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Toda persona física o moral, pública o privada, que diseñe propuestas de contenidos para los
ámbitos de la Autonomía Curricular de la Educación Básica que sometan a consideración de la
Secretaría de Educación, deberá considerar los siguientes criterios:
Curriculares
Componentes curriculares
En el nuevo modelo educativo, la organización del currículo para la Educación Básica se integra
por tres componentes curriculares: Formación Académica, Desarrollo Personal y Social y
Autonomía Curricular. Cada uno de éstos tiene un espacio específico dentro de la jornada escolar,
por lo que son de carácter obligatorio para todas las escuelas. Dichos componentes responden a las
necesidades actuales del contexto nacional, estatal y de la propia escuela.
Los componentes curriculares Formación Académica y Desarrollo Personal y Social, plantean una
misma propuesta curricular para todas las escuelas. Estos incorporan los aprendizajes que la escuela
debe proveer a los alumnos sin importar su condición social, económica, de etnia, de religión o de
región.
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o Reconozca y valore la diversidad de su entorno.
Enfoque
La Educación Básica busca contribuir a formar ciudadanos que tengan la motivación y capacidad
de lograr su desarrollo personal, laboral y familiar, dispuestos a mejorar su entorno social y natural;
así como a continuar aprendiendo a lo largo de su vida, en un mundo complejo que vive cambios
vertiginosos.
Bajo la premisa anterior, es fundamental considerar las necesidades de formación de los alumnos
y reconocer con suficiencia los distintos aspectos del individuo a los que la escuela debe atender,
como por ejemplo, la diversidad de estilos y necesidades de aprendizaje así como otros aspectos
fundamentales en el desarrollo personal y social para garantizar una formación integral.
La formación integral de los alumnos incluye necesariamente estrategias para el desarrollo de sus
emociones, oportunidades para hacer deporte y tener contacto con las artes y la cultura en general.
Al mismo tiempo, se hace indispensable incorporar en la educación aprendizajes que permitirán a
los estudiantes vivir en sociedad y aportar a la misma sus saberes de forma constructiva.
El enfoque del componente Autonomía Curricular es humanista y se rige bajo los principios de la
educación inclusiva porque considera a los alumnos como únicos e irrepetibles y promueve el
desarrollo de sus múltiples potencialidades; por lo que se espera que se fomente una educación de
calidad que considere la experiencia y el contexto de los estudiantes. Para ello, la escuela debe
reorganizarse, de tal forma que los grupos se integren por alumnos de distintos grados, capacidades
y expectativas pero con intereses y/o necesidades comunes. En este sentido, el componente
Autonomía Curricular es un espacio educativo heterogéneo en el que las prácticas inclusivas se
convierten en la única forma de conseguir un aprendizaje significativo en todos los alumnos, ya
que valora la diversidad y ofrece a todos y a cada uno diferentes oportunidades de aprendizaje;
además, brinda a la escuela la oportunidad de transformar su quehacer educativo para brindar un
servicio de mayor calidad.
Metodología
La organización escolar por grupos de alumnos de distintas edades en función de sus intereses,
habilidades o necesidades hace necesario el uso de metodologías y estrategias de intervención
docente diferentes a las que se utilizan en los grupos por grado.
Este componente, es diverso en los ámbitos y temas que lo integran, por lo que la intervención
docente representa un cambio metodológico. En gran medida la práctica docente consiste en
plantear tareas vinculadas a contextos de los alumnos, que obligue movilizar aprendizajes,
habilidades y actitudes. En varios de los temas se busca hacer a los alumnos competentes mediante
un aprendizaje basado en problemas, situaciones o proyectos. Las tareas que se proponen a los
alumnos deben ser de su interés para que movilicen todos sus conocimientos y habilidades, muchos
de ellos adquiridos fuera del aula, para resolver un problema, que tiene una dimensión social a
través de estrategias de trabajo colaborativo.
