La palma de aceite, una agroindustria eficiente, sostenible y mundialmente competitiva

Jens Mesa Dishington

Presidente Ejecutivo de Fedepalma

Alexandre Patrick Cooman

Director de la Unidad de Extensión
Cra. 10A No. 69A-44 Coordinador General XVIII Conferencia Internacional
Tel: 313 86 00 sobre Palma de Aceite - Editor invitado
www.fedepalma.org
Bogotá D.C., Colombia Editora
Andrea González Cárdenas
Esta publicación cuenta
con el patrocinio del Directora de Planeación Sectorial y Desarrollo Sostenible
Fondo de Fomento Palmero
Secretario General
Boris Hernández Salame

Comité Editorial
Jens Mesa Dishington
Boris Hernández Salame
Mauricio Posso Vacca
Juan Fernando Lezaca Mendoza
Tatiana Pretelt De La Espriella

Coordinación Editorial
Yolanda Moreno Muñoz
Esteban Mantilla

Traducción
Foto portada: Esteban Mantilla. XVIII Conferencia Sofía Lemaitre Cepeda
Internacional sobre Palma de Aceite. Cartagena,
Colombia. 2015. Adriana Arias de Hassan
Strong Tower Consulting
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Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 1
 Contenido
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7 presentación

acto de instalación y plenarias

11 Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de
Palma de Aceite, Fedepalma
Jens Mesa Dishington

33 Mensaje del Presidente de la República de Colombia

Juan Manuel Santos Calderón

35 Intervención del Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Aurelio Iragorri Valencia

plenaria 1
41 Identificación y eliminación de las brechas de productividad en el cultivo de la palma de aceite
Identification and Elimination of Yield Gaps in Oil Palm Cultivation
Fairhurst, T.

53 Buenas prácticas de manejo en el cultivo de palma de aceite en América Latina

Good Management Practices of Oil Palm Cropping in Latin America
Ditschar, B.

plenaria 2
63 Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite
Findings and Advances on Ganoderma in Oil Palm
Durand-Gasselin, T.

plenaria 3
87 La Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible y su impacto en la agroindustria de la palma de aceite en
América Latina
The Roundtable on Sustainable Palm Oil and its Impact on the Oil Palm Agricultural Industry in Latin America
Webber, D.

2
 plenaria 4
93 Perspectivas sobre mercados y precios del aceite de palma
Oil Palm Market and Prices Perspectives
Fry, J.

plenaria 5
99 Perspectivas del biodiésel en Estados Unidos de América
Perspectives of Biodiesel in the United States of America
Jobe, J.

módulo 1: manejo del cultivo de la palma de

aceite y su mejoramiento genético
sesión 1: plagas y enfermedades

109 Pudrición del cogollo: enfrentamiento integral contra un enemigo letal, P. palmivora
Bud Rot: Comprehensive Confrontation of a Lethal Enemy, P. Palmivora
Sanz, J.

115 Nuevos conocimientos sobre el manejo de Phytophthora en el trópico

New Insights into Managing Phytophthora in the Tropics
Wallace, S.

119 Nuevas estrategias para el control de enfermedades de la palma de aceite mediante la investigación de
patógenos de la planta
New Strategies for Oil Palm Disease Control through Plant Pathogen Research
Schornack, S.

123 Comunidades microbianas en el suelo: causa y soluciones de las enfermedades en plantas

Soil Microbial Communities: The Cause and Solutions of Plant Diseases
Hao, J.

131 Estudio de firmas espectrales de palmas de aceite afectadas con la Marchitez letal, usando análisis estadísticos
de datos funcionales
Study of the Spectral Signatures of Oil Palms Affected with Lethal Wilt, Using Functional Data Statistic Analysis
Giraldo, R.

140 El uso de sensores remotos para detectar la infección por Ganoderma

Use of Remote Sensors to Detect Ganoderma Infection
Mohd, N.

151 Innovación inclusiva, desarrollo de capacidades y redes sociales en clústeres emergentes

Inclusive Innovation, Capacity Building and Social Networks in Emerging Clusters
Ramírez, M.

3
 sesión 2: mejoramiento genético

159 Biotecnología y selección de la palma de aceite: la Palma Dorada del futuro

Biotechnology and Breeding of Oil Palm: the Golden Palm of the Future
Billote, N.

175 Las biotecnologías como impulsadoras de la producción de aceite de palma sostenible

Biotechnologies as Pushing of Sustainable Palm Oil Production
Rival, A.

183 Resistencia a la Pudrición del cogollo en el material Guineensis

Resistance to Bud Rot in Guineensis
Louise, C.

190 Una mirada al mejoramiento genético de la palma de aceite en los últimos cincuenta años: una aventura
personal
A Review of Oil Palm Breeding for the Past 50 Years: A Personal Journey
Rajanaidu, N.

sesión 3: agronomía de la palma de aceite

203 Indicadores agroambientales para la producción de palma de aceite sostenible

Agri-Environmental Indicators for a Sustainable Oil Palm Production
Caliman, J.

214 Ciclos de carbono y nitrógeno en plantaciones de palma de aceite: claves para la

productividad y la sostenibilidad
Carbon and Nitrogen Cycling in Oil Palm Plantations: the Keys to Yield and Sustainability
Nelson, P.

225 Impactos ambientales de productos de aceite de palma: ¿Qué podemos aprender del Análisis de
Ciclo de Vida?
Environmental Impacts of Palm Oil Products: What Can We Learn from Life Cycle Assessment?
Bessou, C.

235 Inteligencia de Plantaciones de palma de aceite: análisis de datos de producción para una toma de
decisiones agronómicas efectivas y manejo de fertilizantes
Oil Palm Plantation Intelligence: Production Data Analysis for Effective Agronomic Decision Making and
Fertilizer Management
Oberthür, T.

243 Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años
Selected Precision Agriculture Studies in Oil Palm: A 10-Year Summary
Balasundram, S.K

267 Uso de la teledetección de alta resolución con sensores térmicos para el manejo del riego y variabilidad
espacial intralote
Use of High Resolution Remote Sensing Using Thermal Sensors for Irrigation and Spatial Variability
Management
Bellvert, J.

4
 sesión 4: avances en los híbridos interespecíficos oxg

275 Estudios de las características vegetativas, la calidad del aceite y el grosor del cuesco en híbridos
interespecíficos Elaeis oleifera x Elaeis guineensis y sus retrocruces con E. guineensis
Studies on Selected Vegetative, Oil Quality and Shell Thickness Traits in Interspecies Elaeis oleifera x Elaeis
guineensis Hybrids and their Backcrosses to E. guineensis
Leao, S.

281 Biología de insectos polinizadores en palma aceitera y sus híbridos interespecíficos (Elaeis oleifera x Elaeis
guineensis)
Biology of Pollinizing Insects in Oil Palm and its Interspecific Hybrids (Elaeis oleifera x Elaeis guineensis)
Ponce, P.

285 Introgresión de genes E. guineensis en híbridos interespecíficos OxG para recuperar la fertilidad del polen y
otras características deseables en palma de aceite
E. guineensis Gene Introgression in Interspecific OxG Hybrids for Recovering Pollen Fertility and other
Desirable Oil Palm Traits
Barba, J.

294 Comportamiento del híbrido interespecífico OxG, Coari x La Mé en Palmeras del Ecuador
Behavior of the OxG Coari x La Mé Interspecific Hybrid in Palmeras del Ecuador
Torres, E.

5
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contenido
presentación

Para Fedepalma es motivo de satisfacción hacer entrega de las Memorias de la XVIII Conferen-
cia Internacional sobre Palma de Aceite, realizada del 22 al 25 de septiembre de 2015, en Car-
tagena de Indias, bajo el lema “Agroindustria de la palma de aceite: aprovechamiento integral
de una producción sostenible”. Esta Conferencia, que congrega a los palmicultores de América
cada tres años, hace parte del esfuerzo institucional que desde 1977 hace la Federación por tener
un escenario internacional en el que los diferentes actores que hacen parte de la cadena de valor
de la palma de aceite en Colombia y en la región, puedan abordar el estado del arte, la dinámica
y los principales temas de interés de esta agroindustria en el mundo.
La Conferencia contó con la participación de alrededor de 1.800 asistentes, provenientes de 21
países, en su mayoría de continente americano, incluido Colombia. De igual forma, este evento
tuvo la presencia de 64 panelistas, 52 extranjeros y 12 nacionales. Así mismo, la muestra comer-
cial, Expopalma, registró una variada oferta de productos, insumos y servicios de interés para la
palmicultura, por parte de 271 expositores de 11 países.
En esta ocasión, en la sesión plenaria los asistentes tuvieron la oportunidad de tener informa-
ción relacionada con: identificación y eliminación de brechas de productividad en palma de
aceite; buenas prácticas de manejo de palma de aceite en América Latina; hallazgos y avances
sobre Ganoderma en palma de aceite; la Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible (RSPO,
por sus siglas en inglés) y su impacto en la agroindustria de la palma de aceite en América La-
tina; perspectivas sobre mercados y precios de aceite de palma; y perspectivas de la industria
del biodiésel en Estados Unidos. Como ha sido tradicional, la Conferencia estuvo compuesta
por tres módulos temáticos, a saber: manejo del cultivo de la palma de aceite y su mejoramien-
to genético; de plantas de beneficio a biorrefinerías, procesos y productos; y panorama de la
economía mundial y tendencias en su comercialización y desarrollo sostenible. En razón a lo
anterior, la información correspondiente a las presentaciones que realizaron los diferentes ex-
pertos en las plenarias y en cada uno de los módulos antes señalados, fue recopilada y contó con
la aprobación de los mismos para hacer parte de esta publicación.
Si bien es cierto que Asia representa el 89 % de la producción mundial de aceite de palma, bajo
el liderazgo de Indonesia y Malasia, también es claro que América actualmente ya contribuye
con el 6 % de la misma, como resultado de la dinámica que ha tenido este renglón productivo
en los 12 países en los que se adelanta esta actividad, siendo Colombia el líder en su producción.
Por ello, esta Conferencia resulta una alternativa de la mayor importancia para traer el mundo
de la palma al continente americano.
Esta Conferencia se pudo realizar gracias a que contamos con el apoyo de una institución como
Cenipalma, nuestro Centro de Investigación en Palma de Aceite, que está celebrando 25 años de
actividades y es, sin ninguna duda, uno de los mayores activos del sector palmero colombiano.
Finalmente, Fedepalma sigue comprometida con la realización de esta serie de eventos, en la
medida en que generan valor para la palmicultura nacional y de América. Esperamos que el
conocimiento y la información que estas memorias recopilan sean de gran utilidad para los
palmicultores, para los hacedores de política pública, los centros de formación e investigación y
los demás grupos de interés de la agroindustria de la palma de aceite.

Cordialmente,

JENS MESA DISHINGTON

Presidente Ejecutivo de Fedepalma

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 7, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 7
 presentation

Fedepalma is pleased to present the proceedings of the XVIII International Oil Palm Conference
held in Cartagena de Indias on September 22-25, 2015, under the motto of “Oil palm agribu-
siness: comprehensive approach to sustainable production.” Every three years, this conference
gathers oil palm growers from the Americas and, since 1977, it is part of the Federation’s insti-
tutional endeavour to offer an international setting where the different stakeholders in the oil
palm value chain in Colombia and the region may discuss the state of the art, the dynamics, and
the main topics of interest about this industry.

More than 1,800 participants, from 21 countries, attended the conference, most of them from
the American continent, including Colombia. There were also 64 panelists, 52 international
and 12 local. Likewise, the Expopalma exhibition attracted a whole range of stands displaying
products, inputs and services of interest for the oil palm industry offered by 271 exhibitors from
11 countries.

This time, attendants to the plenary session had an opportunity to obtain information on the fo-
llowing subjects: identification and elimination of productivity gaps in oil palm; good manage-
ment practices in oil palm in Latin America; findings and advances on Ganoderma in oil palm;
the Roundtable of Sustainable Palm Oil (RSPO) and its impact on oil palm agribusiness in Latin
America; outlook on oil palm markets and prices; and perspectives on the US biodiesel industry.
As always, the Conference included three thematic modules, namely: management of oil palm
crops and genetic breeding; from extraction plants to biorefineries, processes and products; and
the landscape of the world economy, marketing trends and sustainable development. The infor-
mation contained in the presentations by the different experts during the plenary meeting and
the modules was compiled and they gave their consent for its inclusion in this publication.

Although Asia accounts for 89% of the world production of palm oil driven by Indonesia and
Malaysia, it is also clear that the Americas are currently contributing 6%, as a result of the dy-
namics of this productive activity in the 12 countries where it takes place, Colombia being the
leader in production. For this reason, this Conference is of the greatest importance as a chance
to bring the world of oil palm to the American continent.

This Conference was made possible thanks to the support of an institution like Cenipalma, our
Oil Palm Research Centre. Today, as it celebrates 25 years of operations, it is undoubtedly one of
the greatest assets of the Colombian oil palm sector.

Finally, Fedepalma reiterates its commitment to these kind of events, that represent a greatest
value to oil palm in Colombia and in the Americas. We hope that the knowledge and informa-
tion contained in these proceedings will be of great use to oil palm growers, policy-makers,
training and research centres, and all other stakeholders in oil palm agribusiness.

Regards,

JENS MESA DISHINGTON

Fedepalma Executive President

8 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 8, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923
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contenido

ACTO DE
INSTALACIÓN
Y PLENARIAS
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contenido

Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación

Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de
la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite

Jens Mesa Dishington

Presidente Ejecutivo de la
Federación Nacional de Cultivadores
de Palma de Aceite

Saludo Costa Rica (14), Ecuador (114), España (6), Estados

Para Fedepalma es un gran gusto auspiciar, en con-
junto con nuestro Centro de Investigación en Palma
de Aceite, Cenipalma, esta nueva versión de la Confe-
rencia Internacional sobre Palma de Aceite. En primer
lugar, quiero saludar especialmente al señor Ministro
de Agricultura y Desarrollo Rural de Colombia, Au-
relio Iragorri Valencia, al cuerpo diplomático que nos
acompaña, a los representantes de entidades del or-
den nacio­nal, departamental y municipal, provenien-
tes de las diferentes zonas palmeras; a los asistentes a
esta conferencia provenientes de países como Alema-
nia (1), Argentina (2), Brasil (38), Colombia (1.449),
Unidos (24), Francia (2), Guatemala (23), Holanda (1),
Honduras (26), Indonesia (2), Italia (1), Malasia (12),
México (33), Nicaragua (6), Panamá (6), Perú (29), Po-
lonia (1), República Dominicana (1) y Venezuela (3); a
los directivos y representantes de otras agremiacio-
nes agropecuarias y, de empresas relacionadas con
nuestra agroin­dustria, a los directivos de Fedepalma
y Cenipalma.
También un saludo especial a los directivos de
centros de investigación de ciencia y tecnología y
miembros de la comunidad académica nacional e in-
ternacional; a los representantes de ong ambientales
y sociales del país y del exterior. Así mismo, damos

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 11
 la especial bienvenida a los cerca de 80 conferencis-
tas que nos acompañan en estos tres días de confe-
rencia, a los moderadores y coordinadores, a todos
ellos nuestro cordialísimo saludo y agradecimiento
por haber aceptado la invitación a hacer parte de este
evento; a todos los aliados que participan en Expo-
palma; tenemos más de 100 estands que esperamos
disfruten y sean de su interés. A todos los miembros
de la comunidad palmera del país; representantes de
los medios de comunicación, señoras y señores.
Nuevamente nos encontramos en Cartagena de
Indias, bella ciudad del Caribe colombiano que se
ha constituido en sede de nuestra Conferencia In-
ternacional, y que esperamos todos disfruten du-
rante su estadía. Este año el evento cuenta con más
de 1.700 asistentes de 30 países, la gran mayoría de
América. Por eso, este evento cada año se consolida
como la alternativa en América de eventos simila-
res a los que se realizan en torno a la agroindustria
de la palma de aceite en Malasia e Indonesia y es,
sin duda, el más representativo para el sector en
este continente.
La temática a abordar en esta presentación está di-
vidida en cuatro aspectos principales: por una parte,
el mercado de aceites y grasas, que presenta nuevas
realidades; por otra, la sostenibilidad de este sector
productivo; en tercer lugar, el modelo que tiene esta
agroindustria para desarrollarse de manera sosteni-
ble; y, finalmente, algunos de los principales retos de
Figura 1. Evolución de los precios a)
internacionales de los principales
1.800
aceites y grasas.
1.600
a) Caída, b) Volatilidad.
1.400
Fuente: Oil World y Reuters.
1.200
US$ / t
800
600
400
200
0
12
la agricultura y las oportunidades que se derivan de
ello para la palma de aceite.
Nuevas realidades en el mercado
de aceites y grasas
En lo que tiene que ver con el mercado de aceites y
grasas, es importante señalar que este se desarrolla en
medio de nuevas realidades, la primera de ellas es la
caída de los precios internacionales, no solamente de
los aceites y grasas, sino en general de los commodi-
ties. En promedio los precios del aceite de palma han
caído a menos de la mitad en los últimos tres años, esa
es una realidad de mercado, que sin duda debe llevar
a repensar muchas de las acciones que se vienen ade-
lantando en la agroindustria. En Colombia, gracias a
la tasa de cambio, la disminución de los precios toda-
vía no se ha sentido en el bolsillo de los palmicultores
tal como debería ser, pero no se puede dejar pasar un
hecho tan significativo como ha sido esta evolución
de los precios internacionales del aceite de palma.
También es importante señalar que, a lo largo de los
años, la volatilidad de los precios internacionales de los
aceites y grasas se ha acentuado y este es un elemento
de riesgo para los negocios, porque así como en algu-
nas épocas pueden tenerse niveles de precios fabulo-
sos, también el sector debe prepararse para vivir con
otros niveles de precios no tan favorables (Figura 1).
La fuerte caída de los precios internacionales obligan a repensar muchos negocios
-52 %
ene-08
nov-08
sep-09
jul-10
may-11
mar-12
ene-13
nov-13
sep-14
jul-15
Aceite de colza FOB Dutch exmill Aceite de palma crudo, CIF N.W. Europe
Aceite de soya, FOB Arg. Petroleo Brent
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016
b) La volatilidad de los precios se ha incrementado generando mayores riesgos para el negocio
Continuación Figura 1. Evolución
1.800 de los precios internacionales de los
Coef. Var Prom 22 % Coef. Var Prom 41 % principales aceites y grasas.
1.600

1.400 a) Caída, b) Volatilidad

1.200

1.000
US$ / t

800

600

400

200

0
ene-89
feb-90
mar-91
abr-92
may-93
jun-94
jul-95
ago-96
sep-97
oct-98
nov-99
dic-00
ene-02
feb-03
mar-04
abr-05
may-06
jun-07
jul-08
ago-09
sep-10
oct-11
nov-12
dic-13
ene-15
Aceite de colza FOB Dutch exmill
Aceite de soya, FOB Arg.
Aceite de palma crudo, CIF N.W.Europe

De otra parte, cabe señalar que si bien esta esta actividad. Por otra parte, en productividad la-
agroindustria tiene una gran bondad de orden so- boral, medida en toneladas de aceite producidas por
cial por ser intensiva en mano de obra, ello conlleva un trabajador, la palma de aceite tiene una gran des-
que los costos por este concepto pesan más en palma ventaja frente a lo que ocurre con otras oleaginosas
de aceite que en otros cultivos oleaginosos. Así, es (Figura 2).
de gran relevancia tener una buena productividad La palma es líder en la producción de aceites,
laboral, siendo este uno de los temas para tenerse en puesto que produce 10 veces más aceite por hectá-
cuenta en esta industria a futuro. Hasta ahora se tie- rea que la soya, pero otras oleaginosas como la soya
nen muchas labores manuales, pero hacia adelante tienen una composición diferente en su producción
seguramente será necesario incorporar más mecani- entre aceites y tortas. Por ello, lo que pasa en ese
zación, en especial en países como Colombia y otros mercado de las tortas es otra variable muy impor-
de Latinoamérica, donde el costo de la mano de obra tante que debe tenerse en cuenta para conocer mejor
es más alto que en los países líderes mundiales de la competitividad real de esta agroindustria.

a) La palma de aceite es intensiva en mano de obra y su productividad laboral es sensiblemente inferior Figura 2. Comparativo entre
a la de otros cultivos oleaginosos
a) Productividad laboral y
b) Rendimientos físicos en
45 % 700
42 % 609 oleaginosas.
40 % 600
35 %
500 486 Fuente: LMC.
30 %
Toneladas

25 % 400
19 %
20 % 16 % 300
15 % 13 %
200
10 % 8% 109
100 96
5% 32
0% 0
Colza Soya Soya Girasol Palma Colza Soya Soya Girasol Palma
UK US Arg. Arg. Malas. UK US Arg. Arg. Malas.

Mundo. Mano de obra como porcentaje del costo Mundo. Producción anual de aceite de palma por
total de producción 2011/14 trabajador tiempo completo

Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite 13
 Continuación Figura 2. Comparativo b) La competitividad de los aceites vegetales también está determinada por lo que ocurre en el mercado
entre a) Productividad laboral de las tortas

y b) Rendimientos físicos en
1,7
oleaginosas. 1,8 4,5
4,0
1,6 4,0
Fuente: LMC. 1,4 3,5
1,2 1,1 3,0

t / ha / año

t / ha / año
1,0 2,5
0,8 0,7 2,0
0,6
0,6 0,5 1,5
0,4 1,0 0,8
0,2 0,6
0,4
0,2 0,5 0,2 0,1
- -
1 2 3 4 5 6 1 2 3 4 5 6

1. Torta de palmiste 4. Torta de soya 1. Aceites de palma 4. Aceite de soya

2. Torta de colza 5. Torta de maní 2. Aceite de colza 5. Aceite de maní
3. Torta de girasol 6. Torta de algodón 3. Aceite de girasol 6. Aceite de algodón

Mundo. Productividad de tortas en 2014 Mundo. Productividad de aceites en 2014

La palma de aceite tradicionalmente se destacaba
por ser la oleaginosa de más bajo costo por tonelada
de aceite. Sin embargo, estudios más recientes, ade-
lantados por la firma inglesa lmc, muestran que la
palma perdió esa preponderancia y la soya la supe-
ró ampliamente, a propósito de esa evolución en el
mercado de las tortas. Esta Conferencia Internacio-
nal permitirá profundizar en algunos de estos ele-
mentos, de tal forma que se tenga mayor claridad de
las diferentes realidades de esta agroindustria y los
productores puedan tomar mejores decisiones.
No se puede olvidar que la palma es fundamen-
talmente un negocio de aceites, el cual es el segundo
grupo de alimentos en importancia en la dieta del
mundo, después de los cereales. El mercado de acei-
tes y grasas es muy importante y, con seguridad, lo va
a seguir siendo, pero el tema es: ¿cómo tener un buen
desempeño dentro de esas posibilidades de mercado?
El mercado de aceites y grasas hoy en día supera los
200 millones de toneladas, algo que no muchos hu-
bieran soñado hace algún tiempo y, además, la palma
ha ganado un protagonismo extraordinario, gracias a
que su crecimiento promedio anual fue de casi 8 %,
más del doble de lo que fue la dinámica promedio de
los diferentes aceites y grasas, lo que ha ubicado a la
palma como el primer aceite o la primera fuente de
aceites vegetales a nivel mundial.
También es importante destacar que esa produc-
ción de aceites y grasas se ha venido especializando
alrededor de tres productos, que son: palma, soya y
colza o canola, y entre los tres representan el 70 %
de la producción de aceites del mundo; si bien hay
muchas otras fuentes, realmente han ido perdiendo
participación frente a lo que representan estos tres
renglones que son los que deberían estarse monito-
reando permanentemente (Figura 3).

Figura 3. Tendencias del mercado a)

internacional de aceites y grasas.
a) Dieta mundial de aceites Otros
Cereales
vegetales. b) Tasa de crecimiento Leguminosas
Aceites
anual de consumo de aceites Bebidas alcohólicas Lo que vegetales
vegetales. Frutas come el Carnes
Vegetales mundo Azúcares
Fuente: FAO. Lácteos
Tubérculos

En la dieta del mundo los

aceites vegetales ocupan
el segundo lugar en
importancia

14 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016

b) En las tres últimas décadas el mercado mundial de aceites y grasas se triplicó
y superó los 200 millones de toneladas Continuación Figura 3. Tendencias
del mercado internacional de aceites
250 Tasa de crecimiento
y grasas.
anual a) Dieta mundial de aceites
Total A&G 3,8 % vegetales. b) Tasa de crecimiento
Palma 7,8 %
200
Soya 4,2 %
anual de consumo de aceites
Colza 5,4 % vegetales.
Girasol 3,1 %
Millones de toneladas

150 Fuente: Oil World

100

50

-
1985
1986
1987
1988
1989
1990
1991
1992
1993
1994
1995
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
Otros Aceite de girasol Aceite de colza
Aceite de soya Aceites de palma

Si bien en semillas oleaginosas el frijol soya lidera En razón a lo mencionado anteriormente, puede
el comercio mundial, en los aceites el primer puesto concluirse que el mercado internacional de aceites y
corresponde a la palma, con más del 60 % del comer- grasas ha tenido profundos cambios en las últimas dos
cio mundial de aceites y grasas. En un país como Co- o tres décadas; para no ir muy lejos, incluso en relación
lombia, que ha vivido enfocado más en el mercado a lo observado en la versión anterior de esta Conferen-
local, hablar del comercio mundial es un hecho que cia. Esto es motivo suficiente de reflexión, como sector,
para muchos sorprende; pero, sin duda, la palma es para revisar cómo se está adelantando la palmicultura,
protagonista en el mercado global de aceites y grasas. y cómo proyectar al futuro el negocio de esta agroin-
dustria.
Cerca de 77 de las 200 millones de toneladas de
aceites y grasas producidas en la actualidad se comer-
cializan entre países; tres de cada cuatro toneladas La cuestionable sostenibilidad de
de aceite de palma que se producen en el mundo son este sector productivo
para los mercados de exportación, siendo este un ren-
glón productivo con una clara vocación exportadora. En segundo lugar, una dura realidad que afecta a esta
agroindustria se refiere a que la palma está siendo cues-
Para concluir esta primera parte, cuando se anali-
tionada por su sostenibilidad en lo ambiental, por de-
za ¿Cómo se distribuye la producción por regiones del
forestar, por atentar contra la vida silvestre en algunas
mundo?, América es el continente de la soya y lidera de
zonas del planeta; en lo social, por temas relacionados
lejos la producción mundial. Asia, por su parte, es líder
con el conflicto de tierras con comunidades rurales; en
en aceite de palma y los principales países productores
algunos casos también se cuestiona la generación de
son Indonesia, Malasia y Tailandia, con otros que están
empleo o la calidad del mismo.
ubicados en esa región del mundo y representan el 89 %
del total de la producción mundial. Al lado de estos cuestionamientos, especialmen-
te en Latinoamérica, algo que genera mucha incerti-
Sin embargo, América cada día ha venido conso-
dumbre y que hay que tenerlo también presente con
lidando mucho más su protagonismo, representando
relación a la sostenibilidad de este cultivo, son las
actualmente el 6 % de la producción mundial de acei-
plagas y las enfermedades. En Colombia, en la his-
te de palma.

Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite 15
 toria del cultivo, se han perdido cerca de 100.000
hectáreas por la enfermedad de la Pudrición del
cogollo, un problema que también ha azotado a
otros países de Suramérica.
Otro cuestionamiento que se ha presentado desde
los años 80 contra el aceite de palma, está relaciona-
do con el hecho de que algunos lo presentan como un
producto no saludable (Figura 4).
Todos estos temas, de una u otra forma, afectan la
reputación e imagen global de esta industria. Si bien
algunos de estos señalamientos, de tipo ambiental y
social pueden ser ciertos, corresponden a casos es-
pecíficos, no en todos los países productores, por lo
que no pueden generalizarse; lo que se debe hacer es
cuestionar a los responsables de esos hechos y no al
cultivo. En cuanto a las dudas sobre los efectos del
aceite de palma en la salud humana, estudios científi-
cos recientes demuestran que son más mitos por falta
de información veraz, que realidades.
Modelo de la agroindustria para su
desarrollo sostenible
Es importante resaltar que la agroindustria de la palma
de aceite cuenta con un modelo para desarrollarse de
manera sostenible ambiental, social y económicamente.
En la dimensión ambiental, lo primero que debe
señalarse es que la mayor contribución que tiene la
palma es su baja presión sobre el uso de la tierra.
Aunque en el mundo pareciera que la imagen que se
vende es la contraria, la realidad es que la palma es
la fuente de aceite vegetal que menos tierra requiere.
A manera de ejemplo, si la producción mundial
de aceites y grasas, de 200 millones de toneladas, que
corresponde a la necesidad del mundo hoy día, fuera
a obtenerse de una sola fuente y esa fuera palma, se
requerirían solamente 50 millones de hectáreas, mien-
tras que si fuera a partir del frijol soya se requeriría 10
veces más tierra, más de 500 millones de hectáreas. Por

Figura 4. Principales a) b)
cuestionamientos en
sostenibilidad de la palma
de aceite. a) Ambientales,
b) Sociales, c) Plagas y
enfermedades, y d) Salud
humana.

La palma de aceite está cuestionada por su La palma de aceite está cuestionada por
sostenibilidad, por deforestar y comprometer a desplazamiento de comunidades y trabajo mal
futuro la vida silvestre de ciertas especies remunerado

c) d)

La PC ha arrasado con
cultivos de palma en
Brasil, Colombia, Costa
Rica, Ecuador, Honduras,
Nicaragua y Surinam,
entre otros.

Colombia ha perdido
alrededor de 100.000
hectáreas en palma por
Pudrición del cogollo (PC).

Las plagas y las enfermedades Algunos señalan que el aceite de palma

también generan incertidumbre NO es saludable

16 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016

esta razón, quienes estudian y abordan con seriedad
estos temas y ven los requerimientos de aceites y grasas
del mundo futuro, sin duda, expresan que la palma de
aceite es una de las fuentes principales para satisfacer
adecuadamente dichos requerimientos.
Por otra parte, las siembras de palma de aceite
pueden adelantarse sin deforestar, dentro de la fron-
tera agrícola. Colombia tiene cerca de 43 millones
de hectáreas aptas para agricultura y solo aprovecha
con cultivos un poco más de siete millones. Es decir
que hay unas posibilidades enormes de utilizar tierra
dentro de la frontera agrícola, si las condiciones son
las adecuadas, y eso ocurre también en otros países.
Adicionalmente, la palma de aceite puede ser un eco-
sistema que ayuda a conservar zonas de Alto Valor
de Conservación (avc), y eso requiere cultivos bien
planeados, observando las distintas variables de tipo
ambiental (Figura 5).
Los cultivos de palma que se adelantan sin defo-
restación son una alternativa a la situación de cambio
climático que está viviendo nuestro planeta, porque
su contribución a la reducción de gases de efecto in-
vernadero (gei) es muy positiva. En el caso del Pro-
grama de Biodiésel de Colombia, los estudios realiza-
dos por el   Instituto Federal Suizo de Investigación y
Prueba de Materiales y Tecnologías (empa, por sus si-
glas en inglés) de Suiza, muestran que las reducciones
pueden estar entre 83 y 108 % frente a las emisiones
que produce el diésel derivado del petróleo o el diésel
fósil, lo cual es una contribución muy importante de
la palmicultura al tema ambiental.
Igualmente, en ciertas discusiones se dice que la
palma seca o desertifica los suelos porque consume
mucha agua. La realidad es que existen las tecnologías
para que el uso de agua en plantaciones se haga de ma-
nera muy eficiente; pero no puede olvidarse algo muy

a) La palma de aceite es el cultivo oleaginoso que menos Figura 5. Baja presión sobre a) Uso
presión ejerce sobre el uso de la tierra
de la tierra y b) Desarrollos de la
Algodón palmicultura dentro de la frontera
1.347 mill ha agrícola.
Maní
1.260 mill ha
Frijol soya
507 mill ha
Girasol
320 mill ha
Colza
266 mill ha Hectáreas requeridas para producir
Palma de aceite 200 millones de toneladas de aceites y grasas
50 mill ha

La palma de aceite puede desarrollarse dentro de la frontera agrícola sin deforestar

b)

Uso de la tierra y cultivos de palma en colombia

Colombia. Uso y vocación del suelo

Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite 17
 importante, a la hora de sembrar palma, lo ideal es que
se elijan aquellas áreas de la frontera que están dispo-
nibles, donde hayan buenas precipitaciones naturales.
Así, distintos estudios muestran que la palma no uti-
liza más agua que otros cultivos, contrario a la afirma-
ción que algunos plantean, incluso en foros académicos
sin algún sustento técnico. Estudios sobre la huella hí-
drica en Colombia evidencian una condición muy fa-
vorable para la palma frente a otros cultivos (Figura 6).
En cuanto a biodiversidad, otro tema sensible a
nivel ambiental, un estudio comparativo entre más de
30 cultivos en Colombia, realizado por la Universi-
dad Nacional, muestra que la palma de aceite favore-
ce la biodiversidad mucho más que otras actividades
agrícolas. Finalmente, cabe recordar que una buena
gestión ambiental a nivel de las plantaciones favorece
ampliamente la biodiversidad y la fauna silvestre.
En la dimensión social, lo primero que vale la pena
señalar es que hace algún tiempo, el Banco Mundial
estuvo muy cuestionado por apoyar el cultivo de la pal-
ma de aceite a nivel mundial. Durante un par de años
entró casi en moratoria para no seguir invirtiendo en
este cultivo y, por ello, adelantó una iniciativa en los
cinco continentes para determinar cuál era realmente
el balance entre lo que unos decían en contra de la ac-
tividad y lo que otros defendían. La conclusión de ese
ejercicio, en el cual también participó Fedepalma, es
que la palma de aceite es un instrumento de desarrollo
que mejora las condiciones de vida de la población ru-
ral, vía empleo y reducción de la pobreza.
En ese orden de ideas, la palma de aceite puede
tener amplios beneficios sociales en las zonas rura-
les. Algunos estudios sobre el tema de empleo, en el
caso de Colombia, muestran que la palma realmente
mejora las condiciones económicas en las regiones;
hay más formalidad, los empleos son de mejor nivel
comparados con los ofrecidos por otras actividades
rurales. Esto corrobora que hay aportes muy signifi-
cativos en materia social (Figura 7).

Figura 6. La palma contribuye con a) La palma de aceite, sin deforestar, contribuye a mitigar el cambio climático
a) Reducción de Gases de Efecto
Invernadero (GEI) y b) Uso eficiente
del agua. Productos para
alimentación animal
Energía solar Extracción Reducción de Gases de Efecto
Invernadero, GEI
Producción Fuente de energías alternativas
de biodiésel
renovables
Recurso
renovable
El biodiésel de palma en Colombia
Productos reduce GEI entre 83 y 108 %, frente
de glicerina al diésel fósil

Combustible
Tecnología renovable
existente

b) La palma de aceite no tiene un consumo de agua superior al de otros cultivos

Cultivo Factor Kc medio del cultivo 1 Huella hídrica total del sector agrícola en Colombia
Caña 1,20
Maíz 1,15 Banano 3 % Otros 8 %
Algodón 1,15 Cacao 3 % Café 22 %
Arroz 1,15 Papa 3 %
Soya 1,10 Yuca 6 %
Banano 1,10
Frijoles 1,00
Palma de aceite Maíz 13 %
Papa 1,00 8%
Yuca 1,00
Caña de azúcar
Melón 1,00
11 % Arroz 12 %
Sandía 0,95
Plátano 11 %
Palma 0,90 Fuente: WWF.
Caucho 0,90
Café 0,90
Fuente: Allen, R., Pereira, L., Raes, D., Smith, M. 2006.
Pasto rotación 0,90 Evapotranspiración del cultivo. Guías para la determinación
Aguacate 0,80 de los requerimientos de agua de los cultivos. FAO Estudio de
Pasto extensivo 0,70 Riego y Drenaje 56, Organización de las Naciones Unidas para la
Agricultura y la Alimentación, Roma.

18 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016

a) La palma de aceite mejora las condiciones de vida de la población rural
Figura 7. La agroindustria de la
palma a) Reduce la pobreza y es
b) Fuente de empleo formal.
Empleo
La palma de aceite genera 30 veces más
empleo por unidad de area que cultivos como
el fríjol soya.

Reduccion de la pobreza
Un incremento de 1 % del área en producción
en palma de aceite, reduce entre 0,15 y 0,25
puntos porcentuales los niveles de pobreza.

b) La agroindustria de la palma de aceite genera empleo estable, bien remunerado y de calidad

En Colombia un estudio de empleo arrojó que

en la agroindustria de la palma de aceite:

Los niveles de formalidad son superiores al

60 %, mientras que en el campo no supera
el 15 %

Los trabajadores ganan 20 % más que en

otras actividades agrícolas

Hay mejores condiciones de calidad

de vida (ICV) en los hogares de los
trabajadores

Se incrementa la probabilidad de contar

con salud, pensiones y cobertura de
riesgos

Paralelamente, el tema de inclusión social es algo
que se impulsa en muchos países. Para el caso de Co-
lombia se tuvo en cuenta la experiencia de Malasia,
específicamente la liderada por felda, agencia del
gobierno de Malasia, sobre cómo la palma logró sacar
de la pobreza a miles de personas de la zona rural; y
hoy en día, después de varias décadas de trabajar en
este cultivo, muchas de esas comunidades presentan
una situación económica muy distinta a la que tuvie-
ron en su momento.
felda actualmente tiene más de 100.000 familias
y es un proyecto que le ha permitido a todos estos
pequeños agricultores participar, tanto en el cultivo
como en actividades aguas abajo de la cadena. Incluso
felda es uno de los grupos palmeros de Malasia con
mayor presencia a nivel internacional.
En Colombia, por su parte, ha habido una expe-
riencia importante denominada Alianzas Productivas
Estratégicas (ape), que ha logrado tener un impacto
muy favorable en muchas zonas, más de 120 alianzas
que se desarrollaron en poco más de una década, be-
neficiando a muchos cultivadores de pequeña escala,
que de otra manera nunca hubieran podido incursio-
nar como productores de palma. Las Alianzas han sido
modelos que con un buen acompañamiento empresa-
rial y de parte del Estado, en corto tiempo han genera-
do cambios significativos en la calidad de vida de esos
pobladores y sus comunidades. Estas Alianzas se han
evaluado y, sin duda, todas las conclusiones apuntan a
que sus impactos son relevantes, aunque también hay
mucho por mejorar, porque la gestión, sobre todos es-
tos proyectos, no siempre es igual y no todas han teni-
do iguales oportunidades. Pero lo que sí es claro es que
con palma, con buenos modelos y buen acompaña-
miento, se puede tener un impacto social muy positivo
en muchas zonas rurales (Figura 8).
En Colombia se presenta otra particularidad y es
que la palma ha servido, en algunas regiones, para la
sustitución de cultivos ilícitos, como en Tumaco, el
Magdalena Medio y la región del Catatumbo. En ese
sentido, el New York Times visitó el Catatumbo hace
algún tiempo y pudo ver que la palma de aceite, cuan-

Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite 19
 Figura 8. Los negocios inclusivos a) El éxito del modelo asociativo de Malasia, promovido por el FELDA, mostró que la palma puede ser un
son una realidad en el sector
palmero. a) Modelo asociativo de
Malasia y b) Modelo asociativo en
Colombia.
b) En Colombia, el modelo de Alianzas Productivas Estratégicas (APE) ha logrado incorporar productores
do se desarrolla de una manera empresarial, de cara al
mercado y con buenas prácticas, puede ser una alter-
nativa real frente a la economía de lo ilícito, tema de
mucha relevancia hoy para el Gobierno Nacional. Así
mismo, los impactos que vienen registrando muchas
empresas palmeras en las distintas regiones del país
son claros, en materia de servicios de salud, educación,
vivienda rural para los trabajadores e infraestructura;
así mismo, en algunas zonas las plantaciones han desa-
rrollado obras de infraestructura, lo cual tiene mucho
impacto social. Como este, hay múltiples casos mara-
villosos que se pueden registrar (Figura 9).
Por lo anterior, es claro que la palmicultura es un
instrumento de desarrollo. En Colombia, varios es-
tudios han tratado de comparar municipios palme-
ros con no palmeros, y lo que se puede observar es
que hay una clara conexión entre necesidades bási-
cas satisfechas y el desarrollo de la palmicultura, los
20
negocio inclusivo
112.000 familias
724 mil hectáreas en palma de
aceite (16 % Malasia)
71 Plantas Extractoras y la
segunda refinería más grande
de aceite de palma en Malasia
3 mill t de aceite de palma
19.000 empresas filiales
2012 cotiza en la Bolsa Bursátil
de Malasia
de pequeña escala al negocio, de manera organizada
127 alianzas establecidas para 2014
Más de 5.600 productores de pequeña y
mediana escala
1 de cada 4 hectáreas sembradas en la
última década se han hecho bajo el
modelo de Alianza Estratégica
Cerca de 70.000 ha
municipios con más tradición en palma han logrado
desarrollarse mejor que otros que tienen otras cultu-
ras productivas.
Por otra parte, en la dimensión económica, es
muy importante señalar que esta agroindustria cuen-
ta con algunos centros de investigación en diversos
países productores, que vienen trabajando en palma
de aceite. A manera de ejemplo, desde hace 25 años
en Colombia contamos con Cenipalma y, en ese mis-
mo sentido, varios países y grupos empresariales
especialmente en Asia, están haciendo esfuerzos en
ciencia, tecnología e innovación, lo que, sin duda, se
constituye en un respaldo y acervo de conocimiento
para el desarrollo de esta agroindustria a nivel mun-
dial. Sin embargo, hay mucho por hacer todavía, por
ello, la invitación a los productores de cada uno de los
países de Latinoamérica, a organizarse para hacer su
propio esfuerzo.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016
a) La palma de aceite contribuye a la educación en el campo
b) La palma de aceite mejora las condiciones de vivienda de sus trabajadores y comunidades
El gremio palmero en Colombia, aparte de Ce-
nipalma, también cuenta con el Fondo de Fomento
Palmero, el cual es un mecanismo a través del cual
todos los productores aportan el 1,5 % del valor de
su producción y la mayoría de esos recursos se des-
tinan a financiar programas de investigación y trans-
ferencia de tecnología. Eso es lo que le ha permitido
al sector posicionarse con una inversión de alrededor
del 1,1 % del valor de la agroindustria en programas
de investigación. Quienes se han movido en las líneas
académicas saben que normalmente los países o las
empresas líderes invierten cerca del 3 % de su pro-
ducto en temas de investigación e innovación, pero
niveles del 1 en adelante se consideran muy positivos.
Para tener una referencia, en Colombia apenas se in-
vierte el 0,2 % (Figura 10).
Por otra parte, también es importante destacar
como una gran fortaleza en el tema de sostenibilidad
económica, lo que ha ocurrido en Suramérica con los
Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite
Figura 9. La palma de aceite fuente
de bienestar en las comunidades
rurales. a) Educación, b) Vivienda.
materiales de palma de aceite híbrido OxG, el cru-
ce de la palma africana con la palma americana, que
se experimentó y desarrolló en algunas plantaciones
como una alternativa para afrontar los problemas sa-
nitarios. Aparte de que los híbridos han permitido
seguir cultivando palma en zonas con grave afecta-
ción sanitaria, también a nivel de producto, del aceite,
muestra cosas muy interesantes, que a futuro pueden
constituirse en oportunidades muy significativas.
Al respecto, vale la pena hacer un reconocimien-
to a las personas y plantaciones en varios países de
nuestra región que han trabajado por muchos años en
investigación sobre híbrido. En el caso de Colombia,
cabe destacar a Philippe Genty, su empeño y terque-
dad permitió que los esfuerzos y enseñanzas iniciales
con los híbridos no se perdieran y que en los últimos
años, cuando los problemas sanitarios se agudizaron
en Colombia, estos materiales se hubieran podido ver
como una esperanza.
21
 Figura 10. La investigación y a) Hay centros de investigación especializados que dan confianza y respaldo a la agroindustria palmera de
transferencia de tecnología son distintos países
un activo del sector palmero.
a) Respaldo empresarial a la
investigación en Colombia.
b) Inversión en investigación de la
Federación

b) El sector palmero colombiano invierte 1,1 % del valor de su producción en investigación y desarrollo

Por otra parte, una gran fortaleza de esta agroin-
dustria, como negocio, es que el espectro productivo
de la palma es muy amplio. La productividad global
promedio es de 3,6 toneladas de aceite por hectárea,
pero se puede observar que, con buenas prácticas, los
rendimientos pueden ser mucho más altos, incluso
alcanzar las 8 toneladas, situación que no se observa
comúnmente en otros cultivos.
En muchos países existen brechas de productivi-
dad entre productores que hay que cerrar. La forta-
leza productiva de la palma es fundamental para su
sostenibilidad económica a futuro. Muchas de las
soluciones a los problemas que enfrenta esta agroin-
dustria están relacionadas con los avances en materia
de productividad, al igual que en materia de buenas
prácticas agrícolas y empresariales. Hay ejemplos de
plantaciones en América con desempeños muy simi-
lares a las mejores plantaciones de otros continentes
(Figura 11).
La asociatividad es otro aspecto fundamental en
esta actividad productiva. Si bien en muchos casos
los cultivos de palma de aceite se han desarrollado
por grandes grupos empresariales, en la realidad la-
tinoamericana priman los agricultores de pequeña y
mediana escala, frente a lo cual es muy importante la
organización de los productores para lograr econo-
mías de escala y mejores resultados en eficiencias que
permitan avanzar mucho más en el negocio. Al res-

22 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016

a) La palma de aceite tiene una gran fortaleza productiva, pero aún hay disparidades en su desempeño,
Figura 11. Alto potencial de
entre productores y entre países
productividad y buenas prácticas
20
18,2 agrícolas. a) Estadísticas de
18 7,0
6,4 productividad, b) Manejo
16 6,0
14 13,6 agronómico.

t aceite / ha / año
12,2 5,0
12
4,0 3,7 3,6
t / ha

10 8,6 3,4
8 3,0 2,9 2,9
6,0 2,1
6
2,0
4 2,9 3,9
2,0 1,0
2
0,2
0 0
1 2 3 4 5 6 7 8 9 1 2 3 4 5 6 7

1. Nativa de África 6. Mejor experimento 1. Guatemala 5. Brasil

2. Plantación África en parcela 2. Honduras 6. Ecuador
(Nacional) 7. Material 3. Colombia 7. Mundo
3. Plantación América seleccionado 4. Costa Rica
(Nacional) 8. Palma individual
4. Plantación Malasia 9. Máximo teórico Fuente: Oil World Annual (2014)
(Nacional)
5. Plantación comercial
Malasia
Fuente: Corley 1998, MPOB y Oil World 2011

b) Con mejores practicas agrícolas y empresariales se pueden lograr cultivos productivos y rentables

pecto, desde el gremio palmero en Colombia se está rección correcta, para aprovechar las economías de
promoviendo la conformación de núcleos palmeros, escala. Aunque hace falta velocidad, hay que conti-
como una estrategia para organizar a los palmicul- nuar y persistir en esa tendencia de tener núcleos
tores de pequeña y mediana escala alrededor de una con plantas de más tamaño y envergadura, que per-
empresa ancla líder. mitan hacer mejor uso de otras tecnologías. Fruto
de esta tendencia, se observan casos de plantas que
Cabe destacar que por esta vía de organizar a los
han adelantado una reconversión tecnológica fuer-
productores alrededor de las plantas extractoras, se
te, otras se han construido con nueva tecnología, y
ha logrado incrementar el tamaño promedio de esos
plantas antiguas que se han replanteado y fusionado
núcleos. Hace 20 o 30 años estábamos en niveles de
para desarrollar nuevos proyectos con mayor viabi-
alrededor de 2.000 hectáreas por planta extractora,
lidad económica (Figura 12).
y hoy en día alcanzan más de 7.000 hectáreas. Si
bien en promedio aún el país está lejos de donde se En ese orden de ideas, el sector palmicultor en
quiere llegar, ya existen núcleos superiores a 20.000 Colombia se está moviendo en la dirección correcta,
hectáreas, lo que muestra un movimiento en la di- alrededor de las oportunidades que brinda la bioma-

Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite 23
 Figura 12. a) Núcleo palmero a) La organización de los palmicultores de pequeña y mediana escala permite mayores eficiencias y
b) Economías de escala, acceso a economías de escala
financiamiento y otros beneficios.

Plantaciones
propias

Proveedores
independientes Planta de
beneficio

Aliados

b) Dado que las economías de escala son fundamentales para reducir los costos de extracción de
aceite, el crecimiento de los núcleos palmeros mejora su competitividad

25
Costos de procesamiento (US/tonelada de RFF)

20

15

10

0
0 10 20 30 40 50 60 70 80

Escala promedio de la planta de beneficio (toneladas RFF/hora)

sa resultante del proceso de extracción de aceite, de las fortalezas que serán fundamentales para en-
principalmente en la generación de energía, para frentar los retos futuros.
autoconsumo de la propia planta extractora o para
El biodiésel, sin duda, ha sido un nuevo mercado
la venta a la red. En relación a ello, Colombia cuen-
muy importante para la producción de aceites y gra-
ta con una nueva legislación de energías alternati-
sas en el mundo y ha coadyuvado a su sostenibilidad
vas renovables, la Ley 1715 de 2014, y se está tra-
económica, pues en década y media se ha posicionado
bajando en su reglamentación, con la cual podrán
y consume cerca del 15 % del volumen total de aceites
potencializarse nuevos negocios de generación de
y grasas a nivel mundial. En Colombia, el Programa
energía a partir de las plantas extractoras de aceite
Nacional de Biodiésel ha evolucionado de manera muy
de palma, y fortalecer así el desempeño económico
destacada y se espera que el Gobierno Nacional ayude
de esta agroindustria.
a que ese mercado siga evolucionando como lo requie-
En el tema del mercado, la versatilidad del aceite re la sostenibilidad del sector palmero. Los mercados
de palma es maravillosa; son muchos los productos para el aceite de palma han venido creciendo en el
que pueden elaborarse a partir de él, como variados mundo de manera significativa en los últimos 30 años,
los nichos de mercado que atiende esta agroindustria. y el aceite de palma cada día se ha incorporado en más
En la versatilidad de esta agroindustria yacen muchas usos comestibles y no comestibles (Figura 13).

24 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016

a) La palma de aceite tiene una gran versatilidad y es usada en múltiples industrias a nivel mundial Figura 13. La versatilidad de la
palma dinamiza su consumo en
el mundo. a) Usos industriales y
alimenticios, b) Crecimiento del
mercado internacional

b) Cada vez más países demandan aceite de palma para múltiples usos comestibles y no comestibles

1984 2014

Crecen los mercados para

el aceite de palma

Fuente: The Guardian

De tal forma que realmente hay un panorama muy
positivo para la palmicultura y existe el modelo, al
cual Colombia le ha apostado de manera muy fuerte,
que es el de la Mesa Redonda de Aceite de Palma Sos-
tenible (rspo, por sus siglas en inglés), para garan-
tizar una sostenibilidad integral de la agroindustria
de la palma de aceite y que así pueda contrarrestarse
debidamente los cuestionamientos mencionados al
principio de este documento, que se han presentado
en algunos casos particulares y que, desde luego, no
deben generalizarse.
Es claro que la palma si puede desarrollarse soste-
niblemente en lo ambiental, en lo social y en lo eco-
nómico, constituyéndose en motor de desarrollo para
las zonas rurales, pero es responsabilidad de todos los
empresarios y productores hacerlo bien para contri-
buir a un nuevo posicionamiento de la agroindustria
palmera (Figura 14).
Principales retos de la agricultura y
las oportunidades para la palma de
aceite
En lo que tiene que ver con los retos, en primer lugar
está el tema del cambio climático, situación que en-
frentan muchos países y que afecta no solamente el
campo sino también las zonas urbanas. Hacia adelan-
te, la agricultura estará enfrentada a esta nueva rea-
lidad, que tiene que entenderse y conocerse mucho
mejor, para poder continuar adelantándola con éxito.
Otro reto que enfrenta la agricultura está relacio-
nado con el fuerte crecimiento que se espera de la po-
blación mundial. Hoy en día hay un poco más de siete
billones de personas en el planeta y para el año 2050
se estiman más de nueve billones; es decir, son más
estómagos para alimentar, más personas demandan-

Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite 25
 Figura 14. Modelo sostenible de
la agroindustria de la palma de
aceite según la RSPO.
EQUITATIVO
ECONÓMICA
do bienes y servicios para su bienestar, lo cual, según
cifras de la Organización de las Naciones Unidas para
la Alimentación y la Agricultura (fao), incremen-
tará la demanda actual de alimentos en 70 % para
2050. Este es un hecho que hay que tener presente,
para saber cuál puede ser el rol de la palma frente a
esta situación.
Pero no solamente la agroindustria enfrenta el
reto del crecimiento poblacional. Los países también
vienen desarrollándose y ello implica que la clase me-
dia, la clase consumidora, también esté creciendo a
pasos muy acelerados, aumentando cada día más la
demanda de bienes y servicios. Es decir, que el cre-
cimiento de población más el crecimiento del consu-
mo, explicarán el crecimiento futuro de la demanda
total de alimentos (Figura 15).
Todo esto ocurre en un mundo donde la velocidad
de los cambios es cada vez mayor; y esto, para quienes
están en el campo, que normalmente están acostum-
brados a vivir de una manera tranquila y piensan que
los temas dan espera, es un reto de mucha importan-
cia. A manera de ejemplo, veamos simplemente el
tiempo que a distintos productos les tomó alcanzar
50 millones de usuarios: la radio se demoró alrededor
de 38 años para llegar a superar esa meta; Twitter en
menos de un año ya desbordó ese nivel. Es decir, que
mucho de lo que algunos consideran que aún funcio-
na, rápidamente se vuelve obsoleto.
26
SOCIAL
SOPORTABLE
VIABLE
AMBIENTAL
Estudios de la fao muestran que el 50 % de lo que
actualmente está en las estanterías de muchos super-
mercados no lo estará en cinco años; luego, si las em-
presas no innovan, la pregunta es: ¿cómo van a parti-
cipar de este mercado?, si no tienen nuevos productos
para presentar, difícilmente mantendrán esos merca-
dos. El mundo está cada vez más interconectado; lo
producido localmente se consume en cualquier parte
del mundo y esa realidad debe tenerse muy presente
para el desarrollo de los negocios.
Otra tendencia de los mercados es a consumir pro-
ductos saludables y sostenibles, en muchos lugares, ya
no es solamente a nivel de unos pocos productos, hay
supermercados completos, comunidades enteras tra-
bajando en esa orientación; entonces, la pregunta es:
¿cómo posicionar nuestra agroindustria de cara a esa
nueva realidad? (Figura 16).
Oportunidades de la agroindustria
de la palma de aceite
Por una parte, cabe resaltar que la palma de aceite es
un cultivo tropical y que América tropical es una de
las regiones del planeta donde existe mayor disponibi-
lidad de tierra para desarrollar cultivos. Si se tiene en
cuenta que la palma presenta la más alta productivi-
dad, en términos de aceite por hectárea, sin duda, esta
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016
a) El cambio climático amenaza la productividad del campo lo que requiere un mejor manejo Figura 15. Los retos de la
y desempeño de la actividad agrícola
agroindustria de la palma de aceite
son a) Mitigación del cambio
climático y b) Cubrir el incremento
en la demanda mundial de
alimentos.

b) El crecimiento de la población mundial implicará mayor consumo de alimentos

Población
mundial Demanda

9.1
actual de
alimentos
billones de crecerá
personas en
70 %
2050
En 2015, la población mundial es de 7,3 billones Fuente: FAO

Figura 16. Preferencia por

productos sostenibles y saludables.

agroindustria tiene muchas posibilidades de tener un
rol importante en ese nuevo escenario, siempre y cuan-
do las condiciones de inversión sean las apropiadas.
De otra parte, es claro que la agricultura se adelan-
ta cada vez a mayor escala y la palma no es la excep-
ción. A manera de ejemplo, un grupo empresarial en
Malasia recientemente superó un millón de hectáreas
en palma de aceite, dos veces o más el área sembra-
da en Colombia. Este contexto es el que precisamente
permite visualizar los modelos asociativos, que orga-
nicen alrededor de empresas ancla a productores de
pequeña y mediana escala, que son en buena medida
la realidad en América, para desarrollar el negocio de
la palma de cara al futuro.
En cuanto a nuevas tecnologías disponibles para
mejorar la productividad y el desempeño de la agroin-
dustria, afortunadamente, como se señaló anterior-
mente, existen grupos de investigación que han gene-

Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite 27
 rado tecnologías y lo que se requiere ahora es acelerar
los procesos de adopción de esas tecnologías, especial-
mente frente a los desafíos que enfrenta el sector.
En la actualidad, a pesar de que los materiales de
palma de aceite que se vienen sembrando tienen mucho
potencial productivo que no se ha aprovechado comple-
tamente, la agroindustria cuenta con nuevos materiales
que avizoran un mejoramiento productivo significativo,
que también es necesario aprovechar (Figura 17).
Así mismo, esta actividad puede adelantarse con
una visión cero desechos. El aprovechamiento que ha
te­nido la agroindustria de la palma por muchos años
se circunscribe a solo cerca del 30 % de lo cosechado y
que se lleva a la planta extractora; una visión cero dese-
chos podría alcanzar un aprovechamiento de más del
60 %, con otro tipo de usos y aplicaciones, y superar la
idea de que esta agroindustria es solo aceite.
Figura 17. Las oportunidades de a) Las investigaciones en palma de aceite y las nuevas tecnologías son fuente para innovar y ser más
competitividad de la agroindustria competitivos
se basan en a) Innovación
y tecnología y b) Nuevos
materiales.
b) Ya se proyectan nuevos materiales y tecnologías para avanzar en la sanidad y productividad del cultivo
28
Al respecto, lo que se requiere es desarrollar las
plantas extractoras como biorrefinerías, para darle
curso a otro tipo de negocios, con los tamaños y las
tecnologías apropiadas para hacer un verdadero apro-
vechamiento de la biomasa, que en el caso de Colom-
bia, y seguramente de otros países latinoamericanos,
es todavía muy baja frente a su potencial (Figura 18).
En cuanto a las características nutricionales del
aceite de palma, apenas se está conociendo su verda-
dera riqueza, su contenido de antioxidantes naturales
y las grandes alternativas que ofrece para elaborar los
productos cada vez más saludables que el mercado
demanda. Está cambiando la percepción que se tenía
del aceite de palma, incluso en mercados sofisticados
como el estadounidense. Esto ya se observa en me-
dios masivos de comunicación, como el programa en
televisión del Doctor OZ.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016
a) Visión de cero desechos en la agroindustria
b) La palma es mucho más que aceite
BIORREFINERÍA
Estos cambios en las percepciones, con nuevos he-
chos y nueva información, han conducido a que recien-
temente en Estados Unidos se prohíba la ingesta de gra-
sas trans, lo cual, según algunos expertos, rápidamente
puede generar un aumento significativo en la demanda
de aceite de palma para el mercado americano, de alre-
dedor de un millón de toneladas anuales, frente a lo que
ya ha venido creciendo en los últimos años. Esta, sin
duda, es una nueva realidad que la agroindustria pal-
mera en Latinoamérica puede aprovechar.
De otra parte, fruto del desarrollo del híbrido OxG,
la agroindustria cuenta con el aceite de palma alto olei-
Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite
Figura 18. Aprovechamiento
integral de biomasa, una
oportunidad de agregar valor en la
agroindustria con a) Cero desechos
y b) Diversificación de la palma
como materia prima para otros
usos.
co, que tiene unas excelentes propiedades para atender
el consumo de alimentos saludables. Al respecto, gru-
pos industriales en Estados Unidos empiezan a percibir
que el aceite de palma alto oleico es una de las grandes
maravillas e innovaciones que esta agroindustria ofre-
ce a nivel mundial. Sus diferencias en el contenido de
fitonutrientes, especialmente en tocotrienoles, pueden
aprovecharse para avanzar en el desarrollo de muchos
otros productos. Esta agroindustria tiene una gran ver-
satilidad, no solamente en el campo alimenticio sino
también en cuanto a usos no comestibles, como sus-
tituto renovable de productos derivados del petróleo.
29
 Las tecnologías, en muchos casos, ya están listas o muy
avanzadas; es cuestión de terminar de afinar cómo al-
gunos de esos frentes de desarrollo de productos pue-
den llegar a ser viables económicamente (Figura 19).
Como se mencionó anteriormente, la palma cuenta
con un modelo de sostenibilidad integral que le per-
mite tener un ciclo sostenible desde el cultivo hasta la
mesa del consumidor, y en la medida que los produc-
tores avancen en su certificación, podrán aprovecharse
cada vez mayores oportunidades de mercado.
Actualmente, cerca del 20 % de la producción
mundial de aceite de palma está certificada como
sostenible. En América apenas el 8 % de la produc-
ción está certificada rspo según información de me-
diados de 2015; es decir que esta región del mundo
está bastante rezagada. Teniendo en cuenta las nuevas
tendencias de los mercados que se expusieron ante-
riormente, es necesario avanzar mucho más rápido
en la certificación rspo de América y abordar estos
temas de una manera más amplia como una estrate-

Figura 19. El aceite de palma es un a) El aceite de palma es fuente de antioxidantes naturales y fitonutrientes que protegen la salud, y
a) Alimento saludable y tiene representan posibilidades de agregación de valor a la agroindustria

b) Grandes bondades nutricionales.

b) Como resultado de las nuevas regulaciones sobre aceites y

grasas, se espera que Estados Unidos incremente sus compras
de aceite de palma en más de 1 millón de toneladas

1,6

1,4

1,2
Millones de toneladas

1,0

0,8

0,6

0,4

0,2

0,0
1985 1995 2005 2014
Estados Unidos. Importaciones de aceite de palma

30 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 11-31, Tomo I, 2016

gia de alcanzar mayor productividad en la agroindus-
tria (Figura 20).
Finalmente, una reflexión para quienes están
produciendo palma en América. Este continente
ha ganado importancia en la producción de aceite
de palma; desde luego, muy lejos de lo que Asia ha
logrado en esta agroindustria. América ya alcanza
alrededor de 3,5 millones de toneladas de aceite de
palma, de tal forma que para defender este merca-
do y avanzar en el posicionamiento de la agroin-
dustria, es necesario trabajar unidos. En cada uno
de los países palmeros de América, los productores
deben organizarse, y luego, como organizaciones
de productores, conformar una organización que
represente y defienda la palmicultura en esta parte
del mundo; esto le corresponde a quienes adelantan
esta actividad productiva en América. La agroin-
dustria de la palma de aceite puede ser un sector
ganador frente a los desafíos que tiene la agricultu-
ra a nivel mundial, pero siempre y cuando se haga
de manera sostenible y logre un aprovechamiento
integral de la producción.

a) La sostenibilidad puede ser un elemento diferenciador para el aceite de palma en América Figura 20. La certificación RSPO es
la alternativa de diferenciación para
la palma en América.
a) Recomendaciones de la RSPO,
b) Cadena de suministro.

20 % de la producción mundial de
aceite de palma

(8 % de la producción)

b) La certificación de sostenibilidad RSPO fortalece el acceso de los aceites de palma a los mercados pues asegura su trazabilidad de la finca a la mesa

CADENA DE SUMINISTRO RESPONSABLE DE PALMA DE ACEITE

Productores
Responsables
Certificados

Trazabilidad
del suministro

Refinería Comerciante
100 toneladas 100 toneladas
100 toneladas
de aceite de aceite
de aceite
Extractora provenientes provenientes
trazable a una Demanda de
únicamente de únicamente de
La cadena de extractora producto:
Sin deforestación Plantaciones Incremento plantaciones plantaciones
suministro suministrada contiene
de palma de de la certificadas certificadas
es limpia, únicamente aceite de
aceite son productividad
auditada y por palma libre de
cultivadas sin a través de
trazable plantaciones deforestación
deforestar mejores
certificadas
sobre suelos prácticas de
degradados manejo

Intervención del Presidente Ejecutivo de la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite, Fedepalma,
Jens Mesa Dishington, en el acto de instalación de la XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite 31
Volver al
contenido
Mensaje del Presidente de la República de Colombia
Juan Manuel Santos Calderón*
Greetings from The President of the Republic of Colombia
Juan Manuel Santos Calderón
*Video/Video presentation.
Muy buenos días a todos. Si bien no he podido acom-
pañarlos en esta oportunidad, quiero saludar por este
medio a todos los participantes de la XVIII Confe-
rencia Internacional sobre Palma de Aceite, de la que
nos sentimos orgullosos de ser anfitriones. Colombia
es el primer productor de aceite de palma en todo el
continente y el cuarto a nivel mundial, lo que refleja
la realidad de un sector que se consolida cada vez más
y el liderazgo de un gremio pujante, que busca estar a
la vanguardia. Los felicito por la pertinencia de la te-
mática central de este año: aprovechamiento integral
de una producción sostenible, porque incentiva una
necesaria conversación sobre las energías renovables
en Colombia.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 33-34, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923
Juan Manuel Santos Calderón
Presidente de la República de Colombia
El privilegio de vivir en una tierra tan biodiver-
sa lo asumimos con sentido de responsabilidad, pues
comprendemos que semejante riqueza es una opor-
tunidad frente a desafíos que trascienden nuestras
fronteras. Ejemplo de ello es el calentamiento global,
un fenómeno al que somos particularmente vulne-
rables y sobre el que estamos decididos a contribuir
para frenar su avance; tanto es así, que a finales de este
año en la Cumbre de la onu sobre cambio climático,
en París, vamos a suscribir el compromiso de reducir
20 % de aquí al año 2030 nuestras emisiones de gases
de efecto invernadero. Para cumplir con esa contri-
bución por el bien de los colombianos y del mundo es
fundamental el aporte de esta agroindustria.
33
 El biodiésel de palma de aceite reduce en más de 80 %
las emisiones de gases de efecto invernadero, entre mu-
chos otros beneficios ambientales. Lo que ustedes hacen
es tal vez uno de los mejores ejemplos de que el progreso
no riñe con la preservación del medio ambiente; todo lo
contrario, el desarrollo puede ser verde. Por eso, desde el
Gobierno Nacional no hemos dudado en apoyarlos y lo
hemos hecho con recursos; dispusimos, por ejemplo, de
un incentivo a la capitalización rural superior a 30 mil
millones de pesos destinados exclusivamente a la pro-
ductividad del sector palmicultor.
De otra parte, hemos promovido líneas de normali-
zación de cartera para los pequeños, medianos y gran-
des productores, y ampliamos a 15 años los créditos
del Banco Agrario para invertir en sistemas de riego.
Los palmicultores colombianos merecen eso y mucho
más, porque han sido incondicionales en el desarro-
llo de nuestro agro. Ustedes han creído en el campo y
han invertido en él, en medio de un conflicto que ya
supera el medio siglo; han sido y deben ser permanen-
tes constructores de paz, por eso mismo comprenden
mejor lo importante que sería para todo el país, y muy
especialmente para el sector rural, si acabamos de una
vez por todas y para siempre con este conflicto. Lo que
todos queremos es avanzar a mayor velocidad con la
transformación del campo, y eso solo se puede lograr
si silenciamos los fusiles, para que lo único que se oiga
sean las herramientas con las que se abona la tierra.
34
Hay mucho potencial en la altillanura, ya se están
haciendo importantes inversiones y esperamos pue-
dan hacerse muchísimas más, estamos impulsando
en el Congreso el Proyecto de Ley que crea las Zonas
de Interés de Desarrollo Rural, Económico y Social
las zidres, con las que vamos a fomentar muchos
más proyectos productivos para campesinos sin tie-
rra y sacar provecho a miles y miles de hectáreas en
zonas que tienen un gran futuro.
El mundo necesita alimentos y productos agra-
rios, y nosotros podemos convertirnos en su gran
despensa a través de un mejor aprovechamiento de
nuestra tierra y, por qué no, ser también importan-
tes actores en la industria de las energías renova-
bles. También podemos cambiar para siempre la
vida de nuestros compatriotas más humildes en el
campo. Más desarrollo rural significa más empleo,
mejor calidad de vida, mejor infraestructura y, en
definitiva, mayores oportunidades para las familias
campesinas.
Gracias a todos los palmicultores por ser arte y
parte de este cambio, gracias por contribuir a for-
jar este nuevo país, que no solo quiere estar en paz,
sino también ser una nación con más equidad y me-
jor educada. Que aprovechen las enseñanzas de esta
Conferencia en beneficio de su industria.
Muchos éxitos, y muchas gracias.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 33-34, Tomo I, 2016
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Intervención del Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural,
Aurelio Iragorri Valencia
Muy buenos días, quiero saludar muy especialmente
a mis compañeros de la Mesa Directiva, Luis Francis-
co Dangond, José Ignacio Sanz, José María Obregón;
a todos y cada uno de ustedes; a los miembros del
cuerpo diplomático presentes; a Jaime Bueno, Alto
Consejero Presidencial para la Competitividad; a to-
dos los representantes del Gobierno y de las entidades
del orden nacional y local; y especialmente a los cerca
de 900 invitados internacionales que se encuentran
hoy aquí con nosotros.
Uno de los departamentos donde se siembra pal-
ma de aceite en este país es Santander, y se dice que
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 35-40, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923
Aurelio Iragorri Valencia
Ministro de Agricultura y
Desarrollo Rural
el que pisa tierra santandereana es santandereano, así
que a los invitados internacionales les digo que el que
pisa tierra colombiana, es colombiano; bienvenidos y
ojalá disfruten su estadía en nuestro país.
Una vez estaba yo con mi mamá, cuando era jo-
ven, yo vengo de origen político, para los que no sa-
ben, y estuvimos en un acto de esos aburridores del
sector político y, al terminar una de las intervencio-
nes, le dije: ¿Cómo le pareció la intervención? y me
dijo: mijo, le voy a dar una recomendación si algún
día llega a tener un cargo importante, cada vez que
haga una intervención, tiene que cumplir tres requi-
35
 sitos: que sea breve, que sea corta y que no sea larga,
entonces voy a tratar aquí de ser muy concreto y cum-
plir con esos tres requisitos.
En primer lugar, ahora que estaba viendo los híbri-
dos de palma, recordé la primera vez que Jens Mesa
me invitó a una Junta Directiva, fue el primer día en
que recibí cuestionamientos directos en contra del
Gobierno, que además los disfruté, porque a mí me
gusta la gente directa, la gente que opina y dice lo que
es, y ahí estaba un hombre que hoy, lamentablemente,
no nos acompaña, que me hizo recapacitar sobre mu-
chos temas y adquirí con él varios compromisos que
espero haberlos cumplido, uno de los cuales fue que
no siguiéramos con el tema de restitución de tierras,
permitiendo que las invadieran y, así, se expidió una
normatividad en virtud de la cual, si alguien llega a
invadir una de las tierras que está en proceso de resti-
tución, se para el proceso de restitución. Ese hombre
directo, franco, es don Mauricio Herrera Vélez. Él no
solamente era un hombre frentero y directo, tuve la
oportunidad de verlo en varias de esas juntas, hoy no
nos acompaña después de una penosa enfermedad
que lo quitó de nuestro lado demasiado rápido. Al fi-
nal, don Mauricio murió de lo que ha vivido, murió
del corazón, desde aquí un gran aplauso para él, para
que nos escuche en el cielo.
Ahora bien, quiero simplemente decir lo que esta-
mos haciendo en el Ministerio de Agricultura y De-
sarrollo Rural, para dónde vamos, el qué, el cómo y
el cuándo, que es lo que la gente quiere oír. Respecto
a todo lo que se ha dicho sobre la palma de aceite,
las críticas que históricamente han recibido, ustedes,
quienes han creído en el país, quienes invirtieron en
casi 500.000 hectáreas que hay sembradas actualmen-
te; mi primer comentario es que solo se le tiran pie-
dras al árbol que da frutos, no hay que creer en tanto
cuento, hay que seguir adelante y vamos a fortalecer
este sector productivo.
El tema de la palma tiene varios puntos funda-
mentales, primero es una de las pocas actividades del
campo colombiano que sigue siendo buen negocio,
eso es importante, eso no tiene nada de malo, de eso
se trata, ojalá todas las actividades relacionadas con el
sector agrícola en nuestro país fueran buen negocio;
segundo, ustedes han incursionado en unas zonas en
donde nadie fue capaz de incursionar antes de la lle-
36
gada de la palma de aceite, esto ha significado la paz
en muchas de esas regiones de Colombia. Al respecto,
ayer el señor Presidente de la República lanzó lo que
será el Programa de Sustitución de Cultivos Ilícitos,
un programa que, lamentablemente, a pesar de todos
los esfuerzos que se han hecho en gobiernos anterio-
res, no ha sido suficientemente exitoso.
Ese programa se basa fundamentalmente en Alian-
zas Productivas, un tema que nació en el Ministerio de
Agricultura hace 13 años, y gracias al cual actualmente
más o menos 60.000 familias se benefician y han he-
cho un trabajo mostrando el camino de la paz. En lo
correspondiente al Ministerio de Agricultura, a través
de ese modelo exitoso, se han apoyado no solamen-
te Alianzas en palma, sino también en otros sectores,
fruto de lo cual 830 Alianzas Productivas están ope-
rando actualmente en el país, con unos resultados de
cumplimiento del 80 % de las ventas que se proyecta-
ron cuando se iniciaron estos emprendimientos. En
ese sentido, es importante hacer un reconocimiento a
todo el gremio palmero y en especial, al Doctor Carlos
Murgas, que fue quien inventó este modelo en nues-
tro país. Su invento, el invento de los palmeros, de las
Alianzas Productivas, hizo posible que los agricultores
se convirtieran en empresarios del campo, que llegara
la paz a esas zonas del país en donde la tierra solo le
había servido a la gente para enterrar a sus parientes.
Este modelo que hoy es una realidad con la palma de
aceite, será el principio del cambio, de la sustitución de
los cultivos ilícitos en Colombia.
Mediante estos proyectos de Alianzas Produc-
tivas en otros sectores, lo que hemos hecho es im-
plementar el proceso que se estableció en la palma
de aceite y el éxito ha sido muy importante para la
agricultura del país. Entre líneas, en la información
que dio el señor Presidente, mencionó ese proyecto
de Alianzas Productivas como el camino para lograr
que esas 60.000 hectáreas que están sembradas con
cultivos ilícitos, se transformen en otros cultivos,
entre esos en palma de aceite.
Para dónde vamos, el qué, el cómo y el cuándo y
este es un mensaje para quienes están y nos acompa-
ñan el día de hoy. Colombia es uno de los siete países
del mundo, según la fao, en donde se estima sembrar
el 50 % del crecimiento de la producción de alimentos
de los próximos años. Según los resultados del nuevo
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 35-40, Tomo I, 2016
Censo Nacional Agropecuario, que no se había he- tiene futuro en Colombia, la respuesta es que tiene
cho desde hace 45 años, lo que muestra cómo estaba todo el futuro y por muchas razones, porque es un
de abandonado el campo, Colombia tiene sembradas cultivo que ayuda en el tema climático, más ahora que
actualmente 7,2 millones de hectáreas y cuenta con estamos viviendo las inclemencias del Fenómeno del
44,5 millones de hectáreas aptas para desarrollar su Niño, que pega tan duro en estos países del Pacífico.
agricultura, ganadería y reforestación. Para tener una
Además, es importante mencionar el aporte social
referencia, todo Ecuador sembrado son 7 millones de
que ha hecho la palmicultura, tal vez ninguna otra
hectáreas. Ahora bien, lo que pasa es que uno abre la
agroindustria en el país haya logrado ese aporte. Rom-
despensa hoy y la encuentra vacía, de 44,5 millones
pieron el paradigma de diferencias entre pequeños,
de hectáreas con potencial agrícola solo sembramos
medianos y grandes productores, cuando todos unidos
7,2. En este país en agricultura está todo por hacer.
lograron articularse en una sola cadena para alcanzar
Cuando me posesioné como ministro, hace un año y
mayor prosperidad, que es lo que requiere el campo.
un poco más, para que sepan quienes nos visitan, yo
soy el ministro 100 de 101 años que lleva el Ministe- Está también el tema económico, se ha demostra-
rio de Agricultura, o sea que dura más una siembra do que la palma de aceite es un buen negocio. Pero
de cebolla cabezona que un ministro de agricultura nos falta, así como ahora estamos en la campaña de
en Colombia; ya completé el año por si acaso, estoy la “papa tiene lo suyo” y lo tiene porque producimos
mejorando el promedio. dos millones y medio de toneladas y, algunos tienen
el cuento que la papa engorda, no consuman papa; la
De tal forma que, aquí lo que ha faltado es política,
verdad es que en otros países consumen 90 kilos per
y alguien que además dejara de hacer tanto estudio,
cápita y nosotros en Colombia, siendo unos grandes
porque aquí hay gente muy experta en el tema agro-
productores, estamos solo en 60, por la mala fama de
pecuario pero que no ha sembrado una matera. En el
la papa. Igual, escuché a Jens Mesa hablando sobre
Ministerio hay estudios por todos lados, si yo creyera
algunos temas que vienen tratando de hacerle mala
en esos estudios, habría que cerrar el Ministerio de
fama al aceite de palma, así que vamos a fortalecer el
Agricultura porque todo está perfecto.
consumo humano del aceite de palma.
Yo dije una frase válida cuando
me posesioné, que casi me cuesta
el puesto: “vamos a pasar de la ha-
La palmicultura rompió el paradigma de
bladera a la sembradera”. ¿Cómo?,
estableciendo un plan que vamos diferencias entre pequeños, medianos y
a lanzar el próximo primero de grandes productores, cuando todos unidos
octubre en virtud del cual vamos
a apoyar una serie de productos lograron articularse en una sola cadena para
para sembrar un millón de nuevas alcanzar mayor prosperidad, que es lo que
hectáreas. Yo sé que es poco, pero
es el doble de lo que se sembró en
requiere el campo.
los últimos cuatro años. No nos
falta por sembrar sino lo necesario
para llegar a 44,5 millones de hectáreas que tiene el Yo me llevo mi botella roja para hacerle publici-
país de potencial. Así que, este compromiso de sem- dad, ya es la segunda con la que experimento y va-
brar un millón de nuevas hectáreas implica pasar de mos a hacerle una campaña publicitaria muy fuerte al
7,2 a 8,2 hectáreas. aceite de palma, nosotros estamos felices en Colom-
bia, consumiendo otros aceites, no voy a referirme a
La palma de aceite tiene futuro en Colombia, y es ninguno para no afectar la comercialización de los
uno de los productos que está incluido en este plan otros, pero ¿por qué no podemos consumir aceite de
de siembra de un millón de nuevas hectáreas. De palma que es tan bueno o mejor que los que se produ-
tal forma que, si tienen dudas de que esta actividad cen en otros lados?

Intervención del Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Aurelio Iragorri Valencia 37

 Tenemos que lograr que ustedes no dependan
solamente de la generación del biodiésel sino que la
actividad principal sea el tema del consumo mismo
del aceite, de sus subproductos, que son tan impor-
tantes y, de las exportaciones que seguramente con el
aporte y el apoyo de quienes nos acompañan hoy en
esta xviii Conferencia Internacional sobre Palma de
Aceite, que es un centro de conocimiento de la palma,
lo vamos a lograr.
Yo he estado con todos los gremios en distintas
reuniones, pero nunca había visto un sector tan for-
talecido cuando uno da la vuelta por cada uno de esos
stands que son centros de conocimiento, es impresio-
nante cómo está conectada esta industria, de todo lo
que mueve alrededor y de todo lo que genera.
En mi tema específico del millón de hectáreas,
no me voy a “chiviar” porque lo tengo que lanzar el
próximo primero de octubre, pero es lo que vamos a
hacer, el país tiene varios problemas, uno de esos, el
más grave, el conflicto armado de 50 años. Ha costa-
do mucho trabajo este proceso de paz, ha sido des-
gastante desde el punto de vista político, esperamos
tenerle al país muy pronto buenas noticias, sé que a
Colombia le molestan temas del proceso y a nosotros
también, pero esperemos que esas molestias que he-
mos tenido en un proceso de casi tres años se acaben.
Que logremos, ojalá, lo que todos los colombianos
esperamos, que es la firma de ese acuerdo.
En La Habana están tratando de ponerle fin al con-
flicto armado, mientras eso ocurre, nosotros aquí en
esta Conferencia, ustedes en cada uno de los predios
donde trabajan, cada uno de los que vende maqui-
naria, van sembrando la verdadera paz de Colombia,
que es la que siembran ustedes en el campo colom-
biano, porque es ahí donde está la paz de este país y
todos ustedes son aportantes al proceso de paz con
lo que han logrado en las zonas en las que tienen in-
fluencia y donde tienen inversiones, brindando tran-
quilidad y paz para esos colombianos que aguantaban
hambre antes de que llegara la industria de la palma
de aceite a sus municipios, a sus veredas.
¿Qué es lo que vamos a hacer?, el primer problema
es qué hacemos si se firma el acuerdo o si no se firma,
la respuesta es que nosotros vamos a avanzar con el
tema del campo, porque el campo colombiano no va a
seguir abandonado. Segundo punto, tengo que escoger
38
unos socios estratégicos, y uno de esos socios son los
palmeros de Colombia, ustedes son los socios estraté-
gicos para lograr el desarrollo del campo colombiano.
En el Censo Nacional Agropecuario salieron varios
datos que son angustiosos: la cantidad de hectáreas que
están por sembrar, los niveles de pobreza en el cam-
po, que son tres veces más pobres que quienes viven
en las ciudades; sin embargo, por primera vez en no sé
cuántos años podemos decir, según los datos de pobre-
za que acaban de ser publicados, la disminución de los
niveles de pobreza en el sector rural fue mayor que la
disminución de la pobreza en las ciudades.
Lo anterior quiere decir que vamos cerrando esa
brecha para alcanzar cada vez una mayor equidad, por-
que uno de los temas que no se pueden soportar en un
país, es tener a una población tres veces más pobre que
la otra por estar en zonas rurales. Esa disminución de
la pobreza, que se llama equidad, es una medida im-
portante que, en parte, se debe a las inversiones que
hizo la industria de la palma, que le ha permitido a la
gente tener empleo en esas zonas del país. De hecho, en
la actualidad, la palma de aceite genera más de 200 mil
empleos directos e ingresos para quienes son asocia-
dos a través del modelo de Alianzas Productivas, con
lo cual se mueve toda la economía, el transporte y los
centros de procesamiento, entre otros.
¿Cómo queremos reactivar el
campo?
Vamos a sembrar un millón de nuevas hectáreas en el
país de diferentes productos agrícolas. La verdad, es
que el país dejó de sembrar productos de ciclo corto,
nos volvimos dependientes, lo mismo que le ocurrió
a Ecuador y a Perú, que son ejemplo de cómo fueron
capaces de retomar un tema que aquí se le olvidó a la
gente, que es la seguridad alimentaria de Colombia,
que algunos, los de posición más de izquierda llaman
soberanía alimentaria.
Entonces, vamos a sembrar cereales, no podemos
seguir importando toda la cebada que se consume en
este país, cuando tenemos una de las industrias cerve-
ceras más grandes de América Latina. Con los precios
actuales y el tipo de cambio, podríamos sembrar ce-
bada de calidad, asesorados lógicamente por Bavaria,
dado que este producto sirve para la generación de la
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 35-40, Tomo I, 2016
malta, por un lado y, por el otro, para el consumo en
productos concentrados. También vamos a sembrar
maíz, no puede ser que estemos importando, hace 10
años estamos produciendo un millón de toneladas de
maíz al año, no hemos subido un solo gramo, enton-
ces vamos a incrementar la siembra de este cultivo
para no ser tan dependientes.
Por otra parte, están los productores de concentra-
dos, estuve con la industria porcícola, con la de aves y
huevos, Fenavi, que están pidiendo que se disminuya
por un tiempo o por unos embarques el arancel que
existe hoy para la importación de maíz. Al respecto, si
hay un compromiso de absorción de la cosecha en los
próximos días, vamos a permitir esa autorización para
que no se nos sigan incrementando los costos de los
productos que finalmente afecten la canasta familiar.
En cuanto a leguminosas, frijol, arveja, lenteja,
más o menos la mitad se está importando en Co-
lombia, ese es el segundo grupo; el tercero es pes-
cados, acuicultura, nosotros tenemos dos océanos
inmensos. El 0,1 % de la población dijo que utilizaba
distritos de riego en este país, el 20 % dice que riega
Intervención del Ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Aurelio Iragorri Valencia
sus cultivos a través de carrotanques, así es imposi-
ble ser competitivo, productivo.
Después sigue la parte de los maderables y no
por ser menos importante, luego están las nuevas
hectáreas que queremos sembrar de palma de aceite.
Con estos productos esperamos en unos años, por lo
menos en tres años, sembrar el millón de hectáreas,
pero esa no es una siembra así no más, vamos a ayu-
dar con temas del seguro agropecuario, vamos a dar
garantías de precio de los productos, vamos a buscar
la forma de que el Banco Agrario preste de manera
eficiente, rápida y oportuna a estos sectores; vamos a
pedirle a la gente que se inscriba por departamentos
para hacer un seguimiento al crecimiento del sector
agropecuario en Colombia.
Ese es el qué, el cuándo y el cómo, me toca espe-
rar hasta el primero de octubre próximo, para contar
todo lo que hemos trabajado en el Ministerio de Agri-
cultura durante un año planeando este programa, no
quisimos lanzarlo antes, porque como tenemos ahora
el Fenómeno del Niño, nos iban a decir que se va a
perder toda la inversión, pero lo que no puede seguir
39
 haciendo este país es entregando subsidios, depen-
diendo del grito de la angustia del sector y solamente
apagando incendios. Todo lo contrario, vamos a hacer
una política del sector agropecuario que le permita a
este país crecer, reactivar el campo, generar esa paz en
el campo que mientras existan los niveles de pobre-
za actuales es imposible lograr, fortalecer a la mujer
campesina, que tiene funciones importantes también
en la industria palmera, vamos a buscar la forma de,
en muy poco tiempo, sembrar este país de verdadera
paz mediante este tipo de procesos y tengan la absolu-
ta seguridad que ese es el camino. La gente dice, bue-
no, ¿cuál es el camino? no hay caminos hacia la paz,
la paz es el camino y ese camino va a estar rodeado,
al lado y lado, de palmas que van a estar sembradas
generándole a la gente tranquilidad, empleo y riqueza
a todo el que quiera pensar en invertir en Colombia.
También vamos a avanzar en el tema de seguri-
dad jurídica, que viene afectando el crecimiento de la
agroindustria en el país. Este año queda resuelto ese
tema con una ley que será aprobada antes del mes de
40
diciembre y van a tener con este plan de acción todo
el apoyo para que sigan creyendo en Colombia.
A la agroindustria palmera, gracias por ese esfuerzo
que han hecho durante tantos años en zonas de inmen-
sos conflictos, donde ustedes han hecho posible esa paz
que todavía no se firma en La Habana y que esperamos
se firme pronto, a todos ustedes muchísimas gracias.
Bienvenidos a Colombia, disfruten su estadía y
damos así por instalada la xviii Conferencia Interna-
cional sobre Palma de Aceite.
Este país tiene mucho futuro, pero este país sin la
palma de aceite no tiene el mismo futuro, ustedes nos
van a acompañar a que eso sea realidad, a todos los
invitados internacionales gracias por estar aquí, bien-
venidos y sigan creyendo en el campo colombiano
que yo me levanto todos los días pidiéndole a Dios
que no me deje equivocar y que cada una de las ac-
ciones que emprendo pueda apoyar a alguno de estos
sectores del agro colombiano, incluida la palma de
aceite, a todos ustedes muchas gracias por su tiempo.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 35-40, Tomo I, 2016
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contenido

plenaria 1

Identificación y eliminación de las brechas de productividad

en el cultivo de la palma de aceite*
Identification and Elimination of Yield Gaps in Oil Palm Cultivation

citación: Fairhurst, T. (2016). Identificación y eliminación de las brechas de

productividad en el cultivo de la palma de aceite. Palmas 37(Especial Tomo I),
pp. 41-52.
palabras clave: productividad, costos, producción sostenible, gestión
ambiental.
keywords: Yield, cost, sustainable yield, environmental stewardship.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Strong Tower Consulting.

Thomas Fairhurst
Director de Tropical Crop
Consultants Limited
Director, Tropical Crop
Consultants Limited
tfairhurst@tropcropconsult.com

Resumen
El logro de la producción máxima económica de aceite (MEOY, en inglés) es un imperativo en las
plantaciones de palma de aceite. La productividad presente en la palma de aceite es resultado de las
prácticas de manejo implementadas durante los 3-4 años anteriores, ya que la inflorescencia se tarda
unos 36 a 40 meses desde el inicio de su formación hasta la cosecha. Por tanto, los gerentes inteli-
gentes tienen una visión a largo plazo sobre los costos y el uso de los insumos. Actualmente, se debe
reducir el amplio margen requerido para cumplir con la demanda del mercado del aceite de palma,
por medio del cierre de la brecha entre la productividad existente y la MEOY. Así, la intensificación
de la productividad es una parte fundamental de la producción sostenible y la gestión ambiental. En
este documento se describen cinco pasos para la intensificación de la productividad sostenible:

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 41-52, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 41
 1. Es esencial que exista una estrecha alineación entre todos los niveles de personal en la compañía
de una plantación. La alta gerencia debe establecer metas y trabajar para asegurar que todos los
empleados, desde los gerentes de campo, los supervisores y hasta los operadores manuales, estén
debidamente informados acerca de las prácticas de campo necesarias y que tengan acceso a los
recursos necesarios, incluyendo los insumos y mano de obra en las plantaciones.
2. Recomendamos usar un modelo simple para identificar las causas de las brechas de productivi-
dad en cada bloque dentro de una plantación. La brecha 1 se refiere a la reducción permanente
en la productividad causada por el establecimiento pobre de plantaciones. La 2 se refiere a la
reducción en la productividad a causa de las recomendaciones de fertilización incorrectas y a la
falta de técnicas apropiadas para controlar las plagas y enfermedades; la 3, por su parte, tiene que
ver con la mala aplicación de las recomendaciones de fertilizantes y las medidas de control de
plagas y enfermedades. La brecha de productividad 4 se refiere a la pérdida de cultivos debido a la
incompleta renovación de los mismos.
3. Todo el personal de administración, desde la junta directiva hasta los supervisores de campo,
deben estar capacitados con los procedimientos operativos estándar que describan claramente
cada práctica de campo. Una vez que se han establecido, la administración puede centrarse en la
implementación, en vez de debatir sobre qué técnicas se deben utilizar.
4. La plantación debe estar equipada con el software para el manejo de datos que contenga un sis-
tema de información geográfica integrado, diseñado para almacenar y analizar todos los datos
agronómicos y meteorológicos. Esta base de datos es una herramienta esencial para identificar
patrones espaciales y temporales de los datos agronómicos.
5. La definición de las recomendaciones de fertilización es una tarea compleja que se basa en princi-
pios científicos, pero también puede hacer uso de los datos agronómicos cualitativos y semicuan-
titativos registrados en campo durante el muestreo foliar.

Abstract
The achievement of maximum economic oil yield (MEOY) is a core imperative in oil palm plantations.
Present yield in oil palm is the result of management practices implemented over the previous 3-4
years, because flowers are set about 36-40 months before harvest. Astute managers therefore take a
long-term view over costs and input use. At present there is much scope to reduce the land requirement
required to fulfil market demand for palm oil by closing the gap between existing yield and MEOY. Yield
intensification is therefore a core part of sustainable production and environmental stewardship.

In this paper we outline five steps in sustainable yield intensification:

1. It is essential that there is close alignment between all levels of staff in a plantation company. Top
management must set goals and work to ensure that all employees from field managers, supervisors
to field workers are properly informed of the required field practices and have access to the neces-
sary resources including plantation inputs and labor.
2. We recommend the use of a simple model to identify the causes of yield gaps in each block within a
plantation. Yield Gap 1 refers to the permanent reduction in yield caused by poor plantation establi-
shment. Yield Gap 2 concerns the reduc-tion in yield due to incorrect fertilizer recommendations
and lack of appropriate techniques to control pests and diseases. Yield Gap 3 concerns poor imple-
mentation of fertilizer recommendations and pest and disease control measures. Yield Gap 4 refers
to the loss of crop due to incomplete crop recovery.

42 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 41-52, Tomo I, 2016

 3. All management staff, from the board of directors to field supervisors must be equipped with
standard operating procedures that describe clearly each field practice. Once this has been imple-
mented, management can focus on implementation rather than discussions about what techni-
ques should be used.
4. The plantation must be equipped with database software with an integrated geographical informa-
tion system designed to store and analyze all agronomic and meteorological data. Such a database
is an essential tool to identify spatial and temporal patterns in agronomic data.
5. The definition of fertilizer recommendations is a complex task that draws on scientific principles but
can also make use of qualitative and semi-quantitative agronomic data collected in the field during
leaf sampling.

Introducción racimos de fruta o 4,0 - 4,5 t/ha de aceite de palma

¿Oportunidad para mejorar?
Lograr una máxima productividad económica del
aceite (meoy) es un imperativo fundamental en las
plantaciones de palma de aceite (Fairhurst y Griffi-
ths, 2014). Mientras que los precios del aceite de pal-
ma crudo son impredecibles y están sujetos a cam-
bios cíclicos, los productores que logran y mantienen
la meoy siempre están en una posición competitiva
en el mercado y son capaces de sostener las ganancias
y los rendimientos de la inversión.
En la actualidad, la productividad media en Co-
lombia se ha estancado en alrededor de 19,5 t/ha de
crudo (Figura 1) (Food and Agriculture Organisa-
tion, 2013).
Sin embargo, en lugares con niveles de lluvia y
suelos adecuados en Colombia, una empresa bien
administrada debe ser capaz de lograr una produc-
tividad promedio de 23-25 t/ha de racimos de fruta
o de 5-6 t/ha de aceite crudo de palma en todas las
plantaciones. Por tanto, la brecha de productividad
promedio de las plantaciones en Colombia es en la
actualidad de 3,5-5,5 t/ha de racimos de fruta o 0,75
-1,5 t/ha de aceite de palma crudo. Esto equivale a
una brecha de producción de 190.000-390.000 t de
aceite de palma crudo, con un valor aproximado de
usd 100-210 millones, conforme al bajo precio del
aceite de palma crudo a usd 550 /t.

500 5000 30
Figura 1. Área en producción, la
producción de racimos de fruta y
Rendimiento de racimos (t/ha)

400 4000 25 productividad de los racimos en

Colombia, 1990-2013.
Producción (,000 t)

20
Área (,000 ha)

300 3000
15
200 2000
10

100 1000 5

0 0 0
90 92 94 96 98 00 02 04 06 08 10 12
Año

Lento aumento del rendimiento Área

Producción (t) Rendimiento (t/ha)

Identificación y eliminación de las brechas de productividad en el cultivo de la palma de aceite • Fairhurst, T. 43

 El efecto de las prácticas mejoradas está Los principales factores agronómicos que se pue-
rezagado en el tiempo den gestionar son:
• Manejo del área foliar: establecer condiciones
Al igual que otros cultivos, la palma de aceite es sen- óptimas de área foliar mediante la poda, el raleo y
sible a factores de estrés que se pueden disminuir por la nutrición de los cultivos.
medio de prácticas agronómicas (Figura 2).
• Manejo de nutrientes: reciclaje de residuos de
Sin embargo, a diferencia de los cultivos anuales, cosechas y aplicación de fertilizantes minerales
la productividad actual de la palma de aceite es resul-
para optimizar el estado nutricional de la palma,
tado de las prácticas de manejo implementadas du-
por ejemplo.
rante los últimos tres o cuatro años, ya que las flores
se inician 36-40 meses antes de la cosecha del racimo. • Manejo de la cobertura del suelo: establecer una
Por tanto, el beneficio completo de las prácticas agro- cobertura del suelo no competitiva por medio del
nómicas mejoradas solo se observa 3-4 años después manejo de la fertilidad del suelo, y el control físi-
de la implementación (Figura 3). co, químico y mecánico de especies indeseables.

