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BIBLIOTECA ROMÁNICA HISPÁNICA ¡'

FUNDADA POR
DÁMASO ALONSO'
m. MANUALES., 81

PARA ENTENDER LA PRAGMÁTICA

L\~'eo~ Ptao

10 JEF VERSCHUEREN

re EDITORIAL GREDOS, S. A., 2002

Sánchez Pacheco, 85.28002 Madrid

www.editorialgredo.s.com VERsróNESPAÑOLA DE
ELISABAENA y MARTALACORTE'
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Título original:
Understanding !r.~gmatics
r.eet 3~ PRÓLOGO DE
GRACIELA REYES "

.,' E,ciward Arnold (publishétsfLtd. London, 1999

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\Diseño gráfico e ilustración:
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'1

Manuel Janeiro

Dep6sito Legal: M. 44251- 2002

, •• ,ISBN 84:249-2348-0' "' ,

fu OS
Impreso en Esp'ajía. Printed in Spain

Encuadernación Ramos

Gráficas C6ndor,S. A.

Esteban Terradas'. 12. Pollgono Industrial. Leganés (Madrid), 2002


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BIBLIOTECA ROMÁNICA HISPÁNICA

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PRÓLOGO , " -'.~" .

.;;'~'.

«¿Qué hace la gente cuando ~a el lenguaje'?» Esta es la pre~ta


con la que comienza este libro. Pregunta «impertinente») es decir) el'
tipo de pregunta que se sale d,e las r~glas del juego de una disciplina,
ignora los presupuestos y los paradigmas' aceptados y obliga a mir~
,1q~s.mo ¡;:on oj!Js dife~ente,~, La, re.spuesta que. sigue -este :lil;,:t:q- ,
.., .
'

es,utia reconsid'erac~~n,apasionada de la pragmática y Ulla nuevipro- :.,2;"""':;;:':::'''''''~'''''"''''~~!B\


