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Coronel, veinticuatro de julio de dos mil quince

PROCEDIMIENTO: De Aplicación General.


MATERIAS: Despido injustificado/cobro de prestaciones.
DEMANDANTE: ROBERTO ESTEBAN RODRIGUEZ BRIONES.
APODERADO: CRISTIAN PEREZ SUAZO.
DEMANDADA: MAESTRANZA AMSU LTDA.
REPRESENTANTE LEGAL: MARCELO NUÑEZ MASFERRER.
APODERADO: JORGE FIGUEROA ARANEDA
RIT: O – 18 – 2015.
_________________________________________/
Coronel, veinticuatro de julio de dos mil catorce.
VISTOS, OIDOS Y CONSIDERANDO:
PRIMERO: Que ante este Primer Juzgado de Letras del Trabajo de Coronel,
se inició esta causa R.I.T. O –18 – 2015, en Procedimiento de Aplicación
General, y se han presentado el demandante don ROBERTO ESTEBAN
RODRIGUEZ BRIONES, chileno, maestro soldador, C.I. N° 12.526.941-9,
domiciliado en Calle Chaiten N 8326, Lan C, comuna de Hualpén, y la
demandada MAESTRANZA AMSU LTDA. Rut: 79.997.090-2, representada
legalmente conforme al artículo 4 del Código del Trabajo, por MARCELO NUÑEZ
MASFERRER, ambos domiciliados en Parcela 53, Km. 18, camino a Coronel,
Coronel.
SEGUNDO: Que el actor viene en solicitar se declare que el despido de que
fue objeto es indebido y que se ordene el cobro de las prestaciones que señala,
fundado en los siguientes antecedentes:
Que con fecha 23 de febrero de 2009 comenzó a prestar servicios bajo
dependencia y subordinación para la demandada, realizando las funciones de
maestro soldador. Que la relación laboral, en cuanto a la duración, tenía
naturaleza de contrato indefinido.
Que su jornada de trabajo era de 45 horas semanales, distribuyéndose de
lunes a jueves de 08:00 am a 17:45, pm, con media hora para colación, y los días
viernes de 08:00 am a 16:30 pm, también con media hora de colación.
Que su remuneración mensual consistía en sueldo base de $367.000,
gratificación legal $89.063, Asignación de movilización $51.000, Bono antigüedad
$7.340, y otros bonos.
Que, la relación laboral se desarrolló con absoluta normalidad hasta el día
4 de marzo de año en curso, fecha en que se le hizo entrega de carta de aviso de
despido, la que indicaba “Nos permitimos comunicar que se ha resuelto poner
término al contrato que lo vincula con la empresa, el que se hará efectivo a contar
del 4 de marzo de 2015, por causal del art. 160 n 3, inasistencia injustificada
durante dos días seguidos en el mes 02 y 03 de marzo de 2015.-
Que a fin de obtener una solución pacífica al conflicto, presentó un
reclamo ante la Inspección del Trabajo con fecha 4 de marzo de 2015, citándose a
una audiencia para el 26 del mismo mes y año, oportunidad en la que solo hubo
acuerdo en cuanto al pago de saldo de remuneración fija por días trabajados del
mes de marzo, más no respecto de los demás ítems reclamados.
Que, las ausencias que fundan la carta de despido, si bien son ciertas, son
justificadas, que el 2 de marzo de 2015, a las 07:45 solicitó a su superior directo,
Julio Soto, vía telefónica permiso por dos días completos, 2 y 3 de marzo, para
realizar diligencias médicas de su hijo y propias del trabajador.
Que el día 2 de marzo fue con su hijo al médico, toda vez que se
encontraba con un cuadro de rinofaringitis aguda, que fueron atendidos en el
Sanatorio Alemán a las 12:00, no obstante que había llegado a las 10:00 am.
Posteriormente entre las 13:00 pm y las 17:00 pm aproximadamente recorrió
innumerables farmacias, con le objeto de cotizar medicamentos los que no pudo
comprar por su alto precio.
Que el 3 de marzo, también contando con el correspondiente permiso
previo, debió asistir al Hospital Higueras a buscar sus medicamentos producto
de un cuadro alérgico de rinitis aguda, que padece, que llegó a las 08:00, y se
retiró a las 15:30 horas, que con posterioridad volvió a su hogar a cuidar a su
hijo.
Que el día 4 de marzo, al llegar a trabajar, a eso de las 07:40 al marcar su
ingreso en portería el sistema computacional le arroja la frase “registro no valido”.
En ese momento se quedó esperando hasta que apareció su supervisor, quien le
indicó que fuera a la oficina de RRHH. Que en ese lugar, lo recibió el jefe de
recursos humanos, Mauricio Jerez, y le entregó la carta de aviso de término de
contrato. Que la carta ya se encontraba lista cuando llegó a dicha oficina. Que lo
obligaron a firmar la carta de despido, y fue a la inspección del Trabajo, junto al
presidente del sindicato.
Que, previas citas legales, solicita se tenga por interpuesta la demanda en
procedimiento ordinario por despido injustificado, cobro de indemnizaciones y
prestaciones en contra de su ex empleadora Maestranza Amsu Ltda.
Representada legalmente por Marcelo Núñez Masferrer, ambos individualizados,
admitir la demanda a tramitación citar a las audiencias respectivas, y en
