MASONERIA Y SUS FINES

La Masonería, institución fundada sobre los principios de la Ley Natural, lleva impreso un sello de
antigüedad tan remota e irradia un espíritu de filosofía y de moral tan pura, que le dan gran importancia social
y le aseguran, además, el respeto j la veneración de todos los pueblos de la tierra.
Su genio, que ha tenido siempre el instinto de lo verdadero, la elevó hasta el descubrimiento de la verdad
y la condujo al reconocimiento de un Ser Supremo.
La creencia en un Dios Único, el amor a la Humanidad y la Fraternidad Universal, que son las bases de
su doctrina, han sido manantiales fecundos de beneficios para sus adeptos y para la sociedad de que éstos
forman parte.
En sus templos se aprende a amar y a respetar lo que la Vida y la Sabiduría consagran.
Espíritu de la libertad y esencia del progreso anatematiza el despotismo; y lejos de pretender invadir y
dominar, trabaja incesantemente para un-ir a la especie humana con los lazos del amor fraternal y para que
se extiendan por todos los ámbitos de la tierra las corrientes de tolerancia y de dulce simpatía en que ella se
inspira.
Conteniendo en sí todo cuanto es necesario para formar al hombre social, dotándolo de todas las altas
condiciones de moralidad, instrucción e pendencia, que son los atributos principales de su naturaleza,
marcha a la cabeza de la civilización para dirigir y activar el movimiento propagador de las luces,
armonizando su arción con el espíritu de los tiempos.
En este concepto la Masonería, según una de las definiciones universalmente aceptadas y contenida
en los códigos de las principales potencias y autoridades masónicas del mundo, es una institución de
fraternidad universal, esencialmente filantrópica, filosófica y progresiva, que proclama la existencia de un
principio creador bajo el nombre de GRAN ARQUITECTO DEL UNIVERSO, y tiene por fundamentos la
tolerancia mutua, el respeto de sí mismo y de los demás y la libertad absoluta del pensamiento y de la
conciencia. Por tanto, está abierta para todos los hombres de todas las razas y de todas las nacionalidades,
cualesquiera que sean sus opiniones y creencias, con tal que sean hombres libres y de buenas costumbres.
Tiene por objeto la investigación de la verdad, el estudio de la moral y la práctica de la solidaridad;
trabaja por el mejoramiento 'material y moral y por el perfeccionamiento intelectual y social de la humanidad;
hace extensivos a todos los hombres los lazos fraternales que unen a los masones sobre; toda la superficie
del globo y lucha incesantemente contra la ignorancia, bajo cualquiera forma que ésta se presente.
En el Convento Universal de los Supremos Consejos del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, reunido en
Lausana-Suiza, en septiembre de 1875, se emitió la siguiente declaración:
La Masonería proclama, como proclamó desde su origen, la existencia de un principio creador bajo el
nombre de Gran Arquitecto del Universo.
No impone límite alguno a la libre investigación de la verdad y, para garantizar a todos esa libertad,
exige absoluta tolerancia.
La Masonería está, pues, abierta a los hombres de toda nacionalidad, de toda raza, de toda creencia.
Así prohíbe en sus talleres toda discusión política o religiosa y acoge a todo profano, cualesquiera que
sean sus opiniones en política o en religión, con tal que sea libre y de buenas costumbres.
La Masonería tiene por objeto combatir la ignorancia bajo todas sus formas; es una escuela mutua,
cuyo programa se reduce a obedecer las legas de su país, a vivir con honor, a practicar la justicia, amar a
sus semejantes y trabajar sin descanso por el bien de la humanidad y por su emancipación progresiva y
pacífica. Para elevar al hombre a sus propios ojos, para hacerlo digno de su misión sobre la tierra, la
Masonería sostiene el principio de que el Creador Supremo ha dado al hombre como el bien más precioso
la libertad; la libertad patrimonio de la humanidad entera, rayo de luz le lo alto que nadie tiene derecho de
apagar ni amortiguar y que es el origen de los sentimientos del honor y de la dignidad.
Desde la preparación del primer grado hasta la investidura del grado más elevado de la Masonería, la
primera condición, sin la cual nada se concede al aspirante, es una reputación de honor y de probidad
incontestables.
A los hombres para quienes la religión es el consuelo supremo, la Masonería les dice: cultivad vuestra
religión sin obstáculos, seguid las aspiraciones de vuestra conciencia; la Masonería no es una religión, no
tiene culto.
A los que con razón temen las discusiones sobre política, la Masonería les dice: Yo proscribo en mis
reuniones toda discusión, todo debate político; sé para tu patria un servidor fiel y celoso, no tienes que darnos
cuenta. Por lo demás, el amor a la Patria se concilia también con la práctica de todas las virtudes".
La Masonería honra y dignifica el trabajo y lo considera como uno de los deberes más esenciales del
hombre; por esto proscribe la ociosidad voluntaria y da a sus miembros el título de OBREROS.
De lo anterior se deduce claramente que la Masonería es una institución nacida para combatir, con las
armas de la persuasión .y con la fuerza moral del buen ejemplo, todo lo que atente al progreso de la razón y
al espíritu de la confraternidad universal. En esta fuerza moral, que sólo se adquiere por la virtud, que es la
única que la opinión reconoce corno legítima y que la conciencia de los pueblos consagra en el código de
las naciones, considerándola como agente supremo del poder soberano, cifra la Masonería su mayor gloria;
y a ella es deudora de los grandes triunfos que con tanta justicia la han colocado como la primera entre todas
las grandes instituciones nacidas del amor a la humanidad y del interés por el bienestar de los pueblos.
 Por esto debemos definirla, en conclusión, diciendo: ES LA CIENCIA DEL PROGRESO MO-RAL; y
resumir su acción social en estos dos gran-des atributos de la inteligencia: LUZ y VERDAD.
Ilustrar a los hombres, cimentando su instrucción en ideas sólidas y positivas y sobre los principios de
la Ley Natural; convencerlos por la persuasión y enseñarles con el buen ejemplo es conducirlos por la fuerza
de la razón a un régimen de orden y de simpatía y a un estado de paz y de bienestar duradero y envidiable.
¿Qué es la Masonería? De dónde viene o de dónde procede esta institución, cuyo origen se pierde
entre las sombras que envuelven el principio de la humanidad? La Masonería surgió como una necesidad
evolutiva del momento allá cuando el tiempo era joven y el mal era niño. Su origen es antiquísimo y, tal como
dice una parte de nuestra liturgia, es la más sublime de las instituciones humanas.
La Masonería es una serie de reglas o normas de conducta, que tienden a guiar al individuo a través
del azaroso camino de la vida, para ayudarle a cumplir su misión de la manera más feliz para sí y para los
demás hombres, a quienes debe considerar como hermanos sin reparar para ello en condiciones sociales,
creencias o razas.
Masonería es el amor y el respeto que debemos a Dios, a nosotros mismos y a nuestros semejantes.
Es comprensión, es tolerancia, es la práctica constante de las virtudes humanas y, especialmente, ese noble
precepto de amarnos los unos a los otros como verdaderos hijos de un padre común, el Gran Arquitecto del
Universo.
La Masonería se puede decir que es maestra de hombres, trata de hacer de sus obreros hombres
nobles, infiltrándoles en su espíritu la nobleza de alma que debe tener todo individuo que le duela el dolor
ajeno y coopere al mejoramiento de la huma-na especie, desde el punto de vista de la moral, de la
espiritualidad, de la bondad y puede así acercarse algo más a Dios.
Las diferentes organizaciones de la Orden, en sus declaraciones de principios, coinciden cuando
-- 9 —
declaran que es una "Institución Orgánica de la Moralidad" o cuando dicen que es un "Bello sistema de moral
velado por símbolos y embellecido por alegorías".
Dorothy Dix, la conocida escritora norteamericana dice:
"La Masonería es una de las más nobles y altruistas organizaciones que existe en el mundo".
Eugene Lennohf dice: "La Masonería es comunicación de pensamientos, que envuelve su obra en un peculiar
sistema de alegorías y símbolos, a los que nunca ha dado rigidez dogmática".
Dice T. M. Kalaw: "La Masonería es escuela de ética individual y social, vivero de hombres rectos y sabios,
crisol de héroes, broquel de pueblos y forja de patrias".
Juan Granados Sánchez ha dicho: "Algunos creen que la Masonería es la caridad en sentido ele-vado,
porque tiene en cuenta solamente los resulta-dos prácticos, las nobles caridades que dispensa, las lágrimas
de viudas que enjuga, los lamentos de huérfanos que acalla, las múltiples necesidades de desamparados
que cubre. Otros creen que la Masonería tiene por único objeto el fomento de los sentimientos sociales y la
fortificación de los lazos de amistad, pero nosotros creemos que el objeto de la Masonería es la búsqueda
de la verdad".
Dice E. Crutcher en la revista NEW AGE: "Ma-sonería es la cumbre de la moral, la ciencia de la moralidad.
Su edad no puede precisarse, pues nació cuando la barbarie comenzó a civilizarse, cuando los hombres
principiaron a ser apacibles, observa-dores y contemplativos. La Masonería eleva y ennoblece el carácter
individual. Ella conserva el estado social de la comunidad, domina al dogmático,
— 10 —
educa al ignorante, promueve la libertad de con-ciencia y el derecho a la libertad de pensar".
Dice Lessing: "Masón es todo aquel que cons-truye y completa su propia vida, a fin de contribuir a la
realización de la obra artística de la vida de la humanidad. Nadie puede contribuir a la realización de la obra
artística de la vida de la humanidad, na-die puede contribuir al bien de la humanidad si por sí mismo no hace
cuanto puede y debe".
Anderson dice: "Masón no será jamás un estúpido ateo ni un libertino irreligioso".
Alfonso Coalla escribe: "La Masonería es un oasis en medio del desierto del alma de los hombres. Es una
religión proclamando el amor y la verdad. Es ideal que canta. Es entidad hermosa y santa cuyo don más
solemne se levanta, armonía que eleva al infinito. Es la poesía del fraternal amor a la humanidad".
Haim H. Penha dijo: "Masonería es la aristocracia del espíritu. Es la religión del amor y del trabajo, porque
sólo por el amor, el poder central de la vida, se ahoga el egoísmo y se puede ser fiel a la humanidad y ser
masón".
La definición que encontramos generalmente en manuales, catecismos e instructivos es esta: La Masonería
es una escuela de moral y de virtud que imparte sus enseñanzas por medio de símbolos.
La Masonería considera el fanatismo bajo todas sus formas como una desviación del sentido moral. Acepta
todas las religiones, todas las creencias y todas las opiniones siempre que ellas no enseñen principios contra
la moral y los que la profesen sean sinceros. Donde el amor al prójimo no existe debe encontrarse el
fanatismo que lo aleja. El fanatismo y los prejuicios son la fuente de muchos males que
— 11 —
siembran entre los hombres la discordia, el odio, y despiertan las malas pasiones.
La Masonería no tiene una luz propia, que pertenezca solamente a ella. Lo mismo que la tierra recibe la luz
del Sol, la Masonería toma su Luz de la Verdad que deriva del conocimiento de sí mismo; cada uno es por
sí mismo un mundo y todos los hombres que pueblan el infinito obedecen a la misma ley que hemos
reconocido en nosotros.
LOS MASONES
Francmasones o Masones son aquellos que, reuniendo las condiciones exigidas y llenadas las formalidades
necesarias para ello, san admitidos como miembros de la Fraternidad por la ceremonia de la iniciación e
inscritos como tales en los registros correspondientes de la Orden.
Aunque diseminados por todos los ámbitos de la tierra en número ilimitado, los masones se hallan
estrechamente unidos por el mismo ideal que persiguen y por los lazos de la solidaridad y del amor fraternal;
por esto se dan entre sí el nombre de HERMANOS.
En todas las circunstancias se deben apoyo y protección; deben ayudarse y socorrerse moral y
materialmente aún con peligro de su vida. El masón, según la expresión de un ilustre hermano, "es el
ciudadano del universo".
Los rituales lo definen: es un' hombre íntegro y probo, igualmente amante del rico que del pobre con tal que
sean virtuosos.
La virtud, la seriedad, la honradez son, por tan-to, los caracteres distintivos del masón. No es por
- 12 -
los medios de reconocimiento ni por el prestigio de los grados que debe darse a conocer el masón, sino por
sus virtudes. Desde el momento que penetró en el Templo dejó de ser el hombre del mundo, el hombre de
los errores y de las preocupaciones, el hombre de los vicios y de las pasiones, que alimentan nuestras
debilidades, para convertirse en el hijo de la Luz y en el adepto celoso de la Justicia. Es una especie de
caballero consagrado a la defensa de la humanidad, que tiene que conocer a la clase 'de enemigos a quienes
ha de combatir y tener la seguridad de que no ha de faltarle el valor y la constancia necesarios para salir
victorioso de su empresa.
Entre los vicios que impiden los progresos de la razón y que los hombres vivan como hermanos están la
superstición y el fanatismo. Estos son hijos de la ignorancia, nacidos de cuanto puede existir de más estúpido
en el mundo; son dos hidras de cien cabezas siempre renacientes y hambrientas, que esparcen por todas
partes el veneno y las llamas que devoran a los hombres, a los pueblos y a las gene-raciones y que han
abierto en la tierra un abismo insondable y eterna, para sumergir en sus oscuros antros a las generaciones
venideras. No hay que olvidar jamás que el masón tiene el deber de combatir valerosamente y sin cejar un
solo instante a estos dos formidables enemigos del progresó y de la prosperidad del hombre y que la ciencia,
la lógica, todas las facultades de la inteligencia, todas las fuer-zas del espíritu y del cuerpo deben emplearse
para resistir los estragos que causan en el mundo.
Sin estos requisitos no se puede ser masón. Todo aquel que pasare por las pruebas de la iniciación sin
despegarse de su envoltura material y entrare en el sagrado recinto de los templos con las debilidades
propias de su humanidad, no será más que un profano disfrazado con la antigua túnica del iniciado.

— 13 ---
 LOGIA
Es una reunión de un número ilimitado de masones regulares, constituida de conformidad con las reglas y
prácticas consuetudinarias universalmente aceptadas y seguidas para la organización de la Masonería y la
aplicación y desarrollo de sus principios y doctrinas.
(Masón regular es aquel que se halla en plena posesión de sus derechos masónicos, es decir, a plomo con
el tesoro de su logia y con un récord de asistencia regular e inscrito como miembro activo en el registro de
una logia regularmente constituida, que a su vez está en actividad y forma parte de una Gran Logia
reconocida).
La logia es el TALLER FUNDAMENTAL de la Masonería.
Fuente de todo derecho, de todo poder y de to-da autoridad, es la única que puede admitir e iniciar a profanos
a la vida masónica y conferirles el carácter y prerrogativas de miembros de la Institución.
Todas las logias son iguales en derechos y obligaciones y autónomas e independientes dentro del círculo de
las atribuciones que le reconozcan y garanticen las leyes constitutivas a que deban acata-miento. Las logias
regulares trabajan bajo los auspicios de una potencia regular y reconocida, con estricta sujeción a las
prácticas y reglas universales y a las establecidas por dicha potencia.
Unidas por los lazos de la solidaridad y fraternal inteligencia, deben prestarse mutuamente todo el apoyo que
pudieran necesitar las unas de las otras, tanto para sí como para sus respectivos obre-ros.

--- 14 -----
Las logias se designan con el nombre distintivo que tengan a bien adoptar al constituirse y por el número de
orden que les corresponde en el registro de la Gran Logia que las auspicia.
Como las logias gozan de autonomía, tanto en lo concerniente a su administración y régimen interior como
en lo que afecta a los actos más esenciales de la vida masónica, es absolutamente indispensable y muy
necesario que pongan el más exquisito cuidado en no perder de vista jamás las leyes fundamentales de la
Institución, sin separarse lo más mínimo de ellas. La fe en estas leyes es el alma de la Masonería; es la que
da a las logias el poder de la acción y la fuerza moral de que disfrutan. De ella nacen también la unidad del
pensamiento y la comunidad de sentimientos que deben procura r, con vivo interés, que se mantengan
siempre in-tactos entre sus obreros, porque es la que alienta y mantiene la fidelidad y adhesión recíprocas;
la que establece la religión del corazón y el culto de la simpatía; la que inspira el amor al estudio y al tra-bajo;
la que excita a la práctica de las virtudes y, en una palabra, la que regula la moralidad entre los verdaderos
hijos de la Luz.
Por esto se da a las logias los nombres de taller, escuela, templo y santuario, porque efectivamente son
verdaderos talleres de iniciación, escuelas de enseñanza y templos o santuarios en donde se descubren, se
explican y se hacen palpables a los masones las verdades que se encierran en los símbolos y alegorías.
La posición normal de la Masonería consiste en hallarse siempre dentro del camino de la verdadera ciencia,
marchando constantemente hacia adelante, en pos del progreso y de la perfección. Por esto deben
componerse las logias de hombres serios, probos, prudentes y generosos, entusiastas defensores de los
intereses de la Patria y amantes de la humanidad, sin que jamás den cabida en su seno a la intriga, a la
superstición ni 'a las maniobras de la ambición personal.
- 15
La Masonería; que ha trabajado desde su ori-gen por el progreso social y moral de la humanidad, constituye
hoy una de las esperanzas más sólidas para el Porvenir de las naciones. El fanatismo y la superstición,
monstruos que renacen de sus cenizas como el Ave Fénix, tienen aún profundas raíces y grandes multitudes
de esclavos que les sirven sumisas; la ambición dispone de ancho campo para satisfacer 'su brutal egoísmo
bajó múltiples formas; la perfidia y la traición pueden tender impunemente todavía sus infames lazos a los
hombres nobles y de buena fe y el genio del mal vela incesantemente y no perdona medio ni ocasión para
arrojarse sobré sus víctimas, pretende dominar el pensamiento humanó y esclavizar las conciencias y hace
esfuerzos titánicos para enseñoreare de los derechos de la humanidad.
Es preciso, por lo tanto, trabajar con ahínco y eficacia más constantes y ardientes cada día para inutilizar y
destruir los males que afligen y azotan a la humanidad, privándolos de los poderosos medios de que disponen
aun para proseguir la impía y despiadada lucha que mantienen.
A las logias incumbe la difícil y gloriosa tarea de amaestrar a sus miembros y dirigirlos, hasta hacer que sean
dignos de sí mismos y de titularse campeones de la gran obra de regeneración y progreso a que están
consagrados.
— 16 —
Pero, ¿qué significa la palabra Logia? Deriva del sanscrito Loka o Loga que significa Universo.
La Masonería, siendo una institución universal, trabaja o desarrolla su humanitaria labor en el mundo entero,
por lo cual los locales en que se reúnen sus miembros llevan el nombre de logias, con su simbolismo de
Universo.
Estas logias o talleres, al representar el universo, tienen el piso que simboliza la tierra, el tabique o techo que
simboliza el cielo y las paredes representan el ilimitado horizonte con los cuatro pun-tos cardinales: Oriente,
por donde aparece el Sol, Occidente, lugar por donde desaparece o se pone el astro rey, Norte, el lugar
menos iluminado del mundo, según las creencias antiguas y la tradición, y Sur, el punto donde brilla más y
mejor el Sol.
En esta forma los masones siempre están trabajando entre el cielo y la tierra (entre el compás y la Escuadra).
En estas condiciones las dimensiones de una logia son: su longitud de Oriente a Occidente, su anchura de
Norte a Sur y su profundidad desde el Cielo al centro de la Tierra.
La Logia está decorada de acuerdo con este significado. El piso, entre las columnas del pórtico y el Altar,
está hecho de ladrillos blancos y negros significando el bien y el mal, la unión de los masones de todas las
razas, de todas las creencias, de todas las nacionalidades. La virtud y el vicio, las bajas' pasiones y la
fraternidad. Todos los sentimientos que animan al género humano que está en la tierra. El techo simboliza
el cielo tachonado de estrellas, con nubes y celajes. En Oriente hay un Sol hacia el Sur y una Luna hacia el
Norte y en el centro el triángulo radiante con el Ojo que todo lo Ve o el Nombre Inefable. En Occidente .tiene
nubes
17
oscuras. En los lados Norte y Sur hay en algunos talleres seis columnas en cada lado con los signos del
Zodíaco sobre sus capitales, que representan los lugares por donde pasa el Sol y que determinan los meses
del año y las estaciones. En la parte alta, alrededor de la Logia, hay una cadena, que simboliza fraternidad,
es decir, la estrecha unión de los masones por el lazo indestructible del amor fraternal.
En el pórtico o entrada hay dos grandes columnas de bronce con lirios y granadas sobre sus capiteles. En
muchos talleres las columnas tienen sobre las granadas una esfera terrestre y otra celeste. La del lado Norte
con una letra B , en la base o en el fuste y la del Sur con una letra J , en el mismo lugar. Al pie de la
primera hay una Piedra Bruta o tosca y al pie de la segunda una Piedra Cúbica.
En el centro de la Logia está el Altar o Ara, que es una columna rectangular o triangular, sobre la cual se
colocan las Luces Mayores. Rodeando al Altar están las Luces Menores.
Para llegar a Oriente hay tres gradas.
El trono que ocupa el V , M , está colocado sobre siete gradas sobre el nivel del piso de la Logia, tres que
ya se mencionaron para subir al estrado y cuatro más. Los funcionarios y hermanos que se sientan en Oriente
tienen sus asientos en el estrado, es decir, tres gradas sobre el piso. El P , V , tiene su sitial sobre cinco
gradas y el S.S. V... sobre tres solamente.
Sobre los sitiales de los Dignatarios hay doseles, grande el de Oriente y pequeños los otros. La Cámara de
Aprendices está decorada en rojo. Las Logias son de tres clases: Simple o triángulo —Justa, en instancia o
bajo dispensa— y Perfecta o con Carta Patente.
-- 18 --
La primera la forman tres Maestros Masones regulares, con autorización del Gran. Maestro de la Gran Logia
de la cual depende la logia regular que le apadrine y a la que pertenecen sus tres miembros. Puede recibir
solicitudes para iniciación, ascenso y exaltación de aspirantes domicilia-dos en su valle, las cuales se
tramitarán y resolverán en la logia auspiciadora en el seno de la cual se efectuarán las ceremonias
respectivas.
La segunda la constituyen cinco Maestros Masones regulares, también con autorización del Gran Maestro
de la Gran Logia, por medio de un documento que se llama Carta Dispensa.
Estas logias tramitan sus propias solicitudes, pero las ceremonias respectivas las verifican en una Logia
Perfecta.
La tercera clase está formada por SIETE Maestros Masones regulares, el documento que la constituye se
llama Carta Patente y lo expide la Gran Logia de la cual depende.
Estas logias gozan de autonomía, libertad y privilegios como cualquier otra logia regular del mundo.
Como anexos, cada taller tiene el vestíbulo o atrio, el Salón de Pasos Perdidos y el Gabinete de Reflexiones.
El primero es el que da acceso al Templo y en el cual debe estar un funcionario. Aquí están los útiles para
los trabajos, estandartes, mandiles, etc. Los obreros se decoran en dicho lugar y en él se quitan sus mandiles.
El segundo es la sala en donde se reúnen los masones antes de entrar a los trabajos. Aquí estará el Libro
de Asistencia en donde firman los hernia nos que asisten a la Logia, sean miembros activos, honorarios o
visitadores.
- 19 –
Se presume que el Gabinete de Reflexiones debe ser subterráneo;» es de reducidas dimensiones, con '
aspecto de cueva, lúgubre, todo pintado o revestido de negro y está iluminado por una vela o por una lámpara
de aceite; en sus paredes, están inscritas en caracteres blancos unas inscripciones muy conocidas por los
iniciados, a las que nos referiremos en otra ocasión. Su mobiliario consiste en una mera y un asiento
triangulares, negros. Sobre la mesa hay emblemas de vida y muerte: un reloj de arena, pan, agua, sal, azufre,
una calavera y restos humanos, etc., para demostrar al profano que ha llega-do el momento de morir para el
vicio, las pasiones, los prejuicios y las malas costumbres, para hacerle comprender que ante la muerte se
desvanecen el orgullo y la ambición humanos, que de nada valen el poder y las riquezas del mundo.
Este gabinete representa el período de gestación del masón. El recipiendario ha muerto para el mundo
profano y está preparando su mente y su espíritu para nacer a una nueva vida.
El nacimiento a la vida masónica se verifica entre las columnas del pórtico, en donde el masón tiene el
privilegio de ver la LUZ. Por esto la iniciación significa NACIMIENTO.
Las logias tienen una sola puerta de entrada situad& en Occidente hacia el Norte, de manera que el G , T
, I , quede situado en la columna del Norte. En algunos talleres la puerta está hacia el Sur y en otros hay
dos puertas en Occidente, una hacia el Norte y otra hacia el Sur. Otros templos tienen la puerta, a en el
centro de Occidente, que es el lugar que nosotros reservamos para el P , V ,

20 —
SIMBOLOS Y EMBLEMAS
La Masonería se sirve de diferentes alegorías, símbolos y emblemas para el uso exclusivo y reservado de
sus miembros, los que se trasmiten por tradición desde tiempos inmemoriales y cuyo alto significado e
interpretación sólo pueden ser explicados a los iniciados.
Estos símbolos y emblemas constituyen un lenguaje misterioso y especial, sumamente expresivo para todo
iniciado, que permite que los masones puedan reconocerse y comunicarse entre sí, en to-das las
circunstancias de la vida, cualquiera que sea su idioma y en cualquier parte del mundo en que se encuentren,
pudiendo disfrutar así de las inapreciables ventajas que les otorga con ello la Institución.
El carácter de universalidad de los signos y emblemas del simbolismo masónico impone a todos los iniciados
el deber de respetarlos, mantenerlos y transmitirlos íntegramente tal como se hallan contenidos en las
liturgias auténticas o admitidos por el tiempo y por las antiquísimas y tradicionales prácticas que nos han
sido legadas.
Veamos algo de este simbolismo, tan interesan-te e indispensable por ser la base de la instrucción o
enseñanza masónica.
Los miembros de las logias son hermanos y este es el único título que se concede en logia a sus miembros.
Las velas encendidas se llaman estrellas.
— 21 —
Las cartas que se escriben son planchas.
Las actas de las sesiones se llaman trazados.
Las sesiones se llaman tenidas.
Lo que se hace durante las tenidas lo denominamos trabajo. Todo lo que se trata durante el trabajo se llama
material.
Los discursos sé denominan piezas de arquitectura.
Aspirante es el profano propuesto para su iniciación.
Candidato se llama éste desde que su solicitud ha sido aceptada y está siguiendo los trámites legales.
Recipiendario se denomina durante toda la ceremonia de su recepción.
Neófito se denomina desde el momento de su proclamación como miembro de la Logia.
Los toques significan: Buscad y encontraréis; llamad y se os abrirá; pedid y se os dará. Deben darse con
suavidad y discretamente.
El profano que desea ser masón busca las maneras para ingresar; encuentra los medios y llama a la puerta
de nuestro templo y, si la opinión le es favorable, le abrimos la puerta. Entonces pide ser masón, es decir,
ver la LUZ, instruirse, perfeccionarse, etc. Se busca el templo de la sabiduría y, al encontrarlo, se llama a
sus puertas, una vez abiertas éstas se entra y se pide *lo que se desea.
Los medios de reconocimiento del masón que, según el primer Landmark son inalterales, son: toque, orden,
marcha, saludo, palabra, edad, tiempo de trabajo, clase de labor, decoración, etc. Estos medios de
reconocimiento solamente pueden, explicarse en logia y constituyen un secreto para los iniciados. El toque
recuerda los golpes que se dan en la puerta para entrar y tiene el mismo significado. El signo de orden consta
de tres partes y significa obediencia y respeto; sus partes son pedestre, braquial y manual, cada una en
forma de escuadra.
— 22 —
La marcha simboliza VIDA en sus tres etapas: infancia, juventud y vejez. Tiene también el significado de la
herramienta esencial del masón —La Regla— por eso se hace en línea recta y con su propio significado. El
saludo no puede describirse ni explicarse, debe hacerse y comprenderse exactamente, lo mismo que la
palabra que se da por letras al oído en la forma que todos conocemos y que significa Fuerza. Como el
Aprendiz no sabe leer ni escribir y apenas empieza a deletrear, da la palabra por letras de una en una, no la
escribe, dibuja ni graba nunca. La edad le recuerda el tiempo que en la antigüedad se tenía en observación
a los candidatos antes de admitirlos en los trabajos. El tiempo de trabajo significa que el hombre está en
capacidad de laborar por el bien de la humanidad y por el propio desde el medio día de su vida (juventud)
hasta su muerte, que es la media noche. La labor del Aprendiz, es desbastar la piedra bruta, para la cual usa
las tres herramientas conocidas: Regla, Mazo y Cincel. La decoración por excelencia del masón, la de más
valor, la que le da el verdadero carácter y que es inseparable de él, pues sin esa prenda nadie puede ser
admitido en logia alguna, es el mandil. Este debe ser blanco y de piel de cordero no nacido, simbolizando
pureza e inocencia. El usado regularmente es de tela blanca. Esta decoración esencial significa trabajo y
consta de tres partes: cuerpo, bayeta y cinta. El cuerpo es rectangular de 38 por 33 centímetros, simboliza
la tierra y sus lados los cuatro elementos de la naturaleza: tierra, aire, agua y fuego. Esta es la misma
significación de la escuadra como Luz Mayor del Ara. La bayeta es triangular y tiene el mismo significado del
compás como Luz Mayor. La cinta, por su forma circular, simboliza el universo.

23
Los aprendices ocupan sitios en la columna del norte y usan el mandil con la bayeta levantada, por lo rudo
del trabajo y 'por las mismas razones por las que se colocan las luces mayores del Altar en la forma que
todos conocemos.
El número TRES es el del primer grado de la Masonería y así vemos que el toque, los signos_ de orden y de
saludo, la marcha, la edad, los viajes, la batería, los abrazos, etc., son siempre regidos por este número tres.
Un triángulo (tres lados) es la forma del pliego de solicitud y del que contiene las tres preguntas
fundamentales, Tres son los principales deberes que jura ante el Ara. Tres son las luces mayores del Ara y
tres las menores. Tres son las luces del taller y tres son las columnas que sostienen el Templo.
Los tres viajes se hacen: por el aire que significa LIBERTAD; por el agua que simboliza IGUALDAD; y por el
fuego que es FRATERNIDAD. Es decir que en esta forma tenemos el lema de la Masonería, venerado y
respetado desde hace centurias.
Antes de estos tres viajes, el recipiendario ha efectuado el viaje por la tierra, representada por el Gab de
Ref
Los masones trabajan en la construcción de templo Moral consagrado a la Virtud y a la Ciencia, bajo los
auspicios del Gran Arquitecto del Universo y el trabajo del Aprendiz consiste en desbastar piedra bruta, lo
que significa que trata de dominar sus pasiones y perfeccionar su espíritu, quitando con sus herramientas
(tres) todas las asperezas que originan las preocupaciones y las costumbres viciosas del mundo profano.
—24--
La Logia representa el Universo, en donde los masones trabajan, y por eso caben en ella todos los hombres.
El piso representa la tierra y el mosaica significa el bien y el mal, las distintas razas. El techo es el cielo
tachonado de estrellas, con nubes, claridad y penumbra. Las paredes son los cuatro puntos cardinales,
ilimitados, el horizonte. En Oriente están, el sol y la luna, uno que alumbra en el día y la otra que ilumina en
la noche.
En toda la logia hay un Altar o Ara, en donde se hacen los juramentos y promesas. Es una columna o parte
de columna; sobre él deberán estar siempre las tres luces mayores (llamadas también grandes luces de la
Masonería) durante' los trabajos, estas son: el Volumen de la Ley, el Compás y la Escuadra. En algunas
logias también se colocan sobre el Altar las leyes que rigen al taller.
El Volumen de la Ley' significa Sabiduría y re-presenta el espiritualismo del masón; también simboliza la
voluntad del Gran Arquitecto del Universo, porque por medio de este libro ha revelado más preceptos y
pruebas de su divino poder que por cualquier otro medio. Por consiguiente nos da la luz para para poder
cumplir nuestros deberes para con DIOS.
El masón debe regular sus pensamientos con el compás de la razón y ajustar sus acciones con la escuadra
del deber. El Compás simboliza el deber imperativo de dominar nuestras pasiones y refrenar nuestros deseos
en los límites debidos. Es el emblema más saliente de la Virtud y la única y verdadera medida del masón.
Diríamos que nos ilumina en nuestros deberes para con nosotros mismos.
25 —
La Escuadra, formando un ángulo recto, simboliza la rectitud y nos enseña a normar nuestros actos y nuestra
conducta masónicamente y a corregirlos y a armonizarlos para obrar con equidad. Podríamos decir que nos
induce a cumplir los de-beres para con nuestros semejantes.
El Compas y la Escuadra, en sus varias posiciones, forman el símbolo de la Masonería en todos sus grados.
El Compás representa el cielo, a donde el iniciado debe dirigir constantemente sus miradas; la Escuadra
representa la tierra, en donde lo encadenan sus vicios y pasiones; por eso se dice que el vez dadero masón
se encuentra siempre entre la es-cuadra y el compás.
El Mallete es símbolo de autoridad y solamente lo usan los Dignatarios del taller.
Las herramientas del Aprendiz son tres: Regla, Mazo .y Cincel. La regla es de veinticuatro pulga-das y
recuerda el orden, que es la base fundamental de todo progreso. Simboliza el tiempo, la vida, pues cada una
de sus partes representa una hora del día, el cual dividimos en tres partes iguales de ocho horas cada una
para dedicarlas al trabajo, al servicio de la humanidad y al descanso. Representa, pues, las 24 horas del día,
el orden y el método.
El Mazo es la fuerza de voluntad y la constancia de propósitos con que el hombre, dominando sus pasiones,
debe trabajar en su perfeccionamiento, desembarazando su cuerpo y su alma de los apetitos y las pasiones
bastardas, para no desmentir su naturaleza humana y realizar su alta misión.
El Cincel es el cuidado que ha de poner el hombre en apartar de sí la parte bruta de su ser, cultivando la
inteligencia a fin de prepararla para la grande obra de unificación y de regeneración sociales que le están
encomendadas.
— 26 --
Los signos de orden y de saludo y la marcha recuerdan al Aprendiz el simbolismo de la escuadra. La letra
grabada en la columna que está hacia el norte debe recordarle la palabra sagrada, la cual no deberá escribir,
grabar, dibujar ni comunicar sino en logia abierta y por letras, significando que no puede más que deletrear.
FUNCIONARIOS
Las Logias tienen un cuerpo o Cuadro de Funcionarios para la dirección y ejecución de sus trabajos, como
las sociedades profanas tienen una Junta Directiva.
Una Logia Simple o Triángulo está regida por tres funcionarios: Presidente, Secretario y Tesore-ro, como las
directivas provisionales cuando se ini-cia la organización de una sociedad profana.
La Logia Perfecta o con Carta Patente tiene siete funcionarios: V , M , P V , Sec , Tes ., P , D. y
S D , pero al aumentar el número de sus maestros forma su Cuadro con QUINCE o más funcionarios
divididos en tres categorías: Dignatarios, Oficiales de Primera Clase y Oficiales de Segunda Clase. Los
primeros son TRES: V , M , P , V. y S , V . Los segundos son también TRES: Ord , Sec. y Tes
. Los Oficiales de Segunda Clase son NUEVE o más: Hosp , P , D , S. , D , M de C , P.•. E , S
, E , P . Est , G , T , y G T . E .
Los Dignatarios y los Oficiales de Primera Clase son funcionarios de elección; los de Segunda Clase son de
nombramiento.
-- 27 --
Además de los anteriores, las logias perfectas pueden tener Oficiales Adjuntos y los demás que necesiten
para sus trabajos. Los funcionarios de una logia están colocados así:
V M. en oriente sobre siete gradas.
P V en Occidente sobre cinco gradas.
S V en el centro o punto medio del Sur, sobre tres gradas.
Ord en Oriente hacia el Sur.
Sec en Oriente hacia el Norte.
Tes en el extremo oriental de la columna del Sur.
Hosp en el extremo oriental de la columna del Norte.
P D en Oriente, a la derecha del V M fuera del dosel.
S D en Occidente, a la derecha del P V
M de C en el Sur, adelante del Tes
S E al lado norte de la columna B.•.
P E al lado sur de la columna J
P E en el Sur, adelante del Hosp
G T I en el Norte, al lado de la puerta que debe estar en el esquina N. O.
Esta colocación no es universal, como tampoco lo es el orden mencionado que para nosotros es el orden
jerárquico. En muchos talleres solamente se sientan en Oriente el V M y el Ord En el orden jerárquico
el G T es un Oficial de Primera Clase.
Nosotros creemos que el orden y la colocación mencionados son los más aceptados y usados, por ser los
más racionales.
Sobre la colocación de los Vigilantes se ha hablado y se ha discutido mucho, pero la posición generalmente
admitida es la mencionada, pues los Dignatarios deben estar en los vértices de un triángulo cuyo lado mayor
va del V M al P V y en la únión de los menores, que deben ser iguales, está colocado el S V
En algunos talleres los Vigilantes ocupan los sitios que hemos indicado para los Expertos y así quedan cada
uno en la columna que le corresponde.
Como se ve, no hay la uniformidad que debería existir en los talleres de la Masonería.
JOYAS
Los funcionarios usan durante los trabajos colla-rines de tela o de metal plateado, según lo dispone cada
taller y lo apruebe la Gran Logia.
Pendiente del collarín y en su parte anterior usan una Joya distintiva del cargo que cada uno desempeña y
con su propio simbolismo, así:
V M —Una Escuadra sostenida por su vértice.
P V —Un Nivel.
S.S V —Una Plomada.
Ord —E1 Libro de la Ley abierto.
Sec.'.—Dos Plumas cruzad.as.
Tes --Dos Llaves cruzadas.
Hosp —Una Mano abierta, una bolsa o saco o un Cuerno de la Abundancia.
P D —Una Escuadra y un Compás con un Sol en el centro .
SP D P —Una Escuadra y un Compás con una Luna en el centro.
M de C —Dos bastones cruzados, o una regla de 24 pulgadas, o una vara con terminal de escuadra y
compás.
— 29 —
P E —Dos Alabardas o Pértigas cruzadas, o un triángulo equilátero.
S E —La misma joya que el anterior, o un alfanje.
P Est —Un Estandarte, o un Compás.
G T I —Dos Espadas desnudas cruzadas.
G T E...—Una Espada desnuda.
L U CES
En el taller de la Masonería hay tres clases de luces: las de la logia; las del Altar o Ara; y las de iluminación.
Las primeras son los Dignatarios, pues son los que iluminan a los obreros, los instruyen, los guían, disipan
sus dudas y les dan ejemplo.
Las del Ara son de dos clases: mayores y menores. Las primeras son el Vol de la Ley, que simboliza
sabiduría; el Compás, emblema de la virtud, la moral, la conciencia, el espíritu, el cielo; y la Escuadra que
simboliza la tierra, las pasiones, los vicios, el mundo profano.
Un Landmark establece que "Un Libro de la Ley no debe faltar en una Logia cuando trabaja", por eso es
indispensable este libro sobre el Altar. Como un libro cerrado no da luz, no enseña- nada, el libro debe estar
abierto y, al hacerlo, escogemos un pasaje que se relacione con el grado en que se trabaja. En logias que
trabajan en el Rito Escocés Antiguo y Aceptado abren la Biblia -- Vol de la Ley— en el Libro de Ruth; las
que siguen el Rito de York abren el libro en el Salmo 133. Sobre este libro abierto se colocan las otras dos
luces mayores en la forma que todo Masón debe conocer y su colocación indica el grado en que se trabaja,
así como el libro que se relaciona con cada grado, en el cual se abre la Biblia. En el primer grado su posición
está indicando que el Aprendiz todavía tiene do-minado su espíritu por los vicios y pasiones del mundo
profano.
3.0
Las luces menores están colocadas alrededor del Altar, dos adelante, una hacia el norte y otra hacia el sur
y la última atrás, en el Norte y hacia Oriente. Significan Fe, Esperanza y Caridad y también Ciencia, Virtud,
y Fraternidad. También simbolizan el Sol, la Luna y 'el V M , porque el primero alumbra en el día, la
segunda ilumina en la noche y el V , M , ilumina su logia, es decir, da conocimientos, consejos y ejemplos
a sus obreros.
Las luces de iluminación son también de dos clases; indispensables y dispensables. Las, primeras deben
estar encendidas en, los bufetes de los Dignatarios durante los trabajos; las segundas están colocadas en
los bufetes de otros funcionarios, en el techo y en las paredes, solamente sirven para iluminar y puede
prescindirse de ellas.
 COLUMNAS
En nuestros templos hay seis clases de columnas:
1—las del pórtico que tiene por nombres B J coronadas de granadas y lirios y con las esferas terrestre y
celeste;
2 las del taller —sostenes del Templo— que son los Dignatarios o Luces;
3—las que sostienen los doce signos del Zodíaco y representan los meses del año; columnitas que tienen
los. Vigilantes, si milares a las del pórtico, que simbolizan au-toridad;
- 31
5—las que forman los obreros en las tres partes en que está dividida la logia: Oriente, Sur y Norte, a la
cabeza de las cuales están el V M y los vigilantes; y
6—la que cada obrero representa, pues cada uno es una columna de su taller o templo, y, en consecuencia,
de nuestra Institución.
En los tronos de los Dignatarios se acostumbra colocar estatuas de Minerva —Sabiduría o Inteligencia—;
Hércules —Fuerza—; y Venus —Belleza—, significando que para la obra de la Masonería es indispensable
la primera para disponer o planear, la- segunda para ejecutar y la tercera para embellecer y adornar la obra.
Estas nociones elementales deberán ser amplia-das y completadas con el estudio de las Constituciones,
Estatutos, Reglamentos y demás disposiciones legales y con la lectura y práctica de las liturgias. Como
algunos de los símbolos solamente pueden explicarse en logias, es indispensable asistir regularmente a los
trabajos, en donde los Aprendices reciben su instrucción.
CATECISMO
P.—¿Sois masón?
R.—Me satisface pertenecer a esta Institución cu-yos ideales, basados en la virtud, la moral, el honor, la
ciencia y la justicia, en la lucha con tra el retroceso, la ignorancia y la maldad, han venido realizándose en
los pueblos cultos en bien de la humanidad.
- 32 —
P.—¿Cómo probáis que sois masón?
R.—Por los medios de reconocimiento y por mi conducta.
P.—¿Qué se necesita para ser recibido masón?
R.—Ser hombre libre de preocupaciones, fiel a las leyes, amante de su Patria, de buenas costumbres,
dispuestos sinceramente a corregir sus defectos y a dominar sus pasiones para llegar a ser virtuoso, estando
desde luego dispuesto a procurar empeñosamente el bien de los demás.
P. — ¿Cuáles son los preceptos fundamentales del masón?
R. —Amor fraternal, socorro y verdad. I'.
P— ¿Cuál es, la acepción literal de la palabra masón?
R. —Materialmente masón es lo mismo que albañil o arquitecto y en sentido figurado o simbólico es obrero
de la virtud, que enseña y practica los principios inmutables del deber y del derecho que el G A D U
ha grabado en su conciencia.
P. — ¿Cómo conseguir esto?
R. —Levantando a la Verdad el Templo de la Sabiduría.
P. —¿En dónde se construye ese Templo?.
R. —En la Logia.
P. — ¿Qué significa esa palabra?
R. —Significa Universo y al decir que los masones trabajamos en una logia significamos que nuestra labor
la desarrollamos en el mundo entero. Esta palabra se tomó del sanscrito Loka o Loga.
P. — ¿Creéis que es un término apropiado para los talleres?
-- 33 –
R —Si, porque toda logia tiene por base la tierra, por techumbre el cielo, el Oriente es la luz, el Occidente
las, tinieblas y su circunferencia el océano y el ilimitado horizonte. Además, fue el nombre que se le dio al
Templo del Rey Salomón, del cual es representación la logia actual y, por otra parte, el meior templo a la
Verdad y a la Virtud es el Universo.
P.—¿Cómo está sostenida una Logia?
R.—Simbólicamente por tres grandes columnas: Sabiduría, Fuerza y Belleza, representadas Por los
respectivos dieses de la mitología: Minerva. Hércules y Venus. La primera alude al Maestro que concibe y
dirige: la segunda al P V que ejecuta: y la tercera al S V que adorna y embellece las ideas y las obras
masónicas.
P.— Cuál es el distintivo del V Maestro?
R.—La Escuadra, emblema de la Virtud y de la Rectitud.
P.— Cuál es el del Prim Vig ?
R.— El Nivel, símbolo de la Igualdad.
P.— ¿Y el del Seg Vig ?
R.— La PIomada, símbolo de la Justicia y de Equidad.
P—¿Qué significación simbólica se da al trabajo del Masón?
R—Que abre abismos para los vicios y erige templos a la Virtud.
P —¿Cuántas clases de logias conocéis?
R —Tres: Simple o Triángulo: Justa, en instancia o Bajo Dispensa; y Perfecta o con Carta Patente.
P— ¿Cuántos forman una logia simple?
R—Tres Maestros Masones que, como funcionarios se denominan Presidente, Secretario y Tesorero.
P —¿Cuántos componen una logia justa?

