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ar
CAPITULO 67

TOXICOS AMBIENTALES NO METALICOS


Contaminantes atmosféricos, solventes
y vapores y plaguicidas

Curtís D. Klaassen

La exposición a productos químicos del entorno puede tener efectos adversos en la salud. Es
importante que el médico conozca las posibles consecuencias de la exposición a dichas sus­

r
tancias, y considere esa información al elaborar el diagnóstico clínico y un plan terapéutico.

.a
Las personas están expuestas a los efectos de sustancias químicas presentes en el aire que
respiran, en los alimentos que consumen y en el agua que beben. Los efectos tóxicos de estos

om
productos dependen de la dosis. Por lo común, sus concentraciones en aire, alimentos y
agua no alcanzan los valores necesarios para que estos productos resulten tóxicos. Las
personas más propensas a sufrir tales efectos son las que están expuestas al contacto con

s.c
estos productos en el sitio de trabajo, porque a menudo reciben dosis mayores de ellos que la
población general. ico
En este capítulo se examinan los efectos tóxicos de tres clases principales de sustancias:
contaminantes del aire, solventes y vapores, y plaguicidas. Cuando se conocen, se señalan
tratamientos específicos para casos de exposición a las sustancias de estas clases.
ed
sm

La contaminación ambiental, una consecuencia indesea­ Absorción y depósito de sustancias


te

ble de la actividad humana, fue relativamente insignifi­ tóxicas en los p ulmones


cante hasta que comenzó el proceso de urbanización a gran
un

escala. El empleo de carbón mineral para calentar los ho­ El sitio en que se depositan los aerosoles en las vías respi­
gares creó una atmósfera de humo sulfuroso sobre las ciu­ ratorias depende del tamaño de las partículas. Muchas tie­
ap

dades. Ya en el siglo XIII se hacían esfuerzos periódicos nen forma irregular. Son varias las maneras de definir el
por prohibir la combustión de carbón mineral en la ciudad tamaño o el comportamiento de éstas, como serían su diá­
w.

de Londres; sin embargo, en términos generales, la gente metro aerodinámico, su masa media u otros. Las partícu­
ha aprendido a aceptar la atmósfera contaminada como las con un diámetro de 5 !lm o más suelen depositarse en
ww

parte de la vida urbana. Las plantas de energía queman la porción superior de las vías respiratorias; las de 1 a5
combustibles fósiles para generar electricidad, proliferan !lm se decantan en las vías terminales o los alveolos. Las
las acererias en bancos de rios y riberas de lagos, se erigen que se depositan en la porción anterior de las vías nasales,
refinerías de petróleo cerca de puertos y campos petrolí­ sin cilios, permanecen en esa zona hasta que son elimina­
feros, los grandes hornos funden y refinan metales cerca das mediante maniobras digitales, el sonarse o el estornu­
de depósitos extensos de estas materias primas y, en cual­ do. En la porción posterior de las vías nasales, una capa de
quier parte del planeta, se encuentran automóviles. Todas moco impulsada por los cilios transporta en cuestión de
estas manifestaciones de las sociedades modernas conta­ minutos las partículas insolubles hasta la faringe, de don­
minan el aire, el agua y la tierra. de son deglutidas y pasan a las vías gastrointestinales. Las
partículas solubles disueltas en el moco pueden ser trans­
portadas a la faringe o absorbidas en el epitelio y de ahí a
CONTAMINANTES ATMOSFERICOS la sangre.
Las partículas que se depositan en el árbol traqueobron­
Los contaminantes del aire penetran en el cuerpo princi­ quial son eliminadas por los movimientos anterógrados del
palmente por los pulmones. Algunos se absorben en la san­ moco impulsado por los cilios. El movimiento de éstos varía
gre, otros se eliminan por los pulmones, y una fracción entre las distintas partes de las vías respiratorias, pero es
queda retenida en el cuerpo. rápido y eficaz. Las velocidades de transporte son de 0.1 a
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1 mm/min, con lo cual la vida media de las partículas varía presencia de hidrocarburos, óxidos de nitrógeno.y oxidan­
de 30 a 300 mino La tos y el estornudo desplazan rápida­ tes fotoquímicos. Es causado por las emisiones de los au­
mente el moco y las partículas hacia la glotis, donde tam­ tomotores y se observa típicamente en regiones como la
bién pueden ser deglutidas. cuenca de Los Angeles, donde la luz solar intensa causa
Las partículas que tienen menos de 1 f1.m de diámetro reacciones fotoquímicas en masas de aire contaminado
quedan suspendidas en el aire inhalado y llegan a los al­ atrapadas por una capa de "inversión térmica". Por su natu­
veolos pulmonares, donde pueden ser absorbidas fácilmen­ raleza se le describe como el tipo oxidante de contamina­
te. El área de superficie de la zona alveolar es grande (50 ción o contaminación atmosférica fotoquímica. Las partí­
a 100 m'); la velocidad de flujo sanguíneo es grande, y la culas formadas en algunos sitios, en particular las generadas
sangre está muy cerca del aire alveolar (10 f1.m). Todos por la combustión, pueden adsorber vapores o gases, cam­
estos factores influyen en el grado de absorción; en el ca­ biar sus propiedades superficiales y generar una sustancia
pítulo 13 se enumeran los factores que rigen la velocidad todavía más dañina que cualquiera de ellas por separado.
de absorción de los gases. Los aerosoles líquidos cruzan Hasta 90% de las toneladas de contaminantes que se
las membranas alveolares por difusión pasiva, en propor­ dispersan en el aire cada año provienen de cinco fuentes

r
ción con su liposolubilidad. No se han definido con tanta principales: transporte (ante todo automóviles), industria,

.a
exactitud los mecanismos para eliminar o absorber las par­ generación de energía eléctrica, calentamiento de espacios
tículas (por lo común menores de 1 f1.rn de diámetro) des­ cerrados, y eliminación de desechos (en orden de impor­

om
de el alveolo, y son menos eficaces que los que eliminan tancia relativa).
partículas desde el árbol traqueobronquial. Al parecer, in­

s.c
tervienen tres procesos. El primero es la eliminación fisi­
ca; se piensa que las partículas depositadas en la capa de Efectos de la contaminación atmosférica
líquidos de los alveolos son aspirados en la "escala móvil" en la salud
ico
mucociliar del árbol traqueobrono:¡uial. El segundo meca­
nismo es la fagocitosis, por lo común por parte de mono­ Las crisis de alta contaminación causan mortalidad y mor­
nucleares o macrófagos alveolares. El tercero es por ab­ bilidad. Se conocen tres ejemplos clásicos: en el valle del
ed

sorción en el sistema linfático. En él, las partículas pueden Meuse en Bélgica, 65 personas fallecieron en 1930; otras
quedar por largo tiempo, razón por la cual se ha llamado a 20 murieron en Donora, Pennsylvania en 1948; 4 000 su­
sm

dicho sistema "el guardapolvo" de los pulmones. cumbieron en Londres en 1952. Cada uno de estos inciden­
En general, la eliminación de las partículas desde los tes se produjo durante una inversión térmica atmosférica
alveolos es relativamente ineficiente. Sólo 20% se desechan
te

que duró tres o cuatro días. En ese lapso, la concentración


en el primer día de haberse depositado, y las que permane­ de contaminantes rebasó los niveles prevalecientes en esas
un

cen más de 24 h suelen ser eliminadas con gran lentitud. zonas ya muy contaminadas; el combustible principal era
La velocidad de este proceso puede calcularse con base en el carbón mineral, por lo qlle la contaminación fue del tipo
la solubilidad de la sustancia en líquidos pulmonares. Los reductor. Gran parte de las víctimas que enfermaron o fa­
ap

compuestos menos solubles se desechan con mayor lenti­ llecieron eran ancianos; algunos tenían ya trastornos car­
tud. Al parecer, la eliminación depende en gran medida de diacos o respiratorios; ninguno pudo soportar la carga adi­
w.

la disolución y la absorción en la sangre. Algunas partícu­ cional de respirar el aire fuertemente contaminado.
las pueden permanecer en los alveolos por tiempo indefi­ Los efectos agudos en la salud guardan relación neta
ww

nido, si proliferan las células que las fagocitan y se unen a con el tipo reductor de contaminación. Si bien hay menos
la red reticular para formar una placa o un nódulo alveolar datos para relacionar la contaminación oxidante foloquí­
"de polvo". mica concomitante con dichos efectos cn la salud del ser
humano, se advierten correlaciones netas entre los niveles
de oxidantes en el aire y las hospitalizacioncs por trastor­
Tipos y fuentes de contaminantes atmosféricos nos alérgicos, enfermedades inflamatorias de los ojos, in­
fecciones agudas de vías respiratorias superiores, influen­
Cinco contaminantes constituyen cerca de 98% de las sus­ za y bronquitis.
tancias que invaden el aire, a saber: monóxido de carbono
(52%), óxidos de azufre (18%), hidrocarburos (12%), par­
tículas (10%) y óxidos de nitrógeno (6%) (Amdur, 1991). Características toxicológicas

A menudo se distingue entre dos tipos de contaminación. de los contaminantes atmosféricos

La primera se caracteriza por la presencia de dióxido de Dióxido de azufre. El dióxido de azufre gaseoso se genera
azufre y humo de la combustión incompleta de carbón más bien por la combustión de productos fósiles que lo contie­
mineral, y en situaciones de niebla y temperaturas frias. nen. La concentración necesaria para matar animales de labora­
Por su naturaleza química se le ha llamado tipo reductor torio es tan grande que este gas tiene poca atingcncia en los pro­
de contaminación. El segundo tipo se caracteriza por la blemas de contaminación atmosférica. Sin embargo, la exposición
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Capíttdo 67 Tóxicos ambientales no metálicos 1783

,
diaria de ratas a 10 ppm de dióxido de azufre durante uno a dos UV
NO, - NO+O (67-1)
meses produjo un incremento del quíntuple en el grosor de la
O+O2 ---+ =03 (67-2)
mucosa traqueal. Los cilios siguieron moviéndose con la fre­
0, +- NO - NO,+0, (67-3)
cuencia normal, pero el moco espeso retardó su eliminación. La
capa anormal de moco se debe a un número mayor de células
que 10 secretan en los bronquios principales, sitio donde éstas La intensificación de la luz ultravioleta en la superficie te­
abundan, y en las vías respiratorias periféricas, donde normal­ rrestre (por depleción del ozono de la estratosfera) apresura la
mente no están presentes (Hirsch y col., 1975). formación de este gas. El N02 es regenerado por la reacción de
Una respuesta fisiológica básica a la inhalación de dióxido de NO con 03, por lo que el resultado es cíclico. En forma simultá­
azufre es un grado leve de constricción bronquial, que depende nea, átomos de oxígeno reaccionan con hidrocarburos de la at­
de la inervación parasimpática intacta. Casi todos los seres hu­ mósfera, en particular olefinas y aromáticos sustituidos, con 10
manos expuestos a 5 ppm de dióxido de azufre durante 10 min que se producen compuestos oxidados y radicales libres que
muestran mayor resistencia al flujo del aire. Los asmáticos tie­ reaccionan con NO para producir más óxido nitroso. El resulta­
nen una mayor sensibilidad al dióxido de azufre; puede surgir do es la acumulación de N02 y 03, en tanto que se agotan las
broncoconstricción incluso con valores de 0.25 ppm (Sheppard concentraciones de óxido nítrico.
y col., 1981). El ozono irrita los pulmones y puede ocasionar la muerte por

r
Al parecer, el aumento de la concentración atmosférica de edema de estos órganos. Se advierte edema pulmonar macros­

.a
óxidos de azufre que suele generar la mayor concentración de cópico en ratones expuestos a concentraciones superiores a dos

om
partículas, modifica en grado considerable la morbilidad y la partes por millón. El ozono descama el epitelio en todas las vías
mortalidad. En ciudades fuertemente contaminadas (como Lon­ ciliadas y produce cambios degenerativos en las células de tipo
dres, Nueva York o Cracovia), la exposición durante 24 h a �on­ 1, así como turgencia o rotura del endotelio capilar de los alveo­
los. Las células de tipo 1 son sustituidas luego por las de tipo n,

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centraciones de dióxido de azufre de 0.11 a 0.15 ppm, y concen­
traciones totales de partículas de 500 a 600 p.g!m', incrementa y la proliferación de estas últimas es un signo característico de
las cifras de morbilidad y mortalidad, y determina una disminu­ la intoxicación por ozono. Es importante advertir que se ha ma­
ico
ción temporal en la función pulmonar, cuando hay 0.1 ppm de nifestado tmdcosis pulmonar en animales de experimentación,
dióxido de azufre y 250 p.g!m' de partículas (Ware y col., 1981). incluso después de lapsos relativamente breves de exposición a
las concentraciones de ozono que a veces se presentan por corto
ed

Acido sulfúrico. Parte del dióxido de azufre presente en la tiempo en zonas urbanas contaminadas (Lippmann, 1989).
atmósfera se transforma en ácido sulfúrico, sulfato de amonio y La exposición prolongada al ozono puede causar engrosamien­
otros sulfatos. La conversión a ácido sulfúrico puede iniciarse to de los bronquiolos respiratorios terminales. En especies ex­
sm

por el hollín o por metales minoritarios,.· como el vanadio o el puestas a dicho gas en concentraciones. un poco mayores de una
manganeso. Pueden formarse complejos de sulfito estables en parte por millón (Amdur, 1991) se advierten bronquitis, fibrosis
presencia de metales como el cobre o el hierro. y cambios enfisematosos crónicos.
te

El. ácido sulfúrico aumenta la resistencia de vías respirato­ El ozono, en concentraciones de 0.25 a 0.75 ppm, causa res­
rias, en relación con la concentración y el tamaño de las partícu­ piración superficial y rápida, disminución de la distensibilidad
un

las (Amdur y col., 1978). Las partículas de I p.m (1 mg/m') au­ pulmonar, y síntomas subjetivos como tos, sensación de opre­
mentan en forma rápida y notable la resistencia al flujo, en tanto sión en el pecho y sequedad de la faringe. Las concentraciones
ap

que las de 7 pm producen apenas un incremento leve, porque no de ozono mencionadas pueden surgir durante vuelos largos a
penetran más allá de las vías respiratorias superiores. El ácido grandes alturas. El ozono también aumenta la sensibilidad de
sulfúrico intensifica en un grado extraordinario la resistencia al los pulmones a broncoconstrictores como histamina, acetilcoli­
w.

flujo, en comparación con el dióxido de azufre, después de ex.,. na y alergenos. Incrementa la incidencia de infecciones en anima­
posición a corto o largo plazo. Los asmáticos son más sensibles les de laboratorio expuestos a un aerosol con microorganismos
ww

al ácido sulfúrico y al dióxido de azufre. infectantes, tal vez por inhibición de los sistemas de "limpieza"
y eliminación de partículas. La concentración de ozono que sue­
Sulfatos en partículas. Los sulfatos varían grandemente en le observarse en el aire urbano es similar a la que ocasiona dis­
sus efectos en la respiración, y el ion sulfato en sí no modifica la minuciones medibles en la función respiratoria de los seres hu­
función respiratoria. El sulfato de amonio y zinc, un constitu­ manos (Kinney y �ol., 1988). Así pues, es escaso el margen entre
yente de la niebla de Donora, incrementa la resistencia respira­ las concentraciones usuales y las que causan efectos mínimos
toria a una concentración de 0.25 rng/m3; produce un mayor au­ del ozono. Por fortuna, se piensa que en lo que atañe .al ozono no
mento en la resistencia al flujo que el dióxido de azufre. existe un grupo de personas "de alto riesgo" o más sensibles a
él, a diferencia de lo que ocurre con el dióxido de azufre, al cual
Ozono. En la atmósfera contaminada, el ozono (03) es el oxi­ son más susceptibles los asmáticos.
dante que está presente en las concentraciones más altas. Varios El mecanismo bioquímico de daño pulmonar producido por
kilómetros por arriba de la superficie terrestre hay suficiente luz ozono se debe tal vez a la formación de productos intermedios
ultravioleta de onda corta (UV) para transformar el 0, en 0" que son radicales libres reactivos. Los radicales libres inducidos
por absorción directa. Entre los principales contaminantes at­ por· ozono pueden provenir de la interacción con grupos sulfhi­
mosféricos, el dióxido de nitrógeno es el más eficiente para ab­ drilo, por descomposición oxidativa de ácidos grasos no saturados
sor ber la luz de esta longitud de onda. Dicha absorción desenca­ o por ambos mecanismos. Algunos datos indican que uno de los
dena una serie compleja de reacciones que puede resumirse de efectos biológicos del ozono es reaccionar con ácidos grasos no
este modo: saturados, y la ozonización de estos últimos equivale esencial-
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1784 Sección XVII Toxicología

mente a la peroxidación de lípidos. Los compuestos sulfhidrilo nómeno bastante raro que no guarda relación con la exposición
y los antioxidantes (como el ácido ascórbico y el a-tocoferol) dentro del hogar (Nordman y col., 1985). La inhalación de
protegen de la intoxicación por ozono a animales de laboratorio, formaldehido (6 a 15 ppm) durante dos años indujo carcinoma
pero no se ha demostrado que posean los mismos efectos en el de células escamosas en la cavidad nasal de ratones y ratas (Kems
ser humano (Menzel, 1994). y col., 1983). Sin embargo, no hay datos de que la exposición a
dicho compuesto produzca cáncer en el ser humano (U.A.R.E.P.,
Dióxido de nitrógeno. El gas mencionado, a semejanza del 1988).
ozono, irrita los pulmones y es capaz de causar edema en ellos. La acroleina es mucho más irritante que el formaldehido; es
El contaminante en cuestión impone un riesgo partícular para una sustancia que contribuye en grado importante a la irritación
los agricultores, porque pueden liberarse en los silos volúmenes que causan el humo de cigarrilios y el esmog fotoquímico. La
de dióxido de nitrógeno suficientes para producir síntomas de cifra limite del umbral ocupacional (TLV) de acroleina es de 0.1
daño pulmonar, lo que se denomina ''pulmón del llenador de ppm; una parte por millón ocasiona lagrimeo en menos de cinco
silos". En los hogares donde se utiliza gas como fuente de enero minutos (Cornmittee on Aldehydes, 198 1). La acroleína intensi·
gía para cocinar se registran niveles de óxidos de nitrógc:no cin­ fica la resistencia de vias respiratorias y el volumen ventilato­
co veces mayores que en los que se emplea electricidad. El LC,. rio, y disminuye la frecuencia de la respiración. Los aldehidos

r
de una exposición durante cuatro horas al dióxido de nitrógeno intensifican la resistencia al flujo de aire en concentraciones me­

