Professional Documents
Culture Documents
MEJORADOR DE SUELOS
INTRODUCCION
El yeso agrícola es un mineral muy suave compuesto por sulfato de calcio di-hidratado
(CaSO4+2H2O) que ha sido utilizado por los agricultores desde hace mucho tiempo. Se
aplicó ampliamente como fertilizante en Europa en el siglo XVIII, incluso los griegos y
los romanos lo utilizaron. Más recientemente, el yeso se ha convertido en una enmienda
del suelo que ha demostrado ser capaz de recuperar suelos sódicos degradados y
mejorar varias propiedades físicas del suelo. El yeso puro está constituido por 79 % de
sulfato de calcio y 21 % de agua. El sulfato de calcio contiene 23.3 % de calcio (Ca) y
18.6 % de azufre (S); es moderadamente soluble en agua (2.5 g/L), aproximadamente
200 veces mayor que la cal agrícola. Esta característica de solubilidad del yeso hace que
el calcio sea más móvil que el calcio de la cal y le permite moverse con mayor facilidad
a través del perfil del suelo.
Las propiedades químicas del suelo que se mejoran con la aplicación de yeso son: 1. La
mitigación de la acidez del subsuelo y la toxicidad por aluminio, favoreciendo el
enraizamiento y la capacidad de las plantas para absorber adecuadamente agua y
nutrientes durante periodos de sequía; y 2. Como mejorador de suelos sódicos. Estas
características del yeso representan un gran potencial para ofrecer beneficios a los
productores.
BENEFICIOS
Disminuye la densidad del suelo
Los suelos tratados con yeso presentan una mejor densidad comparado con suelos no
tratados. La materia orgánica puede incluso disminuirlo más cuando se utilizan ambos.
Un suelo más suave es más sencillo de labrar y las cosechas son mejores.
Ayuda a reparar suelos no aptos para labranza
Una aplicación general de yeso en el suelo puede resultar un buen procedimiento inicial
para preparar un terreno no arable, ya que el mismo, permite que la permeabilidad del
suelo dure varios años, ayudando a que los fertilizantes aplicados sobre la superficie
penetren de manera más sencilla.
Previene el agrietamiento del suelo y ayuda a la germinación de semillas
El yeso disminuye y permite el agrietamiento de la superficie causado por las lluvias,
sistemas de riego o por ser un suelo inestable. La prevención en evitar el agrietamiento,
se traduce en una mayor germinación de semillas, de manera más rápida por lo que se
puede tener la cosecha unos días antes. La germinación generalmente se incrementa
desde un 50 hasta en un 100%. La prevención y el uso del yeso en suelos que tienden a
agrietarse generan una reacción de floculación.
Disminuye la pérdida de fertilizante nitrógeno en el aire
El calcio que contiene el yeso ayuda a disminuir la volatilidad de nitrógeno de amonio
resultante de las aplicaciones de amonio, nitrato de amonio, urea, sulfato de amonio ó
cualquier otro fosfato de amonio. El calcio puede disminuir la efectividad del pH
precipitando los carbonatos y formando una sal compleja de calcio con el hidróxido de
amonio la cual previene la pérdida de amoníaco a la atmósfera. El calcio mejora la
absorción de nitrógeno por medio de las raíces de la planta, especialmente cuando éstas
son jóvenes.
Ayuda a las plantas a absorber nutrientes
El calcio, el cual se encuentra en el yeso, es esencial para los mecanismos bioquímicos
por medio de los cuales las raíces de la planta absorben los nutrientes necesarios para su
desarrollo. Sin una cantidad adecuada de calcio estos mecanismos no pueden funcionar.
Detiene la erosión
El yeso mejora la filtración del agua y mejora también la conductividad hidráulica del
suelo. Brinda una protección contra los caudales del agua que se hacen por tormentas
las cuales generan erosión en el suelo. De la misma manera, disminuye la erosión
causada por el viento. Los problemas de polvo se pueden erradicar, combinando el yeso
con polímeros solubles en agua. Con un suelo preparado y estabilizado se logra que
menor cantidad de pesticidas y residuos de nutrientes escapen de la superficie del
terreno para alcanzar ríos o lagos; por lo tanto, el yeso genera grandes beneficios al
medio ambiente.
7. Mejora la estructura del suelo
El yeso provee calcio el cuál ayuda a que las partículas más pequeñas de arcilla se
junten formando una menor cantidad de partículas de arcilla, pero ahora más grandes.
Este proceso se llama floculación, el cual, es necesario para mejorar el terreno
permitiendo que el agua y el aire penetren de manera favorable mejorando el
crecimiento de las raíces.
