REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMETAL DE LA SEGURIDAD

VICERRECTORADO ACADÉMICO
SAN CRISTÓBAL – ESTADO TÁCHIRA

INSTRUMENTO DE EVALUACION PSICOLOGICO PARA LA MEDICIÓN DEL

GRADO DE SALUD MENTAL EN LOS FUNCIONARIOS Y FUNCIONARIAS
POLICIALES.

AUTORA: Yuneiry Contreras

San Cristóbal, mayo 2018

 CAPITULO I

EL PROBLEMA

Planteamiento del Problema

El desarrollo integral del ser humano, encierra diversos elementos que le

permiten fortalecer el nivel de evolución, crecimiento y fortalecimiento de las
relaciones sociales, entre ellos se destaca el elemento psicológico con el cual se
logra determinar el grado de madurez, la coherencia en las aptitudes y actitudes,
así como la adecuada capacidad para afrontar las realidades del entorno en el
cual se ubica. En tal sentido, se trata por tanto de atender la significatividad de la
psicología para el reconocimiento pleno y absoluto de las facultades mentales del
individuo para mantener un estado de salud pleno, que permita el disfrute de las
actividades que realiza de una manera placentera.

En consecuencia, el aspecto psicológico de todo ser humano se encuentra

precedido por una serie de condiciones elementales que le definen como persona,
sirviendo de atenuante para la adquisición de responsabilidades principalmente en
el campo laboral, razón por la cual establecer los parámetros que definen las
particularidades del individuo son necesarias y determinantes para comprender la
complejidad de la mente humana y las dinámicas de intervención que logran
mantener grados de sobriedad y ética en los desempeños diarios ya sean
laborales o familiares. Por tan razón, Mikulic (2013) hace mención: “La
evaluación psicológica nos propone un interesante desafío que consiste en
integrar conceptualmente aportes de múltiples enfoques psicológicos, con la
posibilidad de utilizar los últimos desarrollos tecnológicos puestos al servicio de las
crecientes demandas del medio” (p.5). En tal sentido, es la evaluación psicológica
un medio que facilita la intervención clínica basada en el análisis de diversos
elementos que pueden configurar los niveles de actuación y además que su
importancia radica en la necesidad de dar solución a diversos problemas humanos
centrándose en una perspectiva totalizadora del hombre y su entorno.

Ahora bien, la determinación del impacto de la adecuada evaluación psicológica

esta dado como establece Linares (2013) “Por la veracidad en la ética del
psicólogo quien debe emplear técnicas fundamentas en la comprensión de las
realidades contextuales del individuo para llevar a la complexión absoluta de las
condiciones de salud mental” (p.32). De tal manera, la necesidad de abordar la
evaluación psicología recae en atender las particularidades del individuo,
definiendo sus potencialidades, los contrastes de su personalidad, carácter e
ingenio llevando a calificar de apto o no para ciertos desempeños en entornos que
muchas veces pueden someterlos a grandes niveles de estrés y agotamiento,
impidiendo el mantenimiento de la salud mental.

Con respecto a este aspecto, es determinante observar que la salud mental se

corresponde con las capacidades particulares del individuo para mantener su
mente, raciocinio, temperamento, personalidad acorde con su edad, niveles de
desarrollo, lo que conlleva a considerarlo como un ser asertivo frente a las
vicisitudes del día a día. Por esta razón, Houtman y Kompier (2013) supone que
una persona cuya salud mental es acorde se fundamenta en: “Características
como los estilos de afrontamiento: la competencia y la aspiración son
características de una persona mentalmente sana, que se muestra interesada por
su entorno, participa en actividades motivadoras y busca su propia proyección por
medios personalmente significativos” (p.2). Estas características permiten
comprender que la axiología de una persona con salud mental favorable tiende a
mantener un afrontamiento eficaz ante las realidades, son capaces de dominar el
entorno y prevalece la autoeficacia.
 Por otra parte, la salud mental en el individuo es garantía de las destrezas
motivadoras para el desarrollo de las condiciones humanas, permitiendo la
construcción de la armonía en las relaciones con sus semejantes. Por tanto,
Milicic (2012) comenta: “La complejidad de la mente requiere de la evaluación
psicológica para comprender si las condiciones están dadas para garantizar la
armonía y buen acople a las dinámicas de una determinada función principalmente
laboral” (p.5). Es decir, las consideraciones de la salud mental en el individuo
ofrece ciertas garantías para quienes se encuentran alrededor, principalmente en
entornos laborales.

