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ARMADO DE MUROS DE MADERA

PROCESO CONSTRUCTIVO.
Los MUROS de madera se presentan como un
medio de construcción económico (dependiendo
de la madera que se utilice), muy liviano y rápido
de realizar, que además se caracteriza por aportar
resistencia y una sensación de calidez,
combinados con una interesante capacidad de
aislamiento térmico y acústico.

¿COMO HACER UN MURO DE MADERA?

El muro puede ser simple, apenas con el espesor del material. En ese caso, el sistema de
sujeción con el techo y el suelo puede ser mediante guías de madera, o escuadras de fijación.
También se puede construir
muros de madera dobles con
una cámara de aire en el
interior que necesitan de guías
verticales y horizontales, que
funcionan como armazón de
apoyo para los bordes de la
misma. Con este sistema
constructivo las sujeciones
quedan disimuladas en el
interior del muro.

Para hacer un muro de madera, primero se


debe marcar su posición en el piso y su
espesor, empleando una regla y un lápiz. A
continuación, se marcará la posición del
muro sobre las paredes de apoyo con la
ayuda de una plomada, comprobando que
el travesaño superior caiga exactamente
encima de la marca en el suelo, para evitar
que el muro quede inclinado.

Si se desea hacer una puerta, se debe


marcar sobre el suelo su ubicación exacta
y su anchura, añadiendo la medida del marco.

El siguiente paso será construir el armazón usando listones del mismo espesor del muro, con un
mínimo de 50 x 50 mm. Luego, se corta la placa inferior del largo necesario (siempre teniendo
en cuenta si la pared llevará puerta o no), y también los largueros. Se atornilla la placa inferior
al piso, y los largueros a las paredes y al techo, empleando tacos de expansión tipo Fisher.
Posteriormente, se corta una serie de listones a la
misma longitud que la distancia entre el larguero
colocado sobre el techo y el del suelo, que se
colocarán verticalmente a cierta distancia y
atornillados a dichas piezas. También se deberá
cortar los listones necesarios para formar los
travesaños horizontales que se colocarán a media
altura y sobre la puerta o ventana

Luego, se procede a colocar el revestimiento final, que puede estar hecho de láminas de
contrachapado, cartón prensado o tablero aglomerado de 1 cm. de espesor.

Para fijar las placas se deberá utilizar clavos galvanizados que se colocarán con una separación
de 20 cm. entre ellos y a más de 1 cm. del borde. La placa se debe comenzar a clavar por el
centro, manteniéndola firmemente apoyada contra el armazón. Los clavos deben penetrar
perpendiculares a la placa hasta introducir la cabeza en ella.
Todas las caras de los listones que forman el armazón deberán ser lisas y formar un único plano.
Una vez cortadas todas las placas, se clavarán horizontalmente, con los bordes laterales en
paralelo al cielorraso o al techo. Después de colocar la primera placa, se irán colocando encima
las siguientes hasta llegar a la superior que habrá que cortarla a la medida para que llegue
exactamente al techo.

Finalmente, se tapan las juntas y las cabezas de los clavos con dos manos de masilla. Cuando se
haya secado la última capa, se lija para eliminar las imperfecciones.
CONSTRUCCIÓN DE MUROS PORTANTES EN MADERA

Estas construcciones se emplean para cabañas, casas en el área rural, casetas, en parques y
sitios determinados para el comercio o también en partes interiores de una vivienda normal.

La madera la madera más utilizada es en rollo el estilo americano de blocados. Estos rollizos se
colocan echados y a tope formando las paredes exteriores y para verificar su asiento hay que
ejecutar muescas a fin de asentarlos de forma guadralpada. Estas muescas corresponden a la
cuarta parte del diámetro del rollizo, de manera que las juntas de una pared quedan a la altura
del eje de los rollizos que están colocados perpendicularmente en la pared con la cual se
traslapa y tienen que presentar un buen cogote, es decir un buen saliente, que alcance unos
30 centímetros.

