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Un átomo es la unidad constituyente más pequeña de la materia que tiene las propiedades de

un elemento químico.3 Cada sólido, líquido, gas y plasma se compone de átomos neutros
o ionizados. Los átomos son muy pequeños; los tamaños típicos son alrededor de 100 p.m. (diez
mil millonésima parte de un metro).4

Modelo atómico probabilístico: Modelo probabilístico o estadístico es la forma que pueden tomar un conjunto de
datos obtenidos de muestreos de datos con comportamiento que se supone aleatorio.
Un modelo estadístico es un tipo de modelo matemático que usa la probabilidad, y que incluye un conjunto de asunciones
sobre la generación de algunos datos muéstrales, de tal manera que asemejen a los datos de una población mayor.
Las asunciones o hipótesis de un modelo estadístico describen un conjunto de distribuciones de probabilidad, que son
capaces de aproximar de manera adecuada un conjunto de datos. Las distribuciones de probabilidad inherentes de los
modelos estadísticos son lo que distinguen a los modelos de otros modelos matemáticos deterministas.

La tabla periódica de los elementos es una disposición de los elementos químicos en forma de tabla, ordenados por su número
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atómico (número de protones), por su configuración de electrones y sus propiedades químicas. Este ordenamiento
muestra tendencias periódicas, como elementos con comportamiento similar en la misma columna.

Períodos

En la tabla periódica los elementos están ordenados de forma que aquellos con
propiedades químicas semejantes, se encuentren situados cerca uno de otro.

Los elementos se distribuyen en filas horizontales, llamadas períodos. Pero los periodos
no son todos iguales, sino que el número de elementos que contienen va cambiando,
aumentando al bajar en la tabla periódica.

El primer periodo tiene sólo dos elementos, el segundo y tercer periodo


tienen ocho elementos, el cuarto y quinto periodos tienen dieciocho, el sexto periodo
tiene treinta y dos elementos, y el séptimo no tiene los treinta y doselementos porque
está incompleto. Estos dos últimos periodos tienen catorce elementos separados, para
no alargar demasiado la tabla y facilitar su trabajo con ella.

El periodo que ocupa un elemento coincide con su última capa electrónica. Es decir, un
elemento con cinco capas electrónicas, estará en el quinto periodo. El hierro, por
ejemplo, pertenece al cuarto periodo, ya que tiene cuatro capas electrónicas.

Grupos

Las columnas de la tabla reciben el nombre de grupos. Existen dieciocho grupos,


numerados desde el número 1 al 18. Los elementos situados en dos filas fuera de la
tabla pertenecen al grupo 3.

En un grupo, las propiedades químicas son muy similares, porque todos los elementos
del grupo tienen el mismo número de electrones en su última o últimas capas.

Así, si nos fijamos en la configuración electrónica de los elementos del primer grupo, el
grupo 1 o alcalinos:
Elemento Símbolo Última capa
Hidrógeno H 1s1
Litio Li 2s1
Sodio Na 3s1
Potasio K 4s1
Rubidio Rb 5s1
Cesio Cs 6s1
Francio Fr 7s1

La configuración electrónica de su última capa es igual, variando únicamente el periodo


del elemento.

Los números cuánticos son unos números asociados a magnitudes físicas conservadas en ciertos sistemas cuánticos. En muchos
sistemas, el estado del sistema puede ser representado por un conjunto de números, los números cuánticos, que se corresponden
con valores posibles de observables que conmutan con el Ha miltoniano del sistema. Los números cuánticos permiten caracterizar
los estados estacionarios, es decir, los auto valores del sistema.
En física atómica, los números cuánticos son valores numéricos discretos que indican las características de los electrones en los
átomos, esto está basado en la teoría atómica de Niels Bohr que es el modelo atómico más aceptado y utilizado en los últimos
tiempos por su simplicidad.
En física de partículas, también se emplea el término números cuánticos para designar a los posibles valores de
ciertos observables o magnitud física que poseen un espectro o rango posible de valores discretos.

Que son notaciones electrónicas: En química, la configuración electrónica indica la manera en la cual los electrones se
estructuran, comunican u organizan en un átomo de acuerdo con el modelo de capas electrónicas, en el cuál las funciones de ondas
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del sistema se expresa como un átomo o atómicamente un producto de orbitales antisimetrizadas. La configuración electrónica es
importante porque determina las propiedades de combinación química de los átomos y por tanto su posición en la tabla periódica.

