You are on page 1of 17

FRANCISCO ORTIZ GUSTAVO

Contenido
CAPITULO I ASPECTOS Y GENERALIDADES DEL PATRIMONIO CULTURAL........................................... 1
1. ANTECEDENTES HISTORICOS DEL PATRIMONIO CULTURA ......................................................... 1
1.1 ÉPOCA PREHISPÁNICA ........................................................................................................... 1
1.2 ÉPOCA COLONIAL .................................................................................................................. 1
1.3 ÉPOCA INDEPENDIENTE ........................................................................................................ 2
1.4 EPOCA POST REVOLUCIONARIA ............................................................................................ 3
1.5 ÉPOCA ACTUAL ...................................................................................................................... 4
CAPÍTULO 2 CONCEPTOS Y GENERALIDADES DEL PATRIMONIO CULTURAL ...................................... 4
2.1 CONCEPTO DE PATRIMONIO CULTURAL ................................................................................... 4
CONCEPTO JURIDICO.- ................................................................................................................ 4
2.2 QUE BIENES INTEGRAN EL PATRIMONIO CULTURAL (ARQUEOLÓGICOS, ARTÍSTICOS,
HISTÓRICOS Y CUÁLES SON SUS CARACTERÍSTICAS)....................................................................... 5
ARQUEOLÓGICOS ........................................................................................................................ 6
HISTÓRICOS ................................................................................................................................. 7
ARTISTICOS .................................................................................................................................. 8
2.3 INSTITUCIONES DE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA FEDERAL LOCAL Y MUNICIPAL SON
ENCARGADOS PARA PROTEGER RESGUARDAR Y MANTENER EL PATRIMONIO CULTURAL ........... 9
NIVEL NACIONAL ......................................................................................................................... 9
CAPITULO III EL RÉGIMEN JURÍDICO DE LOS BIENES CULTURALES ................................................... 10
3. ANÁLISIS DE LAS LEYES, REGLAMENTOS, LINEAMIENTOS QUE REGULAN LOS BIENES ............ 10
CONSTITUCIÓN .......................................................................................................................... 10
3.2 LEY GENERAL DE BIENES NACIONALES.................................................................................... 11
3.3 LEY FEDERAL DE MONUMENTOS Y ZONAS ARQUEOLÓGICAS, HISTÓRICAS Y ARTÍSTICAS..... 12
3.4 REGLAMENTOS ........................................................................................................................ 12
3.5 TRATADOS INTERNACIONALES................................................................................................ 12
Bibliografía ........................................................................................................................................ 14

Imagen 1.- palenque (Chiapas)........................................................................................................... 6


Imagen 2.- Teotihuacán (estado de México)...................................................................................... 7
Imagen 3.- Centro Histórico ............................................................................................................... 7
II
Imagen 4.- Palacio de Bellas Artes ..................................................................................................... 8
CAPITULO I ASPECTOS Y GENERALIDADES DEL
PATRIMONIO CULTURAL

1. ANTECEDENTES HISTORICOS DEL PATRIMONIO CULTURA

1.1 ÉPOCA PREHISPÁNICA

Nuestra Ley Federal Sobre Monumentos y Zonas Arqueológica, Artísticos


e Históricos de 1972 está basada en una definición cronológica de los bienes
pertenecientes a nuestro patrimonio, que comprende las épocas prehispánica
(monumentos arqueológicos: bienes muebles e inmuebles producidos por las
culturas anteriores al establecimiento de la hispánica, así como los restos humanos,
de flora y de fauna relacionados con ellas), colonial y decimonónica : inmuebles
construidos en los siglos XVI al XIX, así como documentos y expedientes,
documentos originales manuscritos y colecciones científicas y técnicas del mismo
periodo) y del Siglo XX (monumentos artísticos: bienes muebles e inmuebles con
valor estético relevante pertenecientes a este siglo).

Se habla, por ello, de restos humanos, de fauna y flora de la época


prehispánica, pero también de la prehistoria al contemplarse "los vestigios o restos
fósiles de seres orgánicos que habitaron el territorio nacional en épocas pretéritas
y cuya investigación, conservación, restauración, recuperación o utilización
revistan interés paleontológico".

