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ISBN: 978-84-9116-376-3
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titulares del copyright.
Autora
Iria da Cunha
Del 2010 al 2014 fue miembro del Comité Ejecutivo de la Red Iberoamericana de
Terminología. Ha sido miembro del Comité Científico y del Comité Organizador de varios
congresos internacionales y nacionales. Actualmente es miembro del Comité Editorial de
varias revistas científicas.
A Hugo y a Max
Prólogo. Redactar un proyecto,una capacidad adquirida
M. Teresa Cabré
1. La comunicación especializada
Como se explica en Cabré (1992, 1999), la comunicación especializada tiene
ciertas particularidades que la distinguen de la comunicación general, según los
elementos del esquema comunicativo de Jakobson (1963). Estas particularidades
se refieren principalmente a tres elementos: el emisor, el mensaje y el receptor.
En primer lugar, el emisor ha de ser un especialista del domino o ámbito
especializado sobre el que trata el texto, como por ejemplo la medicina, la
economía, la lingüística, la informática, la química, el derecho, el teatro, el medio
ambiente, etc. El especialista puede serlo porque ha adquirido sus
conocimientos sobre el ámbito mediante una formación específica o porque ha
desempeñado una profesión durante un periodo temporal prolongado que avala
los conocimientos que ha adquirido sobre dicho ámbito. En el caso de un
trabajo académico, el estudiante debe situarse en el lugar del especialista como
emisor. En segundo lugar, en el caso de la comunicación especializada, el
mensaje es el mismo texto especializado (ya sea oral o escrito) que se transmite.
El estudiante no debe olvidar que un trabajo académico es un producto textual
que debe cumplir los requisitos que se esperan de este tipo de textos
especializados. En tercer lugar, en el contexto de la comunicación especializada,
el receptor puede ser de naturaleza diversa. Concretamente suelen mencionarse
tres tipologías de receptores posibles: otros especialistas o expertos del ámbito
especializado del que trata el texto, estudiantes o aprendices interesados en
aprender sobre dicho ámbito, o el público general o lego en la materia, que
simplemente tiene un interés puntual o esporádico sobre el ámbito, pero no
tiene formación sobre él. En el caso de los trabajos académicos, los receptores
principales serán otros especialistas del mismo ámbito (principalmente los
directores del trabajo, los miembros del tribunal que lo evaluará y otros
especialistas que investiguen sobre temas afines al del trabajo), y estudiantes que
se encuentren en la fase de elaboración de su propio trabajo académico de grado
o de fin de máster y necesiten adquirir información sobre dicho tema.
La elaboración de un trabajo académico o trabajo de investigación se sitúa,
pues, en el contexto de la comunicación especializada, en la cual se transmite un
conocimiento especializado por parte del estudiante (en su rol ahora de
especialista) en una situación formal. En este contexto, el trabajo académico se
materializa en varios productos textuales que serán evaluados por un tribunal y
que se corresponden con tres géneros textuales concretos que se transmiten
por canales de comunicación distintos (escrito u oral): el trabajo académico
escrito, la presentación oral para la defensa del trabajo y la presentación con
diapositivas que apoya la presentación oral de la defensa. Entendemos «género»
como una forma textual convencional reconocida socialmente, como podría ser
una noticia periodística, un editorial, una receta de cocina, un informe, una nota
clínica, una ley, etc. En muchos casos, existen géneros textuales que se
corresponden con ámbitos especializados determinados. Sería el caso, por
ejemplo, de una ley en el ámbito del derecho o de una nota clínica en el ámbito
de la medicina. En cambio, los géneros «trabajo académico escrito»,
«presentación oral para la defensa del trabajo académico» y «presentación escrita
con diapositivas para la defensa» trascienden el ámbito especializado, de la
misma manera que lo hacen otros géneros como el «artículo científico», la
«conferencia» o la «clase magistral». En otras palabras, la principal variación
entre diferentes trabajos académicos es el ámbito en el cual se circunscriben y el
tema concreto desarrollado, pero las características globales del género en sí (sea
escrito u oral) no son variables, es decir, deben seguirse unas pautas o criterios
determinados para su elaboración. Por ejemplo, es imprescindible que la
estructura de un trabajo académico incluya unos apartados prototípicos que a su
vez reflejen unos contenidos determinados, como son los objetivos del trabajo,
la metodología, los resultados, las conclusiones, etc. (este tema se trata con
detalle en el apartado 3 del capítulo 3). De todas maneras, es cierto que los
trabajos académicos que se realizan en algunos ámbitos especializados (como la
medicina o la informática, por ejemplo) pueden adquirir ciertas particularidades,
como se irá observando en los siguientes capítulos.
Como se indica en Seghezzi (2011), los textos especializados escritos y
orales tienen ciertas similitudes, pero también existen diferencias entre ellos. En
el caso de los tres géneros textuales (escrito y oral) en los que deriva un trabajo
académico, estos comparten la necesidad de planificación previa y el elevado
grado de formalidad que deben reflejar. En cuanto a las diferencias entre ambos,
en el caso del género escrito «trabajo académico» existe la posibilidad (más bien
la obligatoriedad) de revisión del texto final, mientras que en el género oral
«presentación para la defensa del trabajo académico», aunque las diapositivas
empleadas para realizar la presentación sí pueden (y deben) revisarse, el texto
oral se produce en tiempo real y, por lo tanto, no hay opción de revisión. Es por
este motivo que la presentación oral debe prepararse muy bien, de cara a no
cometer errores inoportunos. Asimismo, un trabajo académico escrito implica
un distanciamiento con el receptor del texto, lo cual debe traducirse en una
necesidad de claridad conceptual y en ausencia de ambigüedad, para que las
interpretaciones del lector sean las adecuadas. En cambio, en la defensa oral,
existe un contexto compartido entre el emisor (el estudiante) y el receptor (el
tribunal), en el cual incluso hay interacción entre ellos. Estas diferencias tienen
implicaciones importantes que deben tenerse en cuenta a la hora de elaborar un
trabajo académico.
La figura 1 muestra de manera esquemática al emisor, el mensaje y al receptor
de un trabajo académico contextualizado en la comunicación especializada.
Figura 2. Cuestiones que el estudiante debe tener en cuenta para lograr el éxito académico
La realización de un trabajo académico de grado o de máster supone el punto
final de un proceso de formación largo. Por tanto, el estudiante suele estar
cansado y, en ocasiones, desmotivado. Habrá días en los que todo se verá
positivo y el trabajo será algo creativo y estimulante, pero, siendo realistas,
también habrá otros días en los que las ganas de tirarlo todo por la borda
aflorarán, ya sea por falta de tiempo, de interés, de motivación, etc. En estos
momentos tener una autoestima elevada (en cuanto al plano académico) es
fundamental. La seguridad en las capacidades de uno mismo para desarrollar
un trabajo determinado son determinantes en este proceso. El estudiante debe
estar convencido de que puede acabar su trabajo académico y poner todos sus
recursos para lograrlo. Es fundamental el esfuerzo del estudiante durante todo
el camino y la constancia de su trabajo día a día para no abandonar el trabajo.
Es importante también tener cierta estructuración mental, para poder gestionar
el tiempo adecuadamente y seguir un calendario realista y adecuado.
Sin embargo, para realizar un trabajo académico es necesario algo más que la
autoestima, la seguridad, el esfuerzo, la constancia y la estructuración: los
conocimientos sobre el tema son imprescindibles. Para adquirirlos el estudiante
debe saber cómo acceder a fuentes especializadas para obtener bibliografía
adecuada sobre el tema y, posteriormente, leer dichas referencias de manera
crítica, es decir, asimilando los contenidos y siendo capaz de aplicarlos al trabajo
académico planteado. Asimismo, aunque la autoestima es necesaria en ciertos
momentos del proceso de elaboración de un trabajo académico, también es
indispensable tener cierta capacidad de autocrítica durante todo el proceso. Es
normal equivocarse en algunas cuestiones, que pueden tener que ver con el
planteamiento de los objetivos, con la metodología seguida, con la
interpretación de resultados, etc. Es importante que el estudiante reconozca sus
propios errores o limitaciones, e intente ponerles remedio sin sentirse mal por
ello. En este proceso es normal que surjan infinidad de dudas. Es más, si no
surgen dudas, desconfiemos. Un trabajo académico supone, por ejemplo,
plantearse un tema, unos objetivos o una metodología, y es totalmente lógico
dudar inicialmente sobre todos estos aspectos. ¿Es pertinente el tema
propuesto? ¿Los objetivos están planteados de manera correcta? ¿La
metodología diseñada es adecuada para lograr los objetivos? Estas preguntas o
dudas son necesarias en una investigación y el estudiante debe saber
responderlas con un cierto grado de madurez. De todos modos, no ha de
olvidarse que en un trabajo académico es vital la supervisión por parte de un
director o tutor, quien debe ayudar al estudiante a resolver estas dudas. Sin
embargo, es cierto también que la función del director o tutor es guiar el
proceso de elaboración del trabajo académico, pero es el estudiante quien debe
realizarlo y el producto final es su responsabilidad. Otra de las funciones del
director o tutor es dar un «ultimátum» al estudiante cuando este no sea capaz
de cerrar el trabajo. Ha de tenerse en cuenta que en un trabajo de investigación
siempre quedarán cuestiones que al estudiante le gustaría abordar pero que no le
es posible tratar, ya sea por falta de tiempo (siempre existe un deadline para la
entrega y defensa del trabajo académico) o por la magnitud estipulada del trabajo
(normalmente la extensión máxima exigida por la institución académica no debe
superar un cierto número de páginas).
Asimismo, con respecto al planteamiento del trabajo académico, deben tenerse
en cuenta dos cuestiones fundamentales: la innovación y la creatividad. Un
trabajo académico debe ser innovador, en el sentido de que debe tratar un tema
nuevo o, al menos, algún aspecto nuevo de un tema ya tratado previamente.
Este aspecto innovador puede referirse, por ejemplo, a un objetivo diferente, a
una nueva metodología propuesta o a un nuevo marco teórico empleado para
alcanzar un objetivo determinado. Además, el estudiante no debe tener miedo
de ser creativo, tanto en el planteamiento del trabajo como en su propia
realización. La creatividad siempre está bien valorada por un tribunal y aporta un
valor añadido al trabajo.
En relación con el contenido del trabajo académico, si anteriormente me
refería a la estructuración mental para poder gestionar el tiempo adecuadamente,
ahora retomo el término, pero en esta ocasión para referirme a la
estructuración que debe reflejarse en el trabajo académico en sí. El trabajo
debe estar correctamente organizado y dividido en apartados coherentes que
sigan la estructura prototípica de este tipo de trabajos. Además, otra de las
características indispensables en un trabajo académico es la claridad. El
estudiante no ha de olvidar que el lector debe entender fácilmente todos los
contenidos del texto y, para ello, este debe estar redactado de una manera
concisa, precisa, clara, etc., es decir, siguiendo las características generales que
deben mantener los textos especializados.
Finalmente, una cuestión imprescindible para que la investigación llegue a
buen puerto es el sentimiento que el estudiante le pone a su trabajo académico.
Puede parecer un tópico, pero la realidad es que, cuando un estudiante está
motivado y contento con el tema de su trabajo, obtiene mejores resultados.
Estoy segura de que, con ilusión por la investigación y con la lectura de los
siguientes capítulos, cualquier estudiante logrará obtener el éxito académico.
Capítulo II
Las etapas del proceso de elaboración del trabajo
académico
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12
Ampliación del corpus textual
Establecimiento del corpus terminológico (casos
normalizados)
Análisis de casos normalizados (factores de implantación)
Implementación de la base de datos
2008
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12
2009
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12
4. Revisión de la literatura
La etapa de la revisión de la literatura en un trabajo académico es clave y sirve
para cubrir dos necesidades importantes del trabajo. Por un lado, como ya se
apuntaba en el apartado 3 del capítulo 2, es necesaria para realizar el estado de la
cuestión del trabajo y, por otro, si el trabajo requiere un marco teórico para
llevarse a cabo, esta será la etapa en la que se encontrará.
En relación con el estado de la cuestión, la revisión de las referencias
bibliográficas relacionadas directamente con el tema del trabajo académico es
fundamental para no repetir el trabajo ya realizado por otros. Si el estudiante no
lleva a cabo esta revisión bibliográfica de manera adecuada y exhaustiva, puede
darse cuenta al final del proceso de elaboración de su trabajo de que su
propuesta no es original y de que la investigación realizada ya había sido llevada
a cabo (total o parcialmente) por otros investigadores. El estudiante también
puede encontrarse en la (desagradable) situación de que sea el propio tribunal
que evalúa el trabajo el que le haga darse cuenta de ello el día de la defensa oral.
Así pues, esta etapa es útil para validar la adecuación de los objetivos planteados
en el trabajo académico.
