La industria alimentaria tiene un excelente historial de proporcionar un producto
seguro y saludable para el consumidor. Esto no es un accidente Los técnicos en alimentos de la industria y el gobierno trabajan juntos para garantizar que los miles de millones de contenedores de alimentos producidos cada año lleguen al consumidor en excelentes condiciones. Ocasionalmente, los envases desarrollan problemas de integridad y el producto enlatado sufre fallas prematuras por corrosión, pérdida de integridad del sello, o desarrolla una decoloración que es objetable para el consumidor. Los miembros solicitan frecuentemente a la Asociación Nacional de Procesadores de Alimentos (NFPA) que proporcione una evaluación independiente de un problema por parte de un tercero. Las partes involucradas podrían ser dos miembros procesadores de alimentos, un miembro y un procesador no miembro, o un procesador de alimentos y uno de sus proveedores de ingredientes o materiales de empaque de alimentos. La industria alimentaria debe determinar rápidamente las causas de estos problemas para evitar su recurrencia. La corrosividad de los materiales utilizados para la fabricación de contenedores de metal siempre ha sido una consideración importante en la elección de estos materiales y el uso que se les puede dar. En lo que respecta a este país, en cualquier caso, la hojalata es el material más comúnmente utilizado para contenedores metálicos que se utilizan literalmente para cientos de productos diferentes, para cada uno de los cuales se debe estudiar el complejo de hojalata / producto para detectar posibles efectos corrosivos nocivos. En este artículo, el autor considera la hojalata, la "placa negra" y el aluminio en su papel de metales estructurales para contenedores, describiendo sus características de corrosión bajo diversas condiciones y revisando el estado actual del conocimiento de este importante tema de la corrosión de contenedores metálicos.