Discos (Symphysodon aequisfasciatus axelrodi)

Los peces disco son junto con los peces ángel (o escalar) los cíclidos más abundantes en los
acuarios de un tamaño superior a 150 litros. Los peces disco viven en grupo por lo que lo ideal
es mantener varios ejemplares en el mismo acuario. Debido a que su dimorfismo sexual es
apenas evidente, la forma de identificar los machos de disco de las hembras no es fácil.
Consiste en colocar varios ejemplares en un mismo acuario de unos 200 litros y confiar en que
se formen parejas entre ellos. La cría en muchos pasos no se diferencia de la cría de cualquier
otro tipo de peces, excepto en el importante detalle de que, al principio, los alevines de peces
disco (Symphysodon aequisfasciatus axelrodi) se alimentan exclusivamente, de una mucosidad
que les aparece en los costados a los padres durante la freza, por lo que siempre se ha
considerado que no se puede separar a los adultos de sus alevines. Para obtener un
rendimiento aceptable en la cría de estos peces, se deben de seguir los pasos siguientes:

1 Una vez distinguida la pareja de peces disco a procrear, se separan los dos ejemplares y se
les alimenta bien durante 15 días con comida de primera calidad, mientras preparamos el
tanque de cría que debe de ser de unos 200 litros. Este debe contener agua de las siguientes
características: T=28-30°C, pH=6.5 y dGH=3° y dKH=menor de 1. En el acuario de cría se
añaden unas macetas en posición invertida que servirán de soporte a los huevos.

2 Después de juntar a la pareja de disco, la hembra colocará los huevos en las paredes del
acuario o en la maceta. Se les puede añadir azul de metileno (12 gotas al 1% por cada 10 litros
de acuario) para evitar los hongos de la freza. Es este el momento en el que podremos observar
si los progenitores se comen o no los huevos. Si se los comen procederemos a separarlos de
los adultos y los introduciremos en un pequeño acuario con las mismas condiciones del agua,
donde intentaremos sacarlos adelante con un método de cría artificial que se expone al final de
este artículo.

3 La incubación dura 2 días, los alevines de disco recién eclosionados, quedan suspendidos de
unos filamentos. Pasados otros 2 días y medio los alevines ya nadan libremente.

4 Cuando nadan al lado de sus padres, se alimentan de la mucosidad de la piel de estos. Otros
tres días más tarde, ya se alimentan con nauplios de artemia. Los problemas que podemos
tener durante esta fase, es que los padres no segreguen suficiente mucosidad, y los alevines se
vayan muriendo poco a poco de hambre. En este caso se procede como en el caso de que se
comieran los huevos.

5 Según van creciendo se les va cambiando el alimento por uno adecuado a su tamaño y se les
introduce a su vez en acuarios cada vez mayores. Pasada la fase crítica de la mucosidad, el
desarrollo de los alevines no presenta ninguna diferencia respecto de la de cualquier otro
cíclido.

En caso de que debamos de criar los alevines

artificialmente sin los padres, los huevos se colocan en un
acuario pequeño aireado. Llegada la fase del primer alimento,
se procede como sigue:

Se rebaja el nivel del acuario unos 5 cm., se seca el borde

con papel absorbente, se añade la papilla al borde donde se
quedará apegada extendiéndola con un grosor de unos 2
mm. Se deja secar unos 15 minutos y se añade agua fresca
que vuelva a cubrir el borde con la papilla. Y llega la hora de la verdad, los alevines deben de
acercarse al borde y comer la papilla que se encuentra pegada a este. Esta imitación del mucus
de los padres suele ser aceptada por los alevines pero si no lo hacen morirán sin remisión (la
papilla está compuesta por 1/3 de yema de huevo cruda, 1/3 de yema cocida y 1/3 de nauplios
de artemia recién eclosionada). Este trabajoso procedimiento de alimentación se debe realizar 3
veces al día durante unos 3 días, pasando luego al alimento con nauplios de artemia
convencional.