Meses después del inicio de la floración

Figura 2. Efecto del estrés sobre la
Número de inflorescencias femeninas productivas

productividad de la palma de aceite. 0 4 8 12 16 20 24 28 32 36 40 44

Sin estrés Postestrés

Número de flores
definidas
Número de flores
femeninas definidas Aborto de flores Pudrición y
aborto de racimo

Inicio de la floración Determinación del sexo Antesis Cosecha

Figura 3. Rezago entre mejores Rezago en el tiempo

prácticas de manejo y el incremento 30
en productividad.
28
Rendimiento racimos (t/ha)

Ganancia de rendimiento

26

24

22

20

18

16
-9 -8 -7 -6 -5 -4 -3 -2 -1 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11

Después de años de aplicación

44 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 41-52, Tomo I, 2016

• Manejo del agua: alivio del estrés por humedad Un paso importante es evaluar los costos del cam-
por medio del riego, la conservación del agua del po (usd/ha) con relación a la productividad (t/ha de
suelo y un drenaje adecuado. aceite de palma crudo) y el precio (usd/t aceite de
palma crudo) (Figura 4). Por ejemplo, conforme a los
La alta productividad solo puede sostenerse cuan-
precios actuales (usd 550/t de aceite de palma crudo),
do se mantienen los procedimientos agronómicos
si los costos del campo son de usd 2.500/ha, el pun-
correctos a largo plazo.
to de equilibrio de la productividad es de 4,5 t/ha de
aceite de palma crudo (Figura 4).
¿Control de costos o costo optimizado?
Para maximizar los beneficios, la gerencia debe
Los administradores diligentes tienen una visión a lograr un equilibrio a largo plazo elaborado con pre-
largo plazo de los costos y del uso de los insumos, ya cisión entre las inversiones en el mantenimiento del
que es muy difícil predecir las tendencias futuras de campo, la aplicación de fertilizantes adecuados y el
los precios de materias primas. Por tanto, es esencial alcanzar una máxima productividad económica. La
hacer previsiones para periodos de precios bajos de “reducción de costos” arbitraria que lleva a la dismi-
los productos esenciales (commodities) por medio de nución de la productividad conducirá inevitablemente
un manejo efectivo de los recursos económicos de la a una rentabilidad reducida. En vez de ello, es esencial
empresa. La reducción de costos arbitraria durante evaluar los costos del campo con referencia a los están-
los períodos de precios bajos simplemente exacer- dares de mantenimiento del campo, el estado nutri-
ba los problemas a largo plazo, y es probable que la cional de la palma y, particularmente en Colombia, la
empresa tenga que renunciar a mayores ganancias eficacia del control de plagas y enfermedades (Tabla 1).
que se acumulan de la alta productividad cuando El proceso de mejora de la productividad puede
los precios se hayan recuperado. Tomando prestado implicar moverse paso a paso de los estándares de
el argot de los comerciantes, los administradores de campo pobres y con bajos costos, a una posición tem-
la palma de aceite deben irse ‘de largo’ en términos poral de altos costos, a medida que se mejoran los
de estrategia. La optimización de costos significa estándares del campo, antes de poder llegar a costos
invertir en el mantenimiento del campo para lograr más bajos mientras se mantienen las buenas condi-
grandes rendimientos y ganancias. ciones del campo (Tabla 1).

1200

1100 Figura 4. Relación entre la

USD 1500/ha
1000 USD 2000/ha
productividad, el costo de
USD 2500/ha producción (USD/ha), y el precio.
Costos de producción (USD/t aceite)

900 USD 3000/ha

USD 550/t CPO
800

700

600

500

400

300

200

100

0
2.5 3.0 3.5 4.0 4.5 5.0 5.5 6.0 6.5 7.0
Rendimiento aceite (t/ha)

15 20 25 30
Rendimiento racimos (t/ha)

Identificación y eliminación de las brechas de productividad en el cultivo de la palma de aceite • Fairhurst, T. 45

 Tabla 1. Comparación de los costos de producción y los estándares del campo.

Estándares de mantenimiento del campo (evaluados mediante auditorías de campo)

Pobre Bueno

• Estándares pobres en el campo y altos • Buenos estándares en el campo y altos

costos. costos.
Alto • ¿mala implementación o rezago entre la • ¿Encontrar maneras de reducir los
inversión para mejorar las condiciones costos y mantener estándares altos por
Costos de campo y mejorar la productividad? medio de una eficiencia mejorada?
del campo
(USD/ha)

• Estándares pobres en el campo y bajos

• Buenos estándares de campo y bajos
costos.
Bajo costos.
• ¿Amerita considerar la posibilidad de
• ¡La meta final!
invertir en mejoras de campo?

Condiciones previas para mejorar la
productividad
Antes de embarcarse en una campaña de intensifi-
cación de la productividad es esencial que exista una
estrecha alineación entre todos los niveles del perso-
nal de la plantación. La alta dirección debe establecer
metas transversales, y debe trabajar para garantizar
que todos los empleados, desde los administradores
de campo hasta los supervisores y los trabajadores de
campo, estén debidamente informados acerca de las
prácticas de campo que se requieren y tengan acce-
so a los recursos necesarios, incluyendo los insumos
y la mano de obra en las plantaciones. La reducción
arbitraria de costos no es recomendable porque di-
chas reducciones afectarán la productividad en años
futuros. En cambio, las proyecciones presupuestarias
a mediano plazo deben estar basadas en previsiones
de precios conservadoras y alcanzables, y en pronós-
ticos de productividad. Una estrategia a largo plazo
se debe preparar de manera que establezca los com-
promisos de la empresa y las obligaciones de los em-
pleados para mejorar la productividad.
Todo el personal de la gerencia, desde la junta
directiva hasta los supervisores de campo, debe es-
tar dotado de procedimientos operativos estándar
(poe) que describan claramente cada práctica de
campo. Una vez que esto se haya implementado, la
gerencia puede enfocarse en la aplicación más que
en las discusiones acerca de las técnicas que deben
emplearse. Además, los supervisores podrán con-
centrarse en implementar los estándares inequí-
vocos en sus labores diarias. Tropical Crop Con-
sultants (tccl) ha desarrollado un conjunto de
manuales que describen cada tarea para el manejo
en fase de vivero, y en las plantaciones maduras e
inmaduras (Fairhurst et al., 2015).
La plantación debe estar dotada con software de
base de datos, un sistema integrado de información
geográfica diseñado para almacenar y analizar toda
la información agronómica y meteorológica. Las ho-
jas de cálculo tienen un valor muy limitado en este
sentido, debido a la cantidad de datos sujetos a limita-
ciones de tiempo que deben ser almacenados y anali-
zados. Esta base de datos es una herramienta esencial
para identificar patrones espaciales y temporales de
los datos agronómicos. La base de datos también pue-
de utilizarse para identificar los bloques individuales
“atípicos” en donde se encuentran grandes brechas de
productividad, y algunas de las causas subyacentes; así
como para proporcionar informes de síntesis y datos
históricos actualizados al personal administrativo de
cada bloque, para ser utilizados durante las visitas de
campo. Al analizar la productividad de la plantación,
creemos que es más útil tener una base de datos agro-
nómicos para centrarse en los ‘físicos’ (es decir, el uso

46 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 41-52, Tomo I, 2016

de fertilizantes, la mano de obra y los combustibles de Las recomendaciones incorrectas para las prácti-
hidrocarburos) en vez de los datos de costos, ya que los cas agronómicas causan la Brecha de Rendimiento 2
‘físicos’ son los que impulsan los costos. (Y-nd). Entre las causas más comunes se encuentran:
• La falta de resultados de ensayos factoriales de
Identificación de oportunidades de fertilizantes.
mejora • La interpretación incorrecta del análisis foliar y
de suelos.
Muchas empresas obtienen beneficios de la creación • Los errores en el muestreo de hojas y el análisis
de un equipo de auditoría independiente que realiza de muestras.
auditorías de campo semestrales de cada bloque. Los
resultados pueden ser evaluados con relación a los gas- • La falta de recomendaciones apropiadas para el
tos de mantenimiento de campo, para determinar si manejo de plagas y enfermedades.
la empresa está logrando una “relación calidad-precio” La mala aplicación de las recomendaciones agro-
como resultado de los programas de auditoría. Las au- nómicas causa la Brecha de Rendimiento 3 (Y-am).
ditorías de campo también ayudan a identificar dónde Entre las causas más comunes se encuentran:
se requieren mejoras en la gestión del campo.
• La implementación incorrecta de las recomenda-
Recomendamos el uso de un modelo simple para ciones de los fertilizadores (colocación, tiempos
identificar las causas de las brechas de productivi- y precisión).
dad en cada uno de los bloques dentro de una plan-
• La implementación incorrecta de las recomenda-
tación (Figura 5).
ciones para el control de plagas y enfermedades.
La brecha en la productividad del campo puede
dividirse en cuatro brechas de productividad. • La mala implementación de los programas de
mantenimiento de campo.
Las prácticas de plantación pobres que no pueden
ser corregidas fácilmente durante la vida útil de las La recuperación incompleta de la cosecha causa la
palmas causan la Brecha de Rendimiento 1 (Y-mey). Brecha de Rendimiento 4 (Ya). Entre las causas más
Entre las causas más comunes se encuentran: comunes se encuentran:

• Daños del suelo durante el establecimiento de • El mal control de los intervalos de cosecha.
plantaciones. • Una supervisión deficiente.
• Un gran número de palmas improductivas (mala • La falta de oportunidad en transporte de los culti-
selección de vivero). vos a la planta de beneficio y de capacidad de esta.

100
Figura 5. Cuatro brechas de
BR 1 Potencial de
producción productividad explican la brecha
Producción relativa de racimos (%)

90
BR 2
Rendimiento de una entre el potencial de productividad
reducido progenie
para el ciclo para un suelo
del campo y su productividad real.
y clima en
80 BR 3 Rendimiento productivo a particular
reducido a causa de un
causa del pobre esta-
70 BR 4 Rendimiento diagnóstico blecimiento
reducido a incorrecto de de plantaciòn
Rendimiento causa del nutrientes
60 reducido por inadecuado
deficiencias manejo
en cosecha agronómico
50
Y-a Y-ma Y-dn Y-rme Y-rp

Identificación y eliminación de las brechas de productividad en el cultivo de la palma de aceite • Fairhurst, T. 47

 Los datos recogidos durante las auditorías de
campo proporcionan la base para dividir las cau-
sas de las brechas de productividad e identificar las
medidas de seguimiento necesarias. Por ejemplo,
es importante determinar si el pobre estado nutri-
cional de la planta es causado por recomendaciones
nutricionales incorrectas o por la mala implementa-
ción de un programa de fertilización bien diseñado.
Una comparación de los resultados de la auditoría
de campo con los costos de campo ayuda a la geren-
cia a determinar si las condiciones de campo pobres
se deben a una asignación presupuestal insuficiente
o a una aplicación deficiente.
El valor de las auditorías e inspecciones de cam-
po se incrementa considerablemente cuando el per-
sonal de campo tiene acceso a los datos que pro-
porcionan una historia agronómica de cada bloque
visitado (Figura 6).
Uso de mejores prácticas de manejo de
bloques para cuantificar el potencial de
mejora de la productividad
Para determinar el margen de mejora de la producti-
vidad, las mejores prácticas de manejo (mpm) se de-
ben implementar en los bloques representativos de la
plantación. Se debe seleccionar un bloque (± 30 ha)
por cada unidad administrativa de 1.000-1.500 hec-
táreas. Una revisión exhaustiva de las condiciones
de campo y la identificación de las limitaciones de
campo (manejo de campo, estado nutricional de los
cultivos) se lleva a cabo antes de la aplicación de las
medidas correctivas y el establecimiento de las mpm.
La productividad se debe vigilar de cerca durante un
período de tres a cuatro años para determinar el im-
pacto de las mpm sobre la productividad. Un análisis
de costo-beneficio se lleva a cabo luego de evaluar la
rentabilidad económica de la implementación rigu-
rosa de las mpm. Cuando corresponda, se puede di-
señar un plan posterior para ampliar la implementa-
ción para una zona más extensa.
Utilización de una herramienta de apoyo
para elaborar recomendaciones de los
fertilizadores
La elaboración de recomendaciones de fertilización
es una tarea compleja basada en principios científi-
cos, pero también puede hacer uso de los datos agro-
nómicos cualitativos y semicuantitativos recogidos
en el campo durante el muestreo de hojas. La geren-
cia también debe determinar la fuente menos costosa
de nutrientes fertilizantes para implementar las reco-
mendaciones. Hemos diseñado una herramienta de
apoyo a las decisiones denominada Fertilizer Plan-
ner™ con el fin de consultar los datos almacenados
en omp para desarrollar un programa de fertilizantes
(Figura 7) (Fairhurst y Kerstan, 2015).
omp almacena datos agronómicos bajo las si-
guientes categorías (Fairhurst et al., 2003):

Figura 6. Ejemplo de un informe de

la historia del bloque producida por
el software OMP.

Escala Comercial BMP Comercial División D01-01 Finca Barcelona Bloque

45-032
Suelo Franco arcilloso Topografía Plana Año de siembra 2005 Edad de siembra (meses) 11 Edad 10 DFH 01/01/200 MFH 14
Cultivo anterior Banano Método de preparación Manual Densidad 143 Material de siembra Dami Las Flo Área 22.7 ha

--------- Datos de producción ----------- --------- Fertilizantes aplicados (kg/palma) ---------- ------ Análisis foliar (% de materia seca) ---------
N P2O K2O Mg B N P K Mg B PCS PH0 SPH
Yr
YA Pot Act
Gap BW BN A R A R A R A R A R L D L L Rc D L D L D cm2 m p/ha

15 10 32 32.0 - - - 1.3 - 0.5 - 2.4 - 0.2 - 0.05 - - - - 133

14 9 32 31 -1.0 24 100 .93 0.9 0.5 0.5 2.73 3.1 0.16 0.3 0.03 0.06 3.1 - 0.18 1.1 1.2 - 0.28 - 22 - 50 6 133
13 8 32 31 -0.8 22 121 .17 1.1 0.5 0.5 3.01 2.7 0.43 0.4 0.04 0.03 3.2 - 0.20 1.4 2.3 - 0.29 - 20 - 49 5 121
12 7 32 43 11,4 20 161 .50 1.4 0.4 9.2 3.42 2.0 0.36 0.2 0.04 0.04 2.8 1 0.16 1.0 2.2 1 0.28 1 18 2 42 4 133

Comentarios del asesor

48 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 41-52, Tomo I, 2016

 Figura 7. Diagrama de flujo
Fraccionamiento y
colocación (% por mes) del proceso para generar
Contenido de nutriente
recomendaciones de fertilizadores
Menú sobre
fertilizantes
(%N, P2O5, K2O, MgO, B) con el Fertilizer Planner OMP.
y residuos
de cultivos Costo ($/t fertilizante/t
disponibles residuo)

Programa de aplicación
de residuos (t/ha)

Datos de análisis foliar y

Preparación

Ingreso de raquis. Datos de suelos. OMP Mejoramiento Cantidades Dosis por ronda y Aplicación
todos los datos Historial de fertilización. Conjunto de rutinas en preliminares de fraccionamiento mensual de
agronómicos Estándares agronómicos. de datos planeador de fertilización anual (% mensual) fertilizante
Dato de censo de palmas preparado fertilizantes Otros
factores
Redefine escenarios y
Mantenimiento, conjunto de reglas Revise y
definición de dosis Brechas de
Defina y analice Seguimiento rendimiento
redefina correctivas y prioridades
escenarios y Reglas
reglas Reglas para aplicar las definidas
Factores
dosis de fertilizantes agronómicos
definidas
Costo
Ajustes Recomendación
Recomendación ($, $/ha, $/palma)
completa de manuales final de
fertilizantes - fertilizantes Cantidad
escenario 1 (t, kg/ha, kg/palma)

• Información general sobre cada bloque (por ejem-
plo, el tipo de suelo, material de siembra, fecha de
siembra y el uso previo del suelo);
• Datos de producción y componentes de producti-
vidad calculados (por ejemplo, t/ha de racimos de
frutas, racimos/palma, peso del racimo, t/día de
trabajo por hombre);
• Datos de análisis histórico de tejido foliar y suelos;
• Puntuación cualitativa de los estándares de man-
tenimiento del campo (por ejemplo, la poda, acce-
so a vías para la cosecha, drenaje);
• Uso histórico de todos los fertilizantes y residuos
de cultivos;
• Incidencia histórica de plagas y enfermedades;
• Los datos del censo de palmas (todos los puntos
de siembra categorizados como nuevas siembras o
reemplazos, inmaduros, maduros, muertos, anor-
males y no sembrables); y
• Los datos climáticos (incluidos los déficits de agua
calculados).
Como mínimo, se requiere un año de datos (pro-
ductividad, análisis foliar, análisis de suelos, censo
de palmas, la evaluación cualitativa de los paráme-
tros agronómicos) para ejecutar el Fertilizer Planner
(planeador de fertilizantes). La información de las
condiciones agronómicas y de manejo almacenada
se puede consultar e invocar como base para efectuar
ajustes a las recomendaciones de los fertilizantes que
están basadas ​​principalmente en los resultados del
análisis foliar. El Fertilizer Planner “agrega valor” a la
información almacenada en omp, al tener en cuenta
toda la información conocida sobre las característi-
cas del bloque para la elaboración de las recomenda-
ciones de los fertilizadores.
La primera tarea del Fertilizer Planner es calcular
las cantidades de nutrientes para cada bloque consul-
tando los datos agronómicos almacenados en omp.
Para ello, el usuario debe definir una serie de dosis
de aplicación de los nutrientes, junto con las reglas
de aplicación asociadas. Estas reglas se pueden de-
finir como “un conjunto de argumentos que, al ser
cumplidos en un bloque concreto, proponen una do-
sis de nutrientes correspondiente para el bloque”. Se
pueden configurar varias dosis para cada nutriente, y
cada dosis se clasifica como:
• ‘Mantenimiento’ (es decir, para mantener la situa-
ción actual de nutrientes);
• ‘Correctiva’ (es decir, para corregir una deficien-
cia de nutrientes); o
• ‘Prioritaria’ (es decir, para corregir las deficiencias
graves y para abordar las interacciones entre los
nutrientes individuales).
Las dosis recomendadas son acumulativas; en-
tonces, por ejemplo, la recomendación total de N en

Identificación y eliminación de las brechas de productividad en el cultivo de la palma de aceite • Fairhurst, T. 49

 un bloque identificado como deficiente puede incluir
dosis correctivas y prioritarias, además de una dosis
de mantenimiento, si el bloque cumple con los crite-
rios especificados para todas estas dosis. También es
posible incluir lo que llamamos “normas de anula-
ción”, las cuales definen los criterios en aquellos casos
en donde se debe cancelar la aplicación de nutrientes,
a pesar de que un bloque pueda cumplir con los crite-
rios de dosis normales (por ejemplo, para los bloques
que serán sembrados nuevamente).
Cada dosis puede invocar las reglas de una o más
aplicaciones que dependen, por ejemplo, del análisis
de datos de hojas y raquis, datos del análisis del sue-
lo, o puntuaciones cualitativas de otros parámetros
agronómicos almacenados en omp. La toma anual
de muestras foliares ofrece una oportunidad para
recabar otra información clave sobre las condiciones
agronómicas del bloque en cada unidad de muestreo
de follaje por palma lsu (leaf sample unit) (Tabla 2).
Después se pueden resumir los datos de cada blo-
que, y el Fertilizer Planner puede consultar los datos.
El Fertilizer Planner puede entonces configurarse de
manera que tenga en cuenta las condiciones de cam-
po, así como el estado nutricional de la palma. Por
ejemplo:
• En los bloques con mal drenaje, el drenaje debe
corregirse antes de hacer las aplicaciones correc-
tivas con fertilizante nitrogenado.
• Las altas tasas de fertilizantes no se justifican en
los bloques en donde la recuperación del cultivo
es pobre debido a la falta de acceso (caminos, cír-
culos, pasarelas).
Una ventaja del Fertilizer Planner actual es que los
usuarios tienen una flexibilidad casi ilimitada en la
creación de las dosis y en las reglas que utilizan pará-
metros de datos almacenados en omp. En contraste con
otras herramientas de recomendación de fertilizantes,
el Fertlizer Planner de omp no tiene una “fórmula” co-
dificada para las recomendaciones de nutrientes, que
por lo general solo son apropiadas para una región geo-
gráfica en particular. En cambio, el programa se puede
ajustar para ser utilizado en cualquier región de cultivo
de palma de aceite en el mundo y puede tomar en cuen-
ta los factores específicos de cada terreno.
Un conjunto particular que combina ‘dosis’ y ‘re-
glas’ se conoce como un “conjunto de reglas de nu-
trientes”. El conjunto global de datos que consiste en
los objetivos nutricionales, las recomendaciones de
fertilizantes y todas las configuraciones utilizadas
para derivarlos, se guardan juntos en el Fertilizer
Planner como un solo ‘escenario de recomendación
de fertilizantes’. Por tanto, es posible crear varios es-
cenarios del mismo terreno y del mismo año, lo cual
facilita probar y evaluar diferentes suposiciones y
comparar la manera en que afectan los requerimien-
tos y costos de fertilizantes de manera general. 

Tabla 2. Categorías sugeridas para nueve parámetros claves evaluados durante el muestreo foliar (se pueden invo-
car en la elaboración de las recomendaciones de fertilizantes).

Parámetro Posibles categorías

Drenaje
Erosión del suelo
Conservación del suelo
Acceso de la cosecha
Poda
Cobertura del suelo
Estado del cultivo de palma
Evidencia de etiolación
Raleo
Bien drenado, mal drenado, anegado, inundación estacional
Nueva evidencia de: lavado de la superficie, arroyuelos, barrancos, ausencia de pérdida de
suelo
Terrazas, plataformas
Incompleto, completo
Correcta, podado excesivo, podado insuficiente, descuidado
> 50 % cobertura de plantas leguminosas, < 50 % cobertura de plantas leguminosas,
malezas difíciles, suelo descubierto
Afectado, en recuperación, recuperado (dos espirales de hojas sanas), muerto
Sí, no
Realizado, no realizado

50 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 41-52, Tomo I, 2016

 La configuración de los conjuntos de reglas de nu-
trientes se pueden guardar y volver a utilizar (o pue-
den ser cargados y después modificados) para distin-
tos escenarios. El uso de las dosis y reglas se ilustra
en los siguientes ejemplos para N, P, K y Cu. Como
se indicó antes, estos solo son ejemplos y el programa
tiene opciones casi ilimitadas para ajustar las reglas y
las dosis a cualquier sitio.
Las ventajas clave que ofrece el planificador de
fertilización incluyen:
• Transparencia. Todos los supuestos y las reglas
son transparentes y de fácil acceso para la revisión
de los pares.
• Minimización de costos. La fuente menos costosa
de fertilizantes minerales se selecciona de una lis-
ta de fuentes disponibles.
• Específico al sitio. Los escenarios y las reglas pue-
den ser adaptadas a cada ubicación.
• Sustitución de nutrientes. Los residuos de cultivos
se pueden integrar como fuentes de nutrientes.
• Utilización de datos. Máximo uso de los datos
agronómicos almacenados en omp. Las recomen-
daciones de fertilizantes pueden ajustarse para te-
ner en cuenta las condiciones de mantenimiento
del campo, además de los análisis de hojas y suelos.
• Flexibilidad. Se pueden elaborar varios escenarios
con diferentes niveles de rigor para tener en cuen-
ta los desarrollos del precio.
• Ahorra tiempo. El tiempo necesario para la elabo-
ración de las recomendaciones del fertilizante se
reduce significativamente.
• Propiedad intelectual. La empresa conserva to-
talmente su propiedad intelectual con respecto al
manejo de nutrientes.
Conclusiones
En este trabajo hemos demostrado que la intensifi-
cación de la productividad de la palma de aceite es
un proceso a largo plazo debido a la gestación de 30-
40 meses de los racimos de fruta. La optimización de
costos requiere un enfoque integrado para relacionar
los costos de campo a los estándares de implemen-
tación de las prácticas agronómicas. Debido a que la
intensificación de la productividad es un proceso a

Tabla 3. Resumen de las sugerencias en cuanto a las condiciones previas para los programas de intensificación de
la productividad de las plantaciones de palma de aceite.

# Condición previa
Enfoque de presupuestos a largo plazo para garantizar la continuidad de las condiciones de campo y de la nutrición
1
de los cultivos.
Los costos de campo se evalúan con referencia a los estándares de manejo de campo para determinar si la empresa
2
está recibiendo el valor de las inversiones en mantenimiento del campo.
El personal, desde la alta gerencia a los supervisores de campo, está alineado (e incentivado) con el fin de intensificar
3
la productividad.
Los procedimientos operativos estándar que describen cada procedimiento de campo se dan por acuerdo entre todo
4
el personal administrativo y están disponibles para el mismo.
5 El software de base de datos se utiliza para almacenar y analizar datos agronómicos.
El análisis de la brecha de productividad proporciona los medios para identificar las áreas específicas o las responsa-
6
bilidades que necesitan mejorar.
Las auditorías de campo semestrales se llevan a cabo para evaluar las condiciones de campo y las causas de las bre-
7
chas de productividad.
Se establecen bloques de MPM en etapa de plan piloto para evaluar el potencial de mejora de la productividad dentro
8
de las mejores prácticas de manejo.
Utilización de una herramienta computarizada de apoyo a las decisiones para mejorar las recomendaciones de los
9
fertilizadores.

Identificación y eliminación de las brechas de productividad en el cultivo de la palma de aceite • Fairhurst, T. 51

 largo plazo, los supervisores de campo deben estar
estrechamente alineados en cuanto a los objetivos y
las tareas. Los procedimientos operativos estándar
que detallan cada práctica agronómica deben ser
establecidos y puestos a disposición del personal en
todos los niveles de manera que no haya “brechas de
conocimiento” o malentendidos sobre lo que se re-
quiere en el campo.
El software para el manejo de datos es esencial para
almacenar y analizar los datos agronómicos, de ma-
nera que el personal esté dotado con la información
adecuada durante el trabajo de campo. Un modelo
simple ayuda a los productores a dividir las brechas
de productividad bajo diferentes causas y áreas de res-
ponsabilidad. Los bloques de mpm instalados en cada
unidad administrativa proporcionan evidencia de las
posibilidades de mejora de la productividad, y los da-
tos necesarios para realizar el análisis de costo-benefi-
cio antes de ampliar la aplicación. Una herramienta de
apoyo computarizada para las decisiones proporciona
los medios para mejorar las recomendaciones de fer-
tilizantes al invocar varios parámetros, así como los
resultados del análisis foliares y suelos.

Referencias bibliográficas
Fairhurst, T., and Kerstan, M. (2015). OMP Fertilizer Planner. A computer decision support tool for
the preparation of cost-effective and site-specific fertilizer recommendations using data stored in
OMP. Tropical Crop Consultants Limited, PT Agrisoft Systems. Wye, UK.

Fairhurst, T., Rankine, I., and Griffiths, W. (2015). Oil Palm Series – Nursery, Immature and Mature,
3 ed. Tropical Crop Consultants Limited, Wye, United Kingdom.
Fairhurst, T.H., and Griffiths, W. (2014), Oil Palm. Best Management Practices for Yield In-
tensification. International Plant Nutrition Institute, Southeast Asia Program (IPNI SEAP),
Penang, Malaysia.
Food and Agriculture Organization (2013). Statistical Database. Disponible en: http://faostat3.fao.org

52 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 41-52, Tomo I, 2016

Volver al
contenido

Buenas prácticas de manejo en el cultivo de palma

de aceite en América Latina*
Good Management Practices of Oil Palm Cropping in Latin America

citación: Ditschar, B. (2016). Buenas prácticas de manejo en el cultivo de

palma de aceite en América Latina. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 53-62.
palabras clave: Buenas Prácticas de Manejo, costos de producción,
rendimiento.
keywords: Good Management Practices, productivity, production costs, yield.
*Articulo original recibido en español, previamente a la realización del evento.

Bernd Ditschar
Asesoría de las Buenas Prácticas
de Manejo (BPM) en Palma de Aceite
y Consultor Técnico para K+S
KALI GmbH para Colombia y
América Central.
Advisory Good Management Practices
(GMP) Oil Palm and Technical
Consultant for K + S KALI GmbH for
Colombia and Central America.
Bernd.Ditschar@gmx.de
Resumen

Las estadísticas de la producción en Colombia (www.fedepalma.org) están demostrando que la pro-

ducción de palma de aceite en los últimos 15 años ha crecido junto con el área pero, por otro lado, la
productividad por hectárea no ha cambiado. Entre los años 2000 y 2015, la productividad en prome-
dio fue 16 t RFF por hectárea. Los costos de producción están creciendo y para cubrirlos es necesario
un rendimiento de 14 t RFF/ha. La idea con las Buenas Prácticas de Manejo (BPM) es cerrar las brechas
entre la productividad actual y la máxima productividad potencial. Definimos como productividad
potencial de un sitio específico la que puede ser obtenida cuando todas las prácticas de manejo agro-
nómico de campo son implementadas correctamente y la productividad es limitada solamente por
factores fuera del control del agricultor (precipitación, radiación solar y la temperatura).

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 53-62, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 53
 Se definieron brechas en cuatro etapas del cultivo. La brecha 1 es causada por la falta de la implemen-
tación de las mejores prácticas agronómicas durante el vivero y la fase de desarrollo de las palmas
inmaduras. La brecha 2 se da por una mala recomendación de los nutrientes y el control de la aplica-
ción. La 3 es la productividad limitada por manejo agronómico, que ocurre debido a la falta de imple-
mentación de suficiente “cuidado de cultivo” o manejo agronómico basado en las recomendaciones
del agrónomo. La brecha 4 está definida por la cosecha y el transporte, y es un paso determinante en
la productividad, que está en el campo y es, por ejemplo, la falta de organización en el transporte de
todos los racimos y frutos sueltos a la planta extractora para su procesamiento.

En Indonesia, los resultados demostraron una mayor productividad en todos los lotes de BPM en
comparación con el testigo. En Colombia observamos la misma tendencia que encontramos en
Indonesia. Mejoramos la productividad significativamente en los lotes de BPM contra el testigo. La
gran diferencia entre el BPM y el testigo representa también un beneficio adicional de cantidad (el
cálculo de la cantidad está en proceso). En Ecuador, el proyecto de BPM empezó en 2013. A partir de
este año, encontramos en los lotes de BPM una productividad extra en comparación con el testigo. El
cálculo de los costos totales entre el BPM y el testigo demostró que hay costos más altos en los lotes
de BPM pero se compensaron con un mejor valor de la productividad que resulta en un beneficio
adicional de USD 242 por hectárea.

Abstract

Production statistics in Colombia (www.fedepalma.org) are showing that oil palm production has
grown in the past 15 years along with the area but, on the other hand, yields per hectare have not
changed. Between 2000 and 2015, the average yield was 16t FFB per hectare. Production costs are
increasing, and 14t yield/ha is necessary in order to pay for them. The purpose of Good Practices was
to close the gap between current yields and the potential yield. We defined the potential yield for a
specific area, as the yield that can be obtained when all agronomic management practices are properly
implemented and when yields are limited only by factors beyond the control of the grower (precipita-
tion, solar radiation and temperature).

Yields gaps are obtained for 4 stages of the production process. Gap 1 is caused by the non-implementa-
tion of best agronomic practices during the seedling and development phases of immature plants. Gap 2
is due to the poor recommendation for the application of nutrients. Gap 3 is yield-limited by agronomic
management, which occurs due to the lack of implementation of sufficient “crop care”, or agronomic
management based on recommendations provided by the agronomist. Gap 4 is defined by the harvest
and transportation, and is a “yield-taking” step. Yields are field-based, and i.e. sometimes there is a lack
of organization in transporting all the bunches and loose fruits to the mill for processing.

In Indonesia, results showed a higher yield in all GMP yields when compared to test specimens. In Co-
lombia, we observed the same trend found in Indonesia. We improved yields significantly in GMP lots
when compared to the test specimen. The significant difference between the GMP and test specimen
batches leads us to expect an additional benefit in terms of amounts (the calculation of amounts is
under process). In Ecuador, the GMP process began in 2013. As of that year, we found an extra yield in
GMP batches when compared to the test specimen. The calculation of total costs between the GMP and
the test specimen proved that there are higher costs in GMP batches, but the higher costs were offset by
a higher yield value that results in an additional USD 242 benefit per hectare.

54 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 53-62, Tomo I, 2016

Las estadísticas de la producción en Colombia (www.
fedepalma.org) están demostrando que la producción
de palma de aceite en los últimos 15 años ha crecido
junto con el área pero, por otro lado, el rendimiento
por hectárea no ha cambiado. Entre los años 2000 y
2015 el rendimiento en promedio fue 16 t rff por hec-
tárea. Los costos de producción están creciendo y para
cubrirlos se requiere un rendimiento de 14 t rff/ha.
Todos los palmicultores, ya sean agricultores de peque-
ña escala o compañías grandes, hablan acerca de la ne-
cesidad de maximizar el rendimiento para mejorar la
rentabilidad, pero, ¿cómo lograr esto? El mejoramiento
del rendimiento en palma de aceite es complicado por
el lapso de tiempo existente entre la implementación
de las prácticas en el campo y su efecto en el rendi-
miento, ya que un período de 26 a 40 meses transcurre
entre la floración y la cosecha del racimo. Además, la
vida útil de una plantación en particular es de 23 a 25
años, así que cualquier error cometido durante el es-
tablecimiento de la plantación afectará el rendimiento
por la duración del ciclo de plantación.
La plantación pt Asiatic Persada en Jambi (Indo-
nesia) inició en los años 2000 un proyecto de Buenas
Prácticas de Manejo en Palma de Aceite para inten-
sificar la producción. Luego el ipni (International
Plant Nutrition Institute) del Sudeste Asiático tomó
estas Buenas Prácticas de Manejo para intensificar
la producción en Indonesia a seis plantaciones di-
ferentes. Estas prácticas fueron adaptadas al final
del año 2010 para Colombia (implementación en
Aceites Manuelita y Unipalma S.A.) y en 2012 en
Ecuador (Maravilla/ Oasis y Cooperación Orellana)
(Fairhurst y Ditschar, 2014).
La idea que se tenía en cuanto a las Buenas Prácti-
cas era cerrar las brechas entre el rendimiento actual
y el rendimiento potencial. Definimos el rendimien-
to potencial de un sitio específico como el que pue-
de obtenerse cuando todas las prácticas de manejo
agronómicas de campo son implementadas correc-
tamente y el rendimiento es limitado solamente por
factor que están más allá del control del agricultor
(precipitación, radiación solar, temperatura). El ren-
dimiento actual es por lo general considerablemente
más pequeño que el rendimiento potencial, debido a
varias deficiencias en manejo agronómico y de cam-
po. El proyecto de Buenas Prácticas de Manejo (bpm)
en Palma de Aceite está buscando soluciones con las
Buenas prácticas de manejo en el cultivo de palma de aceite en América Latina • Ditschar, B.
cuales podemos cerrar las brechas en el rendimiento
para mejorar la rentabilidad. En cada plantación de
proyecto hay cuatro lotes (entre 10 y 40 hectáreas), ma-
nejados con prácticas de buen manejo y cuatro lotes del
mismo tamaño como testigo o referencia. El testigo no
tiene manejo de la plantación, por eso al final del pro-
yecto se compara el rendimiento y también los costos
del bpm vs el testigo. Para efectuar la comparación es
importante que cada pareja tenga la misma variedad,
edad y rendimiento histórico. El proyecto se desarrolla
durante cuatro años para encontrar todos los resulta-
dos que han ocurrido entre la implementación de las
prácticas en el campo y sus efectos en el rendimiento.
Las brechas existentes pueden dividirse en cuatro
componentes:
Brecha 1: debida a ineficiencias durante el desarro-
llo de la siembra y hasta el fin de la etapa inmadura.
Brecha 2: evaluación inadecuada de los requeri-
mientos de nutrientes, que además reduce el máximo
rendimiento económico que se podría lograr.
Brecha 3: manejo ineficiente de la palma adulta;
el rendimiento está limitado por manejo agronómico.
Brecha 4: el rendimiento reducido por mala recu-
peración de los racimos y frutos sueltos.
La brecha 1 es causada por la falta de implementa-
ción de las mejores prácticas agronómicas durante el
vivero y la fase de desarrollo de las palmas inmaduras.
Las causas incluyen malas técnicas de vivero y errores
en la siembra de las palmas (Figura 1). En el vivero la
selección de las palmas jóvenes es muy importante.
Se requieren palmas homogéneas con un buen desa-
rrollo en la fase de vivero. Las palmas van a estar por
25 años en el campo y por eso solamente sembramos
palmas sanas y que tengan alta productividad.
El fertilizante es el insumo más costoso en el cul-
tivo de palma de aceite y en la mayoría de las planta-
ciones en Colombia también es el de mayor potencial
para mejorar los rendimientos significativamente. La
brecha 2 obedece a una mala recomendación de los
nutrientes y el control de la aplicación. Al inicio fal-
ta el adecuado diagnóstico de los requerimientos de
nutrientes. Las causas comunes son errores durante
el muestreo y/o análisis de laboratorio y la interpre-
tación para proporcionar recomendaciones balan-
ceadas. Los fertilizantes difieren en calidad, conte-
55
 Figura 1. Errores en la fase de
desarrollo: malas semillas y
selección en el vivero e insuficiente
atención durante los primeros años
en el campo.
nido de nutrientes, solubilidad de estos y el costo.
El productor puede requerir la interpretación de las
recomendaciones proporcionadas como cantidades
de nutrientes por palma en cantidades de fertilizan-
te por palma. Si la aplicación no está balanceada, las
palmas muestran, por ejemplo, bandas blancas en
las hojas jóvenes (Figura 2).
Un alto contenido de Ca en algunos fertilizantes
junto con un alto nivel de Ca del suelo son antagó-
nicos a la absorción de Mg y K y puede inducir defi-
ciencias de estos elementos. Ng, Thong, Ooi & Leng
(1995) reportaron este antagonismo también en la
hoja 17 (Figura 3). Después de 11 años de hacer una
aplicación con kieserita se cambió a dolomita. El efec-
Figura 2. Las bandas blancas son
usualmente asociadas con un
desequilibrio entre N y K.
56
to fue que el Ca subió en las hojas y, por antagonismo,
el K y Mg se redujeron, con lo cual el resultado fue
que el rendimiento también decreció.
Por esto se recomienda analizar el uso adecuado
de los abonos para aumentar el rendimiento.
La brecha 3 es el rendimiento limitado por ma-
nejo agronómico, lo cual ocurre debido a la falta de
implementación de suficiente “cuidado de cultivo” o
manejo agronómico basado en las recomendaciones
proporcionadas por el agrónomo. El ipni (Internatio-
nal Plant Nutrition Institute) (2012) describió cuatro
estándares para discutir y evaluar el uso de fertilizan-
tes. Estos son: la fuente correcta (p. ej., solubilidad),
la dosis (p. ej., cuántos kilogramos por palma), el sitio
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 53-62, Tomo I, 2016
 %K % Mg % Ca FFB (t/ha) Figura 3. Efecto del cambio de
1,4 0,40 1,0 30,3 una aplicación con kieserita a
dolomita después de 11 años, en el
0,9
1,3 0,35 25,3 antagonismo entre K, Mg y Ca en la
1,2 0,30
0,8
20,3 hoja y efecto en el rendimiento.
0,7
1,1 0,25 15,3
0,6
1,0 0,20 10,3
0,5
0,9 0,15 0,4 5,3

0,8 0,10 0,3 0,3

6 a 9 a 12 a 15 a 6 a 9 a 12 a 15 a 6 a 9 a 12 a 15 a 6 a 9 a 12 a 15 a
8 11 14 17 8 11 14 17 8 11 14 17 8 11 14 17

de aplicación (zona de la aplicación, palera y/o plato)
y el tiempo apropiado. Los cuatro estándares van a
funcionar solamente si la plantación tiene la infraes-
tructura y condición adecuadas para implementar
estas prácticas estándar. El sitio de la aplicación de-
pende de la dinámica del sistema de las raíces y el mo-
vimiento de los nutrientes en el suelo. Fertilizantes de
P, K y Mg deben aplicarse en la palera o cajón de cada
palma (Figura 4, a) en donde las tasas de infiltración
de agua son altas y donde el sistema de las raíces está
desarrollado. La palera es el sitio perfecto porque hay
una proliferación de raíces finas (Figura 4, b), además
de materia orgánica proveniente de la descomposi-
ción de las hojas viejas y hay más humedad (Figura 4,
c). Se recomienda la aplicación de N, para minimizar
la volatilización de dicho N.
En el proyecto de Buenas Prácticas de Manejo,
los fertilizantes pueden aplicarse manualmente o
con esparcidores de fertilizantes (Figura 5). Inde-
pendientemente del método de aplicación, la dis-
tribución correcta es vital: los nutrientes tienen que
ser aplicados en sitios en donde crecen las raíces de
la palma.
Antes de la aplicación de los nutrientes el bloque
debe prepararse adecuadamente. Este requiere pla-
tos limpios (sin vegetación con malas hierbas) y un
buen control de los árboles, arbustos y hierbas altas.
Estas plantas (Figura 6 A y B) son fuertemente com-
petitivas con las palmas (por nutrientes, luz, agua) y,
por consiguiente, deben ser eliminadas y sustituidas
por hierbas suaves o leguminosas (Figura 7 A y B).

a. b. Figura 4. a. La palera puede

construirse a modo de cajón o
en forma de U para aumentar la
superficie cubierta con las hojas
cortadas b. El medio ambiente es
perfecto por el crecimiento de las
raíces finas c. y la humedad es más
alta detrás de las hojas.

c.

Buenas prácticas de manejo en el cultivo de palma de aceite en América Latina • Ditschar, B. 57

 Figura 5. Una aplicación mecanizada
incorrecta. Los nutrientes están
siendo aplicados en el camino y no
en el sitio en donde encontramos las
raíces (plato y palera).

Figura 6. Plantas que hacen

competencia con las palmas a. b.
en el campo.

Figura 7. Una buena cobertura en

palmas jóvenes (A) y palmas adultas a. b.
(B) puede controlar el crecimiento
de los árboles y arbustos del campo.

58 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 53-62, Tomo I, 2016

 El punto importante es que todo el personal de
una plantación debe estar de acuerdo acerca de cuá-
les especies de cobertura son benéficas y cuáles son
competitivas. El palmicultor debe manejar la compo-
sición de las especies de cobertura de suelo mediante
el manejo de la fertilidad del suelo y utilizando mé-
todos de control manual y químico de malas hierbas
para que haya una cobertura adecuada, pero no plan-
tas competitivas.
La brecha 4 está definida por la cosecha y el
transporte y es un paso de “toma el rendimiento”.
El rendimiento está en el campo y a veces falta la
organización adecuada para transportar todos los
racimos y frutos sueltos al molino para su procesa-
miento. Las palmas maduras producen unos 10-12
racimos por palma al año. Por tanto, si un racimo se
pierde al año debido a los prolongados intervalos de
cosecha, supervisión insuficiente o falta el transpor-
te al molino, la pérdida de cultivo será 8-10 %, sin
a. b.
Buenas prácticas de manejo en el cultivo de palma de aceite en América Latina • Ditschar, B.
contar los frutos sueltos que no son recoleccionados
del plato. Una clave para una cosecha completa son
las rondas de cosecha. En las Buenas Prácticas, la re-
comendación de la cosecha es cada siete días con el
criterio de 2-3 frutos sueltos en el plato. La recupe-
ración del rendimiento es imposible sin tener buen
acceso a cada palma en la plantación. Un buen acceso
significa que hay caminos en el campo para los co-
sechadores y trabajadores, carretas de búfalo o mini-
tractores y personal de supervisión (Figuras 8 y 9).
La Figura 10 muestra la eficiencia de un recolector
en la cosecha durante el proyecto de Buenas Prácticas
en Asia. En los lotes de bpm los recolectores ocupa-
ron en promedio 0,7 ha más por día en comparación
con los recolectores que trabajaron en los lotes de re-
ferencia. En otras palabras, en las bpm ¡somos 30 %
más eficientes! La mejor eficiencia es resultado de un
mejor acceso, plato limpio y rápida recolección de los
frutos sueltos (a causa del plato limpio).
Figura 8. Se requieren caminos para
garantizar que los racimos puedan
ser transportados al molino dentro
de las 12 horas siguientes a la
recolección; los caminos cubiertos
de hierba son menos susceptibles al
daño del suelo y erosión.
Figura 9. Un acceso insuficiente
tiene efectos negativos en el
desempeño de los trabajadores; el
movimiento en el campo es lento,
el plato con los frutos sueltos no
es visible desde el camino y el
recolector está perdiendo mucho
tiempo en encontrar racimos
maduros.
59
 Figura 10. La eficiencia en la 4,5
cosecha está mejorando gracias a 4,0
las Buenas Prácticas de Manejo.
3,5

3,0

ha día-1
2,5

2,0

1,5

1,0

0,5
1 2 3 4 5 6

Lotes BPM Lotes REF

A veces olvidamos que los racimos de cada palma
han sido pagados por el agricultor o productor y son
el resultado de 30 a 40 meses de labor e inversión.
¡cosecha perdida es ganancia perdida! Una vez
que ha mejorado el acceso a los lotes, se tienen platos
limpios y se ha llevado a cabo la poda adecuada, la
recuperación total de la cosecha tiene la máxima im-
portancia. En las Buenas Prácticas de Manejo, algu-
nas prácticas pueden ayudar a minimizar las pérdidas
de la cosecha en el campo. Durante la poda, por ejem-
plo, los trabajadores siempre deben cortar las hojas
cerca del tronco. Si no, atrás de la hoja cortada existe
un espacio en el que caen los frutos durante la reco-
lección. Estos frutos sueltos nunca van a recolectarse
y son pérdidas de ganancias (Figura 11).
Generalmente al comienzo del proyecto en cada
país los lotes de bpm fueron seleccionados con el peor
rendimiento con respecto al testigo (Figura 12A).
Después en el proyecto en Indonesia los resultados
demostraron un mayor rendimiento en todos los lo-
tes de bpm en comparación con el testigo. En lotes
en los cuales el rendimiento estuvo en un nivel bajo
(Figura 12B) el aumento del rendimiento fue mejor.

Figura 11. Pérdidas de la cosecha si a. b.

cortamos las hojas lejos del tronco.

c.

60 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 53-62, Tomo I, 2016

 a. antes BPM b. después BPM
Figura 12. El rendimiento antes de
33 33
las BPM (A) y después (B).
30 30
28 28
25 25
t RFF/ha

t RFF/ha
23 23
20 20
18 18
15 15
13 13
10 10
1 2 3 4 5 6 1 2 3 4 5 6
sitio sitio

Lotes BPM Lotes REF Lotes BPM Lotes REF

Los sitios 2-6 obtuvieron en promedio un benefi-
cio adicional de 228 dólares por hectárea. De acuerdo
con cada situación, el beneficio adicional varía entre
26 y 443 dólares, dependiendo del nivel de rendi-
miento al inicio del proyecto. Un nivel bajo es más fá-
cil de mejorar que un rendimiento alto si se empieza
en el sitio 1 (rendimiento de 27,5 t rff por hectárea).
En Colombia observamos la misma tendencia que
se encuentra en Indonesia. Mejoramos el rendimien-
to significantemente en los lotes de bpm con respecto
al testigo. La gran diferencia entre las bpm y el testigo
hace esperar también un beneficio adicional del im-
porte (el cálculo del importe está en proceso).
En Ecuador el proyecto de bpm empezó en 2013.
A partir de este año encontramos en los lotes de bpm
un rendimiento extra en comparación con el testigo.
El rendimiento adicional en el primer año está dado
por la recolección completa de los frutos sueltos. En
2014 el rendimiento adicional correspondió al peso
de los racimos y un mejor manejo en el campo en ge-
neral (Figura 13A). El cálculo de los costos totales en-
tre las bpm y el testigo demostró que hay costos más
altos en los lotes de bpm (Figura 13B). El alza de los
costos se debe a una mejor y balanceada fertilización
y más costos en la cosecha (p. ej., la ronda de cosecha
es de 7-10 días). Los altos costos se compensaron con
un mejor valor de rendimiento, que genera un bene-
ficio adicional de 242 dólares por hectárea.
Los resultados preliminares obtenidos en Ghana
(África) muestran el efecto de las Buenas Prácticas de
Manejo en plantaciones establecidas y entre peque-
ños palmicultores. Entre 2013 y 2014 el rendimiento

pareja 1 pareja 2 Figura 13. Comparación del

25 25 rendimiento en dos parejas en el
proyecto de BPM en Ecuador.
20 20
t RFF/ha

t RFF/ha

15 15

10 10

5 5

0 0
2012 2013 2014 2012 2013 2014

Lotes BPM Lotes REF Lotes BPM Lotes REF

Buenas prácticas de manejo en el cultivo de palma de aceite en América Latina • Ditschar, B. 61

 subió en 30 % en los lotes de bpm en plantaciones es-
tablecidas y 43 % en plantaciones pequeñas. En los
mismos años el rendimiento del testigo subió 25 y
34 %, respectivamente. Estos resultados indican el
gran efecto ocasionado en plantaciones pequeñas en
donde hay un gran potencial de rendimiento.
Conclusión
Las Buenas Prácticas de Manejo en Indonesia, Colom-
bia, Ecuador y Ghana aumentaron los rendimientos
significativamente en comparación con las prácticas
que existen en las plantaciones. Por eso, al comienzo el
mejor camino para aumentar la producción es traba-
jar para obtener un incremento de la producción por
hectárea en las áreas ya existentes en vez de desarrollar
más hectáreas. Los costos de las Buenas Prácticas son
más altos para implementarlas pero el rendimiento ex-
tra está compensándolos. Las Buenas Prácticas han de-
mostrado que hay un alto potencial en el rendimiento
que puede lograrse con disciplina, control en el campo
y con adecuadas prácticas agronómicas.

Referencias bibliográficas

Fairhurst, T. and Ditschar, B. (2014). Uso de la implementación de la Fase Piloto de las Mejores Prácti-
cas de Manejo para mejorar la producción en plantaciones de palma de aceite. Verlagsgesellschaft
für Ackerbau, Germany.
IPNI (2012). 4R Plant Nutrition: A Manual for Improving the Management of Plant Nutrition. IPNI,
http://www.ipni.net/4R.
Ng, S. K., Thong, K. C, Khaw, C. H., Ooi, S. H., and Leng, K. Y. (1995). Balanced nutrition in some
major plantation crops in S.E. Asia. In: Potassium in Asia. Proceedings of the 24th Colloquium of
the International Potash Institute. Basel, Switzerland, 235-244.

62 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 53-62, Tomo I, 2016

Volver al
contenido

plenaria 2

Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite*

Findings and Advances on Ganoderma in Oil Palm

autores: Tristan Durand-Gasselin1, Nicolas Turnbull1, Hubert de Franqueville1,

Fréderic Breton2, Indra Syahputra3 and Benoit Cochard1.
citación: Durand-Gasselin, T., Turnbull, N., de Franqueville, H., Breton, F.,
Syahputra, I., & Cochard, B. Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de
aceite. Palmas, 37(Especial Tomo I), pp. 63-86.
palabras clave: detección, Ganoderma boninense, material de siembra, palma
de aceite, Pudrición basal del estípite, resistencia parcial, selección.
keywords: Detection, Ganoderma boninense, planting material, palm oil, Basal
stem rot, partial resistance, selection.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Strong Tower Consulting.
1
PalmElit SAS, Bat 14, Parc Agropolis, 2214 Bd de la Lironde, 34980 Montferrier
sur Lez, France. Tristan Durand-Gasselin
2
CIRAD, UMR 108-AGAP Avenue Agropolis, 34398 Montpellier, Cedex 5 France. Director Ejecutivo, PalmElit S.A.S.
3
P. T. SOCFINDO INDONESIA-Jl.K.L. Yos Sudarso N°106, Medan 20115 , Indonesia. CEO of PalmElit S.A.S.
tristan.durand-gasselin@palmelit.com

Resumen
Muchas plantaciones de palma de aceite sufren pérdidas considerables a causa de la enfermedad Pu-
drición basal del estípite, causada por Ganoderma boninense, un hongo telúrico que provoca daños
letales al cultivo.

La taxonomía de Ganoderma es compleja, existen 400 nombres pero solamente de 100 a 150 especies.
Ganoderma es un patógeno del roble, el arce, el sicomoro, la areca, la acacia, la palma de aceite, entre
otros. Existe un consenso para afirmar que G. zonatum y G. boninense están relacionadas a la palma.
Prácticas culturales y un manejo agronómico y fitosanitario pueden reducir el impacto de esta enferme-
dad. Esto debe ir de la mano con la utilización de materiales de siembra resistentes, aun parcialmente, a
G. boninense. En este artículo se discutirá la importancia de la distancia entre la palma y el bulbo de la
palma de la anterior generación, transporte, zanjas, eliminación de los cuerpos fructíferos, montículos
y preparación de la tierra.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 63
 La resistencia genética total de las plantas a dicho hongo no ha sido reportada aún, pero se han obser-
vado varios ejemplos de resistencias parciales que incluyen la palma de aceite.

Se ha desarrollado una metodología para hacer una detección sistemática de la resistencia parcial a
G. boninense del material de siembra de la palma de aceite en la etapa de previvero. Esta metodología,
altamente reproducible y consistente, permite a los mejoradores desarrollar una tipificación fenotípica
de alto rendimiento. Nuestro grupo de investigación confirmó inicialmente la ausencia de interacción
entre cepas de G. boninense y progenies de palma de aceite probadas. Se ha destacado que prevalece la
varianza aditiva. A partir de esta base se ha decidido estandarizar la metodología utilizando probadores.

Desde hace mucho tiempo, el material Deli puro se reconoce por su alta susceptibilidad a la Pudrición
basal del estípite. Por esta razón se dio particular énfasis a los orígenes Deli de prueba. Al mismo tiem-
po fueron cuidadosamente evaluadas las pruebas de mejoramiento de campo, los jardines de semilla,
los jardines parentales y las pruebas de progenie. Se seleccionaron cuatro orígenes Deli que muestran
una resistencia parcial tanto en campo como en pruebas de detección temprana.

Se evaluaron los orígenes del grupo B (pisifera) principalmente de orígenes La Mé y Yangambi. La

mayoría de las fuentes de resistencia se encontraron en el material La Mé. Se seleccionó el origen más
resistente. Finalmente, se confirmó que los cruzamientos entre los Deli SIB y los orígenes La Mé selec-
cionados tienen una alta resistencia en comparación con el material no seleccionado.

Este trabajo nos permitió lanzar una variedad de palma de aceite que presenta, a la fecha, la mejor resis-
tencia parcial posible a la enfermedad de la Pudrición basal del estípite causada por Ganoderma boninense.

Abstract
Many oil palm plantations experience considerable losses mainly due to Basal stem rot disease, caused
by Ganoderma boninense, a telluric fungus which provokes lethal damages to the crop.

Taxonomy of Ganoderma is confuse, 400 names but only 100 to 150 species. Ganoderma is a pathogen
for Oak, Maple, Sycamore, Areca, Acacia... and Oil Palm. A consensus exists to say that G. zonatum
and G. boninense are related to palms. Cultural practices, agronomic and phytosanitary management
can reduce the impact of the disease. It should come along with the use of planting materials which
are resistant, even partially, to G. boninense. The usefulness of distance to the palm of previous gene-
ration, under planting, shipping, trenches, elimination of fruiting bodies, mounding and land prepa-
ration will be discussed.

Total genetic resistance of plants to such fungus has not yet been reported, but many examples of
partial resistances have been observed including for oil palm.

A methodology has been developed to systematically screen oil palm planting material for its partial
resistance to G. boninense in pre-nursery. This methology, which is highly reproducible and consis-
tent, allows breeders to develop as a routine a relatively high-throughput phenotyping. Our research
group has first confirmed the absence of interaction between G. boninense isolates and tested oil palm
progenies. The prevailing of additive variance has been highlighted. From this founding it has been
decided to standardize the methodology by using early detection tests.

Since a long time, pure Deli material is well known for its relatively high susceptibility to Basal stem
rot disease. Therefore emphasis was given to test Deli origins. At the same time existing breeding field,
seed garden, parental garden and progeny tests, were carefully observed. Four Deli origins which
show partial resistance both in field and in early screening test were selected.

B group origins (pisifera) were evaluated mainly from La Mé and Yangambi origins. Most of the re-
sistance sources were found in La Mé material. The most resistant origin was selected. At last crosses
between the selected Deli SIB crosses and the La Mé selected origin were confirmed, to be highly re-
sistant as compared to non selected material.

This work allowed us to launch an oil palm variety which presents, to date, the best possible partial
resistance to Basal stem rot disease caused by Ganoderma boninense.

64 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016

Introducción
Este estudio resume una parte del conocimiento de
la especie Ganoderma y presenta una actualización
de una charla realizada durante la Conferencia Inter-
nacional sobre la Palma de Aceite (International Oil
Palm Conference – iopc) en Bali en el año 2014.
Quisiéramos dedicar este estudio a la memoria de
Gerardo Martínez y Mauricio Herrera. Para mí hu-
biera sido un placer compartir y discutir con Gerar-
do, fitopatólogo de Cenipalma, las bases de este estu-
dio y muchos otros temas, especialmente en relación
con la Pudrición del cogollo.
Mauricio Herrera ha pasado a la palma de aceite
su espíritu de esperanza, confianza en las investiga-
ciones dedicadas, la impaciencia que nos lleva a dar
lo mejor de nosotros mismos y, por último, su pa-
sión por la palma.
La Pudrición basal del estípite (pbe) causada por
Ganoderma sp. puede ocasionar pérdidas significati-
vas, de hasta 80 % en las plantaciones del Sudeste Asiá-
tico, especialmente después de haber sido renovadas.
(Susanto, 2009, Susanto and Huan, 2010) (Figura 1).
De hecho, el impacto de la pbe empeora a medida
que aumenta la cantidad de generaciones de renovación;
algunas plantaciones en Sumatra del Norte han llegado
a su cuarta e incluso quinta generación. Mientras que
la incidencia de la pbe en la escala de un país como In-
donesia se había considerado como algo de menor im-
portancia desde hace mucho tiempo, los cálculos más
recientes muestran que se trata ahora de un problema
mayor. Se estima que 10 % de las palmas han sido afec-
tadas (Figura 2) y que si la tasa de infección sigue esta
tendencia, la cifra podría duplicarse para el año 2035.

Figura 1. Campo de palma de

aceite diezmado por Ganoderma
boninense en el Sudeste Asiático
(Sumatra del Norte).

Figura 2. Predicción de la incidencia

25
de Ganoderma en Indonesia.

20

15
(%)

10

0
1850 1870 1890 1910 1930 1950 1970 1990 2010 2030
Año

Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite • Durand-Gasselin, T. et al. 65

 En Colombia el porcentaje de infección por Ga- Esta enfermedad debe combatirse utilizando un
noderma sigue siendo muy bajo, pero se han encon- manejo integrado mediante prácticas de cultivo (pre-
trado situaciones en algunas plantaciones, en donde paración de la tierra, eliminación de las palmas infec-
10 a 15% de las palmas han sido infectadas para el tadas), control biológico (uso de organismos antago-
final de la primera generación. (Cenipalma, comu- nistas como Trichoderma spp.), y resistencia genética.
nicación personal).
Hemos conocido a través de observaciones de cam-
La especie predominante G. boninense parece po, en Indonesia, la evidencia de distintos comporta-
ser la más agresiva (Cooper et al., 2011), incluso si mientos frente a Ganoderma, de un origen a otro. Esto
otros tipos de Ganoderma como G. ryvardense han confirma la existencia de variaciones genéticas den-
sido mencionados (Kinge and Mih, 2011). G. boni- tro de la palma de aceite respecto de la resistencia a
nense también puede causar una Pudrición superior la pbe (de Franqueville et al., 2001, Durand-Gasselin
del tallo (pst), la cual es mucho menos común que la et al., 2005). Estos resultados se emplearon para crear
Pudrición basal del estípite. una prueba de detección temprana (Breton et al., 2005,
Breton et al., 2009ª, Flood et al.,
2010) y para desarrollar una estrate-
Acerca de la resistencia y la tolerancia gia de selección para la resistencia.
Los primeros resultados han sido
Los patólogos y cultivadores hacen una distinción clara entre in- publicados (Breton et al., 2010a y b,
munidad, resistencia y susceptibilidad. De manera general, la in- Miranti et al., 2010), mostrando una
munidad es específica, mientras que las resistencias son no espe- correlación bastante acertada entre
cíficas. Normalmente (no siempre), la inmunidad es el resultado las observaciones realizadas en el vi-
de una interacción de gen a gen entre la planta y el patógeno. vero y en campo.
La resistencia de gen a gen es una forma de buscar resistencia a Esta enfermedad también ocu-
enfermedades ampliamente explotadas por los mejoradores de rre en África y ahora cada vez más
plantas. Sin embargo, una resistencia específica puede ser eludida en América Latina. En África, en
por el patógeno; por tanto, en la palma de aceite, la cual es un cul- donde también existe la marchitez
tivo perenne, no buscamos dichos mecanismos de defensa. por fusarium, causada por el Fusa-
rium oxysporum f.sp. elaeidis (Foe)
La estrategia de PalmElit busca la selección de varios genes de (Wardlaw, 1946, Fraselle, 1951),
defensa involucrados en la resistencia (parcial). Esta selección fo- se han reportado plantaciones en
mentará y brindará una resistencia sostenible no específica a una donde la enfermedad se encuentra
mayor variedad de aislamientos de los patógenos, en vez de una y están activas ambas enfermeda-
resistencia específica. Es importante observar que, en consecuen- des, desde hace varios años (de
cia, la selección de plantas con resistencias parciales múltiples a Franqueville and Diabaté, 2004).
enfermedades dará como resultado variedades que exhibirán al- Recientemente la cantidad de sitios
gún síntoma de la enfermedad, pero que serán más eficientes en con ambas infecciones está aumen-
limitar la cantidad de estos. tando, y deben buscarse variedades
que tengan una resistencia parcial a
Los agrónomos y cultivadores utilizarán la palabra “tolerante” en ambas enfermedades.
vez de “resistencias parciales múltiples” en la mayoría de los casos.
Hasta ahora, la pudrición por
Alineados con la recomendación de la Federación Internacional Ganoderma en África ha infectado
de Semillas, los autores fomentan la clasificación de resistencia palmas de más de 30 años de edad.
en distintos niveles: variedades altamente resistentes o de resis- Por tanto, se consideraba una enfer-
tencia intermedia. medad oportunista. Sin embargo,
en la actualidad está claro que en las
http://www.euroseeds.org/publications/esa_12.0605.pdf/view áreas de renovación la enfermedad

66 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016

puede ocurrir mucho más temprano, especialmente
si las palmas jóvenes han sido sembradas demasiado
cerca a los tejidos de bulbo de las palmas de genera-
ciones anteriores. Este es el caso de una plantación en
Camerún, en donde prácticas de cultivo demasiado
pobres han contribuido al desarrollo de Ganoderma
en una edad temprana.
Nuestra estrategia para desarrollar material de
siembra parcialmente resistente a Ganoderma involu-
cra varios pasos que se presentan aquí:
• Resaltar las diferencias de sensibilidad en campo
• Usar el método de detección temprana para hacer
estudios detallados de las fuentes de resistencia
• Determinar la relación entre los resultados en el
campo y los resultados de las pruebas tempranas
Taxonomía de la especie Ganoderma
Ganoderma es reconocido por ser un hongo saprofí-
tico que aprovecha tejidos necróticos. Pero también
puede ser patógeno y puede causar la pudrición blanca
de la madera dura, en el roble, el arce, la areca (nuez de
areca). La acacia y la palma de aceite también pueden
ser infectados por Ganoderma (Seo y Kirk, 2000).
Los hongos de la familia Ganodermataceae son
hongos basidiomicetos. Dada la amplia diversidad de
color y forma de estos hongos, y dado que algunas es-
Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite • Durand-Gasselin, T. et al.
pecies de Ganoderma se utilizaban como remedios en
la medicina china, la cantidad de nombres es de más
de 400, con varios sinónimos (Figura 3).
Debido a los nombres dados por especialistas no
taxónomos, la clasificación aún no es clara en algunas
ocasiones. Se han hechos trabajos con isoenzimas (Go-
ttlieb y Wright, 1999) y con marcadores de adn, espe-
cialmente de adn ribosomal (rapd, its...) (Moncalvo et
al., 1995). Recientemente Richter reportó una revisión
de la taxonomía de Ganoderma (Richter et al., 2015).
Ganoderma luccidum y Ganoderma boninense son
las especies que con mayor frecuencia están relaciona-
das con las palmas de aceite. Es interesante observar que,
según Moncalvo, estas dos especies están estrechamente
relacionadas (Figura 4, de Moncalvo, 2000).
Además de la diversidad de géneros entre especies,
es pertinente estudiar la diversidad dentro de las espe-
cies. Mercière (Mercière et al., 2015) han desarrollado
marcadores de Secuencias Simples Repetidas (Simple
Sequence Repeats, ssr, por sus siglas en inglés) de G.
boninense que permitirán hacer un estudio interesan-
te en Asia, y una comparación con África y probable-
mente con América.
Sin esperar a tener estas herramientas, Pilotti ha
efectuado estudios de la variabilidad genética del
Ganoderma dentro de plantaciones utilizando rapd.
Ella concluye que la variación genética era alta inclu-
so en parcelas pequeñas (Pilotti et al., 2003).
Figura 3. Diversidad de Ganoderma.
Ejemplo de distintos basidiocarpos
de Ganoderma.
: Relacionados con la palma de
aceite.
67
 Figura 4. Taxonomía del
Ganodermataceae utilizando G. tsugae ATCC46754 USA
ITS G. ahmadii TYPE Pakistán
espaciadores transcritos G. valesiacum CBS282.33 UK
internos (ITS). 80 G. tsugae ZHANG0981 N. China
G. lucidum RYV33217 Norway
(Fuente: De Moncalvo, 2000). G. oregonense CBS177.30 USA
G. lucidum CBS270.81 Corsica
G. praelongum ATCC52410 Argentina
G. resinaceum CBS152.27 UK
82 G. cf. resinaceum CBS430.84 USA
72 RSH.RS Taiwán cultivar
88 G. microsporum TYPE Taiwán
96
G. weberianum CBS219.36 Filipinas
G. cf. capense ACCC5.71 China
95 Ganoderma sp. RSH.0626 Taiwán
Ganoderma sp. ATCC32471 India
58 G. cf. curtisii RSH.J2 cultivar Japón
69
G. cf. curtisii RSH.BLC Taiwán
RSH.J1 cultivar Japón
98 72 RSH.H3 cultivar Taiwán
55
G. cf. curtisii RSH.1109 Taiwán
G. cf. curtisii HMAS60537 China
G. cf. curtisii ACCC5.65 China
100 G. cf. tropicum RSH.1111 Taiwán
JM95/1 Tailandia (palm)
100 G. zonatum ME-GAN-33 Florida (palm)
72 G. boninense LKM/257 Sabah (palm)
90 G. sinense RSH.0109 Taiwán
100 G. adspersum CBS351.74 Bélgica
98 G. applanatum CBS175.30 UK
94 G. australe RSH.0705 Taiwán
100 JM95/6 Tailandia (palm)
ME-GAN-14 Florida (palm)
Amauroderma rude JM/ASP.1 Taiwán

Biología de Ganoderma boninense También es importante entender la manera en que

El principal punto de importancia que debe tenerse
en cuenta es el ciclo de vida de Ganoderma boninense,
es un políporo que lleva basidiosporas de pared do-
ble. Las esporas germinan y dan micelios monocarió-
ticos. No todos los monocariontes pueden reprodu-
cirse para dar dicariontes, como la identificación de
compatibilidad sexual requerida (Pilotti et al., 2002).
Pilotti indica que este sistema podría ser una in-
compatibilidad bifactorial con un mecanismo tetra-
polar, lo cual es consistente con la sexualidad de otras
especies del género.
Es importante tener en cuenta la sexualidad de
Ganoderma, la cual naturalmente puede explicar la
alta variabilidad observada, pero también debe ser
tomada en cuenta por genetistas que seleccionan el
material resistente a Ganoderma. La coadaptación del
material de siembra y el Ganoderma podría ocurrir
después de cierto tiempo según la complejidad de las
resistencias (parciales).
ocurre la dispersión de Ganoderma. La infección de
raíz a raíz se ha determinado hace mucho tiempo
(Tuner, 1965), y ha sido confirmada por Flood (Flood
et al., 2000) utilizando palmas cebo; las palmas cebo
fueron infectadas por la misma cepa de Ganoderma
de la palma fuente (Figura 5).
Prácticas agrícolas
Cultivo anterior
Singh (1991) recolectando información de distintos
lotes, ha enfatizado la importancia del cultivo ante-
rior en el desarrollo de la infección de Ganoderma.
Cuando el cultivo anterior es de palma de aceite o de
coco, se puede observar una infección de hasta 50 %
después de aproximadamente diez años. Es, de lejos,
la peor situación en comparación con los bosques
o el caucho (Figura 6: Desarrollo del porcentaje de
infección de Ganoderma relacionada con la edad en

68 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016

 Figura 5. La palma adulta y las
palmas cebo pueden ser infectadas
Palma adulta infectada por la misma cepa de Ganoderma.
Palma cebo joven

Figura 6. Desarrollo del porcentaje

70 de infección de Ganoderma con la
60
Caucho edad en distintos campos según el
Bosque
Palma de aceite cultivo anterior.
% de infección

50
Coco
40
(Adaptado de Singh, 1991).
30

20

10

0
1 3 7 9 11 13 15 17 19

Años

distintos campos según el cultivo anterior). (Adap-
tado de Singh, 1991).
De esta observación se puede entender que el porcen-
taje de la infección de Ganoderma aumentará, gene-
ración tras generación, si no se utilizan prácticas agrí-
colas específicas o si no se siembra material resistente
genéticamente.
Retirar la fuente del inóculo
Flood (Flood et al., 2000) ha reportado un trabajo
importante que estudia el efecto de retirar el suelo
infectado para limitar la propagación de Ganoderma
(Tabla 1 y Figura 7).

Tabla 1. Efecto de la intensidad en remover la fuente del inóculo (profundidad del bulbo) sobre la incidencia de
Ganoderma en las palmas cebo. (Fuente: Flood et al., 2000).

Estado del bulbo Profundidad del bulbo Porcentaje de plántulas cebo infectadas

Infectado (PBE) 0 75 %
Infectado (PBE) 20 cm 58 %
Infectado (PBE) 40 cm 28 %
Infectado (PBE) 60 cm 21 %
Infectado (PBE) 80 cm 0%
Infectado (PBE) 100 cm 0%
Control (sano) 60 0%

Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite • Durand-Gasselin, T. et al. 69

 Figura 7. El tamaño y la profundidad
del bulbo retirado tienen una clara
influencia sobre la propagación de
Ganoderma en las palmas de cebo.

A partir de este estudio queda claro que la reno-
vación se debe hacer lejos de la fuente de los inóculos
(bulbo de raíces de una generación anterior).
Densidad de la plantación
Por alguna razón se puede tener la necesidad de cambiar
la densidad de la plantación de una generación a otra.
A partir de la afirmación anterior según la cual “la
renovación se debe hacer lejos de la fuente de los inó-
culos”, se debe evitar cualquier cambio en la densidad
de la plantación. Hubert de Franqueville ha ilustrado di-
cho cambio (Figura 8). Esto lleva a tener algunas palmas
nuevas muy cerca al bulbo de raíces del ciclo anterior.
Prácticas agrícolas adicionales
Algunas prácticas agrícolas como el amontonamien-
to, cavar zanjas entre las palmas y retirar cuerpos
frutescentes, han sido probadas y muestran distintos
efectos. Podría ser de sentido común retirar palmas
infectadas en una generación dada. La utilidad de di-
cha práctica no es clara. La Tabla 2 resume los resul-
tados de distintas prácticas agrícolas.

Figura 8. Efecto del cambio de

densidad de 143 a 160 palmas
por hectárea, en cuanto a la
distancia entre las palmas nuevas
y el bulbo de raíces anterior.

70 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016

Tabla 2. Efecto de distintas prácticas agrícolas sobre la propagación de Ganoderma dentro de una plantación de
palma de aceite.

Práctica Efecto / Utilidad / Resultado

Saneamiento antes de replantar:

Sí
• Remoción de bulbos de raíces

Distancia a la palma anterior Sí

Saneamiento durante la generación Probablemente sí
Remoción de basidiocarpos Probablemente no
Zanjas No
Amontonamiento Sí durante algunos meses

Evidencia principal de la resistencia comercial Deli puro a la pbe, en comparación con el

en campo
La evidencia principal de las diferencias en la suscep-
tibilidad a Ganoderma en distintos orígenes genéticos
de la palma de aceite fue presentada por primera vez
a la comunidad científica en 2001 (De Franqueville et
al., 2001), y nuevamente en 2005 (Durand-Gasselin et
al., 2005). A continuación se presenta un resumen de
los puntos principales.
Deli es susceptible de manera general
Entre los orígenes de E.guineensis, Akbar (1971) fue el
primero en reportar la alta susceptibilidad del material
material Deli x Yangambi (Tabla 3) en plantaciones de
P.T. Socfindo (Mata Pao y Tanah Gambus, Indonesia).
De Franqueville reportó otro ejemplo (De Fran-
queville et al., 2001) utilizando observaciones de ma-
terial de siembra Deli puro, La Mé puro y material
parental puro de Yangambi del Bloque 60 en la plan-
tación Bangun Bandar (P.T. Socfindo) (Figura 9). A
pesar de la falta de diseño estadístico, es bastante ob-
vio que los orígenes Deli son altamente susceptibles
a Ganoderma; de igual manera, los orígenes La Mé
o Yangambi son parcialmente resistentes; los oríge-
nes Deli sufren una pérdida de palmas de casi 80 %,
mientras que los orígenes La Mé y Yangambi sufren
pérdidas en promedio de 23,5 %.

Tabla 3. Observación de la incidencia de PBE en las plantaciones comerciales de Socfindo en 1970. Fuente: Akbar
et al., 1971.

Terreno Bloque Año de siembra Tipo de material % de PBE

2 1958 Deli x Deli 74
3 1955 Deli x Deli 61
4 1955 Deli x Deli 60
Mata Pao
5 1955 Deli x Deli 73
13 1958 Deli x Yangambi 16
18 1958 Deli x Yangambi 25
32 1957 Deli x Deli 33
33 1957 Deli x Deli 24
Tanah Gambus
47 1957 Deli x Yangambi 13
53 1957 Deli x Yangambi 12

Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite • Durand-Gasselin, T. et al. 71

 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18
Figura 9. Bloque 60: La tasa de
1
PBE depende de la localización del 2
material parental dentro del campo. 3 TxP Yangambi
4 Deli x Deli: 82 % 17 %
5
6
TxT La Mé
7
Deli autofecundadas: 83 % 12 %
8
9
10
TxT Yangambi
11
Deli x Deli: 69 % 24 %
12
13
14
15
16
17 Deli x Deli: 77 % TxP La Mé
18 32 %
19
20
21
22 Deli autofecundadas: 93 %
23
24
25
26 Autofe-
cundación
27
Ténera La
28
Mé
29 Semilla comercial 29 %
30 23 %
31
32
33
34

Variabilidad dentro de los orígenes
De Franqueville ha observado además un grado de
variabilidad en la respuesta de los cruzamientos La
Mé en este bloque, con pérdidas entre 12,4 % y
40,9 %. Esto sugiere que existe una enorme va-
riabilidad dentro del origen (una diferencia de 3
a 4 veces), lo cual amerita ser tomado en cuenta por
parte de los mejoradores.
También se identificaron variaciones dentro de
los materiales Deli. Varios orígenes Deli se cruzaron
con el mismo origen La Mé (lm2t autofecundado) y
fueron sembrados en dos pruebas (bb gt 11 d y bb
gt 17). Se observaron diferencias muy significativas
(Tabla 4). Al considerar Deli 2 como un puente entre
las dos pruebas, Deli 4 parece ser muy susceptible y
Deli 3 parece ser la menos susceptible entre los orí-
genes Deli.
El mismo autor también señaló la consistencia de
estos resultados en otras pruebas (bbcl 2, bbcl 3,
bbgt 1A y bbgt 28): el origen Deli 3 estuvo siempre
entre los materiales menos susceptibles.
Como ejemplo, los últimos resultados del bbgt 28
se indican en la Tabla 5: el Deli 3 parece ser el menos
susceptible entre los orígenes Deli, así como el lm 1
en el origen La Mé. Este origen del grupo B podría
brindar una resistencia parcial adicional.
Detección del material de siembra
utilizando la prueba de vivero
Prueba de detección temprana
(prueba de vivero)
cirad desarrolló un método de inoculación en co-
laboración con dos socios privados (P.T Socfindo y
P.T Lonsum) entre 2002 y 2008 en Indonesia (Bre-
ton et al., 2009 a y b). En la actualidad se emplea
este método para hacer una evaluación temprana de
la resistencia a Ganoderma de varias progenies de
palma de aceite (Figuras 10 y 11).

72 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016

Tabla 4. Observación de la incidencia de la PBE en dos pruebas (BBGT 11D y BBGT 17), comparando los materiales
comerciales de siembra agrupados en categorías.

Origen genético de los Origen genético de los parentales Grupo estadístico

Prueba % de PBE
parentales, Deli dura masculinos (Estudio)

Deli 1 LM2T Autofecundado (LM) 43,6 a

BBGT11D
Deli 2 LM2T Autofecundado (LM) 42,7 a
(siembra 1981)
Deli 3 LM2T Autofecundado (LM) 22,0 b
Deli 4 LM2T Autofecundado (LM) 34,7 a

BBGT17 Deli 5 LM2T Autofecundado (LM) 27,9 b

(siembra1984) Deli 6 LM2T Autofecundado (LM) 20,7 c
Deli 2 LM2T Autofecundado (LM) 19,2 c

Tabla 5. Respuesta a la PBE de los distintos orígenes La Mé y Yangambi al ser cruzados con distintos orígenes Deli
la prueba BBGT 28. (Finca Bangun Bandar, siembra de 1986, observación en 2010). Durand-Gasselin et al. (2005)
brinda más detalles al respecto.

Orígenes LM 1 LM 2 LM 3 Yg 1 Total

Deli 7 53,3 32,0 42,7

Deli 3 25,2 18,7 26,7 14,7 21,3
Deli 6 37,3 49,3 43,3
Deli 8 32,0 38,7 37,8 34,7 35,8
Deli 2 21,3 30,7 26,0
Total 26,2 31,6 39,6 27,1 32,3

Figura 10. Inducción de síntomas

en una edad temprana utilizando
inoculación artificial en el vivero.

Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite • Durand-Gasselin, T. et al. 73

 Figura 11. Inducción de síntomas
en una edad temprana utilizando
inoculación artificial en el vivero.
La investigación y desarrollo del inóculo y el
ambiente que permiten la infección fue un proce-
so bastante complejo que requirió varios años de
estudio en los distintos parámetros de crecimien-
to. Nuestra meta era crear una prueba que fuera
reproducible, con alta eficacia y lo más rápida po-
sible, para hacer una selección en las palmas de
aceite. Después de efectuar pruebas a una amplia
gama de sustratos de crecimiento y métodos de
inoculación, quedó claro que los bloques de made-
ra de caucho (bmc) colonizados con Ganoderma,
un método descrito por Idris inicialmente (Idris,
2006), son el mejor procedimiento que puede uti-
lizarse. Estos bloques de madera deben ser lo más
pequeño posible, de manera que puedan dispo-
nerse dentro de las bolsas de polietileno del vivero
antes de sembrar las plántulas. En la actualidad se
han probado 100 progenies, con 100 plántulas al
mes cada una. Los resultados estarán disponibles
en unos meses.
Dichos resultados, por lo general, se expresan
como un porcentaje de las palmas afectadas por Ga-
noderma o que este ha matado, sin considerar la es-
cala de severidad de los síntomas. Se hicieron análisis
estadísticos después de una transformación logarít-
mica de los datos observados: X = ln (p/(1-p)), en
74
donde p = (cantidad de palmas infectadas / cantidad
de palmas observadas).
Los resultados se emplearon para atribuir un ín-
dice a los cruzamientos en cada prueba. Este índice
es similar al utilizado para interpretar los resultados
de las pruebas de resistencia temprana a la marchitez
vascular en África Occidental (Renard et al., 1991, De
Franqueville et al., 1995). Dicho índice corresponde a
la proporción de pbe expresada por cruzamiento y la
media del ensayo en el que figura. Por definición, el ín-
dice de la media de esta prueba es de 100. Un cruce es
más resistente cuanto más bajo es su índice (o cuando
es menos susceptible que la media de los cruzamientos
sometidos a pruebas), y más susceptible cuanto más
alto es su índice. Al clasificar los cruzamientos entre sí
y centrarlos en la media de cada prueba, el índice per-
mite comparaciones globales y hace posible establecer
un rango de susceptibilidad de manera rápida y clara.
Además se desarrolló una escala de referencia
que utiliza un conjunto fijo de cruzamientos de con-
trol, para utilizarla en cada tamizaje. Esta representa
un rango de resistencia y susceptibilidad que permite
conectar todas las pruebas entre sí. Los resultados se
ajustan por la varianza residual observada en el grupo
de referencia.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016
Interacciones entre cepas de Ganoderma y
progenies de palma de aceite
También es importante verificar que no haya una in-
teracción significativa entre los aislamientos de Ga-
noderma y las progenies de palma de aceite sometidas
a las pruebas. Para este fin, efectuamos pruebas con
regularidad utilizando un rango de aislamientos y
progenies; la Tabla 6 muestra los resultados para cada
par de aislamientos por progenie; corresponden a la
media de 41 ensayos cada uno, en donde están invo-
lucradas 100 plántulas (5 repeticiones de 20 plantas).
A pesar de los esfuerzos hechos para alcanzar una
máxima estandarización de la prueba, la precisión
de cada dato sigue siendo débil, con un intervalo de
confianza de 95 % de ± 5 puntos porcentuales. Por
consiguiente, el análisis estadístico muestra que la
interacción aislamiento x progenie es efectivamente
significativa, pero su nivel es demasiado bajo en com-
paración con el efecto de la progenie o el efecto de
los aislamientos. La consecuencia de esta interacción
débil es que la clasificación de las progenies someti-
das a pruebas no se ve afectada, tomando en cuenta
la imprecisión de las pruebas y cualquiera que sea el
aislamiento (Tabla 7). Sobra decir que los aislamien-
tos menos agresivos (aislamiento 5), no son suficien-
temente discriminatorios, debido a la incapacidad de
diferenciar los cruzamientos más resistentes. Breton
(Breton et al., 2010) demostró que la máxima efectivi-
dad de una prueba se alcanza cuando el porcentaje de
palmas infectadas es aproximadamente 30 %.
Transmisión genética aditiva de
resistencia a Ganoderma
Durante toda la etapa de desarrollo se utilizó una amplia
gama de cruzamientos comerciales; pudimos identificar
subconjuntos para visualizar el diseño factorial. La Ta-
bla 8 es un resumen de un subconjunto de 368 cruza-
mientos que representan 37.000 plántulas. Estos datos
validan la hipótesis de una transmisión principalmente
aditiva de la resistencia a Ganoderma.

Tabla 6. Estudio de la interacción aislamiento x progenie. Resultados observados 24 semanas después de la inocu-
lación, expresado como porcentaje de plántulas infectadas.

Progenie 1 Progenie 2 Progenie 3 Progenie 4 Progenie 5 Progenie 6 Aislamiento promedio

Aislamiento 1 27,3 41,3 32,8 33,5 38,0 21,8 32,4

Aislamiento 2 48,8 55,5 62,3 61,3 52,0 41,5 53,5
Aislamiento 3 12,0 30,8 24,5 30,8 20,0 14,3 22,0
Aislamiento 4 30,3 39,8 38,5 45,0 37,1 26,8 36,2
Aislamiento 5 6,3 18,5 21,0 11,8 13,8 6,8 13,0
Progenie promedio 24,9 37,2 35,8 36,5 32,2 22,2 31,4

Tabla 7. Estudio de la interacción aislamiento x progenie. Resultados observados después de 24 semanas desde la
inoculación. Expresado en orden como una clasificación.

Progenie 1 Progenie 2 Progenie 3 Progenie 4 Progenie 5 Progenie 6

Aislamiento 1 2 6 3 4 5 1
Aislamiento 2 2 4 6 5 3 1
Aislamiento 3 1 5 4 5 3 2
Aislamiento 4 2 5 4 6 3 1
Aislamiento 5 1 5 6 3 4 2

Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite • Durand-Gasselin, T. et al. 75

 Tabla 8. Índice observado de un conjunto de cruzamientos utilizados en un diseño factorial. Este reagrupa cinco
orígenes del Grupo A y cinco orígenes del Grupo B.

Origen Yangambi Origen

Origen La Mé A Origen La Mé B Origen La Mé C Promedio
A y A’ Yangambi B

125 97 115 118

Origen 117 114
(18 cr, 22 (10 cr, 11 (15 cr, 15 (12 cr, 12
Deli A (8 cr, 8 pruebas) susceptible
pruebas) pruebas) pruebas) pruebas)

122 86 102
Origen 107 107 90
(12 cr, 12 (13 cr, 16 intermedio a
Deli B (8 cr, 8 pruebas) (4 cr, 8 pruebas) (5 cr, 5 pruebas)
pruebas) pruebas) resistente

107 109
Origen 105 129 95
--- (4 cr, 8 susceptible a
Deli C (5 cr, 10 pruebas) (5 cr, 5 pruebas) (5 cr, 13 pruebas)
pruebas) intermedio

122 86 102 103 110

Origen 139
(5 cr, 10 (10 cr, 20 (5 cr, 9 (8 cr, 13 susceptible a
Deli D (5 cr, 11 pruebas)
pruebas) pruebas) pruebas) pruebas) intermedio

109 114 82 99 88 98
Origen
(43 cr, 58 (6 cr, 13 (28 cr, 36 (18 cr, 22 (17 cr, 23 intermedio a
Deli E
pruebas) pruebas) pruebas) pruebas) pruebas) resistente

117 Susceptible 90 109 Susceptible

Promedio 118 Susceptible 102 Intermedio
(A’ al menos) Resistente a intermedio

El uso de cruzamientos de prueba
Conjunto de probadores
Los resultados anteriores nos convencieron para defi-
nir un grupo de palmas de referencia que se utilizaría
para ser cruzado con los parentales probados. El es-
tudio de variaciones de resistencia y susceptibilidad
entre uno y otro podría entonces ser posible. Para
realizar pruebas a los parentales del grupo A, prin-
cipalmente Deli, seleccionamos un grupo de pisiferas
provenientes de dos progenies: una susceptible y la
otra con una resistencia intermedia a Ganoderma.
Por el contrario, los parentales del grupo B fueron so-
metidos a pruebas utilizando un grupo de duras Deli
provenientes de dos progenies susceptibles, y con
resistencia intermedia. Los probadores fueron verifi-
cados en un diseño factorial para cruzar el grupo A
y el grupo B, de dos en dos. Esperábamos un índice
medio dentro del intervalo [105,107] (Tabla 9).
Nuevamente, podemos observar en estos resul-
tados la aditividad de la transmisión genética de la
resistencia a Ganoderma. Los cruzamientos realiza-
dos con los probadores susceptibles mostraron 50 %
más de infección que los realizados con probadores
que tenían resistencia intermedia.

Tabla 9. Resultados de los cruces del diseño factorial con ambos grupos A y B. Índice (cantidad de pruebas < 100 –
cantidad de pruebas > 100).

Probadores Probador Yangambi (S) Probador La Mé (I) Promedio

Probador Deli I 99 (10-9) 82 (19-6) 90

Probador Deli S 123 (3-28) 107 (5-5) 115
Promedio 111 95 103

76 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016

Principales resultados de la evaluación de más de una familia pudo haber sido sometida a prue-
cruzamientos de prueba bas. La Figura 12 muestra cada origen representado
por 1 y hasta 7 familias.
Se usaron los cruzamientos probadores para seleccio- Los tres orígenes Yangambi con los que trabaja-
nar varias fuentes de resistencia dentro de cada origen. mos son, en promedio, mucho más susceptibles que
Desde el inicio del proceso de detección evaluamos los orígenes La Mé. A menudo cuando un rasgo no
5.100 cruces; 3.066 de ellos fueron analizados por cru- está fijado aún en las poblaciones de palma de aceite,
zamiento de prueba. Se hizo énfasis particular en el la diversidad de la resistencia se puede encontrar en
grupo A (2.054), ya que hay menos fuentes de resisten- una agrupación genética. Los orígenes La Mé, prove-
cia presentes. Sin embargo, la cantidad de cruzamien- nientes en su mayoría de tres palmas hermanas, cu-
tos de prueba analizados para el grupo B sigue siendo bren la mayor parte del rango de susceptibilidad.
importante (1.012).
Nuestra meta es evaluar la resistencia a Gano- Grupo A. El grupo A incluye principalmente distin-
derma en cada familia, disponible en la actualidad, tos orígenes de Deli y un solo origen de Deli x Angola
dentro de nuestros programas de selección. Se selec- llamado ‘Angola’ en la Figura 13. En la manera en que
cionaron aleatoriamente diez palmas de cada familia ambos grupos fueron interpretados y analizados, ambos
para ser cruzadas con ambos tipos de probadores; grupos están centrados alrededor de un índice de 100.
cada cruce realizado se somete a pruebas dos veces Sin embargo, los orígenes Deli son, por lo general, más
como mínimo, para tener así 20 datos por cada fami- susceptibles que los orígenes del grupo B y las compara-
lia. A continuación presentamos el índice promedio ciones solo pueden hacerse dentro de los grupos (A y B)
de cada familia probada al menos cinco veces. y nunca entre ellos. Es claro que algunos orígenes Deli
están mejor posicionados que otros (Figura 13).
Grupo B. Para cada origen genético proveniente Algunos orígenes Deli están representados por
de lm2t (La Mé) o lm718t x lm238y (Yangambi), una progenie de gran cantidad (Deli D, F, I o M). A

140
130 Figura 12. Índice estimado para
120 distintos orígenes del grupo B.
110
100 La cantidad de progenies dentro
Índice

90 de cada origen aparece entre

80
70 paréntesis.
60
50
40
La Mé A (2)

La Mé B (2)

La Mé C (2)

La Mé D (2)

La Mé E (2)

La Mé F (2)

La Mé G (2)

La Mé H (2)

Yangambí A (1)

Yangambí B (2)

Yangambí C (1)

La Mé I (4)

160 Figura 13. Índice estimado para

140 distintos orígenes del grupo A.
120 La cantidad de progenie dentro
Índice

100 de cada origen se indica entre

80 paréntesis.
60
40
Deli A (1)

Deli B (2)

Deli C (2)

Deli D (23)

Deli E (4)

Deli F (9)

Deli G (8)

Deli H (3)

Deli I (14)

Deli J (6)

Deli K (4)

Deli L (3)

Deli M (30)

Deli N (3)

Deli O (3)

Angola A (2)

Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite • Durand-Gasselin, T. et al. 77

 continuación presentamos ilustraciones de la variabi- dice). Este último origen muestra niveles de resis-
lidad dentro de cada origen Deli D, F e I tencia muy homogéneos.
El origen Deli I es una recombinación entre dos Para aprovechar estos resultados, se debe tomar en
palmas provenientes de un origen genético muy cuenta la varianza de orígenes entre y dentro de am-
distinto, que muestra niveles opuestos de resisten- bos grupos. Pretendemos obtener más información
cia. En consecuencia, se puede observar una amplia al nivel de palmas individuales, especialmente para el
variabilidad (385) con una brecha de 68 de índice, grupo B, ya que se utiliza como parental masculino.
entre las dos progenies extremas. La varianza dentro
La información al nivel de familia también será
de cada origen aumenta debido a la disyuntiva del
importante, pero tomará más tiempo obtenerla debi-
rasgo, ocasionado por el cruce. (Figuras 14, 15 y 16).
do a la cantidad de cruzamientos que se deben hacer.
El origen Deli D proviene de una primera gene-
ración de autofecundación, este muestra menos va-
riaciones (148) y una brecha de 48 puntos del índice
Relación entre las pruebas en campo
entre ambas progenies extremas. El origen Deli F y en vivero
proviene de una segunda generación de autofecun-
dación, y lógicamente muestra la más baja variabili- Los resultados de las pruebas de detección temprana
dad (48 puntos del índice) y la brecha más estrecha deben estar validados por un comportamiento consis-
entre las progenies más extremas (21 puntos del ín- tente en campo que pueda utilizarse de modo rutinario.

Figura 14. Índice estimado de

14 familias del origen Deli I. La 180

cantidad de pruebas realizadas 160

en cada familia se indica entre 140

paréntesis. 120
100
80
60
40
Familia A (11)

Familia B (14)

Familia C (18)

Familia D (34)

Familia E (10)

Familia F (26)

Familia G (21)

Familia H (11)

Familia I (10)

Familia J (12)

Familia K (5)

Familia L (5)

Familia M (20)

Familia N (14)

Figura 15. Índice estimado de

160
23 familias del origen Deli D. La
cantidad de pruebas efectuadas 140
para cada familia aparece entre 120
paréntesis. 100

80

60

40
Familia A (28)
Familia B (20)
Familia C (12)
Familia D (19)
Familia E (7)
Familia F (5)
Familia G (10)
Familia H (7)
Familia I (21)
Familia J (25)
Familia K (10)
Familia L (16)
Familia M (14)
Familia N (19)
Familia O (28)
Familia P (14)
Familia Q (18)
Familia R (22)
Familia S (7)
Familia T (14)
Familia U (15)
Familia V (36)
Familia W (6)

78 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016

 120 Figura 16. Índice estimado de 9
110 familias de origen Deli F. La cantidad
de pruebas efectuadas para cada
100
familia aparece entre paréntesis.
90

80

70

60

50

40
Familia A (36)

Familia B (16)

Familia C (39)

Familia D (10)

Familia E (32)

Familia F (27)

Familia G (12)

Familia H (61)

Familia I (29)
Para este fin, se sembraron ensayos entre 2002 y fuentes de resistencia identificadas en la prueba de
2005 en áreas afectadas severamente con Ganoder- detección temprana obtuvieron también los mejores
ma. Tres ensayos, Gano 1, 2 y 3, fueron sembrados puntajes en campo.
utilizando un diseño completamente al azar (1 plan-
Cuando los parentales de las familias más suscep-
ta por replicación). El área cubierta es de 310 hectá-
tibles de los grupos A y B fueron cruzados entre sí,
reas. El ensayo Gano 2 fue plantado en tres distintas
la progenie resultante mostró 24 % de infecciones de
zonas de P.T. Socfindo: Bangun Bandar, Mata Pao y
Ganoderma en campo, estando el promedio de prue-
Tanah Gambus.
ba en 11 %. Por otro lado, cuando los parentales de
Otro ensayo (Gano 4) fue plantado en 2009 para las familias más resistentes de los grupos A y B fueron
comparar el nivel de resistencia del material gené- cruzados, la progenie resultante mostró 5 % de infec-
tico, pero también el efecto de la aleatoriedad total, ciones de Ganoderma.
en contraposición a la categoría monobloques de las
Los resultados son similares a los observados en el
siembras comerciales, que podrían aumentar la con-
bloque genético sembrado en Aek Loba Timur. Este
taminación por Ganoderma. Estos cuatro ensayos in-
bloque se sembró entre 1995 y 2001 para evaluar y
cluyen casi toda la diversidad genética disponible en
calcular la capacidad de aptitud combinatoria general
el programa de selección conjunta de P.T. Socfindo y
(acg) de varios parentales que se emplean en la pro-
PalmElit en Sumatra del Norte. La Tabla 10 muestra
ducción de semillas (480 cruzamientos con 72 plantas
una visión más detallada de estos ensayos.
evaluadas). Los síntomas de Ganoderma se registran
A finales de 2013 el ensayo Gano 1 fue el único anualmente en estas pruebas, o donde podría efectuar-
que mostró suficientes síntomas para ser analiza- se un análisis de acg para la resistencia a Ganoderma.
do (Tabla 11). Diez años después de la siembra, las También, el análisis por padre no mostró resultados

Tabla 10. Ensayos de Ganoderma sembrados en campo entre 2002 y 2009 con el porcentaje de infección observa-
do a finales de 2013.

Cantidad de plantas / cruces Hectáreas Plantación Porcentaje de Ganoderma

Ensayo Diseño
BB TG MP (ha) Fecha Generación anterior 2013
Ganoderma 1 1x1 98 -- -- 40 2002/3 30 % 10,8
Ganoderma 2 1x1 50 50 50 261 2003/4/5 30 a 50 % 2,1
Ganoderma 3 1x1 50 8 2003 30 % 7,2
Ganoderma 4 diversos 76 120 2009 > 50% 0,0
BB: Bangun Bandar; TG: Tanah Gambus; MP: Mata Pao.

Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite • Durand-Gasselin, T. et al. 79

 Tabla 11. Observación de la incidencia de Ganoderma (%) en el ensayo Gano 1 a los diez años de sembradas. La
cantidad total de plantas observadas se muestra entre paréntesis.

Deli x La Yangambi Yangambi Promedio

Orígenes La Mé A La Mé B Nigeria A Nigeria B
Mé IRHO A Socfin A (No. de palmas)

Deli Dabou A 18,0 10,4 8,0 4,0 10,1 (200)

Deli Dabou B 0,0 16,7 10,0 6,0 9,9 (300)

Deli Dabou C 14,6 7,3 9,1 8,3 12,1 10,2 10,1 (900)

Deli Dabou D 15,3 7,4 6,3 3,4 4,8 9,1 8,0 7,2 (1.000)

Deli Dabou E 31,3 8,3 12,9 13,2 16,3 22,9 13,1 14,7 (1.150)

Deli Nifor A   17,6 6,0 14,7 (200)

Deli Nifor B 22,0 9,0 9,0 4,0 13,0 16,0 10,3 11,3 (550)

Deli Socfindo A 16,7 2,1 0,0 12,5 13,4 5,0 8,5 (400)

Deli Socfindo B 6,2 14,6 15,0 12,5 11,3 (400)

Promedio 19,2 7,4 10,3 7,0 12,0 15,0 9,7 10,8

(No. de palmas) (300) (800) (1100) (350) (850) (600) (1.100) (5.100)

significativos debido a la baja presión de Ganoderma; Caracterización del material de

la reagrupación de los datos por clases desde los más
susceptibles a los más resistentes y por origen A y B dio
como resultado una visión mucho mejor. Se crearon
cinco clases distintas con los distintos parentales A y B
y se les asignó un puntaje: de -2 para los más suscepti-
bles, a +2 para los más resistentes. Luego se calculó la
infección promedio por tipo de cruce; los cruzamien-
tos entre parentales resistentes mostraron una infec-
ción de Ganoderma inferior a 5 % en campo (Tabla 12).
siembra de resistencia intermedia
Utilizando los hallazgos y los resultados anteriores,
parece posible desarrollar un material de siembra con
buena resistencia y ponerlo a disposición de los cul­
tivadores. Sin embargo, sería un material parcialmen-
te resistente, pero reduciría significativamente los ni-
veles de Ganoderma en campo, en comparación con
los materiales comerciales actuales.

