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3 Hacia un concepto del Derecho Agrario

El estudio, comprensión y uso de las instituciones jurídicas supone necesariamente el


análisis de sus comienzos, incluyendo las razones histórico-económicas y políticas de su
creación, el desarrollo de las mismas en el devenir temporal y la razón de su permanencia
en los actuales tiempos lo cual justifica su existencia; porque el derecho en el mundo
moderno, cargado de prisa y rápida evolución, se justifica en la medida en que es útil al
hombre, en tanto y en cuanto ciertamente cumpla con su misión natural de regular la vida
de éste en sociedad. El desarrollo de la actividad agrícola y pecuaria, por parte del hombre
como mecanismo para la creación y conservación de vida y como factor explotación
económica para la subsistencia propia de él, nace lógicamente en los inicios de la
humanidad. Este hecho humano ha sido regulado por el derecho desde los inicios del
tiempo como corresponde al desarrollo de la labor cultural jurídica. Esta comenzó a crear
normas desde los mismos comienzos de la existencia humana, y produjo normas
tendientes a orientar la vida social del hombre, el cual es el objetivo final del derecho
como ente regulador de la vida social. (Hernadez, 2012).

Para definir o conceptualizar el derecho agrario, es necesario partir de los conceptos


manejados por varios autores. Pero la cuestión no estriba en buscar una definición formal
uniforme, sino en individualizar los caracteres esenciales del Derecho Agrario, en hallar
aquellas notas que le son propias y hacen de él un cuerpo jurídico diverso. Según Remo
di Natale citado por el profesor en Derecho Agrario Ivo Alvarenga de la Universidad de
El Salvador, no todos están de acuerdo en que tal búsqueda sea posible. Para algunos
autores, o carece de sentido tratar de hallar un concepto de Derecho Agrario por la sencilla
razón de que éste no existe como rama jurídica autónoma o al menos no es posible dar un
concepto de validez general, ya que están diversa la legislación de un lugar a otro que
"puede considerarse que hay tantos derechos agrarios como países".

La legislación tiende a ser diferente de un país a otro, si bien es cierto que esta posee la
tendencia a uniformarse en sistemas cuya homogeneidad tiene origen en la tradición
histórico-cultural común, en la vecindad geográfica y, sobre todo, en la similar
organización política, económica y social. Entre sistema y sistema, además, tiende a
existir una recíproca influencia, máxime cuando a través de convenios internacionales se
procura conscientemente uniformar las normas, o cuando por efecto de la asistencia
técnica de los organismos internacionales, para los problemas semejantes que afrontan
países diversos se proponen soluciones jurídicas similares.

Características generales del Derecho Agrario

1. es una rama del Derecho que busca la trasformación de la sociedad, y promueve el


cambio de estructuras fundamentales que la conforman;

2. tiene carácter publicístico: muchas de sus normas son de orden público, debe destacarse
el interés social que inspira a sus normas y a sus principios;

3. es un Derecho de protección o tuitivo: por cuanto busca la protección de un importante


sector de la sociedad;

4. es un Derecho especial, porque sus normas se refieren a un sector de la sociedad, a una


actividad específica e inclusive pueden regir sólo para determinadas regiones del país;
5. tiene una íntima vinculación con otras ciencias, que colaboran con el desarrollo de esta
rama del derecho.

6. El Derecho Agrario es Democrático, porque sus normas van dirigidas a lograr el


propósito de que la tierra sea para las masas trabajadoras que la laboran.

El derecho agrario es realista y objetivo, el primero porque sitúa y examina al hombre


dentro del marco de su realidad social y pretende resolver sus problemas que surgen de
la actividad agropecuaria. El segundo porque las cuestiones que ya existen y las que
emanen con motivo de su aplicación, tienden a resolverlas con base en hechos objetivos.

Para finalizar el profesor Alvarenga indica que, en el caso del Derecho Agrario, el objeto
sobre el cual recae, es decir la agricultura, se encuentra presente en todo el mundo, es
natural por tanto que si no como sistema de leyes positivas y doctrina, al menos como
leyes se le encuentre en prácticamente todo el orbe. la agricultura cambia según las
diferentes zonas geográficas y conforme el estado de la técnica; pero en esencia se trata
de un mismo fenómeno económico. Las relaciones sociales que surgen como efecto del
ejercicio de la agricultura, varían según el régimen político-económico vigente; pero
como decíamos hace un momento, las soluciones legislativas tienden a agruparse en
sistemas y los sistemas entre sí presentan rasgos comunes.

