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La estenosis hipertrófica del píloro es una patología muy frecuente del lactante. Su etiología está poco
precisada, pero su tratamiento está bien codificado. Corresponde a una hipertrofia progresiva del tramo
pilórico del estómago que provoca una obstrucción del vaciamiento gástrico. Es la causa de vómitos
alimentarios característicos que rápidamente sugieren el diagnóstico. La ecografía permite confirmar el
diagnóstico sospechado por la clínica; el estudio de laboratorio detecta las consecuencias de los vómitos
y controla la rehidratación. Esta rehidratación preoperatoria es necesaria para que en el momento de la
cirugía el niño se encuentre en óptimas condiciones. El tratamiento curativo consiste en una pilorotomía
longitudinal extramucosa que permite el rápido reinicio de la alimentación y requiere una vigilancia
hospitalaria bastante breve tras su realización. La curación es la norma.
© 2017 Elsevier Masson SAS. Todos los derechos reservados.
Introducción Etiología
La estenosis hipertrófica del píloro (EHP) es una patología fre- Factores predisponentes
cuente del lactante. Se manifiesta por un engrosamiento y una
elongación del músculo pilórico debidos a una hipertrofia con- Genética
céntrica de la musculatura pilórica. Esta situación provoca una Es evidente un componente genético en la EHP ante su asocia-
obstrucción creciente de la luz pilórica responsable de los vómitos. ción a algunos síndromes (Cornelia de Lange, Smith-Lemi-Opitz),
Aunque su etiología siga siendo poco clara, el tratamiento de la prevalencia masculina y una distribución familiar. Un paciente
esta patología está muy bien codificado. Se trata de una urgen- presenta un riesgo 15 veces mayor de desarrollar una EHP si un
cia médico-quirúrgica con rehidratación inicial, seguida, una vez miembro de su familia ha presentado una EHP. Así mismo, la pro-
que el niño se encuentra en equilibro hidrolítico, por la realiza- porción por sexos de 4/1 constituye un argumento suplementario,
ción de una pilorotomía extramucosa longitudinal. La curación En la actualidad, no se ha aislado ningún gen específico, pero se
sin secuelas es la norma, una vez realizada la intervención. han identificado varios locus [8] .
EMC - Pediatría 1
Volume 52 > n◦ 3 > septiembre 2017
http://dx.doi.org/10.1016/S1245-1789(17)85525-6
E – 4-018-N-10 Estenosis hipertrófica del píloro
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Estenosis hipertrófica del píloro E – 4-018-N-10
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E – 4-018-N-10 Estenosis hipertrófica del píloro
Figura 5. Disección.
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Estenosis hipertrófica del píloro E – 4-018-N-10
caso de hemostasia). Se realiza el cierre parietal con puntos separa- Ante una perforación mucosa detectada durante la interven-
dos, sobre todo en caso de desnutrición del niño. Una resección de ción, se debe realizar la sutura inmediatamente con puntos
los ángulos a nivel de la T de la incisión cutánea permite conseguir separados de hilo monofilamento 6/0. Se puede colocar un par-
una cicatriz semicircular en los pliegues del ombligo. che de epiplón para cubrir la perforación. Una alternativa consiste
en el cierre de la piloromiotomía y la realización de una segunda
Otras vías de acceso incisión en una zona alejada de la primera. En este caso, la alimen-
La vía de acceso inicialmente descrita era una laparotomía sub- tación postoperatoria se retrasa 48 horas y se mantiene la sonda
costal derecha frente a la oliva pilórica palpable, con una incisión nasogástrica tras la intervención [31] . Las complicaciones de esta
cutánea horizontal y una abertura transrectal vertical. Se emplea perforación son raras (< 5%).
cada vez menos, pero puede resultar interesante en las reinter- Las complicaciones de la pared son de dos tipos [32] : los abs-
venciones precoces en caso de pilorotomía incompleta o cuando cesos y las eventraciones. Los abscesos o infecciones parecen ser
el ombligo no está completamente cicatrizado, ya que permite ligeramente más frecuentes cuando se emplea la vía de acceso
liberar la importante prensión y tracción de la oliva pilórica en umbilical (3%), debido al despegamiento subcutáneo necesario.