puesta sobre cómo estúdiar la: comunicaCión verbil1.EstaprornleSta
profundamente distinta de los proyectos más difundidos de la prag- ",
mática actual, derivados) sobre todo) de las ideas del filósofo' Paul
'Grice, y concentrados en teorizar los principios Sie recuperación de
, significados implícitos y en analizar la relación entre funciones prag-: '@),'
máticas y estructuras del lenguaje, ya sea a partir de la noción filosó,:,
flca de cooperación o de la noción cognitiva de relevancia. En este li­
bro se parte, en cambio) de las propiedades del lenguaje 'que hacen
posible que lo usemos para comunicamos, y de la relación entre esas
propiedades y el contexto, teniendo en cu~nta las condiciones sociales
y culturales del uso del lenguaje. Estamos, pues, ante otra tendencia
en pragmática, no nueva (puesto que tiene una firme tradición), pero
menos difundida por los manualeS) revolucionaria en muphos aspec­
tos) y, por invitar al análisis interdisciplinario, menos «lingüística»)
que laS tendencias de origen griceano. Antes de describir sus rasgos
principales, echemos una ojeada a la situación y alcances de la prag­
mática en la actualidad.
Para entender la pragmátz'ca Prólogo 9
';-:: ' ,La pragmática nació de la convergencia de varios enfoques dis­ Por otra parte, la pragmática, a diferencia de otras disciplinas lin­
;_"iintos, los más importantes de ellos filosóficos y lingüísticos, qu~ in­ güísticas, se conecta con las preocupaciones de los hablantes y con
é
f ;3tentaban .encontrar los principios según los cuales los hablantes pro­ sus intuicionés, más o menos conscientes, sobre cómo usar el len­
<f)1ucen e in.terpretan significado por medio del lenguaje. Pero antes de guaje y por qué. Ningún hablante, ni el menos sofisticado, es indife­
&~ja aparición ~ficial d~ la pragm~ica, h,ace. menos de ~einta años, :1 rente al lenguaje. En toda conversación hay un relieve de reflexión
,[~filósofo Charles Moms, que acunó el tennmo pragmática en el sentl­ metalingüística y metacomunicativa que es esencial a la conversa­
~~do que le damos hoy, la defmió, dentro de su proyecto de una teoría ción, y por eso los modelos de la pragmática para explicar el uso del
"':genera1 de los signos, como el estudio de todas las relaciones entre los lenguaje pueden interesar, en principio, a todos los hablantes, aunque
,"",~ignos y sus intérpretes (Morris, 1938, pág. 6). Aunque no se conec­ no sean lingüistas o no tengan profesiones relacionadas directamente,
@):an ~on'esa tradición,los m?delos ~e la pragmática llamada «radi~al»" con el discurso.
" f;>.msplrada sobre todo en Grice ~Grice, 1957 ~ 1989 [1975]), surgIdos En efecto; la pragmática estudia procesos que; al menos en parte,
':en los setenta, dan a los usuanos del lenguaJe un lugar central en la son analizados por los mismos hablantes: qué quiere decir alguien
f'Deoría, tal 'como proponía Morris, y definen el significado pragmáti~o con tal palabra, qué es lo implícito de una comunicación, cómo ha de
',.):omo el «significado del hablante» (por oposición al significado de entenderse algo en cierto contexto, por qué un enunciado es apropia­
, t)as palabras). Lapragrllática actual, tanto en la tradición griceana co­ do o inapropiado, qué viene al caso y qué no viene al caso, qué es
~ca
';mo en la tradición «continentah>,
,
más amplia, que es la de este libro,
'
cortés o descortés, cuáles son las nonnas comunicativas de detenni­
':::éstudia el Jenguajeen fu?cionamiento, es decir, en cuanto sirve para nada actividad social, quién tiene el poder,--de .decir -qué. Reciente­
.: {;.producir, transmit4" e interpretar significados en la interacción social, mente -,y de \ manera muy, destacada,
. en este.libro-,
...
se est4 tratando
ofroce teotías sobre ellenguaj~ como comportamiebto y sobre los ' de incorporar estas reflexiones metapragmáticas de los hablantes al
"principios de su empleo. Como consecuencia de esta expansión en. el análisis pragmático, relacionándolas con dos tipos de fenómenos: por
(~Jratamiento del significado lingüístico, la pragmática ~aliza también una parte, las ideologías o conjuntos de ideas no ex.aminadas que tie­
,~4as estructuras lingüfsticas que expresan la relación entre lenguaje y ne una comunidad sobre el empleo apropiado y eficiente de1.1enguaje,
%ontexto de uso, desde los deícticos y los conectores 'discursivos, y por otra, con principios de uso lingüístico discutidos más o menos
(~)lementos abiertamente pragmáticos, hasta aspectos sintácticos y se­ explícitamente en las mismas interacCiones' verbales. Hay una comu­
E~~;nánticos que a primera vista parecen menos comprometidos Con el nidad de intereses entre usuarios legos y usuarios especialistas que
·~:.~so, como el orden de palabras o las presuposiciones. La amplitud del hace a la pragmática la más accesible de las disciplinas lingüísticas y
:,cénfoque pragmático, su poder explicativo de fenómenos que no había la que más puede influir, potencialmente, en la vida de'los hablantes,
¡.J;!podido tratar la lingüística hasta ahora (por ejemplo los tipos de signi­ si los vuelve conscientes de las motivaciones y estructuras de ciertos
i~.Jicados implícitos, los efeétos poéticos, la cortesfa como resguardo comportamientos comunicativos. Para algunos pragmatistas, socio­
CJsicológico de los hablantes), su conexión con otras disciplinas (la lingüistas y educadores, la pragmática puede llevar, incluso, a mejo­
,filosofía, la sociología, la antropología, la gramática), han contribuido rar la enseñanza del lenguaje y a colaborar para que el lenguaje como
'-.~·Á asegurar su éxito académico, aunque todavía se discute su unIdad bien social se distribuya y disfrute de manera más justa en la socie­
"Jeórica y su metodología. dad, cumpliendo con el viejo ideal de una «lingüística emancipadora»
(véase Mey, 1998).
10 Para entender la pragmática Prólogo 11