- 344_
R.—Cinco Maestros Masones que se denominan V M ,P.'. V , S V ., y Sec y Tes
P.—¿Cuántos integran una logia perfecta?
R.—Siete Maestros Masones, los primeros cinco tienen la misma denominación anterior y los otros dos P
, D y S.S. D
P.—¿Cuántos funcionarios tiene una logia regular para su trabajo ordinario?
R.—Tiene quince funcionarios divididos en tres clases: Dignatarios, Oficiales de Primera Clase y Oficiales
de Segunda Clase.
P . —¿Cuáles son estos funcionarios? .
R— Los Dignatarios son el V M , el P V y el S V son funcionarios de elección. Los Oficiales
de Primera Clase son el Ord , el Sec. y el Tes También son electos por el taller. Los Oficiales de
Segunda Clase son: P D , S D M de Cer , P Exp , S . Exp , P . Est , G . T I. y G T
. E Estos los nombra el Ven.'. Maestro, pero el P V escoge al S D
P.- -¿Qué debéis hacer antes de entrar a una logia?.
R—Decorarme, es decir, colocarme el mandil en debida forma; firmar en el libro de asistencia, si hay; llamar
a la puerta y esperar que abran..
P — ¿Y cuándo os han permitido la entrada qué hacéis? 11. Hacer el signo de orden, efectuar la marcha,
saludar a las Luces y esperar, entre columnas, la orden del V M .
P -¿Qué es el mandil? H. El mandil es el símbolo del trabajo. Es la decoración por excelencia del masón, la
joya más preciada que le da el carácter de tal y sin el cual no puede presentarse el masón en logia alguna.
— 35 —
. P— ¿De qué material está hecho el mandil?
R. —De piel de cordero no nacido. Debe ser blanco. Significa pureza e inocencia. Corrientemente se usan
mandiles de tela blanca para todos los trabajos ordinarios.
P. — ¿i De cuántas partes consta el mandil?
R. — De tres partes: cuerpo, bayeta y cinta. El cuerpo es rectangular, de 38 por 33 centímetros, simboliza la
tierra, el mundo profano, como las escuadras que forman sus ángulos. Sus lados representan los cuatro
elementos de la naturaleza; el inferior la tierra, el superior el aire, el derecho el agua y el izquierdo el fuego.
La bayeta es triangular, simboliza el cielo, el espíritu, como el compás; la cinta tiene forma circular, simboliza
el Universo.
P. — ¿Cómo usan el mandil los aprendices?
R. —Con la solapa o bayeta levantada por lo rudo del trabajo y para significar que los aprendices estamos
todavía dominados por los vicios y pasiones mundanos.
P. — ¿Cuál es vuestro trabajo?
R. —Desbaratar la piedra bruta.
P. — ¿Explicadme qué significa esto?
R. — (Se dan las explicaciones pedidas).
P. — ¿Con qué herramientas se hace ese trabajo?
R. —Con las tres herramientas que recibimos de nuestro Vigilante. (Da una explicación amplia sobre este
asunto).
P. — ¿De cuántas partes está formado el signo de orden?
R. —De tres (se explica ampliamente).
P. — ¿Qué significa el signo de orden?
—36--
R — Obediencia, respeto.
P. — ¿Cómo es el toque?
R. — (Se explica).
P. — ¿Qué significa?
R. —Buscad y encontraréis; llamad y se os abrirá; pedid y se os dará.
P— ¿Cómo es la marcha? ¿Qué significa?
R— (Se explica ampliamente).
P. — ¿Cómo es el signo de saludo y qué significa?
R. — (Se responde en debida forma),
P. — ¿Qué son los medios de reconocimiento?
R. —Son un conjunto de maneras que nos sirven para darnos a conocer y para reconocer como masones a
los desconocidos.
P. — ¿Decidnos algunos de esos medios, en qué están fundados y en qué consisten?
R. — (Se explican).
P. — ¿Cómo se encuentran los masones?
R. —Entre la escuadra y el compás
P. — ¿Cómo se separan?
R. —Bajo la escuadra, símbolo de la rectitud y de la virtud.
P. — ¿Cómo se congregan?
R. —Bajo el nivel, símbolo de la igualdad.
P. — ¿Cómo se conducen?
R. —Bajo la plomada, símbolo de la equidad y de la justicia...
P. — ¿Cómo se deben tratar los masones?
R. — Como verdaderos hermanos, favoreciéndose y dándose ayuda y consuelo cuando sea necesario.
P— ¿Qué grado tenéis?
R. —El de Aprendiz Masón, que es el primero de la Masonería Simbólica.
P. — ¿Cuál es vuestra edad? I
P—Tres años.
— 37 —
P— ¿Por qué esa edad?
R— Porque antiguamente no era admitido aspirante alguno sino después de tres años de observación y
pruebas.
P. — ¿Dónde se colocan los Aprendices?
R. —En la columna del Norte, por ser la menos iluminada del mundo.
P — ¿Quién es vuestro principal instructor?
R. —El querido hermano Segundo Vigilante.
P. — ¿Cuál es el objeto principal de los trabajos en logia?
R. — Disipar la ignorancia, combatir el vicio e inspirar el amor a la humanidad, para poder lograr el
perfeccionamiento de los hombres.
P. — ¿A qué horas trabajan los Aprendices?
R. —Del medio día a la media noche.
P. — ¿Cuáles son las razones para trabajar ese tiempo?
R. — (Se explica).
P. —Dadnos un resumen de los trabajos masónicos.
R. — (Contesta ampliamente).
P. — ¿Cómo fuisteis recibido masón?
R. — (Explíquese la preparación del recipiendario y su simbolismo).
P. — Explicadme los distintos pasajes de la recepción.
R— (Se explica todo con su significado).
P— ¿Qué distintivo os dieron al consagraros Masón?
R —El distintivo por excelencia del masón: un mandil blanco.
P— ¿Qué entendéis por Masonería?
R— (Explíquese ampliamente este punto).
P— ¿Cuál es la divisa de la Masonería?
R —Libertad, Igualdad y Fraternidad, pero no como la expresión de una tesis política, sino cómo una síntesis
filosófica de los principios de nuestra institución, nacida indudablemente de los -elementos esenciales de la
naturaleza: Aire, Agua y Fuego, en los que se purifica el recipiendario durante los viajes de su iniciación.
— 38 —
P. — ¿Podéis explicar algunos de los símbolos y emblemas?
R—(Los explica uno por uno).
P. — ¿Cuál es el lugar que ocupa el G T E ?
R.—(Lo dice y explica).
P. — ¿Dónde se sitúa el G.... T I ?
R. — (Lo dice y explica).
P. — ¿Cuál es el lugar del P Est ?
R. —Adelante del bufete del H Host.
P. — ¿Dónde se colocan los Expertos?
R. — E1 primero al lado de la Col J y el segundo al lado de la B
P. — ¿Dónde se coloca el H M de Cer ?
R. — Delante del bufete del H Tes.
P —¿Cuál es el lugar del S.S. D...?
R.—A la derecha del hermano P V,
P. —Y el P D ¿Dónde se sienta?
R. —A la derecha del V M fuera del dosel.
P. — ¿Podéis decirme las atribuciones de estos funcionarios?
R. — (Dice las de todos los que se han mencionado).
P. — ¿Cuál es el lugar del hermano Hosp ?
R. —El extremo oriental de la columna del norte.
P. — ¿Y cuál es el del hermano Tes ?
R. —E1 extremo oriental de la columna del sur.
P. — ¿Y el hermano Sec dónde se coloca?.
—En Oriente hacia la esquina noreste.
P. — ¿Cuál es el lugar del hermano Ord ?
R. —En Oriente hacia la esquina sudeste.
— 39 —

P. — ¿Cuál es el lugar en logia del hermano S.•.

R. — (Lo dice).
P. — ¿Dónde se sitúa el hermano P V ?
R. — (Lo dice).
P. — ¿Qué lugar ocupa en logia el V.•. M ?
R. — (Lo dice).
P. —Explicadnos las atribuciones de estos últimos oficiales.
R. — (Lo hace ampliamente).
P. — ¿Cuáles son las joyas de todos estos funcionarios?
R. — (Lo explica).
P. — Habladnos sobre el templo y sus atributos.
R. —El Templo representa el Universo. El pavimento de mosaico, formado de piedras blancas y negras
unidas por un mismo cemento, simboliza la unión de todos los masones sin distinción de razas, creencias
políticas o religiosas, ni de nacionalidades; es también imagen del bien y del mal, de que está sembrado el
camino de la vida.
La bóveda azul del templo, sembrada de estrellas, representa el firmamento y, como la del cielo, cobija a
todos los hombres sin distinción alguna. El templo está hacia el Este y a él se entra por el Oeste, porque del
Oriente viene la Luz y hacia él vamos, desde Occidente, en busca de esa luz que es Sabiduría, que es
Verdad. Las dos columnas de la entrada son una semejanza de las que se colocaron en el pórtico del Templo
del Rey Salomón, las cuales tenían 18 codos de altura, 12 de circunferencia, 12 en su base y 5 en los
capiteles haciendo un total de 47, número simbólico de las constelaciones del Zodíaco, esto es, el mundo
celeste; son de bronce para significar la estabilidad de las leyes de la naturaleza que son base de la doctrina
masónica; están huecas 'para poder encerrar en ellas nuestros útiles y herramientas de trabajo; y al lado de
ellas se entrega su salario a los obreros despidiéndolos contentos y satisfechos.

— 40 —
Las granadas que se hallan en su parte superior simbolizan el pueblo masónico, estrechamente unido;
millares de granos en la fruta con el mismo germen, una misma substancia y un mismo asilo.
Según los preceptos bíblicos, a las columnas del templo de Salomón se le dieron los nombres que tienen las
nuestras; B a la del Norte y J a la del Sur. Estas mismas columnas están representa-das con su misma-
simbología pero además, significando autoridad, en los situales de los Vigilantes.
El Volumen de la Ley, el Compás y la Escuadra son las grandes luces de una logia o las luces mayores del
Altar y se encuentran siempre sobre él durante los -trabajos; reunidas simbolizan la conciencia del hombre,
que es la regla y guía de su conducta. La ley enseña el arte del bien y nos recuerda nuestros deberes para
con Dios; la Escuadra es emblema de la Virtud, del sentimiento moral y del amor fraternal y nos recuerda los
deberes para con nuestros semejantes; y el Compás simboliza la razón, luz de la conciencia que mide
nuestros deseos y nos mantiene dentro de los límites de la justicia en todos nuestros actos, recordándonos
nuestros deberes para con nosotros mismos.
Las luces menores del Ara son las que están alrededor de ésta, colocadas allí para recordarnos los benéficos
astros que dan luz a la tierra y al Maestro de la logia que ilumina a sus hermanos. Simbolizan la Ciencia, la
Virtud y la Fraternidad y Fe, Esperanza y Caridad, que resplandecen en el Altar y nos dirigen por el camino
del progreso moral.
Hay también las luces de la logia que son sus Dignatarios y las luces de iluminación: También hay otras
clases de columnas.
Los dos primeros golpes de la batería demuestran el celo del masón y el último su perseverancia en el bien.

Además de todo lo anterior, se deberá preguntar al Aprendiz en las tenidas de instrucción y en su examen
para aumento de su salario, todo lo que se explica en la liturgia, los procedimientos y las reglas que no están
escritas pero que le explicará su instructor que es el Segundo Vigilante o cualquier otro Maestro. También
se procurará que el Aprendiz conozca perfectamente los Antiguos Limites o Landmarks, los Antiguos
Deberes, la Constitución y Estatutos de la muy respetable Gran Logia, el Reglamento Interior de su logia y
lis demás disposiciones lega-les dictadas en la jurisdicción. Todos los puntos aquí tratados deberán
desarrollarse lo más ampliamente posible en las tenidas de instrucción, para que el Aprendiz pueda tener un
concepto claro, definido y exacto de la enseñanza masónica.

Humberto Acosta.

CURSO DE MASONERIA MASONICA

Para conocimiento de nuestros queridos hermanos lectores, copiamos algunos párrafos del PREFACIO de
la interesante obra de nuestro V H Fausto Tenfus:
"Este Curso de Masonería Simbólica consta de 405 lecciones y 2,025 preguntas sobre los temas expuestos,
todas con sus respuestas y cor ues suplementarias muy ilustrativas."
"81 lecciones versan sobre historia de la Masonería, 108 sobre simbolismo, 108 sobre filosofía initica de los
tres grados y 108 sobre la aplicación de las enseñanzas masónicas en la vida cotidiana.
"Es evidente la necesidad de dar en nuestras logias una instrucción masónica completa, no solamente
litúrgica, sino altamente valorizada por una correcta y exacta interpretación de las formas litúr-r iras de
nuestra milenaria, institución. El perfecto conocimiento de nuestros símbolos, su interpretación teórica,
filosófica y ritualística y las sugestiones para su aplicación en la vida práctica, darán un sentido más amplio
a nuestras ceremonias y crean una conciencia masónica intelectualmente iluminada.
"La vida social de los masones modernos sufre a cada momento una fortísima presión del espíritu (profano,
disipado, voluble e injusto, completamente contrario al espíritu masónico firme, estable y prudente.
Solamente una sólida constitución espiritual y mental intelectualmente afianzada, habilitará a los masones
para resistir victoriosamente las influencias del medio profano, pretencioso, inútil y sofisticado y a los ataques
viperinos, necrosantes, perversos y calumniosos de los enemigos organizados de nuestra Orden."
— 45 —
"El esquema general de este Curso de Masonería Simbólico fue presentado al PRIMER CONGRE-SO DEL
INTERIOR PAULISTA, celebrado el 14 de Junio de 1951 en Mirasol y fue unánimemente recomendado. El
8 de Febrero de 1952 fue aprobado por unanimidad por la Resp Log SAN JUAN DE ESCOCIA No. 7, del
Vallé de Mirasol. En 1955 una Comisión Especial de la muy respetable GRAN LOGIA UNIDA DE SAN
PABLO, recomendó su publicación en un volumen."
No hemos podido averiguar si el volumen mencionado se publicó o no, a pesar de nuestras súplicas a la
Gran Logia, al Director de la revista O MAL-HETE y al propio hermano Tenfus al respecto y, desde luego, a
nuestro interés por obtener un ejemplar de dicha obra.
La revista O MALHETE, editada en San Pablo, inició la publicación del Curso a que nos referimos y, ante la
imposibilidad de obtener el libro, nos dimos a la tarea de traducir del portugués las lecciones a medida de su
publicación, pero desgraciada-mente, solamente vieron la luz las lecciones que ahora ofrecemos a nuestros
queridos hermanos, cuya lectura dejará una enseñanza valiosa a no dudarlo.
Sirva esto como una explicación del contenido de este libro que ahora tenemos el placer de ofrecer a nuestros
queridos hermanos.
Humberto Acosta.
-- 46 —
LECCION I
LOS MISTERIOS ANTIGUOS
Los misterios así llamados eran cultos especiales generalmente secretos, practicados únicamente por los
que habían recibido una iniciación especial. Generalmente se basaban en antiquísimas ideas y tradiciones
e incluían la creencia en un Ser Supremo y en la existencia de un mundo espiritual más allá de los límites
materiales.
Homero, el gran poeta griego, se refirió a ceremonias de purificación y de expiación. Aunque haya indicios
de la extraordinaria antigüedad de los misterios, es a partir del siglo VI antes de Cristo que tenemos noticias
positivas de su existencia y referencias claras y precisas de sus ceremonias. Los más conocidos y notables
misterios son: de los Cabirios VII la isla de Samotracia; de Zeus en la isla de Creta; de Dionisio en los
territorios griegos de Ática y de Beocia; de Deméter en Andancia; de Hécate en Agina; de Orfeo en toda
Grecia; y de Elipsis, que son los que se conocen mejor.
Las ceremonias eleusinas comprendían diversas purificaciones por el agua y por el fuego, baños, rezos,
ayunos, representaciones de dramas simbólicos, a veces terribles y .otras consoladores, descenso los
infiernos (regiones inferiores de tormento), regreso a la luz (recordando el Hágase la Luz), re surrección,
enseñanzas misteriosas dadas por los sacerdotes, presentación de objetos sagrados y también enseñanza
de fórmulas especiales para el reconocimiento y para el trabajo. -
- 47 –
Más o menos en el siglo IV antes de Cristo comenzaron a aparecer algunos misterios de origen oriental, tales
como los de Mithra y de Isis, que trajeron para el culto el sensualismo típico de Oriente. Roma practicó los
misterios griegos y también los de Venus y de Baco, que en el transcurso del tiempo dieron lugar a muchos
abusos y tuvieron que ser prohibidos por el Senado Romano en el siglo II antes de Cristo.
También el cristianismo tenía sus misterios secretos cuándo principió su expansión por el occidente.
Actualmente los misterios cristianos se resumen en algunas verdades que deben ser aceptadas aun-que no
sean comprendidas: la trinidad divina, la encarnación del Hijo de Dios, la redención del mundo, las relaciones
de Dios con el mundo, la justicia y misericordia de Dios, etc.
Los misterios de los magos persas tenían por objeto conservar los conocimientos científicos y útiles a través
de símbolos para recordarlos, ya que esos tiempos no había imprenta. Los misterios braharnánicos servían
para consolidar el poder de los brahamanes y subyugar al pueblo, hasta que fueron vencidos por el progreso.
Los misterios egipcios tenían por finalidad la instrucción y el interés político de los templos. Los sacerdotes
de Isis fueron en realidad los primeros hombres que se interesaron por la felicidad del pueblo, objetivo
primordial de la Masonería.
Los misterios de los Cabirios tenían por objeto exaltar el patriotismo, los de Orfeo la adquisición de la ciencia
según la capacidad de cada individuo.
— 48 —
Los misterios escénicos trataban de abolir la idolatría, establecer la tolerancia, la caridad y la moral más
austera. Socorrían a todos los hombres sin distinción de raza o de creencia. Los misterios cristianos tendían
al establecimiento de la nueva religión basada en la igualdad de todos los hombres, en la libertad política y-
religiosa y en la abolición de las castas privilegiadas. Los de los Druidas eran esencialmente religiosos. Los
misterios de Isis merecen mayor atención, porque son los que más directamente atañen a la Masonería.
Antes de ser iniciado el candidato debía dar pruebas de ser un hombre de valía. Recorría subterráneos,
atravesaba fuego y torrentes se suspendía sobre abismos, etc., sufría todo esto en las criptas di, los templos.
La iniciación estaba dividida en cuatro partes: Bautismo —Muerte y resurrección— Descenso a los .Infiernos
—o regiones de sufrimientos y de horror— y Transfiguración de la Luz. Antes de comenzar la iniciación el
candidato era sometido, a un período de ayuno y meditación, el cual terminaba solamente después de haber
visto alguna visión; podía durar esto meses o años. Bajo la presión o influencia de las oraciones, del ayuno
y de Ia soledad, el sistema nervioso del candidato sufría alteraciones y cuando había visto a la diosa en una
de estas visiones, era bautizado en el torrente de la cripta, se volvía un hombre nuevo y principiaba a vivir ir
la vida real.
Después del bautismo el neófito se alimentaba únicamente con vegetales durante diez o más días pasaba
entonces a la segunda fase del círculo iniciatico: Muerte y Renacimiento. Era colocado en un ataúd como si
estuviera muerto, y por medio del hipnotismo y el magnetismo, lo ponían en contacto con los espíritus de los
muertos; cuando volvía en sí, al terminar el viaje por el mundo de los espíritus, era considerado como un sol
o luz viva sobre la tierra.
-- 49 --
Después de este período le enseriaban las palabras misteriosas que abren las puertas del mundo espiritual
y permiten la comunicación con los espíritus; recibía las instrucciones necesarias para practicar bien todos
los ritos del templo y para provocar su comunicación con el mundo espiritual siempre que lo necesitase. De
este modo el candidato adquiría la certeza de que la muerte no existe en el sentido que se le da
corrientemente, sino que es apenas el paso de un mundo hacia otro diferente, pero más poderoso.
Terminada esta parte el neófito comparecía delante del Tribunal Sagrado, era juzgado y podía después
continuar recorriendo los misterios. Aprendía a describir los astros del sistema solar, se confesaba con los
jueces relatando su vida anterior con toda minuciosidad y con todas sus angustias y aspiraciones.
Estas ceremonias no eran meras representaciones simbólicas como son las nuestras, sino realizadas
prácticamente y permitían entrar en contacto con el otro lado de la vida. Terminada la confesión, se
arrodillaba ante la estatua de la Diosa, símbolo de la Naturaleza Madre, y pronunciaba la siguiente oración:
"Oh madre, celeste diosa de la piedad, echásteis mi alma en el seno de la muerte para mostrarme la belleza
de la vida eterna, sed bendita ahora y por siempre". De ahí en adelante el neófito será el intérprete de la Ley,
esto es, de la revelación del TORA que las leyendas transformarán el Minotauro, Numitor y Manutor
modificando el sentido espiritual de la iniciación y dándole un sentido material. Llegó el momento de la
glorificación del iniciado: magníficamente vestido es sacado de su celda y puesto en oración: diosa se le
presenta y le habla: "Tú vivirás feliz y gloriosa bajo mi tutela y cuando se llegue la hora descenderás a los
infiernos, al hemisferio subterráneo, y me verás brillando, gobernando a los muertos, y cuando te fueres al
cielo ahí me verás deslumbrante. Aprende ahora a merecer mi protección ponme tengo (.1 poder de disminuir
o prolongar tu vida".
-- 50 —
Cicerón, que había pasado por los misterios griegos, decía: "Después de mi iniciación conocí la alegría de
vivir, las razones de la vida que tenemos en este mundo y la fundamentada esperanza de una Vida mejor
después de la muerte."
En el templo de Eleusis había esta inscripción: Es bello el misterio que nos viene de los bienaventurados;
para los mortales la muerte no es un mal sino un bien.
Plutarco escribió en su libro Inmortalidad del Alma: "El hombre después de su iniciación se vuelve libre, anda
sin temor, celebra los misterio como un rey. Todos los iniciados dejan el Iodo y las tinieblas y pasan a disfrutar
de una vida digna y elogiable".
Todos los misterios, del mismo modo que la masonería moderna, tenían por objeto hacer del profano un
hombre nuevo. Empuñando su bastón de iniciado, el nuevo adepto de Isis podía recorrer el mundo entero y
era recibido como maestro en todos los templos existentes entonces.
Había una tolerancia universal que puede servir de lección en los tiempos modernos.
Presumiendo, el cielo de los misterios de Isis ha formado por la preparación para el bautismo, la muerte y la
resurrección, el aparecimiento de la diosa, descenso a los infiernos o regiones, inferiores, transfiguración del
iniciado en sol visible, es decir, en filósofo, en sabio, que recibió la iluminación del espíritu y va por la tierra
transmitiendo esa luz .
-- 51 --
Esos misterios, que son en esencia una misma cosa, nos dan una explicación del mundo antiguo y de lo que
eran los misterios de la antigüedad. En cuanto a la enseñanza propiamente dicha, se dividía en los siguientes
estudios perfectamente simbolizados en el tetragrama o tetragramaton: IOD — HE — VAU — HE.
IOD — estudio de la naturaleza divina, de Dios, de la divinidad, del mundo espiritual;
HE — estudio de la naturaleza material y pro-ducida, de todo lo que hay sobre la tierra;
VAU — estudio de la naturaleza humana, del hombre, de sus relaciones de su vida;
HE — estudio de la' naturaleza productora, de la generación de todas las cosas, del amor universal.
La doctrina de los misterios, aunque revestida de las más diversas formas, jamás varió en su esencia y su
interpretación; era más o menos la misma en todas partes. Esa unidad de sentido prueba claramente que
los misterios tienen un solo origen, de donde derivaron todas las formas de enseñanza filosófica o religiosa
de la antigüedad. La Masonería conserva las bases y tiene la llave de estos misterios.
-- 52 —

LECCION II
LAS COMUNIDADES MISTICAS DE LOS HEBREOS, GRIEGOS E INDUES En la lección primera
estudiamos ligeramente los misterios de la antigüedad, los más importan-tes, de los cuales fueron para la
Masonería los de I.,is, en Egipto, de los que hicimos una descripción ..mnaria . Juntamente con los misterios,
que eran cultos organizados y protegidos por los gobernan-es, con leyes y privilegios, había también una es-
pecie de conventos, comunidades o asociaciones fra-teinales que .recibieron en la historia el nombre de
,milunictades Místicas, esto es, agrupaciones de ini-1 bitios que vivían una vida comun separada en 1,,irte
del resto del mundo. Esas' comunidades existieron en India, Persia, o.ecia y Egipto. Eran semejantes a los
actuales o n ven los de órdenes religiosas de frailes y mon-j, v., pero poseían ciertas características que las
re-11( ionan con la Masonería moderna, por lo que \dmos a estudiarlas aunque un tanto superficial-mente.
A/luchas de esas comunidades o sociedades tu-s' 'proa carácter religioso • y otras no. La mayoría idcio de la
necesidad que sentían los iniciados de curtirse en vida común, para resistir las impos.i-
- 53 --
de la diosa, descenso a los infiernos o regionel, inferiores, transfiguración del iniciado en sol visi-ble, es decir,
en filósofo, en sabio, que recibió la iluminación del espíritu y va por la tierra transmi-tiendo esa luz . Esos
misterios, que son en esencia una misma cosa, nos dan una e. xplicación del mundo antiguo y de lo que
eran los misterios de la antigüedad. En cuanto a la enseñanza propiamente dicha, se dividía en los siguientes
estudios perfectamente sim-bolizados en el tetragrama o tetragramaton: IOD — HE — VAU — HE. IOD —
estudio de la naturaleza divina, de Dios, de la divinidad, del mundo espiritual; IIE — estudio de la naturaleza
material y pro-ducida, de todo lo que hay sobre la tierra; VAU — estudio de la naturaleza humana, del hombre,
de sus relaciones de su vida; HE — estudio de la' naturaleza productora, de la generación de todas las cosas,
del amor univer-sal.
La doctrina de los misterios, aunque revesti• da de las más diversas formas, jamás varió en su esencia y su
interpretación; era más o menos la misma en todas partes. Esa unidad de sentido prueba claramente que
los misterios tienen un solo. origen, de donde derivaron todas las formas de en-señanza filosófica o religiosa
de la antigüedad. La Masonería conserva las bases y tiene la llave de estos misterios .
-- 52 —
LECCION II
LAS COMUNIDADES MISTICAS DE LOS HEBREOS, GRIEGOS E INDUES En la lección primera
estudiamos ligeramente los misterios de la antigüedad, los más importan-tes, de los cuales fueron para la
Masonería los de I.,is, en Egipto, de los que hicimos una descripción ..mnaria . Juntamente con los misterios,
que eran cultos organizados y protegidos por los gobernan-es, con leyes y privilegios, había también una es-
pecie de conventos, comunidades o asociaciones fra-teinales que .recibieron en la historia el nombre de
,milunictades Místicas, esto es, agrupaciones de ini-1 bitios que vivían una vida comun separada en 1,,irte
del resto del mundo. Esas' comunidades existieron en India, Persia, o.ecia y Egipto. Eran semejantes a los
actuales o n ven los de órdenes religiosas de frailes y mon-j, v., pero poseían ciertas características que las
re-11( ionan con la Masonería moderna, por lo que \dmos a estudiarlas aunque un tanto superficial-mente.
A/luchas de esas comunidades o sociedades tu-s' 'proa carácter religioso • y otras no. La mayoría idcio de la
necesidad que sentían los iniciados de curtirse en vida común, para resistir las impos.i-
- 53 –

ciones y miserias del mundo profano y poder llevar una vida conforme con sus ideales y aspiraciones. Aquello
que más liga espiritualmente esas co-munidades antiguas a la Masonería moderna, tal como resultó de la
unión de las logias de Londres, es el hecho de haber sido operativas y especulati-vas, esto es, trabajaban
en actividades materiale3, realizaban servicios de albañil, de carpintero y de constructores en general y
también se entregaban a estudios fildsóficos, científicos y religiosos. La iniciación era condición
absolutamente nece• saria para que alguien pudiera ingresar en esas comunidades antiguas, del mismo
modo que en la Masonería. Tenían esas extraordinarias fraterni-dades medios especiales de reconocimiento:
seña-les, toques y palabras de las que se servían para ser aceptados por sus hermanos, no solamente en
su propio país, sino cuando viajaban a otros luga-res en donde había idénticas comunidades . Alli eran
reconocidos los iniciados viajeros por la se-ñal, el toque y la palabra, tal como hoy se hace con el hermano
masón en cualquier parle del inun-do. Hubo un gran iniciado llamado Apolonio de Tiana, cuya biografía fue
escrita por Filóstrato ba sado en datos anotados por uno de sus discípulos de Apólonio llamado Damis. Ese
gran reformador y fi-lósofo del. siglo I de nuestra era, viajaba constante-mente de una ciudad a otra y de uno
a otro país, visitando todos los templos de cualquiera religión que fuesen y siempre encontraba hospitalidad
y era acogido fraternalmente, diviviendo con todos su ma-ravillosa sabiduría. Damis no era iniciado y no po-
día entrar a los templos se quedaba en las salas ex-teriores que correspondían, más o menos, a nues-tras
Salas de Pasos Perdidos.
-- 54 —
Apolonio de Tiana nació en la villa de Tiana, en el Asia Menor, donde hoy queda Turquía. y murió en la
ciudad de Efeso en el año 97 de. nues-tra era . Era filósofo neo-pitagórico; abrazó la doc-trina de Pitágoras
y emprendió largos viajes. .En todas partes predicaba la reforma de las costum-bres y las doctrinas y
principios que aprendiera en los libros del gran filósofo griego. Apolonio era un hombre de alta moralidad. La
biografía que escribió Filóstrato estaba equivocada -en muchos puntos; otros autores desmintieron a ese
historia-dor. Apolonio estableció en Efeso una comunidad pitagórica, una de las comunidades místicas de la
antigüedad, cuyo sistema describiremos en segui-da . Fue uno de los hombres más sabios y virtuosos del
siglo I de la Era Vulgar. Siendo la comunidad pitagórica la que mejor expresa el sentido de la Masonería, la
examinare-mos minuciosamente. Ya sabemos de un modo ge-neral el aspecto de las comunidades místicas
de la antigüedad y al mismo tiempo el de la más evo-lucionada de todas y más próxima a nuestros idea-les.
Para ser recibido en la comunidad pitagórica el aspirante pasaba por una serie de pruebas des-inadas a
descubrir sus defectos y sus cualidades y el dominio que tenía sobre sus pasiones . Estas pruebas eran
eliminatorias y duraban muchas se manas; si era admitido al final de ellas recibía la I tiz e ingresaba al Primer
Grado . Este Primer Gra-do duraba por lo menos dos años, a veces tres y hasta cinco. En ese grado el
hermano debía me-(I i lar sobre las enseñanzas recibidas y exponía lo a prendido con sus propias palabras
delante de toda la comunidad v su principal- obligación era oir y no discutir nunca. Corresponde exactamente
a
— 55 –

nuestro grado de Aprendiz. Era el Grado de OYEN-'1 E. El Segundo Grado, también llamado de Puri-ficación,
era la recompensa de quien pasaba bien por el primer grado. Entraba al templo donde es-taban el Maestro
y sus discípulos y allí recibía una exposición de la doctrina, de la ciencia de los nú-de la evolución universal
y del destino y fin del alma humana . En la puerta del templo de.l segundo grado estaba grabada una G, que
sig-nificaba Geometría . Este grado corresponde en par-te al segundo grado de la Masonería moderna. El
tercer grado, llamado también de Purifica-ción, era conferido cuando el Maestro juzgaba que el candidato
había alcanzado la completa purifica-ción de su espíritu. Entonces el iniciado aprendía varias ciencias:
Cosmogonía (ciencia de los astros), Sicología (ciencia del alma) y era cuidadosamente guiado en otras
ciencias y artes. Esas enseñanzas del tercer grado eran dadas por la noche, a orillas del mar o en las criptas
de los templos donde había poca luz y el candidato no era visto por los demás que escuchaban. Hay una
gran semejanza entre este grado y el tercero de la Masonería . En la Cámara del medio tam-bién el
recipiendario queda sumergido en las tinie-blas y escucha, sin ver al respetable Maestro, el relato de la
majestuosa y sublime leyenda de Hi-ram. Las comunidades místicas pitagóricas tenían un cuarto grado que
era la plenitud de la carrera y tenía el nombre de Epifanía, que significaba ver desde arriba, desde lo alto .
Era el corazón de todo el aprendizaje. Las iniciaciones pitagóricas preten-dían dar al candidato la Verdad
para la inteligen-cia, la Virtud para el alma, la pureza para el cuerpo.
— 56 —
Le enseñaban al adepto reglas de higiene corporal y mental, para que gozara siempre de salud física y
espiritual. Los miembros de estas' comunidades se casaban, pero no era preciso que abandonaran la
comunidad. Toda la sabiduría y toda la prudencia que ellos adquirían con sus estudios y prácticas se-cretas,
les servían para la vida práctica . Conocían el origen del Bien y del Mal, tenían un alto nivel moral y esparcían
a su alrededor enseñanzas va-liosas que beneficiaban a la sociedad. Eran obre-ros sociales, tales como son
los masones modernos, y contribuían a la armonía y al orden de la socie-dad. La Masonería ligose
espiritualmente con los grandes misterios de la antigüedad, especialmente con los de Isis, porque intelectual
y filosóficamen-te la Masonería tiene sus raíces en los conocimien-tos pitagóricos y se asemeja en su
estructura a las comunidades místicas de esos sabios de la antigüe-dad. Además de las comunidades
pitagóricas hubo (►tras como la de los Esenios entre los hebreos, de la cual se descubrió hace pocos meses
en un mo-nasterio cerca del río Jordán, una rica y valiosa blioteca . Los Esenios difieren- mucho de la Ma-
,;nnería, aunque también tenían una relación mís-ica con ella . Formaban una de las tres socieda-des
judaicas del tiempo de Cristo: Saduceos, Fa-iseos y Esenios, se agrupaban en los alrededores del Mar
Muerto, vivían en común bajo la presi-dencia de ancianos. Juan Bautista fue esenio y d ice que Jesús fue
iniciado entre ellos. La ver-dad es que los últimos hallazgos de libros esenios deI tiempo de Cristo, nos hacen
pensar en una re-lación directa entre el Cristianismo y _los Esenios, tanto más que los libros esenios hablan
de un
-- 57 –

