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NEUROCIENCIA COGNITIVA: OTRO INCONSCIENTE. Por Iván Sandoval Carrión

Miércoles, 28 de Enero de 2015 11:10 Dr. Iván Sandoval Carrión

“Creo que podemos decir que los discernimientos de Freud sobre la naturaleza de la conciencia concuerdan con
los puntos de vistamás avanzados de la neurociencia contemporánea.” ANTONIO DAMASIO 1999.

El epígrafe sorprenderá a todos los que proponen que el psicoanálisis es una teoría caduca y una práctica clínica obsoleta a
causa delprogreso de las neurociencias y de la psicología cognitiva. Parece irónico que Antonio Damasio, uno de
los más prominentes neurocientíficos de la actualidad nos invite a revisitar la obra de Sigmund Freud, el padre
del psicoanálisis.

Aparentemente, con la declinación del conductismo en Norteamérica a partir de 1960, con


los importantes descubrimientos en neurociencias y con el surgimiento de las llamadas ciencias cognitivas, sostenidas en
la cibernética, la teoría general de los sistemas, la informática, la lingüística, la filosofía de la mente y
los descubrimientos en neurociencias de
los últimos veinte años, algunosneurocientíficos actuales están mejor dispuestos a reconsiderar el valor de
los escritos freudianos.

Estas nuevas lecturas de Freud por parte de


los investigadores no psicoanalistas han dado lugar a una gran cantidad de proyectos y
de textos buscando articulaciones entre las dos disciplinas. El entusiasmo ha llevado a algunos a hablar de
un “Neuropsicoanálisis” y a fundar una Asociación Internacional Neuropsicoanalítica en el
2001. Otros, como Eric Kandel, neurocientífico y Premio Nobel de Medicina, aunque conceden cierto valor
al psicoanálisis, proponen que la psicología que conviene al carácter científico de sudisciplina es la psicología cognitiva,
y por ello proponen hablar de Neurociencia Cognitiva, NC, nominación y abreviatura queusaremos en este texto.

Sin embargo, si se lee los textos neuropsicoanalíticos -y hay algunos muy atractivos e interesantes-
es evidente que la revalorizaciónde las propuestas freudianas no equivale a
la aceptación del inconsciente freudiano y lacaniano y de
los conceptos fundamentales delpsicoanálisis. Después de todo, un Neuropsicoanálisis no es el Psicoanálisis.

La NC desarrolla la mayor parte de sus observaciones y teorizaciones alrededor del tema de


la conciencia, retomado y remozado desde comienzos de los años 80. Sin embargo, aunque de un modo marginal,
los investigadores en estas disciplinas deben admitir laexistencia de procesos mentales inconscientes, para decirlo en térmi
nos cognitivos. Esta reconsideración de lo inconsciente les
ha sidoimpuesta por la clínica, por sus observaciones experimentales y por sus elaboraciones lógicas y conceptuales. Vam
os a ilustrarlo contres reflexiones:

El asunto de la informática. Los expertos en informática de la NC han establecido que la conciencia como función mental
y comoexperiencia fenomenológica de “aquí y ahora”es un proceso que maneja una cantidad muy limitada de unidades d
e información encada segundo, desde 1 hasta 16 bits, según Gerald Edelman, neurocientífico Premio Nobel
y versado en informática y filosofía de la mente. Para los neurocientíficos resulta casi inevitable admitir que la
mayor parte de los procesos mentales de aprendizaje, memoria ypensamiento cursan a través de procesos de
los que la conciencia no tiene ninguna noticia, y suponen el manejo de una cantidad inimaginable de bits por segundo.
En este punto conviene recordar que Freud sostenía que conciencia no es sinónimo de mente,puesto que casi toda la vida
mental discurre fuera de la conciencia.

El asunto de la eficacia de lo inconsciente. Se deriva de lo anterior.


Los procesos mentales inconscientes se expresan de modo eficaz através de pensamientos, afectos y actos motores y
de palabra que llegan a la conciencia. Recordemos nuevamente que Freud trató el tema de la eficacia dinámica de
lo inconsciente en un pequeño escrito de
1912, corolario de sus textos canónicos sobre elinconsciente freudiano, escritos entre 1899 y 1905.