Algunas de las corrientes teóricas que otorgan a la pragmática nemas una pragmática más amplia, con una tradición empírica que
este alcance, en especial larepresentada por Verschueren, incorporan procede de la etnometodología y de la antropología, más cercana a la
a sus análisis todos los factores contextuales que constituyen el signi­ s¡;>ciolingüistica, e interesada en la relación entre el usuario y el len­
ficado, incluso las huellas discursivas de la actividad metapragmáti~a guaje teniendo en cuenta que el usuario es un ser social, sus cognicio­
de los hablantes, y no la ven como una disciplina más dentro de la, nes están mediadas socialmente, y la comunicación acontece en un "
lingüística o como un nivel de análisis similar a la fonología O la sin­ contexto social y cultural, que debe incluirse en la teoría. Puede verse
taxis, sin9 como un modo de estudiar todos los niveles del lenguaje una descripción de esta tendencia en el editorial ,del primer númerO de
desde una nueva perspectiva, la perspectiva del «fum:ionamiento sig­ la revista Joumal of Pragmatics (Haberland y Mey, 1977). De esta
nificativ(:m; cómo usamos los recursos del lenguaje, sean fonológicos, zona del mapa pragmático surgió el proyecto de una pragmática como
sintácticos o semánticos,' para producir y comprender el signIficado perspectiva o modo distinto de mirar los fenómenos lingüísticos
transmitido, o, dicho de otro modo, cómo funciona el lenguaje, en to­ (véanse, entre otros, Verschueren y Bertucelli Papi, 1987, y Ver­
dos sus niveles, cuando se usa para producir y comprender significa­ schueren eral., 1995).
&. ' , La pragmática que propone este libro es una perspectiva y no un
Para entender la pragmática es hi exposición más coherente y componente más de la lingüística, aunque es, sin duda, una disciplina
completa de esta lingüística del significado o perspectiva pragmática, lingüística.. y pretende recuperar para la lingüística la posibilidad de
de impronta sociocultural e interdisciplinaria, -que se distingue de la estudiar el significado en toda su complejidad, es decir, integrando
visión más restringida propiade la pragmatica radical anglosajona, , todos los factores que intervienen en la generacióJ). y en la interpreta­
originada en Grice. Aunque no vale la pena hacer un mapa de la ción 'de significado. Los componentes tradicionales de la lingüística
pragmática actual, ya que casi todos sus límites territoriales son bo­ (fonología, sintaxis, semántica) se dedican a investigar cada uno de
rrosos, podemos distinguir, por un lado, el campo de los neogricea­ los niveles estruétJ,1rales del lenguaje que llevan los mismos nombres.
nos, donde se encuentran la teoría de Levinson sobre los tipos de im­ A cada componente le corresponde una unidad de estudio (fonemas,
plicaturas y los significados presumibles (Levinson 2000) y la teoría oraciones, significados). Los que, como Levinson (1983), consideran
de la relevancia (Sperber y Wilson, 1995). Cada uno de estos enfo­ que la pragmática debe ser otro nivel más en el estudio del lenguaje,
que s contribuye a una teoría distinta del significado, parte de premi­ la integran a la Hrigüística y le dan un papel complementario respecto
sas distintas, y construye de manera diferente al usuario del lenguaje, de los demás niveles de estudio. Verschueren se opone a esta integra­
pero ambos Intentan explicar el misterio de la comunicación -por ción, y defiende la necesidad de que la pragmática sea, en lugar de un
qué los hablantes entendemos lo que nos transmiten tanto explícita componente de la lingüística, una perspectiva de análisis de cualquie­
como implícitamente-,-, y ambos proponen que el significado lin­ ra de los niveles del lenguaje estudiados por esos componentes. y
güístico que puede estudiarse ,es el intencional: 10 que el comunicador esto debe ser, así, según Verschueren, porque, en primer lugar, las
