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“Iglesia Misionera” expansión

Introducción

¿Un cristiano de hoy puede vivir con el mismo fervor y dedicación su fe cristiana
como lo hicieron los primeros cristianos? ¿Qué nos faltaría? Leer los Hechos de
los Apóstoles es estar reviviendo la vida de los primeros cristianos, de la primera
Iglesia. Estaba fresco aún el Pan de la Última Cena; la Sangre del Cristo sufriente
estaba aún caliente; sus Palabras desde la Cruz resonaban por todos los rincones.
Ya Jesús subió al Cielo y sus discípulos conservaban en sus pupilas el rostro del
Señor.
Objetivo:
Tomar conciencia que venimos y somos una Iglesia Misionera, el Evangelio
aún no ha llegado a todo el mundo ni al centro de nuestras vidas.
Los hechos de los Apóstoles son la continuación del evangelio de Lucas y narran
el nacimiento del cristianismo y de la primera iglesia. Aquí encontramos las raíces
de un mensaje y un modo de vida que ha sido decisivo en la historia de la
humanidad. La Iglesia presentada en los Hechos es la comunidad de los
discípulos, guiados por el Espíritu Santo. Dan testimonio del Señor desde la
experiencia de la fraternidad.

Características literarias

a) Se sirvió de varias fuentes: el evangelio de Marcos, la famosa “Fuente Q”, los


“archivos” orales y escritos de varias comunidades, los recuerdos vivos de los
apóstoles, los recuerdos personales sobre Pablo. Reelaboró este material y dio a
su escrito una forma unitaria.

b) Ha sido escrito con gusto y refleja una habilidad comparable a la de otros


escritos de la época helenista.

c) Son relatos narrativos con una intencionalidad ejemplar, es decir, provoca en


el lector el deseo de vivir aquellas mismas experiencias.

d) Los discursos insertados a lo largo de los relatos se centran en lo esencial: la


muerte y resurrección de Jesucristo, como fuente de salvación de todos los
hombres.
e) Hay también sumarios que son breves resúmenes de la vida comunitaria, que
van marcando las transiciones y ofrecen al lector una pausa de reflexión para que
se detenga y comprenda el sentido de lo que se cuenta en el libro.
f) Hasta la invención de la imprenta, el libro de los Hechos se transmitió, como el
resto del Nuevo Testamento, en manuscritos.

División y contenido temático

a) Introducción (1, 1-11), que une el libro del evangelio con el de los Hechos de
los apóstoles.
b) La Iglesia de Jerusalén (1, 12-8,3): la comunidad apostólica y la comunidad de
Jerusalén.
c) La expansión de la Iglesia en Asia Menor (8, 4-14.28): en Samaria,
conversión de Pablo, Pedro en Cesarea, fuera de Palestina (Antioquía), liberación
de Pedro, primer viaje misionero de Pablo a Chipre y Asia menor.

d) Asamblea en Jerusalén (15, 1-35).

e) Expansión al mundo griego (15, 36-21, 14): segundo viaje de Pablo en Grecia
y tercer viaje de Pablo en Asia Menor.

f) De Jerusalén a Roma (21, 15-28, 29): Pablo en Jerusalén, en Cesarea y hacia


Roma.

b) El Espíritu Santo, el gran protagonista: más que Pedro y Pablo, el Espíritu


Santo es el protagonista en todas las decisiones de la Iglesia. El Espíritu Santo es
quien convierte a los apóstoles en “testigos” e intrépidos misioneros de Jesús, en
Pentecostés. El Espíritu Santo es la fuerza que lanza a la Iglesia naciente. Este
Espíritu es el mismo Espíritu de Jesús, que se perpetúa en la Iglesia.

La comunidad cristiana: un ideal. ¿Qué características tiene esta Iglesia


Misionera? 107

Anuncian la enseñanza de los apóstoles o kerigma, acompañada por milagros.


Viven en comunión fraterna y en caridad.
Se alimentan de la oración y de la fracción del pan o eucaristía.
Reparten sus bienes con los necesitados. Programas, pero sobre todo
conciencia de trabajar y compartir con los que están imposibilitados para trabajar.
(ancianitos, enfermos, discapacitados, familias en extrema pobreza y mirar sus
causas)

Tienen conciencia y organización de hacer un trabajo misionero en conjunto.


Iglesia, diócesis, Congregaciones, familias, laicos dispuestos a ir a compartir su
Fe.

Características de la Iglesia:

Iglesia misionera y universal: se proyecta, bajo el impulso del Espíritu, afuera


de Jerusalén y Palestina. Es una Iglesia en misión, para que todo hombre tenga la
posibilidad de recibir el evangelio. El ingreso en la comunidad cristiana les
convierte en hombres libres de toda religión o culto, de otros dioses e incluso de
toda institución religiosa. Los conflictos que surgieron al principio con la apertura
de la comunidad a todos los hombres se solucionaron con el diálogo, la oración, la
comunión y la ayuda del Espíritu.

Iglesia ministerial: cada uno es escogido según la llamada de Dios y las


cualidades personales: diáconos, misioneros, responsables de la comunidad.

