Publicación internacional de los adventistas del séptimo día

O c t u b re 2 0 0 8

últımo
El
mısıonero
22 Después de la 24 Salvados de las 27 Los engaños del
cruz llamas tiempo del fin
 O c t ubre 2008
LA IGLESIA

Visión Mundial ............ 3

Informe Mundial
3 Noticias y perspectivas

Ventana
7 Una mirada a Angola

Panorama Mundial
8 Lo que nos dejó Hablemos

SALUD
F O T O G R A F Í A : G R I S Z K A N I E W I A D O M S K I
La osteoartritis........... 11
Allan R. Handysides y
NOTA DE TA PA Peter N. Landless
El último misionero
Homer Trecartin.......................................................................... 16 PREGUNTAS BÍBLICAS
¿Necesitamos todavía misioneros transculturales? Fe en acción ................ 26
Ángel Manuel Rodríguez
DEVOCIONAL
Saludos de Pablo Reinder Bruinsma .................................... 12
ESTUDIO BÍBLICO
El apóstol a los gentiles aún tiene algo que enseñarnos sobre
lo que significa ser cristiano. Los engaños del
tiempo del fin ............. 27
VIDA ADVENTISTA Mark A. Finley
Por los inocentes que sufren Loren Seibold ..................... 14
Un futuro más luminoso para los hijos de prostitutas. INTERCAMBIO MUNDIAL
29 Cartas
ESPÍRITU DE PROFECÍA 30 El rincón de oración
Miembros de la familia real Elena G. de White................ 21 31 Intercambio de ideas
No tenemos que esperar; podemos disfrutar ahora de algunos privilegios.
El rincón de
CREENCIAS FUNDAMENTALES
Después de la cruz Roy Adams ............................................ 22 las personas ................ 32
El ministerio de Cristo en el cielo merece nuestra atención y comprensión.

HERENCIA ADVENTISTA
Salvados de las llamas
Elfriede Raunio, como se lo contó a Andrew McChesney ............ 24
Los pioneros adventistas de Etiopía tuvieron que pasar por
inusuales desafíos.

Publicado por la Asociación General de la Iglesia Adventista del Séptimo Día. www.spanish.adventistworld.org

2 Adventist World | Octubre 2008

 Iglesia en acción
VISIÓN MUNDIAL
El gozo venidero vida, y de la forma en que yo vería conformar la mía: todo lo

C ada uno de los que atesoramos la

Palabra de Dios, solemos tener casi
siempre un texto que capta gran parte
de lo que significa vivir una vida de fe.
Está escrito en los muros y dinteles de nuestras vidas; en mo-
mentos de desánimo o angustia nos esforzamos por recordar
su verdad y poder.
Aprendí mi versículo de boca de mi padre mucho antes
de que pudiera hallarlo en la Biblia. Los sábados al atardecer,
cuando mi familia se reunía en el parque para despedir el sá-
bado, podía ver el brillo en sus ojos mientras leía las palabras
que lo emocionaban: “Puestos los ojos en Jesús, el autor y con-
sumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió
la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del
trono de Dios” (Heb. 12:2).
Las palabras que él leía con solemnidad hablaban pri-
meramente de Jesús, que de buena gana sufrió los peores
abusos “por el gozo puesto delante de él” –el conocimiento
de que por medio de su paciente perseverancia podría atraer
a muchos, de regreso al amor de su Padre. Pero esas palabras
también hablaban de la propia visión de mi padre para su
que hacemos como creyentes, lo hacemos “por el gozo puesto
delante de nosotros”.
En estos tiempos turbulentos, pienso repetidas veces en
esas palabras fundamentales. Todo lo que el pueblo remanente
de Dios puede hacer en el nombre del ministerio; todos lo que
debemos soportar por causa del Nombre sobre todo nombre;
toda nuestra obediencia a la Gran Comisión; todas nuestras
luchas con el mal y las penas y el dolor de este mundo –todo
esto es posible porque hay un gozo inmenso y eterno puesto
delante de nosotros. Así como Jesús se sentó una vez a la
diestra del Padre, así también en poco tiempo más “el que ha
de venir vendrá”, y compartiremos para siempre el gozo
inmaculado de su presencia.
Cuando se sienta tentado a dejar de hacer el bien, recuerde
ese gozo. Cuando el pecado, la violencia y el odio parezcan
amenazar lo que más estima, no olvide ese gozo. Cuando
necesite una mejor razón para seguir viviendo una vida de
fe, aférrese al gozo que promete Jesús a todos los que esperan
pacientemente su segunda venida.
— Bill Knott

INFORME MUNDIAL
LITUANIA: El Parlamento reconoce a la Iglesia Adventista
■ El Parlamento de Lituania reconoció Quiere decir que la Iglesia Adventista es
oficialmente a la Iglesia Adventista en aceptada como una denominación que
julio, lo que le permite recibir subsidios ha establecido su nombre e identidad
estatales y ciertas exenciones impositi- en la sociedad”.
vas, además de excusar del servicio mi- Hibner agradeció a los feligreses del
litar a los estudiantes de teología y los país por su testimonio y por contribuir
B Á LT I C O

pastores. La decisión pone fin a cinco a establecer el nombre adventista en la

años de trámites y a la anterior perse- sociedad, y reconoció los esfuerzos de
cución que sufrió la denominación. los líderes de la División Transeuropea RECONOCIMIENTO OFICIAL: Bertold
D E L

Bertold Hibner, presidente de la y de la Unión del Báltico, así como de Hibner, presidente de la Iglesia Ad-
U N I Ó N

Iglesia Adventista de Lituania, destacó su presidente Valdis Zilgalvis. ventista de Lituania, frente a la sede
la significación de esta manera: “El Dijo Hibner: “Nuestro Dios nos ha central en Kaunas. El 15 de julio, el
L A

reconocimiento oficial de la Iglesia hecho un gran regalo. Espero que la gobierno del país reconoció oficial-
D E

Adventista en Lituania significa que iglesia lo vea como un sólido compro- mente a la iglesia como comunidad
C O R T E S Í A

se aprecia su contribución a la vida miso de servir y proclamar a la comu-

religiosa.
pública y a la cultura, junto a otras nidad las buenas nuevas del evangelio
iglesias con profundas raíces históricas. de nuestro Señor Jesucristo”.

Octubre 2008 | Adventist World 3

 Iglesia en acción
INFORME MUNDIAL
La iglesia se afincó en Lituania
cuando aún era parte de Prusia. A
partir de 1920, la Unión Oriental de
Alemania se hizo cargo de la obra,
estableciendo escuelas y distribuyendo
libros. Después de la Segunda Guerra
Mundial, varios miembros alemanes y
letones fueron perseguidos y tuvieron
que huir hacia sus propios países.
Desde 1995, la iglesia ha sido registrada
por la Iglesia Adventista mundial. En
la actualidad cuenta con unos mil
miembros.
—Informe de la Unión del Báltico y de
la Red de Noticias Adventistas
LÍBANO: Myklebust, rector de la
Universidad del Medio Oriente, deja
el cargo después de once años
■ Randi y Svein Myklebust, una pareja
de misioneros adventistas, ha regresado
a su hogar en Noruega después de
pasar veintinueve años en el extranjero.
Durante los últimos once, Myklebust
fue rector de la Universidad del Medio
Oriente, una institución adventista
(conocida en el pasado como Colegio
Superior del Medio Oriente) en Beirut,
Líbano, donde su esposa trabajó como
profesora asistente de educación.
“Esta dedicada pareja ha dejado una
impresión duradera en las mentes de
los estudiantes, colegas y líderes de tres
continentes –dijo Kjell Aune, presiden-
te de la junta de la institución y presi-
dente de la Unión del Medio Oriente–.
Hemos disfrutado al trabajar con ellos,
y por cierto los vamos a extrañar”.
Antes de asumir el cargo en Beirut,
Myklebust fue docente y administrador
educativo durante nueve años en New-
bold College, una institución adventista
de Inglaterra. El matrimonio ya había
trabajado por nueve años como misio-
neros en África.
Al hablar con la Red de Noticias
Adventistas en 2005, Myklebust desta-
4 Adventist World | Octubre 2008
F O T O G R A F Í A D E L A U N I Ó N
có los desafíos de la institución luego
de décadas de guerra civil en el Líbano.
En esa ocasión mencionó que la insti-
tución, que se convirtió en universidad
en 2001, recibía en el pasado un gran
número de estudiantes internacionales,
pero los años de luchas habían llevado
a redefinir su misión. Myklebust no
solo fue rector sino también adminis-
trador económico-financiero.
En la entrevista de 2005, contó que
se estaban haciendo esfuerzos para me-
jorar las antiguas instalaciones físicas
de la universidad: “Se completaron dos
nuevos laboratorios de computación,
un salón de clases y tres oficinas… Se
remodelaron el comedor estudiantil y
sus alrededores... y acabamos de com-
pletar una renovación total del antiguo
edificio de administración y de las áreas
relacionadas”.
Según Milan Bajic, decano y coor-
dinador de servicios estudiantiles de la
institución, Miklebust fue “un hombre
destacado, cuyas acciones hablaron con
más fuerza que sus palabras. Fue una
persona que analizaba con tranquilidad
la situación antes de brindar soluciones”.
La Sra. Myklebust, que también tra-
bajó en la universidad durante años, es
recordada como “una persona incansa-
ble, trabajadora, erudita pero amigable
–dice Farid Khoury, bibliotecario de la
institución–. Su ilimitada curiosidad
intelectual inspiró a todos los que tra-
bajaron con ella”.
La Universidad del Medio Oriente
es una institución cristiana para ambos
SIERVOS DEDICADOS: Randi y Svein
Myklebust se han retirado del campo
misionero. Desde 1997 el matrimonio se
desempeñó en la Universidad del Medio
Oriente, ella como profesora asistente y
él como rector y administrador económi-
co-financiero.
D E L M E D I O O R I E N T E
sexos y sin fines de lucro, que perte-
nece y es administrada por la Iglesia
Adventista. El campus universitario se
halla en una colina de treinta hectáreas,
verde y tranquila, con vista a Beirut y el
Mar Mediterráneo.
—Informe de Michael Sidawi, Universi-
dad del Medio Oriente y Adventist World
AUSTRALIA OCCIDENTAL: Ministerio
masculino recibe apoyo en línea
■ Según los líderes de la iglesia aus-
traliana, una nueva publicación elec-
trónica está conectando a los hombres
adventistas de Australia Occidental.
Se espera que el Boletín de Noticias
Electrónicas para Hombres de la
Asociación de Australia Occidental
(WACMEN) anime a los hombres a
dejar de ser “espectadores” para pasar a
ser “participantes” en sus iglesias, dice
el editor de la publicación, Danny Bell.
WACMEN es la primera iniciativa
de una red de ministerios masculinos
en Australia Occidental que comenzó a
reunirse el mes pasado, para enfrentar
el desafío de interesar e involucrar a los
hombres en las actividades de la iglesia.
Las estadísticas de la Iglesia Ad-
ventista estiman que la denominación,
compuesta por unos dieciséis millones
de miembros adultos, está formada
en un setenta por ciento por mujeres.
Los líderes e investigadores de iglesias
protestantes han sugerido que esto

se debe a que las iglesias a menudo
brindan un ambiente que se enfoca
en las emociones, y por eso los cultos
y las actividades suelen atraer menos
hombres que mujeres.
Como WACMEN se basa en los
mensajes electrónicos, crea un am-
biente no amenazante que favorece la
participación masculina, dice Bell.
Por ahora, WACMEN tiene un
alcance local, pero Bell espera que
la idea pueda ser implementada de
manera global y dice que los grupos de
hombres pueden funcionar de manera
paralela en lugar de competir con los
a menudo bien establecidos grupos de
mujeres.
“La iglesia no puede continuar con
una mentalidad que piense que si a los
hombres no les gusta la iglesia, ese es su
problema. Necesitamos mirarnos a no-
sotros mismos para ver si no estamos
haciendo algo que los aleje”, dice Bell.
—Informe de Elizabeth Lechleitner, Red
de Noticias Adventistas
SOLO PARA HOMBRES: Los miembros
de un nuevo ministerio electrónico para
hombres en Australia Occidental se
reunieron hace poco en un campamento.
Danny Bell, fundador del ministerio, dice
que es más probable que la mayoría de
los hombres hablen más abiertamente
de su vida espiritual fuera del ambiente
emotivo de los cultos de la iglesia.
C O R T E S Í A
INFORME MUNDIAL
Por qué
aún se necesıtan
r e l at o s
mısıoneros
Dan Weber y el arte de contar relatos;
dos traductores emocionados
Ansel Oliver, director asistente de noticias, Asociación
General de los Adventistas del Séptimo Día
Dan Weber es capaz de pasar una semana sin ducharse con tal de con-
seguir una buena historia.
Este productor de video viaja a menudo a lugares distantes para actua-
lizar a la iglesia mundial sobre los proyectos misioneros, a veces en lugares
totalmente recónditos.
Sin embargo, vaya a zonas urbanas o rurales, Weber regresa con
historias que inspiran y educan a los feligreses sobre la importancia de la
misión, ayudándolos a apoyar los proyectos financieramente y a compren-
der la misión mundial de la iglesia. Esos relatos son contados de diversas
maneras y formatos en el DVD del Misionero Trimestral. Algunos lo han
descrito como uno de los recursos de video mejor producidos de la deno-
minación.
Si bien en algunas regiones este DVD es enviado sin cargo a todas las
iglesias y a todas las oficinas administrativas de la iglesia, muchos feligreses
adventistas aún no lo conocen.
Weber, de 40 años, ha obtenido un título en fotografía de Andrews
University, una institución de la iglesia de Berrien Springs, Míchigan, Es-
tados Unidos, y dice que trabaja no solo para inspirar a los miembros que
ven el DVD sino también a los futuros productores de video y a otros na-
rradores que algún día trabajarán para la iglesia. En los siguientes extractos
de una entrevista reciente, Weber reflexiona sobre la “caza” de relatos, el
estatus de la iglesia en otros países y la promoción de su profesión dentro
de la iglesia.
ADVENTIST NEWS NETWORK: En pocas palabras, ¿cómo explica su trabajo?
DAN WEBER: Soy un antropólogo digital con conocimientos de misiono-
logía. ¿Tiene sentido lo que digo? Para hacer este trabajo hay que entender
cuatro cosas: Cómo contar historias, la cultura observada, las misiones y
la función de estas en la iglesia. Recién cuando uno combina todas estas
cosas, se consigue un buen resultado.
Continúa en la próxima página
D E W A C M E N
Octubre 2008 | Adventist World 5
 Iglesia en acción
INFORME MUNDIAL
RELATO MISIONERO: El productor de video Dan Weber trabajando
en Cuba. Weber ayuda a producir el DVD Misionero Trimestral,
que destaca la obra misionera de la iglesia en todo el mundo.
C O R T E S Í A D E L A S E C R E TA R Í A D E M I S I Ó N A D V E N T I S TA
ANN: ¿Cuál ha sido una de sus historias favoritas?
WEBER: Tenía que ir a una prisión de Moldavia. Allí se llama
“Centro de Detención Permanente”, porque como no existe
la pena capital; un condenado por un crimen grave puede
pasar toda la vida en la cárcel. De manera que fui a una de
esas prisiones y, de los ochenta prisioneros, varios se habían
hecho adventistas. Tuve un culto con ellos dentro de una
pequeña celda. A veces se puede dudar de los prisioneros
convertidos porque puede ser que estén procurando salir
antes de prisión. Pero ellos no tienen posibilidad de salir.
No se han convertido al adventismo para ganar el favor de
las autoridades o salir antes. Por el contrario, a menudo son
excluidos por el grupo de los reclusos, debido a sus creencias. ella era imposible notar que iba a morir. Lo que me resultó
Pero su fe es muy sólida.
ANN: Hace poco usted estuvo en Taiwán, Mongolia, Corea
y Japón. ¿Qué noticias nos puede dar de la iglesia en esos
lugares?
WEBER: Taiwán es un lugar hermoso. La ofrenda allí será uti- fe de la mejor manera posible. Cuando terminamos la
lizada para establecer el Hope Channel China. Cuentan con
un pequeño estudio y están creando programas. En Mon-
golia la iglesia es realmente nueva: el primer bautismo se
produjo en 1993. Uno va a las iglesias y ve muchos jóvenes.
Eso es bueno, porque en Norteamérica o Japón no se ve lo
mismo. Pero Mongolia aún está pasando por los dolores de
6 Adventist World | Octubre 2008
crecimiento. Es todavía un campo misionero.
ANN: ¿Todos sus viajes son tan inspiradores?
WEBER: Hay quienes piensan que a la iglesia
le va bien en todos lados, pero esto no es así
ya que hay lugares donde existen muchas
dificultades. En la Ventana 10/40 [la región que
se extiende del norte de África hasta la costa
este de Asia], menos del uno por ciento de la
población es cristiana, y ni hablar adventista.
Aun así, se ve a las personas que trabajan allí y
su dedicación, fe y compromiso. Eso me resulta
inspirador.
ANN: Usted comenzó como fotógrafo. ¿Es ese
un importante primer paso antes de pasarse al
video?
WEBER: Bueno, algunos de los mejores fil-
madores que he conocido comenzaron como
fotógrafos, y creo realmente que ello marca
una progresión natural porque uno comienza
aprendiendo cómo componer una toma:
cuenta una historia en una fotografía. Al pasar
al video se aprende a contar una historia me-
diante una secuencia de fotografías.
ANN: ¿Qué lo mantiene motivado?
WEBER: Cada vez que tomo mi equipo y subo
al avión para ir a algún lado me siento como si
fuera la primera vez. Sé que voy a experimentar algo nuevo.
Es lo mejor que me puede pasar.
ANN: ¿Cuál fue una de las historias más difíciles de contar?
WEBER: A ver... sí, fue cuando estuve en Phnom Penh
[en Camboya]. Uno de los grupos por los que la Iglesia
Adventista trabaja son los HIV positivos. Muchos de ellos
son inmigrantes de Vietnam que viven en la miseria.
Conocimos a una mujer que se hizo adventista después
de saber que era HIV positiva. Había estado en el hospital
y el médico la envió a su casa a morir. Su madre se había
convertido y comenzó a compartir el mensaje con ella. Su
salud había mejorado muchísimo y cuando me reuní con
inspirador es el hecho que ella daba estudios bíblicos en su
pequeña habitación y fuimos a filmarla. He aquí alguien
que padece una enfermedad mortal, pero no permite que
ello afecte su vida sino que, por el contrario, comparte su
entrevista miré al presidente y al secretario de la iglesia
local, que hacían de traductores, y vi que por sus mejillas
corrían las lágrimas, tan emocionados estaban por la his-
toria de esta mujer. Fue muy duro. Mi desafío siempre es
tomar ese tipo de historias y compartirlas de tal manera
que pueda transmitir también esa emoción.

