You are on page 1of 16

UNIVERSIDAD DE SONSONATE

FACULTAD DE INGENIERÍA Y CC NN.

TEMA: LA MORALIZACIÓN COMO PARTE DEL PROCESO


EDUCATIVO.

CATEDRÁTICO: LIC. RUTILIO ANTONIO DURAN.

ASIGNATURA: ÉTICA PROFESIONAL.

ALUMNO: EDUARDO ERNESTO BARRAZA GUZMÁN.

CICLO I/2016
CONTENIDO
Pág.

INTRODUCCIÓN .................................................................................................... 1
1 LA MORALIZACIÓN COMO PARTE DEL PROCESO EDUCATIVO................ 2
2 CONCEPTO DE MORALIZACIÓN ................................................................... 3
2.1 RELACIÓN DE LA EDUCACIÓN CON LA ÉTICA Y LA MORAL ............... 4
3 CONSTRUCCIÓN DE LA MORALIDAD. .......................................................... 5
3.1 HECHO MORAL......................................................................................... 7
4 MORALIDAD DE LOS ACTOS HUMANOS ...................................................... 9
4.1 LA CONCIENCIA HUMANA. ...................................................................... 9
4.2 LA DIGNIDAD EN RELACIÓN CON LA CONCIENCIA MORAL. .............. 9
4.3 NORMAS DE LA CONCIENCIA. ................................................................ 9
4.4 JUICIOS DE LA CONCIENCIA MORAL................................................... 10
5 EJERCICIOS DE APLICACIÓN ...................................................................... 11
CONCLUSIONES.................................................................................................. 12
RECOMENDACIONES. ........................................................................................ 13
BIBLIOGRAFÍA. .................................................................................................... 14
INTRODUCCIÓN

En el presente documento se realiza un análisis de la moralización y la moralidad


del ser humano como individuo y como esta es parte del proceso educativo de él
mismo. De cómo está definido como un ser social, puesto que pertenece y se
desarrolla en una sociedad. Desde el punto de vista, antes de que se considere
como un ser consciente de sus actos, posea capacidades cognitivas, pues este
nace y es amoral puesto que no tiene normas específicas que lo rigen.

De cómo el individuo emprende el viaje hacia su desarrollo como persona,


pasando por los núcleos primarios de aprendizaje: la familia, la escuela, la religión,
la sociedad, desarrolla la capacidad de elegir y discernir sobre lo que es correcto
o incorrecto. El individuo va aprendiendo de sus diferentes experiencias en los
diferentes grupos sociales, culturales, políticos en los que él se maneja día con día
y, con esto aprende a valorizar y a superar los diferentes estados de adaptación
que tiene que llevar consigo para poder sobrevivir en la sociedad como tal.

La capacidad de poder adecuar su conducta o las costumbres a los valores


morales de sus núcleos de vida como la familia, la sociedad, la escuela, la religión
es lo que lo vuelven un ser moral, puesto que lleva su capacidad de poder llevar a
cabo una norma o valor mediante una conducta que él ha decido llevar a cabo.

Lo que sería la moralidad del individuo llevada a cabo mediante un echo especifico
decidido por la necesidad del deber ser y actuar como su conciencia lo dicta.

1
1 LA MORALIZACIÓN COMO PARTE DEL PROCESO EDUCATIVO.

1.1 MORALIZACIÓN

La antropología pedagógica, ha defendido que la moralización es el


protofenómeno humano, es decir, que sin él el hombre no podría llegar a ser tal,
no podría convertirse en persona. Es ahora el momento oportuno para evocar a M.
Kant, quien proclamó que la moralización no es una cuestión de «predicadores»,
sino de antropólogos. La socialización lleva implícita la moralización, porque es, en
buena medida, la integración de las costumbres y pautas familiares, sociales, etc.
En nuestra sociedad escasea Ia preocupación por Ia moralidad y la Ética; se Ia ha
privado de los fundamentos metafísicos y/o religiosos; se habla de una «Etica de
mínimos», creada por consenso; la posmodernidad rechaza los principios y
valores morales, aceptándoles, a lo sumo, de forma relativista. Los códigos
penales, los códigos civiles y las Constituciones no son capaces de fundamentar
Ia moralidad. Y, según Ia definición de socialización, los principios morales se
aprenden. No se nace moralmente bueno, ni perverso; se nace amoral.

