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Psicología de la Motivación
CAPITULO 4:

LA MOTIVACIÓN EN EL
CONTROL DE LA ACCIÓN
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INTRODUCCIÓN
Al principio, el estudio de la motivación se
centraba en ciertos estados internos de necesidad
que se activaban ante la aparición de una carencia
orgánica, generando la conducta como respuesta.

Luego se vio que en humanos la motivación se

basa también en la consecución de metas y
objetivos, y que la conducta está dirigida por
incentivos externos. También existe un componente
subjetivo, que se corresponde con la apetencia por
alguna meta o reforzador. En este capítulo se
estudiarán como se desencadena la conducta
motivada desde:

- Las características sensoriales de los

estímulos externos al organismo, que van a
llevar a que el sujeto se encuentre motivado a
ejecutar ciertas conductas.
- Otro tipo de motivación en la que no existe
un incentivo externo que la provoque y las
conductas se desencadenan porque el sujeto
desea realizarlas sin más y siente el impulso
de hacerlo. Se trata de las expectativas que
se crean frente las situaciones, y la respuesta
conductual del sujeto ante ellas.
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2. LA CONDUCTA EXTRÍNSECA E
INTRÍNSECAMENTE MOTIVADA

Por el aprendizaje sabemos qué respuesta

debemos dar en cada momento, pero es la
motivación la que da la fuerza para emitir esa
respuesta. Esta puede ser:
• Motivación extrínseca: Son las características
de los estímulos externos lo que determina la
dirección de nuestra conducta. La motivación
regulada por el ambiente es fruto del aprendizaje.
• Motivación intrínseca: Cuando el sujeto persiste
en una conducta sin un estímulo exterior que lo
justifique. Existe ausencia de una contingencia
externa aparente.
La principal diferencia entre ellas es que
intrínsecamente la motivación emana de fuentes
internas y extrínsecamente surge de los incentivos.
El nivel de ambos tipos de motivación que nos lleva a
realizar un comportamiento depende del momento y
de la actividad.
Una misma actividad suscitará motivaciones
diferentes dependiendo de la persona o incluso para
la misma persona en momentos diferentes.
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Según el conductismo de Skinner, son las

causas externas las que determinan la conducta,
aunque haya también causas internas. Sin embargo,
el enfoque cognitivo de Dickinson (1995) elaboró la
llamada:
Teoría del incentivo:
La dirección hacia una meta es fruto de la
interacción entre estados emocionales y expectativas
cognitivas, o entre las consecuencias y el valor de
estas en un momento concreto para el sujeto.
Otros autores sostenían que los seres humanos
son sustancialmente activos por su curiosidad y
competencia, es decir, motivos internos (deseo de
saber y de demostrar que sabe).

Ambos tipos de motivación se complementan sin

excluirse. La intrínseca es importante porque
disminuye la ansiedad en los sujetos, mientras que la
extrínseca, gracias al uso de incentivos, potencia la
conducta cuando las motivaciones internas
disminuyen.
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3. MOTIVACIÓN EXTRÍNSECA
Hace referencia a los factores del ambiente que
nos llevan a dar una determinada respuesta, a
repetirla y a adquirirla. Surge a partir de incentivos y
consecuencias ambientales, debida a la atracción de
determinados objetos. Esta atracción depende de la
historia personal con el reforzador y de ciertas
características personales.
Esto está relacionado con el condicionamiento de
segundo orden que veíamos en el condicionamiento
clásico. El proceso es el siguiente:
A) Por condicionamiento clásico, los objetos del
ambiente adquieren propiedades hedónicas
(agradables o aversivas).
B) Por condicionamiento operante el sujeto
emite respuestas voluntarias para acceder o
huir de estos estímulos.
La motivación basada en la anticipación de las
propiedades del reforzador (ya sean buenas o malas)
se denomina motivación de incentivo. Por tanto:
¾La motivación extrínseca, al estar relacionada
con el ambiente, se aprende por c. operante. Así
se configura la conducta dirigida a una meta.
¾Por el c. clásico los estímulos adquieren sus
características hedónicas. Siendo los incentivos
agradables los que nos aproximan a esa meta.
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En definitiva
• Es la experiencia hedónica producida por las
propiedades sensoriales de los reforzadores lo
que refuerza la conducta motivada. Es decir,
realizamos aquellas conductas que nos llevan al
premio y evitamos las que nos conducen al
fracaso.
• La motivación de incentivo se basa en las
expectativas o en la anticipación de las
propiedades hedónicas de los reforzadores, y
luego se verá como el incremento o descenso del
reforzador al adquirir la conducta, afectará su
ejecución.
• El nivel de motivación cambiará si se cambia el
valor del incentivo, por ejemplo cuando la
expectativa esperada no aparece cómo debería
aparecer.