Asimismo, esta revisión bibliográfica sirve para detectar vacíos en el
conocimiento. Quizás el estudiante tiene claros el ámbito, el subámbito y el tema
de su trabajo académico, pero no acaba de ser capaz de delimitar claramente los
objetivos de su investigación. Mediante una revisión y lectura exhaustiva de la
bibliografía existente relacionada con el tema propuesto, el estudiante puede
obtener información muy valiosa sobre las cuestiones que podría abordar y que
supondrían un avance en el conocimiento de un determinado ámbito. En otras
palabras, esta etapa es útil no solo para validar la adecuación de los objetivos
sino también para delimitar dichos objetivos.
Para realizar una revisión de la literatura de manera adecuada, en primer lugar,
el estudiante debe buscar las referencias bibliográficas que estén directamente
relacionadas con el tema de su trabajo académico. Estas referencias deben ser
textos especializados que se correspondan con diferentes géneros textuales,
como tesis doctorales, artículos científicos de revistas especializadas, artículos
científicos publicados en actas de congresos, libros o capítulos de libros sobre el
tema en cuestión, etc.
Para encontrar estas referencias, el estudiante puede acudir a diferentes
fuentes. Algunas fuentes de información muy útiles son:
• El buscador en línea Google Académico,1 que permite recuperar textos
especializados de cualquier ámbito y género textual, a partir de búsquedas
avanzadas en las que pueden utilizarse diversos parámetros. La figura 6
muestra la interfaz de búsqueda de este buscador especializado.
Figura 6. Captura de pantalla del sistema de búsqueda avanzada del buscador Google
Académico
• Las páginas web de las bibliotecas de las diferentes universidades
nacionales e internacionales. Para acceder a los documentos de estas
bibliotecas, suele ser necesario contar con un usuario y una clave de acceso.
Por tanto, se recomienda al estudiante consultar la biblioteca de la universidad
en la que tiene adscrito su trabajo académico. Si en la biblioteca no se
encuentra un documento concreto, siempre puede solicitarse a otra biblioteca
a través del préstamo interbibliotecario. Un ejemplo es la Biblioteca Virtual de
la Universitat Oberta de Catalunya (UOC),2 que contiene múltiples recursos y
servicios, y además cuenta con un sistema de búsqueda avanzada de
documentos (figura 7) que permite al usuario buscar textos a partir de
diferentes parámetros de búsqueda combinados.
Figura 9. Captura de pantalla de la página web del Portal de Trabajos académicos UPC
• Repositorios cooperativos. Dos ejemplos representativos son Tesis
Doctorales en Red,5 que incluye tesis doctorales en formato digital leídas en
diferentes universidades españolas (figura 10), y RECERCAT (Dipòsit de la
Recerca de Catalunya),6 que incluye diferentes documentos generados en
universidades y centros de investigación de Cataluña, como artículos, trabajos
de investigación, trabajos de fin de máster, proyectos de fin de carrera,
ponencias de congresos, informes, documentos de trabajo, etc. (figura 11).
Figura 10. Captura de pantalla de la página web del repositorio cooperativo Tesis Doctorales
en Red
Figura 11. Captura de pantalla de la página web del repositorio cooperativo RECERCAT
Para buscar referencias bibliográficas en estos recursos en línea, es necesario
realizar búsquedas a través de palabras clave (keywords). Estas palabras clave
suelen corresponderse con las unidades terminológicas más representativas del
tema tratado en el trabajo académico. En el marco de la Teoría Comunicativa de
la Terminología (TCT) formulada por M. Teresa Cabré (Cabré, 1999), se explica
que las unidades terminológicas o términos son unidades léxicas que activan un
sentido preciso en un contexto especializado determinado. Son unidades que
vehiculan el conocimiento especializado en un determinado ámbito y, por tanto,
son especialmente útiles para realizar búsquedas bibliográficas. Los términos
pueden ser monoléxicos (si incluyen una única unidad léxica, como por ejemplo
«cáncer») o poliléxicos (si contienen más de una unidad léxica, como por
ejemplo «cáncer de mama» o «cáncer cerebral»). La tabla 1 incluye algunos
ejemplos de términos que son a su vez palabras clave extraídas de trabajos
académicos de diferentes ámbitos.
gestión de recursos
Ferreira
clúster planificación del trabajo aplicaciones Informática
(2010)
bioinformáticas
Mediterráneo
sanciones
Boneta
Egipto Política Europea de Vecindad Política
(2011)
Túnez
Libia
tipología estructural
edificación
asientos diferenciales Chirino
sensibilidad Arquitectura
daño estructural (2011)
clustering
análisis estadístico
relativismo
psicología humanista Franco
virtud Psicología
Carl Rogers (2010)
persona
La Psicología Humanista y la teoría de Carl Rogers [...]. En los puntos que a continuación
se exponen, pretendemos realizar un análisis del relativismo psicológico que se esconde tras
las propuestas de Rogers, particularmente por lo que se refiere a su valoración negativa de la
educación moral, especialmente en la familia.
(Ejemplo extraído de un trabajo final de carrera del ámbito de la psicología: Franco, 2010).
5. Preparación de la metodología
La preparación de la metodología es una etapa fundamental en el proceso de
elaboración de un trabajo académico. La metodología debe incluir los pasos,
etapas o fases que se seguirán en el trabajo para alcanzar los objetivos
propuestos y validar (en su caso) las hipótesis planteadas. La metodología debe
aportar también las técnicas, los métodos, las estrategias, las medidas, las
herramientas, los recursos, etc., empleados en el trabajo. Estos, por supuesto,
variarán en función del ámbito especializado en el que se enmarque el trabajo
académico.
El estudiante puede tomar una metodología existente, aplicada previamente en
otros trabajos similares del ámbito, y emplearla en su trabajo, o bien puede
plantear una metodología nueva adaptada específicamente a su trabajo. En
cualquiera de los dos casos, es necesario explicarla con detalle para que pueda
ser replicable, es decir, para que cualquier investigador pueda aplicarla en
trabajos futuros si lo necesita.
Veamos algunos ejemplos de fragmentos de trabajos académicos de distintos
ámbitos, en los que se explica parte de su metodología. En el siguiente trabajo
de final de carrera se emplea como recurso el CzSS (Citizen Satisfaction Survey)
para aplicarlo al marketing político:
[…] Para realizar un CzSS se pueden seguir las directrices trazadas en los estudios de CSS.
Primero debemos definir el universo de estudio y el tipo de información que se desea
obtener. Se incluirán todos aquellos aspectos de interés general que afecten a la vida política
y social, como por ejemplo: seguridad, vivienda o economía. Los aspectos a analizar,
llamados factores fidelizantes en los estudios de CSS, serán tanto aspectos generales de
interés ciudadano como aspectos específicos para cada población particular. […]
(Ejemplo extraído de un trabajo final de carrera del ámbito de la publicidad: Busquets,
2008).
A continuación se muestra un fragmento de un trabajo de fin de máster en el
que se explica con detalle la metodología para calcular el impacto ambiental de
diferentes tipologías de viviendas:
[…] El cálculo del impacto ambiental en emisiones de CO2 equivalente se dará mediante la
suma de los impactos ambientales asociados a la construcción, al uso y a la movilidad de
cada conjunto de viviendas de interés social seleccionadas. Cada uno de estos impactos
tendrá lugar con una multiplicación sencilla de los consumos anuales por sus respectivos
factores de emisión de CO2 equivalente.
Para el cálculo del impacto ambiental asociado a la construcción se deberá hacer una
multiplicación sencilla de las cantidades de materiales, en Kg, utilizados en la fase inicial de
construcción de las viviendas y de las infraestructuras y en la fase de mantenimiento, en las
reformas, por los correspondientes factores de emisión de CO2 equivalente de cada material,
en KgCO2eq/Kg. […]
(Ejemplo extraído de un trabajo de fin de máster del ámbito de la arquitectura: Martins,
2011).
Finalmente, en el siguiente ejemplo, se detallan y justifican los recursos
tecnológicos empleados para desarrollar e implementar geoservicios en un
parque natural, en el marco de un proyecto de fin de máster:
[…] La solución tomada para el sistema gestor de la base de datos ha sido el software de
PostgreSQL y su extensión espacial PostGIS porque, a pesar de que MySQL era el entorno
más conocido por los técnicos del parque, se ha considerado que era la solución que añadía
mejores funcionalidades y sobre todo porque es accesible desde un mayor número de
programas SIG gratuitos […].
Tabla 2. Tabla que muestra una metodología existente (ejemplo extraído de Kuznik, 2007; se
ha realizado la traducción del contenido de la tabla al castellano, que originalmente estaba en
portugués)
Procedimientos para estudios de identificación de competencias
Figura 12. Figura que muestra una metodología nueva (ejemplo extraído de Torres, 2008)
[…] Hemos realizado la prueba sobre las 946 variantes validadas y los 13.936 contextos del
corpus. A fin de garantizar la fiabilidad del resultado hemos replicado el experimento 100
veces, ordenando cada vez los registros de forma aleatoria y aplicando el test binomial para
medir el efecto de la casualidad. […]
(Ejemplo extraído de una tesis doctoral del ámbito de la lingüística aplicada: Fernández,
2010).
Mediante el estudio tipológico y estadístico de las estructuras afectadas por los trabajos de
tunelación para la Línea 9 del metro de Barcelona, ubicadas en el tramo Sagrera-Carrer de
Mandri, se pudo cumplir el objetivo especifico de esta tesina final de máster,
clasificando y seleccionando las tipologías estructurales y de fachada representativas para los
edificios de algunos barrios de la ciudad de Barcelona.
(Ejemplo extraído de Chirino, 2011).
1. http://scholar.google.es.
2. http://biblioteca.uoc.edu/es.
3. http://repositori.upf.edu.
4. https://upcommons.upc.edu/pfc.
5. http://www.tdx.cat.
6. http://www.recercat.cat.
Capítulo III
La redacción del trabajo académico
1. Procesadores de texto
Una de las primeras decisiones prácticas que debe tomar el estudiante a la hora
de redactar un trabajo académico es el procesador de texto que empleará. Las
opciones principales son las siguientes: a) Microsoft Office Word de Windows,
b) Writer del LibreOffice,1 c) Writer del OpenOffice2 y d) LaTeX. El
procesador Microsoft Office Word de Windows, aunque es de pago, se
emplea con mucha frecuencia desde hace años y es con el que más
familiarizados suelen estar los estudiantes. Sin embargo, en los últimos tiempos,
se están utilizando cada vez más los procesadores de texto del LibreOffice y del
OpenOffice, ya que tienen prácticamente las mismas funcionalidades y son de
código abierto. Pueden descargarse gratuitamente desde su página web en
cualquier ordenador y utilizarse desde Windows, Mac OS o Linux, entre otros
sistemas operativos.
Otra opción interesante es LaTeX, un sistema de composición de textos
escritos que está especialmente orientado a la generación de trabajos
académicos, artículos, libros, etc. Con este sistema se obtienen documentos con
una calidad tipográfica muy alta y, una vez se comprende su funcionamiento,
puede ahorrar mucho trabajo. Comenzar a trabajar con LaTeX desde cero
requiere un cierto esfuerzo de aprendizaje, ya que es necesario interiorizar
ciertos códigos. No obstante, una vez asimilados estos conceptos, merece la
pena, porque se obtienen unos resultados excelentes. Este sistema puede
utilizarse desde Windows, Mac OS y Linux. En la página web LaTeX fácil3 se
incluyen varias guías, información, paquetes y plantillas que pueden ayudar a los
estudiantes que quieran iniciarse en el uso de este sistema. También en la página
web de Wikilibros puede accederse a un Manual de LaTeX4 muy detallado.
Asimismo, recomiendo el manual de Valiente (1996) para aprender cómo
elaborar textos científicos con LaTeX.
Existen varios sistemas en línea que permiten editar y compilar textos en
LaTeX, como son ShareLatex5 y Overleaf6 (llamado WriteLatex antes del año
2014). Estos sistemas permiten elaborar documentos de manera colaborativa
entre varios autores, ofrecen diferentes plantillas y pueden utilizarse desde
cualquier ordenador. Es decir, con solo crear una cuenta gratuitamente (la
versión de pago incluye más espacio, pero las funcionalidades son las mismas),
pueden obtenerse documentos con una configuración idéntica desde cualquier
lugar, ya que el ambiente LaTeX que incorporan estos sistemas se ejecuta en sus
ordenadores en tiempo real. La figura 16 incluye un ejemplo de visualización de
un texto fuente en LaTeX (a la izquierda) y el texto generado en pdf (a la
derecha) en línea con Overleaf.