Ahora bien, en el campo laboral, según comentan Houtman y Kompier (2013)

“La salud mental se conceptualiza no sólo como un proceso o una variable de
resultado, sino también como una variable independiente; es decir, una
característica personal que influye en nuestro comportamiento” (p.6). Esta
determinación enfatiza en afirmar el condicionamiento que puede generar en el
campo laboral la salud mental, razón por la cual es extremadamente necesario el
análisis funcional de las determinaciones psicológicas para establecer la
capacidad de interacción, de afrontamiento y las condiciones elementales para el
desempeño.

En tal sentido, estas determinaciones son conjeturas que han sido abordadas
desde plano internacional, donde la incidencia de evaluación psicológica esta
precedida por todos los campos de intervención, especialmente los laborales,
permitiendo identificar si en efecto es posible que una persona adquiera
responsabilidades especificas dentro de un determinado organismo. Así lo
muestra Flórez (2014) al afirmar: “Países desarrollados como Rusia, China y
Estados Unidos, regularmente realizan las valoraciones psicológicas en los
puestos de trabajo de mayor confidencialidad, acuñando periodos específicos para
realizarlos” (p.2). Muchos países a escala mundial, realizan las evaluaciones
psicológicas para complementar la estimación de eficiencia que puede mantener
en el cumplimiento de las funciones inherentes al cargo a desempeñar.

Por su parte, en Latinoamérica y especialmente en Venezuela, la cultura de

evaluación psicológica no es acogida como una necesidad prioritaria, así lo
determina Gómez (2014) al afirmar: “No existe en América Latina una influencia
notoria en la valoración psicológica de los prospectos laborales, por el contrario se
aplica como una mera solicitud inicial dentro del proceso laboral” (p.3). Es decir,
que lamentablemente la evaluación psicológica en Venezuela, se centra en ser
presentada solo al iniciar las gestiones laborales, pero realmente no existe un
seguimiento real, paulatino que permita describir la salud mental de los individuos
y mucho menos que exista una correspondencia entre las capacidades de
afrontamiento y las necesidades especificas del área laboral.

Hasta el momento se ha añadido el valor fundamental de la aplicación continua

de una evaluación psicológica que permita medir el grado de salud mental en los
contextos laborales, pero realmente la problemática que se desea abordar esta
enfatizado en la aplicación de la investigación al contexto de los funcionarios y
funcionarias policiales. Ahora bien, se contempla esta vicisitud considerando que
los funcionarios y funcionarias policiales, se encuentran sometidos a diversos
grados de estrés que pueden condicionar su actuación laboral y familiar, así como
llevar a implementar comportamiento ligados con el agotamiento, depresión,
cambios de humor entre otros, que lamentablemente pueden condicionar su buen
labor y el desempeño de sus funciones.

De tal manera, que como síntomas específicos pueden ser evidentes: la

personalidad cambiante, no definida, es decir que los funcionarios pueden tener
hoy un estilo de temperamento pero dentro de un momento tiende a volverse
inconstante generando un ambiente laboral tenso; incapacidad de realizar
trabajos eficazmente, donde se asigna una función especifica de confianza, no se
realiza con los lineamientos planteados, no se sigue las instrucciones pertinentes;
bajos deseos de superación y motivación; apatía en lo laboral como en lo
personal, no se muestra con deseos de crecer profesionalmente y mucho menos
en el ámbito laboral; comportamiento agresivo y perturbador en el ambiente
laboral, por lo general, tienden a estar a la defensiva, aislados y en los casos en
los que se requiere compenetración no siguen ordenes, ni tienen sentido de
cooperación con los compañeros.

Por tanto, las causas que pueden llevar a ser frecuentes dichos síntomas
pueden ser las siguientes: demandas psicológicas en el puesto de trabajo, lo que
muchas veces puede traducirse en acoso laboral e instigación; suele darse el
caso, que el deterioro de la salud mental del funcionario o funcionaria policial se
deba a un exceso de responsabilidades, aunque también puede darse por el
hecho totalmente inverso donde la frustración este dado por la falta de delegación
de responsabilidades especificas; en algunas ocasiones suele darse un estilo de
afrontamiento equivocado por parte de los funcionarios, lo que conlleva a que la
forma de reacción ante la dificultad este completamente desfasada de la realidad;
sometimiento a trabajos forzados; así como exigencia de resultados a corto plazo.