1
Maestro de la Virtud, presidente de los esenios, que fue crucificado y cuya resurrección era espe-rada. Se
esperan, pues, revelaciones sensacionales para cuando sean descifrados todos los libros en-contrados en
las cavernas de las riberas del Mar Muerto, en el lugar llamado Qumram. En Egipto existieron los Terapetas,
que eran esenios judíoegipcios. En la. India estaban las co-munidades místicas de los Gimnosofistas, palabra
que significa sabios desnudos y vivían prácticamen-te sin ropa alguna; son los precursores de los yo-guis
1Vloral, material y espiritualmente se despo-jaban de. toda riqueza y pasaban practicando la meditación,
quitándose las ilusiones de .la mente y persiguiendo la verdad. En algunos aspectos te-nían relación con la
1Vlasonería porque buscaban la verdad sin poner límites a su investigación. Finalmente recordemos que
todas las comuni-dades místicas antiguas tenían, razgos de unidad comunes: iniciación, señales, toques,
palabras, to-lerancia, investigación de la verdad, secreto, reu-niones, perfeccionamiento del individuo,
influen-cia en la sociedad a través de los iniciados per-fectoS, etc. Eran por lo tanto verdadera Masone-ría,
pero con otros nombres y bajo otros aspectos. Recordemos la imponente figura de' Apolonio de Tiana,
predicando la doctrina de Pitágoras por todo el Cercano Oriente. Pensemos en las comu-nidades pitagóricas
con sus cuatro grados de 'Oyen-te. Purificado, Perfecto y Epifanía correspondien-, tes a nuestros grados de
Aprendiz, Compañero, Maestro y Maestro perfecto. Somos los continua-dores de los sabios maestros,
honremos su memoria.
— 58 --
LECCION III
LOS TEMPLARIOS Y LOS ROSACRUCES
En estas modestísimas lecciones, procurando responder a la pregunta ¿DE DONDE VENIMOS?,
comencemos por recordar los misterios de la an-tigüedad y hablemos de las comunidades místicas de los
hebreos, los egipcios, los griegos y los in-dúes . Ahora dedicaremos nuestra atención a dos importantes
órdenes: los Templarios y los Rosa-ruces . Entre los años 1118 y 1119, hace ya más de 81.0 años, nueve•
caballeros franceses se reunieron en la roca de Kube-es-Sakrá, más o menos don-de estuvo el templo de
Jerusalem, y allí fundaron la Orden Militar del Templo con un solemne ju-ramento. Reunidos en círculo con
sus espadas des-' r itdas, prestaron los tres votos de pobreza, casti-dad y obediencia. Solamente dos de
estos deja-run sus nombres a la historia: Hugo de Payen primer Gran Maestre, y Godofredo de Santo Omer.
Para ser admitido entre los Caballeros del el candidato pasaba por diversas pruebas recibía una iniciación
progresiva a medida que ..1 ihía en la escala de los grados. En cada grado res taba nuevo juramento; la
recepción era acom-itada de ceremonias misteriosas y dé fórmulas .1111 bólicas. El capítulo se reunía en
una iglesia
-- 59 —
casi siempre por la noche y el candidato esperaba afuera. El Presidente mandaba tres veces a dos hermanos
a preguntar al aspirante si quería ser ad-mitido en la milicia del templo. El aspirante res-pondía tres veces,
pedía pan y agua y se declara-ba enteramente de acuerdo con la vida del caba-llero templario; entonces era
introducido al tem-plo . El Presidente le hacía la siguiente exhorta-ción: "Las reglas de nuestra orden son
severas, te expondréis a grandes sufrimientos y peligros, cuan-do penséis reposar será preciso que estéis
despier-to, tendréis que soportar fatigas cuando imaginéis ir a descansar, sufriréis hambre y sed exactamen
te cuando quisiéreis comer y beber tranquilamen-te, tendréis que ir a un país cuando desearías ;r a otro".
Terminado este discurso, el Presidente in-terrogábale así: ¿Queréis ser Caballero? ¿Sois sano de cuerpo?
¿No sois esposo ni novio? ¿No pertenecéis a otra orden? ¿No tenéis deudas imposibles de pa-gar? Cuando
el candidato había respondido a ese cuestionario prestaba el juramento. Los Templarios pueden ser
considerados como los más antiguos masones . Escuchemos el juramen-to que prestaban: "Juro consagrar
mis palabras, mis fuerzas y mi vida a la defensa de la creencia en la unidad de Dios y de los misterios de la
fe . Prometo obediencia al Gran Maestro de la Ordén. Siempre que los enemigos invadieren nuestras tie-
rras, atravesaré los mares para libertar a mis her-manos. Con el esfuerzo de mi brazo socorreré a la Iglesia
y a los reyes contra los príncipes enemi-gos . Cptnbatiré a mis enemigos aunque fueran más de tres y no
huiré jamás". Esa fraternidad creció en número con el ingre-so de numerosos elementos de las mejores
familias europeas . Comandando esa lucida juventud Hugo
--60-
de Payen, el Primer Gran Maestro, volvió a Pales-tina con el propósito de defender el reino cristiano cle
Jerusalem contra los guerreros mahometanos . 1,os Caballeros del Templo se distinguieron en nu-merosos
combates como los de Ascalón, San Juan de Acre, Tiberíades, Ptolomaida, Mansurá y mu-cilisimos otros .
Terminado el período de las Cru-zadas vinieron al occidente y se dedicaron al es-t lidio• de la Ciencia de los
Santuarios. Se enrique-cieron y fueron los banqueros de occidente y esto fue su ruina. Felipe el Hermoso,
rey de Francia, y Clemente V resolvieron apoderarse de las riquezas de los Tem-plarios y levantaron un
proceso calumnioso e in-fame contra la Orden, condenaron a muerte a su ran Maestro Jacobo Burgundo de
Molay y a mu-cli ísimos caballeros . En la hoguera ese hombre he-mico intimó al Papa y al Rey para que
compare-( ¡eran ante Dios dentro de un año y tres meses. I )ices oyó al Gran Maestro y así se cumplió. Entre
al i to la Orden había determinado desde hacía algún i(,mpo que sus caballeros ingresaran a las organi-/a(
iones de Albañiles Libres. Eran hombres ins-II o idos e ilustres, sus grados eran ocho: Iniciado, i ciado del
Interior, Adepto, Adepto de Oriente, iran Adepto del Aguila Negra de San Juan, Pos-lante, Adepto Perfecto
del Pelícano y Caballero b. la Guardia Interior. Para dar lugar a esos valientes caballeros, la I\ Isonería
instituyó los grados 19, 20, 23, 24, 25, 91, 97 y 29. Así fue incluido el Rito Templario el Rito Escocés Antiguo
y Aceptado. Esos ocho 11.1(10s, llamados templarios, enseñan los siguien-a,.. principios que los masones
deben defender: li-11(.11 ad de instrucción, lucha contra la ignorancia y las supersticiones, defensa de los
derechos y de-
- 61 —

beres del pueblo contra el despotismo y la dictadu-ra, igualdad social, defensa de la libertad de pen-samiento
y de la soberanía del pueblo. Por esto comprenderán mis queridos hermanos cómo la Or-del del Templo
contribuyó a la organización masó-nica y continúa figurando *en ella. La Fraternidad de los Rosacruces fue
una socie-dad, formada en la Edad Media, cuya benéfica in-fluencia se ha hecho sentir hasta nuestros días.
Esos valerosos filósofos xecibieron sus enseñanzas de los gnósticos y de la kabala. antigua. Fue orga-nizada
por Christian. Rosenkreutz que vivió 105 años, gracias a un elixir que descubrió y le prolon-gó la vida. Data
esta sociedad de mediados del si-glo XV y tuvo muchos y variados nombres durante su existencia . En el
siglo XVIII se unió con los Albañiles Libres, con la Masonería, y en ella in-fluyeron favoreciéndola y
transformándola de ope-rativa en especulativa, haciendo que la Masonería abandonase completamente la
construcción mate-rial y solamente se ocupase de la construcción es-piritual. Veamos las principales
enseñanzas y doctri-nas rosacruces, tan íntimamente ligadas a la Ma-sonería: juraban guardar al máximo el
secreto, no revelándolo nunca a los profanos; se especializaban en la medicina; eran piadosos y sabios,
combatían los errores y la hipocresía, procurando levantar la conciencia de los pueblos. En su vasto
programa de ciencia experimental constaba lo siguiente: trans-mutación de los metales, es decir, el paso de
un me-tal a otro que solo ha sido logrado ahora, en la Era Atómica, en los laboratorios donde se desintegran
los átomos. Fabricación del Elixir de Larga Vida, que no ha sido lograda todavía, pero que con las sulfas, los
antibióticos, la cirugía moderna y los pro-
- 62 —
Rresos de la higiene, ya la edad media de la vida aumentó treinta años más. La clarividencia de 'lo invisible,
esto es, ver a través del espacio, de los cuernos opacos, lo que ha sido logrado con los ra-yos X, la
Fluoroscopía, la televisión, la transmisión (le imágenes por radio a largas distanciaá. Poco a poco la
humanidad avanza en la ruta .que trazaron los Rosacruces. Cuando las persecuciones y los despotismos hi-
cieron huir a los Rosacruces, ellos büsCaron abrigo en los Templos Masónicos, donde hubo necesidad más
tarde de organizar una escala de gradoS, para distribuir en ellos a estos filósofos. Permaneciendo asentada
sobre la base simbólica 'de los tres grados tiniversales —Aprendiz, Compañero y Maestro los I rados del 15
al 18 del Rito Escocés Antiguo y-A ceptado recuerdan a los masones actuales la .deci-i va influencia rosacrúz
en el establecimiento de la iiirarquía en nuestra organización. Los grados capi-tulares son los • que recuerdan
mejor a los Rosacru-tes: 15-Caballero de Oriente, dedicado a formar él ciipíritu del patriota v a recordar a los
grandes hé-roes nacionales; 15-Príncipe de Jerusalem, dedica-do a conmemorar a los grandes hombres que
die-ron su vida por el bienestar de la humanidad; 17-+ :►ballero de Oriente y de Occidente, para recordar
los masones su deber de.trab.ajar por el desenvol-;miento de la Orden en todo el mundo; 18-Caba-1 lpro o
Príncipe Rosa Cruz, especialmente destinado a conmemorar el triunfo de la luz sobre las tinie-bl►s, de la
Verdad sobre la Ignorancia. Une la creen-, id cm el.Eterno con la ciencia. Comprendemos, por lo tanto, que
además de los ► brios de la antigüedad y de. las comunidades místicas, también la Orden 'del Templo y la
Frater-► idad Rosacruz contribuyeron para la formación
— 63 —
de la Masonería Moderna. Las tradiciones templa-rias y rosacruces entraron en nuestra Orden y por esto la
Masonería se volvió la intérprete y herede-ra natural de todas esas tendencias filosóficas dife-rentes.
Resumiendo las enseñanzas originarias de los Templarios y de los Rosacruces, veámoslos tales co-mo
existen hoy dentro de los grados masónicos: el masón debe declarar la guerra a la pereza y tomar parte en
todo lo que pueda establecer un gobierno democrático, porque el despotismo es el mayor ene-migo de la
libertad; instrúyanse los hermanos para que gobiernen sabiamente. La humanidad está can-sada de ser
explotada intelectual y materialmente, en la Masonería existe luz para la inteligencia y ca-ridad verdadera y
real. El hombre sólo se hace fuer-te por medio de la fe y de la esperanza, sólo ama a sus hermanos por
medio de la caridad. El masón tiene por obligación combatir por la verdad, por el honor y la caridad,
importándole poco si vencerá o no. Los masones que gobiernan la Orden son sola-mente los primeros entre
sus iguales. El masón debe ser siempre tolerante, porque solamente el Gran Ar-quitecto conoce todos los
secretos del Universo, que vienen de El y volverán a El. El Gran Arquitecto es la Causa Primera, creó el
Universo y la Fuerza Suprema, el Pensamiento Supremo, la Inteligencia Infinita, la Sabiduría Infinita.
Conserva todo por su omnipotente voluntad y mediante la ley de la armonía. Todas las creencias son
legítimas porque tienden a llevar al hombre hacia el Eterno. El Eter-no manifiesta su poder y su fuerza en el
Universo que El creó. Esta es la maravillosa contribución de los Templarios y de los Rosacruces para el
conte-nido filosófico de la Masonería.
— 64 —
LECCION IV
CAMARA DE REFLEXIONES
La Cámara de Reflexiones es el lugar, general-mente subterráneo, donde son introducidos los pro-fanos que
han sido aceptados para ingresar a la Ma-sonería y que constituye la primera parte de su ini-ciación. En esta
sala, gabinete, cámara o cuarto, hay-!' umerosos objetos que recuerdan la muerte y tie-nen por objeto hacer
meditar al recipiendario so-bre el poco valor de este mundo material. En esa disposición de su espíritu escribe
sus pensamien-tos y su última voluntad. En general, el gabinete de reflexiones tiene, o debería tener, la
forma de una gruta o caverna som-bría, porque simboliza el centro de la tierra, el seno de la naturaleza
material de donde venimos y a londe volveremos y nos disolveremos transforma-dos en polvo. El profano es
introducido en este lu-r sombrío para que aprenda y entienda bien que morirá y nacerá de nuevo, que iniciará
una vida !lleva y por lo tanto deberá morir para la vida pro-oa, deberá comenzar a vivir de otro modo purifi-
ado y regenerado. La Cámara de reflexiones es el 1111511. donde está siendo purificado 'por el elemento
fierra, a fin de iniciar una nueva vida. Esta primera parte de la iniciación viene de los kliii,erios Egipcios, en
los cuales los candidatos per-
- 65 –
manecían aislados, rodeados de momias y emblemas fúnebres, para que reflexionaran sobre el paso que
iban a dar. Ya tuvimos la oportunidad de estudiar los Misterios de la Antigüedad, las Comunidades Místicas,
los Templarios y los Rosacruces, y esta-mos principiando a comprender mejor la valiosa contribución que
ellos dieron para la formación y desenvolvimiento de nuestra Venerable Institución. Un gran número de
profanos, lo mismo que mu-chos masones, piensa que la finalidad de esta cáma-ra o gabinete es amedrentar
a los candidatos y por eso truenan y protestan estos -últimos de esa ceremo-nia inicial, que es
verdaderamente la clave de la iniciación. Desgraciadamente, la mayoría de las mo-dernas cámaras no
despiertan aquellos profundos y temerosos pensamientos que °pudieran hacer que el recipiendario modifique
su modo de pensar y tome más en serio su vida. Todo debe infundir respeto y meditación en ese lugar
destinado a purificar su. es-píritu, a alterar los pensamientos de un alma, lle-vándole a comprender la nada
de las cosas terrenas y el gran valor de las espirituales. Corresponde al hermano Experto o Preparador
conducir convenientemente la ceremonia, a fin de que no tenga nada de ridículo. Todo en la cámara debe
ser limpio, aseado, pero caracterizando bien el interior de una gruta o caverna y con la comodi-dad
indispensable para que el recipiendario pueda meditar tranquilamente. No olvidemos que ese ga-binete es
el verdadero punto crítico de la iniciación, es allí donde el recipiendario pasa por una crisis interior. Si no
hubiera una verdadera meditación, si fuera hecho todo de modo que el graduante com-prenda perfectamente
el poco valor de las cosas profanas y el gran valor del mundo espiritual a donde él entrará, entonces no podrá
ser nunca un
— 66 —
verdadero iniciado. El aislamiento del Gabinete de Reflexiones, sus paredes negras y su silencio, repre-
sentan un período de obscuridad y de silencio para el alma, que por medio de la meditación y de la
concentración en sí misma, comienza a preparar un progreso efectivo y consciente que más tarde mos-trará
sus efectos en la vida del masón. En este gabinete hay numerosos emblemas de la muerte y una lámpara
sepulcral y en sus negras paredes están escritas algunas frases, destinadas a experimentar la fuerza del
alma del recipiendario, .11 firmeza y su voluntad para continuar y progre-r hasta ingresar en la Orden.
Después él deberá X presar todo esto en el pliego triangular, es su tes-lamento. Por desgracia en nuestras
cámaras de reflexio-nes todo se reduce a contestar unas cuantas pregun-que en la gran mayoría de veces
el recipienda-in no entiende bien o las comprende mal, cuando la verdadera finalidad no es solamente
contestar las preguntas, sino hacer que el graduante exprese su npinión sobre ellas y escriba su última
voluntad, su t.;tainento. ¿Por qué? porque es bajo la influencia del aspecto y condiciones de la cámara que
él dirá I: verdad. Es preciso y conveniente que se le en-(.19 te una hoja de papel en blanco, con lineas, don-
de deberá escribir en pocas palabras sus últimas vo-ades exactamente como si fuera a morir. Expre-,n .; sus
últimos pensamientos y sus últimas dispo-H Int-1es. Por ese documento escrito en momentos que su mente
sólo habla la verdad, tendrá la lo-mi conocimiento casi perfecto de los verdaderos i; n tientos del profano. El
hei'mano Experto le que declare si hay alguien a quien tenga que I ir perdón, si tiene en su conciencia alguna
cosa
-- 67 –
que le oprima, para que se desahogue y quedé en paz. Así será un verdadero testamento. Al ingresar
vendado en la cámara, será despo-jado el recipiendario, de todos los valores y metales que lleva, que el
Experto recoge y guarda cuidado-samente, y se le quita parte de sus ropas. Simbóli-camente significa esto
que está reducido al estado de completa desnudez y desamparo, lo mismo que estaba Adán, el primer
hombre simbólico, y que el recipiendario se desprende de todas las cosas que le fueron útiles para llegar al
estado en que se encuen-tra, pero esas cosas materiales, esos valores secun-darios, serán un obstáculo
para su progreso y por eso él se despoja simbólicamente de todo. Desde que entra al seno de la madre tierra
en-teramente desnudo, despojado de todas las cosas materiales, deberá comprender que no puede tener
ya confianza alguna en los valores exteriores del mundo. El recipiendario encontrará de allí en ade-lante
dentro de sí mismo los verdaderos valores, los valores o virtudes morales y espirituales. Ya no po-drá aceptar
sin discusión creencias y opiniones, abrirá caminos hacía la Verdad discutiendo todo y usando siempre su
razón como guía. Todo este simbolismo no significa que el reci-piendario tenga que abandonar todo lo que
le per-tenece y que adquirió con sus esfuerzos y como pre-mio de su trabajo, el significado verdadero es la
instrucción del profano en el sentido de que no debe dar gran valor y. una importancia principal a las cosas
materiales, ni debe volverse esclavo de ellas. Significa que por encima de todas las consideracio-nes
materiales o utilitarias de las riquezas y de los bienes del mundo, el iniciado debe afianzar su fi-delidad a los
grandes principios y doctrinas que ema-nan de la razón y que están fundamentadas en la
— 68 —
Ley Natural. La finalidad del Gabinete de Refle-xiones es libertar al individuo de. los lazos que lo atan,
falsedades, inmoralidades y calumnias, que so-lamente sirven para impedir el progreso del espíritu. En
resumen, la Cámara de Reflexiones es el lugar donde el individuo, despojado de todas las conside-raciones
y respetos humanos, entra para quedar en presencia de su conciencia solamente, viendo el fin material de
la vida; allí su alma se abre a la ver-dadera realidad en la que él no tuvo tiempo de pen-sar cuando 'estaba
en el mundo profano. Queridos hermanos, el Gabinete de Reflexiones es el seno de la tierra y es allí que se
verifica la gestación para el nuevo nacimiento; allí un hombre muere para" dar nacimiento a un hombre nuevo
con nuevas ideas, nuevos sentimientos y una nueva ma-nera de pensar y de actuar. Esta cámara es la par-
te más importante de la iniciación sin restarles mé-ritos a las otras. Si alguien pasa por esta cámara y no
renace jamás, no será un verdadero masón, sino que un masón que no comprendió el gran alcance de su
transformación, porque en realidad no llegó i transformarse, siguió siendo profano. Es preciso que las logias
den la máxima aten-ción al gabinete y que no sea solamente un lugar propiado, sino que esté revestido de
todas las con-(1 iciones necesarias para impresionar al recipienda-rio y hacerle pensar. No debe ser un lugar
que dé miedo o pavor. La Biblia dice que Cristo pronunció estas pala-bras: EL QUE NO NACIERE DE NUEVO
NO EN-TRARA AL REINO DE LOS CIELOS, y i:no de los -abios hebreos que estaba alY, llamado Nicode-
mus, resp9ndió: "por ventura podrá un hombre vol-verse embrión nuevamente para volver a nacer?"
— 69 —

Cristo reafirmó con energía: SI NO NACE DE NUEVO NO ENTRARA AL REINO DE LOS CIE-LOS.
Apliquemos a nuestro caso las sabias palabras del Divino Maestro. Sabemos con absoluta certeza que él
fue uno de los grandes iniciados y maestro de los esenios y, por lo tanto, a la luz de la Masone-ría sus
palabras adquieren un nuevo y vibrante sentido. Quieren decir que el individuo que no se somete a la
iniciación no entra al seno de la tierra, no muere para todo su pasado y no se convierte a una vida nueva; no
entrará al reino de la Luz, de la Verdad y de la Justicia, no será un justo, no se-rá un iniciado poseedor de
los secretos de la vida y de la muerte. Cristo dijo: "destruid ese templo y en tres días lo reedificaré". A la luz
de la Masonería, que ema-na del Delta Sagrado, entendemos estas palabras así: pasaré tres días en el seno
de la tierra y resu-citaré, seré un nuevo, habré renacido. El recipien-dario permanece en el seno de la madre
tierra, en la Cámara de Reflexiones que es un templo simbó-lico, y renace a la "vida luminosa de la
Masonería.
70 ----
LECCION V
EL TESTAMENTO DEL CANDIDATO Dáse el nombre de Testamento a una fórmula usada en las iniciaciones
masónicas, con el doble fin de dar a comprender al graduante que él morirá para el mundo profano y nacerá
para una vida nue-va, donde conocerá los más íntimos sentimientos de su alma. El testamento con las
preguntas que en. (',1 se formulpn para que el recipiendario las con-leste por escrito, cuando está en el
Gabinete de Re-flexiones, tiene enorme importancia. Las antiguas tradiciones de nuestra Orden, mu-chas
veces vistas con desprecio, mandan que este testamento sea escrito en una hoja de p: en for-ma de un
triángulo equilátero, estando gritas en tina de sus caras las siguientes preguntas. ¿Cuáles son los deberes
del hombre para con Dios ¿Cuáles son los deberes del hombre para con .it is semejantes? ¿Cuáles son los
deberes del hombre para consi-ilo mismo? Esta hoja así preparada es presentada al reci-piendario por el
hermano Experto. cuando lo ha in-troducido en él Gabinete de Reflexiones, advirtién-dole que medite el
significado de cada pregunta y las conteste en el mismo pliego en la forma que sus
— 71 —
sentimientos le sugieren. Cuando este pliego trián-guiar ha sido llenado y firmado, lo recoge el Ex-perto y lo
lleva ante el Venerable Maestro, quien lo lee, o ruega al hermano Orador que lo haga, a fin de que todos los
hermanos presentes puedan co-nocer los sentimientos del graduante y formular las observaciones y
preguntas sobre las respuestas da-das, que deben ser anotadas por el V.*. M.". y des-pués repetidas al
recipiendario, para que quede bien claro su pensámiento. Terminada la ceremonia de iniciación, el hermano
Experto llevará ese pliego en la punta de una espada y lo quemará entre colum-nas en presencia del neófito,
ocasión que aprovecha-rá el V.•. M.•. para explicarle el significado y obje-tivo de aquel testamento. Ella es la
forma que de-termina la tradición de nuestra Augusta Institución, forma muy desvirtuada y modificada en la
actua-lidad por la prisa con que a veces se realizan en muchas logias estas ceremonias, para llegar lo más
pronto posible a la Sala de Banquetes. Ese documento es un testamento iniciático, muy diferente del
testamento profano que es una prepa-ración para la muerte física del individuo, mientras que el testamento
simbólico es la preparación para una vida nueva, ya que en esos momentos un hom-bre nuevo nacerá. El
testamento escrito en el Cuar-to de Reflexiones es un emblema de la muerte del hombre profano y del
nacimiento de un hombre ini-ciado, quien será su propio ejecutor. En aquellas pre-guntas que ha respondido
con ideas profanas está resumido un programa de vida que él deberá reali-zar. Allí se establece una triple
relación con el G.•. A.•. D.•. U.•., con sus semejantes y con él propio. Principiará una nueva era en sus
relaciones con el Supremo Creador, con los demás hombres y consi-
- 72 —
go mismo. Este testamento simbólico es un recono-cimiento a los deberes que el graduante asumirá. La
primera obligación o deber del recipiendario se expresa en la pregunta ¿qué deberes tiene el hord-1) re para
con Dios? y és una relación o deber que tiene que ser establecido interiormente, en la con-ciencia del hombre,
pero no sobre la base de creen-cias o prejuicios. No se pregunta al graduante si id cree o no en Dios ni cual
es su credo religioso o filo-sófico, porque para la Masonería todas las creencias son equivalentes, son otros
tantos aspectos de la ver-dad, que se encuentra oculta debajo de las diversas ideas religiosas. Es solamente
la verdad la que inte-resa a la Masonería y no las diversas formas con que ella se presenta, a través de las
interpretaciones religiosas y filosóficas. Lo que es de importancia vital, y por eso la Masonería lo exige
rigurosamen-IP, es nuestra íntima y directa relación con el Prin.- ( itio de Vida Universal, sea cual fuere el
nombre (lite se le dé. Es una relación que se establece en lit conciencia por sobre la inteligencia y la mentali-
d. id común de la vida. Así, directamente en /Tia-( i("in con la divinidad, es que se manifiesta aque-ilit LUIZ
"que ilumina a todo hombre que viene a (...te mundo", como dice el Libro de la Ley Sagrada de los cristianos.
Por eso al preguntar al recipien.- (Lirio cuales son sus deberes para con Dios, la Ma-...merla sabe
inmediatamente lo que él piensa de ese isino Dios y puede aceptarlo o rechazarlo, por lo .pie el V.•. M...,
después que se han leído las pre-:911 Las y sus respuestas, pregunta a los otros obre-1,),; si están
satisfechos con tales contestaciones. Ge-ii.ralmente éstas son satisfactorias, pero hay casos vi que la logia
rechaza al candidato por sus res-puestas cuando no satisfacen los ideales de nuestra nrhilen. Si un candidato
respondiera a la primera
-- 73 —
pregunta —"ninguna obligación tengo para con. Dios porque no reconozco su existencia" daría mo-tivo para
no aceptarlo. El segundo deber se expresa por las obligaciones para con los otros hombres. A veces se usa
la pa, labra prójimo que significa lo mismo. Esta pregun ta tiene perfecta relación con las otras, porque e
recipiendario ya se reconoció dependiente del Prin-cipio de la Vida Universal, reconoce que tiene debe res
para con 'esa fuerza superior y también qu tiene deberes para consigo mismo, como parte d ese Todo
Universal, parte consciente y viva. Ahora reconoce que tiene obligaciones para con sus seme jantes, prójimos
o hermanos, individuos que son co• mo él partes, partículas o elementos vivos y cons-cientes del Gran Todo,
de la Potencia Divina, del Gran Arquitecto del Universo. Decimos que esa pre gunta depende de las otras
porque él sé reconoce ya. como partícula de la divinidad, implícitamente reconoció también las otras
partículas que son lo otros hombres, seres conscientes y vivos como él. originados de la misma fuente, del
mismo Foco d Luz y Amor. Viendo en todos los hombres herm nos suyos, proyecciones de la divinidad,
manifesta, ciones del amor, de la sabiduría, de la bondad de Principio Universal de Vida; el hombre es en
reali dad un hermano gemelo de todos los otros hombres sin distinción de raza, de color o de cualquiera otr
diferencia física, interna o externa. El tercer deber u obligación se expresa por 1 pregunta ¿qué deberes tiene
el hombre para consig mismo? Esto no es más que una consecuencia de 1 primera, porque habiéndose ya
reconocido que tie ne deberes para con el Principio de Vida Univer sal, reconoce que no es más que una
expresión in dividual de El. Por lo tanto los deberes del hombrel
-- 74 --
para consigo mismo son volverse cada día una ex-presión más perfecta del G.*. A.•. D.•. U.'., que está en él
manifestado por las fuerzas del espíritu. Compete al hombre usar sus. capacidades y posibili-dades para
volverse perfecto y así reconocerá que está empleando bien todos los dones que le fueron dados por el
Supremo Hacedor. El hombre necesita hacerse a sí mismo utilizando las fuerzas puestas a su disposición
dentro de su ser. Con sus pensamien-tos, su voluntad y su mentalidad, el hombre puede realizar maravilla.
s. Al responder a aquella pregun-ta, el recipiendario manifiesta su comprensión de lo que piensa deberse a
sí mismo y deja a la logia que le juzgue. Por sus respuestas puede la logia sa-ber si el graduante tiene
posibilidades para llegar a ser un" obrero capaz de comenzar la construcción de sí mismo, porque en la
Masonería todo es una continua construcción. El hombre se hace a sí mis-mo con sus nuevos pensamientos
y ajusta su mente, os actividades y su voluntad a los intereses supe-lores de la divinidad, bien claros en el
orden y la ►cTfección del mundo. La fraternidad nace de este principio divino: "iodos los hombres son
hermanos y tienen el mismo l'adre Común". El Gran Arquitecto del Universo a todos saca de la nada y los
mantiene en la existen-cia por ley natural, impuesta a todo el universo. ,as diferencias son apenas de orden
físico, mental o moral y provienen del grado de adelanto del ser I umano. Contribuyamos, por lo tanto, al
progreso mejoramiento del hombre, para cumplir una par ic del plan divino de confraternización y de armo-í
de todos los hombres, a través de la acción cons-irme de los mismos, para que se entiendan y co-nozcan
como criaturas dotadas de voluntad y de de-icrt Iiinación individual propia.
— 75 –
--- 84 ----
Como un rayo en nuestro espíritu cuando estarnos preparados para recibirla, como está el recipiendario .
Resumamos el asombroso simbolismo de la puerta del Templo y la etnrada del graduante: la puerta es un
símbolo complejo en la iniciación, es un templo reducido a las dos columnas y una viga . Pasando por ella el
recipiendario moral y físicamente preparado, habiendo llamado tres ve-ces con golpes desordenados
buscando la Verdad, pidiendo la Luz y solicitando la entrada, será recibido en las otras tres puertas: la de la
Belleza donde se le dejará pasar porque es hombre libre y de buenas costumbres; la de la Fuerza donde
recibirá la orden de ser purificado por el agua, símbolo de la pureza de la vida masónica; y finalmente llegará
a la puerta de la Sabiduría, donde oirá la orden de ser purificado por el fuego a fin de que nada le quede del
mundo profano. Se presenta libre y de buenas costumbres y podrá ser recibido por hombres libres, por
masones libres, por constructores e idealizadores de un mundo nuevo, libre de prejuicios y de ideas absurdas
del mundo profano, hombre perfecto de costumbres sanas, honestas y decentes, despojado de los vicios .
Es el graduante conducido por el hermano Experto, que ya recibió la punzada de la verdad, simbolizada en
la punta acerada de una espada. Bella y sublime entrada digna de la grandeza de su objetivo sublime. El
hombre que aspira a los beneficios de la iniciación masónica, es presentado al Templo después de haber
pasado por la Gran Puerta Simbólica, tras la cual quedó el mundo profano, con una venda en los ojos símbolo
de la obscuridad mental y moral en que se encuentran todos los profanos,
— 85 —

