Película María Magdalena.

Análisis
Esta película demuele la Revelación sobrenatural trasmitida en la Sagrada Tradición y en la Sagrada
Escritura. No es una reproducción de pasajes bíblicos, es una “historia inventada” que utiliza a personajes
del Nuevo Testamento para transmitir su ideología.

Los apóstoles se presentan de modo muy deformado, en edad, apariencia y actitudes, mostrando
tendencias poco varoniles. Hay dos escenas “abiertas a la interpretación”: una, donde dos apóstoles están
duermiendo pero uno abrazando a otro y en la segunda, dos apóstoles están con las caras “pegadas”.

La Magdalena se presenta como “diferente” a las demás mujeres, mostrando resistencia hacia el
matrimonio, sugiriendo que es porque ella es “diferente”, dejándolo a la imaginación. Ella es presentada
completamente distinta a la de las Sagradas Escrituras y la Tradición, indicando que siempre fue “santa”,
negando su vida de pecado y su conversión. Su rol está sobredimensionado: a) Jesús la bautiza. b) Es la
única mujer apóstol. c) En la predicación de Jesús, es puesta al centro como modelo de discípula. d) Jesús
le consulta a ella sobre qué predicar a las mujeres. e) Ella es como uno de los doce: bautiza y predica.
f) Ella entiende mejor que los mismos apóstoles las enseñanzas de Jesús y tiene que aclarárselas, “apóstol
de los apóstoles”. g) Ella consuela a Jesús y aparece como su confidente privilegiado.
Independientemente de Pedro y de los demás apóstoles (de la Iglesia apostólica), ella afirma que “se hará
escuchar”, rompe así el machismo patriarcal de los apóstoles (y sus sucesores), porque ella es “la semilla
del Reino que crecerá y que gracias a ella, se entenderá al fin el “verdadero mensaje”.

Jesús se presenta en la película como un humano, quien no tiene conciencia de su divinidad. Es fuerte
físicamente pero débil de carácter, melancólico; que sufre “desgaste” y queda exhausto al realizar
milagros. Es presentado como un curandero que representa un personaje lacónico y excéntrico, como un
Santón o gurú hindú. Aparece poco dueño de sí y dudoso, llorando por esta vida y miedoso ante la muerte.
En una escena, la Magdalena es la que lo anima y consuela acariciándole la cabeza, la cual yace sobre las
piernas de ella. La escena de la resurrección de un muerto, es presentada con una tremenda deformidad,
donde Jesús casi se acuesta sobre el muerto y le acaricia el pecho, actuando como si su palabra no fuera
suficiente para resucitar muertos; como si sufriera o perdiera su energía al hacer el milagro. Pide a la
Magdalena que sea ella quien cuide a los apóstoles. La escena de los vendedores del templo, es reducida
a un diálogo con uno de los sacerdotes que poco caso le hace, pareciendo ser este el motivo de su enojo.
Jesús aparece como un loco furioso, que pierde el control de sí, teniendo que ser rescatado por sus
apóstoles. Supuestamente Jesús bautiza a la Magdalena lo cual es falso, ni tampoco ella fue ministro del
bautismo; se ve en todo una clara tendencia feminista. En la última cena, la Magdalena aparece a la
derecha de Jesús y ni en los Evangelios ni la Tradición, se menciona la presencia de la Magdalena en la
última cena. Jesús ya resucitado, aparece melancólico y a disposición de la Magdalena, esperándola
sentado fuera del sepulcro, al cual sólo ella acude. También ya resucitado, hay una escena en la que Pedro
le dice a la Magdalena: “tú lo debilitaste”, como si toda la vida y misión del Hijo de Dios encarnado, hubiera
dependido del encuentro con la Magdalena; al grado de ser uno antes y otro, “débil”, después.
Parece que la misión de Jesús y sus apóstoles no es anunciar el Reino, sino buscar seguidores para
conformar un ejército. No parece que Jesús instituyera los sacramentos, ni tampoco a la Iglesia.

Judas parece ser el mejor apóstol y aunque aparece pálidamente la traición, Judas no es pintado como un
traidor. Se omite que era ladrón, que su corazón se había envenenado por su ambición y que finalmente
entra en él, el demonio. La traición es presentada como consecuencia lógica de un modo de pensar. El
motivo de su suicidio no es el arrepentimiento, sino el deseo de morir por “irse con su familia”. Aparece
como un hombre bueno curando a la Magdalena, por el supuesto golpe que le dan en el huerto de los
olivos donde según la película, ella estuvo presente.

Pedro es presentado como un hombre de color, por lo tanto no como un judío. Aparece siempre
confundido y miedoso, incluso después de la resurrección. Su liderazgo no parece claro, no entiende el
mensaje de Jesús. Él es quien obedece a la Magdalena pues ella es la que le dice lo que hay que hacer.

La Virgen María está protagonizada por una mujer muy mayor, sin carácter, temerosa y melancólica.
Su actuación está muy lejos de representar a la Santísima Virgen María. La Virgen es eclipsada por la
Magdalena, quien aparece con un vínculo de unión con Jesús, superior al de la misma Virgen.

Temas Importantes:
Un tema recurrente a lo largo de toda la película es el del Reino, que ningún apóstol entiende con
excepción a la Magdalena. El Padrenuestro dice el mismo Jesús ser oración del Bautista. Magdalena dice
a Pedro: “tienes que orar como si estuviera contigo”, no reconocen ni la presencia espiritual, ni la
presencia real post-Pascual de Jesús. La Magdalena afirma: “el reino llegará con nosotros”, es decir, no
por el misterio Pascual, ni por la acción del Espíritu Santo, sino por la mera acción humana.
La Magdalena aconseja a Pedro: “predica tu mensaje, no el de él”, es decir, que el mensaje predicado por
los apóstoles es sólo humano, no la revelación que nos trajo el Hijo de Dios. El judaísmo es presentado
como machista, irracional y supersticioso. Ya que la protagonista no quiere casarse y es “diferente”, sus
parientes la consideran endemoniada y le practican un exorcismo (con un rito judío distorsionado) que
tiene como efecto, considerar el judaísmo de la época, como algo absurdo.

Conclusión:
Cinematográficamente habrá críticos que elogien su fotografía, tomas panorámicas o close-ups, también
a quién representa al personaje principal o los efectos especiales. Pero en el ámbito doctrinal, podemos
concluir con las siguientes observaciones sobre esta película:
1) Presenta a la Magdalena casi como la fundadora del cristianismo, con clara intención de criticar la
tradición apostólica.
2) Representa veladamente homosexualismo entre los apóstoles.
3) Utiliza personajes del Nuevo Testamento, para narrar una fábula con mensajes ideológicos feministas.
4) Deja la puerta abierta para justificar la introducción del “sacerdocio” femenino.
5) Aparece el mensaje de Jesús como incitación a dejar los deberes de estado, porque Cristo los liberaba
de las tradiciones patriarcales humanas como hacer una familia y cuidar de los hijos.
6) Tiene claras intenciones de ser incluyente, no sólo con las diferentes razas y sexos, –que
correctamente comprendido está bien– sino sobre todo con las preferencias sexuales.
7) Manifiesta un arrianismo moderno, en donde Jesucristo parece ser sólo hombre.
8) Busca restar credibilidad a la Iglesia como verdadera, pues su enseñanza no es lo que enseñaba Jesús.