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UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL

UNIDAD AJUSCO

SECRETARÍA ACADÉMICA

DIRECCIÓN DE DOCENCIA

LICENCIATURA EN PEDAGOGÍA

TESINA

LA IMPORTANCIA DE LA INTERVENCIÓN DEL ORIENTADOR EDUCATIVO


EN LA FORMACIÓN DEL AUTOCONCEPTO DEL ADOLESCENTE:
EN EL NIVEL SECUNDARIA.

QUE PARA LA OBTENCIÓN DEL TÍTULO DE LICENCIADA EN PEDAGOGÍA.


PRESENTA.

SANDRA JAQUELINE. GILBAJA ARTEAGA

ASESOR: MTRO. J. AGUSTÍN MENDOZA DE GYVES.

ENERO, 2005
ÍNDICE

INTRODUCCIÓN 1

CAPITULO I ORIENTACIÓN EDUCATIVA 4

1.1 Antecedentes de la Orientación Educativa 5


1.2 Conceptos de Orientación Educativa 10
1.3 Funciones del Orientador Educativo en Educación Secundaria 16
1.4 Áreas de la Orientación Educativa 20
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 26

CAPITULO II TEORÍAS DEL AUTOCONCEPTO 28

2.1 Diferentes aproximaciones al Estudio del Autoconcepto 29


2.2 Perspectiva de Carl Rogers 39
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 46

CAPITULO III AUTOCONCEPTO Y DESARROLLO DEL ADOLESCENTE 48

3.1 Caracterización del Adolescente 49


3.2 El adolescente y la formación de su Autoconcepto 53
3.3 Implicaciones del Autoconcepto 57
3.3.1 Familiar 58
3.3.2 Escolar 60
3.3.3 Social 62
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 63

CAPITULO IV PROPUESTA DE SEMINARIO TALLER DIRIGIDO A ORIENTADORES


EDUCATIVOS DE ESCUELAS SECUNDARIAS 64

CONCLUSIONES 96

BIBLIOGRAFÍA GENERAL 100


INTRODUCCIÓN
2

INTRODUCCIÓN

El presente trabajo aborda ala adolescencia tomando como punto principal al


autoconcepto del adolescente, relacionándolo con la Orientación Educativa dentro de la
Escuela Secundaria; es decir cómo un Orientador Educativo puede realizar su labor en
torno al autoconcepto de los adolescentes que se encuentran en ese nivel educativo.

La Orientación Educativa es una disciplina que ayuda al desarrollo integral del


alumno, y el autoconcepto forma parte del desarrollo del adolescente, es por esto que el
Orientador Educativo dentro de la Escuela Secundaria debe apoyar al joven en la
formación de su autoconcepto, para que éste pueda desarrollarse mejor y
favorablemente dentro de la escuela, familia y sociedad en la que se encuentra.

Se debe tomar en cuenta que el autoconcepto es importante para el desarrollo del


adolescente y que se puede definir como: la parte integradora de la personalidad de
cada individuo, esto se refiere a la percepción que tiene el sujeto de sí mismo en su
totalidad, es decir la opinión particular de la persona misma, abarcando la identidad, las
instancias psíquicas y físicas y la autoestima del adolescente. Sin dejar de lado las
percepciones que los otros, familia, sociedad o escuela atribuyen al joven, ya que estas
pueden mejorar o empeorar el concepto que el adolescente puede tener sobre sí mismo

El joven para lograr un autoconcepto aceptable debe tener claras las respuestas a
las siguientes preguntas: ¿quién soy?, y ¿hacia donde voy?, para que tenga un
desarrollo más estable en su vida, que le permita equivocarse menos en las decisiones
que debe tomar en el transcurso de su vida, ya sean personales, académicas o
vocacionales.

Es lamentable mencionar que en la escuela secundaria, los Orientadores


Educativos han tomado más en cuenta aspectos académicos y administrativos, dejando
de lado los aspectos personales y emocionales de los adolescentes, es por esto que se
presenta un seminario-taller incluido en este trabajo con el que se pretende involucrar
más al Orientador Educativo en los aspectos socio-personales del adolescente.
3

En el transcurso de esta tesina se desarrollan cuatro capítulos, el Capítulo I aborda


lo relacionado con la Orientación Educativa, sus antecedentes, los conceptos que se
han realizado en cuanto a este tema, las funciones que un Orientador Educativo realiza
dentro de su labor, y que se encuentran establecidas en diversos documentos;
finalmente se mencionan las áreas donde puede intervenir el Orientador Educativo.

Posteriormente en el Capítulo II se describen las diferentes aproximaciones


teóricas que se han desarrollado sobre el autoconcepto, se incluye un apartado donde
se describe la perspectiva de Carl Rogers, ya que este trabajo se inclina hacia la
corriente humanista.

El Capítulo III aborda el autoconcepto dentro del desarrollo del adolescente, es


decir, cómo un joven puede desarrollar su concepto de sí mismo, y qué instancias
sociales pueden ayudar a establecerlo o impedir que se desarrolle eficazmente.

Para finalizar, en el Capítulo IV se presenta un seminario-taller elaborado para los


Orientadores Educativos con el fin de que sirva para tener una visión amplia sobre el
autoconcepto, así como diferentes estrategias o técnicas que pueden servir al
Orientador para ayudar a sus alumnos a conformar un concepto de sí mismo
satisfactorio.

En la escuela secundaria es donde se encuentran los chicos en plena


adolescencia, y es este período donde existen más conflictos personales, que en
muchas ocasiones tienen que ver con un autoconcepto mal planteado o nulo; se busca
que con este trabajo los orientadores puedan obtener un mayor conocimiento en cuanto
a esto y poder así apoyar al adolescente en la conformación de un concepto de sí
mismo.
Es por esta razón que el Orientador Educativo debe estar atento a estos cambios o
conflictos para apoyarlo en la conformación de un autoconcepto que le permita
desenvolverse en sus diferententes actividades.
CAPITULO I

ORIENTACIÓN EDUCATIVA
5

CAPITULO I

ORIENTACIÓN EDUCATIVA

A lo largo de éste capítulo se describe la evolución que presenta la orientación


educativa, tomando en cuenta que ésta en sí se viene dando desde los orígenes de la
humanidad, como lo menciona Rafael Bisquerra (1996) ya que desde entonces se dan
situaciones en las que algunos individuos ayudan a otros en momentos de necesidad.
Ya en el siglo XX con el paso de la historia, se da algo más concreto en cuanto al
campo que nos ocupa, denotando que la finalidad de este es “ayudar a vivir con mayor
plenitud y de manera más fructífera”. (Bisquerra, R. 1996)

1.1 ANTECEDENTES DE LA ORIENTACIÓN EDUCATIVA

María Luisa Rodríguez (1991) sostiene que Frank Parsons, en l908 es quien
introduce el concepto de Orientación, le da en ese momento un matiz de Orientación
Vocacional. Centrado en una labor humanitaria, pretende ayudar a la población obrera,
victima del caos organizativo. Este proceso orientador está fundamentado en comparar
y contrastar las características de la persona que aspira a una profesión con diversos
requisitos y demandas.

Kelley también usa el concepto de orientación como la ayuda que se les da a los
estudiantes para la elección de su carrera.

Posteriormente algunos otros autores afirman que la orientación esta muy


relacionada con la educación, (como MEULY Ruiz, René. 2000) y en ocasiones llegan a
decir que estos dos términos no tienen ninguna distinción, ya que tienen la misma
misión “guiar al niño en su proceso vital...” No obstante, al ver a la Orientación
semejante a la educación se podría estar limitando mucho el término Educación y
ampliando excesivamente el de Orientación así se debe tomar en cuenta a la
6

Orientación como una intervención educativa continúa de ayuda al alumno que tiene
que estar presente desde la educación básica hasta etapas avanzadas de nivel
superior, siempre apoyado por la influencia de los padres, la familia y la escuela.

Entre los años 1923 y 1935 se tiene en vigencia el departamento de


psicopedagogía e higiene escolar autorizado por la SEP y brinda apoyo fuera de las
escuelas secundarias el cual pretende los siguientes objetivos:

Ø Conocer el desarrollo mental, físico y pedagógico del niño mexicano.


Ø Explorar el estado de salud de maestros y alumnos.
Ø Valorar las aptitudes físicas y mentales de los alumnos para valorarlos y
orientarlos en el oficio o profesión más adecuada para ellos.
Ø Diagnosticar a los niños anormales.
Ø Estudiar estadísticamente las actividades educacionales en todo el país.

Este departamento se funda a partir del decreto del 29 de Agosto de 1925, donde
el presidente Plutarco Elías Calles autoriza a la SEP, la creación de escuelas
secundarias.

“Cuando se establece la Orientación Educativa, México vivía un período de


prosperidad y paz social, caracterizado por un proceso de industrialización; bajo
estas condiciones surge la Orientación Educativa como respuesta a las
necesidades de detección y canalización de los alumnos hacia el trabajo y de
ubicación a su medio familiar, escolar y social. A ello se debe que la Orientación
Educativa se haya prestado sólo como un servicio de ayuda a los estudiantes
para adaptarlos al medio social.” (NAVA Ortiz, José; 1993:7)

Específicamente en México la Orientación Educativa, se comienza a manifestar a


partir de programas concretos desde el año 1952 cuando Luis Herrera y Montes y sus
colaboradores presentaron un proyecto para realizar un proceso de experimentación de
éste servicio en las escuelas secundarias, ya aprobado se le llamó a la Orientación,
Educativa y Vocacional, la cuál pretende ayudar a los jóvenes en sus problemas
escolares, familiares y vocacionales.
7

Así en 1952-1953 se realizan los diferentes materiales psicotécnicos


experimentándose diferentes técnicas y procedimientos propios de la Orientación
Educativa y Vocacional; se elaboran pruebas colectivas e individuales, con fines de
diagnóstico y pronóstico personal.

La Orientación se introduce a las escuelas secundarias generales del Distrito


Federal, en 1954, por el proyecto del profesor Luis Herrera y Montes, que fue aprobado
por la SEP, y se experimenta durante dos años en las escuelas secundarias. Este autor,
le da a la Orientación los términos de Educativa y Vocacional, y la organiza como un
servicio de asesoría y ayuda para los alumnos en sus problemas escolares, familiares y
vocacionales.

Con lo anterior se crea también la primera oficina de Orientación Educativa y


Vocacional, que es atendida por un equipo técnico encabezado por el profesor Luis
Herrera y Montes, teniendo las siguientes secciones:

Ø Información Vocacional.
Ø Exámenes Psicotécnicos.
Ø De entrevista y asesoramiento.

Este departamento fue dirigido por el profesor Herrera hasta 1966 (año en que se
jubila).

En 1960 en el plan de estudios de la segunda enseñanza, se introduce una hora a


la semana la Orientación Vocacional para niños de tercer grado.

El Servicio Nacional de Orientación Vocacional (SNOV) se crea en 1966 con la


finalidad de auxiliar al estudiante en su elección de carrera, en éste lugar se elabora y
divulga el material necesario para su fin, pero éste servicio solo dura aproximadamente
cuatro años, sin embargo, se deja el modelo de Orientación para que los profesionales
interesados en éste tema puedan rescatar los principios de la Orientación Educativa y
continuar en el tema. (MEULY, Ruiz René; 2000)
8

Planteándose la necesidad de vigorizar la acción orientadora, en el ciclo escolar


1972-1973, se designa una comisión técnica para estudiar el estado del servicio de la
Orientación Educativa, y presentar así mismo un proyecto de trabajo que pudiera
ponerse en marcha. Ante esto se realiza una investigación para conocer las
posibilidades y posteriormente lograr cambios significativos.

“Posteriormente a ésta investigación se organiza el primer programa de


actualización para directores y maestros de escuelas secundarias del Distrito
Federal. Elaboran también un proyecto para reestructurar el servicio de
Orientación, donde se propuso una sección de asesoramiento, con las siguientes
finalidades: Integrar el equipo educativo en cada escuela. Profesionalizar la
acción de los educadores. Este proyecto se implantó de 1974 a 1978”. (MEULY
Ruiz, René; 2000:34)

Aunque en el ciclo escolar 1975-1976, se implanta un plan de estudios organizado


por áreas de aprendizaje y por asignaturas o materias, es aquí donde se suprime la
hora semanal obligatoria de Orientación para tercer grado que se tiene desde 1960.

Así las sesiones grupales se realizaron en horarios rotativos o en ausencia de


profesores de otras materias, es decir, la orientación se trabaja en la ausencia de algún
profesor ya que no está incluida en la curricula oficial.

Puede decirse que desde la creación del servicio de orientación en las escuelas
secundarias, se han utilizado programas diversos, sin embargo el que surge de la
Reforma del 74, se aplica en el ciclo escolar de l978 – 1979, sufriendo modificaciones
en 1982 y vigente hasta 1992.

En la Reforma Educativa para la Educación Básica (1993), dentro del Programa


para la Modernización Educativa hay dos productos para la Orientación Educativa:

Ø La Guía Programática de Orientación Educativa.


Ø El programa de Orientación Educativa para Tercer Grado de Educación
Secundaria (1994-1995).
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Ésta guía sirve para que cada secundaria elabore su propio programa de acuerdo
a las necesidades que tiene, tomando como base ésta guía. Además para que quede
cubierto el campo del servicio de Orientación se consideran tres áreas: la pedagógica,
la afectivo-social y la vocacional.

El programa de Orientación Educativa para Tercer Grado de Secundaria permite


que el Orientador localice casos y asuntos, como problemas personales (familiares, de
personalidad, etc), académicos (deserción escolar, reprobación, etc.) y vocacionales
(elección de carrera y/o bachillerato), en los que su intervención puede ser positiva y
oportuna. Así durante el ciclo escolar 1994-1995 se hace obligatoria la asignatura de
Orientación Educativa en el nivel secundaria, con tres horas a la semana a los grupos
de tercer grado.

Con todo lo anterior podemos observar cómo la Orientación Educativa es de suma


importancia, considerada como un medio de ayuda para resolver problemas educativos,
laborales y personales, para el beneficio del estudiante.

Durante el ciclo escolar 2000-2001 se pone en marcha el programa de Formación


Cívica y Ética, sustituyendo a la asignatura de Orientación Educativa en Tercer Grado
siendo ahora más completo para los jóvenes en relación a su entorno social, escolar y
familiar, ya que tiene temas desde democracia, responsabilidad y toma de decisiones,
etc; lo cual puede hacerlo más rico al centrar al adolescente en su sociedad y en su
individualidad, es decir, se resalta tanto la función socializadora como la función de
desarrollo de la persona o de la individualización, notándose que el propósito central es
de adaptación a la sociedad a la que pertenece. (DIAZ Barriga, Frida; 2001)

Actualmente este programa sigue vigente en las escuelas secundarias, donde el


Orientador Educativo y/o el profesor de Educación Cívica, son quienes imparten la
materia.

Este programa se piensa que es más integrador y completo que otros que se
habían puesto en marcha, ya que no solo habla de un solo aspecto del individuo, sino
10

que integra la personalidad, la socialización y la individualización del joven, lo cual es


más rico para poder orientarlo, y apoyar al joven para que pueda responsabilizarse de
su propia vida y así lograr una autonomía y un concepto propio que le permita ser él
mismo dentro de su sociedad.

Aspectos que no pueden dejarse de lado son la democracia, la toma de decisiones


y la responsabilidad en la escuela, ya que con esto se pude hacer más conciente al
individuo sobre su propia vida y la importancia que tienen cada uno de estos aspectos
para una vida más plena.

1.2 CONCEPTOS DE ORIENTACIÓN EDUCATIVA

Para comenzar con el concepto de Orientación, es importante saber qué definición


nos brinda el diccionario y posteriormente entrar en materia de Orientación (en el
ámbito educativo).

Orientación es la acción y el efecto de orientar u orientarse. Orientar significa


informar a una persona de lo que ignora o desea saber, del estado de un asunto para
que sepa manejarse en él. Además es dirigir, o encaminar una cosa hacia un fin
determinado. (DICCIONARIO DE LA LENGUA ESPAÑOLA)

Al tratar de realizar una revisión en la literatura en cuanto al concepto de


Orientación, se pueden encontrar infinidad de definiciones a lo largo de la producción
literaria especializada. Por este motivo se toman en cuenta solo algunas de las
definiciones más relevantes, que han hecho autores interesados en la Orientación, y
que han trascendido por el enfoque que le han dado a su definición.

Carl Rogers, que es uno de los autores que influyen en algún momento, en la
orientación en México, (NAVA Ortiz, José; 1993) desde el enfoque no directivo,
humanista y fenomenológico, enfatiza la confianza que el individuo debe tener para
llegar a auto orientarse, es decir debe expresar por si mismo sus sentimientos y
emociones, con el apoyo de el Orientador siempre y cuando el orientador establezca
11

las condiciones de respeto y estímulo necesarias para que haga aflorar en el individuo
sus capacidades innatas o aprendidas.

“Luis Herrera y Montes menciona que se ha definido a la Orientación


Educativa y Vocacional como la fase del proceso educativo que tiene por objeto
ayudar a cada individuo a desenvolverse, a través de la realización de
actividades y experiencias que le permitan resolver sus problemas, al mismo
tiempo que adquiere un mejor conocimiento de si mismo”. (NAVA Ortiz, José;
1993:40)

Aquí también se puede ver la importancia que tiene dentro de la Orientación


Educativa el conocimiento de sí mismo, no es algo que se deje de lado sino se toma en
cuenta, sobre todo dentro del proceso educativo, para que dentro de éste pueda saber
el individuo quien es él mismo a través de la confianza que puedan inspirarle sus
profesores y compañeros. Tomando en cuenta que la Orientación Educativa es la
idónea para desarrollar un mejor conocimiento de sí mismo, el orientador educativo es
quien debe estar preocupado por el desarrollo de los jóvenes en secundaria.