.a
es de unas 90 ppm. Como ocurre con el ozono, el dióxido de nores que las que disminuyen la frecuencia respiratoria.
nitrógeno daña las células de tipo 1 de los alveolos.

om
La exposición experimental de animales o seres humanos al Monóxido de carbono. Se trata de un gas incoloro, inodoro,
dióxido de nitrógeno altera en un grado medible la función pul­ insipido y no irritante, emanado por la combustión incompleta
monar. El patrón de esta alteración es similar al generado por de partículas orgánicas. El monóxido de carbono (CO) es el con·

s.c
ozono e incluye incremento de la frecuencia respiratoria y dis­ taminante que más abunda en la capa inferior de la atmósfera, y
minución de la distensibilidad pulmonar. Casi no se altera la un gran número de muertes accidentales y suicidios se producen
resistencia pulmonar al flujo de aire. Surgen cambios en la fun· cada año con su inhalación.
ico
ción pulmonar cuando un sujeto sano se expone a 2 a 3 ppm, Aunque desde hace mucho tiempo se sabe que el CO es sinte·
pero en algunos asmáticos pueden ocurrir con concentraciones tizado por el organismo durante la degradación del hern, no se
mucho menores (Orehek y col., 1976). pensaba que poseyera una función fisiológica. Con la identifica·
ed

ción del ácido nitrico como factor relajante derivado del endote·
Aldehídos. Los aldehidos se forman a través de la oxidación lio, se sugirió que el monóxido podría tener una función similar
sm

de hidrocarburos por acción de la luz solar y por combustión (Marks y col., 1991). Sin embargo, se necesita abundante inves·
incompleta (emisiones de automóviles, incendios forestales); son tigación para establecer si el CO posee alguna función fisiológi·
liberados de resinas que contienen formaldehído (como serían ca o no.
te

madera terciada o aglomerada, y los aislantes de espuma de urea­ La concentración promedio del CO en la atmósfera es de 0.1
formaldehido). La gran reactividad de los aldehidos hace que su ppm; fuentes naturales como la oxidación atmosférica de metano,
un

vida media sea breve, es decir, de unas horas en la atmósfera. La incendios forestales, oxidación de terpina, y el océano mismo
concentración de aldehidos en una atmósfera limpia es de 0.0005 (en el que los microorganismos producen monóxido) explican
00.002 ppm; en el aire urbano ambiente, de 0.004 a 0.05 ppm, y casi 90% del CO atmosférico; la actividad humana produce el
ap

más de 0.8 ppm en recintos cerrados en que se identifican los 1 (lO!o restante.
materiales emisores de formaldehido (Cornmittee on Aldehydes, La ventilación inadecuada de hornos y automóviles ocasiona
w.

1981; Woodbury y Zenz, 1983). Cerca de 50% del aldehido total muchas muertes cada año. Casi todas las víctimas de incendios
en el aire contaminado es formaldehido (H,CO), y 5% es acro­ en espacios cerrados fallecen de intoxicación aguda por el gas y
ww

leina (H,C=CHCHO), sustancias que probablemente aporten no por las quemaduras. El automóvil es la fuente máxima de
su olor al esmog fotoquimico y expliquen la irritación ocular monóxido de carbono; en zonas de tránsito intenso las concen­
que causa. traciones llegan a 115 ppm, en vías rápidas a 75 ppm, y en zonas
El fonnaldehído irrita las mucosas de vías nasales y respira­ residenciales a 23 ppm. En garajes y túneles subterráneos se ha
torias superiores, y los ojos. Las concentraciones de 0.5 a 1 ppm advertido que los niveles de dicho gas rebasan las lOO pprn duo
se detectan por el olor, las de 2 a 3 ppm producen irritación leve, rante periodos largos. La instalación de dispositivos para con­
y casi ninguna persona tolera las de 4 a 5 ppm. La concentración trolar la contaminación, 10 que incluye convertidores catalíticos
de formaldehido puede alcanzar 1 ppm en el aire de edificios en los sistemas de escape de los automotores, ha disminuido las
recién construidos, en patticular casas móviles. Se ha detectado emisiones de ca por el tránsito vehicular y debe disminuir las
una correlación significativa entre la concentración de formal­ del gas en atmósferas urbanas.
dehido en el aire del interior del hogar y la incidencia de irrita­ Al parecer, la concentración promedio de monóxido de car­
ción ocular. Cuando dentro de la c,asa bono en la atmósfera se estabiliza por medios naturales y efi·
altas de formaldehido (Woodbury y Zenz, 1983), son más fre­ cientes de eliminación ("sumideros"), el más importante de los
cuentes otros sintomas. como rinorrea, dolor faringeo. cefalalgia cuales parece ser la reacción del monóxido con radicales hidroxilo
y tos. El patrón global de respuesta respiratoria se asemeja al del del ambiente para formar dióxido de carbono; la porción supe·
dióxido de azufre. En los sujetos sensibilizados el formaldehido rior de la atmósfera y la tierra también hacen las veces de sumi­
causa reacciones cutáneas, no sólo por contacto sino por inhala­ deros.
ción (Maibach, 1983). La exposición ocupacional al forrnaIdehido Otra fuente de contacto con el mon6xido de carbono es el
también ocasiona asma, 10 cual, sin embargo, parece ser un fe- humo del tabaco. Goldsmith y Landaw (1968) señalaron una
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Capítulo 67 Tóxicos ambientales no metálicos 1785

mediana del nivel de carboxihemoglobina (COHb) de 5.9% en La toxicidad del CO depende no sólo de la interferencia en el
fumadores que consumen dos cajetillas de cigarrillos al día (unos aporte de oxígeno por la sangre; este gas ejerce también un efec­
40 cigarrillos) y que inhalan el humo. to tóxico directo al unirse a citocromos celulares como los pre­
Rea cción del CO con la h emoglobina. La toxicidad del mo­ sentes en las enzimas respiratorias y la mioglobina (Gutiérrez,
nóxido de carbono proviene de su combinación con la hemoglo­ 1982).
bina para formar carboxihemoglobina (COHb). En dicha forma, Factores que determinan la toxicidad del CO. La toxicidad
la hemoglobina no transporta oxígeno, dado que ambos gases del monóxido de carbono depende principalmente de la concen­
reaccionan con los mismos grupos protéticos del hem en la mo· tración del gas en el aire inspirado, el tiempo de exposición, el
lécula tetramérica de la hemoglobina. La afinidad de dicho pig­ volumen respiratorio por minuto. el gasto cardiaco, la necesidad
mento por el monóxido es 220 mayor que por el oxígeno y, por tisular de oxígeno, y la concentración de hemoglobina en la san­
esa causa, es peligroso incluso en bajísimas concentraciones. El gre. Los anémicos son más susceptibles a la intoxicación por
aire contiene 21% de oxigeno en volumen; por tanto, la exposi­ CO que las personas con cantidades normales de hemoglobina.
ción a una mezcla gaseosa de 0.1% de monóxido de carbono El metabolismo más intenso agrava los síntomas de la intoxica­
(1 000 ppm) en el aire ocasionarla una carboxihemoglobinemia ción por monóxido de carbono; por esta razón los niños mueren
cercana a 50%. antes que los adultos cuando ambos se exponen a una concen�
La disminución en la capacidad acarreadora de oxígeno de la tración dada del gas.

r
sangre es proporcional a la cantidad de carboxihemoglobina pre­ Los cambios en la presión barométrica no modifican las afi­

.a
sente. Sin embargo, disminuye todavía más el oxígeno que llega nidades relativas de la hemoglobina por el oxígeno y el monóxi­
a los tejidos, por la influencia inhibidora de COHb en la disocia­ do de carbono. Sin embargo, a grandes alturas y en otras situa­

om
ción de cualquier oxihemoglobina (O,Hb) disponible; puede ciones en que es pequeña la tensión de oxígeno, los efectos de
entenderse mejor si se compara a una persona anémica con una una concentración particular de CO serán correspondientemente
cifra de hemoglobina de 80 giL con otra que tenga una cifra de más intensos.

s.c
pigmento de 160 giL, pero en la que la mitad de éste esté en la Signos y sintomas de la intoxicación por CO. Los signos y
formade COHb (fig. 67-1). En cada caso la capacidad acarreadora síntomas de la intoxicación por monóxido de carbono son los
de oxigeno es la misma. El individuo anémico puede mostrar característicos de la hipoxia. El cerebro y el corazón son los ór­
ico
síntomas leves o nulos, en tanto que la persona que sufre intoxi� ganos con las mayores necesidades de oxígeno y el metabolis­
cación por monóxído estará cercana al colapso. mo más intenso, por lo cual son los más sensibles a la hipoxia, y
en ellos se manifiestan casi todos los efectos observados des­
ed

pués de la exposición al tóxico. Los síntomas de intoxicación


por monóxido de carbono han sido correlacionados con el con­
sm

tenido de COHb de la sangre, como se muestra en la figura 67-2.


:o No obstante, es importante destacar que en una persona deter­
J:
wQ 100 minada los signos y síntomas clínicos tal vez no guarden una
te

0o? correlación estrictamente cuantitativa con dicho nomograma; es


o!.-
zw 80 más, una persona dada puede no presentar todos los síntomas
w...I
un

,,!e mencionados. Se advierte notable variación entre personas, y


-z
X 60 hay poca información sobre la variabilidad interindividual, la
0o
0- velocidad y duración de la captación y parámetros cinéticos afi­
ap

W(I)
nes, para definir un nomograma verdaderamente exacto. No obs­
°15 40
0 tante, las relaciones mostradas pueden ser útiles, en un sentido
«
w.

Qz semicuantitativo, para relacionar la exposición con el efecto. A


z- 20
wOl veces, la inhalación de concentraciones altas de monóxido pro­
f-g
ww

z " duce signos prodrómicos (debilidad y mareos transitorios) antes


0 0 O de perder la conciencia, pero puede no ocurrir algún signo de
u::;:
W O 20 60 80 100 este tipo.
40
J: Las concentraciones moderadas de COHb tienen poco efecto
P02 (torr) en las funciones vitales del ser humano en reposo. Como se
mencionó, la presencia de la carboxihemoglobina disminuye la
Fig. 67�1. Efecto de la carboxihemoglobina (COHb) en la
" curva de capacidad oxífora, pero no la P02 de la sangre arterial. En con­
disociación de la oxihemoglobina.
secuencia, el mecanismo de quimiorreceptores carotídeo y a6r�
La curva A (línea negra) representa la curva de disociación normal tico no estimula la respiración. La frecuencia cardiaca, por otra
de oxígeno no alterada por la presencia de anemia (p. ej., 80 giL de parte, se incrementa en todos los sujetos en quienes la COHb
hemoglobina en la sangre). La curva B (Unea azul) representa la si­ llega a 30%, tal vez para compensar la vasodilatación periférica
tuación en que hay 50% de COHb y una concentración nonnal de
causada por la hipoxia; la lactacidosis es consecuencia de la hi­
hemoglobina (160 gil de hemoglobina en la sangre y la mitad de los
poxia tisular.
sitios de unión ocupados por el mor16xido de carbono). La capacidad
Son muy diversos los signos clínicos en personas con intoxi­
acarreadora de oxígeno es igual en anWos casos; sin embargo, cuan­
do hay COHb el oxígeno se disocia dC( la hemoglobina, a niveles
cación aguda por monóxido de carbono; muchos muestran sín­
menores de POzo El efecto anterior es consecuencia de interacciones tomas que no son los típicos de este cuadro: lesiones cutáneas,
entre los sitios de unión por oxigeno o mQDÓxido de carbono; se sudación excesiva, hepatomegalia, tendencia hemorrágica, hi­
conocen cuatro sillos de ese tipo por mOléculB: de hemoglobina. perpirexia, leucocitosis, albuminuria y glucosuria.
,
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1786 Sección XVII Toxicología

veles de monóxido demasiado bajos para inducir coma también


Y
débil bradipnea; insuficiencia pueden ocasionar efectos neuropsiquiátricos.
::li Pulso
z respiratoria y muerte La intoxicación profunda por monóxido de carbono produce
5 lesiones cutáneas que varían desde áreas de eritema y edema
t!l
Z funcibóleinnmuerte
con convulsiones
h���I���;i: la oosi termi
cardiatentes;
ca hasta la formación de vesiculas y bulas muy notorias. También
;;¡ y
taquipnea intermiten· se observa a veces rabdomiólisis, tal vez causada por el efecto
Z y pulso acelerado;
O con convulsiones tóxico directo del monóxido de carbono en la mioglobina, y tam­
-.c
�:l:
a:0
de Cheyne·Stokes
inferior n e;
con mayor
bién mioglobinuria, con insuficiencia renal.
::>u colapso o si cop
Diagnóstico de la intoxicación aguda por CO. El diagnóstico
!;(z de la respiración y el pulso preliminar de la intoxicación aguda por CO suele ser facilitado
",O
w
O
u
be"rc, debilidad;vómi
•• náuseas y
mareos;
tos; por pruebas circunstanciales, dado que la víctima suele estar en
situaciones que dejan poca duda respecto a la causa del proble­
w
ma. La COHb tiene color rojo cereza y su presencia en altas
�Z concentraciones en la sangre capilar puede impartir un color rojo
w anonnal a la piel, mucosas y los lechos ungueales. Sin embargo,
u
a: , ,�(,i��II��'�� �::�; dilatacifrente;
rs.;� en la
ón de el individuo vivo suele estar más bien cianótic$) y pálido, y sólo

r
� en la necropsia se advierte la "cianosis rojo cereza". El diagnós­

.a
tico definitivo depende de la demostración de carboxihemoglo­

om
bina en la sangre. En la persona fuertemente intoxicada no ha de
retrasarse el tratamiento por realizar dicha prueba, pero la de­
Fig. 67·2. Correlaci6n entre la concentración de carboxihemoglobi· mostración de la carboxihemoglobina (COHb) conlleva impor­
na y signos y slntomas de intoxicación por monóxido de carbono. tancia forense. Si una persona muere en una atmósfera que con·

s.c
tiene monóxido de carbono, la muestra sanguínea post mortem
Se ha advertido un continuo de síntomas en la intoxicación por mo­
suele contener 60% de carboxihemoglobina; sin embargo, algu­
nóxido de carbono. No obstante, hay que destacar que surge enorme
.
ico nas mueren en un medio con concentraciones menores. Si la per­
variabilidad interindividual en respuesta a la exposición al monóxi­
do de carbono. Debe utilizarse el nivel sanguíneo de carboxihemo­ sona es retirada de dicha atmósfera mientras respira, aún dismi­
globina (COHb) sólo como una fonna semicuantitativa para relacio­ nuirá rápidamente la concentración de COHb, y si el intercambio
ed

nar la exposición con el efecto. (Con autorización de Sayers y respiratorio sigue siendo adecuado, esta fonna de hemoglobina
Davenport, 1930.) desaparecerá de la sangre en un lapso de horas.
Destino y eliminación del CO. La COHb es totalmente diso­
sm

ciable, y una vez concluida la exposición aguda, el CO se


excretará por los pulmones y sólo una cantidad pequeñísima de
Cuadro patológico de la intoxicación aguda por CO. Como él se oxidará en dióxido de carbono.
te

se comentó, los tejidos más afectados por la exposición al CO El monóxido de carbono (CO) no se excreta sin respiración
son los más sensibles a la privación de oxígeno, como el encéfa· activa. Es más, la carboxihemoglobina es extraordinariamente
un

lo y el corazón, y las lesiones son predominantemente hemorrn­ estable y casi no la afecta la putrefacción. Por tanto, mucho tiem­
gicas. Puede ocurrir daño pennanente del corazón por la presen­ po después de muerta una persona pueden hacerse mediciones
ap

cia de COHb en la sangre; a veces se observan signos de cambios válidas de las concentraciones de COHb en el cuerpo. Por lo
isquémicos y de infarto subendocárdico. Se considera que la contrario, después de la muerte el CO se absorbe poco o nada, y
cefalalgia intensa consecutiva a exposición al CO se debe a ede­ el análisis de sangre del corazón permite hacer una medición
w.