Mejora la calidad de los frutos y previene enfermedades de las plantas
La cantidad de calcio en los frutos generalmente es solamente marginal y a menudo
resulta deficiente en los frutos en desarrollo. Para obtener una buena calidad en los
mismos, es necesario que cuente con una buena cantidad de calcio, su función es
desplazarse lentamente de una parte de la planta a otra siendo los frutos el final de la
cadena, por lo que estos reciben una proporción muy pequeña del nutriente. Es por esto
que es importante que el calcio esté siempre disponible en las raíces. En suelos con un
pH muy alto no existe suficiente cantidad de calcio, por lo tanto, el yeso ayuda a que se
cubra ese requerimiento. El yeso es utilizado en los cultivos de cacahuate los cuales
crecen debajo del suelo, para mantenerse libre de enfermedades. Por otra parte el yeso
mejora la terminación tipo flor en la raíz de la sandía y el tomate y en el hoyo de las
manzanas. El yeso resulta más benéfico en el cultivo de papa en suelos ácidos debido a
que controla la sarna. La putrefacción de la raíz del aguacate causada por el
“phytophthora” es parcialmente controlable mediante el uso del yeso.
Mejora las arcillas que se expanden
El yeso puede disminuir la expansión y el agrietamiento asociados con altos niveles de
sodio en las arcillas tipo montmorillonita. Conforme el sodio es reemplazado por calcio
en estas arcillas, se hinchan menos y por lo tanto no se obstruyen fácilmente los
espacios entre poros a través de los cuáles se mueven el aire, el agua y las raíces.
10. El yeso facilita el arar suelos ligeramente húmedos
Los suelos que han sido tratados con yeso tienen un rango más amplio de niveles de
humedad que permiten arar de manera más segura sin el peligro de una compactación o
defloculación. Esto es acompañado con una mayor facilidad de labranza y una
preparación más efectiva de la cama de sembrado y el control de la maleza. Se requiere
menos energía para la labranza.
Previene el anegamiento de los suelos
El yeso mejora la habilidad del suelo para drenar y no anegarse debido a la combinación
de altos niveles de sodio, arcillas expandidas y exceso de agua. Con el uso del yeso se
obtienen mejoras en la taza de infiltración y en la conductividad hidráulica y se añade
habilidad a los suelos para tener un drenaje adecuado.
Ayuda a hacer estable la materia orgánica del suelo.
El yeso es una fuente de calcio lo cual es el mayor mecanismo que une la materia
orgánica del suelo a la arcilla en el suelo lo cual proporciona estabilidad a los agregados
del suelo. El valor de la materia orgánica aplicada al suelo aumenta cuando esta se
aplica con yeso.
Aumenta el valor de los orgánicos
El yeso aumenta el valor de los agregados de orgánico. La mezcla de yeso y orgánicos
aumenta el valor del resto de los agregados al suelo, especialmente para mejora de la
estructura del suelo. Los altos niveles de materia orgánica en el suelo son siempre
asociados con cantidades importantes de calcio lo cuál es en parte del yeso. La
disminución de calcio quema la materia orgánica del suelo cuando los suelos son
cultivados uniendo la materia orgánica a arcilla.
Corrige la acidez del subsuelo
El yeso puede mejorar algunos suelos ácidos aún mejor que la cal. Se puede prevenir la
costra en la superficie. El efecto tóxico del aluminio soluble puede ser disminuido,
incluso en el subsuelo donde la cal no puede penetrar. Esto hace posible tener raíces más
profundas, lo cual resulta beneficioso para los cultivos. El mecanismo es más que un
reemplazo de iones de hidrógeno ácido, los cuales pueden ser disueltos del suelo para
dar un pH más alto. Los iones de hidrógeno no pueden migrar rápidamente en suelos
que contienen arcillas. Se sugiere que el sulfato de yeso forma un complejo (AISO4+)
con aluminio lo cual hace el aluminio no tóxico. También se sugiere que los iones del
sulfato reaccionan con los hidróxidos de hierro para liberar iones de hidrófilo lo cual da
el efecto de la cal que aumenta el pH del suelo. El yeso es utilizado ampliamente en
suelos ácidos.
Tiene un 17% de sulfatos
El yeso tiene un 17% de sulfatos lo cual es la mejor forma de absorción de sulfuro para
las plantas.
Ayuda a recuperar los suelos sódicos
El yeso es utilizado en la recuperación de suelos sódicos. Cuando el porcentaje de sodio
intercambiable de suelos sódicos es también alto, éste debe ser disminuido para
mejoramiento del suelo y un mejor crecimiento del cultivo. La manera más económica
de hacerlo es agregar yeso, lo cual es un sustituto del calcio. El calcio reemplaza el
sodio que se encuentra en los puntos de vinculación con la arcilla. El sodio es entonces
disuelto del suelo como un sulfato de sodio a un tiradero adecuado. El sulfato es el
residuo del yeso. Sin el yeso el suelo no puede ser sometido a dispersión o disolución.
Algunas veces un porcentaje de sodio intercambiable de 3 es alto, pero algunas veces se
puede tolerar hasta un 10, dependiendo del cultivo.