Figura 16. Ejemplo de visualización del texto fuente y el texto generado en LaTeX con
Overleaf
2. Formato
Una vez seleccionado el procesador de texto, el estudiante debe decidir el
formato de su trabajo académico. Antes de nada, debe comprobar si su
institución ofrece indicaciones al respecto. Hay algunas instituciones que ofrecen
una plantilla modelo para realizar el trabajo académico, pero normalmente, en
un trabajo de fin de grado o de fin de máster, se deja libertad al estudiante en
esta cuestión. Sin embargo, sí es habitual que se especifiquen algunos requisitos
en cuanto al tipo y el tamaño de letra, el interlineado, los márgenes y,
especialmente, el número de páginas. Saber la extensión con la que se cuenta
para realizar el trabajo es fundamental para poder estructurarlo adecuadamente y
realizar una previsión ajustada. Es importante fijarse si el número máximo de
páginas exigido incluye la bibliografía y los anexos, ya que esto puede cambiar
bastante la previsión de contenido.
En caso de que la institución no disponga de unos requisitos concretos en
relación con el formato del trabajo académico, el estudiante deberá tomar una
decisión al respecto. Una vez decidido el formato, es importante que este se
aplique en todo el trabajo de manera sistemática. Es decir, por ejemplo, si el
estudiante decide emplear un tipo de letra Arial, Times o Calibrí (que son los
más empleados y recomendables en trabajos académicos), debe utilizar el mismo
en todo el trabajo.
Es muy recomendable utilizar las funcionalidades de asignación de estilos
que se incluyen en los procesadores de texto. De esta manera, es más sencillo
garantizar la sistematicidad del formato en todo el trabajo. En el procesador
Microsoft Office Word de Windows, por ejemplo, la ruta que debe seguirse es:
Inicio > Estilos. En esta sección es posible determinar el estilo de los diferentes
fragmentos del trabajo académico (texto normal, títulos, citas, ejemplos, etc.).
En la figura 17, por ejemplo, se observa que, para el texto normal del trabajo, se
ha seleccionado un formato de letra Calibrí con un tamaño de 11 puntos,
justificado en ambos márgenes y con un interlineado de 1,5.
Figura 17. Ejemplo de asignación de estilos con el procesador de texto Microsoft Office
Word
El apartado 5 del capítulo 3 trata sobre la elaboración automática del índice y
allí se ofrece información sobre el estilo de los títulos y los subtítulos.
Otros elementos que tienen que ver con el formato del trabajo académico son
las notas. En trabajos académicos se recomienda que las notas se incluyan a pie
de página y no al final del trabajo, para favorecer la lectura del documento. En el
procesador Microsoft Office Word de Windows, por ejemplo, la ruta que debe
seguirse para insertar una nota es: Referencias > Insertar nota al pie.
Sobre el resaltado de algunas partes del texto en trabajos académicos, debe
evitarse el subrayado y la negrita en la medida de lo posible, en favor de la
cursiva. También debe evitarse el doble resaltado (por ejemplo, el empleo de la
negrita y de las comillas simultáneamente en una misma palabra o fragmento).
3. Estructura y contenidos
En este apartado se introducen dos temas de gran importancia en la
elaboración de un trabajo académico. En primer lugar, se explica la estructura
prototípica de un trabajo académico y los contenidos que habitualmente se
asocian a cada parte de la estructura. En segundo lugar, se ofrecen pautas y
recomendaciones para redactar los objetivos del trabajo adecuadamente.
Figura 18. Ejemplo de indicaciones sobre la estructura del trabajo de fin de máster ofrecidas
por el máster de Lingüística teórica y aplicada de la UPF
ORIENTACIONES PARA LA ELABORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL TRABAJO DE FIN DE MÁSTER
(de investigación y académico)
Figura 19. Ejemplo de indicaciones sobre la estructura del trabajo de fin de grado ofrecidas
por el grado de Administración y Dirección de Empresas de la UOC
Administración y Dirección de Empresas. Trabajo final de grado
A. Presentación de un estudio del ámbito de la gestión contable y financiera, la gestión fiscal, la dirección
general, la empresa y los mercados globales, el análisis económico o de innovación empresarial. Este
trabajo se estructura alrededor de una pequeña investigación sobre un problema o cuestión económica
dentro de los campos descritos que implicará el trabajo de las siguientes unidades diferenciadas:
1. Análisis inicial sobre la pre-propuesta
En esta primera unidad, el estudiante, a partir de la pre-propuesta planteada, deberá avanzar en el
conocimiento teórico del ámbito elegido, mediante la recogida inicial de información y su análisis para la
elaboración de conclusiones sobre la hipótesis que quiere trabajar en el trabajo final. [..]
2. Análisis empírico de la propuesta
En la segunda unidad, el estudiante deberá realizar un análisis empírico, desde un punto de vista
cuantitativo y/o cualitativo, para abordar la hipótesis planteada. [...]
Datos para el análisis, valorar los datos, esbozar conclusiones, compararlas con el estado del arte de la
subdisciplina y aplicar el conocimiento adquirido al problema.
3. Elaboración de conclusiones
Finalmente, y basándose en el trabajo realizado en las unidades anteriores, el estudiante elaborará un
análisis de resultados, mostrará las conclusiones del trabajo final realizado y planteará posibles propuestas
de futuro con relación a la propuesta abordada. [...]
En la tabla 3 se incluyen los apartados prototípicos de la estructura de un
trabajo académico en la primera columna, junto con los contenidos que suelen
insertarse en cada uno de estos apartados.
• Título.
• Datos académicos: nombre y logo de la institución, nombre del programa
académico, tipo de trabajo académico (de grado, de máster, etc.), nombre y
Portada
apellidos del autor, nombre y apellidos del director (y, en su caso, del
codirector), ciudad, fecha, etc.
(Más información en el apartado 4 del capítulo 3).
• Reconocimiento al apoyo de la institución académica, grupo de investigación,
Agradecimientos programa de estudios, becas recibidas, etc.
(opcional) • Reconocimiento al apoyo de personas concretas, tanto del ámbito académico
como del familiar o personal.
• Resumen en la lengua del trabajo que incluye los contenidos principales del
trabajo.
Resumen + abstract
• Abstract (resumen traducido al inglés).
(Más información en el apartado 6 del capítulo 3).
• Síntesis crítica de los trabajos previos de otros autores relacionados con el tema
del trabajo:
– Explicación de sus propuestas, modelos, estrategias, etc.
Estado de la cuestión – Resultados positivos obtenidos.
– Limitaciones y carencias detectadas.
– Relación de estos trabajos con el que se está desarrollando.
(Más información en el apartado 4 del capítulo 2).
• Principales conclusiones del trabajo ligadas con los objetivos i/o hipótesis,
Conclusiones y líneas
aspectos que han quedado pendientes y se prevé trabajar en el futuro.
de trabajo futuro
(Más información en el apartado 7 del capítulo 2).
• Contenidos que no se pueden insertar en el cuerpo del texto por ser demasiado
ANEXOS largos o secundarios, en formato papel o en CD-ROM.
(Más información en el apartado 8 del capítulo 3).
Estos apartados y contenidos están sujetos a variaciones posibles. Por un lado,
estas variaciones tienen que ver con el tipo de trabajo (trabajo de fin de grado,
trabajo de fin de máster, tesis doctoral, etc.). Por ejemplo, como ya se ha visto
en el apartado 3 del capítulo 2, no es estrictamente necesario que un trabajo de
fin de grado o de máster incluya hipótesis y, en cambio, una tesis de doctorado
sí suele incluirlas. Por otro lado, las posibles variaciones dependen del ámbito
especializado en el que se trabaje (traducción, ciencias de la salud, tecnología,
derecho, etc.). Por ejemplo, en un trabajo del ámbito de las ciencias de la salud
en que se haga un estudio de casos, seguramente se incluirá un apartado
específico con un título similar a «Materiales y métodos» o «Pacientes y
métodos», que contendrá diferentes subapartados muy recurrentes en este
ámbito (que tengan que ver, por ejemplo, con la población y la muestra, el
análisis estadístico, las implicaciones éticas, etc.). En el siguiente caso, extraído
del índice de un trabajo de fin de máster del ámbito de la salud, se observa un
ejemplo que ilustra esta situación:
2. Materiales y métodos
2.1. Diseño del estudio
2.2. Población de referencia y tamaño muestral
2.3. Variables
2.4. Análisis estadístico de los datos
2.5. Implicaciones éticas
Problemática ambiental: las emisiones de gases del efecto invernadero y el cambio climático
(Ejemplo extraído de Martins, 2011).
Los apartados y los subapartados deben aparecer numerados correctamente de
manera consecutiva. En la figura 21 se muestra un ejemplo de numeración
correcta y de numeración incorrecta. En un trabajo académico, puede haber
varios niveles de subapartados, pero no se recomienda que la estructura sea muy
profunda, ya que se corre el riesgo de confundir al lector. En un trabajo de fin
de grado o de máster, se recomienda una profundidad máxima de tres niveles,
como se observa en la numeración correcta del apartado 2 de la figura 21. Un
error frecuente es crear un único subapartado dentro de un apartado, como
ocurre con los apartados 1.1. y 2.1.1. de la numeración incorrecta de la figura.
Los subapartados solo son pertinentes en caso de que haya un mínimo de dos al
mismo nivel, como sucede, por ejemplo, en los apartados 1.1. y 1.2. de la
numeración correcta reflejada en la figura.
El objetivo de este trabajo es el de confeccionar una lista de probables estrellas jóvenes (i.e.,
en grupos cinemáticos jóvenes) con sistemas planetarios.
(Ejemplo extraído de Rojas, 2011).
OBJETIVOS ESPECÍFICOS
1. Determinar si existen parámetros cefalométricos estadísticamente significativos para las
diferentes medidas dentarias en el grupo I y grupo II antes y después del tratamiento.
2. Analizar si existen diferencias estadísticamente significativas entre el grupo I y grupo II
para las variables estudiadas antes o después del tratamiento, así como a lo largo del estudio.
3. Comparar los valores cefalométricos obtenidos a nivel de los incisivos superiores e
inferiores entre el grupo I y el grupo II antes y después del tratamiento.
(Ejemplo extraído de Ortega, 2014).
Esta estrategia es muy frecuente en trabajos académicos de todos los ámbitos
especializados. A continuación se ofrece otro ejemplo, extraído de un trabajo de
fin de máster del ámbito de los estudios feministas:
El objetivo general del TFM consiste en analizar el uso que la prensa diaria realiza de la
imagen del cuerpo de las mujeres como forma de control sobre sus comportamientos,
promoviendo la reproducción de estereotipos. […]
Además del objetivo general, los objetivos específicos más relevantes que nos planteamos
conseguir en el término de esta investigación son los siguientes:
• Revisar la Historia del Periodismo con una perspectiva feminista. Denunciar la
invisibilización de las mujeres en la profesión, bien como productoras bien protagonistas
de los hechos noticiosos.
• Periodismo como herramienta transmisora del patriarcado.
• Visibilizar cómo, a pesar de los inconvenientes, algunas mujeres desarrollaron la profesión,
llegando a editar y dirigir publicaciones.
• Analizar el género «prensa femenina» como forma de exclusión de las mujeres de la prensa
generalista de debate político.
• Comprender la responsabilidad de los medios de comunicación como transmisores de la
cultura.
• Observar la importancia histórica y actual que tienen en la transmisión de la imagen del
cuerpo de las mujeres.
• Analizar los grupos comunicativos de España y Costa Rica.
• Mostrar la violencia que desde la prensa escrita se ejerce sobre los cuerpos de las mujeres a
través de sus imágenes y sus textos, con los ejemplos de Karina Bolaños y Olvido
Hormigos.
• Construir una mirada feminista alejada de la visión masculina de los medios, donde las
mujeres se empoderen en el proceso de construcción de sus propios cuerpos.
(Ejemplo extraído de Tena, 2013).
Tanto los objetivos generales como los específicos deben ser concisos y
precisos. Por un lado, la concisión se refiere a la brevedad o economía
lingüística. Es más adecuada una redacción con un menor número de palabras,
pero que refleje exactamente el objetivo del trabajo, que una redacción con
demasiadas oraciones subordinadas, adjetivos o adverbios innecesarios,
información entre paréntesis, ejemplos, etc. Asimismo, cada objetivo debería
incluir una única oración. Por otro lado, la precisión tiene que ver con la
condición de exactitud. Un objetivo debe incluir únicamente la información
realmente necesaria para que el lector entienda qué se propone realizar el
investigador en su trabajo. Para ello, debe eliminarse toda información superflua
de los objetivos y toda aquella que pueda resultar ambigua.