El asunto de la clínica.Se articula con los dos anteriores. Hoy como en tiempos de Freud, la psicología y la clínica de
la conciencia nopermite una explicación satisfactoria de algunos fenómenos clínicos.
Si una pretensión básica de muchas prácticas científicas es laexplicación, parece que la NC no puede esquivar el asunto de
lo inconsciente. Actualmente la mayor parte de
los neurocientíficoscomo Kandel, Edelman, Damasio y Panksepp, admiten que lo inconsciente es algo más que la serie de
actos motrices y automáticosque ejecutamos cotidianamente, como pensaba la neurociencia de hace 30 años.

Esta aceptación de lo inconsciente no obliga a la NC a admitir el inconsciente del psicoanálisis.


Los distintos fundamentosepistemológicos de las dos prácticas, las neurociencias y el psicoanálisis, no lo permiten.
En coherencia con su lógica interna, la NC debe desarrollar su propia teoría de los procesos inconscientes, distinta a la
del psicoanálisis.

Las teorías acerca de lo inconsciente en la NC no son una piedra angular en su edificio teórico. El cuerpo conceptual
de esta disciplina gira más bien alrededor de la conciencia, y
de ella se desprenden los intentos de explicación sobre lo inconsciente. Esto eslógico. En este aspecto,
la situación no es muy diferente a la que imperaba en los primeros tiempos de Freud, cuando él señalaba que en
la filosofía de su época, en la psicología oficial y en la elaboración teórica de los clínicos de su tiempo, como Pierre Janet,
el inconsciente era considerado como un no-consciente, o como una segunda conciencia paralela con
la misma dinámica y propiedades que la conciencia oficial.

Otra consideración importante es el hecho de que la


NC concibe al aparato psíquico como un sistema de procesamiento deinformación. Más allá de la experiencia de
la conciencia como vivencia fenomenológica, su ocurrencia es en buena medida el efectode
un trabajo sobre la información. Una teoría sobre lo inconsciente en la NC, es igualmente una teoría sobre el manejo de
lainformación, pero de características particulares en cuanto a su velocidad, amplitud y sistemas involucrados.

Con estos antecedentes, los trabajos sobre lo inconsciente en la NC giran básicamente alrededor de
dos aspectos fundamentales y relacionados entre si: el asunto de la “localización” de lo inconsciente y el de
los modelos funcionales.

En lo que concierne a la “localización”, la NC actual


ha superado el nivel del localizacionismo estrecho e ingenuo que se derivó de
los trabajos pioneros de Broca y Wernicke sobre las afasias en
la segunda mitad del siglo XIX. Estos dos investigadores, siguiendo elmétodo anatomo-
clínico, descubrieron un correlato en sus pacientes entre ciertas formas clínicas de afasia y lesiones muy definidaslocaliza
das en zonas específicas de la corteza cerebral, en el hemisferio izquierdo. Había nacido el localizacionismo.

Estos descubrimientos impulsaron a otros investigadores a buscar las áreas cerebrales que controlan el funcionamiento de
diversasfunciones sensoriales y mentales en las décadas siguientes. Esta vía llevó posteriormente a plantear el problema e
n términos ingenuosy estrechos, bajo el supuesto de que había un lugar anatómico circunscrito para cada función o para ca
da síntoma.

No es raro que en esta lógica muchos se hayan planteado la pregunta por el lugar anatómico del inconsciente freudiano, ig
norandoque Freud indicó en varias ocasiones que su inconsciente no era un lugar anatómico.

Menos mal que la NC


actual renunció hace algunas décadas al localizacionismo ingenuo gracias al replanteo del asunto del
localizacionismo que se deriva de la teoría de los sistemas funcionales de Alexander Luria construida a partir de
1960. Esta teoríapropone que la producción de las diversas funciones no es el efecto de un solo órgano o tejido en
particular, sino más bien el emergente de
la interacción y conexión de varios órganos y tejidos. Es verdad que una lesión de cierta extensión en la llamada área
de Broca enel lóbulo frontal izquierdo, producirá invariablemente una afasia de expresión además de ciertos trastornos mo
tores; perola emisión del lenguaje hablado es un proceso en el que intervienen otras regiones de la corteza y
del sistema nervioso, además del área de Broca.

Actualmente, ningún autor de la NC se plantea el tema de


la localización del inconsciente freudiano en términos de anatomía cerebral.Cualquier propuesta se formula en términos de
un sistema funcional.