ma cerebral e hipertensión intracraneal, que es resultado del tra­ precisa de la concentración sanguínea de COHb al morir el suje·
sudado excesivo por capilares hipóxicos. Finck (1966) ha cata­ too Estos datos son de interés medicolegal.
ww

logado los cambios patológicos macroscópicos observados en Si la persona en reposo inspira aire ambiente, el contenido de
351 casos mortales de intoxicación accidental por CO; los casos CO en su sangre disminuirá, con una vida media de 320 mino Si
prontamente mortales se caracterizaron por congestión y hemo­ el aire se sustituye por oxígeno puro (100%), la cifra disminuirá
rragias de todos los órganos. En situaciones más prolongadas a 80 min; en un medio hiperbárico la vida media puede ser me­
que culminaron finalmente en la muerte, las lesiones hipóxicas nor de 25 min (Peterson y Stewart, 1970). Estos hechos aportan
observadas dependieron de la duración de la inconsciencia los principios básicos para el tratamiento de la intoxicación por
poshipóxica. monóxido de carbono.
Bokonjic (1963) demostró que el periodo máximo de incons­ Tratamiento de la into xica ción por CO. En primer término
ciencia poshipóxica inducida por CO compatible con recupera­ resulta esencial llevar a la víctima a un medio con aire fresco. Si
ción neurológica completa es de 21 h en personas menores de ya no respira, habrá que emprender inmediatamente respiración
48 años y de 11 h en sujetos de mayor edad. No se observó recu­ artificial. Hecho lo anterior, el tratamiento se orienta a suminis­
peración completa de las funciones mentales cuando la incons­ trar cantidades adecuadas de oxígeno a las células corporales, y
ciencia rebasó las 15 h en un grupo de personas ancianas o las apresurar la eliminación del CO. Casi siempre bastará la admi­
'
64 h en un grupo de individuos jóvenes. Es probable que el efec­ nistración rápida de oxígepo puro con una mascarilla perfecta­
to más insidioso de la intoxicación por CO sea la aparición tar­ mente ajustada. AlgunQs clínicos recomiendan dar oxígeno
día de trastornos neuropsiquiátricos, que se manifiestan por eu­ hiperbárico cuando se cuenta con el equipo ,necesario. La base
foria y perturbaciones del juicio, del pensamiento abstracto y de racional (aunque no se ha corroborado inequívocamente) de tal
la concentración (Choi, 1983); algunos clínicos piensan que ni- método es que el oxígeno hiperbárico, además de aportar dicho
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Capítulo 67 Tóxicos ambientales no metálicos 1787

gas en solución para los tejidos, también apresura la disociación Junto con la silicosis pueden surgir otras enfermedades pul­
de COHb. La mejor guía de normalización de la saturación monares, y el sílice puede facilitar su patogenia. Desde hace
apropiada de oxígeno es la función neurológica de la víctima; es mucho tiempo se sabe que la silicosis intensifica y agrava la
posible medir las concentraciones sanguíneas de carboxihemo­ susceptibilidad a la tuberculosis, y también incrementa el peli­
globina como dato de apoyo, para evaluar la eficacia de la oxi­ gro de infección por otros microorganismos.
genación, y los niveles sanguíneos decrecientes de COHb a La asbestosis es consecuencia de la inhalación de polvos de
menos de 10% de la saturación constituyen un punto de corte asbesto por largo tiempo. El asbesto es la sustancia fibrosa com­
terapéutico razonable. Las medidas suplementarias incluyen puesta de minerales de silicato hidratado; se le utiliza amplia­
corrección de la hipotensión y la acidosis, así como vigilancia mente en la industria, porque es material no inflamable, flexible
seriada de la función cardiaca (Tintinalli y col., 1983). y resistente a ácidos y álcalis, y tiene enorme potencia tensil,
Intoxicación por exposición prolongada a bajas concentracio­ baja densidad y gran resistividad eléctrica. El asbesto también
nes de CO. El aparato cardiovascular, en particular el corazón, solía utilizarse para aislamiento, recubrimiento de balatas, y para
es susceptible a los efectos adversos de bajas concentraciones techados, pero su uso ha disminuido por sus efectos nocivos.
de carboxihemoglobina. Con niveles de 6 a 12% de ella, el me­ La asbestosis (una fonna de fibrosis pulmonar) surge por pri­
tabolismo cambia de aerobio a anaerobio (Ayres y col., 1970). mera vez en zonas vecinas a los bronquiolos, donde parecen
Los estudios experimentales y clínicos sugieren que la exposi­ depositarse preferentemente las fibras de mayor longitud del

r
ción a largo plazo al monóxido facilita la aparición de ateroscle­ asbesto. También surge una pleuritis fibrosa en la que la mem·

.a
rosis (Thomsen, 1974). El CO también parece afectar la conduc­ brana pleural se engruesa para rodear el pulmón en una cápsula
ta humana. La realización de pruebas de vigilancia se altera fibrosa rígida. Los síntomas clínicos de la asbestosis se aseme­

om
cuando la COHb llega incluso a 2 a 5%. No obstante, estos nive­ jan a los de la silicosis: disnea, taquipnea y tos. Sin embargo, la
les bajos de COHb tal vez no tengan efecto en otras conductas, tuberculosis no constituye una complicación sobresaliente.
como la de conducción de vehículos, tiempo de reacción, discri­ Entre 20 y 30 años después de la exposición inicial, surge

s.c
minación temporal, coordinación, procesos sensoriales y tareas cáncer broncógeno por la inhalación de asbesto. la cual, en com­
intelectuales complejas (National Research Council, 1977). binación con la inhalación del humo de cigarrillos, aumenta ex­
El feto puede ser extraordinariamente susceptible a los efec­ traordinariamente la incidencia de cáncer pulmonar, en un grado
ico
tos del monóxido de carbono, el cual cruza fácilmente la placen­ que rebasa el peligro que conlleva cada uno de los factores por
ta. Los hijos de mujeres que han sobrevivido a la exposición sí solo (Selikoff y Hammond, 1979). El mesotelioma, un cáncer
breve a una concentración alta del gas durante el embarazo, sue­ mortal a muy breve plazo, también guarda relación con la expo­
ed

len mostrar secuelas neurológicas y pueden sufrir lesión cere­ sición a las fibras de asbesto de crisólito, y puede aparecer en la
bral grave (Longo, 1977). Los niveles persistentemente bajos de pleura o el peritoneo 25 a 40 años después de la exposición ini­
sm

COHb en el feto de una mujer que ha fumado durante el embara­ cial (Selikoff y Harnmond, 1979). En Turquía, una incidencia
zo también pueden influir en el desarrollo del sistema nervioso alta de mesotelioma se ha atribuido a la tremolita fibrosa del
central (SNC). estuco y las lechadas con que se blanquean los muros de las
te

La policitemia surge en el curso de la exposición a largo pla­ casas. Así pues, aunque esta neoplasia no parece ser una reac­
zo al monóxido de carbono. Es probable que aparezcan otros ción específica al asbesto, cualquier material fibroso natural o
un

mecanismos compensatorios, aunque no se han demostrado. Los sintético con fibras de dimensiones similares puede ser carcinó­
sujetos sanos son extraordinariamente reactivos al estrés de la geno (Elmes, 1980). No obstante, salvo la inhalación prolonga­
da de material fibroso y la fuerte sospecha de un mayor riesgo
ap

hipoxia, y la compensan de inmediato, por incremento del gasto


cardiaco y el flujo a órganos de máxima importancia. Los indi­ en personas que viven muy cerca de instalaciones industriales
viduos con enfermedad cardiovascular significativa son más cuyas emisiones contienen arsénico, son muy pocas las pruebas
w.

vulnerables a la intoxicación por CO, porque tal vez no puedan convincentes de que la contaminación del aire- contribuya al pe­
hacer compensaciones de la hipoxia (Stewart, 1975). ligro de cáncer (Kaplan y Morgan, 1981).
ww

Otras muchas neumopatías ocupacionales son causadas por


Partículas. Las neumoconiosis son una categoría de enfenne­ la inhalación a largo plazo de polvos que contienen minerales o
dades causadas por inhalación de polvos y el cuadro más común sustancias orgánicas; entre ellas están la neumoconiosis de los
de este tipo os la silicosis. Después del oxígeno, el silicio es el mineros del carbón (enfermedad del pulmón negro), la aluminosis
elemento más abundante en el planeta; cerca de 60% de las rocas (pulmón por bauxita; enfermedad de Shaver), la baritosis (por
de la corteza terrestre contienen silice, y en muchas industrias bario), la beriliosis, la bissinosis (por el algodón) y otras (Speizer,
abundan los polvos de esta sustancia, particularmente en la ex­ 1983).
plotación minera de oro, hierro y carbón mineral, pero también
en la cantería y en tareas de limpieza con chorro de arena. Las
partículas mayores de 10 ¡.¡,m tienen poca importancia clínica,
SOLVENTES Y VAPORES
porque raras veces llegan a los alveolos; las menores de 2 a 3,um
son fagocitadas por macrófagos alveolares, células que al final
Parte común del entorno son los solventes orgánicos y sus
son destruidas. Otros macrófagos proliferan y emigran a los si­
tios de reacción. Los nódulos silicóticos que aparecen por las
vapores. La exposición breve y accidental a concentracio­
reacciones mencionadas están distribuidos de manera unifonne nes pequeñas de los vapores de solventes como gasolina,
en ambos pulmones. Se necesitan lOa 25 años para que surja la líquido de encendedores, aerosoles y quitamanchas, pue­
neumoconiosis. Al aumentar la masa de tejido fibrótico disminu­ de ser relativamente innocua; sin embargo; la exposición
ye la capacidad vital y el enfermo muestra falta de aire (disnea). a sustancias para quitar pinturas, agentes de limpieza de
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1788 Sección XVII Toxicología

suelos y mosaicos, y otros solventes del hogar y la indus­ o


tria, puede ser peligrosa. Además, tal vez sea inadecuada 11
CH,-C-CH,-CH,-CH,-CH,
la forma de desechar muchas de estas sustancias, lo que
determina que haya fugas o filtraciones desde los vertede­ metil
ros para sustancias tóxicas, que entonces contaminan el n-butil cetona
••••••••••••••••••
agua potable. Innumerables trabajadores de la industria
están expuestos a solventes y vapores tóxicos, por lo que CH,-C-CH,-CH,-CH,-CH-CH,
se han hecho esfuerzos importantes por precisar los nive­ n-hex ano
les "seguros" de exposición. En el caso de los contami­
nantes almosféricos se han definido valores limitrofes de o OH
umbra l (TLV) o concentraciones máximas permisibles 11 1
(MAC); un TLV representa la concentración en la cual casi CH,-C-CH,-CH,-CH-CH,
todos los trabajadores pueden estar expuestos inocuamente 5-hidroxi·
durante un lapso de ocho horas cinco veces por semana y 2-hexanona

r
durante toda una vida de exposición laboral.

.a
Gases anestésicos, solventes y fluorohidrocarburos (uti­
lizados como propelentes en productos de aerosol) causan O O

om
11 11
efectos subjetivos si se inhalan, y por esta razón suelen ser CH,-C-CH,-CH,-C-CH,
objeto de abuso. Esta práctica peligrosa, que ha ocasiona­
2,5-hexanodiona
do innumerables muertes, se expone en el capítulo 24.

s.c
Fig. 67-3. Melll.boUsmo del heJUlno.
Hidrocarburos alifáticos
El n-hexano y la metil n-butil cetona (2-hexanona) son neurotóxicos
ico
Hidrocarburos allfáticos de. y ambos son activados por w-l oxidación hasta el metabolito tóxico
final, 2,5-hexanodiona.
drocarburos de cadena recta con cuatro o menos átomos de car­
ed

bono aparecen en el gas natural (metano o etano) y en el gas


envasado para uso doméstico (propano o butano). El metano y
el-etano son ""asfixiantes simples", y sus efectos se observan
sm

s610 cuando su concentraci6n en el aire es tan alta que disminu­ Gasolina y queroseno. La gasolina y el queroseno, que son
ye la cantidad de oxigeno; no producen síntomas sistémicos. destilados de petróleo preparados por fraccionamiento del cru­
do, contienen hidrocarburos alifáticos, aromáticos y otros, rami­
te

Hidrocarburos aUfáticos de cinco a ocho carbonos. Los hi­ ficados y no saturados. Se les utiliza como combustibles para
drocarburos alifáticos de peso molecular más alto, como mu­ iluminar, calentar, y mover motores, y como vehículo de plagui­
un

chos solventes orgánicos, deprimen el sistema nervioso central cidas, agentes de limpieza y solventes de pinturas. A menudo se
(SNC) y causan mareos e incoordinación. Sin embargo, la poli­ almacenan en recipientes que originalmente fueron de bebidas,
ap

neuropatía es la reacci6n tóxica primaria al n-hexano, solvente por lo que constituyen una causa frecuente de intoxicación acci­
de uso amplio (USEPA, 1988); se observó por primera vez en el dental en niños. Un aspecto preocupante de la exposición a lar­
Japón, donde 93 personas que trabajaban en la fabricación de go plazo a la gasolina es qne contiene cerca de 2% de benceno y,
w.

sandalias sufrieron una reacción t6xica al usar un pegamento de esta manera, tiene la posibilidad de causar leucemia.
que contenía por lo menos 60% de n-hexano (Iida y col., 1973). La intoxicación por ingestión de gasolina y queroseno se ase­
ww

La 2-hexanona (metil n-butil cetona) produce cambios neuroló­ meja a la del alcohol etilico. Sus signos y sintomas consisten en
gicos similares a los del n-hexano. incoordinaci6n, inquietud, excitación, confusión, desorientación,
Ambos son metabolizados en 2,5-hexanodiona, que es el ataxia, delirio y, por último, coma. que puede durar horas o dias.
metabolito tóxico final (fig. 67-3). Este último se liga a grupos La inhalación de concentraciones altas de vapores de gasolina,
amino de las fibras nerviosas, forma agregados, y causa turgen­ como la que sufren los trabajadores que limpian tanques de de­
cia de los axones (Anthony y Graham, 1991). Los síntomas cli­ pósito, puede causar la muerte inmediata. Los vapores mencio­
nicos consisten en disfunción sensorial simétrica de las regio­ nados sensibilizan al miocardio, al grado que cantidades muy
nes distales de las extremidades, que evoluciona a debilidad pequeñas de adrenalina circulante pueden desencadenar fibrila­
muscular en dedos de pies y manos, y pérdida de los reflejos ción ventricular; muchos hidrocarburos poseen esta acción. Las
sensoriales profundos. Antes de que surjan los síntomas (Seppa­ concentraciones altas de vapores de gasolina también ocasionan
lainen, 1982) disminuye la velocidad de conducción nerviosa. depresión rápida del SNC y muerte por insuficiencia respirato­
Aunque la recuperación suele ser lenta, el pronóstico es en ge­ ria. Si se inhalan por varias horas concentraciones altas, puede
neral satisfactorio, excepto en individuos con lesiones muy gra­ ocurrir neumonitis.
ves (Graham y col., 1987). La biotransformación del n-hexano La intoxicación por estos hidrocarburos es consecuencia de
en 2-hexanona y de ahí en 2,5-hexanodiona mediada por cito­ inhalación de los vapores o de ingestión de la forma liquida.
cromo P450, parece ser el punto de partida de la neuropatia pe­ Esta última forma es la más peligrosa, porque los liquidos tie­
riférica ocasionada por exposición a estos solventes (Couri y nen baja tensión superficial y pueden ser broncoaspirados más
Milks, 1982). fácilmente en vías respiratorias por vómito o eructos. La morbi-
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Capítulo 67 Tóxicos ambientales no metálicos 1789

lidad se atribuye a broncoaspiración en el momento de la inges­ solubles en lípidos, por lo que se absorben fácilmente des­
tión o durante el tratamiento. El daño a los pulmones no es con­ pués de inhalación o ingestión. A semejanza de muchos
secuencia de absorción de la gasolina o del queroseno en las otros solventes orgánicos, los compuestos de este tipo de­
vías gastrointestinales. La secuela más grave de la broncoaspi­
primen las funciones del SNC.
ración es la neumonitis química complicada por neumonía bac­
teriana y edema pulmonar secundarios. El sujeto muere por ede­
ma pulmonar hemorrágico en término de 1 6 a 1 8 h, Y rara vez Tetracloruro de carbono (CC,,). Este solvente se ha utiliza­
después de 24 h de ocurrida la broncoaspiración. do con fines médicos, y alguna vez se empleó como quitaman­
En la necropsia, el estudio de los tejidos indica que los pul­ chas y limpiador de alfombras; sin embargo, ya no se le usa con
mones están pesados, edematosos y tienen hemorragia. Los al­ tales fines, porque se cuenta con otros medios más seguros. No
veolos están llenos de un exudado en el que abundan proteínas, obstante, se le utiliza todavía en la fumigación de granos y como
células y fibrina, a menudo en un patrón que recuerda el de la insecticida
enfermedad de membrana hialina. Las paredes alveolares están La exposición transitoria a concentraciones tóxicas de vapo­
debilitadas y pueden romperse, lo cual ocasiona secuelas menos res de CCL. ocasiona los síntomas siguientes: irritación de ojos,
frecuentes, como enfisema y neumotórax. Hay inflamación de vías nasales y faringe; náusea y vómito; sensación de plétora
ganglios linfáticos pulmonares, y se han señalado bronconeu­ cefálica; mareo, y cefalalgia. Si la exposición termina pronto, en

r
monía y atelectasia. cuestión de horas desaparecen los síntomas. La exposición con­

.a
Las medidas sintomáticas y de apoyo quizá constituyan el tinua, o la absorción de mayores cantidades de tetracloruro, pue­
tratamiento más adecuado contra la intoxicación por gasolina o den causar estupor, convulsiones, coma o muerte, por depresión

om
queroseno (Ervin, 1983; Gosselin y col., 1984). Dado el riesgo del SNC. El sujeto puede morir repentinamente por fibrilación
de broncoaspiración, es mejor no inducir el vómito ni hacer la­ ventricular o depresión de los centros vitales del bulbo raquídeo.
vado gástrico, salvo que lo justifique la presencia de otras sus­ Entre las efectos tóxicos tardíos del CCl4 están náusea, vómi­

s.c
tancias tóxicas en el petróleo. La catarsis puede inducirse con to, dolor abdominal, diarrea y hematemesis. Los efectos más
sulfato de magnesio o de sodio. Si hay indicaciones específicas, graves de este tipo son consecuencia de sus efectos hepatotóxicos
como neumonitis bacteriana, se podrá recurrir a los antibióticos. y nefrot6xicos. Después de varias horas, o hasta dos ó tres días,
ico
Es mejor no usar adrenalina ni sustancias similares, porque in­ pueden surgir sigoos y síntomas de daño hepático, sin que ha·
ducen arritmias. El tratamiento debe incluir la corrección de los yan aparecido efectos intensos más tempranos en el SNC. Los
desequilibrios hidroelectrolíticos. datos bioquímicos de daño hepático suelen incluir incremento
ed