Una elección adecuada de los verbos iniciales que incluyen los objetivos es
fundamental para lograr que estos sean precisos. Los verbos seleccionados
deben ayudar a especificar qué se ha hecho concretamente en el trabajo:
¿analizar?, ¿definir?, ¿diseñar?, ¿comprobar? Es indispensable una reflexión
preliminar por parte del estudiante para delimitar adecuadamente la contribución
que propone realizar en su trabajo. Esta reflexión le ayudará a escoger los verbos
correctos para la redacción de los objetivos. En la tabla 4 se incluyen algunos
verbos habituales en los objetivos de trabajos académicos, aunque existen
muchos otros y su elección siempre variará dependiendo del trabajo.
analizar
contabilizar
contrastar
definir
desarrollar
describir
determinar
diseñar
establecer
estudiar
implementar
medir
realizar
Asimismo, se recomienda la redacción de los objetivos con verbos en
infinitivo, como puede observarse en los ejemplos de objetivos de trabajos
académicos mostrados hasta ahora: «realizar», «confeccionar», «formular»,
«examinar», «explorar», «promocionar», «incluir», «impulsar», «fomentar»,
«determinar», «analizar», «comparar», «revisar», «observar», «construir», etc.
Otro aspecto clave en la redacción de los objetivos es una selección adecuada
de los términos introducidos. Como se avanzó el apartado 4 del capítulo 2, los
términos son las unidades léxicas que vehiculan el conocimiento especializado
en un ámbito (Cabré, 1999) y, por lo tanto, los términos incluidos en los
objetivos son especialmente relevantes. Veamos el siguiente ejemplo de una tesis
doctoral del ámbito de la empresa y las ciencias sociales:
Nuestro objetivo general es comprobar si existen diferencias en las trasferencias realizadas
por los diferentes grupos competitivos de empresas de su estrategia a uno de sus principales
stakeholders –los clientes–, distinguiendo además si la transferencia de la estrategia es
distinta entre los e-clientes y los clientes off-line.
(Ejemplo extraído de Pelegrín, 2013).
Este objetivo incluye términos representativos (tanto en singular como en
plural) del ámbito y del tema de la tesis, como «transferencia», «grupo
competitivo», «empresa», «estrategia», «stakeholder», «cliente», «e-cliente» y
«cliente off-line». Estos son algunos de los términos clave del trabajo que
aparecerán en un gran número de ocasiones en el cuerpo del texto. Asimismo,
suele ser frecuente que algunos de los términos que se introducen en los
objetivos aparezcan también en el título del trabajo, como se verá en el apartado
4 del capítulo 3. En este caso, el trabajo se titula «Análisis comparativo de la
estrategia de los grupos competitivos: e-clientes vs. clientes off-line». De los
términos incluidos en el objetivo general, cuatro de ellos aparecen en el título:
«grupo competitivo», «estrategia», «e-cliente» y «cliente off-line».
Veamos otro ejemplo, en este caso de una tesis doctoral del ámbito de la
biología:
El principal objetivo planteado en esta Tesis Doctoral fue el de determinar los mecanismos
moleculares mediante los cuales PrPC podía estar ejerciendo una función neuroprotectura y
reguladora del ciclo celular.
(Ejemplo extraído de Carulla, 2013).
Este objetivo principal también incluye varios términos específicos del tema
que trata, como «mecanismo molecular», «PrPC», «función neuroprotectora y
reguladora» (unidad que en realidad puede desplegarse en dos términos
poliléxicos: «función neuroprotectora» y «función reguladora») y «ciclo celular».
Esta tesis se titula «La proteína priónica celular: análisis de su función
neuroprotectora y reguladora del ciclo celular». En este caso, dos de los términos
recogidos en el objetivo principal del trabajo se reflejan literalmente en el título
de la tesis: «función neuroprotectora y reguladora» y «ciclo celular». En este caso
aparece también un fenómeno habitual este tipo de trabajos. En el objetivo
observamos la abreviación «PrPC», que equivale al término poliléxico «proteína
priónica celular», que aparece en el título. Ambas unidades se refieren al mismo
concepto y, por este motivo, aparecen tanto en el objetivo como en el título,
aunque con formas diferentes. La razón es que en el título normalmente se
suelen evitar las abreviaciones, como las siglas o los acrónimos (a no ser que se
trate de unidades ya lexicalizadas, como «sida», que proviene originalmente de
«síndrome de inmunodeficiencia adquirida»). En cambio, en el cuerpo del
trabajo, la norma indica que, la primera vez que aparece un término poliléxico al
cual va asociado una abreviación, es obligatorio ofrecer el término completo y a
continuación su abreviación entre paréntesis. De esta manera, en el resto del
texto ya bastará con emplear únicamente la abreviación. Por ejemplo, en la
página 1 de la tesis de la cual se ha extraído el ejemplo anterior, se encuentra
mencionado el término «proteína priónica celular» por primera vez en el cuerpo
del texto:
Forma parte de una de las líneas de investigación del grupo, centrada en conocer el posible
rol fisiológico de la proteína priónica celular (PrPC) en el sistema nervioso central.
(Ejemplo extraído de Carulla, 2013).
Por este motivo el autor ya no incluye el término completo en el objetivo
principal del trabajo, sino que inserta directamente la abreviación «PrPC».
El autor de un trabajo académico puede ser creativo a la hora de redactar los
objetivos, pero habitualmente suelen seguirse unas estructuras concretas. La
introducción de los objetivos en un trabajo de este tipo suele ir precedida por
una entradilla, del tipo «El objetivo de este trabajo es». Esta fórmula tiene
múltiples variantes posibles, en función de varios factores, que tienen que ver
sobre todo con el número de objetivos, y su división entre generales y
específicos. Por ejemplo, si el trabajo incluye un objetivo general y varios
específicos, sería necesario introducir dos entradillas diferentes justo antes de
cada tipo de objetivo:
«El objetivo general de este trabajo es» [objetivo general 1]
«Los objetivos específicos de este trabajo son:»
• [objetivo específico 1]
• [objetivo específico 2]
• [objetivo específico 3]
• [objetivo específico n]
En caso de que hubiese más de un objetivo general, la entradilla debería
adaptarse a esta situación:
«Los objetivos generales de este trabajo son:»
• [objetivo general 1]
• [objetivo general 2]
• [objetivo general 3]
• [objetivo general n]
En la entradilla, los adjetivos «general» y «específico» podrían sustituirse por
otros, como por ejemplo «principal» o «particular». También el sustantivo
genérico «trabajo» podría reemplazarse por «trabajo académico», «trabajo de fin
de grado», «trabajo de fin de máster», «investigación», «tesis», etc., en función del
tipo de trabajo. Sobre la sintaxis de la fórmula, puede haber otras múltiples
alternativas, como «Este trabajo recoge los siguientes objetivos», «En este
trabajo se incluyen los objetivos siguientes», «Este trabajo persigue los objetivos
que se indican a continuación», etc.
Veamos algunos ejemplos de entradillas más elaboradas para los objetivos
específicos, en este caso de trabajos académicos de ámbitos tan diferentes como
la biología, los estudios feministas y la espeleología, respectivamente:
Alcanzar este objetivo implicaba dirigir o enfocar nuestra línea de investigación a objetivos
más específicos, los cuales se indican a continuación:
(Ejemplo extraído de Carulla, 2013).
Además del objetivo general, los objetivos específicos más relevantes que nos planteamos
conseguir en el término de esta investigación son los siguientes:
(Ejemplo extraído de Tena, 2013).
Las aplicaciones llevadas a cabo para el área del macizo de Cotiella se concretan en una serie
de objetivos específicos:
(Ejemplo extraído de Martín, 2012).
Cada uno de los objetivos generales y específicos indicados en los ejemplos
anteriores entre corchetes y en cursiva deben seguir los principios explicados
hasta ahora, es decir, han de ser precisos y concisos, deben constar de una única
oración, incluir verbos adecuados y en infinitivo, y mostrar términos que reflejen
el contenido especializado que se quiere transmitir.
La estructura más habitual que siguen los objetivos está formada por:
• Como ya se ha comentado, un verbo en infinitivo, que refleje cuál es la
acción que se realiza en el trabajo. Por ejemplo, «analizar», «diseñar».
• Un complemento directo (o varios), que debe incluir los términos clave
del trabajo. Para redactar este complemento directo, el estudiante debe
preguntarse: «¿Qué analizo?», «¿Qué diseño?», utilizando el verbo seleccionado
en el paso anterior.
• Complementos de modo, finalidad, etc. Estos complementos son
opcionales, pero suelen ser importantes para reflejar de manera sucinta
información sobre cómo se logrará el objetivo en cuestión o cuál es la
finalidad última de este. Algunas unidades que ayudan a reflejarlos son: «para»,
«por medio de», «mediante», «a través de», etc. Estos complementos también
suelen incluir términos clave del trabajo.
Dentro de la oración que incluye el objetivo puede darse la situación de que
haya dos frases coordinadas (con una conjunción como «y» que funcione como
nexo). En este caso, puede emplearse igualmente la estructura explicada en cada
una de las dos frases coordinadas.
La figura 22 incluye de forma esquemática la estructura prototípica que siguen
los objetivos de trabajos académicos.
4. La portada y el título
La portada de un trabajo académico, que incluye, entre otros datos, su título,
es la primera información a la que accede un lector. Por ello, es importante
ofrecer una portada adecuada, y un título interesante, que llame la atención.
Habitualmente, la institución académica a la cual está adscrito el trabajo
académico del estudiante ofrece una plantilla de la portada o las pautas para
realizarla, que incluyen varios datos, como pueden ser: el nombre y el logo de la
institución, el nombre del programa académico, el tipo de trabajo académico (de
grado, de máster, etc.), el título del trabajo, el nombre y apellidos del autor, el
nombre y apellidos del director (y, en su caso, del codirector), la ciudad, la fecha,
etc. Estos datos pueden ser más o menos completos en función de la institución
y del tipo de trabajo.
Veamos algunos ejemplos. La figura 23 muestra la plantilla de la portada para
los trabajos de fin de grado de la Facultad de Derecho de la Universidad de
Alicante:10
Figura 23. Plantilla de la portada del trabajo de fin de grado de la Facultad de Derecho de la
Universidad de Alicante
Existen otras instituciones que no ofrecen una plantilla, sino que únicamente
indican los datos que el estudiante debe incluir en la portada. No obstante, hoy
en día, la mayor parte de las universidades o instituciones académicas disponen
de una plantilla específica que es obligatorio emplear.
Redactar el título de un trabajo académico no es una tarea fácil, ya que este
debe sintetizar la idea principal del trabajo (es decir, podría decirse que sería el
resumen más reducido posible del trabajo) y, a la vez, debe llamar la atención del
lector (esto es, ha de ser sugerente pero a la vez profesional). Normalmente, los
títulos de trabajos académicos son frases nominales y no suelen incluir verbos (o
al menos verbos conjugados), sino nominalizaciones verbales. Veamos algunos
ejemplos:
La aplicación de las TIG en el campo de la espeleología
(Ejemplo extraído de Martín, 2012).
Desarrollo, implementación y publicación de los geoservicios WMS y WFS del Parc Natural
de Collserola
(Ejemplo extraído de Salas, 2013).
En estos casos, los tres títulos son frases nominales, que incluyen a su vez
diferentes nominalizaciones verbales, como por ejemplo «aplicación», «gestión»,
«implementación» o «publicación».
En cuanto a la extensión del título, no hay un número de palabras predefinido.
Eso sí, no se recomiendan los títulos excesivamente largos, de más de veinte
palabras (a no ser que sea realmente necesario). La longitud a veces tiene que ver
con el ámbito en el que se circunscribe el trabajo académico, pero también
depende del estilo del autor. A continuación se ofrece un ejemplo de título muy
breve (6 palabras) y otro de un título largo (22 palabras):
Adaptación del CSS al marketing político
(Ejemplo extraído de Busquets, 2009).
Desarrollo, implementación y publicación de los geoservicios WMS y WFS del Parc Natural
de Collserola
(Ejemplo extraído de Salas, 2013).
Otra posibilidad es dividir el título en dos frases nominales separadas por un
punto, como ocurre en los títulos siguientes:
Política sancionadora de la Unión Europea en el Norte de África. Estudios de caso a la luz
de la Primavera Árabe
(Ejemplo extraído de Boneta, 2011).
Tipo de
Correlación de elementos entre el título y el objetivo
correlación
términos
planificación ó gestión
relacionados
Título Desarrollo, implementación y publicación de los geoservicios WMS y WFS del Parc Natural de
Collserola
Fuente Salas (2013)
términos relacionados +
diseñar ó desarrollo
nominalización
Figura 25. Selección del formato del índice automático en el procesador de texto del Office
Word
Dentro del Espacio Europeo de Educación Superior, las nuevas tecnologías se han
convertido en la herramienta por excelencia del aprendizaje, como lo demuestra la
multiplicación de los campus virtuales. Los programas informáticos para la formación en
interpretación, si bien ofrecen cursos valiosos para la práctica, siguen siendo escasos y su
acceso muy restringido. El propósito de nuestro proyecto es proponer un dispositivo que
una todos los recursos necesarios para formarse en interpretación y saque mayor provecho
del desarrollo reciente de plataformas educativas. Así, planteamos la creación de
Interpretarium mediante la plataforma Moodle, cuyas funcionalidades permiten no sólo
subsanar las carencias de los proyectos anteriores sino también potenciar una enseñanza-
aprendizaje reflexiva y cooperativa en línea. El diseño de la versión test de Intepretarium
constituye el primer paso de un proceso de innovación docente para el que la colaboración
de sus usuarios (docentes, estudiantes y profesionales de la interpretación) es esencial.