“Rodolfo Bohoslavsky entiende por Orientación Vocacional, las tareas que


realizan los psicólogos especializados cuyos destinatarios son las personas que
enfrentan en determinado momento de su vida (por lo general el pasaje de un
ciclo educativo a otro) la posibilidad de ejecutar decisiones. Esto hace de la
elección un momento crítico de cambio en la vida de los individuos. De cómo las
personas enfrenten y elaboren ese cambio dependerá el desarrollo ulterior,
ubicable en algún punto del continuum que va de la salud a la enfermedad (como
quiera que ellas sean concebidas). (BOHOSLAVSKY, Rodolfo; 1984:14)

Aunque Bohoslavsky habla de Orientación Vocacional, no solo se refiere a la


identidad profesional sino también a las decisiones a las que pueda enfrentarse un
individuo, que puedan causarle problemas en algún momento de su vida, aquí el
orientador o psicólogo especialista puede colaborar junto con la persona para lograr
desarrollar una posible solución a los problemas que enfrenta. Algo que podemos
resaltar en la definición que Bohoslavsky proporciona es que la Orientación es una
colaboración no directiva que se tiene con el joven con lo que se le puede brindar una
identidad propia, ya que se está dejando al individuo solo con algunas sugerencias para
que pueda tomar lo que a él pueda servirle durante el proceso de orientación, es decir,
es libre para resolver sus conflictos de la mejor manera.
12

“María Victoria Gordillo considera que la Orientación es la concreción


individualizada del proceso educativo. Diciendo posteriormente que la
orientación es una intervención educativa, ésta intervención consiste en
conceptos, contenidos informativos, presupuestos, valores y prescripciones que
son una guía en la actividad práctica de una estrategia de ayuda. La estrategia
de ayuda es producto de dos diferentes tipos de teoría: una teoría de la conducta
o de la personalidad y una teoría de la intervención”. (MEULY Ruíz, René;
2000:49)

Esta autora también toma a la Orientación como un proceso educativo, de ayuda


que puede apoyar a los jóvenes de forma individual a sobreponerse a las dificultades
que puedan presentarse durante su vida. Es importante mencionar que aquí se toma a
la orientación como una intervención y ayuda para cualquier individuo y sobre todo que
esta se pude brindar en el sistema educativo, ya que es considerada como intervención
educativa, es decir, le pertenece a cualquier tipo de educación brindarla de la mejor
manera.

Para María Luisa Rodríguez (1991), Orientar es fundamentalmente guiar, conducir,


indicar de manera procesual para ayudar a las personas a sí mismas y al mundo que
los rodea; es auxiliar a un individuo a clarificar la esencia de su vida, a comprender que
él es una unidad con significado capaz de y con derecho a usar de su libertad, de su
dignidad personal, dentro de un clima de igualdad de oportunidades y actuando en
calidad de ciudadano responsable tanto en su actividad laboral como en su tiempo libre.

Tomando en cuenta que la Orientación para Rodríguez es conducir, dirigir, y


gobernar, se puede decir que el tipo de orientación que ella describe es muy directiva
para las personas que la solicitan, con esto puede llegar a confundirse al orientador con
una persona que arregla la vida, de cualquiera, siendo que el orientador solo ayuda o
apoya a los individuos en circunstancias problemáticas.

A partir del concepto de Orientación, se desprende el de Orientación Educativa; es


decir la Orientación es un proceso paralelo al mismo proceso educativo. Forns y
Rodríguez sostienen que la Orientación Educativa comienza en el mismo momento en
que el sujeto se incorpora a las tareas escolares, y su primordial misión será la de
adelantarse a los problemas (misión preventiva) estudiar al educando, sus
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posibilidades, la adecuación de las exigencias y contenidos escolares a su capacidad


operatoria.

María Luisa Rodríguez (1991) concibe a la Orientación Educativa como un proceso


educativo o formativo siendo que contribuye a que cada alumno consiga estrategias
aplicables al conocimiento de sí mismo, para utilizar sus recursos materiales, diseñar
proyectos y llevarlos a término para resolver problemas de su propio desarrollo.

José Nava (1993), propone que la Orientación puede ser considerada Educativa,
porque integra procesos formativos, así es la disciplina que estudia y promueve durante
toda la vida, las capacidades pedagógicas, psicológicas y socioeconómicas del ser
humano, con el propósito de vincular armónicamente su desarrollo personal con el
desarrollo socioeconómico del país.

Las definiciones anteriores tienen mucho en común, ya que pretenden ayudar o


guiar al individuo cuando se encuentra en problemas en determinado momento de su
vida, así como la notable importancia que le dan al desarrollo de su personalidad,
principalmente al desarrollo del autoconcepto o sí mismo.

También se puede ver una notable importancia para con la Orientación


individualizada, es que ayuda al individuo a conocerse a sí mismo y aceptarse para
integrarse así a la sociedad en la que vive.

La Orientación Educativa surge entre un conjunto de disciplinas de orden social


(psicología, sociología, pedagogía, antropología, educación) ya que sus conceptos y
teorías se han derivado de los aportes de éstas disciplinas.

Así la orientación educativa debe complementarse con las disciplinas arriba


mencionadas para ser parte integradora del individuo, es decir, debe conocer bien al
hombre, su socialización, su cultura, su aparato psíquico para saber qué tipo de
personalidad tiene, como es la mejor forma de ayudar a formar su autoconcepto, la
educación a la que debe acceder y las técnicas de aprendizaje que pueden ser las más
14

aptas para este individuo.

Es importante hacer énfasis en que la Orientación se encuentra dentro del proceso


educativo, así se debe ir brindando a los alumnos en la escuelas, donde el Orientador
tiene que comprometerse a despertar y transformar las capacidades del alumno, tanto
cognitivas, emocionales y sociales para que pueda llegar a desarrollar una vida plena
que le permita vivir dentro de su sociedad.

Además de que la Orientación es educativa, debe ser un proceso continuo que


acompañe al individuo durante toda su vida, ya que como menciona Nava (1993): “el
hombre requiere auto-orientarse en todos los lugares y momentos, sobre todo cuando
trata de poner en práctica sus capacidades personales”.

Se debe pensar que éste proceso puede ir dándose durante la educación que
tenga el individuo, comenzando en la primaria culminando en el nivel superior, y si es
posible más allá de este, así podremos decir que es probable que el individuo pueda
llegar a auto-orientarse e integrarse mejor a la sociedad en la que vive.

Tomando en cuenta que la Educación prepara al individuo para la vida y pretende


desarrollar al máximo su personalidad, puede decirse que la Orientación se considera
Educativa, ya que aspira a “educar” a la personalidad del individuo preparándolo para la
vida, y promoviendo por medio de ésta su desarrollo personal y su autorrealización,
para que pueda adquirir un conocimiento mejor de sí mismo; es importante tomar en
cuenta esto, ya que el conocimiento de sí mismo o autoconcepto es el tema de este
trabajo, y es aquí donde podemos encontrar, cómo la Orientación Educativa lo que
busca es apoyar al individuo en su desarrollo personal y en su autorrealización para su
vida futura.

Cabe mencionar que dentro de la Orientación Educativa es importante ayudar a


los estudiantes a descubrir o desarrollar sus propias capacidades personales para que
puedan ellos solos enfrentarse y resolver en su vida presente o futura problemas
personales o sociales a los que puedan enfrentarse.
15

“J. Brever expone que orientar no es adaptar, conducir, condicionar,


controlar…, sino ofrecer a los alumnos la ayuda necesaria para que comprendan,
organicen, amplíen y desarrollen sus características individuales y cooperativas,
en definitiva, se concibe el proceso indisolublemente unido al proceso educativo
y de desarrollo humano”.(MARTINEZ Clares, Pilar; 1992: 186)

Con esta cita podemos llegar a confirmar que Orientar no es guiar, ayudar ni
mucho menos llevar de la mano a los jóvenes, es más bien desarrollar en ellos las
características que puedan llevarlos a un desarrollo humano satisfactorio para ellos.

Con todo lo anterior se puede decir que la Orientación Educativa es una actividad
esencial del proceso educativo, además de ser un proceso de ayuda que pretende
acompañar o guiar al individuo en los problemas a los que se enfrenta durante su vida.
Es importante lograr que los individuos lleguen a una auto-orientación por medio de la
comprensión de sus aptitudes, intereses y necesidades personales para que puedan
desarrollarse lo mejor posible en la sociedad en la que viven. Con esto también se
pretende que el joven pueda conocerse a sí mismo, logrando conformar un
autoconcepto de acuerdo a sus propias necesidades e intereses. El que la orientación
sea continua y permanente durante la vida escolar del individuo lo podrá ayudar mejor a
formar un autoconcepto real, es decir más próximo a la realidad en la que vive.

Así podemos identificar un modelo de orientación para el desarrollo, que se


atribuye a Mathewson, en el cual se pretende fomentar el desarrollo de la persona en
cuanto a lo emocional-afectivo personal y social.

Esta orientación se enfoca en cuatro áreas fundamentales:

1. Necesidad de autoorientarse y evaluarse.


2. Necesidad de ajustar el yo a las demandas actuales.
3. Necesidad de ser orientado en el presente y hacia el futuro.
4. Necesidad de desarrollar las potencialidades personales. (MARTINEZ, Clares
Pilar; 1992)
Este tipo de orientación que pretende desarrollar las potencialidades del individuo,
es más deseable para cualquier persona, ya que no pretende solucionar la vida del
16

joven, sino va provocando que se desarrollen ciertas áreas para llegar a una
autoorientación y sobre toda a un concepto de sí mismo adaptado a la sociedad en la
que vive el individuo, que es de lo que se trata este trabajo, la formación del
autoconcepto.

Con las concepciones revisadas anteriormente, se puede llegar a una concepción


de orientación educativa como una disciplina que promueve el desarrollo de las
diversas capacidades que el ser humano tiene innatas o aprendidas, para lograr un
desarrollo personal satisfactorio, el cual pueda ayudar a conducirse de la mejor manera
durante su vida personal, académica y social.

1.3 FUNCIONES DEL ORIENTADOR EDUCATIVO EN EDUCACIÓN


SECUNDARIA

La actividad orientadora es un proceso global e integrador que abarca los


elementos del quehacer educativo, este se desarrolla en torno a la persona o joven que
se encuentra en algún nivel educativo, en este trabajo tomamos encuenta el nivel
secundaria que es en el que se encuentra el adolescente.

Para desarrollar esta actividad orientadora, se han establecido y propuesto en


diferentes documentos las funciones que ayudan al orientador para dirigirse a los
aspectos que más puede necesitar el adolescente, por esto, en el presente apartado se
describen algunas de las funciones que desempeña el Orientador Educativo en
secundaria.

Se puede proponer así que las funciones del orientador educativo se deben
realizar conjuntamente con los maestros de las escuelas para que está pueda estar
relacionada con la educación y además para llevar una secuencia de los alumnos,
cuáles son sus dificultades o problemas para así poder intervenir de la mejor manera.
17

Todas las actividades del Orientador Educativo en el nivel medio (secundaria)


pueden presentar dificultades. Por estar dirigidas a los adolescentes quienes atraviesan
por diversos cambios tanto físicos como emocionales, es por esto que la función
primordial del orientador es de guía y ayuda, en el proceso de formación de los
adolescentes.

María Luisa Rodríguez (1991) menciona que uno de los objetivos de la función del
orientador educativo es: ayudar al alumno para que consiga elevados niveles de
satisfacción y eficacia en todas aquellas actividades a las que se comprometen, tanto
escolares como extraescolares para alcanzar satisfacción individual y bienestar social.

También presenta las siguientes funciones básicas de la Orientación Educativa


ligadas al orientador:

1. Función de ayuda para que el orientado consiga su adaptación en


cualquier momento o etapa de su vida y en cualquier contexto, prevenir
desajustes y adoptar medidas correctivas en su caso.
2. Función educativa y evolutiva para reforzar en los orientados todas
las técnicas de resolución de problemas y adquisición de confianza en las
propias fuerzas y debilidades. Es una función que integrará esfuerzos de
profesor, padres, orientadores y administradores por la combinación de
estrategias y procedimientos que implica.
3. Función asesora y diagnosticadora, por la que se intenta recoger
todo tipo de datos de la personalidad del orientado, como opera y estructura,
cómo integra los conocimientos y actitudes y como desarrolla sus posibilidades.
4. Función informativa sobre la situación personal y del entorno, sobre
aquellas posibilidades que la sociedad ofrece al educando -programas
educativos, instituciones a su servicio, carreras y profesiones que debe conocer,
fuerzas personales y sociales que pueden influirle, etc-, y que también debe
hacerse extensible tanto a la familia del orientado como a sus profesores.
(RODRÍGUEZ, Ma. Luisa; 1991:16-17)

La función del orientador en la etapa adolescente es cada vez más necesaria,


asumiendo diferentes roles: de consejero, informante y mediador. Se dice que es cada
vez más necesaria porqué hasta la fecha hay jóvenes que tienen poca comunicación
con los padres, así el orientador es el que puede apoyarlo en las dudas o problemas
que tenga, ya sean de tipo sexual, vocacional (opción de profesiones), académico
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(propuestas didácticas para las diferentes materias) o personal (conflictos personales o


sociales).

Así, otro dato importante del porque es importante la orientación educativa es


como menciona José Nava (1993): Después de cuatro décadas del establecimiento de
la Orientación Educativa, México vive una explosión demográfica, una prosperidad
desigual entre la ciudad y el campo, un proceso de desaceleración económica general y
un nivel de desempleo mayor de 8 millones agravado por otros 12 millones de
subempleados. En ésta realidad, la Orientación Educativa tiene que reconceptualizar
sus contenidos, revalorar las funciones del Orientador Educativo y reestructurar sus
teorías de acuerdo a las nuevas características del país. Además se exigen a todos los
sectores de la sociedad nuevas responsabilidades frente a las necesidades que
aquejan al país. Este compromiso ha de atenderse con criterios de eficacia, eficiencia,
calidad, excelencia y competitividad, exigencias a las cuales los Orientadores
Educativos no deben permanecer ajenos.

El Orientador se debe responsabilizar de su actividad orientadora, cubriendo las


necesidades del alumno para que pueda tener un desarrollo pleno dentro de la
sociedad, de acuerdo a las exigencias que ésta le vaya planteando. Así, el Orientador
no es la persona que se encuentra sentada tras un escritorio o el maestro más barco,
sino que es el profesional que debe detectar en qué tipo de sociedad se encuentran los
jóvenes alumnos, y lo más importante como es que ellos pueden concebirse para así
guiarlos y logren formar un autoconcepto, con el que puedan estar seguros de sí
mismos y tomar decisiones autónomas en la sociedad en la que viven.

Por estas y más circunstancias, la Orientación Educativa debe trascender su nivel


de servicio de ayuda al estudiante, para convertirse concretamente en una verdadera
disciplina que estudie y promueva durante toda la vida de los seres humanos, sus
capacidades cognitivas o de aprendizaje, psicológicas y socioafectivas propiciando
además su vinculación con el desarrollo social del país.
Esto es de suma importancia porque se debe tomar en cuenta que la Orientación
Educativa no es solamente ayudar al estudiante a salir de problemas a los que se
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enfrenta en algún momento de su vida, sino que se deben crear bases sólidas que
sustenten a la Orientación Educativa para que esta pueda ir dándose durante toda la
vida del ser humano y así las personas puedan tener la capacidad de auto-orientarse
cuando se enfrenten a situaciones críticas o difíciles ya sea de índole personal,
académica o social.

Enfatizando ésta función preventiva, se puede decir que:

“... las funciones del orientador tienen carácter: preventivo, interactivo,


contextualizador, integrador especializado, que se organizan en relación a los
objetivos educativos en torno a los siguientes núcleos de referencia:
Ø Enseñar a pensar
Ø Enseñar a ser persona
Ø Enseñar a convivir
Ø Enseñar a comprometerse
Ø Enseñar a decidirse” (MARTINEZ González, María de Codes;--165)

Las funciones que el Orientador debe desempeñar están descritas en documentos,


ya sean manuales, planes, guías, etc., es decir, donde se establecen contenidos y
lineamientos metodológicos de acuerdo con los objetivos de dichos documentos. Pero
es necesario tomar en cuenta el contexto social y las ideologías que se tienen dentro de
este mismo para así actuar de manera lógica y apropiada.

María Luisa Rodríguez (1991) menciona que de entre los textos actuales sobre
Orientación se pueden extraer siete objetivos perseguidos por los profesionales de la
orientación, estos son:

1. Desarrollar al máximo la personalidad.


2. Conseguir la Orientación en sí mismo.
3. Comprenderse y aceptarse a sí mismo.
4. Alcanzar una madurez para la toma de decisiones educativas y
vocacionales
5. Lograr el ajuste y la adaptación.
6. Conseguir un aprendizaje óptimo en los años de escolaridad.
7. Combinaciones de cualquiera de los seis anteriores.
20

Con esto se puede decir que la función general del orientador es conocer a la
persona, ayudarla para que por sí misma y gradualmente pueda conseguir un ajuste
personal y social, además de informar sobre los ámbitos educativo, personal y
profesional.

Para que el Orientador Educativo pueda lograr la realización de sus funciones de


una manera más satisfactoria es importante que intente revalorar sus funciones según
los cambios sociales que se vayan presentando en la sociedad, con la finalidad de que
se logre una vinculación entre las capacidades individuales y las sociales del joven.