El interesante libro El Universo de


la Conciencia o Cómo la materia se convierte en imaginación, escrito por Gerald Edelman con la
colaboración de Giulio Tononi, traducido al español en el 2002 y publicado por la Editorial Crítica de
Barcelona, trae en parte unasíntesis de las investigaciones y teorías de Edelman en los últimos diez o
quince años. Pero la parte novedosa del texto es elpermanente esfuerzo de inferencia del funcionamiento de
lo inconsciente a partir de la conciencia, que recorre todo el libro y quereivindica el pensamiento de Sigmund Freud
y su descubrimiento del inconsciente, al menos en la intención de Edelman.

Edelman comienza con una amplia definición de la conciencia y la presentación de su modelo de funcionamiento.
La conciencia no es un lugar anatómico estático,
dice, es más bien un proceso dinámico, especializado y permanentemente fluido. Para explicar este proceso propone
la hipótesis del núcleo dinámico.

El núcleo dinámico es un proceso de interconexión momentánea y siempre cambiante de


un grupo especializado de neuronasalrededor del eje tálamocortical, una estructura que liga ciertas regiones de
la corteza con estructuras profundas del cerebro. En este eje, se establecen todo el tiempo y
de modo cambiante interconexiones funcionales de distintos grupos neuronales que producen laexperiencia integrada,
continua y a la vez siempre cambiante, de la conciencia. No es un lugar anatómico único, no son siempre las
mismas neuronas,
lo que produce efecto de conciencia son las interconexiones que se establecen en ese momento. Procesopermanente, sólo i
nterrumpido en las fases más profundas del sueño, en el coma
y durante una crisis epiléptica. A partir de estemodelo, resumido aquí de esta manera, Edelman desarrolla todas las propie
dades de la conciencia y sus alteraciones.

A Edelman, neuro científico brillante y buen lector de Freud (no son términos contradictorios como creen algunos),
le resultaimperativo proponer una hipótesis para explicar el funcionamiento del inconsciente. La expone y
la desarrolla aclarando que suesfuerzo sólo explicaría algunas propiedades del inconsciente, pero no pretende explicar la r
elación del inconsciente con el deseo, talcomo la formula Freud
y como la desarrolla Lacan, puesto que admite que el conocimiento y el marco teórico de la NC no sirven paraello.

El inconsciente es también un proceso, que discurre por diversos ejes paralelos al


del núcleo dinámico, involucrando un número másamplio de estructuras que éste, desde la corteza hasta los ganglios basal
es y el cerebelo. En estos ejes funcionales de recorrido más largo,
se producen permanentemente interconexiones que manejan una cantidad de información infinitamente superior a la de la
conciencia. Este es el sistema de lo inconsciente, que está conectado con el núcleo dinámico de
la conciencia a través de vías de entrada y vías de salida. De este modo, algo, una pequeña parte de lo inconsciente llega a
la conciencia, y viceversa. Lo inconscientefunciona todo el tiempo, excepto en algunas fases profundas del sueño, en el
coma profundo, en el episodio epiléptico yseguramente se deteriora en las demencias como la enfermedad de Alzheimer.

El modelo de Edelman le permite intentar explicar algunos fenómenos clínicos, como ciertos síntomas de las neurosis obs
esivas, lascrisis disociativas histéricas y algunos eventos cotidianos, especialmente cierto tipo de actos fallidos como los la
psus verbales, los de la escritura, el olvido de propósitos y los errores en
la ejecución de actos. Este autor no pretende verificar la propuesta freudianarespecto a
los sueños como realización de deseos, puesto que su teoría no tiene alcance para trabajar sobre el concepto del deseo en
el psicoanálisis, según él mismo lo admite.

El trabajo de Edelman es muy sugestivo e interesante, aunque pone en evidencia cierto sesgo fundamental de la
NC omnipresente en sus teorías sobre la conciencia y el inconsciente: la NC se ocupa fundamentalmente de
la mente como procesamiento de información(conciente e inconsciente)
y emisión de respuestas y su correlato neurofisiológico. Algunas categorías conceptuales fundamentales delpsicoanálisis,
como el deseo, el goce, la represión primordial, el complejo de Edipo, la pulsión y el sujeto del inconsciente, no
conciernen a la NC en virtud de su estatuto epistemológico y su aparato conceptual. Por otra parte,
el inconsciente freudiano no esun mero dispositivo de procesamiento de
la información, empezando por el hecho de que la noción de la información está cuestionada en el discurso psicoanalítico.

En síntesis, el sujeto de la NC es el sujeto de


la conciencia, aunque en esa disciplina haya un modelo de funcionamiento de lo inconsciente. El sujeto de
la conciencia no es el sujeto del psicoanálisis.

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