V E N TA N A
Una mirada a
Angola
Hans Olson
U bicada al sur de la línea ecuatorial,
entre Namibia y la República
Democrática del Congo, Angola se
encuentra en un proceso de reconstruc-
ción después de más de veinticinco años
de luchas intestinas.
El país alcanzó la independencia
de Portugal en 1975 después de cua-
trocientos años de colonialismo, pero
muy pronto estalló la guerra, ya que las
diversas facciones políticas comenzaron
a luchar por la supremacía. La paz se
alcanzó finalmente en 2002 después de
la muerte de Jonas Savimbi, líder de la
Unión Nacional, lo que convirtió a José
Eduardo dos Santos, del Movimiento
Popular (MPLA), en el presidente del
país. Se espera que en 2009 se realicen
elecciones presidenciales.
Según algunos informes, se calcula
que durante los veintisiete años de
conflicto murieron más de un millón
y medio de personas. Unos cuatro
millones de angolanos se convirtieron
en refugiados, abandonaron el país o
simplemente huyeron a otras regiones.
Debido a los omnipresentes riesgos para
la salud, la expectativa de vida está por
debajo de los 38 años.
En los últimos años, la economía ha
sufrido una tremenda transformación,
alcanzando el segundo índice de creci-
miento de todo el continente africano
y uno de los mayores del mundo. Es el
segundo productor de petróleo y dia-
mantes de África subsahariana, y hace
poco ingresó como miembro de la Or-
ganización de los Países Exportadores de
N
E
S
N
T E
I S
K R
K
E R I
A
IR
E
ANGOLA IV
L
O
N
O
L S
G I
Petróleo (OPEC). Alrededor del 85 por edificios aún están en pie pero necesitan
ciento de la economía está basada en la ser reparados y reacondicionados con
industria petrolera. La reconstrucción urgencia.
después de la guerra y el regreso de los Parte de la ofrenda del decimotercer
desplazados han ayudado a estimular las sábado del segundo trimestre de 2009
industrias de la construcción y agraria. ayudará a reconstruir el Seminario
Adventista de Bongo. Antes de cerrar sus
Los adventistas en Angola puertas, Bongo tenía un promedio de
La Iglesia Adventista sufrió mucho trescientos estudiantes y ofrecía cursos
durante la guerra civil. Si bien la feligre- de educación primaria, secundaria y
sía creció hasta alcanzar unas trescientas tres años de instrucción bíblica. Este
mil personas, gran parte de la infraes- proyecto tendrá un impacto duradero
tructura de la iglesia se vio afectada. En sobre la Iglesia Adventista de Angola
una región del país, 145 templos fueron porque contribuirá con la educación de
destruidos. la creciente feligresía y la preparación
La Estación Misionera Bongo, donde de los jóvenes para que compartan el
comenzó la obra adventista en 1924, fue mensaje del amor de Dios.
abandonada. En 1986, los obreros de la Si desea saber más de la obra de la
misión se vieron forzados a huir cuando Iglesia Adventista en Angola, visite el
la lucha armada llegó a la zona. Los sitio www.AdventistMission.org.
ANGOLA
Capital: Luanda
Idioma oficial: Portugués
Religión: Creencias indígenas 47%, católica 38%,
protestante 15%
Población: 15,8 millones*
Feligresía adventista: 306.569*
Relación adventista por habitante: 1:52*
*Secretaría de Archivos y Estadísticas de la Asociación General, 144º Informe Estadístico Anual—2006
Octubre 2008 | Adventist World 7
 Iglesia en acción
PA N O R A M A M U N D I A L

E
n noviembre de 1848, Elena
de White tuvo una visión
con profundas consecuencias
para el desarrollo de nuestra
iglesia. A veces se la llama la visión de
los “raudales de luz”. Ella vio que Jaime
White tenía que comenzar a publicar
un “pequeño periódico” que eventual-
mente llevaría el mensaje adventista
como raudales de luz a todo el mundo.
Lo que me resulta asombroso no
es solo la visión en sí, sino lo que hizo
después de recibir la visión; su determi-
nación de ver el plan divino en acción
a pesar de los que afirmaban que era
impracticable. Elena se mantuvo firme
ante la desaprobación de otros líderes
como José Bates, que creía que Jaime
podía ser más eficaz como predicador
que como escritor. También soportó las
dudas de Jaime, que anticipó las inmen-
sas dificultades financieras de imprimir
y distribuir un periódico de ese tipo.
Pero Elena insistió en que “debía escri-
bir, escribir y avanzar por fe”.* Es fácil
pasar por alto el hecho de que en ese
momento ella tenía tan solo 21 años.

Nuestro recurso más valioso

Hace cinco años comencé una serie
de diálogos con los jóvenes adventistas

Lo que nos dejó

Hablemos Jan Paulsen El diálogo con los jóvenes de nuestra

iglesia está tan solo en el comienzo.

8 Adventist World | Octubre 2008


de diversas partes del mundo. La serie
se llamó Hablemos. Como resultado de
los mismos estoy firmemente convenci-
do que los jóvenes también tienen una
visión para su iglesia; son innovadores,
están deseosos de involucrarse y, por
sobre todo, se encuentran apasionada-
mente comprometidos con el Señor y
su misión.
Este diálogo se ha hecho realidad
por medio de transmisiones televisivas
en vivo y una continua corresponden-
cia electrónica. El resultado: he llegado
a sentir una profunda confianza en
nuestros jóvenes. Es verdad que a veces
me he sentido escéptico, pero vez tras
vez, estos jóvenes de 15 o 25 años me
han mostrado que aman a esta iglesia.
Es aquí donde quieren estar. Es aquí
donde quieren servir al
Señor. Y están listos para
hacerlo.
Los diálogos han cubier-
to muchos temas, a veces
impulsados por intereses
locales, por cosas específicas
de un contexto o culturas
particulares. Pero también
hubo un número de pregun-
tas, de temas abarcadores,
que se repitieron ya fuera en
español, suajili, portugués o
inglés.
Jóvenes
comprometidos
1. En busca de un lugar
y una voz. Como eje de sus
palabras a menudo escucho:
“¿Por qué no se nos permite
una mayor participación?”
“¿Por qué no podemos par-
ticipar más en el liderazgo?”
Estas son preguntas exigen-
tes pero justas. No están
inquiriendo si un mayor
H O
número de ellos podría ser
J .
miembro de la Junta Directi-
A L D E N
va de la Asociación General;
ni siquiera si pueden ser
parte de las juntas de División, Unión o
Asociación. Lo que quieren es que se les
confíen mayores responsabilidades en
sus congregaciones locales.
¿Por qué deberíamos rehusarnos a
ello? Pensemos en los doce elegidos por
Cristo. Pensemos en nuestros pioneros.
A veces olvidamos el camino que
hemos andado y los errores cometidos.
Olvidamos que nosotros también al
comienzo tambaleamos y tropezamos.
Es normal que esto suceda hasta que
nuestros músculos se fortalecen por
medio del ejercicio o hasta que apren-
demos adónde apoyar el pie. A veces
exageramos el valor de la experiencia,
que es importante; pero aún más
importante es el desarrollo básico de la
personalidad: cómo nos relacionamos
con las personas, nuestra capacidad de
amar y cuidar de la iglesia y nuestro
sentido de responsabilidad. Si se
coloca a la persona correcta en el lugar
correcto, adquirirá la experiencia que
necesita. Pero si se coloca a la persona
equivocada, no importa su edad, su
desempeño será deficiente.
2. Definición de los límites. Muchas
preguntas se relacionan con la vesti-
menta y las joyas, las opciones de entre-
tenimiento, la música y las relaciones
humanas.
Las mentes jóvenes pueden ser muy
“legalistas” en el sentido que ven el
mundo en líneas claramente definidas.
Buscan seguridad en límites bien
establecidos. Algunos quieren fórmulas
precisas, y pueden ser muy insistentes.
A veces no se conforman con prin-
cipios; quieren respuestas claras. Los
motiva la necesidad de definirse a sí
mismos, de definir los límites que los
rodean, de descubrir qué lugar ocupan
y si lo que los contiene les resulta de su
agrado. Quieren saber si entienden esos
límites y la razón de ser de ellos. Quie-
ren saber cómo se expresa una vida de
obediencia a Dios.
Como muchos de mis interlocuto-
res, yo también crecí en un hogar ad-
ventista. A los 20 años mi pensamiento
era muy legalista. Me impacientaban
los que decían: “Bueno, tal vez no sea
así”. Esa frase me resultaba problemáti-
ca. Pero a lo largo de la vida he apren-
dido que hay situaciones en las que hay
que permitir que los demás crezcan y se
desarrollen, que descubran la voluntad
de Dios para sus vidas.
Esto implica confianza, pero tam-
bién una gran responsabilidad. Por eso
les recuerdo a los jóvenes que jamás
tienen que tomar a la ligera su libertad.
Jan Paulsen es
presidente de la Iglesia
Adventista mundial.
Octubre 2008 | Adventist World 9
 Iglesia en acción
PA N O R A M A M U N D I A L
La elección de la música fue un
tema recurrente, y es normal, porque
este tema representa para ellos una
preocupación legítima. La música es
una parte importante en sus vidas
(observemos tan solo el papel que juega
en un servicio de adoración conducido
por jóvenes), y sus preguntas son
realmente serias.
¿Cómo sé si cierta música cristiana
tiene lugar en la vida de la iglesia?
Yo pregunto: “¿Invita esta música a la
adoración? ¿Me acerca a Dios y me
Estamos perdiendo
a demasiados
jóvenes y
demasiados
miembros menores
de 25 años.
10 Adventist World | Octubre 2008
alimenta espiritualmente? ¿O me aleja
de Dios, de lo que posee escaso con-
tenido y exceso de ruido? ¿Es música
que crea el sentido de comunidad,
que une y congrega a esta familia en
adoración?”
Sé que algunas personas mayores
acaso hayan escuchado estos diálogos
y dicho: “¿Por qué no les dice simple y
claramente cómo tienen que ser las co-
sas?” Ante esto, solo atino a responder:
“Estos son vuestros hijos; hablad con
ellos. Vuestros hijos están buscando
una identidad legítima den-
tro de la iglesia. Ayudadles
a hallarla. No los espantéis.
Ayudadles a entender la con-
fianza y la responsabilidad
que les pertenece”.
3. En busca de una
misión. Los jóvenes se
sienten frustrados por el
gran número de compañeros
que están abandonando la
iglesia. Esta fue también una
preocupación recurrente.
A menudo yo les pregun-
taba: “Díganme, ¿por qué se
fueron?”
Y me respondían:
“Bueno, la iglesia es muy
anticuada”. “No hay tole-
rancia”. “Hay demasiado negativismo,
demasiada crítica hacia nuestro aspecto
y nuestras elecciones”.
Entonces les preguntaba: “¿Y la
amistad? ¿No será que se fueron porque
perdieron el sentido de comunidad?
¿Han sido ustedes verdaderos amigos?”
A menudo se producía un silencio,
hasta que alguien decía: “Sí, tal vez
fallamos un poco en eso”. Y yo les
decía: “Bueno, ¿no deberían ir ahora a
buscarlos?”
Los jóvenes deberían ser comisiona-
dos para asumir mayores responsabili-
dades en el ministerio por sus amigos.
Están preparados como nadie para esta
tarea. Que sea un ministerio definido y
reconocido en la iglesia local, al mismo
nivel que la Escuela Sabática o el ser
diácono o anciano. Que los jóvenes
cuenten con un espacio o territorio
oficial de confianza. Ellos lo captarán,
y esto hará que surja algo nuevo y
poderoso.
Confiemos en ellos
Ante esto, solo atino a responder:
“Estos son vuestros hijos; hablad con
ellos. Vuestros hijos están buscando
una identidad legítima dentro de la
iglesia. Ayudadles a hallarla. No los
espantéis. Ayudadles a entender la
confianza y la responsabilidad que les
pertenece”.
Siempre he creído que el mañana
está en manos de nuestros jóvenes, y
esta realidad debería verse reflejada en
la iglesia actual. Esta convicción no ha
sido cambiada por los diálogos de
Hablemos, sino que por el contrario,
se ha visto fortalecida por ellos. Expe-
rimento un sentido de urgencia, y me
pregunto: ¿Qué nos está reteniendo?
Démosles el espacio y la oportunidad
de crecer.
Invito a la iglesia a confiar en
nuestros jóvenes. Hablemos con ellos.
Escuchemos lo que tienen que decir.
Mostrémosles que confiamos en ellos
al darles oportunidades y responsabi-
lidades. ¿Harán las cosas bien el ciento
por ciento de las veces? Tal vez no, pero
nosotros tampoco somos infalibles.
Confiemos en ellos y estarán con
nosotros el día de mañana, y para
siempre.
*Notas biográficas, pp. 137, 138.
 S A L U D M U N D I A L

La
osteoartritis Allan R. Handysides y Peter N. Landless
Soy una mujer de 68 años. Me duelen las rodillas al caminar. El doctor me dijo
que sufro de osteoartritis y que debería tomar algún analgésico de venta libre
y perder peso. ¿Podría decir algo más de esta afección y qué convendría que haga
al respecto?