— 110
su inteligencia la fuerza de su voluntad —simboli-zada por el Mazo— y la habilidad de su raciocinio —
simbolizada por el Cincel— pudiendo así hallar el mejor camino que es siempre el de la Prudencia, del Valor,
de la Justicia y de la Temperancia. En la sociedad profana el Aprendiz, iluminado por la Luz de la Logia, será
un hombre correcto, agradable, sin intolerancias ni rudezas, un hombre justo y prudente que pensará siempre
antes de to-mar decisiones y en todo momento dando buenos consejos. Será un hombre que huya de los
vicios. de la bebida excesiva, del juego, de todos los excesos. Las herramientas del Aprendiz harán de él un
hom-bre serio y digno, gracias a la profunda y sabia en-señanza que encierra su hermoso simbolismo.
— 111 —
LECCION XIII EL IDEAL DET, APRENDIZ MASON EN ACC ION
El ideal del Aprendiz está simbolizado por la Plomada, .porque ella tiene una dirección vertical y, por
consiguiente, corresponde al modelo de vida del Aprendiz que debe estar siempre erecto, vertical en sus
esfuerzos, en sus aspiraciones y en todo tra-bajo en la sociedad. Ser vertical significa no incli-narse jamás
delante de los opresores ni abatirse fren-te a las persecuciones, sino mantener siempre ele-vado el espíritu
hacia lo alto y el pensamiento siem-pre puro y levantado para las cosas bellas y nobles. La línea vertical de
la Plomada señala para arriba y para abajo, muestra el zenit y el nadir, el cielo y la tierra, el espíritu y la
materia. La Plomada in-dica el peso de las pasiones, de los instintos per-versos del hombre material, del
hombre piedra bru-ta, pero también señala hacia lo alto mostrando que el Aprendiz debe vencer sus pasiones
y volverse -más espiritual, abandonar sus maneras vulgares, desbas-tar completamente la piedra tosca. En
cada pensamiento, en cada palabra, en cada acción, el Aprendiz debe tener siempre presente la Plomada.
Por esto debe modificar su manera de ha-blar dejando los modales groseros y usando el len-guaje decente
y digno; debe modificar sus pensa-
112 —
mientas dedicándolos a las cosas" más elevadas, a las cosas espirituales; debe modificar sus acciones
dejando de ser malo, agresivo y violento y usando -siempre la bondad, la tolerancia y la honestidad. Toda
planta crece y progresa por medio de es-fuerzos verticales y avanzando siempre hacia arriba donde ella se
desenvuelve, así también el Aprendiz tiene que hacer continuos esfuerzos para dirigir su espíritu hacia lo
alto, teniendo en mira nuestro ideal que es la Verdadera Luz. Todos los masones nece-sitamos elevarnos
siempre hacia lo alto buscando las regiones donde está la verdadera y sublime luz que ilumina_ a todos los
hombres de buena voluntad, que nos indica el sendero del bien, que nos da los elementos para vivir
correctamente, auxiliando y animando a nuestros hermanos sin contribuir nun-ca a que luchen entre sí. Este
es el grandioso secreto que encierra la Plo-mada, que sirve para que construyamos el simbóli-co Templo del
Gran Arquitecto del Universo, ese templo simbólico que somos nosotros mismos. La Plomada es el
instrumento simbólica que nos ayu-da a construir el templo de nuestro propio espíritu, de nuestros propios
pensamientos, y a usar nuestra propia razón siempre verticalmente, siempre diri-gida hacia arriba, edificando
nuestra vida con el amor, con la caridad, con la tolerancia, con la amis-tad y con la comprensión para con
todos nuestros queridos hermanos y para con la humanidad en-tera. Todos nosotros poseemos una actividad
cons-tructora que es innata en nosotros mismos; los ma-sones cabemos que esa actividad constructora, ese
deseo de acción y progreso, proveniente de la Inte-ligencia Infinita que es el Principio Creador del Universo,
así todos los masones estamos cooperan-
113
do con el Supremo Arquitecto porque estamos cola-borando en la construcción que El desea, estamos
actuando conscientemente, con toda nuestra inteli: gencia y con toda nuestra voluntad. Para todos los
masones es una gran gloria tomar parte en la cons-trucción de un templo magnífico, que simbólica-mente
fue representado por el Templo de Salomón donde trabajaron aprendices, compañeros y maes-tros durante
varios años. Comprenderemos ahora que construyendo de modo perfecto el glorioso tem-plo del Eterno
dentro de nuestro propio espíritu, estamos consciente y deliberadamente contribuyen-do de modo eficiente
y práctico en la construcción de una sociedad mejor y cada día más perfecta. ¿Por qué? Porque nosotros
somos los elementos formado-res de la familia que es la célula del grupo social, los grupos sociales forman
el distrito, los distritos el municipio, los municipios forman el estado y los estados forman la nación. En
conclusión, si los ele-mentos iniciales fueran excelentes, toda la construc-ción sería excelente y tendríamos
una humanidad feliz, porque el mundo está formado por pueblos y naciones. El ideal indicado por la Plomada
debe ser reali-zado en nuestra propia vida. Consiste primeramente en vencer nuestros defectos, evitar los
prejuicios con sus terribles consecuencias, subyugar la soberbia y el orgullo que son la raíz de todos los
males y que llevan a los hombres a los mayores crímenes, com-batir nuestra natural tendencia a los placeres,
mo-derándonos y procediendo siempre de acuerdo con los más elevados principios de la moral masónica,
refrenar nuestra ira que puede transformarse en odio o dar lugar a los crímenes más infames, luchar contra
nuestra natural tendencia para no exceder-nos en los placeres de la mesa, sea en la comida o
—1.14
en la bebida, que pueden acarrear .serios perjuicios en la salud individual y llevan a perturbaciones del
entendimiento y a cometer acciones vergonzosas, impedir que nazca en nuestros corazones la envidia, que
es una de las fuentes de mayores males para toda la humanidad y una de las formas del vicio hu-mano, que
produce miseria, intrigas y crímenes. Es lo que nos muestra la Plomada: señala todos los vicios y pasiones
que debemos vencer y hacia lo alto para nuestra inteligencia, nuestra voluntad y nuestra razón, para que -
desbastemos nuestros de-fectos y hagamos de la piedra bruta de nuestro ser una piedra pulida y bella, una
piedra cúbica que será una de las más bellas obras cuando se presente completamente libre de asperezas;
entonces, y sola-mente entonces, el Aprendiz será digno del nombre sagrado del MASON. El
perfeccionamiento de nosotros mismos es la parte esencial y fundamental de la obra del Apren-diz. Este
perfeccionamiento consiste en la educación. Hasta hoy los pedagogos discuten todavía lo que es educación,
pero hace siglos la Masonería definió la educación y nos presenta la recta y segura manera de educar. El
sentido propio de esta palabra es traer hacia afuera, hacia la luz, todas las posibilidades de la individualidad
humana, despojándolas de los de-fectos, errores, vicios e ilusiones que se esconden en la personalidad de
cada uno y que son lo contrario de nuestra verdadera naturaleza. Educar masónica-mente es hacer que el
individuo camine hacia la Luz, que busque la verdad, donde ella tiene forzosa-mente que ser encontrada,
esto es, en el reinado de la Virtud. Educar es hacer que el individuo se liber-te progresivamente de todas las
sombras que obscu-recen su mente e 'impiden la manifestación de la luz interior que debe brillar clara y
firmemente den-
115 —

tro de la mente de cada hombre, esclareciendo y des-truyendo las tinieblas, haciéndole conocer la ver-dad
para que así adquiera sabiduría. Desde que el Aprendiz consigue alcanzar ese es-tado superior de
conciencia con los auxilios que le proporciona la Masonería, cuando llega a la altura de comprender y de
reconocer la luz que existe den-tro de él mismo, entonces esa misma luz se mani-festará en toda su vida; en
sus pensamientos, en sus palabras v en .sus acciones. Puede decirse nue esto es muy difícil, nue muy
raramente habrá nuien pueda alcanzar tal grado de perfección, pero podemos responder que la perfec-ción
es semeiante a un banquete al que asisten con-vidados poseedores de estómagos de los más diver-sos
tamaños. Hay los que tienen estómagos enormes y hay los que lo tienen diminutos, pero todos comen cuanto
les cabe en su estómago hasta satisfacer su propia hambre, saliendo todos satisfechos del ban-quete aunque
cada uno haya. ingerido cantidad dife-rente de su compañero. Tal es la perfección masó-nica, no todos
pueden alcanzar las mayores alturas de comprensión, pero todos están sentados a la me-sa del banquete
de la perfección. alimentándose ca-da fino hasta satisfacerse conforme al grado de su inteligencia y
comprensión, cada uno según el gra-do de desenvolvimiento de su mente, pero todos sal-drán satisfechos.
El ideal del Aprendiz debe ser puesto en acción, para lo cual tiene como símbolo la Plomada, que al
contemplarla ve que está señalando para abajo —pasiones y defectos que él necesita combatir y vencer o,
por lo menos, dominar, de tal modo que su razón impere soberanamente— v para arriba por medio de su
cordel hacia el infinito, mostrando al masón que el cielo es el límite de sus aspiraciones.
—116 --
Oir las lecciones de los maestros, practicar la virtud y la caridad, enseñadas por la Masonería, ser tolerante
y bueno, cumplir exactamente sus solem-nes juramentos, es el resumen práctico del ideal del Aprendiz. Así
se identificará con el Supremo Ar-quitecto, participará en su obra, será uno de sus colaboradores en la
construcción del maravilloso templo de su propio espíritu. Entonces verá la LUZ y la tendrá brillando en su
interior e iluminando to-da su vida.
—117,--

LECCION XIV
APLICACION PRACTICA DEL TOQUE DE APRENDIZ
El toque del Aprendiz tiene un significado muy profundo, que la mayoría de los masones no perci-be porque
no se lo enseñaron, ni los maestros ac-tuales se preocupan por abrir los ojos de los apren-dices para que
vean ese admirable secreto. Ya es tiempo que nosotros los masones conozcamos nues-tros propios
secretos. El toque del Aprendiz, de un modo general, sig-nifica la capacidad' de reconocer las cualidades
rea-les y verdaderas que se ocultan y esconden bajo la apariencia exterior de un individuo. Reflexionando
un poco sobre ese espantoso misterio; comprendere-mos el valor extraordinario de esa señal masónica. Los
profanos basan sus juicios y apreciaciones so-bre una persona por las apariencias exteriores de la misma:
en su manera de vestir, de andar, de hablar, en la elegancia de sus actitudes y, sobre todo, por la manera
como esa persona sabe cautivar simpatías o despertar antipatías. Los verdaderos masones, que poseen el
conoci-miento de la Verdad Obtenido por medio de la ini-ciación, ven todo de un modo completamente dife-
rente; para ellos hay una luz distinta que ilumina las cosas y las personas y juzgan a las que se les
118 —
presentan a través de esa facultad masónica. El po-der o facultad de ver las cualidades reales es un privilegio
de los masones que han profundizado el estudio de la Verdad y que tienen por esto profun-damente
iluminado su espíritu. Para estos masones iluminados y conocedores, no vale de nada la más-cara del
individuo, esa máscara que constituye .;u personalidad, y que no es más que una superficie ilusoria que
esconde la verdadera individualidad. El masón profundiza más sus miradas y quita esa más-cara. La
individualidad consiste, masónicamente, en una reproducción en cada hombre iniciado del Prin-cipio Divino,
de la Esencia del Creador de los Mun, dos. Flqa imagen divina que se forma en cada hom-bre iniciado está
integrada por las verdades masó-nicas, forma el propio espíritu en cada masón y en-tonces le transforma en
un Hombre Real, eterno e inmutable. Lo que acabamos de decir parece para muchos un misterio difícil de
penetrar, pero que no es tan incomprensible. Lo que ocurre es lo siguiente: el iniciado, lleno de entusiasmo
por la Verdad y por la Luz masónica, se da de tal modo a la realidad del Principio Creador, que se unifica
con El y brilla, piensa y habla de un modo diferente, más noble, más sensato, más sincero, más elevado,
transformado en un hombre nuevo ahora Real, Eterno e Inmutable como es el Gran Arquitecto del Universo.
Los tres golpes leves y discretos dados con el pulgar y que son en realidad apenas tres leves pre-siones,
son toques simbólicos destinados a hacer vi-brar inmediataMente la cualidad o calidad del ma-són, como
una respuesta muy natural y muy espon-tánea. Así el masón iniciado se da a reconocer y, al ser reconocido
por esos tres simbólicos toques, pro-
119

voca el abrazo fraternal durante el cual se comu-nica la Palabra Sagrada. Veamos ahora la significación
especial de esos tres toques, de esas tres presiones que parecen que-rer penetrar en la piel de aquel a
,quien pretende-mos reconocer. Cada uno de esos imperceptibles gol-pes es en realidad un esfuerzo para
penetrar a tra-vés de la capa de ilusión, de engañadora aparien-cia, con que se presenta el individuo, una
indaga-ción del ser real, del verdadero hermano, que está escondido y que solamente fue percibido a través
de dichas- señales. Esas tres leves presiones dadas en la mano del Aprendiz o del masón en general,
corresponden a tres expresiones enseñadas por el Sublime Maestro de la Virtud y de la Verdad, el admirable
maestro de los Esenios, cuando dijo: BUSCAD Y ENCON-TRAREIS —LLAMAD Y SE OS ABRIRA —PE-
DID Y SE OS DARA. Significa realmente: —busco al masón, ese es el primer golpe y la respuesta es otro
golpe diciendo —aquí estoy. El segundo golpe —ábreme tu corazón, permíteme sentir la grandeza de tu
amor fraternal y la respuesta dice: —está abierto mi corazón y en él podéis depositar tu confianza, soy un
hermano. El tercer golpe —dadme la Palabra de la Verdad que traes contigo la respuesta es: —ten-go esa
palabra y te la daré para probarte claramente mi calidad de masón perfecto, de iniciado real y ver-dadero.
Sigue el abrazo fraternal durante el cual dan al oído la Palabra Sagrada. Hecho el reconocimiento, comienza
la comunión fraternal de afectos, la conversación sobre asuntos de la Masonería y sobre los intereses de la
fraternidad. Ensánchanse los corazones, se expande la fraterni-dad. Después de convencerse podrá
preguntarse al her-
- 120 —
mano si quiere ir más adelante. Entonces se dará el Toque de Compañero seguido de la Palabra Sagra-da
o de Pase y, finalmente, vendrá el Toque del Maestro seguido de la Palabra de Pase o los Cinco Puntos
Perfectos del Masón o de la Maestría, con la Palabra Sagrada del Maestro. La extraordinaria decadencia de
la Masonería en el Brasil ha hecho que estén prácticamente olvi-dados los elementos más esenciales de la
vida masó-nica activa. Como ejemplo tenemos los toques, las palabras y los signos mediante los cuales el
masón consigue el reconocimiento universal de sus herma-nos, sin distinción de potencias ni juridicciones,
pero con pleno conocimiento de todos sus calificativos. Los toques deben ir acompañados, obligatoria-mente,
de las palabras sagradas, de las de pase o de las de reconocimiento correspondientes. El toque del Aprendiz
es prácticamente universal y es la inicia-ción de cualquier reconocimiento. Cada grado tiene un toque
particular que es dado cuando se pretende retejar, esto es, verificar si el hermano es realmente un masón y
posee el grado que mencionan sús do-cumentos. El toque es más eficaz y hasta más común que el signo,
porque permite con un simple apretón de manos descubrir, sin alarma, si una persona per-tenece o no a
nuestra Augusta Institución. En el Rito Francés, el toque de Aprendiz se da apretando la mano con los cuatro
dedos y dejando libre el pulgar y apoyando después éste sobre el nudillo óseo que une el dedo índice con el
cuerpo de la mano (metacarpo). En el Rito Escocés se pro-cede del mismo modo con la diferencia que el
pul-gar se apoya sobre la primera falange del índice y los golpes o presiones se dan con la uña. Demás está
decir que este toque es antiquísimo y que está
121 — en uso desde que existieron las primeras organiza-ciones masónicas en el mundo. También conviene
decir que el sistema Francés es mejor y más prác-tico. En efecto, cualquiera puede experimentar la facilidad
de un toque con el pulgar en la unión del dedo con la mano y la dificultad de dar con la uña el toque en la
falange. Así el toque universal es como lo estableció el Rito Francés que, en este pun-to, ha superado a lo
establecido en el Rito. Escocés. En rigor no hay rito en los tres primeros grados, sino apenas un sistema
ligado a los respectivos ri-tos, porque estos grados son generales y universa-les y son la base de todos los
ritos. Prácticamente, por lo tanto, el toque del Apren-diz es .de inmenso valor. Con él entramos en con-tacto
con nuestros hermanos en todo el mundo; por medio de él se inicia el reconocimiento de los her-manos.
Despreciar este toque y comenzar un reco-nocimiento con otroS toques es un grave error y un engaño.
Demos el toque de Aprendiz, sintamos la respuesta, demos el abrazo y con él la palabra. Después del abrazo
podemos preguntar: ¿que-réis ir más lejos?, ¿o vais más allá? y entonces pro-sigamos de acuerdo con el
grado o grados que haya-mos alcanzado de nuestra Orden. No olvidemos nun-ca que en el Brasil y en
cualquiera otra nación, la gloria del masón está en el conocimiento lo más perfecto posible de su liturgia.
—122—

INDICE

INDICE
Pág. Masonería y sus fines 5 Los Masones 12 Logia 14 Símbolos y Emblemas 21 Funcionarios 27
Joyas 29 Luces 30 Columnas 31 Catecismo 32
CURSO DE MASONERIA SIMBOLICA
Lección Pág. I Los misterios antiguos 47 II Las comunidades místicas de los hebreos, griegos e indúes 53
III Los templarios y los rosacruces 59 IV Cámara de reflexiones 65 V El testamento del candidato 71 VI
Preparación del candidato 77 VII La puerta del templo y la entrada del re-cipiendario 82 VIII Los tres años
del aprendiz 88 IX y X La escuadra y el compás 94
— 125 —

Lección Pág. XI Los tres puntos 100 XII Las herramientas del aprendiz y su obra 106 XIII El ideal del
aprendiz masón en acción 112 XIV Aplicación práctica del toque de aprendiz 118
---126 -
MASONERIA Y SUS FINES
La Masonería, institución fundada sobre los principios de la Ley Natural, lleva impreso un sello de antigüedad
tan remota e irradia un espíritu de filosofía y de moral tan pura, que le dan gran importancia social y le
aseguran, además, el respeto j la veneración de todos los pueblos de la tierra.
Su genio, que ha tenido siempre el instinto de lo verdadero, la elevó hasta el descubrimiento de la verdad y
la condujo al reconocimiento de un Ser Supremo.
La creencia en un Dios Único, el amor a la Humanidad y la Fraternidad Universal, que son las bases de su
doctrina, han sido manantiales fecundos de beneficios para sus adeptos y para la sociedad de que éstos
forman parte.
En sus templos se aprende a amar y a respetar lo que la Vida y la Sabiduría consagran.
Espíritu de la libertad y esencia del progreso anatematiza el despotismo; y lejos de pretender invadir y
dominar, trabaja incesantemente para un-ir a la especie humana con los lazos del amor fraternal y para que
se extiendan por todos los ámbitos de la tierra las corrientes de tolerancia y de dulce simpatía en que ella se
inspira.
Conteniendo en sí todo cuanto es necesario para formar al hombre social, dotándolo de todas las altas
condiciones de moralidad, instrucción e pendencia, que son los atributos principales de su naturaleza,
marcha a la cabeza de la civilización para dirigir y activar el movimiento propagador de las luces,
armonizando su arción con el espíritu de los tiempos.
En este concepto la Masonería, según una de las definiciones universalmente aceptadas y contenida en los
códigos de las principales potencias y autoridades masónicas del mundo, es una institución de fraternidad
universal, esencialmente filantrópica, filosófica y progresiva, que proclama la existencia de un principio
creador bajo el nombre de GRAN ARQUITECTO DEL UNIVERSO, y tiene por fundamentos la tolerancia
mutua, el respeto de sí mismo y de los demás y la libertad absoluta del pensamiento y de la conciencia. Por
tanto, está abierta para todos los hombres de todas las razas y de todas las nacionalidades, cualesquiera
que sean sus opiniones y creencias, con tal que sean hombres libres y de buenas costumbres.
Tiene por objeto la investigación de la verdad, el estudio de la moral y la práctica de la solidaridad; trabaja
por el mejoramiento 'material y moral y por el perfeccionamiento intelectual y social de la humanidad; hace
extensivos a todos los hombres los lazos fraternales que unen a los masones sobre; toda la superficie del
globo y lucha incesantemente contra la ignorancia, bajo cualquiera forma que ésta se presente.
En el Convento Universal de los Supremos Consejos del Rito Escocés Antiguo y Aceptado, reunido en
Lausana-Suiza, en septiembre de 1875, se emitió la siguiente declaración:
La Masonería proclama, como proclamó desde su origen, la existencia de un principio creador bajo el nombre
de Gran Arquitecto del Universo.
No impone límite alguno a la libre investigación de la verdad y, para garantizar a todos esa libertad, exige
absoluta tolerancia.
La Masonería está, pues, abierta a los hombres de toda nacionalidad, de toda raza, de toda creencia.
Así prohíbe en sus talleres toda discusión política o religiosa y acoge a todo profano, cualesquiera que sean
sus opiniones en política o en religión, con tal que sea libre y de buenas costumbres.
La Masonería tiene por objeto combatir la ignorancia bajo todas sus formas; es una escuela mutua, cuyo
programa se reduce a obedecer las legas de su país, a vivir con honor, a practicar la justicia, amar a sus
semejantes y trabajar sin descanso por el bien de la humanidad y por su emancipación progresiva y pacífica.
Para elevar al hombre a sus propios ojos, para hacerlo digno de su misión sobre la tierra, la Masonería
sostiene el principio de que el Creador Supremo ha dado al hombre como el bien más precioso la libertad; la
libertad patrimonio de la humanidad entera, rayo de luz le lo alto que nadie tiene derecho de apagar ni
amortiguar y que es el origen de los sentimientos del honor y de la dignidad.
Desde la preparación del primer grado hasta la investidura del grado más elevado de la Masonería, la primera
condición, sin la cual nada se concede al aspirante, es una reputación de honor y de probidad incontestables.
A los hombres para quienes la religión es el consuelo supremo, la Masonería les dice: cultivad vuestra religión
sin obstáculos, seguid las aspiraciones de vuestra conciencia; la Masonería no es una religión, no tiene culto.
A los que con razón temen las discusiones sobre política, la Masonería les dice: Yo proscribo en mis
reuniones toda discusión, todo debate político; sé para tu patria un servidor fiel y celoso, no tienes que darnos
cuenta. Por lo demás, el amor a la Patria se concilia también con la práctica de todas las virtudes".
La Masonería honra y dignifica el trabajo y lo considera como uno de los deberes más esenciales del hombre;
por esto proscribe la ociosidad voluntaria y da a sus miembros el título de OBREROS.
De lo anterior se deduce claramente que la Masonería es una institución nacida para combatir, con las armas
de la persuasión .y con la fuerza moral del buen ejemplo, todo lo que atente al progreso de la razón y al
espíritu de la confraternidad universal. En esta fuerza moral, que sólo se adquiere por la virtud, que es la
única que la opinión reconoce corno legítima y que la conciencia de los pueblos consagra en el código de
las naciones, considerándola como agente supremo del poder soberano, cifra la Masonería su mayor gloria;
y a ella es deudora de los grandes triunfos que con tanta justicia la han colocado como la primera entre todas
las grandes instituciones nacidas del amor a la humanidad y del interés por el bienestar de los pueblos.
Por esto debemos definirla, en conclusión, diciendo: ES LA CIENCIA DEL PROGRESO MO-RAL; y resumir
su acción social en estos dos gran-des atributos de la inteligencia: LUZ y VERDAD.
Ilustrar a los hombres, cimentando su instrucción en ideas sólidas y positivas y sobre los principios de la Ley
Natural; convencerlos por la persuasión y enseñarles con el buen ejemplo es conducirlos por la fuerza de la
razón a un régimen de orden y de simpatía y a un estado de paz y de bienestar duradero y envidiable.
¿Qué es la Masonería? De dónde viene o de dónde procede esta institución, cuyo origen se pierde entre las
sombras que envuelven el principio de la humanidad? La Masonería surgió como una necesidad evolutiva
del momento allá cuando el tiempo era joven y el mal era niño. Su origen es antiquísimo y, tal como dice una
parte de nuestra liturgia, es la más sublime de las instituciones humanas.
La Masonería es una serie de reglas o normas de conducta, que tienden a guiar al individuo a través del
azaroso camino de la vida, para ayudarle a cumplir su misión de la manera más feliz para sí y para los demás
hombres, a quienes debe considerar como hermanos sin reparar para ello en condiciones sociales, creencias
o razas.
Masonería es el amor y el respeto que debemos a Dios, a nosotros mismos y a nuestros semejantes. Es
comprensión, es tolerancia, es la práctica constante de las virtudes humanas y, especialmente, ese noble
precepto de amarnos los unos a los otros como verdaderos hijos de un padre común, el Gran Arquitecto del
Universo.
La Masonería se puede decir que es maestra de hombres, trata de hacer de sus obreros hombres nobles,
infiltrándoles en su espíritu la nobleza de alma que debe tener todo individuo que le duela el dolor ajeno y
coopere al mejoramiento de la huma-na especie, desde el punto de vista de la moral, de la espiritualidad, de
la bondad y puede así acercarse algo más a Dios.
Las diferentes organizaciones de la Orden, en sus declaraciones de principios, coinciden cuando
-- 9 —
declaran que es una "Institución Orgánica de la Moralidad" o cuando dicen que es un "Bello sistema de moral
velado por símbolos y embellecido por alegorías".
Dorothy Dix, la conocida escritora norteamericana dice:
"La Masonería es una de las más nobles y altruistas organizaciones que existe en el mundo".
Eugene Lennohf dice: "La Masonería es comunicación de pensamientos, que envuelve su obra en un peculiar
sistema de alegorías y símbolos, a los que nunca ha dado rigidez dogmática".
Dice T. M. Kalaw: "La Masonería es escuela de ética individual y social, vivero de hombres rectos y sabios,
crisol de héroes, broquel de pueblos y forja de patrias".
Juan Granados Sánchez ha dicho: "Algunos creen que la Masonería es la caridad en sentido ele-vado,
porque tiene en cuenta solamente los resulta-dos prácticos, las nobles caridades que dispensa, las lágrimas
de viudas que enjuga, los lamentos de huérfanos que acalla, las múltiples necesidades de desamparados
que cubre. Otros creen que la Masonería tiene por único objeto el fomento de los sentimientos sociales y la
fortificación de los lazos de amistad, pero nosotros creemos que el objeto de la Masonería es la búsqueda
de la verdad".
Dice E. Crutcher en la revista NEW AGE: "Ma-sonería es la cumbre de la moral, la ciencia de la moralidad.
Su edad no puede precisarse, pues nació cuando la barbarie comenzó a civilizarse, cuando los hombres
principiaron a ser apacibles, observa-dores y contemplativos. La Masonería eleva y ennoblece el carácter
individual. Ella conserva el estado social de la comunidad, domina al dogmático,
— 10 —
educa al ignorante, promueve la libertad de con-ciencia y el derecho a la libertad de pensar".
Dice Lessing: "Masón es todo aquel que cons-truye y completa su propia vida, a fin de contribuir a la
realización de la obra artística de la vida de la humanidad. Nadie puede contribuir a la realización de la obra
artística de la vida de la humanidad, na-die puede contribuir al bien de la humanidad si por sí mismo no hace
cuanto puede y debe".
Anderson dice: "Masón no será jamás un estúpido ateo ni un libertino irreligioso".
Alfonso Coalla escribe: "La Masonería es un oasis en medio del desierto del alma de los hombres. Es una
religión proclamando el amor y la verdad. Es ideal que canta. Es entidad hermosa y santa cuyo don más
solemne se levanta, armonía que eleva al infinito. Es la poesía del fraternal amor a la humanidad".
Haim H. Penha dijo: "Masonería es la aristocracia del espíritu. Es la religión del amor y del trabajo, porque
sólo por el amor, el poder central de la vida, se ahoga el egoísmo y se puede ser fiel a la humanidad y ser
masón".
La definición que encontramos generalmente en manuales, catecismos e instructivos es esta: La Masonería
es una escuela de moral y de virtud que imparte sus enseñanzas por medio de símbolos.
La Masonería considera el fanatismo bajo todas sus formas como una desviación del sentido moral. Acepta
todas las religiones, todas las creencias y todas las opiniones siempre que ellas no enseñen principios contra
la moral y los que la profesen sean sinceros. Donde el amor al prójimo no existe debe encontrarse el
fanatismo que lo aleja. El fanatismo y los prejuicios son la fuente de muchos males que
— 11 —

siembran entre los hombres la discordia, el odio, y despiertan las malas pasiones.
La Masonería no tiene una luz propia, que pertenezca solamente a ella. Lo mismo que la tierra recibe la luz
del Sol, la Masonería toma su Luz de la Verdad que deriva del conocimiento de sí mismo; cada uno es por
sí mismo un mundo y todos los hombres que pueblan el infinito obedecen a la misma ley que hemos
reconocido en nosotros.
LOS MASONES
Francmasones o Masones son aquellos que, reuniendo las condiciones exigidas y llenadas las formalidades
necesarias para ello, san admitidos como miembros de la Fraternidad por la ceremonia de la iniciación e
inscritos como tales en los registros correspondientes de la Orden.
Aunque diseminados por todos los ámbitos de la tierra en número ilimitado, los masones se hallan
estrechamente unidos por el mismo ideal que persiguen y por los lazos de la solidaridad y del amor fraternal;
por esto se dan entre sí el nombre de HERMANOS.
En todas las circunstancias se deben apoyo y protección; deben ayudarse y socorrerse moral y
materialmente aún con peligro de su vida. El masón, según la expresión de un ilustre hermano, "es el
ciudadano del universo".
Los rituales lo definen: es un' hombre íntegro y probo, igualmente amante del rico que del pobre con tal que
sean virtuosos.
La virtud, la seriedad, la honradez son, por tan-to, los caracteres distintivos del masón. No es por
- 12 -
los medios de reconocimiento ni por el prestigio de los grados que debe darse a conocer el masón, sino por
sus virtudes. Desde el momento que penetró en el Templo dejó de ser el hombre del mundo, el hombre de
los errores y de las preocupaciones, el hombre de los vicios y de las pasiones, que alimentan nuestras
debilidades, para convertirse en el hijo de la Luz y en el adepto celoso de la Justicia. Es una especie de
caballero consagrado a la defensa de la humanidad, que tiene que conocer a la clase 'de enemigos a quienes
ha de combatir y tener la seguridad de que no ha de faltarle el valor y la constancia necesarios para salir
victorioso de su empresa.
Entre los vicios que impiden los progresos de la razón y que los hombres vivan como hermanos están la
superstición y el fanatismo. Estos son hijos de la ignorancia, nacidos de cuanto puede existir de más estúpido
en el mundo; son dos hidras de cien cabezas siempre renacientes y hambrientas, que esparcen por todas
partes el veneno y las llamas que devoran a los hombres, a los pueblos y a las gene-raciones y que han
abierto en la tierra un abismo insondable y eterna, para sumergir en sus oscuros antros a las generaciones
venideras. No hay que olvidar jamás que el masón tiene el deber de combatir valerosamente y sin cejar un
solo instante a estos dos formidables enemigos del progresó y de la prosperidad del hombre y que la ciencia,
la lógica, todas las facultades de la inteligencia, todas las fuer-zas del espíritu y del cuerpo deben emplearse
para resistir los estragos que causan en el mundo.
Sin estos requisitos no se puede ser masón. Todo aquel que pasare por las pruebas de la iniciación sin
despegarse de su envoltura material y entrare en el sagrado recinto de los templos con las debilidades
propias de su humanidad, no será más que un profano disfrazado con la antigua túnica del iniciado.

— 13 ---

LOGIA
Es una reunión de un número ilimitado de masones regulares, constituida de conformidad con las reglas y
prácticas consuetudinarias universalmente aceptadas y seguidas para la organización de la Masonería y la
aplicación y desarrollo de sus principios y doctrinas.
(Masón regular es aquel que se halla en plena posesión de sus derechos masónicos, es decir, a plomo con
el tesoro de su logia y con un récord de asistencia regular e inscrito como miembro activo en el registro de
una logia regularmente constituida, que a su vez está en actividad y forma parte de una Gran Logia
reconocida).
La logia es el TALLER FUNDAMENTAL de la Masonería.
Fuente de todo derecho, de todo poder y de to-da autoridad, es la única que puede admitir e iniciar a profanos
a la vida masónica y conferirles el carácter y prerrogativas de miembros de la Institución.
Todas las logias son iguales en derechos y obligaciones y autónomas e independientes dentro del círculo de
las atribuciones que le reconozcan y garanticen las leyes constitutivas a que deban acata-miento. Las logias
regulares trabajan bajo los auspicios de una potencia regular y reconocida, con estricta sujeción a las
prácticas y reglas universales y a las establecidas por dicha potencia.
Unidas por los lazos de la solidaridad y fraternal inteligencia, deben prestarse mutuamente todo el apoyo que
pudieran necesitar las unas de las otras, tanto para sí como para sus respectivos obre-ros.

--- 14 -----
Las logias se designan con el nombre distintivo que tengan a bien adoptar al constituirse y por el número de
orden que les corresponde en el registro de la Gran Logia que las auspicia.
Como las logias gozan de autonomía, tanto en lo concerniente a su administración y régimen interior como
en lo que afecta a los actos más esenciales de la vida masónica, es absolutamente indispensable y muy
necesario que pongan el más exquisito cuidado en no perder de vista jamás las leyes fundamentales de la
Institución, sin separarse lo más mínimo de ellas. La fe en estas leyes es el alma de la Masonería; es la que
da a las logias el poder de la acción y la fuerza moral de que disfrutan. De ella nacen también la unidad del
pensamiento y la comunidad de sentimientos que deben procura r, con vivo interés, que se mantengan
siempre in-tactos entre sus obreros, porque es la que alienta y mantiene la fidelidad y adhesión recíprocas;
la que establece la religión del corazón y el culto de la simpatía; la que inspira el amor al estudio y al tra-bajo;
la que excita a la práctica de las virtudes y, en una palabra, la que regula la moralidad entre los verdaderos
hijos de la Luz.
Por esto se da a las logias los nombres de taller, escuela, templo y santuario, porque efectivamente son
verdaderos talleres de iniciación, escuelas de enseñanza y templos o santuarios en donde se descubren, se
explican y se hacen palpables a los masones las verdades que se encierran en los símbolos y alegorías.
La posición normal de la Masonería consiste en hallarse siempre dentro del camino de la verdadera ciencia,
marchando constantemente hacia adelante, en pos del progreso y de la perfección. Por esto deben
componerse las logias de hombres serios, probos, prudentes y generosos, entusiastas defensores de los
intereses de la Patria y amantes de la humanidad, sin que jamás den cabida en su seno a la intriga, a la
superstición ni 'a las maniobras de la ambición personal.
- 15
La Masonería; que ha trabajado desde su ori-gen por el progreso social y moral de la humanidad, constituye
hoy una de las esperanzas más sólidas para el Porvenir de las naciones. El fanatismo y la superstición,
monstruos que renacen de sus cenizas como el Ave Fénix, tienen aún profundas raíces y grandes multitudes
de esclavos que les sirven sumisas; la ambición dispone de ancho campo para satisfacer 'su brutal egoísmo
bajó múltiples formas; la perfidia y la traición pueden tender impunemente todavía sus infames lazos a los
hombres nobles y de buena fe y el genio del mal vela incesantemente y no perdona medio ni ocasión para
arrojarse sobré sus víctimas, pretende dominar el pensamiento humanó y esclavizar las conciencias y hace
esfuerzos titánicos para enseñoreare de los derechos de la humanidad.
Es preciso, por lo tanto, trabajar con ahínco y eficacia más constantes y ardientes cada día para inutilizar y
destruir los males que afligen y azotan a la humanidad, privándolos de los poderosos medios de que disponen
aun para proseguir la impía y despiadada lucha que mantienen.
A las logias incumbe la difícil y gloriosa tarea de amaestrar a sus miembros y dirigirlos, hasta hacer que sean
dignos de sí mismos y de titularse campeones de la gran obra de regeneración y progreso a que están
consagrados.
— 16 —
Pero, ¿qué significa la palabra Logia? Deriva del sanscrito Loka o Loga que significa Universo.
La Masonería, siendo una institución universal, trabaja o desarrolla su humanitaria labor en el mundo entero,
por lo cual los locales en que se reúnen sus miembros llevan el nombre de logias, con su simbolismo de
Universo.
Estas logias o talleres, al representar el universo, tienen el piso que simboliza la tierra, el tabique o techo que
simboliza el cielo y las paredes representan el ilimitado horizonte con los cuatro pun-tos cardinales: Oriente,
por donde aparece el Sol, Occidente, lugar por donde desaparece o se pone el astro rey, Norte, el lugar
menos iluminado del mundo, según las creencias antiguas y la tradición, y Sur, el punto donde brilla más y
mejor el Sol.
En esta forma los masones siempre están trabajando entre el cielo y la tierra (entre el compás y la Escuadra).
En estas condiciones las dimensiones de una logia son: su longitud de Oriente a Occidente, su anchura de
Norte a Sur y su profundidad desde el Cielo al centro de la Tierra.
La Logia está decorada de acuerdo con este significado. El piso, entre las columnas del pórtico y el Altar,
está hecho de ladrillos blancos y negros significando el bien y el mal, la unión de los masones de todas las
razas, de todas las creencias, de todas las nacionalidades. La virtud y el vicio, las bajas' pasiones y la
fraternidad. Todos los sentimientos que animan al género humano que está en la tierra. El techo simboliza
el cielo tachonado de estrellas, con nubes y celajes. En Oriente hay un Sol hacia el Sur y una Luna hacia el
Norte y en el centro el triángulo radiante con el Ojo que todo lo Ve o el Nombre Inefable. En Occidente .tiene
nubes
17
oscuras. En los lados Norte y Sur hay en algunos talleres seis columnas en cada lado con los signos del
Zodíaco sobre sus capitales, que representan los lugares por donde pasa el Sol y que determinan los meses
del año y las estaciones. En la parte alta, alrededor de la Logia, hay una cadena, que simboliza fraternidad,
es decir, la estrecha unión de los masones por el lazo indestructible del amor fraternal.
En el pórtico o entrada hay dos grandes columnas de bronce con lirios y granadas sobre sus capiteles. En
muchos talleres las columnas tienen sobre las granadas una esfera terrestre y otra celeste. La del lado Norte
con una letra B , en la base o en el fuste y la del Sur con una letra J , en el mismo lugar. Al pie de la primera
hay una Piedra Bruta o tosca y al pie de la segunda una Piedra Cúbica.
En el centro de la Logia está el Altar o Ara, que es una columna rectangular o triangular, sobre la cual se
colocan las Luces Mayores. Rodeando al Altar están las Luces Menores.
Para llegar a Oriente hay tres gradas.
El trono que ocupa el V , M , está colocado sobre siete gradas sobre el nivel del piso de la Logia, tres que ya
se mencionaron para subir al estrado y cuatro más. Los funcionarios y hermanos que se sientan en Oriente
tienen sus asientos en el estrado, es decir, tres gradas sobre el piso. El P , V , tiene su sitial sobre cinco
gradas y el S.S. V... sobre tres solamente.
Sobre los sitiales de los Dignatarios hay doseles, grande el de Oriente y pequeños los otros. La Cámara de
Aprendices está decorada en rojo. Las Logias son de tres clases: Simple o triángulo —Justa, en instancia o
bajo dispensa— y Perfecta o con Carta Patente.
-- 18 --
La primera la forman tres Maestros Masones regulares, con autorización del Gran. Maestro de la Gran Logia
de la cual depende la logia regular que le apadrine y a la que pertenecen sus tres miembros. Puede recibir
solicitudes para iniciación, ascenso y exaltación de aspirantes domicilia-dos en su valle, las cuales se
tramitarán y resolverán en la logia auspiciadora en el seno de la cual se efectuarán las ceremonias
respectivas.
La segunda la constituyen cinco Maestros Masones regulares, también con autorización del Gran Maestro
de la Gran Logia, por medio de un documento que se llama Carta Dispensa.
Estas logias tramitan sus propias solicitudes, pero las ceremonias respectivas las verifican en una Logia
Perfecta.
La tercera clase está formada por SIETE Maestros Masones regulares, el documento que la constituye se
llama Carta Patente y lo expide la Gran Logia de la cual depende.
Estas logias gozan de autonomía, libertad y privilegios como cualquier otra logia regular del mundo.
Como anexos, cada taller tiene el vestíbulo o atrio, el Salón de Pasos Perdidos y el Gabinete de Reflexiones.
El primero es el que da acceso al Templo y en el cual debe estar un funcionario. Aquí están los útiles para
los trabajos, estandartes, mandiles, etc. Los obreros se decoran en dicho lugar y en él se quitan sus mandiles.
El segundo es la sala en donde se reúnen los masones antes de entrar a los trabajos. Aquí estará el Libro
de Asistencia en donde firman los hernia nos que asisten a la Logia, sean miembros activos, honorarios o
visitadores.
- 19 –
Se presume que el Gabinete de Reflexiones debe ser subterráneo;» es de reducidas dimensiones, con '
aspecto de cueva, lúgubre, todo pintado o revestido de negro y está iluminado por una vela o por una lámpara
de aceite; en sus paredes, están inscritas en caracteres blancos unas inscripciones muy conocidas por los
iniciados, a las que nos referiremos en otra ocasión. Su mobiliario consiste en una mera y un asiento
triangulares, negros. Sobre la mesa hay emblemas de vida y muerte: un reloj de arena, pan, agua, sal, azufre,
una calavera y restos humanos, etc., para demostrar al profano que ha llega-do el momento de morir para el
vicio, las pasiones, los prejuicios y las malas costumbres, para hacerle comprender que ante la muerte se
desvanecen el orgullo y la ambición humanos, que de nada valen el poder y las riquezas del mundo.
Este gabinete representa el período de gestación del masón. El recipiendario ha muerto para el mundo
profano y está preparando su mente y su espíritu para nacer a una nueva vida.
El nacimiento a la vida masónica se verifica entre las columnas del pórtico, en donde el masón tiene el
privilegio de ver la LUZ. Por esto la iniciación significa NACIMIENTO.
Las logias tienen una sola puerta de entrada situad& en Occidente hacia el Norte, de manera que el G , T , I
, quede situado en la columna del Norte. En algunos talleres la puerta está hacia el Sur y en otros hay dos
puertas en Occidente, una hacia el Norte y otra hacia el Sur. Otros templos tienen la puerta, a en el centro
de Occidente, que es el lugar que nosotros reservamos para el P , V ,