definitiva declarar que el despido es indebido, que se le adeuda y se le pague la
suma de $514.403, por concepto de indemnización sustitutiva del aviso previo,
$3.086.418, por concepto de indemnización por años de servicio, esta última
aumentada en un 80% conforme a lo dispuesto en el artículo 168 b del Código del
Trabajo.
Que, contestando la demanda, comparece JORGE FIGUEROA ARANEDA,
abogado, domiciliado en Colon 1038, Talcahuano, en representación de
Maestranza Amsu Ltda. ya individualizada, quien señala:
Que el demandante fue contratado el 23 de febrero de 2009, para prestar
servicios, primero como ayudante de estructuras y luego como soldador,
mediante un contrato indefinido. Que la jornada de trabajo era la señalada por el
actor. Que la remuneración del trabajador era de $318.067, por concepto de
sueldo base, y no como se indica en la demanda, que además percibía una
gratificación mensual de $89.0063, y un bono de antigüedad de $7.340, y una
asignación de colación, que sin embargo no debe considerarse dicho bono para
efectos de determinar la última remuneración mensual para los efectos del
artículo 12 del código del trabajo.
Que el demandante fue despedido el 4 de marzo de 2015, por la causal del
número 3 del artículo 160, esto es no concurrencia del trabajo a sus labores sin
causa justificada, durante dos días seguidos los días 2 y 3 de marzo de 2015.
Que los hechos en que se fundó la causal de terminación de su contrato de
trabajo, fue precisamente la inasistencia a sus labores los días indicados, sin
causa justificada.
Que el demandante hizo uso de un período de vacaciones por 10 días
hábiles a partir del 16 de febrero de 2015, debiendo reintegrarse a sus labores el
día 2 de marzo del mismo año. Que al demandante se le habían adelantado días
de vacaciones del periodo siguiente, ya que las anteriores habían sido
íntegramente otorgadas. Que además de hacer uso del periodo de vacaciones,
hizo uso de un préstamo para vacaciones por la suma de $150.000.-
Que, debiendo el demandante reintegrarse a sus labores el día 2 de marzo
este se comunicó con el supervisor de producción Julio López Salamanca, en
forma telefónica, solicitando se le concedieran dos días más a cuenta de
vacaciones, lo que se le negó dado que ya se le habían anticipado 9 días del
periodo de vacaciones siguiente. Que frente a ello manifestó que se tomaría
igualmente dos días más sin goce de remuneraciones. Nunca mencionó la razón
del permiso, ni indicó que tuviera algún problema grave o de salud que le
impidiera ir a trabajar, sino solo que quería dos días más de vacaciones.
Que la demandada niega que se le hubiera otorgad permiso por dos días
completos para ausentarse de sus labores para realizar diligencias médicas
relativas a su hija y a el mismo.
Que la demandada niega que el demandante y su hijo hayan recibido la
atención médica que indican en la demanda, ya que no le consta dicha
circunstancia y nunca hizo llegar ningún documento médico a la empresa, no
manifestó tal circunstancia ni siquiera al momento de ser despedido.
Que incluso de haber recibido la atención medica que indica la
demandante ello no justifica en caso alguna su inasistencia, dado que no se trata
de hechos graves que le impidan concurrir a sus labores.
Que los hechos fundantes del despido constituyen la causa de caducidad
de la relación laboral invocada por su representada, por lo que el despido es
justificado, siendo improcedente el pago de las indemnizaciones demandadas.
Que, en ese sentido, interpone excepción perentoria de justificación del
despido, por lo que solicita el rechazo de la demanda. Que en subsidio, para el
evento que se condene a su representada al pago de alguna suma favor del actor,
opone excepción de compensación, por la suma de $112.500, por concepto de
préstamos de vacaciones otorgado al demandante con fecha 16 de febrero de
2015, por la suma de $150.000, del cual solo se le descontó la suma de $18.500,
en el pago de su última remuneración, por lo que solicita se tenga por contestada
la demanda y en definitiva rechazarla con expresa condenación en costas.
TERCERO: Que, con fecha 18 de mayo de 2015 se llevó a cabo la
audiencia preparatoria, realizada con la asistencia de todas las partes, la
demandada debidamente representada, y todas asistidas por sus apoderados.
Que, concluido el periodo de discusión el Tribunal procedió a llamar a las
partes a conciliación, proponiendo las bases de arreglo, el que sin embargo no
prosperó.
CUARTO: Que, hecho lo anterior, se procedió a recibir la causa a prueba
fijando los siguientes hechos a probar:
1. La existencia o no de comunicación entre el trabajador y su jefe directo el
día 2 de marzo de 2015, hora, términos y/o expresiones utilizadas por
cada una de las partes.