Tabla 12. Porcentaje promedio de infección de Ganoderma para todos los cruzamientos (480) sembrados en el
bloque genético de Aek Loba Timur con base en la clasificación de los parentales. Los parentales se clasifican de -2
a +2, según los valores de ACG de la resistencia a Ganoderma. Los cruzamientos con un buen comportamiento de
resistencia se han resaltado con color gris.

Grupo B
Clase del padre Promedio
-2 -1 0 +1 +2
-2 17,1 8,3 18,9 15,2 5,8 15,3
-1 12,9 -- 13,4 8,6 7,1 10,9
Grupo A 0 12,4 20,1 11,1 10,7 6,4 11,0
+1 14,7 8,2 8,9 8,7 2,0 9,8
+2 10,1 9,2 4,6 7,3 4,0 6,1
Promedio 13,3 15,9 10,9 10,4 5,5 10,7

80 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016

 Nuestra estrategia de seleccionar parentales para
la producción de material con resistencia intermedia
se basa en una verificación cruzada de la resistencia
en la prueba de detección temprana y en el campo. La
lista de progenies seleccionadas para la producción
futura de semillas se muestra en la Tabla 13. Aquí se
reagrupan las familias que tienen el mejor compor-
tamiento en las pruebas de vivero, en las pruebas ge-
néticas y en los jardines de semillas. Esta elección es
muy conservadora y realizarla intencionalmente para
evitar falsos positivos.
Dado que una gran mayoría de las pisiferas se origi-
nan de la familia La Mé A (Figura 12) solo se seleccio-
nó esta familia para la producción de semillas.
El material comercial de siembra de resistencia in-
termedia a Ganoderma es el resultado de la combina-
ción de parentales seleccionados de las familias Deli
con parentales seleccionados de la familia La Mé A.
Este material de siembra ha sido evaluado en vive-
ro en su forma original (sin el uso de cruzamientos de
prueba). Para ello, los parentales tomados de familias
seleccionadas provenientes de tres de los mejores orí-
genes Deli (Deli E, F e I) se cruzaron con parentales
de la familia La Mé A. Las progenies resultantes mos-
traron índices muy bajos, confirmando sus niveles de
resistencia estimados (Tabla 14).
Es importante resaltar que la resistencia gené-
tica, a pesar de su gran importancia, es solo un
aspecto más del manejo integrado para combatir
la enfermedad de Ganoderma. Como se mencionó
antes, se debe combinar con buenas prácticas de
cultivo (preparación de la tierra, eliminación de
palmas infectadas) y el uso de control biológico,
para lo cual los resultados son muy prometedores.
De hecho, el uso de organismos antagónicos como
Trichoderma spp. podría retrasar el desarrollo de
la enfermedad durante algunos años. El uso de un
espectro amplio de resistencia genética dentro de
los mismos bloques de la plantación, también po-
dría aumentar la eficiencia del manejo integrado
de la enfermedad. Lo anterior está siendo sometido
a pruebas en el ensayo Gano 4 sembrado en 2009,
en donde una amplia diversidad de orígenes resis-
tentes ha sido sembrada de manera completamente
aleatoria.

Tabla 13. Comportamiento frente a la infección de Ganoderma (Índice) de los cinco orígenes Deli seleccionados
(ver la Figura 13).

Prueba de detección Prueba de progenie

Número de familia Índice jardín de
Origen seleccionada/Número de semillas
familia disponible No. de pruebas índice No. de pruebas índice (Grupo A)

Deli B 2/2 50 89 13 91 73
Deli I 6/14 116 84 26 83 77
Deli E 3/4 81 87 30 69 30
Deli C 1/2 22 84 8 84 61
Deli F 6/9 160 87 23 74 47

Tabla 14. Pruebas en vivero de la variedad comercial de resistencia intermedia a Ganoderma. Los resultados se dan
en términos del índice medio y la cantidad de pruebas.

Origen grupo A Origen Grupo B, La Mé A

Deli I x La Mé A 85 (11 pruebas)
Deli F x La Mé A 88 (7 pruebas)
Deli E x La Mé A 71 (34 pruebas)

Hallazgos y avances sobre Ganoderma en palma de aceite • Durand-Gasselin, T. et al. 81

 Impacto económico
Resulta útil calcular las ganancias que se pueden ob-
tener al utilizar este tipo de material de siembra para
renovar las áreas afectadas.
Para esta simulación, asumimos que la tierra ha
sido debidamente preparada y que la siembra se ha he-
cho lo más lejos posible de los bulbos de las palmas an-
teriores. En esta situación, Ganoderma no debería ser
un problema durante los primeros ocho años después
de la siembra. De ahí en adelante, y según el tipo de
material utilizado, una cierta cantidad de palmas mori-
rá cada año por infección de Ganoderma. Esto se pue-
de expresar como un porcentaje de las palmas restantes
desde el año ‘n-1’ que morirán en el año ‘n’ (Figura 17).
Los parámetros utilizados para esta simulación fueron
adaptados para ajustarse a la realidad, tal como ocurre
en el ensayo algp 3, sembrado en 1995 en Aek Loba
en un bloque de renovación. Este ensayo incurrió en
pérdidas de 20 % después de 15 años. Al enfocarnos en
el material más susceptible, desde ocho años de edad y
en adelante, la pérdida anual está alrededor del 7,25 %
en las palmas restantes, mientras que este porcentaje se
reduce a 3,5 % con el material normal, y a solo 1,5 %
con el material de resistencia intermedia.
Utilizando estas predicciones pudimos calcular la
producción acumulada por hectárea y las ganancias
promedio esperadas de una generación de 25 años.
Estos cálculos toman en cuenta la capacidad de las
palmas circundantes para compensar hasta 50 % de
la producción de una palma aledaña muerta (menor
competencia por luz, agua y nutrientes). Esta regla se
cumple solo en cierta medida; decidimos que esta era
válida siempre y cuando el bloque tuviera menos de
20 % de palmas muertas. En estas condiciones, las ga-
nancias esperadas por hectárea, expresadas en valor
presente neto, son mayores en usd 4.000 cuando se
utiliza material de resistencia intermedia, en compa-
ración con el material normal. Estas ganancias son
mayores y hasta en usd 13.000 si se compara con un
material susceptible, lo cual es el caso de muchas va-
riedades, que basan sus orígenes en Yangambi, Nige-
ria, o incluso La Mé no seleccionados, que se venden
en el mercado actual (Figura 12, Tabla 11).

Figura 17. Simulación de 160

pérdidas por Ganoderma según 140
el tipo de material de siembra
seleccionado. El material puede 120
Densidad por hectárea

variar de susceptible a normal o Semillas Ganorresistentes 1,5

100
de resistencia intermedia.
80
Semillas Ganonormales 3,5
60
ALGP 3, 15 años

40
Semillas Ganosusceptibles 7,25
20

0
0 5 10 15 20 25 30

Años

Tabla 15. Comparación de la producción de aceite acumulada, los resultados esperados acumulados y el valor
presente neto por hectárea, de tres tipos de materiales de siembra. [Precio CPO: $ 800; tasa de descuento: 0,05].

25 años Semillas gano-resistentes (1,5 %) Semillas normales (3,5 %) Semillas susceptibles (7,25 %)

Aceite acumulado /ha 176 161 131

Valor acumulado 140.878* 128.462 105.195
Valor presente neto 73.574 69.750 60.391

*USD, dólares americanos

82 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 63-86, Tomo I, 2016

Conclusiones
Ganoderma está presente en Asia y en África desde
hace mucho tiempo. También ha empezado a infectar
palmas en América. Aún no sabemos si las mismas es-
pecies de Ganoderma están en los tres continentes. Se
han desarrollado nuevas herramientas que permitirán
a los científicos responder pronto a esta pregunta.
Las prácticas agrícolas son de gran importancia para
controlar Ganoderma, en especial el saneamiento (eli-
minación de palmas y retiro de residuos del lote) y la
distancia entre los puntos de siembra con respecto a la
siembra anterior, la cual debe ser la máxima posible.
Desde los años setenta, Akbar (1971) ha hecho
énfasis sobre los altos niveles de susceptibilidad del
material Deli. A la vez, la renovación de lotes antiguos
de material con sangre 100 % Deli, sembrados con el
material Deli x África redujo el impacto del Ganoder-
ma e hizo que la atención de los cultivadores se enfo-
cara en otros aspectos. Solo una generación después,
a finales de los años noventa, los niveles de Ganoder-
ma volvieron a aumentar en los lotes para volverse de
nuevo una preocupación.
En el mismo momento, donde observamos gran-
des diferencias en la respuesta frente a Ganoderma
en los distintos materiales de siembra de nuestros
ensayos genéticos, empezamos a tener discusiones y
a compartir nuestras opiniones iniciales acerca de es-
tos hallazgos. Estas diferencias fueron aún más claras
cuando se sembraron clones (De Franqueville, 2001).
El desarrollo de una prueba de detección de re-
sistencia a Ganoderma, que pudiera hacerse en una
etapa inicial, que fuera reproducible, que tuviera una
alta eficiencia y que permitiera obtener resultados lo
más rápidamente posible, requirió años de esfuerzo
(Breton, 2009a).
Solo después de haber verificado la reproducibili-
dad de los resultados, la ausencia de interacción entre
los aislamientos y genotipos, y la prevalencia de un
efecto aditivo, pudimos utilizar esta prueba de rutina.
El uso de probadores para comparar los distintos orí-
genes entre sí fue una mejora significativa y facilitó el
trabajo de selección.
Por tanto, pudimos identificar las familias más
resistentes dentro de cada grupo heterótico (gru-
pos A y B), y desarrollar material comercial de re-
sistencia intermedia, para ponerlo a disposición de
los cultivadores. Este tipo de material traerá consigo
una mejora en la productividad, especialmente para
los cultivadores, que siembran en lotes de segunda
generación o mayores.
Uno de los problemas principales que enfrenta-
mos en la actualidad es saber si los resultados gene-
rados en Asia serán útiles y aplicables en África y en
América. Se ha planeado establecer una unidad de
detección en Camerún el próximo año para empezar
a hacer pruebas empleando aislamientos de África.
Asimismo, en la actualidad se está haciendo un estu-
dio de la diversidad del patógeno y sus mecanismos
de infección, en colaboración con el cirad.

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Volver al
contenido

plenaria 3

La Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible y su impacto en

la agroindustria de la palma de aceite en América Latina*
The Roundtable on Sustainable Palm Oil and its Impact on the Oil Palm
Agricultural Industry in Latin America

citación: Webber, D. (2016). La Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible

y su impacto en la agroindustria de la palma de aceite en América Latina.
Palmas, 37(Especial Tomo I), pp. 87-92.
palabras clave: RSPO, sostenibilidad, certificación, mercados sostenibles.
keywords: RSPO, sustainability, certification, sustainable markets.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Strong Tower Consulting.

Darrel Webber
Secretario General de la Mesa Redonda
de Aceite de Palma Sostenible (RSPO,
por sus siglas en inglés)
General Secretary of the Roundtable on
Sustainable Palm Oil (RSPO)
darrel@rspo.org

Resumen
Esta disertación aborda temas de interés para todos los actores de la cadena productiva del aceite
de palma en la región. De manera especial analiza el avance que ha tenido la propuesta de sos-
tenibilidad de la Mesa Redonda de Aceite de Palma Sos­tenible (RSPO, por sus siglas en inglés) en
la producción de aceite de palma, desde su establecimiento hace más de diez años, en los cuales
se han enfrentado los principales dilemas que pesan sobre la industria del aceite de palma: defo-
restación, conservación de la vida silvestre, ética en las prácticas empresariales, conflictos en la
posesión de tierras, entre otros.

También, comparte información relevante sobre la producción sostenible de productos de palma

de aceite en el contexto latinoamericano y cómo la región entera avanza en su compromiso de
adoptar prácticas de sostenibilidad.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 87-92, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 87
 Finalmente, la presencia de una oficina regional como eje fundamental para acercar a la RSPO con
los productores, comercializadores y demás actores (ONG ambientales y sociales) de la región, los
retos que se enfrentan y las estrategias diseñadas por el secretariado, también son abordados.

Abstract
The dissertation presented by the Roundtable of Sustainable Palm Oil, RSPO, will address topics of in-
terests for all the players of the oil palm productive chain in the region. The progress made by the RSPO
sustainability program for oil palm production will be analyzed in particular, since it was established
over 10 years ago, wherein it has faced the main dilemmas that weigh on the oil palm industry: defo-
restation, wildlife conservation, business practices ethics and land ownership conflicts, among others.

This article also includes a view on the sustainable production of oil palm products within the Latin
American context, in addition to discussing how the region as a whole is moving forward in its com-
mitment to adopt sustainable practices.

Finally, the presence of a regional office, as the main axis to bring the RSPO closer to producers, traders
and other players (environmental and socially-oriented NGOs) in the region, the challenges faced and
the strategies designed by secretariat will be addressed.

Estoy muy complacido de estar aquí hoy en la XVIII
Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite y
que me hayan dado esta oportunidad de compartir
algunas reflexiones, posiciones y actualizaciones
acerca de la Mesa Redonda de Aceite de Palma Sos-
tenible (rspo por sus siglas en inglés) y el papel que
desempeñamos a nivel mundial, especialmente con
relación al mercado latinoamericano.
Durante muchos años, esta conferencia ha sido el
espacio para que el sector palmero nacional e inter-
nacional comparta experiencias y lecciones; una pla-
taforma para crear nuevas conexiones y alianzas en
cuanto a investigación y desarrollo. La rspo fue esta-
blecida en el 2004 para promover la producción y el
uso del aceite de palma sostenible para las personas,
el planeta y la prosperidad general. Utilizando un en-
foque global hacia la sostenibilidad junto con múlti-
ples actores; la rspo se compone de ong ambientales
y sociales, bancos y financistas, e innumerables em-
presas que operan en el mercado del aceite de palma.
A la fecha, cuenta con más de 2.000 miembros.
Esos actores trabajan de manera conjunta para
encontrar una solución que propenda por el desarro-
llo equilibrado de la industria de la palma de aceite.
Son los miembros de la rspo de manera global, desde
América Latina hasta Australia, quienes dan forma a
estas políticas y se reúnen para tomar decisiones infor-
madas mediante su representación en la Junta Ejecuti-
va, Comités Permanentes y Grupos de Trabajo.
Los Principios y Criterios (P&C) de la rspo para
la producción del aceite de palma han sido aplicados
por cultivadores y extractores desde noviembre de
2007, a fin de garantizar que la producción sostenible
del aceite de palma abarque la gestión y las operacio-
nes legales, viables a nivel económico, ambientalmen-
te adecuadas y beneficiosas a nivel social. Estos P&C
incluyen el compromiso con la transparencia, el cum-
plimiento de las leyes y regulaciones pertinentes, el
compromiso con la responsabilidad económica y fi-
nanciera a largo plazo, el uso de las mejores prácticas
por parte de los cultivadores y plantas de beneficio,
la responsabilidad ambiental y la conservación de los

88 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 87-92, Tomo I, 2016

recursos naturales y la biodiversi-
dad, el trato responsable a los em-
pleados, individuos y comunida- A febrero de 2015, la RSPO ha certificado
des afectados por los cultivadores 296 plantas extractoras de aceite de
y procesadores, el desarrollo res-
ponsable de nuevas plantaciones,
palma, con una capacidad combinada de
y el compromiso con el mejora- producción de 2.76 millones de toneladas
miento continuo en áreas clave de de Aceite de Palma Certificado Sostenible
la actividad.
Un criterio claro de la rspo para
la certificación es que los bosques
primarios o áreas que contengan
concentraciones significativas de biodiversidad o eco-
sistemas frágiles, o áreas con alto valor de conservación
tanto para el medio ambiente como para las comunida-
des locales, no pueden ser talados para la producción de
aceite de palma. Este criterio es particularmente impor-
tante para esta región, dada su rica diversidad biológica.
Otros criterios significativos incluyen el uso reducido
de pesticidas y quemas, el tratamiento justo de los tra-
bajadores conforme a los derechos laborales locales e
internacionales, y la necesidad de efectuar consultas e
informar a las comunidades locales antes del desarrollo
de nuevas plantaciones en sus tierras.
Las empresas obtienen la certificación de la rspo a
través de organismos de certificación externos apro-
bados por Accreditation Services International (Ser-
vicios de Acreditación Internacionales). Una vez que
una planta de beneficio y su base de suministro han
sido certificados, se puede comenzar a producir acei-
te de palma conocido como Aceite de Palma Certifi-
cado Sostenible (cspo, por sus siglas en inglés).
A febrero de 2015, la rspo ha certificado 296
plantas extractoras de aceite de palma, con una ca-
pacidad combinada de producción de 2.76 millo-
nes de toneladas de Aceite de Palma Certificado
Sostenible (cspo), de las cuales Malasia e Indone-
sia cuentan con más del 90 % que se produce en el
mundo. Hay una oportunidad clara para impulsar
la producción de aceite de palma en América Latina
fomentando en los cultivadores la adopción de los
principios y criterios de la rspo, la piedra angular
de nuestro estándar de aceite de palma certificado
sostenible.
Con respecto al papel de la rspo en América La-
tina, hoy tiene 64 miembros, 26 de los cuales son
(CSPO)
cultivadores de palma que manejan más de 250.000
hectáreas de plantaciones de palma de aceite. La
producción total de cspo ha alcanzado 440.173
toneladas. Esta proviene de seis empresas certifi-
cadas por la rspo ubicadas en Brasil, Colombia,
Guatemala, Ecuador y Costa Rica. Se espera certi-
ficar otras seis nuevas empresas en 2015. Por tanto,
hacia el final de este año se tendrá cerca de un mi-
llón de toneladas de aceite de palma producido de
manera sostenible en América Latina.
Lograr esto dará la posibilidad de convertir a Amé-
rica Latina en la región con el porcentaje más alto de
aceite de palma sostenible a nivel global. En total 12
países de América Latina cultivan palma de aceite co-
mercial, que contribuye en cerca de 6 % de la produc-
ción mundial por año. Colombia lidera la producción
de aceite de palma en América Latina y es cuarta en la
clasificación mundial. Así, este país se ve como un líder
en el cultivo y extracción de aceite de palma.
Hoy puedo decir con total confianza que la rspo
ha establecido el estándar más ampliamente aceptado
y aplicado para las prácticas de aceite de palma en el
mundo. Los datos actuales señalan que casi una quinta
parte de todo el aceite de palma producido en el mun-
do cumple con los criterios de la rspo, los cuales se
basan en los P&C antes mencionados. Hay cientos de
miembros que utilizan y promueven de manera activa
el aceite de palma certificado sostenible de la rspo. Po-
demos concluir que la rspo y su estándar representan
la base de la producción de aceite de palma sostenible.
Sin embargo, la sostenibilidad es un proceso de mejo-
ramiento continuo, innovación y adaptabilidad.
En vista de esto, los actuales P&C que fueron revi-
sados por última vez en 2013 tendrán pautas adicio-

La Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible y su impacto en la agroindustria de la palma

de aceite en América Latina • Webber, D. 89
 nales, la rspo next, como un complemento adicional
y voluntario para las empresas que elijan adoptarlo.
Esta adenda voluntaria está disponible por un perío-
do de revisión y consulta pública de 60 días desde el 7
de agosto de 2015.
Vemos a rspo next como una demostración de
agilidad renovada dentro de esta organización, en su
respuesta a las demandas del mercado. Representará
el siguiente nivel de mejores prácticas en la indus-
tria de la palma en cuanto a producción. Y una vez
implementadas, nuestros miembros tendrán las he-
rramientas para pasar de las promesas a las acciones
verificadas, de manera independiente y transparente.
Esta es una iniciativa para involucrarse con las
empresas parte de la rspo: productores, proveedores
y usuarios de los productos de palma que hayan cum-
plido con los requisitos actuales de los principios y
criterios de la rspo y, además, que los hayan sobre-
pasado mediante sus políticas y acciones. rspo next
brindará la credibilidad que solamente puede traer la
verificación de acciones por parte de un tercero, en
asuntos como la protección de bosques y humedales,
y los derechos de los pueblos indígenas.
Otra iniciativa es la implementación de un enfo-
que jurisdiccional hacia el aceite de palma sostenible.
Lo que esto significa es que sea mediante un enfoque
jurisdiccional como se implemente la certificación del
aceite de palma a nivel local, en el que se use un mode-
lo de desarrollo rural. Esto apunta directamente a re-
ducir la deforestación, limitar las emisiones de gases de investigación más amplia son una pieza crucial en este
efecto invernadero, mejorar el bienestar de la sociedad
y reconocer los derechos de las comunidades indíge-
nas. El gobierno de Kalimantan Central en Indonesia
A fin de apreciar totalmente la diversidad
biológica latinoamericana y comprender
las causas fundamentales que llevan a la
deforestación, los estudios locales y la
investigación más amplia son una pieza
crucial en este rompecabezas.
90
y el Estado de Sabah en Malasia se comprometieron a
adoptar este enfoque en junio de este año, sentando un
precedente de implementación en esta región.
En América Latina como región, la palma de acei-
te es un cultivo relativamente nuevo. Sin embargo,
su crecimiento la ha convertido en una alternativa
preferida para los cultivadores. Los datos actuales de
la Organización de las Naciones Unidas para la Ali-
mentación y la Agricultura (fao) afirman que esta
región alberga la mitad de los bosques tropicales que
quedan en el mundo. Estos bosques contienen un alto
grado de especies endémicas y diversidad biológica.
Esta combinación constituye un gran recurso, que si
se utiliza de manera sostenible puede promover el de-
sarrollo social y económico de millones de personas.
En cuanto a la conservación en esta región, el
desafío principal es la tasa de deforestación, que in-
fortunadamente está entre las más altas del mundo.
Sin embargo, es interesante que países como Brasil y
México han visto una disminución considerable en
la tasa de deforestación, a pesar del incremento en
el cultivo de la palma de aceite. Sin embargo, la de-
forestación acumulada de la región es significativa.
Por tanto, con tales contradicciones claras es difícil
encontrar una relación directa entre la deforestación
y el cultivo de la palma.
A fin de apreciar totalmente la diversidad biológica
latinoamericana y comprender las causas fundamenta-
les que llevan a la deforestación, los estudios locales y la
rompecabezas. Si bien sabemos que una de las causas
principales de la deforestación es el crecimiento de la
frontera agrícola, necesitamos evidencia detallada a fin
de obtener un panorama más claro
sobre el rol que desempeña el aceite
de palma en ello.
En este contexto, la rspo puede
impulsar la producción de aceite
de palma en América Latina, fo-
mentando en los cultivadores la
adopción de sus principios y cri-
terios, su piedra angular, el están-
dar de aceite de palma certificado
sostenible. Entre ellos, un princi-
pio clave señala claramente la pro-
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 87-92, Tomo I, 2016
hibición de establecer nuevas plantaciones de palma
de aceite en bosques primarios de alto valor para la
conservación (avc). El interés creciente por el aceite
de palma sostenible en la región y el aumento de la
demanda global por el Aceite de Palma Certificado
Sostenible (cspo), son la promesa de un gran poten-
cial para el crecimiento.
A fin de apoyar los mercados rápidamente emer-
gentes y crecientes de América Latina, estamos muy
complacidos de anunciar que los miembros de la rspo
en esta región finalmente tendrán un punto de con-
tacto de la rspo en idioma español. Esperamos since-
ramente esta acción para que la barrera del lenguaje
ya no sea un obstáculo para que las empresas locales y
regionales busquen su certificación. Además de Fran-
cisco Naranjo, también habrán otros representantes
de la rspo en la oficina regional. Sus roles específicos,
teniendo en cuenta que América Latina es una región
con un gran número de pequeños palmicultores, 85 %
de los cultivadores son pequeños palmicultores que
contribuyen con 40 % del área plantada, uno de los
nuevos representantes trabajará de manera exclusiva
La Mesa Redonda de Aceite de Palma Sostenible y su impacto en la agroindustria de la palma
de aceite en América Latina • Webber, D.
para apoyar a los pequeños productores en su camino
hacia la certificación; mientras que el segundo ejecu-
tivo se enfocará en ofrecer la asistencia técnica nece-
saria para el resto de los miembros.
Nuestra esperanza es que la oficina regional sirva
como centro de conocimiento de la rspo en esta re-
gión, y que sea el lugar al cual acudir buscando asis-
tencia técnica y actualizaciones acerca de las últimas
noticias sobre el cumplimiento de la rspo. También
hemos revisado lo concerniente a la consolidación
de la capacidad local, y estamos complacidos de in-
formar que un nuevo organismo de certificación y
capacitación también será incorporado pronto para
trabajar en la región.
También quisiera aprovechar la oportunidad para
compartir algo acerca del avance en el proceso de
Interpretación Nacional. Desde noviembre de 2014,
el Gerente Técnico de la rspo ha estado trabajando
muy de cerca con varios países de América Latina.
De hecho, es un gran placer anunciar que Colombia,
Honduras y Guatemala han culminado exitosamen-
te el proceso de ni (Interpretación Nacional). Ecua-
91
 dor, Perú y Nicaragua han iniciado su proceso, y por
tanto, se espera que para fines de este año casi todos
los mayores productores en América Latina tengan
su ni establecido. Esto definitivamente contribuirá a
la aceleración y al avance de la certificación dentro
de esta región.
Hemos recorrido un largo camino desde la crea-
ción de la rspo y su establecimiento en esta región.
Conferencias como esta son, de hecho, una gran ini-
ciativa de Fedepalma y de su Centro de Investiga­ción
en Palma de Aceite, Cenipalma. Es una plataforma
fantástica para compartir y aprender de los expertos
de la industria. Con este avance tan alentador, tene-
mos la sincera esperanza de que la rspo podrá ofrecer
el apoyo necesario para la región latinoamericana en
su recorrido gradual para adoptar prácticas sosteni-
bles en cuanto al aceite de palma. Les deseamos a us-
tedes el mayor de los éxitos en sus proyectos futuros.

92 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 87-92, Tomo I, 2016

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plenaria 4

Perspectivas sobre mercados y precios del aceite de palma*

Oil Palm Market and Prices Perspectives

citación: Fry, J. (2016). Perspectivas sobre mercados y precios del aceite de

palma. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 93-98.
palabras clave: aceite de palma, mercados, precios.
keywords: Palm oil, market, prices.
*Artículo original recibido en español.

James Fry
Presidente de LMC International Ltd.
Chairman, LMC International Ltd.
jfry@lmc.co.uk

Resumen

Este artículo examina la evidencia más reciente del nexo entre los precios de la palma de aceite y
los precios en el mercado del petróleo. Esto revela la manera en que la información de China e In-
donesia demuestra la importancia de la demanda discrecional (de libre mercado, no impuesta) del
biodiésel, en defensa de los precios del aceite de palma cuando hay una alta cantidad de existencias
según las temporadas.

El panorama se presentará de dos maneras: a corto plazo, mirando hacia el futuro hasta inicios del año
2016; y a largo plazo, pronosticando varios años más adelante. Los pronósticos a largo plazo tomarán
en cuenta la retroalimentación de los precios del aceite de palma a las plantaciones de palma de aceite
y la manera en que estos afectan la producción de cara al futuro.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 93-98, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 93
 Abstract

This text will review the latest evidence of the link between palm oil prices and prices in the petroleum
market. This will reveal how data from China and Indonesia demonstrates the importance of discre-
tionary (free market, not mandated) biodiesel demand in defending palm oil prices when stocks are
high on a seasonal basis.

The outlook will be presented in two forms: short term, looking ahead to early 2016, and long term,
looking several years ahead. The long term forecasts will take account of the feedback from palm oil
prices to oil palm plantings and how these affect production well into the future.

El mercado internacional se ha caracterizado por una diésel de palma se volvió un combustible barato, por lo
banda de precio que relaciona el precio de los aceites cual fue importante en los mercados internacionales.
vegetales con los precios del petróleo y esto muestra lo Finalmente, se plantea la visión a corto y a largo plazo
que ha pasado durante los últimos siete años. Así mis- para el precio del aceite de palma.
mo, señala la función especial de la palma de aceite en
La banda de precio es lo que ata desde enero de
cumplir con el nuevo equilibrio en el crecimiento de la
demanda, entre aceites y tortas oleaginosas, y este cre- 2007 los precios de aceites vegetales y los precios del
cimiento ha sido impulsado por los biocombustibles. petróleo en Europa. En la Figura 1 se puede obser-
Los biocombustibles desempeñan un rol muy impor- var que en el período total desde 2007 los aceites ve-
tante para entender el mercado del aceite hoy día. Tam- getales se han tranzado en una banda de precio por
bién se considera la demanda fijada por los gobiernos encima del petróleo, en Europa. La razón por la que
y se analiza lo que ha sido importante durante los últi- se utiliza este mercado es que Europa es un impor-
mos tres a cuatro años, que es la demanda discrecional, tador de todos los aceites existentes en el mundo,
jalonada únicamente por el precio de los combustibles, pues es deficitario en todos los aceites vegetales, con
pues durante los últimos tres a cuatro años ha habido excepción del aceite de oliva. Por esto, en Europa te-
momentos en que el biodiésel de palma ha sido más nemos precios de los diferentes aceites compitiendo
económico que el diésel fósil y, como resultado, el bio- unos con otros.

1.600
Figura 1. Banda de precios
Precios de los aceites (US$/tonelada)

internacionales de los aceites 1.400

vegetales y el petróleo Brent
1.200
(Europa).
1.00

800

600

400

200
Ene-07

Ene-08

Ene-09

Ene-10

Ene-11

Ene-12

Ene-13

Ene-14

Ene-15

Barril de Brent Aceite de soya

Crudo de colza Aceite de palma

94 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 93-98, Tomo I, 2016

 La prima del aceite de palma sobre el precio del el petróleo Brent, y una de las razones por las que el
petróleo crudo Brent está determinada por los inven- precio del aceite de palma ha caído es porque el piso
tarios de Malasia. La Figura 2 refleja cómo se com- ha caído. El factor más importante que determina la
porta la prima de los precios del aceite de palma sobre prima en el aceite de palma en Europa sobre el petró-
el precio Brent, y en este se puede ver que aumenta leo son los inventarios del aceite de palma en Malasia.
cuando los inventarios son bajos y disminuye cuando
En resumen, para proyectar el precio del aceite
los inventarios son altos.
de palma debemos tener la proyección del precio del
Hacia finales de 2014, cuando brevemente el acei- petróleo. En el pasado, diez años atrás, los precios
te de palma en Europa tenía el mismo precio que el del aceite de palma siempre estaban determinados
petróleo, ya que la prima era cero en ese momento, por la oferta y la demanda, y lo que ha cambiado esto
lo que implicaba que la prima ha debido ser negativa son los biocombustibles.
en el sureste asiático, puesto que hay que exportar, y
costear fletes para llevarlo a Europa; además, debido La demanda de biocombustibles para los aceites
a los impuestos de exportación el precio del aceite ha hecho que la necesidad mundial de aceites crez-
de palma era más bajo en el interior de Indonesia. ca más rápidamente desde 2000, que el constante au-
La evidencia hasta el día de hoy es que básicamente mento de la demanda de harina para la alimentación
desde 2007 los precios del aceite crudo de palma si- animal. Cada año el mundo está buscando aceite adi-
guen atados al precio del petróleo, fluctuando en una cional, sin esa torta adicional, y el aceite de palma es
banda de precios: la parte inferior es establecida por el llamado a suplir esa demanda. (Figura 3).

600 2.700 Figura 2. Prima del precio

Premium sobre Brent en Europa (US$/tonelada)

Inventarios de aceite de palma del MPOB

500 2.500 internacional del aceite de palma
sobre el petróleo Brent vs.
400 2.300 (Miles de toneladas)
inventarios de aceite de palma en
300 2.100 Malasia.
200 1.900

100 1.700

0 1.500

-100 1.300
Ene-08

Ene-09

Ene-10

Ene-11

Ene-12

Ene-13

Ene-14

Ene-15

APC Premium sobre promedio APC Inventarios del

Brent Premium MPOB

350 175 Figura 3. Demanda de aceites

Aceites vegetales (Miles de toneladas)

vegetales y tortas.
Tortas oleaginosas y su equivalente

300 150
(Millones de toneladas)

250 125

200 100

150 75

100 50

50 25

0 0
1974 1978 1982 1986 1990 1994 1998 2002 2006 2010 2014

Tortas oleaginosas y su equivalente Aceites vegetales

Perspectivas sobre mercados y precios del aceite de palma • Fry, J. 95

 Los biocombustibles han creado una nueva de-
manda por aceites vegetales, sin una demanda pa-
ralela para las tortas de semillas oleaginosas, lo cual
ha favorecido el aceite de palma. Generalmente las
proyecciones de la demanda a largo plazo para los
cultivos, sin importar qué cultivo, asumen supues-
tos, como el que a medida que aumentan los ingre-
sos, obviamente sube la demanda por el petróleo,
por oleaginosas, por torta, etc. Lo que es tan espe-
cial sobre los biocombustibles es que eso no tiene
nada que ver con los ingresos, sino con las políticas
de los gobiernos, y lo sorprendente en términos del
cultivo de oleaginosas es que esto ha creado una
demanda por aceites. En conclusión, el equilibrio
entre oferta y demanda de aceites lo representa el
aceite de palma.
Por esto es importante revisar cómo se ha desa-
rrollado la demanda de biodiésel para tres países
productores de aceite de palma: Indonesia, Malasia
y Colombia.
En Colombia, durante los últimos cuatro a cin-
co años se ha consumido más biodiésel a partir del
aceite de palma que la cantidad de aceite de palma
que va hacia la industria de alimentos, lo cual sig-
nifica que el biodiésel representa más de 50 %. En
el caso de Malasia, con una producción de aceite de
palma de más o menos 20 millones de toneladas,
puede verse que el porcentaje de biodiésel en cuanto
a la producción total es pequeño, más o menos 3 a
3,5 %, y las exportaciones de biodiésel eran pequeñas
porque Indonesia era el gran competidor. En 2013 la
Unión Europea introdujo impuestos antidumping al
biodiésel de Indonesia. En el caso de Indonesia, ve-
mos que es más grande y en 2014 era más o menos
10 %, y gran parte para exportaciones, la mitad o
más de la mitad de la producción de biodiésel en In-
donesia iba hacia la exportación. Estas exportacio-
nes obedecían a que el aceite de palma se volvió más
barato que el petróleo, y estaba siendo exportado
como combustible; de hecho, en 2013 y 2014 gran
parte de la demanda de biodiésel local en Indonesia
no tenía nada que ver con el mandato del gobierno,
se desarrolló porque dentro de Indonesia el aceite de
palma era más económico que el petróleo.
En 2015 nuestros estimativos representan una
menor producción de biodiésel de palma en Indone-
96
sia y esto se debe a dos razones; la primera, el aceite
de palma no es competitivo con el petróleo; como
resultado, las exportaciones de biodiésel en el mer-
cado libre no pueden competir con el combustible
diésel. Ahora, también se escuchan muchas historias
de Indonesia, del gran mandato de mezcla de B15,
pero solamente a fin de año se están comenzando
a dar subsidios para cumplir con ese mandato. En
2015 la demanda de biodiésel dentro de Indonesia
no va a alcanzar 1,5 millones de toneladas, y para
2016 estimamos que va a aumentar a 3 millones de
toneladas. Esto se debe a que han introducido un
sistema de impuesto a la exportación, junto con un
fondo para recaudar esos impuestos, a fin de ayudar
a subsidiar el biodiésel, por lo que va a observarse
un gran salto en la demanda de biodiésel.
El aceite de palma no es el único aceite, hay mu-
chos otros aceites con los que tiene que competir
nuevamente en Europa. El aceite de palma ha co-
menzado a estar más económico frente a los otros
aceites vegetales, por lo cual el aceite de palma a sep-
tiembre de 2015 es competitivo con relación a los
demás aceites vegetales, y esto es importante para
un mercado como la India, que es el mayor impor-
tador de aceite. En 2014 India importó 12 millones
de toneladas de aceite, con un cambio de 8 % en la
participación del aceite de palma por la competitivi-
dad del precio, lo cual representa 1 millón de tone-
ladas más de importación. Este país es muy sensible
al diferencial de precios de palma y soya; cuando la
brecha es históricamente pequeña, como lo ha sido
en el último año o en los últimos dos años, entonces
importan otros aceites, pero cuando el aceite de pal-
ma se vuelve más económico frente al aceite de soya,
importan más aceite de palma.
Estas primas de los aceites de soya y girasol han
subido mucho en las últimas semanas de septiem-
bre de 2015, ya que los precios del aceite de palma
disminuyeron, mientras que los precios de los otros
aceites principales se han mantenido estables. Esto
ayudará a la palma a recuperar los mercados de ex-
portación, como el de India, en donde el aceite de
palma perdió ventas con respecto a otros aceites. El
aceite de palma es también una materia prima más
competitiva para la producción de biodiésel de la
Unión Europea, pero se enfrenta a limitaciones de
clima frío en mezcla.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 93-98, Tomo I, 2016
 Con relación a las perspectivas, algo que es im- La proyección o el panorama que tenemos para los
portante mirar es la estacionalidad de la producción, precios de aceite de palma hacia 2016 van a depender
esto es, el crecimiento año tras año en producción, del manejo de los altos inventarios. Estos inventarios
pues la palma tiene períodos en que produce más y altos no serán absorbidos a través de ventas de biodié-
luego descansa, y en el segundo trimestre de 2015 sel discrecional porque el precio del aceite de palma
estamos en un período al alza después de un perío- no está suficientemente bajo, aunque puede haber un
do a la baja. En los próximos meses podremos tener aumento en los precios del petróleo crudo Brent, pero
movimiento al alza, así que normalmente se vería no se ve en los próximos meses. Así mismo, Indonesia
presión de alto inventario. está mirando en serio su mandato de biodiésel, y está
Sin embargo, el estudio de los movimientos de proyectando 300 mil toneladas de biodiésel al mes.
precios diarios del aceite de palma indica que después Pero no se aprecia un salto importante en precios del
de que los precios indonesios estuvieron muy cerca aceite de palma, ya que podemos ver todavía un mo-
del petróleo Brent por un día, la prima se amplió con mento con unos mayores inventarios, pero el sentido
gran rapidez, probablemente anticipando la caída de de un menor crecimiento de la producción y el hecho
inventarios al final del año. de que Indonesia va a ser un productor importante de
biodiésel darán un apoyo positivo para el precio del
El precio puede estar anticipando la caída de las re-
aceite de palma.
servas que se producirán en dos meses, puesto que es-
tacionalmente la producción se desacelera y se estiman Revisando los precios del aceite de palma hacia el
menores productividades por el menor uso de fertili- futuro, si miramos la tendencia a largo plazo en los
zantes y las sequías recientes. El alto precio de los ferti- precios ajustada con la inflación, los precios han esta-
lizantes y los bajos precios del aceite de palma han redu- do cayendo todo este tiempo, y podemos ver que hay
cido las tasas de aplicación y esto comenzará a afectar la períodos en que los precios están por encima de la
producción, lo cual ocurrirá durante la desaceleración tendencia, donde se siembra mucho, luego se siembra
habitual de la producción del sureste asiático después menos, sube el precio, vuelven y siembran, y luego
de noviembre. También sabemos que ha habido algún dejan de sembrar cuando baja el precio. Estos son los
período de sequías graves en algunas áreas importan- promedios anuales, y los precios están cada vez más
tes de producción, por lo que la producción del tercer cerca de la línea punteada que es la tendencia, y se
trimestre, en vez de subir, como usualmente se hubiera puede observar allí que la tendencia ha bajado 1,6 %
esperado, no va a crecer tanto como lo normal. anual. (Figura 4).

2.000 Figura 4. Tendencia de los precios

del aceite de palma ajustados por
1.800
inflación.
Precios reales de 2014 (US$/tonelada)

1.600
La línea de tendencia a largo plazo
1.400 de los precios reales se redujo en un
1.200
1,6 % anual.

1.000

800

600

400

200
1950 1960 1970 1980 1990 2000 2010

Aceite de palma Tendencia del precio del aceite de palma

Perspectivas sobre mercados y precios del aceite de palma • Fry, J. 97

 Hubo un período muy largo, a comienzos de la
década del año 2000, en el que los precios del aceite
de palma eran mucho más bajos que lo que son hoy
día. Ahora una causa de precios fuertes es el creci-
miento en las áreas de cultivo de palma, en 2008 las
ventas de semillas germinadas en Indonesia llegaron
a 200 millones de semillas, que significan un millón
de hectáreas, por lo que los altos precios instan a la
siembra. Ahora que los precios están bajando, las
ventas de semillas están bajando también y vamos a
tener unas siembras mucho menores, pero tenemos
el legado de las altas siembras y estas van a madurar
en estos años, por lo que el petróleo es el que esta-
98
blece el piso para el precio del aceite de palma. En-
tonces, aunque los precios del petróleo crudo Brent
pueden caer por un período corto, el nivel promedio
a largo plazo debe estar por encima del nivel de hoy,
probablemente no se va a quedar a 40 o 45 dólares
por barril. También sabemos que las áreas nuevas
de aceite de palma van a disminuir, la sostenibili-
dad y las presiones están limitando la expansión en
áreas de palma, entonces vemos que el crecimiento
de la producción va a ser lento, y esto significa que el
aceite de palma puede verse con una prima sobre el
petróleo Brent que va a volver a un nivel más normal
de 150 dólares.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 93-98, Tomo I, 2016
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plenaria 5

Perspectivas del biodiésel en los Estados Unidos de América*

Perspectives of Biodiesel in the United States of America

citación: Jobe, J. (2016). Perspectivas del biodiésel en los Estados Unidos de

América. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 99-106.
palabras clave: biodiésel, combustibles, mercados.
keywords: Biodiesel, fuel, markets.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Adriana Arias de Hassan.

Joe Jobe
Director Ejecutivo, Comité Nacional
de Biodiésel, Chief Executive Officer,
National Biodiésel Board
JJobe@biodiesel.org

Resumen
La industria del biodiésel en Estados Unidos dedicó su primera década, que comenzó alrededor de
1994, a la investigación y el desarrollo. En la siguiente, a partir de 2004, inició la fase de comerciali-
zación. El biodiésel percibió un crecimiento importante durante esta década y aumentó hasta llegar
a ser aproximadamente 5 % del suministro de diésel para 2013, con lo que se cumplió la visión de la
industria de 5 x 15. Ahora la industria comienza su tercera década y tiene una nueva visión, 10 x 22;
llegar a ser 10 % del suministro de combustible diésel en 2022. Esta visión utiliza como referencia la
oferta de diésel para transporte vehicular, que es de 40 mil millones de galones, pero se utilizará en
todos los mercados de destilados en diversos niveles de mezcla. El Comité Nacional del Biodiésel o
National Biodiesel Board (NBB, por sus siglas en inglés) sigue siendo la voz unísona de la industria
del biodiésel en EE.UU., compuesta por los productores y procesadores de materias primas, los pro-
ductores y comerciantes de biodiésel, los distribuidores mayoristas y minoristas de combustibles y los

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 99-106, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 99
 prestadores de servicios de la industria. NBB amplió sus afiliados en 2013 anexando a las empresas
que producen diésel de hidrocarburos renovables. Asimismo, se ha asociado con la industria del
aceite para la calefacción con el fin de promover un mercado sólido de BioHeat®.

En esta presentación se revisa el pasado, presente y futuro de las políticas federales y estatales en
EE.UU., y de los temas relacionados con la técnica, la sostenibilidad y el mercado, que han contribuido
al desarrollo del diésel de biomasa en Estados Unidos.

Abstract
The U.S. biodiésel industry spent its first decade beginning 1994 conducting research and develop-
ment. The next decade beginning about 2004 began its commercialization phase. Biodiésel saw subs-
tantial growth during this decade increasing to approximately 5 % of the diésel fuel supply by 2013,
meeting the industry vision of 5 x 15. The industry is now in the beginning of its third decade and has
a new vision of 10 x 22 - to reach 10 % of the diésel fuel supply by the year 2022. This vision uses the
on-road diésel fuel supply of about 40 billion gallons as a benchmark, but will be used in all distillate
markets in various blend levels. The National Biodiésel Board (NBB) remains the singular voice of the
US biodiésel industry including feedstock producers and processors, biodiésel producers and marke-
ters, fuel distributors and retailers, and industry service providers. NBB broadened its membership in
2013 to include member companies who produce renewable hydrocarbon diésel. And NBB has part-
nered with the heating oil industry to promote a robust BioHeat® market.

This presentation overviews on past, present, and future of U.S. federal and state policy, technical,
sustainability, and market issues that have contributed to the development of biomass-based diésel in
the United States.

En este año se cumplen 25 años desde la invasión
de Saddam Hussein a Kuwait para apoderarse de
los campos petroleros, rivalizar con Arabia Saudi-
ta como mayor productor de petróleo del mundo y
controlar los flujos del combustible hacia el Golfo
Pérsico y el resto del mundo. El 8 de agosto de 1990
Saddam nombró a su primo gobernador militar de
Kuwait, convirtiendo al país en la décimonovena
provincia de Irak. Estados Unidos lideró una coa-
lición internacional para ejecutar la Resolución 678
del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas
y obligar a Saddam a retirarse de Kuwait. El 25 de
enero de 1991, las tropas iraquíes arrojaron 400 mi-
llones de galones de petróleo kuwaití al Golfo Pérsi-
co, en el que fuera el más grande derrame oceánico
de petróleo en la historia. Esta agresión ambiental
perpetrada con alevosía y premeditación tuvo por
objeto impedir el desembarco de los infantes de ma-
rina de Estados Unidos. El 26 de febrero de 1991 el
ejército de Saddam inició su retirada hacia la fron-
tera entre Irak y Kuwait, pero no sin antes come-
ter los actos más viles de terrorismo ambiental que
hubiera presenciado el mundo hasta ese momento.
Saddam ordenó la voladura de los pozos petroleros
de Kuwait y la siembra de minas en los alrededores a
fin de impedir que los operarios llegaran hasta ellos.
Los incendios se prolongaron durante 10 meses, ta-
pando en sol con una nube de humo negro tóxico.

100 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 99-106, Tomo I, 2016
 Ese mismo año, un grupo de profesores de agrono-
mía de la Universidad de Missouri asistió a una confe-
rencia en Alemania en donde se presentaron trabajos
sobre el biodiésel derivado de la colza. De regreso a Es-
tados Unidos, los profesores comenzaron a presentar
propuestas para hacer estudios de investigación sobre
el biodiésel. El Consejo de Comercialización de la Soya
del Estado de Missouri (msmc) respondió financiando
el primer proyecto de investigación sobre el biodiésel
en Estados Unidos. El proyecto estudió la factibilidad
del biodiésel derivado de la soya.
En esa época, en Estados Unidos se cosechaban
58 millones de acres de soya para satisfacer princi-
palmente la demanda de torta de soya. El proceso de
trituración del fríjol de soya produce cerca de 80 % de
torta de proteína y 20 % de aceite. La soya es una de
las formas más eficientes de producir proteína para la
industria de alimentos y contiene una relación más
alta de torta de proteína que cualquier otro cultivo
comercial. Sin embargo, los cultivadores de soya de
Estados Unidos sufrían los efectos de unos precios
bajos debido a un superávit de 20 % de aceite, sub-
producto que languidecía en el mercado nacional y
amenazaba la viabilidad económica de la producción
de proteína. Los agricultores habían presenciado junto
con el resto del mundo los atentados horrendos con-
tra el medio ambiente perpetrados por el terrorismo
en el Golfo Pérsico, además de la tragedia humana
alrededor del conflicto petrolero. Estaban ansiosos
por hacer su aporte a la diversificación de la oferta de
energía para el transporte para romper la dependen-
cia de una sola fuente por demás volátil. El Consejo
de Comercialización de la Soya del Estado de Missou-
ri adquirió una vieja camioneta Ford F250 modelo
1993 de motor diésel para someter a prueba su nuevo
producto derivado de la soya.
Contra este telón de fondo, el msmc recurrió a
otros grupos nacionales y estatales de la soya para
formar la Junta Nacional de Desarrollo del Biodiésel
de Soya en Jefferson City, Missouri, en 1993. Su obje-
tivo era explorar el desarrollo de un producto nuevo
y de una industria nueva en Estados Unidos. Utili-
zaron los dólares provenientes del aporte contributi-
vo de los agricultores para financiar sus esfuerzos. El
trabajo exploratorio permitió identificar una serie de
barreras técnicas, normativas, legislativas y de comu-
Perspectivas del biodiésel en los Estados Unidos de América • Jobe, J.
nicación y marketing que tendrían que superarse para
llevar el nuevo producto al mercado.
In 1994, los líderes del gremio de la soya adoptaron
una política neutral frente al tema de la materia prima
y cambiaron su nombre por el de Junta Nacional de
Biodiésel (nbb) para invitar a una coalición más am-
plia e incluyente de actores a participar en el esfuerzo.
Sin embargo, durante cinco años no hubo quienes qui-
sieran incorporarse a las filas de la nbb. Los líderes gre-
miales tenían una visión a largo plazo para su indus-
tria. Entre 1993 y 1999 invirtieron cerca de 30 millones
de dólares, principalmente en investigación.
En Estados Unidos los cultivos de maíz y de soya
se rotan entre sí, de manera que los productores de
soya también cultivan maíz. Muchos de ellos habían
vivido el intento fallido por introducir el etanol de
maíz durante los años ochenta. El etanol o “gasohol”
se había llevado apresuradamente al mercado sin el
adecuado trabajo de control de calidad, especificacio-
nes y pruebas de compatibilidad. Los problemas de
desempeño durante los primeros años de introduc-
ción del etanol contribuyeron a la mala reputación
del combustible entre los consumidores y los mecá-
nicos, reputación que se mantuvo durante decenios,
mucho después de resueltos los problemas. A medida
que la industria del etanol fue resolviendo lentamente
todos estos problemas de desempeño, las críticas se
convirtieron en mitos arraigados, algunos de los cua-
les todavía prevalecen. Los cultivadores de soya no
querían que le sucediera lo mismo al biodiésel. Por
tanto, invirtieron en un compromiso a largo plazo a
fin de hacer del biodiésel uno de los combustibles me-
jor probados. Junto con laboratorios del gobierno y
otros socios, los cultivadores de soya auspiciaron las
pruebas a través de la nbb, en aspectos como com-
patibilidad, durabilidad y desempeño de los motores,
flujo y lubricidad en frío, pruebas de estabilidad en
el almacenamiento e impacto sobre la salud humana,
y muchos otros aspectos de una investigación muy
amplia. La mayor parte de los informes sobre estos
estudios se encuentran en la base de datos de la nbb
en: www.biodiésel.org.
Para finales de los años noventa habían comen-
zado a surgir las compañías de biodiésel y comenza-
ban también a vincularse a la nbb. Con la llegada del
nuevo milenio llegó la fase de comercialización del
101
 biodiésel. La nbb dejó de ser una organización sola-
mente de investigación y desarrollo para convertirse
lentamente en una asociación gremial integral, con
representación de los actores de todos los eslabones
de la cadena, desde la producción y el procesamiento
de la materia prima hasta la producción, la comercia-
lización, la distribución y la venta minorista del bio-
diésel. La nbb inició su trabajo concreto en el ámbito
del desarrollo de políticas. Con el apoyo decidido de
la Asociación Estadounidense de la Soya, el brazo po-
lítico de la industria de la soya en Estados Unidos, la
nbb comenzó a lograr una serie de éxitos en materia
de política federal y estatal que sirvieron para abrir
los mercados al biodiésel. Después de los ataques te-
rroristas del 11 de septiembre de 2001 se revivió un
fuerte apetito por políticas gubernamentales encami-
nadas a asegurar la independencia energética. Estas
metas políticas se intensificaron con el inicio de la
guerra en Afganistán en 2001 y la invasión a Irak para
derrocar el régimen de Saddam Hussein en 2003. En
ese año, Minnesota fue el primer estado en promulgar
un mandato estatal según el cual cada galón de diésel
vendido en el estado debía contener 2 % de biodiésel.
Ese programa ha tenido éxito y ahora hay seis esta-
dos con mandatos relativos al biodiésel y otros cuatro,
además de la ciudad de Nueva York, tienen mandatos
sobre el BioHeat®. (El BioHeat® es el nombre de marca
que designa el biodiésel mezclado con el aceite tér-
mico utilizado en aplicaciones de calefacción domi-
ciliaria e industrial). Minnesota ha incrementado el
requisito obligatorio hasta en 10 %. En 2004, el presi-
dente Bush elevó a nivel de ley el crédito fiscal para la
mezcla de biodiésel. El crédito fiscal fue una política
energética altamente efectiva que llevó a que los volú-
menes de biodiésel aumentaran casi al doble año tras
año durante los cinco años que siguieron, pasando de
una producción nacional de 25 millones de galones
en 2004, a 700 millones de galones en 2008.
En diciembre de 2007 el presidente Bush sancionó
la Ley de Independencia y Seguridad Energética, en la
cual se incluyó la actual Norma de los Combustibles Re-
novables (Renewable Fuel Standard, rfs, por sus siglas
en inglés), que exige aumentar los volúmenes de com-
bustibles renovables hasta 2022 y después. El programa
contenía dos categorías amplias de biocombustibles: el
biocombustible convencional constituido principal-
mente por etanol de maíz, y el biocombustible avanzado.
102
La definición de este último era un biocombustible que
redujera el ciclo de vida de las emisiones de carbono en
más de 50 %. Con base en el análisis del ciclo de vida del
biodiésel realizado por la epa en 2009, el biodiésel redu-
ce las emisiones de carbono en 57-86 %, dependiendo
de la materia prima utilizada. Esto significa que el bio-
diésel califica como el primer biocombustible avanzado
totalmente comercializado de la nación. Sin embargo, la
opinión de la nbb es que los valores de carbono para el
biodiésel son aún más favorables que lo que concluyó
la epa. En el análisis del ciclo de vida de la epa se toma-
ron como supuestos cuatro y cinco niveles de emisiones
indirectas para el biodiésel y ningún impacto indirecto
para el petróleo. La penalidad indirecta primaria fue por
el “cambio indirecto del uso de la tierra”. En los seis años
transcurridos desde el análisis, los datos muestran que el
cambio indirecto del uso de la tierra asignado al biodié-
sel no sucedió. Sin embargo, puesto que la mayor parte
de la extracción nueva de petróleo provino de fuentes
no convencionales más intensivas en producción de car-
bono, como la fracturación hidráulica combinada con
perforación horizontal, sí hubo un significativo cambio
indirecto del uso de la tierra con el petróleo.
El programa rfs exigía un aumento hasta de mil
millones de galones de diésel derivado de biomasa para
2012 y que la epa estableciera unos volúmenes míni-
mos de ahí en adelante. Por ley, la categoría de biocom-
bustible convencional debía aumentar hasta 15 mil mi-
llones de galones para el año 2015 y restringirse con
un tope de allí en adelante. En la categoría de biocom-
bustible avanzado se incluyeron tres subcategorías de
biocombustible: a) diésel derivado de biomasa (la cual
incluye biodiésel e hidrocarbono diésel renovable); b)
biocombustible celulósico; 3) biocombustible avanza-
do indiferenciado. Esta última categoría se puede lle-
nar con diésel de biomasa al igual que con etanol de
caña de azúcar, biogás, diésel renovable coprocesado,
y otros pocos más. Esa categoría se ha llenado algu-
nos años principalmente con diésel de biomasa, y otros
principalmente con etanol de caña de azúcar de Brasil.
Esto varía dependiendo de la economía de la mezcla
de etanol en gasolina, comparada con la del biodiésel
en diésel en un determinado momento, y también de
diversos factores que cambian constantemente.
Los biocombustibles celulósicos se proyectaron
como la categoría de más rápido crecimiento en el
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 99-106, Tomo I, 2016
programa de biocombustibles, con un incremento de la posibilidad de que las generaciones futuras puedan
16 mil millones de galones para 2022. El biocombus- satisfacer estas mismas necesidades”. Los principios
tible celulósico debía llegar a un volumen de 3 mil afirman que el biodiésel reducirá significativamente las
millones de galones en 2015, pero el etanol celuló- emisiones de los gases de efecto invernadero, protege-
sico ha sido más lento que lo esperado. En 2015 se rá la biodiversidad, los recursos naturales y las zonas
produjeron comercialmente volúmenes mínimos de de alto valor de conservación. La nbb ha desarrollado
biocombustible celulósico, de modo que la epa ha uti- un programa integral de sostenibilidad durante los úl-
lizado su autoridad de exención para reducir el requi- timos siete años y se ha comprometido cada vez más
sito de producción de este biocombustible. Aunque con mejorar los esfuerzos científicos para medir la sos-
el crecimiento de la celulosa ha sido más lento que tenibilidad de los biocombustibles.
lo esperado, el biodiésel ha crecido
a mayor velocidad que la prevista,
hasta tal punto que ha hecho que
se cumplan todas las metas de la
categoría del biocombustible avan- Con base en el análisis del ciclo de vida del
zado todos los años del programa biodiésel realizado por la EPA en 2009, el
hasta 2014, cuando la epa propu-
so recortes generales para el rfs.
biodiésel reduce las emisiones de carbono
Tras dos años de demoras, la epa en 57-86 %, dependiendo de la materia
ha anulado su propuesta y ha pre-
prima utilizada.
sentado una propuesta nueva que
exige un crecimiento modesto de
las categorías de biocombustible
avanzado. La propuesta nueva exi-
ge el crecimiento de la categoría de diésel de biomasa En 2007, la política gubernamental influyó sobre
a 1.700 millones de galones en 2015, 1.800 millones esos esfuerzos científicos con la promulgación de la
en 2016 y 1.900 millones en 2017, al igual que la com- Norma de los Combustibles Renovables (Renewable
petencia con el etanol de caña de azúcar por volúme- Fuel Standard, rfs, por sus siglas en inglés) y la Nor-
nes en el grupo total de biocombustibles avanzados. ma de los Combustibles Bajos en Carbono de Califor-
La nbb le ha pedido a la epa aumentar esos volúme- nia (Low-Carbon Fuel Standard, lcfs, por sus siglas
nes al menos a 2 mil millones para 2015 y a 2.300 mi- en inglés). Estas dos leyes representan la primera ma-
llones de galones para 2016. Los volúmenes de la epa nifestación política importante respecto del carbono a
son demasiado conservadores si se considera que el nivel federal y estatal, respectivamente, para el sector del
volumen propuesto de 1.800 millones de galones co- transporte. Las dos leyes se sancionaron en 2007, ambas
rresponde al alcanzado por la industria del biodiésel tardaron dos años en definir los criterios de elegibilidad
en Estados Unidos en 2013. y ambas entraron a funcionar en la práctica apenas en
Uno de los aspectos en los cuales se ha centrado la 2011. Ambas leyes exigían considerar los impactos in-
industria del biodiésel en Estados Unidos en los últi- directos de los biocombustibles. En 2007 prácticamente
mos años ha sido la sostenibilidad. Con una historia no existía la “ciencia” que permitiera analizar los impac-
arraigada en la agricultura y la custodia de la tierra, la tos indirectos de los combustibles. Estas dos políticas
sostenibilidad siempre ha sido un objetivo primordial. relativas a las emisiones de carbono de los biocombus-
La nbb comenzó su programa formal de sostenibilidad tibles llevaron al desarrollo de programas de comercio
en 2008 y desarrolló unos principios de sostenibilidad de bonos, los cuales generan un crédito independiente
para orientar a la industria. Estos principios definen la por cada galón de biodiésel (u otro combustible alterna-
sostenibilidad en estos términos: “Suplir las necesida- tivo) generado. En la rfs, el bono se denomina rin (que
des actuales en materia de custodia ambiental, prospe- significa Número de Identificación Renovable). Bajo la
ridad económica y calidad de vida sin poner en peligro ley lcfs, el crédito se denomina sencillamente “bono

Perspectivas del biodiésel en los Estados Unidos de América • Jobe, J. 103

 de carbono” o “bonos lcfs”. Ambos instrumentos tran-
sables funcionan de manera muy distinta. Un galón de
biodiésel genera 1.5 rin bajo la rfs. Actualmente, un
rin se transa por un valor aproximado de 60 centavos de
dólar, de manera que un galón de biodiésel produce cer-
ca de $ 0,90 en rin. Bajo la ley de California, un crédito
lcfs se basa en el desplazamiento de 1 tonelada métrica
de CO2 conforme a la intensidad de generación de car-
bono asignada a la materia prima y la vía de producción
utilizada. El valor de una tonelada de carbono cambia
con el mercado ya afianzado para los bonos lcfs. La
Junta de California para los Recursos del Aire (Califor-
nia Air Resources Board, carb, por sus siglas en inglés)
ha propuesto imponer al aceite de palma una penalidad
por cambio indirecto del uso del suelo equivalente a 74
gramos/megajulio. Una vez sumada al valor del carbo-
no por concepto de las emisiones directas, la penalidad
por cambio indirecto del uso del suelo haría muy difícil
que la palma generara bonos de carbono significativos
en comparación con el diésel derivado del petróleo. Eso
significa que, tal como está configurado el sistema ac-
tualmente, es poco probable que el biodiésel de palma
se utilice en el futuro cercano para cumplir con la lcfs. en 17 % en comparación con el diésel de petróleo.
Una de las razones más contundentes para
promulgar políticas relativas al biodiésel es
diversificar la oferta de combustible para
el transporte y no depender de una sola
fuente volátil.
La nbb no está de acuerdo con la metodología que
busca asignar unas penalidades por impacto indirecto
a los biocombustibles y la compara solamente con los
impactos directos del petróleo. Esto se basa en el su-
puesto de que los combustibles tienen impactos indi-
rectos significativos y que el petróleo no tiene ninguno, ble oportunidad para mejorar las emisiones de gei
cuando lo contrario es obvio. Pero no hacen falta las
observaciones y los datos anecdóticos para desbancar
este concepto defectuoso porque ya hay siete años de
datos prácticos del mundo real para considerar. Los
datos del mundo real revelan que los impactos indirec-
104
tos asignados a los biocombustibles no se han produci-
do, mientras que sí se han materializado los impactos
indirectos del petróleo en cantidades significativas,
principalmente por la construcción de pozos de frac-
turación hidráulica (fracking). Además, los impactos
del fracking ni siquiera son indirectos sino verdadera-
mente directos, y no se han considerado en los análisis.
La epa y la rfs confieren a la palma un tratamien-
to diferente pero con un resultado algo semejante.
Para elegibilidad bajo la rfs, las materias primas de-
ben estar certificadas en el sentido de que cumplen
la definición de “biomasa renovable” contenida en la
ley. La definición incluye la exigencia de que la ma-
teria prima se cultive en tierras dedicadas a la pro-
ducción agrícola antes de la promulgación de la ley,
en diciembre de 2007. Adicionalmente, para calificar
bajo el programa, la epa debe hacer un análisis del
ciclo de vida del carbono para cada materia prima a
fin de escoger una “vía” elegible.
Según el análisis inicial de la epa, el biodiésel
derivado de la palma de aceite reduce el carbono
Eso significa que no calificaría
para la categoría de biocombus-
tible avanzado caracterizado por
una reducción superior a 50 % de
carbono. También significa que
no calificaría para la categoría del
biocombustible convencional de
más de 20 %. Sin embargo, podría
cumplir con los requisitos para
la categoría de biocombustible
convencional en dos situaciones.
Primero, si el aceite de palma cer-
tifica que se produce en una plan-
ta de biodiésel incorporada en el
programa por haber estado en operación o en cons-
trucción antes de diciembre de 2007. O si el aceite
de palma certifica ante la epa, una vía que le permi-
ta incorporar prácticas adicionales sostenibles que
lo lleven por encima del umbral de 20 %. Una posi-
por la producción del aceite de palma sería capturar
el metano del efluente de las plantas de beneficio
del aceite de palma. (Esta práctica tendría que apro-
barla la epa a fin de cumplir con el requisito de la
reducción adicional).
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 99-106, Tomo I, 2016
 La ley establece un tope de 15 mil millones de ga-
lones para la categoría del biocombustible convencio-
nal, la cual se encuentra actualmente en cerca de 14
mil millones de galones. Por tanto, podría no ser fac-
tible someterse a las barreras regulatorias solamente
para calificar para la categoría de biocombustible con-
vencional. Sin embargo, incorporar constantemente
prácticas sostenibles adicionales y más efectivas es
conveniente para todo el mundo. Es importante feli-
citar a los organizadores y asistentes a la conferencia
de este año por la importancia concedida al tema de
la sostenibilidad.
La sostenibilidad del biodiésel de palma más sos-
tenible de todos se demuestra en el país de origen y es
allí donde se utiliza el producto. Una de las razones
más contundentes para promulgar políticas relativas
al biodiésel es diversificar la oferta de combustible
para el transporte y no depender de una sola fuente
volátil. Por esta época el año pasado, el precio del pe-
tróleo estaba en usd 100/bbl. Hoy está en usd 40/bbl.
Este colapso se debe a una serie de factores globales,
siendo uno de los más importantes la manipulación
de los precios por parte de la opep. En el otoño del
año pasado, la opep anunció que no disminuiría la
producción para responder al aumento de la oferta
global, con la intención de contraer el precio global
y quebrar a los nuevos productores como los frackers
de Estados Unidos. Esta estrategia ha funcionado,
pues muchas operaciones de fracking han parado y
algunas compañías de fracking han quebrado. Así, in-
cluso ante un nivel bajo de los precios del petróleo,
la diversificación del sector de combustibles para el
transporte es una meta que vale la pena tratar de lo-
grar. Se requiere una política energética sólida a nivel
nacional a fin de promover y mantener la diversidad.
Sin una política nacional fuerte, la industria nacional
de combustibles estará inerme ante las manipulaciones
del mercado por parte de la opep y sujeta a los capri-
chos de quienes establecen las políticas en otros países.
La nbb promueve la colaboración internacional
y el intercambio de información entre las industrias
del biodiésel de todos los países. La nbb colabora fre-
cuentemente con las industrias de biodiésel de Cana-
dá, Europa, Australia y otros lugares. La nbb tiene la
voluntad de explorar formas de colaborar y compartir
información con quienes deseen desarrollar un mer-
Perspectivas del biodiésel en los Estados Unidos de América • Jobe, J.
cado nacional sostenible de biodiésel aquí en Colom-
bia o en cualquier otro país. Si su objetivo es desarro-
llar una industria nacional del biodiésel, tengo cuatro
observaciones con respecto a lo que hemos aprendido
en Estados Unidos:
1. Política energética sólida. Es necesaria una po-
lítica energética para que una industria naciente
pueda lograr acceso al mercado en un sector tan
volátil como el del petróleo. Una política energéti-
ca sólida que promueva el biodiésel se traduce en
muchos beneficios para la sociedad, entre ellos el
crecimiento económico, la reducción de las emi-
siones de carbono, un aire más limpio, y diversifi-
cación del portafolio energético del país. En cues-
tiones de política es de vital importancia prometer
menos y cumplir más, y no lo contrario.
2. Calidad del combustible. Las fallas de control de
calidad en la introducción de cualquier producto
nuevo pueden ser la sentencia de muerte para el
producto. Ese principio parece ser especialmente
cierto en el caso de los combustibles. La nbb ha
asumido un compromiso proactivo y sostenido
con la calidad del combustible a través de normas,
promoción del cumplimiento de la reglamenta-
ción, y sistemas de gestión de calidad. El progra-
ma de gestión de la calidad de la nbb se denomina
BQ-9000 y es un programa amplio de acreditación
de la calidad que actualmente abarca 90 % del bio-
diésel consumido en Estados Unidos. Ha sido muy
efectivo y la industria estadounidense del biodié-
sel no ha tenido problemas serios de calidad desde
hace varios años.
3. Sostenibilidad. Todas las materias primas y los
procesos del biodiésel deben ser sostenibles. El
mejoramiento continuo de las prácticas de soste-
nibilidad de la industria de la palma de aceite y
el mayor conocimiento de dichas prácticas por
parte del público son cruciales para el crecimiento
de la industria de la palma de aceite y también de
la industria global del biodiésel. En julio apareció
un artículo en The Economist sobre los esfuerzos
de sostenibilidad de la industria global de la pal-
ma de aceite (http://www.economist.com/news/
business/21660141-palm-oil-firms-are-trying-
105
 go-green-governments-could-do-more-help-reci-
pe), seguido de otro artículo un mes después en
agosto (http://www.economist.com/blogs/econo-
mist-explains/2015/07/economist-explains-25).
Es claro que la comunidad internacional tiene los
ojos puestos en los avances en sostenibilidad. Los
esfuerzos de sostenibilidad han sido una piedra
angular indispensable para el éxito de nuestra in-
dustria en Estados Unidos. Para que los esfuerzos
de sostenibilidad tengan éxito se necesita un com-
promiso constante de priorización y recursos a fin
de lograr resultados reales importantes.
4. Diversificación de las materias primas. La di-
versificación de las materias primas fortalece la
industria del biodiésel de un país y promueve las
metas de las otras tres categorías antes menciona-
das. Si bien esta es una conferencia de palma de
aceite, el desarrollo de la industria del biodiésel de
un país no se debe apoyar solamente en una única
materia prima. Una política energética saludable
para promover el biodiésel con base en la diver-
sificación del portafolio energético no podrá ser
robusta a menos que el portafolio energético de
la industria del biodiésel también represente una
106
amplia coalición y no solamente a uno de los acto-
res. La diversidad de las materias primas también
fortalece los esfuerzos de sostenibilidad. Los culti-
vadores de soya iniciaron la industria del biodiésel
en Estados Unidos, como hicieron los cultivado-
res de colza en Canadá y Europa. Pero todos han
reconocido los beneficios de una industria más
diversificada. Los productores de palma pueden
hacer lo mismo.
Creo en el poder de la energía renovable para ayu-
dar a mitigar el cambio climático provocado por la de-
pendencia de los combustibles fósiles. Creo en el poder
de la agricultura moderna de precisión para producir
alimentos, empleo e ingresos para los pueblos del
mundo y para ayudar a resolver pacíficamente algunos
de los desafíos más perturbadores de la humanidad. El
conflicto entre el uso responsable de los recursos natu-
rales y su explotación exagerada se agudiza en particu-
lar en el caso de los bosques tropicales. Al menos esa
es la percepción desde el hemisferio norte. El progreso
exige un mayor nivel de educación y un diálogo cons-
tructivo. La participación en una política ambiental
sostenible trae consigo la pesada responsabilidad de
demostrar la custodia del medio ambiente.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 99-106, Tomo I, 2016
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MÓDULO 1
Manejo del cultivo de
la palma de aceite y su
mejoramiento genético
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sesión 1 plagas
y enfermedades

Pudrición del cogollo: enfrentamiento integral contra un enemigo

letal, P. palmivora*
Bud Rot: Comprehensive Confrontation of a Lethal Enemy, P. Palmivora

citación: Sanz, J. (2016). Pudrición del cogollo: enfrentamiento integral contra

un enemigo letal, P. palmivora. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 109-114.
palabras clave: Pudrición del cogollo, Phytophthora palmivora.
keywords: Bud Rot, Phytophthora palmivora.
*Artículo original recibido en español.

José Ignacio Sanz Scovino

Director General, Cenipalma
General Director, Cenipalma
jsanz@cenipalma.org

Resumen
La Pudrición del cogollo (PC) de la palma de aceite es una enfermedad que viene devastando planta­
ciones en América y que en Colombia se ha mani­festado con diversas características, según la zona agro-
ecológica en que se encuentran las planta­ciones. Se registró por primera vez en nuestro país en los años
sesenta, en 1988 reapareció con caracterís­ticas endémicas en la Zona Oriental palmera y has­ta finales de
2004 ocurrió un incremento alarmante del número de casos en la Zona Suroccidental. En la actualidad
es la enfermedad más limitante para la palmicultura nacional, especialmente en la Zona Central.

La situación fitosanitaria fue uno de los motivos para la creación, por parte del gremio palmicultor
colom­biano, del Centro de Investigación en Palma de Aceite, Cenipalma. En consecuencia, desde
1991 Cenipalma inició los trabajos de investigación, va­lidación y transferencia de tecnología sobre la
Pudri­ción del cogollo. Esos trabajos, en sus primeras etapas, abarcaron temas como la sintomatología,
la etiología, la epi­demiología, la relación del clima con el disturbio, los factores predisponentes de

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 109-114, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 109
 la enfermedad y los métodos de manejo y control. En el 2007 la investigación tuvo un gran cambio
debido al incremento de la enfermedad en la Zona Suroccidental. El gran paso en la investigación fue la
confirmación científica en el 2008 del agente causante de la lesión inicial de la PC de la palma de aceite,
Phytophthora palmivora, descubrimiento hecho por el equipo de fitopatología de Cenipalma, dirigido
por el Doctor Gerardo Martínez López (†). Este no resultó un enemigo cualquiera, Phytophthora que
en griego significa “destructor de plantas” se ha encargado de mostrarnos en estos años su fuerza.

Como la respuesta debe ir acorde con la dificultad, desde la investigación abordamos el problema de
manera integral con estudios sobre este enemigo, P. palmivora (identificación de sus estructuras, su
ais­lamiento con diferentes métodos de trampeo, inoculación, su ciclo de vida, sus posibles enemigos
naturales), pasando por la definición de las mejores prácticas de manejo del cultivo y la utilización
de métodos de biología molecular para su detec­ción, hasta la búsqueda y selección de materiales
tolerantes, todo con una evaluación técnica y eco­nómica destinada a entregarle al palmicultor
tecnologías útiles y sostenibles. Nuestro trabajo y la estrategia integral para enfren­tar a P. palmivora
no para ahí, seguiremos en la optimización de las metodologías actuales e identi­ficación de otras
tecnologías que permitan acelerar la detección de fuentes de resistencia en materiales de diferentes
orígenes, encontrar métodos de manejo para diferentes escenarios de inciden­ cia y desarrollar
estrategias regionales de control de la enfermedad.

Abstract

Oil palm Bud Rot (BR) is a disease that has been devastating plantations in America, and has expres­sed
itself with various characteristics according to the agro-ecological area where plantations are located.
In our country, it first appeared in the 1960s, and reappeared with endemic characteristics in 1988
in the Eas­tern Area, and an alarming rise took place in the Southwestern area since 2004. This is
currently the most limiting disease for national oil palm cultivation, especially on the Central Zone.

The Phytosanitary situation is one of the reasons for which the Oil Palm Research Center (Centro de
Investiga­ción en Palma de Aceite – Cenipalma) was created by the Colombian oil palm cultivation
sector. Conse­quently, Cenipalma began research, validation and technology transfer work on Bud Rot
since 1991. This endeavor, in its early stages, encompassed topics such as symptomatic assessment,
etiology, epidemiology, relationship between the weather and the disturbance, predisposing factors
of the disease, and control and management methods. Then, BR research had to make a drastic turn
in 2007, due to the fact that the Southwestern area was badly attacked by this disease. The greatest
step in research was the confirmation in 2008 of the agent causal the initial BR lesion in oil palm,
Phytophthora palmivora, a discovery made by the Cenipalma Plant Pathology Team, led by Doctor
Gerardo Martínez López (†). This turned out to be no ordinary enemy; Phytophthora means “plant
destroyer” in Greek, and we have witnessed its force throughout all these years.

Considering that the response must match the problem, we tackle it comprehensively in our
research – with studies on this P. palmivora enemy (structures identification, isolation using diffe­
rent trapping methods, inoculation, life cycle, pos­sible natural enemies), addressing the best crop
management practices and the use of molecular biology methods for detection, and finally addres­
sing the search and selection of tolerant materials, all of which is complemented with a technical
and eco­nomic assessment to deliver useful and sustainable technologies to palm growers. Our work
and the comprehensive strategy to tackle P. palmivora does not stop at that, we will continue to
optimize current methodologies and identify other technologies that will enable us to detect sources
of resistance in materials from different origins, find control and management methods for different
inci­dence scenarios and develop regional disease con­trol strategies.

110 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 109-114, Tomo I, 2016
La Pudrición del cogollo (pc) de la palma de aceite es
una enfermedad que viene devastando plantaciones
en América y que en Colombia se ha manifestado con
diversas características, según la zona agroecológica
en que se encuentran las plantaciones. Se registró por
primera vez en nuestro país en los años sesenta en la
plantación Coldesa, en Urabá, afectando cerca de 2.500
hectáreas de palma y en 1988 reapareció con caracte-
rísticas endémicas en la Zona Oriental palmera. A
finales de 2004 ocurrió un incremento alarmante del
número de casos en la Zona Suroccidental, con el cre-
cimiento exponencial en Tumaco a partir de 2007 que
logró afectar más de 30.000 ha y con una epidemia de
características parecidas en la Zona Central en Puerto
Wilches, en donde entre 2009 y 2013 había impactado
más de 40.000 ha. En la actualidad, la pc sigue siendo
la enfermedad más limitante y el principal flagelo para
la palmicultura nacional.
La situación fitosanitaria fue uno de los motivos para
la creación, por parte del gremio palmicultor colombia-
no, del Centro de Investigación en Palma de Aceite, Ce-
nipalma. En consecuencia, desde 1991 Cenipalma inició
los trabajos de investigación, validación y transferencia
de tecnología sobre la Pudrición del cogollo.
Pudrición del cogollo: enfrentamiento integral contra un enemigo letal, P. palmivora • Sanz, J.
Esos trabajos, en sus primeras etapas, abarcaron
aspectos como la sintomatología, la etiología, la epi-
demiología, la relación del clima con el disturbio, los
factores predisponentes de la enfermedad y los méto-
dos de manejo y control. En el 2007, la investigación
sufrió un gran cambio debido a que la Zona Surocci-
dental se incrementó la enfermedad con característi-
cas epidémicas.
El gran paso en la investigación fue la confirma-
ción científica en 2008 del agente causante de la lesión
inicial de la pc de la palma de aceite, Phytophthora
palmivora, descubrimiento hecho por el equipo de
fitopatología de Cenipalma, dirigido por el doctor
Gerardo Martínez López (†).
Para la identificación del agente causante se to-
maron muestras de palmas afectadas por la pc, pero
lo que ayudó a encontrar el responsable de la en-
fermedad fue apartarnos de los sitios más degrada-
dos y concentrarnos en las zonas de avance en los
sitios más internos del cogollo. Así, mediante un
trabajo fuerte en los laboratorios se logró encontrar
a Phytophthora palmivora (Figura 1) y obtener los
aislamientos puros que dieron paso a todos los estu-
dios de patogenicidad.
Figura 1. Aislamiento de P.
palmivora a partir de tejidos
afectados por la Pudrición del
cogollo de la palma de aceite.
111
 Este no resultó ser un enemigo cualquiera, Phyto-
phthora en griego significa “destructor de plantas”
quien ha mostrado su poder devastador en diferen-
tes cultivos. Diferentes especies del género Phytoph-
thora han sido registradas como las responsables de
las principales enfermedades en múltiples cultivos
de importancia económica, como cacao, tomate, cu-
curbitáceas, árboles y ornamentales, papa, piña, soya,
cítricos y las palmáceas, donde logra afectar distintos
órganos de las plantas, desde las raíces, el tronco, los
folíolos hasta los frutos.
Como la respuesta debe ir acorde con la dificul-
tad, desde la investigación se abordó el problema de
manera integral, con estudios sobre este enemigo P.
palmivora (identificación de sus estructuras, su aisla-
miento con diferentes métodos de trampeo, inocula-
ción, su ciclo de vida, sus posibles enemigos natura-
les), pasando por la definición de las mejores prácti-
cas de manejo del cultivo y la utilización de métodos
de biología molecular para su detección, hasta la bús-
queda y selección de materiales tolerantes, todo con
una evaluación técnica y económica, para entregarle
al palmicultor tecnologías útiles y sostenibles.
Uno de los pasos más importantes fue conocer el
desarrollo de la pc desde los primeros estados hasta
los más avanzados. Fue así como se determinó la es-
Figura 2. Escala de severidad de la a.
Pudrición del cogollo en palma de
aceite adulta.
a. Grado 0. b. Grado 1. c. Grado 2.
d. Grado 3. e. Grado 4. f. Grado 5.
g. Cráter.
e.
112
cala de severidad basada en el daño en la flecha más
joven. Siendo el grado 1 un porcentaje de daño co-
rrespondiente al 20 %; el grado 2, al 40 %; el grado
3, al 60 %; el grado 4, al 80 % y el grado 5, al 100
% de daño, para finalmente llegar al estado de cráter
(Figura 2). Esa escala de severidad desarrollada en
Cenipalma se convirtió en una herramienta útil para
detectar oportunamente la enfermedad y establecer el
manejo integrado basado en la intervención de plan-
tas en grados 1 y 2, y la erradicación de palmas en
grados superiores.
Con los avances en el conocimiento de P. palmivo-
ra se iniciaron los trabajos para identificar las fuentes
de inóculo en campo. Para esto se tomaron muestras
de tejidos afectados de la enfermedad, los cuales algu-
nas veces son retirados y dejados cerca de las palmas
y otras veces se dejan en la palma; en estos tejidos se-
cos se han encontrado estructuras de P. palmivora. Te-
niendo en cuenta la preferencia de Phytophthora por el
agua, se tomaron muestras de agua de sitios con mal
drenaje dentro de lotes afectados, en estas también se
encontraron estructuras como clamidosporas y espo-
rangios, a partir de las cuales ha sido posible obtener el
aislamiento del microorganismo (Figura 3).
Con el fin de verificar si las lesiones iniciales de la
pc constituyen una fuente de inóculo, se inocularon
b. c. d.
f. g.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 109-114, Tomo I, 2016
 a. b.
c.
plántulas de previvero, las cuales fueron regadas por
aspersión. Se colocó un cono en la zona del cogollo
y se recogió el agua de escorrentía que pasaba por la
lesión y en ella se encontraron esporangios de P. pal-
mivora y fue posible aislar el microorganismo, mos-
trando así cómo una pequeña lesión en condiciones
de campo se constituye en una fuente de inóculo de
la enfermedad.
Para diseñar estrategias que constituyan herra-
mientas de manejo es necesario conocer muy bien al
patógeno, para lo cual estamos trabajando en la carac-
terización morfológica y patogénica de P. palmivora.
Los trabajos de inoculación con los otros microor-
ganismos, aislados como secundarios, como Fusa-
rium oxisporum y Thielaviopsis paradoxa, confirma-
ron que P. palmivora es el agente causante de la pc y
que los otros son microorganismos oportunistas, que
desempeñan un papel en la degradación de las pal-
mas afectadas con la pc.
Por otra parte, las alternativas de manejo de Rhyn-
chophorus palmarum, que incluyen la eliminación de
sitios de reproducción, la erradicación mecánica de
palmas, picando y esparciendo, las redes de trampeo
masivo y la aplicación de insecticidas en las heridas
causadas en la palma, por podas o cirugías, resultaron
de gran aplicabilidad en las estrategias integrales de
manejo de la pc.
Pudrición del cogollo: enfrentamiento integral contra un enemigo letal, P. palmivora • Sanz, J.
Figura 3. Estructuras observadas
como fuentes de inóculo de
P. palmivora. a. Esporangios
encontrados en tejidos degradados
de la flecha. b. Clamidosporas
encontradas en agua de escorrentía
en lotes con palmas afectadas por
la PC. c. Esporangios recuperados
de agua de riego que pasó sobre
lesiones iniciales de la PC.
Los trabajos de Cenipalma no se circunscriben a
los estudios y ensayos de las áreas de Fitopatología y
Entomología, organizadas en el Programa de Plagas y
Enfermedades. Los otros programas de investigación
participan activamente en la búsqueda de soluciones
para enfrentar a este poderoso enemigo.
Es así como en Biología y Mejoramiento hemos lo-
grado la transformación fluorescente de P. palmivora,
con lo cual se podrá hacer el seguimiento histológico
del proceso de infección. También avanzamos en la
evaluación de materiales que muestran una probable
resistencia o tolerancia a la enfermedad y en el proce-
so de multiplicación in vitro, que una vez lleguemos a
definir los materiales resistentes nos permitirá la pro-
ducción de clones de esos materiales.
Como resultado de los diferentes trabajos que se
han hecho en Agronomía, se ha encontrado que el
manejo de la enfermedad debe ser preventivo y co-
menzar desde la etapa de vivero con la selección del
material, con buenas características genéticas, sanita-
rias y nutricionales. En general, se deben efectuar to-
das esas prácticas agronómicas que llevan a tener cul-
tivos sanos y productivos, entre estas la preparación
de suelos, establecimiento de drenajes y coberturas,
fertilización y el manejo integrado de plagas.
Las buenas prácticas agronómicas y culturales
desde el establecimiento del cultivo, hacen parte del
113
 paquete de manejo de la enfermedad, el cual asegura
su éxito principalmente en la detección temprana e
intervención oportuna.
Para esto se hace monitoreo periódico de la en-
fermedad, una vez es detectada, los tejidos afectados
deben ser eliminados, haciendo una cirugía, la cual es
tratada con una pasta cicatrizante y cubierta con un
techo de plástico para protegerla. Una vez las palmas
son intervenidas, se aplican unas rondas de control
con productos químicos en la palma afectada y las
vecinas. Finalmente, las palmas intervenidas perma-
necen en cuidados continuos hasta que son dadas de
alta cuando presentan nueve hojas sanas.
Los buenos resultados del paquete completo de
manejo de la enfermedad, recomendado por Cenipal-
ma, han sido validados en las plantaciones de los pal-
micultores y en el Campo Experimental Palmar de La
Vizcaína, demostrando su utilidad para bajar y man-
tener niveles bajos de incidencia así como el beneficio
114
económico para el palmicultor que decide aplicar las
recomendaciones de manera integral.
Nuestro trabajo y la estrategia integral para en-
frentar a P. palmivora no para ahí, seguiremos en la
optimización de las metodologías actuales e identifi-
cación de otras tecnologías que permitan acelerar la
detección de fuentes de resistencia en materiales de
diferentes orígenes, encontrar métodos de manejo
para diferentes escenarios de incidencia y desarrollar
estrategias regionales de control de la enfermedad.
Esperamos que las estrategias de manejo, acom-
pañadas del continuo proceso de fortalecimiento de
la capacidad técnica de los técnicos de las uaatas
(Unidades de Asistencia y Auditoría Técnica, Am-
biental y Social) y de los operarios de campo, se si-
gan implementando de la mano con las empresas
palmeras, para desarrollar estrategias regionales que
permitan afrontar este problema sanitario de la pal-
ma de aceite.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 109-114, Tomo I, 2016
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Nuevos conocimientos sobre el manejo de Phytophthora

en el trópico*
New Insights into Managing Phytophthora in the Tropics

citación: Wallace, S. (2016). Nuevos conocimientos sobre el manejo de

Phytophthora en el trópico. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 115-118.
palabras clave: Phytophthora, plagas, enfermedades.
keywords: Phytophthora, pests, diseases.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Adriana Arias de Hassan.

Sydney Wallace
Director de infraestructura de
invernadero, Universidad de Maryland
Plant Growth Facilities Manager,
University of Maryland
swallac1@umd.edu
Resumen

El manejo de enfermedades causadas por Phytophthora en el trópico se torna complicado debido a las
condiciones ambientales propicias para el desarrollo del patógeno. La correcta identificación a nivel
de especies y la determinación de la etiología de la enfermedad constituyen dos factores principales
que siguen siendo un reto en los ecosistemas tropicales. En nuestros estudios de referencia en los
bosques tropicales de Costa Rica, Perú y Granada, además de las especies conocidas (por ejemplo, P.
palmivora, P. capsici y P. hevea), se han identificado algo más de 20 nuevas especies. Las adaptaciones
de nicho encontradas demuestran que algunas especies se desarrollan mejor en las partes aéreas de
las plantas, mientras que otras prefieren ambientes acuáticos o el suelo. Los bosques tropicales de
transición tuvieron la mayor diversidad de especies. Estos bosques son un reservorio importante para
especies que presentan alto grado de patogenicidad y la principal fuente de especies de Phytophthora
emergentes. La selección de los sitios de siembra y las prácticas de saneamiento, considerando la
biología de las especies y la diversidad, seguirán siendo las herramientas de manejo más importantes
para Phytophthora en el trópico.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 115-118, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 115
 Abstract
Managing Phytophthora in the tropic is challenging due to the rainy conducive environment. Correct
species identification and determining the etiology of the disease have been two major components
that continue to be challenging in tropical ecosystems. In our base line surveys in tropical forests
of Costa Rica, Peru and Granada, besides the well-known species (e.g. P. palmivora, P. hevea and P.
capsici) over 20 new species have been identified. Niche adaptations also exist, demonstrating that
some species prefer an airborne biology whereas others are primarily waterborne or terrestrial. In
addition, transitional tropical forests have the greatest species diversity. These forests represent a
major reservoir for species of concern and the main source of emerging Phytophthora. Choosing
plantation sites and sanitation practices considering the species biology and diversity will continue to
be the most significant management tool for Phytophthora in the tropic.

Introducción

En la actualidad el comercio global de productos y en California ha motivado levantamientos sistémicos

recursos naturales exclusivos de distintas partes del
mundo ocurre a una velocidad asombrosa. A pesar de
los beneficios, la creciente globalización y el aumen-
to del comercio internacional pueden abrir las puer-
tas para la introducción y la diseminación de nuevas
plagas y enfermedades exóticas que pueden dañar
seriamente nuestros ecosistemas nativos, los cultivos
agrícolas y posiblemente también la salud humana
(Brasier, 2008, Liebhold y cols., 2012, Roy y cols.,
2014). Son muchas las enfermedades que emergen en
los bosques naturales y en las plantaciones a una velo-
cidad cada vez mayor en el mundo entero (Aukema y
cols., 2010). Probablemente las zonas tropicales sean
las más vulnerables por la falta de recursos para efec-
tuar estudios exhaustivos.
Entre los fitopatógenos, la especie Phytophthora sur-
gió como un grupo de patógenos significativos de los
ecosistemas naturales (Hansen, 2015). Por ejemplo, la
Phytophthora cinnamomi causa casos severos de muer-
te de los eucaliptos comenzando en las hojas, y reduce
la flora nativa de Australia. También se ha implicado
en el diezmado de poblaciones de roble en la Europa
mediterránea y en el noreste de Estados Unidos (Balci
y cols., 2007). Más recientemente, el surgimiento del
patógeno de la Muerte Súbita del Roble (P. ramorum)
en la costa oeste de Estados Unidos, y la mengua del
alerce (Larix decidua) en el Reino Unido son fenóme-
nos que recalcan el papel destructivo de este grupo de
fitopatógenos. El impacto devastador de la P. ramorum
en los bosques y los viveros en busca de especies de
Phytophthora de interés regulatorio. Sin embargo, estas
investigaciones se hicieron principalmente en las zonas
templadas (Balci y cols., 2007 y la bibliografía asocia-
da), pero revelaron unos grupos endémicos y disemi-
nados de especies de origen exótico.
Un reto que afrontamos con el manejo de los pa-
tógenos invasivos (por ejemplo, Phytophthora) es que
casi todas las especies que producen deterioro de los
bosques han sido desconocidas para la ciencia antes
del brote. Esto se puede atribuir en gran medida a la
falta de información y de estudios sobre la biodiversi-
dad de los oomicetos y, en particular, la falta de levan-
tamientos de fitopatógenos antes de que provoquen
daños significativos. Por tanto, nuestro propósito fue
explorar los ecosistemas nativos de Costa Rica para
determinar la biodiversidad de las especies de Phyto-
phthora. Nuestro objetivo fue generar conocimiento
sobre la biodiversidad de este grupo extremadamente
patogénico que básicamente no se ha explorado en
los ecosistemas tropicales.
Materiales y métodos
Se seleccionaron 10 sitios en total para representar
distintos tipos de bosque de los Parques Nacionales
de Costa Rica. La primera visita de campo se realizó
entre el 5 y el 15 de julio de 2012, y la segunda entre el
15 y el 25 de enero de 2013.

116 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 115-118, Tomo I, 2016
 El muestreo se diseñó para explorar diferentes
nichos ecológicos, entre ellos, ambientes aéreos, de
suelos y acuáticos. El material de la muestra se tomó
de cuatro fuentes distintas: 1) hojas de las plantas de
menor estatura con lesiones necróticas, todavía adhe-
ridas a las plantas (LP); 2) hojas recién caídas del dosel
con lesiones necróticas de color pardo oscuro (LF);
3) hojas sumergidas en agua con lesiones embebidas
en agua (LS); 4) muestras de suelo recogidas alrede-
dor de los árboles (S).
Los aislamientos se agruparon inicialmente uti-
lizando la homología de secuencia con base en la
región del separador interno transcrito (ITS, por
sus siglas en inglés) del ADNr (con base en los ITS
iniciadores 4 & 5; White y cols., 1990). Todos los
aislamientos de los distintos grupos se analizaron
para determinar las características morfológicas cla-
ve mediante una Lucid Key (Martin y cols., 2012).
Cuando se encontró concordancia entre la morfo-
logía y la identificación de la secuencia basada en
ITS no se hicieron secuenciaciones de loci adicio-
nales. Los aislamientos en el interior de un grupo
con identidad diversa de morfología y secuencia in-
ferior a 99,9 % con respecto a cualquier secuencia de
Phytophthora disponible en GenBank o las caracte-
rísticas morfológicas confirmatorias de la variación
con respecto a las especies más próximas se consi-
deraron posibles especies nuevas y se secuenciaron
adicionalmente usando siete loci adicionales.
La clasificación se basó en observación y medición
de las estructuras asexuales y sexuales tal como se in-
dica en Martin y cols. (2012). Para calcular el prome-
dio de variación de los tamaños se escogieron al me-
nos 50 muestras. Se registró el patrón de crecimiento
de las colonias en agar de dextrosa de papa (pda) y
en agar de jugo V8 clarificado (cV8A), y los reque-
rimientos de la temperatura de cultivo (10 a 40 °C)
utilizando cV8A (19 ml en una caja de Petri de 9
cm). Los requerimientos de temperatura de cultivo
se repitieron dos veces con tres réplicas.
Resultados
Se recuperaron en total 417 aislamientos de Phyto-
phthora. De esta colección, 257 provinieron de una
fuente particular de material. Los 160 aislamientos
Nuevos conocimientos sobre el manejo de Phytophthora en el trópico • Wallace, S.
adicionales se identificaron como repeticiones y, por
tanto, se excluyeron de la lista de la colección final
(es decir, se identificó que los aislamientos eran de la
misma especie derivada de la misma fuente de mate-
rial). Los 257 aislamientos de Phytophthora se carac-
terizaron en 21 especies, entre ellas P. capsici, P. cinna-
momi, P. cryptogea, P. hevea, P. macrochlamydospora,
P. palmivora, P. tropicalis, P. taxon “PgChlamydo” y 13
especies nuevas. La descripción formal de los taxones
nuevos se propone en otro artículo. El mayor número
de aislamientos fue de P. taxon “lagoariana” (aisla-
miento 40), seguido de P. taxon “sp1” (36).
La diversidad de las especies dependió del sitio del
muestreo. En el sitio CR5 se descubrieron 15 especies.
El contraste fue grande con los sitios CR3 y CR6-10,
donde se aislaron entre 1 y 5 especies diferentes. Al
agrupar los sitios por tipos de bosque, las tierras bajas
de clima húmedo/seco (bosques de transición) pre-
sentaron la mayor diversidad de especies. Asimismo,
en los sitios elevados de montaña (bosques nubosos)
se encontró una mayor cantidad de especies diversas
(por ejemplo, los sitios 1, 2, 3, 6). En los sitios en don-
de las condiciones de humedad persistían durante
todo el año o donde predominaban los climas tropi-
cales secos (por ejemplo, los sitios 4, 8, 7, 9, 10) la
diversidad de las especies fue la más baja.
Ubicación filogenética
La filogenia multilocus ubicó las especies en siete rami-
ficaciones o clados diferentes. Los clados 2 y 9 se repre-
sentaron con seis especies, mientras que en los clados
4, 5, 6 y 8 se encontraron solamente dos especies. En el
clado 7 se encontró solamente una especie (por ejem-
plo, P. cinnamomi). De las especies nuevas, cuatro se
encontraron en el clado 9 y tres en el clado 2. Solamen-
te una especie se encontró en todos los demás clados,
salvo el clado 7. Hubo algunos consensos con respecto
a las características morfológicas cuando se agruparon
las especies con base en su clado molecular. En el clado
9, todas las especies tenían esporangios no papilados.
Asimismo, todas las especies encontradas en el clado
2 tenían esporangios semipapilados. Sin embargo, no
hubo consenso con respecto a la morfología y el nicho
en donde se encontraron las especies.
117
 Discusión dad de especies se encontró en los bosques húmedos
tropicales de altura (bosques nubosos) sujetos a gran-
des fluctuaciones de temperatura, y en las tierras ba-
Este estudio se cuenta entre los primeros levantamien-
jas de bosques de transición con ciclos de humedad/
tos sistémicos de la biodiversidad de las especies de
sequía. En los bosques tropicales, las áreas de clima
Phytophthora en los bosques tropicales. El hallazgo de
variable ofrecen mayor ventaja al género Phytophthora
22 taxones, incluidas 13 especies nuevas en tan solo diez
en comparación con las áreas en donde las condicio-
sitios de estudio, demuestra que estos bosques albergan
nes climáticas son relativamente constantes. Una razón
mucha más diversidad de Phytophthora que los bosques
particular para explicar esas adaptaciones a un nicho
templados. La diversidad también es muy alta en el bos-
podría ser la menor capacidad competitiva de las espe-
que tropical cuando se considera un solo sitio. Identifi-
cies de Phytophthora cuando están presentes diversos
camos 15 especies en el Parque Nacional Carrara (CR5),
organismos. Un ciclo seco con grandes fluctuaciones
en comparación con los bosques templados en donde el
de temperatura podría reducir el inóculo de organis-
número de especies reportadas oscila entre 1 y 4.
mos antagonistas y ser ventajoso para la Phytophthora.
Considerando la mala fama de las especies de
Se encontraron 17 especies asociadas con las par-
Phytophthora por su patogenicidad, en este estudio
tes aéreas de las plantas. Esto nunca se había demos-
hemos demostrado que se encuentran fácilmente en
trado en ningún otro estudio de las especies de Phyto-
nichos ecológicos diversos, sin daño obvio para la co-
phthora. Si bien las especies aéreas existen en las re-
munidad vegetal. Salvo por un caso en el que se aisló P.
giones templadas, se considera que son exóticas tanto
palmivora en retoños marchitos de las plantas de me-
aquellas que causan daño a las plantas leñosas como
nor altura, no se observó mortalidad de las plantas en
las que afectan a los cultivos agrícolas. Varios estudios
ninguna otra situación de bosque. Las infecciones en
han demostrado cómo se disemina la P. palmivora al
las plantas vivas observadas en el momento del mues-
dosel a través de la salpicadura de lluvia, de distin-
treo constaron de pequeñas secciones necróticas en las
tos escarabajos y hormigas, moluscos y vertebrados
hojas. Sin embargo, todas las especies conocidas en-
(Guest y Drenth, 2013), y un mecanismo semejante
contradas en este estudio son fitopatógenos importan-
podría explicar las especies encontradas en este estu-
tes distribuidos en el mundo entero (Erwin y Ribeiro,
dio. Si bien las áreas tropicales parecen ser puntos de
1996). Con excepción de la P. macrochlamydospora, la
actividad para las especies de Phytophthora aérea en
cual se ha reportado únicamente en la soya (Glycine
su función como colonizadoras iniciales del follaje,
max) en Australia, P. capsici, P. cinnamomi, P. crypto-
los estudios de su “biología críptica” prometen nuevo
gea, P. hevea, P. palmivora y P. tropicalis tienen una lista
conocimiento acerca de su papel funcional.
muy larga de hospederos que superan los centenares
de especies vegetales (Erwin y Ribeiro, 1996, Farr y En la práctica, la identificación de los taxones
Rossman, 2015). En esta colección, P. palmivora, P. cap- nuevos que podrían representar una amenaza para la
sici y P. tropicalis fueron las más comunes. Su presencia salud de la planta es una labor difícil para los fitopató-
frecuente va de la mano con su impacto en los trópicos, logos. Considerando que la gran mayoría de las espe-
en donde se ubican entre las especies más infecciosas cies pertenecientes al género son fitopatógenos, quizá
de Phytophthora que afectan a la mayoría de los cul- todas tengan el potencial de causar enfermedades. Sin
tivos arbóreos en los trópicos, exceptuando el banano embargo, sería imposible predecir cuál de los taxones
(Drenth y Guest, 2013, Uchida y Kadooka, 2013). nuevos podrían ser “asesinos del bosque”, como P. ra-
morum o P. cinnamomi con base en la morfología, la fi-
Vale la pena recalcar la presencia generalizada de la
logenia o la ecología únicamente. No obstante, nuestro
especie denominada provisionalmente P. taxon “Pg-
método de muestreo nos brindó pistas sobre su com-
Chlamydo” porque es la primera vez que se encuentra en
portamiento y los hábitats posibles de su predilección.
un ambiente tropical. Esta especie se ha descubierto en
Por otra parte, P. cinnamomi se encuentra solamente
muchos países, con adaptaciones a diversos ecosistemas
en el suelo. Este tipo de conocimiento de la ecología
(Brasier y cols., 2003, Greslebin y cols., 2005, Burgess y
podría ayudar enormemente a afinar los enfoques de
cols., 2009, Reeser y cols., 2011, Hüberli y cols., 2013).
diagnóstico y manejo y los esfuerzos de estudio para
En nuestro estudio también se han hecho evidentes determinar la presencia de estos patógenos en caso de
las adaptaciones de la Phytophthora. La mayor diversi- su introducción en ambientes nuevos.