Es importante que el alumno consiga su adaptación en cualquier momento, etapa


de su vida o contexto en el que se encuentre, es por eso que la tarea de los
orientadores se basa en ayudar a encontrar el concepto de sí mismo y adaptarse en el
medio que se encuentra.

1.4. ÁREAS DE LA ORIENTACIÓN EDUCATIVA

El ámbito de la Orientación Educativa, suele dividirse en áreas de acción, algunos


autores como: Pérez, Nava y Castillo (1993, 1989) las dividen en tres áreas donde se
abordan los diferentes aspectos importantes de la orientación, y son las siguientes:
problemas de aprendizaje, constituido entre otros aspectos por técnicas y métodos para
obtener un buen aprovechamiento escolar, otro es lo afectivo, emocional y los
problemas a los que puede llegar a enfrentarse el individuo dentro de lo educativo y
personal. Por último se cita el área vocacional o profesional, es decir donde se apoya al
joven para que pueda elegir alguna opción educativa de acuerdo a sus intereses,
habilidades y capacidades, además de poder mostrar la realidad educativa y laboral, en
la que se encuentra inmerso, de acuerdo a la sociedad en la que vive.
A continuación, se presenta más detalladamente cada una de éstas áreas, para
tener en cuenta que el orientador educativo no sólo se ocupa de un problema aislado,
sino que tiene que atender varios aspectos educativos para lograr una orientación que
21

responda a los ideales educativos y que pueda servir al individuo durante toda su vida,
ya sea educativa, laboral o personal. Si esta orientación se enfoca sólo a un área, esta
quedará incompleta, impidiendo al individuo llegar a una autoorientación, finalidad
preponderante desde el aspecto educativo.

Dentro de la Orientación Educativa se encuentran tres áreas en las cuales puede


actuar el orientador, éstas son:

-ÁREA ACADÉMICA: Esta área se ocupa de la enseñanza-aprendizaje que


se brinda en al ámbito escolar, su propósito es facilitar el aprovechamiento académico,
y utiliza para ello entre otros recursos técnicas y hábitos de estudio.

En la Guía Programática de acuerdo con José Nava el Área académica o


Pedagógica: “va dirigida a atender a los alumnos en sus necesidades académicas con
respecto a los hábitos y técnicas de estudio, problemas de motivación y bajo
rendimiento escolar.

En ésta área debe estar inmerso el Orientador Educativo, se trata de dotar al


estudiante de técnicas de estudio para que pueda por si mismo lograr un aprendizaje
satisfactorio que le permita aprobar todas sus materias escolares, además de tener
esos conocimientos aprendidos, para utilizarlos en cualquier momento de su vida que le
sean necesarios. Esto permite que entre los alumnos haya un menor índice de
reprobación y además para motivar en las materias asignadas a los jóvenes, creando
actitudes positivas e interés hacia las materias que tiene.

Es importante dentro de ésta área que no solo los estudiantes conozcan las
diferentes técnicas y estrategias de estudio, las cuales también deben proporcionarse a
los maestros que imparten las diferentes materias, dentro de un centro educativo para
que junto con sus alumnos puedan utilizarlos y lograr un aprendizaje más significativo
que pueda disminuir la reprobación, ya que ésta en muchas ocasiones es causada por
que los jóvenes no saben como estudiar y los maestros no saben cómo enseñar o
tienen métodos tradicionalistas que no ayudan a que se desarrolle un buen aprendizaje.
22

En el área pedagógica, el orientador se relaciona con diferentes asuntos referidos


al aprendizaje y la enseñanza, que muchas veces se pasan por alto y en muchas
ocasiones se dejan de lado sin prestarles ninguna atención, estos son factores que
repercuten en el aprovechamiento escolar, por ejemplo:

“…Todos los aspectos del aprendizaje curricular no han tenido una


consideración similar por parte de la praxis orientadora. La intervención
orientadora en los procesos de aprendizaje se ha centrado primordialmente y
durante largo tiempo en un aspecto de los mismos: los trastornos y fracasos
escolares”. (ALVAREZ Rojo, Víctor; 1994:85-86)

Se ha tomado mucho en cuenta que el estudiante tan solo no repruebe para que
no existan altos índices de reprobación dentro de un centro educativo, pero se ha
dejado de lado que el orientador educativo es también quien debe intervenir en los
programas educativos para detectar si en verdad los contenidos son adecuados a las
peculiaridades o características de los sujetos. Siendo que este es un factor importante
en el problema de la reprobación, deserción y bajo desempeño.

El orientador educativo debe entonces comprobar que el currículum propuesto


para ese nivel educativo sea adecuado para los sujetos a los que está dirigida esa
enseñanza, y así proporcionarle las diferentes técnicas o recursos con los que pueda
comprender mejor los contenidos más adecuados a su contexto social.

Así es importante tomar en cuenta no solo el fracaso escolar, sino los factores que
pueden estar involucrados en éste, las causas que lo generan y sobre todo, sería
acertado crear estrategias de intervención que apoyen al joven para que existan menos
fracasos y deserciones educativas, que es lo que se pretende en esta área.

-ÁREA PSICOSOCIAL: Esta área está centrada en los problemas y


desarrollo de la personalidad del individuo (ya sea en la sociedad o en la institución
educativa).
23

Dentro de la Guía Programática de Orientación Educativa, se maneja a esta área


como “Orientación Afectivo Psicosocial”, la cual:

“pretende desarrollar en el educando actitudes y sentimientos de seguridad


en sí mismo, lograr un autoconocimiento más pleno cada día, expresar sus
inquietudes, aprovechar adecuadamente sus propios recursos y establecer
relaciones positivas con los demás para lograr una superación propia y de la
comunidad”. (NAVA Ortiz, José; 1993:92)

Esta área es de suma importancia para la investigación, sin dejar de lado las otras
dos, ya que es aquí donde podemos indagar sobre: el autoconcepto, esto es, al
pretender que el individuo tenga un mejor conocimiento y seguridad de sí mismo, se
crea en él un autoconcepto que le permita vivir de una manera más positiva en su
entorno social.

Es decir se pretende en ésta área de la Orientación que haya un desarrollo


afectivo equilibrado además de una adaptación y participación satisfactoria del individuo
con el contexto o grupo social con el que interactúa por medio de la satisfacción
personal y el ajuste social que el individuo tenga sobre sí mismo; esto se puede lograr
gracias a la intervención del orientador educativo, por medio de una orientación
adecuada a la sociedad del adolescente.

Con esto se pretende que el joven se conozca a sí mismo ya sea por medio de
diferentes técnicas aplicadas en grupo o por medio de una orientación personalizada, la
cuál debe estar adecuada al individuo, así también el orientador debe tener el suficiente
conocimiento sobre el trato con los jóvenes.

Dentro de esta área se toma en cuenta la personalidad del sujeto, y para que
pueda desarrollarla lo más aceptablemente posible es conveniente que se emplee una
intervención que utilice técnicas y métodos no directivos, que permitan al joven
desarrollar al máximo esa personalidad y sobre todo permitirle ser responsable de esto.

-ÁREA VOCACIONAL: Dentro de ésta área se destacan los cambios


24

personales de los jóvenes respecto a los profesiones que existen relacionadas con el
ámbito social en el que se encuentra viviendo.

Comprende la elección de estudios posteriores al nivel en que se encuentran los


jóvenes así como la ubicación en la profesión que más se acerque a sus características
ya sean personales o sociales, además de tomar en cuenta las necesidades que cada
individuo presenta, para que este pueda tener un mejor desempeño en la vida
académica en que se incorpore.

Para que ésta área se desarrolle lo más correctamente posible es necesario que
se practiquen pruebas psicológicas adecuadas para ayudar al estudiante a tomar una
mejor decisión; es decir se debe ubicar al estudiante en la realidad presente para que
no haya o sea menor la deserción y el abandono de estudios.

Con lo anterior se hace necesario que el Orientador tenga conocimientos sobre el


estado socioeconómico que vive el país, así como la oferta y demanda de profesiones,
para que con éste panorama y las pruebas psicológicas pueda ubicar al estudiante de
acuerdo con sus propias habilidades, aptitudes, tendencias y gustos, para que el joven
sea más productivo en la profesión o estudios posteriores en los que se le ubique.

En esta área lo que se pretende es:


“facilitar un mejor conocimiento de sí mismo, de sus intereses, aptitudes,
valores, necesidades, etc. Un mejor y más amplio conocimiento del mundo del
trabajo y de las circunstancias y condiciones que rodean las diferentes
ocupaciones”. (CASTILLO Arredondo, Santiago; 1989:40)

Esto es, la elección vocacional está relacionada al conocimiento de sí mismo,


porque al conocer mejor cuales son los intereses, necesidades, etc. del propio joven,
tanto personales como sociales, puede hacer así una mejor elección educativa o
profesional, según el grado educativo en el que se encuentre el adolescente.

Así la elección vocacional además de estar basada en los intereses, aptitudes y


cualidades personales, debe ofrecer información de oferta educativa que contenga las
25

oportunidades educativas y vocacionales que se encuentren en su contexto social, por


medio de materiales profesiográficos, pruebas que valoren su perfil profesional, etc.,
con el fin de que haya un equilibrio entre las preferencias personales y las necesidades
del mercado laboral.

Se debe tomar en cuenta que la Orientación Vocacional, no es una bola mágica


que diga a cada estudiante que profesión debe elegir, sino que es un instrumento que
sirve al Orientador para que ayude al adolescente a tener opciones Educativas que se
adecuen a sus necesidades, así el propio joven puede elegir lo que más le agrade.

Law y Watts, dicen que la Orientación Vocacional es un conjunto de actividades


planificadas que facilitan al alumno el conocimiento de posibilidades ocupacionales, el
conocimiento de sí mismo, la facultad de tomar decisiones y la facultad de enfrentarse a
la transición de un nivel educativo a otro. (RODRÍGUEZ, Ma. Luisa; 1991: 80)

Así la Orientación Vocacional puede brindarle al alumno en secundaria contenidos


reales y detallados de el mundo educativo y laboral que existe a su alrededor. Es decir,
el Orientador Educativo prepara al estudiante para elegir un tipo de escuela, estudios,
trabajo o carrera tomando siempre en cuenta sus características personales y
procurando no frustrar sus aspiraciones.
26

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

ÁLVAREZ Rojo, Víctor (1994), Orientación Educativa y Acción Orientadora, relaciones


entre teoría y práctica, Madrid, Ed. EOS.

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Conferencias “La Orientación Educativa en el fin de siglo: alcances y limitaciones de la
práctica”, México, UPN.

BISQUERRA Alzina, Rafael (1996), Orígenes y desarrollo de la Orientación


Psicopedagógica, Madrid, Ed. Narcea.

BOHOSLAVSKY, Rodolfo (1984), Orientación Vocacional, la estrategia clínica Buenos


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término de la EGB. Madrid, Ed. Cincel-Kapelusz.

DÍAZ Barriga, Frida. (2001), Un análisis de diversos programas de formación para niños
y jóvenes, en: Revista de Educación 2001, núm. 71, pp. 37-38.

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Edición, Madrid, Ed. Oikos

GRIMALDI Papadopulos, Verónica (1995), La Orientación Educativa: una practica en


construcción; en “La Orientación Educativa en el fin de siglo, alcances y limitaciones de
la práctica, México, UPN.

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Educativo en el nivel medio básico, secundaria, tercer grado, Tesina para obtener titulo
de Licenciada en Pedagogía, México, UPN.
27

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Revista Anales de Pedagogía No 10 pp. 185-220 Universidad de Murcia.

MARTINEZ González, Ma. De Codès , Orientación Escolar, Ed. Sanz y torres

MEULY Ruiz, René, (2000), Caminos de la Orientación: Historia, Conceptualización y


práctica de la Orientación Educativa en las Escuelas Secundarias, Tesis, México UPN.

NAVA Ortiz, José. (1993), La Orientación Educativa en México. Documento Base;


México AMPO.

RODRÍGUEZ, Ma. Luisa. (1991), Orientación Educativa, Ed. CEAC, Barcelona.


CAPITULO II

TEORÍAS DEL AUTOCONCEPTO


29

CAPITULO II

TEORÍAS DEL AUTOCONCEPTO

El capítulo que ahora nos ocupa, inicia con una exposición en torno al
autoconcepto, proveniente de algunos teóricos, incluyendo a Carl Rogers, con la
finalidad de retomar una definición clara sobre el autoconcepto del individuo,
posteriormente se hace una revisión sobre las condiciones en que se desarrolla este
componente de la personalidad y finalmente se extraen conclusiones que serán útiles
para la propuesta psicopedagógica que se hará en el presente estudio.

Este componente de la personalidad es importante y necesario para el Orientador


Educativo, porque es quien esta en contacto con el adolescente, y quién debe tener
esta información para tener un mejor trato con el joven.

2.1 DIFERENTES APROXIMACIONES AL ESTUDIO DEL


AUTOCONCEPTO

Los teóricos de este tema, presentan distintos puntos de vista y se refieren


también a este constructo como: “Self”, o “sí mismo” y que por tanto serán considerados
sinónimos en esta investigación.

Algunos autores han definido al autoconcepto o sí mismo de la siguiente manera:

Williams James hacia 1890 sostiene que. “El sí mismo es aquella continuidad que
cada uno de nosotros reconoce cada vez que nos despertamos. Según James tiene
varias capas” (FADIMAN; James; 1979:219). Este filósofo, aporta los primeros
cimientos del conocimiento de sí mismo, denominando “constituyentes del sí mismo”.
30

Ø El sí mismo material: formado por las cosas que identificamos como nuestras, el
cuerpo físico, todas aquellas propiedades materiales, amistades y la familia. Es
decir son la suma de lo que puede llamar suyo, que originan en él las mismas
emociones.
Ø El sí mismo social: son las percepciones que una persona ha interiorizado
provenientes de los allegados a él y que comparten su contexto vital.
Ø El sí mismo espiritual: es el ser interior y subjetivo del individuo en términos de
capacidades, rasgos, impulsos y motivaciones más privadas.

James sostiene que el individuo tiene tantas imágenes de sí mismo como


personas se la proporcionan, así es como se ve un carácter multidimensional de la
estructura del autoconcepto, ya que se están tomando en cuenta diferentes aspectos
que pueden explicar el sí mismo, o más bien con los que se forma el sí mismo.
Identificando al sí mismo como objeto de conocimiento, es decir, el sí mismo es
consciente en cuanto a lo que el individuo puede mirar que pertenece a él.

Así James le da al concepto de sí mismo un carácter más social, ya que las


imágenes de sí mismo provienen del medio, reaccionando ante estas según el grado de
continuidad o discontinuidad que tengan. Es así como se nota la gran influencia de las
otras personas hacia el individuo, siendo así como éste puede conformar un
autoconcepto aceptable para él.

Cooley define al sí mismo como: “aquello que se designa en el lenguaje ordinario


mediante los pronombres de primera persona del singular: yo, mi, me, mío, yo, yo
mismo” (EPSTEIN, Seymour; 1981:93) Si el individuo siempre al designar algo como
suyo, lo menciona en primera persona se producirá hacia él una emoción más intensa,
que si no lo hiciera, además se debe tomar en cuenta que solo los sentimientos
subjetivos pueden hacer que el identifique a su sí mismo. Cooley utiliza también la
metáfora del sí mismo como espejo, aludiendo a que el individuo se ve así mismo del
modo en que los otros lo perciben.
31

George Mead dice: “el concepto de sí mismo surge en la interrelación social como
consecuencia de cómo el individuo se ve afectado por las reacciones de otros ante él”
(EPSTEIN, Seymour; 1981:94) Es decir, las personas siempre están atentas a cómo la
demás gente reacciona ante ésta para que trate de actuar de la mejor manera ante los
demás así el individuo debe aprender a percibir el mundo como los demás lo ven,
tomando en cuenta las reacciones que puedan tener los otros ante ciertos casos, esto
es el individuo aprende a regular su conducta en base a la presiones externas.

Carl Jung en la década de los sesenta, sostiene que el autoconcepto es un


arquetipo central formado por imágenes conectadas al individuo por las emociones, de
orden y la totalidad de la personalidad, es decir el consciente e inconsciente se
complementan para formar el sí mismo.

“El sí mismo es un factor interno de guía, completamente diferente al ego y


al consciente. El sí mismo es no solamente el centro, sino también la
circunferencia total que abarca tanto el consciente como el inconsciente; es el
centro de esta totalidad”. (FADIMAN, James; 1979:75)

Desde un marco humanista, Abraham Maslow define al sí mismo como: “El punto
central interior o la naturaleza innata del individuo, nuestros propios gustos, valores y
metas”. (FADIMAN, James; 1979:365)

Es importante la comprensión de nuestra naturaleza interior y nuestra actuación de


acuerdo con ella para actualizar el sí mismo. Aunque éste autor no analiza al sí mismo
como estructura específica dentro de la personalidad. Si se pude rescatar que el sí
mismo esta relacionado con los gustos que cada uno tiene, los valores que son
marcados por la sociedad y las metas que cada persona o individuo pueden plantearse
de acuerdo como vaya conceptualizándose a sí mismos.

Gordón define al concepto de sí mismo como:

“un sistema organizado de multitud de elementos (percepciones o


concepciones) en constante interacción recíproca. Este autor habla de
“estructuras de significaciones” es decir, de organizaciones jerárquicas de los
32

distintos elementos del concepto de sí mismo. Para el los elementos del sí


mismo se forman desde la infancia a través de proceso de socialización y
particularmente vía personas significativas”. (MARTINEZ Clares, Pilar; 1992:191)

Con esta autora también podemos llegar a la conclusión de que el concepto de sí


mismo o autoconcepto se va adquiriendo a través del tiempo y se obtiene de la suma de
percepciones que le proporcionan al joven los individuos que lo rodean; tiene también
un carácter multidimensional como lo toma James, ya que se va modificando este
concepto de sí mismo con el paso de los años tomando en cuenta que la interacción
social crece a medida de la edad y del tipo de sociedad en la que vive el individuo.

