You are on page 1of 5

Portada 

COMUNICADO DE LA 
CÁMPORA 

 
A partir de los hechos de público conocimiento en relación a hechos de
violencia conocidos recientemente, consideramos dar a conocer que
estamos atravesando profundos y necesarios procesos de discusión
interna. Como militantes populares confiamos en que es en la organización
política donde se deben atender las necesidades y construir respuestas
colectivas, y no en los medios de comunicación, ni de manera individual.

Es en función de estas discusiones que hemos avanzado en definiciones


políticas y que estamos asumiendo el compromiso irrevocable y la
responsabilidad de transformar la organización para revisar todas las
prácticas que avalan, legitiman y engendran situaciones de violencias y
desigualdad de género.

En este mismo camino, basándonos en la ley 26.485 sancionada en el año


2009 y en los profundos cambios sociales de toma de conciencia sobre
dicha problemática, es que hace más de un año elaboramos un Protocolo
interno de detección, abordaje y acompañamiento de situaciones de
violencia de género. El mismo fue fruto de un largo proceso colectivo y
prevé los canales para recibir los relatos de las compañeras en ámbitos de
resguardo y contención, preservar sus espacios de militancia para que no
deban ser ellas quienes se alejen, y brindar la orientación que necesiten
respecto a las posibilidades de acción, ya sea legal, de atención
psicológica o lo que se considere pertinente.

En todos los casos, ante la recepción y toma de conocimiento de cualquier


hecho de violencia en todas sus formas, ejercido por un integrante de la
organización se le quitan las responsabilidades políticas y se lo aparta
preventivamente de todos los ámbitos de militancia, mientras dure todo el
proceso. Entendiendo que siempre se cree en la palabra de las
compañeras, y no es la organización política la que debe tomar veredictos
respecto de los hechos sucedidos sino proteger, reparar y acompañar a
quienes hayan sufrido cualquier tipo de violencia de genero.

Asumiendo un espíritu que busca no ser punitivista, sino transformar


profundamente las estructuras de las relaciones de poder, los varones
deben atravesar procesos de revisión de sus prácticas, de formación y de
concientización que permitan iniciar un real proceso de deconstrucción.

Cabe destacar que la mayoría de los casos que recibimos hasta el


momento se refieren a situaciones anteriores a la implementación del
Protocolo, fundadas en el relato de las compañeras que tuvieron el valor
de plantear hechos que en su momento callaron o fueron callados. Es un
trabajo militante permanente dentro de la organización hacer efectivas las
definiciones tomadas.

A partir de la denuncia pública contra Jorge Romero, senador provincial y


quien hasta ese momento se desempeñaba como responsable político de
la Provincia de Buenos Aires, la organización definió la aplicación
inmediata del Protocolo. De esta manera, se le quitaron todas las
responsabilidades políticas dentro de la organización, y no puede participar
en los espacios de militancia en tanto dure la aplicación del mismo.

Pese a la decisión de esta persona de transmitir esta definición


individualmente a través de sus redes sociales, enfatizamos en que la
decisión política fue tomada por la organización a partir de los procesos
antes mencionados.

Si bien reconocemos al Poder Judicial como patriarcal, ya que en la


mayoría de los casos es garante de impunidad de la violencia machista,
creemos en el Estado de Derecho y militamos y seguiremos militando
todos los días para que se haga Justicia.

Es nuestra obligación también dar a conocer definiciones sobre otros


casos que son mencionados públicamente, Julian Eyzaguirre, abandonó la
Organización tras no acatar el proceso de protocolo, y se finalizó su
relación laboral.

Nicolas Roó quien militaba en La Cámpora La Pampa fue expulsado de la


organización y se demandó la renuncia al cargo de director de la Casa de
la Juventud.
Gustavo Matias, quien fuera responsable del distrito de Vicente López,
recibió graves denuncias públicas por varias compañeras que militaron en
su momento en la organización. El mencionado ya habia sido separado de
la estructura política, por diversas causas hace años, y estamos
comprometidxs a acompañar a todas las mujeres que sufrieron violencia
por su parte o dentro del esquema que él conducía.

Nos estamos involucrando con todas las situaciones que tomaron estado
público, pero no podemos desconocer la operación mediática montada
como un aprovechamiento político de los grupos de poder a quienes nada
les interesa la integridad de las mujeres. La finalidad no sólo es construir la
idea de deslegitimación de La Cámpora sino de la política toda. Nosotrxs
asumimos la gravedad de la situaciones y tenemos la voluntad política y la
responsabilidad con nuestrxs militantes y con la sociedad de profundizar la
transformación de nuestra organización para estar a la altura de los
imprescindibles cambios sociales que necesitamos para consolidar
verdadera Justicia social en términos feministas.

Desde la conformación del Frente de Mujeres e Igualdad de Géneros, la


organización disputa el sentido de la sororidad en clave de construcción
política. Es imprescindible que, tal como expresó Cristina Fernández de
Kirchner, nuestra organización se asuma como feminista y esta
concepción atraviese toda la estructura orgánica para que la perspectiva
de género nos permita erradicar las desigualdades sociales y también las
propias dentro de la organización. Por eso, continuaremos con la
formación obligatoria hacia el conjunto de la militancia.

Entendiendo que, como todo cambio de paradigma, éste es un proceso


muy difícil, duro y doloroso, requiere un debate transversal y una fuerte y
real voluntad política, no meramente declamativa, para erradicar prácticas
machistas enquistadas de una vez por todas.

Reconocemos que todas las militantes han padecido las consecuencias de


la lógica patriarcal. Por eso trabajamos en la deconstrucción de los
varones dentro de la organización para seguir dando una transformación
generacional y que no haya ninguna persona más que sufra algún tipo de
violencia.

Escuchando el mandato de las compañeras a lo largo y ancho del país,


vamos a convocar una Asamblea de Mujeres, Lesbianas, Travestis y Trans
de La Cámpora.

Necesitamos generar un encuentro de estas características, un lugar de


escucha para todas las compañeras que tenga como finalidad elaborar un
documento con las propuestas que allí surjan como aporte para la revisión
y transformación de todas las estructuras que sean necesarias y así
construir una organización política a la altura del momento histórico en
Argentina y el mundo.

Para los desafíos que tenemos por delante necesitamos paridad en todos
los ámbitos orgánicos y un nuevo orden en la valoración de las voces y
opiniones de las mujeres y las disidencias sexuales.

Así como asumir el compromiso profundo para la consolidación de un


feminismo popular, diverso, disidente y multicultural comprometido con
erradicar todas las desigualdades sociales y que apueste a la política y a la
representación de las mayorías populares. Sólo con feminismo habrá
justicia social.

http://www.lacampora.org/2018/12/18/comunicado-de-la-campora-2/

You might also like