Professional Documents
Culture Documents
Durante estos día de novena en honor a San Francisco de Asís, vamos acompañar a este Santo,
conociendo su búsqueda de la voluntad de Dios en su vida. Francisco como todo joven tuvo sus
luchas internas y buscó su camino por medio de encuentros consigo mismo, con los enfermos, con
los amigos, con el mismo Cristo. Esta misma búsqueda que todo joven realiza hoy. La búsqueda de
Francisco sigue siendo vigente para el joven de hoy.
__________________________________________________
Durante su adolescencia Francisco soñaba con ser un caballero, por ello fue a pelear a la guerra
donde calló prisionero, y estando en la cárcel de Perusa, comenzó a descubrir uno de los primeros
signos de que en su corazón se estaban dando algunos cambios fundamentales. Éste fue quizás el
primer encuentro que experimentó el joven Francisco. Su adolescencia había transcurrido
superficialmente entre las fiestas juveniles, los cuidados de su madre, el derroche en vestidos
lujosos y en afanes de gloria, pero, sobre todo, en medio de la irresponsable seguridad que le daba
la cuantiosa fortuna de su padre. El fracaso en la batalla de Perusa y los rigores de la cárcel seguidos
de la enfermedad y las contrariedades, le obligaron a fijarse en sí mismo, a mirar su propia realidad,
a pensar que su existencia tenía una razón de ser y una misión que cumplir, a reconocer sus
limitaciones y a preocuparse por dar una orientación precisa a su vida y señalarle una meta
determinada. Por ello le pregunta a Dios “Señor, ¿qué quieres que haga?, esa pregunta se convirtió
en una oración constante en los labios de Francisco.
“Si no es Dios la Razón de nuestros deberes, no existe ninguno” (Fray Mamerto Esquiu)
PETICIONES:
A cada invocación respondemos: Por intercesión de San Francisco de Asís, escúchanos Señor.
1. Te pedimos Señor, por el aumento de vocaciones en la Iglesia, para que los jóvenes sepan
discernir la vocación a la que Tú les llamas. Oremos.
2. Para que las familias cristianas sean hogar y fuente donde puedan nacer futuras vocaciones
para la Iglesia. Oremos.
3. Te pedimos Señor, por cuantos no encuentran sentido a su vida, para que en Ti encuentren
la razón de su existir. Oremos
“No puede darse una auténtica libertad que no sea libertad en el orden” (Fray Mamerto Esquiu)
PETICIONES:
A cada invocación respondemos: Por intercesión de San Francisco de Asís, escúchanos Señor.
1. Te pedimos Señor, por todos los jóvenes para que estén abiertos a escuchar la llamada que
Dios les haga y busquen siempre realizar el mejor servicio a los otros. Oremos.
2. Por toda la Iglesia, por cada uno de los cristianos, sepamos anunciar, con nuestra forma de
vivir y con nuestra palabra, la Buena Noticia de Jesús. Oremos.
3. Te pedimos Señor, por los pobres y excluidos de la sociedad, para que al ejemplo de San
Francisco sepamos acogerlos. Oremos.
4. Por tantos jóvenes que están buscando su camino, para que descubran la alegría de entregar
sus vidas por completo a vivir el Evangelio. Oremos.
PETICIONES:
A cada invocación respondemos: Por intercesión de San Francisco de Asís, escúchanos Señor.
1. Te pedimos Señor, por todos los jóvenes para que estén abiertos a escuchar la llamada que
Dios les haga y busquen siempre realizar el mejor servicio a los otros. Oremos.
2. Por todos nosotros, para que descubramos cada día la llamada y el envío que el Señor nos
hace. Oremos.
3. Te pedimos Señor, para que siempre haya corazones jóvenes dispuestos a seguir la llamada
de Dios y dedicar su vida al servicio de sus hermanos, siendo testigos de esperanza. Oremos.
4. Por los laicos, para que vivan su vida con entusiasmo como respuesta a la llamada al
seguimiento del Señor. Oremos.
“Dios se mece sobre los hombres, como el sol centellea sobre los planetas” (Fray Mamerto Esquiu)
PETICIONES:
A cada invocación respondemos: Por intercesión de San Francisco de Asís, escúchanos Señor.
1. Te pedimos Señor, los jóvenes, para que sean generosos en su seguimiento a Jesucristo.
Oremos.
2. Por toda la Iglesia, por cada uno de los cristianos, sepamos anunciar, con nuestra forma de
vivir y con nuestra palabra, la Buena Noticia de Jesús. Oremos.
