i
:
j
;
:
Hacia el centro del campo hay un pequefio monticulo, una protuberancia en
la tierra, el nico aviso de Ja presencia de la obra, Mas cerca puede verse la gran
aberturs euadrada del foso, as! como el extremo de la escalera necesaria para des-
tender a Ja excavacién. Mitad atrio, mitad ténel, la obra en si se encuentra entera—
mente bajo tierra; una delicada estructura de postes y travesafios de ‘madera define
la fontera entre el interior y el exterior. La obra Perimetros/pabellones/sefielos, rea~
lizada en 1978 pot Mary Miss, es desde luego una esculrura 0, mis concretamen-
te, un earthwork.
‘En los ftimos diez afios, se ha utilizado el término “escnltura” para referinse a
cosas bastante sorprendentes: estrechos pasillos con monitores de televisiGn en sus
extremos; grandes fotografias que documentan excursiones campestres; espejos dis~
puestos en sngulos extraios en habitaciones corrientes;effmerss Vineas trazadas ex
Evsuelo del desierto. Aparentemente, no hay nada que pueda proporcionar a tal
ariedad de experiendias cl derecho a reclamar su pertenencia a algin tipo de cate-
fora excultérica. A menos, claro est, que convirtamos dicha eategoria en algo
infinitamente maleable.
‘Las operaciones criticas que han acompafiado el arte americano de posguerra
han trabajado en gran medida al servicio de esta manipulacion. En manos de esa
critica, categorias como Ja escultara o la pintura han sido amasadas, gstiradas y
Setoreidas en una extraordinaria demostracin de elasticidad, revelando la forma en
{que un término cultural puede expandime para hacer referencia a cualquier cosa.
¥ aunque ese estitamiento de un término como “escultura” se realiza abierta-
mente en nombre de la estética de vanguardia —de la ideologia de lo nuevo—, su
‘mensaje encubierto es el mensaje del historicismo. Lo nuevo se hace confortable al
Convertirse en familiar, al conteraplarlo como tna evolucién gradual a partir de las
formas del pasado. El historicismo actiia en lo auevo y lo diferente disminuyendo
lh novedad y mitigando la diferencia. Evocando el modelo evolutivo, clabora un
Ingar para el cambio en nuestra experiencia, nos permite aceptar que tn hombre
es diferente al nifio que en su dia fue, y contemplarlo simultineamente —a través
Ge la invisible accién del telos— como el mismo ser. Esta percepcién de la igual-Many Miss. Perimetos/pabellones/stuelos. 1978,
(Condado de: Nassau, Long Island, Nueva York.)