quiere decir o quiere implicar, contando con la capacidad del desti­ elecciones lingüísticas (que en su teoría constituyen, como veremos
natario de reconocer esa intención. La corriente neogriceana lleva la enseguida, el proceso básico del uso del lenguaje) se hacen en todos
marca dé su origen filosófico, discute todavía sus relaciones con la los niveles estructurales, desde la pronunciación de los sonidos hasta
semántica, y trabaja, en la mayor parte de los casos, con ejemplos " la constitución del discurso, y por lo tanto generamos significado en
construidos, como hacen la semántica y la lógica. Por otro lado, te- todos esos niveles, y todos deben estudiarse pragmáticamente, no tan
~_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _P_a_r_a_e_n_t_en_d_e_r_l,--a.:.:.p,--r.:.::!agm=.:..:..:.:::.á:.:.ti=ca
. Q:;f)._12_·_ _ Prólogo 13
@solo los enunciados, como hace la pragmática tradicional. Además, el funcionamiento de los signos» (Morris, 1938, pág. 108). Dice Levin­
2¡significado lingüístico tiene dimensiones sociales y culturales que son que este liSO amplio del término, que cubre sociolingüística, psi­
(:::)exigen. co.ns~derar factores ~? lingüísticos, y trabajar en tándem con colingüísticay otras disciplinas, «es todavía el que se usa general­
~.ptras dIscIplInas. La pragmatlca es, por lo tanto, diferente de la sinta­ mente en el continente» (1983, pág. 2; subrayado mío). Verschueren,
":,:~1<:is o la fonología: en cuando perspectiva general, la pragmática es, sin embargo, separa cuidadosamente la psicolingüística, la sociolin­
(t~Anás que una rama de la lingüística descriptiva, una lingüística del güística, la antropología lingüís'tica, etc., de la pragmática, cuyo ob­
e~ignificado.. .
jeto, el funcionamiento significativo del ~enguaje, es más específico
(~ . Levinson considera que esta pragmática amplia es un comentario que los programas múltiples que propone la definición de Morris. Pe­
J~obre los métodos y datos de la lingüística, un modo nuévo de mirar' ro ambos enfoques, el de Morris y el de Verschueren,' tienen en co­
';;:;los fenómenos lingüísticos, y concluye que, por meritorio que sea tal mún la inclusión en la teoría' de factores no lingüísticos, y afirman la
¡~!&omentario, de todas maneras necesitamos una teoría pragmática necesidad de una visión interdisciplinaria del significado, con lo cual
(Junto con la teoría sintáctica, fonológica y semántica (cfr. 1983, pág..
la propuesta de Verschueren recupera e intenta desarrollar teórica­
(:1 3). Mey propone dejar que la pragmática como componente y la
mente una visión muy amplia de 'la pragmática. Esta visión no es in­
. ,:::?ragmática como perspe9tiva existan juntamente, ya que, «después de
compatible con el paradigma griceano, puesto que comparte presu­
";~odo, ambas son metáforas que intentan expandir, y no estrechar, el
puestos básicos sobre la naturaleza del lenguaje y el comportamiento
\::;?~10rizonte epistemológic?» (Mey, 1998, pág. 726; trad. mía). Para
de los hablantes, pero sí cambia el panorama de la pragmática, sus
fiYerschueren, en cambior)a pragmática solamente RUede ser una pers­
temas de trabajo, sus métodos y sus fines. Los lectores comprobarán
(~J~ctiva analítica, y,' por lo tanto, situarse fuera del conjunto de disci­
que en este libro se unen los viejos principios pragmáticos con rein­
,.~lmas que estudian niveles estructurales del lenguaje, actuando como
terpretaciones criticas de algunas verdades que aceptábamos sin exa­
'-tina bisagra. que une la lingüística a otras disciplinas interesadas en el
minarlas ya, y con novedades que, en algunos casos, se apartan es­
:'i'enguaje.
candalosamente del «dogma)} de la pragmática.
. La expresión «lingüística del significado», utilizada pQr Verschue­
<rjen en este libro, no debe llevarnos a creer que su pragmática es una '"