118 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 115-118, Tomo I, 2016
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Nuevas estrategias para el control de enfermedades de la palma

de aceite mediante la investigación de patógenos de la planta*
New Strategies for Oil Palm Disease Control through
Plant Pathogen Research

citación: Schornack, S. (2016). Nuevas estrategias para el control de

enfermedades de la palma de aceite mediante la investigación de patógenos de
la planta. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 119-122.
palabras clave: Pudrición del cogollo, Phytophthora palmivora, enfermedades,
plagas.
keywords: Bud rot, Phytophthora palmivora, diseases, pests.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Adriana Arias de Hassan.

Sebastian Schornack
Líder del Grupo de Investigación de la
Royal Society University, Universidad
de Cambridge
Research Group Leader, Royal Society
University Research Fellow, University
of Cambridge
sebastian.schornack@slcu.cam.ac.uk,
http://www.schornacklab.net

Resumen

La palma de aceite es el cultivo oleaginoso más importante del mundo y la Pudrición del cogollo
causada por Phytophthora palmivora es su enfermedad más destructiva. P. palmivora también infecta
otros tipos de cultivos comerciales como el cacao, los árboles de caucho, las palmas de coco y el durión
en todo el mundo, causando marchitamiento, pudrición de las raíces, marchitamiento fúngico (dam-
ping off), tizón tardío (añublo o gota) en hojas y tallos, y pudrición de los frutos, que generan pérdidas
significativas en la productividad y la calidad.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 119-122, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 119
 En la actualidad, las estrategias para el manejo de estas enfermedades son muy limitadas. En este
artículo se presenta el proceso logrado en desentrañar la base molecular de la resistencia y la suscep-
tibilidad a las enfermedades causadas por P. palmivora.

P. palmivora porta una serie de genes que codifican a las proteínas efectoras que el patógeno secreta
al tejido vegetal para suprimir la inmunidad de las plantas, favoreciendo la infección y la enferme-
dad. Estudiamos la distribución y la variación de un grupo de efectores y se identificaron aquellos
presentes en todos los aislamientos evaluados de P. palmivora, representativos de diferentes regiones
del mundo. El conocimiento de las moléculas blanco de cada proteína efectora, permitirá acelerar los
procesos de mejoramiento genético y así aumentar la resistencia de las plantas al patógeno. También,
se halló que el patógeno relacionado P. infestans, que causa la enfermedad de la gota en plantas de
papa y P. palmivora comparten efectores similares. Sorprendentemente, los receptores inmunes de la
papa son capaces no solo de percibir los efectores de P. infestans sino también los de P. palmivora, lo
cual permite enfocarse en la ingeniería de la resistencia de la palma de aceite mediante la transferencia
de genes de resistencia de la papa a la palma de aceite.

Abstract

Oil palm is the most important oil crop in the world and bud rot, caused by Phytophthora palmi-
vora is its most destructive disease. P. palmivora also infects important other cash crops such as
cocoa, rubber trees, coconut and durian throughout the world causing wilt, root rot, crown rot,
seedling damping-off, leaf and stem blight, and fruit rot and resulting in significant yield and
quality losses.

Current strategies for management of these diseases are very limited. This article presents the progress
in unravelling the molecular basis resistance and susceptibility to diseases caused by P. palmivora.

P. palmivora carries a set of genes encoding effector proteins which are secreted by the pathogen
into the host tissue to suppress host immunity and promote infection and disease. We studied dis-
tribution and variation in a set of P. palmivora effectors and identified core effectors present in, and
thus essential to, all tested isolates worldwide. Knowing the host targets of core effectors will enable
us to engineer or breed and select for plants with modified target processes effectively rendering
the plants more resistant.

Also, we found that the related potato blight pathogen P. infestans and P. palmivora share similar
effectors. Remarkably, effector detecting potato immune receptors are not only capable of perceiving
P. infestans effectors but also P. palmivora ones providing inroads to engineering oil palm resistance
by gene transfer from potato to oil palm.

La palma de aceite es el cultivo oleaginoso más im-
portante del mundo y la enfermedad de la Pudrición
del cogollo, causada por Phytophthora palmivora es la
más destructiva de todas. P. palmivora también infec-
ta otros cultivos comerciales como el cacao, el caucho,
el coco y el durión en el mundo entero, provocando
marchitez, pudrición de las raíces y de la corona, pes-
te de los semilleros, necrosis de las hojas y los tallos,
y Pudrición del fruto, lo cual se traduce en pérdidas
sustanciales de productividad y calidad.

120 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 119-122, Tomo I, 2016
 Son muy limitadas las estrategias disponibles
actualmente para manejar estas enfermedades. La
posibilidad de desentrañar la base molecular de la
resistencia y la susceptibilidad a la enfermedad pro-
vocada por P. palmivora se traducirá en estrategias
nuevas para establecer palmas de aceite resistentes
a la enfermedad.
P. palmivora pertenece al grupo de los oomice-
tos, unos patógenos filamentosos con el aspecto de
hongos pero que no tienen relación alguna con es-
tos (Fawke, S. et al., 2015). El género Phytophthora
produce numerosas esporas unicelulares móviles.
En condiciones de humedad nadan activamente ha-
cia los tejidos de las plantas donde forman quistes,
germinan e infectan. La infección pasa desapercibida
durante varios días mientras P. palmivora vive como
biótrofo en el interior de los tejidos de la planta. Du-
rante esta etapa dirige haustorios en forma de digita-
ciones hacia las células de las plantas para extraerles
nutrientes y depositar moléculas que suprimen su
sistema inmune. Para estos efectos, P. palmivora por-
ta un conjunto de genes que codifican para proteínas
efectoras secretadas por el patógeno dentro del tejido
hospedero para unirse a las proteínas y suprimir la
inmunidad de la planta y promover la enfermedad
(Schornack, S. et al., 2009). Vale la pena anotar que el
repertorio de genes que codifican para proteínas efec-
toras varía significativamente entre los aislamientos
de Phytophthora de la misma especie, puesto que los
aislamientos generan nuevos efectores que se adaptan
mejor para el ambiente específico del hospedero y las
proteínas efectoras sueltas que desencadenan reaccio-
nes inmunes en el tejido hospedero.
La secuenciación del genoma de P. palmivora per-
mitió identificar genes que codifican efectores en un
aislamiento colombiano con base en características
genéticas conservadas. Estudiamos la distribución y la
variación en una serie de 19 efectores de P. palmivora e
Referencias bibliográficas
Fawke, S., Doumane, M., Schornack. S. Oomycete Interactions with Plants: Infection Strategies and
Resistance Principles. Microbiol Mol Biol Rev. 2015 Sep;79(3):263-280. Review.
Nuevas estrategias para el control de enfermedades de la palma de aceite mediante la investigación
de patógenos de la planta • Schornack, S.
identificamos siete efectores centrales presentes, y por
tanto, esenciales, en los 18 aislamientos tomados de
diversas plantas hospederas y ubicaciones geográficas
del mundo entero. Con este conocimiento podremos
desarrollar sistemas de detección basados en pcr para
caracterizar los aislamientos patógenos emergentes. El
hecho de conocer las proteínas blanco de estos efecto-
res centrales en la planta nos permitirá hacer ingenie-
ría o fitomejoramiento y seleccionar plantas con pro-
teínas blanco modificadas. Así, estas plantas no serán
afectadas por los efectores de P. palmivora y, por tanto,
serán más resistentes.
Otra estrategia para conferir resistencia a la
planta consiste en identificar los receptores inmu-
nes capaces de detectar los efectores de P. palmivora
o sus actividades en el hospedero (Vleeshouwers,
VG. et al., 2011). Los tipos comunes de receptores
inmunes son las proteínas denominadas nb-lrr,
las cuales están presentes en todas las plantas su-
periores. Quisimos determinar si las proteínas nb-
lrr conocidas de otras plantas son capaces de de-
tectar los efectores de P. palmivora.
Vale la pena señalar que descubrimos que P. pal-
mivora comparte efectores semejantes con P.  infes-
tans, el patógeno causante de la enfermedad de la
gota en plantas de papa. En la papa se habían iden-
tificado previamente las proteínas nb-lrr que reco-
nocían estos efectores de P. infestans. Es importante
anotar que un receptor inmune nb-lrr de la papa
es capaz de percibir los efectores de P. palmivora.
Un posible enfoque para lograr palmas de aceite re-
sistentes consistiría en la transferencia genética del
receptor inmune de la papa a palmas de aceite trans-
génicas y someter a prueba su capacidad para pro-
teger las hojas de la palma contra la infección por P.
palmivora. En su conjunto, nuestros métodos mo-
leculares comienzan a abrir caminos nuevos hacia
la ingeniería de la resistencia de la palma de aceite.
121
 Schornack, S., Huitema, E., Cano, LM, Bozkurt, TO, Oliva, R., Van Damme, M., Schwizer, S., Raffaele,
S., Chaparro-Garcia, A., Farrer, R., Segretin, ME, Bos. J., Haas, BJ, Zody, MC, Nusbaum, C., Win,
J., Thines, M., Kamoun, S. Ten things to know about oomycete effectors. Mol Plant Pathol. 2009
Nov;10(6):795-803. Review.
Vleeshouwers, VG., Raffaele, S., Vossen, JH, Champouret, N., Oliva, R., Segretin, ME, Rietman, H.,
Cano, LM, Lokossou, A., Kessel, G., Pel, MA, Kamoun, S. Understanding and exploiting late blight
resistance in the age of effectors. Annu Rev Phytopathol. 2011;49:507-31. Review.

122 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 119-122, Tomo I, 2016
Volver al
contenido

Comunidades microbianas en el suelo: causa y soluciones de las

enfermedades en plantas*
Soil Microbial Communities: The Cause and Solutions of Plant Diseases

citación: Hao, J. (2016). Comunidades microbianas en el suelo: causa y

soluciones de las enfermedades en plantas. Palmas 37(Especial Tomo I),
pp. 123-130.
palabras clave: Comunidades microbianas, enfermedades, suelo.
keywords: soil microbial communities, diseases, soil.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Sofía Lemaitre Cepeda.

Jiajun Hao
Profesor Asistente de Fitopatología,
Universidad de Maine
Assistant Professor of Plant Pathology,
University of Maine
jianjun.hao1@maine.edu

Resumen

El suelo es el medio que propicia el crecimiento de las plantas. Es un biosistema activo que contiene
diversos microorganismos que cumplen múltiples funciones. Los patógenos hospederos del suelo son
la principal limitación para la salud y el rendi­miento de las plantas. En el tratamiento de enfer­medades
se han estudiado y practicado estrategias con base biológica como una opción en la producción agrí-
cola. Una mejor aplicación del biocontrol depende del entendimiento de la comu­nidad microbiana.

En este artículo se describe un caso de estudio que utiliza la roña co­mún de la papa (Streptomycesa spp.)
y un suelo que suprime la enfermedad. Un campo que tiene una historia de cultivo de papa de déca-
das demostró un declive en la roña común, por lo cual se consideró que te­nía un suelo supresor de
enfermedades. Un campo contiguo al suelo supresor presentó una gran presión de enfermedades y

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 123-130, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 123
 se consideró como conducente a las enfermedades. Se recolectaron muestras de los suelos de ambos
campos y se extrajo la totalidad del ADN genómico. Al analizar la estructura, la diversi­dad y el enri-
quecimiento de las comunidades micro­bianas en los suelos usando la dilución en placas en medios
de cultivo semiselectivos y la metagenó­mica, se identificaron microorganismos benéficos, incluyendo
bacilos, pseudomonas, Streptomynces no patógenas, Lysobacter, entre otros. La población enriquecida
y la alta diversidad de estos microorga­nismos beneficiosos son las razones por las cuales existe una
supresión de las enfermedades. Se aisló la cepa bacteriana Bacillusamyloliquefaciens BAC03 del suelo
supresor de enfermedades y se caracterizó en actividades de control biológico. Esta mostró un am­plio
espectro de actividades antimicrobianas y una gran eficacia para el control de la roña común de la
papa y otras enfermedades. Lo anterior se discuti­rá en cuanto al uso de esta información para enten­
der las prácticas culturales y las estrategias de diseño efectivo del tratamiento de enfermedades.

Abstract

Soil is the medium for supporting plant growth. It is an active living biosystem that contains various
microor­ganisms with various functions. Soil borne plant pathogens are the main constraints to plant
health and yield. In disease management, biologically based stra­tegies have been studied and practiced
as an option in agricultural production. Better biocontrol applica­tion depends on understanding the
microbial commu­nity.

A case study is described using potato common scab (Streptomyces spp.) and soil that is suppressive to the
disease. A field with decades of history of potato cultivation showed a decline of potato common scab,
which was considered to contain disease-suppressive soil. A field adjacent to the suppressive soil showed
a high disease pressure was considered as disease-conducive soil. Soil samples were collected from both
fields, and total genomic DNA was extracted. By analyzing the structure, diversity and enrichment of
soil microbial communities using dilution plating on semi-selective culture media, and metagenomics,
beneficial microorganisms have been identified, in­cluding bacilli, pseudomonds, non-pathogenic Strep­
tomces, Lysobacter, and others. Enriched population and high diversity of these benifical microorga-
nisms are the reason of disease suppression. A bacterial strain Bacillusamyloliquefaciens BAC03 was
isolated from the disease-suppressives oil and characterized in biological control activities. It showed a
broad spec­trum of antimicrobial activities and strong efficacy in controlling potato common scab and
other diseases. It will be discussed in using this information on how to understand cultural practices and
design effective strategies of disease management.

Introducción
El suelo es el medio para sustentar el crecimiento de
las plantas. Es un biosistema activo vivo que contie-
ne diversos microorganismos con distintas funciones
(Bakker et al., 2014, Panke-Buisse et al., 2015). Estos
microorganismos incluyen diversos tipos de taxones
que favorecen la sanidad vegetal, así como fitopató-
genos. Los fitopatógenos hospederos del suelo son
los principales limitantes para la sanidad vegetal y la
productividad (Dees y Wanner, 2012, Hao et al., 2009,
Lorang et al., 1989, Postma et al., 2008). Por ejem-
plo, la sarna común de la papa (scp) causada por
Streptomyces spp. (Labruyere, 1971), que amenaza la
industria de la papa en Estados Unidos, que mueve
usd 3,5 mil millones (NASS, 2010) debido a la falta
de métodos eficaces de control (Wanner et al., 2014,
Thomson et al., 2006). El agente causal Streptomyces
spp. corresponde a un grupo de estreptomicetos que
tienen diversos antecedentes genéticos y conforman
un complejo de comunidades patógenas (Goyer et
al., 1996, Hao et al., 2009, Jiang et al., 2012). Son

124 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 123-130, Tomo I, 2016
habitantes persistentes del suelo que sobreviven sa-
profíticamente durante largos períodos en ausencia
de hospederos.
La meta en la producción agrícola es reducir o eli-
minar los fitopatógenos y mejorar la productividad
y calidad potencial de los cultivos. Dado que existen
estrategias de control, como los productos químicos,
y las variedades resistentes cumplen en el manejo de
la scp, el control biológico ha sido un interés en las
últimas décadas (Loria y Kempter, 1985, Thomson et
al., 2006, Wanner et al., 2014). La aplicación de un
mejor control biológico depende de entender la co-
munidad microbiana. En este artículo trataremos un
estudio de caso que utiliza la sarna común de la papa
en suelo supresivo a la enfermedad, con la esperanza
de dilucidar la biología y el ecosistema que brindan
información básica para el manejo de la enfermedad.
Suelo supresivo a la enfermedad
Un campo (N 42°43.014’; W 84°27.972’) en East Lan-
sing, Michigan, mostró una disminución de la scp
después de recibir más de 25 años de cultivo de papa
(Hao et al., 2009). Nuestra hipótesis fue que la dismi-
nución de la enfermedad se debió al suelo supresivo a
la enfermedad, por tal razón este campo en particu-
lar fue designado como supresivo a la sarna (ss). Por
el contrario, un campo (N 42°42.937’; W 84°27.975’)
cercano al campo ss, con pocos años de cultivo de
papa, tuvo una presión mucho mayor de la enferme-
dad, y este fue referido como suelo conductivo (sc)
de la enfermedad (Tabla 1). Ambos suelos son franco
arenosos con propiedades físico-químicas similares.
Con base en esta observación de campo e hipótesis, se
hicieron experimentos de invernadero y de laborato-
rio con el fin de confirmar la supresión de la enferme-
dad y los factores biológicos, en caso de que hubiera
algunos que contribuyeran a esta supresión.
Los factores biológicos son el principal
actor en la supresión de la enfermedad
En un ensayo de invernadero, el suelo recolectado del
campo ss se utilizó para diferentes tratamientos. El
suelo ss fue esterilizado en autoclave dos veces (120
minutos cada vez) en 24 h, y se mezcló con suelo SS
no esterilizado a diferentes ratios. El inóculo Strep-
tomyces scabies en vermiculita se mezcló con el suelo
con el nivel del inóculo final ajustado a 106 unida-
des formadoras de colonias (ufc) cm-3 de suelo. Se
sembró papa o rábano en ensayos separados en las
mismas configuraciones de macetas. Los resultados
mostraron que la severidad de la scp se correlacionó
negativamente con el porcentaje del SS (no esteriliza-
do en autoclave) en el suelo (Figura 1), lo que encajó
en un modelo de regresión lineal simple con R2 > 0,90
(P < 0,05). Esto demostró que la supresión de la en-
fermedad es transferible.

Tabla 1. Porcentaje del índice de enfermedad de la sarna común de la papa en dos campos evaluados en múltiples
años en East Lansing, Michigan.

Año Suelo conductivo Suelo supresivo

2007 94,4 10
2008 93,8 28
2010 60 34
2012 No disponible 4

Nota: Las lesiones de la enfermedad en tubérculos de papa se calificaron con base en una escala de 0 a 5: 0 = sin
síntomas, 1 = 1 a 10 % de la superficie con lesiones superficiales o levantadas, 2 = 11 a 25 % de la superficie con
lesiones superficiales o levantadas, 3 = 26 a 50 % de la superficie con lesiones superficiales o levantadas, 4 = 50 %
de la superficie con lesiones superficiales o levantadas o < 25 % superficie con lesiones hundidas y 5 = > 50 % de la
superficie con lesiones superficiales o levantadas, o > 25 % superficie hundida. El índice de severidad de la enfer-
medad se calculó como ∑ (calificación × número de tubérculos con esa calificación) / número total de tubérculos
de papa evaluados.

Comunidades microbianas en el suelo: causa y soluciones de las enfermedades en plantas • Hao, J. 125
 En un segundo ensayo de invernadero, el suelo ss
fue tratado a diversas temperaturas durante 30 minu-
tos, y se utilizó para llenar macetas de plástico para
la inoculación con S. scabies y la siembra con papa
o rábano, como se describió anteriormente. Los re-
sultados indicaron que el tratamiento de temperatura
afectó la supresión de la enfermedad. El incremento
de la temperatura, empezando en 60 °C para el trata-
miento del suelo, redujo significativamente el efecto
de la supresión de la scp por el suelo ss. Esto sugirió
que las temperaturas más altas eliminaron las pobla-
ciones de microorganismos benéficos y diversos gru-
pos de microorganismos que tienen diferentes um-
brales de tolerancia a la temperatura. Estos microor-
ganismos fueron responsables de la supresión de la
enfermedad (Meng et al., 2002a).
Comunidades microbianas únicas en
suelo supresivo a la enfermedad
Con el fin de entender las comunidades microbianas
del suelo ss, se recolectaron muestras de suelo circun-
dante de los campos ss y sc para hacer la compara-
ción. Además, se recolectó suelo rizosférico durante
el período de crecimiento de la papa. Mediante el mé-
todo de dilución en placa, se sembraron suspensio-
nes de suelo en medios de agar semiselectivos. En la
mayoría de los ensayos el ss presentó cifras más altas
de población de hongos totales, bacterias totales, es-
treptomicetos, pseudomonas fluorescentes y bacilos
en la mayoría de las muestras de suelo analizadas. Sin
Figura 1. Efecto de la mezcla de
3
suelo sobre la sarna común de la
papa. (Meng et al., 2012a)
Severidad de la sarna
0
0 25
126
embargo, la mayoría de estas diferencias no fueron
estadísticamente significativas (P < 0,05) (Meng et al.,
2012a). Esto se debe a que el método basado en me-
dios semiselectivos solamente puede separar grupos
principales de microbios y, por tanto, es un ensayo de
baja resolución.
Para analizar más a fondo las comunidades del
suelo se realizó el polimorfismo de longitud de frag-
mentos de restricción terminal (t-rflp, por sus siglas
en inglés). Se extrajo adn de las muestras de suelo
y se aplicó la técnica de la reacción en cadena de la
polimerasa (PCR, por sus siglas en inglés) con los
cebadores fam-63F (5’-cag gcc taa cac atg caa
gtc-3’) marcado con 6-carboxifluoresceína, y 1387R
(5’-ggg cgg wgt gta caa ggc-3’) (Marchesi et al.,
1998), seguido por la digestión de los productos con
las enzimas Rsa І y Msp І. En cuanto al análisis de los
fragmentos t-rflp digeridos con Rsa І y Msp, ambos
tuvieron como resultado dos clústeres idénticos para
ss y sc. Esto indicó que existen dos comunidades mi-
crobianas diferentes que habitan en estos dos tipos de
suelos (Meng et al., 2012a).
Las bacterias antagónicas contribuyen a
que el suelo suprima S. scabies
Se probaron aislamientos de Bacillus, Pseudomonas
fluorescentes, Streptomyces y bacterias totales, aisla-
dos por la dilución en placa (como se describió an-
teriormente), para determinar el antagonismo contra
R2 = 0,95
50 75 100
% de suelo supresivo
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 123-130, Tomo I, 2016
Streptomyces scabies in vitro mediante un ensayo de
coplaca (Yoshida et al., 2001). Una suspensión de es-
poras (100 µl) de la cepa 1019 de S. scabies con una
concentración de 105 ufc ml-1 se extendió en una pla-
ca de agar con extracto de malta y levadura (yme, por
sus siglas en inglés) con aislamientos bacterianos de
prueba inoculados en la misma placa, que fueron in-
cubados a 28 °C durante más de tres días, y se registró
el número de antagonistas.
Un total de 5.285 colonias bacterianas individuales
se obtuvieron en placas con medios semiselectivos e
incluyeron aislamientos que representaron bacterias
totales, pseudomonas fluorescentes, estreptomicetos
y bacilos. En total, 961 (18 %) aislamientos, incluidos
573 y 388 aislamientos de ss y sc, respectivamente,
mostraron antagonismo contra S. scabies. En los cua-
tro grupos muestreados de 2007 a 2010, la frecuencia
de las bacterias antagónicas en SS (0,27, 0,19, 0,49 y
0,24 para bacilos, bacterias totales, pseudomonas y es-
treptomicetos, respectivamente), fue mayor que en sc
(0,23; 0,13; 0,30; y 0,18 para bacilos, bacterias totales,
pseudomonas y estreptomicetos, respectivamente),
pero solamente las diferencias en las frecuencias de
pseudomonas y estreptomicetos fueron significativas
(P < 0,05). Resulta interesante que aunque la población
total de estreptomicetos fue más alta en ss, la de estrep-
tomicetos patógenos fue significativamente menor, y
la de los antagónicos mayor que en sc. Por tanto, las
poblaciones más altas de bacterias antagónicas, como
pseudomonas, bacilos y estreptomicetos antagónicos,
contribuyeron a la supresión de la enfermedad.
Los Streptomyces spp. patógenos son
menores en suelo SS
Con poblaciones más altas de bacterias antagónicas
existentes en el suelo ss, pensaríamos que la población
de Streptomyces spp. patógenos es menor. De hecho,
nuestros resultados confirmaron esto. Para este ensayo
se seleccionaron al azar Streptomyces spp. de ss y sc.
Estos aislamientos fueron inoculados en tubérculos de
papa en rodajas con tampones miceliales (Loria et al.,
1995). Se observaron lesiones necróticas en los discos
de papa y se midieron después de cinco días de incu-
bación en la oscuridad. La frecuencia de los estrepto-
micetos patógenos fue más alta en la rizósfera que en el
suelo circundante. El sc rizosférico tuvo una frecuen-
Comunidades microbianas en el suelo: causa y soluciones de las enfermedades en plantas • Hao, J.
cia significativamente más alta de estreptomicetos pa-
tógenos que el ss. Además, no se encontró ninguna di-
ferencia en la frecuencia de estreptomicetos patógenos
del suelo circundante entre los suelos ss y sc.
La metagenómica revela la estructura de
las comunidades microbianas
La tecnología de secuenciación de próxima genera-
ción ofrece una poderosa herramienta para analizar
la mayoría de las comunidades microbianas del sue-
lo, especialmente para aquellas especies no cultiva-
bles (Rosenzweig et al., 2012). En nuestro estudio se
recolectaron muestras de suelo durante el aumento
del volumen del tubérculo, en la interface suelo-raíz
de las plantas de papa (cv. ‘Snowden’) del sc y se
extrajo adn del ss de cada muestra. Se realizaron
reacciones pcr por triplicado mediante el sistema
pcr de Alta Fidelidad de Roche (Roche Diagnostics
Gmbh, Mannheim, Alemania) con el adn extraído
como plantilla. A fin de definir las regiones V4 y
V5 del gen 16S rrna, el cebador incluyó un ceba-
dor directo conformado por el Adaptador 454A de
25 bp, un código de barras de 10 bp, seguido por
el cebador universal bacteriano 16S-577F (5’-cg-
tatcgcctccctcgcgccatcagbarcodeaytgggyd-
taaagng-3’) de 15 bp; y el cebador inverso com-
puesto por al Adaptador 454B de 25 bp y el cebador
universal bacteriano 16S-926R (5’-ctatgcgcctt-
gccagcccgctcagccgtcaattcmtttragt-3’) de
18 bp. Se efectuaron análisis bioinformáticos y com-
putacionales (Rosenzweig et al., 2012).
En las comunidades microbianas del suelo, sc pre-
sentó una abundancia significativamente mayor de los
filos Deinococcus-Thermus (cs: 5,6 %; ss: 2,6 %) y Fir-
micutes (cs: 7,3 %; SS: 4,5 %). Especialmente, sc tuvo
una abundancia mayor de Acetobacteraceae (cs: 1,2
%; ss: 0,5 %), Bacillaceae (sc: 1,8 %; ss: 0,2 %), mien-
tras que las muestras ss presentaron mayor abundan-
cia de acidobacterias Grupo 6 sin clasificar (sc: 1,2
%; ss: 8,6 %), Nocardioidaceae (sc: 1,0 %; ss: 2,6 %),
Pseudomonadaceae (sc: 0,04 %; ss: 0,5 %), acidobac-
terias Grupo 11 sin clasificar (sc: 0,0 %; SS: 0,2 %)
y Bacilli sin clasificar (sc: 0,04 %; ss: 0,4 %). Hubo
una diferencia significativa (prueba de Kolmogo-
rov-Smirnov, P = 0,01) en la distribución entre los gé-
neros bacterianos entre los tipos de suelo. Cuarenta y
127
 un géneros de bacterias difirieron significativamente
en la abundancia relativa entre los suelos ss y sc (a
= 0,05: Wilcoxon). El suelo sc presentó una mayor
abundancia media de Bacillus (sc: 1,4 %; ss: 0,1 %),
Trupera (sc: 5,5 %; ss: 0,07 %), Bacillales sin clasificar
(sc: 1,3 %; ss: 0,3 %) y Bradyrhizobiaceae sin clasificar
(sc: 2,6 %; ss: 0,5 %), mientras que las muestras SS
tuvieron una mayor abundancia media de Lysobac-
ter (sc: 0,04 %; ss: 0,2 %) y Rhizobium (sc: 0,08 %;
ss: 0,2 %). Mediante la metagenómica se han hallado
más grupos funcionales y taxonómicos. Por ejemplo,
hemos encontrado que Lysobacter y Rhizobium se en-
riquecieron en los suelos supresivos.
Microorganismos beneficiosos para el
control de la enfermedad
Al analizar la estructura, la diversidad y el enriqueci-
miento de las comunidades microbianas en el suelo
mediante la dilución en placas en medios de cultivo
semiselectivos y la metagenómica, se han identificado
microorganismos benéficos, incluidos bacilos, pseu-
domonas, Streptomyces no patógenos, Lysobacter y
otros. La población enriquecida y la alta diversidad
de estos microorganismos benéficos son la razón de
la supresión de la enfermedad (Figura 2).
Un ejemplo es esa cepa bac03 de Bacillus amylo-
liquefaciens que fue originalmente aislada del suelo
ss (Meng et al., 2012b, 2015a,b). La bacteria produ-
ce lci, una sustancia antimicrobiana polipéptida con
amplio espectro. También produce volátiles orgánicos
y hormonas vegetales. Sus bioactividades incluyen la
actividad antagónica, la promoción del crecimiento
de plantas y la inducción de resistencia a enfermeda-
des en plantas (Tabla 2). Tiene actividades antimicro-
bianas más fuertes en comparación con el agente de
control biológico comercial Bacillus subtilis qst713
(ingrediente activo de Serenade®).

Figura 2. Efecto inhibitorio a. b.

de la cepa BAC03 de Bacillus
amyloliquefaciens (tres o dos
colonias en la placa) en seis
especies o aislamientos de
Streptomyces patógeno (fondo
de la placa) mediante un ensayo
de cocultivo. Las zonas claras son
las áreas en donde no se observó
crecimiento de Streptomyces spp.
c. d.
a. S. aureofaciens, b. S. scabies,
c. S. acidiscabies, d. Streptomyces
sp. AC-­1, e. 0095, f. DS 3024

e. f.

128 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 123-130, Tomo I, 2016
Aplicación de agentes de control
biológico: de las promesas a la práctica
El objetivo final de estudiar las comunidades micro-
bianas en el suelo es hallar una manera para controlar
mejor las enfermedades en plantas. Hemos aprendido
que el suelo supresivo a la sarna contiene una cantidad
de bacterias beneficiosas (Meng et al., 2012 a,b). Estos
microbios pueden emplearse de múltiples maneras. Una
estrategia es reincorporar al suelo determinados mi-
croorganismos en donde los agentes de control biológi-
co fueron aislados para controlar la población patógena.
Hemos seguido estudiando la cepa bac03 en ensayos de
campo. Al empapar el suelo con la suspensión bacteriana
10 días después de la siembra, la sarna común de la papa
se redujo de manera significativa (Meng et al., 2013). En
el mismo ensayo, bac03 fue mejor que cualquier otro
tratamiento de suelo o para plantas, tales como Rega-
lia, aceite esencial y el químico pentacloronitrobenceno.
Este resultado fue consistente durante varios años y en
múltiples localizaciones (Meng et al., 2013). Otra ma-
nera de utilizar los microorganismos beneficiosos es la
regulación de las comunidades microbianas, tanto en
estructura como en población, mediante prácticas cul-
turales y otros métodos. Esto puede tener un mayor po-
tencial en el manejo de enfermedades, lo cual depende
exclusivamente de entender las comunidades microbia-
nas en el suelo y los factores que pueden afectarlas. El
suelo supresivo a enfermedades es un ejemplo de ello.

Tabla 2. Actividades antimicrobianas de la cepa BAC03 de Bacillus amyloliquefaciens en comparación con la cepa
QST713 de Bacillus subtilis en placas de agar.

Diámetro de la zona de inhibición (cm)

Patógeno de prueba
BAC03 QST713
Streptomyces scabies 49173 2,53 * 1,70
S. acidiscabies 49003 0,86 * 0,23
Agrobacterium tumefaciens 2,18 * 1,80
Clavibacter michiganensis subsp. michiganensis 2,40 * 1,90
Trichoderma harzianum 2,00 * 1,40
Cryphonectria parasitica 1,50 * 1,20
Phytophthora capsici 1,05 * 0,70
Phytophthora cambivora 1,15 * 0,70
Botrytis cinerea 2,00 * 0,85
Rhizoctonia solani 1,60 * 0,85
Sclerotinia sclerotiorum 1,80 * 0,50

Nota: * indica que la actividad de BAC03 fue significativamente más fuerte que QST713.

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130 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 123-130, Tomo I, 2016
Volver al
contenido

Estudio de firmas espectrales de palmas de

aceite afectadas con la Marchitez letal, usando
análisis estadísticos de datos funcionales*
Study of the Spectral Signatures of Oil Palms Affected
with Lethal Wilt, Using Functional Data Statistic Analysis

autores: Ramón Giraldo, Angie Molina Villarreal, Jorge Luís Torres León, María
Claudia Acosta y Sergio Martínez.
citación: Giraldo, R., Molina, A., Torres-Leon, J. L., Acosta, M., & Martínez,
S. (2016). Estudio de firmas espectrales de palmas de aceite afectadas con
la Marchitez letal, usando análisis estadísticos de datos funcionales. Palmas
37(Especial Tomo I), pp. 131-139.
palabras clave: análisis de datos funcionales, Marchitez letal, firmas
espectrales, detección temprana.
keywords: Functional data analysis, Lethal wilt, spectral signatures, early
detection.
*Artículo original recibido en español.

Ramón Giraldo
Profesor asociado, Departamento
de Estadística, Universidad Nacional
de Colombia. Associate Professor,
Department of Statistics, National
University of Colombia
rgiraldoh@unal.edu.co

Resumen
El análisis de datos funcionales (ADF) se ha convertido en la última década en un área de creciente
impulso y desarrollo dentro de la estadística. En este trabajo se explora su uso en la modelación de fir-
mas espectrales de palma de aceite. A manera de ilustración se muestran los resultados obtenidos con
curvas de reflectancia de palmas localizadas en lotes con alta incidencia de la enfermedad Marchitez
letal (ML) y lotes en donde históricamente no se han reportado casos, los cuales hacen parte de una
plantación de palma de aceite localizada en la Zona Oriental palmera. Se estudian las diferencias en el
comportamiento espectral de las curvas bajo tres condiciones de observación: palmas que presentan
síntomas visibles de la enfermedad (ML), palmas aparentemente sanas dentro de foco (SDF) y palmas
sanas fuera de foco (SFF).

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 131-139, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 131
 Inicialmente se realizó un proceso de suavizado por B-splines para convertir los datos puntuales en
curvas de reflectancia. Con ellas se llevó a cabo un análisis descriptivo y exploratorio funcional con
el objetivo de identificar tendencias y variabilidad de las mismas. Se determinaron a través de técni-
cas de profundidad de datos funcionales las curvas atípicas, las cuales fueron posteriormente elimi-
nadas de la muestra y de los análisis subsecuentes. Se usaron ANOVAS no paramétricas (pruebas de
Kruskal-Wallis) en cada longitud de onda para determinar diferencias entre los valores medios de
reflectancia de los tres grupos, en cada nivel foliar. Así mismo, se hicieron pruebas de comparación
múltiple no paramétricas (pruebas de Nemenyi) para establecer entre cuáles grupos se presentaban
las diferencias detectadas con las pruebas de Kruskal-Wallis. También se efectuaron pruebas de mues-
tras pareadas (Wilcoxon) para establecer diferencias entre las observaciones de campo y laboratorio,
en cada condición experimental (ML, SDF y SFF).

Las pruebas de Kruskal-Wallis indican, tanto con la información de campo como con la de laborato-
rio, que hay diferencias significativas en los valores medios de reflectancia. Con los datos de campo
estas diferencias se dan en todo el espectro, mientras que con los de laboratorio dichas diferencias
se presentan en las regiones del verde, rojo e infrarrojo cercano. En general, las firmas espectrales de
palmas con ML tienen reflectancia media mayor que las SDF y SFF, y la reflectancia media de campo
(en los tres grupos y las dos hojas) es mayor que la registrada en laboratorio.

Desde un punto de vista metodológico, los resultados indican que las técnicas de ADF consideradas
brindan en el contexto de las firmas espectrales muchas posibilidades de modelación, facilitando la
interpretación de datos que son complejos de analizar a través de sus contrapartes tradicionales.

Abstract
Functional Data Analysis (FDA) has become an area of growing momentum and development in
statistics during the past decade. This paper explores its use in oil palm spectral signature modeling.
By way of illustration, the results obtained with reflectance curves of palms located in a plot with
a high incidence of lethal wilt disease are shown. The differences in the spectral behavior of curves
are studied under three observation criteria: palms showing visible signs of the disease (LW), appa-
rently healthy palms that are in the focus of the disease (HIF), and apparently healthy palms outside
of its focus (HOF).

An initial exploratory functional analysis (EFA) of the reflectance curves was performed, with the
purpose of identifying their trend and variability, taking into account each of the conditions (LW,
HIF and HOF) and the foliar levels (9 and 17) considered. Multivariate functional techniques (main
component analysis, FMCA, and functional classification, FC) were employed to find reflectance curve
groups with similar characteristics. An analysis of functional variance (FANOVA) was applied to de-
termine the differences between the three groups (LW, HIF and HOF) considering their mean spectral
curves and functional regression (FR) curves in order to establish the association between curves and
temperature and humidity.

Results show that the FDA techniques considered (EFA, FMCA, FC, FANOVA and FR) provide several
modeling possibilities within the context of spectral signatures, easing the interpretation of data that
are difficult to analyze through their traditional counterparts (regression, Anova, main components
and classification). Engaging in statistical spectral signature research from a functional perspective, in
addition to providing a more general view, will prevent considering classical statistical models based
on assumptions that are difficult to comply with in practice.

132 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 131-139, Tomo I, 2016
Introducción
El diagnóstico temprano y no destructivo de enfer-
medades en palmas de aceite y, en general, de cual-
quier tipo de cultivo, es un tema de creciente impor-
tancia en la agricultura.
Debido a las relaciones entre las propiedades óp-
ticas de las plantas, la concentración de pigmentos de
las hojas y los cambios estructurales de las mismas
ante la presencia de un patógeno, la espectroscopia de
reflectancia se ha usado como una metodología para
la detección de enfermedades vegetales. Varios estu-
dios se han realizado en este campo, en los cuales se
comparan diferentes herramientas estadísticas para
el análisis de este tipo de información. Por ejemplo,
Zhang et al. (2001) usan el análisis de componentes
principales y un análisis de clasificación para la dis-
criminación, a partir de información espectral, de
tomates enfermos y sanos. Whang and Sousa (2005)
aplican pruebas de análisis de varianza (anova) y
análisis lineal discriminante (lda) sobre curvas de es-
pectrometría con el fin de establecer diferencias entre
especies de mangle; Vaiphasa (2005) hace un estudio
similar pero usando la distancia de Jeffries-Matusita
para cuantificar la diferencia entre las curvas de di-
versas especies. Lelong et al. (2010) usan regresiones
por mínimos cuadrados parciales y luego un lda para
clasificar entre palmas sanas y varios niveles de afec-
tación por Ganoderma. También, Shafri et al. (2011)
estudian palmas afectadas por este hongo a partir de
curvas de espectrometría, para lo cual efectúan prue-
bas anova por pares de tratamientos y posteriormen-
te un lda con las longitudes de onda en donde se en-
contraron diferencias significativas.
En este trabajo se estudia el comportamiento de
curvas espectrales de reflectancia tomadas sobre las
hojas 9 y 17 de palmas de aceite localizadas en una
plantación del Meta, Colombia. Se consideran tres ti-
pos de condición: palmas que presentan síntomas vi-
sibles de la enfermedad (ml), palmas aparentemente
sanas que se encuentran dentro del foco de la enfer-
medad (sdf) y palmas sanas fuera de foco (sff). Para
llevar a cabo el análisis, se hace un suavizado de las
curvas usando una base de B-Splines, se detectan cur-
vas anómalas o outliers usando una medida de pro-
fundidad de datos funcionales, se aplican pruebas de
Estudio de firmas espectrales de palmas de aceite afectadas con la Marchitez letal, usando
análisis estadísticos de datos funcionales • Giraldo, R. et al.
homogeneidad de varianza y normalidad para cada
longitud de onda y a partir de sus resultados se hacen
pruebas anova o de Kruskal-Wallis (dependiendo
de si se cumplen o no los supuestos). Por último, se
usan pruebas de comparaciones múltiples paramétri-
cas o no-paramétricas y se establece, primero en qué
longitudes de onda se presentan diferencias entre los
grupos y luego entre qué combinación de pares de
grupos se encuentran las diferencias.
El presente documento está organizado de esta ma-
nera: en la siguiente sección se exponen los datos y la
metodología de análisis. Luego, se muestran y discuten
los resultados del suavizado, la detección de outliers, la
verificación de supuestos y los valores P de las pruebas
sobre la hipótesis de igualdad de las curvas medias de
los grupos (anova o Kruskal-Wallis) y de las pruebas
de comparación múltiple. Posteriormente se presenta
una sección de conclusiones, en donde se resumen los
principales resultados obtenidos con la información
analizada y finalmente se da un listado de las referen-
cias bibliográficas consultadas.
Materiales y métodos
Este trabajo se realizó en una plantación comercial lo-
calizada en el departamento del Meta, Colombia. Los
lotes seleccionados se caracterizan por tener el mis-
mo material de palma y una edad de 6 años aproxi-
madamente. Dichos lotes fueron elegidos teniendo en
cuenta las tres condiciones de observación propuestas
(palmas con ml, palmas sdf y palmas sff). Para cada
grupo se consideró una muestra de 40 palmas, sobre
las cuales se recolectaron valores de reflectancia en las
regiones del visible y el infrarrojo cercano (entre 400 y
1.075 nm). Las mediciones se hicieron en las hojas 9 y
17, efectuándose dos tomas por hoja, las cuales cons-
taron de 15 repeticiones cada una, y fueron adquiridas
en fase de campo y laboratorio.
Inicialmente se propone elaborar gráficos des-
criptivos con los datos originales, y luego mediante
el uso de bases de B-splines (Ramsay and Silver-
man, 2005) se obtienen curvas suavizadas y la curva
media correspondiente de cada grupo. A partir de
los resultados obtenidos anteriormente, se efectúa
133
 un análisis de profundidad de datos funcionales
(López-Pintado and Romo, 2009) para cada grupo,
con el propósito de detectar y eliminar las curvas
outliers (extremas).
A continuación se realizan pruebas de normali-
dad y de homogeneidad de varianzas sobre los datos
suavizados, para cada longitud de onda, a través del
test de Lillifors (Dallal and Wilkinson, 1986) y del
test de Levene (Levene, 1960), respectivamente. Con
base en estos resultados se determinan si se pueden
usar análisis de varianzas paramétricos (anova),
o si es necesario acudir a pruebas no paramétricas
(Kruskal-Wallis).
Posteriormente, se obtienen gráficos de dispersión
entre la longitud de onda (en el eje x) y los valores P
(en el eje y) de las pruebas de comparación (anova o
Kruskal-Wallis), para identificar en cuáles longitudes
de onda se dan diferencias significativas en los valores
medios de espectrometría de los grupos.
Por último, se aplican, en cada longitud de onda,
pruebas de comparación múltiple de Tukey (Hinkel-
mann and Kempthorne, 1994) si se satisfacen los su-
puestos de normalidad y homogeneidad de varianzas,
o pruebas de comparación múltiple no paramétricas
de Nemenyi (Lothar, 1997), en caso contrario.
Resultados y discusión
A continuación se presentan los resultados de los aná-
lisis de campo y de laboratorio en cada una de las ho-
jas evaluadas (9 y 17). Inicialmente se hizo un análisis
descriptivo de los datos por grupo, el cual consistió en
graficar los valores de reflectancia para cada longitud de
onda (líneas grises claras continuas), las curvas grises
oscuras continuas o promedio, e identificar (en al me-
nos uno de los grupos), a través del estudio de profun-
didad de datos funcionales, curvas extremas en función
del comportamiento global de las curvas consideradas
en cada grupo (líneas punteadas) (Figuras 1 y 2).

Figura 1. Representación gráfica de a. b.

0,8 0,8
los valores de reflectancia medidos Promedio Promedio
sobre las hojas 9 y 17 de las palmas 0,6 0,6
Reflectancia (%)

Reflectancia (%)

consideradas en cada uno de los 0,4 0,4

grupos definidos (ML, SDF, SFF) en
fase de campo. 0,2 0,2

a. Curvas suavizadas ML Nv. 9. 0,0 0,0

400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
b. Curvas suavizadas SDF Nv. 9.
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)
c. Curvas suavizadas Campo SFF
Nv. 9. d. Curvas suavizadas Campo c. d.
ML Nv. 17. e. Curvas suavizadas 0,8 Promedio 0,8 Promedio
Valor atípico Valor atípico
SDF Nv. 17. f. Curvas suavizadas 0,6 0,6
Reflectancia (%)

Reflectancia (%)

Campo SFF Nv. 17.

0,4 0,4

0,2 0,2

0,0 0,0
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)

e. f.
0,8 Promedio 0,8 Promedio
Valor atípico
0,6 0,6
Reflectancia (%)

Reflectancia (%)

0,4 0,4

0,2 0,2

0,0 0,0
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)

134 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 131-139, Tomo I, 2016
 a. 0,8 b. 0,8
Promedio Promedio Figura 2. Representación gráfica de
Valor atípico los valores de reflectancia medidos
0,6 0,6
Reflectancia (%)

Reflectancia (%)
sobre las hojas 9 y 17 de las palmas
0,4 0,4
consideradas en cada uno de los
0,2 0,2 grupos definidos (ML, SDF, SFF) en
fase de laboratorio.
0,0 0,0
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100 a. Curvas suavizadas ML Nv. 9.
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm) b. Curvas suavizadas SDF Nv. 9.
c. Curvas suavizadas Campo SFF
c. 0,8 d. 0,8 Promedio Nv. 9. d. Curvas suavizadas Campo
Promedio
Valor atípico ML Nv. 17. e. Curvas suavizadas
0,6 0,6
SDF Nv. 17. f. Curvas suavizadas
Reflectancia (%)

Reflectancia (%)
0,4 0,4 Campo SFF Nv. 17.
0,2 0,2

0,0 0,0
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)

e. 0,8
f. 0,8
Promedio Promedio
Valor atípico
0,6 0,6
Reflectancia (%)

Reflectancia (%)

0,4 0,4

0,2 0,2

0,0 0,0
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)

Dado que las curvas atípicas pueden enmascarar onda superiores a 700 nm. A su vez, es posible apreciar
las tendencias generales, estas fueron excluidas de los que en campo las curvas espectrales medias son mayo-
análisis posteriores. res que en laboratorio (más adelante se presentará una
prueba formal de las diferencias entre los grupos).
Una comparación gráfica de las curvas medias (Fi-
gura 3) muestra que en ambas hojas evaluadas, tanto Para establecer estadísticamente si existen o no di-
en campo como en laboratorio, la reflectancia media ferencias significativas entre las medias de los grupos,
en palmas con ml es mayor que las de las palmas sa- usualmente se aplica una técnica de análisis estadísti-
nas. Esto es particularmente evidente en longitudes de co llamada anova, la cual se fundamenta en supues-

a. 0,6 b. 0,6

0,5 0,5
Figura 3. Gráfica de las curvas
medias calculadas para los tres
Reflectancia (%)

Reflectancia (%)

0,4 0,4 grupos (ML, SDF, SFF) en fase de

0,3 0,3
campo y laboratorio.

0,2 0,2

0,1 0,1

0,0 0,0
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)
SFF SDF ML

Estudio de firmas espectrales de palmas de aceite afectadas con la Marchitez letal, usando
análisis estadísticos de datos funcionales • Giraldo, R. et al. 135
 tos de normalidad y homogeneidad de varianzas. En el
caso considerado, esto supone que para cada longitud
de onda los datos de reflectancia en el interior de los
grupos se ajustan a un modelo de probabilidad normal
y que las varianzas de los tres grupos, en cada longitud
de onda, no son significativamente diferentes.
A continuación se presentan los valores P de las
pruebas de hipótesis de normalidad (test de Lilliefors)
y de homogeneidad de varianzas (test de Levene) efec-
tuadas en cada longitud de onda con los datos de los
tres grupos, en los dos niveles foliares (Figuras 4-7).
En todos los casos (datos de campo y de laboratorio
en los dos niveles foliares), los valores P de las pruebas
indican que estos supuestos requeridos para el uso de
la anova no se satisfacen. Se puede observar que en al-
gunas longitudes de onda los valores P están por deba-
jo del nivel de significancia de 5 % (línea punteada), lo
que lleva al rechazo de las hipótesis correspondientes
(normalidad u homogeneidad de varianzas).
Teniendo en cuenta lo anterior, se decidió em-
plear pruebas no paramétricas. En primera instancia
se usaron pruebas de Kruskal-Wallis para determinar
en qué longitudes de onda se dan diferencias entre
los grupos, y posteriormente se emplearon pruebas
de comparación múltiple de Nemeny para establecer
entre cuáles de los grupos (ml, sdf y sff) se daban
específicamente dichas diferencias.
Los resultados de las pruebas de Kruskal-Wallis
se presentan en las Figuras 8a y 8b. De acuerdo con
estas pruebas, se puede establecer que para los datos
tomados en campo correspondientes a la hoja 9 exis-
ten diferencias entre al menos un par de grupos a lo
largo de todo el espectro evaluado (400 a 1.075 nm)
(Figura 8a). Para el caso de la hoja 17, se observa que
las diferencias se presentan en las longitudes de onda
comprendidas entre 506 nm y 1.075 nm (Figura 8b).
Por otro lado, los datos de laboratorio muestran
que para la hoja 9, en longitudes de onda superiores a
700 nm, se presentan diferencias entre los grupos (Fi-
gura 9a), y para el caso de la hoja 17, en las longitudes
de onda comprendidas entre los rangos de 535 a 583
nm, y de 695 a 1.075 nm (Figura 9b).

Figura 4. a. Valores P de las pruebas a. b. 0,8

de hipótesis de normalidad en fase 0,6

de campo para la hoja 9. La línea 0,6
punteada corresponde al nivel de 0,4
significancia de la prueba 5 %.
Valor-P

Valor-P

0,4

b. Valores P de las pruebas de 0,2

0,2
homogeneidad de varianzas en
fase de campo para la hoja 9.
0,0 0,0
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)

Figura 5. a. Valores P de las pruebas

a. b.
de hipótesis de normalidad en fase 0,8 0,6
de campo para la hoja 17. La línea
punteada corresponde al nivel de 0,6
significancia de la prueba 5 %. 0,4
Valor-P

Valor-P

0,4
b. Valores P de las pruebas de
homogeneidad de varianzas en fase 0,2
0,2
de campo para la hoja 17.
0,0 0,0
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)

136 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 131-139, Tomo I, 2016
 a. 0,8 b. 1,0 Figura 6. a. Valores P de las
pruebas de hipótesis de normalidad
0,8
0,6 en fase de laboratorio para la hoja
0,6 9. La línea punteada corresponde al
nivel de significancia de la prueba
Valor-P

Valor-P
0,4
0,4
5 %.
0,2
0,2 b. Valores P de las pruebas de
homogeneidad de varianzas en
0,0 0,0
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
fase de laboratorio para la hoja 9.
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)

a. b. 1,0
Figura 7. a. Valores P de
0,6
las pruebas de hipótesis de
0,8 normalidad en fase de laboratorio
para la hoja 17. La línea
0,6
0,4 punteada corresponde al nivel de
Valor-P

Valor-P

0,4 significancia de la prueba 5 %.

0,2 b. Valores P de las pruebas de
0,2
homogeneidad de varianzas en
0,0 0,0 fase de laboratorio para la hoja 17.
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)

a. b. Figura 8. a. Valores P del test de

0,014 0,008
Kruskal-Wallis para cada longitud
0,012 de onda para datos de campo en
0,006 la hoja 9.
0,010
Valor-P

Valor-P

0,008 b. Valores P del test de Kruskal-

0,004
0,006 Wallis para cada longitud de onda
0,004
para datos de campo en la hoja 17.
0,002 La línea punteada corresponde al
0,002
nivel de significancia de 5 %.
0,000 0,000
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)

a. b.
Figura 9. a. Valores P del test de
1,0 1,0
Kruskal-Wallis para cada longitud
0,8 0,8 de onda para datos de laboratorio
Valor-P

Valor-P

en la hoja 9.
0,6 0,6
b. Valores P del test de Kruskal-
0,4 0,4 Wallis para cada longitud de
onda para datos de laboratorio
0,2 0,2
en la hoja 17. La línea punteada
0,0 0,0 corresponde al nivel de
400 500 600 700 800 900 1000 1100 400 500 600 700 800 900 1000 1100 significancia de 5 %.
Longitud de onda (nm) Longitud de onda (nm)

Estudio de firmas espectrales de palmas de aceite afectadas con la Marchitez letal, usando
análisis estadísticos de datos funcionales • Giraldo, R. et al. 137
 De manera general, se concluye que las diferencias
entre los valores de reflectancia de los tres grupos ob-
jeto de estudio (ml, sdf y sff) dependen, por un lado,
de las condiciones bajo las cuales se hace la toma de
los datos (campo o laboratorio), y por el otro, de qué
tan avanzada se encuentra la expresión de síntomas
en las hojas.
De manera complementaria, a continuación se
presenta en la Tabla 1 el resumen de los resultados
encontrados con las prueba de Nemenyi.
De acuerdo con los resultados descritos en la si-
guiente tabla, de manera general se puede interpre-
tar que en las longitudes de onda en donde hay dife-
rencias entre los grupos, la media de reflectancia de
palmas afectadas por Marchitez letal es mayor que
las medias de reflectancia obtenidas con las palmas
que están dentro y fuera del foco de la enfermedad.
Así mismo, salvo en los datos de nivel foliar 17 re-
gistrados en laboratorio, se observa que no hay, en
ninguna longitud de onda, diferencias significativas
entre los valores medios de reflectancia de palmas
que están dentro y fuera del foco.
Tabla 1. Resumen de resultados encontrados en las pruebas de comparación múltiple de Nemenyi (nivel de signifi-
cancia de 5 %).
Nivel de comparación ML vs. SDF
La reflectancia media de ML es
Datos de campo, nivel
mayor que la de SDF en todo el
foliar 9
espectro.
La reflectancia media de ML
Datos de campo, nivel es mayor que la de SDF en
foliar 17 longitudes de onda entre 506 a
1.075 nm.
La reflectancia media de ML
Datos de laboratorio, es mayor que la de SDF en
nivel foliar 9 longitudes de onda superiores
a 700 nm.
La reflectancia media de ML
Datos de laboratorio, es mayor que la de SDF en
nivel foliar 9 longitudes de onda entre 535 a
583, y entre 693 y 1.075 nm.
138
Por último, se llevaron a cabo pruebas de Wilco-
xon de muestras pareadas (en cada palma hay dos
mediciones, una en campo y otra en laboratorio)
para determinar si hay diferencias significativas en-
tre las medias de estas dos condiciones de medición.
En todos los casos, la conclusión es que las medias
obtenidas en campo son superiores a las medias re-
gistradas en laboratorio.
Conclusión y trabajo futuro
A partir de los análisis realizados puede concluirse que,
tanto con la información de campo como con la de la-
boratorio, existen diferencias en los valores medios de
reflectancia. Con los datos de campo estas diferencias
se dan a lo largo de todas las longitudes de onda eva-
luadas, mientras que con los datos de laboratorio di-
chas diferencias se presentan en las longitudes de onda
correspondientes a las regiones del verde, rojo e infra-
rrojo. En general, las firmas espectrales de palmas con
ml tienen reflectancia media mayor que las sdf y que
las sff. Además, la reflectancia media obtenida con los
ML vs. SFF SDF vs. SFF
No hay diferencias
La reflectancia media de ML es
significativas entre las medias
mayor que la de SDF en todo el
de reflectancia de SDF y SFF
espectro.
en ninguna longitud de onda.
La reflectancia media de ML No hay diferencias
es mayor que la de SFF en significativas entre las medias
longitudes de onda entre 506 y de reflectancia de SDF y SFF
1.075 nm. en ninguna longitud de onda.
La reflectancia media de ML No hay diferencias
es mayor que la de SFF en significativas entre las medias
longitudes de onda superiores a de reflectancia de SDF y SFF
700 nm. en ninguna longitud de onda.
La reflectancia media de ML La reflectancia media de SDF
es mayor que la de SFF en es mayor que la de SFF en
longitudes de onda entre 535 y longitudes de onda entre 727
583 nm, y entre 693 y 1.075 nm. y 1.075 nm.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 131-139, Tomo I, 2016
datos de campo (en los tres grupos y los dos niveles
foliares) es superior a la registrada en laboratorio.
Desde el punto de vista metodológico, se puede
decir que los resultados obtenidos son bastante sa-
tisfactorios, dado que indican que las técnicas de
análisis de datos funcionales brindan la posibilidad
de tener una visión más general del patrón de com-
portamiento de las curvas de reflectancia. Aunque se
aplicaron pruebas no paramétricas tradicionales para
hacer las comparaciones en cada longitud de onda, la
fase preliminar de análisis descriptivo y de identifi-
cación de observaciones atípicas desde la perspectiva
funcional es fundamental para el posterior uso de las
pruebas clásicas. Hay además un potencial de herra-
mientas estadísticas comprendidas dentro del análi-
sis de datos funcionales que aún no han sido aplica-
das con este tipo de datos; por ejemplo, el análisis
de regresión funcional para determinar la relación
entre las curvas de reflectancia y covariables como
temperatura o humedad, así como también el análi-
sis discriminante funcional para identificar a partir
de una curva de reflectancia si una palma está en-
ferma, el uso de geoestadística funcional para hacer
predicción espacial de la enfermedad a partir de las
firmas espectrales.

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Estudio de firmas espectrales de palmas de aceite afectadas con la Marchitez letal, usando
análisis estadísticos de datos funcionales • Giraldo, R. et al. 139
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contenido

El uso de sensores remotos para detectar la infección

por Ganoderma*
Use of Remote Sensors to Detect Ganoderma Infection

autores: Nisfariza Mohd Noor1 (Principal). Anuar Mohamad Izzuddin2, Abu

Seman Idris2 and Bahrom Ezzati1 (Coautores).
citación: Mohd, N., Mohamad, A., Seman, A., & Bahrom, E. (2016). El uso
de sensores remotos para detectar la infección por Ganoderma. Palmas
37(Especial Tomo I), pp. 140-150.
palabras clave: Ganoderma, infrarrojo cercano, Pudrición basal del estípite,
RGB, vehículo aéreo no tripulado.
keywords: Ganoderma, Near Infrared, basal rot, RGB, unmanned aerial vehicle.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Sofía Lemaitre Cepeda.
1 Department of Geography, Faculty of Arts and Social Sciences, Universiti of
Malaya, 50603 Kuala Lumpur, Malaysia. E-mail: nish@um.edu.my
2 Ganoderma and Diseases Research for Oil Palm (GanoDROP) Unit, Biological Nisfariza Mohd Noor
Research Division, Malaysian Palm Oil Board, 43000, Kajang, Selangor, Profesora titular, Departamento de
Geografía, Facultad de Artes y Ciencias
Malaysia. E-mail: idris@mpob.gov.my
Sociales, Universidad de Malaya
Senior Lecturer, Department of
Geography, Faculty of Arts and Social
Sciences, University of Malaya
nish@um.edu.my

Resumen
El estudio del uso de la teledetección para la enfer­medad de la Pudrición basal del estípite (PBE) de la
pal­ma de aceite por parte de la Mesa de Aceite de Pal­ma de Malasia (Malaysian Palm Oil Board) inició
en 2008. Se efectuaron diversos estudios para analizar las propiedades fisiológicas y fenológicas de la
palma de aceite y la interacción entre las radiacio­nes electromagnéticas y la enfermedad de la PBE por
Ganoderma. Existe la necesidad de desarrollar tecnologías de detección de la PBE basada en teledetec-
ción aérea para una imple­mentación más rápida del control de la enfermedad de PBE por Ganoderma.
El estudio inicial se realizó para investigar la posibilidad de utilizar la telede­tección hiperespectral como
herramienta para la detección temprana de esta enfermedad; se llevó a cabo en tres niveles experi-

140 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 140-150, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923
 mentales: en el vivero, en el campo y en el aire, utilizando dos sensores hipe­respectrales: el espectro-
rradiómetro manual (GER 1500) y el sistema de imágenes hiperespectrales (AISA Eagle).

Los experimentos en el vivero se establecieron para adquirir una perspectiva acerca de la respuesta
hi­perespectral de la palma de aceite a la Pudrición basal del estípite (PBE) por Ganoderma y se emplea-
ron como punto de comparación para el análisis. Este fue un estudio multidimensional que incorporó
las distintas etapas de la enfermedad, las etapas del crecimiento de la palma, ins­trumentos con varias
resoluciones espaciales y es­pectrales, y una gama de análisis espectrales. Las mediciones en campo se
diseñaron para entender las propiedades de la palma de aceite, con y sin la enfermedad. Por otra parte,
las medidas de transmisión por el aire se utilizaron para poner a prueba la viabilidad de la teledetec-
ción hiperespectral desde una perspecti­va operacional. Se trata de una investigación con diversos
enfo­ques en escala, que incluye la escala de unidades de muestreo (en las hojas y por transmisión
aérea), la escala del fenómeno (la etapa de infección de la enfermedad PBT) y la escala del análisis para
describir la detección temprana de la PBE por Ganoderma en la palma de aceite.

Aunque concluimos que la teledetección hiperespec­tral es una opción no destructiva para la detec-
ción temprana de la enfermedad de PBE por Ganoderma, los métodos deben desarrollarse en forma
preci­sa y confiable para determinar las palmas infectadas asintomáticas antes de implementar las op-
ciones de tratamiento de la enfermedad con una máxima efectividad. Hemos avanzado en utilizar el
sistema UAV RGB-NIR de última tecnología para la detección de la PBE por Ganoderma con integración
del SIG y modelos basados en el censo de la enfermedad para lograr una vista aérea y determinar su
propagación en las plantaciones de palma de aceite.

Abstract
The study of the use of remote sensing in Gano­derma Basal Stem Rot (BSR) disease of oil palm in
Malaysian Palm Oil Board was initiated in 2008. A number of different experiments were carried out
to understand the base line information about the oil palm physiological and phenological proper-
ties and target interaction between the electromagnetic ra­diations with the Ganoderma BSR disease.
There is a requirement for the development of airborne remote sensing based BSR disease detection
technology for faster Ganoderma BSR disease control implemen­tation. The initial study was done to
investigate the possibility of using hyperspectral remote sensing as a tool in early detection of Gano-
derma BSR; it was conducted at three experimental levels: the nursery, the field and airborne, using
two hyperspectral sen­sors – the handheld spectroradiometer (GER 1500) and hyperspectral imaging
(AISA Eagle) system.

The nursery experiments were established to gain a fundamental perspective on oil palm hyperspec-
tral response to Ganoderma Basal Stem Rot (BSR) disease and were used as a benchmark for the analy-
sis. The study was multi-dimensional, incorporating different stages of the disease, different stages
of palm growth and instruments with different spatial and spectral re­solutions as well as a range of
different spectral analyses. The field measurements were designed to enable a fundamental understan-
ding of the oil palm spectral properties, with and without the disease. The airborne measurements, on
the other hand, were used to test the feasibility of hyperspectral remote sensing from an operational
point of view. The research with several scaling approaches including the scale of sampling units (leaf
and airborne), the scale of the phenome­non (the stage of BSR disease infection) and the scale of the
analysis in describing the early detection of Ga­noderma BSR in oil palm.

Although we concluded that hyperspectral remote sensing analysis is an option non-destructive early
detection of Ganoderma BSR disease. The methods need to be accurately and reliably developed to
deter­mine infected asymptomatic trees before implemen­ting the disease-management options with
maximum effectiveness. We have moved forward to use the cutting-edge UAV RGB-NIR system to de-
tect Gano­derma BSR disease with the GIS integration and mo­delling based on disease census to obtain
the aerial view and spread of the Ganoderma BSR disease in oil palm plantation.

El uso de sensores remotos para detectar la infección por Ganoderma • Mohd, N., et al. 141
 Introducción
La Pudrición basal del estípite (pbe) de la palma de
aceite es causada por un hongo transmitido por el suelo
denominado Ganoderma spp. Esta enfermedad gene-
ra una pérdida sustancial a la industria de la palma de
aceite en Malasia e Indonesia (Idris y Roslan, 2012). La
especie más agresiva de Ganoderma que causa la pbe
es Ganoderma boninense (Idris, 2011). La propagación
de esta enfermedad es inducida por contacto entre
las raíces sanas y las lesionadas y los tejidos enfermos
abundantes en el suelo. El hongo Ganoderma crece a lo
largo de la raíz infectada y finalmente llega al estípite
de la palma. La renovación sucesiva de las generacio-
nes siguientes de palma de aceite en el mismo suelo da
lugar a una mayor incidencia de la enfermedad. Los
síntomas de la enfermedad se presentan aún más tem-
prano que en las generaciones anteriores (Idris, 2012).
Es urgente desarrollar un método rápido y preci-
so para detectar la enfermedad en las plantaciones de
palma de aceite (Nisfariza, 2012). Se han desarrollado
varias tecnologías para la detección de la pbe en lotes
de palma de aceite, a saber, el medio selectivo para Ga-
noderma (gsm, por sus siglas en inglés) (Ariffin et al.,
1993), los anticuerpos policlonales - ensayo de inmu-
noabsorción ligado a enzimas (PAbs-elisa) (Madihah
et al., 2014, Idris y Rafidah, 2008), el kit Multiplex pcr-
dna (Idris et al., 2010a), y la tomografía GanoSken
(Idris et al., 2010b). Estas tecnologías requieren mucho
tiempo y una investigación individual y exhaustiva de
los lotes de palma de aceite. Es necesario desarrollar
una tecnología aerotransportada para la detección de
la pbe a fin de obtener resultados y trabajos de gestión
de control rápidos, así como ahorrar costos.
Los datos obtenidos mediante teledetección hipe-
respectral aerotransportada ofrecen un mejor enfoque
para la detección del estrés en las palmas de aceite en
una superficie extensa sembrada (Shafri y Hamdan,
2009). Las imágenes hiperespectrales aerotransporta-
das utilizan la espectrometría de imágenes montada
en una plataforma aerotransportada que adquiere las
imágenes en muchas bandas espectrales estrechas y
contiguas a lo largo de las porciones visibles, del infra-
rrojo cercano, del infrarrojo mediano y del infrarrojo
térmico del espectro (Nisfariza, 2012, Yang et al., 2011,
Izzuddin, 2010, Lillesand et al., 2004).
142
Las aplicaciones de los vehículos aéreos no tri-
pulados (vant) equipados con generadores de imá-
genes en los estudios agrícolas están cobrando cada
vez mayor importancia en la literatura. García-Ruíz
et al., (2013) presentaron la capacidad de teledetec-
ción de baja altitud de vant multirrotores para de-
tectar el Huanglongbing (hlb): enfermedad de enver-
decimiento de los cítricos que afecta los huertos. Se
adaptó un sensor de imágenes multibanda a un vant
compatible con la altitud de vuelo. El análisis demos-
tró que la detección aérea de alta resolución presenta
el mejor resultado en la detección de los árboles in-
fectados con hlb en comparación con el sistema de
imágenes similar a partir de sensores en aeronaves
con menor resolución espacial.
En el estudio de Calderón et al., (2013) se demues-
tra el potencial de los vant para la detección tem-
prana de la infección de marchitez por Vermicillium
en olivos mediante imágenes térmicas, multiespec-
trales e hiperespectrales. Se accede a la detección de
esta enfermedad mediante la temperatura de la copa
del árbol, los índices estructurales, los índices rgb, la
fluorescencia y el índice de salud, y proporciona un
buen indicador para detectar la presencia de daños en
los cultivos de olivo.
Hill et al., (2009) demostraron que el fitopatógeno
del suelo Phytophthora cinnamomi ocasiona cambios
estructurales y florísticos a largo plazo en las comu-
nidades vegetales nativas australianas. El principal
conocimiento en el manejo de la enfermedad es saber
dónde ocurre y su tasa de propagación. Los puntos
de localización de P. cinnamomi se han cartografia-
do pero es difícil y costoso mapear el alcance de la
enfermedad. Las imágenes digitales multiespectrales
se probaron para cuantificar la infestación sobre ex-
tensas áreas, lo que proporciona una herramienta no
invasiva y de bajo costo para su manejo.
Materiales y métodos
Área de estudio
El área de estudio está localizada en una plantación
de palma de aceite ubicada en Seberang Perak, Mala-
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 140-150, Tomo I, 2016
sia (4° 6’ 42” N, 100° 53’ 12” E), con una precipitación
anual de 2.256 mm por año y una temperatura entre
24 y 34 °C (Figura 1). El área se seleccionó debido a
la disponibilidad del censo sobre el terreno de la in-
cidencia de la pbe realizado en los años 2013 y 2014.
Las imágenes provenientes del vant se adquirieron
en junio de 2014 sobre una porción de toda la plan-
tación en donde se reportó la ocurrencia de la enfer-
medad. La edad de las palmas de aceite es de ocho
años después de la siembra y es el área sembrada de
segunda generación.
Tabla 1. Índice de Severidad de Enfermedad (ISE) de la Pudrición basal del estípite (PBE) en palma de aceite.
Nivel de
severidad de la Descripción
enfermedad
Palma no infectada, no hay hongos
T0
Ganoderma en los tejidos y GSM negativo.
T1 Estípite con infección leve.
Palma infectada con hongos Ganoderma sin
síntomas foliares pero con pequeño botón
T2
blanco o cuerpo fructífero en la base del
estípite, GSM positivo.
Palma infectada con hongos Ganoderma
con síntomas foliares y micelio blanco o
T3
cuerpo fructífero en la base del estípite, y
GSM positivo.
El uso de sensores remotos para detectar la infección por Ganoderma • Mohd, N., et al.
Censo sobre el terreno
El censo sobre el terreno se llevó a cabo para registrar
la ubicación y el número de lotes de palma de aceite sa-
nos e infectados en el área de estudio. Las palmas infec-
tadas se clasificaron en cuatro categorías de Índice de
Severidad de Enfermedad (ise) de la pbe en palma de
aceite (Idris y Rosmidi, 2014). En la Tabla 1 se muestra
el ise. Para la confirmación de la infección pbe en cada
uno de los lotes de palma de aceite se utilizó el medio
selectivo para Ganoderma (gsm). Esta técnica utiliza
Figura 1. Sitio de estudio de la
plantación de palma de aceite,
Seberang Perak, Malasia.
Evaluaciones visuales
Hojas y palma sana, sin síntomas foliares y ausencia de
micelio blanco o cuerpo fructífero (Ganoderma) en la
base del estípite.
Hojas y palma sana, sin síntomas foliares, pequeño botón
blanco, descomposición en cuerpo foliar y el estípite.
Hojas y palma de aspecto sano, sin síntomas foliares
pero con presencia de pequeño botón blanco o cuerpo
fructífero (Ganoderma) en la base del estípite.
Amarillamiento o secamiento de algunas hojas. Tres o
más permanecen como flechas sin abrir. Decaimiento de
las hojas más viejas. Presencia de pequeño botón blanco
o cuerpo fructífero (Ganoderma) en la base del estípite.
143
 muestras de tejido del estípite o la raíz de la palma
de aceite para confirmar la existencia del patógeno
Ganoderma. Las muestras se recogieron mediante la
técnica de perforación.
El sistema de vehículo aéreo no tripulado
(VANT)
Las imágenes rgb y nir se obtuvieron mediante el sis-
tema vant Swinglet cam (Figura 2) (Sensefly, 2015).
El sistema vant captura imágenes digitales en el es-
pectro rgb y nir.
El peso del vant es de aproximadamente 0,5 kg, la
envergadura es de 80 cm y el material es de espuma
de polipropileno expandido (epp), estructura de car-
bono y partes compuestas. El sistema de propulsión
utiliza una hélice propulsora eléctrica, motor sin es-
cobillas de corriente directa y 100 W. El vant funcio-
na con una batería de 11,1 V, 1.350 mAH.
El vant también está equipado con una Unidad
de Medición Inercial (umi) y un Sistema de Posicio-
namiento Global (gps) para la navegación y los tra-
bajos de planificación de vuelos. Hay dos cámaras
de 16 megapixeles para el vant: la cámara rgb y la
nir. La cámara rgb cubre la banda ancha en el visible
(450-750 nm) y la nir cubre 760-860 nm. La altitud
de vuelo del vant durante la adquisición de imágenes
es de unos 150 metros y la resolución de pixeles para
la imagen es de 10 cm.
Figura 2. Sistema VANT Swinglet
CAM.
144
La adquisición de las imágenes se realizó con cie-
lo despejado y buen tiempo, con velocidad del viento
de 25 km/h. Hay tres juegos de baterías que se utilizan
para el vant, adecuadas para una hora y media de vue-
lo. El vuelo se controló mediante una estación inalám-
brica terrestre integrada con el software eMotion.
Procesamiento de imágenes
Las imágenes rgb y nir adquiridas sobre el área de
estudio se descargaron del sistema vant al disco
duro de un computador después de la campaña de
vuelo. Posteriormente se utilizó el software Postfli-
ght Terra lt para comprobar la superposición de
las imágenes y se generó un ortomosaico de baja
resolución mientras aún estaba en campo. Luego,
las imágenes fueron geocorregidas y a continuación
ortorrectificadas en ortofotos. Después, estas fueron
unidas en mosaicos. Los procedimientos para la ge-
neración de mosaicos de ortofotos se efectuaron con
base en Terrasolid Oy (2014).
Técnica estadística comparativa
El análisis estadístico comparativo se utiliza para de-
terminar si existe una diferencia significativa entre
dos grupos de conjuntos de datos o varios grupos de
conjuntos de datos (Johnson, 1989). En este estudio
se utilizó la prueba t para determinar si había dife-
rencias entre los ise. Una prueba t hace la compara-
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 140-150, Tomo I, 2016
ción entre dos medias que indica, en un grado espe-
cífico de certeza, si las dos medias son diferentes o si
la diferencia podría haber ocurrido por casualidad.
Por consiguiente, una prueba t puede indicar si la
diferencia entre los números del antes y el después
es genuina o si pudo haber sido resultado de la ca-
sualidad (Harmon, 2011).
En este estudio se empleó la prueba t para com-
parar dos medias muestrales. Las diferencias entre
la prueba t para comparar medias muestrales son la
ecuación que se utiliza para calcular el estadístico t
y los grados de libertad para elegir el valor tabulado
de t. Se necesitaron dos medias muestrales separadas,
desviaciones estándar y tamaños de muestras. Ade-
más, el número de grados de libertad (gdl) se calculó
al número entero más cercano. El análisis de la prueba
t fue adoptado por Siddiqui et al. (2014) en el estudio
de las características visibles de plantas o análisis de
rasgos mediante sistemas de imágenes termográficas
infrarrojas; Cho et al. (2008) en la discriminación de
tres arbustos y tres especies a partir de índices hipe-
respectrales y Peijie et al. (2011) para la discrimina-
ción de células enfermas en humanos.
Los estudios anteriores sugieren que la prueba t es
adecuada para analizar la diferencia entre T0, T1, T2
y T3 a partir de las imágenes procedentes de vant. En
este estudio el valor de p se fijó en p < 0,05 para recha-
zar la hipótesis nula de que no hay diferencias signifi-
cativas entre los ise. Este nivel de diferencia significa-
tiva se ha utilizado en muchos estudios relacionados.
Resultados
Mosaicos de ortofotos a partir de las
imágenes obtenidas con VANT
Las imágenes descargadas del vant fueron pre-
procesadas con el software Terrasolid, corregidas
El uso de sensores remotos para detectar la infección por Ganoderma • Mohd, N., et al.
en proyección planimétrica con asimetría reduci-
da y convertidas en ortofotos. Luego, las ortofotos
fueron unidas en mosaicos de ortofotos como se
muestra en la Figura 3. El mosaico de ortofotos tie-
ne un sistema de coordenadas de latitud y longitud
con proyección de wgs 84.
La imagen consiste en lotes jóvenes de palma de
aceite (8 años de edad). La resolución espacial de la
imagen es de 10 cm y la cobertura total es de aproxi-
madamente 25 hectáreas. La creación de los mosaicos
de ortofotos se hizo en las imágenes rgb y nir.
Resultados estadísticos comparativos
Se efectuó un análisis estadístico comparativo del nú-
mero digital (nd) de los doseles de palma de aceite
extraídos de cada ise. Los nd se extrajeron mediante
la herramienta Región de Interés (roi, por sus siglas
en inglés) proporcionada en el software envi 4.8. Las
imágenes extraídas de los doseles de palma de aceite
de cada ise se muestran en la Tabla 2. Las imágenes de
los doseles de palma de aceite se obtuvieron a partir
de imágenes rgb y nir.
Luego se calcularon los estadísticos descriptivos de
cada ise de la pbe; la media, la desviación estándar y
el número de nd extraídos de cada pixel en las imáge-
nes de los doseles se utilizaron como entradas para la
prueba t. Cuatro pares de ise se compararon mediante
la prueba t para cada imagen rgb y nir. La media, la
desviación estándar y el número de pixeles de cada ise
son importantes para efectuar la prueba t. En la Tabla
3 se muestran la media, la desviación estándar y el nú-
mero de pixeles de las imágenes rgb y nir.
La Tabla 3 muestra que los valores de la media y
la desviación estándar de las imágenes rgb y nir son
diferentes. La media para las imágenes rgb oscila entre
111 y 121, mientras que para las nir los valores de la
media oscilan entre 119 y 136. La desviación estándar
Figura 3. Mosaicos de ortofotos del
área de estudio.
145
 Tabla 2. Imágenes de los doseles de palma de aceite para cada Índice de Severidad de Enfermedad (ISE) de la PBE en
palma de aceite.

Índice de Severidad de Enfermedad Imagen RGB Imagen NIR

T0

T1

T2

T3

146 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 140-150, Tomo I, 2016
es mayor para la imagen nir, y oscila entre 51 y 49,
mientras que los valores para la imagen rgb van de
24 a 26 solamente. Los resultados muestran que la
variación en la imagen nir entre los ise es mayor en
comparación con la imagen rgb de los ise.
A continuación se efectuó una prueba t por pares
de los ise. Se probaron seis pares de ise mediante la
prueba t. El nivel significativo para la prueba se fijó
en p < 0,05. La Tabla 4 muestra los resultados de la
prueba t para las imágenes rgb y nir.
Los resultados muestran que las imágenes rgb
y nir tenían la capacidad para diferenciar todas las
severidades de la pbe. Sin embargo, estos resultados
solo se probaron para el análisis a nivel de dosel sin
tener en cuenta las repercusiones de los efectos de los
antecedentes del suelo. Se requiere medir el efecto de
los antecedentes del suelo en la precisión de la discri-
minación entre las categorías de la enfermedad y de-
sarrollar un método para eliminar o reducir el efecto
que pueda causar.
La Tabla 4 muestra que existe una diferencia signi-
ficativa entre todos los posibles pares de categorías de
severidad de la pbe. Todos los pares muestran que el
valor de p se encuentra por debajo de 0,05, con excep-
ción de T0 vs. T3 para la imagen rgb, donde no hay
diferencia significativa (p = 0,1112). Estos resultados
sugieren que la comparación o la clasificación de las
severidades de la pbe con base en la media, la desvia-
ción estándar y el número de pixeles no es suficien-
te para diferenciar entre todas las severidades de la
enfermedad. Se necesitan más muestras de cada una
de las categorías de la enfermedad y métodos avanza-
dos de clasificación y discriminación de las categorías
para obtener una diferencia significativa entre las ca-
tegorías (Guo et al., 2010, Yuan et al., 2014).
Guo et al. (2010) determinaron las diferencias
para los valores log10 cn entre combinaciones de cul-
tivos y labranza mediante la prueba t con valor de
p inferior a 0,0001. Ellos sugirieron que un mues-
treo adicional de campo de uno de los factores del
modelo puede mejorar los resultados del modelo.
Yuan et al. (2014) emplearon imágenes multies-
pectrales spot 6 de alta resolución para hacer una
comparación de desempeño para la detección de la
enfermedad mildeo polvoso mediante tres técnicas
de clasificación supervisada: los clasificadores de
red neuronal artificial (rna), de distancia de Maha-
lanobis (dm) y por máxima probabilidad (máximum
likelihood, ml). La evaluación de la precisión mostró

Tabla 3. Media, desviación estándar y número de pixeles para cada ISE (Imágenes RGB y NIR).

RGB NIR
ISE Desviación Número de Desviación Número de
Media Media
estándar pixeles estándar pixeles
T0 113,0774819 25,98938063 4216 122,9477344 45,77989337 3323
T1 115,9121873 24,33257747 1600 119,9937809 48,78786523 3853
T2 120,6646053 25,81622187 3484 135,4071172 51,2081068 3107
T3 111,6237942 25,83292153 1008 131,8155431 52,486145 2566

Tabla 4. Valores de p de los resultados de la prueba t para las imágenes RGB y NIR.

Valor de p por pares

Imagen T0 vs. T1 T0 vs. T2 T0 vs. T3 T1 vs. T2 T1 vs. T3 T2 vs. T3
RGB 0,0002 < 0,0001 0,1112 < 0,0001 < 0,0001 < 0,0001
NIR 0,0086 < 0,0001 < 0,0001 < 0,0001 < 0,0001 0,0094

* valor de p < 0,05.

El uso de sensores remotos para detectar la infección por Ganoderma • Mohd, N., et al. 147
 que la rna tiene la mayor precisión global, de 89 %,
seguida de la dm y ml, con precisiones globales de
84 y 79 %, respectivamente.
Nuestros resultados concuerdan con el trabajo
efectuado por Everitt et al. (1999), que utilizó ver-
de, rojo y nir para la detección de la enfermedad
de marchitez del roble en roble vivo. Utilizaron el
procedimiento de la Mínima Diferencia Significati-
va (lsd, por sus siglas en inglés) (p < 0,05) para de-
terminar la diferencia entre robles sanos, enfermos y
muertos. Sus resultados mostraron que el verde, rojo
y nir presentaron una diferencia significativa entre
todas las categorías.
Nuestro trabajo también comprobó los estudios
anteriores de Izzuddin (2010), Nisfariza (2012), Iz-
zuddin et al. (2013) e Izzuddin et al. (2014), en los
cuales las longitudes de onda en las bandas verde,
roja y del infrarrojo cercano tenían la capacidad
de diferenciar entre las palmas de aceite sanas y las
infectadas. Nuestro estudio también sugiere que la
diferencia entre los ise de las palmas infectadas con
pbe no influye por la conversión de longitud de onda
específica y significativa a un rango más amplio de
banda significativa.
Conclusiones
Las tecnologías convencionales de detección de la pbe
en palma de aceite son costosas y requieren mucho
tiempo. Por ello, los datos obtenidos por teledetección
para la clasificación y la cartografía de la enfermedad
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148
pbe proporcionan una información amplia y detalla-
da de manera eficaz desde el punto de vista del tiempo
invertido. La disponibilidad de imágenes rgb y nir de
alta resolución espacial obtenidas con vant ofrecen un
mayor potencial para la clasificación y la cartografía de
la pbe en las plantaciones de palma de aceite.
Nuestro estudio analizó las imágenes rgb y nir
con la prueba t para diferenciar la enfermedad pbe
en palma de aceite con base en el ise. Los resulta-
dos muestran que existe una diferencia significa-
tiva entre todos los ise, con excepción de T0 vs.
T3 del potencial de la imagen rgb debido al efec-
to de los antecedentes del suelo. Estos resultados
muestran que hay un gran potencial para utilizar
las imágenes rgb y nir obtenidas con vant para
la detección de la pbe en palma de aceite. Nuestro
estudio también sugiere que los métodos de clasi-
ficación avanzados pueden eliminar o reducir el
efecto de los antecedentes del suelo o desarrollar
máscaras de filtro que solamente extraen el dosel
de la palma de aceite para su análisis.
Se requieren trabajos futuros a fin de desarrollar
técnicas de detección temprana para detectar la pbe
en palma de aceite mediante imágenes hiperespec-
trales obtenidas con vant. Es necesario desarrollar
nuevas tecnologías específicas que sean más sensibles
a los primeros síntomas de la pbe. Se pueden utilizar
técnicas avanzadas de procesamiento de imágenes,
como las Redes Neuronales Artificiales, para procesar
las imágenes hiperespectrales obtenidas con vant y
generar nuevas tecnologías para completar el objetivo
de la detección temprana de la pbe en palma de aceite.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 140-150, Tomo I, 2016
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150 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 140-150, Tomo I, 2016
Volver al
contenido

Innovación inclusiva, desarrollo de capacidades

y redes sociales en clústeres emergentes*
Inclusive Innovation, Capacity Building and Social
Networks in Emerging Clusters

citación: Ramírez, M. (2016). Innovación inclusiva, desarrollo de capacidades

y redes sociales en clústeres emergentes. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 151-
158.
palabras clave: redes sociales, innovación inclusiva, cohesión, apertura de
redes, gobernanza.
keywords: Social networks, inclusive innovation, cohesion, network opening,
governance.
*Editado por Fedepalma a partir de la grabación de video y la presentación en
PowerPoint.

Matías Ramírez
Profesor titular de la Unidad de
Gestión de la Ciencia Política de
Investigación y Administración,
Universidad de Sussex
Senior Lecturer in Management
Science Policy Research Unit, Business
and Management (SPRU), University
of Sussex
Matias.ramirez@sussex.ac.uk

Resumen
La “innovación inclusiva”, es decir, la incorporación de distintos actores, incluyendo grandes y peque-
ños productores, en procesos de innovación y aprendizaje, representa uno de los grandes retos del
sector palmero, y más allá, de la agricultura en Colombia. Este estudio presenta un marco teórico y
práctico basado en tres elementos clave que refuerzan este debate. El primero se refiere a la importancia
de la asociatividad y la conectividad entre pequeños productores y estos con organizaciones centrales
en redes sociales dirigidas a lograr una acción coordinada. El segundo elemento, la apertura de redes,
se refiere a las oportunidades potenciales existentes en las redes sociales para la introducción o trans-
misión de ideas novedosas, tema clave para la innovación. El tercero, la gobernanza de decisiones,
corresponde al nivel de participación de distintos actores en el diseño de nuevas prácticas tecnológicas.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 151-158, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 151
 El enfoque de redes junto con el marco teórico presentado se utiliza para el análisis de las distintas
respuestas que los actores construyen en red para sobrevivir a situaciones negativas externas como la
crisis desatada por la enfermedad de la Pudrición del cogollo en el sector. En particular se analizan
dos casos, a partir de los cuales se evidencian distintos patrones de inclusión (reticente, participativa
y paternal).

Abstract
‘Inclusive innovation’ i.e., the incorporation of different stakeholders – including large and small produ-
cers - in innovation and learning processes is one of the greatest challenges for the oil palm sector, fur-
ther still, for agriculture in Colombia. This study introduces a theoretical and practical framework based
on three key elements that strengthen this debate. The first element is a reference to the importance of
creating partnerships and connectivity between small producers and the main organizers in social ne-
tworks aimed at achieving coordinated action. The second element: making social networks open, refers
to the potential opportunities lying within the network for introducing or transmitting novel ideas; a key
theme for innovation. The third element is governance in decision-making. This refers to the levels of
participation of the different stakeholders in designing new technological practices.

The main focus of the networks alongside the theoretical framework to be presented, is used to survi-
ve in negative, external situations such as the crisis unleashed by the bud rot disease in the sector. In
particular two cases are analyzed, from which different patterns of inclusion (reluctant, participatory
and paternal) are evident.