L
a osteoartritis es la forma más
común de artritis, y se presenta
con más frecuencia con la edad.
La artritis es la inflamación de una
articulación. Las articulaciones son las
interfases de los huesos, cubiertas por
un suave cartílago y encapsuladas en un
saco fibroso. El revestimiento del saco se
llama sinovio, y segrega el líquido sino-
vial, que lubrica las articulaciones.
rada. El hueso que está bajo el cartílago
dañado se torna cada vez más denso, y
los crecimientos óseos en los extremos
de la articulación causan articulaciones
de aspecto desparejo.
Cuando este proceso involucra
articulaciones como rodillas o cadera,
puede producir dificultad para despla-
zarse. Si en cambio produce artritis de
las articulaciones pequeñas (las manos),
antiinflamatorios no esteroideos tales
como el Naproxen pueden ser usados
con la menor dosis efectiva en casos en
que el Tylenol no resulte útil, aunque
tienen efectos secundarios gástricos.
A muchos les beneficia una inter-
vención quirúrgica que reemplace la
articulación y, aunque se solía retrasar
esto tanto como fuera posible, algunos
estudios indican que el reemplazo

El ejercicio puede ser nocivo para las articulaciones con osteoartritis,

pero los ejercicios acuáticos han mostrado ser de mucha ayuda.
En la artritis reumatoidea, el sinovio
se inflama porque es atacado por el sis-
tema inmunológico del cuerpo como si
fuera un tejido extraño. Esta equivocada
respuesta inmunológica causa infla-
mación y las secreciones inflamatorias
dañan el cartílago y la articulación, lo
que los lleva a deformarse. Aún no se
sabe bien por qué el cuerpo ataca a sus
propias membranas.
Otras formas de artritis pueden estar
asociadas con la infección, los tumores o
aun la gota. En este último caso, cristales
de ácido úrico se precipitan en la articu-
lación y causan inflamación.
La osteoartritis no está asociada
con infecciones, tumores, cristales o
anticuerpos propios, sino que apa-
rentemente se da cuando existe una
predisposición familiar en personas que
han abusado seriamente de sus articula-
ciones o inclusive en los que han sufrido
golpes de consideración. En la osteoar-
tritis, el cartílago que cubre el extremo
del hueso se degenera por razones
que no son completamente claras, y se
produce una inflamación leve o mode-
la persona experimenta una pérdida de
la destreza y debilidad en los miembros.
El ejercicio puede ser nocivo para
las articulaciones con osteoartritis, pero
los ejercicios acuáticos (natación) han
mostrado ser de gran ayuda y lo mejor
para estos casos. Es bueno perder peso,
especialmente si están comprometidas
las articulaciones de rodilla y cadera.
Los cambios en el régimen alimentario
no resultan de gran ayuda, aunque
la reducción del ácido úrico puede
contribuir a mejorar la artritis reuma-
toidea. De allí el beneficio de una dieta
vegetariana.
Algunos han promovido el uso de
sulfato de chodroitina y de glucosamina,
pero un estudio serio halló que no eran
superiores a un placebo (la proverbial
“píldora de azúcar”). Algunos datos
recomiendan inyectar ácido hialurónico
en la articulación, y gran parte del tra-
tamiento se centra en el alivio del dolor.
Se ha mostrado que en algunos casos
es posible reducir el dolor mediante la
acupuntura, pero en general se suele
usar el acetaminofeno (Tylenol). Los
temprano puede prevenir la debilidad
muscular y asociarse con un estilo de
vida más productivo.
Está claro que el tema difícilmente
está agotado; su médico puede darle
consejos más específicos para atender las
necesidades individuales.
Esperamos que obtenga el
suficiente alivio y que pueda disfrutar
de la vida.
*Clegg, D. et al., The New England Journal of Medicine, 2006,
354, pp. 794-808.
Allan R. Handysides, M.B.,
Ch.B., FRCPC, FRCSC, FACOG,
es director del departamento
de Ministerios de Salud de la
Asociación General.
Peter N. Landless, M.B., B.Ch.,
M.Med., F.C.P.(SA), F.A.C.C., es
director ejecutivo del ICPA y
director asociado de Ministerios
de Salud de la Asociación General.

Octubre 2008 | Adventist World 11

D E V O C I O N A L

Saludos
Reinder Bruinsma

C
uando se le preguntó qué
aspecto habría tenido el após-
tol Pablo, se dice que Martín
Lutero expresó que seguramente se

Pablo
parecía a su colega Felipe Melancton.

Los retratos de la época muestran
que Melancton era un individuo de
aspecto más bien adusto, y que tenía
expresiones faciales que –para decirlo
suavemente– no expresaban demasiado
gozo de vivir. De alguna manera, yo
también pensaba que Pablo era así.
Aunque tenía una imagen mental
de Pedro como la de un individuo
optimista, alguien a quien me habría
gustado invitar a comer y a conversar,
pensaba que Pablo era un estricto
académico que prefería luchar con
interrogantes teológicos escabrosos
antes que compartir una buena
comida con un amigo. No me parecía
una persona muy sociable, ni alguien
que abrazara a otras personas, dedicara
tiempo a hablar de cosas simples o a
cultivar sólidos lazos de amistad.
El último capítulo de Romanos
cambió mi forma de pensar al respecto.
Dedicado a las personas
Cuando Pablo escribió la epístola
desde Corinto, alrededor del año 55
d.C., aún no había visitado Roma. Su
carta a esta iglesia que en ese entonces se
reunía en los hogares de los feligreses, se
convirtió en su epístola más destacada,
donde describió en forma más detallada
su teología de la redención en Cristo. En
este artículo, sin embargo, me concentra-
ré en el epílogo de la epístola, en la lista
de salutaciones que se encuentran en el
capítulo 16.
Febe, a quien Pablo menciona al
comienzo del capítulo, fue probable-
mente la que llevó la carta a Roma. Febe
era una cristiana destacada en la iglesia
de Cencrea, cerca de Corinto. El texto
Reinder Bruinsma es
director de comunicacio-
nes de la Unión Holan-
desa, en Huis ter Heide,
Holanda.
de
Después de décadas de malentendidos,
pude ver el lado tierno de Pablo.
griego parece indicar que era diaconisa.
La carta que llevó contenía salutaciones
para no menos de veintinueve indivi-
duos de Roma.
Priscila y Aquila, ex compañeros de
Pablo en la confección de tiendas, son
mencionados primero (vers. 3). El ma-
trimonio había huido de Roma durante
las persecuciones del emperador Clau-
dio (Hech. 18:2). Pablo trató con ellos
en Corinto y en Éfeso, y aquí los llama
“mis colaboradores en Cristo Jesús”.
Pablo saluda entonces a Epeneto (vers.
5), el primer converso al cristianismo en
lo que hoy es Turquía. A continuación
menciona a María, uno de muchos per-
sonajes bíblicos que lleva ese nombre.
Dice Pablo que ella trabajó “muy duro”
por la iglesia (vers. 6). (Recordemos
buscarla en la Nueva Jerusalén para ver
quién era).
No puedo comentar aquí los
veintinueve nombres. Pero Andrónico
y Junias (vers. 7) merecen una breve
mención. Ellos eran “muy estimados
entre los apóstoles”, dice Pablo. Esta es
una declaración extraordinaria, ya que
hay grandes posibilidades de que Junias
fuera una mujer. El nombre “Junias”
puede ser masculino o femenino y, por
más de mil años, los teólogos se han
referido a esta persona como mujer. El
escritor Juan Crisóstomo, del siglo IV
d.C., expresó inclusive su sorpresa sobre
el hecho de que aparentemente una
mujer se hallara entre los apóstoles.
(Sin embargo, a partir del siglo XIII se
comenzó a pensar en Junias como
nombre masculino).
Pasamos por alto a Amplias, Urbano,
Estaquio y Apeles (dado que solo
sabemos sus nombres), y llegamos a
Aristóbulo (vers. 10). Puede ser que
haya sido uno de los nietos del rey
Herodes. Herodión (vers. 11) también
puede haber pertenecido a la familia de
Herodes. Narciso (vers. 11), puede haber
pertenecido a la alta sociedad. Algunos
sugieren que puede haber sido un
secretario privado en la corte imperial.
Más abajo encontramos a Rufo
(vers. 13). Su nombre nos recuerda a
Marcos 15:21, donde Simón de Cirene
(que llevó la cruz de Cristo) es descrito
como “el padre de Alejandro y Rufo”.
Algunos estudiosos de la Biblia creen
que el Evangelio de Marcos puede
haber sido dirigido inicialmente a los

12 Adventist World | Octubre 2008

 Cuando miramos
a Pablo desde
la perspectiva
de Romanos 16,
surge una
nueva imagen
del apóstol.
P O T T S
C A I T L I N

cristianos de Roma y al saber que Rufo
finalmente terminó alli Marcos tuvo el
gesto de insertar ese detalle.
Después de mencionar unos pocos
nombres adicionales, Pablo concluye
la carta animando a sus receptores a
saludarse unos a otros con “beso santo”
(vers. 16), una costumbre que aconsejó
que siguieran sus lectores de otras de sus
epístolas.
Un Pablo diferente
Pablo aún no había estado en
Roma y, sin embargo, ¡conocía a casi
treinta personas por nombre! Resulta
singular que nueve de las veintinueve
personas mencionadas son mujeres.
¿Puede ser que Pablo no haya sido el
tipo de misógino que a veces se piensa?
Asimismo, aunque algunos de la lista
eran personas de un estatus considerable
en la sociedad romana y en la iglesia,
Pablo también recordó los nombres de
otras personas “simples”, trabajadoras y
confiables que no poseían alcurnia o un
trasfondo académico destacado.
Cuando miramos a Pablo desde
la perspectiva de Romanos 16, surge
una nueva imagen del apóstol: la de
alguien que estaba profundamente
interesado en otras personas. Al tener
en cuenta este aspecto al releer el resto
de Romanos y las otras epístolas, vemos
una clara confirmación de esta imagen
en muchos lugares. Entre medio y por
detrás de la teología y las críticas y amo-
nestaciones a menudo severas, vemos
a un hombre que amó a las personas y
que se preocupó genuinamente por ellas.
¿Dónde se halla esto más visible que en
sus cartas a Timoteo, a quien ama como
si fuera su propio hijo (2 Tim. 1:1-5)?
Y la pasión que sentía por su propia
nación se ve con claridad en Romanos
9:2-4: “Tengo gran tristeza y continuo
dolor en mi corazón, porque deseara
yo mismo ser anatema, separado de
Cristo, por amor a mis hermanos, los
que son parientes según la carne; que
son israelitas”.
El rostro humano
Como administrador de la iglesia,
paso gran parte de mi tiempo en
reuniones, analizando todo tipo de
temas de organización y administración:
reglamentaciones, programas, edificios,
dinero, puestos vacantes, informes a ser
evaluados. Todo esto constituye gran
parte de mi trabajo. Pero en último
término habría fallado si no hubiera
visto el rostro humano detrás de todo,
si no valorara a las personas por sobre
los reglamentos. Si lo que yo y otros
líderes de la iglesia hacemos, carece de
un rostro humano, sería mejor dejarlo
sin hacer.
Si queremos trabajar en cualquier
nivel de la iglesia, ya sea como volunta-
rios o empleados pagos, tenemos que
amar a las personas. Resulta significativo
que la carta a los Romanos no culmina
en declaraciones o teología doctrinal
altisonante, sino con personas reales que
son mencionadas por nombre. De ma-
nera que hoy, ya sea estemos hablando
de teología, doctrinas, temas sociales o
morales difíciles, nuevos reglamentos o lo
que fuera, veremos que todas las perspec-
tivas cambian cuando permitimos que
esos temas adopten un rostro humano.
Romanos 16 ha transformado mi
pensamiento sobre Pablo. Ahora lo veo
más humano. ¡Conocía veintinueve
personas en una iglesia que jamás había
visitado! ¿Cuánto conoce usted a las
personas de su iglesia?

Octubre 2008 | Adventist World 13

V I D A A D V E N T I S T A

Por los Loren

inocentes que sufren

Seibold

Un plan para ayudar a

N uestra visita a Calcuta coincide con el Holi, un festival de
primavera que se celebra arrojando polvo de tiza de co- las familias de la zona roja
lores a los amigos. Por donde miramos, vemos personas son-
rientes con manos, rostros y ropas manchadas de rojo, rosado, de Calcuta
azul o verde. Algunos descansan acostados sobre el pavimento
tibio, recuperándose de las fiestas de la noche anterior.
La trabajadora social Urmi Basu se dirige hacia un pasa-
dizo extrañamente largo y estrecho. La seguimos, esquivando
las aguas servidas. A cada lado hay entradas de madera tosca,
H U M A N I T Y

como puertas de establo; tras ellas, hay familias que viven en

habitaciones sin ventanas y con una sola fuente de luz. Los
niños pasan corriendo y riendo a nuestro lado, absortos en sus
juegos. “Aquí viven las prostitutas”, dice Urmi.
F O R

Nos hallamos en el corazón de Kalighat, una zona antigua

F AT T I C / H O P E

de Calcuta. Su nombre proviene del famoso templo de la diosa

Kali, uno de los sitios más sagrados de la religión hindú. Es
una zona atestada y con mucho movimiento, y es también el
centro de la zona roja de Calcuta.
Sin embargo, nada se asemeja al colorido erotismo de
K U R T

Amsterdam o Nueva York. A veces, la marea alta arroja en las

casas y calles, el agua de un canal cercano (mezclada con cu-
carachas, basura, animales muertos y desperdicios). Los niños
juegan en esa agua. Es este un lugar de pobreza extrema, y no
es casualidad que aquí se encuentre el hogar de la Madre Tere-
sa, para los destituidos y moribundos. Los clientes son hom-
bres pobres: conductores de calesas manuales y jornaleros.