2. Existencia o no de razones que justifiquen la inasistencia del trabajador los


días 2 y 3 de marzo de 2015

3. La existencia o no de razones que justifiquen el despido.

4. La existencia de prestaciones adeudadas, naturaleza y monto.

5. Efectividad de adeudarse por el trabajador la suma de $112.500 al


empleador.-

QUINTO: Que, se establecieron como hechos no controvertidos:

-La fecha de ingreso del trabajador a la prestación de servicios el día 23 de


febrero de 2009, la jornada de 45horas semanales, y el día de término de la
relación laboral el 4 de marzo de 2015, por la causal del 160 N3 del código del
trabajo

-Que el trabajador no asistió a prestar servicios los días 2 y 3 de marzo de 2015.-

SEXTO: Que, con fecha 6 de julio de 2015 se llevó a cabo la audiencia de


Juicio, con la asistencia de todas las partes, asistidas por sus apoderados.
Que, en dicha audiencia, las partes, a fin de acreditar los hechos que
fundan sus pretensiones, incorporaron la siguiente prueba, conforme al orden
establecido en el artículo 454 N° 1 del Código del Trabajo:
De la Demandada:
Documental:
1.- Copia de contrato de trabajo del demandante de fecha 23 de febrero de 2009,
junto a sus anexos de fecha 1 de septiembre de 2009, 1 de junio de 2011, 1 de
noviembre de 2012 y 01 de noviembre de 2014.
2.- Acta de comparendo de conciliación ante la Inspección del Trabajo de Coronel
de fecha 26 de marzo de 2015.
3.- Carta de aviso de término de contrato de trabajo de fecha 4 de marzo de
2015, firmada por el demandante, junto a comprobante de envío a Inspección del
trabajo.
4.- Copia de liquidación de remuneraciones del demandante de los meses de
enero y febrero de 2015.
5.- Solicitud de préstamo de vacaciones de fecha 16 de febrero de 2015, firmada
por el demandante junto a comprobante de transferencia de la suma de $150.000
por préstamo de vacaciones a la cuenta vista del demandante.
6.- Copia de correo electrónico de 3 de marzo de 2015 enviado por el Sr. Julio
soto Salamanca a Mauricio Jerez, ambos de maestranza AMSU, en que comunica
al jefe de personal las ausencias del demandante.-
Testimonial:
1.- Declaración de Julio Soto Salamanca, Quien debidamente juramentado y
legalmente interrogado, declaró: Que el demandante había faltado a trabajar un
día lunes y martes, en marzo.
Que el demandante había planificado sus vacaciones, y que el lunes debía volver,
que el demandante llamó al testigo, solicitando permiso, por dos días más, que
esta solicitud tenía q pasar a jefatura directa, por lo que le dijo que volviera a
llamar a medio día, sin embargo no lo llamó hasta las 4 de la tarde preguntando
si había permiso, a lo que el testigo respondió que le habían dicho que no, que
aún debía días del próximo feriado, a lo que el trabajador dijo que necesitaba dos
días de permiso, así que volvía el miércoles.
Que no supo más del trabajador, hasta el día miércoles, que el testigo lo vio
entrando a la maestranza y le dijo que se dirigiera a la oficina de recursos
humanos. Que el testigo no sabe que ocurrió, se imagina que le comunicaron que
estaba despedido. Consultado acerca de si el trabajador comunicó las razones de
su ausencia el testigo indica que no.
Se le exhibe el correo electrónico acompañado como prueba documental, a lo que
indica que lo reconoce, que fue enviado por él al jefe de recursos humanos, en el
que indica que el trabajador se tomaría dos días más de permiso, y solicita por
favor analizar, al momento de llamar dijo q necesitaba hacer trámites.
El testigo señala que redactó el correo de la manera más justa y formal.
Consultado acerca de si el trabajador había tenido problemas previos a esta
audiencia señala que no.
2.- Mauricio Ervin Jerez Sáez. Quien debidamente juramentado y legalmente
interrogado señaló:
Que conoce a las partes, que el demandante ya trabajaba en la maestranza
cuando el testigo comenzó a trabajar hace unos tres años. Que el demandante
trabajaba como soldador en la maestranza, en la nave 5, parcela 53, km 18
escuadrón.
Que el demandante trabajó hasta febrero de 2015 en la maestranza.
El testigo indica que es jefe de recursos humanos, le corresponde ver el personal,
confirmar la asistencia, “hacer sueldo”, ver contrataciones, finiquitos. Señala que
se le informó que el demandante no se presentó los días 2 y 3 de marzo, días
lunes y martes, antes de eso asistía normalmente, las dos semanas anteriores
estuvo con vacaciones que terminaban ese primer día, el lunes tenia q ir.
Señala que “el trabajador falló, la verdad de las cosas, tipo 10 de la mañana Julio
Soto me contacta”. Agrega que el trabajador quería dos días más de vacaciones
adicionales, lo cual no aceptó, porque en el caso de Rodríguez, le habían otorgado
días a cuentas de vacaciones, no le quedaban días de vacaciones.
Señala que el trabajador había ido a hablar con él porque tenía una situación
especial, que hablaron en diciembre o noviembre, en esa época le dijo que no
podía decirle si o no, pero que volviera más cerca de la fecha.
Que hablaron de nuevo en febrero, y autorizó el adelanto de vacaciones. Por esta
razón negó los dos días a cuenta de vacaciones solicitados.
Consultado por el Tribunal señala que es normal otorgar feriado o permiso
cuando un trabajador lo necesita. Que en cambio no es normal cuando tiene
feriado en contra o cuando lleva poco tiempo.
Agrega que cuando volvió el miércoles, la instrucción era, que se presentara a su
oficina, donde mantuvieron un diálogo en el que le señala que había faltado dos
días seguidos, momento en que el trabajador reconoce su error, y no justifica su