Ahora estudiaremos:
1. El efecto del incentivo en la motivación.
2. Consecuencias del incentivo agradable.
3. Efecto en la conducta al retirar del incentivo
agradable.
4. Consecuencias del incentivo desagradable en
la conducta.
5. Resultado de la desaparición del incentivo
sobre la conducta motivada.
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3.1. Efecto del incentivo en los niveles de
motivación
Las teorías de la motivación basadas en el
incentivo defienden que los organismos se pueden
anticipar al reforzamiento, y esto es lo que facilita la
conducta: la expectativa creada.

El incentivo facilita la ejecución por las

expectativas que crea, y por esta razón el valor del
incentivo es aprendido. El valor del objeto no se
encuentra en sí mismo, sino en el sujeto que lo
percibe e interpreta, es algo subjetivo.
Los incentivos no causan siempre la conducta,
pero afectan a la probabilidad de que se repita la
respuesta. El valor del incentivo, o el conocimiento de
que se produzcan consecuencias de premio o
castigo, se aprende mediante la experiencia.
Hay a distinguir bien 3 conceptos:
ƒ Recompensa: Objeto ambiental agradable. Su
objetivo es el incremento de una conducta.
ƒ Castigo: Objeto ambiental desagradable. Su
objetivo es reducir una conducta.
ƒ Incentivo: Objeto ambiental que se conoce de
antemano que se va a conseguir si se realiza
determinada ejecución y atrae a la persona a
realizarla. Es el componente motivacional de la
acción.
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Así, un mismo objeto puede actuar como

recompensa e incentivo o como castigo e incentivo.
Diferencia entre incentivo y reforzador:
o Incentivo: Se adelanta al
comportamiento. Refuerza o
debilita el inicio de la conducta.
o Reforzador: Se da al final de la
respuesta. Determina el que se
vuelva a dar la respuesta.

Por tanto, los incentivos difieren de los

reforzadores en su momento de aparición, y en cómo
motivan el comportamiento.
El incentivo externo afecta a la ejecución porque
distrae la atención del proceso de aprendizaje hacia
las conductas necesarias para obtener la
recompensa cuanto antes.
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3.2. Consecuencias del incentivo agradable sobre
la motivación
Saber que a determinada conducta le siguen
consecuencias favorables para el organismo, le va a
conducir a repetir la respuesta, y esta respuesta será
más rápida en función del valor que de el sujeto al
incentivo. Vamos a estudiar 5 elementos que afectan
a la motivación de incentivo cuando se está
aprendiendo una conducta que es premiada:
1) Contingencia incentivo-conducta motivada.
¾Programa de refuerzo continuo: La relación
entre ambos es similar y predecible.
¾Programa de refuerzo parcial: No siempre
se corresponden una y otra.
2) Cantidad y calidad del incentivo: A mayor
cantidad de estímulo reforzante, más
conducta motivada.
3) Detección de causalidad: Cuando la
respuesta a una conducta es aleatoria y
genera “superstición”.
4) Demora del incentivo: Demoras en el acceso
al incentivo retardan la ejecución.
5) Niveles de motivación y la ejecución: A
mayor motivación, mejor ejecución y más
duradera es la respuesta.
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1) Contingencia incentivo-conducta motivada