B OY D
La aceptación general de la prostitución ilegal parece fuera
de lugar en esta cultura orientada a la familia y de estrictas

reglas morales. Pero no debería sorprendernos del todo: en
todas las culturas (y en nuestra propia fe) observamos que
cuanto más inflexibles e inmisericordes son las normas mora-
les, más grande es el potencial para la hipocresía. “La mayoría
de estas mujeres no pueden elegir otra cosa”, explica Urmi.
Algunas fueron violadas, luego de lo cual (por más que no
tengan la culpa), no pueden regresar a sus hogares. Otras son
viudas, en una cultura que considera la viudez una desgracia.
Muchas jovencitas fueron raptadas para ser esclavas sexuales.
Al final del pasillo pasamos por la cocina casi vacía y subi-
mos una escalera, hasta encontrarnos bajo un techo precario
y humildes habitaciones. Nos asombra lo que vemos al descu-
brir que por esa puerta ingresamos a un nuevo mundo. Cada
noche, antes de ir a trabajar, las prostitutas de Kalighat llevan
allí a sus hijos. Vemos filas de niños sonrientes que, sentados
a la mesa, comen buenos alimentos. Un médico se ocupa de
M E L A N I E
De arriba a abajo: DADLES VOSOTROS DE COMER:
Dar alimentos a los niños de las prostitutas de
Calcuta mientras sus madres aprender a leer es
parte de un programa patrocinado conjuntamente
por Hope for Humanity, la División Sudasiática y
Amistad International. AMIGAS NECESITADAS:
Karen Kotoske, una adventista de California, Esta-
dos Unidos, fundadora y directora de la organiza-
ción humanitaria Amistad International, posa con
algunas de las niñas que viven en el Hogar Soma,
un proyecto que Amistad ayudó a fundar.

14 Adventist World | Octubre 2008

los enfermos; también se les corta el cabello y se los baña; hay
quienes ayudan a los que van a la escuela y cuando terminan
las tareas, se sientan en el piso como lo harían otros niños, a
mirar videos.
Este es el Centro New Light de Kalighat; un refugio para
los niños de las prostitutas de Calcuta.
El viaje a Kalighat
¿Cómo llegamos hasta aquí?
A comienzos de 2007 me invitaron a viajar por la India
con un grupo de pastores y líderes de la iglesia para inspec-
cionar uno de los ministerios más creativos de “Hope for
Humanity”: una red nacional de clases para mujeres, en las
que se les enseña a leer usando la Biblia como libro de texto.
(Véase el número de diciembre 2007 de Adventist World, “Por
las mujeres de la India”).
Cuando mi amiga Karen Kotoske se enteró que estaba
yendo a la India, me preguntó: “¿Será que por casualidad vas a
pasar por Calcuta?”
Karen, una adventista de Palo Alto, California, Estados
Unidos, es la fundadora y directora de Amistad International,
una organización humanitaria sin fines de lucro. Por muchos
años, esta entidad trabajó exclusivamente entre los indios hui-
chol de México, en sociedad con la División Interamericana.
Unos años atrás, Karen conoció a una visitante de la India:
Urmi Basu; una mujer india de clase alta, bien educada y ele-
gante, que trabaja por las familias de las prostitutas de Calcuta.
Durante la cena, Urmi le contó a Karen del Centro New Light,
y de un proyecto llamado Hogar Soma (pronunciar Shoma),
una gran casa fuera del distrito de Kalighat, adonde esperaba
trasladar las hijas adolescentes de las prostitutas, antes de que
fueran forzadas a realizar la misma tarea destructiva de sus
madres. Aunque Urmi no tiene una base religiosa en su tra-
bajo, Karen se convenció de que esta mujer estaba haciendo la
obra de misericordia de Cristo. Amistad Internacional pronto
reunió fondos para ayudar a establecer el Hogar Soma.
“Si vas a Calcuta –me dijo Karen entusiasmada– visita por
favor a Urmi Basu y su centro para los hijos de las prostitutas”.
Y así es que me encontré del otro lado del mundo, guiando
a un grupo de pastores adventistas por una zona roja donde
abundaban las prostitutas.
Al regresar a mi hogar en Estados Unidos comencé a idear
un plan: Ahora tenía amigos en la India que les estaban ense-
ñando a las mujeres a leer, y otros que estaban ayudando a las
familias de las prostitutas. ¿Y si comenzábamos a dar clases de
lectura en Kalighat?
Escribí a Hepzibah Kore, líder de las escuelas de alfabetiza-
ción de la India. Me respondió que nunca antes había hecho
algo así, pero si reunía los fondos, lo intentaría. A la gente
de Hope for Humanity también les gustó la idea. Urmi Basu
estaba dispuesta a ofrecer el centro para que allí se dictaran las
clases. Solo nos faltaba el dinero.
Un sábado de mañana subí al balcón de mi iglesia para
hablar con los operadores audiovisuales. Allí se reúne una
clase de Escuela Sabática. Al pasar, Don Scriven, el maestro de
la clase, interrumpió su lección y dijo: “Pastor, ¿necesita algo?”
En realidad, aún no había pensado en hablar de mi idea, pero
Dios me dio la oportunidad de hacerlo.
“¿Qué les parece –pregunté– si como clase, adoptan un
proyecto misionero?”
“Hoy almorzaremos juntos –dijo Don– venga y cuéntenos
de qué se trata”.
Esa tarde, la clase de Escuela Sabática de Don prometió
juntar dinero suficiente para comenzar con la escuela de
lectura en Kalighat. Otra clase se les unió poco después. En las
siguientes semanas, llamé a varios pastores amigos que habían
visitado el centro conmigo, y prometieron difundir la idea en
sus iglesias.
Resultados alentadores
En las primeras clases de alfabetización, las prostitutas
estuvieron acompañadas por las asistentes de Urmi, mujeres
pobres (algunas de las cuales escaparon del comercio sexual)
que podrían ser docentes en el futuro. También hay una clase
para las mujeres dalit –de la casta llamada “intocable”.
Nuestro objetivo para las mujeres de Kalighat es modesto:
ayudar a que alguien sin futuro alguno aprenda a leer. Mucho
tiempo atrás, cuando una prostituta fue puesta a los pies
de Jesús, él les dijo a sus acusadores: “El que esté sin pecado
arroje la primera piedra”. Fue un recordatorio de que a los ojos
de Dios, la distancia entre lo peor y lo mejor de nosotros no es
tan grande como podemos suponer. Todos somos pecadores,
aunque algunos hemos tenido más bendiciones que otros. ¿No
tendríamos que ayudar, entonces, los más bendecidos a los
que necesitan una bendición mayor?
Cómo puede ayudar
Hope for Humanity recibe donaciones para el Programa de
Alfabetización de la India. Visite el sitio http://hope4.com, o
escriba a Hope for Humanity, 12501 Old Columbia Pike, Silver
Spring, MD 20904, Estados Unidos, o llame al 1-888-425-7760.
Amistad International continúa apoyando la obra de
Urmi Basu en la zona roja de Kalighat. Visite el sitio
www.amistadinternational.org, o escriba a 1657 Edgewood
Drive, Palo Alto, CA 94303, Estados Unidos, o llame al
1-650-328-1737.
La iglesia adventista de Worthington tiene un sitio web sobre
sus proyectos misioneros: www.worthingtonsda.org.
Loren Seibold es pastor de la iglesia adventista
de Worthington, Ohio, Estados Unidos, y editor
de un boletín electrónico para pastores llamado
“Buenas prácticas para el ministerio adventista”
(www.vervent.org).
Octubre 2008 | Adventist World 15
 N O TA D E TA PA

F O T O G R A F Í A S : S E C R E TA R Í A D E M I S I Ó N A D V E N T I S TA

número de habitantes
por adventista
División de África del
Sur-Océano Índico
76
División del Pacífico Sur
85
División Interamericana
1OO
División Sudamericana
12O

El último Homer
Trecartin

mısıonero Podría ser usted?