2
2 CONCEPTO DE MORALIZACIÓN

Por moralización entiendo:

«Proceso, calificado de protofenómeno humano, en virtud del cual se aceptan los


deberes, las normas o las leyes reguladoras de la conducta: se asumen las
exigencias personales en la búsqueda del «yo ideal» soñado, y el individuo se
responsabiliza libremente del cumplimiento y de las consecuencias, que se
derivan de su realización u omisión» (Fermoso. 1994: 247).

3
2.1 RELACIÓN DE LA EDUCACIÓN CON LA ÉTICA Y LA MORAL

En todo proceso educativo se enmarca un comportamiento ético; dónde toda


educación es ética y toda educación es un acto político en el ejercicio formativo.

Si bien es cierta la educación tiene como objetivo fundamental preparar al joven


para el mundo de la vida, esto implica abordar dos dimensiones de acción o
comportamiento, el cual es a partir d uno mismo y de los demás.

La actividad educativa no solo es un acto de trasmisión o incorporación de


conocimientos y saberes, que van dentro del sentido contextual, es decir va mas
allá de su especificidad técnica o de utilidad práctica; sino que también deben
incorporarse el conocimiento en un sentido ético y moral unas veces normativo y
otras veces permisivos, donde se formen personas con conciencia moral
imperando siempre el respeto y de esta manera construir y ejercer su condición de
ser humano en el mundo.

Cabe destacar que en la autoformación, no hay recetas o certezas, es decir, no


hay una vía única para la formación del sujeto ético o moral tampoco garantiza un
logro como tal bien sea individual o colectivo, simplemente existe la creatividad
para afrontar incertidumbres o problemas que puedan acarrear y reconocer el
límite de nuestras posibilidades; en la educación de la formación ética y moral es
necesario sea vista desde diversas perspectivas o niveles, refiriéndose a lo
cognitivo, como el uso de la razón en el conocer y establecer orden de forma
universal con responsabilidad e involucrar la parte afectiva donde se presentan no
solo el autoestima sino también los sentimientos para actuar en determinadas
situaciones con flexibilidad.

4
3 CONSTRUCCIÓN DE LA MORALIDAD.

La moral se divide en dos planos: normativo y fáctico. El primero, se refiere a las


estructuras que originan un deber ser, es decir, a las leyes y normas que regulan el
comportamiento del ser humano. Hablando en términos estrictos, el término moral
designa los códigos de conducta que rigen la convivencia humana y el sistema de
leyes que determina el comportamiento de los hombres en sociedad. Sin embargo,
en un sentido más amplio, dicha palabra agrupa a ambos planos.

La moralidad se desenvuelve en el plano fáctico, por lo que se define como el


conjunto de actos concretos que siguen la norma establecida. Cuando el hombre
interpreta el deber ser y actúa conforme a éste, está ejerciendo la moralidad. De
ahí que la moralidad sea una tarea, un emblema social, y no el hallazgo o la
invención de un individuo para encontrar el sentido de la vida.

Para que la moralidad alcance su nivel máximo de desarrollo deben producirse


varios factores:

 Que se inculque a los miembros de la colectividad el uso de la razón.


 Que se enfatice la autonomía de sus integrantes para que puedan tomar
decisiones propias.

Al hacer este ejercicio de reflexión, se deben encontrar los fundamentos válidos de


la reglamentación imperante, o en todo caso, se debe luchar por cambiar los
preceptos racionalmente inválidos.