Programa de refuerzo continuo: La conducta
emitida es reforzada en todos los ensayos de forma
similar, haciéndose predecible.
Sin embargo, no obtenemos siempre obtenemos
los mismos resultados aunque realicemos la misma
conducta. Por lo tanto, en la vida real la ejecución de
la conducta motivada no siempre es contingente con
el incentivo esperado, es un:
Programa de refuerzo parcial: La emisión de la
respuesta no siempre tiene las consecuencias que se
desean. Estos programas, sin son simples, se
pueden llevar a cabo de 2 maneras:
o Programa de refuerzo de razón: Se manipula
el número de respuestas que se tienen que
emitir para recibir el incentivo.
o Programa de refuerzo de intervalo: Que el
incentivo se dispense después de un tiempo
determinado. Durante el intervalo de tiempo el
sujeto puede dar la respuesta motivada, pero
sólo recibirá el incentivo cuando haya pasado
el tiempo establecido.
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• Programa de refuerzo de razón: Se manipula
el número de respuestas que se tienen que
emitir para recibir el incentivo:
o En el programa de razón fija, como su
propio nombre indica, se da el incentivo
después de un número fijo de respuestas,
(como los cupones para lograr una vajilla).
o Si el número de respuestas cambia es un
programa de razón variable (como en la
expectativa de premio en las tragaperras.)
• Programa de refuerzo de intervalo: Que el
incentivo se dispense después de un tiempo
determinado. Durante el intervalo de tiempo el
sujeto puede dar la respuesta motivada, pero
sólo recibirá el incentivo cuando haya pasado el
tiempo establecido. Al aproximarse el final del
intervalo el sujeto incrementa su número de
respuestas (por la cercanía del incentivo).
Conforme se acerca la fecha de un examen, el
alumno está más motivado para aumentar sus
horas de estudio, por ejemplo.
o programas de intervalo fijo en los que la
duración del intervalo es siempre la misma.
o programas de intervalo variable en los que
la tasa de respuestas es más estable ya que
al individuo le es más difícil hacerse unas
expectativas respecto a la situación.
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2) Cantidad y calidad del incentivo
La ejecución de la conducta motivada aumenta
conforme se incrementa la magnitud o cantidad del
estímulo reforzante por las expectativas que conlleva.
Y es importante saber la historia previa del individuo
con el incentivo para establecer su cantidad óptima.
Efecto de contraste: Los cambios en la cantidad o
calidad del incentivo durante la adquisición de una
conducta provocan cambios exagerados en la
conducta motivada.
 Efecto de contraste conductual positivo (o
efecto de elación): Si a un sujeto se le entrena con
una magnitud de recompensa determinada y luego
se le va incrementando, el sujeto estará más
motivado y dará mayor número de respuestas en
menos tiempo.
 Efecto de contraste conductual negativo (o
efecto de depresión): Lo contrario al positivo. Si a lo
largo del experimento se disminuye la magnitud de
la recompensa, los sujetos responderán peor.
Ambos efectos tienen que ver con las reacciones
emocionales que se producen en el sujeto ante el
cambio en las expectativas que se crean sobre la
situación de incentivo.
La conducta motivada también se incrementa si
aumenta la calidad del incentivo, igual que sucede
con la cantidad.
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3) Detección de causalidad
Conducta supersticiosa: Se da cuando el sujeto
empareja de manera accidental una conducta con un
premio, y en realidad no están relacionados. En este
contexto no se da contingencia ya que la respuesta
en estas circunstancias no es la causante del
incentivo.
Aprobar un examen un día que llevabamos
calcetines rojos y a partir de ahí ponernos siempre
calcetines rojos para ir a los exámenes, por ejemplo.