16 Adventist World | Octubre 2008
E
l joven adventista se sentó en mi oficina y me dijo
que había crecido en el campo misionero. Ahora
estudiaba un posgrado y colaboraba con una clase
de misión en una gran universidad. El profesor
con el que trabajaba quería que se enfocara en uno de los
grandes movimientos misioneros contemporáneos: el que
lleva adelante la Iglesia Adventista. Por eso me estaba pidien-
do estadísticas de la historia de las misiones adventistas en
el mundo.
Hablamos del crecimiento de nuestra iglesia desde su
fundación en 1863, y compartí con él las estadísticas de
nuestro programa misionero. Al comienzo se asombró de
saber que, en comparación con unos años atrás, actualmente
tenemos la mitad de misioneros de tiempo completo. Su
comentario fue: “Bueno, tal vez está bien. Supongo que en
realidad ya no necesitamos tantos misioneros. Los locales
han sido entrenados para realizar la tarea. Los extranjeros
pueden quedarse en su país”.
¿Lo pone incómodo esa idea? A mí sí. ¿Sería un motivo
de celebración traer de regreso al último misionero?
Durante años, algunos han aducido que el concepto
de misiones cristianas es un error. ¿Por qué un creyente
acostumbrado a la corbata, los templos tradicionales y los
himnos y las Biblias occidentales tiene que invadir la belleza
inmaculada de las sociedades primitivas? ¿Qué bien puede
producir el interrumpir las tradiciones y costumbres de los
nativos al introducir otros conceptos respecto de lo correcto
o incorrecto?
Décadas atrás, antropólogos bien conocidos afirmaron
que el cristianismo, especialmente en Asia y África, no hacía
más que seguir los pasos de los gobiernos coloniales. Creían
que la conversión en estas regiones era coercitiva y raramen-
te genuina, y predijeron que el cristianismo desaparecería tan
pronto como los movimientos nacionalistas forzaran a los
gobiernos coloniales a retirarse.
¿No es interesante, sin embargo, ver lo que realmente
sucedió? El cristianismo parece estar desapareciendo en esos
antiguos poderes colonialistas a la vez que crece con rapidez
en las regiones y países que fueron colonizados y que ahora
controlan sus destinos económicos y políticos.
Quizá los estudiosos se enfocaron en el tema equivocado.
La pregunta no era (y no es) si cambiarían las culturas
“primitivas”. El cambio es inevitable en cualquier cultura. La
pregunta real es: ¿Quiénes serán los agentes de cambio? ¿Se-
rán los marineros en busca de mujeres, los comerciantes que
buscan ganancias, los traficantes de personas que acechan a
los vulnerables? ¿O serán los discípulos de Jesús –los misio-
neros– motivados por el amor que sienten por él y el deseo
de compartir su amor?
Breve historia de las misiones
Siempre ha habido “misioneros”. Desde su refugio en las
montañas, Enoc descendía a las ciudades para hablar con la
gente.1 Noé utilizó ayudas visuales para atraer la atención
de la gente y llevarlos hacia donde pudiera hablar con ellos.2
Abrahán anduvo por zonas rurales, donde estableció altares
y permitió que su vida fuera un testimonio. Jonás llevó el
mensaje a una nación pagana. Jesús envió los discípulos de
dos en dos en un breve itinerario misionero (Mar. 6:7). A la
orden de Jesús, Pablo y la iglesia primitiva se esparcieron y
llevaron el evangelio hasta los confines del mundo conocido.
A lo largo de los siglos, aunque buscados y perseguidos, el
Señor siempre ha hallado creyentes dispuestos a arriesgarse
al peligro y la enfermedad, a fin de compartir las verdades de
su Palabra.
A comienzos del siglo XVII, una organización misionera
–la Sociedad Católica de Jesús– contaba con más de ocho mil
quinientos misioneros en el extranjero, ubicados en veinti-
trés países, en una época cuando la población mundial no
superaba los 550 millones, lo que era menos de la mitad de la
población actual de la India.
A fines del siglo XVIII comenzaron a surgir las organi-
zaciones misioneras protestantes a medida que el Espíritu
Santo impulsó a hombres y mujeres que conocían el amor de
Jesús, a ir más allá de los enclaves del cristianismo occidental.
En ese siglo, decenas de europeos y norteamericanos dieron
respuesta al llamado e incluso dieron sus vidas. Para cuando
se realizó la primera Conferencia Misionera Mundial en
Edimburgo, Escocia, en 1910, había 160 juntas o sociedades
misioneras protestantes.
El primer misionero adventista
En 1869, el congreso de la Asociación General de la na-
ciente Iglesia Adventista votó formar la “Sociedad Misionera
Adventista” con el propósito de llevar el mensaje “al extran-
jero y a partes distantes de nuestro propio país, por medio de
misioneros, documentos, libros, folletos, etc.”. 3 Sin embargo,
al comienzo los avances fueron escasos. No todos, ni siquiera
entre los líderes de la iglesia, sentían aún el deber de enviar
misioneros a otros países.
“En enero de 1874 apareció el primer número de True
Missionary, una revista que contenía artículos que instaban
a los adventistas a enviar misioneros a otros países. Estos
llamados y los realizados por los adventistas suizos, fueron
efectivos y el 15 de septiembre de 1874, J. N. Andrews, el
primer misionero adventista en ser enviado fuera de Nortea-
mérica, se embarcó hacia Liverpool en camino hacia Suiza”.4
Una vez que se dio este primer paso, se produjo un
crecimiento a ritmo vertiginoso, al menos para una iglesia
que al comienzo de la década solo tenía cinco mil miembros.
Homer Trecartin es director de planificación
de la Secretaría de Misión Adventista en
la Asociación General. Si desea más
información sobre las misiones, visite el sitio
www.AdventistMission.org.
Octubre 2008 | Adventist World 17
 N O TA D E TA PA
Pronto salieron misioneros hacia Alemania (1875), Francia
(1876), Italia (1877), Noruega (1878) y Suecia (1880). Du-
rante la década siguiente, se enviaron misioneros para que
comenzaran la obra en Australia (1885), Sudamérica (1885),
Sudáfrica (1887) y Asia (1888), y otros para construir sobre
la obra ya iniciada.
Las estadísticas son imprecisas, pero parece ser que el nú-
mero de empleados interdivisión (“misioneros” empleados
por la iglesia para ir a vivir a otro país durante un período
extendido de tiempo) alcanzó su punto máximo en la década
de 1970. En 1979 había 1.561 empleados activos más sus
cónyuges e hijos.
En la actualidad, ese número
ha descendido a 919 y aunque
añadiéramos las estimacio-
nes no oficiales de 4.800
pioneros de Misión
Global y Evangelismo,
64 misioneros adven-
Para que los individuos o las iglesias
sigan siendo saludables, se
necesita acceder continuamente a
nuevas ideas y perspectivas.
tistas de avanzada, varios cientos de estudiantes misioneros
y otros misioneros enviados por los ministerios de apoyo de
la iglesia, todavía estaríamos muy por debajo de la cifra de
misioneros de la Iglesia Católica allá por 1600.
¿Son aún necesarios?
Nos hallamos en un punto de inflexión en la historia de
las misiones adventistas. ¿Continuaremos el lento descenso,
o acaso lo aceleraremos? ¿Son aún necesarios los misioneros?
¿O es tiempo de que regrese el último?
Creo que siempre necesitaremos misioneros nacionales e
internacionales. Creo que tenemos que revertir rápidamente
este descenso. Creo que necesitamos incrementar dramáti-
camente el número de misioneros. He aquí algunas de las
razones para ello:
Polinización cruzada. La genética nos ha mostrado
qué sucede cuando un grupo de aves, mamíferos o seres
humanos queda aislado durante largos periodos: se produce
una endogamia. Esto puede resaltar características faciales,
enfermedades heredadas y la propensión a diversas afec-
ciones médicas. Una comunidad fuerte y saludable necesita
enriquecer continuamente su acervo genético.
18 Adventist World | Octubre 2008
El mismo principio se aplica al ámbito espiritual. Para
que los individuos o las iglesias sigan siendo saludables, se
necesita acceder continuamente a nuevas ideas y perspec-
tivas. Los medios adventistas (los ministerios de televisión,
radio, publicaciones e Internet) pueden contribuir con ello,
pero el mayor impacto se produce cuando los seres humanos
se ponen en contacto regular con otros que incorporan pers-
pectivas enteramente nuevas a los temas locales.
Esa es la razón por la que Pablo nos dice que no olvi-
demos de congregarnos, especialmente a medida que el fin
se acerca (Heb. 10:25). Necesitamos que otros enriquezcan
nuestra visión del mundo y nuestra experiencia también
puede ayudar a los demás. Ningún individuo o matrimonio
puede reflejar realmente la imagen plena de Dios. Se requiere
todo un cuerpo de creyentes para hacerlo.
Si una región del mundo (o la iglesia mundial) se aísla,
si ya no llegan “forasteros” a compartir su experiencia de fe,
caminar por sus calles y enseñar en sus escuelas, la gente de
esa región estará cada vez más concentrada en sí misma. Se
incrementará el egoísmo, y declinará la comprensión y el
apoyo de la misión de la iglesia en el mundo. Lo mismo suce-
derá con cualquier parte del mundo que decida aislarse y ya
no envíe sus hijos e hijas a ayudar a los demás. Necesitamos
más misioneros de otras regiones de la iglesia mundial que
enseñen en las instituciones educativas adventistas de Euro-
pa, las Américas, Asia, África y el Pacífico Sur. Necesitamos
pastores y administradores. Necesitamos ser una iglesia que
se traslade desde cualquier lado a todos lados.
Barreras étnicas y tribales. Aun al esforzarnos por hacer
realidad la oración de Cristo de ser uno en él, hay veces
cuando esto parece ser un objetivo casi inalcanzable. Los
prejuicios étnicos, tribales y raciales hacen que sea imposible
comprender la experiencia de los demás.
En algunas regiones, las tensiones históricas entre
diversos grupos de creyentes se enfrentan de mejor manera
al invitar a “forasteros” sin vínculos con ninguno de los
grupos, para que lideren la obra de la iglesia, administren sus
instituciones y contribuyan con el avance de los proyectos
misioneros.
Este enfoque ha mostrado ser valioso en regiones que
históricamente se consideraban las “proveedoras” de mi-
 número de habitantes
por adventista
División de África Centro-Oriental
125
División Norteamericana
325
División de África Centro-Occidental
405
División de Asia-Pacífico Sur
710
sioneros del mensaje adventista. Tales regiones a menudo
sostienen tanto a iglesias grandes, metropolitanas o institu-
cionales como a pequeñas congregaciones rurales apartadas.
Los creyentes de ambas clases de iglesia pueden sentir que los
administradores están gastando demasiado tiempo y dinero
en el otro grupo. Si se elige un líder de uno u otro grupo, su
labor a menudo se ve obstaculizada.
Creo que siempre necesitaremos obreros, especialmente
líderes, que vayan de un país a otro. Pero existe otra necesi-
dad que es aún más urgente que esa.
Sin adventistas locales
En 1863, el movimiento comenzó con una proporción
de un adventista cada 373.143 habitantes. En menos de cin-
cuenta años (para 1900), esa proporción había descendido
a un adventista cada 21.487. Para 1950, había un adventista
cada 3.300. Como iglesia mundial, hemos experimentado un
crecimiento fenomenal. Hoy día hay más de quince millones
de miembros en el mundo y, si se cuentan los niños y los
asistentes regulares, la familia adventista tiene casi 25 millo-
nes de personas. En el Concilio Anual de octubre de 2007 se
anunció que en la actualidad hay un adventista por cada 429
habitantes.5 ¡Alabado sea el Señor!
Este movimiento comenzó como un pequeño grupo
angloparlante en los Estados Unidos. Pronto Europa, África,
América Central y del Sur y las islas llegaron a ser “campos
misioneros”. Hoy día, más de un tercio de todos los adven-
tistas vive en el África, y otro tercio vive en América Central
y del Sur. El tercio final se divide entre Europa, Australia,
Norteamérica, Asia y el resto del mundo.6
Hoy día, más adventistas hablan español que inglés y en
26 países, incluyendo Belice, Zambia, Ruanda y Jamaica, hay
al menos un adventista por cada 25 habitantes. ¡En algunos
países, la proporción alcanza a un adventista por cada diez
habitantes! En Jamaica hay una iglesia adventista casi cada
siete kilómetros, y los nuevos templos están siendo ubicados
estratégicamente en las zonas intermedias no alcanzadas.
Dios nos ha bendecido y hemos progresado de tal mane-
ra que a veces oigo decir: “La época de las misiones ya pasó.
La obra está casi terminada. En efecto, en las misiones les va
mejor que a nosotros. Dejemos que cada región del mundo
se arregle por su cuenta”.
De alguna forma esto suena razonable, si uno mira solo
parte de los datos. Observemos con detenimiento esta lista
de habitantes por adventista en cada una de las trece divisio-
nes mundiales.
Otras cifras nos muestran que en Israel hay un adventista
por cada 8.848 habitantes; en Pakistán, uno por cada 16.669;
y la Unión del Medio Oriente tiene uno por cada 15.736.
Pero en esa Unión, la mayoría de los miembros vive en el sur
de Sudán. Egipto tiene un adventista por cada 90.838, y Siria,
Arabia Saudita y Yemen se hallan entre los países menos
alcanzados del mundo con aproximadamente veinte millo-
nes de habitantes y ningún miembro oficial en los registros
eclesiásticos.
No podemos esperar que esas zonas del mundo se las
arreglen por sí solas. En muchos lugares, no hay un solo
habitante que pueda mostrar a otros qué significa ser cris-
tiano. Hay millones que jamás han oído hablar de Jesús, e
innumerables millones que han oído su nombre pero jamás
se han encontrado con alguien que lo conozca como Amigo
y Salvador.
Aunque los medios adventistas (televisión, Internet, radio
y publicaciones) han contribuido decididamente al avance
del evangelio, estas poderosas herramientas misioneras a
menudo resultan más efectivas en llamar la atención de
Octubre 2008 | Adventist World 19
 N O TA D E TA PA
una persona que ya está siendo influenciada por el Espíritu
Santo. Ellas aún necesitan ver la fe práctica en la vida de un
adventista comprometido que pueda mostrarles qué significa
ser transformado por Cristo. Solo así podrán entender y
aceptar plenamente el evangelio.7
Aún se necesitan misioneros que vivan, prediquen y en-
señen el evangelio en países y regiones no alcanzadas por las
buenas nuevas del amor de Jesús.
Las lecciones correctas
A lo largo de la historia de las misiones se han come-
tido errores. Aun Abrahán, David, Jonás, Santiago y Juan
cometieron errores, no solo en lo que respecta a lo correcto
e incorrecto, sino en lo relacionado con las costumbres y
hábitos culturales. Muchos de los relatos bíblicos nos hablan
de personas que al llevar un mensaje enfrentaron situaciones
interculturales. A veces no supieron bien qué hacer y a veces
los cristianos –aun los adventistas– se equivocaron. La histo-
ria abunda con ejemplos de misioneros bien intencionados
que tristemente no pudieron o no supieron separar las bue-
nas nuevas de Cristo de los designios políticos de sus países
nativos o de sus propias tradiciones culturales. Sin embargo,
Dios ha obrado por medio de ellos, y juntos todos hemos
aprendido.
Más de cuarenta años atrás, la Iglesia Adventista estable-
ció el Instituto de Misión Global para preparar misioneros
20 Adventist World | Octubre 2008
número de habitantes por adventista
División del Sudeste Asiático
1.126
División Euroasiática
1.943
División de Asia-Pacífico Norte
2.796
División Euroafricana
3.361
División Transeuropea
5.960
que van a otros países. Esa preparación inicial, junto con el
incremento general del conocimiento de otras culturas y la
creciente facilidad de las comunicaciones, ha resultado de
gran ayuda para evitar o corregir los errores culturales de los
primeros días.
A pesar de la inexperiencia de los misioneros y a pesar
de los errores cometidos, millones han sido transformados
mediante la influencia de estas personas que amaron a Jesús
y a ellos. Durante casi 135 años, dedicados misioneros ad-
ventistas han dado sus vidas en un esfuerzo por realizar una
diferencia en muchos de los lugares más difíciles de la tierra.
Que no regresen los misioneros, ya sea por decisiones
administrativas o por la gradual disminución de los fondos.
Entendamos que cada uno de nosotros es un misionero
donde Dios nos ha colocado. Tenemos una obra que hacer
allí donde estamos y podría ser que fuésemos el último mi-
sionero que conozcan nuestros vecinos.
Pero nuestra influencia y responsabilidad no termina allí.
Algunos de nosotros seremos llamados por Dios para ser
misioneros a corto o largo plazo. A otros, Dios les pedirá que
permanezcan donde están, pero que apoyen a los que van a
otras partes, con su dinero y sus oraciones.
Ninguno de nosotros puede realizar la tarea de llegar a
todos por sí solo. Pero como grupo, al hacer la obra que Dios
nos da y ser fieles en nuestros diezmos y ofrendas misione-
ras, seremos parte de un movimiento que llevará el mensaje
a todo hombre, mujer y niño de la tierra –un mensaje dise-
ñado por el Creador para elevar y salvar a la humanidad de
los eventos dramáticos de los últimos días.
1
White, E. G. (1879, February 20). Seth and Enoch. Signs of the Times, par. 6.
2
White, E. G. (1870). The Spirit of Prophecy, vol. 1 (p. 69). Battle Creek, Mich.: Seventh-day
Adventist Publishing Association, 1969 facsímil.
3
Review and Herald (June 15, 1869). Citado en Missions. The Seventh-day Adventist® Encyclo-
pedia (2002). Hagerstown, Md.: Review and Herald.
4
Ibíd.
5
Ibíd.
Calculado a partir de los datos de la Secretaría de Archivos y Estadísticas (2005). 143rd Annual
6
Statistical Report–2005. Silver Spring, Md.: General Conference of Seventh-day Adventists®.
7
White, E. G. (1911). Los hechos de los apóstoles (p. 109, 110).