~~specie de lirigüística alternativa. Verschueren distingue claramente '" *


~ntre «lingüística de los recursos» Oa que estudia los recursos fonoló­
(1$cos, sintácticos, semánticos, es decir, las estructuras lingüísticas) y Pata el autor de este libro, la pragmática debe preguntarse, ante
lingüística del significado, que saca provecho de los análisis de la todo, cuánto y cómo contribuye el lenguaje a la vida y a la supervi- .
·.,lingüística de los recursos y estudia la relación entre estos y el con­ vencia: qué hace la gente cuando usa el lenguaje. L~ respuesta empie­
,)rxto : como veremos, esta es la tarea exclusiva de la pragmática, que za así: la gente, cuando usa el lenguaje, hace elecciones continuas,
;'fesulta, así, no una alternativa, sino otra parte de la lingüística, situada conscientes e inconscientes, internas o externas al lenguaje. Elige
':..::Jn el cruce entre varias disciplinas lingüísticas y no lingüísticas. idiomas, formas, entonaciones, estrategias, no solo para transmitir
(j erschueren continúa las ideas de Morris, que proponía estudiar to­ significados, sino para interpretarlos. Los procesos de elección se re­
',.~jl-s las relaciones entre el usuario y los signos, es decir, <{todos los fe­ lacionan con tres nociones básicas de la teoría de Verschueren: varia­
jJ,pmenos psicológicos, biológicos y sociológicos que ocurren en el bilidad, negociabilidad y adaptabilidad lingüísticas (nótese, por cier­
.--~ ..
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

-'
14 Para entender la pragmática Prólogo 15
to, que el autor se resiste a decir «mi teoría», ya que es consciente del adaptabilidad; 2) relacionar o situar la adaptabilidad respecto a dife­
riesgo de intentar crear una visión propia, cerrada, de la pragmática, e rentes niveles de· estructuración lingüística; 3) analizar la dinámica de ....
.'

imponer así modos rígidos de mirar los fenómenos, presupuestos in­ la adaptabilidad en· ei tiempo; 4) considerar la saliencia, o sea el es­
tocables, o dogmatismos). Variabilidad, negociabilidad y la noción tatus de los procesos de generación de signifIcado en relación con la
principal, adaptabilidad, son tres propiedades del lenguaje, y partien­ conciencia metapragmática de los hablantes. .
do de ellas el autor llegará a defInir la perspectiva pragmática como el . El contexto y la estructura (tareas 1 y 2) constituyen el locus del
análisis de la adaptabilidad del lenguaje. hecho comunicativo, es decir, la combinación de rasgos lingüísticos'y
La variabilidad es la propiedad del lenguaje que determina el extralingüísticos que se correlacionan en el espacio del acto lingüísti­
conjunto de posibilidades de entre las cuales se hacen las elecciones. co. El contexto ha sido considerado y es todavía considerado por mu- .
No se trata, solamente, de las bien conocidas variantes sociales, geo­ chos investigadores una realidad extralingüística cuya inclusión en ()
gráfIcas o funcionales del lenguaje, sino del conjunto de opciones una teoría lingüística es problemática o indeseable. Para el autor, da- l~
presentes en cada si~ación comunicativa, que no son estables, sino 'da la indeterminación del lenguaje, que hace que cualquier expresión 'C)
que están en contin:uo cambio incluso dentro de una conversación, pued~ tener muchos signifIcados que dependen del uso de la expre­
donde una elección puede eliminar alternativas o crear otras. La ne­ sión, la inclusión del contexto es una garantía de precisión en el estu­
gociabilidad, a su vez, es la propiedad del lenguaje responsable del dio del signifIcado. Además, el contexto no eS «todo» 10 extralingüís­
hecho de que las elecciones no se hagan mecánicamente o de acuerdo tico, sino que es generado en el uso del lenguaje, y por 10 tanto
con reglas fIjas de relación entre form¡¡ y función, sino a base de prin-:­ restringido hasta cierto punto,y, además, puede rastraerse en los
éipios y estrategias· muy flexibles.· La negociabilidad es tan fuerte, enunciados no es una realidad inaccesible. En la generación de signi- ... '~
I . , • ',')