El clímax de la moralidad se halla en el conocimiento de los valores y en


postularlos como la norma orientadora de la conducta social o individual. Pero esto
no debe restringirse a un ámbito cultural o a una época determinada, ya que se
limitarían las opciones morales de los individuos. Para que una elección exista,
debe haber diversas opciones o distintos fines existenciales, es decir, diferentes
metas y proyectos que el ser humano se propone para que su vida valga y
adquiera un sentido.

Al ser educados con valores de una cultura dominante, ciertos individuos no se


percatan de la existencia de otras axiologías, sobre todo si se acomodan en la
configuración social imperante y poseen un estatus alto dentro de ella. Su
conducta se automatiza porque no tienen puntos de comparación y se dirigen
hacia una sola finalidad preestablecida. Debido al desconocimiento de otras
alternativas, no se percatan de que no eligieron, sino que fueron seleccionados
para representar una forma de ser estereotipada.

5
En su obra Ética, William Frankena analiza la existencia de un proceso evolutivo
de la moralidad:

 El individuo o la sociedad, o ambos, son guiados por la tradición.


 El individuo o la sociedad, o ambos, son guiados internamente.
 El individuo o la sociedad, o ambos, son guiados por otros.
 El individuo o la sociedad, o ambos, son autónomos.

En esta jerarquización, el individuo debe realizar, desde el segundo paso, una libre
elección por un convencimiento interno proveniente del razonamiento acerca de la
conducta a la que lleva la ejecución del valor. En el tercer paso es necesario
anular la posición unilateral y dogmática a la que conlleva la tradición. Se debe
considerar la finalidad del otro, y observar si es compatible con la propia,
buscando una elección más justa para todos los integrantes de la sociedad.

Por otro lado, alcanzar el cuarto aspecto entraña una dirección interior racional, en
donde constantemente enjuiciamos la validez de nuestras elecciones. Con esto se
logra la autonomía, que se define como "la capacidad del ser humano de regirse
por sus propios principios".3 El sujeto es capaz de actuar por sí mismo, de tomar
sus decisiones libremente. Está, hasta cierto punto, exento de coca-iones internas
o externas (tomando en cuenta que la capacidad de elección absoluta no es
posible). Tal postura puede llevar al individuo a efectuar una crítica bien
fundamentada de los valores y normas que rigen a su sociedad.

Cuando el hombre ha alcanzado el cuarto paso de la evolución moral, comprende


a lo humano como el fin superior e integral de la existencia. Habrá entendido los
sentidos existenciales que permiten la evolución de su especie, la humanidad: "La
moralidad es una institución social de la vida, peno tal. que fomenta en sus
miembros la auto guía o la autodeterminación racional".

No es fácil alcanzar el verdadero rango de la moralidad — en especial en nuestros


días —, debido a los peligros que esto implica. Y es que no todos están dispuestos
a realizar una autocrítica de los cánones, y menos aún a enfrentarse a una
sociedad ya estructurada moral y legalmente: se conocen las consecuencias que
puede traer el juicio crítico a los paradigmas.

En la actualidad, en algunos países considerados como prototipos culturales, se


muestra de forma clara la intolerancia a nuevas propuestas de civilización y
desarrollo. Las manifestaciones culturales distintas o novedosas son interpretadas
como una amenaza para el propio sistema. Este tipo de naciones imponen actos
de segregación racial, genocidios, boicots económicos, etcétera; sacrifican a
grupos humanos que muestran la alteridad, lo diferente, aquello que se manifiesta
de forma completamente opuesta a los "países del primer mundo".
6
Sin embarga a pesar de lo temible que es pertenecer a lo diferente, existen sujetos
que luchan por alcanzar el más alto grado de moralidad. Su finalidad es conseguir
la igualdad moral entre los hombres: aquello que permita la solidaridad humana,
que fomente la disminución de las diferencias o que las respete, para lograr una
mejor convivencia entre los hombres.