miembros
familia
de la
real
E
l pecado de Adán y Eva causó
una espantosa separación entre
Dios y el hombre. Es entonces
cuando Cristo se interpuso entre el
hombre caído y Dios, diciendo al ser
humano: “Podéis aún venir al Padre; se
ha diseñado un plan por el cual Dios
puede reconciliarse con el hombre; por
medio de un mediador podéis aproxi-
maros a Dios... Él es el gran Sumo
Sacerdote que clama en vuestro favor,
y resta a vosotros venir y presentar
vuestro caso ante el Padre por medio
de Jesucristo. Así podéis acceder a
Dios... vuestro caso no es desesperado”.
“Si alguno ha pecado, abogado tenemos
para con el Padre, a Jesucristo, el justo”.
Agradezco a Dios que tenemos un
Salvador... Que nadie piense entonces
que es una gran humillación de su par-
te aceptar a Jesucristo, porque cuando
damos ese paso, estamos dando el pri-
mer paso hacia la verdadera exaltación;
nos aferramos del cordón dorado que
conecta al hombre finito con el Dios
infinito, que nos eleva de manera de
estar preparados para asociarnos con
los ángeles puros y celestiales del reino
de gloria.
Ángeles en derredor
No os desaniméis ni desmayéis.
Aunque tengáis tentaciones, aunque
seáis asediados por el astuto enemigo,
si ante vosotros conserváis el temor
de Dios, ángeles de fuerza indescrip-
F O T O G R A F Í A : J E F F C R U M P
E S P Í R I T U
Elena G. de White
tible serán enviados para ayudaros, y
juntos podréis vencer los poderes de
las tinieblas. Cristo vive. Ha muerto
para otorgar una vía de escape a la
raza caída. Vive para interceder por
nosotros, para que seamos exaltados a
su diestra. Tened esperanza en el Señor.
El mundo avanza por la senda ancha
y, si elegís la senda estrecha y os veis
obligados a luchar contra principados
y potestades y os enfrentáis a la oposi-
ción de enemigos, recordad que se ha
hecho provisión para vosotros. El que
es poderoso os ayudará, y por su medio
podréis salir victoriosos.
Hijos e hijas de Dios
“Salid de en medio de ellos y apar-
taos, dice el Señor... y vosotros me seréis
hijos e hijas, dice el Señor Todopode-
roso”. ¿Qué promesa es esta? Es la pro-
mesa de que llegaréis a ser miembros
de la familia real, herederos del reino
celestial. Si una persona es honrada o
se pone en contacto con alguno de los
monarcas de la tierra, es celebrada por
los periódicos e incita la envidia de
los que no se creen tan afortunados.
Pero he aquí uno que es rey sobre
todo, el soberano del universo, el
originador de toda cosa buena, que nos
dice: “Seréis mis hijos e hijas; os uniré
a mí, y llegaréis a ser miembros de la
familia real e hijos del Rey celestial”.
Y Pablo agrega: “Así que, amados,
puesto que tenemos tales promesas,
D E P R O F C E C Í A
Los herederos del
reino celestial
gozarán por la
eternidad
limpiémonos de toda contaminación
de carne y de espíritu, perfeccionando
la santidad en el temor de Dios”.
¿Cómo no hacerlo, cuando tenemos
semejante incentivo, el privilegio de
llegar a ser hijos del Dios Todopode-
roso, el privilegio de llamar al Dios del
cielo nuestro padre, no es suficiente?
¿Llamáis a esto privarse de todo lo
que consideráis valioso? ¿Es esto la
entrega de todo lo que creéis digno de
poseer? Permitid que me una a Dios y
a sus santos ángeles, porque esta es mi
ambición suprema. Podéis tener todas
las posesiones de este mundo, pero yo
prefiero mi Cristo; quiero tener el dere-
cho de acceder a la herencia inmortal, a
la sustancia eterna. Dejad que goce de
las bellezas del reino de Dios. Permitid
que me deleite y disfrute de los cuadros
pintados con sus propios dedos. Voso-
tros también podríais deleitaros... [y]
por medio de ellos podríamos ser diri-
gidos hacia él para contemplar la gloria
del que ha creado todas estas cosas para
nuestro deleite.
Este artículo es un extracto del publica-
do en The Advent Review and Sabbath
Herald, ahora la Adventist Review
(www.adventistreview.org), el 31 de mayo
de 1870. Los adventistas creemos que
Elena de White ejercitó el don bíblico de
profecía durante más de setenta años de
ministerio público.
Octubre 2008 | Adventist World 21
C R E E N C I A S F U N D A M E N T A L E S
Después
E
l Santuario se hallaba en el cen-
tro de la adoración de Israel en
tiempos del Antiguo Testamento
y a comienzos del Nuevo. Pero el Nuevo
Testamento deja bien claro, tanto simbó-
lica como explícitamente, que ese anti-
guo sistema ahora ha sido reemplazado
por una realidad celestial.
La mayor evidencia simbólica se
produjo cuando Jesús murió. “Entonces
de la
–dice Mateo– el velo del Templo se rasgó
en dos, de arriba abajo” (Mat. 27:51). El
significado estaba claro: el viejo orden Roy Adams
acababa de ser cambiado por aquel que
rasgó de arriba abajo ese sólido velo y
expuso a la vista de todos un lugar que
había sido sumamente sagrado en el pa-
sado. A partir de allí, el énfasis cambiaría de la tierra al cielo. El
que fuera proclamado por Juan el Bautista como “el Cordero
de Dios” (Juan 1:29) acababa de morir como sacerdote y vícti-
ma al mismo tiempo. Y ahora, por medio de su muerte, había
adquirido el derecho de entrar al “verdadero tabernáculo que
levantó el Señor y no el hombre” (Heb. 8:2).
Antes de morir apedreado, Esteban vio a Jesús en visión en
ese lugar sagrado, y expresó la sublime revelación en palabras
que enojaron terriblemente a sus acusadores. Esteban dijo:
“Veo los cielos abiertos, y al Hijo del hombre que está a la
diestra de Dios” (Hech. 7:56).
La obra presente de Cristo en el Santuario celestial no le
quita méritos a su obra consumada en la cruz. Cuando murió
en el Calvario, realizó la expiación plena por nosotros. Cuando
los adventistas hablan de la obra presente de Cristo, “no buscan
minimizar la centralidad de la cruz. Por el contrario, buscan
indicar que la cruz llega más allá del Calvario, más allá del año
31 d.C., y alcanza al Santuario mismo, el asiento del gobierno
de Dios, el centro mismo de la salvación humana, donde Cristo
ha ingresado por nosotros dentro del velo, habiendo sido hecho
Sumo Sacerdote para siempre según la orden de Melquisedec”.*
Estos dos conceptos son paralelos y no entran en conflicto
entre sí.
Dos preguntas comunes
1. ¿Qué hace en realidad Jesús como Sumo Sacerdote?
No podemos responder esta pregunta de una manera
que sea lógica para la mente científica. En último término,
Roy Adams es editor asociado de
Adventist World.
22 Adventist World | Octubre 2008
NÚMERO 24
cruz
Su ministerio desde el
simplemente tenemos que permitir que la Biblia se responda
a sí misma. En los capítulos 1 al 7 de Hebreos, el escritor de-
sarrolla un argumento elaborado que enfatiza la singularidad
de Jesús. Entonces, al llegar al capítulo 8, resume el punto que
había estado desarrollando anteriormente.
Dice: “Ahora bien, el punto principal de lo que venimos
diciendo es que tenemos tal sumo sacerdote, el cual se sentó a
la diestra del trono de la Majestad en los cielos. Él es ministro
del santuario y de aquel verdadero tabernáculo que levantó el
Señor y no el hombre” (Heb. 8:1, 2).
En el resto de Hebreos 8 y 9, el autor sostiene que el antiguo
sistema del tabernáculo ha sido sucedido por un “mejor” (es
decir, superior) ministerio en el Santuario celestial. Entonces,
en Hebreos 9:12 pone fin a la argumentación: Cristo no entró
al Santuario celestial “por sangre de machos cabríos ni de bece-
rros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el
Lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención”.
El autor quiere que sus lectores capten dos cosas. La pri-
mera es el significado teológico de estas realidades y la otra es
su dimensión práctica.
El significado teológico, ya resumido en Hebreos 8:1, 2, es
que ahora tenemos un Sumo Sacerdote más excelso, el Hijo
del Dios Viviente. Al igual que los sumo sacerdotes de la anti-
güedad, es humano; a diferencia de ellos, es divino y perfecto.
Dado que es humano, puede “compadecerse de nuestras de-
bilidades” (Heb. 4:15); como también es divino, puede “salvar
perpetuamente a los que por él se acercan a Dios” (Heb. 7:25).
El punto práctico del apóstol tiene que ver con el acceso.
En el sistema antiguo, el adorador israelita común se hallaba
separado del Lugar Santísimo del Santuario por varias barre-
ras que jamás podía atravesar. Solo el sumo sacerdote gozaba
de acceso pleno y, aun así, lo hacía solo una vez al año (en el
Día de la Expiación). Pero ahora, por medio de Cristo, nuestro
mediador celestial, se nos ha abierto una puerta de acceso
ilimitado. Es una puerta de acceso al Santuario celestial, la sala
del trono del Dios viviente. “Acerquémonos, pues, confiada-
 mente, al trono de la gracia –dice el escritor sagrado–, para
alcanzar misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro”
(Heb. 4:16).
Entonces ¿qué está haciendo Jesús ahora mismo? Como
Sumo Sacerdote, está brindando ayuda constante a “los que
son tentados”, porque conoció por experiencia personal los
peligros de la tentación (Heb. 2:17, 18). Asimismo, intercede
por nosotros (Heb. 7:25); trabaja para solidificar nuestra
lealtad al inscribir sus leyes en nuestras mentes y corazones
(Heb. 8:3-10); limpia nuestras “conciencias de obras muertas”
para que sirvamos al Dios vivo” (Heb. 9:13, 14); y trabaja para
poner fin a lo que los adventistas llamamos “el gran conflicto”
(véase Heb. 10:11-13).
rimentamos un nuevo aprecio por el pacto eterno, simboliza-
do por la ley divina inmutable que se apoya, por así decirlo, en
el asiento de la misericordia. Esa santa ley llega a ser una parte
indeleble de nuestra conciencia espiritual (véase Heb. 8:10).
Esto define parte de la diferencia que la enseñanza del
Santuario tiene para nosotros. Por fe ingresamos a ese lugar
sagrado donde ministra Jesús. Allí, contra todo y contra todos,
nos aferramos a aquel cuya promesa inmutable está simboli-
zada en el arca del pacto. Fue su respeto por el Santuario y lo
que representaba, lo que creó y preservó la lealtad y fidelidad
de Daniel a Dios, a pesar del peligro de muerte (véase Dan. 6).
Y Daniel es hoy un símbolo del remanente final que elegirá
honrar a Dios aunque tenga que pagar con su vida.
A diferencia del resto del cristianismo, que se muestra listo

centro mismo del universo
No podemos saber, por supuesto, la forma exacta de la
intercesión de Jesús. Pero las Escrituras nos ofrecen varios
ejemplos de la idea general; por ejemplo, en la experiencia de
Moisés (Éxo. 32:9-14, 30-32) y en las súplicas de Daniel (Dan.
9). Lo vemos también en la gran oración de Jesús antes de la
pasión (Juan 17). (Para entender lo que Cristo está haciendo
ahora por nosotros, no hay mejor pasaje que Juan 17).
2. Una segunda pregunta: ¿Qué ventaja tiene conocer a
Jesús como Salvador y Sumo Sacerdote?
En último término, se centra en la pregunta de la lealtad
y fidelidad. Al seguir a Jesús por fe hasta el Santuario celestial,
experimentamos su gracia que nos limpia. Pero también expe-
para deshacerse de cualquier parte de la ley divina que les re-
sulte inconveniente o incómoda, ese remanente permanecerá
firme en su lealtad a Dios, cueste lo que cueste. Anclados a
una esperanza que traspasa el velo, están seguros contra todo
concepto de filosofía (pertenezca a la evolución, ateísmo,
materialismo o lo que fuera) que busca privar al Dios eterno
de su trono o minimizar o degradar la validez de su ley eterna
conservada bajo el asiento de la misericordia.
La doctrina del Santuario se convierte así en algo que nos
protege de la rebelión, y le asegura a Dios un remanente fiel en
un mundo convulsionado.
*Roy Adams, The Sanctuary: Understanding the Heart of Adventist Theology (Review and Herald,
1993), p. 142.
Este artículo ha sido adaptado del capítulo 12 del libro del autor titulado The Wonder of Jesus
[La maravilla de Cristo];(Review and Herald, 2007).

El ministerio de Cristo
en el
En el cielo hay un santuario, el ver-
Santuario celestial
dadero tabernáculo que levantó el Señor
y no el hombre. En él, Cristo lleva a cabo
su ministerio en nuestro favor, poniendo
a disposición de los creyentes los benefi-
cios de su sacrificio expiatorio realizado
una vez para siempre en la cruz. Cuando
ascendió al cielo, inauguró su ministerio
intercesor como nuestro Sumo Sacer-
dote. En 1844, al fin del período profético
de los 2300 días, entró en la segunda y
última fase de su ministerio expiatorio.
Es una obra de investigación judicial, la
cual es parte de la eliminación definitiva
de todo el pecado, tipificada por la pu-
rificación del antiguo santuario hebreo
en el Día de la Expiación. En ese servicio
típico, se purificaba el santuario con la
sangre de sacrificios animales, pero las
cosas celestiales se purifican con el
perfecto sacrificio de la sangre de Jesús.
El juicio investigador revela ante las in-
teligencias celestiales quiénes de entre
los muertos durmieron en Cristo, y por
lo tanto son en él considerados dignos
de participar en la primera resurrección.
También manifiesta quiénes de entre los
vivos permanecen en Cristo, guardando
los mandamientos de Dios y la fe de
Jesús, y se hallan por lo tanto listos en él
para ser trasladados a su reino eterno.
Este juicio vindica la justicia de Dios al
salvar a los que creen en Jesús. Declara
que los que han permanecido leales a
Dios recibirán el reino. La consumación
de este ministerio de Cristo poco antes
de la Segunda Venida marcará el cierre
del tiempo de prueba para la raza huma-
na. (Heb. 8:1-5; 4:14-16; 9:11-28; 10:19-22;
1:3; 2:16, 17; Dan. 7:9-27; 8:13, 14; 9:24-27;
Núm. 14:34; Eze. 4:6; Lev. 16; Apoc. 14:6, 7;
20:12; 14:12; 22:12.)

Octubre 2008 | Adventist World 23

H E R E N C I A

Wilhelm Koelling, padre de Elfriede paja, con excepción de nuestro hogar,

Raunio, construyó la Estación Misionera
Aira en la década de 1920, en una zona de
Etiopía que no había sido alcanzada por
la Iglesia Adventista. Los que vivían allí
jamás habían visto hombres blancos.*
que tenía techo de chapa. Junto a la esta-
ción corría un amplio río; usábamos esa
agua para beber y bañarnos. Alrededor
del complejo crecían pastos gigantes
de hasta tres metros de altura donde a
menudo se escondían leones y tigres.

E
l golpeteo continuo de los tam-
bores llenaba el aire de la noche.
No era la primera noche que se
escuchaba, pero esta vez era diferente.
Se oyó un grito agudo: “¡Dindele!
¡Dindele! ¡Dindele!”
Di un salto en la cama. “¿Qué es
eso?”, exclamé.
–¿Qué sucede, Elfriede? –preguntó
mi padre, mientras entraba apresurado
a mi habitación.
–Tengo miedo –dije, mientras me
acurrucaba entre las sábanas.
Papá me miró y señaló el cuadro
blanco y negro de Jesús con una corona
de espinas. No importa dónde viviéramos,
ese retrato siempre estaba sobre mi cama.
Papá les enseñó a leer y escribir a
los residentes de las aldeas vecinas. Tra-
taba sus enfermedades con medicinas
modernas y les hablaba del amor de
Dios. Haile Selassie, regente y futuro
emperador del país, apoyaba el puesto
misionero, porque era de sostén propio
y ofrecía atención médica. Pero los
hechiceros nos rechazaban, temiendo
quedarse sin trabajo.
Elfriede Raunio,
según se lo contó a
Andrew McChesney

Salvados
–¿Crees en Jesús y en tu ángel guar-
dián, no es así?
–Sí.
–¿Te parece que el ángel y Jesús van a
dejar que te pase algo malo?

llamas
Papá oró conmigo, y pronto volví a

de las
dormirme.
Era el año 1925, y las exclamaciones
nocturnas provenían de una mujer
llamada Dindele. Noche tras noche,
completamente desnuda, daba saltos
en una danza alocada fuera de su hogar
de adobe, mientras gritaba su nombre.
Había sido enviada por hechiceros que
esperaban atemorizarnos y echarnos de
nuestra pequeña estación misionera.
Ellos iluminaron la oscuridad con
Un puesto misionero en Etiopía el evangelio
Papá había construido una estación
misionera adventista un año atrás, al
promediar nuestro período de seis años
como misioneros provenientes de Ale-
mania. La estación, ubicada a tres sema-
nas de viaje a caballo desde Adís Abeba,
estaba compuesta por varias casas, un
edificio principal que servía de iglesia
y escuela, un albergue y nuestro hogar.
Todas las edificaciones tenían techos de