ausencia.
Las palabras exactas utilizadas no las recuerda, cree que el trabajador le señaló
que no debió haberlo hecho y que uno tiene que asumir su situación no más.
Consultado por el tribunal sobre las justificaciones del trabajador, el testigo se
limita a señalar que el trabajador no le presentó información formal, y que dicha
reunión habría durado cinco minutos.
Sobre el procedimiento para solicitar permisos sin goce de sueldo indica que hay
un documento, que tienen todos los supervisores, en triplicado, es un
formulario, lo lleva el supervisor o el encargado del grupo de trabajo. Que va con
firma del supervisor y el trabajador, que es automático, por ejemplo si se
necesita el día de permiso, se lo hacen en forma automática.
Que por regla general los permisos se solicitan en los días anteriores, que en
forma general no se solicitan permisos por teléfono, que si ocurriera una
situación urgente le habría indicado al trabajador que fuera a firmar el permiso,
que sin embargo no hay un plazo mínimo establecido.
Que en el caso de los permisos, basta que se pida para que se le otorgue, lo que
pasa es que el supervisor consulta el motivo, y se evalúa la razón, en caso que el
motivo no sea válido podrían rechazar el motivo, pero hasta ahora nunca se ha
hecho.-
Que respecto de la información que le remitió Julio Soto, señala que le dijo que el
trabajador lo había llamado tipo 10 u 11 de la mañana solicitando dos días más
de vacaciones. Que nunca se le mencionó que el trabajador solicitaba un permiso
sin goce de sueldo.
Indica que el trabajador adeuda el crédito de vacaciones, por la suma de
$150.000, pagadero en 8 cuotas de las cuales se le descontó la primera en la
liquidación de sueldo.
Absolución de posiciones
Declaración del Trabajador ROBERTO ESTEBAN RODRIGUEZ BRIONES, quien
señaló que trabajó durante 6 años aproximadamente en Maestranza AMSU en el
cargo de soldador en estructuras. Que mediante la carta de aviso se le informó
que era despedido por no presentarse a trabajar los días lunes 2 y martes 3 de
marzo.
Que interrogado reconoce que no asistió, agrega que con su familia volvieron de
vacaciones y tuvieron problemas con su hijo, al que le dio una rinofaringitis
aguda y estuvo con fiebre. Agrega que el lunes llamó temprano, a las 8, a Julio
Soto, pidiéndole permiso por dos días de vacaciones, o si no, por dos días sin goce
de sueldo. Que más tarde lo llamó y le dijo que “no vacaciones”, por lo que
entendió que se le otorgaban los días sin goce de sueldo, que Julio Soto le dijo
que si, y el le respondió que se veían el miércoles. Agrega que estuvieron el el
doctor el que los atendió pasadas las 12:00 y en la tarde estuvo cotizando
medicamentos para poder comprarlos y se desocupó “súper tarde”.
Indica que el día siguiente el fue al Hospital Higueras, por que padece de rinitis
crónica alérgica y tiene que ir todos los meses a buscar los medicamentos, pero
en esta oportunidad debía renovar la receta, por lo que necesitaba hablar con su
doctor para que le diera una nueva receta, como un sobrecupo. Como su doctor
estuvo en pabellón en la mañana lo esperó.
Sobre el día del despido señala que se presentó como un cuarto para las 8 pero al
tratar de “marcar”, el ingreso aparecía como no válido, que en portería no tenían
información, pero al llegar su supervisor, alrededor de las 10:00 le dijo que
hablara con don Mauricio, quien no había llegado. Cuando llegó conversaron, le
dijo ahí en portería que estaba despedido por ausencia, el trabajador le indicó que
había tenido un problema, pero que en ese momento no andaba con los papeles
para mostrárselos, el trabajador reconoce que se confió por que habitualmente
cuando uno pedía permisos urgentes lo hacía por teléfono y luego firmaba el
papel.
Consultado sobre el préstamo de vacaciones, lo reconoce en la suma de
$150.000, y agrega que se le alcanzó a descontar una de las 8 cuotas, por lo que
adeuda el saldo.
Por su parte la demandante rindió la siguiente prueba a fin de acreditar los
fundamentos de su demanda.
Documental
1.- Certificado de fecha 2 de marzo año 2015, suscrito por el médico Juan Nazar,
que indica que asistió a Manuel Rodríguez, quien padecía un cuadro de rino-
faringitis aguda, el que acude con su padre, a medio día, y deja constancia que el
certificado se extiende para presentarlo en el lugar de trabajo del padre.
2.- Certificado emitido por el Servicio de Salud Talcahuano, Hospital Higueras, en
que el médico que suscribe, indica que el demandante fue atendido a las 10:00, y
que solicitó continuidad de una receta médica.
Testimonial
1.- MARCELA JEANNETTE ARANCIBIA RIOS, 16.037.165-K, técnico, paramédico,
quien debidamente juramentada y legalmente interrogada declaró:
Que conoce al demandante, es su esposo, que sabe que el juicio se inició por el
despido de su esposo. Sobre el despido señala que es injustificado, dado que lo
echaron habiendo pedido permiso telefónicamente con su supervisor. Que el
permiso era para los días 2 y 3 de marzo de este año. Que su esposo se comunicó
temprano en la mañana con su supervisor, alrededor de las 8, llamó a Julio Soto.
Que le pidió autorización si podía ser a cuenta de vacaciones y le respondió que
lo llamara “otro rato”, para saber si era a cambio de vacaciones o devolución de
horas. Agrega que el demandante le explicó al supervisor que tenía a su hijo
enfermo, y que además el día martes tenía que ir al hospital Higueras con el
otorrino.
La testigo señala que alrededor de una hora su esposo habría obtenido la
confirmación sobre el permiso. Agrega que ella no pudo llevar a su hijo al doctor