4) Demora del incentivo

Demoras en el acceso al incentivo retardan la
ejecución debido a que no se establece claramente
una relación conducta motivada-incentivo. Además el
sujeto puede seguir realizando otras conductas y
cuando aparece el incentivo no saber cuál de ellas ha
sido la que lo ha originado.
Para solucionar este problema aparecen
estímulos de marca que actúan como incentivos
secundarios que sí son contingentes con la conducta
motivada. Estos estímulos de marcaje pueden ser
simplemente decirle a un niño desordenado “muy
bien” cada vez que recoja algo de su habitación.
Cuando la habitación esté completamente ordenada
se le podrá llevar al cine, que sería el incentivo
principal.
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Descuento de la demora: La demora del premio

produce que se reduzca su valor de incentivo. Aquí
se da la curiosidad que cuando un mayor incentivo
se demora un largo tiempo, se preferirá un incentivo
menor pero antes. Trabajadores a los que por cumplir
los objetivos de noviembre se les obsequia con un fin
de semana en un parador a final de ese mes u 8 días
en un hotel de lujo en las vacaciones de verano.
Conforme se acerca el fin de semana muchos
comienzan a valorar más la primera elección.
Margen de vulnerabilidad: Margen de tiempo en
el que se cambia el criterio de decisión y se pasa a
preferir el reforzador más inmediato. Depende de la
magnitud y demora del reforzador y del autocontrol e
impulsividad del sujeto. (Pan para hoy, hambre para
mañana).

5) Niveles de motivación y la ejecución

Cuanto más intensa es la motivación en una
tarea, mejor es la ejecución del sujeto y más tiempo
tarda en dejar de emitir la respuesta aunque no
reciba el reforzador durante su ejecución.
Esta “norma” pude verse afectada por el nivel de
dominio en la tarea o por la percepción del dominio
en ella por parte del sujeto. Los cambios en las
necesidades también influyen en el nivel de incentivo.
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3.3. Efecto de la retirada del incentivo agradable

sobre la conducta
Cuando la aparición de una conducta provoca
que desaparezca el premio. Esto provoca:
Entrenamiento de omisión: El valor de incentivo
determina que no se ejecute la conducta para que no
se retire el estímulo agradable. Su objetivo es
suprimir una conducta. Por ejemplo en las
expulsiones por cometer falta en un partido.
Conviene destacar que, en estas situaciones, la
demora excesiva del inventivo no repercute apenas
en la conducta, por ejemplo cuando nos mandan una
multa a casa meses después de haberla cometido.
Su eficacia disuasoria radica en que llegue lo antes
posible, para que tomemos conciencia de lo que
hemos hecho, y lo evitemos en el futuro.
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3.4. Consecuencias del incentivo desagradable

sobre la conducta
Hay dos situaciones en las que se emplea un
estímulo desagradable, cada una con sus
consecuencias en la conducta:
1- Situación de escape/evitación: La aparición de
la conducta tiene como efecto que desaparezca el
estímulo desagradable o que no llegue a
presentarse. Aquí, el valor del incentivo llevará a
ejecutar la conducta para no sufrir los efectos del
estímulo desagradable.
A medida que se adquiere la conducta, se ejecuta
más rápidamente la respuesta para evitar el estímulo.
por tanto, las expectativas ante la situación permiten
no sufrir las consecuencias.
2- El castigo: Si un sujeto ejecuta la respuesta
aparece el estímulo aversivo. Se trata de un
procedimiento para reducir la aparición de una
conducta. No se refuerza esta, sino que se castiga.
Se pensaba que la eficacia del castigo en la
eliminación de la conducta sólo era eficaz de forma
temporal, por lo que se ha estudiado desde una serie
de variables que afectan a los resultados del castigo.
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Variables que afectan a los resultados de la
aplicación del castigo
Ê Intensidad del incentivo aversivo: Cuanta
mayor intensidad tenga, mayor efecto tendrá
sobre la (omisión) de la conducta. Sobre todo si
es suave al comienzo, y se va incrementando
hasta que pierda eficacia su efecto.
Ê Duración del incentivo aversivo: Cuanto más
prolongado sea el castigo, mayor efecto
supresor.
Ê Contingencia del castigo: Siempre se debe
administrar el castigo ante la conducta
inadecuada para que tenga el máximo efecto, y
de forma continua, no intermitente.
Ê Efecto de la demora: Para que sea eficaz un
castigo debe aplicarse de inmediato.
Ê Disponibilidad de una respuesta alternativa: Si
a la vez que castigamos una respuesta
inadecuada, premiamos una adecuada, la
probabilidad de ocurrencia de la respuesta
castigada disminuirá.
Estas variables, usadas adecuadamente, otorgan
eficacia al efecto del castigo. Si no, pueden provocar
ansiedad en el que lo padece. Además, quién ejerce
el castigo corre el riesgo de usarlo de forma
automática o impulsiva, y volverse agresivo.
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Indefensión aprendida:
Se produce cuando se expone a un sujeto a
estímulos aversivos de los que no se puede escapar,
y provoca en él que no sepa responder ante otras
situaciones.
Provoca un retraso en futuros aprendizajes si se
reciben previamente contingencias incontrolables.
El sujeto se vuelve incapaz de evitar otras
situaciones desagradables, y de dar solución a
conflictos ante los que se tenga que presentar.
Así se explica, por ejemplo, la inmovilidad de las
personas que sufren malos tratos.
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3.5. Resultados de la desaparición del incentivo
sobre la conducta motivada

