Departamento de Ciencias Humanas y Sociales

Apreciación de la Escultura

Tema: Conversatorio con el Arquitecto Escultor

Milton Barragán

Nombre: Paula Tilleria

Docente: Gina Villacis

Horario: Lunes 9:30 – 11:30

“La creación da vida a la gente” (Milton Barragan)

Milton Barragán Dumet (Huigra, 1934) es uno de los arquitectos más singulares y
destacados de la modernidad en Ecuador. Desde su titulación en 1958 en la Universidad
Central de Ecuador en Quito, forja su compromiso con la modernidad que se ilustra en
sus obras. Ha realizado varias exposiciones individuales y colectivas dentro y fuera del
país. Moldea el metal desde hace 37 años y la madera desde 1992. Su trabajo lo aprendió
solo, le bastó únicamente con observar algunas construcciones que realizaba, para ir
dando forma a estos dos materiales.

Barragán, arquitecto y artista, combina su profesión con la escultura. Pone en cada una
de sus obras la esencia de su naturaleza y los conocimientos adquiridos en la arquitectura.
Las piezas que presenta están realizadas en metal y madera. Sus representaciones, sus
temas escultóricos tienen muchos elementos:
En primer lugar está el material, la textura y la forma. “Yo juego más que nada con el
espacio. Espacio que se continúa, que se adivina, que viene y va de la obra”. Sin duda,
eso es lo que más atrae al espectador ya que hay una ola de espacio, libertad y movimiento
de la obra.
La combinación entre disciplinas es más evidente cuando hablamos de los lazos estéticos
formales de la arquitectura y escultura. Esta relación existe entre las grandes
manifestaciones del genio creativo, forjada a través de la historia y la práctica de una
profesión desarrollada también en el campo de la docencia, se sintetiza en la máxima
expresión de la forma armónica como es la escultura.
La construcción del espacio tanto de la arquitectura como de la escultura, demanda una
atención de sus formas internas y externas de la obra. En las obras de Milton Barragán,
las esculturas metálicas se tornan a la idea de mostrar edificios sin piel, dónde en
ocasiones la figura humana transita, conversa o se ama. Sin embargo en otras obras
pareciera que el artista imitara a las esculturas monumentales, reduciéndolas a un espacio
mínimo de intervención con el espacio.
Es inevitable que como arquitecto al crear una obra, el artista busque provocar un placer
estético, darle función, objetivo, concepto o forma ideal de apreciación arquitectónica. En
tal medida nuestro ojo humano identifica el espacio urbano en su escultura, sin embargo
las sensaciones se dispersan por el metal que conforma la obra.
“No hay arquitectura sin escultura” es una de las frases de Milton Barragán en la que se
proyecta la forma en el espacio donde desarrolla su estética, la sociedad que corresponde
al ser humano de nuestra época, al que podemos distinguir observando las estructuras.
Se presentan algunas obras escultóricas del Arquitecto Escultor Milton Barragán con cada
detalle descrito anteriormente:
En este conjunto de obras analizadas, Milton Barragán transita por algunos de sus logros
más destacados ilustrando la pervivencia de la tradición moderna.
Conciliador del arte y de la técnica, su obra caracterizada por la experimentación
estructural y formal, la audacia estructural y el uso plástico de los materiales, Barragán
muestra cómo es posible emplear recursos modernos para crear obras que van más allá
de la modernidad. Desarrollando una singular e intensa manera de recuperar la
modernidad, con el sentido artístico presente en toda su obra y su explícito talento
artístico, su obra no es únicamente una continuación de la tradición moderna sino una
reflexión e interpretación de esa tradición.
“Yo dejo visible el material con todas sus características para que el espectador mire
cuáles han sido los procesos creativos”. Según lo visto en las esculturas de Barragán,
cuando terminó el conversatorio me impresioné con una cosa: los rasgos humanos no
desaparecen; la figura del hombre sigue estando en el arte. Esto, en las palabras de
Barragán, se convierte en una frase que versa: “Las personas tienen que volver al arte ya
que es el único que nos reafirma como una especie”.