Introducción

El concepto de innovación inclusiva implica la in-
corporación de distintos actores – incluyendo gran-
des y pequeños productores- en procesos de inno-
vación y aprendizaje, y está basado en tres propie-
dades. La primera de ellas es la cohesión, entendida
como la importancia de la asociatividad y la conec-
tividad entre actores en redes de conocimiento. La
segunda, la apertura de redes, se refiere a las opor-
tunidades potenciales existentes en las mismas para
la introducción o transmisión de ideas novedosas,
tema clave para la innovación. La tercera, la gober-
nanza de decisiones, concerniente al nivel de parti-
cipación de distintos actores en el diseño de nuevas
prácticas tecnológicas. A la luz de esta metodología
de innovación inclusiva se ilustran dos casos de es-
tudio. En el primer caso se presentan las redes so-
ciales para productores de palma de aceite y para
productores de mango, en tanto que en el segundo
se analiza la coyuntura de los productores de palma
de aceite altamente afectados por la enfermedad de
la Pudrición del cogollo (pc) en dos zonas de Co-
lombia. Finalmente se presentan algunas reflexiones
orientadas a los roles de los distintos actores vincu-
lados a estas redes.
Propiedades de la innovación
inclusiva
1. Cohesión: acción colectiva
Una red de conocimiento cohesiva se caracteriza por
un alto nivel de conectividad entre sus actores, los
cuales están dirigidos a lograr una acción coordina-
da. Esta conectividad, por su parte, es resultado del
capital social existente entre los actores. La presencia
de valores compartidos en redes cohesivas mejora la

152 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 151-158, Tomo I, 2016
capacidad de sus actores y reduce la vulnerabilidad
de los mismos. En la Figura 1 se ilustra un ejemplo de
red que tiene altos niveles de cohesión.
En estas redes pueden haber diferentes tipos de
actores (productores, organizaciones, científicos), y
cuando hay un vínculo entre ellos, obviamente se da
una relación que se puede medir de distintas mane-
ras. Aquí se puede ver que hay una gran conectivi-
dad, gran transferencia de conocimiento que se da de
Innovación inclusiva, desarrollo de capacidades y redes sociales en clústeres emergentes • Ramírez, M.
manera fácil y fluida; el alto nivel de coherencia y el
alto capital social permiten que nuevas ideas, nuevas
tecnologías, según este mapa, puedan ser transferidas
y compartidas no solo por una empresa, sino por toda
una red de actores.
En la actualidad el tema de redes es abordado de
manera importante en discusiones relacionadas con
innovación, porque tradicionalmente la forma de
entender innovación era a través del mercado o por
Figura 1. Clúster de biotecnología
de San Diego
Fuente: Casper, S (2005), BRESE
Conference, Brunel University.
Figura 2. Afiliación: conexiones
entre científicos en Cambridge, UK.
Fuente: Casper, S (2005), BRESE
Conference, Brunel University.
153
 empresas que tienen su forma de gobernanza. Pero en
innovación esto se está haciendo cada vez más com-
plejo y la forma de gobernar se está asociando cre-
cientemente con redes.
Las redes pueden ser cohesivas o fragmentadas,
como el caso de la red de científicos en Cambridge
que se ilustra en la Figura 2. Aquí se observa una red
fragmentada cuyo problema radica en la dificultad en
la transferencia de conocimiento, pues se tiene que
pasar por una serie de etapas y de personas, lo que
cada vez genera un costo de capacitación y una pérdi-
da de conocimientos.
Por lo anterior, se espera que en redes en donde
hay innovación exista un elemento de cohesión e in-
clusividad de los actores que la conforman.
2. Apertura: proxy de innovación
Abordando la relación de la innovación con la estruc-
tura de redes de conocimiento, se tiene el concepto
de redes abiertas o redes cerradas. Las redes cerradas
son aquellas que no miran hacia fuera, que solamen-
te están insertas en sus problemas, son redes en las
cuales no hay innovación. Por el contrario, una red
abierta, entendida como aquella en la que se da la
transmisión de ideas novedosas, puede representar
una proxy de innovación. Este tipo de redes cuentan
con información menos redundante y con un mayor
grado de acceso a nuevo conocimiento.
La apertura de redes aprovecha la heterogeneidad,
crea conectividad afuera, hace que la gente piense de
una manera distinta y, por tanto, se requiere una red
abierta para que haya innovación.
Como se verá en los estudios de caso, se evalúa
la relación entre la red cohesiva y la red abierta. En
Figura 3. Enfoques “arriba-
abajo” y “abajo-arriba”.
Fuente: Presentación de M. Arriba-Abajo
Ramírez, Cartagena, XVIII
Conferencia Internacional de Economías de escala
Palma de Aceite.
Preferencias y necesidades homogéneas
(Mansouri and Rao, 2013)
Altos niveles de coordinación central
154
otras palabras, que entre información, que entre co-
nocimiento y que ese conocimiento puede ser rápi-
damente transferido, eficientemente transferido, en
una red fluida.
3. Gobernanza: planeación e
implementación de prácticas
La gobernanza de decisiones, asociada al nivel de par-
ticipación de los actores en el diseño de nuevas prác-
ticas tecnológicas, es un factor crítico en los proce-
sos de toma de decisión e implementación de dichas
prácticas. Esta propiedad tiene que ver con la manera
en que se introducen nuevas ideas, especialmente a
los productores más pequeños.
Esta implementación se puede dar desde dos enfo-
ques: el enfoque “arriba-abajo” (top-down), o el enfo-
que “abajo-arriba” (bottom-up). La Figura 3 muestra
las condiciones que suelen estar presentes en cada
uno de estos enfoques.
En el enfoque “arriba-abajo” la información es
introducida desde arriba y se cuenta con una forma
lineal, jerárquica, de distribución de las ideas nuevas,
que no son muy discutidas a nivel de la base. El en-
foque “abajo-arriba” es una forma más participativa,
una forma en la que se discuten los problemas de la
gente, especialmente con productores pequeños.
Aplicando la metodología de innovación inclusiva,
se hizo un análisis de la correlación entre las tres pro-
piedades antes explicadas, con el fin de diagnosticar
cómo diferentes redes y clúster están funcionando, si
hay elementos de inclusividad, si hay heterogeneidad,
si las redes están cerradas o abiertas, es decir, frag-
mentadas. A continuación se presentan brevemente
tres casos del trabajo que se ha hecho en este sentido,
incluyendo la palma de aceite.
Condiciones propicias para los diferentes enfoques
Abajo-Arriba
Mayor participación de actores locales en
planeación de prácticas (Sen, 1985)
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 151-158, Tomo I, 2016
Caso de estudio 1. El mango peruano y una red
de palma de aceite en Colombia
Se ilustran aquí dos clústeres, el primero corresponde a
uno del sector de aceite de palma en Colombia y el segun-
do, al del mango en el norte del Perú (Figuras 4 y 5). Para
la revisión de los casos se hicieron algunas encuestas.
Lo primero que llama la atención es que al clúster
del mango le llega mucha más información de afue-
ra, todos los servicios que se observan alrededor son
Innovación inclusiva, desarrollo de capacidades y redes sociales en clústeres emergentes • Ramírez, M.
servicios que están entregando, llegando con informa-
ción, es decir, este clúster al parecer es mucho más in-
novador que el clúster del aceite de palma.
El segundo punto que llama la atención es ver cuál es
la relación entre la apertura y la cohesión. El clúster del
mango es más cohesionado, los actores están más cohe-
sionados entre sí, pero al mismo tiempo el clúster está
más abierto, es decir, hay una relación complementaria
entre capital social, cuando los actores están más unidos,
y la demanda por conocimiento que viene de afuera.
Figura 4. Red social de productores
de aceite de palma.
Fuente: Presentación de M.
Ramírez, Cartagena,
XVIII Conferencia Internacional de
Palma de Aceite.
Figura 5. Red social de productores
de mango.
Fuente: Presentación de M.
Ramírez, Cartagena,
XVIII Conferencia Internacional de
Palma de Aceite.
155
 Y ¿por qué? Aunque estadísticamente no hay una
causalidad, es probable que lo que está ocurriendo es
que los actores se están juntando en torno a una de-
manda, se crea una demanda por servicios para resol-
ver problemas, y las autoridades, sean gremios o sea
el Estado, responden trayendo actores desde afuera.
En el caso de la palma de aceite se observa un pe-
queño clúster. Allí lo que está ocurriendo es que los
actores están fragmentados, no están hablando entre
sí, no son capaces de crear una demanda y, por tanto,
la red se cierra.
Al analizar la otra característica, la gobernanza, se
observa que en el clúster del aceite de palma hay tres ac-
tores principales; uno es la empresa extractora, otro es
un anónimo y el otro es Cenipalma. Entonces hay pocos
actores que están en esta red y que son fundamentales;
estas dos organizaciones articulan la red y, por consi-
guiente, deben tener capacidad de entender su rol en la
misma y traer el conocimiento desde afuera.
Habíamos identificado en el caso del mango que
esta parecía ser una estructura más compleja, más
innovadora, pero si dentro de este mapa le quitamos
varios servicios, incluso las organizaciones, y solo
ponemos a los productores y sus gremios, se observa
que los productores entre sí están totalmente desarti-
culados, no hay vínculos bilaterales entre ellos, y más
aún, hay una gran dependencia de los gremios, lo
cual no es de sorprender. Pero quizá lo que más llama
la atención es la relación existente entre los dos gre-
mios, pues el gremio que se dedica a la exportación y
a hacer redes afuera, con carácter comercial, no tiene
un vínculo directo con el gremio o la asociación, en
este caso, de productores pequeños. Esto crea una asi-
metría de información entre los que están pensando
en cómo crear mercados nuevos y los que están pre-
ocupados por el problema de mejorar la producción,
una asimetría que no es positiva.
Caso de estudio 2. Coyuntura: enfermedad de la
Pudrición del cogollo (PC)
El segundo caso de estudio fue llevado a cabo por
Paloma Bernal, actual estudiante de doctorado en la
Universidad de Sussex, Inglaterra. Su trabajo se basa
en el análisis de la situación de un clúster de pro-
ductores de palma de aceite en las zonas muy afec-
tadas por la PC en Colombia, antes de la crisis por
la enfermedad y después de la misma. A partir de
encuestas se hizo un diagnóstico del nivel de redun-
dancia dentro de la red, entendiendo por redundan-
cia cuando todos los actores conocen lo que cada
uno conoce, no hay conocimiento nuevo, las redes
están muy cerradas.
La Figura 6 ilustra el estado de la red en 2010, antes
de que se presentara la crisis. Allí se observa una red
muy centralizada en la empresa extractora. La mayoría
de actores comparten el mismo conocimiento y la va-
riedad de la información en el clúster es muy limitada.
Al hacer nuevamente la encuesta en 2015 se encon-
tró que la red se destruyó. En este nuevo diagnóstico
se evidencia que Cenipalma desapareció como fuen-
te importante de conocimiento, al igual que una frag-

Figura 6. Red de productores

de palma de aceite antes de la
Pudrición del cogollo (2010).
Fuente: Presentación de M.
Ramírez, Cartagena,
XVIII Conferencia Internacional
de Palma de Aceite.

156 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 151-158, Tomo I, 2016
mentación y desaparición de pequeños productores de
la red (15 productores en 2010, nueve en 2015). Otro
aspecto identificado es la inactivación de la asociación
de productores que había sido identificada como actor
en 2010.
La Tabla 1 muestra la comparación de las variables
asociadas a la red de conocimiento en los dos mo-
mentos del tiempo.
Reflexiones y conclusiones
Para el clúster de palma de aceite se pueden plantear
tres reflexiones. La primera se refiere a la extractora, a
la cual se le dificultaba hacer el proceso de transferen-
cia de conocimiento, tenía dificultades, quizá por falta
de capacitación, lo que repercutía en una fragmenta-
ción de la red. La segunda es todo lo contrario, en don-
de una empresa grande estaba muy comprometida, a
tal punto que en realidad hacía todo para los pequeños
productores. Esta empresa se encargaba de hacer los
tratamientos, la vigilancia, mientras los pequeños pro-
ductores de palma no lo hacían. El tercer caso corres-
ponde a una empresa que trabaja con asociaciones de
pequeños productores, en donde había comunicación
entre ella y los pequeños productores, formando una
parte activa en el mejoramiento de su trabajo. Estos
productores en muchos casos no solo imitaban lo que
se hacía, sino que a veces también lo desaprendían. Es-
tas reflexiones se pueden resumir así:
• Las grandes empresas no se vinculan con los peque-
ños agricultores porque no son capaces de imple-
mentar la formalización de sus actividades. –“No

Figura 7. Red de productores de

palma de aceite después de la
Pudrición del cogollo (2015).
Fuente: Presentación de M.
Ramírez, Cartagena,
XVIII Conferencia Internacional de
Palma de Aceite.

Tabla 1. Indicadores de características de la red de productores de palma de aceite, antes y después de la

Pudrición del cogollo.

Región de alta incidencia

Indicadores E1 (Antes de la PC) E1 (Después de la PC)

Cohesión (Average degree AG) 3,06 1,57

Asociatividad (No. Asociaciones) 2 1
Grado de centralización (GC) 27,68 9,92
Porcentaje de pequeños productores de un bi-componente fuerte (bi-C) 93,33 % No biocomponentes
Variedad de conocimiento externo de pequeños productores (Indegree
1,46 0,1
from outside: lo)
Nivel de redundancia (Constraint) 0,8 0,95

Fuente: Presentación de M. Ramírez, Cartagena, XVIII Conferencia Internacional sobre Palma de Aceite.

Innovación inclusiva, desarrollo de capacidades y redes sociales en clústeres emergentes • Ramírez, M. 157
 nos sentimos responsables de su supervivencia”-.La
fragmentación es más alta y la red es desarticulada.
• Las grandes empresas intervienen para ayudar
en la adopción de nuevas técnicas; por ejemplo,
ofreciendo préstamos puente. Son relaciones de
arriba hacia abajo basadas en relaciones pater-
nales, como se muestra en el diagrama de redes
racimo; hay rápida y eficiente implementación de
políticas centralizadas.
• Junto a las grandes empresas existen asociaciones
de pequeños productores que toman una parte ac-
tiva en la implementación de nuevas prácticas. No
solo imitan; por ejemplo, se ocupan de diversifi-
car, del riesgo y de la vulnerabilidad.
En el caso del mango, se encontraron dos reflexio-
nes a través de las entrevistas. En realidad, pese a que
el clúster mostraba un gran trabajo en conjunto, so-
lamente había dos comunidades. Estas trabajaban de
manera muy distinta, los productores de apem, que
eran los exportadores, para quienes la red era esencial-
mente un tema de comercialización, un tema de ob-
tener licencias para exportación, para financiamiento
y encontrar mercado; ellos no necesitaban quizás un
trabajo de base, o compartir con otros ese trabajo tan
detallado. Por el contrario, los productores asociados
en promango tenían una red distinta; para ellos era
compartir tecnología, comprar tecnología en común,
desarrollar estrategias, resolver problemas de mejora
de la tecnología, con ingresos muy bajos. Entonces las
redes también tienen valor, trabajan de manera distinta
y hay que entender este proceso.
Como conclusión, la metodología permite ver dis-
tintos patrones de inclusión. La inclusión reticente,
158
cuando a los actores centrales les cuesta articular la
red y donde la barrera más significativa para la inclu-
sión es la fragmentación. La inclusión participativa,
en donde las redes están abiertas y los actores mar-
ginados tienen capacidad de demanda; sin embargo,
deben distinguirse entre aquellas que son un vehícu-
lo para el aprendizaje conjunto y la construcción de
valores comunes, y aquellas cuyos miembros ven la
red como un medio para acceder a recursos. El ter-
cer caso, que parece bastante común, es una forma
de inclusión paternal, en donde las grandes empresas
actúan como “ovejeros”, llevando a los productores lo
que necesitan; esto puede reflejar institucionalización
de un sistema eficiente para la transferencia de pro-
tocolos, pero también puede institucionalizar la de-
pendencia y no responder bien a las necesidades de
productores pequeños.
Es importante resaltar que las empresas grandes
pueden actuar como “ovejeros”, dirigiendo a peque-
ños hacia ciertas acciones. Por otra parte, la existen-
cia de asociatividad de productores pequeños activa
la búsqueda de nuevos proyectos y crea un camino
para abrir la red. El “espacio” entre distintos grupos
debe ser poblado por intermediarios relevantes, es
decir, la virtud de una red cohesiva no es la conecti-
vidad, sino lograr construir un puente entre distin-
tos tipos de organizaciones.
Finalmente, es importante implementar y crear
estos espacios para poder crecer. En resumen, lo más
importante de este proceso es que las redes sean no
solamente un espacio para conectar a la gente, sino
que esencialmente sean una forma de crear puentes
con conocimientos distintos, conocimientos nuevos,
pues esto es esencialmente la innovación.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 151-158, Tomo I, 2016
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contenido

sesión 2
mejoramiento
genético

Biotecnología y selección de la palma de aceite:

la Palma Dorada del futuro*
Biotechnology and Breeding of Oil Palm: the Golden
Palm of the Future

autores: Billotte, N1; Cuellar, T.1; Espeout-Fois, S.1; Rivallan, R.1; Ilbert, P.1;
Droc, G.1; Bocs, S.1; Flori, A.1; Verdeil, J.L.1; Montoya, C.2; Ayala-Diaz, I.M.2; Pardo
Vargas, A.2; Zambrano, J.3; Syahputra, I.4; Omore, A.5; Escobar, G.A.6; Nouy, B.7;
Amblard, P.7; Romero, M.2; Ritter, E.8; Lanaud, C.1
citación: Billotte, N., Cuellar, T., Espeout-Fois, S., Rivallan, R., Ilbert, P., Droc,
G., Bocs, S., … & Lanaud, C. (2016). Biotecnología y selección de la palma de
aceite: la Palma Dorada del futuro. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 159-174.
palabras clave: biotecnología, manipulación genética, productividad.
keywords: biotechnology, genetic manipulation, yield.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Strong Tower Consulting.
1
CIRAD, France; 2 Cenipalma, Colombia; 3 Hacienda La Cabaña, Colombia; 4 PT
Socfindo, Indonesia; 5 INRAB, Benin; 6 Indupalma, Colombia; 7 PalmElit, France; Norbert Billotte
8
Neiker-Technalia, Spain. Líder de Equipo, Genoma y Selección,
CIRAD, Team Leader, Genome and
Breeding, CIRAD
billotte@cirad.fr

Resumen
Los marcadores de ADN, la secuenciación con sistemas NGS, la manipulación genética y las tecno-
logías de cultivo in vitro, combinadas con la caracterización fenotípica de alta tecnología, ponen al
alcance de los cultivadores las variedades que desearían cultivar sin que hubieran podido imaginar
siquiera que fuese posible sembrarlas. Se espera que las variedades de palma de aceite sufran muchos
cambios desde el día de hoy hasta el año 2050, por medio de una selección biotecnológica de las espe-
cies E. guineensis y E. oleifera.

La productividad de la palma de aceite está ligada estrechamente a su potencial fisiológico. El deter-

minismo genético completamente dilucidado de la morfología de la fertilidad del fruto permite que
existan nuevas variedades que solo contengan pulpa, tales como las pisifera fértiles y tenera parteno-
cárpicos. El bajo crecimiento del tallo y la voluminosidad reducida logran que las palmas se cultiven

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 159-174, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 159
 en menos hectáreas de tierra, lo cual genera una cosecha menos costosa. La reducción de la frecuencia
de cosecha (tan baja como una vez al mes) será posible gracias al no desprendimiento de frutos. La
baja actividad de lipasa en la pulpa de los frutos maduros garantizará la producción de un aceite de
palma sin ácidos libres significativos en los racimos entregados a las plantas extractoras, lo cual ase-
gurará la producción en campo sin incurrir en pérdidas económicas. Las variedades con hasta 90 %
de ácido oleico entrarán al mercado y este novedoso aceite de palma “aceitunado” se venderá a precios
marcadamente más competitivos para la mesa de la mayoría de las personas del mundo, destronando
así al mercado privilegiado del aceite de oliva mediterráneo, de mayor costo. El imperio del cultivo
de palma de aceite ha expandido sus territorios a lo largo de América del Sur gracias a las variedades
interespecíficas resistentes a la enfermedad de la Pudrición del cogollo, a la vez que se preservan con-
siderablemente la mayoría de los bosques naturales al convertir los grandes pastizales en palmares.

Abstract

The DNA markers, NGS-based sequencing, genetic manipulation and in vitro culture technologies
combined to latest High-Tech phenotypic characterization put within the reach of growers varieties
they want to cultivate without having ever dare to imagine being able to plant. Oil palm varieties are
expected to go through major changes from now to 2050, by a biotech-based breeding of both species
E. guineensis and E. oleifera. The productivity in palm oil largely approaches the plant physiological
potential. The fully elucidated genetic determinism of the fruit morphology and fertility allows novel
varieties with only pulp such as fertile pisifera or parthenocarpic tenera varieties. The low stem grow-
th and reduced bulkiness make palm trees orchards leading to a less costly harvest. The reduced har-
vest frequency (as low as once a month) will be possible thanks to non-shedding fruits. A low lipase
activity in the pulp of mature fruits will ensure a palm oil without significant free acids for bunches
rendered to the factory, securing the field production without economic loss. Varieties with up to
90 % oleic acid will be released and this novel tropical “olive-like” palm oil will be sold at far better
price on the table of most people in the world, dethroning the privileged market of the more expen-
sive Mediterranean olive oil. The empire of oil palm cultivation has expanded its territories all over
South America thanks to interspecific varieties resistant to the bud rot disease, while preserving most
of natural forests notably by judiciously converting large pastures into palm groves.

Introducción

El consumo de aceites vegetales se divide en dos apli-
caciones principales: la industria alimenticia (con
más de 80 % del mercado) y la industria química,
para la formulación de pinturas, tintas, resinas, bar-
nices, plastificantes, producción de biocombustibles,
etc. (Rosillo-Calle et al., 2009). La palma de aceite
es el cultivo oleaginoso más productivo del mundo,
produciendo un promedio de 4 toneladas de aceite
de palma junto con 0,5 t de aceite de palmiste por
hectárea por año (Oil World, 2015). Está clasificada
como la primera en la contribución a la producción
mundial de aceite vegetal, seguida por el fríjol de soya
y la colza. Corley (2009) estimó que la demanda de
aceite de palma para el año 2050 estará muy proba-
blemente entre 120 y 156 t, en comparación con las
45 t de 2009 (faostat, 2011), debido al crecimiento
de la población humana que podría llegar a cerca de
9 mil millones según las actuales proyecciones de cre-
cimiento (Figura 1).
En promedio, la producción global de aceite de
palma es diez veces mayor que la de fríjol soya y cua-
tro veces la de la colza. Los cultivos activos logran
fácilmente hasta 6 t/ha en miles de hectáreas, y en
algunos cultivos incluso superan 8 t/ha. De esta ma-
nera, para satisfacer la creciente demanda de aceite se
necesita mucho menos superficie dedicada a la palma

160 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 159-174, Tomo I, 2016
 16000
15000
156 t
150 Figura 1. Estimados de población
14000
mundial desde el año 1800 hasta
2100, con base en las proyecciones

Demanda mundial de aceite de palma (t por año)

13000
“alta”, “media” y “baja” de las
12000 120 t +
Naciones Unidas (son las curvas en
11000 2050
escala de grises), y los estimados
Millones de personas

10000 100
históricos de la Oficina de Censos
9000
de EE. UU. (curva en negro), y en la
8000
escala de la derecha los estimados
7000 de la demanda mundial de aceite
6000 de palma en 2009 y 2050, según
5000 50 Corley (2009).
+ 45 t
4000
2009
3000
2000
1000
0 0
1800

1820

1840

1860

1880

1900

1920

1940

1960

1980

2000

2020

2040

2060

2080

2100
Estimado UN Alto UN Medio UN Bajo Actual

de aceite que para cualquier otro cultivo, a la vez que de palma no se limita a la demanda y a los mejores pre-
los desafíos más patentes relacionados con la indus- cios competitivos, sino también a las calidades del acei-
tria del aceite de palma son los relativos a reducir la te de palma crudo (cpo, por su sigla en inglés) versus
deforestación y a la presión que se hace sobre la bio- otros aceites vegetales. Para incrementar el mercado
diversidad natural, y adoptar prácticas agrícolas con del aceite de palma es crucial ampliar el panorama de
un bajo impacto ambiental (icop, 2014). Esto signifi- cualidades del cpo con respecto a los requerimientos
ca intensificar la productividad de la palma de aceite del consumo humano o el uso para biocombustibles.
mediante sistemas operativos sostenibles respetuosos Cirad-PalmElit y sus aliados han diseñado un plan
del medio ambiente, también dentro del contexto de innovador de investigación integrada desde el año
los cambios climáticos en el planeta. 2015 hasta 2050, con el fin de acelerar el mejoramiento
Además de esto, la rentabilidad de los cultivos de genético de la palma de aceite y su desarrollo mundial.
palma de aceite depende fuertemente de los costos Sus principales objetivos generales para los cultivado-
operativos como el costo de la mano de obra, el de los res son los que se mencionaron en el apartado anterior.
insumos, especialmente de los fertilizantes (cerca de En nuestra presentación nos enfocamos en la manera
60 % de todos los costos operativos), y las pérdidas como los resultados de dicho plan tendrán impacto so-
pre y post cosecha debido a causas naturales (enfer- bre el modo de cultivar la palma de aceite. Ofrecemos
medades, plagas, sequías) o técnicas. Una de las priori- ejemplos de cómo las biotecnologías y el mejoramiento
dades de los cultivadores es reducir el costo de la mano genético, apoyado por los marcadores de adn, pueden
de obra, aunque el manejo de los cultivos esté siendo impulsar la productividad y la rentabilidad de la palma
condenado a tener una mecanización pobre. Otra de de aceite y el desarrollo sostenible.
las prioridades es reducir los costos que representan los Se espera que las variedades de palma de aceite su-
fertilizantes manteniendo los mismos niveles de pro- fran grandes cambios desde este momento hasta 2050,
ductividad. Es obvio que se han de explotar varieda- mediante el mejoramiento genético con base en la bio-
des de palma de aceite más resistentes a las principales tecnología sobre ambas especies Elaeis. Los marcado-
enfermedades y plagas, al igual que a las variaciones res de adn, los métodos basados en la Secuenciación
climáticas. Por supuesto, el mercado mundial del aceite de Nueva Generación (ngs, por su sigla en inglés), la

Biotecnología y selección de la palma de aceite: la Palma Dorada del futuro • Billote, N., et al. 161
 manipulación genética y las tecnologías de cultivo in
vitro combinadas con los últimos avances en alta tec-
nología de caracterización fenotípica, ponen al alcance
de los cultivadores variedades que ni siquiera hubieran
imaginado poder cultivar. Singh et al. (2013) lograron
un paso importante en dicha dirección mediante la se-
cuenciación del adn de los cromosomas de la palma
de aceite y con el descubrimiento de la codificación del
gen SHELL para el tipo de fruto de la palma de acei-
te. Aún queda camino por recorrer y mucho trabajo
a partir del adn y el genoma hasta lograr variedades
superiores totalmente novedosas.
La palma de aceite y su pariente
silvestre, E. oleifera: una
combinación clave
La palma de aceite es una planta perenne y alógama ori-
ginaria de África (Hartley, 1988). Su genoma diploide
(2n = 32) consta de 16 pares de cromosomas (Schwendi-
man et al., 1982). Las condiciones naturales del suelo y el
clima para la palma de aceite son las de las regiones hú-
medas tropicales de latitudes bajas, entre 0 y 300 msnm.
La palma de aceite es de gran plasticidad y adaptación,
lo que explica el crecimiento significativo en condicio-
nes agrícolas relativamente diversas y hasta 1.000 m de
altitud. Al inicio del segundo año después de plantada
y continuando durante su ciclo de vida, la palma culti-
vada produce inflorescencias unisexuales masculinas o
femeninas en ciclos sucesivos, que emergen en la axila
de cada hoja. La parte aérea de la planta adulta consta
de un estípite de crecimiento relativamente rápido. Las
inflorescencias femeninas crecen en racimos que poseen
entre 200 y 4.000 frutos. El fruto de la palma de acei-
te es una drupa que se produce en grandes cantidades
dentro de racimos compactos, y contiene dos aceites ve-
getales muy diferentes: el aceite de palma (del mesocar-
pio) saturado aproximadamente en 50 % y compuesto
principalmente de ácido palmítico (C16:0) y ácido oleico
(C18:1), y el aceite de palmiste, saturado en más de 80 % y
compuesto principalmente de ácido láurico (C12:0). Los
cultivos de palma de aceite tienen una vida económica
útil aproximadamente de 25 a 30 años.
Existen tres tipos de frutos en la palma de aceite,
dependiendo del espesor del cuesco, que es controlado
por un gen principal codominante llamado Sh (por la
162
palabra Shell en inglés) (Beirnaert and Vanderweyen,
1941), que quiere decir cuesco, ya sea grueso (dura),
sin cuesco (pisifera) para las raras flores femeninas
fértiles, o con cuesco delgado (tenera) que proviene
del cruce de los otros dos tipos. El tipo tenera es el de
las variedades comerciales, ya que asegura una mayor
productividad de aceite de palma. Singh et al. (2013)
identificaron el gen Sh como un homólogo del gen
SEEDSTICK (stk), un gen box mads que controla la
identidad del óvulo y el desarrollo de la semilla en
la Arabidopsis thaliana. Ellos abrieron el camino para
predecir el tipo dura, pisifera o tenera de una palma
de aceite mediante el simple análisis del adn de esta.
Las variedades tenera, naturalmente más produc-
tivas en la palma de aceite y derivadas de cruces de
dura x pisifera o de dura x tenera, usualmente son
mejoradas mediante selección recurrente y recíproca,
como la realizada por el Institut des Huiles et des Olé-
gineux (irho) (Meunier y Gascon, 1972) y luego por
Cirad-PalmElit. Un ciclo completo de mejoramiento
genético demora entre 15 y 20 años, con un avance
genético para la producción de aceite de palma alre-
dedor de 1 % por año.
Solo existen dos especies en el género Elaeis: la
palma de aceite cultivada E. guineensis Jacq. y la E.
oleifera hbk, Cortés de América del Sur (Hartley,
1988) (Figura 2).
La diversidad genética de E. guineensis es baja
dentro del género Elaeis y mucho menor que la de E.
oleifera, que está establecida en cuatro grandes gru-
pos geográficos: Brasil, América Central, Perú, Su-
rinam y Guyana Francesa (Barcelos et al., 2002). La
E. oleifera tiene muchos carácteres deseables, si bien
su producción de aceite de palma es muy pobre, prin-
cipalmente gracias al porcentaje bajo de pulpa (todas
las palmas E. oleifera son del tipo dura) y con bajo
contenido de aceite en la pulpa. Mientras que el aceite
de palma de variedades E. guineensis es rico en ácidos
grasos saturados, principalmente el ácido palmítico
(C16:0), las especies silvestres de E. oleifera producen
un equivalente tropical del aceite de oliva en la pul-
pa de sus frutos, principalmente rico en ácido oleico
(C18:1). La E. oleifera presenta resistencia genética a
la enfermedad de la Pudrición del cogollo, la cual ha
sido endémica en América del Sur y letal para cual-
quier palma de aceite en las áreas afectadas. El creci-
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 159-174, Tomo I, 2016
 Figura 2. Palma de aceite africana
cultivada E. guineensis Jacq. y E.
oleifera de Sudamérica.

E. oleifera de Sudamérica

• Inter fértil con E. guineensis

Palma de aceite E. guineensis de África
• con crecimiento muy lento del estípite
• resistente a la enfermedad de la Pudrición del
cogollo
• alta proporción de ácido oleíco en su aceite de
palma
• no desprendimiento de los frutos
• casi sin actividad de lipasa en la pulpa de frutos
maduros (sin degradación del aceite de palma
en ácidos grasos libres)
• alta tasa de frutos partenocárpicos en algunos
orígenes geográficos
• pero tiene mala productividad debido a una
baja proporción de pulpa en sus frutos y un bajo
porcentaje de aceite en la pulpa

miento lento del estípite, el no desprendimiento de
frutos y una baja actividad de la lipasa en la pulpa de
los frutos maduros, son otros carácteres agronómicos
de interés para los cultivadores.
E. oleifera es interfértil con la palma de aceite. Ci-
rad-PalmElit emplea el alto grado de diversidad gené-
tica entre las palmas E. oleifera para el desarrollo de
híbridos interespecíficos, y mediante estrategias de re-
trocruzamiento asistidas con marcadores de adn para
la creación de variedades novedosas de palma de aceite
Elite que posean los genes más favorables de E. oleifera.
Hoja de ruta de un plan de
investigación integrada para el
mejoramiento y el desarrollo
genético
El núcleo del mejoramiento genético de la palma
de aceite está sujeto a dos tendencias muy fuertes
que buscan:
• Integrar las tecnologías de marcadores de adn
dentro de la clásica selección recurrente recíproca.
• Desarrollar una Selección Asistida por Marcado-
res (mas, por su sigla en inglés) versus la introgre-
sión de genes de la especie silvestre suramericana
E. oleifera, de interés a nivel agronómico.
• Tomar en cuenta las interacciones Genotipo x
Ambiente que incluyan prácticas agrícolas (inte-
racciones genotipo x fertilización).
• Abrir más prospectos para una intensificación
ecológica del cultivo de la palma de aceite.
En esta publicación no se describen las herramien-
tas y métodos biotecnológicos de nuestro plan, que
está diseñado a 35 años (hasta 2050) que correspon-
den aproximadamente a dos ciclos convencionales de
mejoramiento genético. Hay dos líneas principales: de
una parte, el mejoramiento genético asistido por bio-
tecnologías y, de otro lado, la revelación del potencial
genético mediante investigaciones agronómicas, tam-
bién asistidas por las biotecnologías. Algunas rutas úti-
les se encuentran dentro del siguiente concepto.
La idea consiste en desarrollar una “revolución”
experimental y de selección, preparada de antemano,
teniendo en cuenta los cambios climáticos, mediante

Biotecnología y selección de la palma de aceite: la Palma Dorada del futuro • Billote, N., et al. 163
 la inclusión de estudios de Genotipo x Ambiente (GxE,
por sus siglas en inglés) para predecir si los materiales
genéticos pueden mantener su potencial de producti-
vidad. Por ejemplo, ¿cuáles materiales genéticos pro-
ductivos estarán adaptados a 600 ppm de CO2 en el
año 2100? También, un desafío importante será el de
plantar palmas de aceite en áreas que dejarán de ser las
más favorables, en paralelo con la preservación de re-
giones ecológicas biodiversas, lo que significa aceptar
plantar en áreas menos favorables. En el enfoque GxE
se incluyen los estudios de la interacción genotipo x
nutrición mineral & agua (GxMN&W, sigla en inglés).
La resistencia genética a las enfermedades es otro
tema de investigación muy problemático, al mismo
tiempo que la preservación de la diversidad de los
materiales de las plantas. Esta es una aplicación estra-
tégica separada. Actualmente se da una respuesta con
respecto a la enfermedad Ganoderma o la enferme-
dad de la marchitez mediante el tamizaje de los ma-
teriales genéticos (a través de pruebas de inoculación
de la enfermedad en el vivero), que es una solución a
corto plazo. Un desafío clave para Suramérica es crear
variedades de alta productividad y además resistentes
a la Pudrición del cogollo.
Los desarrolladores de palma deben proyectarse
sobre las implicaciones que se deben considerar sobre
la MAS en el desarrollo, operación e interpretación
de redes experimentales para las pruebas genéticas. El
diseño de ensayos genéticos está adaptado de manera
que evolucione en estrategias y conceptos, para gene-
rar aplicaciones tangibles de mejoramiento genético.
El largo paso del tiempo y la alta inercia relacionada
con la durabilidad de la planta se deben integrar a la
reflexión y al programa científico a largo plazo.
Los criterios de selección incluyen el concepto de
ideotipos y, por tanto, llevan al diseño y construc-
ción de estos ideotipos. En agronomía un ideotipo
es una variedad de cosecha seleccionada por su ca-
pacidad de aprovechar un cierto entorno en forma
óptima. Otra definición es la de “una planta nueva
que en condiciones de cultivo utiliza mejor los re-
cursos del entorno que los tipos actualmente cono-
cidos y soporta mejor los cambios a fin de probar ser
un mejor insumo”. De esta manera, existen varios
ideotipos para la misma especie, de acuerdo con los
diferentes tipos de entornos.
164
Algunos criterios son independientes del entorno,
tales como algunas características de los frutos.
En dicho enfoque se sugieren dos reglas: 1) olvidar
la palma de aceite como es actualmente y cómo puede
afectar al ideotipo imaginado; 2) al conocer el ideoti-
po deseable, ¿cómo crearlo con la especie E. guineen-
sis combinándola o no con E. oleifera?
El actual ideotipo estándar (sin cambio, excepto
por el enriquecimiento del genoma para lograr resis-
tencia genética a la enfermedad) está evolucionando
en un cuadro completo de ideotipos deseables:
• Ideotipo por un entorno específico, para entornos
muy contrastantes.
• Ideotipo en una condición muy favorable, enfren-
tando el problema de feminidad haciendo plantas
dioicas (que producen solamente inflorescencias
femeninas y racimos) y creando polinizadores hí-
permasculinos interplantados con las palmas pro-
ductoras híperfemeninas.
La principal limitación es la duración del ciclo de
mejoramiento genético y el desafío de la mas será
superado, si es posible acortar los ciclos de mejora-
miento, particularmente en los programas de intro-
gresión interespecífica.
Por ejemplo, en la elección de genotipos que se
buscan en un vivero, un tamizaje de marcadores de
ADN de un gran número de plántulas, en menos
de un año, permite dos ciclos sucesivos de mas (sin
prueba de campo) adicionados a un único ciclo de se-
lección fenotípica para confirmación en el campo. En
promedio, se puede lograr un ciclo de mejoramiento
de ocho años en vez de los 20 años, a partir de un gran
número de plántulas, mediante una selección rasgo a
rasgo para recomposición o mediante la selección de
rasgos múltiples.
Líneas de mejoramiento genético
usando marcadores moleculares
Los marcadores de adn hacen posible enriquecer la
selección fenotípica directa de rasgos importantes
mediante la selección indirecta, con base en los mar-
cadores vinculados estrechamente a los genes de in-
terés (Gallais, 1996). El mérito principal es identificar
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 159-174, Tomo I, 2016
la(s) parte(s) cromosomal(es) que portan los genes ramiento, es decir, de 1,5 % por año en comparación
responsables de un rasgo cuantitativo (denominados con 1 % (Figura 3).
Loci de Caracteres Cuantitativos o qtl, por su sigla
En los programas de introgresión interespecífica se
en inglés), relacionando la variación en el adn mo-
identifican los genes de E. oleifera que son de interés
lecular (polimorfismo) de los marcadores con la va-
agronómico y el adn es etiquetado en accesiones natu-
riación fenotípica de ese carácter (Charcosset, 1996).
rales de esta especie y en retrocruces interespecíficos,
Las secuencias de adn de los cromosomas de la pal-
combinando información molecular (tal como el adn)
ma de aceite que Singh et al. (2013) hicieron disponi-
y fenotípica. Un retrocruce asistido por marcadores (o
bles, permiten identificar con mayor facilidad cuáles
mabc, por su sigla en inglés) tal como lo describen
genes son responsables de qtls y luego diseñar mar-
Gallais et al. (2000) es uno de los principales métodos
cadores de adn intragenes que ayuden a predecir los
para el mejoramiento genético que hace uso de E. olei-
valores genéticos de las palmas de aceite y acelerar su
fera. Los resultados esperados del método mabc están
selección. Según Gallais et al. (2000), dicha mas en la
disponibles, tras el trabajo teórico de varios equipos,
palma de aceite puede ser realizada utilizando el mé-
incluyendo los de Hospital y Charcosset (1997). El
todo de construcción recurrente de genotipo asistida
método mabc consistirá en una introgresión rápida
por marcadores (margb).
y simultánea de genes principales o alelos favorables
Otro método (más reciente) que puede optimi- de qtls/genes menores provenientes de E. oleifera en
zar los esquemas de mejoramiento genético es la se- genotipos de palma de aceite de Elite. También se apli-
lección genómica (sg), la cual utiliza un número de cará un método de sg interespecífico.
marcadores de adn muy grande, a la vez que no re-
quiere un conocimiento particular de los genes mis- Demos ahora un vistazo a las variedades futuras
mos (Meuwissen et al., 2001). La selección genómi- de la palma de aceite.
ca se basa en un cubrimiento amplio de marcadores
genómicos a fin de producir valores estimados de Las palmas de oro del futuro
mejoramiento genómico (gebv) a partir de un aná-
lisis completo de todos los marcadores. Mediante Productividad de la palma de aceite y
la simulación se ha comprobado que ese método es estabilidad de las variedades Tenera clásicas
preciso en la palma de aceite (Cros et al., 2015), con
ciclos reducidos y un avance genético incrementado El potencial fisiológico en la productividad de la pal-
en 50 %, comparado con el método actual de mejo- ma de aceite se ha estimado en 18 toneladas de aceite

Figura 3. Selección recurrente

RRS RRGS recíproca (RRS, izquierda) versus
A B A B
selección genómica recurrente
recíproca (GS, derecha) (Cros et
al., 2015).
Nota. Los bloques sólidos
representan individuos con prueba
de progenie (RRS) o con prueba
de progenie y genotipo (SG). Los
bloques punteados representan
individuos genotipados (carácteres
genéticos). Los bloques en blanco
40 años representan individuos genotipados,
pero sin prueba de progenie. Las
24 años
Selección genómica líneas punteadas: aplicación de GS.
Se espera un avance genético global
Individuos a los que se hizo prueba de progenie y genotipo
de 1,5 % por año al aplicar la GS en la
Individuos a los que se determinó genotipo palma de aceite.

Biotecnología y selección de la palma de aceite: la Palma Dorada del futuro • Billote, N., et al. 165
 de palma/ha/año (Corley y Tinker, 2003). Actualmen-
te, las mejores variedades examinadas en los estudios
genéticos del Cirad y sus aliados ya están produciendo
cerca de 10 toneladas de aceite de palma/ha/año. Una
selección genómica recurrente recíproca (sg) de E.
guineensis usando marcadores de adn acelerará el in-
cremento de la productividad de las variedades clásicas
tenera de la palma de aceite (Cros et al., 2015). Al igual
que lo descrito por estos autores, la selección recurren-
te recíproca convencional (rrs) requiere cerca de 20
años debido a la preselección antes de efectuar prue-
bas de progenie sobre los carácteres más heredables,
pruebas de progenie y recombinación entre individuos
seleccionados. Mediante la sg, son suficientes 24 años
para completar dos ciclos, dentro de los cuales se uti-
lizan 18 años del primer ciclo para calibrar el modelo
sg (ya no se requiere la preselección sobre carácteres
heredables) y seis años para completar el segundo ciclo
solamente con selección sobre los marcadores (Figu-
ra 3). Para la sg, con la secuenciación de la siguiente
generación o con un chip de marcadores de Polimor-
fismo Nucleótido Único (snp), por ejemplo, se podría
hacer selección entre individuos a los que no se haya
hecho la prueba de progenie y que pertenezcan ya sea
a la misma generación que los individuos de entrena-
miento o a la(s) siguiente(s) generación(es).
La productividad en el aceite de palma se aproxi-
mará al potencial fisiológico de la planta en 2050, muy
probablemente con 14 t/ha/año, mediante el mejora-
miento de las características clave de productividad
como el número de racimos/palma/año, la cantidad
de frutos, el porcentaje de frutos en el racimo, el por-
centaje de la pulpa en el fruto, el porcentaje de aceite
de palma en el fruto, etc., en conjunto con grandes
estudios fisiológicos en los niveles de células, órganos
y las plantas completas principalmente sobre la efi-
ciencia de la fotosíntesis y la capacidad de las raíces
para adsorber nutrientes, minerales y agua.
Una consecuencia para los palmicultores también
será que el lanzamiento de variedades que son me-
jores productoras se adicionará cada ocho años en
promedio. En este sentido, la transferencia del avance
genético a los palmicultores será más rápida (en apro-
ximadamente 2,5 veces) por una mayor frecuencia de
nuevas variedades comerciales, lo que les permitirá
optimizar sus programas de siembra o renovación
con materiales más productivos.
166
La estabilidad de la productividad incluye la re-
sistencia genética a las enfermedades Ganoderma
o marchitez. El método de sg antes mencionado se
aplicará igualmente a estos últimos carácteres, lo
cual hará mucho más segura la productividad de
aceite de palma con respecto a estas enfermedades
en Asia y África.
“Saltos de selección” por nuevos tipos de
materiales genéticos de palma de aceite
Un mejoramiento genético continuo y de mayor ren-
dimiento está en camino para las palmas de aceite de
la variedad tenera clásica. Además, se lograrán varios
“saltos de selección” por la concepción de materiales
genéticos completamente novedosos (que no existen
aún) en el género Elaeis.
Una palma de aceite “dioica”: palmas
de aceite súper femeninas y súper
masculinas en los cultivos
La palma de aceite es monoica (también calificada
como “temporalmente dioica”) ya que produce inflo-
rescencias masculinas y femeninas en ciclos alternos
en la misma planta. Los mejoradores trabajan para
incrementar la proporción de sexos, definida como el
número de inflorescencias femeninas relativas al nú-
mero total de inflorescencias. Para los cultivadores de
palma de aceite, una palma ideal produciría solamen-
te inflorescencias femeninas, en tanto sea posible. Se
sabe que la proporción sexual en la palma de aceite
está influenciada por factores genéticos y ambienta-
les. Adam et al. (2011) revisaron el estado actual del
conocimiento sobre el proceso de determinación del
sexo en la palma de aceite (Figura 4a). Ellos afirmaron
que nuevas técnicas basadas en genómica combina-
das con estudios de campo y estudios bioquímicos y
moleculares con base citológica deberían aportar una
nueva forma de entender los procesos complejos que
rigen la determinación de sexo en la palma de aceite
dentro de un futuro previsible. Afirman también que
el hecho de que la proporción sexual de la palma de
aceite pueda ser mejorada o reducida dependiendo
del genotipo, eleva la posibilidad de identificar los ge-
nes determinantes del sexo.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 159-174, Tomo I, 2016
 a. Figura 4. Bioingeniería para una
Fotosíntesis
dioicidad en la palma de aceite
y sistema de siembra de nuevas
plantaciones de palma de aceite.
a. Posibles modos de interacción
Disponibilidad de agua
de los factores que afectan el sexo
Glucosa
Almidón
de la inflorescencia y los objetivos
de los estudios moleculares en la
palma de aceite, según Adam et al.
(2011). Nota: Como objetivos de
investigaciones de biotecnología e
Estado de hormona
ingeniería genética para crear una
E. guineensis con dioicidad.
Factores genéticos b. Sistema de plantación en futuras
parcelas de palmas “dioicas”. Nota:
Arriba, las palmas comerciales
Inflorescencia femenina actuales producen principalmente
Inflorescencia
racimos en proporción (ilustrados
indeterminada en gris con parte de inflorescencias
Inflorescencia masculina masculinas (ilustradas en cuarto
negro) que polinizan los racimos.
Abajo, palmas dioicas súper
femeninas que solamente producen
inflorescencias femeninas
b. desarrolladas en racimos (círculos
totalmente grises). Su polinización
es asegurada por unas pocas
palmas dioicas súper masculinas
intercaladas por hectárea.

Por ejemplo, se reveló que un gen putativo de al-
do-ceto reductasa (denominado EgAKR1) es un can-
didato promisorio para la determinación de la pro-
porción sexual en la palma de aceite, el cual puede
contribuir a la proporción sexual mediante la capa-
cidad de respuesta al estrés (Somyong et al., 2014).
La ingeniería genética en busca de una palma dioica
también podría aprovechar la existencia del sistema
cromosómico homomórfico XY que controla la dioi-
cidad en la palma de dátil (Cherif et al., 2013). Los fu-
turos cultivos de palma de aceite serán de palmas sú-
per femeninas, interplantadas por unas pocas palmas
súper masculinas para su polinización (Figura 4b.)
Frutos completamente pulposos en la
palma de aceite
Haber aclarado el determinismo genético de la mor-
fología y la fertilidad del fruto permitirá crear nuevas
variedades en las que sus frutos solo tengan pulpa
(aunque hay que tener en cuenta las limitaciones en
fábrica). En este punto el publicitado gen SHELL (Sh)
(Singh et al., 2013) es un paso clave. Los frutos com-
pletamente pulposos representarán entre 10 y 20 %
más de pulpa aceitosa, en comparación con los frutos
de las actuales palmas comerciales tenera, lo que sig-
nifica igualmente un incremento drástico en la pro-

Biotecnología y selección de la palma de aceite: la Palma Dorada del futuro • Billote, N., et al. 167
 ductividad del aceite de palma. Se están investigan-
do dos formas utilizando biotecnologías para tener
solamente pulpa en los frutos de la palma de aceite:
palmas pisifera totalmente fértiles y palmas comple-
tamente partenocárpicas (Figura 5).
Las palmas pisifera producen cerca de 90 % de
pulpa en sus frutos sin cuesco, pero generalmente
son estériles en lo femenino. En la naturaleza existen
palmas pisifera completamente fértiles, aunque son
muy raras. Los estudios actuales están identificando
y clonando el gen principal que controla la fertilidad
de las flores femeninas en la palma de aceite, del cual
se sabe que está estrechamente ligado al gen Sh. Sin
duda se crearán variedades pisifera comerciales com-
pletamente fértiles y altamente productivas mediante
la introgresión intraespecífica o ingeniería genética,
usando el alelo del gen favorable que confiere la fer-
tilidad del fruto. Se obtendrá una ganancia cercana
a 10 % de la productividad de aceite de palma en las
variedades pisifera fértiles, en comparación con la de
las variedades tenera clásicas (Figura 5a).
pero las palmas presentan una tasa parcial variable
de frutos partenocárpicos dentro de cada especie, de-
pendiendo del origen genético. Aquí se requieren los
estudios moleculares y fisiológicos combinados para
crear variedades totalmente partenocárpicas. Sin em-
bargo, las ventajas económicas son tan importantes
y las posibilidades en biotecnología virtualmente tan
ilimitadas, que el trabajo en esa característica puede
ser indudablemente exitoso.
Las variedades totalmente pulposas significan más
aceite de palma a expensas del aceite de palmiste. El
precio del aceite de palmiste usualmente es mayor
que el del aceite de palma; por ejemplo, 194 dólares
por tonelada métrica en promedio en los últimos cua-
tro años (Fuente: Banco Mundial, 2015). También,
las fábricas de aceite de palma utilizan el cuesco de
los frutos en el proceso de extracción del aceite. Los
frutos sin cuesco requerirán una adaptación en los
métodos de extracción de la palma de aceite en las
fábricas. Se deberán considerar las limitaciones en los
planes de negocio.

La partenocarpia de todos los frutos de un raci-

mo, en todos los racimos de una palma, es difícil de
conseguir ya que se encuentra bajo un determinismo
muy complejo, y los frutos partenocárpicos jóvenes
son en parte sometidos a aborto. Por lo que sabemos,
no existe una palma que produzca 100 % de frutos
partenocárpicos no abortivos en el género Elaeis,
Selección de variedades interespecíficas
con base en la biotecnología utilizando
E. oleifera
El alto contenido de ácidos grasos insaturados (de
59 a 61 % según Ngando-Ebongue, 2010) y la fluidez

Figura 5. Frutos totalmente

pulposos en futuras variedades de
palma de aceite. a) Variedades de a) Variedades pisifera
totalmente fértiles
pisifera completamente fértiles.
+10 % de (~ 90 % de pulpa)
b) Variedades partenocárpicas no solo pulpa
abortivas.

+20 % de b) Variedades
solo pulpa partenocárpicas no
Variedad tenera abortivas (~ 100 % de
(~ 80 % de pulpa) pulpa)

Además, es apropiado pensar en una palma de aceite que produzca 100 % de frutos
partenocárpicos (sin cuesco, ni almendra) desarrollada a partir de flores femeninas no
fertilizadas, lo que significa 100 % de frutos totalmente pulposos (Figura 5b.). Las variedades
partenocárpicas pueden ganar cerca de 20 % más de aceite de palma, comparadas con las
variedades tenera tradicionales. Otra ventaja de las variedades partenocárpicas es que sus
flores femeninas no necesitan polinización alguna para desarrollarse en fruto. Por tanto,
no representan un costo relacionado con el defecto en la polinización natural o por la (casi
obligatoria) polinización asistida de las variedades clásicas a una edad joven.

168 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 159-174, Tomo I, 2016
del aceite de palma de E. oleifera fueron los primeros
motivadores del interés en las especies sudamerica-
nas y el mejoramiento genético interespecífico con la
palma de aceite (Meunier y Boutin, 1975). Las difi-
cultades de una selección sin marcadores moleculares
en ese tiempo, y la falta de compensación financiera
para los productores de aceite de palma conforme a
la calidad del aceite, explican en gran medida porqué
el mejoramiento de esa característica estuvo detenido
hasta muy recientemente.
En la década de los sesenta muchos estudios de
investigación en aceite de palma recogieron pobla-
ciones de E. oleifera. Se implementó un programa
importante de hibridación interespecífica y de mejo-
ramiento genético de híbridos interespecíficos de E.
guineensis x E. oleifera para la explotación rápida de
genes favorables de E. oleifera, y en el futuro, para la
introgresión de estas últimas, dentro del genoma de
variedades de palma de aceite mediante retrocruces
sucesivos (Meunier et al., 1976).
El programa interespecífico se enfocó en la crea-
ción de variedades resistentes genéticamente a la en-
fermedad de la Pudrición del cogollo, y en el aceite
de palma suficientemente productivo para la explo-
tación económica, mas no especialmente en la com-
posición de ácidos grasos del aceite de palma. Infor-
tunadamente, los problemas de esterilidad parcial y
la baja tasa de extracción del aceite en los híbridos
interespecíficos explican su menor productividad en
comparación con la del aceite de la palma de aceite
(Le Guen et al., 1991). Sin embargo, la productivi-
dad de estos híbridos ha mejorado desde la década
de los noventa.
Los híbridos interespecíficos comerciales, resis-
tentes a la Pudrición del cogollo, se producen y utili-
zan en áreas contaminadas en América del Sur, como
en Colombia (Bastidas et al., 2011). Hoy día los mar-
cadores de adn ya no son un cuello de botella en el
programa de mejoramiento genético interespecífico
y las biotecnologías abren virtualmente la explota-
ción de todos los genes útiles con fines económicos
de E. oleifera, a través de su introgresión en las pal-
mas de aceite Elite. En la especie E. oleifera yacen los
principales saltos de selección y un futuro novedoso
para el cultivo de la palma de aceite.
Biotecnología y selección de la palma de aceite: la Palma Dorada del futuro • Billote, N., et al.
Palmas sin desprendimiento de
frutos y baja actividad de lipasa en
los frutos
El costo de producción del aceite de palma está entre
las principales preocupaciones de los cultivadores.
Esto es válido sin importar el tamaño de los cultivos,
especialmente en países emergentes en donde los sala-
rios de la mano de obra en los campos están incremen-
tando. En Indonesia, el costo actual de mantenimiento
de los cultivos de palma de aceite en grandes haciendas
está alrededor de 500 dólares/ha, del cual el costo del
fertilizante representa alrededor de 60 %. Además el
costo de la cosecha (principalmente el costo de mano
de obra) está alrededor de 120 dólares/ha. Este último
costo incluye 15 % del costo de mano de obra necesaria
para recoger del suelo los frutos maduros desprendi-
dos. En este ejemplo, un costo de producción del aceite
de palma de aproximadamente 620 dólares/ha debe
compararse con el precio de venta del cpo después del
procesamiento de 600 dólares en promedio para el año
2015 (Fuente: Banco Mundial, 2015). Con una cifra de
4 toneladas de aceite de palma por hectárea por año, el
costo total de producción es equivalente más o menos
a 25 % del precio de venta del cpo.
Facilidad de cosecha
Se ha logrado un avance genético para un menor in-
cremento del estípite en la palma de aceite; por ejem-
plo, una tasa de crecimiento vertical de 40-50 cm/
año en África para plántulas actuales, Cirad® (http://
www.palmelit.com). Se continúa el trabajo utilizando
únicamente materiales de E. guineensis en la mayo-
ría de los centros de investigación de palma de aceite.
Además de esto, el estípite de E. oleifera se caracte-
riza por un crecimiento muy lento (5-10 cm/año),
que es aproximadamente una quinta parte del de E.
guineensis (Hartley, 1988). Se están identificando los
genes que rigen el crecimiento del estípite del género
Elaeis en E. guineensis (Lee et al., 2015), al igual que
en E. oleifera (Cirad y sus aliados, no publicado). Las
formas del gen de E. oleifera, que ha sido objeto de in-
trogresión y que confieren un crecimiento muy bajo
del estípite, harán que las palmas de parcelas (enanas)
169
 tengan alturas tan bajas como 2.5 metros a una edad calidad garantiza la producción en campo sin pérdi-
máxima de 25 años, lo que llevará a que el tiempo da económica. Igualmente, podría modificar y hacer
de cosecha con trabajadores en el campo sea mucho menos costoso el proceso de esterilización de los ra-
menor y, por tanto, menos costoso (Figura 6). Sobre cimos en la planta de beneficio.
dicho logro se puede hacer una analogía con la selec-
Las investigaciones recientes con respecto a la
ción del manzano a partir de tipos de árboles enanos
abscisión del fruto de la palma de aceite (Roongsa-
silvestres. Por supuesto, el enanismo estará combina-
ttham et al., 2012) y la actividad de la lipasa (Mor-
do con la productividad y demás cualidades mejora-
cillo et al., 2013) son pasos clave hacia la creación
das del aceite de palma.
de palmas con baja frecuencia de cosecha. Esto se
Una selección paralela de un estípite largo de raci- logrará en variedades puras de palma de aceite y pal-
mo (característica también presente en E. oleifera) ha- mas interespecí­ficas.
ría más factible una cosecha parcialmente mecanizada
de las palmas utilizando cuchillos eléctricos.
La resistencia genética a la
enfermedad de Pudrición del
Baja frecuencia de cosecha
cogollo
La frecuencia reducida de la cosecha (tan baja como
Este es un plan complejo de investigación y usa E.
una vez al mes) comparada con cada diez días en pro-
oleifera y los híbridos interespecíficos. En resumen,
medio en los cultivos clásicos de palma de aceite será
se están creando variedades Elite futuras de Elaeis re-
posible gracias a dos características combinadas: 1) el
sistentes a la enfermedad de la Pudrición del cogollo
no desprendimiento de frutos maduros, lo que aho-
mediante la identificación de genes resistentes en E.
rrará cerca de 15 % en costos de mano de obra para
oleifera, los cuales son transferidos al mismo tiempo
la cosecha que usualmente se dedica a recoger frutos
a los ideotipos superiores de las especies de palma de
desprendidos que caen al suelo, y 2) una baja activi-
aceite. De nuevo, este es un proceso que las biotecno-
dad de lipasa en la pulpa de frutos maduros, lo que
logías aceleran enormemente.
significa que no hay cantidad significativa de aceite de
palma que se degrade en ácidos grasos libres para los Una consecuencia de la próxima disponibilidad de
racimos que se lleven a las plantas de beneficio; esta variedades resistentes a la Pudrición del cogollo y de

Figura 6. Ilustración esquemática

de una palma de parcela (enana)
interespecífica con una edad
cercana a 25 años.

Palma de aceite cultivada en la actualidad Palma de parcela (enana)

170 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 159-174, Tomo I, 2016
alta productividad es que desbloqueará por completo
las regiones suramericanas en donde las condiciones
agroclimáticas son adecuadas para el cultivo de la pal-
ma. El imperio del cultivo de la palma expandirá sus
territorios en toda América del Sur gracias a estas va-
riedades interespecíficas. Por supuesto, estas últimas
también estarán disponibles para el Sureste Asiático o
para África, en caso de presentarse una introducción
accidental o de la propagación de la enfermedad en
estas regiones de cultivos libres de pc.
Calidad del aceite para nuevos
nichos de mercado
Aceite de palma
Las críticas actuales y recurrentes a nivel mundial, es-
pecialmente en los países occidentales en cuanto a la
calidad del aceite de palma con respecto a los proble-
mas para la salud humana, de nuevo motivan a los me-
joradores de palma a crear y usar variedades particula-
res con una composición más deseable de dicho aceite.
Elaeis guineensis es una especie
superior a nivel de los ácidos grasos
del aceite, con una enzima fatb es-
pecialmente activa sobre el sustrato Las investigaciones recientes con respecto
del ácido palmítico, el cual favorece
la producción de ácido palmítico
a la abscisión del fruto de la palma de
en la pulpa (Montoya et al., 2013). aceite y la actividad de la lipasa son pasos
Por el contrario, el alto contenido
de ácido oleico en la pulpa de E.
clave hacia la creación de palmas con baja
oleifera se explica notablemente por
una fuerte actividad enzimática de
kas II sobre el ácido palmítico con
respecto a E. guineensis.
Las variaciones entre la especie Elaeis en C16:0 y
C18:1 pueden ser descifradas mediante actividades de
las enzimas de unos pocos genes (fatb, sad, KAII)
(Montoya et al., 2013), los cuales pueden seleccionarse
utilizando marcadores intragenes. Una palma de aceite
que produzca mucho más ácido oleico en proporción
que la E. oleifera pura es incluso factible. Variedades
particulares hasta con 90 % de ácido oleico serán lan-
zadas, y este aceite de palma tropical “similar a la oliva”
se venderá a un precio mucho mejor e irá a la mesa de
la mayoría de personas en el mundo, destronando el
mercado privilegiado del más costoso aceite de oliva
mediterráneo. El precio actual de este último es apro-
ximadamente 10 veces más alto en comparación con el
del aceite de palma clásico. Este aceite de palma “simi-
lar al de oliva” será un nuevo nicho de mercado muy
rentable para los cultivadores de palma de aceite.
Aceite de palmiste
Una palma de aceite que produzca casi únicamente
aceite de palmiste de frutos con una almendra muy
grande, cuesco delgado pero sin mesocarpio, puede
considerarse un sustituto rentable de la producción
de aceite de coco, rico en ácido láurico (C12:0). Los
estudios genómicos comparativos entre los cromoso-
mas del adn de la palma de aceite y el coco identifica-
rán los genes responsables del tamaño del cuesco y el
espesor de la pulpa, lo que permite crear variedades
de palma de aceite “de palmiste” que apuntan más al
mercado del aceite de coco y específicamente al mer-
cado comercial de cosméticos, para un mayor precio
de venta por tonelada de aceite.
frecuencia de cosecha.
Genotipo mediante variedades
comerciales optimizadas al entorno
Un gran desafío es diseñar mejor el potencial gené-
tico de la palma de aceite de acuerdo con los sitios
en que se cultivarán las variedades comerciales. De
esto trata la agronomía de precisión. La Ciencia de la
Información Geográfica (cig) permite extraer y ana-
lizar el conocimiento disponible sobre las condicio-
nes agroclimáticas a nivel local y del país. En paralelo,

Biotecnología y selección de la palma de aceite: la Palma Dorada del futuro • Billote, N., et al. 171
 varios experimentos complejos de referencia sobre el
Genotipo x Ambiente de la palma de aceite realizados
en todo el mundo diseñarán y probarán cómo las va-
riedades que están siendo creadas (ideotipos), revela-
rán su mejor potencial agronómico dependiendo del
ambiente en el sentido amplio. Aquí todos los temas
científicos agrícolas se preocupan de que la genética
y la agronomía en conjunto utilicen todas las herra-
mientas y métodos de biotecnología que sean apro-
piados. En particular, los experimentos de genotipo
x nutrición mineral y agua buscan una mayor absor-
ción de la raíz y que en toda la planta se dé una va-
lorización optimizada de los nutrimentos minerales
y el agua. Las variedades con menos insumos, pero
con las mismas productividades, estarán disponibles
para reducir los costos de fertilización. También se
da prioridad para desarrollar variedades particulares
adaptadas a las áreas marginales, menos fértiles o su-
jetas a la sequía, las cuales en parte serán expandidas
por el cambio climático continuo en el planeta, la ruta
de la fotosíntesis, y de manera más amplia, toda la fi-
siología de la planta es estudiada activamente para ser
optimizada genéticamente en este contexto de cam-
bio climático que incluye una mayor cantidad de CO2
y eleva la temperatura de la atmósfera.
Entendemos que los resultados del mejoramiento
genético con base en la biotecnología traerán muchos
avances genéticos y riqueza económica a la agroin-
dustria de la palma de aceite en el futuro cercano. La
alta tasa de intensificación combinada con un gran
panel de ideotipos nuevos, y políticas ecológicamen-
te responsables como las promovidas por gobiernos
nacionales interesados y por la Mesa Redonda de
Aceite de Palma Sostenible (rspo, por su sigla en in-
glés), permitirá la conservación de la mayoría de los
bosques con la conversión notable y de manera sen-
sata de grandes áreas de pastos en cultivos de palma,
como se está desarrollando en Brasil.

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174 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 159-174, Tomo I, 2016
Volver al
contenido

Las biotecnologías como impulsadoras de la producción

de aceite de palma sostenible*
Biotechnologies are Pushing Sustainable Palm Oil Production

citación: Rival, A. (2016). Las biotecnologías como impulsadoras de la

producción de aceite de palma sostenible. Palmas 37(Especial Tomo I),
pp. 175-182.
palabras clave: biotecnologías, palma de aceite, sostenibilidad.
keywords: Technology, palm oil, sustainability, oil palm.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Strong Tower Consulting.

Alain Rival
Coordinador de Investigación de
Palma de Aceite de CIRAD
Director regional de países insulares
del Sudeste Asiático de CIRAD
CIRAD Coordinator for Oil Palm
Research, CIRAD Regional Director
for South-East Asian Island Countries
alain.rival@cirad.fr

Resumen
Las biotecnologías y el desarrollo sostenible son temas recientes de controversias públicas. Están evolu-
cionando de forma rápida, llegando a ser más económicas y aplicables. Existe un interés cada vez mayor
en aplicar dichas tecnologías en los esfuer­zos que hoy día se llevan a cabo hacia la intensifi­cación eco-
lógica del cultivo de palma de aceite. Los organismos vivos están soportados por el genoma (ADN) me-
diante la acción del transcriptoma (ARNs), el proteoma, el metaboloma y el ionoma, los cuatro pilares
básicos de la genómica funcional. Estos representan la suma de todos los genes, proteínas, metabolitos
y elementos dentro de un organismo. La respuesta dinámica y la interacción de estos omas bioquímicos
definen cómo funciona un sistema vivo, y su estudio, la biología de sistemas, es hoy uno de los mayo-
res desafíos de las ciencias de la vida. En el caso de la palma de aceite, al igual que en muchos cultivos
principales, la genómica funcional aún se encuentra en una etapa inicial, aunque no hay ra­zón para que

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 175-182, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 175
 la biología de la palma de aceite no pueda beneficiarse rápidamente del acelerado pro­greso generado
por las tecnologías automatizadas y de alto rendimiento. El éxito de los proyectos de secuenciación en
varias especies de palma ha ge­nerado un interés en la exploración de la estructura y los patrones de
expresión del genoma, abriendo el camino para la rápida evolución de diversos en­foques basados en la
genómica. De manera simul­tánea, se ha solicitado a los científicos agrícolas brindar soluciones a largo
plazo para la mitigación y adaptación de especies de cultivos frente al cam­bio climático. Un enfoque
específico ha sido el de la captación de carbono en los suelos, que sin duda impulsará los esfuerzos de
investigación sobre la metagenómica de organismos vivos subte­rráneos. Este artículo se enfocará en los
desarrollos más recientes de diversas áreas de biotecnología de plantas en donde ya existen aplicaciones
para mejorar la sostenibilidad o serán desplegadas en un futuro próximo.

Abstract
Biotechnologies and sustainable development are now at a crossroad and there is increasing interest
in applying such technology in the current efforts for ecological intensification of oil palm cultivation.
Li­ving organisms are supported by the genome (DNA) through the action of the transcriptome (RNAs),
pro­teome, metabolome and ionome, the four basic pillars of functional genomics. They represent the
sum of all the expressed genes, proteins, metabo­lites, and elements within an organism. The dyna­mic
response and interaction of these biochemical “omes” defines how a living system functions, and its
study, systems biology, is now one of the biggest challenges in life sciences. In oil palm, as in many
major crops, functional genomics is still at its beginning, although there are no reasons why oil palm
biology should not rapidly benefit from the fast progresses generated by automated and high-throu-
ghput tech­nologies. The success of sequencing projects on se­veral palm species has created a wides-
pread interest in exploring the structure and expression patterns of the genome, paving the way for
the rapid evolution of various genomics-based approaches. At the same time, agricultural scientists
are requested to provide long term solutions for the mitigation and adaption of crop species to climate
change. A specific focus has been set on carbon capture in soils, which will certainly boost research
efforts in metagenomics of underground living organisms. This article will focus on recent develop-
ments in various plant biotechnology areas in which applications for impro­ving sustainability already
exist or will be developed in the near future.

La sostenibilidad de la palma de
aceite y las biotecnologías son
objeto de debate público

El rápido desarrollo de los cultivos de palma de acei-
te da lugar a algunos problemas de tipo social, tales
como bio­diversidad, deforestación, hábitos alimenta-
rios e inver­siones éticas. La industria agroalimentaria
del Norte y los agricultores de la zona tropical pueden
considerar ahora que las especies de palma que se ori-
ginaron en los bosques africanos son un regalo, o in-
cluso, un milagro, pero también representan una grave
amenaza ecológica según las organizaciones no guber-
namentales (ong) que abogan por el hábitat o los de-
rechos de los pueblos indígenas (Rival y Levang, 2014).
Hay muchas opiniones acerca de la controversia pú-
blica sobre el aceite de palma, la cual es alimentada por
declaraciones perentorias y, en ocasiones, exageradas.
Se requiere llevar a cabo investigaciones en muchos
campos y la comunidad investigadora debe pronunciar
un discurso más matizado, que se base en evidencias,
información científica y experiencia de campo.
La sostenibilidad de la palma de aceite aborda la
investigación a través de muchas preguntas en varios
campos y temas (Murphy, 2014). Sin duda, la inten­
sificación ecológica del cultivo de palma de aceite (Fi-

176 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 175-182, Tomo I, 2016
gura 1), la cual involucra los pilares de la sostenibilidad
como lo son el planeta y la rentabilidad (Boonen et al.,
2012), abarca campos de investigación importantes y
multidisciplinarios como: el mejoramiento y la gené-
tica, el manejo de residuos (en­trando en la economía
circular), la agricultura de preci­sión, las mejores prác-
ticas agrícolas, la mitigación de los gases de efecto in-
vernadero, el control integrado de plagas y los servicios
ambientales. Las investigaciones que abordan las cien-
cias sociales y que se fundamentan en el pilar gente de-
ben encargarse de las condiciones para reducir la po-
breza extrema a través del cultivo de la palma de aceite,
con un enfoque en los derechos civiles y laborales, el
acaparamiento de tierras, las políticas públicas, las in-
versiones éticas y las asociaciones público-privadas.
Las biotecnologías también son objeto de debate
público, centrado principalmente en los organismos
agrícolas modificados genéticamente (omg) y en la
clonación animal en Europa y ee.uu. (Sandin y Mou-
la, 2015). Sin embargo, las biotecnologías no se res-
tringen a los omg, y muchas de sus aplicaciones en la
agricultura ya están funcionando de manera conve-
niente en la sostenibilidad agrícola.
La biotecnología puede definirse como el uso de
sistemas y organismos vivos para desarrollar o elaborar
productos útiles. Recurre a la manipulación controla-
da y deliberada de sistemas biológicos para fabricar o
Intensificación ecológica
• Mitigación de la
pobreza
nas
Perso
• Derechos civiles
• Derechos laborales
• Acaparamiento de
tierras
• Políticas públicas
• Inversiones éticas
• Sociedades público- an
G
privadas a n cia s
• Agroecología
• Mejoramiento Vegetal
• Manejo de residuos
• Agricultura de precisión
• Mejores prácticas agrícolas
• Mitigación de gases de efecto
invernadero
• Control integrado de plagas
• Servicios ambientales
Las biotecnologías como impulsadoras de la producción de aceite de palma sostenible • Rival, A.
procesar productos útiles en forma eficiente. Durante
milenios la humanidad ha utilizado la biotecnología en
la agricultura, la producción de alimentos y la medici-
na. En efecto, la fabricación de pan, vino, cerveza, que-
so, tofu, medicinas tradicionales y la reproducción de
plantas y animales, son biotecnologías muy antiguas.
Las biotecnologías están
trabajando para la sostenibilidad
de la palma de aceite
Las biotecnologías están avanzando rápidamente y
se está disminuyendo la diferencia entre las plantas
modelo (con genomas pequeños y un tiempo de ge-
neración menor, y con la capacidad de producir re-
cursos genómicos con mayor rapidez y facilidad), y
las plantas de cultivo (con genomas más grandes, en
ocasiones poliploides, y una duración de generación
mucho mayor).
La Figura 2 muestra la gran variedad de biotecno-
logías que se están aplicando en la actualidad (o que
se aplicarán en el futuro muy cercano) y que contri-
buyen a la sostenibilidad del cultivo de la palma de
aceite (Rival y Jaligot, 2010). Las biotecnologías tie-
nen la capacidad de impulsar muchas áreas de inves-
tigación sobre la palma de aceite, y en este artículo se
han seleccionado solamente algunos ejemplos.
Figura 1. La sostenibilidad de
• Agroecología la palma de aceite aborda la
Plan • Mejoramiento Vegetal investigación a través de muchas
• Manejo de residuos
preguntas en varios campos y
eta
• Agricultura de
precisión temas.
• Mejores prácticas
agrícolas
• Mitigación de gases de
efecto invernadero
• Control integrado de
plagas
Intensificación
ecológica
177
 Figura 2. Nube de biotecnologías
de la palma de aceite.
La caracterización de la
biodiversidad a través del ADN
Para mejorar la sostenibilidad del cultivo de la palma
de aceite es necesario caracterizar la biodiversidad
en un sentido más amplio, es decir, antes, durante y
después de la siembra del cultivo como tal. Conocer
la extensión y la estructura de la biodiversidad es el
primer paso para: i) evaluar el impacto que un cultivo
de palma de aceite tendría sobre el agua, el suelo, la
flora y la fauna de diversos paisajes; ii) usar con inte-
ligencia los servicios ambientales dentro del cultivo.
La biotecnología puede brindar las herramientas ade-
cuadas para lograr una mejor caracterización y com-
prensión de la biodiversidad.
En efecto, el código de barras del adn es una he-
rramienta molecular que utiliza cebadores estandari-
zados, por lo general de 600 a 800 segmentos del gen
mitocondrial de citocromo c oxidasa I, a fin de clasi-
ficar las especies. Cada vez es más reconocido como
una forma eficiente de estudiar y clasificar las espe-
cies para documentar la biodiversidad y ordenar por
prioridades los trabajos de conservación. El código
de barras del adn ofrece una oportunidad para iden-
tificar, inventariar y estudiar los especímenes con el
fin de (i) comprender la diversidad de las especies de
un ecosistema, y (ii) evaluar la variabilidad genética
dentro de las especies. En particular, los códigos de
barras del adn contienen información valiosa para
las diversas partes interesadas en la conservación: los
investigadores podrían identificar especies con ma-
yor rapidez, los taxonomistas podrían determinar los
178
grupos de especies que se deben estudiar en mayor
detalle, y los redactores de políticas podrían utilizar
la información del código de barras para determinar
las medidas de conservación adecuadas (Valentini et
al., 2008). En este contexto, el código de barras del
adn se recomienda como un método económico, rá-
pido y objetivo.
En el caso del desarrollo sostenible de la palma
de aceite, se están llevando a cabo estrategias de co-
dificación con el fin de caracterizar la biodiversidad
antes y después de la siembra de cultivos, y en los
límites entre los bosques, las zonas de amortigua-
ción y las plantaciones. Asimismo, esta técnica es de
gran interés para describir y documentar con pre-
cisión la biodiversidad a lo largo de la vida de los
cultivos. Otro tema de investigación interesante es
evaluar el impacto de la biodiversidad al interior de
la plantación y de varias prácticas culturales como
pasar de usar fertilizantes minerales a orgánicos, o
el uso de herbicidas en algunas etapas. Dentro del
marco de un estudio reciente sobre la toxicidad de
rodenticidas, se identificaron varias especies de ra-
tas que infestan los cultivos de palma de aceite me-
diante el método de codificación molecular (Andru
et al., 2013).
Diseño de los ideotipos de la palma
de aceite para el futuro
Ya se han emprendido estrategias de reproducción
asistida por marcadores en la palma de aceite y estas
cuentan con el apoyo de varias actividades de inves-
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 175-182, Tomo I, 2016
 Código de barras del ADN Figura 3. Elementos básicos de
www.barcodinglife.org una estrategia de codificación del
código del ADN.
• Crear una base de
• Proporcionar un
• Código de barras del datos con enlaces
mecanismo para
ADN: secuencia uno o de nombres,
acelerar el proceso de
unos cuántos tramos especímenes y
caracterización de la
cortos «estándar» (c 600 otra información.
biodiversidad.
bps) de ADN.
- Tomar un tejido,
- Identificación
- Los individuos de una secuenciarlo, averiguar
de especímenes
especie podrían tener qué es y qué se sabe
desconocidos para
una secuencia de ADN sobre él.
especies conocidas.
más similar que los - Finalmente, se
- Ayudar al
individuos de otras podría hacer con
descubrimiento de
especies. secuenciadores de
nuevas especies.
ADN portátiles.

tigación sobre reproducción de plantas (Rival y Jaligot,
2013, Murphy, 2014), tales como: certificar el origen y la
trazabilidad del material de cultivo, optimizar el manejo
de los recursos genéticos (colecciones básicas), certifi-
car la genealogía en las pruebas genéticas y semilleros,
certificar el carácter tenera en las semillas y mejorar la
eficiencia de la selección en la E. guineensis a través del
perfeccionamiento de la selección de progenitores.
Además, se han identificado varios locus de carácter
cuantitativo (qtl) de carácteres agronómicos, como la
resistencia a patógenos (marchitez por Fusarium).
La selección genómica (sg) es una forma de selec-
ción asistida por marcadores que puede mejorar los
esquemas de reproducción de plantas y animales. Se
basa en una distribución densa de los marcadores por
todo el genoma a fin de generar los valores genómi-
cos estimados de reproducción (gebv) a partir de un
análisis de todos los marcadores en conjunto. En 2014
Cros et al. demostraron que la selección genómica
tenía valor empírico en la selección recurrente recí-
proca de la palma de aceite, dado que podía explicar
los efectos en las familias y los términos de muestreo
mendeliano, a pesar de las poblaciones pequeñas y la
baja densidad de marcadores.
La reproducción de la palma de aceite podría be-
neficiarse de la selección asistida por marcadores,
pero los estudios en genética son escasos e inconclu-
sos. Tisné et al. (2015) exploraron hace poco las bases
genéticas de la producción de palma de aceite a través
de un método innovador que se basa en la genealo-
gía de acuerdo con el mapeo de locus de carácteres
cuantitativos (qtl). Se descubrió que los patrones de
qtl dependían del origen genético y solo se compar-
tía una región entre grupos heteróticos. Los efectos
contrastantes de los qtl por número de racimo y
peso reflejaron la correlación negativa cercana entre
los dos carácteres. Se demostró que el método basado
en la genealogía en el cual se utiliza información de
los programas continuos de reproducción es eficaz,
relevante y económico para mapear los qtl. Se han
identificado los determinismos genéticos que con-
tribuyen a los efectos heteróticos, los cuales ofrecen
información valiosa para supervisar las estrategias de
reproducción de la palma de aceite.
La revolución de la SNG está
incidiendo en las biotecnologías de
la palma de aceite
Desde hace poco, las tecnologías de secuenciación de
nueva generación (sng) han prometido acelerar aún
más el avance a través de una producción de secuen-
ciación mucho más grande y de menor costo. En el
mercado actual hay cuatro tecnologías de sng: 454
Life Sciences (adquirida por Roche), Solexa (adquiri-
da por Illumina), abi solid (adquirida de Agencourt
Biosciences) y Helicos Biosciences. Aunque, por lo
general, todas tienen sus características específicas, se
pueden agrupar en dos clases, con base en las lectu-
ras de secuenciación que generan. En efecto, Solexa,
abi solid y Helicos producen lecturas muy cortas en
cantidades muy grandes, mientras que la plataforma
454 puede producir una cantidad más moderada de
secuenciación pero con lecturas mucho más extensas.

Las biotecnologías como impulsadoras de la producción de aceite de palma sostenible • Rival, A. 179
 Varias plataformas han pasado por diversas rondas de
actualización de especificaciones y es probable que las
mejoras continúen.
En el futuro pueden continuar los avances en las
tecnologías de sng a fin de reducir el tiempo y el
costo de estos proyectos, pero probablemente esta
estrategia siempre será valiosa para abordar las com-
plejidades de la secuenciación de grandes genomas
repetitivos con sng. Las tecnologías sng ofrecen una
solución práctica e inmediata para la rápida genera-
ción de secuencias de adn a partir de un genoma
eucariótico grande y complejo, como el de la palma
de aceite (Rival y Jaligot, 2010).
En los últimos años los métodos de sng nos han
permitido la secuenciación y la publicación del genoma
nuclear/plastidial de la palma de aceite y de las especies
de palma relacionadas. Este trabajo de investigación re-
ciente incluye la liberación del genoma del cloroplasto
de la palma datilera (Yang et al., 2001) y del genoma
nuclear (Al-Dous et al., 2011), del genoma de la palma
de aceite (Singh et al., 2013 y 2014) y del genoma del
cloroplasto del coco (Huang et al., 2013).
Estos resultados han impulsado los estudios de ge-
nómica y epigenómica en la palma de aceite, en par-
ticular al descifrar los mecanismos moleculares sub-
yacentes a la generación de las variantes somaclonales
«alteradas» (mantled) (Jaligot et al., 2013, Ong-Abdu-
llah et al., 2015). Sin duda alguna, la reciente publi-
cación del ensamble del genoma de la palma de acei-
te africana y la primera secuencia preliminar de su
pariente latinoamericana hace poco les permitieron
a Beulé et al., (2015) abordar el reto de comprender la
composición, estructura y evolución de estos genomas
de la palma a través de la anotación de sus secuencias
repetitivas. Los resultados se mostraron congruentes
en el historial de transposición de los retrotransposo-
nes ltr entre E. oleifera y E. guineensis, en particular
la familia Sto-4. De igual modo, los autores identifica-
ron y descubrieron 583 retrotransposones ltr com-
pletos en el genoma de Elaeis guineensis. Además, el
análisis de la distribución cromosómica sugiere una
inserción preferencial de elementos de Copia en re-
giones ricas en genes, mientras que los elementos de
Gypsy aparecen distribuidos uniformemente en todo
el genoma. El valioso conocimiento obtenido a par-
180
tir de tales estudios constituye un importante recurso
para mejorar la anotación de genomas y la investiga-
ción del historial evolutivo de las palmas.
Análisis metagenómico de la
biodiversidad en suelos
A través de la pirosecuenciación 454 de la región its1
del adn extraído del suelo, Kerfahi et al. (2014) com-
pararon las comunidades de hongos del suelo entre
selvas tropicales sin talar, taladas una vez y taladas
dos veces, y áreas despejadas para la palma de aceite
en Sabah, Malasia. Comprender los efectos de estos
cambios del uso de la tierra en los hongos del sue-
lo, que cumplen funciones esenciales en el funciona-
miento y los servicios del ecosistema de suelos, es una
frontera importante para la conservación. En general,
la composición de la comunidad fúngica difirió sig-
nificativamente entre los bosques y las plantaciones
de palma de aceite. En su totalidad, estos resultados
muestran un efecto permanente respecto de la con-
versión de palma de aceite a la estructura de la co-
munidad fúngica. Los autores concluyeron que tales
cambios generales en las comunidades fúngicas po-
dían afectar la sostenibilidad del cultivo de palma de
aceite a largo plazo.
Transcriptómica y descubrimiento de genes
Con el objetivo de comprender los procesos molecu-
lares que subyacen al desarrollo floral de la palma de
aceite, Beulé et al. (2011) exploraron los transcripto-
mas de la palma de aceite al combinar la hibridación
sustractiva por supresión (ssh) con los microarreglos
de cdna para identificar, a gran escala, los genes que
muestran una expresión modificada en la inflores-
cencia alterada (mantled) de las palmas de aceite pro-
ducidas a través de embriogénesis somáticas in vitro.
Con este método se pudo identificar 32 genes marca-
dores putativos del fenotipo alterado (mantled).
El tejido carnoso del mesocarpio rico en lípidos
del fruto de la palma de aceite no es solo la principal
fuente de aceite comestible para el mundo, sino tam-
bién la fuente alimentaria más rica de provitamina
A. Tranbarger et al. (2011) examinaron la base tras-
cripcional de estos dos importantes carácteres meta-
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 175-182, Tomo I, 2016
bólicos en el mesocarpio de la palma de aceite. Las
características morfológicas, celulares, bioquímicas y
hormonales definieron las fases clave del desarrollo
del mesocarpio. Luego se ensambló un transcriptoma
derivado de la pirosecuenciación 454 para las fases de
desarrollo previas y durante la maduración, momen-
tos en que se presentan altas tasas de biosíntesis de
lípidos y carotenoides.
En un estudio reciente en el que se buscó entender
el mecanismo que rige las diferencias en el contenido
de aceite y en la composición de los ácidos grasos en
los tejidos del fruto de la palma de aceite, Dussert et
al. (2013) compararon el transcriptoma del tejido y la
composición de los lípidos durante el desarrollo. El
aporte de las vías glicolíticas citosólicas y plastidiales
varió considerablemente entre los tejidos del meso-
carpio y de las semillas, pero los patrones transcrip-
cionales de los genes que participaron en la conver-
sión de sacarosa a piruvato no se relacionaron con las
variaciones en el contenido de aceite.
rápido y seguro de las biotecnologías de la palma de
aceite. La mayoría de los logros recientes en la biotec-
nología de la palma de aceite incidirán muy pronto
en ámbitos importantes de la agricultura sostenible,
como en la producción de aceite por hectárea y en la
resistencia a patógenos.
Las secuencias anotadas con mayor precisión del
genoma de la palma de aceite están disponibles y la
epigenómica se está desarrollando con rapidez, lo
cual proporciona un conocimiento valioso tanto de
la estructura como de la expresión del genoma, y pre-
para el terreno para un descubrimiento más eficiente
de los genes y una mejora vegetal asistida por marca-
dores.
Ahora, la metagenómica está respaldando los es-
tudios sobre el efecto de las prácticas culturales en
la biología del suelo y en la de los organismos acuá-
ticos, con lo que se obtendrá información esencial
sobre el impacto del cultivo de la palma de aceite
sobre la biodiversidad.

Conclusión Con una mayor viabilidad de los métodos inves-

tigativos sobre el genoma, la incidencia de las biotec-
La diferencia cada vez menor entre las especies de nologías en la explotación sostenible de la palma de
cultivos y de plantas modelo ha permitido el avance aceite será mucho más palpable en los próximos años.

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182 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 175-182, Tomo I, 2016
Volver al
contenido

Resistencia a la Pudrición del cogollo en el material Guineensis*

Resistance to Bud Rot in Guineensis

citación: Louise, C. (2016). Resistencia a la Pudrición del cogollo en el material

Guineensis. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 183-189.
palabras clave: Guineensis, plagas y enfermedades, Pudrición del cogollo.
keywords: Guineensis, pests and diseases, Bud Rot.
*Artículo editado por Fedepalma a partir de la grabación de video y la
presentación en PowerPoint.

Claude Louise
Investigador, PalmElite
Researcher, PalmElite
louiseclaude56@hotmail.com

Resumen
La gran mayoría de los materiales Guineensis han sido completamente eliminados por el complejo de
la Pudrición del cogollo (PC) en 10 a 15 años en el oriente ecuatoriano. Sin embargo, algunos materia-
les presentan un mejor comportamiento frente a la enfermedad.

En el año 2000 se sembraron dos ensayos en la plantación de Palmeras del Ecuador (PDE) en el
oriente ecuatoriano, que confirmaron la resistencia del material El Dorado, que registra a los 15
años 52 % de pérdidas en el primer ensayo y 45 % en el segundo, cuando el resto de materiales en
el mismo tiempo tenían 90 % de pérdidas en promedio en el primero y 85 % en el segundo. Otro
ensayo, instalado en 2003 con material El Dorado en condiciones de plantaciones industriales
registra 2 % de pérdidas promedio a los 11 años. De hecho, la mortalidad observada en el mate-
rial El Dorado varía mucho en función del genitor: de 34 a 82 %, de 19 a 72 % y de 0,5 a 3,6 %,
respectivamente, en los tres ensayos anteriores.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 183-189, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 183
 En la zona de San Lorenzo (Ecuador, Provincia de Esmeraldas), limitando con la frontera con Colom-
bia, apareció entre 2006-2007 la Enfermedad No Identificada (ENI), una forma de la PC mucho más
agresiva que diezmó 15.000 ha de las plantaciones existentes en la zona en cuatro años. Una parcela
sembrada en mayo de 2008 en la plantación de PDA con varios materiales mostró en junio de 2014, a
los seis años, una pérdida de 26 % para El Dorado vs.un promedio de 68 % para los demás materiales.
Se instaló un ensayo en enero de 2013 con cuatro orígenes de El Dorado y dos orígenes testigos. Ac-
tualmente los testigos registran una pérdida promedio de 42 % y el material El Dorado, de 29 %. Tres
de los orígenes en prueba de El Dorado se encuentran entre 31 y 33 % de pérdidas, el último presenta
20 % y uno de los cinco cruzamientos de este origen registra menos de 7 %.

Dos materiales derivados de El Dorado, el C40 y el C68, fueron sembrados en junio de 2007 en un
ensayo en PDE. A los ocho años, las pérdidas registradas en estos materiales son de 6 y 20 %, respec-
tivamente, cuando el promedio para los otros materiales del ensayo llega a 43 %, con una variación
de 20 a 60 %. Los dos genitores de C40 utilizados son una fuente potencial de resistencia a la PC del
oriente ecuatoriano que se debe confirmar.

Otro ensayo se sembró en diciembre de 2007 en PDE con el material C40. Actualmente, el testigo
El Dorado presenta 1,4 % de pérdidas mientras los otros testigos llegan a 6 %. El material C40
totaliza pérdidas ligeramente inferiores con un promedio de 5 %, variando de 1,4 a 9 %, según
los cruzamientos. Un ensayo similar fue instalado en San Lorenzo en la misma época. En junio
de 2014, las pérdidas de este ensayo registradas en el testigo El Dorado eran de 34 %, similares al
promedio del material C40 (32 %) y claramente inferiores a los otros testigos, que presentaban
una tasa promedio de mortalidad de 70 %. Entre los cinco cruzamientos de C40, dos presentaban
una tasa de 19 y 21 %, respectivamente. Los genitores utilizados para efectuar estos dos cruza-
mientos son una fuente potencial de resistencia a la ENI de San Lorenzo. Ensayos instalados en
abril de 2006 y noviembre de 2010, respectivamente, en el oriente en PDE, muestran que existen
fuentes potenciales de resistencia al complejo PC de la zona en otros materiales.

En el primer ensayo, uno de los genitores registra a los 9 años 36 % de pérdidas mientras los demás
tienen 77 % en promedio, y uno de ellos llega a 92 %. En el segundo ensayo, ubicado justo al lado de un
foco, las pérdidas promedio son actualmente de 49 %, con una variación de 12 a 83 %, dependiendo
de los genitores utilizados. De momento, solo la resistencia del material El Dorado está confirmada en el
oriente de Ecuador y este material está difundido entre los palmicultores. Para las otras fuentes potencia-
les de resistencia encontradas es necesario confirmar el nivel de la resistencia observada en condiciones
de plantación normales.

Abstract

Most Guineensis materials are completely eliminated by the PC complex in 10 to 15 years in eastern
Ecuador. Yet, some materials have a more positive behavior facing the disease.

In the year 2000, two trials were planted in the PDE plantation in eastern Ecuador. Said trials con-
firmed the resistance of El Dorado material, which suffered losses of up to 52% in the first trial and
49% in the second trial in a 15 year period, while all other materials suffered average losses of up to
90% in the first trial and 85% in the second trial. Another trial, which was set up in 2003, with El
Dorado material under the conditions of industrial plantations, shows an average of 2% losses after
an 11-year period. In fact, the mortality rate seen in El Dorado material varies greatly according
to the parent: from 34 to 82%, from 19 to 72%, and from 0.5% to 3.6%, respectively, in the above
mentioned trials.

184 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 183-189, Tomo I, 2016
 In the province of San Lorenzo (Ecuador, Province of Esmeraldas), along the border with Colombia,
from 2006-2007 appeared the Unidentified Disease (ENI, by its acronym in Spanish), a form of the PC
much more aggressive,, decimating 15,000 hectares of plantations that existed in the area in 4 years.
A parcel with a variety of materials planted in May 2008 in the PDA plantation showed a 26% loss for
El Dorado vs an average loss of 68% for other materials by 2014, 6 years after being planted. A trial
was set up in January 2013 with 4 El Dorado origins and 2 origins of reference specimens. Currently,
reference specimens show an average 42% loss while El Dorado material shows a 29% loss. In three
of the El Dorado test origins, losses ranged between 31 and 33%, the last of them showing 20% losses,
and one of the 5 crossbreeds of this origin shows losses under 7%.

Two materials derived from El Dorado, C40 and C68, were planted in June 2007 in a PDE trial. After 8
years, recorded losses for these materials were 6% and 20%, respectively, while the averages for other
materials in the trial were of up to 43% with a 20-60% variation. The two C40 parents used are a po-
tential source of resistance to BR in eastern Ecuador that are to be confirmed.

Another trial was planted in December 2007 in PDE using C40 material. Currently, the El Dorado re-
ference specimen has 1.4% losses, while other reference specimens reach 6%. The C40 material totals
slightly lower losses with an average of 5%, with a variation ranging from 1.4% and 9% depending
on the crossbreed. A similar trial was set up in San Lorenzo during the same period. In June 2014,
recorded losses for El Dorado reference specimens amounted to 34%, similar to the C40 material
(32%) and clearly below the other two reference specimens that had an average mortality rate of 70%.
Among the five C40 crossbreeds of the trial, two showed rates of 19% and 21%, respectively. The pa-
rents used to carry out these two crossbreeds are a potential source of resistance to ENI in San Lorenzo.
In brief, trials set up in April 2006 and November 2010, respectively, in the east of PDE show that there
are potential sources of resistance to the BR complex in other materials found in the area.

In the first trial, one of the parents shows 36% losses after 9 years, while the others average 77%, one
of which has losses of up to 92%. In the second trial, located right next to a focal point, average losses
were 49%, with a variation of 12 to 83%, depending on the parents used. For the time being, only the
resistance of El Dorado material has been confirmed in eastern Ecuador, and this material has been
disseminated to palm growers. For other potential sources of resistance found, the level of resistance
under normal plantation conditions is yet to be confirmed.

Introducción
Una nueva enfermedad llamada Pudrición del cogo-
llo (pc), apareció en 1928 en una plantación de palma
de aceite en Panamá. Disturbios similares aparecie-
ron en toda América Latina a medida que se expandía
el cultivo. La pc se caracteriza por ser un conjunto de
disturbios que involucra clorosis en las hojas jóvenes
y la aparición de pudriciones húmedas en las flechas,
pudriciones que bajan relativamente rápido hacia el
meristemo. Entre tanto, el resto de los síntomas son
muy variables según la zona geográfica. Se hicieron
numerosas investigaciones en varios países desde la
década de 1970 en diferentes áreas del conocimiento:
entomología, fitopatología, virología, nematología,
pedología, nutrición mineral y prácticas culturales.

Resistencia a la Pudrición del cogollo en el material Guineensis • Louise, C. 185

 No obstante, no se obtuvo algún resultado conclu-
yente de estos estudios, observando únicamente que
la eliminación rápida de las palmas afectadas bloquea
la expansión de la pc. Así mismo, que la quema de
las palmas o de las áreas eliminadas parece también
frenar la propagación de la enfermedad.
A partir de 1997 fueron sembradas diferentes ca-
tegorías de materiales Cirad Deli x La Mé en Palme-
ras del Ecuador, siendo la mayoría afectadas durante
15 años y de manera exponencial desde 1994. No obs-
tante, se observó que una parcela sembrada en 1981
con la variedad Cirad© El Dorado fue menos afectada
que las otras parcelas del mismo cultivo.
Con este trabajo se muestra el avance que se tie-
ne con la variedad Cirad© El Dorado, considerando
que existen probablemente fuentes de resistencia, y
que, por tanto, la vía genética podría ser la solución al
complejo pc a largo plazo. Por ello, se pretende con-
firmar y mejorar la fuente que se tiene, como también
encontrar nuevas fuentes de resistencia que permitan
reducir el daño causado por la Pudrición del cogollo.
Materiales y métodos
El trabajo se llevó a cabo en el nororiente ecuato-
riano, en la plantación Palmeras del Ecuador (pde).
Los experimentos fueron establecidos con materia-
les El Dorado, materiales derivados de El Dorado y
con nuevos materiales.
Ensayo 1. SH-GP 8, SH-GP 9 y SH-GP 10. Para
la evaluación de los materiales se utilizó la distri-
bución en panel de abeja (Figura 1), en donde se
evaluó el cruzamiento El Dorado contra otros seis
cruzamientos de origen diferente. Se utilizó un área
total de 7 ha para este ensayo.
Ensayo 2. SH-GP 16. Se evaluaron diez cruza-
mientos de material El Dorado siembra 2003 durante
un período de 11 años en cuatro parcelas diferentes.
Se empleó un diseño de bloques incompletos al azar,
considerando un área de ensayo de 38 ha y presentan-
do una parcela experimental de 20 palmas.
Ensayo 3. SH-GP 26. Se evaluó un total de 65 cru-
zamientos y tres categorías testigo, incluyendo El Do-
rado (39 genitores del material derivado en prueba),
con año de siembra 2009, en cuatro parcelas diferen-
tes para un área total de 35 ha. Para este ensayo se
utilizó un diseño de bloques completos al azar.
Ensayo 4. Se evaluaron seis materiales comercia-
les de siembra 2008, incluyendo El Dorado, seis años
después de su siembra. El ensayo fue establecido en la
zona de San Lorenzo, en un área de 10 ha.

2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2
5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5
Figura 1. Distribución de las palmas 3
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por cruzamiento (panel de abeja), 5
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1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1
(sombreado en gris). Se evaluaron 6
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7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7
en total siete cruzamientos de siete 1
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orígenes, incluyendo El Dorado. 2
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3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3
6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6
4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4
7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7
5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5
1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1
6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6
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5 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2
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4 2 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6
7 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4
7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7
5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5
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3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3
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4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4
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5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5
3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3
6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6 4 2 7 5 3 1 6
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186 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 183-189, Tomo I, 2016
 Ensayo 5. SL-GP 7. El ensayo se llevó a cabo en
la zona de San Lorenzo. Un total de 26 genitores de
El Dorado fueron evaluados en un diseño de bloques
completos al azar, con cinco repeticiones y nueve
plantas por parcela experimental, para un área total
de 24 ha. Las evaluaciones para ENI se efectuaron 21
meses después de establecido el ensayo.
Resultados y discusión
En el año 2000 se sembraron dos ensayos en la plan-
tación de Palmeras del Ecuador (pde), en el oriente
ecuatoriano. Se confirmó la resistencia del material
El Dorado que registra a los 15 años 52 % de pér-
didas en el primer ensayo, mientras que los demás
cruzamientos ya alcanzaban 90 % de palmas per-
didas (Figura 2a) y 45 % en el segundo, cuando el
resto de materiales en el mismo tiempo presentaba
85 % de palmas afectadas (Figura 2b). En ambos en-
sayos se observó una resistencia intermedia para el
material El Dorado, lo que lo hace un material me-
nos sensible a la enfermedad, considerando que la
máxima incidencia de este se obtuvo a los 15 años
mientras que para los otros cruzamientos el mismo
valor se presentó cinco años antes para los dos ensa-
yos evaluados.
Con base en los resultados anteriores y teniendo en
cuenta los genitores utilizados en los cruzamientos (Fi-
gura 3), se pudo observar una gran variación en la evo-
lución de la enfermedad, lo que permite explicar que la
selección de los genitores debe ayudar a mejorar aún
más la resistencia global del material El Dora­do (Figu-
ra 3), y confirma nuevamente la resistencia intermedia
de este al complejo de la pc del oriente ecuatoriano.
En el ensayo sh-gp 16, instalado en 2003 con ma-
terial El Dorado en condiciones de plantaciones in-
dustriales, se registró en promedio 2 % de pérdidas a
los 11 años. De hecho, la mortalidad observada en el
material El Dorado varía mucho en función del geni-
tor: de 34 a 82 %, de 19 a 72 % y de 0,5 a 3,6 %, respec-
tivamente, en los tres ensayos anteriores.

a.
Figura 2. Evolución de la Pudrición
El cruce 6 (Cr6) es mucho menos afectado
100 %
90 %
del cogollo (PC) en siete
que los otros cruzamientos.
80 %
cruzamientos. a. Primer ensayo
y b. segundo ensayo.
70 %
60 %
50 %
40 %
30 %
20 %
10 %
0%
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15
Edad (años)
Cr 1 Cr 2 Cr 3 Cr 4 Cr 5 Cr 6 Cr 7

b.
100 %
90 %
80 %
70 %
60 %
50 %
40 %
30 %
20 %
10 %
0%
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15
Edad (años)
Cat. 1 Cat. 2 Cat. 3 Cat. 4 Cat. 5 El Dorado

Resistencia a la Pudrición del cogollo en el material Guineensis • Louise, C. 187

 Gran variación según el genitor utilizado
Figura 3. Evolución de la 100 %
enfermedad en el tiempo, con 90 %
base en los genitores usados. 80 %
70 %
60 %
50 %
40 %
30 %
20 %
10 %
0%
0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15
Edad (años)
G1 G2 G3 G4 G5 G6 G7

En la zona de San Lorenzo (Ecuador, Provincia
de Esmeraldas), limitando con la frontera de Colom-
bia, apareció en 2006-2007 la eni, forma mucho más
agresiva, que diezmó 15.000 ha de las plantaciones
existentes en la zona en cuatro años. Una parcela sem-
brada en mayo de 2008 en la plantación de Palmeras
de los Andes (pda) con varios materiales, mostró en
junio de 2014 una pérdida de 26 % para el material
El Dorado, mientras que para los demás materiales
el promedio sobrepasó 56 % (Figura 4), alcanzando
valores de 84 % para la categoría más sensible.
En 2013 se evaluaron 26 genitores de El Dorado,
correspondientes a 72 cruzamientos de El Dorado y
cuatro cruzamientos testigos. En la actualidad, 21 me-
ses después de establecido el ensayo, se observa que
dos genitores presentan un buen comportamiento, con
pérdidas inferiores a 7 % (Figura 5). Así mismo, en
diez genitores se presenta un comportamiento que vale
la pena acompañar, teniendo en cuenta que las pérdi-
das no superan 15 %, lo cual indica que estos genitores
presentan probablemente una resistencia intermedia.
Dos materiales derivados de El Dorado, el C40 y el
C68, fueron sembrados en junio de 2007 en un ensayo
en pde. A los ocho años, las pérdidas registradas en estos
materiales son de 6 y 20 %, respectivamente, cuando el
promedio para los otros materiales del ensayo llega a
43 %, con una variación de 20 a 60 %. Los dos genitores
de C40 utilizados son una fuente potencial de resisten-
cia a la pc del oriente ecuatoriano que se debe confir-
mar. Entre tanto, otro ensayo sembrado en diciembre de
2007 en pde con el material C40 indica que el testigo
El Dorado presenta 1,4 % de pérdidas, mientras que
los otros testigos llegan a 6 %. El material C40 totaliza
pérdidas ligeramente inferiores, con un promedio de
5 %, variando de 1,4 a 9 %, según los cruzamientos.
De la misma manera, un ensayo similar fue instalado

Figura 4. Comportamiento de 100 %

los materiales a los seis años 90 % 84,2 %
de establecimiento frente a la 80 %
enfermedad ENI. 70 % 68,3 %
Tasa de ENI a los 6 años

61,0 % 61,5 %
60 % 56,0 %
50 % Categoría 6
40 % muy sensible

30 % 25,9 %

20 %
10 %
0%
Cat. 1 Cat. 2 Cat. 3 Cat. 4 Cat. 5 Cat. 6

Categoría 1 mucho menos Variedad Comportamiento

sensible que las demás El Dorado diferente

188 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 183-189, Tomo I, 2016
 80 % Figura 5. Evaluación de las
Pérdidas por genitor a los 21 meses 70 %
pérdidas por ENI en 30 genitores
después de 21 meses de
60 % establecido el ensayo.
50 %

40 %

30 %

20 %

10 %

0%
G 24
G5
G 18
G 21
G 22
G 25
G 20
G 19
G 23
G3
G 26
G1
T2
G 14
G 13
G6
T3
G 15
G8
G2
G4
G9
G 11
G 12
G7
G 16
T4
G 17
G 10
T1
en San Lorenzo en la misma época. En junio de 2014 las • En la zona de San Lorenzo, el material El Dorado
pérdidas registradas en el testigo El Dorado fueron de presenta un comportamiento diferente de los otros
34 %, similares al promedio del material C40 (32 %) y materiales frente a la eni y es posible que pueda pre-
claramente inferior a los otros testigos, que presentaron sentar globalmente cierta resistencia intermedia.
una tasa promedio de mortalidad de 70 %. Dentro de
• Se establecieron ensayos para determinar el ni-
los cinco cruzamientos de C40 del ensayo, dos presen-
vel de producción de cada genitor y seleccionar
taron tasas de 19 y 21 %, respectivamente. Los genitores
genitores no solo resistentes a la pc sino tam-
utilizados para efectuar estos dos cruzamientos son una
bién productivos tanto en racimos de fruta fres-
fuente potencial de resistencia a la eni de San Lorenzo.
ca como de aceite.
Conclusiones • Los resultados presentados son prometedores y
se estima que al cabo de algunos años se puedan
• El material El Dorado presenta resistencia inter- tener materiales guineensis resistentes al complejo
media al complejo pc del oriente ecuatoriano. pc en las diferentes zonas del Ecuador.