por que no encontraba a su jefa telefónicamente.
La testigo señala que se encontraba al lado del trabajador al momento de
producirse la conversación con Julio Soto, que el teléfono estaba en alta voz, y
que escuchó que no le autorizaban los días a cuenta de vacaciones, pero si, sin
goce de sueldo, y que la conversación había terminado bien.
2.- DANIEL ALFREDO GONZALEZ ASTETE, 7.137.139-5, domiciliado en Prieto
2155, Concepción, el que previamente juramentado y legalmente interrogado
señaló:
Que conoce a ambas partes, sobre el despido, indica que no recuerda el día
exacto, que el día que el trabajador se reincorporó a sus labores no pudo
ingresar, le dijeron que tenia que ir a la administración, y después se enteraron
que estaba despedido, por una falta injustificada de dos días, que deben haber
sido los dos primeros días de marzo de 2015.
Recuerda que el primer día que faltó Roberto llamó a su supervisor, Julio Soto,
quien se encontraba en ese momento al lado del testigo, alrededor de las 8:00 u
8:05, que concluida la conversación telefónica el supervisor le comentó que lo
había llamado Roberto, que tenía problemas con la “guagua” y que tenía que
hacer las consultas “arriba”, con Mauricio Jerez, el jefe de personal.
Agrega el testigo que si bien el no vio boletas de atenciones médicas, el propio
Julio Soto, le comentó lo del hijo del demandante. Sobre la solicitud de permisos
telefónicamente, indica que se podía, que se llenaba el formulario después, que
esto se hacía en casos urgentes. Que el propio testigo recuerda a lo menos una
vez en que solicitó un permiso por teléfono al mismo supervisor.
Indica que aparentemente ese día esperaban que volviera el demandante, que
había trabajo para él, y que el supervisor se molestó un poco.
Contrainterrogado señala que trabaja al lado del supervisor, a un metro y medio,
que la conversación duró aproximadamente unos treinta segundos.
2.- RONY ALEXI GARCÍA HENRIQUEZ, 12.924.501-8, quien debidamente
juramentado y legalmente interrogado señaló:
Que conoce a ambas partes, por que trabajó con ellos, que fue compañero del
demandante hasta febrero.
Que el trabajador le contó que lo despidieron por faltar dos días, pero que había
solicitado permiso al supervisor Julio Soto, porque tenía enfermo a su hijo.
El testigo señala que era habitual solicitar permisos por vía telefónica, que nunca
le han negado un permiso, que si bien conoce el formulario para solicitar el
permiso, es habitual solicitar los permisos verbalmente.
El testigo señala que durante su desempeño para la empresa demandada ha
pedido unos 20 permisos sin goce de sueldo, y nunca se los ha negado.
Absolución de Posiciones
MARCELO EDGARDO NUÑEZ MASFERRER, 8.588.884-6, representante legal de
Maestranza AMSU Ltda.-
Quien señaló conocer al demandante, que es un trabajador de la maestranza
desde hace unos cinco años, que su remuneración aproximada era de $350.000
de sueldo base.
Sobre las razones del despido indica que fue despedido por ausentarse dos días
seguidos, pero que personalmente no le consta; que no se enteró de las
ausencias, ni de la determinación de su despido.
Oficios
1.-Se recibe por el Tribunal correo electrónico remitido por el centro de
salud Sanatorio Alemán, de fecha 11 de junio de 2015, el que indica que el
médico Juan Nazar atendió al hijo del demandante de un año nueve meses de
edad, el día 2 de marzo de 2015, por un cuadro respiratorio agudo viral, a las
12:50.
SEPTIMO: Que concluida la rendición de la prueba las partes realizaron
sus alegaciones finales en los siguientes términos:
Que la demandante señaló que conforme a la prueba rendida se ha acreditado
cada uno de los puntos de prueba establecidos.
Que se ha acreditado que el trabajador se comunicó con su jefe directo, y fue
claro en justificar las razones para solicitar el permiso, que además se ha
acreditado que el día 2 de marzo llevó a su hijo al doctor, y el día siguiente fue al
Hospital Higueras a solicitar su medicamento. Que además hay discrepancias en
las declaraciones del Supervisor, Julio Soto, que señala que el Trabajador solicitó
permiso, en caso que no se concedieran las vacaciones, sin embargo no se señala
esto en el correo electrónico dirigido a Mauricio Jerez, tampoco se señalan las
razones del permiso, las que fueron explicadas por el Trabajador.
Que no es necesario que se de aviso previo de la inasistencia, sino que se requiere
que la ausencia esté justificada, que en este caso la inasistencia se haya
justificado, y que además se ha acreditado que al Trabajador no le dejaron dar
sus justificaciones antes de proceder al despido.
Que por su parte la demandada señaló: Que si bien se ha indicado que se
encontraría justificada la inasistencia, las razones esgrimidas carecen de
gravedad suficiente, en cambio, para proceder al despido se ha cumplido con
todas y cada una de las obligaciones que tenía el empleador.
Que el niño fue atendido en una consulta privada a eso de las 12:50, por lo que
no era necesario que el Trabajador se ausentara todo el día, que además no se
acompañó certificado ni justificación alguna para la ausencia al día siguiente,
que además la carga de acreditar que la ausencia era justificada era de la
demandante, quien no lo ha acreditado, por lo que deberá rechazarse la
demanda.
OCTAVO: Que la controversia en esta causa se centra básicamente en
determinar si la ausencia del trabajador en dos días seguidos, a saber, 2 y 3 de
marzo, se encuentra o no justificada, partiendo de la base que no se encuentra
controvertido el hecho de la inasistencia.