La violación a las normas y leyes es la causa de que cada quien intente estar por
encima de los demás. Con esto se rompe el equilibrio humano y se provoca el
caos moral en el que se sumergen las sociedades en épocas de crisis.

Las épocas críticas de la humanidad determinan su propio declive. Este patrón


podemos observarlo en nuestros días: nos encontramos con individuos que no
saben hacia dónde ir, que evaden infructuosamente sus angustias por medio de
relaciones con objetos (por ejemplo con computadoras) porque no saben
relacionarse humanamente, o que pretenden encontrar la solución a sus
inquietudes en boca de gurús o líderes, y no en su responsabilidad existencial.
Pocos logran hallar el sentido real de su existencia, trazarse un camino o un
proyecto y llevarlo a cabo. Pero menos ven en la realización de dicho proyecto la
forma de acercarse a una existencia singular y única.

Todo lo expuesto en este apartado nos invita a reflexionar en que la moralidad no


es imposible, aunque también en lo difícil que es poseerla. Es una tarea que debe
comenzar en nuestro interior, y luego continuar con una autonomía individual y
social que pugne por fomentar la práctica continua del equilibrio humano.

3.1 HECHO MORAL.

Un hecho moral es un acto efectuado por el hombre, cuando éste es consciente


de la responsabilidad que contrae al realizarlo y de la valoración de esa acción.
Cuando un comportamiento puede ser calificado de bueno o malo nos hallamos
frente a un hecho moral. Como ejemplo de caso tenemos el maltrato de niños: si
un padre golpea a sus hijos, o una madre desatiende y abusa psicológicamente de
sus hijos, podemos clasificar estos artos como hechos morales. Los padres tienen
una responsabilidad sobre sus hijos y es por ello que calificamos como malo al
maltrato infantil.

Hablar del hecho moral es hacerlo de la necesidad que tiene el hombre de actuar.
El hombre pretende convertir en realidad sus pensamientos, sus anhelos, sus
deseos. Vivir humanamente nos conduce a querer construir un mundo en el
quesea posible habitar, ir en búsqueda de la felicidad y en ese trance darnos
cuenta de que la felicidad no se encuentra al final sino en el propio camino. El

7
hombre existe en la medida en que actúa, en que es capaz de ejercer un efecto
modificador en su entorno.

El hombre está dotado de capacidades para explotar los recursos materiales


existentes y lograr vencer los obstáculos a los que se enfrenta: por ello, es capaz
de hacer al pensamiento y al acto correspondientes, de conseguir la congruencia
entre lo que dice y lo que hace. Esto da como resultado que sea un agente social
apto para actuar moral o inmoralmente.

8
4 MORALIDAD DE LOS ACTOS HUMANOS

Los actos humanos, es decir, libremente realizados tras un juicio de conciencia,


son calificables moralmente: son buenos o malos (Catecismo, 1749).

El obrar es moralmente bueno cuando las elecciones de la libertad están


conformes con el verdadero bien del hombre y expresan así la ordenación
voluntaria de la persona hacia su fin último, es decir, Dios mismo.

La moralidad de los actos humanos depende:

 Del objeto elegido;


 Del fin que se busca o la intención;
 De las circunstancias de la acción.

El objeto, la intención y las circunstancias son las “fuentes” o elementos


constitutivos de la moralidad de los actos humanos.

4.1 LA CONCIENCIA HUMANA.

La conciencia moral, presente en lo íntimo de la persona, es un juicio de la razón,


que en el momento oportuno, impulsa al hombre a hacer el bien y a evitar el mal.
Gracias a ella, la persona humana percibe la cualidad moral de un acto a realizar o
ya realizado, permitiéndole asumir la responsabilidad del mismo. Cuando escucha
la conciencia moral, el hombre prudente puede sentir la voz de Dios que le habla.