Resistencia a la Pudrición del cogollo en el material Guineensis • Louise, C. 189

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contenido

Una mirada al mejoramiento genético de la palma de

aceite en los últimos cincuenta años: una aventura personal*
A Review of Oil Palm Breeding for the Past 50 Years:
A Personal Journey

citación: Rajanaidu, N. (2016). Una mirada al mejoramiento genético de la

palma de aceite en los últimos cincuenta años: una aventura personal. Palmas
37(Especial Tomo I), pp. 190-202.
palabras clave: mejoramiento genético, palma de aceite.
keywords: Breeding, oil palm.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Strong Tower Consulting.

Nookiah Rajanaidu
Investigador Senior,
Malaysian Palm Oil Board, MPOB
(Junta de Palma de Aceite de Malasia)
Senior Research Fellow,
Malaysian Palm Oil Board (MPOB)
rajanaidu45@gmail.com

Resumen
Este estudio cubre el mejoramiento genético de palma de aceite en Malasia entre 1965 y 2015. El des-
cubrimiento de Beirnaert de la herencia del cuesco en El Congo en 1941 y el cultivo de DxP como el
principal material de siembra, han crea­do las condiciones para el desarrollo de la industria de aceite
de palma a nivel mundial. Existe la capa­cidad de producir casi 400 millones de semillas DxP en Indo-
nesia, Malasia, Papúa Nueva Guinea, Costa Rica, Tailandia, Colombia y Benín. En las etapas más tem-
pranas hubo un intercambio significativo de materiales genéticos entre países. AVROS derivado de la
palma Djongo del Congo, Yangambí (Congo), Calabar (Nigeria), Ekona (Camerún), La Mé (Costa de

190 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 190-202, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923
 Marfil) URT (Guthrie) y SP540 (Indonesia) son las principales pisiferas involucradas en la producción
de semi­llas. En el lado femenino, la Deli dura derivada de las cuatro palmas de Bogor desempeñó un
rol fundamental. Hubo una sana competencia entre IRHO/CIRAD y el equipo de Malasia liderado por
el Oil Palm Genetics Laboratory (Laboratorio Genético de Pal­ma de Aceite) (Dr. Hardon, Dr. Corley)
respecto de la ciencia de la selección para la palma de acei­te. Programas de mejoramiento como la
MPOB, IRHO/CIRAD, ASD Costa Rica, Indonesia, Ecuador y Colombia efectuaron colectas de germo-
plasma de palma africana y palma americana. Dichas colectas serán un recurso importante tanto para
la selección de nuevas variedades como para la investigación genómica.

El programa de cultivo de tejidos en palma de aceite inició a comienzos de la década de los años ochenta.
La producción comercial en Malasia es en la actualidad de aproximadamente 7 millones de ramets anua-
les. Sin embargo, las anormalidades en las inflorescencias representaron un cierto nivel de riesgo en la
plantación sembrada con clones. El MPOB y los miembros de la industria han hecho grandes inversiones
para descubrir los marca­dores de ADN que puedan emplearse para identi­ficar y descartar en el vivero, las
plántulas anormales antes de ser sembradas en el campo.

Existe una aplicación potencial de la técnica de cul­tivo de tejidos para multiplicar las palmas parenta­
les (las cuales han estado sometidas a pruebas de progenie) para que produzcan semillas semiclona­
les y biclonales. La selección para la resistencia a enfermedades ha tenido un progreso notable en
África para el Fusa­rium por parte de IRHO/CIRAD y Unilever, y para la Pudrición del cogollo por parte
de Colombia, Ecua­dor y ASD Costa Rica. Con el descubrimiento de genes virescens a nivel molecular
y después de la publicación de la secuencia del genoma de la palma de aceite, el mejoramiento asistido
por marcadores (Markers Assisted Breeding, MAS) y una mayor inte­gración entre las técnicas de selección
convencionales y moleculares. Anticipamos que en los siguientes 50 años la tecno­logía de haploides, la
conversión de palma de aceite de C3 a C4, la transformación de la palma de aceite, la edición de genes,
el desarrollo de material de cultivo con plantas enanas y materiales más eficientes en el uso de recursos
tendrán un impacto sobre la industria de la palma de aceite.

Abstract
The development of oil palm breeding from 1965 to 2015 is covered in this paper. Discovery of the inheri­
tance of shell by Beirnaert in Congo in 1941 and the subsequent cultivation of DxP as the major planting
material have provided the impetus for the develop­ment of oil palm industry throughout the world. The­re
is a capacity to produce nearly 400 m DxP seeds in Indonesia, Malaysia, Papua New Guinea, ASD Costa
Rica, Thailand, Colombia and Benin. In early stages, there was significant exchange of breeding material
between countries. The AVROS derived from the Djongo palm in Congo, the Yangambi (Congo), Cala-
bar (Nigeria), Ekona (Cameroon), La Mé (Ivory Coast), URT (Guthrie), SP540 (Indonesia) are the ma­jor
pisiferas involved in the seed production. On the female side, the Deli duras derived from the 4 Bogor
palms played the major role. There was a healthy competition between IRHO/CIRAD and the Malaysian
team spear-headed by Oil Palm Genetics La­boratory (Dr Hardon, Dr Corley) on the science of oil palm
breeding. Breeding methods such a germplasm collections of both Elaeis germoplasm and oleiferas were
carried out by MPOB, IRHO/CIRAD, ASD Costa Rica, Indonesia, Ecuador and Colombia. These co­llections
will be an important resource for both bree­ding new varieties and genomic research.

Oil palm tissue culture programme was started in early eighties. Current commercial production is
about 7 m ramets per year in Malaysia. Meanwhile, tissue culture floral abnormalities had cast a cer-
tain level of risk in planting oil palm clones. MPOB and members of the industry have invested heavily
to dis­cover the DNA markers which can be used to identi­fy and discard abnormal plantlets in the
nursery and before field planting.

Una mirada al mejoramiento genético de la palma de aceite en los últimos cincuenta años: una
aventura personal • Rajanaidu, N. 191
 There is a potential application of tissue culture tech­nique to multiply parental palms (which have
been progeny-tested) to produce semi- and bi- clonal seeds. Companies such as AAR, United Plan­
tations and FELDA Agricultural Services have been marketing semi-clonal seeds at a premium price.
Breeding for disease resistance has made notable progress in Africa for Fusarium by IRHO/CIRAD and
Unilever, bud-rot in by Colombia, Ecuador and ASD Costa Rica. With the discovery of shell virescens
genes at the molecular level and following publishing the oil palm genome sequence data, we expect
markers assisted breeding (MAS) and further integration of conventio­nal and molecular breeding te-
chniques. We speculate in the next 50 years, the haploid tech­nology, conversion of oil palm from C3
to C4, oil palm transformation, gene editing, development of dwarf and resource efficient planting
material will make impact on the oil palm industry.

Introducción
Este artículo trata principalmente del desarrollo de las
tecnologías de mejoramiento de la palma de aceite en
el período comprendido entre 1965 y 2015. También
se menciona descubrimientos fundamentales como la
herencia del cuesco, la siembra de semillas DxP en la
década de 1960, el intercambio de materiales de siem-
bra, la ciencia del mejoramiento de la palma de aceite,
el cultivo de tejidos, la aplicación de tecno­logías mo-
leculares en el mejoramiento de la palma de aceite, el
mejoramiento asistido por marcadores, la selección ge-
nómica, la secuencia del genoma de la palma de aceite,
el descubrimiento de los genes del espesor del cuesco
y virescens, y la anomalía en el cultivo de tejidos que
genera los genes «Karma», y su futuro desarrollo.
El descubrimiento del gen del espesor del cuesco
(dura, tenera, pisifera) en la palma de aceite, por par-
te de Beirnaert y Vanderweyen (1941) en el Congo,
constituye la base para la producción del material de
siembra dura x pisifera (DxP) (Figura 1). Se ha utili-
zado plenamente el conocimiento de la herencia de
un solo gen, y ello ha generado un enorme crecimien-
to de la producción de aceite.
Las primeras investigaciones de Yangambi en
el Congo, irho en África, nifor en Nigeria, avros
(rispa) en Indonesia, el Departamento de Agricultu-
ra de Malasia, Guthrie en Malasia, ica en Colombia e
iniap en Ecuador, significaron un aporte importante
al mejoramiento de la palma de aceite. Los trabajos
combinados de belgas, franceses, ingleses, holande-
ses, malasios, indonesios, colombianos, ecuatorianos
y tailandeses, han sido el origen del desarrollo actual
del mejoramiento en la palma de aceite.

Figura 1. Descubrimiento del

gen del espesor del cuesco por
Beirnaert, 1941.

Dura x Pisifera

Tenera

192 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 190-202, Tomo I, 2016
Intercambio de materiales mejorados
Al comienzo hubo un considerable intercambio de
materiales mejorados entre países. Los materiales
avros, provenientes de la palma Djongo en el Congo,
Yangambi (Congo), Calabar (Nigeria), Ekona (Came-
rún), La Mé (Costa de Marfil), urt (Guthrie Malasia)
y SP540 (Indonesia), son las principales palmas pisi-
feras implicadas en la producción de semillas. Por el
lado de los parentales femeninos, la Deli dura, deri-
vada de las 4 palmas de Bogor, cumple una función
importante como progenitor femenino en los progra-
mas de mejoramiento de la palma de aceite.
Además de los programas de mejoramiento, el
intercambio de materiales de siembra entre institu-
ciones ha representado un beneficio para la industria.
Un ejemplo fue Socfin de Malasia, que participó en
la “Experience Internationale”, contienen institutos
del África occidental, en particular el irho. Algunos
programas de colaboración destacados fueron el Es-
quema de Mejoramiento Cooperativo (cbs), el Labo-
ratorio de Genética de la Palma de Aceite (opgl), el
Programa de Mejoramiento Sabah (sbp) y el Progra-
ma de Mejoramiento Combinado (cpb) iniciado por
Unilever.
El opgl se fundó en 1963 como un consorcio de
cuatro empresas de cultivo: Kumpulan Guthrie Sdn.
Bhd. (kgsb), Harrisons Malaysian Plantations Sdn.
Bhd. (hmpb), Dunlop Estates Bhd. y Pamol Plantations
Sdn. Bhd (pamol). Este consorcio tuvo a cargo la pri-
mera adquisición, evaluación, utilización y enriqueci-
miento, a gran escala, de germoplasma de la palma de
aceite, con material genético diverso de E. guineensis y
E. oleifera, para utilizarlo en las siembras de sus plan-
taciones (Tabla 1).
El sbp fue una iniciativa que el gobierno estatal
emprendió en la década de 1960 para producir se-
millas probadas en el país, y contribuir al desarrollo

Tabla 1. Introducción de material genético del OPGL.

Año del N.º de experimento

cultivo HMPB Guthrie
E. guineensis
Programa dura
Recolección histórica de material antiguo de dura en Bogor, Sumatra y Malasia 1970 PT49
Programa tenera y pisifera
DxP comercial élite de NIFOR 1967 PT29 GB31
Introducción de TxT de NIFOR 1967 PT30
Cruzamientos obtenidos de NIFOR, Camerún e IRHO 1968 PT33
Teneras de polinización abierta de Bamenda (Camerún) 1969 PT40 GB57
Cruzamientos del material exYangambi con BM119 y teneras de Socfin 1969 PT42
Material ExNIFOR de Ghana para DxT 1972 PT53
TxT de Binga (Zaire) 1973 PT54 GB67
Resistencia a las enfermedades
Material de Camerún resistente al marchitamiento 1968 GB46
E. oleifera
Colección de Panamá, Costa Rica y Colombia
E. oleifera, F1 (GxO), F2 (GxO) y retrocruzamiento (GxF1) 1969 PT50 GB62
GB64a
E. oleifera (polinización abierta) 1971
GB64b

Una mirada al mejoramiento genético de la palma de aceite en los últimos cincuenta años: una
aventura personal • Rajanaidu, N. 193
 de la industria en Sabah. La estación de investiga-
ción Ulu Dusun en Sandakan se creó en 1962 con
este fin. Los materiales mejorados se obtuvieron
mediante un esquema de intercambio organizado
por c.w.s. Hartley, quien sostenía relaciones con el
gobierno estatal. En el esquema participaron cuatro
instituciones malasias y tres africanas. El programa
contenía selecciones de tenera africana, dado que los
progenitores masculinos se cruzaron con materiales
Deli dura de Malasia. Los participantes malasios
fueron Chemara (Guthrie), hmpb (Golden Hope),
Socfin y doa. Las tres empresas africanas que par-
ticiparon en este proyecto fueron el Instituto Nige-
riano para la Investigación de la Palma de Aceite
(nifor), Unilever Nigeria y Unilever Camerún (Ra-
janaidu et al., 1986).
El programa de mejoramiento combinado (cbp),
iniciado por Unilever, realizó el intercambio de mate-
riales mejorados entre el Congo, Camerún, Londres,
Sumatra-Indonesia, Univanich-Tailandia, Dami-Pa-
púa Nueva Guinea, y Unilever-Colombia. Por esta
razón los materiales de mejoramiento relacionados
con Ekona, Djongo, Mongana y Yangambi están rela-
cionados con el cbp.
Las colecciones genéticas recientes
El programa actual de mejoramiento de la palma de
aceite se fundamenta en una base genética reducida.
Para ampliar la base genética, el mpob recolectó ger-
moplasma de Elaeis guineensis y Elaeis oleifera en los
centros de origen de palma de aceite africana y suda-
mericana (Rajanaidu, 1994, Kushairi et al., 2011).
El mpob ha reunido la colección más grande de
germoplasma de E. guineensis en el mundo. La prime-
ra fue en 1973, con la colaboración de mardi y nifor.
Las últimas colecciones se hicieron en Nigeria, Ca-
merún, Zaire, Tanzania, Madagascar, Senegal, Gam-
bia, Sierra Leona, Guinea, Ghana y Angola.
Desde 1982 el mpob ha colectado varias poblacio-
nes de E. oleifera en Colombia, Panamá, Costa Rica,
Honduras, Nicaragua, Surinam, Perú y Ecuador,
como se muestra en la Tabla 2 (Rajanaidu y Ainul,

Tabla 2. Colecciones de germoplasma de E. guineensis y Elaeis oleifera disponibles en el MPOB.

Especies País de origen Años de recolección

Nigeria 1973
Camerún 1984
Zaire 1984
Tanzania 1986
Madagascar 1986
Elaeis guineensis Senegal 1993
Gambia 1993
Sierra Leona 1994
Guinea 1994
Ghana 1996
Angola 1991, 2010
Nicaragua 1982
Honduras 1982
Costa Rica 1982
Colombia 1982, 2004
Elaeis oleifera Surinam 1982
Brasil 1982, 2004
Panamá 1982
Perú 2004
Ecuador 2004

194 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 190-202, Tomo I, 2016
2013). En 1967 United Brands Company inició un
programa en Centroamérica para recolectar E. oleife-
ra, con el fin de evaluarla y utilizarla en bosques natu-
rales de Costa Rica, Panamá y Colombia. Los mejora-
dores de Socfin, opgl y United Plantations realizaron
colecciones en Colombia, Panamá y Costa Rica y,
posteriormente, las introdujeron en Malasia en 1967,
1969 y 1980, respectivamente. La baja producción de
E. oleifera es un gran obstáculo para la utilización de
la especie como material de siembra comercial.
En Alvarado et al. (2010) se resumen las coleccio-
nes de asd. asd ha sembrado las siguientes E. gui-
neensis en Coto, Costa Rica (Tabla 3).
Rey et al. (2004) enumeraron las exploraciones de
E. oleifera en el área amazónica y de E. guineensis en
Angola. E. oleifera está compuesta por 137 accesio-
nes, obtenidas de 13 poblaciones y 92 familias.
El material silvestre de Elaeis guineensis se colectó
en Angola en Caixito, Sumbe, Benguela, Cabinda y
Uige. Se tomaron muestras de 44 accesiones en total
(38 dura y 6 tenera).
En Camerún, Arias (2001) relacionó los detalles
de la colecta de E. guineensis. Cenipalma prospectó
y recolectó 74 accesiones de seis regiones geográficas
de Camerún.
Barba (2015) ha listado las colectas de E. oleifera en
Palmar del Río (pdr), Ecuador. pdr tiene 76 accesiones
de E. oleifera en Pastaza (Taisha), Morona, Neavo Roca-
fuerte, Colombia (Cereté) y Brasil (Coari).
Se han publicado varios artículos sobre la carac-
terización molecular y morfoagronómica de la palma
Tabla 3. Germoplasma de E. oleifera sembrado en Coto, Costa Rica (1970-2004).
Origen
Honduras
Nicaragua
Costa Rica
Panamá
Colombia
Surinam
Brasil
Ecuador
Una mirada al mejoramiento genético de la palma de aceite en los últimos cincuenta años: una
aventura personal • Rajanaidu, N.
de aceite en Angola y Camerún (Arias et al., 2012),
Barcelos et al. (2002) sobre la diversidad genética en
poblaciones de E. guineensis y E. oleifera, y la relación
entre ellas. Se destacaron las poblaciones de oleife-
ra de Brasil, Centroamérica, Gu­yana Francesa y Su-
rinam, Perú y Brasil, y separaron claramente las de E.
guineensis en otro grupo.
El rendimiento de los híbridos
interespecíficos
El descubrimiento de los híbridos (Elaeis guineensis
x Elaeis oleifera) resistentes al amarillamiento letal
en Colombia condujo al establecimiento de la pri-
mera plantación comercial (Turner, 1981). También
se encontró que el híbrido OxG era tolerante a la
enfermedad de la Pudrición del cogollo en Lati-
noamérica, y al marchitamiento vascular en África
(Amblard et al., 1999). Así mismo, se ha considera-
do una fuente prometedora de una nueva variación
genética de la palma de aceite (Meunier y Hardon,
1976). No obstante, los híbridos interespecíficos de
E. oleifera tienen una baja producción de aceite, en
comparación con los materiales comerciales de DxP.
mpob, up y felda efectuaron amplias investi-
gaciones sobre los híbridos interespecíficos. up ha
cultivado casi 500 hectáreas para producir aceite de
híbridos con fines comerciales. En el caso de E. olei-
fera, las progenies introgresadas del grupo Panamá x
Colombia tienen el mayor rendimiento de racimos de
fruta fresca (rff), con 139,98 kg/palma/año, debido
principalmente a la gran cantidad de racimos (nr) de
Número de accesiones
43
43
107
88
41
13
31
4
195
 12,67 Racimos/palma/año, y peso medio de racimo
(pmr) de 10,23 kg/palma/año. El grupo Panamá x
Colombia también mostró el mejor peso medio del
fruto (pmf), y la mejor relación aceite en mesocarpio
seco (ac/ms), frutos a racimo (f/r) y aceite a racimo
(ac/r) (Noh et al., 2012).
La baja producción de aceite de E. oleifera y su hí-
brido interespecífico, en comparación con el material
de siembra comercial DxP, ha mejorado mediante re-
trocruzamientos. Los de primera generación (bc 1)
se crearon con híbridos interespecíficos (OxP), como
progenitor femenino y E. guineensis var. pisifera, como
progenitor masculino. Sin embargo, los retrocruza-
mientos no tuvieron un efecto significativo en el peso
promedio de racimo. mpob, up y felda tienen un pro-
grama de retrocruzamiento activo. En la mpob, la pro-
genie que tuvo el mejor rendimiento de rff en el pro-
grama de retrocruzamiento fue la pk1298, con 94 kg/
palma/año, y un ac/r fue de 16,27 % (Noh et al., 2012).
Los híbridos interespecíficos (E. oleifera x E. gui-
neensis) se siembran, en gran medida, en América
del Sur. Según informes recientes, Coari x La Mé,
Coari x Pobe y Taisha x Avros son más tolerantes a la
Pudrición del cogollo (Navia et al., 2014, Amblard,
2010, Barba, 2015).
Cultivo de tejidos
En Malasia, la producción actual de ramets ha ascen-
dido a cinco millones, pero los 11 laboratorios del
país todavía tienen dificultades para llegar al objeti-
vo de 40 millones de plántulas en 2017 (Kushairi et
al., 2011). El tiempo total de crecimiento que necesita
una plántula de un cultivo de tejidos desde el explante
Tabla 4. Severidad acumulada según tipo de cruzamiento.
Cruzamiento
Coari x La Mé
Coari x Pobe
Patuca (E.g.)
Pepilla (E.g.)
Fuente: Navia, et al. (2014).
196
hasta la etapa de previvero es de 2 a 3 años. Además,
el proceso de cultivo de tejidos ha sufrido una gran
pérdida debido a la baja tasa de conversión de explan-
tes a callos (19 % aproximadamente), y de callos a la
etapa embrioide (4  % aproximadamente) (Corley y
Tinker, 2003).
Para aprovechar exitosamente la técnica de propa-
gación clonal de cultivo de tejidos y las subsecuentes
iniciativas ampliadas en esta área se requiere resolver
o superar varios problemas cruciales. Estos proble-
mas incluyen la variación somaclonal, la eficiencia
de la clonación, la eficiencia de selección de ortets y
la reclonación y el sistema de cultivos de suspensión
(Soh et al., 2010).
Recientemente Meilina et al. (2015) identificaron
el marcador molecular “Karma” para descartar las
plántulas de un cultivo de tejidos que son suscepti-
bles a sufrir anomalías. Este avance puede incentivar
el cultivo de clones de palma de aceite.
La técnica del cultivo de tejidos tiene un excelente
potencial para multiplicar los progenitores dura y pi-
sifera, con el fin de producir semillas semiclonales y
biclonales (Figura 2).
La ciencia del mejoramiento de la
palma de aceite
Métodos de mejoramiento
Los principales programas de mejoramiento de la
palma de aceite han adoptado el método de selección
recurrente modificada, o el de selección recurrente
recíproca. El primero se emplea principalmente en
% final de severidad acumulada
52,2
44,0
98,0
96,0
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 190-202, Tomo I, 2016
 Clon dura x pisifera
Semillas semiclonales
Clon dura x Clon pisifera
Semillas biclonales
los programas del Lejano Oriente, mientras que el se-
gundo es adoptado en países del África occidental e
Indonesia, asesorados por cirad (Soh et al., 2010).
• La selección recurrente modificada (SRM)
La gran mayoría de los mejoradores de Malasia uti-
lizan la srm debido a que las pisiferas individuales
se cruzan con varias Deli duras (Figura 3). Con el
diseño del mejoramiento nc 1 (North Caroline), se
puede calcular la aptitud combinatoria, específica y
general, de las pisiferas. Al observar el rendimiento
promedio de una pisifera con varias Deli dura se
puede determinar la aptitud combinatoria general
(acg). Si la media es alta, la acg de la pisifera se
considera buena y viceversa. Sin embargo, en la
aptitud combinatoria específica (ace) solo ciertos
cruzamientos tienen un alto rendimiento. Después
de registrar el rendimiento durante al menos cua-
tro años, se seleccionan las palmas para la produc-
ción de semillas (Rajanaidu et al., 2000).
Ensayos
Ciclo ‘0‘
DxD
DxP
Prueba de
progenie
Introgresión
Ensayos
Ciclo ‘1‘
DxD
Una mirada al mejoramiento genético de la palma de aceite en los últimos cincuenta años: una
aventura personal • Rajanaidu, N.
dura x clon pisifera
Figura 2. Semillas clonales.
Semillas semiclonales
• La selección recurrente recíproca (SRR)
A diferencia de la srm, en la srr los cruzamientos de
prueba de parentales y las palmas autofecundadas de
los parentales se siembran en campo al mismo tiem-
po. En un período hasta de 12 años es posible produ-
cir una cantidad limitada de semillas DxP de buena
calidad. El Institut National pour l’Etude Agronomi-
que du Congo Belge (ineac) desarrolló en Yangambi
el primer programa de mejoramiento que abordó la
srr (Corley y Tinker, 2003). Al comparar srr con
srm, la primera toma más tiempo porque implica dos
etapas (Figura 4). El primer paso consiste en evaluar
las Deli duras y pisiferas progenitoras, a manera de
cruzamientos TxT o TxP. Después se debe probar la
progenie de Deli duras con las pisiferas élite. Es posi-
ble producir una gran cantidad de semillas DxP, pero
esto tardaría unos 20 años. Además, la SRR requiere
una gran zona de experimentación para probar las
progenies de los cruzamientos DxT y las palmas au-
tofecundadas (Rajanaidu et al., 2000).
Figura 3. Método de
Ensayos mejoramiento de SRM.
TxT/TxP
DxP
Produción
de semillas
Ensayos
TxT/TxP
197
 Figura 4. Esquema de selección
recurrente recíproca en la palma de
aceite. Progenies dura Ciclo `0’ Progenies tenera

DxD DxT TxT TxT

DxD Palmas Prueba de Palmas Palmas
Cruzamientos autofecundadas progenie de autofecundadas autofecundadas
y hermanas híbridos y hermanas y no hermanas

DxP
Producción de
semillas híbridas

Ciclo `1’

TxT
DxD DxT
Palmas
Palmas Prueba de
autofecundadas
autofecundadas progenie de
y hermanas
y hermanas híbridos

• La mejor predicción lineal no sesgada (BLUP)
Los métodos comunes de srm o srr son difíciles de
aplicar con éxito sobre los híbridos. Los mejorado-
res que quieran seleccionar clones o progenitores de
semillas de poblaciones híbridas deben poder pre-
decir el rendimiento de la progenie o de los clones.
La confiabilidad de la identificación de genotipos
superiores es importante para el éxito de la selec-
ción y, por tanto, las ganancias genéticas se puedan
lograr a través del mejoramiento. Sin embargo, en
los híbridos hay muchos factores que pueden afec-
tar negativamente la capacidad de predecir el rendi-
miento. La correlación suficientemente alta entre el
rendimiento previsto y el observado de los híbridos,
en cuanto a la mayoría de carácteres importantes, se
obtuvo mediante conjuntos de datos altamente asi-
métricos. El coeficiente blup debería ser suficiente
para realizar la selección, con base en el carácter de
la producción de aceite, que es el principal objetivo
de los programas de mejoramiento de la palma de
aceite (Purba et al., 2001).
La técnica de blup incluye los mejores cálculos
lineales no sesgados de los efectos fijos, a través de
cuadrados mínimos, generalizados con la mejor
predicción lineal no sesgada de los efectos genéti-
cos aleatorios (valor de mejoramiento). El proce-
dimiento blup también tiene la ventaja de poder
incluir información de los parientes para mejo-
rar la predicción de las tendencias genéticas, tales
como los grupos genéticos diferentes y el sesgo de
la selección, y tratarlas como efectos fijos. En efec-
to, con el procedimiento blup los efectos de interés
secundario se tratan como efectos “problemáticos”
que deben eliminarse a manera de efectos fijos y, en
consecuencia, se obtiene una predicción genética no
sesgada o valor de me­joramiento de los progenitores
(Soh, 1994).
Los diseños experimentales
A fin de seleccionar las palmas individuales para el
mejoramiento, es necesario medir la producción de
los racimos y, para analizar el contenido de aceite y
palmiste, en ocasiones también se utilizan medidas
vegetativas. Para realizar el mejoramiento a partir
de las palmas seleccionadas se debe hacer una poli-

198 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 190-202, Tomo I, 2016
nización controlada, y las progenies generadas deben
sembrarse en diseños experimentales con validez es-
tadística (Corley y Tinker, 2003).
• El diseño en bloques completos aleatorizados
(DBCA)
El germoplasma y los materiales de mejoramiento re-
colectados en África y Sudamérica se sembraron en la
Estación de Investigación de mpob en Kluang, Johor.
Se utilizó un diseño experimental de dbca para es-
tudiar el rendimiento de los materiales. Las diversas
etapas y el tiempo para la recolección, establecimien-
to, evaluación y liberación de los materiales de siem-
bra élite tardan aproximadamente veinte años.
• El diseño completamente aleatorizado (DCA)
El dca es un diseño flexible que puede incorporar
progenies de tamaño diferente. En particular, es útil
para probar en campo las progenies resistentes a las
enfermedades. En el mpob se probaron las progenies
DxP utilizando tanto el diseño dbca como el dca.
• La interacción del genotipo x el ambiente (GxA)
Los estudios demuestran que los genotipos tienen una
respuesta diferente a los cambios ambientales, como las
precipitaciones, el suelo y las prácticas agronómicas. El
nivel de interacción GxE en los materiales de siembra
DxP, es más bien limitado. Sin embargo, los clones de
palma de aceite muestran un nivel importante de GxE.
La interacción GxE es relevante para el mejoramiento
de la resistencia a las enfermedades en diversas loca-
lidades. Por ejemplo, las pruebas con Ganoderma en
el Sudeste Asiático, Fusarium en África, y la Pudrición
del cogollo y de flecha en Sudamérica.
Selecciones genómicas
Del mejoramiento de fenotipo a genotipo se ha pa-
sado al de genotipo a fenotipo. Esto se conoce como
selección genómica.Wong y Bernardo (2008), David
Cros et al. (2014) han aplicado el método de selección
genómica al mejoramiento de la palma de aceite. Se
prevé que en los cultivos perennes se reduce el tiem-
po del ciclo de mejoramiento y aumenta la intensidad
de la selección, utilizando pequeñas poblaciones de
entrenamiento.
Una mirada al mejoramiento genético de la palma de aceite en los últimos cincuenta años: una
aventura personal • Rajanaidu, N.
• Mejoramiento en cuanto a resistencia a las
enfermedades
En Malasia, la palma de aceite afronta brotes cró-
nicos de Pudrición basal del estípite (pbe) por el
hongo Ganoderma, lo cual puede ocasionar grandes
pérdidas económicas. La resistencia de la planta es
la forma de control menos costosa. Cuatro especies
de Ganoderma se han asociado a la palma de aceite.
Según los reportes, tres de estas especies son patogé-
nicas para la palma de aceite y Ganoderma boninense
es la más destructiva (Idris et al., 2000, Nurniwalis,
2009). Con base en el estudio del mpob (Norziha et
al., 2012), las progenies entrecruzadas de origen El-
mina fueron más resistentes a Ganoderma en com-
paración con las progenies autofecundadas. Entre las
progenies de origen Elmina, la ms3358 tuvo la mayor
resistencia a la enfermedad de pbe, y es una progenie
que tiene potencial para desarrollarse como material
tolerante a Ganoderma.
Recientemente socfindo lanzó al mercado un
material de siembra resistente a Ganoderma. Varias
organizaciones de Malasia e Indonesia han mejora-
do el tamizaje de las progenies con diferentes cepas
de Ganoderma.
Las tecnologías moleculares
En las investigaciones de la palma de aceite se han uti-
lizado métodos moleculares en la evaluación y mejora-
miento del germoplasma. Primero se usaron isoenzimas
para estudiar la diversidad genética en Elaeis spp. (Ghes-
quiere, 1985, Moretszohn, 1995). También se ha estudia-
do el polimorfismo en la longitud de los fragmentos de
restricción (rflp, por sus siglas en inglés) en la palma
de aceite (Mayes et al., 1997, Maizura et al., 2006). Bar-
celos et al. utilizaron los marcadores de polimorfismo
de longitud en los fragmentos amplificados (aflp, por
sus siglas en inglés) y de rflp para evaluar la relación
genética entre las diferentes accesiones de la palma de
aceite americana. Los marcadores microsatélite (simple
sequence repeats, ssr) son ahora una opción popular
para estudiar la diversidad genética de la palma de aceite
(Billotte et al., 2001;Zulkifli et al., 2009; Ngoot Chin et
al., 2010; Seng et al., 2011; Noorhariza et al., 2012).
Singh et al., (2013) y Singh et al., (2014) han pu-
blicado en la revista Nature los resultados de sus
199
 investigaciones sobre la secuencia del genoma de la
palma de aceite, los genes del cuesco y el color del
fruto (virescens). Ahora es posible determinar el tipo
y el color de los frutos a nivel de plántula.
Varios grupos han identificado los genes marca-
dores relacionados con la altura de la palma, el con-
tenido de ácidos grasos y lipasa (Cadena et al., 2012,
Montoya et al., 2014, Pootakham et al., 2015).
Conclusiones
nómicos, como el cuesco, el color del fruto, el mantle
en cultivo de tejidos, los ácidos grasos, la altura de
la palma, etc., a nivel de genes y marcadores. En los
próximos 50 años la tecnología molecular se integra-
rá en forma estrecha con el mejoramiento convencio-
nal de la palma de aceite. En el futuro la tecnología de
haploides tendrá un gran impacto, la palma de aceite
C4, el bajo contenido de lipasa, la transformación, la
edición de los genes, palmas enanas y materiales de
siembra para que se utilicen eficazmente los recursos.

En el período comprendido entre 1965 y 2015 se Agradecimientos

presentó una gran transformación y desarrollo de la
industria de la palma de aceite con la siembra de ma-
teriales de alto rendimiento. Se reunió gran cantidad
de germoplasma de las especies guineensis y oleifera.
Se identificaron los genes de diversos carácteres agro-
Los autores expresan su gratitud al Director General
del mpob por su permiso para presentar este artículo.
También valoran sobremanera la ayuda de Azleha D.,
del grupo de mejoramiento.

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202 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 190-202, Tomo I, 2016
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sesión 3:
agronomía de la
palma de aceite

Indicadores agroambientales para la producción

de palma de aceite sostenible*
Agri-Environmental Indicators for a Sustainable Oil Palm Production

citación: Caliman, J. (2016). Indicadores agroambientales para la producción

de palma de aceite sostenible. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 203-213.
palabras clave: indicadores agroambientales, materia orgánica del suelo,
palma de aceite, residuos de pesticidas, servicios del ecosistema.
keywords: Environmental indicators, soil organic matter, oil palm, pesticide
residues, ecosystem services.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Strong Tower Consulting.

Jean Pierre Caliman

Director del Smart Research Institute
Director of the Smart ResearchInstitute
jpcaliman@sinarmas-agri.com

Resumen
Los indicadores agroambientales fueron propuestos por la Organización para la Cooperación y el
Desarrollo Económicos, OCDE (1998) para evaluar y monitorizar el im­pacto de la agricultura sobre
el medio ambiente, con el objetivo de lograr una agricultura sostenible, la cual es una preocupación
pública de gran importancia. Incluye varios componentes del medio ambiente, como la calidad de
la tierra, la calidad del agua, la biodiver­sidad y las emisiones de gases de efecto invernadero.

Se están desarrollando indicadores específicos para el cultivo de palma de aceite. La estrategia es

construir un conjunto de indicadores que sean simples, entendi­bles, que ofrezcan un panorama re-
presentativo de la situación y que permitan hacer diagnósticos, predic­ciones, monitorizar el progreso,
tomar decisiones y en algunos casos, también para fines de comunicación.

En este artículo se hace un recuento del enfoque y la metodología que se han elegido y se da un infor­me
del progreso en la investigación. En la actualidad, el enfoque está sobre la validación de los indicadores
clave que fueron desarrollados en un pa­sado reciente, específicamente en cuanto a la calidad del agua
(residuos de pesticidas y nutrientes). También se presenta un indicador para la materia orgánica.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 203-213, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 203
 Además se presenta el trabajo actual para evaluar el enlace entre el impacto sobre el me­dio ambiente
de las prácticas sobre el terreno del cultivo de palma de aceite y la retroalimentación de este im-
pacto sobre el rendimiento de la palma mis­ma. La plataforma de Función de la Biodiversidad y del
Ecosistema en la Agricultura Tropical (Biodi­versity and Ecosystem Function in Tropical Agricul­ture,
BEFTA) establecida en Sumatra (Indonesia) buscó estudiar la relación entre la complejidad del hábitat
en el sotobosque de una plantación, la biodiversidad y la función del ecosistema, con el ren­dimiento
de las palmas. Los resultados preliminares muestran que la reducción en la diversidad de la flora y en
la cobertura de la vegetación lleva a un descenso en la cantidad de plagas, como también a variaciones
más extremas en la temperatura de la tierra.

Se muestra cómo la monitorización de la di­versidad y la cobertura de la flora en el sotobosque pueden

ayudar a cuantificar el estado químico de la tierra, ayudando así a la gestión de fertilizante; y se pre-
sentarán otros vínculos entre el medio ambiente y el posible rendimiento de las palmas.

Abstract
Agri-environmental indicators were proposed by Organisation for Economic Co-operation and
Development, OECD (1998) to evaluate and monitor the impact of agricultura on the environment, with
objective the achievement of sustainable agriculture, a major pu­blic concern. It includes various compo-
nents of the environment such as soil quality, water quality, biodi­versity and greenhouse gases emission.

Dedicated indicators are being developed for oil palm cultivation. The strategy is to build a set of
indicators, which are simple, understandable, providing a repre­sentative picture of the situation,
and allowing making diagnostic, prediction, monitoring progress, taking decisions and in some
case for communication.

In this paper, we remind the approach and me­thodology chosen and give an update about research
progress. Current focus is placed on the validation of key indicators developed in the recent past,
specifi­cally regarding water quality (pesticides residues and nutrients). An indicator about soil orga-
nic matter are also presented.

The paper are also presents current work to eva­luate the link between the impact of field practices
in oil palm cultivation to the environment, and the feed-back of this impact on the performance of
the palms itself. The Biodiversity and Ecosystem Function in Tropical Agriculture platform (BEFTA)
set up in Sumatra (Indonesia), aimed to study the rela­tionship between habitat complexity in the
unders­torey of a plantation, biodiversity and ecosystem function, and the performance of the palms.
Prelimi­nary results show that a reduction of the flora diversity and vegetation cover leads to a decline
of assassin bugs number, as well as more extreme variations in soil temperature.

We also show how a monitoring of the diversity and coverage of flora in the understorey can help to
quantify the chemical soil status, helping for fertilizer management. Other links between the environ-
ment and the possi­ble performance of the palms are presented.

Los indicadores agroambientales fueron propuestos
por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económicos, ocde (1998), para evaluar y monitorizar
el impacto de la agricultura sobre el medio ambiente,
con el objetivo de lograr una agricultura sostenible, lo
cual es una importante preocupación pública. Se inclu-
yen diversos componentes medioambientales, como la
calidad del suelo, la calidad del agua, la biodiversidad y
la emisión de gases de efecto invernadero.
Se están desarrollando indicadores para la agri-
cultura de clima templado; por ejemplo, el método
indigo® (Girardin et al., 2005), y posteriormente se
están adaptando para el cultivo de la palma de aceite
(Carcasses, 2004, Caliman et al., 2005, Rodrigues et
al., 2010). La estrategia es crear un conjunto de indi-
cadores que sean simples, comprensibles, que brinden
una imagen representativa de la situación, y que per-
mitan hacer diagnósticos, predicciones, monitoriza-

204 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 203-213, Tomo I, 2016
ción del progreso, que faciliten la toma de decisiones
y en algunos casos, que ayuden en la comunicación.
Este documento ofrecerá una actualización de
los avances con relación al desarrollo de este tipo de
herramientas: recordaremos el enfoque y la meto-
dología elegidos y presentaremos una actualización
respecto del trabajo de investigación, centrada en el
trabajo de validación de estos indicadores, con base
en el ejemplo de IPhy-Palm, el indicador relacionado con
la utilización de plaguicidas. También se presentará el
indicador ISOM para la materia orgánica del suelo.
Este documento también describe los estu-
dios actuales para evaluar la relación del impac-
to sobre las prácticas de campo y en el cultivo de
la palma de aceite sobre el medio ambiente, jun-
to con la retroalimentación de este impacto sobre
la productividad de las palmas mismas. Se hace
una descripción de la plataforma de Función de la
Biodiversidad y los Ecosistemas en la Agricultura
Tropical (Biodiversity and Ecosystem Function in
Tropical Agriculture, befta) elaborada en Sumatra
(Indonesia), cuyo objetivo es estudiar la relación
entre la complejidad del sotobosque de una planta-
ción, la biodiversidad y su función conexa al eco-
sistema, y la productividad de las palmas. También
se muestra cómo la monitorización de la diversidad
y la cobertura de la flora del sotobosque pueden
ayudar a cuantificar el estado químico del suelo, lo
cual ayuda con la gestión de fertilizantes.
Indicadores agroambientales:
objetivo y enfoque (Girardin et al., 2005)
El objetivo principal de los indicadores es desarrollar
una herramienta para evaluar el impacto de la pro-
ducción de aceite de palma sobre el medio ambiente.
Esta herramienta debe estar fundamentada de forma
científica para ser creíble, pero a la vez debe ser sim-
ple y comprensible para todos, desde los plantadores
hasta los consumidores, y debe dar un panorama re-
presentativo de la situación. Además, su implemen-
tación no debe ser costosa. En consecuencia, una he-
rramienta de este tipo podría emplearse para hacer
el diagnóstico, para monitorizar el progreso, y debe
ser una herramienta de decisión con el fin de elegir
la mejor opción en términos de prácticas. Por último,
Indicadores agroambientales para la producción de palma de aceite sostenible • Caliman, J.
los resultados se utilizarán para la comunicación in-
terna y externa.
Tales indicadores no pretenden medir, controlar o
verificar el nivel de un parámetro específico, sino eva-
luar el nivel probable de dicha variable en comparación
con un valor de referencia, que se reconoce como un va-
lor representativo de las prácticas sostenibles. El método
indigo® fue desarrollado con este fin (Bocksteller et al.,
1997, Girardin et al., 1999 a, b), y varios de sus indica-
dores han sido o están siendo adaptados al cultivo de la
palma de aceite (Caliman et al., 2006).
El método indigo® fue propuesto por el Instituto
Nacional de Investigación Agronómica (Institut
National de la Recherche Agronomique, inra) en
Francia, con el fin de caracterizar el efecto de las prác-
ticas de campo sobre la agricultura de tierra templa-
da, en cada parámetro específico del medio ambiente
(Bockstaller et al., 1997, Girardin et al., 1999a, 1999b,
2000). El concepto se presenta como una matriz de
doble entrada que cruza las prácticas agrícolas y los
componentes ambientales del agroecosistema (Figura
1). Una celda de la matriz representa el impacto de
una práctica agrícola sobre un parámetro específi-
co del medio ambiente. Representa la unidad básica
(módulo) sobre la cual se basará el indicador agroam-
biental. La agregación “vertical” de todos estos módu-
los en una columna específica representa el impacto
de una práctica sobre todos los parámetros del medio
ambiente; este es el indicador agroambiental. Por otra
parte, la agregación horizontal de cada módulo da
la posibilidad de construir un indicador de impacto
ecológico, es decir, la evaluación de cómo un paráme-
tro específico del medio ambiente se ve afectado por
la producción de aceite de palma.
En 2006 se propusieron varios indicadores dedica-
dos al cultivo de palma de aceite (Caliman et al.) Se
presentaron dos indicadores en la XV Conferencia
Internacional sobre Palma de Aceite de Cenipalma: IN
y IPhy-Palm. Sin embargo, la validación no estaba termi-
nada para ese momento. Ambos indicadores evalúan
el riesgo de las prácticas agrícolas sobre la calidad de
las aguas superficiales, las aguas subterráneas y la at-
mósfera. Todas las variables utilizadas por estos indi-
cadores son datos que por lo general se registran en el
manejo de las plantaciones, o que son definidos en las
tablas adjuntas.
205
 Figura 1. Matriz agroambiental de
la producción de aceite de palma.

Irriga- Pesti-
Preparación y manejo de la tierra Fertilización Extractora
ción cidas

Indicador ecológico
Adecuación del entor-
(Primera generación)
Preparación del suelo

Preparación del suelo

Limpieza del terreno

Cultivo de cobertura

(MGAT biomasa)

Pérdida de aceite
Materia orgánica
no (Terrazas, ...)

Micronutrientes
de leguminosas
(renovación)

Herbicidas
Plantación

Nitrógeno

Pesticidas
Matriz agroambiental

Magnesio

Efluente
(Ca, ...)
Potasio
Fósforo
Vivero

Humo
EFB
Superficie ++ ++ + ++ ++ + + ++ + ++ + + + + + ++ ++
Agua Aguas Calidad de
++ + + + + + ++ ++ + + + + + + ++
subterráneas aguas
superficiales
Aire + + + ++ + + ++ ++ ++ Calidad del agua
Químico ++ + + + ++ ++ + + + + + + ++ + subterránea
Calidad del aire
Suelo Físico ++ ++ ++ + ++ ++ + + ++ + Fertilidad quími-
ca del suelo
Biológico + + + + ++ ++ + + + + ++ + Fertilidad física
del suelo
Recursos no renovables + + + + ++ + ++ ++ ++ ++ ++ + + Fertilidad bioló-
gica del suelo
Biodiversidad +++ + + + + + + + + ++ ++ + + Valores del
recurso natural
Paisaje +++ + + + + + + + + + +

Indicador agroambiental iOM iN iP iK iMg iPHY

Validación de los indicadores de variables, hemos seleccionado aquellas que depen-

existentes den más de las condiciones de campo o las prácticas
agrícolas, por ejemplo, la pendiente del terreno y el
La validación científica de este tipo de indicadores, manejo de la cobertura vegetal. El agua superficial
de manera similar a la validación de los modelos I-Phy fue agregada al componente de la tasa para cal-
científicos, es uno de los pasos más difíciles en este cular el agua de superficie I-phy modificada.
tipo de investigación. Para dicho fin, se estableció un diseño de campo
IPhy-Palm se presenta en una etapa final de valida- dedicado para una plantación de palma de aceite ubi-
ción. Este indicador está compuesto por cuatro com- cada en Sumatra (Indonesia). El estudio de escorren-
ponentes: tres de ellos evalúan el riesgo del uso de tía también se utiliza para evaluar las aguas de esco-
pesticidas sobre los tres elementos ambientales prin- rrentía, la erosión del suelo y la pérdida de nutrientes
cipales: las aguas subterráneas, las aguas superficiales con relación a la cobertura y la pendiente del suelo.
y el aire; el último depende de la tasa de plaguicidas Estos experimentos de campo consisten en parcelas
aplicados. Posteriormente, los distintos componentes de 18 x 18 m (que incluyen cuatro palmas), aislados
se agregan utilizando la lógica difusa y un sistema de de la intrusión de agua de escorrentía exterior con un
reglas de decisión (Wohlfahrt et al., 2009). La valida- muro de 20 cm de alto construido con ladrillos. El
ción consiste en comparar los puntajes de IPhy-Palm con agua de escorrentía y la erosión del suelo se recogen
las pérdidas de pesticida medidas en el campo. en bidones de plástico calibrados.
Decidimos validar el componente de agua super- Decidimos enfocarnos en los herbicidas, los prin-
ficial, que evalúa el riesgo de contaminación de las cipales pesticidas utilizados en las plantaciones (los
aguas superficiales por residuos de pesticidas. Dado herbicidas representan 98 % de los pesticidas utiliza-
que en este componente se incluyen un gran número dos, gar, 2014).

206 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 203-213, Tomo I, 2016
 Para probar el indicador se aplicó una dosis fija
(11 ± 0,38 ml) de glifosato por parcela en 27 parce-
las. En tres parcelas se aplicaron las prácticas están-
dar (dosis según la cobertura de maleza). Después de
cada evento de precipitación de lluvia, se recogió el
agua de escorrentía y se determinó la concentración
de glifosato. No se encontró ampa (producto de de-
gradación del glifosato) en el agua de escorrentía. Se
efectuaron cálculos de las pérdidas de glifosato (g.ha-
1
) y del agua I-Phy modificada de la superficie.
La prueba de validación consiste en definir una
zona de probabilidad que representa al indicador y
compararla con las pruebas de mediciones de cam-
po, verificando si el área de probabilidad incluye al
menos 95 % de los puntos (Bockstaller and Girardin,
2003). Consideramos los valores con malos puntajes
y bajos niveles de pérdida de pesticidas “dentro del
área de probabilidad”; los buenos puntajes corres-
pondientes a las pérdidas elevadas de los pesticidas
están excluidos de esta área. La matriz se completará
y los parámetros I Phy-Palm pueden ajustarse según los
resultados posteriores. En la actualidad, IN también
se encuentra en fase de validación, y los resultados
podrían ser presentados en una próxima publicación.
cambio climático. Se afirma que un aumento anual de
0,4 % en el carbono orgánico del suelo podría compen-
sar las emisiones de CO2 (www.agriculture.gouv.fr/).
Esto gracias a su gran producción de biomasa, de la cual
una parte significativa (frondas) se recicla durante todo
el año en los campos, o al final del ciclo; es decir, cada ±
25 años, mientras que la mayor parte de la enorme can-
tidad de residuos orgánicos obtenidos después de la ex-
tracción también se reciclan en las plantaciones, aunque
la aplicación cubre un área más limitada (pero con una
alta tasa por hectárea), la palma de aceite podría contri-
buir a la mitigación del cambio climático a través de un
aumento en la fijación de carbono en el suelo.
El objetivo del indicador de materia orgánica del
suelo (mos), ISOM, en el cultivo de la palma de aceite,
es predecir el nivel futuro de mos con base en un equi-
librio fuente/sumidero. Para ello, el indicador incluye
dos submódulos, respectivamente. La Tabla 1 presenta
los parámetros y las variables utilizadas en el indicador.
La computación se realiza por separado para cada
componente espacial de una plantación (incluyendo
pilas de material de poda de hoja (calle de palera),
calle de cosecha, círculo de palma...) que se agregan
posteriormente en una puntuación única.

Desarrollo de nuevos indicadores ISOM Fuente orgánica (para conocer más

(Piercy Gatineau et al., 2010) detalles, véase Piercy Gatineau et al., 2010)

Además de la consideración de la fertilidad del suelo, La fuente interna se refiere a la materia orgánica ha-
el carbono orgánico del suelo atrae un interés cada vez llada en el suelo o en la tierra, mientras que las fuen-
mayor por su posible contribución a la mitigación del tes orgánicas se refieren a la parte de estos materiales

Tabla 1. Ejemplos de variables y parámetros utilizados para ISOM.

Parámetros
Coeficientes iso-húmicos de fuentes internas y contenidos de agua
Peso en fresco de los residuos
Contenido de suelo arcilloso y piedra caliza
% de materia orgánica activa en la materia orgánica del suelo
Profundidad del suelo; masa de volúmenes en el suelo; reserva máxima de agua en el suelo
Temperatura de referencia Tref
Variables
Características vegetativas de la palma (radio del tallo...)
Ocupación de la tierra (ancho del camino de cosecha, ancho de pila fronda, ancho de aplicación de EFB, ...

Indicadores agroambientales para la producción de palma de aceite sostenible • Caliman, J. 207

 que efectivamente entran en el suelo para covertirse
en materia orgánica. La cantidad del origen orgáni-
co en el suelo depende del “Coeficiente de isohúmico
(k1)”. Basado en el modelo de Henin-Dupuis:
(Ecuación 1)
Fuentes orgánicas = Sk1 • fuente internai
En donde i es el índice de fuentes internas
Las fuentes internas tomadas en cuenta en el
I-SOMpalm son:
• Malezas: densidad total de cada especie relaciona-
da con el número de especies de maleza por hec-
tárea; la fuente potencial de la materia orgánica (es
decir, si el cuerpo muere) a partir del tejido de la
especie en cuestión, por hectárea, ...)
• Raíces de la palma: la rotación de raíces debe ser
evaluada o tomada de la literatura (con frecuencia,
30 % se considera como valor por defecto).
• Otros tipos de biomasa reciclada de palmas: raci-
mos de fruta vacíos.
Sumidero orgánico (para conocer más detalles,
véase Piercy Gatineau et al., 2010).
Las pérdidas orgánicas se dan principalmente por
medio de la mineralización. El nivel de pérdidas or-
gánicas depende del coeficiente de mineralización k2.
Basado en el modelo Henin-Dupuis, depende princi-
palmente de la textura, la temperatura y la humedad del
suelo. En el modelo, las pérdidas orgánicas a lo largo de
un año se estiman a partir de la siguiente ecuación:
(Ecuación 2)
Pérdidas orgánicas = OMa • M • k2
con (Ecuación 3)
k2 = K • fθ • fw • P
(Ecuación 4)
k2 = OMa • M • K • fθ • fw • P
En donde:
OMa: porcentaje de materia orgánica en el suelo.
Normalmente es el 35 % del nivel total de ma­teria
orgánica del suelo.
208
M: masa del suelo en la zona considerada y sobre una
profundidad pertinente
K: coeficiente de potencial en función del contenido
de arcilla y piedra caliza del suelo.
K = 1200/[(110 + ‰ arcilla) •
(600 + ‰ piedra caliza)]
fθ: Coeficiente correctivo relacionado a la temperatu-
ra del suelo (modelo STICS 5)
fθ = exp(a • (T-Tref))
T: temperatura
a: coeficiente; a = 0,115
Tref: temperatura de referencia; en países tropicales Tref
= 25 oC
fw: Coeficiente correctivo relacionado con la hume-
dad del suelo (modelo STICS 5)
fw(SWR) = 1
si SWR ≥ 0.8 • SWRmax
fw(SWR) = SWR/(0.8 • SWRmax)
si SWR < 0.8 • SWRmax
SWR: reserva de agua del suelo (soil water reserve).
el fw se calcula para cada período de diez días, y el fw
final es la media de más de un año
P: Coeficiente de ponderación.
P = I • TS • fr
I : coeficiente corrección relacionado al riego. si hay
riego, I = 1; si no hay riego, I = 1,25.
TS: coeficiente corrector relacionado con la labranza
del suelo en los cuatro años anteriores.si hay al
menos uno, TS = 1; si es solo superficial, TS = 0,8;
si no hay labranza, TS = 0.
fr: coeficiente corrector con relación a la frecuencia
de fertilización orgánica.
si > 10 años, fr = 1; si de 5 a 10 años, fr = 1,1; si 3-5
años, fr = 1,2; si < 3 años, fr = 1,3.
Sistema de puntuación (para conocer más
detalles, véase Piercy Gatineau et al., 2010)
La puntuación de la materia orgánica del suelo en
cada zona (I-SOMzone) se obtiene mediante la
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 203-213, Tomo I, 2016
comparación de la proporción de humus con el ni-
vel de materia orgánica del suelo objetivo. Sin em-
bargo, se consideran dos métodos de cálculo ba-
sados en la comparación entre el nivel de materia
orgánica del suelo real del bloque comercial y el
nivel objetivo:
Si el nivel real es mayor que el nivel teóricamente
adecuado, las pérdidas orgánicas se calculan con el
nivel real:
(Ecuación 5)
I-SOMzonei = 10 • (fuentes orgánicas /
pérdidas orgánicas)
Si el nivel actual es inferior al nivel teóricamente ade-
cuado, las pérdidas orgánicas se calculan con el
nivel adecuado:
(Ecuación 6)
I-SOMzone i = 7 • (fuentes orgánicas/
pérdidas orgánicas)
La puntuación global de I-SOM
I-SOM = Sj ((zonaj /área de bloque) • I-SOMzonej)
En donde I-SOM es el indicador global de la materia
orgánica del suelo en todo el bloque a lo largo de
un año; j es el índice para las zonas.
I-SOM es un indicador global de materia orgánica del
suelo calculada para un período de un año.
Se presentaron ejemplos de aplicación (Gatineau
et al., 2010). Los resultados muestran una puntuación
muy alta, alcanzando el máximo valor posible del in-
dicador, en el área en donde se recicla la biomasa de la
palma (pilas de tusa, aplicaciones de efb). Este resul-
tado indica que existe una alta posibilidad de aumen-
tar la fijación de carbono en el suelo a mediano - largo
plazo. En la actualidad las observaciones y medicio-
nes están en progreso, para validar este indicador y
para predecir el rango de capacidad del agrosistema
de la palma de aceite en cuanto a fijar el carbono en
el suelo.
Indicadores agroambientales para la producción de palma de aceite sostenible • Caliman, J.
Un enfoque agroecológico del
impacto del cultivo de la palma de
aceite
Si bien los indicadores agroambientales, conforme a lo
definido anteriormente, se enfocan estrictamente en el
impacto de las prácticas de campo sobre el medio am-
biente, el nuevo enfoque adicional que tenemos en la
actualidad es el de trabajar simultáneamente en la retro-
alimentación de varios de estos impactos y su efecto so-
bre la productividad de la palma de aceite. Esto incluye
evaluar el impacto de las prácticas de cultivo sobre al-
gunos parámetros y componentes del medio ambiente,
identificar los servicios que estos componentes prestan
a las palmas, y evaluar y cuantificar, en la mayor medi-
da posible, el impacto de la retroalimentación sobre la
productividad de las palmas. Del mismo modo, se han
hecho observaciones sobre el impacto de los cambios
medioambientales a nivel global (en particular el cam-
bio climático) sobre el funcionamiento de las palmas.
La plataforma BEFTA
Por ejemplo, la plataforma befta (de la Función de
la Biodiversidad y el Ecosistema en la Agricultura
Tropical) se estableció en 2012 en Sumatra a través de
la colaboración entre la Universidad de Cambridge
y el Smart Research Institute www.oilpalmbiodiver-
sity.com). En este proyecto estudiamos la relación
entre la complejidad del hábitat en el sotobosque de
una plantación de palma de aceite, su impacto sobre
la diversidad de la flora y la fauna y, posteriormente,
la función de esta diversidad con relación a la pro-
ductividad de las palmas.
El enfoque se basa en la manipulación de la co-
bertura vegetal del suelo con dos tratamientos, 1) una
complejidad mejorada (la reducción de la utilización
de herbicidas para mantener una máxima cobertu-
ra de vegetación), y 2) una complejidad reducida (la
alta utilización de herbicidas para reducir al mínimo
la cobertura vegetal del suelo; casi un suelo descu-
bierto). Estos dos tratamientos se compararon con la
práctica local estándar para mantener la vegetación
(exceptuando las malezas nocivas) a un nivel acep-
table compatible con una buena gestión de la planta-
ción (mínima pérdida de frutos).
209
 Se han encontrado varios resultados interesantes: que contribuyen al control de la herbivoria (observa-
ción aún en curso), como muestra la Figura 3.
1- Un control severo de la vegetación de cober-
tura del suelo, lo que genera un suelo casi descubierto (color plano = después del tratamiento).
que induce a un cambio microclimático en la tempe-
ratura de la superficie, como muestra la Figura 2; este Calidad del agua y eficiencia de
tratamiento genera una gama de temperaturas más
extremas, con registros tanto superiores como infe-
los fertilizantes (o del balance de
riores (hasta 1,5 0C). nutrientes) en las prácticas de campo
2- Dicho tratamiento también da como resulta-
Pérdida de nutrientes por escorrentía y
do una disminución de los agentes de control natu-
ral de las plagas como Sycanus dichotomus y Picticeps erosión
cosmolestes; por otra parte, el mantenimiento de una
cobertura vegetal diversa atrae a una población signifi- Una plataforma separada busca cuantificar las pérdi-
cativa de estos insectos asesinos, que a su vez se supone das de nutrientes con base en el sistema de gestión

Figura 2. Proyecto BEFTA - Efecto

del bajo y alto microclima del suelo
(temperatura).

31

30

29

28
Temperatura

27

26

25

24
05/02/2014
06/02/2014
11/02/2014
14/02/2014
17/02/2014
19/02/2014
22/02/2014
25/02/2014
28/02/2014
06/03/2014
09/03/2014
12/03/2014
14/03/2014
17/03/2014
20/03/2014
23/03/2014
16/03/2014
29/03/2014
01/04/2014
04/04/2014
06/04/2014
08/04/2014
12/04/2014
15/04/2014
18/04/2014
21/04/2014
24/04/2014
27/04/2014
29/04/2014
02/05/2014
05/05/2014
08/05/2014
11/05/2014
14/05/2014
17/05/2014
20/05/2014
22/05/2014
25/05/2014
28/05/2014
31/05/2014
03/06/2014
06/06/2014
08/06/2014
12/06/2014
14/06/2014
17/06/2014
20/06/2014
23/06/2014
26/06/2014
29/06/2014
02/07/2014
05/07/2014
07/07/2014
10/07/2014
13/07/2014
16/07/2014
19/07/2014
22/07/2014
25/07/2014
28/07/2014
30/07/2014
02/08/2014
05/08/2014
08/08/2014
11/08/2014
14/08/2014
17/08/2014
20/08/2014
22/08/2014
25/08/2014
28/08/2014
31/08/2014
03/09/2015

Fecha

Reducida Normal Mejorada

210 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 203-213, Tomo I, 2016
 Figura 3. Proyecto BEFTA - Efecto
30
de la diversidad alta (“mejorada”),
25 estándar (“normal”) y baja
(“reducida”) de la cobertura
20
vegetal del suelo sobre los
15 parasitoides beneficiosos.
Abundancia

10

0
sep-13

feb-14

sep-14

feb-15

sep-13

feb-14

sep-14

feb-15

sep-13

feb-14

sep-14

feb-15
Mejorada Normal Reducida

Picticeps cosmolestes

4
Abundancia

0
sep-13

feb-14

sep-14

feb-15

sep-13

feb-14

sep-14

feb-15

sep-13

feb-14

sep-14

feb-15

Mejorada Normal Reducida

Sycanus dichotomus

de la cobertura vegetal del suelo. Un nivel de con- Tabla 2, las cantidades de N, P y K que se pierden a
trol de malezas severo, que nuevamente da como través de la escorrentía y la erosión llegan a 9,4 %,
resultado un suelo casi descubierto (solo parte del 4,7 % y 3,1 %, respectivamente, con un uso intensi-
área permanece cubierta con residuos de hoja) lle- vo de herbicidas, mientras que la conservación de
va a un alto nivel de pérdida de nutrientes debido a la vegetación ocasiona pérdidas de 3,5 %, 1,9 % y
la escorrentía y la erosión. Como se muestra en la 3,1 %, respectivamente.

Tabla 2. Pérdida de la cobertura vegetal del suelo y nutrientes.

Pérdidas de nutrientes en Pérdidas de nutrientes en

Pérdida de nutrientes total
la escorrentía de agua los sedimentos
Manejo de la
vegetación (% de aportación (% de aportación (% de aportación
del suelo de nutrientes) de nutrientes) de nutrientes)

N P2O5 K2O N P2O5 K2O N P2O5 K2O

Uso intensivo de herbicidas 2,4 1,2 2,8 7,0 3,5 0,3 9,4 4,7 3,1
Estándar 1,7 0,6 2,4 2,0 1,4 0,1 3,7 1,9 2,5

Nota: pendiente del terreno = 5 %.

Indicadores agroambientales para la producción de palma de aceite sostenible • Caliman, J. 211

 Diversidad de flora en el sotobosque:
un indicador de la fertilidad química
del suelo
Mantener un buen nivel de cobertura vegetal del sue-
lo también es útil para identificar deficiencias especí-
ficas en los nutrientes del suelo. Por ejemplo, en una
plantación de 3.500 hectáreas ubicada en Sumatra
(Indonesia), un estudio detallado ha identificado más
de 186 especies de malezas vasculares. Encontramos
que tres especies de Pteridophyta, una especie de mo-
nocotyledones y una especie de dicotyledones fueron
buenos indicadores de un bajo nivel de fósforo en el
suelo, lo que genera una mayor necesidad de fertili-
zantes de fosfato (Tabla 3).
Conclusión
El desarrollo de los indicadores agroambientales está
alcanzando una nueva etapa que se enfoca en la va-
lidación. También se están desarrollando enfoques
adicionales que buscan identificar no solo el impacto
de las prácticas de cultivo de la palma de aceite sobre
el medio ambiente, sino a su vez, el impacto que es-
tas modificaciones del medio ambiente tienen sobre
la productividad de las palmas; en otras palabras, los
servicios que se ven afectados por tal impacto.

Tabla 3. Fertilidad del suelo y diversidad de la flora vascular (proporción dominante sumada).

Proporción dominante sumada (%)

Especie Clase Sig.
Control P aplicado

Especies que se encuentran de manera dominante en los suelos de baja fertilidad (sin P - fertilizante aplicado)
Taenitis blechnoides Pteridophyta 27,0 0,8 **
Dicranopteris linearis Pteridophyta 16,5 0,1 ns
Scleria sumatraensis Monocotyledones 16,2 0,6 **
Pteris vittata Pteridophyta 6,9 0,2 **
Stenochlaena palustris Pteridophyta 3,3 0,4 ns
Clidemia hirta Dicotyledones 2,0 0,9 ns
Especies encontradas de manera dominante en los suelos de alta fertilidad (P - fertilizantes aplicados regularmente)
Nephrolepis biserrata Pteridophyta 6,1 29,1 **
Asplenium longissimum Pteridophyta 0,5 24,2 **
Arcypteris irregularis Pteridophyta 0,5 7,7 ns
Peperomia pellucidea Dicotyledones 0,0 6,2 **
Asystasia micrantha Dicotyledones 0,0 3,7 *
Lindernia crustacea Dicotyledones 0,6 2,6 ns
Cyperus kyllingia Monocotyledones 0,0 2,1 *
Microlepia spelluncai Pteridophyta 0,0 1,0 **
Cleome rutidosperma Dicotyledones 0,0 0,7 *
Blechnum orientale Pteridophyta 0,0 0,7 *
Phyllanthus amarus Dicotyledones 0,0 0,1 **
Mikania micrantha Dicotyledones 0,0 0,1 *

212 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 203-213, Tomo I, 2016
Referencias bibliográficas

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Indicadores agroambientales para la producción de palma de aceite sostenible • Caliman, J. 213

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contenido

Ciclos de carbono y nitrógeno en plantaciones de palma de aceite:

claves para la productividad y la sostenibilidad*
Carbon and Nitrogen Cycling in Oil Palm Plantations:
the Keys to Yield and Sustainability

autores: Nelson, P.N.1; Huth, M.I.2; Banabas, M.3; Webb, M.J.2; Goodrick, I.1
citación: Nelson, P., Huth, M. I, Banabas, M., Webb, M. J., & Goodrick, I.
(2016). Ciclos de carbono y nitrógeno en plantaciones de palma de aceite:
claves para la productividad y la sostenibilidad. Palmas 37(Especial Tomo I),
pp. 214-224.
palabras clave: ciclos de carbono y nitrógeno, productividad, sostenibilidad,
plantaciones de palma de aceite.
keywords: Carbon and nitrogen cycling, yield, sustainability, oil palm
plantations.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Sofía Lemaitre Cepeda.
1 College of Science, Technology and Engineering, James Cook University,
Australia Paul Nelson
Profesor Asociado, Centro de Estudios
2 Agriculture Flagship, CSIRO, Australia Ambientales y de Sostenibilidad
Tropical, Universidad James Cook,
3 PNG Oil Palm Research Association, Papua New Guinea
Australia
Associate Professor, Centre for Tropical
Environmental and Sustainability
Studies, James Cook University,
Australia

Resumen
El alto rendimiento y la rentabilidad de las inversio­nes en palma de aceite dependen de la fijación de
carbono producto de la fotosíntesis en las hojas, la cual está limitada por la radiación, la temperatura
y la disponibilidad de agua y nutrientes, en particular el nitrógeno. Los ciclos de carbono y nitrógeno
también son factores determinantes para la condición del suelo (en particular, la materia orgánica,
la acidez y la actividad biológica), la salud de los ecosistemas acuáticos y las emisiones de gases de
efecto inver­nadero. Aunque la productividad y los efectos am­bientales del cultivo se han estudiado
extensamente, es difícil predecir cómo podrían verse afectados por los cambios en el genotipo, en las
condiciones ambientales o en las prácticas de manejo, dada la complejidad de las interacciones entre

214 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 214-224, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923
 los ciclos de carbono y nitrógeno, y los factores antes mecanísticos, la integración de nuestro conoci-
miento a mode­los mecanicistas predictivos es esencial para avanzar. Dicha integración se ha logrado
recientemente para la palma de aceite utilizando el marco AP­SIM (www.apsim.info), el cual integra
modelos de fisiología de cultivos y de ciclos de agua, carbono y nitrógeno. El modelo ha demostrado
tener la capacidad de predecir el crecimiento vegetativo y el rendimiento apropiadamente, y de ma-
nera consistente en Papúa Nueva Guinea, en donde fue desarrollado. Ahora debe ser ensayado en un
mayor rango de entornos. AP­SIM Oil Palm tiene un potencial considerable como herramienta para
predecir el rendimiento y generar eficiencia al explorar escenarios cuya evaluación ex­perimental no es
plausible, tales como los efectos probables de una gestión de fertilizantes distinta, los efectos del tipo
de clima y suelo en la productividad, la condición del suelo y el entorno.

Abstract
High yields and return on investment in oil palm all depend on the fixation of carbon by photosyn-
thesis in the leaves, which is limited by radiation, tempe­rature and the availability of water and nu-
trients, especially nitrogen. The carbon and nitrogen cycles are also key determinants of soil condition
(particu­larly soil organic matter, acidity and biological acti­vity), aquatic ecosystem health and green-
house gas emissions. Although productivity and environmental effects of cultivation are well studied,
it is difficult to predict how they might be affected by changes in genotype, environmental conditions
or mana­gement practices, because of complex interactions between the carbon and nitrogen cycles
and these factors. Integrating our knowledge into mechanistic predictive models is essential to move
forward. Such integration has recently been achieved for oil palm using the AP­SIM framework (www.
apsim.info), which integrates models of crop physiology and cycling of water, carbon and nitrogen.
The model has been shown to predict vegetative growth and yield consis­tently well in Papua New
Guinea, where it was de­veloped. It now needs to be tested in a wider range of environments. AP­SIM Oil
Palm has considerable potential as a tool for predicting yield and for effi­ciently exploring scenarios
that are not feasible to assess experimentally, such as the likely effects of different fertilizer manage-
ment, climate or soil type on productivity, soil condition and the environment.

Introducción

Los cultivadores de palma de aceite tienen muchas
preguntas importantes con relación a la productivi-
dad y la sostenibilidad, que son difíciles de responder
con un nivel de confianza aceptable o, incluso, cono-
cido. Los mejoradores de palma querrán conocer los
factores críticos que influyen en la conversión de la
luz solar en aceite. Los gerentes de campo y los pe-
queños palmicultores desean saber cómo maximizar
la productividad de racimos de fruta fresca (rff) por
unidad del costo de producción, del cual los fertili-
zantes representan una parte importante. Los geren-
tes de las plantas extractoras y de transporte desean
conocer la cantidad de fruta que se va a producir en
los meses y años venideros. Los propietarios de tierra
quieren saber cómo mantener de la mejor manera el
valor de su activo, especialmente la fertilidad del sue-
lo (en particular, el contenido de materia orgánica, la
acidez y la actividad biológica del suelo), para man-
tener la productividad a largo plazo, especialmen-
te si les falta tierra y no cuentan con recursos para
mantener su fertilidad o mejorarla. Los gerentes de
sostenibilidad de las empresas desean saber cómo las
prácticas de manejo influyen en las emisiones de ga-
ses de efecto invernadero y las reservas de C. Ade-
más, las comunidades locales que dependen de los
ambientes acuáticos aguas abajo desean saber cómo
el manejo influye en la escorrentía de nutrientes.
Para responder estas y otras preguntas similares, las

Ciclos de carbono y nitrógeno en plantaciones de palma de aceite: claves para la productividad

y la sostenibilidad • Nelson, P., et al. 215
 únicas opciones actuales son los ensayos y los pro-
gramas de monitorización, o las reglas generales con
base en la experiencia, pero ambos presentan gran-
des desventajas.
Los métodos actuales para predecir la producción
y los efectos ambientales de las prácticas de manejo
de la palma de aceite presentan varios problemas. Los
ensayos y los programas de monitorización son cos-
tosos y tardan mucho tiempo en dar respuestas con-
fiables, ya que es necesario que se evalúe todo el ciclo
de aproximadamente 25 años de una plantación y la
variabilidad climática. Las reglas generales, apren-
didas por ensayo y error, pueden ser limitadas en su
utilidad, dado que con frecuencia hay poca experien-
cia acumulada para ciertas plantaciones (ya que gran
parte de la industria solo se encuentra en su primer
ciclo de cultivo) y porque con frecuencia es difícil
transferir estos conocimientos de una persona a otra.
Sería útil reunir todo nuestro conocimiento colec-
tivo de manera que pueda utilizarse para responder
las preguntas relacionadas con la investigación y el
manejo en situaciones nuevas en las cuales se care-
ce de conocimientos. Esta recopilación de conoci-
mientos en herramientas predictivas es el campo de
la modelación de los sistemas agrícolas. Esto requiere
comprender los ciclos del agua, del carbono y del ni-
trógeno a través del sistema suelo-planta-atmósfera y
cómo estos ciclos interactúan entre sí, los genotipos
del cultivo y el medio ambiente.
El objetivo de este trabajo es examinar los ciclos
del C y el N a lo largo de un ciclo de cultivo, mediante
un modelo de sistemas agrícolas desarrollado recien-
temente, y estudiar cómo el modelo podría utilizarse
como herramienta para predecir la forma en que el
manejo puede influir en la productividad del cultivo,
las propiedades del suelo y los impactos ambientales.
Modelación de los flujos de carbono
y nitrógeno
Los conocimientos sobre el crecimiento del cultivo y
los ciclos de agua, carbono y nutrientes en los siste-
mas de producción de palma de aceite no se habían
integrado en trabajos sino hasta hace poco tiempo
mediante el marco apsim (Huth et al., 2014), que
combina varios modelos en un único modelo de sis-
216
temas agrícolas para un determinado dominio del
problema (Holzworth et al., 2014, www.apsim.info).
El desarrollo del módulo de crecimiento de palma
de aceite en ese trabajo fue desarrollado sobre mo-
delos previos de crecimiento de la palma de aceite,
como opsim (van Kraalingen et al., 1989), oprodsim
(Henson et al., 2007), WaNuLCAS (Van Noordwijk
et al., 2011) y ecopalm (Combres et al., 2013). Los
modelos para los procesos ambientales y del suelo ya
estaban disponibles en el marco apsim (Holzworth et
al., 2014). Con apsim-Oil Palm (palma de aceite), ya
es posible predecir la productividad del cultivo y los
impactos ambientales de escenarios con diferentes
combinaciones de clima, tipo de suelo y manejo.
apsim-Oil Palm fue desarrollado mediante el
marco de modelación de plantas apsim (Brown et
al., 2014) y los datos de crecimiento de las palmas de
aceite a partir de ensayos de fertilización a largo pla-
zo en Papúa Nueva Guinea (Huth et al., 2014). Los
módulos estándar SoilWat (agua en el suelo), SoilN
(nitrógeno en el suelo) y SurfaceOM (materia orgá-
nica superficial) de apsim aportaron la capacidad
para simular los procesos del agua, el N y la materia
orgánica superficial (Probert et al., 1998). El mane-
jo de las palmas, incluidos el manejo de la siembra y
de fertilizantes se especifica mediante un lenguaje de
scripting de manejo (Moore et al., 2014). apsim-Oil
Palm simuló bien el crecimiento y la productividad
de la palma de aceite (Figura 1), lo que nos da con-
fianza en que los ciclos de C y N están siendo simu-
lados con precisión aceptable. La modelación de las
reservas y flujos de C y N en el ciclo de la palma de
aceite se realizó para la plantación Sangara en Papúa
Nueva Guinea, en donde el crecimiento modelado de
la palma de aceite fue el más cercano al crecimiento
real de la misma.
La fijación de carbono y la productividad de rff
fueron mayores cuando la radiación solar, la dispo-
nibilidad de agua y el suministro de N fueron mayo-
res, como cabría esperar (Figura 1). La productividad
anual fluctuó en respuesta a la precipitación anual, e
impulsada principalmente por el número de racimos.
Las respuestas a los fertilizantes nitrogenados se dife-
renciaron sustancialmente entre los sitios.
Las reservas modeladas de C y N en el suelo se re-
lacionaron con la edad del cultivo y la dosis de fertili-
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 214-224, Tomo I, 2016
 Figura 1. Productividad anual de
Sagarai Sangara Hargy racimos de fruta fresca (RFF) y

Precipitación de lluvias (mm)

40
0 componentes de productividad
Producción del racimo (y-1)

300 en ensayos de fertilización en tres

30 a. d. g. 600 sitios en Papúa Nueva Guinea.
900 Los valores reales son puntos y
20 1200
los valores modelados son líneas.
1500
Los tratamientos de fertilización
10
comenzaron después de finalizar el
0 período sombreado con gris, y los
25 b. e. h. parámetros se muestran para tres
Tamaño del racimo (kg)

dosis de aplicación de fertilizantes

20
nitrogenados (círculo sin relleno,
15 círculos en gris claro y oscuro,
10 siendo 0,57 y 227 kg N ha-1 año -1,
5
respectivamente).
0 Reimpreso de Huth et al., (2014).
40 c. f. i. Environmental Modelling and
Software 62, 327-350. Tomado con
autorización de Elsevier.
RFF (t ha-1)

30

20

10

0
93 96 99 02 05 08 97 99 01 03 05 07 09 97 99 01 03 05 07 09

Año

zantes (Figura 2). La cantidad total de C (y N orgáni-
co, que está estrechamente relacionado con el C orgá-
nico) almacenado en el suelo aumentó durante la fase
en desarrollo, a medida que las palmas previamente
derribadas se descomponían. A partir de ahí, la re-
serva de C en el suelo se mantuvo cuando se aplicaron
dosis altas de fertilizantes nitrogenados, o disminu-
yó cuando se aplicó poco o nada de N. La diferen-
cia se debió a las desigualdades en la productividad
primaria neta entre los tratamientos. Una proporción
relativamente alta de la producción primaria neta se
extrae en los rff, pero la restante, principalmente la
producción de hojas, se adiciona al suelo y equilibra
la pérdida de C a través de la respiración microbiana.
Cuando no se aplicaron fertilizantes, no hubo cambio
neto en el contenido modelado de C en el suelo a lo
largo del ciclo de cultivo, mientras que la adición de
fertilizantes dio como resultado un incremento neto.
El contenido modelado de N mineral en el suelo fue
sensible a la edad del cultivo y al manejo (Figura 2). Se
elevó durante la fase en desarrollo, a medida que las
palmas de aceite recientemente derribadas y el cul-
tivo de cobertura leguminosa se descomponían y el
N orgánico que contenían se mineralizó a amonio y
nitrato. Las palmas derribadas contenían N absorbi-
do a lo largo de los últimos 25 años y el cultivo de co-
bertura leguminosa contenía N absorbido antes que
el dosel de la palma se cerrara. Las pérdidas por lixi-
viación de N mineral fueron grandes durante la fase
en desarrollo, debido a que las cantidades disponibles
fueron mayores de lo que las palmas podían absorber.
A partir de ahí, durante la fase en producción, el con-
tenido de N mineral del suelo estuvo estrechamente
relacionado con la aplicación de fertilizantes, la ad-
sorción por las palmas y las pérdidas por lixiviación.
La dosis óptima agronómica de N fue de aproximada-
mente 50-100 kg N ha-1 año-1 en este sitio. Las dosis de
aplicación por encima de esta dieron como resultado
un alto contenido de nitratos en el suelo y elevadas
pérdidas por lixiviación.
Los intercambios modelados de N entre el siste-
ma suelo-planta y la atmósfera también fueron sen-

Ciclos de carbono y nitrógeno en plantaciones de palma de aceite: claves para la productividad

y la sostenibilidad • Nelson, P., et al. 217
 Figura 2. Reservas moderadas
350
de C y N en el suelo, y pérdidas
mensuales de N por lixiviación 300 0 kg N/ha/año
en un ciclo de cultivo en 57 kg N/ha/año

Suelo NO3-N
250

(kg/ha)
227 kg N/ha/año
Sangara, Papúa Nueva Guinea, 200
con tres dosis de aplicación 150
de fertilizante nitrogenado
100
(de 2001 a 2011). La dosis
comercial de fertilizante 50

nitrogenado para las palmas en 0

producción en esta plantación
313
fue de aproximadamente 100 kg
N ha-1 año -1. 311
Suelo C
(t/ha) 309

307

305

20
NO3-N Lixiviado

15
(kg/ha/mo)

10

0
96 97 98 99 00 01 02 03 04 05 06 07 08 09 10 11

Año

sibles a la edad del cultivo y el manejo (Figura 3).
La fijación de nitrógeno fue alta al inicio de la fase
del cultivo y disminuyó a niveles insignificantes
cuando se cerró el dosel de las palmas. Se mantuvo
en niveles insignificantes en toda la fase en produc-
ción en los tratamientos fertilizados. Sin embargo,
donde no se adicionó fertilizante, las tasas de fija-
ción aumentaron a medida que el cultivo envejecía,
presumiblemente debido al menor contenido de N
mineral y más luz en esas condiciones. Las pérdidas
de N a la atmósfera fueron sensibles a la cantidad de
N mineral en el suelo y el contenido de agua en el
suelo. La mayor parte de la pérdida de N gaseoso fue
en forma de N2, pero se emitieron cantidades signi-
ficativas del gas de efecto invernadero N2O con dosis
excesivas de fertilizantes. Con dosis bajas adecuadas
de fertilizantes nitrogenados, las emisiones de N2O
fueron bajas en la fase en producción, lo que estuvo
de acuerdo con las mediciones realizadas en este si-
tio (Banabas, 2007).
Medición de las reservas de
carbono y nitrógeno en el suelo
Las reservas de C y N en las mismas palmas de aceite
se entienden razonablemente bien y pueden calcular-
se mediante las relaciones alométricas existentes. Sin
embargo, hay muchos menos datos disponibles sobre
los cambios en las reservas de C y N a largo plazo en
suelos sembrados con palma. Por otro lado, la ma-
yor parte del C y N en el sistema se encuentra en el
suelo, por lo que las cantidades involucradas tienen
una gran influencia en los procesos de los ciclos. Por
tanto, la medición precisa de las reservas de C y N en
el suelo es fundamental para iniciar simulaciones re-
alistas y monitorizar los cambios reales a lo largo del
tiempo. Teniendo en cuenta que no hay datos de mo-
nitorización a largo plazo disponibles, examinamos
los cambios en las reservas de C en un período de
25 años mediante una cronosecuencia en plantacio-

218 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 214-224, Tomo I, 2016
 Figura 3. Intercambios modelados
de N entre el sistema suelo-
25
0 kg N/ha/año
planta y la atmósfera (valores
mensuales) a lo largo de un ciclo
(kg/ha/mo)
Fijación de N

20 57 kg N/ha/año

15
227 kg N/ha/año de cultivo en Sangara, Papúa
Nueva Guinea, con tres dosis
10 de aplicación de fertilizante
5
nitrogenado (de 2001 a 2011).
La dosis comercial de fertilizante
0 nitrogenado en esta plantación
 20
fue de aproximadamente 100 kg
Emisiones de N2-N

N ha-1 año -1 .
(kg/ha/mo)

15

10

4
Emisiones de N2O-N
(kg/ha/mo)

0
96 97 98 99 00 01 02 03 04 05 06 07 08 09 10 11

Año

nes sembradas en praderas en Papúa Nueva Guinea
(Goodrick et al., 2015). Además, utilizamos isótopos
de C para cuantificar la pérdida de carbono orgáni-
co del suelo (soc, por sus siglas en inglés) derivada
de las praderas y la ganancia derivada de la palma de
aceite durante este período.
El estudio de la cronosecuencia mostró un incre-
mento neto de C en el suelo en las plantaciones de
palma de aceite sembradas en las praderas (Figu-
ra 4). Hubo un aumento constante, pero pequeño,
del C derivado de las palmas a lo largo del período
de 25 años y ninguna pérdida significativa del C ori-
ginal derivado de la pradera. Ese resultado corres-
ponde con un reciente estudio de 20 plantaciones
en Indonesia, que no halló ninguna variación neta
general en las reservas de C en suelo sembrado con
palma de aceite (Khasanah et al., 2015). Con base
en estas mediciones de campo, la modelación de las
reservas de C en el suelo mediante apsim (Figura 2)
parece razonable.
Durante nuestras mediciones y modelación de las
reservas de carbono en el suelo, resultó evidente que
los métodos de muestreo existentes no eran óptimos
para cuantificar las tendencias a largo plazo (es decir,
más de un ciclo de cultivo) en las propiedades del suelo
o las cantidades totales de agua, C y N en el suelo en
una plantación. El problema se debe en gran medida
a la alta variabilidad espacio-temporal en la escala de
0-10 m. Aunque esta variabilidad es bien conocida, los
diseños estándar existentes de muestreo de suelos no
la tuvieron en cuenta de manera adecuada para efec-
tuar monitorización a largo plazo (especialmente de
un ciclo de cultivo a otro) o cuantificar las reservas
por unidad de área sembrada (Nelson et al., 2014). Por
tanto, propusimos diseños de muestreo mejorados y
probamos su capacidad para tomar en cuenta esta va-
riabilidad espacio-temporal. Evaluamos los diseños de
muestreo de los transectos lineales mediante la super-
posición de ellos en mapas de propiedades del suelo
desarrollados a partir de un programa de muestreo de

Ciclos de carbono y nitrógeno en plantaciones de palma de aceite: claves para la productividad

y la sostenibilidad • Nelson, P., et al. 219
 Figura 4. Reservas de carbono
orgánico en el suelo (SOC, por sus 100 0-0,05m 16 0-0,05m
siglas en inglés) en plantaciones
14
sembradas en praderas, para
80

Reservas de SOC (% del total)

tres intervalos de profundidad, 12

Reservas de SOC (kg m-2)

expresadas en proporción de la
10
reserva total y como cantidades 60
absolutas. Las líneas muestran 8
un modelo exponencial de los 40 6
cambios en las reservas. No se
muestran líneas para las reservas 4
20
absolutas de carbono derivado 2
de la pradera, ya que no se
relacionaron significativamente 0 0
0 5 10 15 20 25 0 5 10 15 20 25
con los años después de la
siembra. Años después de la siembra Años después de la siembra
Derivado de la palma de aceite Derivado de la palma de aceite
Reimpreso de Goodrick et al.,
Derivado de la pradera (vegetación previa) Derivado de la pradera (vegetación previa)
(2015). Global Change Biology
Bioenergy 7, 262-272. Tomado con
autorización de John Wiley & Sons. 100 0-0,02m 16 0-0,02m

14
80
Reservas de SOC (% del total)

12

Reservas de SOC (kg m-2)

60 10

8
40
6

4
20
2

0 0
0 5 10 15 20 25 0 5 10 15 20 25

Años después de la siembra Años después de la siembra

Derivado de la palma de aceite Derivado de la palma de aceite
Derivado de la pradera (vegetación previa) Derivado de la pradera (vegetación previa)

100 0-1,5m 16 0-1,5m

14
80
Reservas de SOC (% del total)

12
Reservas de SOC (kg m-2)

60 10

8
40
6

4
20
2

0 0
0 5 10 15 20 25 0 5 10 15 20 25

Años después de la siembra Años después de la siembra

Derivado de la palma de aceite Derivado de la palma de aceite
Derivado de la pradera (vegetación previa) Derivado de la pradera (vegetación previa)

220 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 214-224, Tomo I, 2016
alta resolución (Nelson et al., 2015a). Probamos varias
orientaciones de los transectos (Figura 5) y densidades
de los puntos de muestreo. Se encontró que la variabili-
dad espacio-temporal a escala de árbol podía explicar-
se adecuadamente al obtener una muestra compuesta
conformada por aproximadamente 50 muestras toma-
das a lo largo de un transecto que cruza seis hileras en
ángulo oblicuo (Figura 5). El muestreo según este dise-
ño permitirá que se cuantifiquen las tendencias en las
propiedades del suelo a lo largo del tiempo, incluidos
los contenidos de C y N.
Discusión
La productividad y los impactos ambientales de la
palma de aceite están estrechamente ligados a los
ciclos del agua, del carbono y del nitrógeno que in-
teractúan entre sí, al genotipo del cultivo, al tipo de
suelo y al manejo. El modelo de sistemas de cultivos
recientemente desarrollado, apsim Oil Palm, propor-
ciona una herramienta para los científicos, y poten-
cialmente también para los gerentes, para predecir los
posibles efectos de cultivos en nuevas áreas, o de cam-
bios en las prácticas de manejo en las ya existentes.
Esta aplicación para la toma de decisiones de manejo
ya la está logrando un grupo de cultivadores de ce-
reales líderes en Australia, mediante la utilización de
una herramienta basada en apsim denominada Yield
Prophet® (Holzworth et al., 2014). Los posibles usos
de apsim Oil Palm podrían incluir:
• Predecir la productividad en nuevas situaciones
de clima, tipo de suelo o uso previo del suelo.
• Predecir la respuesta de la productividad y la efi-
ciencia en el uso de N a los cambios en el manejo,
como los diferentes tipos, dosis y frecuencias de
aplicación de fertilizantes nitrogenados (en situa-
ciones específicas de suelo y clima).
• Pronosticar la productividad de RFF en los próxi-
mos meses o años.

Figura 5. Sección de una plantación

de palma de aceite, que muestra
los seis transectos de muestreo de
suelo evaluados, con las longitudes
entre paréntesis (s = distribución
triangular de siembra de las
6-r
6-
ro

ow,

palmas). También se muestran

w,
>

>
60

60°

las “unidades de árbol” (la unidad

°(
6,

(5,

de repetición en la plantación)
56

57s
s)

atravesadas por los transectos y,

)

en la parte inferior izquierda de la

4-row

figura, la cobertura equivalente

4-
ro

, > 60

de una unidad de árbol por cada

w,
>
60

transecto.
° (3,6
°
(4
,5
8

Reimpreso de Nelson et al.,

1s)
s)

(2015a). Plant and Soil. 394, 421-

2-row 4-row 6-row
(> 60°) (> 60°) (> 60°) 429. Tomado con autorización de
Springer.
2-row, > 60° (1,73s)

2-
ro
w,
>
60 Transecto
°
(2
,6
5s Unidad de árbol
)

Estípite de palma

Canal de pila

Canal de cosecha

2-row 4-row 6-row Plato de la palma

(> 60°) (> 60°) (> 60°)

Ciclos de carbono y nitrógeno en plantaciones de palma de aceite: claves para la productividad

y la sostenibilidad • Nelson, P., et al. 221
 • Predecir las tendencias en las condiciones del
suelo, incluidos el contenido de C orgánico, la
actividad biológica y la acidificación del suelo.
El principal determinante del contenido de C or-
gánico en el suelo y la actividad biológica es la
entrada de materia orgánica (Baldock y Nelson,
2000), que se puede predecir por la productivi-
dad primaria neta menos la retirada de rff. La
acidificación del suelo se puede predecir de ma-
nera similar a partir de los procesos del ciclo de
nitrógeno y la exportación de cationes no ácidos
en los rff (Nelson et al., 2015b).
• Predecir las emisiones de gases de efecto inverna-
dero para el componente de campo de los mode-
los de presupuesto de gases de efecto invernadero
(por ejemplo, Chase y Henson, 2010, Henson et
al., 2012a, b), incluidos los intercambios entre las
emisiones de CO2 y N2O en situaciones específicas
de suelo, clima y uso previo del suelo.
• Predecir los efectos del manejo en la calidad del
agua aguas abajo, especialmente las pérdidas de N
en los entornos aguas abajo.
• Evaluación de las limitaciones y opciones para me-
jorar los sistemas de los pequeños palmicultores.
• Capacitación para gerentes y cultivadores sobre
las interacciones entre el crecimiento del culti-
vo, el medio ambiente y el manejo en todo el
ciclo de cultivo.
Para que estos usos potenciales se hagan reali-
dad, apsim Oil Palm se debe seguir desarrollando
y probando en una mayor variedad de situaciones.
Esto requerirá la recopilación de datos sobre el suelo
y meteorológicos adecuados para los lugares donde
se utilizará. Con frecuencia estos datos no están dis-
ponibles, pero existen métodos para recolectarlos o
generarlos (Huth et al., 2014, Wockner et al., 2014,
Nelson et al., 2015a).
apsim Oil Palm abarca los procesos críticos que
determinan el crecimiento y la productividad de la
palma de aceite, pero no incorpora todos los proce-
sos conocidos. Si estas limitaciones impiden la apli-
222
cación del modelo, sería posible superarlas con más
investigación y desarrollo. Por ejemplo, apsim Oil
Palm fue desarrollado con los datos de crecimiento
para Dami tenera Elaeis guineensis, pero sería posi-
ble desarrollar las configuraciones para otros culti-
vares o híbridos con E. oleifera. Otros módulos de
cultivo en apsim, como el módulo de trigo, tienen
parámetros para diferentes cultivares. apsim tam-
bién se ha utilizado para modelar las interacciones
genotipo x medio ambiente x manejo para otros cul-
tivos (Holzworth et al., 2014). Con respecto al su-
ministro y absorción de nutrientes, se supone que
otros nutrientes diferentes al N están en cantidad
adecuada, y la respuesta a su suministro no está
modelada actualmente. Puede ser posible construir
módulos para el ciclo de otros nutrientes, como el
potasio (K), en particular (Scanlan et al., 2015).
También serían posibles nuevas mejoras, tales como
el mejoramiento de los parámetros de los cultivos
de cobertura, la simulación de la capa freática y sus
efectos, la variabilidad espacial en los procesos, y los
procesos fisiológicos, como la producción de aceite.
Estas y otras mejoras potenciales son posibles den-
tro del marco apsim.
Conclusión
Los conocimientos sobre los ciclos del agua, del car-
bono y del nitrógeno en el sistema de palma de acei-
te están actualmente integrados en un marco de mo-
delación. El modelo apsim Oil Palm puede permitir
una investigación más específica y una mejor toma
de decisiones en el futuro. Sin embargo, primero es
necesario probarlo en una mayor variedad de situa-
ciones, lo que requerirá la recopilación de conjuntos
de datos adecuados y la colaboración entre agróno-
mos y modeladores.
Agradecimientos
Este trabajo fue financiado por el Centro Australiano
para la Investigación Agrícola Internacional (smcn-
2009-013).
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 214-224, Tomo I, 2016
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Ciclos de carbono y nitrógeno en plantaciones de palma de aceite: claves para la productividad

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224 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 214-224, Tomo I, 2016
Volver al
contenido

Impactos ambientales de productos de aceite de palma:

¿Qué podemos aprender del Análisis de Ciclo de Vida?*
Environmental Impacts of Palm Oil Products:
What Can We Learn from Life Cycle Assessment?

autores: Cécile Bessou1; Lénaïc Pardon1.

citación: Bessou, C., & Pardon, L. (2016). Impactos ambientales de productos
de aceite de palma: ¿Qué podemos aprender del Análisis de Ciclo de Vida?
Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 225-234.
palabras clave: productos de aceite de palma, calentamiento global, impacto
ambiental, emisión de gases efecto invernadero.
keywords: Oil palm products, global warming, environmental impact,
greenhouse gas emissions.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Sofía Lemaitre Cepeda
1 CIRAD, UPR Systèmes de pérennes, pôle ELSA.