Que, a este respecto, es menester analizar, cuáles han sido las


justificaciones esgrimidas por el demandante, y si estas son bastantes para
justificar la ausencia.

Que en autos se ha rendido prueba tendiente a demostrar que las razones


de la ausencia son de origen médico, se encuentra fehacientemente acreditado
que el día 2 de marzo el trabajador llevó a su hijo de un año al doctor, y que el
día 3 de marzo el propio trabajador asistió al hospital Higueras. Esto mediante
prueba documental -consistente en los certificados que dan cuenta de estas
asistencias, así como la respuesta de oficio emitida por el Sanatorio Alemán- y
mediante prueba testimonial, principalmente mediante la de la madre de su hijo.

Que, esta sentenciadora es del parecer, que para determinar si la ausencia


del trabajador es o no justificada, es menester realizar un análisis previo, que
dice relación con el contexto en que el trabajador adopta la decisión de no asistir
a su empleo y con un análisis posterior a la ausencia, que dice relación con el
razonamiento que hace el empleador para concluir que la ausencia es
injustificada.

Que, en lo que respecta a conducta del trabajador, debe analizarse la


política de la empresa demandada para conceder permisos sin goce de
remuneración o recuperación de horas.

Que, se ha acreditado, mediante las propias declaraciones de Julio Soto y


Mauricio Jerez, que cuando se solicitaban días “administrativos” o sin goce de
sueldo, siempre se concedían, en algunos casos descontando las horas de la
remuneración, y en otros casos imponiéndose al trabajador la obligación de
recuperar las horas no trabajadas.

Que, asimismo, se encuentra acreditado, mediante las declaraciones de los


Sres. Soto y Jerez, así como mediante el correo electrónico remitido por el Sr.
Soto al Sr. Jerez, que si bien el supervisor informó al jefe de recursos humanos
sobre la solicitud de vacaciones, no informó que el trabajador solicitaba “en
subsidio” un permiso sin goce de sueldo, sino que por el contrario se informó que
negado el feriado, el trabajador había comunicado unilateralmente que se
ausentaría a cuenta de permiso, sin visto bueno del supervisor.

Que, el sr. Julio Soto no explicó en estrados la razón de esta omisión, y el


Sr. Jerez, señaló que en comunicaciones verbales, tampoco se le expresó esta
solicitud por el Sr. Soto.

Que, si bien los testigos señalaron que había alguna especie de


ponderación de los motivos del permiso, nunca habían negado un permiso, por lo
que no se explica la decisión del supervisor de informar que no daba su visto
bueno, en circunstancias que nunca lo había negado.