Lo analizado hasta el momento, genera una serie de consecuencias entre las

cuales pueden destacar: agotamiento, depresión mayor, psicosis, problemas en el
ámbito laboral y familiar, irritabilidad ante el trabajo, incapacidad para plantearse
metas especificas en su crecimiento profesional y laboral, menor cumplimiento de
funciones laborales, inestabilidad emocional, ambiente laboral tendería a ser
fracturado por las formas incoherentes de actuación, poco procesamiento de
acciones (iniciativas personales) que conlleven a mejorar la calidad organizativa
de la institución. Situaciones todas, que quebrantan la estabilidad institucional
coartando la eficiencia en el desempeño de la seguridad ciudadana como lo
contempla la normativa vigente para la función policial.
 En concordancia con dichos planteamientos, podría pronosticarse que de no
contar con una evaluación psicológica que permita la medición del grado de salud
mental en los funcionarios y funcionarias policiales, llevaría a generarse
inestabilidad en el entorno laboral, además de establecerse condiciones de
vulnerabilidad para las consideraciones éticas de la función policial, creando
distorsión en la calidad de atención a la ciudadanía. Razón por la cual se requiere
proponer un instrumento de evaluación psicológico para la medición del grado de
salud mental de los funcionarios y funcionarias policiales a fin de procurar un
análisis sistemático, coherente y funcional de las características preliminares en el
entorno laboral que sea consecuente, dinámico y cuya aplicación sea progresiva.

Por lo anterior se formulan como interrogantes que guiaran el proceso de

investigación las siguientes: ¿Qué factores inciden en la evaluación psicológica
para la medición del grado de salud mental en los funcionarios y funcionarias?
¿Cuáles son los principales problemas de salud mental en los funcionarios y
funcionarias policiales que puedan ocurrir por la falta de evaluación psicológica?
¿Cuáles serian las estrategias de gestión de los problemas de salud mental de los
funcionarios y funcionarias policiales? ¿Es posible el diseño de un instrumento de
evaluación psicológica para medir el grado de salud mental de los funcionarios y
funcionarias policiales?

Objetivos de la Investigación

Objetivo General

Proponer instrumento de evaluación psicológico para la medición del grado de

salud mental en los funcionarios y funcionarias policiales.

Objetivos Específicos

Describir los factores que inciden en la evaluación psicológica para la

medición del grado de salud mental en los funcionarios y funcionarias.
 Determinar los problemas de salud mental en los funcionarios y funcionarias
policiales por la falta de evaluación psicológica.

Analizar las estrategias de gestión de los problemas de salud mental de los

funcionarios y funcionarias policiales.

Diseñar instrumento de evaluación psicológica para la medición del grado de

salud mental en los funcionarios y funcionarias policiales.

Justificación

Comprender la salud mental en los funcionarios y funcionarias policiales, debe

partir básicamente de la valoración psicológica, por lo tanto la evaluación a través
de un instrumento especifico permite que se forjen un consenso para determinar
los criterios que pueden contribuir en el equilibrio del desempeño para de esta
manera apreciar la practica profesional como un mecanismo que vitalice la
convivencia ciudadana para garantizar sus derechos. En tal sentido, la
investigación adquiere un elemento de importancia para erradicar las practicas
deshonestas, disfuncionales y altamente agresivas de algunos funcionarios y
funcionarias, minimizando el impacto negativo que puede llegar a mantener la
ciudadanía, quienes por lo general manifiestan que los funcionarios mantienen
atenciones inadecuadas con continuos malos tratos.

Así mismo, la investigación puede llegar a ofrecer un medio para el análisis de

las capacidades específicas de los funcionarios y funcionarias lo que llevaría a la
obtención de mejores resultados organizacionales y funcionales del servicio
policial. Por tanto, diseñar el instrumento de evaluación psicológica es una
necesidad prioritaria para concebir el avance integral de la institución policial, a su
vez que permite a los funcionarios y funcionarias contar con una serie de
gestiones que le generen mayores beneficios en lo profesional y personal para
mitigar las situaciones de vulnerabilidad emocional y psicológica.
 De tal manera, que la investigación se muestra pertinente, apoyando con ello
la resolución de posibles conflictos que puedan presentar en el entorno laboral
producto del desconocimiento de las capacidades y limitaciones psicológicas de
los funcionarios y funcionarias. Por lo tanto, el diseño del instrumento resulta ser
original, de interés y novedoso para obtener mejores resultados en la adecuación
de los compromisos profesionales de los funcionarios y funcionarias, a la vez de
brindar la estabilidad temperamental y de la personalidad que tanto requiere. Por
estas razones, la investigación se justifica dentro de los planos: practico, social,
teórico y metodológico.