Si una conducta no va seguida de incentivo, su

probabilidad decrece hasta que desaparece. Es lo
que se conoce como la extinción. La motivación del
sujeto desaparece, al no estar incentivado.
La extinción pude ser tan adaptativa como la
adquisición, ya que si una conducta no aporta
resultados, lo más fácil es inhibirla, por ejemplo en
las rabietas de un niño al que se le deja de hacer
caso.
Inicialmente cuando desaparece el incentivo, el
sujeto incrementa la magnitud y la intensidad de las
respuestas llegando incluso a producir agresividad
debido a su frustración de no obtener el incentivo. El
niño sigue a los padres por la casa gritando.
La extinción se puede medir mediante la llamada
resistencia a la extinción, que es el número de
veces que se sigue emitiendo la respuesta aunque el
incentivo no esté presente. Las variables que afectan
a la extinción se miden por los efectos que producen
en dicha resistencia. Las más destacables son:
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¾Contingencia incentivo-conducta motivada: Con

programas de refuerzo parcial la extinción se
produce más lentamente que con reforzamiento
continuo. Si siempre se da el incentivo tras la
conducta y de repente se omite, la extinción
ocurrirá rápido. Si por el contrario se ha seguido
un refuerzo parcial en el que a veces había
incentivo y a veces no, la extinción será más
duradera porque a pesar de no obtener incentivo,
el sujeto seguirá realizando la conducta ya que
anteriormente hubo momentos en que no obtuvo
incentivo pero posteriormente volvió a obtenerlo.
¾Si el aprendizaje se ha efectuado en distintos
ambientes, la extinción es más difícil.
¾El efecto de la magnitud de la recompensa:
Cuantas más veces se haya realizado el
entrenamiento y obtenido el incentivo, la extinción
será más larga.
¾La demora del incentivo: Cuando se utilizan
intervalos diferentes de demora, la extinción es
más larga.
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4. MOTIVACIÓN INTRÍNSECA
Es la motivación para implicarse en una actividad
por su propio valor, obteniéndose la recompensa en
la mera realización de la tarea. Una conducta se
encuentra intrínsecamente motivada cuando se
produce en ausencia de un estímulo externo y se
basa en una serie de necesidades psicológicas, que
son las responsables de la iniciación y del
mantenimiento de la conducta.
Son varias las necesidades que nos llevan a
actuar intrínsecamente:
- Curiosidad: Sentimos deseo se conocer el entorno,
y es la novedad, imprevisibilidad y complejidad de los
hechos los que determinan el grado de curiosidad.
Berlyne (1965) sostiene que el ser humano
desarrolla altos niveles de estimulación sin
explicación biológica aparente. Es lo que él mismo
denomina “curiosidad intelectual” cuya base se haya
en algún tipo de disonancia conceptual que nos
lleva a buscar más información. Cuando lo percibido
entra en conflicto con lo que ya sabíamos acerca de
ello, se crea esta disonancia. que genera curiosidad y
motivación de aprender.
- La conducta exploratoria (por ejemplo en bebés)
es capaz de lograr una activación psicológica, debido
a cualquier cambio que se produzca, y que origina
una conducta que dirige hacia nuevas experiencias.
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- Autocompetencia y eficacia: Las personas tienen

la necesidad de sentirse competentes y de actuar
eficazmente y con determinación en el entorno
(White, 1959).
- Causación personal: Conductas que inicia una
persona para producir cambios en el ambiente. Surge
de la necesidad de sentirse “origen” y no “peón” de la
conducta y los acontecimientos derivados de ella. No
es trata de un motivo en sí, sino de un principio guía
sobre el que se construyen el resto de los motivos
(De Charms, 1968).
- Autodeterminación: A partir de lo anterior
(causación personal) el hombre deja de ser una
marioneta (al depender de los estímulos externos) y
es iniciador de su propia conducta.