Si se emplea madera de sierra los salientes o cogotes pueden suprimirse y la unión en la


esquina se hace a media madera con corte recto, dibujo siguiente A, o a media madera con
corte oblicuo, dibujo B.
Dibujo B

Estos blocaos (fortines) se asientan sobre un citaron de 50 centímetros, para que queden bien
protegidos de la humedad, si están construidos con rollizos y van destinados a vivienda, es
recomendable si el presupuesto lo permite revestir sus partes interiores por medio de tablillas
o tabla machihembrada. Este tipo de edificación resulta recomendable para lugares donde
abundan los bosques y siguiendo las indicaciones de la explotación racional de la madera que
consiste en explotar pero también utilizar métodos efectivos de siembra.

PAREDES ENTRAMADAS:

Para la construcción de estas paredes se ejecuta primero el citaron o zócalo de fabrica, sobre
el cual se apoya la solera S. Encajados en esta solera se colocan los pies derechos P, los cuales
vienen rematados por la carrera R en donde termina la pared y tienen apoyo las vigas.

Los pies derechos que forman las esquinas se denominan cornijales; los intermedios que
forman los largueros de los vanos y los otros intermedios almas. Siguiente dibujo.
Para formar las puertas se encajan sobre los pies derechos de cerco los traveseros C, llamados
cabeceros o dinteles y para traveseros de la parte inferior de las ventanas se colocan los
designados por D, llamados peanas. Para la subdivisión de los recuadros se colocan los
llamados contrafuertes L.

A fin de reforzar los tramos extremos se colocan las llamadas riostras T, que cruzan
diagonalmente a dicho tramo. Dibujo anterior y siguiente dibujo.

El citaron de asiento puede tener unos 0,50 metros como altura mínima, enrasándose con un
sardinel o verdugo de ladrillo pegado con mortero de cemento. Después del verdugo de
ladrillo viene el zócalo o citaron donde se ensamblan los pies derechos y los traveseros.

Para que a las paredes en madera no llegue la humedad del suelo es recomendable intercalar
entre el citaron (sobre el sardinel o ladrillo) y la solera una tira de cartón o tela asfaltada u otro
impermeabilizante.

Teniendo en cuenta que la carrera R debe sostener el envigado del piso superior, o bien la
cubierta, deberá ser calculada por flexión.

PAREDES DE TABLAS O DE CHAPAS:

Las tablas de chapa puede servir para formar divisorias en madera, para formar paredes
entramadas.

Cuando se trata de construir paredes divisorias de madera se utilizan preferentemente tablas


machihembradas de 3 centímetros de canto, las cuales se colocan verticalmente y se sujetan
tanto en la parte superior como en la parte inferior por medio de latas sujetas al techo y a la
losa del suelo respectivamente.
Cuando se trata de tabiques de gran altura, que conviene tengan gran resistencia y estabilidad,
se disponen en un armadura o armazón sobre cuyos elementos de madera se colocan las
tablas machihembradas, que en este caso tienen de 2 a 2,5 centímetros de canto.

El figurado de paredes entramadas puede hacerse con tablas o chapas ligeras, las cuales se
fijan a ambos lados, logrando por este medio una gran protección contra temperaturas
extremas ya que la madera es un elemento térmico que funciona de acuerdo al ambiente si
hace mucho calor lo apacigua y se hace mucho frio abriga el interior y también es un aislante
acústico por lo tanto reduce ruidos exteriores.

Cuando se trata de un parámetro exterior, este forjado puede ser hecho de tablas verticales
cuyas juntan se cubren por medio de listones de media caña de unos tres centímetros de
ancho.
Igualmente se pueden hacer con tablas solapadas que dan un atractivo aspecto a la fachada.

También se emplean recubrimientos en placa de madera ligera fabricadas a base de material


leñoso como son los contrachapados. Así mismo se utilizan placas de yeso, de hormigón ligero
y de asbesto cemento.

Como ventajas importantes de estas placas sobre las tablas de madera figuran su durabilidad,
resistencia atmosférica y la menos facilidad de corromperse ó afearse aparte de que admiten
fácilmente cualquier revestido.

También pueden guarnecerse ambas caras del entramado por medio de tablas inclinadas, la
inclinación favorece la estabilidad por cuanto dichas tablas actúan como armadura o
jabalconado y descargan el envigado que llevan sobre el citarón o base de ladrillo o piedra.

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