20 —
SIMBOLOS Y EMBLEMAS
La Masonería se sirve de diferentes alegorías, símbolos y emblemas para el uso exclusivo y reservado de
sus miembros, los que se trasmiten por tradición desde tiempos inmemoriales y cuyo alto significado e
interpretación sólo pueden ser explicados a los iniciados.
Estos símbolos y emblemas constituyen un lenguaje misterioso y especial, sumamente expresivo para todo
iniciado, que permite que los masones puedan reconocerse y comunicarse entre sí, en to-das las
circunstancias de la vida, cualquiera que sea su idioma y en cualquier parte del mundo en que se encuentren,
pudiendo disfrutar así de las inapreciables ventajas que les otorga con ello la Institución.
El carácter de universalidad de los signos y emblemas del simbolismo masónico impone a todos los iniciados
el deber de respetarlos, mantenerlos y transmitirlos íntegramente tal como se hallan contenidos en las
liturgias auténticas o admitidos por el tiempo y por las antiquísimas y tradicionales prácticas que nos han
sido legadas.
Veamos algo de este simbolismo, tan interesan-te e indispensable por ser la base de la instrucción o
enseñanza masónica.
Los miembros de las logias son hermanos y este es el único título que se concede en logia a sus miembros.
Las velas encendidas se llaman estrellas.
— 21 —
Las cartas que se escriben son planchas.
Las actas de las sesiones se llaman trazados.
Las sesiones se llaman tenidas.
Lo que se hace durante las tenidas lo denominamos trabajo. Todo lo que se trata durante el trabajo se llama
material.
Los discursos sé denominan piezas de arquitectura.
Aspirante es el profano propuesto para su iniciación.
Candidato se llama éste desde que su solicitud ha sido aceptada y está siguiendo los trámites legales.
Recipiendario se denomina durante toda la ceremonia de su recepción.
Neófito se denomina desde el momento de su proclamación como miembro de la Logia.
Los toques significan: Buscad y encontraréis; llamad y se os abrirá; pedid y se os dará. Deben darse con
suavidad y discretamente.
El profano que desea ser masón busca las maneras para ingresar; encuentra los medios y llama a la puerta
de nuestro templo y, si la opinión le es favorable, le abrimos la puerta. Entonces pide ser masón, es decir,
ver la LUZ, instruirse, perfeccionarse, etc. Se busca el templo de la sabiduría y, al encontrarlo, se llama a
sus puertas, una vez abiertas éstas se entra y se pide *lo que se desea.
Los medios de reconocimiento del masón que, según el primer Landmark son inalterales, son: toque, orden,
marcha, saludo, palabra, edad, tiempo de trabajo, clase de labor, decoración, etc. Estos medios de
reconocimiento solamente pueden, explicarse en logia y constituyen un secreto para los iniciados. El toque
recuerda los golpes que se dan en la puerta para entrar y tiene el mismo significado. El signo de orden consta
de tres partes y significa obediencia y respeto; sus partes son pedestre, braquial y manual, cada una en
forma de escuadra.
— 22 —
La marcha simboliza VIDA en sus tres etapas: infancia, juventud y vejez. Tiene también el significado de la
herramienta esencial del masón —La Regla— por eso se hace en línea recta y con su propio significado. El
saludo no puede describirse ni explicarse, debe hacerse y comprenderse exactamente, lo mismo que la
palabra que se da por letras al oído en la forma que todos conocemos y que significa Fuerza. Como el
Aprendiz no sabe leer ni escribir y apenas empieza a deletrear, da la palabra por letras de una en una, no la
escribe, dibuja ni graba nunca. La edad le recuerda el tiempo que en la antigüedad se tenía en observación
a los candidatos antes de admitirlos en los trabajos. El tiempo de trabajo significa que el hombre está en
capacidad de laborar por el bien de la humanidad y por el propio desde el medio día de su vida (juventud)
hasta su muerte, que es la media noche. La labor del Aprendiz, es desbastar la piedra bruta, para la cual usa
las tres herramientas conocidas: Regla, Mazo y Cincel. La decoración por excelencia del masón, la de más
valor, la que le da el verdadero carácter y que es inseparable de él, pues sin esa prenda nadie puede ser
admitido en logia alguna, es el mandil. Este debe ser blanco y de piel de cordero no nacido, simbolizando
pureza e inocencia. El usado regularmente es de tela blanca. Esta decoración esencial significa trabajo y
consta de tres partes: cuerpo, bayeta y cinta. El cuerpo es rectangular de 38 por 33 centímetros, simboliza
la tierra y sus lados los cuatro elementos de la naturaleza: tierra, aire, agua y fuego. Esta es la misma
significación de la escuadra como Luz Mayor del Ara. La bayeta es triangular y tiene el mismo significado del
compás como Luz Mayor. La cinta, por su forma circular, simboliza el universo.

23
Los aprendices ocupan sitios en la columna del norte y usan el mandil con la bayeta levantada, por lo rudo
del trabajo y 'por las mismas razones por las que se colocan las luces mayores del Altar en la forma que
todos conocemos.
El número TRES es el del primer grado de la Masonería y así vemos que el toque, los signos_ de orden y de
saludo, la marcha, la edad, los viajes, la batería, los abrazos, etc., son siempre regidos por este número tres.
Un triángulo (tres lados) es la forma del pliego de solicitud y del que contiene las tres preguntas
fundamentales, Tres son los principales deberes que jura ante el Ara. Tres son las luces mayores del Ara y
tres las menores. Tres son las luces del taller y tres son las columnas que sostienen el Templo.
Los tres viajes se hacen: por el aire que significa LIBERTAD; por el agua que simboliza IGUALDAD; y por el
fuego que es FRATERNIDAD. Es decir que en esta forma tenemos el lema de la Masonería, venerado y
respetado desde hace centurias.
Antes de estos tres viajes, el recipiendario ha efectuado el viaje por la tierra, representada por el Gab de
Ref
Los masones trabajan en la construcción de templo Moral consagrado a la Virtud y a la Ciencia, bajo los
auspicios del Gran Arquitecto del Universo y el trabajo del Aprendiz consiste en desbastar piedra bruta, lo
que significa que trata de dominar sus pasiones y perfeccionar su espíritu, quitando con sus herramientas
(tres) todas las asperezas que originan las preocupaciones y las costumbres viciosas del mundo profano.
—24--
La Logia representa el Universo, en donde los masones trabajan, y por eso caben en ella todos los hombres.
El piso representa la tierra y el mosaica significa el bien y el mal, las distintas razas. El techo es el cielo
tachonado de estrellas, con nubes, claridad y penumbra. Las paredes son los cuatro puntos cardinales,
ilimitados, el horizonte. En Oriente están, el sol y la luna, uno que alumbra en el día y la otra que ilumina en
la noche.
En toda la logia hay un Altar o Ara, en donde se hacen los juramentos y promesas. Es una columna o parte
de columna; sobre él deberán estar siempre las tres luces mayores (llamadas también grandes luces de la
Masonería) durante' los trabajos, estas son: el Volumen de la Ley, el Compás y la Escuadra. En algunas
logias también se colocan sobre el Altar las leyes que rigen al taller.
El Volumen de la Ley' significa Sabiduría y re-presenta el espiritualismo del masón; también simboliza la
voluntad del Gran Arquitecto del Universo, porque por medio de este libro ha revelado más preceptos y
pruebas de su divino poder que por cualquier otro medio. Por consiguiente nos da la luz para para poder
cumplir nuestros deberes para con DIOS.
El masón debe regular sus pensamientos con el compás de la razón y ajustar sus acciones con la escuadra
del deber. El Compás simboliza el deber imperativo de dominar nuestras pasiones y refrenar nuestros deseos
en los límites debidos. Es el emblema más saliente de la Virtud y la única y verdadera medida del masón.
Diríamos que nos ilumina en nuestros deberes para con nosotros mismos.
25 —
La Escuadra, formando un ángulo recto, simboliza la rectitud y nos enseña a normar nuestros actos y nuestra
conducta masónicamente y a corregirlos y a armonizarlos para obrar con equidad. Podríamos decir que nos
induce a cumplir los de-beres para con nuestros semejantes.
El Compas y la Escuadra, en sus varias posiciones, forman el símbolo de la Masonería en todos sus grados.
El Compás representa el cielo, a donde el iniciado debe dirigir constantemente sus miradas; la Escuadra
representa la tierra, en donde lo encadenan sus vicios y pasiones; por eso se dice que el vez dadero masón
se encuentra siempre entre la es-cuadra y el compás.
El Mallete es símbolo de autoridad y solamente lo usan los Dignatarios del taller.
Las herramientas del Aprendiz son tres: Regla, Mazo .y Cincel. La regla es de veinticuatro pulga-das y
recuerda el orden, que es la base fundamental de todo progreso. Simboliza el tiempo, la vida, pues cada una
de sus partes representa una hora del día, el cual dividimos en tres partes iguales de ocho horas cada una
para dedicarlas al trabajo, al servicio de la humanidad y al descanso. Representa, pues, las 24 horas del día,
el orden y el método.
El Mazo es la fuerza de voluntad y la constancia de propósitos con que el hombre, dominando sus pasiones,
debe trabajar en su perfeccionamiento, desembarazando su cuerpo y su alma de los apetitos y las pasiones
bastardas, para no desmentir su naturaleza humana y realizar su alta misión.
El Cincel es el cuidado que ha de poner el hombre en apartar de sí la parte bruta de su ser, cultivando la
inteligencia a fin de prepararla para la grande obra de unificación y de regeneración sociales que le están
encomendadas.
— 26 --
Los signos de orden y de saludo y la marcha recuerdan al Aprendiz el simbolismo de la escuadra. La letra
grabada en la columna que está hacia el norte debe recordarle la palabra sagrada, la cual no deberá escribir,
grabar, dibujar ni comunicar sino en logia abierta y por letras, significando que no puede más que deletrear.
FUNCIONARIOS
Las Logias tienen un cuerpo o Cuadro de Funcionarios para la dirección y ejecución de sus trabajos, como
las sociedades profanas tienen una Junta Directiva.
Una Logia Simple o Triángulo está regida por tres funcionarios: Presidente, Secretario y Tesore-ro, como las
directivas provisionales cuando se ini-cia la organización de una sociedad profana.
La Logia Perfecta o con Carta Patente tiene siete funcionarios: V , M , P V , Sec , Tes ., P , D. y S D , pero
al aumentar el número de sus maestros forma su Cuadro con QUINCE o más funcionarios divididos en tres
categorías: Dignatarios, Oficiales de Primera Clase y Oficiales de Segunda Clase. Los primeros son TRES:
V , M , P , V. y S , V . Los segundos son también TRES: Ord , Sec. y Tes . Los Oficiales de Segunda Clase
son NUEVE o más: Hosp , P , D , S. , D , M de C , P.•. E , S , E , P . Est , G , T , y G T . E .
Los Dignatarios y los Oficiales de Primera Clase son funcionarios de elección; los de Segunda Clase son de
nombramiento.
-- 27 --
Además de los anteriores, las logias perfectas pueden tener Oficiales Adjuntos y los demás que necesiten
para sus trabajos. Los funcionarios de una logia están colocados así:
V M. en oriente sobre siete gradas.
P V en Occidente sobre cinco gradas.
S V en el centro o punto medio del Sur, sobre tres gradas.
Ord en Oriente hacia el Sur.
Sec en Oriente hacia el Norte.
Tes en el extremo oriental de la columna del Sur.
Hosp en el extremo oriental de la columna del Norte.
P D en Oriente, a la derecha del V M fuera del dosel.
S D en Occidente, a la derecha del P V
M de C en el Sur, adelante del Tes
S E al lado norte de la columna B.•.
P E al lado sur de la columna J
P E en el Sur, adelante del Hosp
G T I en el Norte, al lado de la puerta que debe estar en el esquina N. O.
Esta colocación no es universal, como tampoco lo es el orden mencionado que para nosotros es el orden
jerárquico. En muchos talleres solamente se sientan en Oriente el V M y el Ord En el orden jerárquico el G
T es un Oficial de Primera Clase.
Nosotros creemos que el orden y la colocación mencionados son los más aceptados y usados, por ser los
más racionales.
Sobre la colocación de los Vigilantes se ha hablado y se ha discutido mucho, pero la posición generalmente
admitida es la mencionada, pues los Dignatarios deben estar en los vértices de un triángulo cuyo lado mayor
va del V M al P V y en la únión de los menores, que deben ser iguales, está colocado el S V
En algunos talleres los Vigilantes ocupan los sitios que hemos indicado para los Expertos y así quedan cada
uno en la columna que le corresponde.
Como se ve, no hay la uniformidad que debería existir en los talleres de la Masonería.
JOYAS
Los funcionarios usan durante los trabajos colla-rines de tela o de metal plateado, según lo dispone cada
taller y lo apruebe la Gran Logia.
Pendiente del collarín y en su parte anterior usan una Joya distintiva del cargo que cada uno desempeña y
con su propio simbolismo, así:
V M —Una Escuadra sostenida por su vértice.
P V —Un Nivel.
S.S V —Una Plomada.
Ord —E1 Libro de la Ley abierto.
Sec.'.—Dos Plumas cruzad.as.
Tes --Dos Llaves cruzadas.
Hosp —Una Mano abierta, una bolsa o saco o un Cuerno de la Abundancia.
P D —Una Escuadra y un Compás con un Sol en el centro .
S P D P —Una Escuadra y un Compás con una Luna en el centro.
M de C —Dos bastones cruzados, o una regla de 24 pulgadas, o una vara con terminal de escuadra y
compás.
— 29 —
P E —Dos Alabardas o Pértigas cruzadas, o un triángulo equilátero.
S E —La misma joya que el anterior, o un alfanje.
P Est —Un Estandarte, o un Compás.
G T I —Dos Espadas desnudas cruzadas.
G T E...—Una Espada desnuda.
L U CES
En el taller de la Masonería hay tres clases de luces: las de la logia; las del Altar o Ara; y las de iluminación.
Las primeras son los Dignatarios, pues son los que iluminan a los obreros, los instruyen, los guían, disipan
sus dudas y les dan ejemplo.
Las del Ara son de dos clases: mayores y menores. Las primeras son el Vol de la Ley, que simboliza
sabiduría; el Compás, emblema de la virtud, la moral, la conciencia, el espíritu, el cielo; y la Escuadra que
simboliza la tierra, las pasiones, los vicios, el mundo profano.
Un Landmark establece que "Un Libro de la Ley no debe faltar en una Logia cuando trabaja", por eso es
indispensable este libro sobre el Altar. Como un libro cerrado no da luz, no enseña- nada, el libro debe estar
abierto y, al hacerlo, escogemos un pasaje que se relacione con el grado en que se trabaja. En logias que
trabajan en el Rito Escocés Antiguo y Aceptado abren la Biblia -- Vol de la Ley— en el Libro de Ruth; las
que siguen el Rito de York abren el libro en el Salmo 133. Sobre este libro abierto se colocan las otras dos
luces mayores en la forma que todo Masón debe conocer y su colocación indica el grado en que se trabaja,
así como el libro que se relaciona con cada grado, en el cual se abre la Biblia. En el primer grado su posición
está indicando que el Aprendiz todavía tiene do-minado su espíritu por los vicios y pasiones del mundo
profano.
3.0
Las luces menores están colocadas alrededor del Altar, dos adelante, una hacia el norte y otra hacia el sur
y la última atrás, en el Norte y hacia Oriente. Significan Fe, Esperanza y Caridad y también Ciencia, Virtud,
y Fraternidad. También simbolizan el Sol, la Luna y 'el V M , porque el primero alumbra en el día, la segunda
ilumina en la noche y el V , M , ilumina su logia, es decir, da conocimientos, consejos y ejemplos a sus
obreros.
Las luces de iluminación son también de dos clases; indispensables y dispensables. Las, primeras deben
estar encendidas en, los bufetes de los Dignatarios durante los trabajos; las segundas están colocadas en
los bufetes de otros funcionarios, en el techo y en las paredes, solamente sirven para iluminar y puede
prescindirse de ellas.
COLUMNAS
En nuestros templos hay seis clases de columnas:
1—las del pórtico que tiene por nombres B J coronadas de granadas y lirios y con las esferas terrestre y
celeste;
2 las del taller —sostenes del Templo— que son los Dignatarios o Luces;
3—las que sostienen los doce signos del Zodíaco y representan los meses del año; columnitas que tienen
los. Vigilantes, si milares a las del pórtico, que simbolizan au-toridad;
- 31
5—las que forman los obreros en las tres partes en que está dividida la logia: Oriente, Sur y Norte, a la
cabeza de las cuales están el V M y los vigilantes; y
6—la que cada obrero representa, pues cada uno es una columna de su taller o templo, y, en consecuencia,
de nuestra Institución.
En los tronos de los Dignatarios se acostumbra colocar estatuas de Minerva —Sabiduría o Inteligencia—;
Hércules —Fuerza—; y Venus —Belleza—, significando que para la obra de la Masonería es indispensable
la primera para disponer o planear, la- segunda para ejecutar y la tercera para embellecer y adornar la obra.
Estas nociones elementales deberán ser amplia-das y completadas con el estudio de las Constituciones,
Estatutos, Reglamentos y demás disposiciones legales y con la lectura y práctica de las liturgias. Como
algunos de los símbolos solamente pueden explicarse en logias, es indispensable asistir regularmente a los
trabajos, en donde los Aprendices reciben su instrucción.
CATECISMO
P.—¿Sois masón?
R.—Me satisface pertenecer a esta Institución cu-yos ideales, basados en la virtud, la moral, el honor, la
ciencia y la justicia, en la lucha con tra el retroceso, la ignorancia y la maldad, han venido realizándose en
los pueblos cultos en bien de la humanidad.
- 32 —
P.—¿Cómo probáis que sois masón?
R.—Por los medios de reconocimiento y por mi conducta.
P.—¿Qué se necesita para ser recibido masón?
R.—Ser hombre libre de preocupaciones, fiel a las leyes, amante de su Patria, de buenas costumbres,
dispuestos sinceramente a corregir sus defectos y a dominar sus pasiones para llegar a ser virtuoso, estando
desde luego dispuesto a procurar empeñosamente el bien de los demás.
P. — ¿Cuáles son los preceptos fundamentales del masón?
R. —Amor fraternal, socorro y verdad. I'.
P— ¿Cuál es, la acepción literal de la palabra masón?
R. —Materialmente masón es lo mismo que albañil o arquitecto y en sentido figurado o simbólico es obrero
de la virtud, que enseña y practica los principios inmutables del deber y del derecho que el G A D U ha
grabado en su conciencia.
P. — ¿Cómo conseguir esto?
R. —Levantando a la Verdad el Templo de la Sabiduría.
P. —¿En dónde se construye ese Templo?.
R. —En la Logia.
P. — ¿Qué significa esa palabra?
R. —Significa Universo y al decir que los masones trabajamos en una logia significamos que nuestra labor
la desarrollamos en el mundo entero. Esta palabra se tomó del sanscrito Loka o Loga.
P. — ¿Creéis que es un término apropiado para los talleres?
-- 33 –
R —Si, porque toda logia tiene por base la tierra, por techumbre el cielo, el Oriente es la luz, el Occidente
las, tinieblas y su circunferencia el océano y el ilimitado horizonte. Además, fue el nombre que se le dio al
Templo del Rey Salomón, del cual es representación la logia actual y, por otra parte, el meior templo a la
Verdad y a la Virtud es el Universo.
P.—¿Cómo está sostenida una Logia?
R.—Simbólicamente por tres grandes columnas: Sabiduría, Fuerza y Belleza, representadas Por los
respectivos dieses de la mitología: Minerva. Hércules y Venus. La primera alude al Maestro que concibe y
dirige: la segunda al P V que ejecuta: y la tercera al S V que adorna y embellece las ideas y las obras
masónicas.
P.— Cuál es el distintivo del V Maestro?
R.—La Escuadra, emblema de la Virtud y de la Rectitud.
P.— Cuál es el del Prim Vig ?
R.— El Nivel, símbolo de la Igualdad.
P.— ¿Y el del Seg Vig ?
R.— La PIomada, símbolo de la Justicia y de Equidad.
P—¿Qué significación simbólica se da al trabajo del Masón?
R—Que abre abismos para los vicios y erige templos a la Virtud.
P —¿Cuántas clases de logias conocéis?
R —Tres: Simple o Triángulo: Justa, en instancia o Bajo Dispensa; y Perfecta o con Carta Patente.
P— ¿Cuántos forman una logia simple?
R—Tres Maestros Masones que, como funcionarios se denominan Presidente, Secretario y Tesorero.
P —¿Cuántos componen una logia justa?

- 344_
R.—Cinco Maestros Masones que se denominan V M ,P.'. V , S V ., y Sec y Tes
P.—¿Cuántos integran una logia perfecta?
R.—Siete Maestros Masones, los primeros cinco tienen la misma denominación anterior y los otros dos P ,
D y S.S. D
P.—¿Cuántos funcionarios tiene una logia regular para su trabajo ordinario?
R.—Tiene quince funcionarios divididos en tres clases: Dignatarios, Oficiales de Primera Clase y Oficiales
de Segunda Clase.
P . —¿Cuáles son estos funcionarios? .
R— Los Dignatarios son el V M , el P V y el S V son funcionarios de elección. Los Oficiales de
Primera Clase son el Ord , el Sec. y el Tes También son electos por el taller. Los Oficiales de Segunda
Clase son: P D , S D M de Cer , P Exp , S . Exp , P . Est , G . T I. y G T . E Estos los nombra el Ven.'.
Maestro, pero el P V escoge al S D
P.- -¿Qué debéis hacer antes de entrar a una logia?.
R—Decorarme, es decir, colocarme el mandil en debida forma; firmar en el libro de asistencia, si hay; llamar
a la puerta y esperar que abran..
P — ¿Y cuándo os han permitido la entrada qué hacéis? 11. Hacer el signo de orden, efectuar la marcha,
saludar a las Luces y esperar, entre columnas, la orden del V M .
P -¿Qué es el mandil? H. El mandil es el símbolo del trabajo. Es la decoración por excelencia del masón, la
joya más preciada que le da el carácter de tal y sin el cual no puede presentarse el masón en logia alguna.
— 35 —
. P— ¿De qué material está hecho el mandil?
R. —De piel de cordero no nacido. Debe ser blanco. Significa pureza e inocencia. Corrientemente se usan
mandiles de tela blanca para todos los trabajos ordinarios.
P. — ¿i De cuántas partes consta el mandil?
R. — De tres partes: cuerpo, bayeta y cinta. El cuerpo es rectangular, de 38 por 33 centímetros, simboliza la
tierra, el mundo profano, como las escuadras que forman sus ángulos. Sus lados representan los cuatro
elementos de la naturaleza; el inferior la tierra, el superior el aire, el derecho el agua y el izquierdo el fuego.
La bayeta es triangular, simboliza el cielo, el espíritu, como el compás; la cinta tiene forma circular, simboliza
el Universo.
P. — ¿Cómo usan el mandil los aprendices?
R. —Con la solapa o bayeta levantada por lo rudo del trabajo y para significar que los aprendices estamos
todavía dominados por los vicios y pasiones mundanos.
P. — ¿Cuál es vuestro trabajo?
R. —Desbaratar la piedra bruta.
P. — ¿Explicadme qué significa esto?
R. — (Se dan las explicaciones pedidas).
P. — ¿Con qué herramientas se hace ese trabajo?
R. —Con las tres herramientas que recibimos de nuestro Vigilante. (Da una explicación amplia sobre este
asunto).
P. — ¿De cuántas partes está formado el signo de orden?
R. —De tres (se explica ampliamente).
P. — ¿Qué significa el signo de orden?
—36--
R — Obediencia, respeto.
P. — ¿Cómo es el toque?
R. — (Se explica).
P. — ¿Qué significa?
R. —Buscad y encontraréis; llamad y se os abrirá; pedid y se os dará.
P— ¿Cómo es la marcha? ¿Qué significa?
R— (Se explica ampliamente).
P. — ¿Cómo es el signo de saludo y qué significa?
R. — (Se responde en debida forma),
P. — ¿Qué son los medios de reconocimiento?
R. —Son un conjunto de maneras que nos sirven para darnos a conocer y para reconocer como masones a
los desconocidos.
P. — ¿Decidnos algunos de esos medios, en qué están fundados y en qué consisten?
R. — (Se explican).
P. — ¿Cómo se encuentran los masones?
R. —Entre la escuadra y el compás
P. — ¿Cómo se separan?
R. —Bajo la escuadra, símbolo de la rectitud y de la virtud.
P. — ¿Cómo se congregan?
R. —Bajo el nivel, símbolo de la igualdad.
P. — ¿Cómo se conducen?
R. —Bajo la plomada, símbolo de la equidad y de la justicia...
P. — ¿Cómo se deben tratar los masones?
R. — Como verdaderos hermanos, favoreciéndose y dándose ayuda y consuelo cuando sea necesario.
P— ¿Qué grado tenéis?
R. —El de Aprendiz Masón, que es el primero de la Masonería Simbólica.
P. — ¿Cuál es vuestra edad? I
P—Tres años.
— 37 —
P¬— ¿Por qué esa edad?
R— Porque antiguamente no era admitido aspirante alguno sino después de tres años de observación y
pruebas.
P. — ¿Dónde se colocan los Aprendices?
R. —En la columna del Norte, por ser la menos iluminada del mundo.
P — ¿Quién es vuestro principal instructor?
R. —El querido hermano Segundo Vigilante.
P. — ¿Cuál es el objeto principal de los trabajos en logia?
R. — Disipar la ignorancia, combatir el vicio e inspirar el amor a la humanidad, para poder lograr el
perfeccionamiento de los hombres.
P. — ¿A qué horas trabajan los Aprendices?
R. —Del medio día a la media noche.
P. — ¿Cuáles son las razones para trabajar ese tiempo?
R. — (Se explica).
P. —Dadnos un resumen de los trabajos masónicos.
R. — (Contesta ampliamente).
P. — ¿Cómo fuisteis recibido masón?
R. — (Explíquese la preparación del recipiendario y su simbolismo).
P. — Explicadme los distintos pasajes de la recepción.
R— (Se explica todo con su significado).
P— ¿Qué distintivo os dieron al consagraros Masón?
R —El distintivo por excelencia del masón: un mandil blanco.
P— ¿Qué entendéis por Masonería?
R— (Explíquese ampliamente este punto).
P— ¿Cuál es la divisa de la Masonería?
R —Libertad, Igualdad y Fraternidad, pero no como la expresión de una tesis política, sino cómo una síntesis
filosófica de los principios de nuestra institución, nacida indudablemente de los -elementos esenciales de la
naturaleza: Aire, Agua y Fuego, en los que se purifica el recipiendario durante los viajes de su iniciación.
— 38 —
P. — ¿Podéis explicar algunos de los símbolos y emblemas?
R—(Los explica uno por uno).
P. — ¿Cuál es el lugar que ocupa el G T E ?
R.—(Lo dice y explica).
P. — ¿Dónde se sitúa el G.... T I ?
R. — (Lo dice y explica).
P. — ¿Cuál es el lugar del P Est ?
R. —Adelante del bufete del H Host.
P. — ¿Dónde se colocan los Expertos?
R. — E1 primero al lado de la Col J y el segundo al lado de la B
P. — ¿Dónde se coloca el H M de Cer ?
R. — Delante del bufete del H Tes.
P —¿Cuál es el lugar del S.S. D...?
R.—A la derecha del hermano P V,
P. —Y el P D ¿Dónde se sienta?
R. —A la derecha del V M fuera del dosel.
P. — ¿Podéis decirme las atribuciones de estos funcionarios?
R. — (Dice las de todos los que se han mencionado).
P. — ¿Cuál es el lugar del hermano Hosp ?
R. —El extremo oriental de la columna del norte.
P. — ¿Y cuál es el del hermano Tes ?
R. —E1 extremo oriental de la columna del sur.
P. — ¿Y el hermano Sec dónde se coloca?.
—En Oriente hacia la esquina noreste.
P. — ¿Cuál es el lugar del hermano Ord ?
R. —En Oriente hacia la esquina sudeste.
— 39 —
P. — ¿Cuál es el lugar en logia del hermano S.•.
R. — (Lo dice).
P. — ¿Dónde se sitúa el hermano P V ?
R. — (Lo dice).
P. — ¿Qué lugar ocupa en logia el V.•. M ?
R. — (Lo dice).
P. —Explicadnos las atribuciones de estos últimos oficiales.
R. — (Lo hace ampliamente).
P. — ¿Cuáles son las joyas de todos estos funcionarios?
R. — (Lo explica).
P. — Habladnos sobre el templo y sus atributos.
R. —El Templo representa el Universo. El pavimento de mosaico, formado de piedras blancas y negras
unidas por un mismo cemento, simboliza la unión de todos los masones sin distinción de razas, creencias
políticas o religiosas, ni de nacionalidades; es también imagen del bien y del mal, de que está sembrado el
camino de la vida.
La bóveda azul del templo, sembrada de estrellas, representa el firmamento y, como la del cielo, cobija a
todos los hombres sin distinción alguna. El templo está hacia el Este y a él se entra por el Oeste, porque del
Oriente viene la Luz y hacia él vamos, desde Occidente, en busca de esa luz que es Sabiduría, que es
Verdad. Las dos columnas de la entrada son una semejanza de las que se colocaron en el pórtico del Templo
del Rey Salomón, las cuales tenían 18 codos de altura, 12 de circunferencia, 12 en su base y 5 en los
capiteles haciendo un total de 47, número simbólico de las constelaciones del Zodíaco, esto es, el mundo
celeste; son de bronce para significar la estabilidad de las leyes de la naturaleza que son base de la doctrina
masónica; están huecas 'para poder encerrar en ellas nuestros útiles y herramientas de trabajo; y al lado de
ellas se entrega su salario a los obreros despidiéndolos contentos y satisfechos.

— 40 —
Las granadas que se hallan en su parte superior simbolizan el pueblo masónico, estrechamente unido;
millares de granos en la fruta con el mismo germen, una misma substancia y un mismo asilo.
Según los preceptos bíblicos, a las columnas del templo de Salomón se le dieron los nombres que tienen las
nuestras; B a la del Norte y J a la del Sur. Estas mismas columnas están representa-das con su misma-
simbología pero además, significando autoridad, en los situales de los Vigilantes.
El Volumen de la Ley, el Compás y la Escuadra son las grandes luces de una logia o las luces mayores del
Altar y se encuentran siempre sobre él durante los -trabajos; reunidas simbolizan la conciencia del hombre,
que es la regla y guía de su conducta. La ley enseña el arte del bien y nos recuerda nuestros deberes para
con Dios; la Escuadra es emblema de la Virtud, del sentimiento moral y del amor fraternal y nos recuerda los
deberes para con nuestros semejantes; y el Compás simboliza la razón, luz de la conciencia que mide
nuestros deseos y nos mantiene dentro de los límites de la justicia en todos nuestros actos, recordándonos
nuestros deberes para con nosotros mismos.
Las luces menores del Ara son las que están alrededor de ésta, colocadas allí para recordarnos los benéficos
astros que dan luz a la tierra y al Maestro de la logia que ilumina a sus hermanos. Simbolizan la Ciencia, la
Virtud y la Fraternidad y Fe, Esperanza y Caridad, que resplandecen en el Altar y nos dirigen por el camino
del progreso moral.
Hay también las luces de la logia que son sus Dignatarios y las luces de iluminación: También hay otras
clases de columnas.
Los dos primeros golpes de la batería demuestran el celo del masón y el último su perseverancia en el bien.

Además de todo lo anterior, se deberá preguntar al Aprendiz en las tenidas de instrucción y en su examen
para aumento de su salario, todo lo que se explica en la liturgia, los procedimientos y las reglas que no están
escritas pero que le explicará su instructor que es el Segundo Vigilante o cualquier otro Maestro. También
se procurará que el Aprendiz conozca perfectamente los Antiguos Limites o Landmarks, los Antiguos
Deberes, la Constitución y Estatutos de la muy respetable Gran Logia, el Reglamento Interior de su logia y
lis demás disposiciones lega-les dictadas en la jurisdicción. Todos los puntos aquí tratados deberán
desarrollarse lo más ampliamente posible en las tenidas de instrucción, para que el Aprendiz pueda tener un
concepto claro, definido y exacto de la enseñanza masónica.

Humberto Acosta.