La paradoja del incentivo:

Aquellos incentivos externos incorporados a
actividades intrínsecamente motivadas llegan a
disminuirla. Lo normal es pensar que si ya de por sí
realizábamos una actividad y además nos premiaban
por ella, la actividad se incrementaría, sin embargo
esto no ocurre así. Existen varias explicaciones y
teorías que vamos a ver a continuación y que
explican porqué esto ocurre así.
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4.1. Teorías explicativas de la motivación
intrínseca

Lo común a todas las teorías que se van a

exponer es:
→ Que no son las condiciones estimulares lo
que determina la motivación, sino la manera
activa e intencionada en que las personas
ponen a prueba sus competencias.
→ Los rasgos de activación e intencionalidad,
confieren a la motivación intrínseca su
identidad, diferenciándola de la experiencia
pasiva.
→ Que la conducta motivada es propositiva y
espontánea, pues está impulsada por planes,
metas y objetivos personales (Barberá, 2002).

La principales teorías que explican la

motivación intrínseca, se centran en los efectos
producidos por los incentivos externos sobre ella.
Son las siguientes:
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a) Tª de la sobre-justificación: Lepper
El interés por la actividad disminuirá si la acción
se convierte en un instrumento para conseguir alguna
meta extrínseca.

b) Tª de la autodeterminación: Deci y Ryan

Es el sujeto el que decide su propia conducta, y el
grado de implicación en una tarea.

c) Tª de la evaluación cognitiva: Deci y Ryan.

Basada en la anterior, señala que la satisfacción
de sentirse autónomo y competente ante una tarea,
incita la motivación intrínseca.

d) Tª de la autoeficacia: Bandura.
La percepción que se tenga sobre el dominio en
una tarea, marca su expectativa de éxito y
dedicación.
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a) Tª de la sobre-justificación.

Se debe a Mark R. Lepper (1973). La percepción

que tiene uno mismo de las causas que provocan su
conducta determina e influye en su motivación. El
interés por una actividad disminuirá si la acción se
convierte en un instrumento para conseguir una meta
extrínseca. Si a un arquitecto que disfruta con un
proyecto se le presiona con dinero, su interés
intrínseco disminuirá (pero aumentará el extrínseco).
Los premios introducen autopercepciones de
instrumentalidad, provocando un descenso de la
motivación intrínseca. Se basa en el experimento con
niños que pintan sin recompensa, con ella o con ella
aún no esperándola.(Lepper, Greene, Nisbett, 1973)
El costo oculto de la recompensa es el
resultado que produce el incentivo externo sobre una
conducta que ya se encuentra motivada intrínseca-
mente (Lepper y Green, 1978).
La conclusión es que la recompensa puede
afectar negativamente a la motivación intrínseca de
la persona, en vez de reforzarla.
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b) Teoría de la autodeterminación