En el aspecto práctico, la investigación se justifica porque no solo se trata de

apreciar un instrumento de evaluación psicológica sino además de que la futura
aplicación del mismo, permite generar un diagnostico pertinente con el cual se
tomen decisiones en relación a la aplicación de estrategias de gestión de los
problemas de salud mental que puedan llegar a suscitarse. Desde la perspectiva
social, es la investigación un bastión importante que permitirá a la ciudadanía
contar con funcionarios y funcionarias eficientes, cordiales, con sentido de
pertinencia en el cumplimiento de sus actividades laborales, lo que permitirá un
mayor contacto con la colectividad impulsando valores como la solidaridad, el
respeto y la cooperación.

En el ámbito teórico, el proceso investigativo permite que se concentren una

serie de temáticas que puede servir como un medio para reforzar los
conocimientos de la investigadora, pero además afianza el valor de la recolección
de información profunda, con análisis que determine la aplicación a la
problemática abordada, sirviendo de fuente para posteriores investigaciones. Y
por ultimo en el plano metodológico, la investigación persigue la concreción de una
serie de pasos que desde el punto de vista científico le otorguen valor funcional al
estudio, delimitando con ello los procedimientos específicos que guiaran no solo la
recolección de la información, sino además fijara los elementos que tomaran valor
al momento de realizar el análisis a fin de estimar conclusiones y
recomendaciones pertinentes con el nivel de investigación.
 CAPÍTULO II

MARCO TEÓRICO

Concebir las investigaciones científicas, exige el compromiso de generar

fuentes de información donde se desarrolle plenamente el significado especifico
de los objetos de estudio. Por esta razón, la construcción de un marco teórico,
permite al investigador sentar bases que promuevan el conocimiento pleno de los
temas, además que se presta una valoración integral de las variables de estudio,
por cuanto se establecen líneas generales de análisis. En atención a esto, la
investigación presentada parte de un marco teórico con los siguientes elementos:
antecedentes, bases teóricas y bases legales.

Antecedentes

A continuación se enumeran una serie de investigaciones que tienen relación

con el estudio en curso, considerando que tratan sobre la formulación de
instrumentos de evaluación psicológica en funcionarios policiales, pero destacan
su influencia en los entornos internacional, nacional y local, a fin de mantener
aportes metodológicos que sustenten la investigación y den soporte conceptual a
la misma.

En el ámbito internacional, Restrepo (2003) tituló su tesis para optar al título

de psicólogo clínico: La evaluación psicológica en oficiales policiales en el
Contexto de Cataluña. Se realizó un estudio con el propósito de conocer las
percepciones de policias, frente al cumplimiento de su deber, para ello se utilizó la
perspectiva de etnografía focalizada. El estudio se desarrolló en la Escuela de
formación policial de la ciudad de Cataluña. Los informantes fueron 29 informantes
profesores de la institución formativa. En el estudio se encontró que en un medio
con carencias y con alto grado de inconciencia de la función policial, se
desarrollan diferentes estrategias de vida para afrontar dicha problemática.

La investigación permitió destacar la influencia de la evaluación psicológica

para determinar la función policial, y las capacidades específicas que mantendrán
en el ejercicio de la profesional. Se concluye que los funcionarios policiales
mantienen aspectos que no son configurados en su totalidad desde el punto de
vista psicológico y emocional, por tanto se recomienda establecer innovadoras
oportunidades para que dentro de la escuela de formación no solo se consideren
aspectos desde el punto de vista físico y académico sino que se establezcan
políticas para el alcance de destrezas y habilidades psicológicas.