Cécile Bessou
Centro de Cooperación Internacional
en Investigación Agronómica para el
Desarrollo - CIRAD
cecile.bessou@cirad.fr

Resumen
Cuantificar el impacto ambiental de los sistemas de producción se ha convertido en un hito para las
ca­denas de productos agrícolas. El Análisis de Ciclo de Vida (ACV) es una metodolo­gía estandarizada
ISO única para estimar el impacto ambiental de las actividades humanas a lo largo de una cadena
productiva. En la última década, el ACV se ha convertido en el estándar mundial para las de­claraciones
ambientales de producto y el modelo de base detrás de varias calculadoras de gases efecto invernadero
(GEI) y certificacio­nes (por ejemplo, CE, 2009, RSPO PalmGHG).

Varios ACV de productos de aceite de palma han demostrado que la fase agrícola es un contribuyen­
te muy importante a la mayoría de los potenciales impactos medioambientales, como, por ejemplo,

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 225-234, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 225
 calentamiento global, la eutrofización y la acidifi­cación (Yusoff y Hansen, 2005; Schmidt, 2007;
Chuchuoy et al., 2009; Choo et al., 2011). Este gran aporte se debe a una combinación de la en­
trada de niveles de nitrógeno (N) en el campo y los bajos niveles de entrada en planta extractora,
y la refinería. La fase agrícola sigue siendo un colabo­rador crítico, incluso cuando el límite del
sistema se extiende a la producción de biocombustibles con base en palma (Pleanjai et al., 2009;
Achten et al., 2010; Papong et al., 2010; Arvidsson et al., 2011). Enfocándose en el impacto sobre
el calentamiento global, los principales contribuyentes son las emi­siones relacionadas con N-GEI en
las plantaciones y las emisiones de metano provenientes de los efluentes de la planta extractora de
aceite de palma (POME). El impacto de la plantación es abrumador cuando los bosques o las áreas
pantanosas se convierten en plantaciones de palma (Wicke et al., 2008; Reijnders y Huijbregts,
2008; Schmidt, 2010). Mientras tanto, el impacto de (POME) puede reducirse drástica­mente si el
biogás es capturado con recuperación de electricidad.

Mientras los N-insumos son críticos, la mayoría de modelos ACV aún dependen de factores de emisión
global (IPCC, 2006). Un mejor modelamiento del equi­librio N incluyendo una mejor contabilidad de
pro­cesos del suelo, permite un diagnóstico más preciso de los impactos ambientales y control de los
meca­nismos en la gestión de la plantación.

Abstract

Quantifying the environmental impact of production systems has become a milestone for agricultural
commodity chains. Life Cycle Assessment (LCA) is a unique ISO standardized methodology for
estimating the environmental impact of human activities along a commodity chain. In the last decade,
LCA has be­come the worldwide standard for environmental pro­duct declarations and the base line
model behind various GHG calculators and certifications (e.g. EC, 2009; RSPO PalmGHG).

Various LCA on palm oil products have shown that the agricultural stage is a major contributor
to most of the potential environmental impacts, including global warming, eutrophication and
acidification (Yusoff and Hansen, 2005; Schmidt, 2007; Chuchuoy et al., 2009; Choo et al., 2011).
This large contribution is due to combined important nitrogen (N) input levels in the field and low
input levels at the mill and refinery stages. The agricultural stage remains a critical contributor even
when the system boundary is extended to palm-based biofuel pro­duction (Pleanjai et al., 2009; Achten
et al., 2010; Papong et al., 2010; Arvidsson et al., 2011). Focu­sing on global warming impact, main
contributors are N-related GHG emissions in the plantation and methane emissions from palm oil mill
effluent (POME) treatment. The impact from the plantation becomes overwhelming when forests or
peatland areas are converted to palm plantations (Wicke et al., 2008; Reijnders and Huijbregts, 2008;
Schmidt, 2010). Meanwhile, impact from POME can be dras­tically reduced if the biogas is captured
with electri­city recovery.

While N-inputs are critical, LCA models still mostly rely on global emission factors (IPCC, 2006). A
better mo­delling of the N balance including a better accounting for soil processes would allow for a
more accurate diagnosis of environmental impacts and control levels in plantation management.

226 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 225-234, Tomo I, 2016
Introducción

La cuantificación del impacto de nuestros sistemas
de producción en el medio ambiente se ha converti-
do en un hito para las cadenas de productos básicos
agrícolas. Teniendo en cuenta los diversos riesgos de
contaminación (los plaguicidas, los gei, la eutrofiza-
ción…), así como las oportunidades de mitigación
para reducir el calentamiento global, por ejemplo, es
crucial tener un entendimiento, unas herramientas
y modelos adaptados que permitan identificar mejo-
res prácticas para reducir los impactos ambientales
de la agricultura.
Hoy día existe una única metodología estandari-
zada (iso 14040, series 2000-2006), reconocida inter-
nacionalmente, para estimar el impacto ambiental de
las actividades humanas a lo largo de una cadena de
productos básicos: el Análisis de Ciclo de Vida (acv).
En la última década, el acv se ha convertido en la
norma mundial para informar sobre las declaraciones
ambientales de productos (iso 14025 Declaraciones
Ambientales Tipo III) y en el modelo base detrás de
diversas calculadoras y esquemas de certificación de
los gei (por ejemplo, ipcc, 2006, Directiva Europea
sobre Energías Renovables, 2009).
El acv se basa en dos principios fundamentales.
Primero, los impactos ambientales se cuantifican a
lo largo de la cadena de productos básicos o “ciclo
de vida”, desde la extracción de las materias primas
(“cuna”) hasta el final de la vida del producto o ser-
vicio (“tumba”). Luego, se cuantifican los impactos
con respecto a una unidad funcional, ya sea una can-
tidad de producto (un kilo, un carro, etc.) o un uso o
servicio (horas uso, km, etc.) Desde una perspectiva
global, todo el ciclo de vida de un producto se debe
tener en cuenta para que las mejo-
ras ambientales locales en una fase
de producción o en un lugar no
sean simplemente el resultado de
El Análisis de Ciclo de Vida (ACV) es una
trasladar el problema a otra fase o metodolo­gía estandarizada ISO única
lugar (Jolliet et al., 2010). Asimis-
mo, la comparación basada en una
para estimar el impacto ambiental de las
unidad funcional común provista actividades humanas a lo largo de una
es de suma importancia para evitar
trasladar el problema de una cade-
cadena productiva.
na a otra compensatoria. Por últi-
mo, el acv evalúa el desempeño ambiental a través de
múltiples impactos, tales como el cambio climático, la
acidificación, la destrucción de la capa de ozono, etc.
A priori, este enfoque multicriterio no hace hincapié
en alguno de los impactos pero señala los mayores
impactos y sus orígenes en ciertas fases de la produc-
ción. Las compensaciones y arbitrajes necesarios pue-
den, por tanto, documentarse.
En este artículo, primero presentamos breve-
mente el principio de modelización del acv, revi-
samos los resultados de acv publicados y las eva-
luaciones de gei de productos de aceite de palma, y
analizamos la información proporcionada sobre los
impactos ambientales del aceite de palma y las in-
certidumbres restantes.
Fundamentos del Análisis de Ciclo de Vida
El Análisis de Ciclo de Vida (acv) emplea una me-
todología de cuatro etapas: 1) la definición de los ob-
jetivos del estudio y los límites del sistema estudiado
desde el inicio hasta el final de la cadena; 2) el inven-
tario de todos los flujos de recursos utilizados y las
sustancias liberadas dentro del sistema; 3) la carac-
terización o modelización de los impactos con base
en el inventario; 4) la interpretación de los resultados
(iso 14040, series 2000-2006). La definición de los
objetivos del estudio (paso 1) implica la definición de
la unidad funcional (uf) y el alcance de los procesos
del sistema por evaluar (por ejemplo, el acv de uf = 1
tonelada de racimos de fruta fresca –rff- incluye todos
los procesos, desde la extracción de la materia prima
hasta la cosecha de rff en el límite del bloque de pal-

Impactos ambientales de productos de aceite de palma: ¿Qué podemos aprender del

Análisis de Ciclo de Vida? • Bessou, C. & Pardon, L. 227
 mas, en proporciones relativas para producir una to-
nelada de rff). Luego se hace inventario de los flujos
(recursos utilizados y sustancias emitidas) (paso 2)
según las especificidades técnicas del sistema en estu-
dio. Por último, se calculan los impactos ambientales
potenciales (paso 3) con base en un modelo lineal que
da cuenta de la dosis, el destino y la exposición de
todas las emisiones o recursos utilizados que pueden
contribuir a diversos impactos ambientales a lo largo
de la cadena de productos básicos (Ecuación 1). Este
modelo lineal es la simplificación de los mecanismos
de impactos ambientales reales que no tienen en cuen-
ta la sensibilidad media local o los efectos umbral. Los
impactos del acv son, por tanto, efectos potenciales y
no reales. La interpretación de los resultados (paso 4)
se realiza a la luz de las incertidumbres relacionadas
con todos los pasos anteriores. El acv permite identifi-
car los puntos críticos de los impactos ambientales, las
contribuciones del proceso a los impactos y las com-
pensaciones potenciales entre las categorías de impac-
to o las fases del proceso.
(Ecuación 1)
IP = ∑ ni mi • CFi,P
Por ejemplo, el impacto del cambio climático se
calcula teniendo en cuenta un inventario de todas las
emisiones de gei por unidad de producto. Luego, las
emisiones se agrupan en un único indicador de im-
pacto mediante el modelo lineal de ipcc, que caracte-
riza lo que sucede a los gei en la atmósfera y sus con-
tribuciones relativas al efecto invernadero mundial.
Los factores de caracterización, en el caso del cambio
climático, se expresan en CO2 equivalente (CO2e) ba-
sado en la masa.
A pesar de los pasos metodológicos intuitivos y las
directrices bien documentadas, la implementación
del acv plantea algunos problemas debido a la esca-
sez de información o de conocimientos científicos,
lo que da lugar a una serie de incertidumbres, sobre
todo cuando se hace el inventario de las emisiones en
campo y se caracterizan los impactos finales. Existen
varios métodos de caracterización que ofrecen per-
files ambientales diferentes, es decir, un conjunto de
indicadores de impactos potenciales. En la siguiente
sección examinamos los resultados del acv de aceite
de palma a partir de la literatura, sin investigar más
sobre las discrepancias de fondo con relación a la im-
plementación paso a paso del acv.

Donde: ¿Cuáles son los impactos ambientales de

Ip es el indicador para el impacto potencial P
mi es la masa de la sustancia i que contribuye al
impacto potencial P
CFi,P es el factor de caracterización para la contri-
bución de la sustancia i al impacto potencial P
los productos de aceite de palma según los
Análisis de Ciclo de Vida publicados?
Varios acv completos o parciales de productos de
aceite de palma se han publicado en la última déca-
da (Figura 1). Cerca de tres cuartas partes de estas

Figura 1. Artículos publicados en

cada año e informe de citas de 11
Web of Science (September 2015) 10
con el tema (TOPIC) de búsqueda: 9
(LCA+palm oil) ACV+aceite de palma. 8
7
6
5
Resultados encontrados: 67
4
Suma de las veces citadas: 787
3
Suma de las veces citadas sin autocitas: 682
2
Artículos citados: 571
1
Artículos citados sin autocitas: 532
0
Promedio de citas por artículo: 11,75
1996
1997
1998
1999
2000
2001
2002
2003
2004
2005
2006
2007
2008
2009
2010
2011
2012
2013
2014
2015

índice H: 18

228 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 225-234, Tomo I, 2016
publicaciones son acv parciales de la bioenergía a
partir de aceite de palma, que fueron motivadas es-
pecialmente por el debate sobre las posibles ventajas
netas de los biocombustibles en comparación con
sus equivalentes fósiles, y la posterior publicación
de la Directiva Europea sobre Energías Renovables
(2009/28/ec), que estableció los criterios de soste-
nibilidad, incluidas las reducciones mínimas de gei
en comparación con los combustibles fósiles (35 %
actualmente, 50 % de 2017 en adelante). En conse-
cuencia, la mayoría de los acv basados en aceite de
palma publicados se centran en los gei (o impac-
to del cambio climático) y el balance energético (o
agotamiento de los recursos fósiles) (Manik y Halog,
2013, Bessou et al., 2013). Un reducido número de
los acv publicados efectivamente repasan el panel
disponible de impactos ambientales que proporcio-
na la metodología del acv. A continuación, primero
analizamos la información ambiental sobre el bio-
combustible de palma y luego nos centramos en los
acv de aceite de palma.
Impacto ambiental del biodiésel de palma
La mayoría de los acv de bioenergía de aceite de pal-
ma se realizaron en Malasia y Tailandia. Los pocos
restantes cubren principalmente Indonesia (publica-
ciones más recientes), Brasil, Colombia y Camerún.
La gran mayoría de estos estudios evaluó el límite del
sistema de la cuna a la tumba (del pozo a la rueda)
del éster metílico de aceite de palma (pme, por sus
siglas en inglés); es decir, incluidos todos los procesos
a. b.
6 400
5 300
4 200
3 100
2 0
1 -100
0 -200
Tasa de Energía Neta: entrada/salida
-300
Producción agrícola
Transformación industrial
Transporte e infraestructura
Impactos ambientales de productos de aceite de palma: ¿Qué podemos aprender del
Análisis de Ciclo de Vida? • Bessou, C. & Pardon, L.
desde la producción de las entradas (por ejemplo, la
fabricación de fertilizantes) hasta el tanque del vehí-
culo suponiendo combustión completa o incluida la
eficiencia del motor para calcular los indicadores de
energía final y de gei.
Normalmente se utilizan dos indicadores princi-
pales de energía: la Tasa de Energía Neta (ner = sali-
da/entrada) y el Balance o Ganancia de Energía Neta
(salida-entrada). Aunque el indicador más común del
acv para el uso energético generalmente se expresa
en equivalentes del total de recursos fósiles utilizados,
estos indicadores dan una aproximación del impacto
ambiental en términos de agotamiento de los recur-
sos fósiles. Los indicadores de energía pueden incluir,
o no, coproductos, dependiendo de los coeficientes
de asignación o si se aplicó la expansión del sistema.
Los resultados varían mucho entre los estudios (valor
medio de la ner alrededor de 2,9) especialmente en
lo que respecta a la productividad, el manejo de los
coproductos, la inclusión, o no, de bienes de capital
(infraestructura) y las discrepancias en términos de
los escenarios de transporte (Figura 2a).
A pesar de algunas diferencias, todos los estudios
destacan la gran importancia de la producción agrí-
cola de materias primas de aceite de palma y de la
transesterificación en cuanto a costos de energía. La
producción de fertilizantes y metanol es el principal
contribuyente a las fases agrícola e industrial, res-
pectivamente. Si el metanol fuera remplazado por el
bioetanol, la ner se podría mejorar en 50 % (Papong
et al., 2010).
Figura 2. Comparación de los
resultados del ACV del biodiésel
de palma (PME) con base en
información recolectada en Manik
y Halog, 2013; a) tasa de energía
neta media y valores mínimos y
máximos, b) balance medio de GEI
por MJ de biodiésel de palma (PME)
y valores mínimos y máximos con
y sin tener en cuenta el cambio de
gCO2e/MJ biodiésel de palma uso del suelo (LUC, por sus siglas
en inglés).
w LUC
w/o LUC
229
 Los balances de gei también varían considera-
blemente entre los estudios. El principal factor que
influye es la contabilización, o no, del luc. Además,
en los estudios que incluyen el luc, no todos utili-
zan la misma metodología para calcular el impacto
de los gei, lo que dificulta la comparación. Las prin-
cipales variaciones de los parámetros de cálculo son
las reservas de carbono contabilizadas (consideradas
compartimentos de biomasa y cantidad de carbono
liberado/almacenado) y el plazo de amortización
(Wicke et al., 2008; Hansen et al., 2014). Algunos
estudios que no incluyen las emisiones de gei rela-
cionadas con el luc directamente en el balance, dan
información sobre la deuda de carbono o tiempo de
recuperación1 junto con otros resultados. Esta deuda
de carbono varía entre 8 y 169 años para el biodiésel
de palma con valores medios y medianos de 54 y 43
años, respectivamente (Fargione et al., 2008; Wicke et
al., 2008; Pleanjai et al., 2009; Achten et al., 2010; de
Souza et al., 2010; Harsono et al., 2012). El tipo de uso
previo del suelo determina el balance final de gei. Las
reducciones netas de gei parecen posibles cuando se
siembran palmas en tierras degradadas o de pastoreo.
Sin embargo, el cultivo en turberas y la deforestación
son prohibitivos en términos del balance de gei (en
el rango superior de los valores mín-máx). El balan-
ce medio de gei, que explica los diversos escenarios
de luc, alcanza 40 g CO2e/MJ (9 g CO2e/MJ sin luc),
pero se multiplica por diez cuando los bosques de
turberas son convertidos en plantaciones de palma.
En comparación con los combustibles fósiles, el
biodiésel de palma es desventajoso en términos de
gei si se talan los bosques tropicales y de turberas
y la plantación de palma dura menos de un siglo
(Reinhardt et al., 2007). De lo contrario, se puede
lograr una reducción de gei entre 55 y 89 % en com-
paración con el diésel de origen fósil (Wicke et al.,
2008; Pleanjai et al., 2009; Thamsiriroj y Murphy,
2009; Achten et al., 2010). Además del luc, las prin-
cipales fuentes de gei son los fertilizantes (70-90 %
en emisiones en campo, 10-30 % emisiones en el lu-
1 Años necesarios para recuperar la pérdida de carbono
debido al LUC con base en la reducción anual de GEI per-
mitida por el biocombustible al desplazar el combusti-
ble fósil (Fargione et al., 2008; Gibbs et al., 2008).
230
gar de fabricación), las emisiones de metano de los
tratamientos de efluentes de las plantas extractoras
(pome) cuando este no es capturado, y el proceso de
transesterificación (metanol y electricidad) (Plean-
jai et al., 2009; Thamsiriroj y Murphy, 2009; Achten
et al., 2010; Choo et al., 2011).
Por lo menos tres estudios siguen investigando los
impactos ambientales del biodiésel de palma (Puah et
al., 2010; Achten et al., 2010; Arvidsson et al., 2011).
Al mismo tiempo, destacan la importante contribu-
ción de la fase agrícola a otras categorías de impacto,
por ejemplo, potencial de acidificación y de eutrofi-
zación, carcinógenos y respiratorios inorgánicos. Los
fertilizantes contribuyen en gran medida a los im-
pactos potenciales de eutrofización y acidificación. El
uso de biodiésel en motores también se suma a estos
impactos (Arvidsson et al., 2011), y especialmente
contribuye a la categoría de respiratorios inorgánicos
(Puah et al., 2010).
Impactos ambientales del aceite de palma
Los estudios de acv de frutos y aceite de palma son
menos numerosos que los del biodiésel de palma, pero
cubren globalmente más categorías de impacto y pro-
porcionan más detalles sobre la fase agrícola (Yusoff
y Hansen, 2005; Reijnders y Huijbregts, 2008; Zulkifli
et al., 2009; Schmidt, 2010; Vijaya et al., 2010; Stich-
nothe y Schuchardt, 2011). Algunos estudios también
se centran en la evaluación de los gei (Chuchuoy et
al., 2009; Choo et al., 2011; Kaewmai et al., 2012; Bes-
sou et al., 2014). Como era de esperar, los principales
contribuyentes al balance de gei del aceite de palma
crudo son los mismos que para el biodiésel de palma,
la transesterificación aparte, y el luc y la oxidación
de turberas como elementos impulsores críticos y po-
tencialmente abrumadores (Schmidt, 2007; Reijnders
y Huijbregts, 2008; Zulkifli et al., 2009), seguido de
las emisiones de metano del tratamiento de los pome
y de las emisiones relacionadas con los fertilizantes,
especialmente las emisiones en campo de NO2 (Sch-
midt, 2007; Chase y Henson, 2010; Choo et al., 2011;
Bessou et al., 2014).
No obstante, el impacto de los pome puede redu-
cirse significativamente si se hace la captura del biogás
en la planta extractora (Chavalparit et al., 2006; Choo
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 225-234, Tomo I, 2016
et al., 2011; Harsono et al., 2014; Bessou et al., 2014) o, que es impulsada por las emisiones de compues-
en menor medida, si los pome crudos o parcialmen- tos de nitrógeno (N) y fósforo (P). Los principales
te tratados se inyectan en el proceso de compostaje factores de eutrofización en la fase agrícola son la
(Singh et al., 2010; Stichnothe y Schuchardt, 2010). En lixiviación de nitratos y la escorrentía de fósforo y
una aplicación piloto de gei de palma (Calculadora de nitratos. Otras emisiones de compuestos de N tam-
gei de rspo, Chase et al., 2012) en plantas extractoras bién contribuyen a las categorías de impacto de aci-
en el Sudeste Asiático y en América Latina, el balan- dificación y formación de ozono fotoquímico. Aun-
ce promedio de gei fue 1,67 t CO2e/t cpo (Aceite de que el aceite de palma se comporta peor que otros
Palma Crudo, por sus siglas en inglés) oscilando entre cultivos oleaginosos en el impacto del cambio cli-
-0,02 y +8,32 t CO2e/t cpo (Bessou et al., 2014). En las mático, debido especialmente al luc, se comporta
plantas extractoras sin abastecimiento de turberas, la mejor que el aceite de colza en cuanto a los impac-
deforestación, las emisiones de metano de los pome y tos de eutrofización, acidificación, agotamiento de
las emisiones de metano relacionadas con fertilizantes, la capa de ozono y formación de ozono fotoquímico
representaron 41-80 , 15-35 y 3-19 % del total de emi- (Schmidt, 2010).
siones de gei, respectivamente.
El impacto del uso de com-
bustibles fósiles no fue significa-
tivo (0-5 y 0-2 % de las emisiones A pesar de los pasos metodológicos
totales a nivel de campo y planta intuitivos y las directrices bien
extractora, respectivamente). Este
bajo impacto se debió a un bajo ni- documentadas, la implementación del
vel de mecanización en las planta- Análisis de Ciclo de Vida plantea algunos
ciones y al reciclaje de numerosos
residuos que aportan calor y elec-
problemas debido a la escasez de
tricidad para el funcionamiento de información o de conocimientos científicos.
la planta extractora (con potencial
de producción de electricidad ex-
cedentaria). La mayor parte del
uso de combustibles en campo se dedica al trans- ¿Qué nos falta por aprender?
porte de rff. Por consiguiente, el impacto del uso de
combustibles puede variar mucho, de acuerdo con la Existen 13-18 indicadores de categorías de impacto en
logística de recolección de los rff. Los balances de los métodos estándar del acv que se utilizan actual-
gei publicados (o indicador de impacto del cambio mente (recipe, 2008, ilcd, 2011). Quedan muchos
climático) oscilan entre -0,55 y 24 t CO2e/t cpo con indicadores de impacto del acv por explorar más am-
valores medianos de alrededor de 1-2  t CO2e/t  cpo pliamente en los sistemas de producción de aceite de
cuando el luc se refiere a usos mixtos previos del palma, como, por ejemplo, los impactos de los plagui-
suelo y menos de 10 % de turberas, y no se realiza cidas, como el Paraquat o el glifosato en la ecotoxicidad
la captura del metano (Reijnders y Huijbregts, 2008; terrestre o de agua dulce, o el impacto de los sistemas
Schmidt, 2010; Choo et al., 2011; Bessou et al., 2012). de riego en el agotamiento del agua. Dada la alta con-
tribución de los fertilizantes al impacto ambiental de
Con respecto a las otras categorías de impacto, la
la fase agrícola, también habría que investigar más a
fase agrícola sigue siendo el principal contribuyente
fondo los impactos de eutrofización y acidificación re-
a la mayoría de estos, con excepción del impacto de
lacionados con las entradas de nitrógeno (N) y fosfato.
toxicidad en humanos o respiratorios inorgánicos,
a los que contribuyen principalmente las emisiones Independientemente de los límites del sistema, los
de las calderas (Stichnothe y Schuchardt, 2011; Bes- estudios de la fase agrícola, y en particular, las entra-
sou et al., 2012). Las emisiones de las plantas extrac- das de fertilizantes, desempeñan un papel clave en la
toras también pueden contribuir a la eutrofización, determinación del perfil ambiental final. Por tanto,

Impactos ambientales de productos de aceite de palma: ¿Qué podemos aprender del

Análisis de Ciclo de Vida? • Bessou, C. & Pardon, L. 231
 es de suma importancia ajustar las entradas de fer-
tilizantes para fomentar la productividad y al tiempo
limitar los daños al medio ambiente. Para ello, existe
una necesidad crítica de modelos adaptados (mo-
delos mecanicistas u operativos) que permitan ha-
cer una estimación más precisa de las emisiones en
campo relacionadas con los fertilizantes. De hecho, la
gran mayoría de los acv utilizan factores de emisión
de ipcc (2006) para estimar la lixiviación de nitratos
y la escorrentía, así como las emisiones de óxidos ni-
trosos o de amoníaco. Estos factores de emisión están
mal calibrados para las regiones tropicales (Bouw-
man et al., 2002ª; Bouwman et al., 2002b; Stehfest y
Bouwman, 2006) y no toman en cuenta las especifici-
dades de los ciclos de los cultivos perennes, como las
plantaciones de palma.
En una revisión reciente hicimos énfasis en el he-
cho de que la estructura y la evolución a largo plazo
de las plantaciones de palma de aceite inducen patro-
nes espaciotemporales específicos en los flujos de N,
que están mal cuantificados y necesitan mayor inves-
tigación. Esta revisión también destacó que las pérdi-
das de N por lixiviación y volatilización pueden ser
importantes y todas las pérdidas de N gaseoso siguen
siendo muy inciertas (Pardon et al., 2016).
Se necesitan más medidas de campo para esta-
blecer factores de emisión más relevantes. También
se esperan nuevos conocimientos y el desarrollo de
modelos que tengan en cuenta de manera adecuada
el papel amplio de los fertilizantes orgánicos en la ca-
lidad del suelo y las emisiones potenciales en cam-
po. Existen proyectos de investigación en curso que
arrojarán luces sobre los procesos involucrados con
el fin de reducir la incertidumbre en los resultados de
los acv. Los trabajos de desarrollo en otros enfoques,
como los indicadores agroecológicos, pueden ser
complementarios ya que permitirán una mejor con-
tabilidad de las condiciones y prácticas locales para
desarrollar los inventarios del acv.
Existen otros retos relacionados con la modeli-
zación de impactos en el acv. Las investigaciones
en curso sobre la caracterización de impactos del
acv también incluyen el desarrollo de la caracte-
rización de nuevos impactos, como la categoría
de impacto del uso del suelo (Milà i Canals et al.,
2007; Koellner et al., 2012) que ha sido actualizada
en la nueva versión de Ecoinvent (v.3), el impacto
de la biodiversidad ligado al uso del suelo incluida
la diversidad del suelo, etc. Por último, los límites
del modelo lineal se pueden superar mediante el
desarrollo de factores de caracterización regionales
que pueden utilizarse para adaptar el modelo lineal
a la sensibilidad del entorno local. Estos factores
son especialmente críticos en el caso de los impac-
tos localizados que son más sensibles a los cambios
en el entorno inmediato, como la eutrofización, o
los recursos distribuidos de manera desigual a es-
cala mundial, como el agua en las zonas áridas. Ta-
les factores regionales aún no se han desarrollado
mucho en las regiones en donde las plantaciones de
palma están establecidas y en el contexto del luc
que puede afectar especialmente la sensibilidad
media durante la fase de transición.

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234 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 225-234, Tomo I, 2016
Volver al
contenido

Inteligencia de Plantaciones de palma de aceite:

análisis de datos de producción para la toma de decisiones
agronómicas efectivas y el manejo de fertilizantes*
Oil Palm Plantation Intelligence: Production Data Analysis for Effective
Agronomic Decision Making and Fertilizer Management

autores: Thomas Oberthür, Simon Cook, Cristopher Donough, James Cock,

Suan Pheng Kam, Ya Li Lim.
citación: Oberthür, T., Cook, S., Donough, C., Cock, J., Pheng, S., & Li, Y.
(2016). Inteligencia de Plantaciones de palma de aceite: análisis de datos de
producción para la toma de decisiones agronómicas efectivas y el manejo de
fertilizantes. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 235-242.
palabras clave: fertilizantes, plantaciones de palma de aceite, análisis de
datos, productividad.
keywords: Fertilizers, oil palm plantations, data analysis, yield.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Adriana Arias de Hassan.

Thomas Oberthür
Director Regional, Programa del
Sudeste Asiático, IPNI. Regional
Director IPNI Southeast Asia Program,
toberthur@ipni.net

Resumen
La industria de la palma de aceite se encuentra en un punto de inflexión. Lo sucedido durante los últi-
mos dos decenios de crecimiento espectacular, apoyado en la adquisición de tierras no se prolongará por
siempre. Los propietarios de las plantaciones afrontan hoy no solamente una falta de tierras adecuadas
sino también el deterioro del valor del aceite de palma, la ambigüedad de la productividad, la escasez de
mano de obra y una imagen pública deslucida. La industria debe encontrar un nuevo asidero, diseñar
mejores procesos y hacer más con menos. Debe forjar un nuevo futuro para el aceite de palma como
elemento creíble de contribución a la seguridad alimentaria, energética y ambiental, tanto a nivel local
como global. La promesa de la Inteligencia de Plantaciones (IP) radica en implementar e impulsar este
cambio a través de la generación y el análisis de las grandes bases de datos (Big Data). La producción
de aceite de palma es una actividad rica en datos pero pobre en información. La industria hace acopio
de grandes cantidades de datos pero muy pocos se analizan para mejorar la gestión. Sin embargo, los

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 235-242, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 235
 datos encierran la clave para desarrollar mejores prácticas agronómicas, asignar mejor los recursos y
tomar mejores decisiones de gestión. La IP es un proceso de aprendizaje adaptativo basado en el análisis
de grandes bases de datos de desempeño del cultivo para lograr una mayor productividad. Algunos
factores como el clima y el suelo no se pueden controlar, mientras que otros como la fertilización y los
protocolos de cosecha se pueden manipular. La experiencia del Instituto Internacional de Nutrición
Vegetal (IPNI) sugiere que adoptar la IP es algo relativamente sencillo para las plantaciones comerciales.
Entre los beneficios se cuentan una evaluación exacta del desempeño, el rendimiento sobre la inversión
y la identificación de los obstáculos que impiden una producción eficiente.

En este artículo introducimos el concepto de la IP y demostramos la forma de utilizarla para compren-

der mejor la respuesta de la palma de aceite a los fertilizantes y a los factores que interactúan con ella a
fin de identificar y poner en marcha estrategias de gestión de los nutrientes que mejoren el desempeño
global de la plantación.

Abstract
The oil palm industry is at an inflection point. The last two decades of spectacular growth through
unrestricted land acquisition can not go on forever. Plantation owners now face not only a lack of
suitable land but also declining value, yield ambiguity, labor shortage, and a lack luster public ima-
ge. The industry needs to find a new footing. Devise better processes. Do more with less. It needs
to develop a new future for oil palm as a credible contributor to local and global food, energy, and
environmental security. The promise of Plantation Intelligence (PI) is about implementing and accele-
rating this change, through Big Data generation and analysis. Oil palm production is a data-rich but
information-poor activity. The industry collects vast amounts of data but relatively little is analyzed
to improve management. The data itself holds the key to better agronomic practices, better resource
allocation, and better management decisions. Plantation Intelligence is an adaptive learning process
based on the analysis of a large data base of crop performance data to achieve better yield. Some of
these factors cannot be controlled, such as climate and soil, while others can be manipulated, such
as fertilization and harvesting protocols. IPNI’s experience suggests that it is fairly straight forward
for commercial plantations to adopt PI. Among the benefits: an accurate assessment of performance,
return-on-investment, and obstacles to efficient production.

In this paper we introduce the concept of PI, and then demonstrate how it is used to better understand
oil palm response to fertilizer, and the factors interacting with it, in order to identify and implement
strategies for nutrient management that enhances a plantation’s overall performance.

Motores del desarrollo de la

Inteligencia de Plantaciones
Se espera que la población mundial alcance una cifra
superior a 9 mil millones para el año 2050, y que la
mayoría vivirá en las ciudades (Clay, 2011). Una po-
blación más grande con mayores ingresos disponi-
bles y los consiguientes cambios en la alimentación,
incluida una mayor demanda de alimentos procesa-
dos, productos de origen animal y biocombustibles,
apunta a la necesidad de incrementar la producción
agrícola total durante los próximos decenios (fao,
2006). Sin embargo, hay abundante evidencia de que
la productividad de muchos cultivos se ha estancado
(Fischer y cols., 2009, Ramankutty, 2010, Byerlee &
Deininger, 2010, Kushairi, 2010), incluida la de la
palma de aceite (Elaeis guineensis Jacq.), la fuente

236 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 235-242, Tomo I, 2016
más importante de aceites vegetales (Fry, 2010). La
mayoría de los aumentos de la producción de pal-
ma de aceite durante los últimos años se ha asociado
con el incremento del área sembrada y hay preocu-
pación acerca de cómo aumentar la productividad
para satisfacer las exigencias futuras (Corley, 2009).
El único medio posible para cumplir con las metas
de producción sin invadir las tierras de bosque es
aumentar la productividad de las plantaciones ac-
tuales e incorporar tierras degradadas con rendi-
mientos aceptables.
Sin embargo, hay dudas respecto de si se pueden
lograr los mayores rendimientos y si hay capacidad
para mejorar la productividad de las tierras degra-
dadas hasta un nivel aceptable. Corley (1998) ha
propuesto una posible productividad teórica de >18 t/
ha de aceite por año. La progenie seleccionada ha pro-
ducido 12,2 t de aceite de palma crudo (apc) por
hectárea por año (Rajanaidu et al., 1990) y las pal-
mas individuales han producido el equivalente de
13,6 t de apc por hectárea por año (Sharma & Tan,
1999). Donough (2010) ha reportado rendimientos
de aceite cercanos a 20 t de apc por hectárea por año
a partir de mediciones efectuadas en una plantación
comercial totalmente maduro. Se calcula que la pro-
ductividad máxima de aceite que se puede obtener a
escala comercial es de 10 a 11 t de apc por hectárea
por año (Breure, 2003). Una plantación de la Malay-
sian ioi Corporation Berhad produjo un promedio
de 38 t de RFF/ha/año, con un rendimiento esti-
mado de aceite de más de ocho t por hectárea por
año (Donough et al., 2006). Las plantaciones más
eficientes de Indonesia producen más de seis t de
apc por hectárea por año (Donough, 2010). A estos
niveles de productividad será posible satisfacer la
demanda futura de aceite de palma a partir del área
actual en producción y de posibles desarrollos nue-
vos en tierras degradadas marginales. Infortunada-
mente, a nivel de Indonesia los promedios quinque-
nales de 3,30; 3,92; 3,41; 3,47; 3,56 y 3,64 t de apc
por hectárea indican muy poco o ningún aumento
de la productividad, y la existencia de una brecha
entre el promedio de las plantaciones (faostat,
2011). Por tanto, la posibilidad de cerrar la brecha
de productividad dependerá en gran medida de las
innovaciones introducidas como consecuencia del
mejoramiento continuo de las prácticas de manejo.
Inteligencia de Plantaciones de palma de aceite: análisis de datos de producción para la toma
de decisiones agronómicas efectivas y el manejo de fertilizantes • Oberthür, T., et al.
Inteligencia de la Plantación como
soporte para el manejo de las
plantaciones
El Programa del ipni en el Sudeste Asiático (seap)
ha desarrollado un enfoque de gestión basado en las
Mejores Prácticas de Manejo (mpm) a fin de reducir
la brecha de productividad entre las distintas plan-
taciones de palma adulta (Witt & Donough, 2007) en
concordancia con los principios de la Mesa Redonda
de Aceite de Palma Sostenible (rspo). Se han demos-
trado resultados exitosos en diversas plantaciones de
gran escala. Un estudio hecho en seis plantaciones
de aceite de palma reveló un promedio de aumento
en un lapso de cuatro años de 4,6 a 25,6 %. La mejor
plantación produjo un promedio de más de 30 t de rff
por año por hectárea, y la menos productiva tuvo un
rendimiento de más de 20 t. El mejor bloque produjo
un promedio anual de 36,2 t de rff durante un pe-
ríodo de cuatro años. La mayor producción anual de
uno de los bloques comerciales fue de 38,2 t de rff
en Kalimantan, lo cual equivale a una producción
de apc de más de 7,6 t (a una tasa supuesta de ex-
tracción de 20 %). Durante cuatro años, dos planta-
ciones superaron anualmente las 6 t de apc, y una
plantación alcanzó 5,7 t.
Si bien ha sido muy exitoso, el desarrollo del mé-
todo de las mpm también reveló la complejidad de su
implementación. Según Kaydos (1999), la definición
de sostenibilidad es la capacidad de cambiar los pro-
cesos en respuesta a los factores impulsores del cam-
bio. Esos factores son muy impredecibles debido a
la complejidad de las fuerzas económicas, sociales y
políticas que los generan. A fin de lograr incremen-
tos sostenibles de producción es necesario armoni-
zar múltiples mpm con condiciones ambientales muy
heterogéneas. Además, las empresas que se encuen-
tran en situaciones ambientales semejantes pueden
manejar sus plantaciones con filosofías comerciales
diferentes, lo cual crea aún mayor complejidad. Sin
embargo, es vital adaptarse para aumentar la produc-
tividad. Proponemos que se requieren procesos com-
plementarios para desplegar unas mpm sostenibles
y exitosas. Las empresas que se adaptan cambiando
fundamentalmente los procesos son más exitosas a
largo plazo que las que se adaptan cambiando sola-
237
 mente los factores porque, con el tiempo, las condicio-
nes cambiantes anulan los pequeños cambios factoria-
les, mientras que las empresas que modifican procesos
pueden continuar adaptándose. Hoy se hace énfasis
con frecuencia en la importancia de la inteligencia
del negocio para facilitar la adaptación, y en el sur-
gimiento del Big Data como componente esencial de
la estrategia empresarial. Algunas de las afirmaciones
pueden ser exageradas, pero varios informes recientes
(Pearson y Wegener, 2013, Brown et al., 2014, McAfee
y Brynjolfsson, 2012) presentan datos confirmatorios.
Las compañías que utilizan inteligencia del negocio
son más rentables y tienen mayor probabilidad de ex-
plotar mercados nuevos y adoptar procesos nuevos.
Es cierto que no sorprende el éxito de compañías que
utilizan el Big Data como Google o Amazon, puesto
que ya están ubicadas en la “banda de la información”
dentro del espectro industrial. Después de todo, es cla-
ro que las empresas construidas sobre tecnologías que
evolucionan a gran velocidad tienen mayor probabili-
dad de beneficiarse de la adopción de las tecnologías
de la información que aquellas que se benefician de las
dotaciones de recursos. Es más fácil comprender cómo
el análisis de los datos mejora el marketing –un proceso
intangible esencialmente– que la forma como mejora
unos procesos de producción conectados a unos pro-
cesos biológicos en el mundo real.
Sin embargo, sugerimos algunas posibles aplicacio-
nes de los análisis de los datos para los operadores de
la industria de la palma de aceite (Cook et al., 2014):
a) Evaluación precisa del desempeño, incluido el
análisis de las fuentes de rentabilidad, pérdidas o
valoración de los activos de operaciones grandes y
altamente variables.
b) Análisis del rendimiento sobre la inversión (in-
cluido el retorno por el uso de fertilizantes) de pal-
mas de composición genética variable sometidas a
distintos climas y cultivadas en suelos diferentes.
c) Identificación de los obstáculos que impiden me-
jorar los procesos de producción, como la falta
de mano de obra calificada o de oportunidades
de mecanización.
d) Soporte para las decisiones tácticas que requieren
análisis de procesos complejos y/o a largo plazo.
Entre ellos están, por ejemplo, evaluar la rentabi-
lidad futura de los bloques considerando las pro-
238
yecciones inciertas del precio del apc, los eventos
climáticos o la disponibilidad de mano de obra.
Cook et al., (2014) plantean una pregunta váli-
da con respecto a la inteligencia que podría reque-
rirse en el caso del nego­cio de la palma de aceite.
Si bien es razonable suponer que la mayoría de los
gerentes conocen su negocio suficientemente bien
como para que el análisis fuera innecesario, un cú-
mulo de estudios resumidos por Kahneman (2011)
sugiere lo contrario. Esta investigación cataloga
muchos tipos de sesgos y errores de criterio a los
cuales son susceptibles hasta los mejores gerentes,
independientemente del tipo de industria en la que
se desenvuelven como la “desventaja” de lidiar con
un mundo incierto y cambiante. La consecuencia
práctica es que cuando los gerentes están bajo pre-
sión, tienden a dejarse llevar principalmente por la
intuición a la hora de tomar decisiones. Cuanto más
inciertas las condiciones, más arriesgadas tienden a
ser esas decisiones.
Propósito de la Inteligencia de
Plantaciones
Hemos desarrollado una adaptación de la inteligencia
del negocio para apoyar concretamente a los gerentes
y propietarios de las plantaciones en sus decisiones
tácticas y estratégicas. El objetivo de la ip es propor-
cionar un análisis de las operaciones comerciales de
la palma de aceite para que sirva de apoyo a la hora
de tomar decisiones en condiciones de incertidum-
bre. Algunos ejemplos de tales situaciones (Cook et
al., 2014) podrían ser los siguientes:
a) La expansión de la producción de palma de aceite
a otras zonas en donde el conocimiento actual so-
bre la producción es extremadamente limitado.
b) Cambios futuros de los términos del comercio. La
probabilidad de que los precios mejoren en el fu-
turo es menor que la probabilidad de que aumen-
ten los costos de los insumos y la mano de obra, lo
cual implica que los términos del comercio de la
palma de aceite pueden tender a la baja, como se
ha documentado durante los últimos 40 años para
toda una gama de productos básicos diferentes a
los combustibles (Spatafora y Tytell, 2009).
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 235-242, Tomo I, 2016
c) La mayor tensión por cumplir con las presiones
ambientales y sociales cuando los actores exter-
nos pueden restringir el espacio operativo dis-
ponible en el que los productores puedan tomar
decisiones estratégicas.
d) Consolidación del área de producción, lo cual se
traduce en presiones para los operadores para ex-
traer más de la tierra y de los recursos laborales
existentes a fin de satisfacer a los inversionistas y a
otras partes interesadas.
Mecánica y proceso de la
Inteligencia de Plantaciones
La ip es un proceso adaptativo de aprendizaje basado en
el análisis de una gran base de datos de desempeño del
cultivo encaminado a lograr mayor productividad. Los
gerentes participantes aprenderán a manejar diversos
factores que afectan la productividad. La ip ilustra la va-
riación del desempeño del cultivo y de los factores que
afectan el desempeño. Algunos de esos factores como
el clima y el suelo no se pueden controlar, mientras que
otros se pueden manipular, como los protocolos de fer-
tilización y de cosecha. Los análisis de la base de datos
producen un portafolio de intervenciones recomenda-
das que se pueden llevar posteriormente a la práctica
mediante las mpm existentes. Las mpm se pueden im-
plementar directamente o someterse a prueba en un
experimento a escala de finca a fin de lograr una confir-
mación adicional de su efectividad (Figura 1).
La producción de palma de aceite es una actividad
rica en datos pero pobre en información. La industria
recopila grandes cantidades de datos pero son muy po-
cos los que se analizan para mejorar la gestión. Esta fal-
ta de análisis se traduce en oportunidades perdidas. La
“variación no gestionada” en las plantaciones de palma
de aceite representa un medio para reclamar esas opor-
tunidades perdidas a fin de innovar a través de la ip,
puesto que son los datos los que encierran la clave para
mejorar las prácticas agronómicas, asignar mejor los
recursos y tomar mejores decisiones de gestión. La ip
puede mejorar las habilidades de los gerentes al aclarar
los efectos de los diversos insumos y vencer los sesgos
naturales de criterio. Las intervenciones recomenda-
das más prometedoras se pueden implementar fácil
e inmediatamente porque (a diferencia de los experi-
mentos tradicionales de laboratorio) un experimen-
to a escala de finca se puede hacer como parte de la
operación de rutina de una plantación comercial, con
mínima perturbación de las actividades diarias. Con el
tiempo, a medida que se agregan datos nuevos, el ge-

Figura 1. La Inteligencia de
Opcional: Plantaciones es una herramienta
Cambie
Organice los datos analítica que examina los datos
decisiones inciertas
con el
de rendimiento existentes y los procesos de
existentes para su
ESTADO DE
VISUALIZACIÓN
producción como base para
EXPERIMENTOS A
ESCALA
desarrollar y/o desplegar ideas
nuevas e innovaciones para
toda una plantación en un lugar
específico.

Cuantifique
Genere indicadores
los cambios de
de rendimiento y
rendimiento para
métricas para el
DECISIONES
ANÁLISIS
gerenciales

Cree opciones
de intervención
específica para la
EVALUACIÓN del
rendimiento

Inteligencia de Plantaciones de palma de aceite: análisis de datos de producción para la toma

de decisiones agronómicas efectivas y el manejo de fertilizantes • Oberthür, T., et al. 239
 rente tendrá un conjunto de cifras cada vez más con-
fiables con las cuales trabajar. Esto permite crear una
estrategia más dirigida para incrementar la productivi-
dad con mayor responsabilidad, maximizando la pro-
ducción de cada lote de tierra cultivada independiente-
mente de las características originales de la plantación.
La experiencia del ipni sugiere que adoptar la ip es
algo bastante sencillo para las plantaciones comerciales
puesto que el proceso de generación es el mismo para
todos los gerentes de las plantaciones. El ejercicio se
puede diseñar de tal manera que refleje las prioridades
de la gerencia de una plantación o de su junta directiva.
En la ip los gerentes y analistas determinan conjun-
tamente las fuentes de variación importantes para los
gerentes. El análisis consta de ocho pasos en los cua-
les interactúan los gerentes y los analistas (Cook et al.,
2014). Los pasos comprenden la adquisición de los
datos, el análisis preliminar, las conversaciones con la
gerencia, un análisis más a fondo y su discusión y, fi-
nalmente, la evaluación. Es importante comprender el
sistema de producción antes de tratar de analizar un
componente específico de las operaciones de campo,
como puede ser el uso de fertilizantes. El objetivo es
eliminar la incertidumbre causada por la variación a
escala de campo y así apoyar a la gerencia en sus deci-
siones. El ciclo análisis-interpretación-decisión-evalua-
ción mejora progresivamente la certeza de los gerentes
de campo, quienes utilizan los resultados para sustentar
los cambios en la práctica. El valor del método radica en
la exploración progresiva de los datos para la totalidad
del área, la cual les permite a los gerentes monitorizar
la pertinencia práctica de cada conocimiento adquirido.
En nuestra conferencia ilustramos la forma como la
ip contribuye a la consolidación de la producción en las
áreas existentes. En particular, demostramos la forma
como se utiliza para comprender mejor la respuesta de
la palma de aceite al fertilizante en situación comercial y
los factores que interactúan con ella, a fin de identificar
e implementar estrategias de gestión de los nutrientes
para mejorar el desempeño global de la plantación.
Inteligencia de Plantaciones en la
gestión de los fertilizantes
Los resultados presentados en la conferencia represen-
tan siete años de datos recopilados de cientos de blo-
240
ques, es decir, las unidades más pequeñas de gestión
de la plantación, abarcando más de 10.000 hectáreas
de dos plantaciones comerciales en Indonesia y Mala-
sia. Los datos para cada bloque incluyen el área total
y el área sembrada, el año de siembra, el número total
de palmas, y el tipo predominante de suelo y la clase
de pendiente. Un experto en suelos clasificó los sue-
los en grupos de manejo después de desarrolladas las
plantaciones. La clasificación se basó en la profundi-
dad, la textura, el drenaje y la fertilidad del suelo. La
precipitación mensual y el número de días de lluvia
se registraron en toda el área del estudio. Se utilizaron
los registros mensuales del número y el peso total de
los rrf para cada bloque. Se registraron las cantidades
anuales de cada fertilizante aplicadas a cada bloque, se
convirtieron en nutrientes N, P, K, y Mg y se sumaron
para obtener el total anual de N-P-K-Mg aplicado. Se
aplicaron suficientes micronutrientes para suplir las
deficiencias conocidas, pero estas no se consideraron
en el análisis. Se registró el número de veces que se co-
sechó cada bloque y el número total de días-hombre de
cosecha (dhc) en cada ocasión.
Estos datos se registraron cada mes, pero se su-
maron para obtener el total anual de dhc para cada
bloque. Antes del análisis revisamos lo que se había
registrado y eliminamos los datos incompletos, con
lo cual se redujo el conjunto de datos. Calculamos el
índice promedio de productividad de los fertilizantes
(ppf) (fao, 2006) utilizando el formato general aplica-
do en control de procesos. La variación en el producto
es función de las variables controlables (vc), las varia-
bles no controlables pero conocidas (nc) y las variables
no controlables desconocidas (aleatorias). Las vc son
insumos de fertilizantes e intensidad de la cosecha (de-
finida como el número de dhc por hectárea). Las nc
corresponden a datos como el área del bloque, la edad
de las palmas, la densidad de siembra, la topografía,
el tipo de suelo y la precipitación. Exploramos el efec-
to de las nc sobre la respuesta en productividad a los
fertilizantes. La productividad en rff y la cantidad de
fertilizante aplicado muestran grandes variaciones en
el año y entre años. Redujimos la variación interacti-
vamente mediante la regresión lineal gradual incorpo-
rada en el software Spotfire de tibco (tibco, 2014). El
analista pudo monitorizar los componentes de la varia-
ción puesto que cada uno influye individualmente en
el cálculo de la respuesta estimada al fertilizante.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 235-242, Tomo I, 2016
 Se necesitan 30 meses desde el momento en que se
determina el sexo de la florescencia de una palma de
aceite y el momento en que se cosecha un racimo ma-
duro (Breure, 2003). Por tanto, para el cálculo de la
respuesta en productividad a los fertilizantes se debe
relacionar la productividad en rff con el fertilizante
aplicado durante el período de desarrollo del racimo.
Tomamos en cuenta el período de seis meses entre
la polinización y la cosecha: la productividad en rff
no responde al fertilizante aplicado en los seis meses
previos a la cosecha, es decir, desde la polinización
hasta la madurez. Sin embargo, los rendimientos de
rff sí responden al fertilizante aplicado durante los
dos años transcurridos entre la diferenciación sexual
y la polinización. Por tanto, la productividad en rff
durante cualquier año calendario se relaciona con la
suma de 50 % de los nutrientes aplicados en ese año,
la cual toma en consideración los seis meses previos a
la cosecha, 100 % en el año anterior y 50 % en el año
anterior a ese. De esta forma, sumamos el fertilizante
aplicado durante los dos años anteriores a la polini-
zación, la cual ocurre seis meses antes de la cosecha.
Resumen de los resultados
presentados en la Conferencia
Brindamos un procedimiento para analizar los da-
tos comerciales de las plantaciones de palma de aceite
para identificar la relación entre el uso de fertilizante
y la productividad en rff. Hasta donde sabemos, es
la primera vez que se han utilizado datos de la planta-
ción para identificar la respuesta al fertilizante a escala
comercial. Hay datos disponibles para todas las planta-
ciones comerciales. Consideramos que este análisis po-
dría convertirse en elemento central de las plantaciones
de palma de aceite que monitorizan constantemente el
desempeño. El análisis complementa los experimentos
convencionales de lotes. Explica las observaciones en
Referencias
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Inteligencia de Plantaciones de palma de aceite: análisis de datos de producción para la toma
de decisiones agronómicas efectivas y el manejo de fertilizantes • Oberthür, T., et al.
grandes áreas comerciales y apoya las inferencias sobre
el desempeño futuro. El análisis arroja luces sobre las
respuestas al fertilizante, las cuales aplican directamente
a las áreas y a la escala en la cual se toman las decisiones
sobre los fertilizantes. Se puede extrapolar fácilmente a
áreas más grandes. El análisis toma en consideración las
fuentes individuales de variación a cada paso, algo que
los gerentes comprenden fácilmente.
La principal debilidad del método es su especifici-
dad. No se pueden generalizar los resultados con cer-
teza más allá de las áreas analizadas. La confianza en los
resultados se basa en la variación del producto en rela-
ción con la variación de los insumos. En las operaciones
comerciales, los insumos variables no tienen por objeto
aportar máxima claridad sino generar utilidades. Este
procedimiento les brinda a los operadores cálculos di-
rectos de la respuesta a los fertilizantes en áreas grandes,
sin costos adicionales aparte del análisis. Con base en
los resultados, los gerentes pueden optar por aplicar más
fertilizante a los bloques de mejor desempeño. También
pueden explorar si están justificadas las inversiones
como las hechas en drenaje para lograr una producti-
vidad mayor y más estable. En caso de que la gerencia
decida que no es rentable mejorar los bloques de mal
desempeño, otra alternativa podría ser aplicar menos
fertilizante. Los gerentes tendrán que reexaminar la pro-
gramación de la mano de obra para tomar en considera-
ción las respuestas esperadas al uso del fertilizante. Qui-
zá deban concentrar más mano de obra costosa y difícil
de conseguir en los bloques más productivos.
Agradecimientos
Los resultados reportados son producto de un pro-
yecto de colaboración que se encuentra en marcha
entre el Programa de ipni en el Sudeste Asiático, Wil-
mar International Limited e ijm Plantations Berhad,
con fondos de ipni y Canpotex Limited.
241
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242 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 235-242, Tomo I, 2016
Volver al
contenido

Estudios seleccionados de agricultura de precisión

en palma de aceite: un resumen de diez años*
Selected Precision Agriculture Studies in Oil Palm:
A 10-Year Summary

citación: Balasundram S. K. (2016). Estudios seleccionados de agricultura de

precisión en palma de aceite: resumen de diez años. Palmas 37(Especial Tomo
I), pp. 243-266.
palabras clave: agricultura de precisión, detección remota y proximal,
modelación geoespacial, sistema de apoyo a las decisiones.
keywords: Precision agriculture, remote and proximal sensing, geospatial
modeling system decision support.
*Artículo original recibido en inglés y traducido por Adriana Arias de Hassan.

Siva Kumar Balasundram

Departamento de Tecnología Agrícola,
Facultad de Agricultura,
Universiti Putra Malaysia
Department of Agriculture Technology,
Faculty of Agriculture,
Universiti Putra Malaysia
skbal71@gmail.com

Resumen
La agricultura de precisión (AP) conlleva una estrategia holística de gestión del campo que permite
ajustar el uso de los insumos y los métodos de cultivo como semillas, fertilizantes, pesticidas, la apli-
cación del agua, selección de variedades, siembra, labranza y cosecha, para que correspondan a la
diversidad de suelos, cultivos y otras características de los campos. La AP supone el mapeo y análisis
de la variabilidad de los campos y asocia esta variabilidad con acciones de gestión, a diferencia de la
agricultura convencional, que se basa en un tratamiento uniforme de todo el campo. La palma de
aceite es una excelente candidata para la implementación de la AP, especialmente porque consume
una gran cantidad de insumos químicos y físicos. Sin embargo, uno de los mayores obstáculos para
implementar en detalle estas estrategias a la palma de aceite es la gran extensión de las plantaciones.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 243
 El desafío agronómico de mejorar la productividad depende de tres problemas principales: 1) la fer-
tilización, 2) las prácticas de cultivo, como la densidad de siembra, la cobertura vegetal, la poda y el
drenaje y 3) el control de plagas y enfermedades.

En este documento se presenta un resumen de diez años de estudios seleccionados de AP que se realiza-
ron en las plantaciones de palma de aceite de Malasia e Indonesia. Estos estudios tratan sobre la variabi-
lidad espacial de la fertilidad del suelo en una misma topografía, la eliminación de los efectos espaciales
para mejorar la interpretación de los datos de las pruebas de fertilizantes, la elaboración de un protocolo
de estimación no destructiva de la producción y la calidad del aceite, la evaluación de la densidad de
repoblación mediante la detección remota, la variabilidad espacial del carbono orgánico del suelo en
diferentes etapas de cultivo, la variabilidad espacial de la enfermedad de manchas anaranjadas, discrimi-
nación entre deficiencia de potasio y los síntomas de la enfermedad de manchas anaranjadas mediante
la detección remota, los cálculos de producción de los racimos de fruta fresca mediante la detección
remota, y el cálculo de la calidad y la producción de aceite de palma mediante detección proximal.

Abstract
Precision Agriculture (PA) embodies a holistic field management strategy that allows adjustment of
crop input use and cultivation methods, including seed, fertilizer, pesticide and water application,
variety selection, planting, tillage and harvesting, to match varying soil, crop and other field attribu-
tes. PA involves mapping and analyzing field variability, and linking such variability to management
actions. This contrasts with conventional agriculture that is based on uniform treatment(s) across a
field. Oil palm is an excellent candidate for PA implementation simply because it consumes a large
amount of chemical and physical inputs. However, a major constraint in implementing PA strate-
gies on a detailed scale for oil palm is the typically large plantation size. The agronomic challenge
of increasing oil palm yield productivity hinges on three primary issues: 1) fertilization, 2) cropping
practices such as planting density, ground cover, pruning and drainage, and 3) pest and disease ma-
nagement. This paper presents a 10-year Abstract of selected PA studies carried out in Malaysian and
Indonesian oil palm plantations. These studies are: spatial variability of soil fertility across topography,
removal of spatial effects to improve interpretation of data from fertilizer trials, development of a
non-destructive oil yield and oil quality estimation protocol, stand density assessment using remote
sensing, spatial variability of soil organic carbon across different crop ages, spatial variability of orange
spotting disease, discriminating between potassium deficiency and orange spotting disease symptoms
using remote sensing, estimating fresh fruit bunch yields using remote sensing, and estimating palm
oil quality and yield using proximal sensing.

Introducción
La Agricultura de Precisión (ap) ofrece varios bene-
ficios posibles en lo referente a rentabilidad, produc-
tividad, sostenibilidad, calidad del cultivo, protección
ambiental, calidad de la vida en la plantación, segu-
ridad alimentaria y desarrollo económico rural (Ro-
bert, 1999). Desde el punto de vista del operador de
la plantación, probablemente el mayor incentivo para
adoptar la ap es aumentar el rendimiento económi-
co de la tierra y mejorar el ambiente. Por lo general,
en las decisiones sobre las prácticas agronómicas se
toman en consideración los costos, los beneficios y
los riesgos asociados. Emmot y cols. (1997) indica-
ron que las prácticas agronómicas tienen relación con
una amplia gama de factores como el clima, la infraes-
tructura, los suelos, la topografía y la distribución de
la productividad, las necesidades de nutrientes, los
insectos, las enfermedades y las malezas. La mayoría
de estos factores generalmente presentan variabilidad

244 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
espacial. Por otro lado, factores como el clima, las ne-
cesidades de nutrientes, insectos, enfermedades, ma-
lezas y la distribución de la productividad, también
pueden tener variabilidad temporal. Por consiguien-
te, los problemas principales a los que se ve aboca-
do el operador de la plantación son: 1) determinar
las causas principales de la variación, 2) considerar
cuáles de ellas son controlables, 3) evaluar y priorizar
las posibles actividades de manejo en términos de sus
ventajas agronómicas o económicas.
Hay tres requisitos fundamentales para la ap: 1) la
capacidad de identificar la localización de cada cam-
po; 2) la capacidad de capturar, interpretar y analizar
datos agronómicos a una escala y frecuencia adecua-
das; 3) la capacidad de ajustar el uso de los insumos y
las prácticas agronómicas para maximizar los benefi-
cios de la ubicación de cada campo. Hay toda una se-
rie de tecnologías como el sistema de posicionamien-
to global, la modelación geoespacial, el sistema de
información geográfica, la detección remota y proxi-
mal, la aplicación de tasa variable, los monitores de
productividad y los sistemas de apoyo a las decisiones
que permiten satisfacer esas necesidades. Hay varias
configuraciones de estas tecnologías que se ajustan
a distintas operaciones en la ap. Los protocolos para
la implementación de la ap se pueden reducir a tres
pasos generales: 1) recabar información sobre la va-
riabilidad, 2) procesar y analizar la información para
evaluar la importancia de la variabilidad, 3) imple-
mentar el cambio en el manejo de los insumos. La ap
se ciñe a un proceso cíclico tipificado por un sistema
que se torna más inteligente por cada año en que se
utiliza en la plantación.
El concepto de la ap no es nuevo en palma de
aceite. Ng y Selvadurai (1967) habían promovido el
estudio de los suelos, el uso de mapas del suelo para
asignar los cultivos, y las prácticas especializadas de
siembra conjuntamente con los datos de campo y en-
sayos experimentales para establecer recomendacio-
nes de fertilizantes específicas para cada operación.
Sin embargo, la principal limitación para recabar
datos, planear e implementar el trabajo a una escala
detallada para la palma de aceite es el gran tamaño de
las plantaciones. A la fecha, muchas plantaciones es-
tán equipadas con mapas de suelos semidetallados a
una escala que permite examinar a nivel de 10 hectá-
reas, y a nivel de series y fases de suelos. Según Chew
Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años • Balasundram, S.K.
(1997), varias plantaciones que comprenden suelos
más variados tienen mapas detallados con el doble
de intensidad de examen. Se han identificado áreas
de suelos problemáticos y se han levantado los mapas
necesarios para permitir atención especial y medidas
correctivas. Sin embargo, pocas tienen mapas del te-
rreno, la forma de la tierra, las pendientes o mapas
detallados de drenaje. El reto agronómico de incre-
mentar la productividad de la palma se centra en tres
problemas principales: 1) fertilización, 2) prácticas de
cultivo como densidad de siembra, cobertura del sue-
lo, poda y drenaje, y 3) el manejo de plagas y enferme-
dades (Chew, 1997). Hay evidencia considerable en el
sentido de que los rendimientos de la palma de aceite
son muy variables y esa variabilidad se debe a las va-
riaciones de las propiedades del suelo, los atributos
de la palma, la precipitación y la historia de cultivo
(Foster y Tarmizi, 1988, Chew y Pushparajah, 1995).
Este artículo es un resumen de estudios selecciona-
dos sobre ap realizados en plantaciones de palma de
aceite de Malasia e Indonesia durante los últimos diez
años. Estos estudios se examinarán categóricamente con
base en la plataforma tecnológica empleada (Tabla 1).
Modelación geoespacial
Estudio 1. Relación entre la productividad
de la palma de aceite y la fertilidad
del suelo de acuerdo con la topografía
(Balasundram et al., 2006a)
Se efectuó un estudio con el objeto de evaluar la for-
ma como la topografía afecta la fertilidad del suelo y
la productividad de la palma de aceite en una planta-
ción comercial localizada en el sur de Sumatra, Indo-
nesia. Se dividieron dos sitios con historia de manejo
y esquemas de fertilidad diferentes en tres posiciones
topográficas. En cada posición topográfica se regis-
traron los rendimientos a intervalos de diez días du-
rante un período de dos años. Se recogieron mues-
tras de hojas y suelos de puntos correspondientes a
intervalos de 36,4 m (dirección X) y 8,7 m (dirección
Y) utilizando un esquema sistemático. El análisis fo-
liar se realizó con el fin de cuantificar N, P, K, Mg y
Ca, mientras que el objeto del análisis del suelo fue
determinar pH, C orgánico, P extraíble, K intercam-
biable, Mg y Ca, ceic (Capacidad Efectiva de Inter-
245
 Tabla 1. Plataformas empleadas, presentadas de acuerdo con el alcance de la investigación. Estudios publicados
sobre AP en palma de aceite (2006-2015).

Plataforma tecnológica Alcance de la investigación Palabras clave

Rendimientos en Racimo de Fruta Fresca

Nutrientes foliares y de suelos Variabilidad espacial, zonas de manejo, análisis
Modelación geoespacial
Ensayos de fertilizantes del vecino más cercano, zonas operativas
Carbono orgánico del suelo

Cosecha de Racimo de Fruta Fresca,

Sistema de apoyo a las Rendimiento del aceite
procesamiento de imágenes, color superficial,
decisiones Calidad del aceite
índice de grado de blanqueabilidad

Productividad en Racimo de Fruta Fresca

Índices de vegetación, reflectancia espectral,
Detección remota y Detección de enfermedades
sensor, sistema de información geográfica,
proximal Calidad del aceite
Google Earth
Densidad de siembra

cambio Catiónico), y textura. Los datos recabados
se sometieron a análisis exploratorios, univariados
y bivariados, y también a un análisis de varianza. Se
definieron funciones empíricas de producción para
cada posición topográfica con base en variables
medidas. Los resultados mostraron que la produc-
tividad promedio en los dos sitios del estudio varió,
dependiendo de la posición topográfica. En el si-
tio 1 (Plantación Sungai Pelepah), la productividad
fue constantemente mayor en la ladera y en la cima
que en el talud (Tabla 2). En el sitio 2 (Plantación
Sri Gunung) se observó un gradiente de producti-
vidad, siendo esta más alta en el talud y más baja
en la cima (Tabla 3). La fertilidad del suelo varió
en las distintas posiciones topográficas en los dos
sitios. Las variables medidas en las hojas y el sue-
lo demostraron niveles diferentes de optimalidad/
suficiencia en las distintas posiciones topográficas.
En la mayoría de los casos, las variables foliares y
del suelo demostraron un desempeño comparable
como predictores de productividad (Tabla 4). La
validación de los modelos calibrados mostró exac-
titud razonable para el talud en el sitio 1 y en las tres
posiciones en el sitio 2.

Tabla 2. Comparación de variables (hojas y suelo) y la productividad correspondiente en las distintas posiciones
topográficas en la Plantación Sungai Pelepah.

Variables1 Talud Ladera Cima

Hojas
N 2,71b 2,76a 2,72b
P 0,16b 0,16b 0,17a
K 0,99ab 0,97bc 1,00a
Mg 0,42b 0,41b 0,45a
Ca 0,74a 0,64c 0,71ab
Suelo
pH
0-20 cm 4,46a 4,26bc 4,14c
OM
0-20 cm 2,06ab 2,32a 1,96b
P
0-20 cm x
12,24b x
157,14a x
18,36b
20-40 cm y
3,23b y
6,31a y
2,90b

246 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
Continuación Tabla 2. Comparación de variables (hojas y suelo) y la productividad correspondiente en las distintas
posiciones topográficas en la Plantación Sungai Pelepah.

Variables1 Talud Ladera Cima

K
0-20 cm x
0,30a x
0,20a x
0,15a
20-40 cm y
0,12a y
0,08b y
0,06b
Mg
0-20 cm x
0,71a x
0,31b x
0,43b
20-40 cm y
0,15a y
0,10c y
0,11 bc

Ca
0-20 cm x
1,11b x
1,54a x
0,73c
20-40 cm y
0,30 ab
y
0,28b
y
0,24c
CIEC
0-20 cm 6,33a 4,46b 3,71c
2
Textura LC SCL, LC LC
Productividad
3
2,15b 3,79a 3,97a

1 Expresadas en las unidades siguientes: % (para nutrientes foliares y materia orgánica en el suelo), mg kg-1
(para P del suelo) y m.e. 100 g-1 (para K, Mg, Ca y CIEC del suelo)
2 Interpretada con base en el esquema de la Sociedad Internacional de Ciencias del Suelo (ISSS) [Donde: LC =
arcilla liviana, SCL = marga de arcilla y arena]
3 Reportada en términos del promedio de dos años de RFF (kg) por palma
Nota: no hay diferencia significativa en ninguno de los dos sitios experimentales para los valores promedio segui-
dos del mismo superíndice en el mismo renglón y del mismo subíndice en cada columna (solo para P, K, Mg, Ca del
suelo), p = 0,05.

Tabla 3. Comparación de las variables (hojas y suelo) y la productividad correspondiente para las distintas topo-
grafías en la Plantación Sri Gunung.

Variables1 Talud Ladera Cima

Hojas
N 2,75a 2,75a 2,73a
P 0,18a 0,15c 0,16b
K 0,98a 0,93b 0,96a
Mg 0,40b 0,43a 0,42ab
Ca 0,78a 0,72b 0,71b

Suelo
pH
0-20 cm 4,78a 4,27b 4,16c
OM
0-20 cm 2,59a 2,22b 2,33ab
P
0-20 cm x
79,38a 77,98a
x x
7,14b
20-40 cm y
9,84a y
2,41b y
1,43c
K
0-20 cm x
0,23a x
0,20a x
0,20a
20-40 cm y
0,25a y
0,10b
y
0,10 b

Mg
0-20 cm x
0,65a x
0,70a x
0,61a
20-40 cm y
0,19a y
0,20a y
0,19a

Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años • Balasundram, S.K. 247
 Continuación Tabla 3. Comparación de las variables (hojas y suelo) y la productividad correspondiente para las
distintas topografías en la Plantación Sri Gunung.

Variables1 Talud Ladera Cima

Ca
0-20 cm x
1,63a x
1,49a x
1,19b
20-40 cm y
0,47a y
0,31c y
0,38b
CIEC
0-20 cm 5,46a 5,80a 5,02a
2
Textura SC LC LC

3
Productividad 4,43a 3,60b 3,13c

1 Expresadas en las unidades siguientes: % (para nutrientes foliares y materia orgánica en el suelo), mg kg-1 (para
P del suelo) y m.e. 100 g-1 (para K, Mg, Ca y CIEC del suelo).
2 Interpretada con base en el esquema de la Sociedad Internacional de Ciencias del Suelo (ISSS) [Donde: LC = arci-
lla liviana, SCL = marga de arcilla arenosa]
3 Reportada en términos del promedio de tres meses de RFF (kg) por palma
Nota: no hay diferencia significativa en ninguno de los dos sitios experimentales para los valores promedio segui-
dos del mismo superíndice en el mismo renglón y del mismo subíndice en cada columna (solo para P, K, Mg, Ca del
suelo), con p = 0,05.

Tabla 4. Relación entre productividad y variables de hojas/suelo en las distintas topografías en los dos sitios del
estudio.

Posición
Modelo de regresión§ R2 Ajustado R2
topográfica
Plantación Sungai Pelepah
Talud (1) Productividad = -6,07 + 51,40* P foliar 0,63 0,54
(2) Productividad = 11,44 – 0,55* (N:P) foliar 0,84 0,80
(3) Productividad = 0,36 + 0,62*OM + 0,20*P del subsuelo 0,90 0,83
(4) Productividad = 4,13 – 2,98* (Mg:Ca) del suelo
0,68 0,60
Ladera (2) Productividad = 1,50 + 11,80* (P:K) foliar
0,67 0,59
Cima -Sin modelo significativo-
- -
Plantación Sri Gunung
Talud (1) Productividad = 5,22 – 2,53* Mg foliar 0,76 0,70
(2a) Productividad = 3,19 + 0,15* (N:Mg) foliar 0,80 0,75
(2b) Productividad = 3,04 + 2,66* (P:Mg) foliar 0,79 0,74
(3) Productividad = 3,66 + 0,10* pH 0,66 0,58

Ladera (3) Productividad = 8,78 – 0,70*CIEC – 19,03*log 0,89 0,82

(Mg del subsuelo)

Cima (1) Productividad = 28,25 – 9,28* N foliar 0,89 0,86

(4) Productividad = 3,88 – 2,57* (K:Mg) del suelo 0,75 0,68

§ Desarrollado separadamente utilizando el grupo siguiente como predictor de productividad: variables foliares,
(2) índices de nutrientes foliares, (3) variables del suelo, (4) índices de nutrientes de la capa vegetal.

248 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
 Estudio 2. Variabilidad espacial de las de la palma de aceite en lotes de pequeña escala si-
variables de fertilidad del suelo que influyen tuados en distintas posiciones topográficas. Para cada
sobre la productividad de la palma de aceite posición topográfica se determinaron las variables
que influyen en la productividad (vip) y luego se so-
(Balasundram y cols., 2006b)
metieron a análisis de datos espaciales con variografía
e interpolación (ponderación inversa de la distancia).
Este estudio (extensión del Estudio 1) ofrece informa- Los resultados demostraron que la estructura espacial
ción sobre la variabilidad espacial de las variables de de las vip fue diferente en las distintas posiciones to-
fertilidad del suelo que influyen en la productividad pográficas (Figuras 1, 2 y 3).

Figura 1. Semivariogramas de las

(i) N foliar (%) (ii) P foliar (%) VIP en el talud.
Estructura espacial: Aleatoria Estructura espacial: Aleatoria

0,0137 81,82E-006

0,0103 61,36E-006
Semivarianza

Semivarianza

0,0069 40,91E-006

0,0034 20,45E-006

0,0000 0,00E+000
0,00 21,44 42,88 64,31 85,75 0,00 21,25 42,50 63,75 85,00

Distancia de separación (m) Distancia de separación (m)

(iii) Mg foliar (%) (iv) pH del suelo

Modelo: Esférico; Dependencia Espacial: Fuerte Modelo: Esférico; Dependencia Espacial: Fuerte
Pepita = 3x10-4; Meseta = 22x10-3; Rango Efect = Pepita = 1,89x10-2; Meseta = 0,133; Rango efect
32 m = 81 m

31,88E-004 0,194

23,91E-004 0,146
Semivarianza
Semivarianza

15,94E-004 0,097

79,71E-005 0,049

00,00E+00 0,000
0,0 27,5 55,0 82,5 110,0 0,00 22,69 45,38 68,06 90,75

Distancia de separación (m) Distancia de separación (m)

Figura 2. Semivariogramas de las

(i) CIEC (m.e. 100 g )
Estructura espacial: Aleatoria
(iv) Mg del subsuelo (m.e. 100 g ) -1 VIP en la ladera.
Modelo: Esférico; Dependencia espacial: Moderada
-1
Pepita = 9,9x10-4; Meseta = 3,7x10-3; Rango efec
=58m

0,828 65,7E-004

0,621 49,2E-004
Semivarianza
Semivarianza

0,414 32,8E-004

0,207 16,4E-004

0,000 00,0E+000
0,00 30,00 60,00 90,00 120,00 0,0 30,0 60,0 90,0 120,0
Distancia de separación (m) Distancia de separación (m)

Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años • Balasundram, S.K. 249
 Figura 3. Semivariogramas de las (ii) K de la capa vegetal (m.e. 100 g-1)
Modelo: Esférico; Dependencia espacial: Fuerte
VIP en la cima.
Pepita=1x10-5; Meseta=1x10-3; Rango
efectivo=54m
(iii) Mg de la capa vegetal (m.e. 100 g-1)
Modelo: Esférico; Dependencia espacial: Fuerte
Pepita = 1x10-4; Meseta = 8.8x10-2; Rango efectivo
= 38 m

54,78E-004 12,25E-004

41,09E-004 91,88E-005

Semivarianza

Semivarianza
27,39E-004 61,25E-005

13,70E-004 30,63E-005

00,00E+000 00,00E+000
0,00 20,00 40,00 60,00 80,00 0,00 20,00 40,00 60,00 80,00

Distancia de separación (m) Distancia de separación (m)

(i) N foliar (%)

Modelo: Exponencial; Dependencia espacial: Fuerte

Pepita=1,7x10-4; Meseta=4,8x10-3; Rango efec=41m

0,123

0,093
Semivarianza

0,062

0,031

0,000
0,00 20,00 40,00 60,00 80,00

Distancia de separación (m)

Se determinó que la estrategia óptima de muestreo
depende del tipo de variable investigada y su posición
topográfica. Se pueden obtener estimativos precisos (in-
tervalo de confianza de 95 %, error relativo de 10 %) de
los valores de las pruebas foliares a partir de un tamaño
de muestra consistente en 5 puntos. El tamaño de mues-
tra requerido varió de acuerdo con la variable foliar en
el siguiente orden:
N/P < Mg
Mayor tamaño de muestra (n)
En las variables del suelo, para lograr estimativos
razonablemente precisos (intervalo de confianza de
95 %, error relativo de 10 %), se requiere un tama-
ño de muestra que abarque 86 puntos. El tamaño de
muestra requerido varió de acuerdo con la variable
del suelo en el siguiente orden:
pH < CIEC < Mg del subsuelo < K de la
capa vegetal < Mg de la capa vegetal
Mayor tamaño de muestra (n)
Al parecer, es apropiado para el manejo de la fer-
tilización un concepto de manejo de la zona en el que
se utilice la topografía como factor de delineación.
Solamente el potasio (K) demostró demarcar con cla-
ridad las zonas con valores altos, moderados o bajos
y, por tanto, la necesidad de un manejo de tasa varia-
ble (Figura 4).
Estudio 3. Consideración de la
variabilidad espacial en ensayos
de fertilidad de la palma de aceite
(Balasundram y cols., 2006c)
Las variaciones espaciales de la fertilidad del suelo
pueden ocultar los efectos del tratamiento y, por ende,

250 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
a. Capa superficial Topsoil
del suelo K (m.e./100 g)
0.36 Figura 4. (a) Variabilidad espacial
del K de la capa vegetal en la cima
0.34
y (b) mapa correspondiente de
Alta 0.32 variabilidad reclasificada.
0.3
0.28
0.26
0.24
Superficie del suelo

) 0.22
a s (m
alm 0.2
t rep
n
cia e 0.18
tan
Dis
0.16
Dis
tan
cia 0.14
ent
re h N
iler 0.12
as (
m)

b.
0,38
0,36
0,34
0,32
0,30
0,28
0,26
0,24
0,22
0,20
0,18
0,16
0,14
0,12
0,10
Distancia entre hileras (m)

40

30

20

10
20 40 60 80 100 120 140 160 180 200
Distancia entre palmas (m)

Variable

Alta Moderada Baja

llevar a recomendaciones incorrectas sobre el uso de mediciones originales de crecimiento. Los resultados
fertilizantes. Este estudio (una extensión del Estudio mostraron que el efecto de los tratamientos sobre el
2) tuvo por objeto evaluar el crecimiento de la palma crecimiento de la planta no fueron significativos antes
de aceite en respuesta a la aplicación de K. La variable de eliminar las tendencias espaciales (Figura 5). Las
de respuesta en este estudio fue el crecimiento de la variables de crecimiento presentaron una tendencia
planta, expresado en altura de la palma y longitud de espacial significativa (Figura 6). Para el crecimiento
la hoja. Los efectos del tratamiento sobre la altura de la residual se encontró la observación correspondiente.
planta y la longitud de la hoja se investigaron median- Con la técnica nna se redujo sustancialmente la varia-
te el análisis de variación (aov). Las dos variables de ción estructural presente en los conjuntos de datos de
crecimiento se evaluaron para estructura espacial por crecimiento, lo cual permitió evaluar los efectos verda-
medio de variografía. Después se utilizó el análisis del deros del tratamiento (Figuras 7, 8). Después del ajuste
vecino más cercano (nna) para obtener datos ajusta- nna, las variables de crecimiento variaron significati-
dos de crecimiento. El nna consistió de un proceso de vamente entre los tratamientos, observándose el ma-
tres pasos realizados de manera iterativa. Los efectos yor aumento del crecimiento de la planta en el control
del tratamiento sobre los datos de crecimiento ajus- no tratado (Figura 9). El ajuste nna también se tradujo
tados con el nna se examinaron mediante el análisis en una mayor precisión del modelo lineal, calculado
aov, y se compararon con los obtenidos utilizando las mediante aov.

Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años • Balasundram, S.K. 251
 Figura 5. Crecimiento en respuesta (a) Plantación Sungai Pelepah

a los tratamientos en (a) la 40

y = 1,30x2 - 7,25x + 31,31
plantación Sungai Pelepah y (b) la R2 = 0,99
plantación Sri Gunung 30 MSD = 16,21

Unidad de aumento
(cm por tira)
*Nota: MSD = diferencia de
20
significancia mínima basada en la y = 0,74x2 - 4,26x + 6,59
R2 = 0,99
prueba t del índice de K de Waller- MSD = 18,18
10
Duncan; los promedios separados
por valores inferiores o iguales a la
0
MSD no presentan una diferencia 0 1 2 3 4 5 6
significativa, con p = 0,05. Cloruro de potasio (kg por palma)
Altura de planta Longitud de la hoja

(b) Plantación Sri Gunung

40
y = -0,03x2 - 0,80x + 34,39
R2 = 0,99
30 MSD = 15,21
Unidad de aumento
(cm por tira)

20
y = -1,27x2 - 9,07x + 9,53
R2 = 0,79
10 MSD = 24,94

0
0 1 2 3 4 5 6
Cloruro de potasio (kg por palma)
Altura de planta Longitud de la hoja

Figura 6. Atributos espaciales Longitud de la hoja (unidad de

aumento, cm) (a) Plantación Sungai Pelepah
estructurales de (a) la longitud de Modelo: Esférico; Dependencia
las hojas en la plantación Sungai espacial: Moderada
Pelepah y (b) la altura de las Pepita = 81,3; Meseta = 170,2; 321
Rango efectivo = 38 m
plantas en la plantación Sri Gunung
341
Semivarianza

*Nota: No se observó una

161
tendencia espacial significativa en
cuanto a la altura de las plantas 80
en la plantación Sungai Pelepah
o la longitud de las hojas en la 0
0,00 36,0 72,0 108,0 144,0
plantación Sri Gunung.
Distancia de separación (m)

(b) Plantación Sri Gunung

736

552
Semivarianza

368

184

0
0,00 36,0 72,0 108,0 144,0

Distancia de separación (m)

252 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
 Iteración 1 Iteración 2 Figura 7. Semivariogramas de los
Modelo: Esférico; Dependencia espacial: Moderada Modelo: Exponencial;
Pepita = 55,8; Meseta = 174,7; Dependencia espacial: Fuerte residuos de la longitud de las hojas
Rango efectivo = 36 m Pepita = 0,1; Meseta = 52,7; calculados de manera iterativa
Rango efectivo = 109 m
para la plantación Sungai Pelepah.
230 59,5
§El factor de tendencia (3r*) se
172 44,6 obtuvo mediante el siguiente
Semivarianza

Semivarianza
modelo de regresión (R2 = 0.8):
115 29,7
3r* = 8,1-0.003(x)-0,11(y), donde
57 14,9 (3r) se refiere a los residuos de la
0 0,0
longitud de las hojas en la iteración
0,0 36,0 72,0 108,0 144,0 0,0 36,0 72,0 108,0 144,0 3, (x) es la distancia entre las
palmas y (y) es la distancia entre
Distancia de separación (m) Distancia de separación (m)
las hileras.
Iteración 3 (final) Después de la corrección§
Modelo: Esférico; Dependencia espacial: Débil Modelo: Lineal; Dependencia espacial: Débil
Pepita = 0.1; Meseta = 38,9; Pepita = 19,9; Meseta = 21,7;
Rango efectivo = 95 m Rango efectivo = 137 m
Los valores 3r* se restaron de
los residuos finales reales (3r)
48,3 31,2 y después se evaluaron para
estructura espacial
36,2 23,4
Semivarianza

Semivarianza

24,1 15,6

12,1 7,8

0,0 0,0
0,0 36,0 72,0 108,0 144,0 0,0 36,0 72,0 108,0 144,0
Distancia de separación (m) Distancia de separación (m)

Iteración 1
Iteración 2 Figura 8. Semivariogramas de los
Model: Esférico; Dependencia espacial: Fuerte residuos de la altura de las plantas
Modelo: Esférico; Dependencia espacial: Moderada
Pepita = 51,6; Meseta = 262,7;
Pepita = 130,3; Meseta = 475,9; calculados de forma iterativa para
Rango efectivo = 85 m
Rango efectivo = 82 m
556 648
la plantación Sri Gunung
§ El factor de tendencia (3r*) se
417 486
obtuvo mediante el siguiente
Semivarianza

Semivarianza

278 324 modelo de regresión (R2 = 0,6):

139 162 3r* = -17,9-0,05(x)-

0,17(y)+816,4(rlP), donde 3r se
0 0 refiere a los residuos de la altura de
0,0 36,0 72,0 108,0 144,0 0,0 36,0 72,0 108,0 144,0
las plantas en la iteración 3, (x) es
Distancia de separación (m) Distancia de separación (m)
la distancia entre las palmas, (y) es
la distancia entre las hileras, y (rlP)
Iteración 3 (final) Después de la correción§
Modelo: Esférico; Dependencia espacial: Fuerte Modelo: Lineal; Dependencia espacial: Débil es el residuo de P de las hojas.
Pepita = 0; Meseta = 230,9; Rango efectivo = 65 m Pepita = 81,2; Meseta = 98,4;
Rango efectivo = 137 m Los valores 3r* se restaron de
los residuos finales reales (3r)
449 120
y después se evaluaron para
337 90 estructura espacial.
Semivarianza

Semivarianza

224 60

112 30

0 0
0,0 36,0 72,0 108,0 144,0 0,0 36,0 72,0 108,0 144,0

Distancia de separación (m) Distancia de separación (m)

Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años • Balasundram, S.K. 253
 Figura 9. Respuesta de (a) Plantación Sungai Pelepah

crecimiento ajustada mediante

NNA: (a) longitud de las hojas 10
en la Plantación Sungai Pelepah,

NNA aumento de la altura

ajustada (cm por tira)
(b) altura de las plantas en la
Plantación Sri Gunung *Notas: MSD 0
= diferencia mínima de significancia 0 1 2 3 4 5 6
basada en la Prueba t del índice de
K de Waller-Duncan; los promedios
-10
separados por valores inferiores y = 2,15x2 - 11,86x + 8,57
o iguales a la MSD no presentan R2 = 0,73
MSD = 3,24
una diferencia significativa con p = SE = 0,97
0,05, SE = error típico. -20

Cloruro de potasio (kg por palma)

(b) Plantación Sri Gunung

50
y = 0,26x2 - 4,47x + 40,37
R2 = 0,94
NNA aumento de la altura

MSD = 10,71
ajustada (cm por tira)

40
SE = 2,95

30

20

10

0
0 1 2 3 4 5 6
Cloruro de potasio (kg por palma)

Estudio 4. Variabilidad espacial del obtuvieron en total 60 conglomerados de muestreo

carbón orgánico en el suelo y en los
cultivos maduros de palma de aceite
(Law y cols., 2009)
El objetivo de este estudio fue cuantificar la variabi-
lidad espacial del carbón orgánico en el suelo (cos),
calculando el cos en los sitios no muestreados y
comparando la variabilidad espacial del cos entre
los cultivos jóvenes y maduros de palma de aceite.
El sitio del estudio se escogió para representar dos
grupos de edades de la palma, a saber: 5 años y 17
años después de la siembra. Se utilizó un diseño de
muestreo sistemático para tomar muestras del suelo
a la profundidad de 0-20 cm con base en un con-
glomerado de cuatro palmas que comprendían tres
zonas operativas: el plato (wc), la adición de mate-
ria orgánica (fh), y el sendero de cosecha (hp). Se
para cada sitio. Se hizo la prueba de cos utilizan-
do el método de combustión seca. Todos los puntos
de medición se referenciaron mediante un Sistema
de Posicionamiento Global diferencial (GPSd). Los
datos del cos se exploraron primero por medio de
estadística descriptiva, verificación de normalidad,
detección de valores atípicos y transformación de
datos, seguidos de variografía e interpolación. El
mapa de la variabilidad espacial del cos se realizó
con base en valores medidos y sometidos a Kriging.
Los resultados mostraron heterogeneidad del cos
entre las distintas zonas operativas, en donde los va-
lores más altos de cos se registraron en la adición de
materia orgánica, seguidos del plato y el sendero de
cosecha en los dos sitios (Figura 10). Todas las zo-
nas operativas presentaron una estructura espacial
definible, la cual se describió mediante modelos es-
féricos o exponenciales. Todas las zonas operativas

254 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
 mostraron una dependencia espacial fuerte (Figuras la encontrada en las palmas de cinco años. Los ha-
11, 12). Las zonas operativas de las palmas de cinco llazgos de este estudio sugieren que la evaluación de
años de edad mostraron un rango efectivo menor la variabilidad espacial es una técnica factible para
que el de las palmas de 17 años. La concentración cuantificar la variabilidad del cos en el cultivo de
de cos en las palmas de 17 años fue más estable que palma de aceite.

Figura 10. Contenido de carbón

Carbono orgánico del suelo (%) de 5 años después de la siembra (YAP) y 17 YAP orgánico en el suelo (SOC) (%) a
una profundidad de 0-20 cm en las
2,5
tres zonas operativas (WC, FH y
HP) y a 5 y 17 años después de la
a
2,0 a a siembra (YAP).
b

1,5
SOC (%)

c b

1,0

0,5

0,0
5 YAP 17 YAP
Zonas operativas

Círculo de desyerbado Camino de palera y apile Camino de cosecha

(Weeded circle, WC) (Frond heap, FH) (Harvesting Path, HP)

(a) Círculo de desyerbado (5 YAP)

293250 Figura 11.
2,1
0,0992
293200
Semivariograma
1,82 y mapa de
Latitud (m)

0,0744
Semivarianza

293150 % variabilidad
1,54 SOC
0,0496 293100 1,26
correspondiente
de COS para
0,0248 293050 0,98
(a) WC, (b) FH
0,0000 y (c) HP a cinco
423550

423600

423650

423700

423750

423800

423850

0,00 46,75 93,50 140,25 187,00 Puntos de muestreo años después de la

Áreas excluidas de
Distancia de separación (m) Longitud (m) la interpolación siembra.

(b) Camino de palera y apile (5 YAP)

293250
2,66
0,0742 293200
2,21
Latitud (m)

0,0557 293150 %
Semivarianza

1,76 SOC

0,0371 293100 1,31

293050 0,86
0,0186
423550

423600

423650

423700

423750

423800

423850

0,0000 Puntos de muestreo

0,00 46,75 93,50 140,25 187,00 Áreas excluidas de
Distancia de separación (m) Longitud (m) la interpolación

Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años • Balasundram, S.K. 255
 Continuación (c) Camino de cosecha (5 YAP)
Figura 11. 293250
0,0668 1,81
Semivariograma 293200
y mapa de 1,37

Latitud (m)
0,0501

Semivarianza
293150 %
variabilidad 1,13 SOC
correspondiente 0,0334 293100 0,99
de COS para (a)
0,0167 293050 0,65
WC, (b) FH y (c)
HP a cinco años 0,0000

423550

423600

423650

423700

423750

423800

423850
Puntos de muestreo
después de la 0,00 46,75 93,50 140,25 187,00
Áreas excluidas de la
siembra. Distancia de separación (m) Longitud (m) interpolación

426500
Figura 12. (a) Círculo de desyerbado(17 YAP)
Semivariograma 426450
0,309 2,79
y mapa

Longitud (m)
2,29
correspondiente 0,232 426400
Semivarianza

%
de variabilidad del 1,79 SOC
COS en (a) WC, 0,154 426350 1,29
(b) FH y (c) HP a 0,077 0,79
17 años después 426300
de la siembra. 0,000

291750

291800

291850

291900

291950

292000

292050

292100
0,00 54,00 108,00 162,00 216,00 Puntos de muestreo
Áreas excluidas de la
Distancia de separación (m) interpolación
Latitud (m)

426500
(b) Camino de palera y apile (17 YAP)
0,0731 426450 2,84
Longitud (m)

2,35
0,0549 426400
Semivarianza

%
1,86 SOC
0,0366 426350 1,37

0,0183 0,88
426300
0,0000
291750

291800

291850

291900

291950

292000

292050

292100

0,00 54,00 108,00 162,00 216,00 Puntos de muestreo

Áreas excluidas de la
Distancia de separación (m) interpolación
Latitud (m)

426500
(c) Camino de cosecha (17 YAP)
0,163 426450 1,86
Longitud (m)

1,46
0,122 426400
Semivarianza

%
1,06 SOC
0,082 426350 0,66

0,041 0,26
426300
0,000
291750

291800

291850

291900

291950

292000

292050

292100

0,00 54,00 108,00 162,00 216,00 Puntos de muestreo

Áreas excluidas de la
Distancia de separación (m) interpolación
Latitud (m)

256 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
Sistema de apoyo a las decisiones
Estudio 5. Relación entre el contenido
de aceite y el color superficial de la fruta
de la palma de aceite (Balasundram y
cols., 2006d)
El objetivo de este estudio fue investigar la relación
entre el contenido de aceite y la distribución del color
superficial de la fruta. Se tomaron al azar 80 muestras
de fruta en campo; cada muestra incluyó dos frutas.
Se tomaron fotografías digitales de las muestras a
temperatura ambiente y en condiciones controladas
de iluminación; posteriormente, las muestras se so-
metieron al análisis del aceite total por medio de téc-
nicas de extracción de Soxhlet. Las imágenes digitales
se rectificaron primero con el software Photoshop de
Adobe, y luego se agruparon y sometieron a clasifi-
cación no supervisada mediante el aplicativo Mul-
tiSpec. La cuantificación de la distribución del color
superficial se realizó en Arc View. La relación entre el
contenido de aceite y la distribución del color se de-
terminó mediante una regresión lineal múltiple. Los
resultados mostraron que el contenido total de aceite
osciló entre 5,2 y 86,4 %. Se encontró una correlación
significativa entre el aceite total y todos los compo-
nentes del color, siendo más fuerte la correlación con
el negro (r = -0,85), seguida de rojo (r = 0,81), naranja
(r = 0,62) y amarillo (r = 0,48). La mejor forma de
explicar la relación entre el contenido total de aceite
y los componentes del color fue por medio de los si-
guientes modelos de regresión: (1) % de aceite total =
88,08 – 0,52 (% negro) + 1,30 log (% amarillo), y (2) %
de aceite total = 36,84 + 0,63 (% rojo) + 1,52 log (%
amarillo). Estos dos modelos explicaron 80-81 % de la
variación del color de la fruta (Tabla 5), con 87-88 %
de bondad de ajuste (Figura 13). Al validar con otro
conjunto de datos distinto, estos modelos demostraron
una precisión de 73-75 % (Figura 14). El beneficio de
cosechar la fruta del aceite de palma con base en la
relación entre la distribución del color superficial y el
aceite total se calculó en usd 0,15 por árbol por año
(Tabla 6).

Tabla 5. Modelos de regresión lineal y sus atributos diagnósticos.

Valor de Valor de p
Modelo Sigma
EcuaciónΦ R2 p para la para falta de
(descripción) mayúscula
regresión ajusteΨ

1 (completo) TO = 62,80 – 0,42*B + 0,15*R – 0,17*O + 1,43*log(Y) 0,83 5,96 **

-
+ 12,77*S
2 (sub) TO = 87,43 – 0,57*B 0,71 7,31 **
0,668
3 (sub) TO = 31,71 – 0,63*R 0,66 7,98 **
0,137
4 (sub) TO = 46,17 – 1,51*O 0,38 10,75 **
0,750
5 (sub) TO = 62,91 – 1,95*log(Y) 0,23 12,01 **
0,694
6 (sub) TO = 37,60 – 16,65*S 0,03 13,49 ns -
7 (sub) TO = 91,07 – 0,61*B – 0,19*O 0,72 7,38 **
-
8 (sub) TO = 88,08 – 0,52*B + 1,30*log(Y) 0,81 6,02 **
0,718
9 (sub) TO = 31,63 – 0,57*R – 0,51*O 0,69 7,74 **
-
10 (sub) TO = 36,84 + 0,63*R + 1,52*log(Y) 0,80 6,25 **
0,823

Φ Donde: TO = % aceite total, B = % Negro, R = % Rojo, O = % Naranja, Y = % Amarillo, y S = Forma

Ψ Calculado únicamente cuando todos los términos del modelo muestran significancia estadística
** Significativo en p = 0,01, ns = no significativo

Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años • Balasundram, S.K. 257
 Figura 13. Relación entre
el contenido total de aceite (a) Previsto para: negro y amarillo (b) Previsto para: rojo y amarillo
observado y pronosticado a partir
de (a) submodelo 8 [% aceite total 100 R2 = 0,78 100 R2 = 0,76

Cantidad de aceite prevista

Cantidad de aceite prevista

= 88,08 – 0,52 (% negro) + 1,30 log 80 80
(% amarillo)] y (b) submodelo 10 60 60

(%)

(%)
[% aceite total = 36,84 + 0,63
40 40
(% rojo) + 1,52 log (% amarillo)]
20 20

0 0
0 20 40 60 80 100 0 20 40 60 80 100

Medida total de aceite Medida total de aceite

(%) (%)

Figura 14. Validación de (a) Previsto para: rojo y amarillo (b) Previsto para: negro y amarillo
(a) submodelo 8 [% aceite
total = 88,08 – 0,52 (% negro) + 90 R2 = 0,54 90 R2 = 0,56
Cantidad de aceite prevista

Cantidad de aceite prevista

1,30 log (% amarillo)] y
75 75
(b) submodelo 10 [% aceite
total = 36,84 + 0,63 (% rojo) + 60 60
(%)

(%)
1,52 log (% amarillo)]
45 45

30 30
30 45 60 75 90 30 45 60 75 90
Medida total de aceite Medida total de aceite
(%) (%)

Tabla 6. Implicación económica de utilizar los modelos calibrados para calcular el contenido de aceite de palma.

