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Las anoréxicas abstinentes se colocan una armadura medieval que las protege de su
extrema sensibilidad, pero que finalmente se convierte en su prisión. La abstinencia es
la solución intentada que parece imposible abandonar, porque, si se quita su armadura
serían incapaces de manejar sus emociones.
Los miembros de su familia tienden a hacer toda clase de esfuerzos para ayudar a la
persona insistiéndole en que coma, estando con ella, controlándola constantemente,
etc. Habitualmente se ve a toda la familia en la primera sesión, se necesita conseguir a
los miembros de la familia como co-terapeutas. Se utilizan diferentes prescripciones
para guiarlos
Prescripción (paciente):
“Desde ahora hasta la próxima vez que nos veamos, cada noche cuando te vayas a la
cama, en tu almohada, la última cosa que has de hacer antes de dormir… necesitarás
comprar algunas cosas para escribir, un buen papel de carta, y escribirme una carta.
Sólo hay un requisito previo: has de empezar con «Querido doctor» —o sea, yo—.
Después, puedes escribir lo que te apetezca, incluso que soy tacaño o estúpido… pero
has de empezar con un «Querido doctor». Cuando hayas acabado la carta, la firmas,
la pones en un sobre, lo cierras, y me traes todas las cartas la próxima vez. Esto me
ayudará a comprenderte mucho mejor que cientos de charlas.”
Prescripción (familia): se deben dar con el fin de detener las soluciones intentadas,
consiste en decirles que “dejen de intervenir y mencionar el problema”.
Esta se realiza una vez que los síntomas están empezando a mejorar, pero, algunas
personas anoréxicas piensan que deben cuidar su alimentación por lo que miden las
calorías que consumen al día.
En estos casos podemos enseñarles a “pesar” con los ojos y luego con una escala,
para que abandonen sus lentes deformantes.
“Detrás de todo límite hay una trasgresión. Mientras más rígidos sean tus límites, más
tentada estarás de transgredirlos. Si, en cambio, construyes un orden que incluya
desorden, ya no volverás a sentir la necesidad de transgredirlos, porque el pequeño
desorden te salva de un enorme desorden y mantiene tu sistema equilibrado y en
perfecta evolución. Un trocito de chocolate, una pequeña trasgresión, significa que tú
no sientes la necesidad de trasgredir en grandes cosas en otros momentos. Uno ha de
permitirse a sí mismo algunas cosas. Si te lo permites, podrás pasar sin ello; si no te lo
permites, será irresistible.”
Anorexia Sacrificante