Se trata pues de una concepción del patrimonio cultural en la que tienen


cabida no sólo los monumentos y vestigios arquitectónicos, las obras de arte y los
objetos producto de culturas o civilizaciones pasadas, sino también los vestigios
con valor científico, acervos bibliográficos, documentales, científicos y técnicos,
bienes agrupados genéricamente dentro de los patrimonios paleontológico,
arqueológico, histórico o artístico, conforme a la época a la que pertenecen.

1.2 ÉPOCA COLONIAL

En uno de los apartados anteriores señale que México seguía una dirección
distinta en relación a la terminología propuesta por la UNESCO, lo referente a la
protección del patrimonio cultural. Dicha tradición mexicana sin duda hunde sus
raíces hasta la misma época colonial y esta génesis, sin duda, deriva del hecho de

1
que al constituirse como un estado independiente heredo el sistema jurídico
español de corte románico.

Tal origen de esta concepción se concreta en la propiedad de dichos bienes


culturales lo que significa que es el estado nacional el responsable de conservar y
proteger dichos bienes culturales en tanto que son propiedad de la nación, y el
estado representado por el gobierno debe velar por los intereses de aquello que es
propiedad nacional. Pero tal herencia deviene de la época colonial, concretamente
del hecho de que la corona española asumió la propiedad de los tesoros que se
encontraban en los templos y tumbas de los indios, porque todo lo que se
encontraba en américa, incluyendo poblaciones y cuanto existiera fueran
obsequiados a la monarquía española por la bula del papa Alejandro VI en 1493.

Con el logro de la independencia, los monumentos arqueológicos fueron


reivindicados por el Estado nacional, por su valor histórico y social, como
integrantes de una herencia que correspondía a la nación mexicana, que en esa idea
estaba constituida desde antes de la invasión española y había sido oprimida
durante trescientos años.

En este contexto se trataba de sacar a flote un valor que fundamentara el


desarrollo de la conciencia social de los mexicanos, establecer las bases de
vinculación como pueblo que corresponde en su conjunto a los retos del presente
y del futuro, o sea una comunidad de origen, y como comunidad de destino. En
este entendido el origen de esta comunidad nacional existía antes de la llegada de
los españoles, de tal manera que la historia nacional se remota a la epoca
prehispánica como una primera etapa, y todos los productos culturales de esa etapa
corresponde a la nación mexicana representada ahora para la federación.

Así pues, producto de esa herencia y en un afán de encontrar una fuente en


donde se anclara el anhelo criollo de la independencia esta etapa prehispánica
compuesta fundamentalmente por el elemento indígena diverso desde aquel
entonces plasmada en los valores culturales tradicionales y sobre todo en grandes
testimonios arquitectónicos, sirvió de base para la elaboración de la idea de la
nación mexicana.

1.3 ÉPOCA INDEPENDIENTE

Toda esta idea de los monumentos arqueológicos como la base sobre la cual
se constituía la nación prevaleció prácticamente durante el siglo XVIII, bajo el
concepto de “antigüedades mexicanas”.

2
En esta etapa profundamente convulsiva, no se llega a valorar el testimonio
cultural de la época colonial, pues está representada justamente aquella etapa de
dominación y opresión de la que se busca salir. De esta manera es hasta finales del
siglo XIX e iniciando el siglo XX (1902) que se decide integrar a lo considerado
como bienes de la nación, aquellos monumentos que incluían testimonios de otra
etapa en la historia de la nación, es así como se habla de los monumentos
históricos, los cuales a su vez van a estar integrados por los monumentos coloniales
y los del siglo XIX vistos dentro de otra etapa, la del México independiente.

Esta ley como señala el doctor Julio Cesar Oliver sigue en la definición, un
criterio ejemplificativo de una idea muy general, así establece que “todos los
edificios que bajo cualquier aspecto resulten interesantes para el estudio de la
civilización o de los pobladores del México antiguo”. En cuanto a los objetos
muebles solo se estableció la prohibición de exportarlos sin autorización legal, bajo
pena de multa disponiendo también que el ejecutivo concentrara en el museo
nacional las antigüedades que adquiriera.

Si tomamos como parámetro, la valía científica y cultural de tales bienes, así


como la importancia social que tenían para la nación misma, indudablemente que
tales disposiciones resultaran insuficientes, pues al dejar los bienes muebles bajo la
propiedad privada dejaba abierto el terreno a las excavaciones clandestinas y por
ende al tráfico ilícito de estos.