4.2 LA DIGNIDAD EN RELACIÓN CON LA CONCIENCIA MORAL.

La dignidad de la persona humana supone la rectitud de la conciencia moral, es


decir que ésta se halle de acuerdo con lo que es justo y bueno según la razón y la
ley de Dios. A causa de la misma dignidad personal, el hombre no debe ser
forzado a obrar contra su conciencia, ni se le debe impedir obrar de acuerdo con
ella, sobre todo en el campo religioso, dentro de los límites del bien común.

4.3 NORMAS DE LA CONCIENCIA.

Tres son las normas más generales que debe seguir siempre la conciencia:

1. Nunca está permitido hacer el mal para obtener un bien.

9
2. La llamada Regla de oro: «Todo cuanto queráis que os hagan los hombres,
hacédselo también vosotros a ellos».

3. La caridad supone siempre el respeto del prójimo y de su conciencia,


aunque esto no significa aceptar como bueno lo que objetivamente es
malo..

4.4 JUICIOS DE LA CONCIENCIA MORAL.

La persona debe obedecer siempre al juicio cierto de la propia conciencia, la cual,


sin embargo, puede también emitir juicios erróneos, por causas no siempre
exentas de culpabilidad personal. Con todo, no es imputable a la persona el mal
cometido por ignorancia involuntaria, aunque siga siendo objetivamente un mal. Es
necesario, por tanto, esforzarse para corregir la conciencia moral de sus errores.
(Catecismo de la Iglesia Católica #1790-1794-1801-1802)

10
5 EJERCICIOS DE APLICACIÓN

Reflexiona y haz un estudio de caso sobre la siguiente situación:

Si yo fuere un preso al que llevan a un campo de concentración [...] y si


casualmente tuviese aún un reloj de oro oculto en el cuerpo y mi guardián fuese
un italiano entonces yo intentaría acercarme a él y decirle por lo bajito: "Oye, tengo
en mi casa siete niños menores de edad todos pequeñísimos, y tengo una mujer
que no puede vivir sin mí y una anciana madre que no para de llorar. Y aquí tengo
un reloj de oro, te lo doy si miras para otro lado y dejas que me escabulla". El
italiano, con bastante probabilidad, se enjugaba con una lagrimita, tomará por
supuesto el reloj y me dejaría escapar

Identifica los distintos niveles de moral: ¿Cuál es la moral del prisionero? ¿Cuál la
del guardia? ¿Es correcto lo que hace? Ahora reflexiona acerca de su moralidad
¿Cuál es la moralidad del prisionero y la del guardia? ¿Son iguales moral y
moralidad? ¿En que difieren?

Ya que respondiste las preguntas, completa el siguiente cuadro:

Prisionero Guardia

MORAL (normas, reglas que debe seguir,


bueno y malo

MORALIDAD (acciones de los individuos)

¿Hay una correspondencia entre moral y


moralidad?

¿Es una decisión autónoma? ¿O el


individuo es guiado por otros?

11
CONCLUSIONES.

El ser humano no deja de aprender en todos el transcurso de la vida, pero no es


una persona moral si no es capaz de decidir por sí mismo y de llevar a cabo por
su propia convicción una acción que su conciencia le dicte.

El individuo adecua su conducta o sus costumbres a los valores morales


establecidos.

Un ser humano, preocupado por lo moral estará en mejores condiciones para


prepararse para la toma de decisiones que constantemente se requiere en la
sociedad.

12
RECOMENDACIONES.

13
BIBLIOGRAFÍA.

TEXTO UTILIZADO EN CLASE.

Gento Palacios, Samuel; Fermoso Estebanez, Paciano; La Sociedad en Relación


Con El Tratamiento Educativo de la Diversidad: Apertura de la Familia Y de la
Sociedad.

CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA.

ÉTICA, UNA VISIÓN GLOBAL DE LA CONDUCTA HUMANA. Ojeda, María;


Arizmendi, Paula; Rivero, Enrique. Edit. Pearson Educación de México. Primera
Edic. 2007.

INTERNET:

WIKIPEDIA

DICCIONARIO DE LA RAE

14

You might also like