24 Adventist World | Octubre 2008

Izquierda: MOMENTO DISTENDIDO: Un monito domesticado descansa en la falda de Wilhelm Koelling y juega con
Elfriede, en una parada durante la travesía de tres semanas de Adís Abeba, capital de Etiopía, a la Estación Misionera
Aira. En la foto aparecen también Paula e Ilse, hermanas de Elfriede. Abajo: La familia Koelling posa junto al río Elba
en Alemania, antes de viajar a Etiopía.
Confiar desde pequeña
Entonces apareció Dindele. Mi ma-
dre le dio algunas prendas de vestir, pero
a la noche siguiente regresó nuevamente
desnuda. Rechazó la ayuda de mi familia
y se volvió a su aldea.
La tercera vez que apareció gritando
su nombre, llamé nuevamente a mis
padres. “Elfriede, ¿sabes bien qué hacer,
no?”, dijo papá.
La siguiente vez que apareció Din-
dele ya no tuve que llamar a mis padres.
Papá sintió curiosidad y se asomó a mi
habitación, donde me vio arrodillarme
y orar en voz alta. Fue allí que aprendí a
depender de Jesús. Tenía 5 años.
Repentinamente, Dindele dejó de
visitarnos. Los aldeanos le dijeron a mi
padre que uno de los hechiceros le había
hecho algún tipo de magia. Papá dijo
que el hechicero había usado a Beelzebú
para expulsar un demonio, lo mismo
que habían dicho los fariseos de Jesús.
Dijo que los hechiceros tenían temor
de perder el respeto de los aldeanos. Y
tenían razón en estar preocupados. Al
ver el poder sanador de la medicina mo-
derna, la gente se agolpaba en la estación
misionera solicitando ayuda.
Obrero milagroso
Un día mamá llegó con una niñita
en sus brazos, que tenía graves quema-
duras. La gente hacía fuego dentro de
sus chozas y ella había caído sobre las
brasas. “No sé si podemos ayudarla”, dijo
mamá a la madre angustiada, mientras
frotaba la cabeza ampollada de la
criatura con medicamentos. Mamá
Izquierda: SIN COMODIDADES:
Elfriede descansa en un campa-
mento, con su madre y su hermana,
durante la travesía de tres semanas
desde Adís Abeba hasta la
Estación Misionera Aira. Los otros
niños pertenecen a la familia
misionera Stein, que reemplazaron
a los Koelling cuando regresaron a
Alemania, luego de lo cual fueron a
trabajar a las Antillas Holandesas.
C O R T E S Í A D E A N D R E W McC H E S N E Y
comenzó a orar; oró muchísimo durante
varios días. No podía hacer mucho más.
Nadie creía que sobreviviría, pero no
murió.
Algunas personas les hacían pedidos
sorprendentes a mis padres. Una mujer
que había perdido su brazo en un
accidente de molino viajó durante tres
semanas hasta la estación misionera,
donde entregó el brazo cortado en una
bolsa. Papá procuró explicarle que él no
podía volver a colocárselo.
Una noche, llegó un hombre en
una mula. Era hijo de un hechicero y
necesitaba ayuda. Explicó que su padre
había caído enfermo y no podía curarse
a sí mismo. Papá le preguntó por los
síntomas y concluyó que lo que tenía era
un simple caso de parásitos.
Finalmente el hechicero se curó.
Nadie dijo mucho sobre su impresionante
recuperación, pero todos sabían lo que
había pasado. Se corrió rápidamente
la noticia que mi padre podía curar a
todos, aun a los hechiceros. Los aldeanos
comenzaron a besar los pies de papá y
a pensar que era un dios. Papá les decía
con firmeza que había un solo Dios, y les
suplicaba que dejaran de besarle los pies.
Recuerdo una frase que le dijo a mamá:
“Tenemos que orar al Señor. Tenemos
que hacer algo para convencerlos que es
nuestro Dios el que hace estas cosas”.
El fuego fue apagado pero
continúa encendido
Poco después, papá cayó enfermo
de malaria. Era la época del año cuando
quemaba los pastos gigantes más allá
del río, para impedir que los animales
salvajes se acercaran demasiado al agua.
Debilitado por la enfermedad, papá
pidió a un amigo de confianza, Haile
Mariam, que se encargara de la tarea.
Haile siguió las instrucciones, y pronto
las llamas anaranjadas comenzaron a
elevarse hacia el cielo. El pasto gigante,
al igual que el bambú, tiene nudos que
explotan ruidosamente con el calor del
fuego. De pronto, una chispa voló por
sobre el río y cayó en el pasto seco.
Momentos después, un muro de grandes
Octubre 2008 | Adventist World
llamas rodeó los edificios y se esparció
por los techos de paja y por el teff que
estaba puesto a secar sobre mantas, en
el centro del complejo. Con este cereal
se hacía injera –un pan etíope plano y
esponjoso– que era nuestra principal
fuente de alimento.
Mamá acababa de lavar la ropa, por
lo que teníamos algo de agua a mano,
pero no la suficiente para combatir el
fuego. Los estudiantes arrancaron ramas
de árboles y procuraron apagar las
llamas.
Al ver el humo, los residentes de las
aldeas cercanas corrieron al lugar. Pero
pronto vieron que no podían hacer
nada. Estábamos indefensos. Mientras el
fuego amenazaba con destruir la misión,
papá nos reunió en un círculo y oró
para que se hiciera la voluntad de Dios.
De pronto, así como había comenza-
do, el fuego se desvaneció. Inspecciona-
mos los daños: no había tocado el teff y
los edificios también estaban intactos. Al
revisarlos con más detenimiento, vimos
que el único rastro de las llamas estaba
en los extremos ligeramente chamusca-
dos de los techos de paja.
Atónitos, los aldeanos declararon que
con seguridad, un Ser Supremo nos había
cuidado. Muchos aprendieron a creer en
Dios y fueron bautizados en el río.
Actualmente, la Unión de Etiopía
cuenta con 657 iglesias y 157.679
feligreses. Aira se encuentra en el distrito
Guliso de la región occidental del país.
Alemu Haile, presidente de la misión,
dice que el distrito tiene 1.023 miembros,
más de diez iglesias y una clínica.
*Antes de esto la familia Koelling estuvo en Adís Alam (véase
la entrada Ákaki SDA School, SDA Encyclopedia [1996], vol.
10, p. 45).
Elfriede Raunio creció en
Etiopía e Indonesia y trabajó
como misionera junto a su
esposo Leo Raunio en Sudáfrica
y Zimbabue en la década de
1970 y comienzos de la siguiente. Ahora vive en
Cleburne, Texas. Andrew McChesney es su nieto.
25
 P R E G U N TA S B Í B L I C A S
PREGUNTA: ¿Por qué Santiago dice que “el
hombre es justificado por las obras y no solamente
por la fe”? (Santiago 2:24)
P or lo general, se ha creído que Santiago 2:14-26 corrige el
énfasis paulino exclusivo en la justificación por la fe. La
mayoría de los estudiosos actuales están en desacuerdo con
esa declaración, y yo coincido. Para entender el argumento
de Santiago, tenemos que recordar el contexto general y el
propósito de su carta. En segundo lugar, debemos entender
que diferentes escritores bíblicos a veces pueden usar la misma
terminología con un sentido diferente o énfasis particular.
e
F acción
Esto también lo determina el con-
texto. Sería bueno que lea Santia-
go 2:14-26 antes de continuar.
1. La principal preocupación
de Santiago: El mensaje de San-
en
tiago es de naturaleza sumamente
práctica; habla de los sufrimien-
tos y pruebas de la comunidad
de creyentes y de la opresión
potencial y real de la estratifica-
ción social. Está interesado en el
impacto social de la fe cristiana.
Rechaza un tratamiento prefe-
rencial basado en las riquezas o
el estatus social (Sant. 2:1-7) y
condena la explotación social y el
abuso de los pobres (Sant. 5:1-6).
Para Santiago, la fe cristiana no puede desentenderse de la
sociedad, mientras defiende al mismo tiempo su relevancia. El
mensaje teológico de Santiago está embebido de preocupación
por una religión que sea parte de la misma trama social. Esto
significa que todo lo que dice Santiago en esta sección, debe
ser relacionado con esa gran preocupación.
2. Fe y obras: El pasaje en consideración tiene que ser leí-
do en su contexto. Hay que determinar cómo utiliza Santiago
la palabra “fe”, lo que no es difícil de hacer. No la utiliza de la
manera salvífica tradicional sino como conocimiento y con-
vicción interior. En otras palabras, esta no es la fe primordial
que ponemos en Jesús, sino las convicciones religiosas que no
determinan la conducta. Esto queda más claro cuando escribe:
“Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios
creen, y tiemblan” (vers. 19). La fe es estar persuadido de que
nuestras convicciones son correctas; los demonios pueden
tener este tipo de conocimiento. Esta clase de fe es inútil en la
vida cristiana si nos lleva a una actitud de indiferencia hacia
las necesidades de los demás (vers. 14-16, 20). Santiago sostie-
ne que la fe sin obras es muerta (vers. 17).
26 Adventist World | Octubre 2008
En efecto, aducir que la fe existe sin obras es similar a
sostener que el cuerpo podría existir de manera indepen-
diente del espíritu. Uno no puede existir sin el otro. La fe y
las obras constituyen una unidad indivisible en la vida cris-
tiana (vers. 26); las obras hacen visible nuestra fe (vers. 18) y
son la evidencia de la presencia de la fe en el creyente.
3. Fe y justificación: Bajo la influencia de Pablo, se entien-
de por lo general a la justificación como la absolución de los
pecadores arrepentidos ante el tribunal divino, al comienzo
de la vida cristiana, independientemente de las obras.
Santiago no está negando esa creencia, pero tampoco se
está refiriendo a ese tema en particular. Escribe a los miem-
bros de iglesia, a individuos que ya habían sido justificados
por fe en Cristo. El problema
de ellos es que la fe no está
teniendo efecto en su forma de
vivir la vida cristiana. A ellos,
Santiago les dice: “El hombre
es justificado por las obras y
no solo por la fe”.
El elemento más importan-
te en este versículo es la frase
Angel Manuel “es justificado”. Como por el
Rodríguez contexto vemos que la presen-
cia de fe es vista o demostrada
por medio de obras, la frase
“es justificado” probablemente
signifique “mostrar, demostrar
lo que significa ser justo”. El
verbo posee un significado
demostrativo, es decir, los creyentes muestran/demuestran
que han sido justificados no solo al afirmar que tienen fe,
sino más específicamente por lo que hacen. Esta fue la ex-
periencia de Abraham y Rahab, que demostraron su justicia
por obras (vers. 21, 25). Estas no son las obras de la ley por
medio de las cuales algunos, según Pablo, buscaban ser jus-
tificados. Santiago está hablando de lo que Pablo denomina
“buenas obras”. Ambos estarían de acuerdo en que “somos
hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras”
(Efe. 2:10).
El mensaje de Santiago es repetido en Apocalipsis 3:15-
18, y nos desafía a permitir que nuestra fe, por medio del
poder del Espíritu, se exprese en la verdadera conducta
cristiana y en un sincero interés por los pobres y oprimidos.
Después de todo, “¿de qué aprovechará si alguno dice que
tiene fe y no tiene obras?” (Sant. 2:14).
Ángel Manuel Rodríguez es director del Instituto de
Investigaciones Bíblicas de la Asociación General.
 E S T U D I O B Í B L I C O

Los
engaños del
Mark A. Finley
tıempo del fin
Millones de personas en todo el mundo recurren a los astrólogos, adivinos y espiritualistas
para procurar conocer el futuro. Los misterios de la vida los atribulan, y buscan respuestas.
Otros están dominados por el temor a los espíritus; sus vidas se consumen en intentos de
“agradarlos”. Dios desea liberarnos de estos engaños. Él es el gran liberador. Nuestro
Padre celestial anhela que cada uno de sus hijos disfrute de una vida de felicidad, gozo y
paz. No quiere que estemos atribulados por la ansiedad, la preocupación y el temor. La
lección de este mes nos mostrará cómo ser libres de la influencia controladora de los
espíritus malignos en nuestras vidas.

1. ¿Qué promesa dio Jesús a sus seguidores? Lea el texto y llene los espacios en blanco.
“Y conoceréis la verdad y la verdad os hará libres” (Juan 8:32).

La nos hará .

Satanás quiere que seamos esclavos de oscuros engaños y supersticiones. Pero la verdad
de Cristo nos libera del temor a lo desconocido.

2. ¿Cómo se distingue Dios de los dioses paganos de las naciones que rodeaban a
Israel? Lea el texto y llene los espacios en blanco.
“Acordaos de las cosas pasadas desde los tiempos antiguos, porque yo soy Dios; y no hay otro Dios, ni nada hay
semejante a mí, que anuncio lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo que aún no era hecho”.
(Isa. 46:9, 10).

Dios dijo: “Soy Dios… anuncio lo desde el .”

Solo Dios conoce el futuro. Todo el que afirma predecir el futuro por cualquier otro medio
es un impostor.

3. ¿Dónde se halla la verdadera fuente de sabiduría, y cómo podemos descubrirla?

Lea el texto y trace un círculo alrededor de las palabras que mejor responden la pregunta.
“Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin
reproche, y le será dada” (Santiago 1:5).
Toda la verdadera sabiduría viene de Dios. La descubrimos al aplicar los principios bíblicos
a todos nuestros interrogantes. Los astrólogos, adivinos y espiritualistas están llenos de
falsedades y no poseen la verdad de lo alto.

Octubre 2008 | Adventist World 27

 4. Dios condena las fuentes falsas de sabiduría. Lea el texto y marque cada fuente
errónea de sabiduría.
“No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación,
ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos”
(Deut. 18:10, 11).

5. ¿Cómo llama Dios a estos falsos profetas? Lea el texto y llene el espacio en blanco.
“Porque es abominable para Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas cosas abominables Jehová, tu
Dios, expulsa a estas naciones de tu presencia” (Deut. 18:12).

La Biblia dice: “Es para Jehová cualquiera que hace estas cosas”.

6. ¿Cuál es el destino final de estos astrólogos, espiritualistas y hechiceros

engañadores? Lea el texto y llene el espacio en blanco.
“He aquí que serán como el tamo; el fuego los quemará, no salvarán sus vidas del poder de la llama”
(Isa. 47:14).

“El fuego los .”

7. En lugar de buscar sabiduría y fortaleza en lo oculto, ¿adónde nos anima Dios a

dirigir nuestra vista? Lea el texto y trace un círculo alrededor de las palabras o frases
significativas.
“¡Mirad a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no hay otro!” (Isa. 45:22).

8. Se nos promete que en Cristo podemos vencer estos poderes malignos. De acuerdo
con el texto que sigue, ¿cuál es la fuente de nuestro poder? Llene los espacios en blanco.
“Hijitos, vosotros sois de Dios y los habéis vencido, porque mayor es el que está en vosotros que el que está
en el mundo” (1 Juan 4:4).

La Biblia dice: “Mayor es el que está en que el que está en el ”.

Aunque luchamos contra principados, potestades, gobernadores de las tinieblas y huestes

espirituales de maldad, Jesús es más grande y poderoso que todos los poderes del infierno
(Efe. 6:12; Mat. 16:18). Con Jesús no tememos las fuerzas del mal. Él es nuestro refugio y
fortaleza (Sal. 46:1). No hay de qué temer. Él ha venido a darnos paz (Juan 14:27). Al abrirle
nuestro corazón y entregarle nuestra vida, somos libres de la esclavitud del temor y la
superstición.

El estudio del próximo mes,

“Esperanza más allá de la cruz”,
nos mostrará qué dice la Biblia sobre lo que
sucede después de la muerte.