Iglesia apostólica: todo servicio o ministerio tiene como centro y punto de


referencia a los apóstoles. Por eso, los siete diáconos son presentados a los
apóstoles, que les imponen las manos; las decisiones del Concilio de Jerusalén
son avaladas y rubricadas por Pedro y Santiago; Pablo sube varias veces a
Jerusalén para confrontar su fe y su predicación con Pedro. Los apóstoles son
garantes de la verdad y de la unidad. Con el crecimiento de las comunidades, los
apóstoles eligen a unos responsables que tienen como misión: admitir en la
comunidad, vigilar la transmisión del mensaje, enseñar, tomar decisiones en
momentos importantes, distribuir las funciones en la comunidad y dispensar los
sacramentos que eran dos: el bautismo y la fracción del pan.

Iglesia probada y perseguida: desde el inicio es una Iglesia perseguida, pero


sigue valiente, confiada en la fuerza del Espíritu. Perseguida por los mismos judíos
observantes de la ley mosaica, porque los apóstoles admiten a los paganos,
dispensándoles de la circuncisión y de la ley mosaica, pues sólo les bastaba la fe
en Jesucristo. Y perseguida por los romanos paganos, que veían en el tenor de
vida de los primeros cristianos un atentado y una fuerte llamada de atención a la
vida de lujo, vanidades y placeres desenfrenados que llevaban los paganos.
TRABAJO EN GRUPOS DE 4

Hoy… Cómo está nuestra Iglesia en los aspectos de:

Iglesia Misionera

Iglesia comprometida con el Evangelio

Iglesia probada y perseguida

Iglesia como testimonio

MENSAJE DEL PAPA FRANCISCO DOMUND 2016.

Iglesia misionera, testigo de misericordia», es el título del Mensaje


en el que el Obispo de Roma hace hincapié en que «en esta Jornada
Mundial de las Misiones, todos estamos invitados a «salir», como
discípulos misioneros, ofreciendo cada uno sus propios talentos, su
creatividad, su sabiduría y experiencia en llevar el mensaje de la
ternura y de la compasión de Dios a toda la familia humana».

«En virtud del mandato misionero, - escribe el Papa Francisco - la


Iglesia se interesa por los que no conocen el Evangelio, porque quiere
que todos se salven y experimenten el amor del Señor. Ella «tiene la
misión de anunciar la misericordia de Dios, corazón palpitante del
Evangelio» (Bula Misericordiae vultus, 12), y de proclamarla por todo
el mundo, hasta que llegue a toda mujer, hombre, anciano, joven y
niño».

«Todos los pueblos y culturas tienen el derecho a recibir el mensaje de


salvación, que es don de Dios para todos», escribe el Papa y destaca
que «esto es más necesario todavía si tenemos en cuenta la cantidad
de injusticias, guerras, crisis humanitarias que esperan una
solución. Los misioneros saben por experiencia que el Evangelio del
perdón y de la misericordia puede traer alegría y reconciliación, justicia
y paz».

Subrayando que «en este Año jubilar se cumple precisamente el 90


aniversario de la Jornada Mundial de las Misiones, promovida por la
Obra Pontificia de la Propagación de la Fe y aprobada por el Papa Pío
XI en 1926», el Santo Padre señala que por lo tanto, considera
«oportuno volver a recordar la sabias indicaciones» de sus
predecesores, «los cuales establecieron que fueran destinadas a esta
Obra todas las ofertas que las diócesis, parroquias, comunidades
religiosas, asociaciones y movimientos eclesiales de todo el mundo
pudieran recibir para auxiliar a las comunidades cristianas necesitadas
y para fortalecer el anuncio del Evangelio hasta los confines de la
tierra».

El Mensaje pontificio termina invocando a María, Madre de Dios y de


la Iglesia «icono sublime de la humanidad redimida, modelo
misionero para la Iglesia», para que «enseñe a todos, hombres,
mujeres y familias, a generar y custodiar la presencia viva y misteriosa
del Señor Resucitado, que renueva y colma de gozosa misericordia las
relaciones entre las personas, las culturas y los pueblos».

COMPROMISO

Un par de huellas para cada persona y en una colocar el


compromiso que deberíamos retomar como Iglesia Católica en su
parroquia y luego a nivel personal.

CONCLUSIÓN: Los Hechos de los apóstoles nos presenta el modelo de vivencia


cristiana; es decir, ahí encontramos cómo debemos vivir nosotros, cristianos del
siglo XXI y de todos los siglos: unidos en el amor a Cristo, junto a nuestros
pastores (Papa, obispos y sacerdotes), a quienes obedecemos y con quienes
trabajamos codo a codo en la construcción de la Iglesia de Cristo y alimentados en
los sacramentos, especialmente en la Eucaristía.

Canto: Alma Misionera

ORACIÓN: Espíritu Santo, al igual que conducías, a la primera iglesia, te pedimos


que guíes nuestros pasos en este tercer milenio de cristianismo, y pon en nuestros
labios y en nuestro corazón el mensaje de Jesús, para que lo vivamos y
transmitamos con la misma valentía, claridad y entusiasmo de los primeros
cristianos. Amén.

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