3. Te pedimos Señor, por los pobres y excluidos de la sociedad, para que al ejemplo de San
Francisco sepamos acogerlos. Oremos.
4. Por las familias cristianas, para que sean hogar y fuente donde puedan nacer futuras
vocaciones para la Iglesia. Oremos.
“Al hombre toca trabajar y a Dios el dar los frutos; Él sabe muy bien lo que nos conviene, es dueño
absoluto y exclusivo de todo, y es infinitamente bueno para no tener sobre nosotros más que
pensamientos de paz y de amor” (Fray Mamerto Esquiu)
PETICIONES:
A cada invocación respondemos: Por intercesión de San Francisco de Asís, escúchanos Señor.
1. Para que Cristo, que reunió a sus discípulos a su alrededor con el fin de asociarlos a su
predicación evangélica, suscite también en nuestros días servidores de su Evangelios. Oremos.
2. Para que las familias cristianas sean hogar y fuente donde puedan nacer futuras vocaciones
para la Iglesia. Oremos.
3. Por todos los jóvenes que se forman, viven y celebran la fe, para que sepan discernir la
vocación a la que el Señor les llama. Oremos
“La Iglesia no es otra cosa que la continuidad de la persona de Cristo” (Fray Mamerto Esquiu)
PETICIONES:
A cada invocación respondemos: Por intercesión de San Francisco de Asís, escúchanos Señor.
1. Te pedimos Señor, por todos los jóvenes para que estén abiertos a escuchar la llamada que
Dios les haga y busquen siempre realizar el mejor servicio a los otros. Oremos.
2. Por toda la Iglesia, por cada uno de los cristianos, sepamos anunciar, con nuestra forma de
vivir y con nuestra palabra, la Buena Noticia de Jesús. Oremos.
3. Para que quienes han escuchado la llamada del Señor a la vida religiosa o al sacerdocio, para
que no se desanimen ante las tentaciones que los rodean. Oremos.
4. Por tantos jóvenes que están buscando su camino, para que descubran la alegría de entregar
sus vidas por completo a vivir el Evangelio. Oremos.
“La religión es algo más que sus ministros, es mucho más que las personas; es la vida de los
pueblos” (Fray Mamerto Esquiu)
PETICIONES:
A cada invocación respondemos: Por intercesión de San Francisco de Asís, escúchanos Señor.
1. Para que el Señor, suscite en los jóvenes el deseo de consagrarse exclusivamente a su amor y
al servicio de su Iglesia. Oremos.
2. Para que el ejemplo de la Virgen María, la siempre joven y disponible a hacer la voluntad de
Dios, entusiasme a nuestros jóvenes a plantearse la vocación consagrada y a responder con
generosidad. Oremos.
3. Te pedimos Señor, que los jóvenes encuentren en la Virgen María, una Madre que los
acompañe siempre en su caminar. Oremos.
4. Por las familias cristianas, para que sean hogar y fuente donde puedan nacer futuras
vocaciones para la Iglesia. Oremos.
“La religión es algo más que sus ministros, es mucho más que las personas; es la vida de los
pueblos” (Fray Mamerto Esquiu)
PETICIONES:
A cada invocación respondemos: Por intercesión de San Francisco de Asís, escúchanos Señor.
1. Te pedimos Señor, por todos los jóvenes para que estén abiertos a escuchar la llamada que
Dios les haga y busquen siempre realizar el mejor servicio a los otros. Oremos.
2. Para que los matrimonios y familias cristianas vivan su vocación con fidelidad y se conviertan
en un símbolo claro del amor de Cristo a su Iglesia. Oremos.
3. Para que quienes han escuchado la llamada del Señor a la vida religiosa o al sacerdocio, para
que no se desanimen ante las tentaciones que los rodean. Oremos.
4. Para que las familias sean sensibles al despertar vocacional de sus hijos y les ayuden a
descubrir y cumplir la voluntad de Dios es sus vidas. Oremos.
“Cuanto bien hace a mi alma el sentir la verdad, la grandeza infinita, la ternura inagotable del
Buen Jesús” (Fray Mamerto Esquiu)
PETICIONES:
A cada invocación respondemos: Por intercesión de San Francisco de Asís, escúchanos Señor.
1. Para que Cristo, que reunió a sus discípulos a su alrededor con el fin de asociarlos a su
predicación evangélica, suscite también en nuestros días servidores de su Evangelios. Oremos.
3. Por todos los jóvenes que se forman, viven y celebran la fe, para que sepan discernir la
vocación a la que el Señor les llama. Oremos