CURSO DE MASONERIA MASONICA

Para conocimiento de nuestros queridos hermanos lectores, copiamos algunos párrafos del PREFACIO de
la interesante obra de nuestro V H Fausto Tenfus:
"Este Curso de Masonería Simbólica consta de 405 lecciones y 2,025 preguntas sobre los temas expuestos,
todas con sus respuestas y cor ues suplementarias muy ilustrativas."
"81 lecciones versan sobre historia de la Masonería, 108 sobre simbolismo, 108 sobre filosofía initica de los
tres grados y 108 sobre la aplicación de las enseñanzas masónicas en la vida cotidiana.
"Es evidente la necesidad de dar en nuestras logias una instrucción masónica completa, no solamente
litúrgica, sino altamente valorizada por una correcta y exacta interpretación de las formas litúr-r iras de
nuestra milenaria, institución. El perfecto conocimiento de nuestros símbolos, su interpretación teórica,
filosófica y ritualística y las sugestiones para su aplicación en la vida práctica, darán un sentido más amplio
a nuestras ceremonias y crean una conciencia masónica intelectualmente iluminada.
"La vida social de los masones modernos sufre a cada momento una fortísima presión del espíritu (profano,
disipado, voluble e injusto, completamente contrario al espíritu masónico firme, estable y prudente.
Solamente una sólida constitución espiritual y mental intelectualmente afianzada, habilitará a los masones
para resistir victoriosamente las influencias del medio profano, pretencioso, inútil y sofisticado y a los ataques
viperinos, necrosantes, perversos y calumniosos de los enemigos organizados de nuestra Orden."
— 45 —
"El esquema general de este Curso de Masonería Simbólico fue presentado al PRIMER CONGRE-SO DEL
INTERIOR PAULISTA, celebrado el 14 de Junio de 1951 en Mirasol y fue unánimemente recomendado. El
8 de Febrero de 1952 fue aprobado por unanimidad por la Resp Log SAN JUAN DE ESCOCIA No. 7, del
Vallé de Mirasol. En 1955 una Comisión Especial de la muy respetable GRAN LOGIA UNIDA DE SAN
PABLO, recomendó su publicación en un volumen."
No hemos podido averiguar si el volumen mencionado se publicó o no, a pesar de nuestras súplicas a la
Gran Logia, al Director de la revista O MAL-HETE y al propio hermano Tenfus al respecto y, desde luego, a
nuestro interés por obtener un ejemplar de dicha obra.
La revista O MALHETE, editada en San Pablo, inició la publicación del Curso a que nos referimos y, ante la
imposibilidad de obtener el libro, nos dimos a la tarea de traducir del portugués las lecciones a medida de su
publicación, pero desgraciada-mente, solamente vieron la luz las lecciones que ahora ofrecemos a nuestros
queridos hermanos, cuya lectura dejará una enseñanza valiosa a no dudarlo.
Sirva esto como una explicación del contenido de este libro que ahora tenemos el placer de ofrecer a nuestros
queridos hermanos.
Humberto Acosta.
-- 46 —
LECCION I
LOS MISTERIOS ANTIGUOS
Los misterios así llamados eran cultos especiales generalmente secretos, practicados únicamente por los
que habían recibido una iniciación especial. Generalmente se basaban en antiquísimas ideas y tradiciones
e incluían la creencia en un Ser Supremo y en la existencia de un mundo espiritual más allá de los límites
materiales.
Homero, el gran poeta griego, se refirió a ceremonias de purificación y de expiación. Aunque haya indicios
de la extraordinaria antigüedad de los misterios, es a partir del siglo VI antes de Cristo que tenemos noticias
positivas de su existencia y referencias claras y precisas de sus ceremonias. Los más conocidos y notables
misterios son: de los Cabirios VII la isla de Samotracia; de Zeus en la isla de Creta; de Dionisio en los
territorios griegos de Ática y de Beocia; de Deméter en Andancia; de Hécate en Agina; de Orfeo en toda
Grecia; y de Elipsis, que son los que se conocen mejor.
Las ceremonias eleusinas comprendían diversas purificaciones por el agua y por el fuego, baños, rezos,
ayunos, representaciones de dramas simbólicos, a veces terribles y .otras consoladores, descenso los
infiernos (regiones inferiores de tormento), regreso a la luz (recordando el Hágase la Luz), re surrección,
enseñanzas misteriosas dadas por los sacerdotes, presentación de objetos sagrados y también enseñanza
de fórmulas especiales para el reconocimiento y para el trabajo. -
- 47 –
Más o menos en el siglo IV antes de Cristo comenzaron a aparecer algunos misterios de origen oriental, tales
como los de Mithra y de Isis, que trajeron para el culto el sensualismo típico de Oriente. Roma practicó los
misterios griegos y también los de Venus y de Baco, que en el transcurso del tiempo dieron lugar a muchos
abusos y tuvieron que ser prohibidos por el Senado Romano en el siglo II antes de Cristo.
También el cristianismo tenía sus misterios secretos cuándo principió su expansión por el occidente.
Actualmente los misterios cristianos se resumen en algunas verdades que deben ser aceptadas aun-que no
sean comprendidas: la trinidad divina, la encarnación del Hijo de Dios, la redención del mundo, las relaciones
de Dios con el mundo, la justicia y misericordia de Dios, etc.
Los misterios de los magos persas tenían por objeto conservar los conocimientos científicos y útiles a través
de símbolos para recordarlos, ya que esos tiempos no había imprenta. Los misterios braharnánicos servían
para consolidar el poder de los brahamanes y subyugar al pueblo, hasta que fueron vencidos por el progreso.
Los misterios egipcios tenían por finalidad la instrucción y el interés político de los templos. Los sacerdotes
de Isis fueron en realidad los primeros hombres que se interesaron por la felicidad del pueblo, objetivo
primordial de la Masonería.
Los misterios de los Cabirios tenían por objeto exaltar el patriotismo, los de Orfeo la adquisición de la ciencia
según la capacidad de cada individuo.
— 48 —
Los misterios escénicos trataban de abolir la idolatría, establecer la tolerancia, la caridad y la moral más
austera. Socorrían a todos los hombres sin distinción de raza o de creencia. Los misterios cristianos tendían
al establecimiento de la nueva religión basada en la igualdad de todos los hombres, en la libertad política y-
religiosa y en la abolición de las castas privilegiadas. Los de los Druidas eran esencialmente religiosos. Los
misterios de Isis merecen mayor atención, porque son los que más directamente atañen a la Masonería.
Antes de ser iniciado el candidato debía dar pruebas de ser un hombre de valía. Recorría subterráneos,
atravesaba fuego y torrentes se suspendía sobre abismos, etc., sufría todo esto en las criptas di, los templos.
La iniciación estaba dividida en cuatro partes: Bautismo —Muerte y resurrección— Descenso a los .Infiernos
—o regiones de sufrimientos y de horror— y Transfiguración de la Luz. Antes de comenzar la iniciación el
candidato era sometido, a un período de ayuno y meditación, el cual terminaba solamente después de haber
visto alguna visión; podía durar esto meses o años. Bajo la presión o influencia de las oraciones, del ayuno
y de Ia soledad, el sistema nervioso del candidato sufría alteraciones y cuando había visto a la diosa en una
de estas visiones, era bautizado en el torrente de la cripta, se volvía un hombre nuevo y principiaba a vivir ir
la vida real.
Después del bautismo el neófito se alimentaba únicamente con vegetales durante diez o más días pasaba
entonces a la segunda fase del círculo iniciatico: Muerte y Renacimiento. Era colocado en un ataúd como si
estuviera muerto, y por medio del hipnotismo y el magnetismo, lo ponían en contacto con los espíritus de los
muertos; cuando volvía en sí, al terminar el viaje por el mundo de los espíritus, era considerado como un sol
o luz viva sobre la tierra.
-- 49 --
Después de este período le enseriaban las palabras misteriosas que abren las puertas del mundo espiritual
y permiten la comunicación con los espíritus; recibía las instrucciones necesarias para practicar bien todos
los ritos del templo y para provocar su comunicación con el mundo espiritual siempre que lo necesitase. De
este modo el candidato adquiría la certeza de que la muerte no existe en el sentido que se le da
corrientemente, sino que es apenas el paso de un mundo hacia otro diferente, pero más poderoso.
Terminada esta parte el neófito comparecía delante del Tribunal Sagrado, era juzgado y podía después
continuar recorriendo los misterios. Aprendía a describir los astros del sistema solar, se confesaba con los
jueces relatando su vida anterior con toda minuciosidad y con todas sus angustias y aspiraciones.
Estas ceremonias no eran meras representaciones simbólicas como son las nuestras, sino realizadas
prácticamente y permitían entrar en contacto con el otro lado de la vida. Terminada la confesión, se
arrodillaba ante la estatua de la Diosa, símbolo de la Naturaleza Madre, y pronunciaba la siguiente oración:
"Oh madre, celeste diosa de la piedad, echásteis mi alma en el seno de la muerte para mostrarme la belleza
de la vida eterna, sed bendita ahora y por siempre". De ahí en adelante el neófito será el intérprete de la Ley,
esto es, de la revelación del TORA que las leyendas transformarán el Minotauro, Numitor y Manutor
modificando el sentido espiritual de la iniciación y dándole un sentido material. Llegó el momento de la
glorificación del iniciado: magníficamente vestido es sacado de su celda y puesto en oración: diosa se le
presenta y le habla: "Tú vivirás feliz y gloriosa bajo mi tutela y cuando se llegue la hora descenderás a los
infiernos, al hemisferio subterráneo, y me verás brillando, gobernando a los muertos, y cuando te fueres al
cielo ahí me verás deslumbrante. Aprende ahora a merecer mi protección ponme tengo (.1 poder de disminuir
o prolongar tu vida".
-- 50 —
Cicerón, que había pasado por los misterios griegos, decía: "Después de mi iniciación conocí la alegría de
vivir, las razones de la vida que tenemos en este mundo y la fundamentada esperanza de una Vida mejor
después de la muerte."
En el templo de Eleusis había esta inscripción: Es bello el misterio que nos viene de los bienaventurados;
para los mortales la muerte no es un mal sino un bien.
Plutarco escribió en su libro Inmortalidad del Alma: "El hombre después de su iniciación se vuelve libre, anda
sin temor, celebra los misterio como un rey. Todos los iniciados dejan el Iodo y las tinieblas y pasan a disfrutar
de una vida digna y elogiable".
Todos los misterios, del mismo modo que la masonería moderna, tenían por objeto hacer del profano un
hombre nuevo. Empuñando su bastón de iniciado, el nuevo adepto de Isis podía recorrer el mundo entero y
era recibido como maestro en todos los templos existentes entonces.
Había una tolerancia universal que puede servir de lección en los tiempos modernos.
Presumiendo, el cielo de los misterios de Isis ha formado por la preparación para el bautismo, la muerte y la
resurrección, el aparecimiento de la diosa, descenso a los infiernos o regiones, inferiores, transfiguración del
iniciado en sol visible, es decir, en filósofo, en sabio, que recibió la iluminación del espíritu y va por la tierra
transmitiendo esa luz .
-- 51 --
Esos misterios, que son en esencia una misma cosa, nos dan una explicación del mundo antiguo y de lo que
eran los misterios de la antigüedad. En cuanto a la enseñanza propiamente dicha, se dividía en los siguientes
estudios perfectamente simbolizados en el tetragrama o tetragramaton: IOD — HE — VAU — HE.
IOD — estudio de la naturaleza divina, de Dios, de la divinidad, del mundo espiritual;
HE — estudio de la naturaleza material y pro-ducida, de todo lo que hay sobre la tierra;
VAU — estudio de la naturaleza humana, del hombre, de sus relaciones de su vida;
HE — estudio de la' naturaleza productora, de la generación de todas las cosas, del amor universal.
La doctrina de los misterios, aunque revestida de las más diversas formas, jamás varió en su esencia y su
interpretación; era más o menos la misma en todas partes. Esa unidad de sentido prueba claramente que
los misterios tienen un solo origen, de donde derivaron todas las formas de enseñanza filosófica o religiosa
de la antigüedad. La Masonería conserva las bases y tiene la llave de estos misterios.
-- 52 —

LECCION II
LAS COMUNIDADES MISTICAS DE LOS HEBREOS, GRIEGOS E INDUES
En la lección primera estudiamos ligeramente los misterios de la antigüedad, los más importantes, de los cuales fueron para la
Masonería los de Isis, en Egipto, de los que hicimos una descripción sumaria. Juntamente con los misterios, que eran cultos
organizados y protegidos por los gobernantes, con leyes y privilegios, había también una especie de conventos, comunidades
o asociaciones fraternales que recibieron en la historia el nombre de Comunidades Místicas, esto es, agrupaciones de ini-1
bitios que vivían una vida común separada en 1,,irte del resto del mundo.
Esas' comunidades existieron en India, Persia, Grecia y Egipto. Eran semejantes a los actuales o n ven los de órdenes
religiosas de frailes y monjes, pero poseían ciertas características que las relacionan con la Masonería moderna, por lo que
vamos a estudiarlas aunque un tanto superficialmente.
Muchas de esas comunidades o sociedades tu-s' 'proa carácter religioso y otras no. La mayoría nació de la necesidad que
sentían los iniciados de curtirse en vida común, para resistir las imposiciones y miserias del mundo profano y poder llevar una
vida conforme con sus ideales y aspiraciones
- 53 --
Aquello que más liga espiritualmente esas comunidades antiguas a la Masonería moderna, tal como resultó de la unión de las
logias de Londres, es el hecho de haber sido operativas y especulativas, esto es, trabajaban en actividades materiale3,
realizaban servicios de albañil, de carpintero y de constructores en general y también se entregaban a estudios filosóficos,
científicos y religiosos.
La iniciación era condición absolutamente necesaria para que alguien pudiera ingresar en esas comunidades antiguas, del
mismo modo que en la Masonería. Tenían esas extraordinarias fraternidades medios especiales de reconocimiento: seña-les,
toques y palabras de las que se servían para ser aceptados por sus hermanos, no solamente en su propio país, sino cuando
viajaban a otros lugares en donde había idénticas comunidades. Allí eran reconocidos los iniciados viajeros por la señal, el
toque y la palabra, tal como hoy se hace con el hermano masón en cualquier parte del mundo.
Hubo un gran iniciado llamado Apolonio de Tiana, cuya biografía fue escrita por Filóstrato ba sado en datos anotados por uno
de sus discípulos de Apólonio llamado Damis. Ese gran reformador y filósofo del siglo I de nuestra era, viajaba constante-
mente de una ciudad a otra y de uno a otro país, visitando todos los templos de cualquiera religión que fuesen y siempre
encontraba hospitalidad y era acogido fraternalmente, dividiendo con todos su maravillosa sabiduría. Damis no era iniciado y
no podía entrar a los templos se quedaba en las salas exteriores que correspondían, más o menos, a nuestras Salas de Pasos
Perdidos.
-- 54 —
Apolonio de Tiana nació en la villa de Tiana, en el Asia Menor, donde hoy queda Turquía y murió en la ciudad de Efeso en el
año 97 de nuestra era. Era filósofo neopitagórico; abrazó la doctrina de Pitágoras y emprendió largos viajes. .En todas partes
predicaba la reforma de las costumbres y las doctrinas y principios que aprendiera en los libros del gran filósofo griego. Apolonio
era un hombre de alta moralidad. La biografía que escribió Filóstrato estaba equivocada -en muchos puntos; otros autores
desmintieron a ese historiador. Apolonio estableció en Efeso una comunidad pitagórica, una de las comunidades místicas de
la antigüedad, cuyo sistema describiremos en seguida. Fue uno de los hombres más sabios y virtuosos del siglo I de la Era
Vulgar.
Siendo la comunidad pitagórica la que mejor expresa el sentido de la Masonería, la examinaremos minuciosamente. Ya
sabemos de un modo ge-neral el aspecto de las comunidades místicas de la antigüedad y al mismo tiempo el de la más
evolucionada de todas y más próxima a nuestros ideales.
Para ser recibido en la comunidad pitagórica el aspirante pasaba por una serie de pruebas desinadas a descubrir sus defectos
y sus cualidades y el dominio que tenía sobre sus pasiones. Estas pruebas eran eliminatorias y duraban muchas se manas; si
era admitido al final de ellas recibía la luz e ingresaba al Primer Grado. Este Primer Grado duraba por lo menos dos años, a
veces tres y hasta cinco. En ese grado el hermano debía me-(I i lar sobre las enseñanzas recibidas y exponía lo aprendido con
sus propias palabras delante de toda la comunidad v su principal- obligación era oír y no discutir nunca. Corresponde
exactamente a nuestro grado de Aprendiz. Era el Grado de OYÉNT E.
— 55 –

El Segundo Grado, también llamado de Purificación, era la recompensa de quien pasaba bien por el primer grado. Entraba al
templo donde estaban el Maestro y sus discípulos y allí recibía una exposición de la doctrina, de la ciencia de los números de
la evolución universal y del destino y fin del alma humana. En la puerta del templo del segundo grado estaba grabada una G,
que significaba Geometría. Este grado corresponde en parte al segundo grado de la Masonería moderna.
El tercer grado, llamado también de Purificación, era conferido cuando el Maestro juzgaba que el candidato había alcanzado
la completa purificación de su espíritu. Entonces el iniciado aprendía varias ciencias: Cosmogonía (ciencia de los astros),
Sicología (ciencia del alma) y era cuidadosamente guiado en otras ciencias y artes. Esas enseñanzas del tercer grado eran
dadas por la noche, a orillas del mar o en las criptas de los templos donde había poca luz y el candidato no era visto por los
demás que escuchaban. Hay una gran semejanza entre este grado y el tercero de la Masonería. En la Cámara del medio
también el recipiendario queda sumergido en las tinieblas y escucha, sin ver al respetable Maestro, el relato de la majestuosa
y sublime leyenda de Hiram.
Las comunidades místicas pitagóricas tenían un cuarto grado que era la plenitud de la carrera y tenía el nombre de Epifanía,
que significaba ver desde arriba, desde lo alto. Era el corazón de todo el aprendizaje. Las iniciaciones pitagóricas pretendían
dar al candidato la Verdad para la inteligencia, la Virtud para el alma, la pureza para el cuerpo.
— 56 —
Le enseñaban al adepto reglas de higiene corporal y mental, para que gozara siempre de salud física y espiritual. Los miembros
de estas' comunidades se casaban, pero no era preciso que abandonaran la comunidad. Toda la sabiduría y toda la prudencia
que ellos adquirían con sus estudios y prácticas se-cretas, les servían para la vida práctica. Conocían el origen del Bien y del
Mal, tenían un alto nivel moral y esparcían a su alrededor enseñanzas va-liosas que beneficiaban a la sociedad. Eran obre-ros
sociales, tales como son los masones modernos, y contribuían a la armonía y al orden de la sociedad.
La Masonería ligose espiritualmente con los grandes misterios de la antigüedad, especialmente con los de Isis, porque
intelectual y filosóficamente la Masonería tiene sus raíces en los conocimientos pitagóricos y se asemeja en su estructura a
las comunidades místicas de esos sabios de la antigüe-dad.
Además de las comunidades pitagóricas hubo otras como la de los Esenios entre los hebreos, de la cual se descubrió hace
pocos meses en un monasterio cerca del río Jordán, una rica y valiosa biblioteca. Los Esenios difieren mucho de la Masonería,
aunque también tenían una relación mística con ella. Formaban una de las tres sociedades judaicas del tiempo de Cristo:
Saduceos, Fariseos y Esenios, se agrupaban en los alrededores del Mar Muerto, vivían en común bajo la presidencia de
ancianos. Juan Bautista fue esenio y d ice que Jesús fue iniciado entre ellos. La verdad es que los últimos hallazgos de libros
esenios del tiempo de Cristo, nos hacen pensar en una relación directa entre el Cristianismo y _los Esenios, tanto más que los
libros esenios hablan de un Maestro de la Virtud, presidente de los esenios, que fue crucificado y cuya resurrección era
esperada. Se esperan, pues, revelaciones sensacionales para cuando sean descifrados todos los libros encontrados en las
cavernas de las riberas del Mar Muerto, en el lugar llamado Qumram.
-- 57 –

En Egipto existieron los Terapetas, que eran esenios judío-egipcios. En la India estaban las comunidades místicas de los
Gimnosofistas, palabra que significa sabios desnudos y vivían prácticamente sin ropa alguna; son los precursores de los yoguis
1Vloral, material y espiritualmente se despojaban de toda riqueza y pasaban practicando la meditación, quitándose las ilusiones
de .la mente y persiguiendo la verdad. En algunos aspectos tenían relación con la Masonería porque buscaban la verdad sin
poner límites a su investigación.
Finalmente recordemos que todas las comunidades místicas antiguas tenían, razgos de unidad comunes: iniciación, señales,
toques, palabras, tolerancia, investigación de la verdad, secreto, reuniones, perfeccionamiento del individuo, influencia en la
sociedad a través de los iniciados perfectos, etc. Eran por lo tanto verdadera Masonería, pero con otros nombres y bajo otros
aspectos.
Recordemos la imponente figura de' Apolonio de Tiana, predicando la doctrina de Pitágoras por todo el Cercano Oriente.
Pensemos en las comunidades pitagóricas con sus cuatro grados de 'Oyen-te. Purificado, Perfecto y Epifanía correspondientes
a nuestros grados de Aprendiz, Compañero, Maestro y Maestro perfecto. Somos los continua-dores de los sabios maestros,
honremos su memoria.
— 58 --

LECCION III
 LOS TEMPLARIOS Y LOS ROSACRUCES
En estas modestísimas lecciones, procurando responder a la pregunta ¿DE DONDE VENIMOS?, comencemos por recordar
los misterios de la antigüedad y hablemos de las comunidades místicas de los hebreos, los egipcios, los griegos y los indúes.
Ahora dedicaremos nuestra atención a dos importantes órdenes: los Templarios y los Rosacruces.
Entre los años 1118 y 1119, hace ya más de 81.0 años, nueve• caballeros franceses se reunieron en la roca de Kube-es-Sakrá,
más o menos donde estuvo el templo de Jerusalém, y allí fundaron la Orden Militar del Templo con un solemne juramento.
Reunidos en círculo con sus espadas desnudas, prestaron los tres votos de pobreza, castidad y obediencia. Solamente dos
de estos deja-run sus nombres a la historia: Hugo de Payen primer Gran Maestre, y Godofredo de Santo Omer. Para ser
admitido entre los Caballeros del el candidato pasaba por diversas pruebas recibía una iniciación progresiva a medida que
subía en la escala de los grados. En cada grado prestaba nuevo juramento; la recepción era acompañada de ceremonias
misteriosas y dé fórmulas simbólicas. El capítulo se reunía en una iglesia
-- 59 —

casi siempre por la noche y el candidato esperaba afuera. El Presidente mandaba tres veces a dos hermanos a preguntar al
aspirante si quería ser admitido en la milicia del templo. El aspirante respondía tres veces, pedía pan y agua y se declaraba
enteramente de acuerdo con la vida del caballero templario; entonces era introducido al templo. El Presidente le hacía la
siguiente exhortación: "Las reglas de nuestra orden son severas, te expondréis a grandes sufrimientos y peligros, cuan-do
penséis reposar será preciso que estéis despierto, tendréis que soportar fatigas cuando imaginéis ir a descansar, sufriréis
hambre y sed exactamente cuando quisiéreis comer y beber tranquilamente, tendréis que ir a un país cuando desearías ;r a
otro". Terminado este discurso, el Presidente interrogábale así: ¿Queréis ser Caballero? ¿Sois sano de cuerpo? ¿No sois
esposo ni novio? ¿No pertenecéis a otra orden? ¿No tenéis deudas imposibles de pagar? Cuando el candidato había
respondido a ese cuestionario prestaba el juramento.
Los Templarios pueden ser considerados como los más antiguos masones. Escuchemos el juramento que prestaban: "Juro
consagrar mis palabras, mis fuerzas y mi vida a la defensa de la creencia en la unidad de Dios y de los misterios de la fe.
Prometo obediencia al Gran Maestro de la Orden. Siempre que los enemigos invadieren nuestras tierras, atravesaré los mares
para libertar a mis hermanos. Con el esfuerzo de mi brazo socorreré a la Iglesia y a los reyes contra los príncipes enemigos.
Combatiré a mis enemigos aunque fueran más de tres y no huiré jamás".
Esa fraternidad creció en número con el ingre-so de numerosos elementos de las mejores familias europeas. Comandando
esa lucida juventud Hugo de Payen, el Primer Gran Maestro, volvió a Pales-tina con el propósito de defender el reino cristiano
de Jerusalem contra los guerreros mahometanos. Los Caballeros del Templo se distinguieron en numerosos combates como
los de Ascalón, San Juan de Acre, Tiberíades, Ptolomaida, Mansurá y muchísimos otros. Terminado el período de las Cruzadas
vinieron al occidente y se dedicaron al es-t lidio• de la Ciencia de los Santuarios. Se enriquecieron y fueron los banqueros de
occidente y esto fue su ruina.
--60-
Felipe el Hermoso, rey de Francia, y Clemente V resolvieron apoderarse de las riquezas de los Templarios y levantaron un
proceso calumnioso e infame contra la Orden, condenaron a muerte a su gran Maestro Jacobo Burgundo de Molay y a
muchísimos caballeros. En la hoguera ese hombre heroico intimó al Papa y al Rey para que comparecieran ante Dios dentro
de un año y tres meses Dios oyó al Gran Maestro y así se cumplió. Entre tanto la Orden había determinado desde hacía algún
tiempo que sus caballeros ingresaran a las organizaciones de Albañiles Libres. Eran hombres instruidos e ilustres, sus grados
eran ocho: Iniciado, Iniciado del Interior, Adepto, Adepto de Oriente, Gran Adepto del Águila Negra de San Juan, Postulante,
Adepto Perfecto del Pelícano y Caballero de la Guardia Interior.
Para dar lugar a esos valientes caballeros, la Masonería instituyó los grados 19, 20, 23, 24, 25, 91, 97 y 29. Así fue incluido el
Rito Templario el Rito Escocés Antiguo y Aceptado. Esos ocho grados, llamados templarios, enseñan los siguientes principios
que los masones deben defender: libertad de instrucción, lucha contra la ignorancia y las supersticiones, defensa de los
derechos y deberes del pueblo contra el despotismo y la dictadura, igualdad social, defensa de la libertad de pensamiento y
de la soberanía del pueblo. Por esto comprenderán mis queridos hermanos cómo la Orden del Templo contribuyó a la
organización masó-nica y continúa figurando en ella.
- 61 —
La Fraternidad de los Rosacruces fue una sociedad, formada en la Edad Media, cuya benéfica in-fluencia se ha hecho sentir
hasta nuestros días. Esos valerosos filósofos escribieron sus enseñanzas de los gnósticos y de la kabala antigua. Fue
organizada por Christian. Rosenkreutz que vivió 105 años, gracias a un elixir que descubrió y le prolongó la vida. Data esta
sociedad de mediados del siglo XV y tuvo muchos y variados nombres durante su existencia. En el siglo XVIII se unió con los
Albañiles Libres, con la Masonería, y en ella in-fluyeron favoreciéndola y transformándola de operativa en especulativa,
haciendo que la Masonería abandonase completamente la construcción mate-rial y solamente se ocupase de la construcción
espiritual.
Veamos las principales enseñanzas y doctrinas rosacruces, tan íntimamente ligadas a la Masonería: juraban guardar al máximo
el secreto, no revelándolo nunca a los profanos; se especializaban en la medicina; eran piadosos y sabios, combatían los
errores y la hipocresía, procurando levantar la conciencia de los pueblos. En su vasto programa de ciencia experimental
constaba lo siguiente: transmutación de los metales, es decir, el paso de un me-tal a otro que solo ha sido logrado ahora, en
la Era Atómica, en los laboratorios donde se desintegran los átomos. Fabricación del Elixir de Larga Vida, que no ha sido
lograda todavía, pero que con las sulfas, los antibióticos, la cirugía moderna y los progresos de la higiene, ya la edad media
de la vida aumentó treinta años más. La clarividencia de 'lo invisible, esto es, ver a través del espacio, de los cuernos opacos,
lo que ha sido logrado con los rayos X, la Fluoroscopía, la televisión, la transmisión (le imágenes por radio a largas distancia.
Poco a poco la humanidad avanza en la ruta .que trazaron los Rosacruces.
- 62 —
Cuando las persecuciones y los despotismos hicieron huir a los Rosacruces, ellos buscaron abrigo en los Templos Masónicos,
donde hubo necesidad más tarde de organizar una escala de grados, para distribuir en ellos a estos filósofos. Permaneciendo
asentada sobre la base simbólica de los tres grados universales —Aprendiz, Compañero y Maestro los grados del 15 al 18 del
Rito Escocés Antiguo y Aceptado recuerdan a los masones actuales la decisiva influencia rosacruz en el establecimiento de la
jerarquía en nuestra organización. Los grados capitulares son los que recuerdan mejor a los Rosacruces: 15-Caballero de
Oriente, dedicado a formar el espíritu del patriota y a recordar a los grandes héroes nacionales; 15-Príncipe de Jerusalem,
dedica-do a conmemorar a los grandes hombres que die-ron su vida por el bienestar de la humanidad; 17Caballero de Oriente
y de Occidente, para recordar los masones su deber de trabajar por el desenvolviento de la Orden en todo el mundo; 18-
Caballero o Príncipe Rosa Cruz, especialmente destinado a conmemorar el triunfo de la luz sobre las tinieblas, de la Verdad
sobre la Ignorancia. Une la creencia en el Eterno con la ciencia.
Comprendemos, por lo tanto, que además de los misterios de la antigüedad y de las comunidades místicas, también la Orden
del Templo y la Fraternidad Rosacruz contribuyeron para la formación de la Masonería Moderna. Las tradiciones templarías y
rosacruces entraron en nuestra Orden y por esto la Masonería se volvió la intérprete y heredera natural de todas esas
tendencias filosóficas diferentes.
— 63 —
Resumiendo las enseñanzas originarias de los Templarios y de los Rosacruces, veámoslos tales como existen hoy dentro de
los grados masónicos: el masón debe declarar la guerra a la pereza y tomar parte en todo lo que pueda establecer un gobierno
democrático, porque el despotismo es el mayor ene-migo de la libertad; instrúyanse los hermanos para que gobiernen
sabiamente. La humanidad está cansada de ser explotada intelectual y materialmente, en la Masonería existe luz para la
inteligencia y caridad verdadera y real. El hombre sólo se hace fuer-te por medio de la fe y de la esperanza, sólo ama a sus
hermanos por medio de la caridad. El masón tiene por obligación combatir por la verdad, por el honor y la caridad, importándole
poco si vencerá o no. Los masones que gobiernan la Orden son sola-mente los primeros entre sus iguales. El masón debe ser
siempre tolerante, porque solamente el Gran Arquitecto conoce todos los secretos del Universo, que vienen de Él y volverán a
Él. El Gran Arquitecto es la Causa Primera, creó el Universo y la Fuerza Suprema, el Pensamiento Supremo, la Inteligencia
Infinita, la Sabiduría Infinita. Conserva todo por su omnipotente voluntad y mediante la ley de la armonía. Todas las creencias
son legítimas porque tienden a llevar al hombre hacia el Eterno. El Eter-no manifiesta su poder y su fuerza en el Universo que
El creó. Esta es la maravillosa contribución de los Templarios y de los Rosacruces para el contenido filosófico de la Masonería.
— 64 —
LECCION IV
CAMARA DE REFLEXIONES
La Cámara de Reflexiones es el lugar, general-mente subterráneo, donde son introducidos los pro-fanos que han sido
aceptados para ingresar a la Masonería y que constituye la primera parte de su iniciación. En esta sala, gabinete, cámara o
cuarto, hay numerosos objetos que recuerdan la muerte y tienen por objeto hacer meditar al recipiendario sobre el poco valor
de este mundo material. En esa disposición de su espíritu escribe sus pensamientos y su última voluntad. En general, el
gabinete de reflexiones tiene, o debería tener, la forma de una gruta o caverna sombría, porque simboliza el centro de la tierra,
el seno de la naturaleza material de dónde venimos y a donde volveremos y nos disolveremos transforma-dos en polvo. El
profano es introducido en este lugar sombrío para que aprenda y entienda bien que morirá y nacerá de nuevo, que iniciará una
vida !lleva y por lo tanto deberá morir para la vida profana, deberá comenzar a vivir de otro modo purificado y regenerado. La
Cámara de reflexiones es el lugar donde está siendo purificado 'por el elemento fierra, a fin de iniciar una nueva vida.
Esta primera parte de la iniciación viene de los Misterios Egipcios, en los cuales los candidatos permanecían aislados, rodeados
de momias y emblemas fúnebres, para que reflexionaran sobre el paso que iban a dar. Ya tuvimos la oportunidad de estudiar
los Misterios de la Antigüedad, las Comunidades Místicas, los Templarios y los Rosacruces, y estamos principiando a
comprender mejor la valiosa contribución que ellos dieron para la formación y desenvolvimiento de nuestra Venerable
Institución.
- 65 –
Un gran número de profanos, lo mismo que muchos masones, piensa que la finalidad de esta cámara o gabinete es amedrentar
a los candidatos y por eso truenan y protestan estos -últimos de esa ceremonia inicial, que es verdaderamente la clave de la
iniciación. Desgraciadamente, la mayoría de las modernas cámaras no despiertan aquellos profundos y temerosos
pensamientos que pudieran hacer que el recipiendario modifique su modo de pensar y tome más en serio su vida. Todo debe
infundir respeto y meditación en ese lugar destinado a purificar su espíritu, a alterar los pensamientos de un alma, llevándole
a comprender la nada de las cosas terrenas y el gran valor de las espirituales.
Corresponde al hermano Experto o Preparador conducir convenientemente la ceremonia, a fin de que no tenga nada de
ridículo. Todo en la cámara debe ser limpio, aseado, pero caracterizando bien el interior de una gruta o caverna y con la
comodidad indispensable para que el recipiendario pueda meditar tranquilamente. No olvidemos que ese gabinete es el
verdadero punto crítico de la iniciación, es allí donde el recipiendario pasa por una crisis interior. Si no hubiera una verdadera
meditación, si fuera hecho todo de modo que el graduante comprenda perfectamente el poco valor de las cosas profanas y el
gran valor del mundo espiritual a donde él entrará, entonces no podrá ser nunca un verdadero iniciado. El aislamiento del
Gabinete de Reflexiones, sus paredes negras y su silencio, representan un período de obscuridad y de silencio para el alma,
que por medio de la meditación y de la concentración en sí misma, comienza a preparar un progreso efectivo y consciente que
más tarde mostrará sus efectos en la vida del masón.
— 66 —
En este gabinete hay numerosos emblemas de la muerte y una lámpara sepulcral y en sus negras paredes están escritas
algunas frases, destinadas a experimentar la fuerza del alma del recipiendario, .11 firmeza y su voluntad para continuar y
progre-r hasta ingresar en la Orden. Después él deberá X presar todo esto en el pliego triangular, es su testamento.
Por desgracia en nuestras cámaras de reflexiones todo se reduce a contestar unas cuantas preguntas que en la gran mayoría
de veces el recipiendario no entiende bien o las comprende mal, cuando la verdadera finalidad no es solamente contestar las
preguntas, sino hacer que el graduante exprese su opinión sobre ellas y escriba su última voluntad, su testamento. ¿Por qué?
porque es bajo la influencia del aspecto y condiciones de la cámara que él dirá I: verdad. Es preciso y conveniente que se le
entregue una hoja de papel en blanco, con líneas, donde deberá escribir en pocas palabras sus últimas voluntades exactamente
como si fuera a morir. Expresara sus últimos pensamientos y sus últimas disposiciones. Por ese documento escrito en
momentos que su mente sólo habla la verdad, tendrá la lo-mi conocimiento casi perfecto de los verdaderos i; n tientos del
profano. El hermano Experto le que declare si hay alguien a quien tenga que I ir perdón, si tiene en su conciencia alguna cosa
que le oprima, para que se desahogue y quedé en paz. Así será un verdadero testamento.
-- 67 –
Al ingresar vendado en la cámara, será despojado el recipiendario, de todos los valores y metales que lleva, que el Experto
recoge y guarda cuidadosamente, y se le quita parte de sus ropas. Simbólicamente significa esto que está reducido al estado
de completa desnudez y desamparo, lo mismo que estaba Adán, el primer hombre simbólico, y que el recipiendario se
desprende de todas las cosas que le fueron útiles para llegar al estado en que se encuentra, pero esas cosas materiales, esos
valores secundarios, serán un obstáculo para su progreso y por eso él se despoja simbólicamente de todo.
Desde que entra al seno de la madre tierra enteramente desnudo, despojado de todas las cosas materiales, deberá comprender
que no puede tener ya confianza alguna en los valores exteriores del mundo. El recipiendario encontrará de allí en adelante
dentro de sí mismo los verdaderos valores, los valores o virtudes morales y espirituales. Ya no podrá aceptar sin discusión
creencias y opiniones, abrirá caminos hacía la Verdad discutiendo todo y usando siempre su razón como guía.
Todo este simbolismo no significa que el recipiendario tenga que abandonar todo lo que le pertenece y que adquirió con sus
esfuerzos y como premio de su trabajo, el significado verdadero es la instrucción del profano en el sentido de que no debe dar
gran valor y. una importancia principal a las cosas materiales, ni debe volverse esclavo de ellas. Significa que por encima de
todas las consideraciones materiales o utilitarias de las riquezas y de los bienes del mundo, el iniciado debe afianzar su fidelidad
a los grandes principios y doctrinas que emanan de la razón y que están fundamentadas en la Ley Natural. La finalidad del
Gabinete de Reflexiones es libertar al individuo de los lazos que lo atan, falsedades, inmoralidades y calumnias, que so-lamente
sirven para impedir el progreso del espíritu.
— 68 —
En resumen, la Cámara de Reflexiones es el lugar donde el individuo, despojado de todas las consideraciones y respetos
humanos, entra para quedar en presencia de su conciencia solamente, viendo el fin material de la vida; allí su alma se abre a
la ver-dadera realidad en la que él no tuvo tiempo de pensar cuando 'estaba en el mundo profano.
Queridos hermanos, el Gabinete de Reflexiones es el seno de la tierra y es allí que se verifica la gestación para el nuevo
nacimiento; allí un hombre muere para" dar nacimiento a un hombre nuevo con nuevas ideas, nuevos sentimientos y una nueva
manera de pensar y de actuar. Esta cámara es la par-te más importante de la iniciación sin restarles méritos a las otras. Si
alguien pasa por esta cámara y no renace jamás, no será un verdadero masón, sino que un masón que no comprendió el gran
alcance de su transformación, porque en realidad no llegó i transformarse, siguió siendo profano.
Es preciso que las logias den la máxima atención al gabinete y que no sea solamente un lugar apropiado, sino que esté
revestido de todas las condiciones necesarias para impresionar al recipiendario y hacerle pensar. No debe ser un lugar que dé
miedo o pavor. La Biblia dice que Cristo pronunció estas palabras: EL QUE NO NACIERE DE NUEVO NO EN-TRARA AL
REINO DE LOS CIELOS, y uno de los sabios hebreos que estaba allí, llamado Nicodemus, respondió: "por ventura podrá un
hombre volverse embrión nuevamente para volver a nacer?" Cristo reafirmó con energía: SI NO NACE DE NUEVO NO
ENTRARA AL REINO DE LOS CIELOS.