1.4 EPOCA POST REVOLUCIONARIA

Como bien sabemos, la revolución mexicana significo un cambio radical en


la realidad del país y por lo tanto resulto impensable la ley porfirista de 1897, la que
formal mente seguía teniendo vigencia. Sumado a esto conjuntamente con las
distintas fracciones revolucionarias que se disputan en el país es importante
recordar que una buena parte de las riquezas arqueológicas del país ubicadas en el
sur, sureste y la región costera coincidían como a la fecha con los principales
yacimientos petroleros y dichos lugares eran coto privado de las compañías
petroleras. Muy significativo resulta que aun antes dela revolución los sitios
arqueológicos resultaban inaccesibles por ser propiedad privada, de ella dan cuenta
los informes de la escuela internacional en donde queda claro que zonas como
Chichén y Teotihuacán eran propiedad de grandes hacendados, en el caso de
Teotihuacán, señala uno de los primeros arqueólogos mexicanos y primer
inspector de monumentos Leopoldo Batres en su informe preliminar, estaba
dividido entre 200 propietarios.

3
Continuando con esta época encontramos que existen dos disposiciones
jurídicas, una de 1914 y otra de 1916, expedidas durante los mandatos de victoriano
huerta y Venustiano Carranza respectivamente, las cuales no llegaron a aplicarse
por las características en las que se promulgaron la primera en un régimen
usurpador que lleva al poder en un golpe de estado y la otra por haber sido un
mero gobierno de transición. Sin embargo los mencionamos por el interesante
contenido de dichas normatividades que siguen la misma línea de la porfiriana y
más aun, incorporan nuevos elementos como los lugares típicos y bienes artísticos
e históricos. Con el cual la línea de aquella tradición jurídica surgida en el siglo XIX
durante la experiencia del México independiente empezaba a plasmarse y ser
retomada invariablemente.

1.5 ÉPOCA ACTUAL

En suma, los puntos anteriores nos muestran, fundamentalmente el origen


de una concepción en cierto sentido propia del patrimonio, pero sobre todo la
relación científica multidisciplinaria entre el derecho, la antropología y la historia;
lo cual, en nuestro concepto muestra como la administración publica abarca
también un ámbito de la cultura y por lo tanto se crean servicios públicos en este
campo que, el estado atiende fundado en un interés nacional de carácter público.
En tal orientación pasamos a ver cómo está organizado el derecho administrativo
en esta rama.

CAPÍTULO 2 CONCEPTOS Y GENERALIDADES


DEL PATRIMONIO CULTURAL

2.1 CONCEPTO DE PATRIMONIO CULTURAL

CONCEPTO JURIDICO.-

El termino patrimonio originalmente tiene una connotación derivada del derecho


romano, que le consideraba como el conjunto de bienes del páter familias, el que
como sostiene Aristóteles, era propietario del hogar y de todo su contenido, mujer,
hijos y esclavos. En su evolución, ese concepto ha pasado al derecho
contemporáneo llegando a definirse como el “conjunto de bienes de toda
naturaleza, muebles e inmuebles que corresponden a una persona”.

4
Este concepto por similitud, habiendo surgido del derecho romano pierde
su significado jurídico preciso y pasa a las ciencias sociales, en particular a la
antropología y a la historia con la acepción que desarrollo la filosofía alemana, es
decir como la “herencia cultural que imprime sus características a un pueblo y lo
distingue de los demás”.

Esta acepción ha sido retomada e impulsada en los tiempos modernos por


la UNESCO sobre todo a partir de los años 60 del siglo XX, en el sentido de la
protección a los bienes culturales que corresponden a los estados y aun a la
humanidad. Es preciso aclarar que en el caso de México, a pesar de que esta
concepción está presente para significare identificar la herencia cultural,
restablecida por la comunidad a la cual imprime su sello, la legislación nacional ha
tenido un desarrollo propio acorde a nuestra propia historia, por ende no ha
empleado la terminología de la UNESCO, si en cambio, esta terminología y
concepción forma parte de las distintas líneas de investigación, fundamentalmente
en la antropología y la historia y en los últimos tiempos ha influido de manera
notable la promulgación de leyes de carácter local o estatal en México.

