Professional Documents
Culture Documents
Quinto Semestre
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
Docente
Asignatura
2018
INTRODUCCIÓN
Esos contenidos axiológicos son los que permiten hacer un replanteamiento de las
categorías jurídicas del sistema de derecho procesal. Aunado a ello, se ha sostenido
que dicha labor se traduce en una mera prevalencia de la categoría del ser sobre la
ley, dentro del marco de un genuino humanismo que debe presidir los actos de los
encargados de administrar justicia en todos los campos del sistema jurídico.
El debido proceso debe entenderse como una manifestación del Estado que busca
proteger al individuo frente a las actuaciones de las autoridades públicas,
procurando en todo momento el respeto a las formas propias de cada juicio. Por
tanto, las situaciones de controversia que surjan de cualquier tipo de proceso,
requieren de una regulación jurídica previa que limite los poderes del Estado y
establezcan el respeto de los derechos y obligaciones de los sujetos procesales, de
manera que ninguna actuación de las autoridades dependa de su propio arbitrio,
sino que se encuentren sujetas a los procedimientos señalados en la ley o los
reglamentos.
JUSTIFICACIÓN
Es necesario estudiar y analizar los diferentes puntos de vista del derecho al debido
proceso, pues este ha adquirido una importancia en los sistemas jurídico-políticos,
al punto que con frecuencia se proclama tanto en el ámbito de las organizaciones
internacionales y de las declaraciones constitucionales como en la opinión pública,
en torno a las exigencias de defensa y salvaguarda de la persona humana.
Precisamente todo lo humano necesita fundamentación para la búsqueda de unos
principios que justifiquen racionalmente con ideas claras y distintas la realidad
jurídica objetiva y subjetiva que se manifiesta con el debido proceso.
La importancia del debido en los procesos judiciales se encuentra ligado con la idea
de compartir ciertas asunciones y preocupaciones ante la manera en que se ve
comprometida la vida misma en los juicios donde se discute sobre las sanciones,
los derechos, las obligaciones y situaciones semejantes relacionadas con las
normas jurídicas, los principios y los valores.
Por ello, resulta trascendental indagar sobre qué es lo justo o lo debido en los casos
concretos a la hora de tomar una decisión judicial en un proceso donde el juez tiene
el deber legal y constitucional de realizar el control de los actos procesales, así como
crear un acto jurisdiccional razonable, toda vez que la verdad no se ha de investigar
a cualquier precio, sino protegiendo la persona con su dignidad.
METODO
EXPECTATIVA O RESULTADO
Con el estudio realizado se pretende que todas las personas conozcan sobre la
función social que cumplen con el Estado Social de Derecho y por ende, hagan
exigir sus derechos fundamentales, en especial el debido proceso, toda vez que su
aplicación es necesaria en cada actuación que realicemos ante entidades, ya sean
de orden público o privado y así evitar su constante vulneración.
DESARROLLO TEMATICO
En virtud del citado derecho, las autoridades estatales sólo podrán actuar dentro del
marco jurídico definido, respetando las formas propias de cada juicio y asegurando
la efectividad de aquellos mandatos que garantizan a las personas el ejercicio pleno
de sus derechos, y así lo ha decantado la H. Corte constitucional en reiterados
pronunciamientos cuando expresa que, el derecho al debido proceso tiene como
propósito específico la defensa y preservación del valor material de la justicia, a
través del logro de los fines esenciales del Estado, como la preservación de la
convivencia social y la protección de todas las personas residentes en Colombia en
su vida, honra, bienes y demás derechos y libertades públicas (preámbulo y
artículos 1° y 2° de la C.P).
En este sentido, se destaca la dimensión analítica que permite auscultar en los
enunciados normativos la posición jurídica que le es reconocida como derecho a
una persona en las relaciones jurídicas o frente al Estado.
“La institución del Debido Proceso está contemplado en todas las legislaciones y
ello ha permitido consagrar este principio como pilar fundamental de la tesis que
forman el Debido Proceso Universal. Ya particularizada la figura del debido proceso
se convierte en un derecho fundamental constitucional en beneficio de las personas
consideradas partes dentro de la relación procesal.