— 69 —

Apliquemos a nuestro caso las sabias palabras del Divino Maestro. Sabemos con absoluta certeza que él fue uno de los
grandes iniciados y maestro de los esenios y, por lo tanto, a la luz de la Masonería sus palabras adquieren un nuevo y vibrante
sentido. Quieren decir que el individuo que no se somete a la iniciación no entra al seno de la tierra, no muere para todo su
pasado y no se convierte a una vida nueva; no entrará al reino de la Luz, de la Verdad y de la Justicia, no será un justo, no
será un iniciado poseedor de los secretos de la vida y de la muerte.
Cristo dijo: "destruid ese templo y en tres días lo reedificaré". A la luz de la Masonería, que emana del Delta Sagrado,
entendemos estas palabras así: pasaré tres días en el seno de la tierra y resucitaré, seré un nuevo, habré renacido. El
recipiendario permanece en el seno de la madre tierra, en la Cámara de Reflexiones que es un templo simbólico, y renace a
la "vida luminosa de la Masonería.
70 ----
LECCION V
EL TESTAMENTO DEL CANDIDATO
Dáse el nombre de Testamento a una fórmula usada en las iniciaciones masónicas, con el doble fin de dar a comprender al
graduante que él morirá para el mundo profano y nacerá para una vida nueva, donde conocerá los más íntimos sentimientos
de su alma. El testamento con las preguntas que en él se formulan para que el recipiendario las con-leste por escrito, cuando
está en el Gabinete de Reflexiones, tiene enorme importancia.
Las antiguas tradiciones de nuestra Orden, mu-chas veces vistas con desprecio, mandan que este testamento sea escrito en
una hoja de p: en forma de un triángulo equilátero, estando gritas en tina de sus caras las siguientes preguntas.
¿Cuáles son los deberes del hombre para con Dios?
¿Cuáles son los deberes del hombre para con sus semejantes?
¿Cuáles son los deberes del hombre para consigo mismo?
Esta hoja así preparada es presentada al recipiendario por el hermano Experto cuando lo ha introducido en él Gabinete de
Reflexiones, advirtiéndole que medite el significado de cada pregunta y las conteste en el mismo pliego en la forma que sus
— 71 —
sentimientos le sugieren. Cuando este pliego triangular ha sido llenado y firmado, lo recoge el Experto y lo lleva ante el
Venerable Maestro, quien lo lee, o ruega al hermano Orador que lo haga, a fin de que todos los hermanos presentes puedan
conocer los sentimientos del graduante y formular las observaciones y preguntas sobre las respuestas da-das, que deben ser
anotadas por el V M y después repetidas al recipiendario, para que quede bien claro su pensamiento. Terminada la
ceremonia de iniciación, el hermano Experto llevará ese pliego en la punta de una espada y lo quemará entre columnas en
presencia del neófito, ocasión que aprovechará el V M para explicarle el significado y objetivo de aquel testamento. Ella
es la forma que determina la tradición de nuestra Augusta Institución, forma muy desvirtuada y modificada en la actualidad por
la prisa con que a veces se realizan en muchas logias estas ceremonias, para llegar lo más pronto posible a la Sala de
Banquetes.
Ese documento es un testamento iniciático, muy diferente del testamento profano que es una prepa-ración para la muerte física
del individuo, mientras que el testamento simbólico es la preparación para una vida nueva, ya que en esos momentos un
hombre nuevo nacerá. El testamento escrito en el Cuarto de Reflexiones es un emblema de la muerte del hombre profano y
del nacimiento de un hombre iniciado, quien será su propio ejecutor. En aquellas preguntas que ha respondido con ideas
profanas está resumido un programa de vida que él deberá realizar. Allí se establece una triple relación con el G A D U
, con sus semejantes y con él propio. Principiará una nueva era en sus relaciones con el Supremo Creador, con los demás
hombres y consigo mismo. Este testamento simbólico es un reconocimiento a los deberes que el graduante asumirá.
- 72 —
La primera obligación o deber del recipiendario se expresa en la pregunta ¿qué deberes tiene el hord-1) re para con Dios? y
es una relación o deber que tiene que ser establecido interiormente, en la con-ciencia del hombre, pero no sobre la base de
creencias o prejuicios. No se pregunta al graduante si id cree o no en Dios ni cuál es su credo religioso o filosófico, porque
para la Masonería todas las creencias son equivalentes, son otros tantos aspectos de la ver-dad, que se encuentra oculta
debajo de las diversas ideas religiosas. Es solamente la verdad la que interesa a la Masonería y no las diversas formas con
que ella se presenta, a través de las interpretaciones religiosas y filosóficas. Lo que es de importancia vital, y por eso la
Masonería lo exige rigurosamente, es nuestra íntima y directa relación con el Principio de Vida Universal, sea cual fuere el
nombre que se le dé. Es una relación que se establece en la conciencia por sobre la inteligencia y la mentalidad común de la
vida. Así, directamente en relación con la divinidad, en que se manifiesta aquella LUZ "que ilumina a todo hombre que viene a
este mundo", como dice el Libro de la Ley Sagrada de los cristianos. Por eso al preguntar al recipiente cuáles son sus deberes
para con Dios, la Masoneria sabe inmediatamente lo que él piensa de ese mismo Dios y puede aceptarlo o rechazarlo, por lo
que el V M , después que se han leído las preguntas y sus respuestas, pregunta a los otros obreros si están satisfechos
con tales contestaciones. Generalmente éstas son satisfactorias, pero hay casos que la logia rechaza al candidato por sus
respuestas cuando no satisfacen los ideales de nuestra Orden. Si un candidato respondiera a la primera pregunta —"ninguna
obligación tengo para con. Dios porque no reconozco su existencia" daría motivo para no aceptarlo.
-- 73 —
El segundo deber se expresa por las obligaciones para con los otros hombres. A veces se usa la palabra prójimo que significa
lo mismo. Esta pregunta tiene perfecta relación con las otras, porque e recipiendario ya se reconoció dependiente del Principio
de la Vida Universal, reconoce que tiene deberes para con 'esa fuerza superior y también que tiene deberes para consigo
mismo, como parte d ese Todo Universal, parte consciente y viva. Ahora reconoce que tiene obligaciones para con sus
semejantes, prójimos o hermanos, individuos que son como él partes, partículas o elementos vivos y conscientes del Gran
Todo, de la Potencia Divina, del Gran Arquitecto del Universo. Decimos que esa pregunta depende de las otras porque él sé
reconoce ya como partícula de la divinidad, implícitamente reconoció también las otras partículas que son los otros hombres,
seres conscientes y vivos como él originados de la misma fuente, del mismo Foco d Luz y Amor. Viendo en todos los hombres
hermanos suyos, proyecciones de la divinidad, manifestaciones del amor, de la sabiduría, de la bondad de Principio Universal
de Vida; el hombre es en realidad un hermano gemelo de todos los otros hombres sin distinción de raza, de color o de cualquiera
otra diferencia física, interna o externa.
El tercer deber u obligación se expresa por la pregunta ¿qué deberes tiene el hombre para consigo mismo? Esto no es más
que una consecuencia de la primera, porque habiéndose ya reconocido que tiene deberes para con el Principio de Vida
Universal, reconoce que no es más que una expresión individual de Él. Por lo tanto los deberes del hombre
-- 74 --
para consigo mismo son volverse cada día una ex-presión más perfecta del G A D U , que está en él manifestado por
las fuerzas del espíritu. Compete al hombre usar sus capacidades y posibilidades para volverse perfecto y así reconocerá que
está empleando bien todos los dones que le fueron dados por el Supremo Hacedor. El hombre necesita hacerse a sí mismo
utilizando las fuerzas puestas a su disposición dentro de su ser. Con sus pensamientos, su voluntad y su mentalidad, el hombre
puede realizar maravilla. s. Al responder a aquella pregunta, el recipiendario manifiesta su comprensión de lo que piensa
deberse a sí mismo y deja a la logia que le juzgue. Por sus respuestas puede la logia saber si el graduante tiene posibilidades
para llegar a ser un" obrero capaz de comenzar la construcción de sí mismo, porque en la Masonería todo es una continua
construcción. El hombre se hace a sí mismo con sus nuevos pensamientos y ajusta su mente, os actividades y su voluntad a
los intereses superiores de la divinidad, bien claros en el orden y la perfección del mundo.
La fraternidad nace de este principio divino: "iodos los hombres son hermanos y tienen el mismo Padre Común". El Gran
Arquitecto del Universo a todos saca de la nada y los mantiene en la existencia por ley natural, impuesta a todo el universo,
las diferencias son apenas de orden físico, mental o moral y provienen del grado de adelanto del ser humano. Contribuyamos,
por lo tanto, al progreso mejoramiento del hombre, para cumplir una parte del plan divino de confraternización y de armo-í de
todos los hombres, a través de la acción consciente de los mismos, para que se entiendan y conozcan como criaturas dotadas
de voluntad y de determinación individual propia.
— 75 –

Al responder a las preguntas el recipiendario da a la logia una oportunidad excelente de compro-bar si él merece o no ser
admitido en la gran fraternidad que es la Masonería. En resumen este es el gran valor simbólico, asombroso por cierto, de las
preguntas hechas al graduante en, la Cámara de Reflexiones.
Hay una última parte en el pliego triangular que se refiere a la última voluntad del candidato, donde él escribirá con entera
libertad lo que desea que se haga en el caso de no salir con vida de las pruebas por las que pasará, pero ahora no existen los
peligros mortales que antes había en las iniciaciones antiguas, sin embargo, la tradición deberá ser conservada con cariño
porque pone al individuo en actitud de reflexionar sobre la muerte y de expresar únicamente la verdad en las dispersiones
finales de su corazón. Así la logia quedará capa-citada plenamente para juzgar los valores moral, intelectual y mental del
candidato que espera fuera del Templo el honor de ser recibido. Con la pre-tensión de participar en los augustos misterios
masónicos, él deberá abrir su alma en una amplia confesión, para que sus hermanos lo comprendan perfectamente y puedan
confiar en él. Todas las logias deben desarrollar la ceremonia del Testamento de acuerdo con su antigua significación y
grandeza.
76
 LECCION VI
PREPARACION DEL CANDIDATO
Antes de que el candidato sea admitido .en el templo, tiene que pasar por una preparación física, que corresponde a la
preparación moral que el hizo en el Gabinete de Reflexiones; deben ven-dársele completamente los ojos, colocarle una cuerda
al cuello, descubrirle el lado izquierdo del pecho, la rodilla derecha y el pie izquierdo.
El hecho de que hoy muchas logias no cumplen con esas sabias tradiciones de nuestra Augus-1a Institución, nos muestra
cómo ha decaído y se ha perdido casi por completo el significado de esa preparación simbólica, a tal grado que son muy pocos
Tos masones capaces de explicar los misterios de ella.
La venda que se coloca sobre los ojos no es solamente un símbolo de su estado de ignorancia ceguera mental, sino de su
incapacidad para percibir la verdadera luz. Esa venda que le impide ver es una continuación de la obscuridad de la Cámara de
Reflexiones y una ceguera voluntaria, un aislamiento de las influencias del mundo exterior y de la luz ilusoria de los sentidos
corporales, que no permiten que se tenga una percepción ritual de la verdad.
La cuerda que lleva en el cuello es un símbolo
- 77 —
del cordón umbilical que liga al niño con su madre, indica el lazo que lo une con la madre Tierra, de donde salió cuando emergió
de la Cámara de Reflexiones. Esta cuerda significa también el estado de esclavitud en que se encuentra el recipiendario, pues
es esclavo de sus pasiones, sus errores, sus prejuicios, supersticiones y temores. Nos enseña que él aún está ligado a las
tinieblas del mundo profano y que el yugo o dominio de la fatalidad pesa aún sobre él. Tiene también la cuerda otro admirable
significado: revela el de-seo, la voluntad y la capacidad que tiene el recipiendario de libertarse de ese yugo de esa esclavitud
del mundo profano, porque está aceptando voluntariamente las pruebas por las que pasará y está desde ahora cooperando
con sumisión y voluntad para librarse de todo su pasado tenebroso, para llegar a ser un hombre nuevo. También es un símbolo
de las dificultades que el recipiendario encontrará en su vida masónica donde no será todo un camino de rosas y flores, sino
de du-ras y ásperas cuerdas que lastimarán su cuerpo pero que él, venciendo tales obstáculos y dificultades, avanzará en la
senda del progreso y de la perfección.
Finalmente, el recipiendario está con el pecho izquierdo, la rodilla derecha, y el pie izquierdo desnudos, apenas calzado éste
con una simple sandalia. Esto forma un triángulo de desnudez que constituye el tercer elemento de esa preparación simbólica
. Es un sacrificio voluntario de todo lo que no es absolutamente necesario y que podría constituir un obstáculo al progreso del
recipiendario. Él se despoja de todo convencionalismo, de to-da la hipocresía y fingimiento que impiden la sincera manifestación
de sus sentimientos y aspiraciones más profundas. Está con el lado izquierdo del pecho descubierto porque es el lugar del
corazón, en donde están sus deseos .más íntimos. Tiene desnuda la rodilla derecha indicando que se des-teja del orgullo
intelectual, pues es con ella que se arrodilla e inclina delante de la Sabiduría del Eterno. Por lo tanto se despoja de la hipocresía
v del orgullo, simbolizando esto con la desnudez del pecho y de la rodilla.
78-
El recipiendario aleja de sí toda la insensibil edad moral, esto es, llegará a ser un hombre escrupuloso, lleno de moralidad,
sentirá la delicadeza de los sentimientos morales. La insensibilidad o fuerza que él tenía le impedía practicar la virtud. Simboliza
el alejamiento de esa falsa po-i ción la desnudez del pie izquierdo, donde hay más sensibilidad y donde están los grandes
nervios que llevan directamente al cerebro el dolor isado por las espinas o las agudas piedras del camino. Será de ahora en
adelante un hombre (me sentirá la moralidad, tendrá delicadeza de sentimientos, podrá andar con los pies desnudos para
mostrar que solamente andará por el camino recto y no por los atajos o desvíos de la existencia, que muchas veces llevan al
individuo a la perdición y al vicio.
Esa maravillosa preparación del recipiendario nos muestra que la sinceridad de sus aspiraciones, la primera condición de su
progreso en la vida masónica. Es preciso que él tenga un verdadero espíritu de humildad, que no debe ser confundido con un
falso desprecio de si mismo ni con la ignorancia de las divinas posibilidades que en ella se encuentran. La humildad es el
reconocimiento de que siempre hay mucho que saber y conocer, que somos perfectos, pero no impone al individuo
— 79 —
que se desprecie a sí mismo, pues él es realmente una partícula de la divinidad . Pero no debe el hombre engañarse o
encubrirse su propia personalidad, debe buscar el progreso en un plano superior. Así, libre de pensamientos inferiores y de las
miserias terrestres, abrirá su alma, su corazón y su inteligencia a aquellas realidades que son la finalidad de toda iniciación.
Esa finalidad, que los esenios llamaban el reino de los cielos, es la paz perfecta del alma y el dominio pleno del espíritu sobre
todas las tendencias e impulsos materiales del individuo. El pie es el órgano para andar, con el pie izquierdo se principia la
marcha, por lo tanto indica el cuidado con que el recipiendario deberá dar cada paso en su nueva vida, ya que tendrá que
vencer innumerables obstáculos y pruebas, y durante toda su vida encontrará inmensa cantidad de tropiezos. El pie descalzo
o desnudo es altamente simbólico, nos enseña que debemos andar con el máximo cuidado para no tropezar tanto, pues la
vida humana está llena de incontables miserias y solamente el hombre cuidadoso podrá vencerlas.
Por todo eso recordemos el asombroso simbolismo de la preparación del recipiendario: después de su preparación moral, en
el gabinete hace su preparación física simbólica. Los ojos vendados, la cuerda al cuello, el pecho, la rodilla y el pie desnudos.
Es un triángulo simbólico de desnudez; pecho, rodilla y pie. Nada ve porque tiene vendados los ojos, estaba en las tinieblas y
continúa en ellas. No ha visto la LUZ, pero está siendo preparado para que la vea. La venda en sus ojos simboliza su ignorancia
y también que él ahora solamente ve para adentro del mundo espiritual. La cuerda muestra que él es esclavo de sus errores,
está ligado al mundo profano por ese cordón -
---- 80 —
umbilical, pero vencerá y cortará esas ligaduras, será libre y progresará en la senda de la virtud, aunque sea penoso el camino.
Su pecho está desnudo porque está demostrando simbólicamente los deseos de su corazón e intentando purificarlos. Su rodilla
también está desnuda porque ya no tendrá más orgullo, se arrodillará ante el altar de la sabiduría y recibirá la luz masónica,
que lo guiará por los vertiginosos caminos del pensamiento. Su pie está desnudo porque él caminará con cuidado y no
tropezará, será un masón prudente y digno. Con esa preparación maravillosa, el recipiendario está en condiciones de tocar a
la puerta del Templo para buscar, encontrar y pedir la Luz de la Verdad. Buscad y encontraréis —Llamad y se os abrirá—
Pedid y se os dará, dice el Libro Sagrado de los Cristianos. (Mateo - VII - 7).
— 81 —

LECCION VII
LA PUERTA DEL TEMPLO Y LA ENTRADA DEL RECIPIENDARIO
En esta séptima lección trataremos del admirable simbolismo de la entrada del candidato a través del pórtico augusto del
Templo de la Sabiduría. Buscad y encontraréis, tocad y se os abrirá, pedid y se os dará. El que busca la Verdad y pide la Luz,
será satisfecho cuando se abra la puerta a donde llama el recipiendario. La puerta del Templo es un símbolo natural de toda
iniciación y por ella ingresa el aspirante a una nueva vida. Atravesar la puerta del Templo después de la preparación moral y
física, sufrida en la Cámara de Reflexiones es una de las más importantes ceremonias de la iniciación.
El recipiendario toca a la puerta como tocaría a una casa profana porque no conoce la manera correcta de llamar, lo que
produce alarma en el interior del Templo. Llama el recipiendario una segunda. Y una tercera vez, pero .siempre des-ordenada
y profanamente, y por tres .veces se pro-duce la misma alarma en el interior... Esta triple serie de llamadas en la puerta es
altamente simbólica y corresponde a una admirable fórmula que resume toda la iniciación. En la primera llamada el candidato
BUSCA la Verdad, que encontrará en el interior del Templo, en la segunda pide esa Luz, que le será dada más tarde. ¡Qué
admirable simbolismo tan a menudo olvidado en nuestras logias!!!...
-- 82 ----
Con los ojos vendados entra por fin el recipiendario al Templo y siente inmediatamente en el pecho desnudo la aguda punta
de una espada (o del compás). Esto viene a recordarle que ahora que no ve puede sentir y que ese. sentimiento pro-viene de
la Luz que le servirá de guía y le llevará de progreso en progreso hasta alcanzar la verdad. El no ve, pero el sentimiento de
que está en el camino de la Verdad se materializa en el Experto que le acompaña. Este hermano representa al Maestro que
ya recorrió el camino, le conoce y por eso puede acompañar y guiar al recipiendario. Más tarde ya no necesitará de guía
material porque ya no tendrá la venda en los ojos y su guía será la Luz de lo Alto. Ahora es como un ciego y necesita ser
llevado de la mano.
Su guía responde por él cuando en la puerta preguntan: ¿quién es el temerario que se atreve a querer forzar la entrada de
este Templo? El Experto dice: es un profano que, deseoso de conocer la verdadera luz, viene humildemente a pedirla porque
es libre y de buenas costumbres. Ser libre y de buenas costumbres es la condición preliminar que se exige del profano para
ser admitido en la Mazonería. Esto es absolutamente necesario a todo progreso moral 'y espiritual, a todo adelanto en el camino
de la verdadera luz, en el camino de la Verdad y de la Virtud. El candidato debe ser libre no en el sentido de no ser físicamente
un esclavo, sino en el sentido simbólico de no estar esclavizado por los prejuicios, los errores, los vicios y las pasiones que
embrutecen y dominan al hombre.-
- 83 –
 Debe ser de buenas costumbres, esto es, un individuo que oriente su vida por las cosas justas, por las ideas elevadas, sin
formar parte con aquellos que no tienen moral ni honestidad. Para que al recipiendario le sea abierta la puerta del Templo y
pueda llegar a las dos puertas simbólicas de los dos Vigilantes, donde llamará durante sus viajes, y finalmente a la tercera
representada por el V M donde también llamará, necesita ser un hombre completamente libre y de costumbres
perfectamente sanas. Si él está esclavizado, fanatizado por cualquier creencia o partido, no será un hombre libre y jamás podrá
ser un buen masón. Si tiene costumbres deshonestas, si está habituado a beber, a jugar, a maltratar al Prójimo, a vengarse, a
intrigar, a hablar mal, a ridiculizar a los demás, nunca podrá ser buen masón, porque éste es un hombre libre que piensa por
sí propio, que no se entrega atado de pies y manos a cualquier creencia o doctrina, sino que busca siempre la verdad. El
masón es un hombre que debe presentarse como modelo de virtudes y de bondad, no podrá ser por consiguiente una criatura
llena de vicios y de costumbres perversas.
La punta del instrumento que le apoyaron sobre su corazón es a su vez un símbolo de la ver-dad, que se manifiesta dentro de
nuestro espíritu, hiere, por decirlo así, nuestra inteligencia, brilla en el interior de nuestro pensamiento y es una chispa aguda
que comienza a penetrar en el candidato desde que pasó por la puerta del Templo, porque él ya quedó aislado de las influencias
exteriores, ya tiene sus ojos cerrados para el mundo profano y está ahora enteramente dedicado a objetivos superiores, busca
la Verdad y la Luz . La verdad es corno una espada aguda que penetra como un rayo en nuestro espíritu cuando estarnos
preparados para recibirla, como está el recipiendario.
--- 84 ----
Resumamos el asombroso simbolismo de la puerta del Templo y la etnrada del graduante: la puerta es un símbolo complejo
en la iniciación, es un templo reducido a las dos columnas y una viga. Pasando por ella el recipiendario moral y físicamente
preparado, habiendo llamado tres veces con golpes desordenados buscando la Verdad, pidiendo la Luz y solicitando la entrada,
será recibido en las otras tres puertas: la de la Belleza donde se le dejará pasar porque es hombre libre y de buenas
costumbres; la de la Fuerza donde recibirá la orden de ser purificado por el agua, símbolo de la pureza de la vida masónica; y
finalmente llegará a la puerta de la Sabiduría, donde oirá la orden de ser purificado por el fuego a fin de que nada le quede del
mundo profano. Se presenta libre y de buenas costumbres y podrá ser recibido por hombres libres, por masones libres, por
constructores e idealizadores de un mundo nuevo, libre de prejuicios y de ideas absurdas del mundo profano, hombre perfecto
de costumbres sanas, honestas y decentes, despojado de los vicios . Es el graduante conducido por el hermano Experto, que
ya recibió la punzada de la verdad, simbolizada en la punta acerada de una espada. Bella y sublime entrada digna de la
grandeza de su objetivo sublime.
El hombre que aspira a los beneficios de la iniciación masónica, es presentado al Templo después de haber pasado por la
Gran Puerta Simbólica, tras la cual quedó el mundo profano, con una venda en los ojos símbolo de la obscuridad mental y
moral en que se encuentran todos los profanos,
— 85 —

aun los más ilustrados intelectualmente. No está este hombre ni desnudo ni vestido simbolizan-do su inocencia, porque acaba
de salir del seno de la Madre Tierra. Se le ha despojado de todos sus metales, significando así su pobreza y que se ha
despojado de todos los vicios. Empieza a caminar con dificultad porque no ve, necesita de la ayuda de un guía que después
ya no necesitará pues hará uso de sus ojos y podrá andar con seguridad: Está este candidato sumergido en las tinieblas y
pidiendo la luz, necesitará morir para el mundo profano y resucitar para el mundo masónico; será sometido a pruebas físicas
y morales, las primeras para apreciar su fuerza y resistencia y las segundas para conocer las fuerzas de su espíritu y de su
mente.
Es para realizar la gran obra de iniciación que el recipiendario se presenta a la puerta del Templo. Pasará por ella como pasó
por el Gabinete de Reflexiones, teniendo un sincero deseo en su corazón: encontrar la verdad y la luz. Helo finalmente delante
del Templo de la Sabiduría, helo delante del Arca Santa de los misterios indecibles. El recipiendario toca desordenadamente
por tres series de golpes, es el hombre salido del mundo pro fano que se aproxima a un nuevo mundo deslumbrante de luz.
Esa puerta permite entrar para recibir la Luz Intelectual. El recipiendario ve delante de él, cuando. le quitan la venda, un templo
material y utensilios o hen. amientas de los cuales se servirá para su instrucción y trabajo. Recibirá su salario en la columna B
, que significa Fuerza, energía, elementos indispensables para adquirir la Virtud, la Gloria, a través del sacrificio de todo lo
que fue su pasado profano. Una vez traspuesta esa puerta,
—86--
corta todas sus relaciones y ligaduras con el mundo profano lleno de falsedades y prejuicios y le permitirá abrir sus ojos para
comprender y apreciar la Fuerza Oculta que produce el descenso del espíritu al interior de la materia o, como dicen los filósofos,
esa energía luminosa que vuelve vivos a todos los seres animados por ella y que, al mismo tiempo, produce la belleza
inconfundible de los espacios infinitos.
Pero, ¿cuál es esa verdad que el recipiendario busca y que tantos sacrificios desea saber, cuál es esa luz que tan ansiosamente
quiere encontrar y por la cual suspira sujetándose a tanto sacrificio? Lo que él busca es la Razón Suprema de todo, la luz que
pide afanosamente es una claridad que le permita ver y conocer los secretos del universo, que le permita comprender esa
Verdad que es la meta de toda la vida del hombre consciente de su alta dignidad. Es a través de la ciencia en progreso
constante y de la meditación consciente que él alcanzará los límites de la inteligencia. La Verdad no se le dará repentinamente,
sino en forma gran-dual pues de lo contrario quedaría deslumbrado y medio muerto. Para llegar a ese resultado él toca a la
puerta del templo y entra en el sagrado recinto. Sus deseos serán satisfechos, encontrará la Verdad y recibirá la LUZ, porque
buscó, llamó y pidió.
—87—

LECCION VIII
LOS TRES AÑOS DEL APRENDIZ
Los tres años del Aprendiz, los tres años de su marcha, los tres viajes de la iniciación, son símbolos maravillosos del triple
período o de las tres etapas de su progreso en los estudios masónicos. Esos tres períodos de estudio del Aprendiz tienen
también otros profundos significados que pueden ser relacionados así: a las artes fundamentales —Gramática, Lógica y
Retórica—, a los tres primeros números —1, 2 y 3—, y a las tres cualidades indispensables del masón —Sabiduría, Inteligencia
y Voluntad—. Esas cualidades inseparables deben existir bien equilibradas en el masón para que sea un hombre perfecto, un
iniciado real y no simplemente un individuo que pasó por la iniciación y no aprovechó nada de ese formidable medio de
regeneración.
Los tres años del Aprendiz son la expresión del ternario que puede ser encarado en múltiples formas. Veamos algunas de las
más interesantes para el estudio que estamos haciendo: los tres pilares o columnas de las logias masónicas, las Luces del
Taller —Sabiduría, Fuerza y Belleza— representadas por el Venerable Maesiro y los Vigilantes, colocados en Oriente,
Occidente y Sur, siguiendo las tres puertas del Gran Templo de Salomón en
—88----
Jerusalem. Significan el Delta Sagrado o triángulo compuesto de tres líneas y tres ángulos y forman un todo completo e
indivisible. Son el símbolo de la Divinidad que los cristianos adoran con el nombre de Trinidad, los hindúes con los nombres
de Brahama, Vichny y Shiba; simbolizan también las tres virtudes teologales Fe, Esperanza y Caridad.
Los tres arios del Aprendiz recuerdan los tres años de preparación y estudios que Zoroastro impo-nía a sus discípulos o
iniciados. Durante ese período se reunía con ellos en sesiones que comenzaban a medio día y terminaban a media noche con
un ligero refrigerio.
El Aprendiz representa al hombre en su infancia, en los primeros siglos de la civilización. Se sienta en el Norte porque no
puede soportar de frente el Sol de la Verdad. Debe -dedicarse al conocimiento de las letras, esto es, a los principios o elementos
simbólicos. Cuando el Aprendiz afirma que no sabe leer ni escribir, dice apenas una ex-presión simbólica que significa que no
sabe leer ni escribir el LENGUAJE DE LA VERDAD, pero está estudiando y ejercitándose en ello, deletreando letra por letra
las verdades fundamentales sobre las que se basan los conocimientos Masónicos.
En los tres años de aprendizaje simbólico, el prendiz debía conocer las tres lenguas sagradas: Sánscrito, Hebreo y Egipcio;
tres religiones: Bra-hmanismo, Budismo y Cristianismo, y tres ciencias ocultas: Kabala, Magia y Hermetismo.
En los tiempos antiguos, cuando la Masonería era corporación de picapedreros libres y solamente en algunas ocasiones se
ocupaba del desenvolvimiento espiritual; los aprendices pasaban realmente tres años como mínimum trabajando, en compa-í
a de los Maestros, hasta aprender perfectamente el arte de construir. Solamente entonces podían pasar a la categoría de
Compañeros de los Maestros, después de haber demostrado sus habilidades prácticamente.
— 89 —
Actualmente esos tres arios son simbólicos, el tiempo es contado diversamente en las distintas jurisdicciones; en algunas el
Aprendiz recibe, cinco lecciones completas en cinco, tenidaá realizadas en cinco días distintos y debe asistir a una ceremonia
de iniciación; hay una variación de este tiempo entre tres meses y tres años o más. Pero en muchas logias, aunque, estos
períodos sean respetados, muchas veces han promovido al segundo grado á hermanos qué no han recibido instrucción
suficiente, no han asistido a una ceremonia de iniciación ni han demostrado de modo real que conocen, aman y sienten la
Masonería. Debería haber un acuerdo entre todas las Potencias para restablecer los antiguos tres años de aprendizaje, a fin
de restaurar el sentido educacional de la Orden, así se evitaría el hecho común de que llegaran a los cargos elevados dé las
logias, masones poco entrenados y poco conocedores 'de los principios y del espíritu de la Masonería. Un estudio cuidadoso
de la situación masónica périnitiría verificar que esta opinión está fundamentada y su aplicación traería grandes beneficios.
Simbólicos o 'reales, los tres años del Aprendiz están destinados cualquiera que sea el período, a educar y formar a los
masones; durante este tiempo él irá familiarizándose con los símbolos, con la terminología, masónica, se ejercitará en el trabajo
y aprenderá a la par las obligaciones y los deberes; también conocerá la simbología de los números. El número 1 representa
al individuo aislado, al sol, la luna y al hombre (o la mujer). El número 2 representa la luz y la sombra, el bien y el mal, la
felicidad y la desgracia, el hombre y la mujer.
— 90 —
El número 3 es la trinidad divina y otros aspectos a los, que ya nos referimos. En síntesis el 1 es el todo, la unidad; el 2 es la
dualidad, la división, la sepa-ración de los dos opuestos; el 3 es el número de la luz, de la perfección. El Aprendiz acrecentará
sus conocimientos recordando siempre los tres deberes primordiales del hombre: para con Dios, para con sus semejantes y
para consigo mismo. Los tres números —1, 2; y 3— según el decir de Pitágoras, resumen todo el misterio. supremo de los
seres, de to-do lo que existe. Así es como ese filósofo se expresa:
"La Unidad, el número 1, es la Ley de Dios (el Principio de Todas las cosas); el 2 ha nacido de la división (es el duplicado de
la Unidad), representa lo que Dios creó fuera de sí, es la Ley del Universo, la Ley Natural que rige a todos los seres, inclusive
al hombre; la Trinidad —el número 3— (resultante de la colaboración de las dos fuerzas divina y humana) es la evolución, la
Ley de la Evolución Natural, a la que llamamos generalmente Ley de la Naturaleza Creada".
Los antiguos egipcios decían: la Mónada (1) creó una Diada (2) y ésta prodiijo la Triada (3) que brilla en todo el Universo.
Tres años simbólicos debe el Aprendiz pasar estudiando y meditando, oyendo, obedeciendo y aprendiendo antes de poder ser
elevado o ascendido. En su marcha vacilante él da tres pasos que le recuerdan los tres viajes que realizó durante la ceremonia
de su iniciación, el primero simbolizando su infancia, su incapacidad para proveer a sus necesidades, entrañando un concepto
triple —la conservación, la educación y la instrucción— representa la solidaridad como base de la familia; el segundo viaje
- 91 —
representa su juventud, la edad de la instrucción y del desenvolvimiento de su inteligencia, es un ¿segunda manifestación de
la solidaridad humana el tercer viaje simboliza la edad madura, la edad de la amistad, porque en ese período de su vida e
hombre necesita del amparo de sus amigos, es lE tercera manifestación de la solidaridad humana. Los tres años del Aprendiz
recuerdan todo esto.
Durante ese tiempo el Aprendiz debe estudia/ tres artes —Gramática, Lógica y Retórica—. ¿Cómo? De un modo práctico y
eficiente. Procurando primero hablar bien su idioma y hacerse entender claramente y sin falsedades de intención por sus
hermanos —esa es la Gramática real— hablar sin errores y sin ocultar sus pensamientos. Aprender a pensar de modo correcto,
reflexionando bien sobre todo lo que oye y sobre todo lo que lee, para no decir o hacer cosas erradas ni actuar de modo per-
judicial para él y para los demás. Tal es la función de la Lógica, que es el arte del bien pensar, de raciocinar bien. Finalmente,
debe el Aprendiz ejercitarse en el arte de decir y hablar no sólo correcta-mente y diciendo cosas bien pensadas y bien
raciocinadas, sino decirlas de modo elegante, armonioso y agradable, dé manera que los que escuchan no se cansen sino
que, por el contrario, deseen que continúe hablando. Esta es la función de la Retórica que es el arte de hablar elegante,
armoniosa y claramente. Esas son las artes que el Aprendiz debe procurar aprender, ejercitándose constantemente en la logia
y poniendo en ello toda su voluntad.
En esos tres años simbólicos procurará conocer las tres grandes religiones de la humanidad: el Brahamanismo, el Budismo y
el Cristianismo, porque conociéndolas tendrá una idea de los sentimientos que han animado a todos los grandes reformadores
--- 92
de la humanidad. Esto no quiere decir que dejará de instruirse en las otras grandes religiones del mundo, pues prácticamente
todas siguen estos principios: o son panteístas como el Brahamanismo (todo es Dios y Dios es todo lo que existe) o son
materia-listas reduciendo todo a la nada, al aniquilamiento, como el Budismo (el fin de todo es la nada, el Nirvana) o son
espiritualistas como el Cristianismo que admite que el alma humana sobrevive fuera del cuerpo al terminar la vida corporal.
Esta es la razón de dicho estudio.
Concluimos, pues, llamando la atención a todos nuestros queridos hermanos sobre la necesidad absoluta de hacer la
permanencia del Aprendiz en su columna más larga y su trabajo más intenso. Que los tres años simbólicos sean transformados
en tres años reales y así nuestra Augusta Institución sea cada vez más brillante gracias a la observancia de las tres leyes:
Divina, Universal y Evolutiva.
--- 93 ---
 LECCION IX y X
LA ESCUADRA Y EL COMPAS
La Escuadra y el Compás, separados o unidos en la forma acostumbrada como símbolos masónicos, pueden ser considerados
bajo diversos aspectos que serán objeto de esta lección, bajo el punto de vista de la filosofía iniciativa.
El Compás es móvil y el vértice de su ángulo está dirigido hacia Oriente, en cambio lá Escuadra es fija y su vértice está dirigido
hacia Occidente. El ángulo recto de la Escuadra es un símbolo magnífico de la firmeza, de la estabilidad, de la inmutabilidad
de las leyes físicas que gobiernan la naturaleza material que está hacia occidente, reinado de las tinieblas. El Compás se abre
y gira en círculos, es el símbolo perfecto de las leyes que gobiernan el mundo espiritual, leyes perfectas y sublimes, está hacia
Oriente, punto original de la luz que allí reina soberana.
Los dos lados de la Escuadra representan los dos principios opuestos que se encuentran siempre a la distancia de 90 grados,
que corresponden a la cuarta parte de la circunferencia. El Compás es un símbolo de la unidad de lo Eterno y la expresión de
la continuidad, porque gira siempre en círculos infinitos que nos recuerdan las órbitas espaciales de los astros, la forma de
rotación de todos los innumerables mundos creados por el Gran Arquitecto del Universo, supremo principio creador de lo que
existe.
- 94 —
La Escuadra es un símbolo, de la unión del espíritu con la materia y nos muestra cónio el espíritu está extendido, en todo el
ser humano, en su cuerpo físico aparentemente esclavizado a él, pues no es móvil y no puede desligarse de él. El espíritu para
libertarse debe purificarse y dirigirse hacia el centro donde se encuentra la luz suprema irradiada por el Eterno.
El ángulo recto de la Escuadra es un símbolo de lucha, de los contrastes y oposiciones que reinan en el mundo profano, nos
muestra la oposición, la desarmonía reinante en el mundo material, fuera y dentro de nosotros, pero también nos enseña esa
oposición de sus dos lados, es un ángulo ,recto que se resuelve en armonía, porque la firme unión de los dos lados forman la
unidad interior que debe existir en el corazón del hombre; esa paz, esa tranquilidad, que emanan de su seguridad y de la fijeza.
Unida al Compás la Escuadra completa un círculo perfecto del interior del cual brota la luz que ilumina los espíritus, que
deslumbra las mentes y arrebata los corazones.
Es, en síntesis, la unión del mundo espiritual con el mundo material, bajo la protección y la égida del G A D U Principio
de la Vida Universal. La Escuadra y él compás unido representan el dominio del mundo por dos principios: el espiritual y el
material. Son la figura de una ley, de una realidad superior, Abierto el Compás, en un ángulo de 60 grados, unido a la Escuadra
de 90 grados, representa la victoria del ternario (sexta parte de la circunferencia), es decir, .el dominio del cielo sobre la tierra,
del espíritu sobre la materia.
— 95 —
La Escuadra tiene muchas interpretaciones: es el símbolo de la rectitud, por lo cual constituye la joya del cargo de Venerable
Maestro, ya que éste debe ser el masón más recto y justo de su logia. Junto con el Compás que representa el cielo, hacia
donde el iniciado debe dirigir constantemente sus mi-radas, la Escuadra representa la tierra a la cual es-tamos encadenados
todos por las pasiones. En los tres grados simbólicos la Escuadra es el símbolo completo de la rectitud masónica y de la
materia. El Aprendiz usa la Escuadra constantemente: en su marcha la traza en cada paso, en el signo gutural su brazo forma
una escuadra con su cuerpo, lo mismo que sus pies y los dedos de su mano derecha, y al saludar también forma una escuadra.
La Escuadra es una de las Luces Mayores del Altar de la logia, es una de las joyas móviles. Figura en todos los grados de la
Masonería, porque es uno de sus símbolos más elocuentes.
El Compás, otro de los símbolos más conocidos y usados en nuestra Augusta Institución, representa la justicia con que deben
ser medidos los actos de los hombres y por eso está sobre el Vol de la Ley junto con la Escuadra. Constituye otra de las
Luces Mayores del Altar, llamadas también aunque impropiamente Grandes Luces de la Masonería (solamente el libro podría
llevar esta última denominación). Significa que debemos regular nuestra conducta, nuestro sistema de vida, conforme a las
enseñanzas y principios Masónicos, que son fuentes de bien y de verdad.
La Escuadra enseña al masón que debe desprenderse de los afectos a lo material, a las cosas terrenales, y aspirar a una
unión cada vez más perfecta con su celeste origen, porque el verdadero masón es aquel que está siempre entre la Escuadra
y el Compás y, en consecuencia, es un hombre justo y recto
-- 96 —
Hay una gran variedad de compaces: el común que sirve para trazar círculos, el de puntas finas usado para medir distancias
exactas, el cruzado para dibujar pequeñísimos círculos, el de reducción cuyas ramas se cruzan y son reguladas por un tornillo,
el esférico de ramas curvas para calibrar caños, el de proporción formado por dos reglas milimetradas, destinado a medir
proporciones. el compás de tres ramas, interesantísimo, que sirve para reproducir relieves, el de vara que no tiene eie pero
cuyas ramas deslizan sobre una regla graduada. Además, hay otros tipos de compás, más o menos semejantes a los descritos.
En la Masonería usamos únicamente el compás de círculos; pero todos los otros tienen para el masón el mismo significado: el
símbolo de la justicia, de la medida exacta, del espíritu.
De la Escuadra también hay una gran variedad: escuadra común, doble en forma de T, de láminas de acero que usan los
carpinteros, albañiles, cante-ros y otros, para trazar óvalos, para ajustar cantos, de nivel, graduada y otras, pero todas
derivadas de la escuadra de noventa grados, que la Masonería conserva como símbolo de la vida recta y digna y de la tierra o
materia.
El Vértice del Compás está dirigido hacia el Oriente porque la rectitud viene del Oriente, de la Luz, de la fuente suprema de la
Verdad. Aquel que se guía por los elevados principios de la razón, que busca la verdadera sabiduría, que no se deja llevar por
las ilusiones y las mentiras del mundo profano, que tiene conciencia de las altísimas concepciones masónicas, ese recibirá
cada vez más luz. Aquella punta acerada (la del Compás), que sintió en el pecho
97 --,
desnudo cuando ingresó a nuestra Institución Augusta y prestó el solemne juramento con la mano cuesta sobre las Luces
Mayores (Libro, Compás y Escuadra), que le ligó para siempre a nuestra Orden, es semejante a un contacto eléctrico que le
transmite fuerza y energía para repeler el mal, para huir de los consejos de los impíos, de los perversos, cuyo único objetivo
es destruir la personalidad humana, sacrificar la libertad de los individuos y reducirlos a meros autómatas o esclavos.
El Compás es el creador de los círculos siempre iguales y perfectos, rigurosamente equidistantes del centro. La circunferencia
es la figura máxima de la Divinidad que está siempre en expansión, creando constantemente nuevos cielos y nuevos mundos.
Es el símbolo del Principio Creador, siempre en acción. Los mundos se forman y se destruyen para dar origen a otros mundos,
pero el Eterno queda inalterable, inmutable, en el centro de todo porque es la Sabiduría Infinita, Poder Infinito, Gloria Infinita,
es el Supremo Arquitecto del Universo. Dentro del círculo eterno vivimos todos y nos movemos, giramos siempre dentro de
ese círculo que el Creador trazó desde toda la eternidad. El Compás nos recuerda esa espantosa verdad: que estamos dentro
del círculo de la Razón, de la Ley Natural y Divina que el Ser Necesario implantó en nuestros corazones; si saliéramos de ese
círculo estaríamos perdidos sin encontrar la realidad, esa realidad interior nuestra que constituye nuestro propio Yo. Seriamos
como locos vagando sin rumbo ni destino determinado.
La Escuadra completa la ligadura del espíritu con la materia, tiene su vértice hacia Occidente —el lado negativo— para las
tinieblas, para el mundo de los instintos nos purificados. Nos enseña que
— 98 —
fuera de la escuadra y del compás, esto es, fuera de la justicia, de los sentimientos de equilibrio y de equidad para con nuestros
hermanos, fuera del re-conocimiento del valor de la ciencia y de la razón, solamente encontraremos obscuridad y tinieblas.
Para que sea/nos siempre perfectos debemos permanecer continuamente entre la Escuadra y el Compás. Allí estaremos,
gravitando alrededor del Principio Eterno, generador de Luz, de Verdad, del Universo, de la Justicia, de la Razón, del Equilibrio,
del Bien y del Amor.
-- 99 —
LECCION XI
LOS TRES PUNTOS
Los tres puntos masónicos constituyen el más simple y perfecto emblema del ternario, es decir, todo el ser, idea o fuerza
simbolizados por el número TRES.
Tres es Dios, vida, verbo, luz. Esto es lo que expresa la palabra trinidad: el padre, el hijo y el Espíritu Santo. El Padre es la
vida y representa el poder, la fuerza, la expansión. El Hijo es el verbo, la palabra creadora, la forma de lo que existe. El Espíritu
es la luz, no es la sustancia, el ser re-presentado por el Padre, ni la inteligencia en forma activa representada por el Hijo, sino
es la propia sustancia, la propia inteligencia y la luz producida por el Poder Infinito y por la Inteligencia Infinita en acción, es,
por lo tanto, infinita también. El 3 es el equilibrio perfecto entre la vida, el verbo y la luz.
Escogiendo ese símbolo, junto con la Escuadra y el Compás como distintivos de la Orden, los primeros masones dieron prueba
de profunda sabiduría y del conocimiento del valor oculto de sus significados. Los tres puntos sintetizan admirablemente la
Unidad, la Dualidad y la Trinidad, esto es, el grandioso misterio del origen de todos los seres. Esos tres puntos están
armónicamente juntos como Unidad
- 100
en Oriente, como Dualidad en Occidente y como Trinidad en las tres Luces de la Logia; en las Luces Mayores y en las tres
Luces Menores del Altar, en las herramientas que son necesarias para comprender esas verdades que nos indican todos los
símbolos y emblemas que adornan nuestras logias.
El punto superior, que está hacia lo alto, representa el primer Principio de lo Absoluto, de lo Único, es el Gran Arquitecto en el
cual existen original-mente todas las cosas. Es la Suprema Realidad invisible que produce todos los seres. En él están
resumidos el pasado, el presente y el futuro. Los dos puntos inferiores son la imagen de la Dualidad, los mismos dos principios
representados por las dos columnas situadas a la entrada del Templo y de cuya reunión resultan todos los fenómenos del
Universo. Cada uno de ellos es un aspecto, diverso del punto superior, de la unidad primera y originaria, que es siempre
indivisible aunque se muestre en esa doble manifestación. El punto superior corresponde al Oriente y los dos inferiores al
Occidente, pero los tres forman uno solo. Uniendo esos tres puntos tendremos un triángulo equilátero, símbolo perfecto del
equilibrio y de la verdad que resultan del conocimiento de la vida, del verbo y de la luz. Cuando el neófito ve en Oriente el Delta
Luminoso, ve el emblema del ser, de la vida, en el centro del cual están las letras que forman el nombre sagrado de Aquel que
ES, que existe porque SI, el Eterno, cuando el iniciado abre sus ojos a la Luz de la Verdad, no encuentra en el Templo nada
que se relacione simbólicamente con el número UNO, porque nada de lo que es sensible puede representar la unidad. Nosotros
solamente podemos percibir la diversidad, la complejidad. Natía es simple en la naturaleza, todo es complejo. La
---101---