La exposición a largo plazo a la gasolina se ha vueltu un be­ extraordinario de las actividades de transaminasas y otras enzi­
cho preocupante, porque innumerables tanques de depósito de mas hepáticas en plasma. Sin embargo, hay muy poco aumento
sm

este líquido que se ubican bajo tierra tienen fugas y filtraciones, de la actividad de fosfatasa alcalina. Las principales anormali­
y su contenido al final puede contaminar el agua potable. dades histológicas son esteatosis y necrosis centrilobulillar del
hígado.
te

Muchos investigadores han estudiado el mecanismo de la le­


Hidrocarburos halogenados sión hepática inducida por CC" (Kalf y col., 1987) y el com­
un

puesto se ha vuelto la sustancia "de referencia" de todos los pro­


Las excelentes propiedades como solventes y la poca ca­ ductos hepatotóxicos. La lesión producida por el tetracloruro
parece ser mediada por Wl metabolito reactivo, el radical libre
ap

pacidad de ignición de los hidrocarburos halogenados, les


han convertido en solventes industriales de uso muy am­ triclorometilo (·CCI,), formado por el desdoblamiento homolítico
de CCL., o incluso especies más reactivas, como el triclorome­
plio. Algunos hidrocarburos de bajo peso molecular apa­
w.

tilperoxi (Cl,COO-), formado por la reacción de CCI, con O,


recen en el agua potable; de ellos, unos cuaotos, como clo­
(Slater, 1982). Esta biotransformación es catalizada por la mono­
roformo, bromodiclorometano, dibromoclorometano y
ww

oxigenasa, que depende del citocromo P450. De este modo, agen­


bromoformo son producidos por precursores nalurales tes como DDT y fenobarbital, que inducen la actividad de di­
duraote la c!oración del agua; otros, al parecer, no surgen chas enzimas, intensifican en grado extraordinario los efectos
en dicho tratamiento, como son el tetracloruro de carbono, hepatotóxicos del tetracloruro de carbono. Por lo contrario, agen­
el diclorometano y el 1,2-dicloroetaoo. La filtración o el tes que inhiben la actividad farmacometabolizante disminuyen
tratamiento del agua con carbón vegetal aotes de su c1ora­ la hepatotoxicosis del tetracloruro. La biotransformación de este
ción aminoran eficazmente la formación de hidrocarburos producto hacia sustancias intennedias reactivas es una reacción
clorados. Sin embargo, los hidrocarburos halogenados reductora y no oxidativa. En consecuencia, se retarda cuando
abundao en sitios donde se acumulao desechos tóxicos, de las tensiones de oxígeno son altas.
Se piensa que la intoxicación por tetracloruro de carbono se
modo que pueden contaminar los abastos de agua potable.
produce por reacción de radicales libres (·CC!, o C!,COO-) con
Se ha demostrado que algunos de estos compuestos son
lípidos y proteínas; sin embargo, en la génesis de la lesión es
carcinógenos en aoimales, y se hao señalado correlacio­
punto de controversia la importancia relativa de las interaccio­
nes entre la c10ración del agua y la incidencia de cáncer de
nes con diversos constituyentes tisulares. El radical. libre causa
colon, recto y vejiga; por ambas razones es motivo de pre­ la peroxidación de los lípidos polieno!cos del ret!culo endoplás­
ocupación la exposición de un porcentaje grandísimo de mico y la generación de radicales libres secundarios derivados
la población a estas sustancias en el agua para beber de tales lípidos, lo que constituye una reacción en cadena. Esta
(Menzer, 1991). Los hidrocarburos halogenados son muy peroxidaci6n destroctiva de lípidos culmina en la rotura de la
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1790 Sección XVII Toxic% gio

estructura de la membrana y pérdida de su funci6n, y si se con­ cial hepatotóxico es máximo en el clorofonno y el 1,1 ,2-triclo­
sume una cantidad suficiente de CCL, aumenta el calcio cito­ roetano y mínimo en el tricloroetileno, el tetracloroetileno, el
plásmico intracelular, lo que culmina en la muerte de la célula 1 , 1 , l -tricloroetano y el diclorometano; 'el clorofonno puede ser
(Plaa, 1991; Kalfy col., 1987; Recknagel y col., 1989). Con la hepatotóxico, porque se metaboliza en fosgeno (Pohl y col.,
peroxidación de lípidos se forma una serie peculiar de metaboli­ 1978). También son nefrotóxicos cloroformo, 1, 1,2-tricloroetano
tos no enzimáticos del ácido araquidónico, llamados isoprosta­ y tetracIoroetileno. El 1, 1 , l -tricloroetano, el tetracloroetileno y
nos, un fenómeno similar al de la hepatotoxicosis inducida por el tricloroetileno, dado que producen menos daño orgánico
el tetracloruro en animales de laboratorio; los agentes en cues­ que el tetracloruro de carbono y el c1orofofmo, se usan amplia­
tión pueden ser de utilidad diagnóstica para identificar la pe­ mente como agentes de lavado en seco y solventes industriales,
roxidación de lípidos en seres humanos (Morrow y col., 1990, y el diclorometano COmo removedor de pinturas. Este último
1994; Roberts, 1994). tiene un efecto tóxico adicional, porque se metaboliza en mo­
Los sujetos que se recuperan de los efectos de la ingestión nóxido de carbono por acción del citocromo P450 (Kubic y
aguda de etanol parecen más susceptibles 8 las propiedades Anders, 1975). Muchos de estos solventes de hidrocarburos c10-
hepatotóxicas de los hidrocarburos halogenados. Otros alcoho­ rados producen cáncer hepático en ratones, efecto que no se ha
les, como el isopropanol, tienen una capacidad todavía mayor demostrado en seres humanos (Williams y Weisburger, 1985).
de potenciar los efectos del tetracloruro (Plaa, 1991); esta inte­ Entre 1961 y 1980 se notificaron en Inglaterra 330 casos de

r
.a
racción entre el isopropanol y el CCI, se manifestó claramente intoxicación y 1 7 de muerte causados por inhalación de tricloro­
en un accidente industrial registrado en una planta de envasado etileno, tetracloroetileno y l , l , l-tricloroetano, que son los tres

om
de isopropanol donde los trabajadores expuestos a ambos agen­ solventes de uso más común en la industria (McCarthy y Jones,
tes sufrieron daño notable (Folland y col., 1976). 1983). Los fallecimientos Se debieron a narcosis profunda,
Al surgir la lesión hepática también se observan a veces sig­ broncoaspiración de vómito durante la anestesia, o arritmias

s.c
nos de lesión renal, que pueden predominar en el cuadro cHnico. (Jones y Winter, 1983). No se observaron signos de hepatotoxi­
En seres humanos la intoxicación leve se distingue por una oli­ cosis. La exposición a concentraciones altas de tric1oroetileno
guria reversible que dura unos cuantos dias. En la intoxicación se ha relacionado con neuropatia del trigémino (Annau, 1981), y
ico
no mortal se ha señalado que la normalización de la función renal la exposición a largo plazo de trabajadores a solventes hidrocar­
se produce en tres fases. En la primera, después de uno a tres días
_ buros halogenados ha ocasionado alteraciones conductuales
cede la oliguria, pero permanecen altas las concentraciones de (Annau, 198 1 ; Lindstron, 1982).
ed

creatinina y urea en plasma. La segunda comienza con la dismi­ Los hidrocarburos clorados, a semejanza de los clorofluoro­
nución rápida de ambos metabolitos en sus concentraciones plas­ carbonos, tienen un efecto nocivo en la capa de ozono que pro­
máticas. En la tercera fase, un mes después de la lesión inicial
sm

tege al planeta de la radiación solar. Por tanto, ha disminuido el


comienzan a mejorar el flujo sanguineo y la filtración glomeru­ empleo de dichas sustancias, en cumplimiento del Protocolo de
lar, y se restablece la función renal después de lOO a 200 dias. Montreat, un acuerdo internacional para eliminar el uso de sus­
te

El tratamiento de urgencia de la intoxicación por CCl4 debe tancias químicas que deterioran esa capa protectora.
iniciarse de inmediato en toda persona en quien se sospeche ab­
un

sorción de cantidades tóxicas del pr9ducto. El sujeto expuesto a


vapores tóxicos debe ser trasladado a un sitio con aire fresco. La Alcoholes alifáticos
descontaminación de vías gastrointestinales se emprenderá con
ap

arreglo a la situación clínica; el mejor compuesto para este fin Las características del etanol se exponen en el capitulo 1 7.
es, tal vez, el carbón vegetal activado. Si el paciente se presenta
w.

en la etapa de depresión avanzada del SNC, se hará todo esfuer­ Metano!. El metanol (alcohol metílico o de madera) es
zo por evitar la hipoxia. Por ningún concepto se utilizarán fár­
un solvente industrial de uso común; se le utiliza también
macos simpaticomiméticos, dado el peligro de producir arrit­
ww

como líquido anticongelante, solvente para lacas y algu­


mias graves en el miocardio sensibilizado.
Es dificil tratar las insuficiencias agudas hepática y renal cau­
nas pinturas y barnices, y entra en la composición de
sadas por el tetracloruro de carbono. La insuficiencia hepática removedores de pintura. Los combustibles sólidos enva­
es un signo notable de la intoxicación por este compuesto, pero sados contienen metanol. Como sustancia adulterante, hace
la insuficiencia renal es la causa más frecuente de muerte. A perder su potabilidad al etanol (alcohol de caña), lo que
pesar de que signos y síntomas iniciales pueden acompañar a las libera a éste de cargas impositivas, de modo que pueda
deficiencias funcionales del hígado, hay que examinar con todo utilizarse para limpieza, eliminación de pinturas y otros
cuidado la función renal y prever el surgimiento de oliguria o fines, sin incurrir en mayores costos.
anuria. \La absorción y distríbución del metanol y el etanol son
semejantes. Además, el prímero es metabolizado en los seres
Otros hidrocarburos halogenados. Productos como clorofor­
humanos por las mismas enzimas que metabolizan el se­
mo, diclorometano (cloruro de metileno), tricloroetileno, tetra­
gundo (deshidrogenasas de alcohol y de aldehído) hasta
cloroetileno (percloroetileno), 1,1, I -tricloroetano y 1,1,2-triclo­
roetano, producen muchos de los mismos efectos tóxicos que el
formar productos intermedios tóxicos que son el formalde­
tetracloruro de carbono (Von Oettingen, 1964). Todos estos com­ hído y el ácido fórmico (fig. 67-4) (Tephly y col., 1 974,
puestos causan depresión del SNC y algunos se han utilizado 1 979). La oxidación del metanol, a semejanza de la del
como anestésicos de inhalación. También pueden sensibilizar el etanol, se produce a una tasa que es independiente de su
corazón a la aparición de arritmias por catecolaminas. El poten- concentración en la sangre. Sin embargo, esta tasa es sólo
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Capítulo 67 Tóxicos ambientales no metálicos 1791

Metanol
1
H

H - C - OH NAD+
alcohol
d••hidroS,na..
(fase cinetico·
� Lactato
ción es lenta, superficial y jadeante ("en boca de pescado"). La
muerte, que suele depender de insuficiencia respiratoria, puede
ser repentina o sobrevenir después de muchas horas de coma.
En la necropsia se ha observado necrosis pancreática, y se
piensa que el daño del páncreas causa el intenso dolor abdomi­


imitante)
NADH Piruvato nal característico de la intoxicación por metanol (Kaplan, 1962).
+ Las alteraciones de la vista, que son el signo más característi­
co de la intoxicación por este alcohol en seres humanos, se ad­
Formaldehído
vierten al poco tiempo de comenzar la acidosis. Son característi­
cos signos como midriasis, con pupilas no reactivas y oscuridad
alcohol
d••hidrogens., visual. La lesión ocular, que afecta más bien las células ganglio­
R
. "' ;:lt l,
' ,,', .
(rápIda) nares de la retina, es una inflamación destructiva, seguida de


atrofia. A corto plazo la retina está congestionada y edematosa,
H, dependiente de pH H \ y puede haber borramiento de los bordes del disco óptico (Gosse­
C=O , C=O lin y col., 1984). El resultado final es una ceguera bilateral que
HoI -01
suele ser pennanente. Los efectos tóxicos en los ojos parecen

r
Acido fórmico Formiato
deberse específicamente al incremento de las concentraciones

.a
de ácido fónnico, que a su vez guarda relación con la disminu­
dependiente de folato
1991). La muerte por

om
(fase lenta) ción del tetrahidrofolato hepático (Tephly,
metanol casi siempre va precedida de ceguera. Se sabe que in­
cluso 1 5 mi del alcohol mencionado han causado ceguera, y la
CO,+H,O ingestión de 70 a 100 mi por lo regular es mortal, salvo que se

s.c
emprenda tratamiento.
Fíg. 67-4. Metabolismo de metanol hasta generar intermediarios tóxi­ Se piensa que la gravedad de casi todos los síntomas de la
cos que son el forma/dehido y el ácido fórmico.
ico
intoxicación por metanol es proporcional a la acidosis, y la co­
rrección de esta última constituye el fundamento de la terapia
apropiada. Además, la inhibición del metabolismo del metanol
ed

disminuye las concentraciones de fonnaldehído y ácido fórmico


la séptima parte de la correspondiente a la oxidación del en la sangre, con 10 cual aminora la toxicidad; ello se logra con
etanol, y por lo común se necesitan varios días para que etanol, que actúa como sustrato competitivo. El etanol tiene una
sm

haya oxidación y excreción completa del alcohol de madera. afinidad 100 veces mayor por la alcohol deshidrogenasa, que el
metanol y, por ello, la competencia por parte del primero resulta
El metanol ocasiona menos ebriedad que el etanol y, de
eficaz. En la práctica es óptima una concentración de 1 g de
te

hecho, este signo no es importante en la intoxicación por


etanol por litro de sangre. La dosis inicial (0.6 glkg) debe admi­
alcohol metílico, salvo que se consuma una cantidad muy nistrarse tan pronto se corrobore el diagnóstico de la ingestión
un

grande o se ingiera además etanol. Hay un periodo de la­ notable de metanol, y se comienza la venoclisis con etanol (unos
tencia asintomático de ocho a 36 h antes de que surjan los 10 glh en el adulto), para conservar la concentración deseada. A
ap

síntomas de intoxicación. Si el sujeto bebió etanol simul­ la brevedad posible se emprenderá hemodiálisis después de la
táneamente en volúmenes suficientes, puede retrasarse en administración de etanol, en sujetos en acidosis o que presenten
grado extraordinario, y a veces incluso "abortarse", la apa­ concentraciones sanguíneas de metanol mayores de 500 mglL.
w.

rición de signos y síntomas de la intoxicación por metanol. La diálisis eH.mina el metanol y corrige la acidosis, que puede
En tales casos es notoria la intoxicación por etanol, y qui­ ser rebelde a la administración de bicarbonato. El etanol tam­
ww

bién será eliminado por la diálisis, por 10 que hay que incremen­
zá no se sospeche que el sujeto ingirió metanol.
tar la velocidad de su goteo en unos 6 gIb. El 4-metilpirazol es
Los principales signos y síntomas de la intoxicación por
un inhibidor específico de la alcohol deshidrogenasa, y se le ha
metanol son cefalalgia, vértigo, vómito, dolor intenso en la
utilizado como antídoto en animales de experimentación (Mc�
mitad superior del vientre, dorsalgia, disnea, inquietud Martin y col., 1980). Con el fin de intensificar el metabolismo
motora, extremidades frías y sudorosas, visión borrosa e del ácido fórmico (Noker y col., 1980), se han usado también el
hiperemia del disco óptico. Por 10 común no se modifica la ácido fólico y su metabolito activo leucovorina. Después de la
presión arterial. El pulso es lento en pacientes muy graves. intoxicación por metanol puede haber daño neurológico, que se
caracteriza por una disfunción motora pennanente semejante a
El dato más notable de estudios de laboratorio es la profunda la del mal de Parkinson (LeWitt y Martin, 1988); la levodopa
acidosis metabólica, con diferencia aniónic3, resultante de la puede aliviar la rigidez y la hipocinesia (Guggenheim y col.,
oxidación del metanol en e l ácido fórmico que se acumula 1971 ) .

