cruzando los aires con vuelo veloz, y en tibios aleros formaron sus nidos, sus nidos formaron, piando de amor. Que blancos sus pechos, sus alas que inquietas, que inquietas y leves abriéndose en cruz y como alegraban las tardes aquellas, las tardes aquellas bañadas de luz.
Así en la mañana jovial de mi vida,
llegaron en alas de la juventud, amores y ensueños...como golondrinas, como golondrinas bañadas de luz...
Más trajo el invierno su niebla sombría,
la rubia mañana llorosa se fué... se fueron los sueños y las golondrinas... y las golondrinas se fueron también...