2.2 QUE BIENES INTEGRAN EL PATRIMONIO CULTURAL


(ARQUEOLÓGICOS, ARTÍSTICOS, HISTÓRICOS Y CUÁLES SON SUS
CARACTERÍSTICAS)

La Ley Federal Sobre Monumentos Arqueológicas, Artísticas e Históricas


no es sobre el patrimonio cultural, si no sobre monumentos, es decir, es deficiente,
en la actualidad, su redacción pues no se ha actualizado respecto de los conceptos
utilizados en los tratados internacionales que México ha firmado y ratificado; por
ejemplo, no brinda una pos definición de monumento únicamente establece en su
artículo 5 que:

Art. 5. “Son monumentos arqueológicos, artísticos, históricos y zonas de monumentos los


determinados expresamente en esta Ley y los que sean declarados como tales, de oficio o a petición
de parte.”

Según esta ley, los monumentos se clasifican en arqueológicos, históricos y


artísticos.

Estos son los monumentos que forman parte del patrimonio cultural de la
ciudad de México, que se acordaron en 1970, en los decretos y acuerdos expedidos
por el presidente de la republica a partir de la publicación de la Ley del Patrimonio
Cultural de la Nación.

5
ARQUEOLÓGICOS

El artículo 28 de La Ley Federal Sobre Monumentos Arqueológicas,


Artísticas e Históricas establece que:

Art. 28 “son monumentos arqueológicos los bienes muebles e inmuebles, producto de culturas
anteriores al establecimiento de la hispánica en el territorio nacional, así como los restos humanos,
de la flora y de la fauna, relacionados con esas culturas.”

De acuerdo con la redacción de este precepto jurídico y la interpretación


hecha por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, no es necesario que se expida
un decreto por parte de la Presidencia de la Republica en el que expresamente se
señala que “un monumento de esa índole deba ser considerado como tal pues basta
para ello que encuadre en el enunciado del artículo 28 transcrito.

Algunas zonas arqueológicas son:

Imagen 1.- palenque (Chiapas)

6
Imagen 2.- Teotihuacán (estado de México)

HISTÓRICOS

El artículo 35 de La Ley Federal Sobre Monumentos Arqueológicas,


Artísticas e Históricas establece que:

Art. 35.- Son monumentos históricos los bienes vinculados con la historia de la nación, a partir
del establecimiento de la cultura hispánica en el país, en los términos de la declaratoria respectiva
o por determinación de la Ley.

Ahora bien, nos referiremos a los monumentos históricos determinados por


la propia ley y los que han sido declarados como tal según el acuerdo o decreto del
poder ejecutivo.

Imagen 3.- Centro Histórico

7
ARTISTICOS

El artículo 33 de La Ley Federal Sobre Monumentos Arqueológicas,


Artísticas e Históricas establece que:

Art. 33.- Son monumentos artísticos los bienes muebles e inmuebles que revistan valor estético
relevante.
Para determinar el valor estético relevante de algún bien se atenderá a cualquiera de las siguientes
características: representatividad, inserción en determinada corriente estilística, grado de
innovación, materiales y técnicas utilizadas y otras análogas.
Tratándose de bienes inmuebles, podrá considerarse también su significación en el contexto urbano.
Las obras de artistas vivos que tengan la naturaleza de bienes muebles no podrán declararse
monumentos artísticos.

En base a un análisis que se hizo a partir de 1970, encontramos que se


publicaron en el Diario Oficial de la Federación algunos decretos y acuerdos que
declararon monumentos artísticos:

EL PALACIO DE BELLAS ARTES El 4 de mayo de 1987 se publicó en el Diario


Oficial de la Federación el decreto por el cual se declara monumento artístico,
incluyendo pinturas, esculturas, vitrales y demás componentes adheridos a la
construcción.

Imagen 4.- Palacio de Bellas Artes

8
2.3 INSTITUCIONES DE LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA FEDERAL LOCAL
Y MUNICIPAL SON ENCARGADOS PARA PROTEGER RESGUARDAR Y
MANTENER EL PATRIMONIO CULTURAL

El 3 de febrero de 1939, se creó el Instituto Nacional de Antropología e


Historia (INAH) mediante su Ley Orgánica, la cual le atribuyo los dos elementos
de un órgano descentralizado que son tener personalidad jurídica y patrimonio
propio; así quedo establecido en el artículo 1° y 3° de la misma Ley Orgánica. En
1986 dicha ley orgánica se reformo pero mantuvo el artículo 3°, el cual le dio
carácter de órgano descentralizado de la Administración Publica, dependiente de
la Secretaria de Educación Publica.