(McMartin y col., 1977; Jacobson y McMartin, 1986). También


son manifiestas la cetonemia y la cetonuria moderadas. A pesar
de la acidosis profunda, no es frecuente observar respiración de Isopropanol. El isopropanol utilizado para "frotar" en
Kussmaul, a causa de la depresión respiratoria ocasionada por lociones de manos y en preparados descongelantes y
la intoxicación. Puede surgir con rapidez asombrosa coma en anticongelantes, a veces es causa de intoxicación acciden­
sujetos relativamente asintomáticos. En moribundos, la respira- tal o intencional. A semejanza del etanol y el metanol, el
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1792 Sección XVIi Toxicología

isopropanol es un depresor del sistema nervioso central, depresión inicial del SNC; al parecer, la nefrotoxicosis es
pero no ocasiona daño retiniano ni la acidosis que produce producida por el oxalato y otros productos intermediarios.
el metanol. En la orina suelen identificarse los típicos cristales de
En adultos, la probable dosis letal del isopropanol es de oxalato de calcio, lo que pudiera ser una pista temprana
unos 250 mi en una solución al 95% de peso por volumen; para el diagnóstico de intoxicación por etilenglicol. Los
de este modo es más tóxico que el etanol. Los signos y los ácidos glicólico y láctico son la causa de casi todos los
síntomas de la intoxicación por este alcohol se asemejan a casos de acidosis metabólica (Gabow y col., 1 986).
los que causa el etanol, aunque con diferencias notables. El tratamiento específico de la intoxicación por etilen­
El isopropanol produce gastritis más intensa, con dolor, glicol es semejante al que se hace en la intoxicación por
náusea, vómito y hemorragia. Un peligro grave es el vó­ metanol (Gosselin y col., 1984). La acidosis metabólica es
mito con broncoaspiración, y también una complicación tratada con soluciones de bicarbonato de sodio. El etanol
. peligrosa. La intoxicación por isopropanol dura más tiem­ se utiliza como sustrato competitivo de la alcohol deshi·
po, porque el compuesto es oxidado con mayor lentitud drogenasa para disminuir la tasa de formación de metabo­
que el etanol (Gosselin y col., 1 984), y porque su principal litos tóxicos. E1 4-metilpirazol, que es un inhibidor experi­

r
metabolito, la acetona, también deprime el sistema ner­ mental más eficaz de la alcohol deshidrogenasa, puede ser

.a
vioso. El diagnóstico se refuerza por la cetoacidosis y la mejor que el etanol (Baud y col., 1988). La hemodiálisis
presencia de cetonas en orina (sin glucosuria). Como en el resulta eficaz para eliminar el etilenglicol no metabolizado

om
caso de otros alcoholes, la hemodiálisis es útil para elimi­ y para corregir la acidosis. Se recomienda la administra­
nar el isopropanol del cuerpo. ción parenteral de calcio para combatir los espasmos mus­
culares que a veces surgen por la quelación del calcio por

s.c
el oxalato formado en la biotransformación del etilenglicol.
Glicoles ico
Dietilenglicol. El compuesto en cuestión (HOCH,CH,.
Además de su empleo en el intercambio calórico en fór­ OCH,CH,OH) se utiliza en lacas, cosméticos, anticonge·
mulas anticongelantes, liquidos hidráulicos e intermedia­ lantes y lubricantes, y como agente reblandecedor y plasti­
ed

rios químicos, los glicoles se utilizan como solventes en ficante. Su toxicidad planteó un problema importante sólo
productos farmacéuticos, aditivos de alimentos, cosméti­ cuando se usó en el decenio de 1930 como solvente en la
sm

cos y lacas. preparación de sulfanilamidas. En un incidente ocurrido


en esa época, 105 de 353 niños que ingirieron el preparado
Etilenglicol. El etilenglicol (HOCH,CH,OH) se utiliza de sulfanilamida-dietilenglicol fallecieron de lesión renal.
te

ampliamente como anticongelante en radiadores de auto­ Los efectos de este glicol se asemejan a los del etilenglicol,
móviles, y es precisamente en esta formulación como oca­ y el tratamiento de su intoxicación es similar.
un

siona la mayor parte de casos de intoxicación, por la in­


gestión del producto. A semejanza del etanol, el etilenglicol Propilenglicol. Las propiedades fisicas del propilengli­
ap

produce depresión del sistema nervioso central. Los indi­ col (CH,CHOHCH,OH) son semejantes a las del etilen­
viduos que lo ingieren en grandes cantidades caen en glicol, pero es mucho menos tóxico. Por esa razón, esta
w.

narcosis, que a su vez puede ocasionar coma y muerte. sustancia se utiliza como solvente en fármacos, cosméti­
Además de la depresión del SNC, el etilenglicol produce cos, lociones y ungüentos; en productos alimenticios; como
ww

lesión renal grave, y casi todas las víctimas muestran insu­ plastificador; en fórmulas anticongelantes; en el intercam­
ficiencia renal aguda. Los individuos que fallecen de ure­ bio calórico, y en líquidos hidráulicos. A semejanza del
mia tienen nefropatía intensísima, que causa destrucción etanol, su acción farmacológica primaria es deprimir el
de células epiteliales, edema intersticial, necrosis hemo­ SNC; sin embargo, su eliminación es más lenta y su efecto
rrágica focal de la corteza renal, degeneración hidrópica más prolongado.
extensa, innumerables cilindros celulares y cristales de
oxalato en los tubos contorneados (Gosselin y col., 1 984). Glicoléteres. Son componentes de películas, material de
La etapa inicial en la oxidación del etilenglicol en aislamiento en cables de alto voltaje, pinturas, barniz
monoaldehído (glicoaldehído) es mediada por la alcohol de uñas, descongelantes de combustibles, tintas y otros
deshidrogenasa; la oxidación del glicoaldehído al metabo­ productos, y se utilizan en la producción de semicon·
lito ácido más importante que es el ácido glicólico, es ductores. La inhalación prolongada del monometiléter y
catalizada por la aldehído deshidrogenasa. Ambas fases el monoetiléter de etilenglicol por parte de animales de
oxidativas producen NADH a partir de NAD, y así cam­ laboratorio induce atrofia testicular e infecundidad
bian el potencial redox y facilitan la producción dtlactato (Andrews y Snyder, 1991). Además, estos glicoléteres son
a partir de piruvato. El ácido glicólico se metabolíza aún teratógenos en ratas y conejos. Ambos glicoléteres de
más hasta dar ácido glioxílico y después ácido oxálico etileno son metabolizados por la alcohol deshidrogenasa
(HOOCCOOH). Es probable que el etilenglicol cause la hasta dar alcoxiácidos. Dado que el ácido metoxiacético
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Capítulo 67 Tóxicos ambientales no metálicos 1793

también produce toxicosis testicular en ratas macho, los tes y lacas, y como sustancia química intermedia en la sín­
alcoxiácidos parecen ser los que causan este efecto tóxi­ tesis de compuestos orgánicos. Deprime al sistema ner­
co. En cambio, el monometiléter de propilenglicol, que es vioso central y en concentraciones pequeñas ocasiona fa­
un sustrato inadecuado de la alcohol deshidrogenasa, no tiga, debilidad y confusión. A los efectos de solventes como
produce atrofia testicular. el tolueno en el sistema nervioso central, se debe la adic­
ción a inhalar los vapores de los cementos o adhesivos
para calzado. A diferencia del benceno, el tolueno no pro­
Hidrocarburos aromáticos duce anemia aplásica ni leucemia. Sin embargo, en el ad­
hesivo los solventes suelen estar mezclados, de modo
Benceno. El benceno es un solvente excelente; se le uti­ que la persona que inhala estos productos suele exponerse
liza ampliamente en la síntesis de productos químicos y es a otros solventes además del tolueno.
un constituyente natural de los combustibles para automó­
vil. Sin embargo, es una sustancia muy tóxica.
Después de la exposición breve a una gran cantidad de PLAGUICIDAS
benceno por ingestión o por la inhalación de vapores con­

r
La clasificación general de plaguicida comprende produc­

.a
centrados, el principal efecto tóxico se advierte en el siste­
ma nervioso central. Los síntomas ocasionados por expo­ tos de los siguientes tipos: insecticidas, rodenticidas, fun­

om
sición leve incluyen mareos, debilidad, euforia, cefalalgia, gicidas, herbicidas y fumigantes. En Estados Unidos, cada
náusea, vómito, sensación de opresión en el pecho y marcha año se venden más de 453 mil toneladas de plaguicidas,
tambaleante. En la exposición más grave, los síntomas y en el mundo, 2.04 millones de toneladas. Los herbici­

s.c
evolucionan hasta aparecer visión borrosa, temblores, res­ das son los que se venden en mayor cantidad, seguidos por
piración superficial y rápida, irregularidades ventriculares, los insecticidas y los fungicidas. Se elaboran para destruir
parálisis e inconsciencia. alguna forma de vida. La toxicidad selectiva de los pla­
ico
La exposición duradera al benceno suele consistir en guicidas es una característica muy deseable, pero todos
inhalación de vapores o contacto con la piel. Los signos y producen por lo menos alguna intoxicación en seres hu­
ed

síntomas de tal problema incluyen efectos en el SNC y en manos.


vías gastrointestinales (cefalalgia, inapetencia, somnolen­
cia, nerviosismo y palidez), pero la principal manifesta­
sm

ción de intoxicación es la anemia aplásica. Las células de Insecticidas


la médula ósea en etapas incipientes de desarrollo son las
te

más sensibles al benceno (Andrews y Snyder, 1 99 1 ), y la El empleo de insecticidas en la agricultura ha crecido en


detención de su maduración ocasiona agotamiento gradual grado extraordinario desde la Segunda Guerra Mundial;
un

en el número de células circulantes. sin embargo, su uso ha llegado a una fase estacionaria en
Un tema de gran interés es la posible relación entre la los últimos 1 5 años (fig. 67-5). La industria agrícola es la
ap

exposición a largo plazo al benceno y la leucemia (Rinsky que más consume insecticidas, pero también otras los uti­
y col., 1987; Mehlman, 1991). Se han hecho estudios epi­ lizan en grandes cantidades, y su uso dentro del hogar y en
demiológicos en trabajadores de las industrias de los neu­ su alrededor es importante. Suelen quedar restos de insec­
w.

máticos y del calzado, en las cuales se utilizó extensamen­ ticidas en algunos productos agrícolas, y las personas es­
te el benceno. Entre los trabajadores que fallecieron de tán expuestas a niveles pequeños de ellos en los alimen­
ww

exposición a tal sustancia, la muerte fue causada por leu­ tos. Una gran proporción de los incidentes de intoxicación
cemia o anemia aplásica en proporciones muy similares. aguda por insecticidas ha sido consecuencia del consumo
La EPA e IARC clasifican al benceno como carcinógeno de alimentos fuertemente contaminados durante su alma­
para el ser humano. La sustancia es metabolizada en una cenamiento o envío. Los insecticidas utilizados en casa y
serie de productos fenólicos y de anillo abierto y sus con­ jardín han ocasionado intoxicación accidental en niños de
jugados (Snyder y col., 1993). La anemia aplásica y la leu­ corta edad.
cemia tal vez no sean causadas por un solo metabolito,
sino que surgen por la acción concertada de varios de ellos Insecticidas organoclorados. Los insecticidas de esta cate­
(Snyder y col., 1993). En el proceso de formación de di­ goría consisten en derivados del etano dorado, de los cuales el
más conocido es el DDT; los ciclodienos, como clordano, aldrín,
chos metabolitos se crean productos intermediarios reac­
dieldrín, heptaclor y endrin, y otros hidrocarburos, como hexa­
tivos que se ligan de modo covalente con diversas proteí­
clorociclohexanos del tipo de lindano, toxafeno, mirex y clorde':'
nas y DNA, Y que pudieran ser el origen de los efectos cona (KEPONE). Entre 1945 y 1965 se utilizaron ampliamente en
tóxicos del benceno en la médula ósea (Kalf y col., 1987). agricultura y en programas de erradicación del paludismo, los
, insecticidas organoclorados.
Tolueno. El tolueno (C,H,CH,) se utiliza ampliamente DDT. El DDT, el más común de los derivados clomdos del etano,
como solvente en pinturas, barnices, pegamentos, esmal- también se denomina c/orofenotano.
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1794 Sección XVII Toxicología

H que, por último, ataca en forma adversa a la especie que ocupa


el
O>-c:-<O CCl�
,1
el vértice de la pirámide alimentaria.
Por ejemplo, la disminución observada en la población de aves
piscívoras se ha atribuido al adelgazamiento del cascarón del
huevo, resultado neto de la ingestión de DDT y de insecticidas
DDT, CLOROFENOTANO
hidrocarburos clorados similares.
Dada la enorme distribución del DDT; toda persona nacida
Hasta que se impusieron graves restricciones a su empleo en después de 1945 ha tenido contacto con el insecticida alguna
muchos paises, el DDT fue uno de los insecticidas sintéticos vez en su vida y muestra depósitos en los tej idos grasos. Con un
más solicitados y baratos, y tal vez uno de los más eficaces. Así ritmo de ingreso constante, la concentración de DDT en los teji­
pues, se le utilizó ampliamente después de su introducción, ha­ dos adiposos alcanza una cifra "de equilibrio" y permanece re­
cia el año de 1945. lativamente constante. Una vez que cesa la exposición, el insec­
El DDT es muy poco soluble en agua y extraordinariamente ticida se elimina lentamente del cuerpo; se calcula que el DDT
soluble en grasa. Se absorbe con facilidad cuando está disuelto almacenado se excreta a un ritmo aproximado de 1 % cada día.
en aceites, grasas o solventes lípidos, pero su absorción es in­ Antes de la excreción, es deshalogenado y oxidado lentamente

r
significante en la forma de polvo seco o suspensión acuosa. Una por las monooxigenasas que dependen del citocromo P450, y

.a
vez absorbido, el insecticida se concentra en el tejido adiposo. uno de los principales productos de excreción es el DDA (ácido
El depósito de esta sustancia en la grasa es protector, porque así acético bisfp-c1orofeniloD.

om
disminuye la cantidad de la sustancia en el sitio de su principal El DDT tiene un amplio margen de seguridad, y a pesar de su
efecto tóxico, que es el cerebro. E l DDT cruza la placenta, y su uso y disponibilidad tan extensas no ha habido un informe co­
concentración en la sangre del cordón umbilical está en los mis­ rroborado e inequívoco de intoxicación mortal en seres huma­

s.c
mos límites que la observada en la sangre de la gestante a él nos por su uso. Las pocas muertes causadas en personas por la
expuesta (Saxena y col., 1 9 8 1 ). exposición excesiva al insecticida quizá fueron consrcuencia del
El DDT se degrada con gran lentitud en el entorno y se depo­ solvente queroseno, más que del propio insecticida. E l efecto a
sita en la grasa de animales, lo que lo convierte en un ejemplo
ideal del fenómeno de bioamplificación; es decir, una serie de
ico corto plazo más notable de este producto es la estimulación del
sistema nervioso central.
organismos en la cadena alimentaria lo acumulan en cantidades Entre los signos y síntomas de intoxicación en seres humanos
ed
crecientes en la grasa en cada nivel alimentario superior, hasta por dosis altas de DDT están: parestesias de lengua, labios y
cara, aprensión, hipersusceptibilidad a estímulos, irritabilidad,
mareos, temblor y convulsiones tónicas y clónicas (Ecobichon,
m

1991). Se desconoce el mecanismo de acción del DDT en el


es

sistema nervioso central. Dicho compuesto es capaz de alterar


1 400 el transporte de sodio y potasio por las membranas axónicas,
con 1 0 cual aumenta el potencial ulterior negativo; se prolongan
t

(J) _
los potenciales de acción, hay andanadas repetitivas después de
un

« '"
1 200
un solo estímulo, y series espontáneas de potenciales de acción
O �
- (Narahashi, 1983).
u "
'"
-
ap

::> r::: 1 000 En animales de laboratorio, la administración intravenosa de


c.:> '" DDT causa muerte por fibrilación ventricular. Al parecer el DDT
:5 ::l comparte con otros hidrocarburos c1orados una tendencia a sen­
,,- .-
.o
w.

w - 800 sibilizar el miocardio, y por su acción en el SNC y la médula


O Q)
suprarrenal, a veces genera el estímulo necesario para la fibrila­
o "
ww

::; � ción ventricular.


::> r:::
O
600
(J)
Dosis relativamente pequeñas de DDT inducen la actividad
z = del sistema de oxidasa de función mixta (citocromo P450) del
o E retículo endoplásmico del hígado; este efecto se ha demostrado
u - 400
en extenninadores (Kolmodin y col., 1 969) y en trabajadores de
fábricas de DDT (Poland y col., 1970). El resultado es la altera­

200 ción del metabolismo de fármacos, xenobióticos y hormonas es­


teroides.
Es posible que al DDT se deba la mayor frecuencia de rotura
o de huevos en algunas poblaciones de aves, y el estado de la po­
1965 1 970 1 975 1 980 1 985 1 990 blación en etapa de reproducción (Radc1iffe, 1 967). La induc­
ción del citocromo P450 por el DOT parece intensificar el meta­
Año
bolismo de estrógenos en las aves. El desequilibrio endocrino
resultante tal vez afecta el metabolismo de calcio, la postura del
Fig. 67-5. Uso de plaguic:idas en la agricultura y uso total en Estados
Unidos en los últimos 20 años. (Con autorización de AspeJin, A.L.
huevo y el anidamiento, en forma tal que pueden disminuir la
Pcsticides Industry Sales and Usage: 1992 and 1993 Market EslI­ culminación reproductiva total y la supervivencia de los pollue­
mates. Biological and EcoflomicAnalysis Division, Us. Environmental los (Lundholm, 1 987). Para complicar el problema el DDT tam­
Protection Agellcy, Washington. O.c., 1994.) bién ejerce un efecto estrogénico (Kupfer y Bulger, 1982) e in-
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Capitulo 67 Tóxicos ambientales no metálicos 1795

hibe laATPasa de calcio que se necesita para la calcificación del CI CI


cascarón (Miller y col., 1976).
Se han administrado a voluntarios 35 mg de DDT al día

CI CI
-cantidad mil veces mayor que la que recibe la persona prome­
dio-, incluso durante 25 meses, sin efectos nocivos netos
(Hayes, 1963). Sin embargo, hay la preocupación de que el DDT