Notación [editar]
Artículo principal: Orbital atómico

Se utiliza en una notación estándar para describir las configuraciones electrónicas de átomos y moléculas. Para los átomos, la
notación contiene la definición de los orbitales atómicos (en la forma n l, por ejemplo 1s, 2p, 3d, 4f) indicando el número de
electrones asignado a cada orbital (o al conjunto de orbitales de la misma subcapa ) como un superíndice . Por ejemplo,
el hidrógeno tiene un electrón en el orbital s de la primera capa, de ahí que su configuración electrónica se escriba 1s 1. El litio tiene
dos electrones en la subcapa 1s y uno en la subcapa 2s (de mayor energía), de ahí que su configuración electrónica se escriba
1s2 2s1 (pronunciándose "uno-ese-dos, dos-ese-uno"). Para el fósforo (número atómico 15), tenemos: 1s2 2s2 2p6 3s2 3p3.
Para átomos con muchos electrones, esta notación puede ser muy larga por lo que se utiliza una notación abreviada, que tiene en
cuenta que las primeras subcapas son iguales a las de algún gas noble. Por ejemplo, el fósforo, difiere
del argón y neón (1s2 2s2 2p6) únicamente por la presencia de la tercera capa. Así, la configuración electrónica del fósforo se puede
escribir respecto de la del neón como: [Ne] 3s2 3p3. Esta notación es útil si tenemos en cuenta que la mayor parte de
las propiedades químicas de los elementos vienen determinadas por las capas más externas.
El orden en el que se escriben los orbitales viene dado por la estabilidad relativa de los orbitales, escribiéndose primero aquellos
que tienen menor energía orbital. Esto significa que, aunque sigue unas pautas generales, se pueden producir excepciones. La
mayor parte de los átomos siguen el orden dado por la regla de Madelung. Así, de acuerdo con esta regla, la configuración
electrónica del hierro se escribe como: [Ar] 4s2 3d6. Otra posible notación agrupa primero los orbitales con el mismo número
cuántico n, de tal manera que la configuración del hierro se expresa como [Ar] 3d6 4s2 (agrupando el orbital 3d con los 3s y 3p que
están implícitos en la configuración del argón).
El superíndice 1 de los orbitales ocupados por un único electrón no es obligatorio.4 Es bastante común ver las letras de los orbitales
escritas en letra itálica o cursiva. Sin embargo, la Unión Internacional de Química Pura y Aplicada (IUPAC) recomienda utilizar letra
normal, tal y como se realiza aquí.
LAS PROPIEDADES PERIÓDICAS

Son propiedades que presentan los átomos de un elemento y que varían en la


Tabla Periódica siguiendo la periodicidad de los grupos y periodos de ésta. Por la
posición de un elemento podemos predecir qué valores tendrán dichas
propiedades así como a través de ellas, el comportamiento químico del elemento
en cuestión. Tal y como hemos dicho, vamos a encontrar una periodicidad de esas
propiedades en la tabla. Esto supone por ejemplo, que la variación de una de ellas
en los grupos o periodos va a responder a una regla general. El conocer estas
reglas de variación nos va a permitir conocer el comportamiento, desde un punto
de vista químico, de un elemento, ya que dicho comportamiento, depende en gran
manera de sus propiedades periódicas.

Los Elementos no metales son elementos químicos que no son buenos conductores de la corriente eléctrica y el calor, son muy
débiles por lo que no se pueden estirar ni convertir en una lámina.1
De los 118 elementos que se conocen, sólo 25 son no metales; su química a diferencia de los metales, es muy diversa, a pesar de
que representa un número muy reducido, la mayoría de ellos son esenciales para los sistemas biológicos
(oxígeno, carbono, hidrógeno, nitrógeno, fósforo y azufre). En el grupo de los no metales se incluyen los halógenos 1
(flúor, cloro, bromo, yodo, ástato y téneso) que tienen 7 electrones en su última capa de valencia, los gases nobles
(helio, neón, argón, kriptón, xenón, radón y Oganesón) que tienen 8 electrones en su última capa de valencia (excepto el helio, que
tiene 2) por lo tanto, dicha capa está completa y son poco reactivos.
Se denominan metales a los elementos químicos caracterizados por ser buenos conductores del calor y la electricidad. Poseen alta
densidad y son sólidos a temperatura ambiente (excepto el mercurio); sus sales forman iones electropositivos (cationes) en
disolución.1
La ciencia de materiales define un metal como un material en el que existe un solapamiento entre la banda de valencia y la banda
de conducción en su estructura electrónica (enlace metálico). 2 Esto le da la capacidad de conducir
fácilmente calor y electricidad (tal como el cobre) y generalmente la capacidad de reflejar la luz, lo que le da su peculiar brillo. En
ausencia de una estructura electrónica conocida, se usa el término para describir el comportamiento de aquellos materiales en los
que, en ciertos rangos de presión y temperatura, la conductividad eléctrica disminuye al elevar la temperatura, en contraste con
los semiconductores. Reaccionan químicamente con no metales, no son reactivos entre sí la gran mayoría de las veces (aunque
algunos formen aleaciones entre sí).

El modelo atómico de Schrödinger12 (1926) es un modelo cuántico no relativista. En este


modelo los electrones se contemplaban originalmente como una onda estacionaria de materia
cuya amplitud decaía rápidamente al sobrepasar el radio atómico.
El modelo de Bohr funcionaba muy bien para el átomo de hidrógeno. En los espectros
realizados para otros átomos se observaba que electrones de un mismo nivel energético
tenían energías ligeramente diferentes. Esto no tenía explicación en el modelo de Bohr, y
sugería que se necesitaba alguna corrección. La propuesta fue que dentro de un mismo nivel
energético existían subniveles. La forma concreta en que surgieron de manera natural estos
subniveles, fue incorporando órbitas elípticas y correcciones relativistas. Así, en 1916, Arnold
Sommerfeld modificó el modelo atómico de Bohr, en el cual los electrones solo giraban
en órbitas circulares, al decir que también podían girar en órbitas elípticas más complejas y
calculó los efectos relativistas.

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