4 Las Actividades Agrarias


Varela Guzmán afirma que, en el Ecuador el sector agropecuario es y continuará siendo
el verdadero motor productivo de la economía ecuatoriana, la actividad agropecuaria
genera efectos multiplicadores para la economía, su importancia social es evidente ya que
genera gran cantidad de empleo. Todas esas características gracias a la calidad de su suelo
y ubicación geográfica, generan una gran biodiversidad, una exuberante flora y fauna
base de la agricultura y ganadería.

Conceptuar el Derecho Agrario equivale a determinar qué son las actividades agrarias.
Primero que nada, cabe distinguir entre actividades esencialmente agrarias y actividades
agrarias por conexión. Aquéllas por su esencia, por su propia naturaleza, participan de la
característica de la agrariedad. Las segundas, cambio, no serían agrarias en sí mismas; tal
cualidad la adquieren por la conexión que en determinado momento guardan con una
actividad esencialmente agraria. (Alvarenga, s.f)

En este contexto Ballarín Marcial citado por Alvarenga afirma que, las actividades
esencialmente agrarias serían la agricultura, la ganadería y la silvicultura. También lo
define como la actividad dirigida a obtener productos del suelo mediante la
transformación o aprovechamiento de sus sustancias físico-químicas en organismos vivos
de plantas o animales, controlados por el agricultor en su génesis y crecimiento".

Los caracteres que deben concurrir para que una actividad se considere esencialmente
agraria son:

a) Que tenga por objeto la producción de organismos vivos, vegetales o animales,


bajo el control del hombre.
Este literal indica que la producción debe estar bajo control del hombre, lo que no quiere
decir que si la actividad se escapa de dicho control pierde su agrariedad. Sino lo que el
profesor Alvarenga sostiene es que debe haber un control humano consciente y
sistemático en el proceso productivo, afectante a todo lo controlable; o sea, si hay aspectos
que al hombre no le es dable controlar o que circunstancias adversas hacen escapar de su
control, siempre habrá actividad agraria.

b) Que esté en relación con una cierta extensión de terreno agrícola, y para mayor
precisión podríamos decir que con una explotación agropecuaria, aprovechándose
la fuerza productiva natural de la tierra.

En este punto la noción de terreno agrícola, debe tratarse de tierra capaz de producir. Pero
nadie llamaría terreno agrícola a una maceta doméstica por grande que sea, ni siquiera al
jardín de una casa; es más, un campo deportivo, por extenso que resulte, de golf, por
ejemplo, aunque se nos antoje que podría ser ocupado para sembrarlo, no responde a la
idea que tenemos de lo que es terreno agrícola. Esta importa un predio que, por su
extensión, su localización, su destinación, lo suponemos consagrado a la agricultura y
apto para ello.

La explotación agropecuaria implica básicamente un terreno productivo, pero por


añadidura comporta elementos materiales y humanos vinculados teleológicamente, por el
aunamiento de sus esfuerzos hacia la producción. La relación, pues, con cierta extensión
de terreno agrícola y más propiamente con una explotación agropecuaria, es requisito
infaltable de la actividad esencialmente agraria

c) Que tenga por objeto el aprovechamiento económico de aquellos organismos


vivos.

Este literal se refiere a el aprovechamiento económico de los organismos producidos,


cabe quizás insistir sólo en el alcance del adjetivo "económico". Sabemos que dicho en
términos sencillos el hombre desarrolla una actividad económica cuando produce bienes
y servicios para satisfacer sus necesidades, por una parte; y cuando, por otra, dicha
producción se efectúa en el modo más racional y eficiente posible, cuando al mínimo de
esfuerzos corresponde un máximo de provecho.

(Alvarenga, s.f)

6 LOS FINES DEL DERECHO AGRARIO

La finalidad del Derecho Agrario se redujo en un principio a la propiedad de la tierra rural


y a su cultivo. Actualmente el objeto del Derecho Agrario es la actividad agraria en su
totalidad y complejidad considerando sus actores y todos los elementos involucrados en
el proceso productivo hasta que llega al consumidor. (La Guia 2000, 2012)

Las actividades agrarias, lo sean por esencia o por conexión, y las instituciones y
actividades que le son directamente complementarias, son reguladas por el Derecho
Agrario con un criterio finalista.
Bibliografía
Alvarenga, I. (s.f). EL CONCEPTO DEL DERECHO AGRARIO. El Salvador.

Duque Corredor, R. J. (2018). Derecho agrario : estudios seleccionados. SERBIULA (sistema


Librum 2.0).

Hernadez, L. (2012). Temas de Derecho. Venezuela.

Jimenez, J. (2008). Comentarios a Ley de Tierras y Desarrollo Agrario. Barquisimeto-Venezuela:


Editorial Librería J. Rincón.

La Guia 2000, T. d. (2012). Objeto del derecho Agrario.

Varela, C. (2016). El proceso agrario en el Ecuador. Guayaquil-Ecuador: Revista Juridica.

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