�CI
ALDRIN
pueda ser carcinógeno, por contacto prolongado a cantidades
pequeñas (IARC, 1 974a). El uso extenso del insecticida en paí­
ses industrializados no se ha relacionado con incremento de la
frecuencia de cáncer hepático en el ser humano. En un sondeo
entre más de 3 800 trabajadores de empresas autorizadas para el
��\CI CI
Q$r
control de plagas no se registró incremento importante en la tasa
de mortalidad estandarizada, pero sí exceso de muertes por leu­ DlELDRIN*
cemia, en particular la forma mieloide, y cánceres de encéfalo y
pulmones (Blair y col., 1 983). CI CI
Aunque el DDT fue retirado del mercado estadounidense en
CCI, I

r
1972, en todos sus usos, todavía se le emplea en aspectos esen­ I

.a
CI CI CI
ciales de salud pública y en unas cuantas indicaciones para la

y$(
om
protección de cosechas, cuando no se cuenta con otros medios
eficaces. La decisión se debió a la posibilidad de desequilibrio HEPTACLORO
ecológico por el empleo ininterrumpido del insecticida, a la in­
certidumbre del efecto (si lo hay) de la expnsición incesante y CI CI

s.c
duradera, y al almacenamiento de concentraciones pequeñas en
seres humanos, así como a la aparición de especies resistentes CI, I
CI CI CI CI
de insectos. Otros paises han emprendido acciones similares.
ico
Sin embargo, aún se le utiliza ampliamente en algunos paises
tropicales, para desterrar el paludismo. Como consecuencia del
CLORDANO
ed

menor empleo de esta sustancia en muchos países, el DDT ha


sido sustituido por otros plaguicidas, aunque muchos de ellos Fig. 67�6. Estructuras qu/micas de algunos ciclodienos dorados. (*EI
son más tóxicos para el ser humano. endrín es un estereoisómero del dieldrin.)
sm

Metoxiclor. La fórmula estructural del metoxiclor, un deriva­


do etano clorado, es la siguiente:

H
te

CH,o-O{-O-OCH, cial de la neurona y un estado de excitación incontrolable. Los


un

CCJ3 cic1odienos c1orados tienden a producir convulsiones antes que


surjan signos menos graves del ataque. Las personas intoxicadas
ap

METOXICLOR han señalado cefalalgia y náusea, vómito, mareo y contraccio­


nes clónicas leves, y algunos enfermos han mostrado convulsio­
El compuesto está sustituyendo a grandes pasos al DDT. Una nes y signos prodrómicos (Hayes, 1963). A diferencia del DDT,
w.

propiedad atrayente del metoxiclor es que resulta mucho menos los insecticidas ciclodienos han causado innumerables muertes
tóxico que aquél para los mamíferos (la dosis letal media [LD"l por intoxicación aguda.
ww

en ratas es de 6 000 mg!kg, en comparación con 250 mg!kg del Una diferencia importante entre el DDT y los ciclodienos clo­
DDT); no es carcinógeno y no persiste tanto tiempo en el cuer­ radas es que estos últimos se absorben fácilmente en la piel in­
po. El metoxic1or se almacena en tejido adiposo en una propor­ tacta. Quizá no conlleven un riesgo sustancialmente mayor que
ción de 0.2% del almacenamiento del DDT. y su vida media en el DDT en la pnblación general expuesta a cantidades pequeñas
ratas es de sólo unas dos semanas, en comparación con seis meses en los alimentos, pero es más peligrosa la manipulación de solu­
del DDT (Ecobichon, 1991). La vida media más breve es un ciones concentradas de un ciclodieno.
reflejo del metabolismo más rápido por medio de O-desme­ A semejanza del DDT, los ciclodienos clorados son insectici­
lilación (Kapoor y col., 1970); después es conjugado y excreta­ das altamente solubles en Iipidos y se depositao en el tejido adi­
do por la orina. poso, inducen la actividad del sistema de oxidasa de función
Ciclodienos cIorados. En la figura 67-6 se muestran las es­ mixta (citocromo P450) del hígado, se degradan con lentitud,
tructuras de los cic1odienos cIorados de mayor uso; estos com­ persisten en el entorno, y experimentan bioamplificaci6n a 10
puestos estimulan el SNC, y muchos signos y sintomas de la largo de toda la cadena o pirámide alimentaria de los animales.
intoxicación que causan se asemejan a los causados por el DDT. Con arreglo a sus dosis, este tipo de insecticidas ha producido
Sin embargo, los mecanismos celulares por los que los ciclodie� hepatomas en ratones, y posee la capacidad carcinógena máxi­
nos estimulan el SNC son diferentes de los del DDT. Los ciclo­ ma é:ntre todos los insecticidas (National Academy of Sciences,
dienos actúan como antagonistas en receptores inotrópicos del 1977). Por tanto, el aldrín y el dieldrín fueron prohibidos en Es­
ácido y-aminobutírico (GABA), con lo que disminuye la capta­ tados Unidos en 1 974, como se prohibió también, en 1976, el
ción de iones cloruro, lo que ocasiona sólo repolarización par- uso de c]ordano y heptacloro en cultivos agrícolas.
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1796 Sección XVll Toxicología

Otros hidrocarburos e/orados. Este grupo de insecticidas in­ CI


cluye lindano, toxafeno, mirex y clordecona; son sustancias que el
comparten muchas de las propiedades del DDT. Si bien no mo­ el el
difican la conducción axónica, actúan en las terminaciones el el
presinápticas en el SNC e intensifican la liberación de neuro­ 'I"---+-..('el
transmisores (Shankland, 1982). el)-1---,-:-el 'I"---+--r.CI
Hexacloruro de benceno (BHC) y lindano. El hexacloruro de C1 el
benceno (llamado con mayor exactitud hexaclorociclohexano)
el CI el
posee la siguiente fórmula estructural:
el o

el �
el el
el
MIREX CLORDECONA

A semejanza de otros insecticidas de esta categoría, mirex y


clordecona estimulan el sistema neMoso central, ,ocasionan daño
hepático e inducen la actividad del sistema de citocromo P450.

r
La atrofia testicular y la disminución en la producción de esper­

.a
HEXACLOROCICLOHEXANO
matozoides pueden deberse a la acción estrogénica directa de la
(HEXACLORURO DE BENCENO)
c1ordecona (Eroschenko, 1981). Uno y otro insecticidas son car­

om
cinógenos en animales de laboratorio (Cueto y col., 1976; Waters
El producto en cuestión es una mezcla de ocho isómeros y se y col., 1977).
conoce al de tipo y como lindano. El isómero y es el más tóxico, La gran negligencia en la higiene industrial culminó en la in­

s.c
y prácticamente toda la actividad insecticida del BRC reside en toxicación de 76 de 148 trabajadores expuestos que intervenían
él. El compuesto se utiliza en seres humanos como un ecto­ en la producción de c1ordecona en HopeweU, Virginia (Taylor y
ico
parasiticida (véase más adelante). El lindano causa'signos de col., 1978); sufrieron efectos neurológicos que se caracteriza­
intoxicación similares a los del DDT: temblores, ataxia, convul­ ban por temblores, flúter ocular (opsoclono), hepatomegalia,
siones y postración. En casos graves de intoxicación aguda se esplenomegalia, erupciones, cambios psíquicos, y ensanchamien­
to de la base para la locomoción (posición de mayor sustentación).
ed

observan convulsiones tonicoclónicas violentas. Los isómeros


a y y son estimulantes del SNC, pero los isómeros fJ y ó son Las pruebas de laboratorio indicaron disminución del número
depresores. Al parecer, la estimulación del SNC se debe al blo­ de espermatozoides y una menor motilidad de estas células. La
sm

queo de los efectos del GABA (Matsumur. y Ghiasuddin, 1979). contaminación del área que rodeaba la fábrica dio lugar a la pro­
El lindano induce la acción de enzimas microsómicas del híga­ hibición de pescar y capturar moluscos en el río James y zonas
do. Junto con el BHC, se le ha señalado como partícipe en innu­ afectadas de la bahía de Chesapeake.
te

merables casos de anemia aplásica (Rugman y Cosstick, 1990); El mirex quizá es oxidado hastai.dar clordecona (Carlson y
no obstante, en un estudio de 60 sujetos con tal problema, no se col., 1976). El metabolito principal de la c1ordecona es su alco­
un

demostró relación alguna entre la incidencia de dicha forma de hol, que aparece en la bilis humana en la forma de conjugados
anemia y la exposición ocupacional a plaguicidas (Wang y con ácido glucurónico (Guzelian, 1982). La vía principal de eli­
ap

Grufferman, 1981). Se ha demostrado que diversos isómeros de minación de la clordecona son las heces. La colestiramina (caps.
BHC, incluso el lindano, producen hepatomas en roedores 36 y 38), administrada a sujetos intoxicados, incrementa de tres
(Cueto, 1980). a ocho tantos la excreción fecal de c1ordecona, acorta d,e 140 a
w.

La biotransformación de los isómeros de BHC entraña la for­ 80 días la vida media en sangre, y apresura la recuperación res­
mación de clorofenoles. En comparación con el DDT, el lindano pecto de las manifestaciones tóxicas (Cohn y col., 1978). La
ww

tiene una persistencia relativamente pequeña en el entorno. clordecona fecal proviene de la excreción del insecticida por bilis
ToxaJeno. Este producto es una mezcla compleja de más de e intestino (Guzelian, 1982). En seres humanos, sólo 5 a 10% de
175 hidrocarburos policlorados CIO, de los cuales sólo unos 20 la clordecona excretada en la bilis aparece en las heces, lo cual
se conocen (como el heptaclorobomano) (Saleh, 1991). A seme­ denota resorción intestinal extensa del compuesto (Cohn y col.,
janza de otros insecticidas hidrocarburos clorados, el efecto tóxi­ 1978); se piensa que la bilis intensifica enormemente la resor­
co principal del toxafeno consiste en la estimulaci6n del sistema ción (Boylan y col., 1979). Sobre tal base, la colestiramina puede
nervioso central. Al parecer, el compuesto es metabolizado con intensificar la excreción intestinal de clordecona, al ligar consti­
bastante facilidad, y por eUo su vida media es más breve que la tuyentes de la bilis en la luz intestinal. Se ha detectado c1or­
de casi todas los demás insecticidas de esta categoría. El toxafeno decona en la leche de mujeres, vacas y ratas; la leche de vacas
induce tumores hepáticos en ratones y produce mutaciones contaminadas puede ser el medio por el cual llegue la clordecona
(Rooper y col., 1979). Las observaciones mencionadas han he­ al ser humano.
cho que disminuya en grado impresionante el empleo de este
insecticida. Insecticidas organofosforados. Los insecticidas de este tipo
Mirex y c1orelecona. Uno y otro (KEPONE) productos son in­ han sustituido en gran medida a los hidrocarburos clorados. Los
secticidas hidrocarburos cIorados de persistencia extraordina­ organofosforados no persisten en el entorno y tienen un poten­
ria, que se concentran miles de veces en la cadena o pirámide cial carcin6geno extraordinariamente pequeño; sin embargo, su
alimentaria (Waters y col., 1977). Sus fórmulas estructurales son toxicidad aguda es mucho mayor en seres humanos. De hecho,
las siguientes: el parati6n es el plaguicida que con mayor frecuencia causa
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Capitulo 67 Tóxicos ambientales no metálicos 1797

intoxicaciones mortales. En el capítulo 8 se exponen las carac­ Es rara la intoxicación por rotenona en seres humanos. El
terísticas toxicológicas de tales agentes. compuesto se ha aplicado directamente para combatir piojos de
la cabeza, sarna y otros ectoparásitos. Los principales efectos
Insecticidas carbamatos. Los insecticidas de esta categoría locales son conjuntivitis, dermatitis, faringitis y rinitis. La in­
se asemejan en muchos aspectos a los organofosforados. El de gestión de rotenona produce infección gastrointestinal, náusea y
uso más común es el carbarilo y, al igual que otros inhibidores vómito. La inhalación del polvo es más peligrosa; causa estimu­
de la colinesterasa, se estudia en el capítulo 8. lación respiratoria, seguida de depresión y convulsiones. La
rotenona inhibe la oxidación de NADH en NAD y, en conse­
Insectieidas para plantas. El piretro y agentes estructural­ cuencia, bloquea la oxidación de �ustratos (por NAD) como áci­
mente similares se utilizan como insecticidas para plantas. El do glutámico, a-cetoglutarato y piruvato.
piretro es un extracto alergénico crudo que se obtiene de flores La nicotina es uno de los insecticidas más tóxicos (cap. 9).
del piretro Chrysanthemum cincerariaefolium. La piretrina es Después de la intoxicación surgen sialorrea y vómito (por esti­
un extracto extraordinariamente refinado que contiene las seis mulación ganglionar), debilidad muscular (por estimulación se­
piretrinas naturales. La máxima actividad de insecticida del guida de depresión de la unión neuromuscular), y al final convul­
piretro se localiza en la piretrina 1, cuya fórmula estructural es la siones clónicas y detención de la respiración (efectos en el SNC).
siguiente:

r
Insecticidas utilizados como ectoparasiticidas. El ténnino

.a
ectoparasiticida denota el grupo de fármacos que se utilizan

om
contra parásitos animales. En el ser humano comprende más bien
pediculocidas y miticidas.
El Undano (hexacloruro de gammabenceno; KWELL, SCABENE
y otros nombres) (véase antes) es un miticida utilizado para el

s.c
tratamiento de la sama. Se surte en concentración de 1 % en cre­
PIRETRINA I ma, loción o champú. La mezcla se aplica en una capa delgada
ico
sobre toda la superficie cutánea (del cuello hacia abajo) (30 g de
Las piretrinas, y sus derivados sintéticos los piretroides, se crema para el adulto) y se deja en su sitio durante ocho a 12 h. El
utilizan en muchos insecticidas caseros por su acción rápida. Su prurito suele ceder en ténnino de 24 h, y la mayoria de los enfer­
mecanismo de acción en las membranas neuronales se asemeja
ed

mos no necesita una segunda aplicación. Sin embargo, si son ne­


al del DDT (Narahashi, 1983). Suele considerarse al piretro como cesarias, pueden hacerse una segunda y una tercera aplicaciones
el insecticida más innocuo, por su leve toxicidad primaria. La a intervalos semanales. Este fánnaco también es un pediculocida
sm

poca toxicidad de los piretroides en los mamíferos se debe en muy activo, y resulta eficaz para erradicar pediculosis pubis,
gran medida a su biotransfonnación rápida por hidrólisis en éster, capitis y corporis. Suele bastar una sola aplicación de crema, lo­
por hidroxilación o por ambos mecanismos (Aldridge, 1983). ción o champú al 1% para erradicar el ectoparásito. El lindano
te

La biotransfonnación lenta del piretro en los insectos disminuye también se ha utilizado contra la infestación por Phthirus pubis
todavía más por su presentación, que incluye el butóxido de pi­ (ladillas).
un

peronilo (el cual inhibe el citocromo P450) y que intensifica la El malatión es un insecticida organofosforado, y las caracte­
eficacia insecticida. A diferencia de los mamíferos, los organis­ risticas fannacológicas de las anticolinesterasas se exponen en
ap

mos acuáticos son muy sensibles a los piretroides (Khan, 1983). el capítulo 8. El malatión tiene acción pediculocida y liendricida
Las propiedades alergénicas del piretro son intensas, en (niticida); en término de tres segundos una concentración de
comparación con las de otros plaguicidas. Se han señalado in­ malatión al 0.003% y 0.06% en acetona, respectivamente, des­
w.

numerables casos de dermatitis por contacto y alergia de vias troye a los piojos y sus huevecillos (liendres). El preparado far­
respiratorias. Las personas sensibles al polen de especies de To­ macéutico contiene 78% de isopropanol. Fuera de Estados Uni­
ww

xicodendron son particulannente susceptibles a dichas reaccio­ dos el malatión (PRIODERM) se usa para combatir los piojos de la
nes. Los preparados que contienen piretrinas o piretroides sinté­ cabeza y sus liendres. Se frota suavemente en la piel cabelluda y
ticos tienen menor probabilidad de causar reacciones alérgicas se deja durante ocho a 12 h, después de lo cual el cabello se lava
que los elaborados con polvo de piretro. con champú y se peina. Puede hacerse otra aplicación siete a
La rotenona se obtiene de las raíces de plantas como Derris y nueve días después, si es necesario.
Lonchocarpus; se le utilizó para paralizar peces antes que como El benzoato de benzilo es una sustancia relativamente innocua
insecticida. Posee la siguiente fónnula estructural: que en concentración alta es tóxica para Acarus scabiei. El com­
puesto mencionado se ha utilizado en forma extensa para comba­
OCH3
tir la sama, y es también útil en el tratamiento de la pediculosis.
CH,
En el primer caso se aplica una loción de 26 a 30% en todo el
cuerpo, del cuello hacia abajo, después de limpieza minuciosa.
Una vez que ha secado la primera aplicación, se emprende la
segunda. El residuo se elimina con agua después de 24 h.
E) crolamitón (N-etil-o-crotonotoluidida; EURAX) es un escabi­
cida eficaz. Se expende para aplicación local. A veces causa irri­
tación, especialmente en piel inflamada o cuando se aplica por
largo tiempo; puede causar sensibilización. Como aspecto para­
ROTENONA
dójico, los preparados también poseen propiedades antipruriticas.
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1798 Sección XVII Toxicologia