Algo importante que puede destacarse en el modelo de autoconcepto de Gordón


es que lo divide en ocho apartados que contienen diferentes elementos que él
denomina categorías, estas pueden describir constantemente a la persona hasta llegar
a conformar un autoconcepto.

1. Características atributivas: la identidad y los papeles sociales están


determinados independientemente de la persona, estas categorías son: edad,
sexo, nombre, religión, raza.

2. Papeles y pertenencias: el papel social y la identidad están controlados por la


persona; las categorías que aquí se manejan son: papeles familiares,
ocupacionales, estudiantiles, aficiones políticas, estatus social, pertenencia a un
grupo, etc.

3. Identificaciones abstractas: se refiere a la individualidad de la persona; las


categorías que se manejan son: referencias existenciales, a un sistema de
pensamiento o ideología, etc.

4. Intereses y actividades: las categorías que aquí se manejan son: juicios,


preocupaciones intelectuales, actividades artísticas, etc.; es decir, lo que le
interesa al joven en forma individual.
33

5. Referencias materiales: posesiones o recursos materiales, el sí mismo físico y la


imagen corporal, es decir, lo que se identifica como propio del sujeto.

6. Sensaciones sistémicas del sí mismo: se refiere al funcionamiento y adaptación


de la persona: sensación de competencia, determinación de sí mismo,
sensación de unidad y valor moral.

7. Características personales: lo que describe al individuo como tal, el estilo


interpersonal (manera de actuar) y la personalidad.

8. Significaciones externas: son las impresiones que el individuo se propone dejar a


los demás en sus distintas situaciones cotidianas, los juicios que hace de los
demás, referencias situacionales, etc.

Dentro de las aportaciones de este autor, es importante tomar en cuenta estos


ocho apartados, ya que por medio de estos es como se puede formar un concepto de sí
mismo, teniendo en cuenta que el individuo al desarrollar una determinada forma de
pensar, al emitir juicios sobre él y los demás; puede formar así un concepto propio que
llegue a ser favorable para él y para la sociedad en la que vive.

Seymour Epstein hacia el año de 1973, propone que el “sí mismo” es una teoría
que el sujeto desarrolla porque:
Ø Es un subsistema de conceptos internamente consistentes y
jerárquicamente organizados, al interior de un sistema conceptual amplio.
Ø Contiene diferentes sí mismos empíricos.
Ø Es una organización dinámica que se modifica con la experiencia.
Ø Se desarrolla sobre todo a partir de la interacción social con otras personas
significativas.
Ø Resulta esencial para el funcionamiento del individuo, que la organización
del sí mismo se mantenga.
Ø Existe necesidad básica de autoestima, relacionada con todos los aspectos
del sistema de sí mismo y en comparación con la cual, casi todas las demás
necesidades quedan subordinadas.
Ø El concepto de sí mismo posee, además dos funciones básicas: la primera
es organizar los datos de la experiencia; la segunda, es facilitar los intentos
34

de satisfacer las necesidades mientras evita, por otra parte, la


desaprobación y la ansiedad” (CARDENAL Hernaez; Violeta; 1999:49)

También determina que la persona elabora concepciones sobre sí misma


partiendo de la necesidad básica de mantener un nivel aceptable de autoestima.
Tomando en cuenta que las ideas sobre el sí mismo se construyen y se forman dentro
del sistema experiencial.

L’Ecuyer (1985) define al concepto de sí mismo como un sistema multidimensional,


es decir, esta compuesto por estructuras fundamentales que delimitan el concepto de sí
mismo y proceden de las experiencias vividas, percibidas y conceptualizadas por parte
del individuo.

Este autor nos presenta al sí mismo como multidimensional, ya que hay diferentes
dimensiones por medio de las cuales el individuo puede definir sus características, y así
mismo formar un concepto de sí mismo. Estas dimensiones son apariencia física,
gustos, intereses, sentimientos, estilo de vida, etc., que integrados pueden llegar a
integrar jerárquicamente para llegar a un concepto de sí mismo.

José Nava (1993) toma en consideración que “el concepto de sí mismo esta
formado por preceptos organizados en distintas dimensiones, meta dimensiones y
sistemas cada una de las cuales define un aspecto distinto de la estructura de la
personalidad y su funcionamiento” ; Es decir este concepto incluye pequeñas
descripciones que el ser humano hace de sí mismo en forma organizada, describiendo
así la personalidad de cada individuo, como es físicamente e interiormente para que al
final puedan integrarse y llegar a formar un auto concepto claro.

Para González M. Gabriela (1993) el autoconcepto incluye diferentes


componentes:

§ perceptual: como una persona se percibe a sí misma de acuerdo a las


impresiones que los demás tienen de ésta.
35

§ conceptual: los conceptos que la misma persona tiene sobre sus


características, habilidades, recursos, aciertos, fallas, limitaciones, además
de la concepción de su pasado, presente y futuro.

§ actitudes: sentimientos acerca de sí, actitudes frente a su status actual y


frente a sus proyectos futuros.

Por tanto, el autoconcepto además de brindar una concepción de la persona debe


incluir lo que se quiere ser y lo que se debe ser, para que esto lleve a un
desenvolvimiento favorable de su vida. Esto permitirá que el sujeto pueda dirigirse
concretamente a lo que quiere, sin tener que preguntarse a cada momento que es lo
que va a decidir, ya que esto dará lugar a que en el caso del joven se aprecien
constantes fracasos y equivocaciones en su vida personal, vocacional y social.

Isauro Blanco (1997), define al autoconcepto como un aprendizaje que se tiene en


la familia y que se recibe desde muy temprana edad, ya que los padres dicen si el niño
es inteligente o no, si es capaz y sobre todo si es valioso o inoportuno para ellos, así
cada vez que se habla de un pequeño bien o mal se le transmiten mensajes que
pueden dañar o desarrollar un auto concepto. Estos mensajes son transmitidos por
medio de actitudes y palabras que se quedan grabadas en el pequeño. Este autor
afirma que al tener un buen autoconcepto (lo que pensamos de nosotros mismos) se
puede tener un autoestima alta.

Por lo tanto es indispensable que la convivencia con la familia sea favorable para
que hayan mensajes concientes y constructivos para un autoconcepto más pleno.

Para Eliana Sabeh, (2002), el autoconcepto surge y se consolida por medio de la


interacción que mantiene el individuo con las personas del ambiente que lo rodea. Se
puede pensar que los principales determinantes del autoconcepto son asimilados desde
momentos muy tempranos en las relaciones padres-hijos, también influenciado por la
convivencia escolar joven-maestra y joven-joven.
36

Así se puede decir que el autoconcepto no es innato sino que se va construyendo


a lo largo de la vida, donde los primeros años son determinantes en la valoración que
toma el concepto de sí mismo y se va desarrollando por medio de las interacciones que
se llevan a cabo en los contextos sociales en los que se desenvuelve el sujeto.

Después de haber tomado en cuenta las anteriores definiciones podemos decir


ahora que dentro de la personalidad del ser humano existen diferentes fenómenos o
fases por las cuales atraviesa el individuo, llamadas de Autoconocimiento, entre las
cuales se encuentra el autoconcepto y la autoestima, solo que en este capítulo se
maneja únicamente el autoconcepto, pero sin dejar de lado que la autoestima cumple
un papel motivacional dentro de la formación del autoconcepto, ya que la primera es la
parte valorativa del autoconcepto (aspectos descriptivos y evaluativos).

“El autoconcepto y la autoestima pueden ser variables responsables


también de las diferencias individuales a lo largo de la dimensión salud-patología.
En la personalidad sana o saludable, la persona tiene un grado de autoestima
que le proporciona salud personal: se siente a gusto consigo misma y además se
encuentra integrada a la sociedad en la que vive. (CARDENAL Hernández,
Violeta; l999:24)

De aquí se puede desprender la importancia que tiene el autoconcepto en la


autoestima, ya que las personas que tienen un autoconcepto positivo que les permite
tener una vida más plena y saludable, podrán alcanzar un autoestima alta que le
permita estar bien consigo misma.

Esto es porque al definir su autoconcepto una persona siempre da una serie de


evaluaciones u opiniones explícitas o implícitas, es decir, no describe un autoconcepto
libre de juicios u opiniones.

Se debe tomar en cuenta que el autoconcepto no es neutro y libre, ya que también


se va definiendo de acuerdo a lo que el individuo ha interiorizado en cuanto a las
percepciones que ha recibido de las personas más allegadas a él y que comparten su
contexto social, además de los valores percibidos a través de sus propias actividades,
etc.
37

El autoconcepto es la parte integradora de la personalidad, que engloba la forma


en que cada persona se percibe o conceptualiza, se siente y vive, determinando en
gran medida la forma en que actúa, de acuerdo a sus necesidades y deseos.
Al utilizar el término autoconcepto debemos referirnos a la totalidad del ser
humano, tanto en aspectos concientes e inconscientes (identidad, instancias psíquicas,
autoestima, etc.); ya que estas características son las que determinan el autoconcepto
que pueda llegar a formarse el individuo.

El concepto de si mismo constituye el aspecto perceptual o contemplativo del


individuo, se relaciona con lo que el individuo o la persona piensa de sí misma, con las
actitudes, sentimientos, percepciones y evaluaciones que experimenta y percibe con
respecto a sí misma.

Es decir, el autoconcepto puede definirse con un conjunto de rasgos, imágenes y


sentimientos que el individuo reconoce como que forma parte de sí mismo, pero que
esta influido por el entorno en el que se encuentra, y organizado de manera consciente,
para que el individuo pueda mantener un criterio selectivo y reflexivo de los cambios
que se van dando en la sociedad en la que vive.

Se debe tomar en cuenta que el concepto de sí mismo se va estructurando


progresivamente a partir de las primeras percepciones e imágenes iniciales de la
conciencia, que van siendo progresivamente más elaboradas, de acuerdo a las
experiencias personales y conducen a construir un concepto de sí mismo influido por la
sociedad con la que interactúa frecuentemente.

“Las creencias matrices pasionales son ideas y pensamientos


comunicados fundamentalmente por los padres en los primeros años, sobre el
mundo exterior y sobre el propio niño que se constituyen en auténticas directrices
del psiquismo del sujeto, debido sobre todo al contexto en el que fueron
transmitidos, plagado de emociones, de gestos afectivos y de sentimientos
emergentes de las figuras parentales” (CARDENAL Hernaez, Violeta; 1999:22)

Estas ideas y pensamientos comunicados al niño estructuran los contenidos del


autoconcepto y de la autoestima, durante la infancia, haciendo que a partir esto se
38

establezcan los cimientos de autopercepciones y auto evaluaciones inconscientes que


no por permanecer inaccesibles dejan de guiar la vida del niño hasta que se convierte
en adulto.

Es importante tomar en cuenta que si el individuo tiene una imagen positiva de sí


mismo, (viven en bienestar, con mayor eficiencia puede manejar mejor su vida afectiva
y con ello tener una vida más plena), va a tener una buena autoestima, es decir una
buena adaptación al contexto social, escolar y familiar en el que se encuentra. Así con
el buen uso y empleo de las habilidades socio personales (sociales, de auto
conocimiento, de comunicación, de autoestima, de resolución de conflictos),por
ejemplo, en el caso del adolescente; cuando llega a una favorable percepción sí mismo,
mejora las respuestas que se formula, como:¿cómo soy?, ¿qué cualidades tengo?,
¿cómo interacciono con los otros?, ¿qué tipo de alumno soy? o ¿qué descripción hago
de mí mismo en relación con el contexto familiar?

Siendo que dentro de la etapa adolescente la noción de “yo” adquiere su máximo


desarrollo, así puede esperarse que los jóvenes pongan en duda varios de los aspectos
del concepto de sí mismos, llevando esto a una situación de incertidumbre que es
característica de ésta edad. Por esto es deseable lograr una imagen ajustada y positiva
de sí mismo, además de la integración con otras personas superando inhibiciones y
prejuicios, permitiéndole esto un mejor concepto de sí mismo.

Muchos autores están de acuerdo en que el autoconcepto es aprendido y que


parte de este aprendizaje proviene de la observación de las relaciones de las otras
personas, como la del individuo con los padres. De esta manera “...el niño aprende a
verse a sí mismo, observando como otra gente reacciona hacia él” (GONZÁLEZ
Malpicia, Gabriela; 1993:15)

Así se puede decir que el individuo desde la infancia comienza a conformar su


autoconcepto, al tomar en cuenta todas las cosas que lo rodean, desde el
comportamiento de sus padres hacia él hasta las interacciones que se dan dentro del
círculo social en el que se encuentra. Por esta razón el autoconcepto no es algo estable
39

que va a determinar su vida, pero si son algunas de las bases con las cuales, siendo ya
adolescente podrá formar un autoconcepto más estable, con el que ahora sí podrá vivir
su vida.

2.2 PERSPECTIVA DE CARL ROGERS

Tomando en cuenta la clasificación que hace Lafarga (1986) sobre el enfoque


Rogeriano, éste se divide en cinco períodos de desarrollo. En este trabajo se hace
énfasis en el 2° periódo, esto es entre 1946 y 1953 ya que es en éste donde surge el
interés sobre el autoconcepto o concepto de sí mismo como Rogers lo llama. Las ideas
y primeros trabajos sobre autoconcepto aparecen en este período que se menciona y
son sometidos a experimentación en años posteriores.

Rogers diferencia entre dos conceptos claves en su obra (1986) uno es el


“organismo”; es el centro vital de experiencias del sujeto libres y espontáneas que todo
individuo tiene desde su nacimiento. La experiencia del organismo constituye el campo
fenoménico, dentro del cuál hay experiencia consciente e inconsciente.

El otro es “el concepto de sí mismo” que lo define como configuración organizada


de percepciones que son admisibles en la conciencia, integrada por elementos tales
como las percepciones de las propias características y capacidades, los preceptos y
conceptos de sí mismo en relación con los demás y con el ambiente, las cualidades
valiosas que se perciben asociadas con experiencias y objetos, y las metas e ideales
que se perciben con valencias positivas o negativas. (ROGERS, Carl; 1990)

Definiendo al “sí mismo” de manera textual sería:

“un patrón conceptual organizado, fluido, pero consistente, de percepciones


de las características y relaciones del yo y del mí a la vez que de los valores
vinculados a estos conceptos” (EPSTEIN, Seymour; 1981:95)
40

Aludiendo a lo anterior se pude decir que el concepto de sí mismo incluye solo las
características del individuo que son concientes y sobre las que puede ejercer control,
además de todos los valores inculcados por la familia o la sociedad en la que se
encuentra. Así podemos decir que el autoconcepto es un cuadro orgánico que está en
la conciencia del individuo.

El niño forma su autoconcepto al relacionarlo estrechamente con las valoraciones


que le otorgan los demás, a medida que va interactuando con el ambiente. Así va
separándose de su fuente original (sí mismo experiencial u organismo), y se va creando
el concepto de sí mismo, basado en normas y valores.

Aunque es conveniente que los sentimientos y experiencias se simbolicen en el


autoconcepto, al formar el concepto de sí mismo el individuo tiene una serie de reglas
admitidas por la sociedad y dictadas por los padres, que hacen que se vea obligado a
formar un concepto de sí mismo parcial y reducido, con la que funciona habitualmente y
que le dice lo que es.

Es importante señalar que toda persona tiene un concepto de sí como única y


diferente de cualquier otra.

Rogers señala que la unicidad del “sí mismo” como auto esquema proviene
de tres características fundamentales:
1. Es algo de lo que la persona no puede escapar, y nos guste o no, hay varios
aspectos de los cuales no nos podemos desembarazar a lo largo de nuestra
vida.
2. Es el prototipo más rico y complejo
3. Tiene un fuerte componente afectivo, que muchas veces se traduce en
términos de autoestima. (CARDENAL Hernaez, Violeta; 1999:43)

El autoconcepto no solamente es lo que esta pasando en un momento dado, sino


que es la conformación de la vida de una persona, es decir, qué piensa de lo que fue,
de lo que es y de lo que quiere ser, todo esto quedará conformado en el concepto de sí
mismo.
41

“El autoconcepto representa un patrón de percepciones organizado y


consciente. Aunque el sí mismo cambia, siempre conserva estas cualidades
estructuradas, integradas y organizadas” (LEWRENCE, Pervin; 1999:146)

Aquí se debe entender que el sí mismo no es un personita dentro de nosotros,


tampoco es algo que controle nuestra conducta, más bien son percepciones y
experiencias organizadas que generalmente se pueden encontrar al alcance de la
conciencia.

“Las experiencias del yo quedan investidas de valores. Dichos valores son


resultado de la experiencia directa con el ambiente, o bien se toman prestadas
de los demás” (WALTER, Mischel; 1988:209)

La persona cuando tiene contacto con su entorno, queda plagada de valores que
tiene el ambiente, siendo estos los que le son marcados para que pueda pertenecer a
dicho grupo. De acuerdo con las experiencias que vaya teniendo es como va a ir
formando un concepto de sí misma.

“La estructura conceptual del yo, es el concepto de sí mismo que puede o no


corresponder al yo real” (DI CAPRIO, Nicholas; 1976: 323) En el inconsciente se
encuentran las experiencias no simbolizadas o que no están disponibles al consciente.
Por esta razón Rogers dice que al poderse probar que las experiencias de un individuo
se encuentran en el consciente, ésta persona estará en un estado de congruencia, es
decir, tiene una concepción de sí mismo que corresponde al yo real.