Que, también ha quedado fehacientemente establecido que el trabajador


dio por entendido que se le habían concedido los dos días de permiso, según se
desprende de las declaraciones del trabajador y de su esposa, y de las
declaraciones de su supervisor y el jefe de recursos humanos, en el sentido de
jamás haber negado un permiso. Que, si la conducta del empleador era conceder
todos los permisos sin goce de sueldo solicitados, mal podría el trabajador
entender que en este caso se le estaba negando. Que esto es coherente con el
comportamiento de un trabajador que durante 5 años de relación laboral no ha
presentado conductas de ausentismo previas.

Que, además se acreditó el hecho de que era normal solicitar y conceder


autorizaciones de permiso en forma telefónica, según aseveraron los testigos de la
demandante, quienes han solicitado para ellos mismos permisos de esta manera.
Lo que refuerza la creencia del trabajador en el sentido de entender que actuaba
conforme al procedimiento de solicitud de permisos.

Que, en este contexto, aparece lógico el actuar del trabajador, en el sentido


de presumir que su supervisor gestionaría la solicitud telefónica de permiso, y
que se le concedería, ya con descuento en su remuneración, ya con la obligación
de recuperar las horas.

Que a juicio de esta sentenciadora, es esta conducta previa de la


empleadora, y las comunicaciones que el Sr. Soto mantuvo con el actor, las que le
dan a entender, en forma certera, que se le concedía el permiso solicitado,
negándose únicamente la imputación a feriado.-

Que, esta “autorización” es suficiente para justificar la ausencia.

NOVENO: Que, era de cargo del empleador acreditar que el despido del
trabajador fue justificado.

Que, para que concurran los presupuestos fácticos de la causal de despido


invocada es necesario, a más de la ausencia, que esta sea injustificada. Que la
norma no distingue si la justificación debe ser previa o posterior a la ausencia,
por lo que no corresponde que el empleador, o el Tribunal exijan al trabajador
que la justificación sea previa a la ausencia, pudiendo en todo caso ser posterior.

Que, en cambio, para que el despido sea justificado, es menester que el


empleador, haya constatado la ausencia de justificación. Sin que se le imponga
alguna forma o solemnidad al respecto, pero por cierto que es necesario que haya
alguna solicitud de explicaciones, y alguna ponderación respecto de las
explicaciones dadas, o sobre la falta de explicación.

Que, al respecto, la prueba rendida acredita que el día miércoles a las 7:45
horas ya había instrucción de no permitir el libre ingreso del trabajador a sus
faenas.

Que, el jefe de recursos humanos reconoce que la reunión que mantuvo


con el trabajador duró cinco minutos.

Que, además, consultado acerca de si el trabajador le había expresado


alguna causa de justificación, señaló: “no formalmente”. Sin explicar el alcance
de estos dichos. Lo que permite presumir que algún tipo de explicación existió,
sin que en esta declaración, ni en la carta de aviso de despido, se razone sobre
esa explicación y se la estime insuficiente para constituir justificación de la
ausencia.

Que, los dos primeros testigos de la demandante declaran que el


trabajador le indicó a su supervisor los motivos que fundaban su solicitud de
permiso, y sin embargo, ninguno de esos motivos está contenido en el correo
electrónico que el Supervisor dirige al Sr. Jerez.

Que además, el hecho de tener la carta de comunicación de despido para el


día miércoles 4 de marzo, en la mañana, antes del inicio de las labores, da cuenta
de que la intención de la empleadora era lisa y llanamente despedir al trabajador,
estimando que las meras ausencias bastaban, sin indagar en las motivaciones del
trabajador. Que, además, tratándose de un trabajador con más de cinco años de
antigüedad y que nunca había incurrido en ausencias injustificadas, aparece
como falto de lógica el actuar del empleador, de presumir que no habría
justificación válida que pudiera esgrimir el empleador.-

DECIMO: Que, en este orden de ideas, esta sentenciadora ha adquirido


convicción en cuanto a estimar que por una parte existe una justificación para la
inasistencia, a saber, el hecho de haber solicitado de la manera usual, un
permiso sin goce de remuneración por dos días, y el hecho de que la empleadora
nunca ha negado ese tipo de permiso.