Seminario 1 Seminario 2
1
Modelo TO = 88,08 - (0,52 * B) + (1,30 * log Y) TO = 36,84 + (0,63 * R) + (1,52 * log Y)

Entrada B = 30, Y = 0,9 B = 48, Y = 0,9 B = 66, Y = 0,9 R = 29, Y = 0,9 R = 43, Y = 0,9 B = 58, Y = 0,9

Cantidad de aceite prevista (%) 72,42 63,06 53,70 55,04 63,86 73,31
2
Valor (USD):

Por planta y por año 13,62 11,86 10,10 10,35 12,01 13,78

Por hectárea y por año 1851,65 1612,33 1373,01 1407,27 1632,78 1874,40

Beneficio (Valor por planta por año) matriz de comparación:

Modelos de entrada B30 Y0,9 B48 Y0,9 B66 Y0,9

R29 Y0,9 -3,27

R43 Y0,9 0,15

R58 Y0,9 3,69

1
Donde: TO = % aceite total, B = % Negro, R = % Rojo, Y = % amarillo.
2
Extrapolado para representar un RFF con base en un promedio de muestra de dos frutas.

258 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
Estudio 6. Desarrollo de una técnica no
destructiva para calcular la calidad de la
fruta de la palma de aceite. (Balasundram
y cols., 2008 – documento protegido por
derecho de autor)
Este estudio tuvo por objeto computarizar los proto-
colos de análisis de las imágenes y cálculo del rendi-
miento/calidad del aceite de palma, desarrollados a
partir del Estudio 5 (Figura 15). La variable adicio-
nal incluida en este trabajo fue el Índice del Grado
de Blanqueabilidad (dobi), el cual se utiliza en la in-
dustria como medida estándar de la calidad del aceite
de palma. El valor de corte para el dobi oscila entre
3,5 y 4,0. Las frutas con un dobi superior al valor de
corte se consideran de alta calidad, y las que tienen
un dobi inferior al valor de corte se consideran de
baja calidad. Los resultados mostraron una relación
positiva entre el dobi y el % de rojo en las palmas
maduras y jóvenes. La relación fue más pronuncia-
da en el límite superior (dobi > 4,0), especialmente
en palmas maduras (Tabla 7). La computarización de
los protocolos de análisis de las imágenes y cálculo
de la calidad del aceite se hizo a través de una inter-
faz consistente en Visual Basic 6.0 e Ilwis 3.2. Se ha
desarrollado un enfoque no destructivo para calcular
la calidad del aceite de palma (y el rendimiento) con
base en imágenes digitales y programación por com-
putador (Figura 16).

Imagen Figura 15. Protocolo de análisis de

rectificada
las imágenes desarrollado a partir
del Estudio 5. (Balasundram y cols.,
2006d).
Multispec

Isodato
de máxima
probabilidad

ArcView
Adobe Photoshop Imagen
clasificada

62 %

30 %

6%

1%

Imagen original Imagen

(Capturada con cámara reclasificada
digital de alta resolución)

Tabla 7. Regresión del DOBI para el color superficial de la fruta.

Edad de la palma DOBI Modelo

<4 DOBI = 4,1 – 0,03*%O

< 5 (joven)
>4 DOBI = 6,6 + 1,52*log %R

<4 DOBI = 3,6 + 0,02*%R

> 5 (madura)
>4 DOBI = 4,4 + 2,49*log %R – 2,08*log RY

Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años • Balasundram, S.K. 259
 Figura 16. Técnica computarizada
para calcular la calidad de la fruta Load fruit image(s)

de la palma de aceite. Ilwis 3.2

Ÿ Import raster image (.jpg)
Ÿ Color separation
Ÿ Clustering
Ÿ Export clustered image (.bmp)

Cluster re-identification

Cluster re-coloring

Cluster re-construction

Computation of color distribution

Detección remota y proximal distintos períodos de siembra. Entre los índices de

Estudio 8. Cálculo de la productividad
de la palma de aceite mediante índices
de vegetación tomados de QuickBird.
(Balasundram y cols., 2013)
Se utilizaron imágenes satelitales tomadas en una sola
fecha y archivadas en QuickBird junto con datos de
productividad de la palma de aceite recogidos du-
rante una serie temporal de 12 años a fin de generar
modelos empíricos de productividad de la palma de
aceite en las condiciones de Malasia. Los índices de
vegetación y los datos de productividad se sometieron
a un análisis de correlación seguido de modelos de
regresión y validación de los modelos mediante mé-
tricas estándar. Los resultados revelaron una correla-
ción positiva fuerte entre los índices de vegetación y
la productividad de la palma de aceite, comparando
vegetación el rvi (Índice de vegetación de relación)
mostró la mejor correlación con la productividad de
la palma de aceite (Tabla 8). Se demostró que los mo-
delos empíricos fueron acertados para los períodos
de siembra comprendidos entre 1990-2002 y 1998-
1999 (Tabla 9). Los modelos construidos utilizado
el rvi y el msavi ( Índice de vegetación modificado
ajustado para el suelo) mostraron una concordan-
cia fuerte entre la productividad estimada y la ob-
servada (Figura 17). Sin embargo, en el período de
siembra de 1998-1999 solamente mostraron fuerza
confiable para estimar la productividad el rvi y el
gndvi (Índice de vegetación de diferencia normali-
zada para el verde) (Figura 18). En términos gene-
rales, los hallazgos de este estudio sugieren que los
índices de vegetación seleccionados de QuickBird
sirven para estimar la productividad de la palma de
aceite con una precisión confiable.

Tabla 8. Correlación entre la productividad de la palma de aceite y los índices de vegetación comparando distintos
períodos de siembra.

Año de siembra n RVI NDVI MSAVI GNDVI

1990-2002 56 0,789** 0,762** 0,744** 0,713**

1990-1997 17 0,380 0,522* 0,398 0,311

1998-1999 12 0,895** 0,831** 0,761** 0,884**

2000-2002 27 0,617** 0,599** 0,611** 0,559**

* Significativo en p < 0,05. ** Significativo en p < 0,01.

RVI: índice de vegetación de relación; NDVI: Índice de vegetación de diferencia normalizada; MSAVI: Índice de ve-
getación modificado ajustado para el suelo; ; GNDVI: Índice de vegetación de diferencia normalizada para el verde.
Nota: La nube de datos para cada correlación aparece al lado del valor respectivo de correlación.

260 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
Tabla 9. Regresión de la productividad de la palma de aceite (Y) sobre índices de vegetación basados en los datos
de calibración.

Índice de
Período de siembra n R2 GOF F p Ecuación de regresión
vegetación
RVI 0,491 <0,8 33,799 0,000 Y = 0,673 + (0,006 × RVI)*
1990-2002 NDVI 0,445 <0,8 28,013 0,000 Y = 0,597 + (56,543 × NDVI)*
(Serie temporal 37
completa) MSAVI 0,430 <0,8 26,419 0,000 Y = 0,119 + (17,419 × MSAVI)*
GNDVI 0,339 <0,8 17,970 0,000 Y = 0,634 + (64,6 × GNDVI)*
RVI 0,086 <0,8 0,845 0,382 Y = 1,502 + (0,004 × RVI)
1990-1997 NDVI 0,209 <0,8 2,377 0,158 Y = 1,327 + (45,037 × NDVI)
(palmas de 8 a 15 11
años de edad) MSAVI 0,090 <0,8 0,894 0,369 Y = 0,72 + (15,268 × MSAVI)
GNDVI 0,062 <0,8 0,595 0,460 Y = 1,914 + (32,186 × GNDVI)
RVI 0,789 <0,8 22,376 0,003 Y = 0,465 + (0,007 × RVI)*
1998-1999 NDVI 0,814 >0,8 26,321 0,002 Y = 0,341 + (66,536 × NDVI)*
(palmas de 6 a 7 8
años de edad) MSAVI 0,811 >0,8 25,795 0,002 Y = -0,086 + (19,251 × MSAVI)*
GNDVI 0,761 <0,8 19,082 0,005 Y = -0,076 + (100,106 × GNDVI)*
RVI 0,091 <0,8 1,592 0,225 Y = 1,234 + (0,002 × RVI)
2000-2002 NDVI 0,058 <0,8 0,982 0,336 Y = 1,292 + (14,139 × NDVI)
(palmas de 3 a 5 18
años de edad) MSAVI 0,066 <0,8 1,131 0,303 Y = 1,166 + (4,482 × MSAVI)
GNDVI 0,038 <0,8 0,633 0,438 Y = 1,34 + (13,759 × GNDVI)

GOF: Bondad de ajuste.

* Significativo en un nivel de p < 0.05 basado en la prueba F.
RVI: índice de vegetación de relación, NDVI: Índice de vegetación de diferencia normalizada, MSAVI: Índice de ve-
getación modificado ajustado para el suelo, GNDVI: Índice de vegetación de diferencia normalizada para el verde.

3,5 1:1
Rendimiento estimado (t/ha)
Rendimiento estimado (t/ha)

3 3 Figura 17. Ajuste entre la

1:1
2,5 r = 0,96 2,5 productividad observada y las
2 2 r = 0,93 productividades estimadas para
1,5 1,5 palma de aceite en el período de
1 1 siembra 1990-2002.
0,5 0,5
Y = 0,673 + (0,006 * RVI) Y = 0,597 + (56,543 * NDVI)
0 0
0 0,5 1 1,5 2 2,5 3 3,5 4 0 0,5 1 1,5 2 2,5 3 3,5 4

Rendimiento observado (t/ha) Rendimiento observado (t/ha)

3
Rendimiento estimado (t/ha)

1:1
Rendimiento estimado (t/ha)

3 1:1
2,5
2,5
2 r = 0,93
2
r = 0,89 1,5
1,5
1
1
0,5
0,5 Y = 0,634 + (64,6 * GNDVI)
Y = 0,119 + (17,419 * MSAVI) 0
0
0 0,5 1 1,5 2 2,5 3 3,5 4
0 0,5 1 1,5 2 2,5 3 3,5 4
Rendimiento observado (t/ha) Rendimiento observado (t/ha)

Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años • Balasundram, S.K. 261
 Figura 18. Ajuste entre la
productividad observada y las
productividades estimadas para la 3 1:1 3 1:1
palma de aceite en el período de
siembra 1998-1999.

Rendimiento estimado

Rendimiento estimado
2,5 2,5

(t/ha)

(t/ha)
2 2
r = 0,95 r = 0,95

Y = 0,465 + (0,007 * RVI) Y = 0,341 + (66,536 * NRVI)

1,5 1,5
1,5 2 2,5 3 3,5 1,5 2 2,5 3 3,5

Rendimiento observado (t/ha) Rendimiento observado (t/ha)

3 1:1 3 1:1
Rendimiento estimado

Rendimiento estimado
2,5 2,5
(t/ha)

(t/ha)
r = 0,13 r = 0,89

2 2

Y = -0,086 + (19,251 * MSAVI) Y = -0,076 + (100,106 * GNDVI)

1,5 1,5
1,5 2 2,5 3 3,5 1,5 2 2,5 3 3,5

Rendimiento observado (t/ha) Rendimiento observado (t/ha)

Estudio 9. La detección remota como máticas mostraron una correlación significativa (r =

herramienta para evaluar la enfermedad
de la mancha naranja en la palma de
aceite (Selvaraja et al., 2014)
La enfermedad de la mancha naranja (orange spo-
tting, OS) es un problema emergente en palma de
aceite. Este trabajo explora el uso de la reflectancia
espectral como herramienta para detectar la enfer-
medad de la mancha naranja, y clasificar y predecir
la severidad de la misma con base en los índices de
vegetación. Esta evaluación se realizó en una planta-
ción comercial de palma de aceite en Malasia. Se hizo
un muestreo sistemático de 40 palmas sintomáticas
y 10 asintomáticas en un lote de observación de 4,2
hectáreas. El ensayo de Dot-Blot reveló la presencia
de CCCVd en 40 % de las muestras obtenidas de las
palmas asintomáticas. Las muestras de hojas sinto-
-0,70) entre la reflectancia de la clorofila de la hoja y
la severidad de la enfermedad de la mancha naran-
ja. La reflectancia espectral de las hojas sintomáti-
cas fue significativamente menor que la de las hojas
no sintomáticas en la región de longitud de onda de
465-711 nm (Figura 19). Sin embargo, la reflectan-
cia de las hojas sanas y asintomáticas no presentó
diferencias significativas en las distintas longitudes
de onda investigadas. En las hojas sintomáticas, la
reflectancia espectral mostró una tendencia a dismi-
nuir con un aumento hasta de 60 % en la severidad
de la enfermedad, en las longitudes de onda de 555
nm y 780-1.000 nm (Figura 20). Entre los veinte ín-
dices de vegetación sometidos a prueba, el MCARI1
y el mSR705 fueron los mejores para predecir la se-
veridad de la enfermedad de la mancha naranja con
una bondad de ajuste (medida vs. pronosticada) de
66 y 56 %, respectivamente.

262 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
 0,7 0,05 Figura 19. Comparación de la
0,6 reflectancia espectral entre el

Diferencia en la reflectancia
0,03
Reflectancia espectral
0,5
follaje asintomático (n = 10) y

espectral (B-A)
0,4
0,01 sintomático (n = 40).
0,3 -0,01
0,2
-0,03
0,1

0 -0,05
400 500 600 700 800 900 1000

Longitud de onda (nm)

Diferencia (B-A) No sintomática (B) Sintomático (A)

0,7 Figura 20. Reflectancia espectral

de las hojas sintomáticas (con
0,6
cuatro grupos de severidad: 1-20 %,
Reflectancia espectral

0,5 21-40 %, 41-60 %, 61-80 %),

0,4 asintomáticas y sanas.
0,3

0,2

0,1

400 500 600 700 800 900 1000

Longitud de onda (nm)

Salubre 1 - 20 % 21 - 40 % 41 - 60 % 61 - 80 %

Estudio 10. Detección por fluorescencia diferentes (6, 9 y 12 años después de la siembra en
como herramienta para calcular la calidad campo). Los resultados muestran que los índices de-
y los rendimientos del aceite de palma tectados por fluorescencia son un medio práctico no
(Norul Husna y cols., 2015) destructivo para estimar la calidad y el rendimiento
del aceite de palma en tres grupos diferentes (Ta-
blas 10 y 11). En las palmas de 6 y 9 años de edad, la
El método tradicional para evaluar la calidad y el fuerza de estimación de los metabolitos secundarios
rendimiento del aceite de palma suele ser destruc- fue más pronunciada con respecto a la calidad del
tivo, costoso y laborioso. La detección por fluores- aceite (Tabla 12). Por otro lado, en las palmas de 9
cencia brinda una nueva forma de evaluar la calidad y 12 años la fuerza de estimación de los metaboli-
y el rendimiento del aceite de palma de manera no tos secundarios fue más pronunciada con respecto
destructiva. Este trabajo describe la utilización de al rendimiento del aceite (Tabla 12). En general, las
un sensor multiparamétrico de fluorescencia (Mul- determinaciones tanto de la calidad como del rendi-
tiplex®) para calcular la calidad y el rendimiento miento del aceite de palma por medio de los índices
del aceite de palma mediante la cuantificación de de fluorescencia tienen su mayor aplicabilidad en las
la concentración de metabolitos secundarios como palmas de 9 años. Los metabolitos secundarios como
la antocianina y el flavonol en los racimos de frutas la antocianina y el flavonol son indicadores fiables de
frescas y las frutas sueltas de palmas de tres edades la calidad y el rendimiento del aceite de palma.

Estudios seleccionados de agricultura de precisión en palma de aceite: un resumen de diez años • Balasundram, S.K. 263
 Tabla 10. Correlación entre los índices de fluorescencia (ANTH y FLAV) y las concentraciones medidas de antocia-
nina (TAC) y flavonol (TFC) comparando palmas de diferentes edades.

Año de siembra (edad) Índice de fluorescencia TAC (mg g-1) TFC (mg g-1)
ANTH 0,56* -
2002 (12)
FLAV - 0,79*
ANTH 0,57* -
2005 (9)
FLAV - 0,76*
ANTH 0,62* -
2008 (6)
FLAV - 0,54*

* Significativo al nivel de p = 0,05.

Tabla 11. Correlación entre los índices de fluorescencia (ANTH y FLAV) comparando diferentes partes de la palma
de aceite analizada (racimo y frutas sueltas) y palmas de diferentes edades.

ANTH FLAV
Año de siembra (edad) Parte analizada
Frutas sueltas

2002 (12) 0,59* 0,59*

2005 (9) Racimo (RFF) 0,54* 0,59*
2008 (6) 0,79* 0,60*

* Significativo al nivel de p = 0,05.

Tabla 12. Correlación entre los índices de fluorescencia (ANTH, FLAV y NBI) y los atributos de calidad (DOBI1) y
rendimiento del aceite de palma (OER2) comparando palmas de diferentes edades.

Año de siembra (edad) Índice de fluorescencia DOBI OER

ANTH +0,15 +0,53*
2002 (12) FLAV +0,28 +0,57*
NBI –0,71*  +0,28 
ANTH +0,63* +0,65*
2005 (9) FLAV +0,52* +0,53*
NBI –0,13 +0,17
ANTH +0,77* +0,45
2008 (6) FLAV +0,67* +0,16
NBI –0,44 +0,20

1 Índice de Grado de Blanqueabilidad. 2 Tasa de extracción del aceite. * Significativo al nivel de p = 0,05.

Estudio 11. Un método de detección
remota para estimar la densidad de
siembra en palma de aceite
(Balasundram y cols., 2009)
Este trabajo demuestra el potencial de utilizar las imá-
genes satelitales como medio para realizar el censo de
árboles en palma de aceite. El estudio se efectuó en
una plantación comercial localizada en Sagil, Johor,
Malasia. Se obtuvieron imágenes satelitales de archi-
vo (2005) de la plantación a través de Google Earth,
con una resolución espacial de 4 m y sin costo algu-
no. Se demarcaron cinco lotes de estudio (polígonos)
sobre las imágenes con base en el año de siembra y el
tipo de suelo. Cada polígono se georreferenció para
ayudar con las observaciones directas en el terreno
(ground truthing). Las imágenes se procesaron con

264 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
la herramienta de ‘marca’ de MapInfo con base en el
patrón del dosel en la proyección del nadir. Los re-
sultados mostraron una correlación elevada entre el
número de árboles contados en las imágenes de Goo-
gle Earth y el conteo en el terreno (Figura 21). Este
hallazgo sugiere que la detección remota por satélite
puede ofrecer otro medio para calcular la densidad
de siembra de la palma de aceite. Esta técnica no so-
lamente es efectiva en términos de costos sino que
también tiene una precisión razonable.

7 Figura 21. Conteo de puntos sin

sembrar: observado (vía satélite)
6 vs. medido (en el terreno).

4
Moderado

2
y = 1,7143x - 0,2857
r = 0,801783726
1

0
0 0,5 1 1,5 2 2,5 3 3,5

Observado

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266 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 243-266, Tomo I, 2016
Volver al
contenido

Uso de la teledetección de alta resolución con sensores térmicos

para el manejo del riego y la variabilidad espacial intralote*
Use of High Resolution Remote Sensing Using Thermal Sensors
for Irrigation and Spatial Variability Management

citación: Bellvert, J. (2016). Uso de la teledetección de alta resolución con

sensores térmicos para el manejo del riego y la variabilidad espacial intralote.
Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 267-273.
palabras clave: sensores térmicos, riego, variabilidad espacial.
keywords: Thermal sensing, irrigation, spatial variability.
*Artículo original recibido en español.

Joaquim Bellvert Ríos

Investigador postdoctoral, Centro de
Tecnologías Espaciales y Teledetección,
Universidad de California
Postdoctoral Researcher, Center for
Spatial Technologies and Remote
Sensing, University of California
jbellvert@ucdavis.edu

Resumen
En los últimos años los problemas del agua en la agricultura han sido objeto de preocupación y de un
debate creciente en el plano internacional. La adopción de técnicas de riego como el riego deficitario
controlado (RDC), utilizando indicadores de estado hídrico, se ha utilizado en distintos cultivos con el
objetivo de optimizar el uso del agua de riego, maximizar la producción y mejorar la calidad del fruto.
Sin embargo, la dificultad que supone identificar la variabilidad espacial del estado hídrico a lo largo
de lotes limita su implementación en lotes comerciales. El uso de las nuevas tecnologías basadas en
la teledetección térmica de alta resolución se presenta como una herramienta de gran utilidad para
identificar el estado hídrico de los cultivos en grandes extensiones. El índice denominado Crop Water
Stress Index (CWSI) ha sido ampliamente reconocido como indicador del estrés hídrico y presenta una
buena correlación con el potencial hídrico de hoja (Ψh). Centros de investigación de España (IRTA e

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 267-273, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 267
 IAS-CSIC) y empresas colaboradoras han llevado a cabo un proyecto de teledetección (2011-2014) que
ha consistido en desarrollar el CWSI y relacionarlo con el Ψhen distintos cultivos mediante la adquisi-
ción de imágenes térmicas obtenidas desde plataformas aéreas. Actualmente es posible obtener mapas
estimados de Ψhen distintos cultivos y programar el riego de forma diferencial a lo largo de un lote,
teniendo en cuenta el estado hídrico del cultivo. Se pretende implementar esta tecnología en palma
de aceite en los próximos años.

Abstract
During past few years, water problems in agriculture have been the object of growing concern and
debates on an international level. Irrigation techniques such as Regulated Deficit Irrigation (RDI), by
using plant water status indicators, have been adopted and used in various crops with the purpose
to optimize the use of irrigation water, maximize yield and improve fruit quality. Nevertheless, the
difficulty posed by identifying the spatial variability of plant water status across orchards, limits its
implementation in commercial orchards.

The use of new technologies based on high resolution thermal remote sensing is presented as a highly
useful tool to identify the plant water status in large areas. The Crop Water Stress Index (CWSI) has
been widely recognized as a plant water stress indicator and closely related with leaf water potential
(Ψh). Spanish research centers (IRTA and IAS-CSIC) and contributing companies carried out a remote
sensing project (2011-2014) that consisted in developing the CWSI and relating it to Ψh in different
crops by acquiring thermal images gathered from aerial platforms. Currently, is it possible to obtain
estimated maps of Ψh in different crops and schedule irrigation differencially across an orchard, con-
sidering the spatial variability of crop water status. It is intended to implement this technology for oil
palm in the coming years.

Introducción
En las últimas décadas, la escasez de agua está sien-
do un problema mundial en zonas agrícolas de re-
gadío. En este contexto, es importante realizar un
manejo eficiente del riego, con el objetivo de ahorrar
agua y maximizar la producción (Fereres, 2007). La
adopción de estrategias de riego deficitario controla-
do (rdc) ayuda a optimizar el uso eficiente de agua
sin afectar negativamente las cosechas, y en algunos
cultivos contribuye en la mejora de la calidad de los
frutos (García-Tejero et al., 2010, Gelly et al., 2004,
Pérez-Sarmiento et al., 2010). Para ello es necesario
conocer las necesidades hídricas de los cultivos y la
respuesta a la sensibilidad estacional al déficit hídrico.
El uso de indicadores del estado hídrico de la plan-
ta es esencial para una correcta implementación del
rdc. El indicador comúnmente más utilizado para
estimar el estado hídrico de una planta es el potencial
hídrico de hoja/tallo(Ψh), el cual está íntimamente re-
lacionado con las respuestas de la planta al estrés a
corto y mediano plazos y puede ser útil a la hora de
hacer programaciones de riego (Naor, 2000, Girona et
al., 2006). Sin embargo, la dificultad, tiempo y costo
que implica medir el Ψh a escala de lote (se precisa-
rían numerosas medidas puntuales para muestrear la
variabilidad dentro de un lote), hace que esta técnica
sea inviable a nivel comercial. La variabilidad espacial
intralote, en donde factores del medio físico (orogra-
fía del terreno o propiedades del suelo) y prácticas
culturales (poda, riego o aplicación de fertilizantes)
condicionan de manera considerable la respuesta di-
ferencial del cultivo dificulta la implementación de
estrategias de riego de manera eficiente. Conocer los
distintos requerimientos hídricos en cada una de las
subzonas dentro de un lote es esencial para llevar a
cabo un riego eficiente.
Por otro lado, la temperatura de la hoja (Th) ha sido
ampliamente reconocida como indicador del estado
hídrico en distintos cultivos (Tanner, 1963, Fuchs&-

268 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 267-273, Tomo I, 2016
Tanner, 1966). El concepto se basa en que plantas so-
metidas a estrés hídrico tienden a cerrar los estomas
para evitar una mayor pérdida de agua, lo que hace
disminuir su transpiración, así como su capacidad de
efectuar fotosíntesis. En consecuencia, Th aumenta a
medida que las plantas presentan un mayor estrés hí-
drico. En los años 70 y 80 se empezó midiendo Th con
sensores de temperatura infrarrojo (Jackson et al.,
1977, Idso et al., 1978). Actualmente, con el avance
de las nuevas tecnologías basadas en la teledetección
y con ayuda de sistemas de información geográfica, es
posible determinar la variabilidad espacial del estado
hídrico de los cultivos a escala de lote midiendo Th
con sensores térmicos instalados en plataformas aé-
reas. Sin embargo, debido a que Th depende de facto-
res ambientales y el control estomático tiene una res-
puesta distinta según el tipo de cultivo y estado feno-
lógico, es necesario desarrollar algoritmos capaces de
detectar el estado hídrico del cultivo enmascarando
los parámetros que afectan la relación entre Th y Ψh.
Los centros de investigación españoles irta e ias-
csic han llevado a cabo durante cuatro años un pro-
yecto que ha consistido en desarrollar el índice Crop
Water Stress Index (cwsi) (Idso et al., 1981), el cual
es función de Th, y relacionarlo con el Ψh en distintos
cultivos heterogéneos. El objetivo final de este pro-
yecto ha sido desarrollar comercialmente una herra-
mienta capaz de detectar remotamente la variabilidad
espacial del estado hídrico a partir de imágenes tér-
micas de alta resolución obtenidas desde plataformas
aéreas. Con base en esta información ha sido posible
adoptar diversas estrategias de riego en distintos cul-
tivos, teniendo en cuenta la variabilidad intralote del
estado hídrico.
Materiales y métodos
El proyecto se llevó a cabo durante 2011 a 2014 en dis-
tintos lotes comerciales localizados en la zona de Llei-
da, noreste de España. El clima es mediterráneo, con
una precipitación y evapotranspiración de referencia
(ETo) anual promedio de 300 y 1.100 mm, respectiva-
mente. Los cultivos que se estudiaron son viña, olivo,
melocotonero, nectarina, manzano y almendro.
Con el objetivo de determinar el índice CropWa-
ter Stress Index (cwsi), se instalaron dos sensores
Uso de la teledetección de alta resolución con sensores térmicos para el manejo del riego y
la variabilidad espacial intralote • Bellvert, J.
de temperatura infrarrojo (PC151HT-4; Pyrocouple
series, Calex Electronics) encima de dos árboles po-
tencialmente transpirando a 100 % ETc. La tempera-
tura de la hoja (Th) se registró continuadamente y se
desarrollaron las líneas base denominadas ‘non-wa-
ter-stressed baselines’ (nwsb) a partir de la relación
entre Th-Ta y el déficit de presión de vapor (dpv). El
cwsi se calculó a partir del método empírico pro-
puesto por Idso et al. (1981):
(Th - Ta ) - (Th - Ta )L
CWSI =
(Th - Ta )U - (Th - Ta )L
Donde (Th-Ta) es la diferencia entre la temperatu-
ra de la hoja y el aire, (Th-Ta)L el esperado lowerlimit
de (Th-Ta) en el caso de un dosel vegetativo potencial-
mente transpirando, y (Th-Ta)U el esperado diferencial
en el caso de un dosel sin transpirar.
Cada año se realizaron entre seis y ocho vuelos
por cultivo con un sensor térmico (flir SC655, flir
Systems, usa) instalado en una avioneta tripulada
(cessna C172 ec-jyn). El sensor térmico tiene una
resolución de 640 x 480 pixeles, equipado con una len-
te de 24.5 mm f1.0 y una respuesta espectral entre 7.5 y
13 μm. El vuelo se hizo entre las 13 y 16 horas a una al-
tura de 150 m sobre el nivel del suelo. Sobrevolar lotes
a baja altura con sensores de alta resolución permitió
discriminar entre pixeles puros de vegetación y aque-
llos afectados por el suelo o sombras. En el momento
del vuelo, y con el objetivo de validar el Ψh con el cwsi,
estimado a partir de información de las imágenes tér-
micas, se midió el Ψh en 18 árboles por cultivo que es-
taban sometidos a distintos niveles de estado hídrico.
Las medidas de Ψh se efectuaron con una cámara de
presión Scholander (Soil Mositure Equipment Corp.,
Santa Barbara, ca) siguiendo la metodología descrita
por Turner y Long (1980).
Además, en el último año de proyecto se llevó a
cabo la programación de riego de distintos lotes con
base en mapas estimados de potencial hídrico (Ψest).
Se sobrevolaron los lotes con una frecuencia sema-
nal y se adoptaron distintas estrategias de riego. Las
decisiones de riego se tomaron individualmente para
cada sector de riego en función del Ψestpromedio.
269
 Resultados y discusión
Resolución espacial
La resolución espacial o tamaño del pixel es uno de
los parámetros a tener en cuenta para detectar el es-
tado hídrico en cultivos heterogéneos. Este paráme-
tro depende de la resolución del sensor y de la altitud
de vuelo. La adquisición de imágenes térmicas des-
de plataformas aéreas tripuladas permitió conseguir
imágenes de alta resolución e identificar pixeles com-
pletamente puros de vegetación (Figura 1).
En viña se ha demostrado que el tamaño máximo
de pixel debe ser de almenos 0,30 m, y evitar así la ob-
tención de pixeles con información proveniente del
suelo o sombras. Un aumento de pixel de 0,30 a 0,60
m hizo disminuir R2 en la relación cwsi vs. Ψh de 0,71
a 0,38 (Tabla 1). Sin embargo, el dosel vegetativo en
frutales es mayor que en viña, y por tanto, es posible
detectar el estado hídrico con tamaños de pixel mayo-
res. Por ejemplo, en melocotonero se determinó que
el tamaño de pixel mínimo para detectar el estado hí-
drico debe ser de 0,80 m. Sin embargo, R2 aumentó a
medida que el tamaño de pixel decreció.
Figura 1. Mosaico térmico de a.
12-ha aprox. localizado en Lleida
(España), el cual contiene en el
centro de la imagen a) un lote
de melocotonero y nectarina
(Prunus persica); b) detalle
del lote de melocotoneros; c)
detalle de los pixeles puros de
vegetación, seleccionados de los
melocotoneros. Taire en el momento
del vuelo fue de 33.5 ºC.
270
La necesidad de trabajar con altas resoluciones tie-
ne un efecto directo sobre el precio final del mosaico
térmico, ya que con los sensores térmicos low-cost dis-
ponibles actualmente es necesario sobrevolar a una
altura de 150 m y con ello, emplear un mayor tiempo
en la adquisición de imágenes térmicas para mapear el
estado hídrico de una superficie determinada. Se pre-
vé en los próximos años que con sensores de mayor
resolución pueda volarse a una mayor altura y abarcar
mayores superficies con el mismo o menor tiempo.
CWSI y su relación con Ψh
El cálculo del CWSI radica en el desarrollo de la nwsb
a partir de la relación entre Th-Ta y el dpv en árboles
que transpiran a su máximo potencial. En todos los
cultivos, esta relación decreció linealmente a medida
que aumentó el dpv, y presentó diferencias significa-
tivas entre especies, además de entre fases fenológicas
(Bellvert et al., 2015). Consideraciones fisiológicas y
morfológicas de las hojas y la distribución de la luz en
el dosel vegetativo pueden explicar parte de las dife-
rencias detectadas entre especies y variedades. Por otra
parte, las diferencias entre estadios fenológicos pueden
b.
°C
67,0
32,0
c.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 267-273, Tomo I, 2016
 Tabla 1. Comparación del coeficiente de determinación (R2) de la relación potencial hídrico de hoja (Ψh) y CWSI,
obtenido con imágenes térmicas, a las resoluciones espaciales desde 0,3 a 2,0 m, en viña (Bellvert et al., 2014) y
melocotonero.

Tamaño del pixel (m) Viña Melocotonero

0,15 - 0,76
0,30 0,71 0,75
0,60 0,38 0,66
0,80 0,27 0,65
1,00 0,22 0,56
1,20 0,05 0,28
1,50 0,28 0,11
2,00 0,29 <0,10

deberse, en parte, al balance energético del dosel, án- El Ψh se correlacionó significativamente con el
gulo cenital solar u orientación de las hojas. En el futu- cwsi, estimado a partir de las imágenes térmicas (Fi-
ro se llevarán a cabo más estudios para determinar las gura 2). La mayoría de estas relaciones presentaron
posibles causas. una función cuadrática, indicando la existencia de un

-0,4
a)
Viña -0,5
b)
Melocotonero Figura 2. Relaciones estacionales
entre potencial hídrico de hoja
-0,6 (Ψh) y el CWSI para los cultivos
Fase II
-1,0 R2=0,66 de a) viña, cv. Chardonnay;
Fase I
-0,8 R2=0,91
b) melocotonero; c) olivo; d)
Fase III manzano.
-1,0 Fase II -1,5 R2=0,72
R2=0,85
-1,2 Fase III
R2=0,67
-2,0
Post-cosecha
-1,4
Fase I R =0,73
2
Fase I
Potencial hídrico hoja (MPa)

Fase II Fase II
Fase III Post-cosecha
-1,6 -2,5
0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0 0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0

-0,5 Olivo -1,0 Manzano

c) d)

-1,0

-1,5 Fase II
-1,5 R2=0,70
Fase I
-2,0 R2=0,55
-2,0
-2,5

-3,0 Fase II-III Fase III

R2=0,70 -2,5
R2=0,68
-3,5
Fase I Fase II
Fase II-III Fase III
-3,0
-4,0
0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0 0,0 0,2 0,4 0,6 0,8 1,0

CWSI

Uso de la teledetección de alta resolución con sensores térmicos para el manejo del riego y
la variabilidad espacial intralote • Bellvert, J. 271
 umbral de cwsi a partir del cual el Ψh deja de incre-
mentar. A medida que aumenta el estrés hídrico, las
hojas reaccionan cerrando los estomas y disminuye
su tasa de transpiración. La sensibilidad del cwsi a
cambios del Ψh también fue significativamente dis-
tinta entre especies y momentos fenológicos. Así, un
mismo cwsi se correspondió con valores de Ψh más
negativos a medida que el cultivo presentaba un es-
tadio fenológico más avanzado. Ello se explica por
una mayor sensibilidad al estrés hídrico en las fases
tempranas de desarrollo del cultivo, el cual reacciona
cerrando los estomas a Ψh menos bajos. Este distinto
comportamiento debe tenerse en cuenta a la hora de
detectar el estado hídrico remotamente.
Mapas de estado hídrico
Los algoritmos desarrollados en distintos cultivos y a
lo largo del ciclo fenológico permitieron generar ma-
pas del estado hídrico periódicamente a nivel intra-
lote. Con base en esta información es posible tomar
decisiones de riego independientemente para cada
subsector de riego. Por ejemplo, la Figura 3 muestra la
distribución espacial del Ψest de una plantación de fru-
tales (nectarina) en cuatro momentos distintos del ci-
clo fenológico. Durante 2013 se hizo la programación
de riego en forma diferencial y se llevaron a cabo dos
estrategias de riego distintas (Control y rdc, Riego De-
ficitario Controlado-). Los sectores Control se regaron
con base en el método del balance hídrico y aportan-
do la totalidad de sus necesidades hídricas durante
todo el año (100 % ETc). Por otro lado, la estrategia
de rdc consistió en reducir el riego durante la fase II y
postcosecha hasta llegar a unos umbrales de Ψh ya estan-
darizados, los cuales no repercuten negativamente en la
producción (Girona et al., 1993, López et al., 2008).
Puede observarse que durante el final de la fase
fenológica II y en postcosecha, los sectores de riego
bajo una estrategia de rdc presentaron valores de Ψh
más negativos que los Control. En el caso particular
de este lote, llevar a cabo un manejo diferencial del
riego durante todo el año supuso ahorros de agua de
35 %, sin que se detectaran diferencias significativas
en la cosecha.
Los resultados de este proyecto han demostrado
la viabilidad de hacer un manejo eficiente del rie-
go con base en mapas de Ψest obtenidos a partir de
imágenes térmicas de alta resolución. Actualmente
es posible determinar el estado hídrico mediante la
teledetección térmica en algunas variedades de viña,
olivo, melocotonero, nectarina y almendro. Sin em-
bargo, no se tiene evidencia de ningún estudio que
haya desarrollado el cwsi y tampoco que haya utili-
zado sensores remotos térmicos para detectar el es-
tado hídrico de la palma de aceite. En los próximos
años, se prevén colaboraciones para implementar la
tecnología en este cultivo.

Figura 3. Ejemplo de mapas de Fase I Fase II

potencial hídrico estimado (Ψest) a) b)
mediante imágenes térmicas de un RDC -0,78 -1,35
lote de nectarina (Prunus persica
L. cv. Big Top) de 2.2 ha localizado Control -0,70 -0,98

en Lleida (España), en las fases

Control -0,65 -1,02
fenológicas a) II – inicio fase II (13
mayo 2013), b) II – finales fase II (4 -0,64 -1,22
RDC
junio 2013), c) III (25 junio 2013), y
d) postcosecha (31 julio 2013).
*Fase II se caracteriza por el Fase III Postcosecha
crecimiento del embrión y c) d)
-1,23 -1,70 Ψest(MPa)
endurecimiento del endocarpio.
-2,04 -2,20
*Fase III se corresponde con -1,21 -1,30 -1,89 -2,04
-1,73 -1,89
crecimiento y maduración del -1,58 -1,73
fruto. -1,19 -1,26 -1,42 -1,58
-1,27 -1,42
-1,11 -1,27
-1,29 -1,74 -0,96 -1,11
-0,80 -0,96

272 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 267-273, Tomo I, 2016
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Uso de la teledetección de alta resolución con sensores térmicos para el manejo del riego y
la variabilidad espacial intralote • Bellvert, J. 273
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contenido
sesión 4: avances
en los híbridos
interespecíficos
oxg

Estudios de las características vegetativas, calidad del aceite

y grosor del cuesco en híbridos interespecíficos Elaeis oleifera x
Elaeis guineensis y sus retrocruces con E. guineensis*
Studies on Selected Vegetative, Oil Quality and Shell Thickness
Traits in Interspecies Elaeis oleifera x Elaeis guineensis Hybrids
and their Backcrosses with E. guineensis

autores: Sheryl Leao Ling Jiun1; Vengeta Rao2; Sharifah Shahrul Rabiah Syed
Alwee1; Chin Cheuk Weng2.
citación: Leao, S., Rao, V., Shahrul, S., & Cheuk, C. (2016). Estudios de las
características vegetativas, calidad del aceite y grosor del cuesco en híbridos
interespecíficos Elaeis oleifera x Elaeis guineensis y sus retrocruces con E.
guineensis. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 275-280.

palabras clave: aceite de palma, características vegetativas, híbridos.

keywords: Palm oil, vegetative characteristics, hybrids.
*Artículo editado por Fedepalma a partir de la grabación de video y la
presentación en PowerPoint.
1 Felda Global Venture Research & Development Sdn Bhd. Sheryl Leao Ling Jiun
Felda Global Venture Research &
2 Consultor privado. Development Sdn Bhd
sheryl.leao@gmail.com

Resumen
Elaeis oleifera es la palma de aceite de origen latinoamericano que se encuentra en Sur y Centroamé-
rica. Aunque su aceite es completamente apto para usos comestibles y no comestibles, la especie tiene
un uso limitado en comparación con la palma de aceite africana E. guineensis, debido a su menor
rendimiento en la producción de aceite. Se hibridiza fácilmente con E. guineensis pero el híbrido
entre especies también sufre de un bajo rendimiento. Sin embargo, se ha mantenido un interés por el
híbrido F1 debido a su potencial de resistencia a algunas enfermedades letales de la palma de aceite
en Suramérica. También, considerando el aumento en la demanda de consumo del aceite de palma,
las estrategias de sostenibilidad en la cadena de suministro de la palma de aceite en la próxima década
buscan productos con un valor agregado. Estos tienen una aplicación potencial en la provisión de in-
gredientes farmacéuticos y de nutrición para la dieta humana, como también en la industria oleoquí-
mica. Elaeis oleifera tiene algunas propiedades que en este sentido no son superadas por E. guineensis.

El programa de E. oleifera de Felda Global Venture Research Development Sdn Bhd (FGVRD) inició
con las autofecundaciones del material denominado Kuala Lumpur Melanococca (KLM por sus siglas

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 275-280, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 275
 en inglés) llevadas a cabo por el Departamento de Agricultura a finales de la década de los 60. A esto
le siguió el obtener una parte de las prospecciones Martineau de Socfin para Sur y Centroamérica en
1971, y finalmente el germoplasma de E. oleifera de Surinam de MPOB en la década de los 80. Durante
el mismo periodo se realizaron cruces entre las oleíferas de distintos orígenes. Se ha avanzado en el
problema inicial de la exploración de híbridos F1 con miras a explotar generaciones más avanzadas,
dado que se evidenciaron los bajos rendimientos de los híbridos. En la actualidad, la FGVRD está tra-
bajando con varias familias de distintas combinaciones equivalentes al retrocruzamiento 3 (Backcross
3 – BC3) que están más próximas a la comercialización.

Este estudio resume y revisa algunas observaciones, el rendimiento del valor agregado de las caracte-
rísticas de plantas enanas, la cubierta compacta y el alto IV, además de algunas observaciones acerca
de la segregación del grosor del cuesco de F1 a BC3. En las mejores progenies y palmas se retienen
las características de un bajo aumento de tamaño y un raquis corto de la E. oleifera que se mantienen
de F1 al BC3, mientras que la producción de racimos de fruta fresca (RFF) y el rendimiento en la
producción de aceite mejoran con el retrocruce. Los aceites especiales con un alto IV por lo general
se encuentran en todas las generaciones, desde los híbridos de F1 a los de BC3, pero los individuos
dentro de la misma progenie pueden presentar un alto nivel de variabilidad en estas características. El
programa de selección de la FGVRD permanece enfocado, en este momento, en la explotación de las
características de valor agregado de los BC2 y BC3, y no en un retrocruce ulterior. Como un primer
paso, las palmas BC con un buen rendimiento y características de valor agregado, han sido seleccio-
nadas para la propagación del cultivo de tejido como parte de una estrategia inicial para la producción
de materiales de cultivo con características especiales en volúmenes de pequeña escala.

Abstract
Elaeis oleifera is the oil palm species of American origin found in Central and South America.
Though its oil is completely suitable for edible and non-edible uses, the species is only of limited
use, compared to the African oil palm E. guineensis, due to its lower oil yield. It readily hybridises
with E. guineensis but the interspecies hybrid also suffers low yields. The reason the F1 hybrid has
however retained interest is due to its disease resistance potential to some lethal oil palm diseases in
South America. It also holds interest since, with increasing palm oil downstream demand, the next
decade of the palm oil supply chain sustainability strategies are looking at producing added value pro-
ducts. These have potential application in pharmaceutical and nutrition ingredient supply for human
diet as well as in the oleochemical industry. Elaeis oleifera has some properties in this respect not
matched by E. guineensis.

Felda Global Venture Research & Development Sdn Bhd (FGVRD) E. oleifera programme began with
the Kuala Lumpur Melanococca (KLM) selfs received from the Department of Agriculture in the late
1960s. This was followed by obtaining a part of Socfin’s Martineau prospections in South and Central
America in 1971 and lastly MPOB germplasm Surinam oleifera in the 80s. During the same period
crosses were made between the oleifera of different origins. The initial program of exploring F1 hy-
brids has been furthered with a view to exploiting more advanced generations, as the low yields of the
hybrids became apparent. Currently, FGVRD is working on a number of families of various combina-
tions equivalent to Backcross 3 (BC3) which are closer towards commercialization.

This paper summarises and reviews some observations and performance for the added value traits
dwarfness, compact canopy and high IV as well as observations on shell thickness segregation from
F1 to BC3. In the best progenies and palms low height increment and short rachis length characte-
ristics from E. oleifera are retained from F1 to BC3 while FFB and oil yield production improve with
back-crossing. Specialty oils with high IV are generally found in all generations, from F1 hybrids to
BC3 but individuals within the same progeny can show very high variability for these traits. The FG-
VRD oleifera breeding program remains focussed, just now, at BC2 and BC3 for the added value trait
exploitation, rather than further backcrossing. As a first step, good yielding individual BC palms with
added value traits have been selected for tissue culture propagation as part of an initial strategy to
produce small scale commercial volumes of specialty trait planting materials.

276 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 275-280, Tomo I, 2016
Introducción
Los resultados aquí presentados, con énfasis en ca-
rácteres vegetativos, calidad de aceite y tipo de fruto
tienen su base en tres colecciones de la especie Elaeis
oleifera procedente de diferentes orígenes. Este germo-
plasma fue colectado durante las décadas de los 70 y
80. La primera colección corresponde a un material
que se llamó Kuala Lumpur Melanococca (klm), que
se cree tiene su origen en Brasil y está conformada por
una autofecundación del material denominado klm y
el híbrido denominado klm – Socfin. La segunda co-
lección procede de América Central y Colombia y fue
identificada como la colección Socfin Martineau. Por
último, una tercera colección del mpob procedente de
Surinam e introducida en 1981.
Aclaración: el uso de la palabra “retrocruza” en
este estudio, no es en el sentido genético estricto.
Para los objetivos de la investigación, si el padre
recurrente es de la misma especie, se considera un
retrocruce sin tener que ser el mismo individuo.
Componentes de producción
El programa de retrocruza llevado a cabo por Felda
Global Venture (fgv), probablemente el más avanza-
do, ha confirmado una ganancia continua en produc-
ción después de cada ciclo de retrocruza. En la Figura
1 se observa que, a partir de la F1 del BC1 (Backcross
1) y del BC2 (Backcross 2), la ganancia en producción
de ffb (Racimos de Fruta Fresca) continua en el BC3
(Backcross 3). La varianza al interior de la progenie
160.0 %
140.0 %
120.0 %
FFB % (Progenie/SC3)
100.0 %
80.0 %
60.0 %
40.0 %
20.0 %
0.0 %
Híbrido BC1
Generación
Estudios de las características vegetativas, calidad del aceite y grosor del cuesco en híbridos interespecíficos
Elaeis oleifera x Elaeis guineensis y sus retrocruces con E. guineensis • Leao, S., et al.
híbrida F1 es reducida al ser comparada con los si-
guientes cruces, es por esto que algunos investigado-
res recomiendan a la F1 como un material comercial
el cual se puede mejorar en rendimiento mediante
polinización asistida.
En cuanto a los componentes del racimo y pro-
ducción, la varianza dentro de la progenie es reduci-
da en los tres retrocruces, que son similares a cruces
comerciales DxP. Una observación interesante es que
esta ganancia en el rendimiento promedio y la reduc-
ción de variabilidad, se debe a cambios similares en el
número de racimos, pero este comportamiento debe
ser confirmado en más cruces. Lo anterior sugiere
que el peso del racimo se estabiliza más pronto que
el número de racimos cuando el retrocruce tiene un
origen en E. oleifera.
El contenido de aceite por racimo también con-
tinúa mejorando en el BC3 pero hay una menor re-
ducción en la varianza dentro de familias de los BC2
y BC3, debido posiblemente a una fuerte presión de
selección para este carácter en el BC1. Para el BC3 se
evaluaron tres (3) progenies denominadas FM2, FM3
y FM4. En referencia a estas, se observó que la proge-
nie FM2 tiene una varianza más alta en el contenido
de aceite por racimo, la cual posiblemente se debe a
los parentales puros tipo dura provenientes de Nige-
ria, mientras que las progenies FM3 y FM4 provienen
de parentales 50 % Nigerianos y 50 % Deli. Dado el
buen desempeño del BC3, se seleccionaron palmas
tipo tenera para ser clonadas y las progenies tipo dura
seleccionadas están siendo evaluadas. Como la pro-
ducción es limitada, a diferencias de los cruces DxD
Figura 1. Componente de
producción entre las diferentes
generaciones de cruzamientos.
Se observa una ganancia en
la producción de los híbridos
interespecíficos mediante el
avance de los retrocruces con
E. guineensis, como parental
recurrente.
BC2 BC3
277
 escogidos para la producción de semillas, la explota-
ción será a través de semillas clonales.
Incremento de la altura
Sobre el estudio del incremento de altura se ha obser-
vado que las E. oleifera de origen Surinam son las de
menor crecimiento y que esta tendencia se mantiene
en los híbridos descendientes de este origen (Tabla 1).
El promedio y rango para el incremento de altura
en los cruces de las diferentes generaciones se mues-
tra en la Tabla 2. Si el retrocruce es hacia E. oleifera
se observa la disminución de la altura, sin embargo,
la producción de ffb disminuye igualmente rápido.
Como se ha visto con el rango y la varianza, mien-
tras la población de híbridos F1 es relativamente
uniforme para el incremento de altura, considera-
bles variaciones ocurren en la primera generación
del retrocruce. La altura promedio de las poblacio-
nes BC3 es menor que las del BC2, ya que solo in-
dividuos bajos, con alto rendimiento y con buenas
características de fruto fueron seleccionados para
crear las poblaciones BC3.
Obasola et al., (1977), afirmó que en las progenies
del BC1 es posible encontrar palmas que se parezcan
más a sus parentales E. oleifera, otras similares a los pa-
rentales E. guineensis y otras con mayor similitud a los
híbridos de la F1. Para estas progenies se observa que
el incremento de altura va desde 16 cm/año, el cual está
en el extremo inferior para E. oleifera de origen klm
(Tabla 1), hasta 44 cm/año lo cual es norma para las
palmas E. guineensis de Felda.
Calidad de aceite
En cuanto a la calidad del aceite en E. oleifera el valor
de yodo (IV) más alto se encontró en las poblaciones
de América Central/Colombia, seguido por la pobla-
ción de origen klm, mientras que el origen Surinam
exhibió el más bajo.
Los resultados indican que para E. oleifera, los re-
petidos cruces con E. guineensis reducen la propor-
ción de ácidos grasos insaturados y aumentan los sa-
turados. La reducción es muy rápida si la E. oleifera
parental tiene un valor relativo bajo (de ácidos grasos
insaturados), como es el caso de retrocruces deriva-

Tabla 1. Incremento de altura promedio en tres grupos de híbridos E. oleifera x E. guineensis en FGV1.

Parentales de origen oleifera N° de cruces Promedio Rango Varianza media

KLM 9 20,5 16,4-25,0 4,5

Socfin Martineau 29 23,8 20,0-26,0 NA
MPOB Surinam 5 14,3 14,5-14,9 3,5

1
El promedio de la varianza corresponde al promedio de la varianza dentro de la familia

Tabla 2. Incremento de altura en retrocruces de tipo (E. oleifera x E. guineensis) x E. guineensis KLM.

Generación N° de cruces Promedio Rango Varianza media

F1 8 20,5 16,4-25,0 4,5

BC1 54 29,2 19,0-44,0 54,2
BC1’ 1 17,0 - NA
BC2 6 40,4 35,6-45,7 45,6
BC3 13 37,6 22,0-41,4 56,7

BC1’= Retrocruce hacia el parental E. oleifera.

278 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 275-280, Tomo I, 2016
dos de poblaciones de Surinam. Interesantemente, en
los retrocruces derivados de las poblaciones KLM la
reducción es también rápida en las primeras genera-
ciones. Aunque el número de familias en las pobla-
ciones de estudio son pequeñas, los resultados están
en concordancia con datos publicados en investiga-
ciones previas.
en la Tabla 3). Para los retrocruces BC2 y BC3 la se-
gregación de los frutos tipo dura, tenera y pisifera fue
evidente, el % C/F de las tenera fue de 10,5 % dentro
de un rango de 7,6 a 14,5 % (datos no mostrados).
Conclusiones

Grosor de cuesco El mejoramiento de las colecciones de E. oleifera en

Para la característica de grosor de cuesco los resulta-
dos se calcularon sobre la base del porcentaje Cuesco/
Fruto (% C/F) (Tabla 3).
En la Tabla 3 se observa que E. oleifera pura pre-
senta frutos tipo dura según el valor del % C/F. En
cuanto al híbrido F1, se observa que para el cruce en-
tre una E. oleifera dura y una pisifera, la reducción en
el % C/F es importante. Para el BC1, es evidente el
descenso en el % C/F si el parental utilizado es pisi-
fera, mientras se observa lo contrario si el parental
recurrente es de tipo dura (valores de 7,9 y 29,4 %
fgv (Felda Global Venture) ha sido llevado a cabo
por más de cuatro décadas.
La clonación de materiales derivados de la especie
E. oleifera ha sido utilizado para fijar características
con valor añadido como lento crecimiento, compac-
tación y una posible tolerancia a patógenos como Ga-
noderma. Los frutos tipo tenera son para siembra en
plantación y el tipo dura/pisifera para producción de
semilla clonal.
Uno de los retos más importantes es el nivel de
aceptación de la variación en materiales comerciales, si
una nueva característica con valor añadido es incluida.

Tabla 3. Porcentaje de Cuesco/Fruto en tres poblaciones de E. oleifera, sus híbridos con E. guineensis y retrocruces
entre E. oleifera KLM y E. guineensis como parental recurrente.

Generación Tipo de cruce1 KLM n2 CA/Col3 n Surinam n

Oleifera (O) OxO 50,04 9 29,8 5 37,4 1

Híbrido interespecífico OxT 22,7 8 32,4 12 31,7 12

(F1) OxP - - 8,3 4 -
F1 (D) x P 19,0 1
F1 (P) x P 7,9 2 13,6 1 12,0 3
F1 (T) x P - - - 10,9 3
BC1
F1 (D) x D 29,4 9 - -
F1 (D) x Pf 5
20,3 21 - -
F1 (Pf) x T 18,3 10 -
BC2 BC1-‘T’ x T 10,5 18 - -
BC2-T x D 7,6 4 - -
BC3 BC2-D x P 7,3 5 - -
D x BC2-D 24,9 8 - -

1
Las letras entre paréntesis indican el tipo de fruto involucrado en la creación del híbrido (D, P o T); la letra después
del guion indica el tipo de palma involucrada en el cruce. 2Número de cruces. 3América Central y Colombia. 4Tomado
de Rao et al., (1989). 5P= pisiferas normales estériles. Pf= pisiferas fértiles.

Estudios de las características vegetativas, calidad del aceite y grosor del cuesco en híbridos interespecíficos
Elaeis oleifera x Elaeis guineensis y sus retrocruces con E. guineensis • Leao, S., et al. 279
 Referencias
Obasola, C., I. Obisesan, and F. Opute (1977). Breeding for short-stemmed oil palm in Nigeria III. Mor-
phological characters, fruit form segregation and bunch quality of the first backcross population
of interspecific hybrids of Elaeis oleifera x Elaeis guineensis to E. guineensis. p. 68 -94. In Earp, D.,
Newall, W. (eds.), International developments in oil palm. Malaysian International Agricultural
Oil Palm Conference., Kuala Lumpur.
Rao, V.; Chin, C. W.; Rajanaidu, N. (1989). Biology and performance of Surinam Elaeis oleifera
(H.B.K.) Cortes. Elaeis 1(32): 109-118.

280 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 275-280, Tomo I, 2016
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Biología de insectos polinizadores en palma aceitera y sus

híbridos interespecíficos (Elaeis oleifera x Elaeis guineensis)*
Biology of Pollinizing Insects in Oil Palm and its Interspecific Hybrids
(Elaeis oleifera x Elaeis guineensis)

citación: Ponce, P. (2016). Biología de insectos polinizadores en palma aceitera

y sus híbridos interespecíficos (Elaeis oleifera x Elaeis guineensis). Palmas
37(Especial Tomo I), pp. 281-284.
palabras clave: pudrición del cogollo, plagas, enfermedades, polinización.
keywords: Bud rot, pests, diseases, pollination.
*Editado por Fedepalma a partir de la grabación de video y la presentación en
PowerPoint.

Patricio Ponce
Docente investigador, Universidad de
Las Américas (UDLA)
Asociación Nacional de Cultivadores de
Palma Africana (ANCUPA)
Research Professor, Universidad de Las
Américas (UDLA)
National Association of African Palm
Cultivators (ANCUPA, its acronym in
Spanish)

Resumen
La palma de aceite Elaeis guineensis sufre una enfermedad devastadora conocida como Pudrición del
cogollo (PC). Los países productores de África, Asia y América tropical han desarrollado programas
de mejoramiento en busca de tolerancia a la PC. Los híbridos Elaeis oleifera x Elaeis guineensis (OxG)
son resistentes pero muestran problemas fisiológicos y morfológicos que influyen en la productividad
comercial. Una de las limitaciones presentes en los híbridos es la baja polinización natural, por lo que
se necesita polinización manual, que es costosa. Con el desarrollo de plantaciones con híbridos se
requiere conocer sobre la polinización en estos nuevos materiales. Los polinizadores más importan-
tes en la palma pertenecen al orden Coleoptera; sin embargo, en los híbridos, los polinizadores y su
dinámica es poco conocida.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 281-284, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 281
 Abstract
The oil palm Elaeis guineensis suffers from a devastating disease known as Bud rot (BR). The producer
countries in Africa, Asia and tropical America have developed breeding programs in the search of
tolerance to BR. The hybrids Elaeis oleifera x Elaeis guineensis (OxG) are resistant, but have physio-
logical and morphological problems that effect commercial productivity. One of the limitations in
the hybrids is the inadequate natural pollination which calls for costly manual pollination. In the
development of plantations with hybrids it is necessary to get to know about pollination in these new
materials. The most important palm pollinizers belong to the Coleoptera order. Nevertheless, little is
known of pollinizers and their dynamics in hybrids.

Pertenezco a una universidad privada en Quito, Ecua-
dor y desde allí, colaboramos con la Asociación Nacio-
nal de Cultivadores de Palma Africana, ancupa, tam-
bién en Ecuador, siendo común que las universidades
participemos en tratar de resolver los problemas de
los productores, en este caso de palma y, además, para
hacer este estudio contamos con la colaboración de la
plantación de Palmar del Río.
Una de las primeras preguntas cuando fui invi-
tado a participar en este proyecto fue acerca de cuál
era el problema con la polinización. Ya sabíamos que
habían problemas de polinización asistida e incluso
en E. guineensis en Ecuador, y en una de las planta-
ciones en San Lorenzo, Ecuador, cerca de Tumaco,
Colombia, pude observar la problemática de la Pu-
drición del cogollo, que trajo consigo que se hubiera
empezado a cultivar cruces o materiales híbridos. En
Ecuador va en aumento cada vez más el cultivo de
híbridos, debido a casos similares al de Colombia,
donde plantaciones extensas fueron aniquiladas por
la Pudrición del cogollo. Esto además trae consigo la
polinización asistida, que primero, es un rubro adi-
cional que aumenta los costos de producción, y se-
gundo, que incluso necesita entrenar gente para que
esta labor se haga bien, responsablemente y con los
resultados esperados.
Aparte de las dificultades agronómicas, existe una
problemática socioeconómica que representa, en este
caso, utilizar mano de obra en áreas económicamen-
te deprimidas, donde a veces es difícil encontrar esa
mano de obra capaz de hacer este trabajo delicado.
La mayoría de los cultivos en Ecuador, al igual que
en Colombia, están en manos de pequeños y media-
nos productores, los cuales probablemente necesitan
respuestas mucho más aceleradas porque estos seg-
mentos son los más propicios a quebrar. Entonces
nos propusimos dar soluciones o empezar el camino
para dar soluciones pragmáticas, es decir, si hay un
problema con los polinizadores, tenemos que buscar
la manera de promover la esencia de esos poliniza-
dores para que realicen su trabajo en los híbridos.
Elaboramos un programa que, primero, determinara
cuáles son los insectos asociados a las inflorescencias
masculinas y femeninas de los híbridos; y en segundo
lugar, estudiamos el comportamiento de los poliniza-
dores tomando en cuenta las épocas lluviosa y seca,
que son tan marcadas en el oriente ecuatoriano, y que
obviamente tienen un efecto sobre los insectos, para
solucionar produciendo semiartificialmente insectos
polinizadores; es decir, una cantidad muy grande de
insectos que pueden ser criados masivamente y cree-
mos que sería una posible solución.
Para hallar esa solución necesitamos datos biológi-
cos muy generales que no teníamos en Ecuador, y otro
de los componentes importantes fue desarrollar atra-
yentes para promover la polinización. Uno de los com-
ponentes importantes que funciona como atrayente en
E. guineensis es el estragol, un plan bastante ambicioso,
pero completamente posible, por lo que se comenzó a
estudiar la biología y dinámica de los polinizadores en
híbridos, inicialmente en el oriente ecuatoriano, en la
plantación Palmar del Río, que coincidencialmente es
una de las que perdió aproximadamente 10.000 hectá-
reas por la Pudrición del cogollo.
Incluimos en el estudio los materiales E. guineen-
sis, E. oleifera y los híbridos Taisha x Avros, Taisha x
La Mé y Coari x La Mé, y se empezó a colectar insec-
tos tratando de cubrir todas las hectáreas sembradas,
realizando un muestreo certificado en ocho lotes con

282 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 281-284, Tomo I, 2016
material híbrido y de progenitores puros, para lo cual
contamos con la ayuda extraordinaria del personal de
la plantación, y también entrenamos personal que se
dedicaba a polinización para que nos ayudara a hacer
este trabajo y así cubrir la totalidad del terreno.
Para las inflorescencias masculinas y femeninas
escogimos el tercer y cuarto día de antesis y en las
inflorescencias masculinas escogimos 20 espigas para
poder muestrear los insectos.
Resultó bastante interesante estudiar la actividad
de la polinización en las inflorescencias femeninas;
cubrimos parcialmente la inflorescencia con una
lámina de polifán, que es un pegamento inodoro e
incoloro llamado Biotac. Anteriormente habíamos
hecho algunos ensayos con este material y no tuvie-
ron ningún efecto sobre la conducta de los insectos.
Se realizaron observaciones durante las 24 horas del
día; es decir, cubrimos el ciclo de luz y el ciclo de os-
curidad para estar seguros de que no había actividad
Biología de insectos polinizadores en palma aceitera y sus híbridos interespecíficos
(Elaeis oleifera x Elaeis guineensis) • Ponce, P.
de algún otro insecto nocturno. Se determinó el ciclo
biológico de las especies encontradas haciendo un
seguimiento individualizado, al igual que la carga de
polen en cada uno de los insectos para saber si son
polinizadores y qué tan eficientes son cargando po-
len. Se emplearon 10 individuos que venían hacia las
inflorescencias y, utilizando una metodología senci-
lla, identificamos la cantidad de granos de polen que
cada individuo estaba cargando. Todos los resultados
obtenidos y los muestreos fueron georrefenciados,
algo que va a servir a futuro para hacer análisis espa-
ciales muy detallados.
Encontramos Elaeidobius kamerunicus, Grasidius
hybridus, y Couturierius constrictirostris (Figura 1),
todos de la familia Curculionidae, y escarabajos chi-
quitos picudos, excepto una especie, unos pocos es-
pecímenes que aún estamos en la tarea de identificar,
pero colectamos estos insectos que yo llamo asocia-
dos como himenópteros, donde está el grupo de las
Figura 1. Insectos de la familia
Curculionidae encontrados en el
estudio: a) Elaeidobius kamerunicus,
b) Grasidius hybridus, y c) Couturierius
constrictirostris.
283
 avispas, las abejas; de los dípteros, donde están los mos-
cos, mosquitos y tisanópteros, llamados a veces trips o
arañuelas, algunos son plaga en las inflorescencias, y
otros, su presencia es simplemente accidental.
Un aspecto que llama la atención en las poblaciones
de Elaeidobius kamerunicus es que tienen gran varia-
ción morfológica en color, y se les puede diferenciar
fácilmente entre macho y hembra, a diferencia de otras
especies, como es el caso de Grasidius hybridus, que
hasta donde conocemos no hay cómo identificar a sim-
ple vista su sexualidad; por otra parte está Couturierius
constrictirostris que es en realidad una especie menor.
Estamos muy interesados en saber el ciclo biológico de
las tres especies, el cual es muy parecido por una senci-
lla razón, está ligado a la vida de la inflorescencia mas-
culina porque de ella se alimentan, y antes de que se
seque completamente la inflorescencia, estos insectos
tienen que acabar su desarrollo, de allí la coincidencia.
En estas tres especies la vida de un insecto adul-
to puede durar de 18 a 22 días. Las dinámicas de las
poblaciones tienen un pico de visitas a las inflores-
cencias femeninas del tercer y cuarto día de antesis,
pero para ello tiene mucho que ver el tipo de palma y
su genética. Estudiamos los polinizadores por especie
en flores masculinas en épocas lluviosas y secas, en
284
flores masculinas en híbrido, E. guineensis y E. olei-
fera. Otros estudios por analizar hacen referencia al
porcentaje de germinación del polen y se observó que
en los híbridos tiene una viabilidad muy baja compa-
rada con E. guineensis.
Como conclusiones, el Elaeidobius kamerunicus es
el polinizador más importante seguido de Grasidius
hybridus y de Couturierius constrictirostris. Se observó
híbridos con gran potencial de manejo e incremento
de la polinización; se debe hacer un manejo diferen-
ciado de acuerdo a la estación de estas dos especies,
y los resultados obtenidos difieren prácticamente en
todo lo que se ha hecho en polinización, incluso en
América del Sur y Asia, pero hay gran potencial de
desarrollo de los atrayentes y de estudiar la dinámi-
ca de los polinizadores en el occidente que viven en
la costa del Ecuador. Se debe considerar la compa-
tibilidad de la polinización en variedad Taisha x La
Mé, que al parecer funciona mejor dependiendo de
las condiciones y características agronómicas, y que
pese a ser una cuestión muy compleja, pensamos que
va ayudar a delinear el camino en las estrategias para
avanzar en la transición, si es que este es el camino, a
otros híbridos y, obviamente, sin olvidar por supues-
to, la palma E. guineensis.
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 281-284, Tomo I, 2016
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Introgresión de genes E. guineensis en híbridos interespecíficos

OxG para recuperar la fertilidad del polen y otras características
deseables en palma de aceite*
E. guineensis Gene Introgression in Interspecific OxG Hybrids for
Recovering Pollen Fertility and other Desirable Oil Palm Traits

citación: Barba, J. (2016). Introgresión de genes E. guineensis en híbridos

interespecíficos OxG para recuperar la fertilidad del polen y otras características
deseables en palma de aceite. Palmas 37(Especial Tomo I), pp. 285-293.
palabras clave: fertilidad de polen, híbrido interespecífico OxG, introgresión
de genes.
keywords: Pollen fertility, interspecific hybrid OxG, introgression of genes.
* Artículo original recibido en español.

Julián Barba
Gerente de Investigación y Desarrollo,
Palmar del Río
Research and Development Manager,
Palmar del Río
jbarba@palmardelrio.com

Resumen
Está determinado que la especie E. oleifera transmite el gen de la tolerancia a la Pudrición del co-
gollo (PC), así como otras características deseadas en el cultivo de palma de aceite; sin embargo,
factores agronómicos como la baja fertilidad del polen, y la extracción de aceite deben ser optimiza-
dos a través de la introgresión de genes. Para cubrir estas expectativas se realizó en Palmar del Río
(PDR) Ecuador, cruces dura guineensis por dura oleifera Taisha, y paralelamente se cruzó el híbrido
OxG con pisíferas. Se estudió en los segregantes tenera del retrocruzamiento la tolerancia a la PC,
y el aumento de la fertilidad del polen. Luego de cinco años de evaluación en campo, la fertilidad
del polen se restituyó en los cruces entre dura a 40 % y los segregantes tenera alcanzaron un valor
promedio de 53,98 % de germinación. Las palmas tenera de los retrocruzamientos con una relación
de genes 25 % oleifera y 75 % guineensis no presentan Pudrición del cogollo hasta la fecha; crecen
15,68 cm por año; la extracción promedio de aceite en laboratorio al segundo año de cosecha es
de 26,7 %; mantienen el vigor híbrido, las inflorescencias masculinas producen poco polen; estos
materiales también necesitan polinización asistida por lo menos en los primeros años. Se pueden
utilizar como progenitores femeninos los cruces dura Deli x dura Taisha.

Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 285-293, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923 285
 Abstract
It has been established that the E. oleifera species transmit the Bud Rot (BR) tolerance gene, in addi-
tion to other desirable oil palm traits; nevertheless, agronomic factors such as low pollen fertility and
oil extraction must be optimized through gene introgression. In order to cover these expectations,
crosses of Dura guineensis by Dura oleifera Taisha were performed in Palmar del Río – Ecuador (PDR);
meanwhile, the OxG hybrid was crossed with pisifera. BR tolerance and increase in pollen fertility
were studied in the tenera segregants of the backcross; after five years of field evaluation, pollen ferti-
lity was restored to 40% in dura crosses, and tenera segregants reached an average germination value
of 53.98%. Backcrossed tenera palms with a 25% oleifera and 75% guineensis gene rate have shown no
bud rot to this date, they grow 15.68 cm per year, average oil extraction in the lab at the second harvest
year is 26.7%; they maintain a hybrid vigor and male inflorescence produce little pollen; these mate-
rials also require assisted polinization, at least during the first years. Dura deli x Dura Taisha crosses
can be used as female parents.

Antecedentes

Se ha determinado que la especie E. oleifera transmi-
te el gen de tolerancia a la enfermedad Pudrición del
cogollo (pc) a sus descendientes híbridos interespecí-
ficos OxG, siendo parcialmente identificados los ma-
teriales con menos susceptibilidad a esta enfermedad,
considerando que las evaluaciones se efectuaron so-
bre áreas que presentaron afectación. Además, exis-
ten características vegetativas en los materiales OxG
que son deseables para los palmicultores y que se ob-
tuvieron con la siembra de estos cultivares, de manera
especial la tasa de crecimiento, la calidad de aceite y la
producción dado al vigor híbrido.
Con los híbridos OxG se considera solucionado
en parte el principal problema letal de la palma acei-
tera en América; sin embargo, hay algunos tópicos
que merecen investigarse a fin de optimizar labores y
costos dentro de estos cultivares; entre ellos se men-
cionan la fertilidad del polen y la taza de extracción.
Para solucionar estos inconvenientes agronómicos
es necesario recurrir a la introgresión de genes entre
especies que presenten por lo menos un fenotipo si-
milar a la palma guineensis, y esto ocurre con las oleí-
feras de la Amazonía ecuatoriana.
Es conocido que el gen que determina el grosor
del cuesco es dominante en el género Elaeis, y si las
oleíferas por sus características se consideran como
palmas dura en la formación de híbridos OxG, es
posible el proceso de introgresión de genes para ob-
tener cualidades deseadas en los programas de me-
joramiento que tienen las empresas productoras de
semillas a nivel mundial.
Con estos antecedentes Palmar del Río (pdr),
Ecuador, inició sus investigaciones de introgresión de
genes E. guineensis a la especie E. oleifera desde el año
2007 con una serie de ensayos tendientes a solucionar
las siguientes hipótesis:
1. Es posible restaurar en los híbridos OxG la ferti-
lidad del polen con la introgresión de genes de la
especie E. guineensis.
2. Se podrá evitar la polinización de los híbridos in-
terespecíficos con esta introgresión.
3. Con 25 % de genes oleifera se tendrán palmas me-
nos susceptibles a la pc, al igual que con la rela-
ción 50/50 de genes oleifera y guineensis.
Para resolver estas hipótesis se realizaron y eva-
luaron dos ensayos en pdr, cuyo diagrama de cruza-
mientos y proceso se presentan en la Figura 1.

286 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 285-293, Tomo I, 2016
 Introgresión de genes de la especie E. guineensis a la especie E. oleifera Taisha PDR-Ecuador
Figura 1. Diagrama de introgresión
de genes entre las especies
Ensayo: HUID0107 Ensayo: HUID0208 E. guineensis y E. oleífera Taisha.

AÑO AÑO

E. guineensis E. oleifera Híbrido

2007 x 2008 E. guineensis
Dura Deli Dura Taisha OxG PDR x
Pisifera
50 % ole. + 50% gui.

2009 Siembra GxO

2010 Siembra (OxG x GP)
50 % guineensis + 50 % oleifera

2012 Selección de progenies femeninos GxO 50 % 50 %

segregantes segregantes
Tenera Pisifera

2013 DDDT x Pisifera Fertil

2015 Siembra materiales 25 - 75 2015 (Evaluación segregantes Tenera 25-75)

25 % oleifera - 75 % guineensis

Metodología dos OxG-pdr (Taisha x Avros) por pisifera Avros. Los

La investigación se realizó en la empresa Palmar del
Río, ubicada en San José de Guayusa, provincia de
Francisco de Orellana, Ecuador, entre las coordena-
das geográficas 0º 19’ latitud sur y 77º 06’ longitud
oeste, a una altitud de 280 msnm; con un promedio
de precipitación en la última década de 266 mm/mes,
radiación solar de 4148 watts/mes, temperatura mí-
nima de 18,6 °C y máxima de 32,8 °C y humedad re-
lativa de 78,13 %.
Durante el período 2007-2015 se evaluaron dos
ensayos denominados huid0107, que comprendió
el cruzamiento entre progenitores E. guineensis dura
Deli por E. oleifera Taisha, y el huid0208, que estudió
el retrocruzamiento procedente de progenitores híbri-
retrocruzamientos usados en los experimentos presen-
tados en este artículo corresponden a pseudo-retro-
cruzamientos, al no ser el mismo parental recurrente
que se utilizó para generar el híbrido. Las fases de los
ensayos se describen en la Tabla 1.
Ensayo HUID0107: Selección de
progenitores E. guineensis dura Deli y
E. oleifera Taisha
En 2007 se seleccionaron dos palmas oleíferas ot 13:2
y ot 5:6 para realizar 10 cruzamientos con palmas
dura Deli de Murgas & Lowe (Colombia); el detalle
de los cruces se describe en la Tabla 2. Las progenies
se sembraron en 2009 en el lote 13D1 de pdr.

Tabla 1. Cronología de los ensayos HUID0107 y HUID0208.

Período Actividad
2007-2008 Selección de progenitores para cruzamientos en los ensayos.
2007-2008 Cruzamientos dirigidos, 10 por cada ensayo.
2008-2009 Germinación y viveros de los materiales en estudio.
2009-2010 Siembra de las parcelas experimentales.
2010-2015 Evaluación de materiales en campo progenitores y segregantes tenera.

Introgresión de genes E. guineensis en híbridos interespecíficos OxG para recuperar la fertilidad del polen y otras
características deseables en palma de aceite • Barba, J. 287
 Tabla2. Cruzamientos dura Deli por Oleifera Taisha.

FA Código Dura Deli Progenitor femenino Oleifera Taisha PDR Progenitor masculino

1 DD x OT-1 710097*107-508 OT 13:2

2 DD x OT-2 710084*110-215 OT 5:6
3 DD x OT-3 710094*111-404 OT 13:2
4 DD x OT-4 710067*112-201 OT 5:6
5 DD x OT-5 710092*113-309 OT 13:2
6 DD x OT-6 710069*114-613 OT 5:6
7 DD x OT-7 710052*115-306 OT 13:2
8 DD x OT-8 710065*302-208 OT 5:6
9 DD x OT-9 710104*308-102 OT 13:2
10 DD x OT-10 710115*310-112 OT 13:2

Ensayo HUID0208: Selección de 14 y 54 %, respectivamente; los otros cruces no ger-

progenitores híbridos OxG-PDR (Taisha x minaron; estos materiales fueron sembrados en 2010
Avros) por pisifera Avros en el lote 11D2.

Con la información del ensayo de progenies HUGP4 Resultados y discusión

de la primera serie de cruzamientos realizada en pdr
de híbridos OxG (Barba, J., 2010), y del registro de dos
años de producción se seleccionaron 10 plantas por
sus rendimientos y contenidos de aceite, que fueron
cruzadas con el progenitor 1203-3612 pisifera Avros
en 2008. De estos cruzamientos solo se obtuvieron se-
millas del RC1 y RC7 (Tabla 3), con germinaciones de
Ensayo HUID0107: Evaluación de
materiales en campo (progenitores)
Durante la etapa de crecimiento y desarrollo de las
progenies se observaron aspectos agronómicos no
deseados, entre ellos: amarillamiento del follaje, an-

Tabla 3. Selección de progenitores híbridos OxG-PDR (Taisha x Avros) por pisifera Avros.

FA Código OxG-PDR Avros (Progenitor femenino) Pisifera Avros (Progenitor masculino)

1 RC1 10:23 1203-3612

9 RC2 15:6 1203-3612
6 RC3 15:13 1203-3612
6 RC4 13:3 1203-3612
5 RC5 4:1 1203-3612
6 RC6 13:4 1203-3612
7 RC7 7:7 1203-3612
14 RC8 3:2 1203-3612
7 RC9 7:8 1203-3612
6 RC10 13:6 1203-3612

288 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 285-293, Tomo I, 2016
drogénesis continua y baja producción de racimos; aceite, reporta una germinación mayor con los híbri-
variabilidad que se puede atribuir a una escasa ha- dos OxG realizados con progenitores dura y tenera,
bilidad combinatoria de progenitores. Por esta causa alcanzando 58,3 %, cuando se utilizó la oleífera de
los cruzamientos 2, 3, 4, 5, 6 y 7 fueron eliminados Manicore como progenitor femenino (Tabla 4).
entre los 2 y 4 años de edad (Figuras 2a y 2b). De los
Las principales características de desarrollo vege-
cruzamientos 1, 8, 9 y 10 se seleccionaron 32 palmas
tativo de los híbridos dura Deli por dura Taisha se-
por escasa androginia inicial, flores masculinas bien
leccionados para los programas de mejoramiento se
formadas con olor a anís y buena producción de raci-
presentan en la Tabla 5.
mos, como se muestra en las Figuras 3a y 3b.
Los racimos del híbrido dura Deli por dura Tai-
Al año sexto de siembra, los híbridos interespe-
sha presentan promedios de 50,29 % de frutos nor-
cíficos dura Deli por dura Taisha (ddxot) presentan
males y 33,22 % de frutos partenocárpicos (Tabla 6);
menos susceptibilidad a la pc, no se han reportado
los frutos partenocárpicos pretenden formar cuesco,
casos; además, el polen de las inflorescencias de estos
pero este se atrofia (Figura 4), a diferencia de los hí-
cruzamientos incrementó la capacidad de germina-
bridos OxG realizados con pisíferas guineensis, cuyo
ción hasta 41,01 %, en comparación con los híbridos
fruto no presenta nuez.
OxG realizados con pisíferas, en donde la germina-
ción no supera 21 %. Sin embargo, Sánchez G. (2009), Desde 2014 las palmas ddxot se utilizan como
en su estudio de germinación de polen en palma de progenitores femeninos en los retrocruzamientos

a. b. Figura 2. a. Amarillamiento de
palmas DDxOT PDR.
b. Androgénesis pronunciada de
palmas DDxOT PDR.

a. b. Figura 3. a. Palma con una

producción normal de flores y
racimos.
b. Palma con flor masculina normal.

Tabla 4. Esquema comparativo de porcentajes de germinación del polen en híbridos interespecíficos según el tipo
de progenitor guineensis. PDR 2015.

Híbrido interespecífico Dura Tenera Pisifera

OXG PDR - Taisha 40,01 29,12 21,14

OxG - Manicore 58,3 58,1

Introgresión de genes E. guineensis en híbridos interespecíficos OxG para recuperar la fertilidad del polen y otras
características deseables en palma de aceite • Barba, J. 289
 Tabla 5. Características vegetativas de los híbridos dura Deli por dura Taisha.

Descriptor

Tasa de crecimiento del tallo (cm/año) 11,46

Área foliar hoja 17 (m2) 8,11
Presencia de espatas Escasa
Antesis Uniforme
Color del fruto virenses
Peso promedio del fruto (g) 12,15
Nuez en fruto normal (%) 7,08
Racimos promedio por palma/año 11
Peso promedio del racimo (kg) 13,5
Producción (t/ha/año) 17,08

Figura 4. Frutos partenocárpicos y

normales del híbrido DDxOT.

Tabla 6. Información promedio de contenidos de aceite y porcentajes de frutos en racimo de cuatro cruzamientos
DDxOT Palmar del Río, Ecuador.

Frutos
Aceite en Mesocarpio en Frutos normales en
Código Aceite en racimo % partenocárpicos en
mesocarpio % fruto % racimo %
racimo %
DD x OT 1 29,89 17,49 78,22 43,77 36,44
DD x OT 8 29,62 18,26 70,33 57,66 30,02
DD x OT 9 27,27 17,65 75,17 58,39 27,36
DD x OT 10 28,08 18,29 80,62 41,33 39,06
Media 28,72 17,92 76,09 50,29 33,22

290 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 285-293, Tomo I, 2016
que se efectúan en pdr con pisíferas fértiles guineen-
sis, dada la información de los segregantes tenera del
Ensayo huid0208.
Ensayo HUID0208: Evaluación de
materiales en campo - segregantes tenera
De los 10 códigos que fueron enviados a germinador
solo dos se adaptaron al proceso de germinación es-
tablecido para los materiales OxG – pdr: RC1 y RC7,
sembrando 23 y 47 palmas, respectivamente, en marzo
de 2010 en el lote 11D2. Se evaluaron las características
vegetativas de los retrocruzamientos que segregaron a
tenera (Tabla 7). Con esta información y considerando
los criterios usados por Bastidas et al., (2007), como la
disposición de foliolos en el raquis, largo y ancho de los
mismos, vigor de los tallos, largo de hojas, largo de pe-
ciolos, largo del raquis, presencia de flores andróginas, y
forma y color de los frutos, se determinó la segregación
del fenotipo, obteniendo 61,1 % de palmas con fenoti-
po guineensis y 38,9 % híbrido OxG. Como se muestra
en la Tabla 8, la segregación encontrada por Bastidas et
al., (2007) para este tipo de cruces presentó 62,7 % de
los segregantes a híbridos y 37,3 % a E. guineensis; no
obstante, estas diferencias son corroboradas con el pos-
tulado de Escobar y Alvarado (2004), explicando que los
retrocruzamientos en palma de aceite dan lugar a la se-
gregación de una serie de fenotipos diferentes, los cuales
muestran características extremas e intermedias.
Se evaluó además la segregación de frutos, obte-
niendo 45,4 % de frutos tenera y 31,8 % de pisifera
para el RC1, mientras que el RC7 presentó 72,9 % de
tenera y 21,6 % de pisifera. Existen palmas en los dos
códigos que aún no presentan racimos (Tabla 9).

Tabla 7. Características vegetativas de retrocruzamientos RC1 y RC7.

Característica Unidad
Tasa de crecimiento del tallo (cm/año) 15,68
Área foliar (m )
2
5,41
Presencia de espatas Escasa
Antesis Uniforme
Color del fruto virescens y nigrescens
Peso promedio del fruto (g) 15,21
Nuez en fruto (%) 3,11
Racimos promedio por palma segundo año 15
Peso promedio del racimo, segundo año (kg) 9,03
Producción segundo año (t/ha/año) 18,29

Tabla 8. Segregación de fenotipos en los RC1 y RC7.

Código Evaluadas Híbrido (%) Guineensis (%)

RC 1 22 31,8 68,2
RC 7 37 45,9 54,1
Total 59 38,9 61,1

Tabla 9. Segregación de los tipos de frutos. * S

Código Tenera % Pisifera % Sin definir %

RC 1 45,4 31,8 22,7
RC 7 72,9 21,6 5,4

Introgresión de genes E. guineensis en híbridos interespecíficos OxG para recuperar la fertilidad del polen y otras
características deseables en palma de aceite • Barba, J. 291
 Hasta la fecha no se han eliminado palmas por la
pc; el 25 % de genes oleifera, con cinco años de siem-
bra, está demostrando menos susceptibilidad a esta
enfermedad letal. Los contenidos de aceite determi-
nados en laboratorio fueron: mesocarpio (41,49 %) y
racimo (25,99 %), similares a varios tenera guineensis;
los frutos normales en racimo alcanzaron 63,65 % y
14,13 % de partenocárpicos (Tabla 10).
La fertilidad del polen en los segregantes tene-
ra del ensayo huid0208 se restaura, alcanzando un
valor promedio de 53,98 % de germinación. El pro-
blema existente en estos materiales es que el polen
recolectado no supera los 8 gramos, que es bajo en
comparación con el polen obtenido en una flor gui-
neensis que supera los 30 gramos; de igual manera,
sigue el vigor híbrido, y el número de inflorescencias
masculinas es escaso. Es posible que esta condición
cambie con la edad y pueda ser suficiente esta can-
tidad para obviar la polinización asistida en la etapa
adulta del cultivo (Tabla 11).
Consideraciones finales
• Fue posible restaurar en los híbridos OxG reali-
zados con E. oleifera Taisha la fertilidad del polen
con la introgresión de genes de la especie E. gui-
neensis.
• Con 25 % de genes oleifera se mantiene el vigor
híbrido y hasta el momento la emisión de flores
y polen es escasa. Estos materiales necesitan aún
polinización asistida.
• Con 25 % de genes oleifera, aún no hay casos de la
pc; esta generación de palmas mantiene el tamaño
compacto y mejora la extracción de aceite en for-
ma notable.

Tabla 10. Composición de racimo y contenidos de aceite (%).

Frutos
Mesocarpio en Frutos normales en Aceite en
Material partenocárpicos en Aceite en racimo
fruto racimo mesocarpio
racimo
RC7 86,50 56,40 18,83 39,96 25,46
RC1 84,32 70,89 9,43 43,01 26,52
Promedio 85,41 63,65 14,13 41,49 25,99

Tabla 11. Características de las inflorescencias masculinas del retrocruzamiento ((OxG) x G) – PDR 2015.

Característica RC7 RC1 Promedio

Largo de pedúnculo 27,5 25 26,25

N° espigas 99 117 108
Longitud media de espiga (cm) 14,0 11,17 12,59
Germinación del polen (%) 58,48 49,48 53,98
Polen colectado (g) 7,4 5,0 6,2

292 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 285-293, Tomo I, 2016
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Introgresión de genes E. guineensis en híbridos interespecíficos OxG para recuperar la fertilidad del polen y otras
características deseables en palma de aceite • Barba, J. 293
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contenido

Comportamiento del híbrido interespecífico OxG,

Coari x La Mé en Palmeras del Ecuador*
Behavior of the OxG Coari x La Mé Interspecific Hybrid
in Palmeras del Ecuador

citación: Torres, E. (2016). Comportamiento del híbrido interespecífico

OxG, Coari x La Mé en Palmeras del Ecuador. Palmas 37(Especial Tomo I),
pp. 294-298.
palabras clave: híbrido, Pudrición del cogollo, Ecuador.
keywords: Hybrid, Bud rot, Ecuador.
*Artículo original recibido en español.

Enrique Torres
Coordinador Agrícola del Grupo DANEC
etorres@danec.com

Resumen
El complejo de la Pudrición del cogollo hizo su aparición en Ecuador en 1979 y hasta la fecha han sido
erradicadas más de 50.000 hectáreas de palma de aceite a causa de esta enfermedad. La alta tolerancia
del híbrido interespecífico (E. oleifera x E. guineensis) a la PC ha constituido este material como una
alternativa para aquellas zonas que han sido fuertemente afectadas por la enfermedad. El presente
artículo reúne un conjunto de experiencias del comportamiento del híbrido interespecífico (OxG)
Coari x La Mé en Palmeras del Ecuador, prácticas agrícolas, así como enseñanzas con el acompaña-
miento del IRHO-CIRAD y del personal que ha asistido este proceso a través del tiempo.

294 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 294-298, Tomo I, 2016, ISSN 0121- 2923
Abstract
The Bud rot complex made its first appearance in Ecuador in 1979 and to date more than 50,000 hectares
have been eradicated due to this disease. The interspecific hybrid (E. oleifera x E. guineensis) high tole-
rance to this disease has instituted this material as an alternative for those areas that have been heavily
affected by the Bud rot complex. This article includes a set of experiences of the behavior of interspecific
hybrid (OxG) Coari x La Mé in Palmeras del Ecuador, agricultural practices, lessons over time with the
participation of IRHO-CIRAD and staff that has accompanied this process through time.

Complejo de la Pudrición del cogollo Experiencias sobre las prácticas

El complejo de la Pudrición del cogollo está caracte-
rizado por una clorosis en las hojas más jóvenes y por
la presencia de una pudrición que se dirige hacia el
centro del meristemo, acompañado por la pudrición
de racimos uno o dos meses después de la presencia
de los primeros síntomas en la planta.
Su historia en Ecuador data de 1979; los prime-
ros casos se presentaron en el área de Shushufindi y
La Orellana, en donde hasta el año 2002 se perdie-
ron cerca de 10.000 hectáreas. En San Lorenzo 25.000
hectáreas más fueron erradicadas entre 2008-2013 y
otras 15.000 se perdieron en San Mateo, Viche y Cupa
entre 2013 y 2015. En el caso de Palmeras del Ecuador
se perdieron 5.000 ha en un lapso de seis años y de ahí
a la fecha se han perdido 2.000 ha más.
La enfermedad de la Pudrición del cogollo aún
continúa siendo una preocupación general para el
gremio de palma de aceite y genera la inquietud:
¿dejar el negocio o continuar? A la fecha la única al-
ternativa que se tiene es dar un manejo adecuado al
agrosistema de la planta y realizar una erradicación
temprana de las palmas afectadas para frenar el avan-
ce de la enfermedad. En Palmeras del Ecuador se ha
observado que de ninguna manera se ha logrado re-
cuperar la palma mediante la implementación de ci-
rugías o rotación de agroquímicos, pues si bien se ha
visto mejoría en el paquete de hojas verdes, no se ha
logrado recuperar la productividad de las palmas, que
es el objetivo principal.
agrícolas en el híbrido interespecífico
en palmeras del Ecuador
Palmeras del Ecuador se encuentra a una altitud de
260 msnm; la región tiene una temperatura media
de 30 °C y una precipitación anual de 3.300 mm. El
95 % de los suelos, en su mayoría, son limo-arci-
llosos y planos. En total se tienen 9.715 hectáreas
sembradas, con una participación de 66 % con hí-
brido, 33 % de E. guineensis y 1 % de ensayos de los
cuales se ha partido para obtener el material de la
plantación entre E. Oleifera y Backcross.
Vivero
Al híbrido se le ha dado un manejo muy similar al de
la E. guineensis en la fase de vivero. No obstante, se
ha observado que alrededor del quinto mes presenta
una aparente deficiencia severa de boro; sin embargo,
se ha detectado que esta condición se debe a que en
la parte del tallo, por la presencia de fibras y tejidos
que aprietan de afuera hacia adentro la emisión de las
hojas más tiernas, se ocasiona un arrugamiento en un
costado de las hojas nuevas.
Fertilización
El plan de fertilización que se presenta en la Tabla 1 se
realiza al pie de la letra bajo la supervisión del cirad,
aunque en ocasiones se debe hacer una corrección al-

Comportamiento del híbrido interespecífico OxG, Coari x La Mé en Palmeras del Ecuador • Torres, E. 295
 rededor de los 18 meses en cuanto a nitrógeno, pota-
sio, magnesio y boro.
Preparación de suelos
La preparación de suelos debe ser rigurosa antes de
la renovación de la plantación. Se ha dado prioridad
al establecimiento de coberturas y a la eliminación de
cualquier fuente de inóculo de la enfermedad. Para
esto, se ha pasado un tractor agrícola con cincel rom-
piendo las raíces de la palma vieja para la renovación.
Esta práctica ha logrado reducir la incidencia de la pc
en los primeros años de la renovación.
Mantenimiento
Polinización asistida
La polinización asistida inicia cuando hay más de
20 % de inflorescencias femeninas. Esta labor es
fundamental pues la polinización natural se vuel-
ve nula en este tipo de materiales. Las palmas altas
son un desafío para esta labor, por lo cual se han
montado una serie de ensayos simulando que ya
no es posible observar las inflorescencias. El pri-
mer ensayo contempla la aplicación del polen sin
la previa apertura de las espatas; en este ensayo los
tratamientos corresponden a:
• Aplicación del polen en forma dirigida sin abrir
las espatas (T1).
• Aplicación del polen mediante nebulización con
máquina en todas las coronas de las plantas asu-
miendo que hay inflorescencias (T2)
• Aplicación del polen en forma tradicional usando
el gancho y abriendo las espatas de las inflorescen-
cias (testigo).
Se observó que en todos los tratamientos se tuvo
una buena conformación de racimos, el peso medio
de los mismos tuvo una reducción no significativa y
el análisis de potencial de extracción de aceite se re-
dujo de 21,09 a 2,52 %, reducción no significativa en
el proceso industrial.
En el segundo ensayo se usaron escaleras muy
similares a las usadas por los bananeros, en donde

Tabla 1. Fertilización química en el material híbrido según la edad del cultivo.

Fuente (g/palma)
Etapa Edad
Urea DAP KCl MgCO3 Borax SFT Sal

Hoyo       150   250 150

2 meses 150       15    
PROCESO

6 meses   500 250 270 15    

12 meses 200       30    

18 meses   750 400 540 35    

24 meses 500   500   35    

0   1.000 0      
PRODUCCIÓN

1.000   1.500 500 35+35    

Del tercer año
1.500   2.000 800 70    
en adelante
2.000   2.500 1.600      

      2.000      

296 Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 294-298, Tomo I, 2016
una persona cubre nueve hectáreas los días lunes,
miércoles y viernes. Esa persona va de palma en
palma abriendo las inflorescencias y haciendo la
aplicación de la mezcla con una pera; por último,
deja señaladas las inflorescencias con una cinta.
En los dos días siguientes se hacen otras dos para
un total de tres aplicaciones por racimo. Con esta
forma de aplicación se tiene 95 % de racimos bien
conformados. Sin bien esta labor cuesta un poco
más, se cree que a futuro, cuando el personal lo-
gre experticia en la labor los rendimientos serán
mayores y que esta será la solución al problema de
polinización asistida en palma alta.
Manejo de polen
Palmeras del Ecuador posee en la parte occidental
una plantación que está sometida a un verano de seis
meses continuos. Allí se está cosechando polen y con
el previo aislamiento de las inflorescencias se están
logrando rendimientos de 3 kg/persona al día. Ac-
tualmente, el polen se seca en cuartos con aire calien-
te y se logró pasar de un tiempo de secado de 24 horas
con aire frío a 12 horas con aire caliente.
Criterios de cosecha
Inicialmente se adoptaron diversos índices para esta-
blecer el punto óptimo de cosecha en el material hí-
brido, los criterios inicialmente adoptados fueron el
rajado de los frutos y la posterior comprobación de la
coloración de la pulpa. Sin embargo, con el tiempo se
ha observado que simplemente con el número de fru-
tos desprendidos (5 frutos en época de lluvia y 8 en
época seca) se podía definir el criterio para la cosecha.
Producción en Palmeras del Ecuador
La producción y el porcentaje de mortalidad por la
PC en Palmeras del Ecuador se indican en la Tabla
2. La extracción durante los primeros años es baja;
sin embargo, esta se va incrementando a partir del se-

Tabla 2. Producción de toneladas de fruta fresca y de aceite por año del cultivo.

Año de cultivo Hectáreas Año de cosecha t RFF/ha Extracción % t aceite/ha % mortalidad por PC

2011 357 1 12 17,80 2,1 0,98

2010 366 2 17 18,50 3,1 1,46

2009 1.009 3 18 19,00 3,4 1,41

2008 403 4 19 19,20 3,6 1,31

2007 473 5 23 19,50 4,4 1,86

2006 432 6 26 20,00 5,2 1,83

2005 350 7 27 20,00 5,4 1,99

2004 428 8 29 20,50 5,9 2,20

2003 372 9 30 20,50 6,1 1,78

2002 453 10 31,5 21,00 6,6 2,57

2001 176 11 28 21,00 5,8 2,37

2000 594 12 29 21,50 6,2 3,48

1999 345 13 29,3 21,50 6,3 4,61

1997 15 15 28 21,50 6,02 4,44

Comportamiento del híbrido interespecífico OxG, Coari x La Mé en Palmeras del Ecuador • Torres, E. 297
 gundo año, pudiendo llegar a superar el 20 % después
del quinto o sexto año de cosecha.
Conclusiones
El híbrido interespecífico presenta las siguientes
ventajas:
• Larga vida útil de la plantación
• Alta tolerancia natural a plagas y enfermedades
• Menores costos de mantenimiento y cosecha
298
• Alta producción de fruta
• Calidad de aceite superior
Como desventajas de este material se tiene:
• Poco tiempo de investigación
• Menor tasa de extracción con respecto a la E. gui-
neensis
• Menor extracción de almendra (15-20 % de frutos
partenocárpicos)
• Requiere polinización asistida
Revista Palmas Vol. 37 No. Especial, pp. 294-298, Tomo I, 2016
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