Por su parte el 30 de diciembre de 1946, se creó el Instituto Nacional de


Bellas Artes y Literatura (INBAL), mediante la Ley Orgánica, en el cual se
atribuyen de manera similar al INAH, los dos elementos de órgano
descentralizado, es decir, según los artículos 1°y 4°, dicho instituto cuenta con
personalidad jurídica y patrimonio propio.

NIVEL NACIONAL

El Gobierno Federal diseña y ejecuta su política cultural a través de una Secretaría


de Estado, la Secretaría de Educación Pública (SEP), de la cual depende un
Consejo Nacional para la Cultura y las Artes en calidad de órgano desconcentrado.
De éste, a su vez, dependen numerosas instituciones y organismos, que cubren
todos los aspectos del desarrollo cultural nacional.

Las instituciones culturales de los gobiernos locales (estatales y municipales),


se encuentran en coordinación con las instancias federales y contribuyen de manera
esencial al cumplimiento del programa cultural federal.

Organismo Superior de Cultura: Secretaría de Educación Pública y Consejo


Nacional para la Cultura y las Artes

El organismo superior de educación y cultura en el país es la Secretaría de


Educación Pública

9
CAPITULO III EL RÉGIMEN JURÍDICO DE LOS
BIENES CULTURALES

3. ANÁLISIS DE LAS LEYES, REGLAMENTOS, LINEAMIENTOS QUE


REGULAN LOS BIENES

CONSTITUCIÓN

Al hablar del régimen jurídico que regula el patrimonio cultural es natural pensar
que la primera fuente a consultar será la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos, ya que es nuestra ley suprema y de ella se desprende la
normatividad de cada una de las diferentes ramas del Derecho, en este caso la que
nos ocupa es la rama del Derecho Administrativo. En este contexto a continuación
entraremos al estudio del precepto constitucional que reglamenta al patrimonio
cultural:

ARTÍCULO 73: El Congreso tiene facultad:

FRACCIÓN XXV. Para establecer, organizar y sostener en toda la República


escuelas rurales, elementales, superiores, secundarias y profesionales; de
investigación científica, de bellas artes y de enseñanza técnica, escuelas prácticas de
agricultura y de minería, de artes y oficios, museos, bibliotecas, observatorios y
demás institutos concernientes a la cultura general de los habitantes de la nación y
legislar en todo lo que se refiere a dichas instituciones; para legislar sobre vestigios
o restos fósiles y sobre monumentos arqueológicos, artísticos e históricos, cuya
conservación sea de interés nacional; así como para dictar las leyes encaminadas a
distribuir convenientemente entre la federación, los estados y los municipios el
ejercicio de la función educativa y las aportaciones económicas correspondientes a
ese servicio público, buscando unificar y coordinar la educación en toda la
república. Los títulos que se expidan por los establecimientos de que se trata
surtirán sus efectos en toda la república. Para legislar en materia de derechos de
autor y otras figuras de la propiedad intelectual relacionadas con la misma.

Si bien es cierto que la Carta Magna establece solo las bases de las diferentes
instituciones jurídicas que integran el mundo del derecho, a nuestro criterio la
normatividad que establece respecto al patrimonio cultural es insuficiente, pues
deja de lado muchos aspectos relacionados con este tema creando múltiples

10
lagunas y confusiones pues es muy inexpresiva al enviarnos a la legislación que bajo
la facultad otorgada por este precepto crea el Congreso de la Unión.

Entre esos aspectos que deja de regular el constituyente se encuentra lo


relativo a la conservación, enriquecimiento, promoción, restauración e
investigación del patrimonio cultural pues la sociedad en la que nos encontramos
necesita de normas más estrictas y específicas que nos obliguen a respetar y
preservar el patrimonio cultural.

3.2 LEY GENERAL DE BIENES NACIONALES

La Ley General de Bienes Nacionales (LGBN) reglamenta la propiedad del


gobierno federal, y junto con el artículo 27 Constitucional, regula el patrimonio
nacional y federal, fijando los bienes que forman parte del dominio de la nación.

