El síndrome de Goodpasture es una enfermedad autoinmunitaria, perteneciente al
grupo de enfermedades de hemorragia alveolar o pulmonar, que suele acabar en una enfermedad pulmonar intersticial y se caracteriza por la producción de anticuerpos antimembrana basal tanto del glomérulo renal como de los alveolos pulmonares. Este síndrome fue reconocido por primera vez por Goodpasture en 1919 en un paciente de dieciocho años de edad que padeció de forma aguda hemoptisis y hematuria, poco después de recobrarse de una gripe. Desde entonces este tipo de patología, sin ser muy frecuente, ha quedado bien tipificada y se han sucedido numerosos trabajos que han buscado esclarecer su patogenia y su tratamiento más adecuado. Glomerulonefritis crescéntica en el síndrome de Goodpasture Si bien han sido muchos los progresos que nos han permitido comprender mejor este síndrome, sigue sin determinarse de forma concluyente su etiopatogenia, pese a que diversos agentes, como la inhalación dehidrocarburos volátiles o el virus de la gripe, han sido estrechamente implicados. La etiología del síndrome de Goodpasture permanece desconocida, aunque frecuentemente se precede de una infección pulmonar o con manifestaciones similares a una enfermedad viral. También se ha involucrado con la exposición a hidrocarburos y administración depenicilamina (Sternlieb, 1975). El síndrome de Goodpasture se suele presentar entre los 16-30 años deedad. Se reconoce que las manifestaciones pulmonares usualmente preceden a una enfermedad renal evidente. Síntomas y diagnóstico El individuo que padece esta enfermedad desarrolla típicamente ahogo y tos con emisión de sangre. Los síntomas pueden evolucionar rápidamente y empeorar. La respiración puede disminuir y puede haber una pérdida importante de sangre, al mismo tiempo que se produce una insuficiencia renal. Los análisis complementarios muestran en la sangre los anticuerpos característicos y en la orina la presencia de sangre y proteínas. Con frecuencia la enfermedad se acompaña de anemia. Una radiografía de tórax revela zonas alteradas en ambos pulmones y una biopsia del tejido renal permite identificar depósitos microscópicos de anticuerpos con un patrón específico. Tratamiento Esta enfermedad puede evolucionar hacia la muerte con mucha rapidez. Para contrarrestar la actividad del sistema inmunitario se puede administrar corticosteroides y ciclofosfamida por vía intravenosa. El paciente puede además someterse a la plasmaféresis, un procedimiento en el que se extrae la sangre de la circulación, luego se extraen de la misma los anticuerpos responsables de la enfermedad y se devuelve de nuevo la sangre a la circulación. La utilización precoz de esta combinación de tratamientos puede contribuir a salvar la función de los riñones y de los pulmones, porque, una vez que se ha producido el daño, este es irreversible. Muchos pacientes pueden necesitar un tratamiento de apoyo mientras evoluciona la enfermedad. El tratamiento puede requerir oxígeno complementario o un respirador y también transfusiones de sangre. Si los riñones fallan, es necesario someter al paciente a diálisis renal o a un trasplante de riñón.