La emulsión de dihidronaftaleno y oleato de cobre se ha co­ peran del todo; sin embargo, se han señalado en sobrevivientes
mercializado como pediculocida y liendricida, pero no se ha pre­ secuelas neurológicas que incluyen síndromes extrapiramidales,
cisado su eficacia real. cambios de la personalidad y déficit de la memoria.
El tiabendazol puede aplicarse en la piel para tratar la larva El tratamiento de la intoxicación con cianuro debe ser inme�
migrans cutánea (cap. 42). Posee actividad escabicida, por lo diato, para resultar eficaz. El diagnóstico puede facilitarse al
cual se emplea con ese fin fuera de Estados Unidos. También se captar el olor característico de la sustancia (aceite de almendras
afinna que es un antimicótico leve. amargas). La toxicidad es consecuencia de la unión a la forma
férrica de la citocromo oxídasa, razón por cual el tratamiento se
orienta a evitar o revertir dicha unión, al aportar un gran fondo
Fumigantes común de hierro férrico que compita por el cianuro. Un método
eficaz consiste en administrar sustancias como el nitrito, que
Los fumigantes se utilizan para controlar la proliferación oxidan la hemoglobina o la metahemoglobina. El nitrito de amilo
de insectos, roedores y nematodos de la tierra; ejercen su suele administrarse por inhalación, en tanto se prepara una solu­
ción de nitrito sódico para administración intravenosa (10 mI de
acción plaguicida en la forma de gases, y se aprovecha su
una solución al 3%). La metahemoglobina compite con la cito­
capacidad de penetrar en zonas por lo demás inaccesibles.
cromo oxidasa por el ion cianuro, y en la reacción se ve favore­

r
Entre los agentes utilizados para proteger alimentos alma­

.a
cida por su acción de masa. Así se forma cianometahemoglobi­
cenados están: cianuro de hidrógeno, acrilonitrilo (un cia­ na y se restaura la citocromo oxidasa. Otra opción es utilizar
nuro orgánico, CH,=CHCN), disulfuro de carbono, te­

om
4-dimetilaminofenol, que también oxida la hemoglobina, en una
tracloruro de carbono, cloropicrina, dibromuro de etileno, dosis de 3 mglkg por vía intravenosa (Weger, 1983). Los com­
óxido de etileno, metilbromuro y fosfina. puestos de cobalto muestran una gran afinidad por el cianuro

s.c
(Way, 1984), y en la actualidad, la mezcla de cobalto y EDrA
Cianuro. El cianuro [ácido cianhídrico (HCN) o ácido prúsico1 (COzEDTA) se utiliza en algunos países para combatir la intoxi­
es uno de los tóxicos de acción más rápida, cuyas víctimas pue­ cación por cianuro en seres humanos (Cottrell y col., 1978; Weger,
ico
den fallecer a los pocos minutos de entrar en contacto con él. El 1983). De manera similar, cabe recurrir a la hidroxocobalamina
cianuro de hidrógeno gaseoso se utiliza para fumigar barcos y para tratar la intoxicación por cianuro, porque se combina con él
edificios y esterilizar tierra. Por la capacidad que tiene para for­ para formar cianocobalamina (vitamina B 1z).
ed

mar complejos con metales, el cianuro se usa en metalurgia, El principal mecanismo para eliminar el cianuro del organis­
galvanostegia y galvanoplastia y la limpieza de metales. En el mo es su conversión enzimática por la rodanesa (transulfurasa),
hogar, los cianuros están en el 1íquido para pulir plata, insectici­ como una enzima mitocóndrica, hasta dar tiocianato, que es re­
sm

das, rodenticidas y plantas que 10 contienen (como la casava), lativamente atóxico. Para apresurar la desintoxicación se admi­
así como en semillas de frutas (manzanas, albaricoques, almen­ nistra por via intravenosa tiosulfato sódico (50 mi de una solu­
dras y otras). La toxicidad principal del laetrile, que alguna vez ción acuosa al 25%), y el tiocianato formado se excreta con
te

se recomendó como Uanticanceroso", se debe al glucósido cianó­ facilidad por la orina.


geno. Las monooxigenasas que dependen del citocromo P450
un

liberan el cianuro de los nitrilos orgánicos (Willhite y Smith,


Rodanesa
1981), al igual que las glutatión S-transferasas lo hacen de los NaZS2O3 + CN- • SCN- + Na,SO, (67-4)
ap

tiocianatos orgánicos (Okawa y Casida, 1971). El cianuro tam­


bién es un metabolito del nitroprusiato (Cottrell y col., 1978); la Way y colaboradores (1972) demostraron que el nitrito incre­
combustión de plásticos nitrogenados puede producir liberación menta la LD" del cianuro de potasio en ratones, de 1 1 mglkg a
w.

de HCN. Incendios en aeronaves en vuelo mataron a 1 19 pasaje­ 21 mglkg; la administración del tiosulfato aumenta la cifra men­
ros en Parls, en 1973, y a 303 peregrinos en Riyadh, Saudiarabia, cionada a 35 mglkg, en tanto que la administración de nitrito,
ww

en 1980, porque la combustión del material plástico generó áci­ seguido de tiosulfato, aumenta la LD" a 52 mg/kg de peso.
do cianhídrico (Weger, 1983). El cianuro también se utiliza pa­ Muchos casos de intoxicación aguda en seres humanos han sido
ra ejecuciones en las llamadas cámaras de gases, y se utilizó tratados adecuadamente con dichas sustancias.
para más de 900 "suicidios-asesinatos" de tipo religioso en El oxígeno solo, incluso el hiperbárico, tiene mínimo efecto
Guyana en 1978. protector cohtra la intoxicación por cianuro; sin embargo, el oxí­
El compuesto en cuestión posee extraordinaria afinidad por geno potencia extraordinariamente los efectos protectores del
el hierro en estado férrico. Después de absorbido reacciona in­ tiosulfato o de éste adicionado de nitrito (Way y col., 1972). No
mediatamente con el hierro trivalente de la citocromo oxidasa se ha dilucidado su mecanismo de acción, pero la tensión de
en la mitocondria, y de este modo inhibe la respiración celular, oxígeno intracelular pudiera alcanzar niveles lo bastante altos
10 que origina acidosis láctica e hipoxia citotóxica. Bloquea la para producir oxidación no enzimática de los citocromos redu­
utilización de oxigeno, de modo que la sangre venosa se oxige­ cidos o el oxigeno puede desplazar el cianuro de la citocromo
na y adquiere un color rojo vivo casi igual al de la sangre arte­ oxidasa por acción de masa.
rial. Se estimula la respiración porque las células de quimiorre­ Si se ingirió el cianuro, habrá que hacer lavado gástrico, pero
ceptores reaccionan como lo hacen a la disminución del oxígeno. siempre después de emprender el tratamiento más específico.
Se observa una etapa transitoria de estimulación del SNC, con
hiperpnea y cefalalgia; al final surgen convulsiones hipóxidas y Metilbromuro. Este compuesto se utilizó como insecticida
muerte por paro respiratorio. Casi todas las personas con con­ para fumigación y como componente de algunas sustancias para
tacto agudo al cianuro suelen morir a muy breve plazo o se recu- la extinción de incendios. Se afirma que, de todos los insectici-
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Capítulo 67 Tóxicos ambientales no metálicos 1799

das organofosforados, fue la causa de más muertes en California, Cebolla albarrana. Los bulbos de la cebolla albarrana (escila,
en el decenio de 1960, entre personas expuestas a estos tóxicos Urginea maritima) se han utilizado durante muchos años como
por razones ocupacionales (Hine, 1969). Dado que el metil­ un rodenticida relativamente innocuo para el ser humano. Los
bromuro es muy tóxico, en los fumigantes se le agrega cloropi­ principios activos son los glucósidos de escilarina, los cuales, a
erina (CCI,NO,) que es un potente estimulante de epífora, como semejanza de los glucósidos digitálicos, poseen efectos cardio­
medida precautoria contra la exposición al metilbromuro. tónicos (cap. 34). Los signos y síntomas que conlleva la inges­
Los signos y síntomas importantes de intoxicación por metil­ tión de grandes cantidades de cebolla albarrana (escila) consis­
bromuro son atribuibles al sistema nervioso central, y consisten ten en vómito y dolor abdominal, visión borrosa, irregularidades
en malestar, cefalalgia, perturbaciones visuales, náusea y vómi­ cardiacas, convulsiones y muerte por fibrilación ventricular. La
to. El sujeto suele morir durante una convulsión. Después de utilidad selectiva de dicho tipo de cebolla como rodenticida de­
exposición respiratoria intensa, el edema pulmonar puede ser pende de la incapacidad de las ratas para vomitar (Lisella y col.,
mortal. La enorme afinidad del metilbromuro por grupos sulfhi­ 1971). El tratamiento de la ingestión de este tóxico en seres hu­
drHo pudiera contribuir a su acción tóxica. Por ello, los agentes manos, cuando se requiere, es igual al de la sobredosificación
sulfhidrílicos pueden ser beneficiosos como antídotos en la in­ de digitálicos (cap. 34).
toxicación por metilbromuro.
Fluoroacetato sódico. El fluoroacetato sódico y la fluoroace­

r
Dibromoc\oropropano y dibromuro de etUeno. El dibromo­ tamida están entre los rodenticidas más potentes. Son fuerte­

.a
cloropropano (CICH,CHBrCH,Br) y el dibromuro de etileno mente tóxicos para otros animales. y por ello su uso se restringe
(1 ,2-dibromoetano) son fumigantes para tierra que se utilizan a empresas autorizadas para el control de plagas. El fluoroacetato

om
para controlar nematodos. En seres humanos producen depre­ ejerce su acción tóxica al inhibir el ciclo del ácido cítrico. El
sión moderada del SNC y también congestión pulmonar des­ compuesto se incorpora en la fluoroacetil coenzima A, que se
pués de su inhalación, y originan trastornos gastrointestinales condensa con el oxaloacetato para fonnar fluorocitrato. Este úl­

s.c
agudos y edema pulmonar cuando se ingieren. Ambos agentes timo inhibe la enzima aconitasa, con lo cual anula también la
causan carcinoma gástrico en ratas y ratones (Powers y col., 1 975; conversión de citrato en isocitrato. Como cabría esperar, el co­
IARC, 1 977). El dibromocloropropano causa esterilidad o hipos­ razón y el sistema nervioso central son las estructuras orgánicas
ico
pennia anormal en varones que trabajan en su fabricación. Ha atacadas con mayor gravedad por la inhibición general del me­
disminuido el empleo de ambos agentes, por su carcinogenicidad tabolismo de energía oxidativa. En consecuencia, los signos y
y sus efectos adversos en la función reproductora. los síntomas de intoxicaclón por fluoroacetato, además de sig­
ed

nos inespecíficos como náusea y vómito, consisten en irregula­


Fosfina. La fostina (PH) es un fumigante de cereales; se libe­ ridades cardiacas. cianosis, convulsiones generalizadas y muer­
sm

ra poco en presencia de humedad atmosférica de tabletas de te por fibrilación ventricular o insuficiencia respiratoria. Se piensa
fosfuro de aluminio. Es más tóxica que el metilbromuro� sin que la administración de grandes cantidades de acetato antago�
embargo, dado que se necesita una cantidad menor de ella que niza el fluoroacetato en fonna competitiva; en monos, se ha lo­
te

de este último para fumigar un volumen particular de granos, ha grado protección completa de la intoxicación por fluoroacetato
resultado más innocua. Los principales efectos tóxicos de la mediante la administración previa de glicerol monoacetato.
un

fosfina son irritación y edema pulmonares intensos, aunque tam­


bién se observan lesión hepática y del miocardio. Estricnina. Es el principal alcaloide presente en la nuez vómi­
Strychnos
ca, que es la semilla del árbol nativo de la India
ap

nuxvomica. Esta sustancia fue introducida en Alemania en el


Rodenticidas siglo XVI como veneno para ratas y otras plagas de animales. Su
w.

empleo como tal prosigue hoy en día, y es causa de intoxicación


Algunos de los compuestos de este tipo son muy tóxicos accidental de niños y de mascotas domésticas. La fórmula es­
ww

para el ser humano, pero la toxicidad de otros es más se­ tructural de la estricnina es la siguiente:
lectiva. En algunos casos dicha selectividad se basa en una
característica peculiar de la fisiología de los roedores; en
otras se saca provecho de sus hábitos. Los rodentícidas
pueden incorporarse en cebos y colocarse en sitios inacce­
sibles, por 10 que la posibilidad de que contaminen el en­
torno es mucho menor que con otros plaguicidas. De este
modo el problema toxicológico que conllevan los produc­
tos de este tipo es más bien de ingestión accidental o con ESTRICNINA
fines suicidas.
Este alcaloide excita todas las porciones del sistema nervioso
Warfarina. Este, que es uno de los rodenticidas de uso más central; sin embargo, dicho efecto no es consecuencia de excita­
frecuente, se considera innocuo, porque su toxicidad depende ción sináptica directa. La estricnina aumenta el nivel de excita­
de su ingestión repetida. Sin embargo, en una persona que inten­ bilidad neuronal al bloquear selectivamente la inhibición. Nor·
tó suicidarse, la ingestión diaria de 1 a 2 mglkg durante seis días malmente, los impulsos nerviosos curs�n por vías a,4ecuadas y
produjo un cuadro grave. Es un anticoagulante ingerible que se reciben influencias inhibitorias. Al bloquear la inhibición por
estudia en mayor detalle en el capítulo 54. acción de la estricnina se intensifica la actividad neuronal cons-
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1800 Sección XlIII Toxicología

tante y los estimulos sensoriales producen efectos reflejos muy antagoniza las convulsiones sin potenciar la depresión posictal
intensos. (Gosselin y coL, 1984; cap. 17). A veces se necesita un anestési­
La estricnina es un potente convulsivo; la convulsión que co, o bloqueo neuromuscular, para controlar las convulsiones
genera presenta un patrón motor caracteristico. A medida que el refractarias en sujetos fuertemente intoxicados. Hay que llevar
alcaloide disminuye la inhibición -incluso la inhibición reCÍ­ al mínimo todas las formas de estimulación sensorial. Si no se
proca que existe entre músculos antagonistas-, el patrón de la restaura la ventilación adecuada al suprimir las convulsiones,
convulsión depende de los músculos más potentes que actúan resultan esenciales la intubación y la ventilación mecánica.
en una articulación particular. En casi todos los animales de la­
boratorio dicha convulsión se caracteriza por extensión tónica Fósforo. El fósforo elemental blanco o amarillo produjo casos
del cuerpo y de todas las extremidades. Esa extensión va prece­ de intoxicación en seres humanos cuando se expendía integrado
dida y seguida, durante la fase de depresión posictal, de espas­ en pastas o pan para matar roedores. Poco después de su inges­
mos simétricos fásicos de los extensores, que pueden ser desen­ tión dicho mineral produce irritación gastrointestinal intensa y,
cadenados por cualquier modalidad de estímulo sensorial. en dosis suficientes, hemorragia e insuficiencia cardiovascular
El efecto convulsivo de la estricnina se debe a la interferencia que puede ser mortal en término de 24 h. El material vomitado
en la inhibición posináptica mediada por glicina (Aprison y col., es luminiscente y tiene un olor característico a ajo. Si el pacien­
1987). La glicina es un importante transmisor inhibitorio de las te logra vivir después de la fase inicial del daño gastrointestinal,

r
.a
motoneuronas y las intemeuroDas en la médula espinal, y la puede haber intoxicación sistémica y necrosis hepática secun­
estricnina actúa como un antagonista selectivo y competitivo daria. Una secuela tardía que puede ser mortal es la atrofia ama­

om
para bloquear los efectos inhibidores de aquélla en todos los re­ rilla aguda e intensa del higado.
ceptores de esta última (cap. 12). Ejemplos conocidos de este La intoxicación crónica por fósforo se caracteriza por caquexia,
tipo de inhibición posináptica son las influencias inhibidoras que anemia, bronquitis y necrosis del maxilar inferior; la llamada

s.c
existen entre las motoneuronas de grupos de músculos antago­ "quijada del fósforo".
nistas y la inhibición medular recurrente mediada por las células
de Renshaw. Dichas células son excitadas por colaterales intra­ Fosfuro de zinc.
ico Este compuesto reacciona con agua y Hel
medulares de axones de motoneuronas que liberan acetilcolina. en las vias gastrointestinales para producir el gas fosfina (PH3),
La estricnina bloquea la inhibición recurrente de la sinapsis de que causa irritación gastrointestinal intensa. La insensibilidad
motoneurona-células de Renshaw, al antagonizar la acción de la de perros y gatos a dicho producto se ha atribuido a las caracte­
ed

glicina liberada por esa célula. La inhibición posináptica sensi· rísticas eméticas del zinc en animales distintos de los roedores.
ble a estricnina en centros superiores del SNC, también es me­ Las fases ulteriores de la toxicidad se asemejan a la causada por
diada por glicina. el fósforo elemental amarillo.
sm

Los efectos de la estricnina en seres humanos se asemejan


notablemente a los descritos en animales de laboratorio. El pri­ a-Naftiltiourea. La fórmula estructural de este compuesto es
te

mer efecto que se advierte es la rigidez de los músculos de cara la siguiente:


y cuello. Pronto se manifiesta la máxima excitabilidad refleja.
un

Cualquier estimulo sensorial puede producir una respuesta mo­


tora violenta. En las fases iniciales dicha respuesta es un impul­
so extensor coordinado, pero en las ulteriores puede ser una con­
ap

vulsión tetánica florida. En ella, el cuerpo queda arqueado en


hiperextensión (opistótonos), de modo que tocan la superficie
w.

