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APARATO REPRODUCTOR

MASCULINO
es el encargado de garantizar la
reproducción en el varón. Está
formado por órganos internos y
externos. Los principales órganos
externos son los testículos, el
epidídimo y el pene. Los testículos
se alojan en el escroto o saco
escrotal, formado por un conjunto
de envolturas que los cubren y
alojan. Las estructuras internas
son los conductos deferentes y las
glándulas accesorias que incluyen
la próstata y las glándulas
bulbouretrales.
Los testículos producen
espermatozoides y liberan a la sangre hormonas sexuales masculinas (testosterona). Un sistema
de conductos que incluyen el epidídimo y los conductos deferentes almacenan los espermatozoides
y los conducen al exterior a través del pene. En el transcurso de las relaciones sexuales se produce
la eyaculación, que consiste en la liberación del líquido seminal o semen. El semen está compuesto
por los espermatozoides producidos por los testículos y diversas secreciones de las glándulas
sexuales accesorias.

SISTEMA REPRODUCTOR FEMENINO


El aparato genital femenino se compone de
dos partes: el útero, que alberga el feto en
desarrollo, produce secreciones vaginales y
uterinas, y traslada el semen a las trompas de
Falopio; y los ovarios, que producen los
ovocitos o gametos femeninos.

FECUNDACIÓN
es el proceso por el cual dos gametos (masculino y femenino) se fusionan durante la
reproducción sexual para crear un nuevo individuo con un genoma derivado de ambos progenitores.
Los dos fines principales de la fecundación son la combinación de genes derivados de ambos
progenitores y la generación de un nuevo individuo.

Proceso

Los detalles de la fecundación


son tan diversos como las
especies; sin embargo, existen
cuatro eventos que son
constantes en todas ellas:

1. El primer contacto y
reconocimiento entre el
óvulo y el
espermatozoide, que en la
mayor parte de los casos
es de gran importancia
para asegurar que los
gametos sean de la
misma especie.
2. La regulación de la
interacción entre el espermatozoide y el gameto femenino. Solamente un gameto masculino
debe fecundar un gameto femenino. Esto puede lograrse permitiendo que sólo un
espermatozoide entre en el óvulo, lo que impedirá el ingreso de otros.
3. La fusión del material genético proveniente de ambos gametos.
4. La formación del cigoto y el inicio de su desarrollo.

SEGMENTACIÓN
hace referencia a la división
de algunos individuos tanto en
animales y en vegetales en una
serie de segmentos algo
repetitivos. La segmentación
permite un alto grado de
especialización de las regiones
corporales, observable
especialmente en anélidos,
artrópodos y vertebrados. la
segmentación es una
manifestación del concepto más
general de modularidad. Así
mismo, su proceso de formación es
una manifestación del proceso
más general de la morfogénesis.
IMPLANTACIÓN

es un proceso complejo a través del cual el embrión se aproxima y se adhiere al endometrio al que
finalmente lo invade; esto ocurre por lo general en el tercio superior de la pared posterior del útero.
Para que este proceso se lleve a cabo de manera correcta se requieren tres condiciones
indispensables: que el endometrio esté receptivo, un embrión normal en fase de blastocisto y una
comunicación molecular adecuada entre ambas estructuras.

Las condiciones receptivas endometriales se alcanzan de 6 a 7 días después de la ovulación cuando


el endometrio está en su fase de secreción máxima, debido al estímulo de la progesterona. En esta
etapa comienza la implantación con la expresión de citocinas y moléculas de adhesión, a esta fase
inicial se le conoce como ventana de implantación. La implantación se realiza en tres etapas:
aposición, adhesión e invasión.

Etapa de aposición

En la etapa de aposición, el blastocisto encuentra su lugar de implantación, pierde la zona pelúcida


y el trofoblasto situado en el polo embrionario hace contacto con la capa compacta del endometrio;
esta etapa es controlada por el embrión y el
microambiente del endometrio (figura 9-1).