caso de intervención por vía umbilical. Es posible observar eventraciones que suelen corregirse con el cre-
La incisión en doble U, que consiste en una incisión en el plie- cimiento del niño, por lo que pueden respetarse como en el caso
gue umbilical superior con una segunda incisión que permite una de una hernia umbilical asintomática. Son posibles las eviscera-
resección cutánea semicircular y un cierre directo, también pue- ciones postoperatorias, aunque infrecuentes, y se pueden evitar
den emplearse con el fin de reducir la cicatriz [20] . con el cierre parietal con puntos separados.
La vía laparoscópica se utiliza desde 1991 [21] . Se efectúa con un La tasa de mortalidad es muy baja en la mayoría de los centros
trocar umbilical para la óptica y dos trocares quirúrgicos (en el (menos del 0,4%). Las complicaciones tardías también son infre-
lado derecho y epigástrico, ligeramente a la izquierda de la línea cuentes, pero una fístula pasada desapercibida puede provocar una
media). La pinza del lado derecho permite estabilizar la oliva. estenosis pilórica con el tiempo. Así mismo, es muy infrecuente
La incisión epigástrica permite la introducción de un pilorótomo una oclusión digestiva por adherencias postoperatorias.
(con hoja retráctil) o una hoja de bisturí oftálmica. Esta hoja faci-
lita la realización de la incisión longitudinal sobre la oliva pilórica, Postoperatorio
que debe efectuarse estrictamente en el borde antimesentérico. Se Los vómitos postoperatorios son frecuentes tras la cirugía de
coloca entonces un disector en esta incisión que permite cortar EHP. Se debe explicar este hecho a los padres antes de la cirugía.
las fibras pilóricas hasta la zona donde sobresale la mucosa. La frecuencia de las contracciones gástricas aumenta en una este-
Numerosos artículos intentan comparar los postoperatorios en nosis del píloro. Estas contracciones se normalizan 3-5 días tras la
función de la vía laparoscópica o de la cirugía abierta, con resul- cirugía [33] . Los vómitos durante esta fase no deben preocupar ni a
tados no concordantes entre cada estudio. Un sesgo importante los médicos ni a la familia. La morfología del píloro se restablece de
de estos estudios es la experiencia del cirujano que realiza esta forma progresiva durante los 5 o 6 meses tras la cirugía [34] , debido
intervención [22] . a lo cual la ecografía no está indicada para comprobar el aspecto
del píloro y pensar en un diagnóstico de pilorotomía incompleta.
Tratamiento no quirúrgico de la estenosis Además, la ecografía mostraría un píloro con las mismas dimen-
hipertrófica del píloro siones que antes de la cirugía. Podría mostrar pasos alimentarios
Ante la estandarización y los buenos resultados del trata- más frecuentes.
miento quirúrgico, el tratamiento no quirúrgico apenas se aplica. El reinicio de la alimentación tras la cirugía de estenosis del
Este tratamiento asocia una hidratación intravenosa a una píloro es variable entre los servicios de cirugía infantil y ha condu-
administración intravenosa y oral de atropina (inhibidor de la cido a la publicación de numerosos artículos que no demuestran
acetilcolina) [23] . La atropina enlentece la contracción muscular diferencias entre el reinicio progresivo y protocolizado de la ali-
y el peristaltismo gastrointestinal, disminuyendo así los sínto- mentación, en comparación con una alimentación «a demanda»
mas. Kawahara et al describen una administración intravenosa de en términos de duración de la hospitalización [35] o de reingreso. El
0,01 mg/kg/día en seis inyecciones diarias, 5 minutos antes de la número de vómitos puede ser superior en los niños cuya alimen-
alimentación. En su serie de 19 pacientes, 17 presentaron curación tación se reinicia «a demanda». Pero no se ha observado ninguna
y 2 requirieron una intervención pasados 9-18 días. En el segui- complicación ligada a este tipo de realimentación. Un estudio que
miento se realizó la medida del grosor del píloro, que disminuyó ha comparado una realimentación a las 4 horas y a las 18 horas de
significativamente tras el tratamiento [24] . la intervención en 100 pacientes demuestra que no existen dife-
rencias en términos de duración de hospitalización, pero que una
alimentación precoz provoca más vómitos postoperatorios [36] .