Parte de los enfoques de autocompetencia y

causación de White y De Charms. Propuesta por
Deci y Ryan (1985), es una macroteoría que explica
los distintos aspectos de la motivación humana.
Define la autodeterminación como una tendencia
innata que lleva a involucrarse en comportamientos
que despiertan interés en lugar de obligación. Es el
mismo sujeto quien decide su propia conducta y el
grado en que se implica en una tarea por propia
elección.
La actuación se regula por la forma en que se
asumen valores sociales y las contingencias
extrínsecas que se van incorporando a los valores
propios y las motivaciones personales. De esta forma
la motivación intrínseca se modifica a través de
acontecimientos sociales e incentivos que producen
un sentimiento de competencia al actuar.
(No me queda muy claro esto último, pero es algo
así como fusionar lo extrínseco dentro de lo
intrínseco, hasta que deja de ser algo externo, para
transformarse en algo interno).
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c) Teoría de la evaluación cognitiva
Es una sub-teoría de la anterior elaborada por los
mismos autores.
La satisfacción innata de sentirse autónomo y
competente hacia una tarea incita la motivación
intrínseca. Si se percibe que la conducta está
controlada por estímulos externos, disminuye la
sensación de autonomía y el nivel de motivación
intrínseca. La competencia se refiere a la percepción
que se tenga de ella a nivel personal y subjetivo.
El objetivo de esta teoría es especificar los
factores que explican la variabilidad de la MI y
conocer cómo la persona elige aquellas conductas
que le llevarán a la meta que es satisfactoria en sí
misma.

Los estímulos externos influyen en la

variabilidad de la MI de dos maneras:
→ El cambio en la percepción de
competencia y autonomía.
→ El cambio en el origen de la causa de la
conducta (de interna a externa, generando
un descenso de la motivación intrínseca).
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Los incentivos externos que se reciben cuando
se realiza una conducta tienen 2 aspectos:
♦ Informativo: Que suministra retroalimentación
de su competencia, o eficacia de la acción
recompensada. (“que bien lo has hecho!!”)
♦ Controlador: Que provoca relación instrumental
entre la ejecución y las consecuencias,
disminuyendo la MI. (“Lo has hecho tan bien
como tus compañeros”)
Ambos efectos guardan una relación inversa sobre
la conducta. Es decir, si un incentivo tiene un efecto
poco controlador promoverá la autodeterminación e
incrementará la motivación intrínseca, pero si el
incentivo es controlador dañará la autodeterminación
y perjudicará la motivación intrínseca hacia la tarea.
De igual forma, si la información hace que el
individuo se perciba como muy competente, se
estimulará su MI hacia la tarea, pero ocurrirá lo
contrario si la información hace énfasis en los fallos y
transmite la idea de baja competencia.
Estos dos aspectos se manipulan para potenciar
distintos logros, sobre todo en el ámbito académico.
Si se da mayor énfasis a los resultados, se mostrará
menos interés y descenderá la autoestima . Esto
sucede, por ejemplo, a medida que avanza el curso y
la exigencia académica aumenta, pero disminuye la
sensación de competencia en los alumnos, y éstos
rinden peor.
 29
d) Teoría de la autoeficacia
Se deba a Albert Bandura (1987).
La percepción que tenga la persona de su
dominio de la tarea determinará sus expectativas de
éxito, a la vez que su persistencia en la ejecución y la
cantidad de esfuerzo invertido en la realización de
dicha tarea.
La autoeficacia está basada en distintos factores
cognitivos previos. Si se duda ante la propia
capacidad para realizar algo, se pierde motivación de
hacerlo. Conviene diferenciar dos conceptos:
Ê Autoeficacia percibida: Es una valoración
de la capacidad de uno para organizar y
llevar a cabo un tipo concreto de actuación
(saberse capaz de lograr algo).
Ê Expectativa de resultados: Es la
apreciación acerca de la probabilidad de
que se den las consecuencias positivas de
tales actuaciones.
Ambos conceptos hacen que aumente la
motivación intrínseca y se faciliten los aprendizajes
posteriores.
En definitiva, esta teoría considera que la
motivación depende de recompensas externas pero,
sobre todo, de recompensas internas autogeneradas,
que regulan la conducta.
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4.2. Efectos de la tarea sobre la motivación

