REFLEXIONES SOBRE LA GLOBALIZACIÓN MUNDIAL Y LA EDUCACIÓN

*Rubén Gianella Peredo

El fenómeno de la globalización mundial ofrece hoy en día enormes beneficios a la humanidad, que en tiempos pasados
eran impensables que pudieran ocurrir. El conocimiento que antes demoraba mucho tiempo en difundirse y tenía acceso
restringido, ahora está al alcance de quien tenga una computadora o cualquier dispositivo móvil que cuente con conexión
de internet. Los medios de comunicación se encargan de difundir las noticias del mundo entero y todos los
acontecimientos notorios se socializan rápidamente y los avances de la ciencia y la tecnología en todas las áreas del
conocimiento, se multiplican vertiginosamente.

A pesar de la evolución que ha experimentado la didáctica en el último siglo, actualmente conviven en las salas de aulas
prácticas innovadoras de enseñanza y aprendizaje, junto con prácticas antiguas y muy arraigadas en la actividad docente.
Son paradigmas difíciles de derribar, pero no imposibles, especialmente porque se cuenta, actualmente, con el apoyo de
tecnologías emergentes gracias a las cuales puede ser posible realizar este cambio.

El camino, sin lugar a dudas, está en la innovación, el desarrollo y la invención (I+D+i). Pende sobre los países menos
desarrollados la sentencia tácita de que aquellos que no incursionen en esta terna de actividad intelectual, quedarían
rezagados y la subsistencia como países en alto riesgo de sucumbir, principalmente por la enorme brecha tecnológica
que los separaría del resto del mundo que si lo hace.

De ahí el gran llamado que tienen las universidades para aplicar las tecnologías de la información y la comunicación
(TIC) como una herramienta imprescindible para la transformación de la educación dentro de las salas de aulas,
motivando a los estudiantes y docentes a la investigación, innovación e invención. Implementar el uso de las TIC
consolida la conformación de la sociedad del conocimiento, que es posterior a la era de la información y que se nutre de
ella para la transformación tecnológica.
No obstante, el uso de las nuevas tecnologías no es suficiente, per se, para transformar el proceso de enseñanza y
aprendizaje en las instituciones educativas; es necesario también que se imponga un cambio de mentalidad de parte de
los educadores, que deben introducirse en el uso de la didáctica
quedarían rezagados y la subsistencia como países en alto riesgo de sucumbir, principalmente por la enorme brecha
tecnológica que los separaría del resto del mundo que si lo hace.

De ahí el gran llamado que tienen las universidades para aplicar las tecnologías de la información y la comunicación
(TIC) como una herramienta imprescindible para la transformación de la educación dentro de las salas de aulas,
motivando a los estudiantes y docentes a la investigación, innovación e invención. Implementar el uso de las TIC
consolida la conformación de la sociedad del conocimiento, que es posterior a la era de la información y que se nutre de
ella para la transformación tecnológica.

No obstante, el uso de las nuevas tecnologías no es suficiente, per se, para transformar el proceso de enseñanza y
aprendizaje en las instituciones educativas; es necesario también que se logre un cambio de mentalidad de los
educadores, quienes deben introducirse en el uso de la didáctica para desarrollar técnicas y métodos de enseñanza
acordes con las formas de aprender de la juventud de hoy.

Sin lugar a dudas, los beneficios de un mundo globalizado, abre un espacio para la transformación de la educación, que
a su vez permite construir una sociedad más desarrollada y más competitiva en todos los aspectos.