Las personas van formando su concepto de sí mismas de acuerdo con las


valoraciones que recibe de los demás, pero puede decirse que se va separando y
desconectando de la fuente original de su sí mismo (organismo), creando un concepto
de sí misma basado en valores y normas que le marca determinada sociedad.

Si se conectara el sí mismo original (organismo) y se integraran experiencias no


simbolizadas en el concepto de sí mismo, puede llegar el individuo a un autoconcepto
más extenso. Tomando en cuenta que en este autoconcepto hay deseos agradables e
42

impulsos desagradables, que ahora ya son plenamente conscientes y se puede ejercer


un control afectivo y consciente de estos.

“…es conveniente que los sentimientos y experiencias se simbolicen en el


autoconcepto. Pero como al formar el “sí mismo”, la persona tiene una serie de
reglas admitidas y dictadas por los padres, se ve obligado a formar una idea de
sí, parcial y reducida, con la que funciona habitualmente y le dice lo que es”
(CARDENAL Hernaez, Violeta; 1999:47)

Es importante que el individuo siempre tenga presente el “yo real” sin dejar el “yo
ideal” o las reglas dictadas por la sociedad marquen o determinen totalmente su
concepto de sí mismo; así si hubiera una coincidencia entre el autoconcepto y el “yo
real u organismo se llegará a tener una aceptación incondicional de uno mismo.

“Rogers creía claramente que una definición de salud mental incluía cierto grado
de convergencia entre la experiencia, el yo y el yo ideal” (BRAZIER, David; 1997:79),
tomando en cuenta al yo como autoconcepto. Es decir se refiere a que una persona es
sana cuando lo que experimenta puede coincidir con lo que cree que es, y además esto
tiene que coincidir con lo que le gustaría ser, esto es, tiene que coincidir el
autoconcepto, el yo real y la experiencia para que una persona pueda estar bien con
ella misma, tomando en cuenta que esto es lo que se pretende en el enfoque centrado
en la persona.

Es importante destacar que al coincidir estos tres aspectos del yo, el autoconcepto
debe estar en constante cambio como la experiencia, tomando en cuenta que el
individuo se encuentra inmerso en las experiencias o intercambios sociales, ya que vive
dentro de una sociedad. Así el autoconcepto tiene que ir cambiando a medida que se
tengan experiencias.

Este enfoque centrado en la persona propuesto por Carl Rogers, precursor de la


psicología humanista, se describe en la siguiente cita:

“Consiste en que el individuo posee en sí mismo medios para la auto


comprensión, para el cambio del concepto de sí mismo, de las actitudes y del
43

comportamiento autodirigido, y que estos medios pueden ser explotados con sólo
proporcionar un clima determinado de actitudes psicológicas favorables”
(ROGERS, Carl; 1984: 337)

Roges sostiene aquí que el individuo tiene innata la capacidad de auto dirigirse,
esta le permite tomar decisiones y elegir sus propios valores para tener un desarrollo
integral, solo que para que pueda darse esto es necesario brindar al joven un clima
agradable con ciertas actitudes que favorezcan la auto dirección de su vida.

Para crear este clima favorable es importante tener en cuenta tres condiciones que
favorecen el desarrollo de la persona, esta son: EMPATÍA, CONGRUENCIA Y
ACEPTACIÓN. Dentro de este trabajo el Orientador Educativo es quien debe tener
presentes estas condiciones, para lograr que el adolescente llegue a conformar un
autoconcepto sano y aceptable para él mismo. Además se pretende crear un encuentro
más significativo que haga eficiente el desarrollo de este enfoque, creando a la vez una
atmósfera y una relación interpersonal que promueva un cambio en los jóvenes.

La primer Actitud es la EMPATÍA: Que significa sentir como si


estuviéramos dentro del otro.

Dentro de la Orientación esta actitud debe desarrollarse para comprender el


mundo privado del joven, por medio de algunas frases o fragmentos significativos que
contengan la idea de que se esta comprendiendo a la otra persona.

“el terapeuta siente exactamente los sentimientos y la intención es que


están siendo experimentadas por el cliente, al que comunica esta comprensión”
(ROGERS, Carl, 1984:338)

Esta actitud que debe tomar en este caso el Orientador Educativo es esencial para
poder establecer una relación interpersonal, la empatía consiste en sentir el mundo
interno del adolescente como si este fuera propio, sin perder de vista el “como si”, es
decir, sentir lo más posible los sentimientos que surjan pero sin involucrarse
completamente, ya que estos pueden llegar a afectar y ser propios del orientador. Esto
le permite al joven clarificar y tomar conciencia sobre su propio mundo interior, con esto
44

es posible que el adolescente se acerque a sí mismo y aprenda a cambiar y desarrollar


sentimientos favorables para él. (GONZÁLEZ Garza,. Ana Ma.; 1991)

Al establecer una relación empática con el joven, se le comprende mejor, así el


siente más confianza con el Orientador y puede expresar mejor los sentimientos que
tiene, al hacer esto puede decir frases más reales del concepto de sí mismo , lo cual
ayuda mejor para que el Orientador pueda apoyar al joven a conformar un autoconcepto
más claro.

Para esto es necesario que el Orientador tenga la capacidad de sensibilizarse; es


decir, aprender a escuchar realmente en una forma más sensible las expresiones
verbales del joven, ya sean gestos, ademanes, posturas, tonos de voz, silencios, etc.

Lo que se pretende al desarrollar la empatía es crear un ambiente de seguridad y


confianza para el joven con el fin de facilitarle su autodescubrimiento y así mismo un
auto concepto. El Orientador debe comunicar al adolescente estos sentimientos y
experiencias que fueron expresadas por él mismo de forma que puedan ayudar al
individuo en su desarrollo personal.

La segunda Actitud es la CONGRUENCIA: En un principio a esta


actitud se le denominó “genuinidad” o “autenticidad”, ya que la teoría de Rogers se
extendió a otros ámbitos como la educación se le llamó congruencia. (GONZÁLEZ
Garza, Ana Ma.; 1991)

Esta actitud también es básica para el Orientador, ya que significa que éste tiene
que presentarse tal como es, sin caretas o disfraces.

“Significa que él esta siendo él mismo, y no negándose a sí mismo” (LAFARGA


Corona, Juan; 1989:123). Esto es, el Orientador debe transmitir al joven abiertamente
los sentimientos y actitudes que en ese momento se dan en él, de acuerdo con el
encuentro que se tiene con el joven, no debe haber mascaras que expresen
sentimientos que en realidad este Orientador no esta sintiendo. El Orientador debe ser
45

“sincero”, en lugar de mostrar fachadas o caretas de interés, gusto, o preocupación que


en realidad no se sienten por el adolescente, dentro del encuentro que exista entre el
orientador y orientado.

Es indispensable que en esta actitud el Orientador tenga un amplio conocimiento y


aceptación de sus propios sentimientos y actitudes, para poder entablar así una relación
interpersonal con el o los jóvenes que en realidad pueda dejarles algo en su desarrollo
personal.

La tercera Actitud es la ACEPTACIÓN: Esta Actitud es donde el


Orientador debe recibir cálida y libremente todo lo que el joven le exprese de acuerdo a
su experiencia, es decir, admitir al joven como realmente es en ese momento,
aceptando los sentimientos que transmita, ya sean positivos o negativos. Implica la
ausencia de juicios o evaluaciones sobre el individuo y la manifestación de respeto.
46

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

BLANCO P., Isauro (1997), Educación Preventiva, México, Editorial Ger

BRAZIER, David (1997), Más allá de Carl Rogers, Bilbao, Ed. Descleé de Brouwer

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(comp.) Lecturas de psicología de la personalidad; Madrid, Alianza Editorial

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GONZÁLEZ Garza, Ana María (1991), Enfoque Centrado en la Persona, aplicaciones a


la educación. México, Ed. Trillas

GONZÁLEZ Malpica, Gabriela (1993) Autoconcepto en el ámbito escolar, México DF.


Tesis para obtener título de Lic. En Psicología Educativa.

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especiales, En: Revista Española de Pedagogía, Año LX, no. 223, septiembre-
diciembre, pp. 559-572

WALTER, Mischel (1998), Teorías de la Personalidad, México, Ed. Mc. Graw Hill
CAPITULO III

AUTOCONCEPTO Y DESARROLLO DEL


ADOLESCENTE
49

CAPITULO III

AUTOCONCEPTO Y DESARROLLO DEL ADOLESCENTE

Dentro de este capítulo se habla de la concepción que se tiene sobre


adolescencia basado en diferentes autores, para posteriormente llegar a cómo el
adolescente durante esta etapa puede formar su autoconcepto pese a los cambios que
se enfrenta durante este período. Finalizaremos con la importancia o las implicaciones
que tienen la familia, la escuela y la sociedad para la formación de este autoconcepto,
es decir qué tanto están implicados estos núcleos para favorecer el desarrollo de este o
en que manera pueden ser negativos para la formación del autoconcepto.

3.1 CARACTERIZACIÓN DEL ADOLESCENTE

La adolescencia es una etapa del ciclo vital del ser humano, caracterizada por
múltiples transformaciones. En ella aparecen los primeros cambios sexuales y además
el adolescente se enfrenta a la adaptación de nuevas condiciones sociales que
conllevan un riesgo de ruptura y enfrentamiento con la familia y otras instituciones como
la escuela.

“La palabra adolescencia proviene de la palabra latina adoleceré que


significa crecer y se define como: la edad que sigue a continuación de la infancia
y comprende desde la pubertad hasta el desarrollo completo del cuerpo.
(HERNANDEZ Pérez, Yolanda; 2001:22)

Esta etapa es compleja y problemática para el joven, por que es en la que lucha
para llegar a la madurez, pero también es un período en el que hay experiencias
nuevas y en ocasiones emocionantes, que pueden implicar mayores oportunidades de
desarrollo personal para el adolescente.
50

Durante su desarrollo el adolescente atraviesa por diferentes cambios, ya sean


físicos o psicológicos y emocionales, de donde los primeros son desarrollados en la
pubertad, el cuerpo infantil se transforma en cuerpo adulto, teniendo la capacidad para
la reproducción, y los segundos en la adolescencia, aquí se presentan diferentes
conflictos por las decisiones que este adolescente debe tomar dentro del circulo social
en el que se encuentre.

Aunque se debe hacer notar que el crecimiento y desarrollo hormonal que se tiene
durante la adolescencia, repercute en las emociones de los jóvenes, ya que existen
grandes cambios y adaptaciones que hacen que atraviesen por momentos de
incertidumbre e inseguridad.

Los cuerpos masculino y femenino se diferencian enormemente durante la


pubertad, los adolescentes ya no son los mismos cambian sus caracteres sexuales
primarios y los caracteres sexuales secundarios (ejemplo: cambio de voz,
ensanchamiento de hombros en varones y de caderas en mujeres).

Este proceso de transformación se debe a una serie de mecanismos hormonales


que desencadenan un largo proceso de cambios.

Las principales características físicas que presentan los hombres en la


adolescencia son:

§ Crecimiento de testículos y pene con un pequeño surgimiento de vello púbico


§ Cambio de voz
§ Aparición de la primera eyaculación
§ Vello en axilas y en la parte superior de bigote
§ Ensanchamiento de hombros
§ Aumento rápido de estatura
Las mujeres presentan entre otras, las siguientes características físicas en su
desarrollo:
§ Ensanchamiento y redondeamiento de caderas
51

§ Desarrollo del pecho, pigmentación de areolas y pezones


§ Surgimiento de vello púbico y axilas
§ Aparición de la menstruación

Los cambios anteriormente descritos son procesos que se producen relativamente


de manera lenta y pueden ser observables, tomando en consideración las edades en
que ocurren estos cambios, es que comienzan en los hombres entre los 12 y 13 años
terminando entre los 16 y 18años. En las mujeres comienzan en promedio hacia los 10
y 11 años y culminan hacia los 14 y 16 años.

Las edades de desarrollo anteriormente citadas son indicadores promedio, ya que


se puede dar una variación muy amplia, donde los hombres pueden empezar su
proceso madurativo a los 10 años y otros pueden terminarlo a los 20, así mismo las
mujeres pueden comenzar este desarrollo a los 9 años, prolongándose en otras hasta
los 18. Las causas que hacen que los procesos de maduración ocurran más temprano o
más tarde se deben a las implicaciones de tipo genético, ambiental, social o forma de
vida que lleva cada adolescente.

Es evidente que los cambios físicos desempeñan un papel importante en la


adolescencia, ya que al cambiar su imagen, el adolescente trata de modificar su visión
del mundo, buscando nuevas formas de convivencia con el medio que lo rodea, con
amigos de la misma edad con los que pueda identificarse al conversar (comparten ideas
muy semejantes).

“Al iniciar la adolescencia , se despierta el deseo sexual, en los jóvenes,


intenta reafirmar sus intereses profesionales y sociales, desea una plena libertad
y autonomía, da a conocer sus virtudes y capacidades, al mismo tiempo que
comienza a descubrirse así mismo, estableciendo nuevas relaciones,
enriqueciendo su vida afectiva, por otra parte, resulta necesario destacar, que no
siempre el proceso de esta etapa culmina satisfactoriamente…depende de
variadas características que vive y tiene cada uno de ellos…” (HERNANDEZ
Pérez; Yolanda; 2001:25)
52

Enfrentándose a una gran variedad de cambios en su persona, el adolescente


puede llegar a tener problemas que lo desestabilicen. Esto le pude provocar estar
siempre de mal humor, triste, angustiado, enfadado y en muchas ocasiones estar en
contra de sus padres, ya que estos quieren imponerle ciertas normas que a éste no le
agradan por que pretende ser autónomo y libre.

Todo esto puede llevar consigo el bajo rendimiento escolar, una rebeldía total (con
la familia y la escuela), y lo principal el no saber quién es y sobre todo no tener claro un
autoconcepto para poder dirigir su vida.

Durante esta etapa es donde debe encontrar mucha comprensión por parte de los
que le rodean, en este caso son los familiares, maestros y amigos, que puedan
ayudarlo en verdad a superar sus dificultades, ya que esto determina en mucho su vida
adulta.

Los desequilibrios y la inestabilidad por los cuales atraviesa el adolescente, en


ocasiones son perturbadores para los adultos, pero es absolutamente necesario para el
adolescente ya que por medio de este proceso establece su identidad, es decir
comienza a saber quien es en realidad, cómo es y sobre todo hacia donde se dirige, por
esto la adolescencia es un momento vital del joven.

Para Aberasturi y Knobel (1988), la “sintomatología” o características del


adolescente se pueden describir de la siguiente manera.

1. El adolescente busca su sí mismo y su identidad

2. Existe una tendencia grupal

3. Hay necesidad de intelectualizar y fantasear

4. Viene una crisis religiosa que puede ir desde el ateísmo hasta el misticismo.
53

5. Hay desubicación temporal donde el pensamiento adquiere características del


pensamiento primario

6. Evolución sexual manifiesta que va desde el autoerotismo hasta la


heterosexualidad genital adulta

7. Existe una actitud social reivindicadora con tendencias anti sociales de diversa
intensidad

8. Hay contradicciones sucesivas en las manifestaciones de la conducta,


dominadas por la acción.

9. El adolescente se separa progresivamente de sus padres.

10. Existen cambios constantes fluctuaciones de humor y de estado de ánimo

Con las características anteriores se puede dejar un amplio panorama de cómo es


y como tiende a comportarse un adolescente durante su desarrollo. Puede tener
muchas más características pero estas son por las cuales atraviesa con más
frecuencia, aunque esto no limita la investigación o análisis posterior

En el período adolescente, se pretende que el joven busque un concepto de sí


mismo dotado de características físicas e internas que llegan a formar su autoconcepto
para tener una identidad más estable, que perdure por largo tiempo.

3.2 EL ADOLESCENTE Y LA FORMACIÓN DE SU AUTOCONCEPTO

La adolescencia empieza a desarrollarse en el transcurso de la secundaria,


tomando en cuenta que este es un nivel muy difícil, ya que el adolescente no solo se
enfrenta a los cambios físicos y psicológicos implícitos en su desarrollo, sino que
también se encuentra con el cambio de nivel educativo, de la primaria a la secundaria,
54

donde ya tiene 12 maestros diferentes y convive con ellos solamente 50 minutos


algunos días de la semana.

Así es conveniente que su desarrollo y conflictos puedan tratarse en equipo, es


decir, los padres de familia, docentes, orientadores y amigos, para apoyarlo en su paso
de niño a persona madura.

Durante este período se presentan tres duelos fundamentales que para


Aberastury (1988) son:

a) Duelo por el cuerpo infantil perdido.

b) Duelo del rol y la identidad infantiles, ya no se es el niño pequeño y en ocasiones


consentido, sino que es alguien que tiene responsabilidades con sus padres y la
sociedad.

c) Duelo por los padres de la infancia a los que trata de retener en su personalidad.

Estos duelos provocan que se sienta cada vez más vacío y sobre todo con
muchos cambios a la vez. Es por esto que la actitud del adolescente es de inseguridad
y desconfianza para establecer una comunicación abierta con sus padres y profesores,
buscando amistad con grupos de jóvenes sin importarles qué tan adecuados sean para
él.

Durante el período adolescente es evidente que el joven busca formar un


concepto de sí mismo para encajar en la sociedad y llevar una vida equilibrada en su
edad adulta. Esto resulta difícil para el adolescente ya que su autoconcepto se forma a
medida que va cambiando e integrando las concepciones que sobre él tienen las demás
personas, grupos e instituciones, además de asimilar los valores y reglas que la
sociedad le va marcando en el transcurso de su vida.
55

El adolescente al no encontrar una identidad o al no saber quien es, se puede


presentar como varios personajes, ya sea como sus padres, amigos o maestros, así
pretende copiar la forma de ser del otro, al no encontrar todavía cómo manejar las
normas de la sociedad, sus cambios físicos y psicológicos, lo que piensa de si mismo y
lo que los demás piensan de él para integrarlos y de ahí formar un autocondepto
positivo de él mismo.