(Ejemplo extraído de Monbet, 2011).
También debe tenerse en cuenta que, de la misma manera que hay
determinados ámbitos que solicitan apartados o contenidos específicos en los
trabajos académicos, también hay ámbitos que exigen ciertas particularidades en
los resúmenes de estos trabajos. El estudiante es el responsable de seguir las
pautas de elaboración de resúmenes adecuadas a su ámbito de investigación. Por
ejemplo, en el ámbito de la salud, el resumen suele dividirse en secciones, como
se observa en el siguiente caso, extraído de un trabajo de fin de máster:
Introducción
[…]
Objetivos
[…]
Material y métodos
[…]
Resultados
[…]
Discusión
[…]
Utilidad y aplicabilidad del estudio
[…]
Conclusión
[…]
(Ejemplo extraído de Serrano, 2012).
Para saber más sobre cómo escribir un buen resumen, recomiendo la lectura
de las recientes obras de Parodi, Ibáñez y Venegas (2014) y Bondi y Lorés
(2014).
En un trabajo académico, además del resumen en la lengua original del trabajo,
es habitual incluir un abstract, es decir, la traducción del resumen al inglés.
Actualmente, el inglés es la lengua de comunicación científica internacional y es
por este motivo que suele solicitarse la inclusión del abstract en trabajos
académicos, para fines de difusión e indexación. El estudiante debe confirmar si
su institución académica exige incluir el abstract en el trabajo. De todas maneras,
aunque no lo indique explícitamente, si es posible, es recomendable añadirlo.
Se sugiere también elaborar el abstract una vez el resumen en la lengua original
del trabajo esté finalizado y revisado, para no realizar modificaciones constantes.
También se recomienda, siempre que sea posible, la revisión del abstract por
alguna persona que domine el inglés. Algunas herramientas útiles que pueden
ayudar a realizar la traducción son:
• Diccionarios incluidos en WordReference:
http://www.wordreference.com.
• Traductor automático de Google: https://translate.google.es.
• Traductor automático LucySoftware: http://www.lucysoftware.com.
No debe olvidarse que los traductores automáticos aún tienen muchas
limitaciones y, en ningún caso, una traducción automática puede tomarse como
una traducción definitiva. Estos sistemas de traducción suponen solo una
herramienta de ayuda al estudiante y su resultado debe ser revisado
exhaustivamente por el autor del trabajo y/o por un revisor externo.
Veamos algunos ejemplos de abstracts de trabajos de fin de máster, del ámbito
de la astrofísica y la ingeniería eléctrica, respectivamente:
In this work we have conducted a detailed study of kinematics of stars with exoplanets. The
study focused on the stars with exoplanet confirmed by radial velocity and distance
determined by Hipparcos. We have collected all the necessary parameters for calculating the
Galactic space velocities (U, V, W), have identified the stars that are potential kinematics
members in young moving groups in the Galactic disk […] and, last, analysed their actual
membership and youth after gathering all available information in the literature (lithium,
abundance of lithium, rotation, magnetic activity).
(Ejemplo extraído de Rojas, 2011).
The current and future energetic situation is conditioned by the limited fossil fuel reserves.
This energetic situation affects specially the transportation sector, due to its higher energy
consumption. This fact, as well as the increasing environmental concern impulses the
research and development of alternative energy sources.
In the transportation sector, the internal combustion engine propelled by fossil fuel can be
substituted by electrochemical systems, such as the fuel cell, batteries or ultracapacitors. The
success for carrying out the implementation at large scale depends on the ability to solve
current problems of hydrogen storage and supply, cost and range.
In this Master Thesis, the dynamic model and simulation of a low temperature fuel cell PEM
and a lead acid battery VRLA is accomplished. The modelling of both systems can be
tackled from different points of view, such as fluid thermal, electrochemical, electric, etc.
due to the multi disciplinary nature of these technologies. In this thesis, an electric model
based on experimental work is presented for both systems. The tests carried out are current
interruption and electrochemical impedance spectroscopy tests.
Apart from the modelling and simulation of fuel cell and battery, a test bench for energy
sources is developed. This test bench is a hardware in the loop (HIL) simulation. This
methodology is extensively used in the aero spatial and automotive sectors to carry out test
on electronic control units or fault simulations, reducing cost, simplifying the installation
required and allowing a greater flexibility.
Therefore, a HIL simulation is performed, taking the battery as the hardware system and the
fuel cell and vehicle dynamics as the simulated systems. These two simulated systems
interact through power signals with the real battery as the simulation of these systems are
done through other equipments which simulate the behaviour of the fuel cell and the vehicle
dynamics.
(Ejemplo extraído de Gauchía, 2008).
Además del resumen y del abstract, en un trabajo académico suelen incluirse las
llamadas palabras clave. En el apartado 4 del capítulo 2 ya se avanzó que estas
palabras clave se corresponden con los términos más representativos del tema
tratado en el trabajo académico, que pueden ser tanto monoléxicos como
poliléxicos. En la tabla 1 se incluyeron asimismo algunas palabras clave de
trabajos académicos de ámbitos diferentes. No existe un número concreto de
palabras clave, pero suelen ofrecerse entre tres y seis, en función del trabajo.
Hay algunas instituciones académicas que solicitan un número concreto. El
estudiante debe informarse de ello.
De la misma manera que el resumen, las palabras clave deben seleccionarse al
finalizar el proceso de elaboración del trabajo académico, para que estas reflejen
adecuadamente el contenido definitivo de este. Una estrategia útil es extraerlas
del título o del objetivo (u objetivos) general del trabajo. Las palabras clave
deben aparecer también en el resumen. Veamos algunos ejemplos. En el
siguiente trabajo de fin de máster del ámbito de la arquitectura, las palabras clave
que acompañan al resumen coinciden con varios de los términos exactos que
aparecen en los objetivos (en negrita) o son términos relacionados
semánticamente (subrayados):
Keywords: TIC, web, Social science, teenagers, interactive generation, digital age, tablets
smartphones, Apps.
(Ejemplo extraído de Bernabé, 2013).
Figura 31. Ejemplo de gráfico realizado a partir de una tabla en una hoja de cálculo Excel
Un último apunte con respecto a las imágenes: todas las tablas, figuras,
gráficos, fotografías, etc. que se extraigan de otras publicaciones tanto
electrónicas como en papel (trabajos académicos, libros, artículos, manuales,
etc.) o de Google Imágenes deben incluir su fuente correspondiente de manera
explícita. En caso contrario, el estudiante estará cometiendo un plagio.
8. Anexos
Los anexos son las páginas finales de un trabajo académico e incluyen
contenidos que, ya sea por su tamaño o por su menor relevancia, no son
susceptibles de ser incorporados en el cuerpo del texto. Los anexos deben
incluir un título representativo al inicio y su formato puede ser en papel o en
versión electrónica (por ejemplo, se pueden grabar en un CD-ROM). Algunos
contenidos que podrían aparecer en los anexos son, por ejemplo, textos que
forman parte de un corpus (en el ámbito de la lingüística o de la traducción),
planos (en el ámbito de la arquitectura), código de programación (en el ámbito
de la informática), fotografías o imágenes (en el ámbito del diseño), leyes (en el
ámbito del derecho), noticias de medios de comunicación (en el ámbito del
periodismo), etc.
Los anexos deben aparecer referenciados en el índice del trabajo. Veamos
algunos ejemplos de anexos de trabajos académicos del ámbito de la arquitectura
y de la salud:
ANEXO I. TABLA DE FRECUENCIAS GENERAL
ANEXO II. TABLA CONGLOMERADOS CLASIFICACIONES
ANEXO III. TABLA INVENTARIO GENERAL EDIFICACIONES (Incluido en CD)
ANEXO IV. BASE DE DATOS (Valores)
ANEXO V. BASE DE DATOS (Conglomerados)
(Ejemplo extraído de Chirino, 2011).
9.1. En el texto
En algunas instituciones académicas y en función del ámbito especializado del
trabajo, se utiliza un modelo concreto de citas bibliográficas. Por este motivo, el
estudiante debe informarse sobre las pautas de citación exigidas por su
institución o ámbito, tanto en el cuerpo del texto como en el apartado de
bibliografía. En el caso de que la institución no especifique esta cuestión, el
estudiante debe seleccionar un formato y emplearlo de manera sistemática en
todo el trabajo.
Algunas recomendaciones para realizar citas en el cuerpo del texto son:
• Siempre debe citarse al autor de una afirmación, idea, propuesta,
estrategia, metodología, etc., en caso de que se utilice en el trabajo académico.
En caso contrario, el estudiante estará cometiendo un plagio.
• Para citar en el cuerpo del texto, debe indicarse el autor o autores del
trabajo más el año entre paréntesis. Por ejemplo: García (2004); García, Pérez
y Sánchez (2004).
• Si hay más de tres autores de un trabajo suele incluirse únicamente el
primer autor más la indicación «et al.». Por ejemplo: García et al. (2004).
• Si se mencionan varios autores de trabajos diferentes, suelen incluirse
entre paréntesis separados por punto y coma. Por ejemplo: (Barratt, 1994;
Parker y Bagby, 1997).
• Si se realiza una cita literal, el texto citado debe aparecer entre comillas.
Asimismo, es obligatorio incluir el número de página en la cita, después del
año de publicación. Esta información se suele separar con un punto y coma o
dos puntos, o incluso con una coma y la abreviatura de página. Por ejemplo:
García (2004; 30), García (2004: 30) o García (2004, pág. 30), en función del
modelo de cita empleado. El siguiente ejemplo ilustra una cita literal en el
cuerpo del texto:
Según Hurtado Albir (Hurtado Albir, 2001:643) la traducción se puede definir como un
«proceso interpretativo y comunicativo que consiste en la reformulación de un texto con los
medios de otra lengua y que se desarrolla en un contexto social y con una finalidad
determinada».
(Ejemplo extraído de Kuznik, 2007).
• Si no se cita literalmente, sino que se realiza una reformulación o
paráfrasis de una idea de otro autor, el texto no debe aparecer entre comillas y
tampoco se incluye el número de página en la referencia, como ocurre en el
ejemplo siguiente.
A continuación, en los epígrafes que siguen, presentamos el modelo del proceso de
ejecución de las traducciones de Gouadec (2005) donde veremos el concepto de tarea como
operación en una secuencia productiva.
(Ejemplo extraído de Kuznik, 2007).
• Normalmente, las citas literales de menos de tres líneas aparecen
insertadas en el mismo párrafo. En cambio, las citas que superan las tres líneas
suelen separarse del texto principal con un salto de línea y destacarse con un
tamaño de letra, tipo de letra, interlineado o sangría diferente, como ocurre en
el siguiente ejemplo:
La definición de proceso de trabajo (productivo) que adoptamos en esta investigación es la
que proponen Verd et al. (2007) en el campo de la Sociología del Trabajo:
«De este modo, el concepto de proceso de trabajo por el que optamos lo entiende como (i)
un conjunto de interacciones (de diferente naturaleza, fácticas, cognitivas...), (ii) entre
sujetos sociales (individuos o grupos) e instrumentos, (iii) llevadas a cabo en una situación
determinada espacio-temporal y (iv) en contextos (de orden más o menos limitado desde
los más inmediatos hasta los más genéricos y de naturaleza diversa, económico,
organización productiva, etc.), (v) en vistas a la modificación material o simbólica de un
producto.» (Verd et al. 2007:150)
(Ejemplo extraído de Kuznik, 2007).
En este trabajo presento una propuesta relacionada con la oferta hotelera en Barcelona.
Ofreceremos una panorámica de los hoteles vacacionales […].
En este hotel haremos que el cliente se sienta como en casa. […] En la propuesta
económica desgloso los gastos asociados al proyecto.
Para evitar este error, antes de comenzar a escribir el trabajo académico, el
estudiante debe reflexionar sobre qué posición adoptar en su trabajo:
a) El estudiante es el autor único del trabajo académico ð En este caso, deben
emplearse los verbos en primera persona del singular (por ejemplo, «analizo»,
«estudio»).
b) Aunque el estudiante es el autor principal del trabajo académico, por
deferencia a su/s director/es o por modestia académica, decide emplear el plural
mayestático ð En este caso, deben utilizarse los verbos en primera persona del
plural (por ejemplo, «analizamos», «estudiamos»).
Una vez adoptada una posición, esta debe conservarse a lo largo de todo el
trabajo de manera sistemática. No obstante, también puede combinarse la
opción elegida con formas verbales impersonales, muy habituales para favorecer
el tono impersonal que debe mantenerse en textos especializados (por ejemplo,
«se ha analizado», «se ha estudiado»).