Tomando como base los planteamientos descritos en la investigación citada,

se hace énfasis en el valor que posee la evaluación psicológica para garantizar el
desarrollo integral de la función policial, aunado a ello se realiza una visión
particular al entorno donde se desenvuelven los funcionarios a fin de establecer
dinámicas de integración que permitan mejorar la percepción que mantienen con
respecto a la función policial, a fin de lograr delimitar los alcances específicos de la
profesión.
Así mismo, en la Universidad de Chile, Martínez (2011), presenta la
investigación titulada: Generación de un instrumento de evaluación psicológica en
una red de investigadores y profesionales vinculados con materias policiales y
derechos humanos en Chile. El objeto de estudio es aportar algunos elementos a la
discusión teórica que existe sobre el empleo de la fuerza por parte de los policías. El
estudio, fue desarrollado de campo, nivel descriptivo. Se tomó una población de 60
sujetos y la muestra fue de 18, considerando un 30% que según Muñoz, (2012) es
representativa. La validez fue suministrada por expertos y la confiabilidad fue de
68,5; es decir el instrumento fue confiable. Al respecto se concluye que la institución
recae en concluir acerca de la necesidad evaluar psicológicamente a la red de
investigadores que permita la atención legal de los policías, por cuanto son
recursivos los incidentes que se generan y la atención al funcionario queda sólo a
disposición o criterio personal, lo cual afecta los ingresos por el rol desempeñado.
En atención a los planteamientos particulares de la investigación citada, se puede
evidenciar que dentro de los contextos laborales en los que se maneja la función
policial existen una serie de incidencias que permiten establecer la vulnerabilidad de
los agentes policiales en relación al manejo de las consideraciones psicológicas por
cuanto son involucrados en distintos procesos con lo cuales se afecta sus ingresos
económicos y la estabilidad familiar, por esta razón se asume la citada investigación
como referente particular admitiendo con ello que a través de la evaluación
psicológica se promueve el adelanto de las consideraciones pertinentes al
cumplimiento de la función policial.
A nivel nacional, Reyna (2013), presenta en la Universidad José Antonio Páez en
la Facultad de Ciencias Jurídicas y políticas su trabajo de Grado el cual lleva por
título: Procedimiento de la oficina de control en la evaluación psicológica de la
actuación policial para establecer las responsabilidades de los funcionarios
policiales; el objeto de la misma fue analizar el procedimiento de la oficina de control
para la evaluación psicológica de la actuación policial para establecer las
responsabilidades de los funcionarios policiales del municipio San Diego de acuerdo
a la legislación venezolana y se orienta bajo el tipo de investigación documental.
Este trabajo se relaciona con la presente investigación debido a que se establece
además de la evaluación psicológica, que tipo de responsabilidad se aplica a los
funcionarios y funcionarias policiales, permitiendo con ello, esclarecer la función que
puede prestar dentro de la coordinación policial estadal para mejorar las condiciones
legales de los efectivos policiales, estableciendo con ello un proceso de asesoría
continua con la cual se preserven los derechos humanos y profesionales dentro de
la institución.
En al ámbito local, Suarez (2013), presentó un trabajo titulado: Importancia de
la evaluación psicológica a los funcionarios policiales del puesto policial Bramón.
El propósito de éste estudio es presentar los avances, en el conocimiento
acumulado respecto a la necesidad de evaluar psicológicamente al personal
policial de la estación policial o punto de control Bramón, el tipo de investigación
es descriptiva con un diseño de campo para dicho estudio, se trabajó con una
población de 23 funcionarios policiales y se tomó una muestra de 12 policías. Se
asume como técnica la encuesta y como instrumento un cuestionario con un total
de 23 ítems con alternativas de respuestas dicotómicas. Se concluye la necesidad
desarrollar una mayor comprensión sobre cómo se pueden adaptar los principios
psicológicos a las practicas policiales.
En relación a esta investigación, se puede asumir que la evaluación psicológica
para los efectivos policiales es un elemento necesario para que cada uno tenga
conocimiento de la función policial, a demás que sirve de soporte para evaluar los
aspectos que forman parte del instrumento a ser diseñado, permitiendo una
valoración de sus características elementales. En atención a estos elementos la
investigación se asume como complemento necesario en la fundación del
conocimiento de los miembros de la policía para poder tener una visión integral de
los aspectos psicológicos fundamentales.
 REFERENCIAS

Flórez, G. (2014). Mediciones psicológicas contemporáneas. Lima: Elite.

Gómez, Y. (2014) Practicas psicológicas. México: Dimensiones.

Houtman, I; Kompier, M. (2013) Trabajo y salud mental. España: Madrileña.

Linares, B. (2013) Teorías de la comprensión psicológica en contextos laborales.

Perú: Fuentes.

Martínez (2011), presenta la investigación titulada: Generación de un instrumento

de evaluación psicológica en una red de investigadores y profesionales
vinculados con materias policiales y derechos humanos en Chile. Universidad
de Chile

Mikulic, I. (2013) La evaluación psicológica y el análisis ecoevaluativo. Argentina:

Universidad de Buenos Aires.

Milic, S. (2012) Evaluación psicológica en la salud mental. México: Trillas.

Restrepo (2003) La evaluación psicológica en oficiales policiales en el Contexto

de Cataluña. Universidad de Cataluña.

Reyna (2013) Procedimiento de la oficina de control en la evaluación psicológica

de la actuación policial para establecer las responsabilidades de los
funcionarios policiales. Universidad José Antonio Páez

Suarez (2013): Importancia de la evaluación psicológica a los funcionarios

policiales del puesto policial Bramón. Universidad Nacional Experimental de la
Seguridad.