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Evaluación
La evaluación es el proceso de apreciar, obtener y proveer información para tomar las decisiones
oportunas, dando lugar a un conjunto de significaciones que requiere conocer por qué y para qué
se hace y, generen opciones de mejora, para ello es necesario determinar lo que se va a evaluar y
cómo se va a hacer, fijando indicadores o referencias para poder analizar y estimar lo que realiza
el alumno. El aprendizaje y el desarrollo de estos ámbitos y temas de Autonomía Curricular
implican enfoques de evaluación donde el fin no es medir la transmisión de información o solo la
memorización sino provocar que el alumno movilice sus aprendizajes.
Por lo anterior, se sugiere la evaluación cualitativa con un enfoque formativo como un proceso de
valoración continua y permanente de logros y de observación sistemática de las dificultades y
obstáculos a los que se enfrentan los alumnos, de manera que se les pueda ofrecer ayuda y apoyo
necesario en el momento oportuno.
- Para la Educación Preescolar, los periodos lectivos que se destinan a la semana por tipo de
jornada son:
o Escuelas de jornada regular los periodos lectivos para el componente Autonomía
Curricular son de 2 a la semana.
o Escuelas de tiempo completo, los periodos lectivos para el componente Autonomía
Curricular son 27 a la semana.
- Para la Educación Primaria, los periodos lectivos que se destinan a la semana por tipo de
jornada son:
o Escuelas de jornada regular, los periodos lectivos para el componente Autonomía
Curricular son 2.5 a la semana.
o Para escuelas de tiempo completo, los periodos lectivos para el componente Autonomía
Curricular son 20 a la semana, por lo que se deben considerar 4 periodos lectivos por
día.
- Para la Educación Secundaria, los periodos lectivos que se destinan a la semana por tipo de
jornada son:
o Para escuelas Secundarias de jornada regular, los periodos lectivos para el componente
Autonomía Curricular son 4 a la semana, por lo que se destina un periodo lectivo por
día.
o Para escuelas Secundarias de tiempo completo, los periodos lectivos para el
componente Autonomía Curricular son 14 a la semana.
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Una propuesta de contenidos es un conjunto de recursos pedagógicos y materiales sobre un tema
que tiene como propósito facilitar los procesos de enseñanza aprendizaje, favoreciendo el
desarrollo, adquisición y/o fortalecimiento de conocimientos, habilidades y actitudes de los
alumnos, y que se integra necesariamente por:
Un programa de estudios: que debe tener una duración de por lo menos 40 horas y que debe
integrarse por: Propósitos, enfoque, metodología, aprendizajes esperados, contenidos,
orientaciones didácticas, propuestas de evaluación;
Materiales para el maestro, que incluye entre otros, orientaciones didácticas derivadas de
los materiales del alumno;
Si la propuesta lo requiere:
Las propuestas curriculares deben tomar en cuenta y atender los principios que los siguientes
documentos establecen:
Fines de la Educación;
Aprendizajes clave para la educación integral. Orientaciones pedagógicas de los ejes de
aprendizaje; y,
Modelo Educativo en su componente Autonomía Curricular.
Las propuestas de contenidos serán ofertadas por diseñadores y desarrolladores quienes podrán ser:
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Dependencias federales, estatales y municipales. Aquellas instituciones que reciban fondos
federales las ofertarán de forma gratuita;
Organizaciones no gubernamentales con y sin fines de lucro;
Personas físicas o morales;
Padres de Familia; y,
La escuela que tenga actividades extracurriculares exitosas que puedan y quieran adaptar o
en su caso diseñar propuestas de contenidos para los temas de los ámbitos de Autonomía
Curricular.
Para el desarrollo o elección de una propuesta de contenidos, así como para su implementación
seguimiento y evaluación el Consejo Técnico Escolar debe considerar:
Es importante tener en cuenta que los docentes que impartirán las propuestas de contenidos en
Preescolar, Primaria y Telesecundaria será toda la planta docente asignada a la escuela, en
Secundaria los docentes que imparten Tecnología y Asignatura Estatal y los docentes que cuenten
con horas disponibles dentro de la jornada escolar deberán atender estos espacios.