En este aspecto el ciudadano tiene la facultad para hacer valer judicialmente las
violaciones de sus derechos mediante el derecho público subjetivo de acción que
goza de protección iusfundamental. De esta manera, en el orden jurídico se otorga
la garantía institucional que le prohíbe imperativamente al legislador expedir
cualquier norma encaminada a eliminar o modificar la posición jurídica favorable
que tiene el sujeto, pues de no ser así se obstaculizaría su libertad para hacer
realidad sus deseos acordes con los mandatos legales y constitucionales. Por ello,
el ejercicio de la competencia de los órganos estatales ha de estar controlado
mediante un instrumento metodológico adecuado como el principio de
proporcionalidad mediante el cual se hacen “operativos los derechos fundamentales
como límites al ejercicio del poder público” (Bernal, 2007: p. 532).
En todo caso, para abordar el problema dogmático del debido proceso, es preciso
a personalizarse del papel del juez como director del proceso, porque es en sede
judicial donde adquiere significantemente la discusión de su justiciabilidad, de modo
que el debido proceso es justiciable cuando el operador lo respeta y utiliza como
método para crear una providencia judicial mediante procedimientos diáfanos.
CARACTERISTICAS
En relación con esto ítem, se debe destacar que el derecho al debido proceso exige
que todo procedimiento regulado en la ley, se ajuste a las reglas básicas derivadas
del artículo 29 de la Constitución, como son, la existencia de un proceso público sin
dilaciones injustificadas, la oportunidad de controvertir e impugnar las decisiones, la
garantía del derecho de defensa y la posibilidad de presentar y controvertir pruebas,
por ello, es menester traer a colación algunas de sus características las importantes,
entre ellas tenemos las siguientes:
Las garantías que integran el debido proceso, y entre ellas el derecho de defensa,
son de estricto cumplimiento en todo tipo de actuaciones, ya sean judiciales o
administrativas, pues constituyen un presupuesto para la realización de la justicia
como valor superior del ordenamiento jurídico. Ello es así por cuanto la concepción
del proceso como un mecanismo para la realización de la justicia, impide que algún
ámbito del ordenamiento jurídico se sustraiga a su efecto vinculante pues a la
conciencia jurídica de hoy le repugna la sola idea de alcanzar la justicia pervirtiendo
el camino que conduce a ella.
2. Es de aplicación inmediata
El debido proceso como derecho fundamental de aplicación inmediata (C.P. Art. 85),
en concordancia con los artículos 228 y 229 de la Constitución Política y de acuerdo
con las disposiciones de la Ley Estatutaria de Administración de Justicia, se expresa
a través de principios que regulan el acceso a dicha función pública, entre otros, se
destacan los siguientes: la celeridad, publicidad, autonomía, independencia,
gratuidad y eficiencia.
4. Consagración internacional
“En virtud del citado derecho, las autoridades estatales no podrán actuar en forma
omnímoda, sino dentro del marco jurídico definido democráticamente, respetando
las formas propias de cada juicio y asegurando la efectividad de aquellos mandatos
que garantizan a las personas el ejercicio pleno de sus derechos. Según lo ha
destacado este Tribunal, el derecho al debido proceso tiene como propósito
específico “la defensa y preservación del valor material de la justicia, a través del
logro de los fines esenciales del Estado, como la preservación de la convivencia
social y la protección de todas las personas residentes en Colombia en su vida,
honra, bienes y demás derechos y libertades públicas”
De las anteriores líneas jurisprudenciales, queda claro que el eje central y de gran
importancia para garantizar el perfecto funcionamiento del estado social de derecho
es sin duda alguna la persona, por ser este un estado antropocéntrico.
CONCLUSIÓN
El debido proceso presenta una naturaleza y alcance complejos, al punto que puede
ser abordado desde diversos puntos de vista para justificar su existencia que
descansa en el respeto de la persona radicado en las concretas exigencias de la
igualdad, la libertad y dignidad humanas. He ahí el fundamento previo del debido
proceso como derecho humano, cuyo marco normativo está dada en Colombia con
su constitucionalización como principio en el art. 29 de la Constitución Política y en
los diversos Tratados Internacionales suscritos por Colombia. Aunado a ello, quien
tiene una posición jurídica fundamental ostenta posibilidades procesales-
constitucionales de exigir su justiciabilidad ante los jueces, los tribunales y la altas
Cortes.
LOPEZ BLANCO, Hernán Fabio, Código General del proceso parte general, Dupre
Editores. 2017.