“La idea del sí mismo o “self” implica algo mucho más amplio en todas la
etapas del desarrollo. Es el conocimiento de la individualidad biológica y social,
del ser psicofísico en su mundo circundante que tiene características especiales
en cada edad evolutiva. La consecuencia final de la adolescencia sería un
conocimiento del sí mismo como entidad biológica en el mundo, el todo
biopsicosocial de cada ser en ese momento de la vida. Al concepto del “self”
como entidad psicológica se une el conocimiento del substrato físico y biológico
de la personalidad” (ABERASTURY, Arminda; 1988:47-48)

Aquí nuevamente se encuentra que el autoconcepto se desarrolla de acuerdo a la


integración que haga el adolescente de los momentos y las experiencias de su vida.

Al llegar a comprender y acomodar todas esas experiencias que ha tenido, el


adolescente puede concluir la formación de un autoconcepto que integre la totalidad del
joven, en lo social, familiar y escolar.

“Con la llegada de la adolescencia se va a producir una serie de cambios


físicos y psíquicos que van a tener una importante repercusión sobre el
autoconcepto del sujeto” (OLIVA, Alfredo, 2000:472)

No se debe dejar de lado, que los cambios físicos que sufre el joven durante la
adolescencia son tan importantes, por descubrir que su cuerpo cambia se va
configurando un sí mismo nuevo, que poco a poco va consolidándose mejor por medio
de las experiencias, la filosofía de vida y el sistema de creencias que los adolescentes
tienen. Con esto puede decirse que el individuo puede llegar a formar un autoconcepto
propio y sólido que le permita vivir bien con la sociedad y con él mismo.
56

A medida que el adolescente adquiere un pensamiento formal podrá ir tomando


más conciencia de lo que él mismo es, y cómo se concibe dentro de una sociedad, con
todas las características que tiene personalmente. Al decir pensamiento formal nos
referimos a la reflexión que el adolescente va adquiriendo con el tiempo llegando así a
la formación de un autoconcepto.

Durante la adolescencia se desarrollan distintos elementos cognitivos, afectivos y


sociales que resultan para el adolescente confusos y contradictorios, empiezan a
ocasionar en el joven malestar, esto es lo que podría explicar algunas actitudes y
comportamientos incoherentes en los chicos.

Cabe mencionar que es hasta la adolescencia tardía, como menciona Alfredo


Oliva(2000), de los 18 a los 21 años cuando el adolescente toma conciencia y puede
construir una imagen de sí mismo integrada y diferente a los demás. Aquí es donde ya
se tiene un equilibrio constante del autoconcepto.

Según Violeta Cardenal (1999), los factores que pueden contribuir al


establecimiento de un autoconcepto en la adolescencia, son los siguientes:

a) Constante confrontación con la vida académica, lo cual obliga al adolescente a


una continua y progresiva identificación de sus capacidades y aptitudes.

b) Necesidades de establecer una autonomía e independencia personal, seguida


del deseo de distinguirse de sus padres, desarrollando una ideología y una
manera de pensar.

c) Identificación pasajera pero al mismo tiempo intensa, del adolescente con otros
grupos o compañeros situados en sus mismas circunstancias.

Durante este periodo no deben sorprender las numerosas variaciones que el


adolescente se plantea como la imagen corporal, las percepciones de sí mismo en
57

gustos e intereses, las aspiraciones, las cualidades y defectos y las capacidades y


aptitudes.

El autoconcepto se maneja en este trabajo durante la adolescencia, ya que es una


etapa en la que los individuos tienen un grado de organización perceptual más amplio
que les permite establecer un concepto de sí mismo.

Ante esta situación es importante tomar en cuenta al orientador educativo ya que


es el quien puede orientar al adolescente, cuando se encuentre confundido y
desubicado, para que logre formar un autoconcepto. Además si el adolescente no tiene
la noción de cómo conformar su autoconcepto, el orientador es quien debe apoyarlo,
además de hacer notar la importancia que el desarrollo de un autoconcepto tiene para
una vida futura y más plena.

3.3 IMPLICACIONES DEL AUTOCONCEPTO

Como se ha visto durante toda su vida el adolescente se encuentra rodeado de la


sociedad, así en esta se encuentra la escuela y la familia, aquí podremos ver qué tan
implicados están cada uno de estos círculos sociales en la formación del autoconcepto
del adolescente, para concluir qué tanta influencia positiva o negativa pueden tener
para el joven. Esto es de suma importancia ya que así podemos deducir que parte de
su sociedad puede ayudar mejor en la formación de un autoconcepto más pleno y
positivo para el adolescente.

Se debe tomar en cuenta que “…una imagen positiva de sí mismo condiciona: una
buena autoestima, una percepción de auto eficacia ante el trabajo realizado, una buena
adaptación al contexto social y familiar” (SUREDA García, Inmaculada; 2001:11); esto
para que el adolescente tenga un mejor concepto de sí mismo y se encuentre bien con
las personas que lo rodean. Por tal motivo se revisan los núcleos sociales en los que
58

este individuo se encuentra para poder definir qué importancia tiene cada uno de ellos
en la formación de su autoconcepto.

3.3.1 FAMILIAR
Este apartado es importante ya que el adolescente crece y se desarrolla dentro de
un núcleo familiar y es el que va a determinar en mucho su autoconcepto, siendo que
con la familia es con la que se encuentra más apegado, es decir recibe de ellos las
diferentes percepciones que tienen del joven

La familia es un factor que ayuda a conformar un proceso adecuado en el joven


además de un desarrollo integral que le permita desenvolverse conforme a las reglas de
la vida social.

Durante la adolescencia como ya se mencionó la familia juega un papel muy


importante ya que es donde se dan las reglas, normas y valores que debe seguir el
adolescente, es aquí donde él al sentirse abrumado por todo lo que le dicen, rechaza
todas las formas de vida familiar buscando con sus iguales para lograr cierta identidad
con ellos, y así no sentirse tan agobiado.

Cuando los padres de un adolescente son muy autoritarios es muy probable que
éste se sienta confundido y sobre todo desubicado, posiblemente sea un joven al que le
cueste mucho trabajo la conformación de un autoconcepto, ya que lo que piensa de sí
mismo esta demasiado alejado a lo que sus padres le obligan a asimilar; es decir no
puede integrar su yo real y su yo ideal, siendo que lo hacen perder la conciencia de lo
real, al proporcionarle una realidad muy exagerada. No dejan que él sólo asuma
valores y juicios por su propia iniciativa, para que pueda interiorizarlos y a su modo
conformarlos para describir así un autoconcepto.
La familia además de proporcionar normas y valores, debe ser un apoyo para el
adolescente, con el fin de que pueda tener alternativas y posibilidades de superación
personal, en este caso el desarrollo de un autoconcepto, que le permita evitar
59

situaciones difíciles como deserción escolar, drogadicción, etc. y alejarse


completamente de la familia. (HERNÁNDEZ Pérez, Yolanda; 20001)

Así el adolescente si vive en una integración familiar correcta, llega a desarrollarse


plenamente, sin fracasos o frustraciones que le impidan el desarrollo de su
autoconcepto adecuado.

Para que esto suceda es importante que en la familia haya comunicación con los
padres, que propicie libertad, apoyo e intimidad hacia el adolescente para que este se
sienta seguro y con la confianza suficiente que le permita desarrollarse libremente.

…la familia es la escuela de autoconcepto, pues éste es aprendido y los


padres son los maestros principales; si el maestro no tiene un autoconcepto
saludable será difícil que pueda enseñarlo a sus discípulos…” (BLANCO P.,
Isauro, 1997: 55-56)

En esta cita podemos ver que la familia es alguien muy importante para la
formación del autoconcepto del joven, ya que desde la infancia es cuando se
comienzan a transmitir mensajes positivos o negativos que se quedan grabados en él
para que cuando sea adolescente los refleje en su autoconcepto. Para que haya
mensajes buenos en el joven es necesario que los padres traten con respeto a sus hijos
para que estos puedan sentirse valiosos e importantes, esto quiere decir que debe
existir una relación afectiva entre padres e hijos que permita un desarrollo armónico
entre los miembros de la familia, por ejemplo pueden manifestarle motivaciones,
expresiones afectivas, comprensión, etc.

También es importante que la familia transmita manifestaciones positivas que


puedan ayudar al joven a que sienta que es una persona capaz y suficiente para hacer
muchas cosas. Al transmitir pensamientos de este tipo el joven podrá conformar un
autoconcepto más pleno y positivo.
Las percepciones que el individuo hace dentro de la familia, también son
importantes, porque puede introyectarlas al pensar que pudieron haber sido
60

experimentados directamente. Así es deseable que los aspectos de la experiencia del sí


mismo sean significativos y satisfactorios para el individuo.

3.3.2 ESCOLAR
Dentro de la familia se encuentran los primeros cimientos para conformar un
autoconcepto, y es donde el joven tiene sus primeras interacciones positivas o
negativas; la escuela es un círculo social con el cual el joven tiene un segundo roce, al
encontrarse largo tiempo dentro de este. Así la escuela puede ayudar al individuo a
conformar un autoconcepto por medio de la intervención del Orientador Educativo en la
secundaria. Aunque toda la comunidad escolar, participa en este cometido, el orientador
puede hacerlo de una manera deliberada y sistemática. Esta intervención puede
desarrollarse por medio de diferentes técnicas y actividades no directivas, las cuales
deben ayudar al individuo a integrar todas esas concepciones que tiene de sí mismo ya
sean personales o transmitidas por la sociedad para lograr así la conformación de un
autoconcepto claro y aceptable para él mismo y la sociedad.

“…aunque el profesor no se comprometa en la instrucción de las habilidades


sociales y en la mejora del autoconcepto de los alumnos, de manera
inconsciente sigue moldeando actitudes y comportamientos sociales entre sus
alumnos, formando parte de un “curriculm oculto”. Así pues, en estos casos, el
desarrollo personal y social de los alumnos depende más del sistema de
relaciones profesor-alumnos y alumnos-alumnos, que de los contenidos
formalmente tratados…” (SUREDA García, Inmaculada; 2001:14)

Aquí se puede encontrar un punto muy importante referido a la escuela, ya que


esta transmite a los alumnos diferentes elementos (percepciones o concepciones) que
pueden afectar o beneficiar al adolescente, esta transmisión se realiza de manera
implícita, esto es, no se puede observar específicamente como esto puede moldear o
conformar actitudes entre los jóvenes, por eso se dice que es un curriculum oculto, es
decir, no se describe en un programa como debe ser el comportamiento de un profesor
en cualquier nivel educativo, pero existe dentro de la relación profesor-alumno.
61

Así mismo las interacciones que se desarrollan en la escuela, entre maestros-


alumnos y alumnos-alumnos afectan en la formación de un autoconcepto, ya que entre
ellos se transmiten diferentes percepciones y cada uno tiene un concepto diferente del
otro en cuanto a su persona.

Como podemos ver el ámbito escolar esta lleno de interacciones que interioriza el
adolescente, para que junto con sus propias percepciones pueda integrarlas y formar
así un autoconcepto satisfactorio para él mismo.

Así, si dentro de la Escuela existen relaciones autoritarias, el adolescente tenderá


en ocasiones rebelde en el salón de clases, y en otras puede ser cohibido y llegar a
tener una actitud inhibida, lo cual impedirá el crecimiento del mismo para lograr la
conformación de un autoconcepto propio.

En cambio, si la relación profesor-alumnos, es democrática, el adolescente


tendera a ser más autónomo, lo que le permite tener decisiones propias que le ayuden
a ser más responsable de sus propios actos, lo que le brinda estar rodeado de factores
positivos, con los cuales puede construir un concepto de sí mismo que va a llevarlo a
una vida equilibrada, sin pretender ser otra persona o querer copiar las características
de alguien más.

Con el transcurso educativo (secundaria) y con todos los aprendizajes obtenidos,


es deseable que al final de esta se llegue a formar una imagen equilibrada y ajustada
de sí mismo, para que el adolescente desempeñe actividades de participación activa y
responsable en la sociedad que le permita construir su propio bienestar. (SUREDA
García, Inmaculada; 2001
62

3.3.3 SOCIAL
El autoconcepto no es algo que se tiene desde el nacimiento, es un componente
de la personalidad, que aparece y se consolida conforme a la interacción social con los
otros, posteriormente esto se interioriza y forma parte del sí mismo, pero este
autoconcepto no solo se forma en función de lo que los demás proyectan al
adolescente, sino es a partir de la interpretación que hace a este proceso de interacción
con los otros, por esta razón el autoconcepto constantemente se modifica y tiene
cambios continuos derivados de las nuevas experiencias que tiene el joven dentro de la
sociedad.

El concepto de sí mismo o autoconcepto se forma a partir de una edad muy


temprana por medio del proceso de socialización, principalmente con las personas más
significativas al individuo.

Esta socialización de la que se habla son las diferentes interacciones que se


tienen a lo largo de la vida del individuo, estos pueden ser amigos, parientes,
conocidos, maestros, etc. Al interactuar con ellos y recibir de ellos diferentes
comentarios sobre el joven, estos se interiorizan, según este supone que los demás lo
perciben, para lograr una concepción de sí mismo.
Algo importante que debe tener en cuenta el individuo para conformar su
autoconcepto es:

“…la capacidad del individuo de seleccionar y filtrar la información


proveniente de su entorno social sobre su personalidad, de manera que la
compare con sus propias auto percepciones mediante un proceso de análisis
activo y evaluativo incorporando aquellas que se corresponden más
coherentemente con su idea de sí” (CARDENAL Hernaez, Violeta; 1999:67)

Lo anterior es lo más adecuado para que el estudiante forme su autoconcepto, ya


que sabemos que la sociedad en la que vive: familia, escuela, amigos, etc. siempre van
a describir sus características, ya sean favorables o no para él, así el individuo debe
plantearse la necesidad de seleccionar la información que le pueda servir en verdad
para su propio autoconcepto.
63

REFENRENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

ABERASTURY Arminda y KNOBEL Mauricio. (1988), La adolescencia normal, un


enfoque psicoanalítico, México, Ed. Paidós

BLANCO P., Isauro (1997), Educación Preventiva, México, Editorial Ger

CARDENAL Hernaez., Violeta (1999), El autoconocimiento y la autoestima en el


desarrollo de la madurez personal, Málaga, Ediciones Aljibe

HERNANDEZ Pérez,. Yolanda (2001), La importancia de la función del orientador


educativo, en el nivel medio básico secundaria, tercer grado, México DF, Tesina para
obtener título de Licenciada en Pedagogía

OLIVA, Alfredo (2000), Desarrollo de la personalidad durante la adolescencia, En:


PALACIOS Jesús, MARCHESI A., COLL C. (comp.) Desarrollo Psicológico y Educación
I Psicología Evolutiva 2ª. Edición, Madrid, Alianza Editorial

SUREDA García, Inmaculada (2001), Cómo mejorar el autoconcepto, Programa de


intervención para la mejora de habilidades socio personales en alumnos de secundaria,
Madrid. Ed. CCS
CAPÍTULO IV

SEMINARIO-TALLER DIRIGIDO A
ORIENTADORES EDUCATIVOS
65

SEMINARIO TALLER DIRIGIDO A


ORIENTADORES DE ESCUELAS
SECUNDARIAS

EL DESARROLLO DEL AUTOCONCEPTO EN


ALUMNOS DE EDUCACIÓN SECUNDARIA

ELABORADO POR:
SANDRA JAQUELINE GILBAJA ARTEAGA
UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL
ENERO, 2005
66

PRESENTACIÓN

El presente seminario-taller esta dirigido a Orientadores Educativos que se


encuentren prestando sus servicios en el nivel secundaria e interesados en el desarrollo
integral del adolescente.

Este seminario-taller se imparte con el fin de que los orientadores educativos


tengan una visión más amplia en cuanto a la Orientación, además de proponerles
algunas funciones que pueden desempeñar en su labor con los adolescentes. Dentro
de este evento se propone a los orientadores trabajar con los contenidos del “Enfoque
Centrado en la Persona” para proporcionar a los adolescentes un recurso humanista
que tome en cuenta sus intereses y necesidades para formar así un autoconcepto más
pleno.

Al apropiarse de estos contenidos el orientador podrá tomar en cuenta que además


de sus funciones administrativas y docentes debe desempeñar aquellas que ayuden al
adolescente a conformar su autoconcepto, ya que es que es el que está interesado en el
desarrollo del adolescente, tanto escolar, familiar y sobre todo personal, tomando en
cuenta que esta última área es donde se encuentra el autoconcepto que el sujeto va a
plantearse para estar mejor consigo mismo.

Este seminario pretende ser solo un complemento más para los orientadores dentro
de su formación, tomando en cuenta que hay funciones y conceptos de Orientación y
Orientador que están establecidos por los planes y programas en las escuelas
secundarias y que deben llevarse a la práctica, por todos los orientadores. Solo que este
seminario les proporciona un espacio donde acordar puntos de vista semejantes para
así poder llevar a cabo, si es necesario nuevas o mejores actividades que pueden ser
extra curriculares y ayuden a los adolescentes en el departamento de orientación.
67

Se toma en cuenta al “Enfoque Centrado en la Persona” como una alternativa para


el Orientador, ya que así va a poder apoyar al joven a conformar un autoconcepto pleno
que le permita desenvolverse en su sociedad con seguridad y eficiencia.

