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El Proyecto de Saneamiento de la Ciudad y la Bahía de Panamá

actualmente representa el principal proyecto de inversión en materia


de salud ambiental ejecutado en el país, con una inversión
aproximada de más de $900 millones, según datos del Ministerio de
Salud de Panamá.

Misión

El Saneamiento de la Ciudad y la Bahía de Panamá fue un proyecto


del Estado panameño que se diseñó para solucionar el problema de
las aguas residuales de la capital del país, que son vertidas a las
quebradas, ríos y otros afluentes de la región, produciendo
contaminación ambiental y riesgos de salud para la población.

El Plan Maestro integral del proyecto, desarrollado por el Ministerio de


Salud, abarcó cuatro componentes principales: la construcción de
redes sanitarias, la construcción y rehabilitación de colectoras y líneas
de impulsión, el sistema interceptor y la planta de tratamiento de
aguas residuales.

Inicio:

Desde 1958 se visualizaba un plan de saneamiento para la bahía de


Panamá, pero no fue hasta 2006 cuando comenzó la obra.

El ambicioso proyecto iniciado con la ampliación de los sistemas de


recolección (alcantarillados) y la construcción de una planta de
tratamiento para las aguas residuales de la ciudad capital.

Etapas del saneamiento:

Primera etapa: tratamiento de aguas residuales en toda la ciudad

Con la entrega de las dos órdenes de proceder para la construcción


de las redes de alcantarillado de San Miguelito y la colectora de Juan
Díaz culmina la primera etapa del proyecto de Saneamiento de la
Bahía, explicó la coordinadora general de esta iniciativa, Tatiana de
De Janon. La red de alcantarillado en San Miguelito le dará conexión
a unas cinco mil viviendas en este distrito. Corresponde al
Saneamiento de la Ciudad, desde el Casco Viejo hasta el
corregimiento de Tocumen.
En ejecución desde el año 2006, incluye la construcción de
aproximadamente 190 km de redes de alcantarillado sanitario. Esta
fase también espera construir cerca de 76 km de colectoras con el
objetivo de interceptar las descargas de aguas residuales directas a
los ríos y quebradas.

Esta administración tiene en su cronograma de trabajo dejar listo,


antes de 2019, la primera etapa del proyecto, que es descontaminar
los ríos Curundú, Río Abajo, Matías Hernández, Tapia y Tocumen.

Culminación:
Zambullirse en la bahía de Panamá es un sueño a largo plazo que las
autoridades de Salud calculan hacerlo realidad en 2025, pero de la
mano del millón de panameños residentes en la capital, a través de la
aplicación de hábitos de higiene.

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