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4 consejos para mejorar tu nivel de

ajedrez
Una de las preguntas que más me plantean los aficionados al ajedrez es qué pueden
hacer para mejorar su ajedrez. No se trata de buscarse el mejor entrenador de
ajedrez del mundo ni de dedicarle 10 horas cada día. Simplemente buscan algunos
consejos que les ayuden a optimizar el tiempo que quieran o puedan dedicarle al
estudio de nuestro juego.

Pues bien, en este artículo voy a tratar de ofrecer algunos consejos que pueden
ayudar a jugadores de diferentes niveles a mejorar su nivel de juego y a aprender
ajedrez de la manera más óptimaque conozco. Sin grandes inversiones ni un
esfuerzo descomunal. ¿Crees que no es posible? Sigue leyendo

1. Las aperturas no lo son todo


2. Practica con frecuencia
3. Analiza tus partidas
4. La táctica es fundamental

Consejo 1: No le dediques todo el tiempo a las aperturas

Es uno de los errores más comunes. Quizás porque hay muchísima información
disponible sobre la primera fase de la partida o quizás por la esperanza de ganar la
partida en los primeros movimientos, muchos aficionados dedican demasiado tiempo
a estudiar aperturas y demasiado poco a otras cuestiones. ¿Es malo estudiar aperturas?
¡Por supuesto que no! El problema es centrarse exclusivamente en ello.
Como cualquier fase de la partida de ajedrez, la apertura debe ser estudiada, de eso no
hay duda. Pero estudio debe ser consecuente con dos importantes factores:

1. El tiempo total que le vas a dedicar al ajedrez. Si no tienes mucho tiempo para
estudiar ajedrez no deberías tratar de aprender demasiadas aperturas, tal y como
te comenté en el artículo 5 claves para construir tu repertorio de aperturas. Si
queremos mejorar en ajedrez debemos atender a muchos factores, como vamos a
desarrollar en este artículo. Si no tienes mucho tiempo vale más la pena que
tengas claras las leyes fundamentales de la apertura (desarrollo, control del centro
y rápido enroque) y trates de seguirlas a rajatabla, más que memorizar aperturas
que puede que no entiendas en profundidad. De hecho siempre insisto en que
estudiar aperturas tratando de memorizar es absurdo.
2. Tu nivel de juego. También te hablé de esto en el artículo que te mencionaba
anteriormente. Es fundamental. Un gran maestro de élite dedica gran parte de su
entrenamiento a estudiar aperturas. Llegado a cierto nivel las aperturas juegan un
papel fundamental. Pero un principiante de ajedrez debería emplear ese tiempo
de estudio en mejorar en otros factores que pueden llegar a decidir una partida.
¿Cuáles son esos factores? No seas impaciente, sobre eso va este artículo.

Consejo 2: Practica con frecuencia

No basta con tener buenos conocimientos. Hay que practicar. Pero cuidado... cuando
hablo de practicar no me refiero a pasarse horas jugando partidas relámpago a 1
minuto. Eso es divertido, qué duda cabe, pero si queremos mejorar debemos de jugar
a ritmos lo más lentos posibles. El practicar con frecuencia, junto con el trabajo que te
sugiero en el siguiente punto, te ayudará mucho a mantenerte en forma.
Claro que hay distinguir entre dos detalles: una cosa es aprender ajedrez y otra
mantener la mente engrasada. Para rendir a un buen nivel ambos factores son
determinantes. Con la práctica estamos ejercitando nuestra "materia gris", de manera
que nuestra manera de pensar funcione más rápida y eficazmente. Pero jugar con
frecuencia también nos ayudará a aprender nuevas ideas, especialmente cuando
trabajemos sobre esas partidas tal y como te sugiero en el siguiente punto.
Consejo 3: Analiza tus partidas

Casi me atrevería a decir que especialmente las derrotas, pero en realidad también es
importante el trabajo que se realiza sobre las victorias. ¡Mucho cuidado! Muchos
jugadores, en la actualidad, confunden el análisis y el trabajo con las partidas que se
juegan con una simple revisión usando un módulo de análisis. Este es un error grave.
Se puede aprender mucho con el trabajo sobre las partidas que se juega, pero uno de
los detalles más importante es que se deben analizar, con tranquilidad, sobre el tablero
real y sin ayuda del ordenador.
Nos sirve de poco descubrir que tal o cual jugada era mejor que la que hicimos, solo
porque la sugiere nuestro ordenador. El análisis sobre nuestras partidas nos debe
llevar no solamente a los errores, sino al motivo por el que se cometen. Y muy
importante: si nos acostumbramos a analizar nuestras partidas, tal vez acabemos
hallando ciertos patrones que se repiten en nuestros errores. Por ejemplo: que nos
lanzamos al ataque sin motivo o que dejamos nuestro rey débil.

Así que te aconsejo que analices todas las partidas que juegas, especialmente aquellas
que disputes a ritmos a partir de 10 minutos. Por supuesto que, una vez trabajadas sin
módulos, no está mal que compruebes qué dicen las máquinas

Consejo 4: La táctica es fundamental

Hasta ciertos niveles más avanzados, la mayoría de las partidas se deciden por errores
o descuidos tácticos. Fallos de cálculo o "ceguera" a la hora de prever ciertos golpes
tácticos del rival. He escuchado en alguna ocasión el comentario conformista de algún
jugador que comentaba: "se me da mal la táctica". La pregunta del millón sería.
¿trabajas la táctica?

Ser bueno en táctica implica fundamentalmente dos cuestiones importantes:

1. Conocer los principales recursos tácticos ( clavada, doble


amenaza, desviación, descubierta, enfilada... ) y las principales figuras de mate.
2. Tener "nuestra maquinaria" engrasada, lo que nos permitirá desarrollar cierto
sentido "táctico", probablemente aquello que algunos llaman intuición y que al fin
y al cabo no suele ser otra cosa que la experiencia o el conocimiento
subconsciente.
En las sesiones de entrenamiento con mis alumnos me gusta proponer ejercicios
aleatorios de táctica y estrategia, sin que ellos sepan de qué se trata. Normalmente en
los primeros hay que buscar una combinación y en los segundos un plan. Pero prefiero
no darle pistas al alumno. Simplemente: "piensa en esta posición y dime que harías".

¿Por qué hago esto? Estoy harto de ver a alumnos que son capaces de resolver
problemas de táctica relativamente difíciles en nuestras clases y, sin embargo, luego no
ser capaces de ver otras relativamente sencillas en sus partidas. ¿Por qué ocurre ésto?
Muy sencillo: en una partida nadie te advierte de que tienes una gran combinación
en la siguiente jugada, nadie te susurra al oído "blancas juegan y ganan".
Este es el motivo por el
que puede ser bueno
enfrentarse a diferentes
posiciones en los
entrenamientos sin
saber si requieren o no
una solución táctica. Este
método nos
permitirá estar "alerta"
tácticamente en todo
momento, o por lo
menos ese es el
objetivo.

¿Quieres probarlo? Te propongo 6 posiciones. Algunas de ellas tienen una solución


táctica y otras tienen una solución estratégica. Y no sabes si se trata de ganar o
empatar... sencillamente de encontrar la mejor continuación. Déjame un comentario
más abajo valorando esta experiencia, por favor

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