intrínseca

Recapitulando lo anterior tenemos que la MI se

basa en:
→ La curiosidad como necesidad básica de
conocimiento del entorno.
→ El deseo de controlar el ambiente y
sentirse competente dentro del mismo.
→ Las características de determinación y
competencia establecen las diferentes
formas de afrontar las tareas.
A continuación vamos a ver dos aspectos más
que afectan a la motivación intrínseca:
→ Grado de dificultad de la tarea
que se afronta.
→ Empleo de incentivos durante
la realización de la tarea.
 31
Grado de dificultad de la tarea
Una situación de reto óptimo es aquella en la
que el nivel de dificultad de una tarea es semejante a
las habilidades para llevarla a cabo. Si la tarea es
muy fácil para su capacidad, la persona se aburrirá,
si por el contrario es muy difícil para su capacidad le
entrará ansiedad. En ambos casos disminuye la MI.
El psicólogo húngaro Csikszentmihalyi, ha
planteado la existencia de un “flow” (flujo) que sólo
emerge cuando uno mismo percibe congruencia
entre los retos presentados y las propias
competencias. En la situación de flujo se realiza la
acción sin esfuerzo (fluye) debido a un estado de
total concentración por parte del individuo, que se
deja absorber por la tarea, resultando así placentera.
Para que la experiencia de flujo pueda ocurrir,
hacen falta tres condiciones previas:
o Ser capaces de concentrarse en la tarea.
o Que la tarea y la meta a cumplir estén
claramente establecidas.
o Que la retroalimentación por la ejecución
se proporcione inmediatamente.
Deci (1985) indica que cuando se está motivado
intrínsecamente se buscan situaciones con un grado
óptimo de reto. Esto es importante al enseñar, de
cara a no sobrepasar las capacidades del alumno.
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Características del incentivo que afectan a la
motivación intrínseca
Diversos experimentos han concluido que las
recompensas tienen un efecto destructivo sobre las
tareas creativas. Existen 4 factores que limitan las
circunstancias en las que la aparición de la
recompensa externa reduce la MI:
1. La expectativa de recompensa: La perspectiva de
una recompensa anunciada provoca que la
obligación con la tarea se mantenga hasta que se
reciba el premio.
2. El carácter material de la recompensa: Si la
recompensa es material, afecta más a la motivación
intrínseca que si no es tangible (elogios). Las
recompensas verbales informativas sí mejoran la MI.
3. Las recompensas esperadas y tangibles: no solo
ponen en riesgo la MI sino que además interfieren en
el proceso y la calidad del aprendizaje. Si a un
aprendiz de joyero se le recompensa mucho al
principio por engastar piedras, no se preocupará por
aprender el resto del oficio.
4. El efecto de saliencia de la recompensa: Cuando
el incentivo está a la vista del sujeto,desciende el
interés intrínseco por la tarea.
Resumen: La recompensa no afecta a la
motivación intrínseca, salvo que sea
esperada, tangible y excesivamente saliente.
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5. ¿MOTIVACIÓN INTRÍNSECA O EXTRÍNSECA?

No hay pruebas concluyentes. Unos enfoques

mantienen que la motivación externa favorece el
rendimiento y otros destacan sus efectos
perjudiciales.
En muchos casos la MI queda doblegada por
factores sociales, sin que se conozca la
consecuencia que pueda tener esto a largo plazo. A
sí mismo, cada cual crea incentivos para controlar la
conducta de otros.
Cuando el sujeto no está intrínsecamente
motivado, el empleo de incentivos externos
inicialmente puede hacer aumentar su motivación al
cobrar interés por la tarea, sobre todo si ésta es
necesaria como trabajar o limpiar la casa. A veces la
propia recompensa o satisfacción, hace que se
vuelva a repetir e incluso pueden generan interés por
tareas que, en principio, resultan aburridas.
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Para finalizar y a modo de resumen entre los dos

tipos de motivaciones:
Ê Los individuos intrínsecamente motivados
hacia una tarea seleccionan tareas de
dificultad moderada, mientras que los
extrínsecamente motivados son menos
creativos y eligen tareas fáciles que tengan
más posibilidades de conseguir el premio.
Ê Cuando la conducta se mantiene sólo por una
recompensa exterior, se pone fin a la actividad
al obtener el producto deseado.
Ê Si los sujetos participan en una actividad
voluntaria, su motivación intrínseca será más
elevada.
Ê Los factores extrínsecos percibidos como
informativos sobre la propia competencia,
facilitan la motivación intrínseca, mientras que
aquellos percibidos como controladores la
disminuyen.