2. Mantener la coherencia de los tiempos verbales. También es frecuente
observar en trabajos académicos que el estudiante no ha sido sistemático en
cuanto a los tiempos verbales, es decir, que ha combinado aleatoriamente
tiempos en presente, pasado o futuro. Veamos los ejemplos siguientes:
En este estudio se muestra un resumen de los principales factores que deben tenerse en
cuenta. Se ofrecerán también pautas para el diseño de nuevos planes de actuación.
En esta sección indicamos las características que el camping debería incluir. También
hemos destacado las limitaciones que hemos encontrado.
En el primer caso se observa una combinación de verbos en presente y futuro,
mientras que en el segundo caso la combinación se realiza entre un verbo en
presente y uno en pasado. Para evitar esta falta de sistematicidad, el estudiante
debe reflexionar antes de comenzar a redactar su trabajo académico sobre la
posición temporal que quiere adoptar. Si elige los tiempos en pasado, hace más
hincapié en el hecho de que el trabajo ya ha sido realizado y que ahora lo está
dejando por escrito. Si elige los tiempos en futuro, se pone más en la piel del
lector, que irá conociendo el trabajo a medida que vaya leyendo el texto. El
presente es el tiempo verbal más neutro y el más sencillo de utilizar en un
trabajo académico; por lo tanto es el que recomiendo. De todas maneras, la
posición temporal adoptada es un rasgo estilístico del autor sin mayores
consecuencias. Lo que es realmente relevante es que, una vez adoptada dicha
posición, se mantenga en todo el trabajo de manera coherente.
3. Evitar oraciones demasiado largas. A no ser que el estudiante sea un
experto en redacción, se recomienda no abusar de las frases subordinadas o
coordinadas dentro de una misma oración, ya que con mucha frecuencia se
inserta este tipo de frases de manera incorrecta. Esto genera oraciones largas e
incoherentes que provocan que el mensaje que se quiere transmitir no llegue al
receptor adecuadamente. En los ejemplos siguientes, de 63 y 41 palabras
respectivamente, se observa esta situación:
Se intenta crear un ambiente en el que todos puedan ganar, ya que los turistas que se
hospeden en los hoteles de la cercanía pueden visitar nuestras instalaciones y disfrutar de
nuestros servicios, así como turistas que deseen venir un fin de semana a disfrutar de
nuestros servicios pueden hacer uso de los servicios de los hoteles de la zona para mayor
comodidad.
Se entiende que Club Thalasso desarrollará un centro de última generación, para dar un
servicio único y exclusivo para dar un valor añadido a nuestro público objetivo, el cual está
enfocado a parejas, hombres y mujeres con un poder adquisitivo alto.
4. No separar el sujeto del verbo por signos de puntuación. La estructura
sintáctica más habitual en castellano es «sujeto + verbo + complementos» y es la
más recomendable en textos académicos. Sin embargo, uno de los errores más
frecuentes es separar el sujeto y el verbo por una coma. En los ejemplos
siguientes se ha marcado en negrita el sujeto y se ha marcado el verbo en
cursiva. Como puede observarse, entre ambos elementos se ha añadido una
coma, lo cual es incorrecto:
Al estar situado en un lugar de gran afluencia hotelera, nuestros clientes serán tanto
residentes de Barcelona como turistas que vienen solo para desconectar y hacerse un
tratamiento de Talasoterapia. Club Thalasso es un centro dedicado exclusivamente a la
Thalasoterapia [...].
La posible competencia más cercana geográficamente es el hotel Sansi Diputación de 4
estrellas. Por otro lado el competidor más importante es el Hotel Casa Fuster [...].
[…] tours y excursiones, 1 supermercado y un parque infantil.
Los componentes principales de nuestro producto son:
• Atención personalizada y esmerada
• Entorno arquitectónico modernista, histórico y lujoso
• Paz y tranquilidad en espacios acogedores para un descanso físico y mental.
12. Evitar repeticiones en una misma oración o en oraciones contiguas.
En ocasiones es inevitable repetir ciertos elementos en una misma oración o en
oraciones muy próximas en el texto, especialmente si se trata de términos clave
en el ámbito que no tengan posibilidad de sustitución por un sinónimo. Sin
embargo, es recomendable evitar repeticiones innecesarias de conectores,
verbos, determinantes, etc., por medio de sinónimos o paráfrasis. En los
ejemplos siguientes se muestran casos en que las repeticiones (marcadas en
negrita) son innecesarias y se podrían haber evitado fácilmente:
Se intenta crear un ambiente en el que todos puedan ganar, ya que los turistas que se
hospeden en los hoteles de la cercanía pueden visitar nuestras instalaciones y disfrutar de
nuestros servicios, así como turistas que deseen venir un fin de semana a disfrutar de
nuestros servicios pueden hacer uso de los servicios de los hoteles de la zona para mayor
comodidad.
Por encima de todo es una empresa que busca mostrar una imagen joven y fresca, que
quiere por encima de todo la diversión del cliente.
Algunas de nuestras premisas principales para nuestra empresa son:
Se entiende que Club Thalasso desarrollará un centro de última generación, para dar un
servicio único y exclusivo para dar un valor añadido a nuestro público objetivo, el cual está
enfocado a parejas, hombres y mujeres con un poder adquisitivo alto.
13. Diferenciar entre «deber + tener» y «deber + de + tener». Es muy
habitual la confusión entre estas dos estructuras. La primera indica
obligatoriedad, mientras que la segunda refleja una suposición. En los siguientes
ejemplos se han seleccionado estructuras incorrectas:
Al estar situado en un lugar de gran afluencia hotelera, nuestros clientes serán tanto
residentes de Barcelona como turistas que vienen sólo para desconectar y hacerse un
tratamiento de Talasoterapia.
Se trata de una fórmula Urbana.
Pueblo de Sitges, Playa, Golf, ambiente nocturno.
Camping Multiproducto con una segmentación de mercado muy concreta.
16. Acentuar las letras en mayúscula. En un trabajo académico, se
recomienda evitar fragmentos de texto escritos en mayúscula. De todas maneras,
en caso de hacerlo (por ejemplo, en los títulos de los apartados), estos deben
acentuarse normalmente, es decir, no pueden obviarse los acentos gráficos,
como ocurre en los ejemplos siguientes, marcados en negrita:
GESTION DE UNA EMPRESA TURISTICA
CONFLICTO Y FILOSOFIA DEL CAMPING
17. Asignar la misma categoría gramatical y el mismo tiempo verbal (en
caso de ser verbos) a todos los elementos de una lista. En un trabajo
académico suele haber multitud de listas y es muy frecuente que los estudiantes
olviden este principio básico. En los ejemplos siguientes se muestran casos
incorrectos y propuestas de solución:
Incorrecto:
Los objetivos generales y estratégicos del Club Thalasso son los siguientes:
Posicionamiento en el mercado
Lograr atraer al público objetivo
Conseguir fidelización de los clientes
Correcto:
Los objetivos generales y estratégicos del Club Thalasso son los siguientes:
Obtener posicionamiento en el mercado
Lograr atraer al público objetivo
Conseguir fidelización de los clientes
Incorrecto:
Los objetivos generales o estratégicos de Rainbow Sitges en relación con el desarrollo de un
camping en la costa mediterránea son los siguientes:
• Asegurará el éxito del lanzamiento del camping a corto plazo.
• Generar y retener el máximo valor posible en el menor plazo posible.
• Realizar una importante estrategia de Marketing [...].
• Asegurar un equilibrio y una rentabilidad a medio y largo plazo [...].
• Crear un destino vacacional (gay).
• Fidelización del cliente.
• Innovación en nuestros productos y servicios.
Correcto:
Los objetivos generales o estratégicos de Rainbow Sitges en relación con el desarrollo de un
camping en la costa mediterránea son los siguientes:
• Asegurar el éxito del lanzamiento del camping a corto plazo.
• Generar y retener el máximo valor posible en el menor plazo posible.
• Realizar una importante estrategia de Marketing [...].
• Asegurar un equilibrio y una rentabilidad a medio y largo plazo [...].
• Crear un destino vacacional (gay).
• Conseguir fidelización de clientes.
• Innovar en nuestros productos y servicios.
Incorrecto:
Planes de actuación previos para conseguir los objetivos:
• Analizar los diferentes espacios del edificio [...].
• Adecuación del edificio, reformas y acondicionamiento de los diferentes espacios
respetando la arquitectura del mismo.
• Elaboración de un proyecto técnico [...].
• Ofrecer servicios y espacios complementarios que generen valor añadido.
• Desarrollar actividades de promoción y publicidad.
Correcto:
Planes de actuación previos para conseguir los objetivos:
• Analizar los diferentes espacios del edificio [...].
• Llevar a cabo la adecuación del edificio, reformas y acondicionamiento de los diferentes
espacios respetando la arquitectura del mismo.
• Elaborar un proyecto técnico [...].
• Ofrecer servicios y espacios complementarios que generen valor añadido.
• Desarrollar actividades de promoción y publicidad.
18. Acentuar correctamente los pares «dónde/donde»,
«cuándo/cuando», «qué/que», «cómo/como», «sólo/solo», «éste/este»,
etc. Los correctores ortográficos también tienen dificultades para detectar si
estas palabras deben aparecer acentuadas, así que es importante que el estudiante
las revise en su trabajo final. «Dónde», «cuándo», «qué» y «cómo» solo se
acentúan en caso de interrogación (directa o indirecta). Aunque mucha gente
aún se resiste a seguir esta norma, según las indicaciones actuales de la Real
Academia Española, los pronombres «este», «ese», «estos», etc. solo deben
acentuarse en caso de que lleven a confusión entre el pronombre y el
determinante demostrativo. Lo mismo ocurre con «solo», que únicamente debe
acentuarse si en el texto puede existir algún tipo de confusión entre sus dos
significados (solamente versus sin compañía). En los ejemplos siguientes se
observan algunos casos de errores:
El local constará de un pequeño front-office para la atención al público y de un almacén dónde
se guardarán todas las herramientas que quieran ser alquiladas para las actividades.
Al estar situado en un lugar de gran afluencia hotelera, nuestros clientes serán tanto
residentes de Barcelona como turistas que vienen sólo para desconectar y hacerse un
tratamiento de talasoterapia.
Existen cuatro puntos de referencia importantes en el camping: el mar, su localización
cercana al pueblo de Sitges, las actividades de ocio y la imagen gay que éste tiene.
Considerando el producto que se ofrece a los clientes, se adaptarán los camarotes y las
instalaciones para mejorar el confort de éstos.
En resumen, es importante que el estudiante revise cuidadosamente la
redacción de su trabajo académico, para que los errores de forma no resten
calidad al producto final escrito. Para ello, es muy útil emplear herramientas y
recursos como diccionarios, traductores, correctores, etc., pero también seguir
las recomendaciones ofrecidas en este apartado, las normas básicas de redacción
en castellano y otras indicaciones incluidas en obras especializadas en redacción
académica. Es evidente que el contenido del trabajo es lo más importante pero,
sin duda, una redacción adecuada, fluida y sin errores le aportará un plus de
calidad, que ya se espera de antemano en trabajos académicos de fin de grado o
de fin de máster.
1. https://es.libreoffice.org.
2. https://www.openoffice.org.
3. http://nokyotsu.com/latex.
4. http://es.wikibooks.org/wiki/Manual_de_LaTeX.
5. https://es.sharelatex.com.
6. https://www.overleaf.com.
7. http://www.upf.edu/masterlinguistica/es/research.
8. http://estudios.uoc.edu/es/grados.
9. http://estudios.uoc.edu/es/grados.
10. http://derecho.ua.es/es/documentos/estudios/portada-tfg.docx.
11. http://www.upf.edu/dtcl/formacio/informacio/PORTADA_TFM.pdf.
12. http://www.mendeley.com.
13. https://www.refworks.com.
14. https://www.zotero.org.
15. http://es.wikipedia.org/wiki/BibTeX.
Capítulo IV
La defensa oral del trabajo académico
Figura 34. Pantalla de selección de plantillas del sistema de creación de presentaciones Prezi
2. Formato de la presentación
Una vez seleccionado el sistema de creación de presentaciones, el estudiante
debe averiguar si su institución académica exige algún tipo de requisito con
respecto al formato de la presentación. En caso de que la institución no ofrezca
pautas en este sentido, el estudiante debe tomar decisiones al respecto.
En este apartado, me centraré sobre todo en los sistemas de creación de
presentaciones más tradicionales. En ellos, antes de comenzar a trabajar, es
fundamental crear un patrón de diapositivas, para determinar el formato de las
diapositivas en relación con varias cuestiones, como el tipo de letra, el
interlineado, los márgenes, el formato de los títulos de los apartados y los
subapartados, etc. Se pueden utilizar las plantillas predeterminadas incluidas en
estos sistemas, pero se recomienda al estudiante crear un formato propio para la
presentación de su trabajo académico, para diferenciarse de los demás.