horizontal, el occipucio y los talones. Todos los músculos vo­


luntarios, incluso los de la cara, están contraídos plenamente. a-NAFTlLTIOUREA
La respiración cesa por la contracción del diafragma y los múscu­
ww

los de tórax y abdomen. Los episodios convulsivos pueden Las propiedades rodenticidas selectivas de este producto se
reaparecer repetidas veces, con periodos de depresión intercala� deben a la susceptibilidad diferente que muestran varias espe­
dos; la estimulación sensorial aumenta la frecuencia e intensi­ cies. La LD50 en ratas es de 3 rng/kg aproximadamente; en pe­
dad de las convulsiones. El sujeto muere a consecuencia de pa­ rros, de 1 0 mglkg; en cobayos, de 400 mglkg, y en monos, de 4
rálisis bulbar, -ocasionada más bien por la hipoxia consecutiva a glkg. El efecto tóxico principal en la especie susceptible es el
los periodos de disminución de la respiración. En las fases ini­ edema pulmonar masivo, y el derrame pleural parece ser conse­
ciales el sujeto no solamente está consciente, sino que percibe cuencia de acción en los capilares pulmonares. Los microsomas
plenamente todos los estímulos. Las contracciones musculares del higado y el pulmón de rata liberan azufre atómico desde la
son muy dolorosas y la persona está sumamente aprensiva y me­ a-naftiltiourea (Lee y coL, 1980). La toxicidad pulmonar puede
drosa de la muerte inminente. Sin tratamiento, el sujeto muere ser consecuencia (en parte cuando menos) de la unión del azufre
por intoxicación por estricnina después de la segunda a la quinta atómico a las macromoléculas tisulares. Los agentes que blo­
convulsiones totales, pero, si es sostenida, inclu'so la primera quean sulfhidrilo son antídotos eficaces en ratas en algunas si-
puede ser mortal. Si se combinan disminución de la respiración tuaciones experimentales (Koch y Schwarze, 1956). �

y contracciones musculares intensas se producen acidosis respi­


ratoria y metabólica graves. Talio. El sulfato de talio es muy peligroso. El metal no mues­
Los objetivos más urgentes del tratamiento de la intoxicación tra toxicidad selectiva por roedores y muchas personas se han
por estricnina consisten en evitar las convulsiones y dar apoyo a intoxicado con él; por e1lo su uso está regulado estrictamente en
la respiración. Con este fin el agente más útil es el diazepam; muchos países. La intoxicación aguda conlleva irritación de vías
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Capítulo 67 Tóxicos ambientales no metálicos 1801

gastrointestinales, parálisis motora y fallecimiento por insufi­ raros los informes clínicos de intoxicación por herbicidas cloro­
ciencia respiratoria. Las dosis subletales que se consumen en un fenoxi.
lapso particular enrojecen la piel y causan alopecia, que son sig­ Estos compuestos no se acumulan en el organismo de los ani­
nos característicos de intoxjcación por talio. Los. cambjos pato­ males; no se metaboJizan extensamente, pero son excretados en
lógicos incluyen "manguitos" de leucocitos penvasculares y forma activa en la orina (Berndt y Koschier, 1973). Su vida me­
cambios degenerativos en cerebro, higado y riñones. Los sínto­ dia plasmática en seres humanos es de un día (Gehring y co1.,
mas neurológicos son sobresalientes e incluyen temblores, do­ 1973).
lores de miembros inferiores, parestesias de manos y pies y Los herbicidas clorofenoxi han producido dermatitis por con­
polineuritis, en particular en las extremidades pélvicas. También tacto en seres humanos; además, ha surgido una forma bastante
surgen a veces psicosis, delirio, convulsiones y otros tipos de grave de este problema, llamada cloracné, entre quienes inter­
encefalopatía. El tratamiento de la intoxicación por talio consis­ vienen en la elaboración de 2,4,5-T (Poland y col., 1971). La
te en la ingestión de ferrocianuro férrico (azul de Prusia), hemo­ dermatitis parece causada más bien por la acción de un contami­
diálisis y diuresis forzada. El azul de Prusia se liga al talio en el nante, 2,3,7 ,8-tetraclorodibenzo-p-dioxina (TCDD) (2,4-D no
intestino, e intensifica su excrecÍón por las heces. Es importante contiene TCDD), cuya estructura es la siguiente:
no administrar agentes quelantes sistémicos, porque incremen­
tan la captación de talio en el cerebro (Hayes, 1982).

r
.a
Herbicidas

om
2,3,7,B-TETRACLORODIBENZO-P-DIOXINA (TCDD)

En los últimos 20 años ha aumentado en grado extraordi­


La exposición a la TCDD se produce no sólo por herbicidas,
nario la, fabricación y el empleo de sustancias para des­

s.c
sino también al ser liberado éste en diversos procesos industria­
truir yerbas nocivas. Los herbicidas superan abora a los les, como sería la combustión de compuestos organoclorados y
insecticidas en términos de cantidades usadas y precio de el blanqueamiento de la pulpa de papel.
venta. Algunos compuestos de esta categoria tienen muy
ico
La TCDD es particularmente tóxica en algunas especies. Su
poca toxicidad en mamíferos, pero otros son fuertemente LDso es de 0.6 ,ug/kg en cobayos, pero esta cifra es \O 000 veces
tóxicos y han causado la muerte en seres humanos. Existe mayor en ericetas. Se desconoce el mecanismo de la muerte.; se
ed

preocupación creciente por los efectos que tienen los her­ han observado cambios morfológicos en hígado, timo y órganos
bicidas en la salud pública, porque puede haber "fugas" de la reproducción, pero no son lo bastante intensos como para

durante su aplicación en agricultura y contaminación de explicar el faUecimiento. La TCDD no muestra efecto tóxico
sm

alguno en cultivos celulares; es un inductor potente de la activi­


los abastos de agua potable.
dad de hídroxílasa de aril hidrocarburo, una monooxigenasa mi­
crosórnica que depende de citocromo P450 (Poland y GIover,
te

Compuestos clorofenoxi. Los compuestos ácido 2,4-dicloro­


1974). También es un teratógeno potentísimo (Neubert y col.,
fenoxiacético (2,4-D) y ácido 2,4,5-triclorofenoxiacético (2,4,5-
1973), y se ha demostrado su acción carcinógena en animales de
un

T) Y sus sales y ésteres, son quizá los herbicidas más conocidos.


laboratorio (Van Miller y col., 1977; Kociba y col., 1978). En
Sus fórmulas estructurales son:
consecuencia, en Estados Unidos se prohibió el empleo y la fa­
ap


bricación de esta sustancia.
CI
L. exposición accidental ha puesto en claro que la TCDD
C OCH,COOH tiene poca toxicidad en seres humanos, en comparación con al­
w.

gunas especies como el cobayo (Holmstedt, 1 980). Los efectos


de la intoxicación por TCDD en sujetos expuestos consisten en
ww

ACIDD 2,4-DICLOROFENOXIACETICO (2,4-D) cloracné, portirla, hipercolesteremia y perturbaciones psiquiá­


tricas (Hayes, 1982). Durante la guerra de Vietnam, el agente
CI
naranja, que es una mezcla de 2,4-D y 2,4,5-T (contammado
con TCDD), se roció en grandes zonas boscosas y se supone
CI CH'COOH
que muchos soldados quedaron expuestos a él. Los estudios epi­
demiológicos, aunque controvertidos, no señalan efectos adver­
CI
sos de la TCDD en la salud de los veteranos de dicho conflicto
ACIDO 2,4, 5-TRICLOROFENOXIACETICO (2,4,5-T) bélico. No se ha observado diferencia en la concentración plas­
mática de dicha sustancia (TCDD) entre estos sujetos y la po­
Los dos agentes se utilizan para controlar hierbas de hoja blación general, lo cual denota que la exposición de los solda­
ancha en campos de cultivo, y también plantas leñosas en carre­ dos estadounidenses en Vietnam a la TCDD fue mucho menor
teras y en zonas expropiadas (derecho de vía); los compuestos que lo sospechado (Centers for Disease Control, 1 988). Sin em­
actúan como honnonas del crecimiento en plantas. Al parecer, bargo, se han realizado estudios epidemiológicos que incluye­
animales muertos por dosis masivas de 2,4-D faUecieron de fi­ ron personas expuestas a concentraciones altas de dioxinas en la
brilación ventricular. En dosis menores, cuando la muerte no es industria química y en explosiones químicas. Los estudios en
inmediata surgen varios signos de ataque neuromuscular, como cuestión sugirieron que la TCDD podría ser carcinógena en hu­
rigidez de extremidades, ataxia. parálisis y, al final, coma. Son manos, si está presente en grandes cantidades (Hutfy col., 1994).
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1802 Sección XVJ/ Toxicolog/Q

Dinitrofenoles. En el control de hierbas se utilizan algunos ción en cadena de la peroxidación de Iípidos así iniciada semeja
dinitrofenoles sustituidos, solos o como sales de aminas o álcalis un poco la descrita para el tetracloruro de carbono (Smith, 1988).
alifáticos. S e ha señalado intoxicación por dinitroortocresol Dada la intensa toxicidad tardía que impone el paraquat a los
(DNOC) en seres humanos. La toxicidad a corto plazo de los pulmones, es importante el tratamiento inmediato. Consiste en
dinitrofenoles se debe al desacoplamiento de la fosforilación eliminar el tóxico de las vías alimentarias mediante lavado gás·
oxidativa. El metabolismo del sujeto intoxicado puede aumen­ trico y uso de catárticos, impedir su absorción mayor (por inges·
tar en grado extraordinario, al igual que su temperatura corpo­ tión de tierra de diatomeas), y eliminar el herbicida absorbido,
ral. En el ser humano, los signos y síntomas de intoxicación aguda por medio de hemodiálisis o hemoperfusión (Cavalli y Fletcher,
consisten en náuseas, inquietud, hiperemia cutánea, hiperhidro­ 1977; Dav;es y col., 1977).
sis, taquipnea, taquicardia, fiebre, cianosis y, por último, colap­ En un estudio se demostró que 2 1 % de las muestras de mari·
so y coma. El cuadro sigue un curso rápido y el individuo muere huana de la región suroeste de Estados Unidos y 3.6% de las
o se restablece en ténnino de 24 a 48 h. Si la producción de calor obtenidas en todo el país estaban contaminadas con paraquat. El
rebasa su capacidad de disipación, puede haber hipertermia origen de la contaminación fue un programa de dispersión aérea
mortal. El tratamiento específico consiste en baños de agua he­ efectuado en México. Se calcula que quienes fuman marihuana
lada y hielo (para aplacar la fiebre), administración de oxígeno y se exponen a 0.5 rng o más de paraquat cada año, por inhala­
corrección de desequilibrios hidroelectrolíticos. Es importante ción. Sin embargo, es probable que una gran cantidad de la sus·

r
tancia sea pirrolizada al quemarse las hojas. Aunque no se ha

.a
no utilizar salicilatos, que pueden contener un grupo fenólico,
durante el tratamiento del contacto con dinitrofenoles. registrado entre fumadores de marihuana ningún caso clínico de

om
intoxicación por paraquat, tampoco se ha hecho una investiga·
Compuestos de bipiridil. Desde el punto de vista toxicológico, ción sistemática en dichas situaciones (Landrigan y co1., 1 983).
el paraquat es el compuesto más importante entre este tipo de
herbicidas. Su fórmula estructural es: Otros herbicidas. Se conoce un gran número de herbicidas,

s.c
que en su mayor parte poseen una toxicidad aguda relativamen­

OÑ-CH3 ico te pequeña en mamíferos; comprenden carbamatos (comoprofam


y barban), ureas sustituidas (como monurón y diurón), triazinas
(como atrazina y el compuesto similar a aminotriazol), deriva­
PARAQUAT dos anilínicos (como alaclar, propaclor y propanil), derivados
de dinitroanilina (como triflualin), y derivados del ácido benzoico
ed
En los últimos 1 0 años se han señalado cientos de casos de
(como amibén).
suicidio o muerte accidental por intoxicación con paTaquat. Las
alteraciones observadas en l a necropsia indican lesión de pul­
m

mones, hígado y riñones, y a veces miocarditis. El signo patoló­


Fungicidas
es

gico más notable es la proliferación amplia de células fibroblás­


ticas en los pulmones, efecto que no depende de la vía de
administración. La ingestión del paraquat causa perturbaciones Los fungicidas, como otros tipos de plaguicidas, constitu­
t

gastrointestinales en término de horas, pero después de varios yen un grupo heterogéneo de compuestos químicos. Con
un

días pueden sobrevenir los síntomas respiratorios y la muerte algunas excepciones, no han sido objeto de investigación
por insuficiencia respiratoria. toxicológica detallada. A pesar de que muchos de estos
ap

Se ha postulado un mecanismo bioquímico de la lesión pul­ compuestos se utilizan para controlar micosis en plantas,
monar inducida por el paraquat (Bus y col., 1976) (fig. 67-7). Se semillas y productos agrícolas, y son relativamente atóxicos
piensa que dicho compuesto se somete a reducción-oxidación
a corto plazo, hay excepciones notables; los fungicidas
w.

cíclica monoelectrónica, con la formación de un radical anión


mercuriales han causado la mayor preocupación. Han oca­
superóxido (02-). Por mecanismos no enzimáticos este radical
sionado muchas muertes o incapacidad neurológica per­
ww

se transforma en oxígeno simple, que ataca los lípidos poliinsa­


manente, como consecuencia de consumo equivocado por
turados presentes en las membranas celulares, para formar
hidroperóxidos lipídicos; estos últimos son inestables en pre­
parte de seres humanos y animales, de los cereales y semi­
sencia de cantidades ínfimas de iones metálicos de transición, y llas tratados. Los efectos tóxicos del mercurio y sus com­
se descomponen hasta la forma de radicales sin Iípidos. La reac- puestos se exponen en el capítulo 66.

Lípidos
poliinsaturados d e
membrana celular Hidroperóxidos I¡pidos
� +
---.�

0 ,-
NADPH Paraquat Radicales ' Oxigeno simple
lFe
superóxido
.Super6xido
Radicales lípidos libres

dlsmutasa
NADP Paraquat Calalasa
reducido H202 -"-'--'-'_. H20

Fig. 67-7. Mecanismo propuesto de tox;cos;s pulmonar por paraquat.


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Capítulo 67 Tóxicos ambientaies 110 metálicos 1803

Ditiocarbamatos. Los fungicidas de este grupo se utilizan a dependientes de citocromo P450 (Carlson y Tardiff, 1976). En
menudo en agricultura. Su toxicidad aguda es pequeña y las ci­ Turquía, entre 1955 y 1959, se detectaron en seres humanos más
fras de LDso ingerida en ratas varían desde cientos de miligra· de 300 casos de intoxicación, consecutiva al consumo �e trigo
mos hasta varios gramos por kilogramo. Excepto la dermatitis tratado con hexaclorobenceno (Schmid, 1960). Algunos sujetos
por contacto inducida por el ditiocarbamato (Fisher, 1983), hay murieron y el síndrome principal fue la porfiria cutánea, con le­
pocos datos de lesión en seres humanos por exposición a estos siones de la piel, porfirinuria y fotosensibilización. El hexaclo­
compuestos. No obstante, pudieran tener alguna capacidad tera· robenceno se elimina del cuerpo principalmente por las heces,
tógena, carcinógena o de ambos tipos (Organización Mundial como consecuencia de excreción intestinal. Este proceso puede
de la Salud, 1 975). Las fórmulas generales de dos grupos de intensificarse al quíntuple en monos rhesus, si se administra acei­
ditiocarbamatos que se han utilizado, losdimetilditiocarbamatos te mineral por vía oral (Rozman y col., 1983).
y los etilenbisditiocarbamatos son:

]
Pentaclorofenol. Esta sustancia se utiliza como insecticida y
5 herbicida, y también como fungicida, y encuentra su aplicación
H3C
, Catión
¿� Catión
CH2-N H- principal como conservador de la madera. Su empleo ha ocasio­
[ /N-�-5- metálico tH,-NH- C metálico
....... nado algunos casos de intoxicación en seres humanos. La ac­
HaC S \\ ción tóxica aguda de este compuesto en personas y animales de

r
5
experimentación se asemeja a la de los herbicidas nitrofenó1icos,

.a
DIMETILDITIOCARBAMATOS ETILENBISDITIOCARBAMATOS e incluye un Incremento notable en el metabolismo, como con­

om
secuencia del desacoplamiento de la fosforilación oxidativa. El '
Los nombres de los fungicídas provienen de los cationes me­ pentaclorofenol se absorbe fácilmente por la piel. En la sala de
tálicos. Por ejemplo, si el catión es zinc o hierro, el dimetil­ cunas de un hospital surgieron dos casos mortales de intoxica­
ditiocarbamato correspondiente es ziram o ferbam. En el caso

s.c
ción y otros no mortales; en la lavandería se había utilizado
de manganeso, zinc o sodio como catión en la serie de díetilditio­ pentaclorofenol como fungicida, que luego entró en contacto con
carbamato, el fungicida respectivo es maneb, zineb o nabam. la piel de los lactantes a través de los pañales (Armstrong y col.,
ico
Según infonnes, algunos dimetilditiocarbamatos son teratóge­ 1969).
nos en animales y fonnao nitrosamioas in vitro e in vivo (IARC, En años recientes se ha advertido que muchas muestras comer­
1974b; Organización Mundial de la Salud, 1975). Se afirma que ciales de pentaclorofenol están contaminadas con dibenzodio­
ed

los etilenbisditiocarbamatos son teratógenos. Aún más, este grupo xinas y dibenzofuranos policlorados (Buser, 1975); en general,
de compuestos se desdobla para formar etitentiourea (ETU) in dichos contaminantes son menos tóxicos que la tetraclorodioxina
vivo, en el entorno y durante la cocción de alimentos que contie­ (TCDD) en eI 2,4,5-T. El pentaclorofenol es fuertemente tóxico
sm

nen sus residuos. La ETU es carcin6gena, mutágena y terat6ge­ por si mismo, pero algunos estudios sugieren que los contami­
na, y también un agente antitiroideo (IARC, 1974b, 1976). Los nantes pudieran ser la causa de algunos de los efectos adversos
fungicidas ditiocarbamato son análogos del disu!firam y produ­ del producto de "grado técnico" (Johnson y col., 1973; Goldstein
te

cen una reacción semejante a la de este compuesto cuando el y col., 1976). El tratamiento de la intoxicación por pentaclorofe­
sujeto ingiere etanol (cap. 17). nol es semejante al que se hace en la causada por dinitrofenoles.
un

La administración de colestiramina intensifica la excreción de


Hexaclorobenceno. La exposición a este compuesto ocasio­ pentaclorofenol por las heces (caps. 36 y 38), ya que interrumpe
ap

na incrementos en el peso del hígado, en la cantidad de retículo la circulación enterohepática del producto químico (Rozman y
endoplásmico liso y en las actividades de las monooxigenasas col., 1982).
w.

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