28 Adventist World | Octubre 2008

 Intercambio mundial
C A R TA S
Dios usó un hombre
Fue en efecto la eterna y poderosa mano
de Dios la que me llevó a leer el artículo
sobre el renombrado educador adven-
tista Goodloe Bell (véase “Dios usó un
hombre”, por Allan G. Lindsay, Agosto
2008, Adventist World).
Soy una joven educadora en el siste-
ma adventista, y me atrajeron las sólidas
facciones y extensa barba que vi en un
cuadro de mi oficina el primer día de
clases en agosto de 2003. No sabía bien
qué hacer con ese gran cuadro con la
fotografía de Bell. Alguien me dijo que
lo arrojara a la basura. Como el marco
combinaba con los muebles de la oficina
y el rostro de la fotografía otorgaba
“presencia” al lugar, decidí conservarlo
y darle un lugar prominente en la sala.
Todo estudiante, colega o visita que
entraba me preguntaba quién era ese
señor, pero ninguno de nosotros lo
sabía. Hoy me siento feliz. Conservé la
fotografía, y el nombre de Goodloe Bell
ha recibido el debido reconocimiento.
¡Gracias por este artículo!
Charlene Sharpe, docente
de la Northern Caribbean
University
Mandeville, Jamaica
Orgullosa de las mujeres en
el ministerio
Hubo un tiempo cuando se creía que las
mujeres de Asociación Nigeriana Orien-
tal podían estar presentes aunque sin
hablar, pero gracias al pastor I. M. Alala,
que vino al distrito de Uhum y dio por
terminados los años de silencio opresivo
para las mujeres; las damas ya son pre-
dicadoras y también contribuyen en las
actividades diarias de la iglesia. Quería
compartir esto a la luz de los artículos
y cartas sobre el tema que publicó este
año Adventist World.
Las mujeres de nuestra región han
dado conferencias al aire libre y han
ganado conversos para Cristo, mu-
chos de los cuales hoy son miembros
bautizados y comprometidos. Gracias
inmensamente por los líderes de nuestra
iglesia que nos enviaron a este pastor y
su esposa, que es docente, a la directora
de Ministerios de la Mujer Joy Njoku y
a su secretaria Gift Njoku, así como a
Bola Nwaejike, la líder femenina de la
Asociación. Estas damas han alcanzado
grandes logros en el distrito en términos
de crecimiento de miembros y unidad
de los feligreses.
No pertenecía a la iglesia hasta
comienzos de junio de 2006 cuando
contraje matrimonio con Sample Ajah
Onyenmuru de Mbutu Umuezeoche.
Hoy día, soy una orgullosa miembro
Octubre 2008 | Adventist World
bautizada y maestra de Escuela Sabática.
Me siento feliz por la obra que realiza
nuestra iglesia mediante la tarea de
hombres como también de mujeres.
Chioma Sample Ajah
Nigeria
Estilo de vida
He notado que en la actualidad, las re-
vistas adventistas están publicando muy
poco sobre el estilo de vida cristiano, a
pesar de que somos la luz del mundo y
un pueblo especial. ¿Está convirtiéndose
la iglesia al mundo? Necesitamos leer
artículos que presenten lo que dice la
Biblia sobre la indumentaria, la brujería,
el tabaco, el alcohol y prácticas similares.
Las personas necesitan orientación
espiritual para vivir una vida piadosa.
No caigamos en la trampa de pensar que
cualquier estilo de vida es correcto con
tal que creamos en Dios. Recordemos el
caso de Caín y Abel. Ambos procuraron
adorar a Dios, pero uno lo hizo de ma-
nera equivocada.
Louis Lawrence
Jamaica
29
 Intercambio mundial
C A R TA S

Gratitud
Muchas gracias por enviarme Adventist
World. Hasta ahora he recibido dos
números, pero quiero que sepan cuánto
me ha ayudado esta revista. Sentí mucho
gozo al leer la nota de tapa de julio 2008
titulada “Un Daniel en Rusia”. Realmen-
te necesitaba un artículo así. Nos cuenta
que David Kulakov oró para que Dios
tomara el control de sus pensamientos.
Sabía que era fisiológicamente impo-
sible transformar sus impulsos de la
noche a la mañana debido a los surcos
ya establecidos entre sus neuronas,
como resultado de años de indisciplina
y rebelión. Él resolvió copiar toda la
Biblia a mano. Yo decidí hacer lo mismo.
Comencé a copiar la Biblia en un gran
libro de composiciones. Lo hago cada
mañana, y he descubierto que realmente
transforma los pensamientos. Me siento
tan feliz por lo que Dios está haciendo
por mí.
Virginia L. Enanoria
California, Estados Unidos
El artículo de David Marshall titulado
“El milagro más grande”, del número
de julio 2008, me ofreció nuevas pers-
pectivas. Gracias. Y el artículo sobre los
misioneros adventistas expresa lo que le
digo a Dios en oración cada mañana.
Emily Gittins
Pennsylvania, Estados Unidos
Cartas al editor; comuníquese a la dirección letters@
adventistworld.org Las cartas deben hacer referencia a algún
tema que haya aparecido en la revista; deben ser claras y al
punto; de no más de 250 palabras. Asegúrese de incluir el título,
la fecha de publicación y el número de página del artículo.
Agregue también sus datos (nombre, ciudad o pueblo, provincia
o estado y país). Por motivos de espacio y claridad, dichas
cartas podrán ser editadas. Las que lleguen a tiempo tendrán
más probabilidades de ser incluidas; no todas serán publicadas.

EL RINCÓN DE ORACIÓN
Somos un pequeño grupo que planea construir un nuevo
templo. Ya tenemos el terreno. Oren por favor para que
consigamos los fondos que nos permitan llevar adelante el
proyecto.
Arturo, Venezuela
No soy adventista, pero aprecio muchísimo las lecciones que
han compartido conmigo mis compañeras de trabajo que son
adventistas. Me gustaría que oren por mi hijo.
Jocy, Filipinas
Oren por favor para que autoricen a mi hija a estudiar en
Canadá. Ella necesita alcanzar requisitos que por el momento
parecen inalcanzables.
Melta, Irlanda
Pido que oren para que consiga un buen trabajo para ayudar
a mi esposo y mis padres y para poder tener una casa propia.
Oren por nuestra situación financiera, y para que nuestra fe y
nuestra salud sigan bien.
Cynthia, Estados Unidos

Soy pastor. Necesito que oren por un centro para huérfanos
que tengo aquí. Mi misión es cuidar a los huérfanos y las viu-
das. Quiero hacer la voluntad de Dios. Por favor, oren también
por los cinco hogares donde estamos ofreciendo meditaciones
de la Biblia.
Danthapu, India
Estoy por terminar mi título de grado en un seminario y
colegio superior adventista. Sé que Dios obra maravillas. Oren
para que no me desanime y alguien me ofrezca trabajo. Deseo
Por favor, oren por nosotros para que podamos tener templos
para los tres nuevos grupos que comenzamos el año pasado.
Todos ellos aún se reúnen cada sábado al aire libre.
Bulamba, Congo
El rincón de oración; comuníquese a la dirección prayer@adventistworld.org
Pedidos de oración y alabanzas (agradecimientos por oraciones contestadas). Los mensajes
deben ser breves y concisos; de no más de 75 palabras. Por motivos de espacio y claridad,
podrán ser editados. Aunque oraremos por cada mensaje durante nuestras reuniones semanales,
no todos aparecerán en la revista. Por favor, junto al mensaje agregue su nombre y su país de
procedencia.

sinceramente trabajar para el Señor.

Panuel, Bangladés

30 Adventist World | Octubre 2008

 R A D I O M U N D I A L A D V E N T I S TA

“He aquí, vengo pronto . . .”

INTERCAMBIO DE IDEAS Nuestra misión es elevar a Cristo, uniendo a los
adventistas de todo el mundo en creencias, misión,
vida y esperanza.

Al Editor

final
Adventist World es una publicación internacional de
la Iglesia Adventista del Séptimo Día, editada por
la Asociación General y la División de Asia-Pacífico
Norte de la Iglesia Adventista.

túnel
Editor ejecutivo
del Bill Knott
Editor asociado
Claude Richli
Gerente editor internacional
Un estudiante de RMA comparte Chun, Pyung Duk

una experiencia personal. Junta editora

Jan Paulsen, presidente; Ted N. C. Wilson,
vicepresidente; Bill Knott, secretario; Armando Miranda;
Pardon K. Mwansa; Juan Prestol; Charles C. Sandefur;
Uno de los aspectos singulares del ministerio de Radio Mundial Adventista (RMA) Don C. Schneider; Heather-Dawn Small; Robert S. Smith;
Robert E. Kyte, asesor legal.
es que los programas radiales son producidos por hablantes nativos de cada país o
región. Estos productores están muy familiarizados con la cultura de sus oyentes y los Comisión coordinadora de Adventist World
Lee, Jairyong, presidente; Akeri Suzuki; Donald Upson;
grandes desafíos que enfrentan en la vida diaria. Guimo Sung; Glenn Mitchell; Chun, Pyung Duk
Este vínculo puede verse con facilidad en las sesiones de entrenamiento a cargo de Jefe de editores
Ray Allen, director mundial de entrenamiento de RMA. Allen enseña a los novatos a Bill Knott
crear guiones relevantes y programas profesionales con mensajes que demuestren esa Editores de Silver Spring, Maryland, EE.UU.
Roy Adams (editor asociado), Sandra Blackmer,
comprensión y conocimientos. Stephen Chavez, Mark A. Kellner, Kimberly Luste Maran
Durante el entrenamiento llevado a cabo en Burundi el año pasado, el estudiante Editores de Seúl, Corea
Rizinde Lazare escribió la siguiente experiencia personal. Chun, Jung Kwon; Choe, Jeong-Kwan
“En 1994, me encontraba en el norte de Bujumbura, que está junto al lago Editor en línea
Carlos Medley
Tanganica. Vivía en una zona que había sido destruida por la guerra. Muchas casas
Coordinadora técnica
habían quedado vacías. No había gente ni animales domésticos. Merle Poirier
“Un día, mi padre fue a visitar a mi madre y mi hermana, que vivían en otro Asistente ejecutiva del editor
lugar. Yo estaba durmiendo, cuando oí que una voz me llamaba. Abrí la puerta, Rachel J. Child
temeroso. Asistentes administrativos
“Allí afuera estaban varios delincuentes, uno de los cuales era mi vecino. Querían Marvene Thorpe-Baptiste
Alfredo Garcia-Marenko
llevarse todas las cosas de valor de nuestra casa, incluido el dinero. Si no conseguían Servicios al lector
dinero, dijeron que matarían a todos… Merle Poirier
“En la casa solo estábamos mi hermano y yo. Pueden imaginar lo que me suce- Dirección y diseño gráfico
dería. Los delincuentes estaban armados con revólveres, cuchillos y palos. Tenían Jeff Dever, Fátima Ameen, Bill Tymeson
algunas ramas y grama en sus cintos, lo que les daba un aspecto salvaje. Consultores
Jan Paulsen, Matthew Bediako, Robert E. Lemon,
“El líder de la operación me preguntó dónde estaban mis padres. Les pedí que Lowell C. Cooper, Mark A. Finley, Eugene King Yi Hsu,
no me golpearan, y les dije que mi padre había ido a visitar a mi madre. Me contestó Gerry D. Karst, Armando Miranda, Pardon K. Mwansa,
Michael L. Ryan, Ella S. Simmons, Ted N. C. Wilson,
que estaba mintiendo, y entonces ordenó a sus soldados que me golpearan hasta que Luka T. Daniel, Laurie J. Evans, Alberto C. Gulfan, Jr.,
comencé a escupir sangre. Por un momento pensé que estaba muerto, pero entonces Erton Köhler, Jairyong Lee, Israel Leito, Geoffrey G.
razoné que un muerto no puede pensar, y yo estaba pensando. Mbwana, Paul S. Ratsara, Don C. Schneider, Artur
A. Stele, Ulrich W. Frikart, D. Ronald Watts, Bertil
“En ese momento, estaba muy alejado de Dios y siempre me preguntaba dónde A. Wiklander
estaba ese buen Dios del que había aprendido desde la niñez. Pero él puede ayudar-
A los colaboradores: Aceptamos el envío de manuscritos
nos aun en momentos de desesperación. Cuando no hay ninguna otra esperanza, el no solicitados. Dirija toda correspondencia a 12501 Old
Señor está allí para socorrernos. Columbia Pike, Silver Spring MD 20904-6600, EE.UU.
Número de fax de la oficina editorial: 1 (301) 680-6638
“Digo esto porque uno de los delincuentes decidió dejarme con vida. El poder
E-mail: Internet: worldeditor@gc.adventist.org
del Señor lo llevó a protegerme de la muerte… Sin saberlo, ese delincuente estaba Sitio Web: http://www.adventistworld.org/
sirviendo al Señor, porque me salvó cuando me hallaba al final del túnel. A menos que se indique lo contrario, todas las referencias
“Les pido que confíen en Dios. Debemos tener la seguridad de que aun si esta- bíblicas pertenecen a la versión Reina Valera. Revisión 1995.
mos en un túnel muy profundo, el Señor estará allí para ayudarnos en el momento Adventist World es publicada todos los meses e impresa
simultáneamente en Australia, Brasil, Corea, Indonesia y los
preciso. Él nos conoce más de lo que imaginamos, y está listo para ayudarnos de una Estados Unidos.
u otra forma”. Vol. 4, No.10

Octubre 2008 | Adventist World 31


El Rincón de las
PERS NAS
V I D A A D V E N T I S TA
En nuestra iglesia era el
sábado que marcaba el cuarto
aniversario del conjunto vocal
“Armonía de las Olas”. Varios
integrantes eran coreanos, de
la Escuela Nanuri, en Cagayan,
Oro City, y estaban a cargo de la
música orquestal. Me gusta hacer
nuevas amistades y por eso me
servicio
adventista
voluntario
CONOCE A TU PRÓJIMO
“Me encanta ser parte del gran
plan de Dios”, dice Candy Zook al
hablar de su servicio voluntario
en la sede central de la División
Sudasiática, en la India, donde
dirige el programa adventista para
niños. “Cada día, vemos mover-
se montañas cuando aparecen
personas dispuestas a patrocinar la
¿EN QUÉ LUGAR DEL MUNDO SE ENCUENTRA?
senté junto a un niño coreano
de unos 10 años y le pregunté
si hablaba inglés porque quería
conversar con él.
Me resultó muy gracioso que,
en perfecto inglés, me contestó:
P O T T S
“No, no sé hablar inglés”. Supon-
go que quiso decir que no podía
C A I T L I N
hablarlo con fluidez.
—Harlen Sande, Mindanao, Filipinas
C I TA D E L M E S
“Somos un pueblo respetuoso de la ley, ciudadanos obedientes de nuestras
naciones; pero la obediencia a Dios está en primer lugar. Es importante
que no perdamos eso de vista cuando los valores de estos dos mundos
diferentes entran en conflicto”.
—Pastor Jan Paulsen, durante el sermón del 13 de octubre de 2007 con motivo del
Concilio Anual de la Iglesia Adventista
educación de los niños, y construir Zook no se arrepiente de su deci-
albergues y escuelas”. sión y anima a otros a ser parte del
Oriunda de Nebraska, Estados plan divino en la India. “El servicio
Unidos, Zook fue llamada por voluntario es importante, y todos
primera vez a la India para realizar pueden hacer algo. Piensen por
una campaña de evangelización favor en los niños de la India, y
de tres semanas, cuando se estaba sepan que ustedes también pueden
recuperando de la muerte de su colaborar”.
esposo, en mayo de 2005. Fue des- Si desea leer más historias sobre
pués de esta experiencia inicial que los voluntarios adventistas en el
“supe que Dios me estaba llaman- mundo, o saber cómo participar del
do a que regresara a la India”. programa de voluntarios, visite el
Ahora, dos años más tarde, sitio www.adventistvolunteers.org
manualidad pintando en vidrio esmerilado, como parte de los proyectos de arte de los niños.
Bíblica de Vacaciones de la iglesia adventista de Spencerville en julio de 2008, realiza una
RESPUESTA: En Silver Spring, Maryland, Estados Unidos, una niña que asiste a la Escuela