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9/2/2017
Esa disposición incluirá el trabajo con tres indicadores que buscarán asegurar el
cumplimiento de este propósito: entrega oportuna de materiales educativos en lenguas
originales, maestros que reciban acompañamiento pedagógico, y la atención en el servicio
EIB. Este apoyo es vital porque en el país existen 24,964 instituciones educativas bilingües,
ubicadas en su mayoría en la Amazonía, al igual que en Cusco, Apurímac y Ayacucho.
Atienden a un millón 200,000 niños, de los cuales el mayor porcentaje está en primaria.
La estrategia para lograr esas metas incluye capacitar a los docentes en temas de
programación curricular, como el uso y manejo de los cuadernos de trabajo y la relación
que debería tener el maestro con la comunidad, a fin de promover la sostenibilidad de la
EIB y el apoyo de los padres en el proceso educativo. De la misma manera, los maestros
tendrán acompañantes para promover todo lo relacionado con planes de mantenimiento de
la lengua originaria, las tácticas para el castellano como segunda lengua, las competencias
para desarrollar matemáticas, y el trabajo con personal social y de ciencia y tecnología.
En el Perú se hace EIB desde hace 50 años, tiempo durante el cual se han redoblado
esfuerzos para ampliar este tipo de educación, pero nunca como ahora, que existen las
mejores condiciones para garantizar su desarrollo e implementación de manera integral. En
tal sentido, este año se hará por primera vez un censo nacional para identificar cuáles son
las instituciones educativas que deben brindar la EIB.