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Libro Teología Sistemática – WAYNE GRUDEM

Capítulo 21: LA CREACION DEL HOMBRE


A. El uso de la palabra hombre para referirnos a la raza humana
El autor en este libro nos habla y nos da diferentes razones del porque es
importante referirse a la palabra “hombre” como razana humana ya que esta
palabra tiene justificación divina en Genesis. El autor nos habla del termino
hebreo “Adam” que es el mismo adán a el que se le diferencia de la mujer,
adán es utilizado para referirse a seres humanos o varones.
“En Génesis 5:2 describe específicamente la actividad de Dios de elegir un
nombre que se aplicaría a toda la raza como un todo”. Según lo anterior vale
aclarar que no se está argumentando aquí que debemos siempre duplicar las
formas bí-- blicas de hablar, ni que sea equivocado usar a veces términos de
género neutro para referimos a toda la raza humana) el autor nos quiere
recalcar que, sino más bien que la actividad de Dios de poner nombre en
Génesis 5:2 indica que el uso de «hombre» para referirse a toda la raza es
una elección buena y apropiada, y que no hay razón para evitarlo

Según el autor el hecho de que a la razana humana no se le haya querido


llamar “mujer” sino “hombre” puede implicar que esto pueda significar, algo
de liderazgo, y puede tener algún significado para el plan original de Dios.

B. ¿Por qué creo Dios al hombre?


El autor nos hace énfasis en que Dios, no nos creó porque nos necesitara o
porque se sintiera solo, no Dios nos creó para su propia gloria, Dios es auto
existente he inmutable no necesita de nadie para subsistir, Dios no necesitara
alguna vez de nosotros por alguna razón.
Realmente estamos creados y diseñados para hacer todo lo que glorifique a
Dios, por eso él nos creó para que le diéramos gloria, el hecho de que todo
lo que hagamos agrade a Dios, eso realmente hace nuestra vida significativa.
El autor menciona que cuando nos damos cuenta realmente que Dios no nos
necesita, realmente nuestras vidas no tendrían ningún sentido, pero por
medio las escrituras podemos concluir que al hacer su voluntad y glorificarlo
él nos tiene en cuenta como sus hijos y sus hijas.
Como nos dice el autor “Nuestro propósito debe ser cumplir la razón por la
que Dios no creó: Glorificarle a él. Cuando hablamos con respecto a Dios
mismo, ese es un buen resumen de nuestro propósito. Pero cuando
pensamos en nuestros propios intereses, nos encontramos con el feliz
descubrimiento de que estamos para gozar a Dios y deleitamos en él y en
nuestra relación con él”. No hay más nuestro único propósito de vida es este.
Para el cristiano glorificar a Dios debe ser de sumo regocijo.
C. El Hombre creado a la imagen de Dios
1. El Significado de “Imagen de Dios”
De todas las criaturas que Dios hizo, solo una, el hombre, se dice que fue creado
«a imagen de Dios». El autor nos habla que el hecho de que el hombre está formado
a la imagen de Dios quiere decir que el hombre es como Dios y representa a Dios.
“El sentido es que Dios planeaba hacer una criatura similar a él. La palabra hebrea
que se traduce «imagen» (tselem) y la palabra hebrea que se traduce «semejanza»
(demut) se refieren a algo que es similar, pero no idéntico a aquello que representa
o de 10 que es una «imagen». La palabra imagen también se puede usar para
denotar algo que representa otra cosa”.
Muchas son las definiciones o características que grandes teólogos han querido
darles a estas dos palabras “semejanza” e “imagen” buscan características
específicas para decir exactamente en que nos parecemos a Dios, pero muchos
ignoran simplemente lo que Dios nos dice en la escritura.
Según el autor el hecho de que el hombre esté creado en la imagen de Dios quiere
decir que el hombre es como Dios en las siguientes formas: Habilidad intelectual,
pureza moral, naturaleza espiritual, dominio sobre la tierra, creatividad, habilidad
para tomar decisiones éticas e inmortalidad o alguna otra declaración similar.
Si queremos comprender mucho más esto, tenemos que leer las escrituras entre
más la leamos, encontraremos muchas más similitudes y tanto mejor entenderemos
que las Escrituras quieren decir cuando afirman que el hombre está hecho a la
imagen de Dios. Esa expresión se refiere a toda forma en la que el hombre es como
Dios. Toda forma en que el hombre es como Dios es parte del hecho de ser a la
imagen y semejanza de Dios.

2. La caída: La imagen de Dos queda distorsionada, pero no se ha


perdido
Aunque los hombres son pecaminosos, hay todavía suficiente semejanza a Dios en
ellos. El hombre todavía es a imagen de Dios.
Sin embargo, puesto que el hombre ha pecado, no es ya tan completamente como
Dios como 10 fue antes. Su pureza moral se ha perdido y su carácter pecaminoso
no refleja para nada la santidad de Dios. Su intelecto está corrompido por la falsedad
y el mal entendimiento; su forma de hablar no glorifica siempre a Dios; y sus
relaciones están con frecuencia gobernadas por el egoísmo más que por el amor, y
así sucesivamente. Aunque el hombre todavía conserva la imagen de Dios, en cada
aspecto de la vida algunas partes de esa imagen han quedado distorsionadas o
perdidas. Despuesde la caída seguimos conservando la imagen de Dios, pero
distorsionada ya no somos tan completamente como Dios como 10 fuimos antes de
que entrara el pecado. es importante que entendamos el sentido pleno de imagen
de Dios no solo partiendo de nuestra observación de los seres humanos como
existen hoy, sino también desde las indicaciones bíblicas de la naturaleza de Adán
y Eva cuando Dios los creó y cuando todo lo que había hecho era muy bueno.

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