Que, por otra parte, existe un actuar de la empleadora que es precipitado,


que determina el cese de la relación laboral sin permitirle al trabajador justificar
su ausencia.
Que, a mayor abundamiento, el trabajador había expuesto a su jefe directo
las razones que lo llevaron a solicitar el permiso, sin embargo este no transmitió
dicha información a sus superiores.
Que, la falta de acuciosidad del supervisor no puede ser imputable al
trabajador, máxime considerando que cuando él se reincorporó a sus funciones el
día miércoles 4 de marzo, no se le permitió justificar las inasistencias, habiendo
en definitiva el empleador adoptado la decisión con el mérito de las ausencias, sin
ponderar si dichas ausencias tenían o no mérito suficiente para justificar el
despido.
Que, era de cargo de la demandada acreditar que la causal invocada se
encontraba apoyada por un sustento fáctico, lo que no ha hecho.
Que, se encuentra claramente establecida la ausencia, pero no se ha
acreditado que esta fuera injustificada, es más no se ha rendido prueba respecto
de las circunstancias que a juicio de la demandada se ponderaron para
determinar que la ausencia fue injustificada.
Que, se han formulado alegaciones relativas a la corta duración de la
atención del hijo del demandante el día 2 de marzo, sin embargo, esa
circunstancia es una justificación posterior, expresada únicamente en la
audiencia de juicio, toda vez que el empleador no le permitió al trabajador,
justificar su ausencia antes de proceder al despido.
UNDECIMO: Que, la instancia judicial no es la oportunidad para que el
trabajador acredite las justificaciones de su ausencia, lo que sin embargo ha
hecho en autos fehacientemente; sino, la instancia para que el empleador
acredite que el despido ha sido justificado, es decir, que la causal que ha
invocado se condice con los hechos y lo habilita para proceder al despido del
trabajador demandante.
Que, mal podría el empleador cumplir con la obligación de probar que este
despido en particular es justificado, en primer lugar, porque el empleador
acostumbraba autorizar todos los permisos sin goce de sueldo, y habiéndolo
solicitado telefónicamente por estimar que se trataba de una urgencia, lo usual
era que se concediera.
En segundo lugar, no podría acreditar el empleador que el despido fue
justificado, porque no ha acreditado en estos estrados que se hayan solicitado las
justificaciones al trabajador, es decir, que la decisión del despido, se fundó
únicamente en la ausencia del trabajador por dos días seguidos.
Que, además no es imputable al trabajador que su supervisor decidiera no
traspasar toda la información aportada por el trabajador en la comunicación
telefónica, así como no es de su cargo que el empleador no le permitiera justificar
debidamente la ausencia.
Que, en este sentido, esta sentenciadora estima que el despido del
trabajador fue injustificado, toda vez que solo se fundó en las ausencias, y no en
la falta de justificación que la norma exige al invocar esta causal de despido.
DUODECIMO: Que, respecto del préstamo de vacaciones o feriado,
respecto del cual la demandada ha opuesto compensación, se ha reconocido por
el trabajador esta deuda, y se ha acreditado suficientemente la existencia del
préstamo y la suma adeudada. Por lo que se dará lugar a la compensación por la
suma de $131.250
DECIMOTERCERO: Que, para efectos de determinar la remuneración del
trabajador, solo se cuenta con las liquidaciones de remuneraciones de los meses
de enero y febrero de 2015, aportadas por la demandada, que en la primera se
indica que el sueldo base del trabajador es la suma de $318.067, más la
gratificación legal $89.063, lo que coincide con la suma indicada en la
contestación, por lo que se estará a ello, toda vez que la demandante no ha
aportado prueba alguna en contrario y no ha controvertido la veracidad de esta
prueba. Que no puede considerarse en el caso sub lite que la asignación de
movilización constituya remuneración, por cuanto no se ha acreditado que se
trate de una suma constante en el tiempo, que en realidad constituya
remuneración. Que, se tendrá para todos los efectos de este fallo, como
remuneración del actor la suma de $407.130.-
Por estas consideraciones y visto además lo dispuesto en los artículos 1, 2,
3, 4, 5, 7, 8, 9, 41, 42, 44, 54 a 58, 63, 67, 68, 71, 73, 160, 162, 163, 168, 173,
420 letra a), 425 a 432, 446 y siguientes del Código del Trabajo, se resuelve:
I.- Que SE HACE LUGAR a la demanda interpuesta por don Roberto
Esteban Rodríguez Briones, declarándose como injustificado el despido de que
fuera objeto con fecha 4 de marzo de 2015, por parte de su ex – empleadora
Maestranza Amsu Ltda, representada legalmente por don Marcelo Núñez
Masferrer, y se condena a esta al pago de las siguientes prestaciones:
a) La suma de $407.130 por concepto de indemnización sustitutiva del
aviso previo.
b) La suma de $2.442.780, por concepto de indemnización por seis años
de servicio.
c) La suma de $1.954.224, como incremento de la letra c) del artículo 168
del Código del Trabajo.
II.- Que las sumas antes señaladas deberán ser pagadas con todos los
reajustes e intereses que establecen los artículos 63 y 173 del Código del Trabajo.
III.- Que, se acoge la excepción de compensación, debiendo descontarse de
las sumas ordenadas pagar por la demandada la suma de $131.250
IV.- Que cada parte pagará sus costas, por no haberse solicitado en la
demanda que se impusieran las costas a la demandada.
V.- Ejecutoriada que sea la presente sentencia, cúmplase lo dispuesto en
ella dentro de quinto día, en caso contrario, certifíquese dicha circunstancia y
pasen los antecedentes a la unidad de cumplimiento ejecutivo de este Tribunal.
Hágase devolución de todas las pruebas que hubieren aportado las partes.
Regístrese, notifíquese y dese copia.

RIT O-18-2015
RUC 15- 4-0016215-5

Dictada por doña MARIA GERALDINE AGUIRRE BELMAR, JUEZ


SUBROGANTE del 1er Juzgado de Letras de Coronel.

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