Complicaciones quirúrgicas
La sonda nasogástrica preoperatoria no permite reducir los
La tasa de complicaciones postoperatorias de la pilorotomía vómitos postoperatorios ni la duración de la hospitalización [37] .
longitudinal extramucosa es baja. Se debe discutir, por lo tanto, su colocación en función del riesgo
Se han descrito tres complicaciones quirúrgicas: las piloroto- de aspiración preoperatoria.
mías incompletas, las perforaciones mucosas y las complicaciones Se debe mantener la hidratación parenteral en función de la
de la pared. tolerabilidad de la alimentación y de la ganancia de peso. Por
La persistencia transitoria de vómitos tras la intervención no tanto, se pesa al niño a diario y se controla estrechamente la
se considera una complicación, pero debe explicarse a la familia alimentación con el fin de suspender la hidratación lo antes posi-
antes de la intervención. ble. Es posible el alta hospitalaria al comprobar la tolerabilidad
Las series muestran tasas del 0,3-12% de infecciones de la cica- alimentaria.
triz, del 0-11,5% de perforaciones mucosas y del 3-60% de vómitos Se comprueba la cicatriz antes del alta con el fin de tratar una
postoperatorios [25–29] . posible infección a nivel de la vía de acceso.
Se describen pilorotomías incompletas en el 0-5,5% de las inter- Los controles postoperatorios tardíos son sencillos. El niño
venciones laparoscópicas y en el 0-1,9% de las intervenciones puede presentar regurgitaciones persistentes que disminuirán
abiertas. Requieren una nueva intervención que completa la pilo- espontáneamente con la posición de pie. No deben preocupar a
rotomía. El momento más delicado es la exteriorización de la la familia.
oliva pilórica, debilitada por la intervención previa. En este tipo
de situaciones, puede estar indicado un cambio de vía de acceso
(laparoscópica o transrectal que permita evitar una exteriorización Conclusión
traumática de la oliva pilórica). En este caso se recomienda realizar
una segunda pilorotomía en otra zona del píloro. Se ha descrito La estenosis hipertrófica del píloro es una enfermedad
la recidiva de EHP tras varias semanas de alimentación correcta frecuente. Su diagnóstico se basa en la historia clínica, a
y recuperación del peso. Probablemente represente una etiología menudo característica, y debe sospecharse ante cualquier vómito
diferente a una pilorotomía incompleta [30] . alimentario del lactante de 2-9 semanas de vida. En la práctica
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E – 4-018-N-10 Estenosis hipertrófica del píloro
diaria, la exploración física se completa con una ecografía abdo- [19] Bissonnette B, Sullivan PJ. Pyloric stenosis. Can J Anaesth
minal. El estudio de laboratorio permite valorar la repercusión de 1991;38:668–76.
la estenosis en el plano general. [20] Ghaffarpour N, Svensson PJ, Svenningsson A, Wester T, Mesas
Se trata de una urgencia médico-quirúrgica. El tratamiento Burgos C. Supraumbilical incision with U-u umbilicoplasty for con-
comienza con una rehidratación y un reequilibrio hidroelectrolí- genital duodenal atresia: the Stockholm experience. J Pediatr Surg
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Cualquier referencia a este artículo debe incluir la mención del artículo: Lecompte JF, Gastaldi P, Bréaud J. Estenosis hipertrófica del píloro. EMC - Pediatría
2017;52(3):1-6 [Artículo E – 4-018-N-10].
Disponibles en www.em-consulte.com/es
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