Figura 9-1.

Esquema que representa la fase de aposición


del blastocisto en el epitelio endometrial (capa
compacta).

Etapa de adhesión

En esta etapa se expresan las integrinas β1,


β3 y β4, las cuales son intermediarias entre el
endometrio y el blastocisto facilitando la
fijación del trofoblasto (trofoectodermo) con
las células epiteliales del endometrio (capa
compacta).

Etapa de invasión

En la etapa de invasión participan activamente citocinas, entre las que se ha identificado al factor
inhibidor de la leucemia; esta molécula se expresa en forma importante cuando el endometrio está
receptivo y es una de las responsables del diálogo entre el embrión y el endometrio. Como resultado
de este diálogo ocurre la activación del blastocisto, que se inicia con la diferenciación del trofoblasto
en citotrofoblasto y sincitiotrofoblasto. El citotrofoblasto está formado por células poliédricas de
límites bien definidos que se multiplican activamente. El sincitiotrofoblasto es una capa
multinucleada, sin límites celulares y que prolifera gracias a las células del citotrofoblasto que se
integran a éste cuando pierden sus membranas plasmáticas. Al diferenciarse el sincitiotrofoblasto
adquiere su capacidad invasiva, sintetiza enzimas proteolíticas, entre ellas las denominadas
metaloproteasas que rompen los desmosomas de la membrana basal del epitelio endometrial y
mediante protrusiones alcanza la capa esponjosa (figura 9-2). La destrucción del endometrio
durante la penetración origina un ligero sangrado que puede malinterpretarse como una
menstruación anormal.

Figura 9-2.
Esquema que representa la fase de invasión del blastocisto hacia la capa esponjosa.

EL PRIMER TRIMESTRE DE EMBARAZO

El primer trimestre de embarazo


incluye las 12 primeras semanas de
gestación y, con ello, los tres
primeros meses. Las dos primeras
semanas de embarazo solo sirven
para realizar el cálculo lo más
exacto posible.

En el primer trimestre, lo
importante es el desarrollo del
embrión. Los órganos se forman, la
cabeza, los brazos, las manos y los
brazos se desarrollan y las células
nerviosas del cerebro se forman y
también se establecen sus
conexiones. El embarazo no es
visible en las doce primeras
semanas, aunque durante este
periodo la embarazada sufre molestias del embarazo que pueden ser muy diversas. Además, el
primer trimestre es la fase crítica de todo el embarazo: las influencias como las que producen el
alcohol, las drogas y el tabaco pueden originar aquí los mayores efectos, ya que pueden mermar el
desarrollo de órganos vitales.
EL SEGUNDO TRIMESTRE DEL
EMBARAZO

El segundo trimestre del embarazo abarca


desde la semana 13 hasta la semana 28. En
ese período, la madre comienza a descubrir el
crecimiento de su abdomen, a percibir
movimientos del bebé, puede tener
contracciones que son normales, fisiológicas
y aisladas, especialmente cuando hace
actividad física, levanta cosas pesadas, o
padece de stress laboral o social. Estas
contracciones pueden llevarla a la consulta,
en la que el médico -entre otros controles-
descartará si hay alguna afección urinaria (lo
que es frecuente en este período). Es
habitual que el flujo vaginal aumente en este trimestre por una cuestión hormonal. Por lo general,
disminuyen o tienden a desaparecer las náuseas y los vómitos y se incrementa la tendencia a la
constipación, por una disminución de la actividad intestinal causada por las hormonas.

TERCER TRIMESTRE DE EMBARAZO

es la última etapa de tu embarazo en la que


te harás las últimas pruebas, te prepararás
para el parto y darás los últimos toques a la
habitación de tu bebé. Descubre todo lo que
necesitarás en esta última etapa, desde tus
cuidados, a las pruebas o la alimentación que
deberás seguir en estas últimas semanas del
embarazo.

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