Esta ley señala en el artículo 1°, que el patrimonio nacional se compone de


bienes del dominio público y del dominio privado (artículo 2° y 3°)

ARTÍCULO 2.- Para los efectos de esta Ley, se entiende por:

I.- Dependencias: aquéllas que la Ley Orgánica de la Administración Pública


Federal determina como tales incluyendo, en su caso, a sus órganos
desconcentrados;

II.- Dependencias administradoras de inmuebles: la Secretaría y las Secretarías de


Gobernación; Medio Ambiente y Recursos Naturales; Comunicaciones y
Transportes; Educación Pública, y Reforma Agraria, mismas que, en relación a los
inmuebles federales de su competencia, ejercerán las facultades que esta Ley y las
demás leyes les confieran. Las dependencias que tengan destinados a su servicio
inmuebles federales no se considerarán como dependencias administradoras de
inmuebles;

III.- Entidades: las entidades paraestatales que con tal carácter determina la Ley
Orgánica de la Administración Pública Federal;

IV.- Federación: el orden de gobierno que en los términos de esta Ley ejerce sus
facultades en materia de bienes nacionales, a través de los poderes Legislativo,
Ejecutivo o Judicial;

11
V.- Instituciones públicas: los órganos de los Poderes Legislativo y Judicial de la
Federación, del Distrito Federal y de los Estados; las dependencias y entidades de
las administraciones públicas Federal, del Gobierno del Distrito Federal, estatales
y municipales; la Procuraduría General de la República; las unidades
administrativas de la Presidencia de la República, y las instituciones de carácter
federal o local con autonomía otorgada por la Constitución Política de los Estados
Unidos Mexicanos o por las Constituciones de los Estados;

3.3 LEY FEDERAL DE MONUMENTOS Y ZONAS ARQUEOLÓGICAS,


HISTÓRICAS Y ARTÍSTICAS

Es momento de entrar al cuerpo legal que contiene todos los aspectos respectivos
al patrimonio cultural, éste es la Ley Federal de Monumentos y Zonas
Arqueológicas, Históricas y Artísticas, misma que tiene por objeto el patrimonio
cultural, el cual se caracteriza por ser de interés social y nacional, así como
inalienable e imprescriptible, mismo que se rige por disposiciones de orden
público; ya que es de utilidad pública la investigación, protección, conservación,
restauración y recuperación del patrimonio cultural.

3.4 REGLAMENTOS

Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público.- 9, 16, 20, 29, otorga a las
asociaciones el derecho al uso de bienes propiedad de la nación, y señala la
obligación de preservar su integridad, salvaguarda y restauración.
Entre las reglamentaciones pertinentes se encuentran: el Reglamento de la Ley
Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos; el
Reglamento del Decreto que prohíbe la exportación de Documentos originales
relacionados con la historia de México, y de los libros que por su rareza sean
difícilmente sustituibles; el Reglamento para el uso y conservación de las áreas,
objetos y colecciones del Palacio Nacional; así como las Disposiciones
reglamentarias para la investigación arqueológica en México.

3.5 TRATADOS INTERNACIONALES

En cualquier parte del mundo, el patrimonio cultural puede verse amenazado por
las enormes obras públicas que las modernas técnicas de la ingeniería civil han
hecho posibles, ha llevado a la adopción, por parte de la UNESCO, en 1968 de
una importante norma jurídica internacional: la Recomendación referente a la

12
preservación de los bienes culturales puestos en peligro por trabajos públicos o
privados.

El texto ilustra cómo la UNESCO reacciona, a través de instrumentos de


normalización, frente a los peligros que amenazan el patrimonio cultural. Estos
convenios y recomendaciones se basan en las mejores prácticas profesionales
conocidas, con vistas a garantizar el mantenimiento y la preservación del
patrimonio cultural; formulando las reglas para hacer frente a las amenazas contra
el patrimonio cultural, pretenden sensibilizar a los gobiernos con respecto a ese
importante tesoro de la humanidad y sugieren los principios sobre los cuales debe
cimentarse la legislación nacional que deberá, por supuesto, tener en cuenta la
especificidad de los distintos patrimonios presentes en cada país; pretenden
igualmente ayudar a los ciudadanos que luchan contra proyectos inadecuados; y
favorecen la constitución de redes de profesionales de la cultura, que pueden
comparar sus éxitos y sus fracasos, y mejorar así sus capacidades para salvar el
patrimonio de una posible desaparición.

13
Bibliografía
Galeana, P. (2001). Derecho y Cultura. Ciudad de México : porrua .

Ley General de Bienes Nacionales. (13 de 10 de 2018). México.

Rodriguez, A. Á. (2002). MAnual de ARchivistica. México: Sintesis .

You might also like