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Ámbitos, ejes de aprendizaje y temas
El diseño y desarrollo de una propuesta de contenidos para la Educación Básica se debe desprender
de un tema en específico de los definidos en cada uno de los cinco ámbitos de la Autonomía
Curricular. Los temas aún en definición, a modo de ejemplo, son:
Editoriales
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La definición de las propuestas curriculares para este ámbito, será por entidad federativa y participará la Autoridad
Educativa Local como lo establece el Artículo 14 de la Ley General de Educación. La SEP y cada autoridad educativa
local publicarán conjuntamente la oferta de cada entidad por nivel educativo. Ver lineamientos que para ello emita la
SEP.
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Aspectos generales
Apegarse a lo dispuesto en el artículo 3o. de la Constitución Política de los Estados Unidos
Mexicanos, en la Ley General de Educación, y demás ordenamientos legales aplicables.
Responder, en los términos que marca la ley, por el uso del texto, ilustraciones, diseño y
demás elementos contenidos en la propuesta curricular, ante los titulares de los derechos de
autor correspondientes.
Omitir mensajes ofensivos para cualquier persona física o moral, así como aquellos que
tengan propósitos de política partidaria, o de propaganda política para favorecer o
perjudicar a personas que se encuentren en ejercicio del poder público.
Se consideran ofensivos aquellos mensajes que contengan textos o imágenes que agredan o
se refieran de manera irrespetuosa a personas físicas o morales, grupos u organizaciones
sociales, religiosos o étnicos, así como los que promuevan actitudes contrarias a los
derechos humanos o a los valores éticos que la educación debe promover.
Omitir propaganda sobre acciones gubernamentales en curso.
Aspectos específicos:
Apegarse a los propósitos establecidos para el alumno.
Observar el enfoque propio del componente y la metodología,
Fomentar actitudes que despierten el interés, estimulen la reflexión, propicien la indagación
y la investigación, así como el acercamiento a las innovaciones científicas y tecnológicas.
Presentar situaciones que puedan desarrollarse individual y colectivamente.
En caso de ser actividades prácticas, debe sugerirse material alternativo y accesible.
Ser comprensible, fluido e interesante en su lectura.
Evitar el uso excesivo de tecnicismos y de palabras que dificulten la comprensión del
concepto o de la información que se desea exponer.
Fomentar el uso de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) ahí en donde
su uso sea pertinente y represente una ventaja para el alumno.
Incluir, cuando proceda, un glosario de términos que permita introducir palabras
indispensables para el desarrollo de ciertos temas y que no puedan ser sustituidas por otras
de uso común para los alumnos del nivel educativo y grados correspondientes. Siempre que
sea factible se debe evitar el abuso en la incorporación de palabras al glosario.
Incluir, cuando proceda, una lista de referencias bibliográficas para el maestro que pudieran
ser complementarias a la propuesta curricular.
Incluir, cuando proceda, una lista de referencias de sitios de Internet y de materiales
multimedia (discos compactos o video discos digitales) que pudieran ser complementarios
a la propuesta curricular. Estas referencias deberán ser pertinentes para el nivel y grados
escolares correspondientes.
Contemplar una secuencias de situaciones problemáticas que despierten el interés del
alumno y lo invite a reflexionar, a encontrar diferentes formas de resolverlas y a formular
argumentos que validen su respuesta.
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Tratar los contenidos de tal forma que las actividades planteadas y la información
proporcionada sean comprensibles para los alumnos a los que va dirigido.
Incluir, en proporción suficiente al nivel educativo y grados de que se trate, textos,
ilustraciones y actividades, cuidando que estos tres elementos guarden una adecuada
correspondencia entre sí.
Utilizar un lenguaje, una redacción y un vocabulario apropiados al nivel educativo y grados
correspondientes y que permita entender claramente la información que se desea transmitir.
Evitar que las ilustraciones (fotografías, viñetas, mapas, dibujos, cuadros, planos, croquis,
esquemas y gráficas) presenten deformaciones grotescas de la realidad y mensajes
deprimentes o negativos. Se entiende por mensaje deprimente o negativo aquel que
contenga textos o imágenes que describan o representen escenas contrarias o alejadas de
los valores sociales, o bien que promuevan conductas que atenten contra la dignidad
humana, la solidaridad, el amor a la patria, el optimismo y el orgullo de ser mexicano, o
que estén en contra del respeto y responsabilidad en el cuidado de la salud, preservación
del medio ambiente y del aprovechamiento racional de los recursos naturales.