Tomando en cuenta que el enfoque centrado en la persona es producto de los


escritos de Carl Roges, es decir es un enfoque humanístico, así en este seminario-taller
los contenidos son flexibles y solo son propuestos, si es necesario se pueden realizar
cambios según lo convengan las personas que reciben el mismo.

METODOLOGÍA

El seminario-taller se desarrolla en 4 Unidades Temáticas, las cuales proporcionan


al Orientador, teoría, diferentes técnicas y una metodología, de Orientación,
Adolescencia y autoconcepto, lo cual permita que el Orientador ayude o apoye al joven
en el desarrollo de su autoconcepto, basado en la teoría humanista de Rogers “Enfoque
Centrado en la Persona”.

Cada Unidad se desarrolla con base en sesiones divididas en 2 horas cada una,
donde la mitad del tiempo se destina al análisis de una lectura relacionada con el tema
que se está viendo, este análisis se desarrolla con actividades que propicien un
aprendizaje más conciente y significativo para los Orientadores.

La siguiente mitad del tiempo se dedica a la práctica, es decir a actividades que


pueden ayudar al Orientador a lograr una mejor comprensión del seminario-taller, estas
actividades están encaminadas a abordar el autoconcepto, desde la perspectiva
humanista del “Enfoque Centrado en la Persona”.

Los tiempos que se marcan en este seminario están propuestos para 24 horas,
distribuidas en 2 sesiones a la semana tomando en cuenta que las sesiones y las horas
pueden variar según la institución o las necesidades que presente el grupo al que se
imparte.
68

En los análisis de lectura se pretende que los Orientadores involucrados en el


seminario pongan a discusión sus opiniones para llegar a una sola conclusión. Estas
opiniones deben basarse en las experiencias y en las opiniones de la propia lectura.

Las actividades proporcionadas y asimiladas por el Orientador son para que pueda
llevarlas a cabo con sus alumnos de secundaria, apoyándolos en la formación de un
autoconcepto más estable y pleno. Recordando que las actividades son flexibles, los
participantes están en libertad de proponer otras que sean para todos las más
apropiadas.

El papel que juega el maestro o guía que imparte este curso es el de un facilitador,
por lo cuál debe ser empático, congruente y aceptante (tener una actitud de
aceptación), de esta manera no solo facilita el diálogo entre los participantes, sino que
pone el ejemplo de cómo un orientador ayuda a la formación de un autoconcepto desde
el marco del “enfoque centrado en la persona”, este es el punto más relevante del taller
para conseguir objetivos, desde el marco teórico de Carl Rogers.

Las actividades, son retomadas de diferentes libros y adaptadas para los fines de
este seminario-taller. Se hacen las acotaciones correspondientes en cada actividad.
Otras actividades son sugerencia y creación directa de la elaboradora del presente
material.
69

OBJETIVOS GENERALES

q Propiciar debates que lleven a conclusiones generalizadas de diferentes puntos


que se tratan aquí, por medio de las lecturas y la opinión (práctica laboral) que
hayan tenido los orientadores.

q Concientizar a los Orientadores Educativos sobre la importancia que tiene el


autoconcepto durante la adolescencia, tomando en cuenta que éste es importante
para la vida futura del joven.

q Proporcionar actividades y técnicas que puedan auxiliar a los Orientadores en


cuanto a la conformación de un autoconcepto positivo para cada joven.
70

UNIDAD I

LA LABOR DEL ORIENTADOR EDUCATIVO

OBJETIVO: Analizar el campo de la Orientación Educativa, sus áreas y funciones.

TEMAS:
1. Concepto de Orientación Educativa.
2. Áreas de la Orientación Educativa.
3. Funciones que puede desempeñar un Orientador Educativo.

EJES DE ANÁLISIS:

Ø ¿Qué es Orientación Educativa?


Ø Describir las áreas de la Orientación Educativa, en la sesión.
Ø ¿Cuáles son las funciones qué puede desempeñar el Orientador Educativo en
secundaria?
Ø De acuerdo con su práctica orientadora; que funciones han cumplido cada uno de
ellos, discutir si son las apropiadas, cuales pueden ser eliminadas por ser
inadecuadas y cuales pueden llevarse a la práctica para desempeñar una labor
Orientadora más adecuada.
71

SESIÓN 1

OBJETIVOS ESPECÍFICOS:

q Presentar el seminario-taller ante los integrantes, explicar como se va a llevar a


cabo este, con todas sus metas y reglas que se tienen que seguir a lo largo del
mismo.
q Lograr una integración homogénea de los participantes de este seminario-taller,
para que su desarrollo se de lo más favorablemente posible.

En esta primera sesión se hace la presentación del profesor con el grupo, se


explica el propósito del seminario, así como los contenidos, los objetivos y la secuencia
que se va a seguir en el desarrollo de éste.

Las actividades que están diseñadas para esta sesión son para la integración del
grupo de Orientadores así como para concientizarlos de la importancia de este
seminario-taller.

Duración 30 min.

ACTIVIDADES

Actividad 1.1

Cada persona dice solamente su nombre, posteriormente se tienen que formar


pares de personas que no se conozcan entre si, estas parejas tienen que presentarse
diciendo lugar de procedencia, gustos, preferencias, etc.

Posterior a esto se desintegran las parejas y el grupo se integra para que cada
persona presente y describa a su pareja, esto lo hacen todos los miembros del grupo.

Duración 30 min.
72

Actividad 1.2

Se realiza la actividad llamada “CARTA DE PRESENTACIÓN”, (actividad tomada y


adaptada para fines didácticos de: “Técnicas participativas para la educación popular”)
donde los integrantes, en una hoja tamaño carta escriben una respuesta breve y
concreta a la siguiente pregunta: ¿por qué estoy en este seminario-taller?, después cada
uno se pega su hoja en el pecho y se concentran en medio del salón, sin hablar buscan
todos las respuestas que más coincidan con la de ellos, se toman del brazo y forman
equipos para discutir su respuesta, y llegar a una sola conclusión.

Estas conclusiones a las que se lleguen tienen que tomarse en cuenta durante el
desarrollo del seminario-taller, para corroborar al finalizar este si corresponde a lo que
ellos esperan.

Finalmente se entrega el programa de este seminario-taller, para que los


orientadores conozcan los temas que se tratarán en este, así mismo se resuelven dudas
y se admiten comentarios.
Duración 60 min.

Se entrega la lectura para la siguiente sesión, haciendo notar que debe venir
previamente leída y con las ideas principales.

CASTILLO, Arredondo Santiago; (1989) Orientación Educativa, el consejo orientador al


término de la EGB. Cincel, Madrid. Pp.13-22.
73

SESIÓN 2

CONCEPTO DE ORIENTACIÓN EDUCATIVA

OBJETIVO ESPECIFICO:

q Concluir en un concepto específico de Orientación Educativa, tomando en cuenta


la lectura y las experiencias de los orientadores, miembros de este taller, el cual
tiene que tenerse presente para este taller.

ACTIVIDADES:

Actividad 2.1 TEÓRICA

De acuerdo con la lectura previamente realizada y las ideas principales que cada
quien trae sobre la misma, se pide a cada persona proporcione una palabra clave que
pueda describir el tema a tratar, esta se debe escribir en el pizarrón, todo el grupo
participa, al terminar se forman equipos de 6 personas para que realicen una pequeña
reflexión sobre la lectura en base a las palabras que se tienen escritas, todas las
reflexiones se leerán a todo el grupo para finalmente llegar a una conclusión, integrando
una sola definición de Orientación Educativa, que será producto del seminario.

Duración 60 min.
74

Actividad 2.2 PRÁCTICA

Se realiza una actividad referente al autoconcepto sin mencionarlo a los


participantes, solo tienen que saber el nombre de la actividad y realizarla. La actividad se
llama “COMO ME VEO Y COMO ME VEN” (actividad tomada y adaptada para fines
didácticos de este seminario-taller de: SUREDA, Inmaculada: 2001).

La actividad se presenta pidiendo a los Orientadores realizar una pequeña


redacción sobre aspectos que se relacionan con su persona y su entorno como:
cualidades, defectos, características físicas, éxitos, etc., esto irá escrito de un lado de la
hoja, y del otro lado redactará los aspectos negativos y positivos de su familia así como
los elementos de su personalidad que le gustan o disgustan a familiares y amigos.

Seguido a esto se forman parejas para que comenten su autodescripción, para


verificar si coincide con la percepción que el compañero tiene del otro, siempre
resaltando lo positivo. Se integra el grupo para escuchar las autodescripciones y analizar
si son positivas y realistas, desechando las negativas e irrealistas.

Esto permitirá potenciar el autoconocimiento y autoaceptación de sí mismo para


que cada integrante pueda reforzar la imagen positiva de sí mismo, y si es posible
realizar cambios y mejoras en su autoconocimiento. La actividad finaliza con los
comentarios que cada uno tenga sobre lo que más les gusto de la actividad.

Duración 60 min.

Se indica la siguiente lectura, pidiendo que la traigan previamente leída, subrayando las
ideas principales.

CASTILLO, Arredondo; Orientación Educativa, el consejo orientador al término de la


EGB. pp. 22-50
75

SESIÓN 3

ÁREAS DE LA ORIENTACIÓN EDUCATIVA

OBJETIVO ESPECÍFICO:

q Definir las áreas de la Orientación Educativa de acuerdo a la lectura y a los


comentarios y experiencias de los orientadores.

ACTIVIDADES

Actividad 3.1 TEÓRICA

Se comienza con la actividad “LLUVIA DE IDEAS POR TARJETAS”(actividad


tomada y adaptada para fines didácticos de este seminario-taller de: “Técnicas
participativas para la educación popular”), formando equipos de tres personas para que
entre ellas comenten sobre la lectura, en este caso sobre las tres áreas de la Orientación
Educativa que se manejan en este seminario, el equipo tiene que anotar en tarjetas o
fichas bibliográficas las ideas principales que considere más importantes de la lectura,
mínimo 8 por quipo.

Seguido a esto se anota el tema en el pizarrón “Áreas de la Orientación Educativa”,


cada equipo leerá sus tarjetas una a una para que posteriormente se peguen en el
pizarrón, ordenadas de acuerdo con sus contenidos, se anotan los subtítulos de las
áreas que se hayan convenido, para que se proceda a la discusión del tema, si esto es
real o no y ¿porqué? Comentar en plenaria, cuales son las Áreas que ellos como
Orientadores conocen o manejan durante su trabajo diario, para tomar todo esto en
consideración y llegar a una reflexión más conciente y real.

Duración 70 min.
76

Actividad 3.2 PRÁCTICA

En esta actividad cada integrante del grupo tiene que ponerse una hoja pegada en
la espalda para que todos los demás puedan escribir en cada uno como lo describen en
pocas palabras, esto tiene que ser lo más real posible.
Después se lee esta hoja individualmente y se discute qué es lo positivo que puede
sacar cada uno a esto para que puedan tener una autodescripción más amplia., aquí se
pide a todos que participen.
Duración 50 min.

Se proporcionan las lecturas para la siguiente sesión:

ABARCA, Cancino Rosalía. La adolescencia, en: El cuaderno de los maestros de aguas


calientes, año 2000, V. 3 No. 12 pp. 12-13.

PALACIOS, Jesús. et. al. La adolescencia y su significado evolutivo, en: Desarrollo


psicológico y Educación I, Psicología evolutiva, Madrid ¿año? Alianza Editorial pp. 433-
450.
77

UNIDAD II

CONOCIMIENTO DE LA ADOLESCENICA

OBJETIVO: Identificar las características del adolescente, para que el orientador


educativo tenga una visión más amplia sobre lo que son los adolescentes y las etapas
por las que atraviesan, para que haya una mejor comprensión con ellos.

TEMAS:
1. Concepción de Adolescencia.
2. Cambios Físicos y Emocionales del Adolescente.
3. Conflictos por los que atraviesa un Adolescente.

EJES DE ANÁLISIS:
Ø Descripción de la adolescencia.
Ø Los cambios físicos y emocionales que presenta el adolescente.
Ø Conflictos más relevantes por los que puede atravesar un adolescente.

SESIÓN 4

CONCEPCIÓN DE ADOLESCENCIA

OBJETIVO ESPECÍFICO:

r Llegar a un concepto homogéneo de adolescencia dentro del taller, partiendo de la


lectura y culminando con comentarios prácticos de los orientadores.
78

ACTIVIDADES

Actividad 4.1 TEÓRICA

Dentro de esta actividad se forman equipos de 4 a 6 personas para que hagan un


programa de TV., donde puedan destacarse los elementos de la lectura sobre
adolescencia, es decir, como es un adolescente de acuerdo a la descripción de la
lectura.

Ya que cada equipo represento su idea, el grupo discute los puntos que se tocaron
en cada representación tomando en cuenta si son verdaderos o no de acuerdo a su vida
laboral, se llega a un concepto de adolescencia.

Duración 70 min.

Actividad 4.2 PRÁCTICA

La actividad que se realiza es “AUTOAFIRMACIONES”(actividad tomada y


adaptada para fines didácticos de este seminario-taller de: SUREDA, Inmaculada:2001)
explicando que: somos lo que queremos ser o lo que nos decimos que somos y no
lo que quieren que seamos, aquí todos los participantes tienen que escribir en
pequeñas tarjetitas todas las expresiones y cualidades positivas que tengan para
consigo mismas, posteriormente cada uno tiene que leer lo escrito a los demás
compañeros con decisión y firmeza, al final de esto se comenta, sobre la importancia
que tuvo esta actividad y qué sentimientos movió, si es que lo hizo.

Es de vital importancia aquí el tratamiento que da el responsable del seminario ya


que como en el resto de las sesiones, el papel del conductor del seminario-taller, es de
dar respuestas empáticas, manifestar genuinidad y respeto y así propiciar con el
ejemplo, los objetivos del curso.

Duración 50 min.

Se sugieren las siguientes lecturas, y se pide que se lean para la siguiente clase.

ABERASTURY, Arminda. El adolescente y la libertad, en: ABERASTURY A, KNOBEL M.


La adolescencia Normal, un enfoque psicoanalítico, México 1988 Ed. Paidós pp. 14-33.
79

GONZÁLEZ, G. Clara. La importancia de la labor de la orientación en la adolescencia,


en: Revista Mexicana de Pedagogía Año 1996, V 7 No. 31 pp. 20-22.

SESIÓN 5

CAMBIOS Y CONFLICTOS POR LOS QUE ATRAVIESA UN


ADOLESCENTE

OBJETIVO ESPECÍFICO:

r Identificar los cambios y conflictos por los que atraviesa un adolescente por medio
de la lectura y la experiencia laboral de los integrantes.

ACTIVIDADES

Actividad 5.1 TEÓRICA

Para esta actividad se forman 2 equipos, para que cada uno analice una lectura y
tomen las ideas principales sobre: 1) los cambios físicos y emocionales del adolescente
y 2) los conflictos por los que atraviesa el adolescente. Al final los puntos de vista sobre
los temas se llevan a discusión para llegar a una sola conclusión o punto de vista en
común.

Duración: 90 min.
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Actividad 5.2 PRÁCTICA

La actividad que se lleva a cabo es “YO SOY - YO REPRESENTO SER” (actividad


tomada y adaptada para fines didácticos de este seminario-taller de: STEVENS John O:
1976) donde se forman parejas, para que cada una mirándose a los ojos le diga a su
compañero su propia descripción comenzando con “Yo soy”, así le dice todas sus
características, después cambian de lugar y el otro compañero se describe a sí mismo.
Posteriormente la primer persona le repite a su compañero lo que dijo de sí mismo pero
en lugar de decir “yo soy” dice “yo represento ser”, cada frase será meditada y la
persona tiene que darse cuenta como se siente al decir esto, así lo hará la otra persona.
Al terminar pueden compartir las sensaciones que tuvieron al realizar esta actividad.

Duración: 30 minutos

Se propone la siguiente lectura:

EPSTEIN, Seymour. (1981), Revisión del concepto de sí mismo, En: FIERRO Alfredo
(comp.) Lecturas de Psicología de la personalidad, Madrid, Alianza Editorial.
81

UNIDAD III
AUTOCONCEPTO DEL ADOLESCENTE

OBJETIVO: Conocer más ampliamente el autoconcepto, tanto en definición como en


conformación del mismo durante la adolescencia, además de ratificar la importancia que
este tiene para un adolescente.

TEMAS:
1. Definición de Autoconcepto.
2. Importancia del Autoconcepto en la Adolescencia.
3. Formación del Autoconcepto.

EJES DE ANÁLISIS:
Ø Dar una definición de autoconcepto en base a las lecturas y a la experiencia
laboral de los orientadores.
Ø Como puede formar su autoconcepto el adolescente.
Ø Importancia del autoconcepto en la adolescencia.

SESIÓN 6

DEFINICIÓN DE AUTOCONCEPTO

OBJETIVO ESPECÍFICO:

r Construir una definición de autoconcepto por parte de los orientadores.


82

ACTIVIDADES

Actividad 6.1 TEORICA

Con la lectura previamente realizada se propone a los participantes realizar un


“MAPA CONCEPTUAL” en el pizarrón que contenga los elementos que puedan describir
al autoconcepto en la forma más explicativa que se pueda. Tiene que ser un trabajo en
grupo y todos participan, se da cierto tiempo, aprox. 40 min. Para elaborarlo. Al concluir
con este mapa se comienza la discusión del tema, todos pueden opinar para que al final
se lleven una misma definición de autoconcepto.

Duración: 80 min.