Este patrón debe incluir, asimismo, los elementos fijos que el estudiante quiere
mantener en cada diapositiva, como por ejemplo:
• el fondo,
• el título del trabajo,
• los datos de la defensa (fecha y lugar),
• el logo o logos de su institución, programa académico, grupo de
investigación, etc.,
• el número de diapositiva.
El formato y los elementos agregados en el patrón de diapositivas se visualizan
automáticamente en todas las diapositivas creadas y no pueden eliminarse ni
modificarse desde las diapositivas individuales. Trabajar con un patrón de
diapositivas es muy útil para ahorrar tiempo y esfuerzo, y para mantener una
imagen corporativa y profesional en la presentación.
En las figuras 35 y 36 se muestra el patrón de diapositivas del sistema de
creación de presentaciones de Windows y del LibreOffice, respectivamente. De
nuevo, puede observarse que son muy similares.
3. Estructura y contenidos
La presentación de diapositivas empleada en la defensa oral de un trabajo
académico debe incluir una estructura y unos contenidos muy similares a los del
trabajo académico escrito, ya que, precisamente, en este acto es donde se expone
el trabajo realizado para que el tribunal lo evalúe. Sin embargo, los contenidos
de la presentación de diapositivas deben reflejarse de una manera mucho más
sintética y esquemática en comparación con el trabajo escrito.
En la tabla 3 del apartado 3.1 del capítulo 3 se mostraron los apartados
prototípicos que debe contener el trabajo escrito. De estos, se enuncian a
continuación los que se recomienda incluir en la presentación de la defensa oral:
• Portada
• Índice
• Introducción
• Estado de la cuestión
• Marco teórico
• Metodología
• Análisis y resultados, Experimentación, Interpretación de los resultados,
etc.
• Conclusiones y líneas de trabajo futuro
Como puede observarse, se han dejado de lado apartados como los
agradecimientos, el resumen y el abstract, las palabras clave y las keywords, la
bibliografía y los anexos.
En el caso de la portada, que se corresponde con la diapositiva inicial de la
presentación, debe incluir el título del trabajo, el nombre y apellidos del
estudiante, el nombre y apellidos del director o directores del trabajo, el nombre
de la institución académica y del programa de estudios, etc.
En cuanto al índice, que suele mostrarse en la segunda diapositiva, debe estar
numerado y reflejar la estructura seguida en la presentación. Así como en el
trabajo escrito de fin de grado o de máster no se recomienda una profundidad
en la estructura de más de tres niveles, en la presentación oral no se recomienda,
de ser posible, una estructura mayor de dos niveles, ya que sería difícil de seguir
por parte del tribunal y del resto de público asistente al acto.
En cuanto al resto de apartados, pueden ocupar una o más diapositivas en
función de la cantidad de información que incluyan. La diapositiva en la que
comience un apartado o un subapartado debe incluir el título de este y su
numeración (que deben corresponderse con la información previamente
mostrada en el índice). De hecho, es recomendable que cada diapositiva
contenga un título para seguir mejor la estructura de la presentación.
Las diapositivas han de recoger la información correspondiente extraída del
trabajo académico escrito, pero solo la más relevante y necesaria para que pueda
entenderse la presentación. No es adecuado copiar párrafos literales del trabajo
escrito en las diapositivas, sino que debe reformularse la información para
adecuarla a una presentación de diapositivas. No debe olvidarse que las
diapositivas suponen simplemente una ayuda o herramienta visual para guiar o
apoyar la presentación oral del estudiante. Por eso, el estudiante tampoco puede
leer el contenido de las diapositivas de manera literal, ya que esto, con toda
seguridad, será penalizado por el tribunal. En este sentido, es importante no
sobrecargarlas de texto y utilizar, en la medida de lo posible, esquemas, listas,
imágenes, fotografías, gráficos, figuras, tablas, etc. Por supuesto, debe revisarse
que estos elementos visuales tengan la calidad suficiente para que no aparezcan
pixelados al proyectar las diapositivas en el acto de defensa. A diferencia del
trabajo académico escrito, no es necesario que estos elementos incluyan
numeración ni pies con títulos.
Con respecto al tiempo asignado para referirse a cada diapositiva, se sugiere
emplear dos minutos para cada una, aunque esto siempre depende de la
importancia o cantidad de contenido de la diapositiva. Por ejemplo, si el tiempo
asignado para la presentación oral del estudiante es de 30 minutos, no debería
emplear más de 15 diapositivas.
Los sistemas de creación de presentaciones suelen incluir una sección de
notas, donde el estudiante puede añadir información relacionada con cada una
de las diapositivas. Esta información no se proyectará, y resulta útil a la hora de
preparar y practicar la presentación.
En los sistemas de creación de presentaciones que se utilizan en local se
recomienda evitar las animaciones y transiciones de diapositivas muy
sofisticadas (excepto en casos imprescindibles), ya que en el momento del acto
de defensa pueden causar problemas inesperados. Las diapositivas pueden
incorporar sonido y vídeos en caso de ser necesario. En estos casos, es
necesario que el estudiante acuda previamente al aula para comprobar que estos
elementos se escuchan o se visualizan correctamente.
4. Errores lingüísticos frecuentes: consejos para evitarlos
Después de participar como miembro del tribunal de diferentes trabajos
académicos de fin de grado, máster y doctorado, y de mi experiencia como
directora de trabajos académicos en general, he observado algunas cuestiones
puntuales en las que los estudiantes suelen fallar. Recojo aquí algunas
recomendaciones que pueden ser de utilidad para evitar este tipo de errores
frecuentes y mejorar la presentación de diapositivas elaborada para la defensa
oral.
En general, los consejos y recursos lingüísticos recomendados para elaborar las
diapositivas para la defensa del trabajo son muy similares a los ofrecidos para el
trabajo académico escrito (apartado 10 del capítulo 3). Sin embargo, hay algunas
cuestiones que deben tenerse en cuenta específicamente en las diapositivas:
• Deben evitarse las oraciones de más de dos o tres líneas.
• Deben evitarse las oraciones subordinadas complejas.
• Deben priorizarse las frases nominales en vez de las oraciones.
• Deben evitarse los verbos, y priorizar los sustantivos y las
nominalizaciones.
• Deben evitarse los puntos finales.
• Deben evitarse los conectores discursivos.
• Como una presentación de este tipo contiene un gran número de listas, es
especialmente relevante la recomendación 17 del apartado 10 del capítulo 3:
asignar la misma categoría gramatical y el mismo tiempo verbal (en caso de ser
verbos) a todos los elementos de una lista.
Figura 37. Ejemplo de indicaciones sobre el acto de defensa del trabajo de fin de máster
ofrecidas por el máster de Lingüística teórica y aplicada de la UPF
ORIENTACIONES PARA LA ELABORACIÓN Y PRESENTACIÓN DEL TRABAJO DE FIN DE MÁSTER
(de investigación y académico)
6. ¿Cómo es y cuándo se realiza el acto de defensa?
El TFM se presenta en una defensa pública ante un tribunal compuesto por tres profesores doctores.
[…]
El acto de defensa no debe durar más de una hora, de la que un máximo de 20 minutos es para la
presentación oral por parte del estudiante. Una vez terminada la presentación, el tribunal puede formular
preguntas al estudiante y hacer observaciones sobre el TFM, que el estudiante debe responder de manera
adecuada. Al finalizar el debate, el tribunal delibera y acuerda una calificación, que se hace constar en el
acta correspondiente. La calificación del TFM, al igual que la de cualquier otra asignatura, se realiza
mediante una valoración cuantitativa del 0 al 10 (con un decimal) y el correspondiente equivalente
cualitativo (suspenso, aprobado, notable, sobresaliente).
En las universidades virtuales o en línea, en cambio, suele dejarse cierta
libertad en este sentido. En la figura 38, por ejemplo, se incluyen las indicaciones
sobre el acto de defensa del trabajo de fin de grado del grado de Criminología de
la UOC.5 En principio, se indica que la defensa del trabajo debe realizarse de
manera presencial en un acto público en el que el estudiante debe defender su
trabajo y, posteriormente, responder las preguntas tanto del tribunal como de
sus propios compañeros. Sin embargo, también se especifica (subrayado en la
figura 38) que, si el estudiante no puede realizar la defensa de su trabajo de
manera presencial por alguna razón justificada, puede solicitar hacerla mediante
una videoconferencia. Esta estrategia es habitual hoy en día, dados los actuales
avances tecnológicos, que permiten una interacción de manera virtual en caso de
ser necesario.
Figura 38. Ejemplo de indicaciones sobre el acto de defensa del trabajo de fin de grado
ofrecidas por el grado de Criminología de la UOC
Figura 39. Ejemplo de indicaciones sobre el acto de defensa del trabajo de fin de grado
ofrecidas por la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la UNED
1. https://es.libreoffice.org.
2. https://www.openoffice.org.
3. http://prezi.com.
4. http://www.upf.edu/masterlinguistica/es/research.
5. http://estudios.uoc.edu/es/grados.
6. http://portal.uned.es.
Capítulo V
La publicación del trabajo académico
Figura 42. Estructura textual de los artículos de investigación publicados en revistas médicas
españolas (extraída de da Cunha, 2008)
Las revistas científicas también exigen la inclusión del resumen y/o el abstract,
y de las palabras clave y/o keywords en el artículo. Swales (1990) menciona que la
mayor parte de los resúmenes publicados en este tipo de revistas reflejan la
mencionada estructura IMRD. Por ejemplo, como se explica en da Cunha
(2008), en el caso de las directrices de publicación marcadas por la revista de
investigación Medicina Clínica,1 se indica explícitamente que el resumen que
acompaña al artículo debe adjuntarse en español y en inglés, y que el contenido
de ambos también debe dividirse en cuatro apartados y mantener la estructura
IMRD del texto original: Introducción, Pacientes y métodos, Resultados y
Discusión, para expresar de forma más breve pero con igual eficacia el proceso
lógico del pensamiento científico. En cada apartado debe mencionarse,
respectivamente, el problema motivo de la investigación, la manera de llevarla a
cabo, los resultados más destacados y las conclusiones que se derivan de los
resultados. En la figura 43 se muestra el resumen y el abstract de un artículo
científico de la revista Medicina Clínica (Pousada et al., 2015).
Resultados
El genotipo GG estaba presente en el 42% de los pacientes estudiados y en el 65% de los individuos
control. Los genotipos GT + TT aparecieron en el 58% de los pacientes y en el 35% de los controles. Las
diferencias fueron estadísticamente significativas (p = 0,032), siendo el riesgo relativo de desarrollar HAP
en portadores del alelo T de 2,51 (intervalo de confianza del
95% [IC 95%] 1,07-5,86). El análisis mediante el software PolyPhen definió el cambio K198N como
patogénico. No se encontraron diferencias significativas en aspectos clínicos ni en respuesta al
tratamiento a medio plazo en función del genotipo.
Conclusiones
El análisis genotípico para el polimorfismo K198N muestra diferencias estadísticamente significativas en
pacientes con HAP respecto a individuos sanos. Los portadores de al menos un alelo T presentan un
riesgo relativo significativamente mayor de padecer HAP.
ABSTRACT
Background and objective
In pulmonary arterial hypertension (PAH) an association with a polymorphism in the endothelin gene
(EDN1) has been described. The main objective of this study was to analyze the polymorphism K198N
in the gene EDN1 in patients with PAH, correlating the results with clinical and hemodynamic
parameters.
Patients and methods
We compared 41 patients diagnosed with idiopathic and associated PAH of group i with 50 healthy
controls. Polymerase chain reaction and direct sequencing were used to analyze the polymorphism
K198N. We compared the genotype distribution and searched for a correlation with clinical,
hemodynamic and therapeutic response.
Results
Genotype GG was present in 42% of patients in this study and 65% of controls. The GT + TT genotypes
appeared in 58% of patients and in 35% of controls. Statistically significant differences between patients
and controls (P =.032) were detected, with a relative risk in carriers of having the T allele of 2.51 (95%
CI 1.07 to 5.86). The analysis by PolyPhen software defined K198N change as pathogenic. No
significant differences in the response to treatment at medium term were found.
Conclusions
The genotype analysis of the EDN1 gene polymorphism shows statistically significant differences in
patients with PAH compared to healthy individuals. Individuals carrying at least one T allele exhibit a
higher relative significant risk to develop HAP.
Figura 45. Fragmento de las normas que la Revista Española de Cardiología exige a los autores
para el envío de artículos
NORMAS DE PUBLICACIÓN EN Revista Española de Cardiología
INSTRUCCIONES PARA LOS AUTORES
[…]
Todos los manuscritos se adecuarán a las normas de publicación. Se entiende que el autor de
correspondencia de la publicación se responsabiliza de la normativa y que el resto de los autores conoce,
participa y está de acuerdo con el contenido del manuscrito.
1. Artículos originales
Presentación del documento:
A doble espacio, con márgenes de 2,5 cm y páginas numeradas.