Unidad reside en lo íntimo de cada ser. Todo ser pensante tiene la íntima convicción de que es UNO, de que es una unidad,
aunque esté formado complejamente por innumerables partes. Todos nosotros sentimos claramente que somos UNOS, que
en nuestra manera de pensar, sentir y actuar procedemos como única persona.
Los tres puntos son también para el masón el símbolo de lo justo, de lo bello, de lo verdadero, emblemáticamente
representados por las tres luces del candelabro que está sobre el trono del Venerable Maestro. El neófito debe enorgullecerse
de poder agregar a su firma los famosos tres puntos que representan también tres cualidades indispensables al masón:
sabiduría, voluntad e inteligencia. Esas cualidades son absolutamente inseparables y deben existir en equilibrio perfecto en el
masón. Si no hay armonía en esas tres cualidades tendríamos un ser monstruoso. Si él fuera solamente voluntad,. será un
bruto repleto de energía pero sin amor, sin inteligencia, pues la sabiduría implica el amor' y el conocimiento. Si fuera solamente
inteligencia, sería un egoísta, un inútil, que solamente cuidará de sus intereses, despreciando todo lo que no satisface a su
orgullo. Pero si fuera solamente sabiduría o amor, sería también estéril porque sus grandes y generosas aspiraciones no serían
puestas en acción por la voluntad ni controladas por la inteligencia y por la razón. En conclusión, el verdadero masón es el que
posee el equilibrio, cuya armonía está representada por los tres famosos tres puntos: Sabiduría, Voluntad e Inteligencia.
El Ternario, es también motivo de profundos pensamientos para el iniciado, porque representa el nacimiento, la vida y la
muerte, siempre presentes. en el espíritu del masón que así normará su vida
— 102—
en, el recto cumplimiento del deber. Simboliza la infancia, la juventud y la vejez, tres fases terribles de la vida humana en la
que el hombre tiene diferentes obligaciones que cumplir y para las cuales deberá estar preparado. No olvidemos la familia:
Padre, Madre e Hijo, trinidad perfecta cuyo equilibrio mantendrá también equilibrada a la sociedad y cuyo desequilibrio será
fatal para la colectividad humana.
Simbólicamente el Maestro de la Virtud expiró a las tres horas de la tarde, después de 33 años de vida. Tres son los enemigos
siempre presentes que procuran devorar al verdadero masón: la profanidad, la superstición y la carnalidad. La primera
escarneciendo los misterios de la Orden, la segunda invirtiendo el sentido de nuestros símbolos y la última volviendo al hombre
semejante a los animales e incapacitándolo para los pensamientos eleva-dos y nobles.
El Maestro de la Virtud sufrió tres violentas caídas en su marcha hacia el Calvario, a fin de mostrar a sus secuaces que el
hombre, aun el más perfecto, no resistirá el peso de su cruz si no cuenta con el auxilio y la ayuda de sus hermanos. Eso viene
a probar la necesidad de nuestra más completa unión para que podamos servir de cirineos los unos a los otros.
Los tres puntos recuerdan al masón que él está formado de elementos animales, vegetales y minerales y que para conservar
el equilibrio de su naturaleza no debe olvidar que ante el mineral y el animal hay un intermedio indispensable, el vegetal, que
debe predominar en su alimentación y en su vida, para que pueda gozar de salud y de equilibrio mental. Los tres puntos
enseñan al masón que debe ser un hombre con Fe, un hombre con Esperanza
- 103 –
y un hombre con Caridad. Fe en la eterna supremacía de la Verdad, Esperanza en el cumplimiento de las leyes supremas que
rigen el Universo y Caridad en el amor para con sus hermanos, hijos del mismo Padre Supremo, originados del mismo Principio
Creador. Los tres puntos nos recuerdan también que el masón es un constante protector de la mujer que es Madre, Esposa e
Hija, representan-do los tres estados de su paso por el mundo y sirviendo siempre a la creación, formación y sustentación de
la raza humana. Recuerdan también las tres razas fundamentales de la humanidad: la blanca, la negra y la amarilla que, a
pesar de su conformación diferente, expresan también la unidad fundamental del ser humano, proveniente del mismo Principio
Creador, resultado' del mismo poder cósmico que circunda el Universo.
Esos tres puntos también nos recuerdan la flaqueza humana, que uno de los discípulos del Maestro de la Virtud, Pedro, lo
negó tres veces jurando hasta que no le conocía; así tendrá el masón la certeza de que por grande que sea ésta no podrá
nunca confiar totalmente en la naturaleza humana que está sujeta a innumerables flaquezas, debiendo por esto fortificar
constantemente su voluntad y su virtud. Los tres puntos nos recuerdan constantemente los deberes que tenernos para con
Dios, para con nuestros semejantes y para con nosotros mismos. De aquí se desprende el código moral de nuestra vida que
así será siempre digna y correcta, pues Él es el modelador del hombre virtuoso, bueno y prudente.
Y así llegarnos al final de esta breve pieza de arquitectura sobre uno de los más extensos símbolos de nuestra Augusta
Institución, pero siempre recordemos que ellos nos enseñan la totalidad de nuestros deberes y al mismo tiempo la gloria de
nuestra vida de masones.
- 104
Tres logias formaron en los tiempos modernos la primera Gran Logia, y dieron origen a todo el mundo masónico de la
actualidad. Los tres puntos son, por lo expuesto, un emblema maravilloso ca-paz de ejercer sobre nuestros espíritus la más
fascinante atracción, elevando nuestro pensamiento hacia la Triada Suprema que sustenta el Universo.

—105---
LECCION XII
LAS HERRAMIENTAS DEL APRENDIZ Y SU OBRA
El trabajo de desbastar y después pulir las piedras fue el primer trabajo de los hombres primitivos. Aún hoy podemos ver en
los museos de paleontología las hachas más antiguas de la humanidad, simples astillas de piedra bruta o pulida, que fueron
empleadas por los primeros hombres para su defensa y para cazar. Con el progreso de la civilización, el hombre perfeccionó
su trabajo y mejoró sus herramientas o instrumentos y principió a construir albergues y monumentos, para lo cual inventó o
descubrió varias herramientas útiles como la Regla, el Mazo y el Cincel.
La primera recta, que dividió en partes y le sirvió para medir y para trazar líneas rectas y, posiblemente, para dibujar ángulos
y triángulos. Con el Uso de la Regla estableció el orden, el método, una guía segura para lograr el objetivo inmediato de su
trabajo; pudo hacer cortes regulares para lograr que una pieza se adaptara más o menos exactamente con la otra y que todas
las piezas se adaptaran ordenada y Simétricamente. La Regla simboliza el orden.
El Martillo o Mazo es el emblema de la voluntad y el símbolo de nuestro poder interior, de la
---106
fuerza de nuestra alma, de nuestro espíritu. Representa el esfuerzo que 'hacemos para realizar una obra, cuando pretendemos
poner en práctica nuestras ideas y realizar alguna cosa más perfecta. Sin la fuerza de voluntad nada se puede hacer porque
el hombre sin voluntad propia es un ser inútil, lle-vado por los caprichos de los otros y haciendo siempre cosas que él mismo
no desea y que muchas veces son enteramente contrarias a su verdadero interés, a su progreso y a su desenvolvimiento. Esos
dos instrumentos —Regla y Mazo— son verdaderas maravillas simbólicas, que figuran constantemente en todos los trabajos
masónicos para llamar la atención de los masones sobre la rectitud de los procedimientos que resultan de la reflexión, para el
uso de la voluntad en el sentido de llevar adelante los ideales de perfeccionamiento y progreso individual y colectivo.
El Cincel, escoplo o formón, es la herramienta que determina la justa aplicación de la sabiduría, pues ninguna obra de arte
podrá hacerse en piedra sin la acción bien orientada del Cincel, con la fuerza del Mazo, dentro de las líneas rectas y perfectas
trazadas por la Regla.
El Aprendiz también conoce la Escuadra que fundamentalmente representa la rectitud de nuestra inteligencia y de nuestros
juicios, que permite al hombre asegurarse de que está actuando correctamente o no. Del mismo modo que la Escuadra sirve
para verificar si la piedra está perfectamente trabajada, con sus ángulos y aristas perfectos, para que pueda servir en la
construcción del edificio, así también el hombre que emplea debidamente su inteligencia y su razón, el juicio inteligente de las
cosas que ve, que oye .o que lee, puede proceder -con acierto en todos los momentos de su vida.
--1.07 —

El Aprendiz marcha simbólicamente por medio de escuadras, en línea recta, cada paso que da es una escuadra, lo que indica
que en cada paso de su vida, en cada acción que ejecute, ha de usar la escuadra de su inteligencia para tener un juicio exacto
y que su comportamiento sea siempre lo mejor posible.
La Escuadra, gracias a su ángulo recto y a su propia constitución por dos reglas perfectas, tiene una función eminentemente
orientadora, directora: expresa claramente la dirección que debe tener el trabajo de desbaratar la piedra tosca y que todo se
haga con armonía y regularidad. Por eso la Escuadra es la joya del Venerable Maestro, ya que éste es el director de la logia y
en él recae la responsabilidad en la orientación correcta de los trabajos.
El Mazo es el emblema de la fuerza, y justamente es el símbolo del Primer Vigilante en su sitial, que está colocado en Occidente
para revisar los materiales ya aprobados y juzgados convenientes y permitir su conducción a los sitios destinados. Dirige su
columna y está atento a todo lo que pasa en el taller en las columnas y en occidente.
El Cincel produce la belleza final de toda obra, realiza los ornamentos o adornos y hace resaltar las figuras, por esto es el
símbolo del Segundo Vigilan-te que cuidadosamente examina los materiales admitidos por el Guarda Templo y, al estar seguro
de que son buenos, les da el paso hacia el Primer Vigilante, quien los enviará a su lugar.
La actividad combinada de las tres herramienta-tas es indispensable para la realización de la gran obra que se propone llevar
a cabo la Masonería en el mundo y, simbólicamente, puedan desarrollar un trabajo realmente fecundo y provechoso. Todo el
simbolismo de nuestra Augusta Institución se basa
---108
en la construcción, la finalidad de la Masonería es construir. Muchos profanos y aun muchos masones piensan que la finalidad
de nuestra Orden es la beneficencia y. el socorro mutuo, pero si así fuera sería tontería rodearse de tanto misterio, de secreto
y de tantas formilidades en los trabajos simbólicos. Bastaría que actuara como cualquiera asociación caritativa: colectar dinero
y en seguida distribuirlo en efectivo o en objetos o en artículos. Así lo hacen otros centros como las congregaciones de San
Vicente de Paúl y las hermandades religiosas de caridad. Pero la Masonería es mucho más que una asociación de
beneficencia; ella, sobre todo, es constructora. Cuando se declara que adoptamos los rituales de la Masonería Simbólica o
Azul, de Antiguos, Libres y Aceptados Masones en el principio de Constituciones y Estatutos, estamos prácticamente diciendo
que nuestro objetivo es la construcción de una inmensa y grande obra, que es la finalidad de la Masonería Simbólica y los
Masones Antiguos, Libres y Aceptados son, muy por encima de todo, obreros que trabajan para levantar una obra gran-diosa
de acuerdo con un plano aún más grandioso.
Ahora que conocemos las herramientas del Aprendiz y que sabemos que su obra es una construcción, investiguemos
brevemente cual es la aplicación que él podrá hacer de esas enseñanzas en su vida práctica y real, en la sociedad a la que
pertenece y de la cual es parte integrante. La construcción masónica es un templo, ese templo somos nosotros mismos, la
obra que debemos realizar es la construcción de nosotros mismos para que nos trasformemos de piedras brutas y llenas de
defectos en piedras pulidas y a escuadra, que puedan servir para el monumental edificio que es la sociedad humana, justa,
perfecta, fraternal y libre.
—109 ---
— 110
su inteligencia la fuerza de su voluntad —simbolizada por el Mazo— y la habilidad de su raciocinio —simbolizada por el Cincel—
pudiendo así hallar el mejor camino que es siempre el de la Prudencia, del Valor, de la Justicia y de la Temperancia.
En la sociedad profana el Aprendiz, iluminado por la Luz de la Logia, será un hombre correcto, agradable, sin intolerancias ni
rudezas, un hombre justo y prudente que pensará siempre antes de tomar decisiones y en todo momento dando buenos
consejos. Será un hombre que huya de los vicios. de la bebida excesiva, del juego, de todos los excesos. Las herramientas
del Aprendiz harán de él un hom-bre serio y digno, gracias a la profunda y sabia enseñanza que encierra su hermoso
simbolismo.
— 111 —
LECCION XIII
EL IDEAL DEL, APRENDIZ MASON EN ACC ION
El ideal del Aprendiz está simbolizado por la Plomada, .porque ella tiene una dirección vertical y, por consiguiente, corresponde
al modelo de vida del Aprendiz que debe estar siempre erecto, vertical en sus esfuerzos, en sus aspiraciones y en todo trabajo
en la sociedad. Ser vertical significa no inclinarse jamás delante de los opresores ni abatirse frente a las persecuciones, sino
mantener siempre elevado el espíritu hacia lo alto y el pensamiento siempre puro y levantado para las cosas bellas y nobles.
La línea vertical de la Plomada señala para arriba y para abajo, muestra el zenit y el nadir, el cielo y la tierra, el espíritu y la
materia. La Plomada indica el peso de las pasiones, de los instintos perversos del hombre material, del hombre piedra bruta,
pero también señala hacia lo alto mostrando que el Aprendiz debe vencer sus pasiones y volverse -más espiritual, abandonar
sus maneras vulgares, desbastar completamente la piedra tosca.
En cada pensamiento, en cada palabra, en cada acción, el Aprendiz debe tener siempre presente la Plomada. Por esto debe
modificar su manera de hablar dejando los modales groseros y usando el lenguaje decente y digno; debe modificar sus
pensamientos dedicándolos a las cosas" más elevadas, a las cosas espirituales; debe modificar sus acciones dejando de ser
malo, agresivo y violento y usando -siempre la bondad, la tolerancia y la honestidad.
112 —
Toda planta crece y progresa por medio de esfuerzos verticales y avanzando siempre hacia arriba donde ella se desenvuelve,
así también el Aprendiz tiene que hacer continuos esfuerzos para dirigir su espíritu hacia lo alto, teniendo en mira nuestro ideal
que es la Verdadera Luz. Todos los masones necesitamos elevarnos siempre hacia lo alto buscando las regiones donde está
la verdadera y sublime luz que ilumina_ a todos los hombres de buena voluntad, que nos indica el sendero del bien, que nos
da los elementos para vivir correctamente, auxiliando y animando a nuestros hermanos sin contribuir nunca a que luchen entre
sí.
Este es el grandioso secreto que encierra la Plomada, que sirve para que construyamos el simbólico Templo del Gran
Arquitecto del Universo, ese templo simbólico que somos nosotros mismos. La Plomada es el instrumento simbólica que nos
ayuda a construir el templo de nuestro propio espíritu, de nuestros propios pensamientos, y a usar nuestra propia razón siempre
verticalmente, siempre dirigida hacia arriba, edificando nuestra vida con el amor, con la caridad, con la tolerancia, con la amistad
y con la comprensión para con todos nuestros queridos hermanos y para con la humanidad entera.
Todos nosotros poseemos una actividad constructora que es innata en nosotros mismos; los masones cabemos que esa
actividad constructora, ese deseo de acción y progreso, proveniente de la Inteligencia Infinita que es el Principio Creador del
Universo, así todos los masones estamos cooperando
113
con el Supremo Arquitecto porque estamos colaborando en la construcción que El desea, estamos actuando conscientemente,
con toda nuestra inteligencia y con toda nuestra voluntad. Para todos los masones es una gran gloria tomar parte en la
construcción de un templo magnífico, que simbólica-mente fue representado por el Templo de Salomón donde trabajaron
aprendices, compañeros y maestros durante varios años. Comprenderemos ahora que construyendo de modo perfecto el
glorioso templo del Eterno dentro de nuestro propio espíritu, estamos consciente y deliberadamente contribuyen-do de modo
eficiente y práctico en la construcción de una sociedad mejor y cada día más perfecta. ¿Por qué? Porque nosotros somos los
elementos formado-res de la familia que es la célula del grupo social, los grupos sociales forman el distrito, los distritos el
municipio, los municipios forman el estado y los estados forman la nación. En conclusión, si los elementos iniciales fueran
excelentes, toda la construcción sería excelente y tendríamos una humanidad feliz, porque el mundo está formado por pueblos
y naciones.
El ideal indicado por la Plomada debe ser realizado en nuestra propia vida. Consiste primeramente en vencer nuestros defectos,
evitar los prejuicios con sus terribles consecuencias, subyugar la soberbia y el orgullo que son la raíz de todos los males y que
llevan a los hombres a los mayores crímenes, con-batir nuestra natural tendencia a los placeres, moderándonos y procediendo
siempre de acuerdo con los más elevados principios de la moral masónica, refrenar nuestra ira que puede transformarse en
odio o dar lugar a los crímenes más infames, luchar contra nuestra natural tendencia para no exceder-nos en los placeres de
la mesa, sea en la comida o
—114
en la bebida, que pueden acarrear .serios perjuicios en la salud individual y llevan a perturbaciones del entendimiento y a
cometer acciones vergonzosas, impedir que nazca en nuestros corazones la envidia, que es una de las fuentes de mayores
males para toda la humanidad y una de las formas del vicio humano, que produce miseria, intrigas y crímenes. Es lo que nos
muestra la Plomada: señala todos los vicios y pasiones que debemos vencer y hacia lo alto para nuestra inteligencia, nuestra
voluntad y nuestra razón, para que -desbastemos nuestros defectos y hagamos de la piedra bruta de nuestro ser una piedra
pulida y bella, una piedra cúbica que será una de las más bellas obras cuando se presente completamente libre de asperezas;
entonces, y solamente entonces, el Aprendiz será digno del nombre sagrado del MASON.
El perfeccionamiento de nosotros mismos es la parte esencial y fundamental de la obra del Aprendiz. Este perfeccionamiento
consiste en la educación. Hasta hoy los pedagogos discuten todavía lo que es educación, pero hace siglos la Masonería definió
la educación y nos presenta la recta y segura manera de educar. El sentido propio de esta palabra es traer hacia afuera, hacia
la luz, todas las posibilidades de la individualidad humana, despojándolas de los defectos, errores, vicios e ilusiones que se
esconden en la personalidad de cada uno y que son lo contrario de nuestra verdadera naturaleza. Educar masónicamente es
hacer que el individuo camine hacia la Luz, que busque la verdad, donde ella tiene forzosamente que ser encontrada, esto es,
en el reinado de la Virtud. Educar es hacer que el individuo se liberte progresivamente de todas las sombras que obscurecen
su mente e 'impiden la manifestación de la luz interior que debe brillar clara y firmemente dentro
115 —

de la mente de cada hombre, esclareciendo y destruyendo las tinieblas, haciéndole conocer la ver-dad para que así adquiera
sabiduría.
Desde que el Aprendiz consigue alcanzar ese estado superior de conciencia con los auxilios que le proporciona la Masonería,
cuando llega a la altura de comprender y de reconocer la luz que existe dentro de él mismo, entonces esa misma luz se
manifestará en toda su vida; en sus pensamientos, en sus palabras v en .sus acciones.
Puede decirse que esto es muy difícil, nue muy raramente habrá quien pueda alcanzar tal grado de perfección, pero podemos
responder que la perfección es semejante a un banquete al que asisten convidados poseedores de estómagos de los más
diversos tamaños. Hay los que tienen estómagos enormes y hay los que lo tienen diminutos, pero todos comen cuanto les
cabe en su estómago hasta satisfacer su propia hambre, saliendo todos satisfechos del banquete aunque cada uno haya
ingerido cantidad diferente de su compañero. Tal es la perfección masónica, no todos pueden alcanzar las mayores alturas de
comprensión, pero todos están sentados a la mesa del banquete de la perfección alimentándose cada fino hasta satisfacerse
conforme al grado de su inteligencia y comprensión, cada uno según el grado de desenvolvimiento de su mente, pero todos
saldrán satisfechos.
El ideal del Aprendiz debe ser puesto en acción, para lo cual tiene como símbolo la Plomada, que al contemplarla ve que está
señalando para abajo —pasiones y defectos que él necesita combatir y vencer o, por lo menos, dominar, de tal modo que su
razón impere soberanamente— y para arriba por medio de su cordel hacia el infinito, mostrando al masón que el cielo es el
límite de sus aspiraciones.
—116 --
Oír las lecciones de los maestros, practicar la virtud y la caridad, enseñadas por la Masonería, ser tolerante y bueno, cumplir
exactamente sus solemnes juramentos, es el resumen práctico del ideal del Aprendiz. Así se identificará con el Supremo
Arquitecto, participará en su obra, será uno de sus colaboradores en la construcción del maravilloso templo de su propio
espíritu. Entonces verá la LUZ y la tendrá brillando en su interior e iluminando toda su vida.
—117,--

LECCION XIV
APLICACION PRÁCTICA DEL TOQUE DE APRENDIZ
El toque del Aprendiz tiene un significado muy profundo, que la mayoría de los masones no percibe porque no se lo enseñaron,
ni los maestros actuales se preocupan por abrir los ojos de los aprendices para que vean ese admirable secreto. Ya es tiempo
que nosotros los masones conozcamos nuestros propios secretos.
El toque del Aprendiz, de un modo general, significa la capacidad' de reconocer las cualidades rea-les y verdaderas que se
ocultan y esconden bajo la apariencia exterior de un individuo. Reflexionando un poco sobre ese espantoso misterio;
comprenderemos el valor extraordinario de esa señal masónica. Los profanos basan sus juicios y apreciaciones sobre una
persona por las apariencias exteriores de la misma: en su manera de vestir, de andar, de hablar, en la elegancia de sus
actitudes y, sobre todo, por la manera como esa persona sabe cautivar simpatías o despertar antipatías.
Los verdaderos masones, que poseen el conocimiento de la Verdad Obtenido por medio de la iniciación, ven todo de un modo
completamente diferente; para ellos hay una luz distinta que ilumina las cosas y las personas y juzgan a las que se les
118 —
presentan a través de esa facultad masónica. El poder o facultad de ver las cualidades reales es un privilegio de los masones
que han profundizado el estudio de la Verdad y que tienen por esto profundamente iluminado su espíritu. Para estos masones
iluminados y conocedores, no vale de nada la más-cara del individuo, esa máscara que constituye su personalidad, y que no
es más que una superficie ilusoria que esconde la verdadera individualidad. El masón profundiza más sus miradas y quita esa
más-cara.
La individualidad consiste, masónicamente, en una reproducción en cada hombre iniciado del Principio Divino, de la Esencia
del Creador de los Mundos. Flqa imagen divina que se forma en cada hombre iniciado está integrada por las verdades masó-
nicas, forma el propio espíritu en cada masón y entonces le transforma en un Hombre Real, eterno e inmutable.
Lo que acabamos de decir parece para muchos un misterio difícil de penetrar, pero que no es tan incomprensible. Lo que
ocurre es lo siguiente: el iniciado, lleno de entusiasmo por la Verdad y por la Luz masónica, se da de tal modo a la realidad del
Principio Creador, que se unifica con El y brilla, piensa y habla de un modo diferente, más noble, más sensato, más sincero,
más elevado, transformado en un hombre nuevo ahora Real, Eterno e Inmutable como es el Gran Arquitecto del Universo.
Los tres golpes leves y discretos dados con el pulgar y que son en realidad apenas tres leves presiones, son toques simbólicos
destinados a hacer vibrar inmediatamente la cualidad o calidad del masón, como una respuesta muy natural y muy espontánea.
Así el masón iniciado se da a reconocer y, al ser reconocido por esos tres simbólicos toques, provoca el abrazo fraternal
durante el cual se comunica la Palabra Sagrada.
-
119
Veamos ahora la significación especial de esos tres toques, de esas tres presiones que parecen querer penetrar en la piel de
aquel a, quien pretendemos reconocer. Cada uno de esos imperceptibles golpes es en realidad un esfuerzo para penetrar a
través de la capa de ilusión, de engañadora apariencia, con que se presenta el individuo, una indagación del ser real, del
verdadero hermano, que está escondido y que solamente fue percibido a través de dichas señales.
Esas tres leves presiones dadas en la mano del Aprendiz o del masón en general, corresponden a tres expresiones enseñadas
por el Sublime Maestro de la Virtud y de la Verdad, el admirable maestro de los Esenios, cuando dijo: BUSCAD Y
ENCONTRAREIS —LLAMAD Y SE OS ABRIRA —PEDID Y SE OS DARA. Significa realmente: —busco al masón, ese es el
primer golpe y la respuesta es otro golpe diciendo —aquí estoy. El segundo golpe —ábreme tu corazón, permíteme sentir la
grandeza de tu amor fraternal y la respuesta dice: —está abierto mi corazón y en él podéis depositar tu confianza, soy un
hermano. El tercer golpe —dadme la Palabra de la Verdad que traes contigo la respuesta es: —tengo esa palabra y te la daré
para probarte claramente mi calidad de masón perfecto, de iniciado real y ver-dadero. Sigue el abrazo fraternal durante el cual
dan al oído la Palabra Sagrada.
Hecho el reconocimiento, comienza la comunión fraternal de afectos, la conversación sobre asuntos de la Masonería y sobre
los intereses de la fraternidad. Ensánchanse los corazones, se expande la fraternidad.
Después de convencerse podrá preguntarse al her mano -
- 120 —
si quiere ir más adelante. Entonces se dará el Toque de Compañero seguido de la Palabra Sagrada o de Pase y, finalmente,
vendrá el Toque del Maestro seguido de la Palabra de Pase o los Cinco Puntos Perfectos del Masón o de la Maestría, con la
Palabra Sagrada del Maestro.
La extraordinaria decadencia de la Masonería en el Brasil ha hecho que estén prácticamente olvidados los elementos más
esenciales de la vida masó-nica activa. Como ejemplo tenemos los toques, las palabras y los signos mediante los cuales el
masón consigue el reconocimiento universal de sus herma-nos, sin distinción de potencias ni jurisdicciones, pero con pleno
conocimiento de todos sus calificativos.
Los toques deben ir acompañados, obligatoriamente, de las palabras sagradas, de las de pase o de las de reconocimiento
correspondientes. El toque del Aprendiz es prácticamente universal y es la iniciación de cualquier reconocimiento. Cada grado
tiene un toque particular que es dado cuando se pretende retejar, esto es, verificar si el hermano es realmente un masón y
posee el grado que mencionan sus documentos.
El toque es más eficaz y hasta más común que el signo, porque permite con un simple apretón de manos descubrir, sin alarma,
si una persona pertenece o no a nuestra Augusta Institución.
En el Rito Francés, el toque de Aprendiz se da apretando la mano con los cuatro dedos y dejando libre el pulgar y apoyando
después éste sobre el nudillo óseo que une el dedo índice con el cuerpo de la mano (metacarpo). En el Rito Escocés se
procede del mismo modo con la diferencia que el pul-gar se apoya sobre la primera falange del índice y los golpes o presiones
se dan con la uña. Demás está decir que este toque es antiquísimo y que está
121 — en uso desde que existieron las primeras organizaciones masónicas en el mundo. También conviene decir que el
sistema Francés es mejor y más práctico. En efecto, cualquiera puede experimentar la facilidad de un toque con el pulgar en
la unión del dedo con la mano y la dificultad de dar con la uña el toque en la falange. Así el toque universal es como lo estableció
el Rito Francés que, en este pun-to, ha superado a lo establecido en el Rito. Escocés.
En rigor no hay rito en los tres primeros grados, sino apenas un sistema ligado a los respectivos ritos, porque estos grados son
generales y universales y son la base de todos los ritos.
Prácticamente, por lo tanto, el toque del Aprendiz es de inmenso valor. Con él entramos en contacto con nuestros hermanos
en todo el mundo; por medio de él se inicia el reconocimiento de los hermanos. Despreciar este toque y comenzar un
reconocimiento con otros toques es un grave error y un engaño. Demos el toque de Aprendiz, sintamos la respuesta, demos
el abrazo y con él la palabra. Después del abrazo podemos preguntar: ¿queréis ir más lejos?, ¿o vais más allá? y entonces
prosigamos de acuerdo con el grado o grados que hayamos alcanzado de nuestra Orden. No olvidemos nunca que en el Brasil
y en cualquiera otra nación, la gloria del masón está en el conocimiento lo más perfecto posible de su liturgia.
—122—
INDICE

INDICE
Pág. Masonería y sus fines 5 Los Masones 12 Logia 14 Símbolos y Emblemas 21 Funcionarios 27 Joyas 29 Luces
30 Columnas 31 Catecismo 32
CURSO DE MASONERIA SIMBOLICA
Lección Pág. I Los misterios antiguos 47 II Las comunidades místicas de los hebreos, griegos e indúes 53 III Los templarios
y los rosacruces 59 IV Cámara de reflexiones 65 V El testamento del candidato 71 VI Preparación del candidato 77 VII La
puerta del templo y la entrada del recipiendario 82 VIII Los tres años del aprendiz 88 IX y X La escuadra y el compás 94
— 125 —

Lección Pág. XI Los tres puntos 100 XII Las herramientas del aprendiz y su obra 106 XIII El ideal del aprendiz masón en
acción 112 XIV Aplicación práctica del toque de aprendiz 118
---126 -
Blanca Gpe. Nieto Sánchez

Karina Aracely Carraza Pérez

Lorena Isela Barboza González

Carolina Mireya Ruíz Duran

Yolanda Berenice Martínez Guerra

Norma Leticia Barbosa González

Alma Nelly López Sánchez

Ana Marcela González Arizpe

Karla Janeth Flores

Cecilia Mireles Gómez

Lucero Sah Pérez Garza