Actividad 6.2 PRÁCTICA

Se realiza la actividad “¿QUIÉN SOY YO?” (Actividad tomada y adaptada para


fines didácticos de este seminario-taller de: CARDENAL, G. Violeta: 1999); haciendo
énfasis en que cada persona es lo que los demás le dicen que es, de acuerdo a sus
características, ya sean positivas o negativas. En esta actividad los integrantes realizan
un círculo grande en una hoja, dentro de él se hacen otros más pequeños donde se
escriben las cosas positivas de sí mismo, al terminar de escribir se pide que se formen
parejas para discutir los contenidos de esos círculos, además se pretende encontrar las
características más similares entre los dos, para que pueda haber una comprensión
mejor con la otra persona, es decir; ponerse en el lugar del otro para comprender mejor
sus reacciones y sentimientos.

Duración: 40 min.

Se entrega la lectura para la siguiente sesión:

ALFREDO, Oliva. Desarrollo de la personalidad durante la adolescencia, en: PALACIOS


J. et. Al. Desarrollo psicológico y educación I. Psicología Evolutiva, 2ª edición, Madrid
2000 Alianza Editorial pp. 471-491
83

SESIÓN 7

AUTOCONCEPTO EN LA ADOLESCENCIA

OBJETIVO ESPECÍFICO:

r Comprender la importancia que tiene el autoconcepto en la adolescencia y cómo


puede conformarse.

ACTIVIDADES:

Actividad 7.1 TEÓRICA

Se realiza un debate grupal, sobre la importancia y la formación del autoconcepto,


todos pueden dar su punto de vista (esto sin ocasionar discusión), siempre dentro de los
dos puntos que se están debatiendo (autoconcepto y adolescencia). Es importante que
al final se llegue a una conclusión para que el grupo tenga los mismos parámetros sobre
el tema.

Duración: 60 min.

Actividad 7.2 PRÁCTICA

Se realiza la actividad “INVIRTIENDO LOS ROLES” (Actividad tomada y adaptada


para fines didácticos de este seminario-taller de: STEVENS John: 1976) donde se
forman parejas, preferentemente que se conozcan, se les pide que cambien sus roles
tomando el lugar de la otra persona, hablando como si fuera su compañero para que
pueda expresar “sus” sentimientos sobre su relación, sobre su persona o sobre lo que
esta mal entre ellos. Se expresan irritaciones, disgustos, molestias, etc.; es importante
que se intente realmente convertirse en su compañero al ver las cosas desde su punto
de vista con sus propios criterios.

Para esta actividad se destinan aproximadamente 15 min., posteriormente todo el


grupo discute esta actividad para ver qué tan fácil se realizó o qué dificultades
encontraron para hacerlo. Y sobre todo describir qué es lo que sienten los integrantes al
estar en otro rol, o en el lugar de la otra persona.

Duración 60 min.
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La siguiente lectura es para la sesión próxima:

LAFARGA, Juan (1986); Contexto histórico del Enfoque Centrado en la Persona, En


LAFARGA J. Y GOMEZ DEL C. J. Desarrollo del potencial humano, Vol. 3 Aportaciones
de una psicología humanista, México, Ed. Trillas pp. 24-55.

ROGERS Carl. (1984); Fundamentos de un Enfoque Centrado en la Persona, en:


Orientación Psicológica y Psicoterapia. Madrid, 3ª. Edición, Ed. Narcea, pp. 336-348
85

UNIDAD IV
TEORÍA DE ROGERS “ENFOQUE CENTRADO EN LA
PERSONA”

OBJETIVO: Proporcionar al Orientador Educativo la esencia de este enfoque, para que


pueda utilizarlo cuando ayude al adolescente a conformar su autoconcepto o cuando
este se encuentre en circunstancias difíciles de resolver solo.

TEMAS:
1. Descripción del Enfoque.
2. Empatía, Aceptación y Congruencia.

EJES DE ANÁLISIS:
Ø En qué consiste el “Enfoque centrado en la persona”.
Ø Cómo se puede aplicar este enfoque en la formación del autoconcepto del
Adolescente.
Ø Describir y llevar a la práctica: Empatía, Aceptación y Congruencia.
Ø Aplicar lo anterior a casos concretos.

SESIÓN 8

ENFOQUE CENTRADO EN LA PERSONA

OBJETIVO ESPECÍFICO:

r Construir un marco general que defina al “Enfoque Centrado en la Persona”


86

ACTIVIDADES

Actividad 8.1 TEÓRICA

En esta actividad se forman 2 equipos para que realicen la actividad “TECNICA DE


LOS CORRILLOS” (actividad tomada y adaptada para fines didácticos de este
seminario-taller de:(FEERINI, Rita; 1998: 82) donde se discuten las dos lecturas
propuestas para el Enfoque Centrado en la Persona, cada equipo discute una lectura, en
cuanto a que es este Enfoque, en que consiste, o pueden sugerir diferentes preguntas
en torno a la lectura para que a partir de ella se pueda llegar a conclusiones, todo lo que
se discute se escribe en un cuaderno, al finalizar se discute el tema en grupo, tratando
de rescatar todo lo más importante del tema en cuanto a las dos lecturas, Por último se
llega a la conclusión del tema y se pide a cada persona que traiga un ensayo de lo visto
para que el guía del grupo tome en cuanta cual fue la visión de cada persona sobre el
Enfoque Centrado en la Persona.

Duración 40 min.

Actividad 8.2 PRÁCTICA

La actividad se realiza con base a la descripción de la lectura, se pide que formen


equipos de 8 personas para que cada uno realice un “SOCIO DRAMA” de cómo este
enfoque puede aplicarlo el orientador en su quehacer educativo, de acuerdo a los
elementos que se pueden percibir en la lectura. Todas las personas deben participar,
interpretando lo más real este socio drama.

Duración 80 min.

Se proporciona la siguiente lectura:

GONZÁLEZ, G. Ana María. Tres condiciones, tres actitudes, en El enfoque Centrado en


la persona, aplicaciones a la educación, México 1991 2ª. Edición Ed. Trillas pp. 87-114.
87

SESIÓN 9

EMPATÍA

OBJETIVO ESPECÍFICO:

r Concluir en una sola definición de Empatía, llevando este concepto a casos


prácticos.

ACTIVIDADES

Actividad 9.1 TEÓRICA

Se propone a los integrantes, realizar una “LLUVIA DE IDEAS” (Actividad toma y


adaptada para fines didácticos de este seminario-taller de: “Técnicas participativas para
la educación popular”) en cuanto a lo que es la empatía, por parte de todos, estas ideas
Tienen que escribir en el pizarrón para que al finalizar se haga una descripción clara y
precisa de lo que es la empatía, esto para que los integrantes tengan presente este
concepto, que tienen que manejar lo mejor posible al término de este seminario-taller.

Duración 40 min.

Actividad 9.2 PRÁCTICA

Los orientadores al haber comprendido el concepto de empatía, se lleva esta a la


práctica, es decir, se forman equipos aproximadamente de 4 personas para que cada
equipo pueda presentar un problema al que se haya enfrentado, pero que ahora pueda
responder a los sentimientos que tiene una persona frente a un problema con la
empatía.

En cada equipo tiene que haber una persona que plantee un problema de un
adolescente, otra que pueda ayudar de forma empática al ayudado, otra observa y toma
nota de lo que pasa en esa conversación, mientras que la última observa y apoya al que
responde de forma empática ante el problema planteado.

Al finalizar se pide su opinión sobre qué tan eficiente y apropiado es para ellos esta
actitud para con los adolescentes, de acuerdo a las experiencias que hayan tenido.
Duración 80 min.
88

Se pide a los integrantes que la siguiente sesión tienen que proponer la actividad
para trabajar la parte teórica, que es el tema de aceptación del enfoque centrado en la
persona.

SESIÓN 10

ACEPTACIÓN

OBJETIVO ESPECÍFICO:

r Analizar la importancia de la aceptación, en el Enfoque Centrado en la Persona y


cómo puede llevarse a cabo en casos específicos.

ACTIVIDADES

Actividad 10.1 TEÓRICA

Los integrantes realizan la propuesta para esta actividad. Con una duración
aproximada de 40 min.
89

Activad 10.2 PRÁCTICA

Aquí los orientadores forman equipos de cuatro personas, para tratar problemas
específicos con la empatía y la aceptación, ahora son dos actitudes que deben tener los
orientadores para que puedan desempeñar este enfoque. Los problemas específicos
pueden ser:

Ø Proporcionarle ayuda o apoyo a un adolescente que llega con problemas


familiares.
Ø Ayudar a un adolescente que tiene una autoestima muy baja y por lo mismo no
logra formar un autoconcepto adecuado.
Ø Ayudar a un adolescente que ha recibido de su familia solo maltratos psicológicos
y físicos.

Los anteriores pasos, el orientador se ocupa solamente de ser aceptante, y


empático, es decir se centra en los sentimientos, no en el problema.

Estos problemas pueden tratarse o se pueden proponer otros con los que los
orientadores se hayan encontrado, en su labor.

Duración 80 min.
90

SESIÓN 11

CONGRUENCIA

OBJETIVO ESPECÍFICO:

r Concluir en una sola concepción de congruencia, además de integrar los tres


preceptos básicos del enfoque centrado en la persona en casos prácticos.

ACTIVIDADES

Actividad 11.1 PRÁCTICA

Actividad grupal, todos tienen la oportunidad de participar describiendo el concepto


de congruencia, se nombra a una persona para qué tome nota de las opiniones, para
que al finalizar puedan leerse y llegar a un común acuerdo, sobre el tema.

Duración 30 min.

Actividad 11.2 TEÓRICA

Se reúnen en equipos con personas que se hayan encontrado con casos afines
para que juntos puedan darle solución, ahora sí con las tres actitudes que se deben
tomar en el enfoque centrado en la persona.

Duración 60 min.
91

Actividad 11.3 PRÁCTICA

Los participantes en equipos de cuatro integrantes. Se les pide que “obsequien” un


objeto que lleven consigo (llavero, agenda, moneda etc.) y que todos imaginen que es
un regalo muy preciado, que es un verdadero tesoro. Los participantes toman tiempo
para adoptar este papel. A una indicación del facilitador y al mismo tiempo dan su
obsequio. Se comentan los sentimientos que tuvieron con ésta experiencia, no olvidando
a los que pudieron no haber recibido regalo, ya que no se pusieron de acuerdo a quién
se lo darían.

Duración 30 min.

Se proporciona la última lectura para concluir con el seminario:

ROGERS, Carl. El aprendizaje significativo en psicoterapia y en la educación, en: El


proceso de convertirse en persona, México 1986 Ed. Paidós pp.246-260
92

SESIÓN 12

EVALUACIÓN DEL CURSO

OBJETIVO ESPECÍFICO:

r Evaluar el seminario-taller, con críticas constructivas para su mejora. Concluir que


tan significativo ha sido este seminario.

Actividad 12.1 TEÓRICA

Proponer que con la lectura previamente realizada, se tomen los puntos más
importantes para definirse qué tan significativo es este curso, y sobre todo cómo los
orientadores pueden lograr un aprendizaje significativo en los adolescentes, tanto en sus
materias como en la formación de su autoconcepto.

Duración 40 min.
93

Actividad 12.2 PRÁCTICA

Se pide a los orientadores que se haga una evaluación del seminario-taller


expresando todas sus observaciones ya sean buenas o malas, esto sirve para mejorar el
seminario, que se pueda prestar a otros orientadores educativos. Por último tendrán que
decir qué tan constructivo fue este seminario para cada uno, así como describir las
ventajas que les dejó para su labor orientadora.

Para obtener una acreditación se pide a los integrantes del grupo realizar un
ensayo que contenga los siguientes puntos:

Ø Cómo pude ayudar a los adolescentes en la formación de su autoconcepto con


este enfoque.

Ø Además de el autoconcepto, qué otros problemas puedo tratar con el Enfoque


Centrado en la Persona.

Ø Como conclusión, en mi práctica el Enfoque Centrado en la Persona es favorable


y sobre todo puedo ocuparlo dentro de mi práctica orientadora y ¿por qué?

Con la entrega de este ensayo el guía de este seminario puede observar qué tanto
fue favorable el curso y qué tanto pudieron aprender los orientadores en cuanto al
autoconcepto y al enfoque centrado en la persona.

Duración 80 min.
94

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

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SUREDA, Inmaculada. (2001) Como mejorar el autoconcepto, Programa de intervención


para la mejora de habilidades socio personales en alumnos de secundaria, Madrid, Ed.
CCS.
CONCLUSIONES
97

CONCLUSIONES

La definición de autoconcepto que se maneja dentro de este trabajo se retoma de


un enfoque humanista, ya que al individuo se le debe tomar en cuenta como una
totalidad sin olvidar ningún aspecto que integre su personalidad. En muchas ocasiones
dentro de la escuela secundaria a los adolescentes se les brinda atención solamente
académica dejando de lado lo socio personal de los individuos, sin tomar en cuenta que
la gran mayoría de casos en cuestión académica pueden tomar caminos equivocados
por no saber ¿quién es? y ¿hacia donde se dirigen? De esta manera el enfoque
humanista de Carl Rogers es importante dentro de este trabajo ya que a través de este
los Orientadores pueden transmitir a los adolescentes recursos significativos con los
cuales puedan llegar a autodirigir su vida.

Dadas las circunstancias de que el autoconcepto esta determinado en mucho por la


familia, la sociedad y la escuela, es en esta última donde podemos hacer lo mejor
posible para apoyar la formación de un autoconcepto aceptable para el adolescente. Así
es elemental que el Orientador Educativo tenga conocimiento sobre el tema “el
autoconcepto”; es por esto que dentro de este trabajo se maneja un seminario-taller
dirigido a Orientadores el cual brinda herramientas y elementos para que este pueda
intervenir de una manera adecuada en la formación del autoconcepto de los jóvenes de
secundaria.

Todos estos aspectos teóricos y prácticos de los que se habla, se encuentran


desarrollados por medio de la empatía, congruencia y aceptación, pilares fundamentales
del Enfoque Centrado en la Persona, los cuales propician que las personas que tomen
este seminario tengan un concepto más claro de sí mismas para que a su vez puedan
transmitir a sus alumnos lo que aprendieron del Enfoque aplicándolo a su práctica
Orientadora.

La importancia de este seminario-taller radica en que los objetivos que se tenían


planteados en un inicio pudieron cumplirse, ya que por medio de este, el orientador
98

puede tener una visión más amplia y clara sobre el autoconcepto en la adolescencia,
además de que las diferentes actividades y técnicas que se manejan dentro de este
pueden ayudar al Orientador en cuanto al trato con los adolescentes, todo esto
relacionado con el concepto que cada individuo debe plantearse durante la
adolescencia.

Para concluir más específicamente podemos mencionar los siguientes puntos:

Ø La Orientación es una tarea Educativa, y es esta última la que tiene


por objeto “desarrollar armónicamente las facultades del individuo”; así es
importante que la Orientación propicie el desarrollo de esas facultades, ya que es
dentro del área socio-personal donde se tiene más contacto con el joven , y es
donde se le puede ayudar a desarrollar un autoconcepto.

Ø Durante la adolescencia el joven forma un autoconcepto que puede


durante algún tiempo darle una dirección a su vida, solo que no debe dejar de
lado que en el transcurso de su propia existencia pueden desarrollarse elementos
que modifiquen o transformen el autoconcepto que ha construido durante la
adolescencia. Por esto el autoconcepto no es estático, sino es un elemento que
puede estar en constante cambio de acuerdo a las experiencias o circunstancias
sociales que se vayan presentando para el adolescente y para su vida futura.

Ø El autoconcepto se encuentra dentro de las facultades del individuo


y para definirlo de una mejor manera es pertinente describir las características
personales, físicas, emocionales, etc. para saber quien es. Es importante
mencionar que el individuo desarrolla un autoconcepto favorable para él mismo
siempre y cuando tenga impresiones y percepciones adecuadas de los demás
hacia él. Esto puede ayudar a que su realidad, sus pensamientos y lo que le
gustaría ser puedan coincidir de una mejor manera para que tenga un
autoconcepto mejor planteado.
99

Podemos decir que la Orientación al encontrarse insertada en la Educación, tiene


un compromiso social porque ayuda al adolescente en su desarrollo socio-personal para
que pueda vivir más plenamente en la sociedad en la que se encuentra. Así la
Orientación apoyada por el Enfoque Centrado en la Persona puede ayudar así a una
mejor conformación del autoconcepto que es con lo que el joven va a permanecer
estable o inestable en la sociedad en la que vive; ya que este Enfoque sencuentra en la
corriente humanista y toma en cuenta a la persona como un todo integral desde sus
pensamientos, sentimientos, etc., relacionado esto con la sociedad, para que pueda
darle solución a sus problemas.

Podemos mencionar que el Orientador Educativo no es el único medio para


solucionar la mayoría de problemas que existen alrededor del adolescente, en la
escuela, pero con una formación más humanista (Enfoque Centrado en la Persona),
puede ser un medio primordial para brindar una formación más productiva en los
jóvenes, disminuyendo así las personalidades frustradas que se encuentran en esta
situación por no saber hacia donde se dirigen y por no tener establecidas las
características de su persona, es decir, no tienen definido su autoconcepto.

El Enfoque Centrado en la Persona se retoma en este trabajo porque, el individuo


al estar inmerso en un grupo que le brinde empatía, congruencia y aceptación, puede
desarrollarse más plenamente en cuanto a lo escolar, familiar, laboral, social, etc.
Mientras que se eduque a los individuos dentro de este contexto se podrá llegar a tener
una sociedad que apunte hacia la congruencia, aceptación y autenticidad, para lograr de
esta manera la vida plena de más individuos.
BIBLIOGRAFÍA GENERAL
101

BIBLIOGRAFÍA GENERAL

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Aguas Calientes, año 2000, V. 3 no. 12 pp. 12-13.

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