Tiene una extensión máxima de 5.000 palabras, contando desde la página frontal hasta el final y
excluyendo únicamente las tablas.
Consta de dos documentos: primera página y manuscrito.
El manuscrito sigue el siguiente orden: a) resumen estructurado en español y palabras clave; b) resumen
estructurado en inglés y palabras clave; c) cuadro de abreviaturas en español e inglés; d) texto; e)
bibliografía; f) pies de figuras; g) tablas (opcional), y h) figuras (opcional).
Primera página
Título completo en español e inglés (menos de 150 caracteres incluyendo espacios).
Nombre y apellido de los autores. Este tipo de artículos tiene un límite de diez autores. Para los artículos
multicéntricos, el Comité Editorial valorará individualmente esta limitación, previa petición y justificación
por parte de los autores.
Centro de procedencia (departamento, institución, ciudad y país) y fuente de financiación, en su caso.
Dirección postal completa del autor a quien debe dirigirse la correspondencia, teléfono, fax y dirección
electrónica.
Se especifica el número total de palabras del manuscrito (excluyendo únicamente las tablas).
Resumen estructurado […]
Texto […]
Bibliografía […]
Figuras
Las figuras correspondientes a gráficos y dibujos se envían en formato TIFF o JPEG preferentemente, con
una resolución no inferior a 300 dpi y utilizando el color negro para líneas y texto. Están ordenadas con
números arábigos de acuerdo con su orden de aparición en el texto.
Las gráficas, símbolos, letras, etc., son de tamaño suficiente para poderse identificar claramente al ser
reducidas. Los detalles especiales se señalan con flechas, utilizando para estos y para cualquier otro tipo
de símbolos el trazado de máximo contraste respecto a la figura.
Los pies de figuras se incluyen en hoja aparte. Al final se identifican las abreviaturas empleadas, por orden
alfabético.
Las figuras no incluyen datos que permitan conocer la procedencia del trabajo o la identidad del paciente.
Las fotografías de personas deben realizarse de manera que no sean identificables o se adjuntará el
consentimiento de su uso por parte de la persona fotografiada.
Tablas
Se numeran con números arábigos de acuerdo con su orden de aparición en el texto.
Cada tabla se escribirá a doble espacio en una hoja aparte.
Incluyen un título en su parte superior y en la parte inferior se describen las abreviaturas empleadas por
orden alfabético.
El contenido es autoexplicativo y los datos que incluyen no figuran en el texto ni en las figuras.
[…]
Figura 46. Primera página de la plantilla que la revista Procesamiento del Lenguaje Natural
ofrece a los autores para el envío de artículos
Los manuscritos para Rev. Esp. Cardiol. se enviarán a través de la página web
http://ees.elsevier.com/rec. Para enviar un manuscrito sólo tiene que entrar en dicha página
y seguir las instrucciones de la pantalla. En caso de duda, ponerse en contacto con
rec@revespcardiol.org.
En cambio, otras revistas como Tradumática o Debate Terminológico, que son de
acceso abierto, disponen de sus propios sistemas de envío electrónico integrados
en el Open Journal Systems, un programa de publicación de código abierto para la
gestión de revistas que el Public Knowledge Project desarrolla, financia y distribuye
de manera gratuita con la Licencia Pública general GNU.
Una vez enviado el artículo, este pasa por un proceso de evaluación llamado
«por pares» (peer review), en el que la revista asigna al menos a dos especialistas
sobre el tema del artículo para evaluarlo tanto cualitativa como
cuantitativamente. En función de la evaluación realizada por estos expertos, los
editores de la revista deciden si publicar el artículo o descartarlo. Este proceso
de evaluación es largo y suele demorarse unos meses, en función de la dinámica
de cada revista. En muchas ocasiones, los editores se ponen en contacto con el
autor para solicitarle que realice los cambios (mayores o menores) exigidos por
los evaluadores, quienes reevalúan el artículo una vez introducidos dichos
cambios. Este mecanismo favorece la calidad final de los artículos publicados,
pero también ralentiza el proceso de publicación en gran medida.
2. http://revistes.uab.cat/tradumatica.
3. http://www.revespcardiol.org/es.
4. http://seer.ufrgs.br/riterm.
5. http://www.elsevier.es/es-revista-investigaciones-europeas-direccion-economia-
empresa-345.
6. http://dis.sagepub.com.
7. http://journal.sepln.org.
8. http://thomsonreuters.com/en.html.
9. http://www.scopus.com.
10. http://erihplus.nsd.no.
11. http://miar.ub.edu.
12. http://www10.gencat.net/agaur_web.
13. http://core.edu.au/index.php.
15. http://wwww.easychair.org.
16. http://ilia.cchs.csic.es/SPI.
Capítulo VI
Reflexiones finales
La idea de este libro se ha ido gestando durante los más de diez años que llevo
en el ámbito de la investigación. En el año 2002, cuando tuve que realizar los
trabajos académicos de las asignaturas del máster de Ciencias del lenguaje y
lingüística aplicada en el que me matriculé en la UPF en Barcelona, me di cuenta
de que, durante la licenciatura en Filología Hispánica que había estudiado en la
Universidade de Santiago de Compostela, no había cursado ninguna asignatura
sobre la elaboración de trabajos académicos. Por tanto, a pesar de cursar la
asignatura obligatoria del máster sobre la metodología de la investigación y de
encontrar algunos recursos didácticos de apoyo que trataban cuestiones
puntuales sobre la elaboración de trabajos académicos, tuve que esforzarme
mucho para sacar adelante los trabajos solicitados por los profesores. Una vez
superado el máster, me encontré en la misma situación al enfrentarme a la
elaboración de mi proyecto de tesis doctoral (en aquel entonces, el llamado
Diploma de Estudios Avanzados). Poco a poco, con el transcurso de los años, y
a base de prueba y error (y también de mucha paciencia por parte de los
directores de mi trabajo, he de reconocer), fui aprendiendo e interiorizando la
metodología de elaboración de trabajos de investigación, lo que finalmente
derivó en la defensa de mi tesis doctoral en el año 2008.
Durante este período, tanto mis compañeros como yo comentábamos lo útil
que habría sido contar con más información o recursos sobre las etapas del
proceso de realización de una investigación de este tipo, sobre la elaboración de
un cronograma adecuado y realista para organizar el tiempo adecuadamente,
sobre el formato y las características del trabajo académico escrito, sobre la
redacción de los objetivos y las hipótesis de la investigación, sobre la defensa
oral del trabajo ante un tribunal, sobre las presentaciones con diapositivas para
presentar el trabajo (en la misma defensa, en seminarios, en congresos, etc.),
sobre las posibilidades de adaptación del trabajo académico para publicarlo en
otros foros (como en revistas de divulgación o de investigación, en congresos,
en workshops, etc.) y sobre otras muchas cuestiones relacionadas.
Durante los últimos años, he sido profesora en varias universidades de
asignaturas que tienen que ver con la elaboración de textos especializados, con
los géneros textuales, con la terminología, con los recursos informáticos
aplicados a la lengua, etc. Además, he tenido la oportunidad de dirigir (y
codirigir) diferentes trabajos académicos (tanto de grado y de máster, como de
doctorado), y de participar como miembro del tribunal de otros. En este
contexto, he podido observar de primera mano cómo los estudiantes tienen
exactamente los mismos problemas que yo tuve en su momento a la hora de
realizar trabajos académicos (ya sean trabajos de asignaturas, trabajos de fin de
grado, trabajos de fin de máster, proyectos de tesis o tesis doctorales).
En conversaciones informales en la universidad, muchos alumnos me han
confesado que se sienten perdidos cuando han de enfrentarse a un trabajo
académico, especialmente de fin de grado o de máster. Esto es así porque, en los
distintos grados y másteres de las universidades españolas, no se imparten
suficientes asignaturas o cursos destinados a esta cuestión. Y, precisamente, esta
cuestión es fundamental, ya que este tipo de trabajos suponen el punto final de
una trayectoria académica que lleva a la obtención de un título universitario. Con
esta idea en mente, durante el curso académico 2013-2014, impartí un curso de
verano intensivo en la UPF titulado «Cómo redactar y defender un trabajo
académico: las claves del éxito». El curso tuvo una gran aceptación por parte de
los estudiantes participantes (principalmente de grado y de máster), y muchos de
ellos me preguntaron si era posible disponer de los materiales y recursos
ofrecidos en el curso en forma de libro o manual. Es ahora en el 2016 cuando la
Editorial de la UOC me ha dado la oportunidad de publicar este libro,
colaboración que ha surgido a partir de la experiencia de diseñar e impartir la
asignatura «Trabajo de fin de máster» del máster de Traducción especializada de
la UOC, dirigido por el Dr. Antoni Oliver. Por tanto, esta es la principal
motivación del presente libro: servir de ayuda a estudiantes de cualquier ámbito
especializado del contexto universitario español actual que deban afrontar la
redacción, defensa y publicación de su trabajo académico, especialmente a
aquellos que se encuentren en el proceso de elaboración de su trabajo de fin de
grado o de fin de máster.
Existen otros recursos bibliográficos en castellano que pueden resultar
complementarios a este libro. Por ejemplo, la guía de Walker (2001) trata varias
cuestiones (como la selección del tema del trabajo o las fuentes bibliográficas,
principalmente) relacionadas con la redacción de trabajos de investigación en
general. El breve manual de Icart, Fuentelsaz y Pulpón (2001) presenta
recomendaciones específicas para la elaboración y presentación de proyectos de
tesis. El libro de Rigo y Genescà (2002) supone una fuente de información
interesante sobre las normas formales que suelen seguirse en tesis y trabajos de
investigación en general. El manual de Tolchinsky, Rubio y Escofet (2002)
incluye recomendaciones y consejos de diversa índole dirigidos a estudiantes que
quieran iniciarse en el mundo de la investigación. En el manual coordinado por
Pantoja (2009), cada capítulo ofrece de manera muy detallada algunos temas
concretos relevantes sobre la realización de tesinas, tesis y trabajos de
investigación (como documentación y búsqueda de información, aspectos
formales, análisis de datos cuantitativos, elaboración de cuestionarios, etc.),
redactados por parte de especialistas. Finalmente, la guía práctica para la
realización de los trabajos fin de grado y de fin de máster de la Universidad de
Murcia, coordinada por García y Martínez (2012), incluye muchos aspectos que
pueden extrapolarse a trabajos académicos de otras universidades españolas.
También algunas universidades o estudios específicos han publicado en línea
recursos o guías para ayudar a sus estudiantes a elaborar trabajos académicos, lo
cual considero una excelente práctica. Es el caso de la guía redactada por
Anduiza y Méndez (en línea) en el área de Ciencia Política y de la
Administración de la Universidad de Murcia; de las sugerencias para la
realización de trabajos académicos y científicos propuestas por Sánchez Herrera
(en línea) del Departamento de Sociología de la Universidad de La Laguna; o de
la guía de buenas prácticas para la elaboración de los trabajos de fin de grado de
los diferentes grados de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de
Cádiz, coordinada por Rodríguez-Piñeiro (2014).
Todas estas obras suponen, como he mencionado, un complemento al libro
que está en manos del estudiante ahora mismo, ya que toda información es
bienvenida a la hora de aprender a elaborar trabajos académicos. Cada una de
estas obras trata aspectos concretos que pueden resultar de utilidad a quien
desee iniciarse en el mundo de la investigación. Sin embargo, en los cinco
capítulos que conforman el contenido de este libro, se ha intentado mostrar el
proceso de elaboración de este tipo de trabajos como un todo, desde su
contextualización en la comunicación especializada y su ubicación en los géneros
textuales correspondientes, pasando por las diferentes etapas del proceso de
elaboración de un trabajo de final de grado o de máster y por la redacción del
trabajo académico escrito, hasta la defensa oral del trabajo frente a un tribunal y
su publicación en otros formatos. No se trata de una obra que se refiera
únicamente a aspectos formales (que también se explican, aunque no
exhaustivamente, ya que no pretende ser un manual de escritura científica), ni
trata de trabajos científicos en general, ni se centra en la elaboración de trabajos
académicos de especialidades o ámbitos concretos. Busca ser una obra clara y
didáctica que integra cuestiones generales de todo tipo relacionadas con el
proceso de elaboración de trabajos académicos de cualquier ámbito, centrada
especialmente en el trabajo de fin de grado y de fin de máster en el contexto
universitario actual. Por este motivo, junto con los contenidos teóricos, se han
ofrecido múltiples ejemplos extraídos de trabajos publicados en los últimos años
en varias instituciones académicas españolas, así como las referencias y los
recursos documentales y bibliográficos más actuales.
Así, espero que este libro haya sido de utilidad a todos los estudiantes que lo
hayan leído y haya logrado resolver (al menos) algunas de las dudas que yo tuve
en su momento. ¡Os deseo mucho éxito!
Bibliografía