que en pragmática no ponemos asteriscos, como en sintaxis: no hay fIcado, el contexto se negocia: se acepta, se rechaza, se replantea, se
enunciados «apragmáticos» (sino, a 10 sumo, enunciados desafortu­ vuelve a negociar, en el proceso llamado contextualización, quizá el
nados, que no cumplen con la función de comunicar algo a alguien). más importante para comprender cómo se genera el signifIcado en la ()
Toda expresión se puede hacer servir para producir un signifIcado interacción social.
distinto del que era inherente o previsible en esa expresión: la inde­ Las estructuras lingüísticas, objeto de la tarea 2, son todas sus­
terminación producida por la negociabilidad se explota de manera ceptibles de análisis pragmático, y no solamente, como hasta ahora en
creativa, siempre con el riesgo, claro, de que la comunicación falle. pragmática, los deícticos o las expresiones o partículas que dari ins­
La adaptabilidad, fInalmente, es la más importante de las tres propie­ trucciones sobre cómo procesar el discurso. La pragmática como
dades consideradas, y es la que permite a los seres humanos hacer perspectiva tiene por objeto todas las estructuras: des~e las lenguas,
elecciones negociables, partiendo de una amplia gama de posibilida;' códigos y estilos hasta las proposiciones, enunciados y grupos de (j
des para poder llegar, a cumpljr satisfactoriamente (nunca óptima­ enunciados, pasando por fonemas; morfemas, palabras. Para el autor,
mente, quizá) las rrecesidades comunicativas. las reglas gramaticales que sirven para construir oraciones' en una
A partir de la noción de adaptabilidad, el autor asigna a la prag­ lengua dada reflejan, meramente, hábitos estructurales que pueden
mática cuatro tareas o perspectivas de investigación, que presenta romperse de diversas maneras; si se mantienen relativamente estables
como puntos de mira complementarios para estudiar cualquier fenó­ es porque así se evita difIcultar la interpretación. En palabras del au­
meno lingüístico: 1) identifIcar los correlatos contextuales de la tor, «la gramática no· lleva una vida independiente» (pág. 282): no hay
Para entender la pragmática Prólogo. 17

::C::&na relación fija entre forma y función, sino negociabilidad y adapta­ fumadora y el reconocimiento de sus derechos. La camarera reinter­
X2bilidad. preta completamente la pregunta de la cliente, de modo que esta
La tarea 3, que tiene a su cargo la dinámica de la adaptación, pregunta significa más, en este intercambio, que lo que la cliente in­
,",:!ibarca el conjunto de procesos de adaptación, o sea la naturaleza y el tentaba que significara (volveremos enseguida al problema de la
.:,;ñesarrollo en el tiempo de la relación entre contexto y estructura. Esta' intencionalidad). Un análisis centrado en la intencionalidad, o en
~:~iAinámica debe estudiarse teniendo en cuenta la variabilidad y la ne­ la secuencia, de actos de habla, no podría explicar de manera teórica­
\¿:!l'gociabilidad. Esta es la tarea central y más especifica de la pragmáti­ mente satisfactoria los significados generados en este breve diálogo.
()a. Mientras la lingüística dedicada al estudio de los recursos lingüís­ La tarea 4 consiste en analizar cómo la dinámica de interadapta­
.ticos independientemente del uso estudia a fondo las estructuras de bUidad entre contexto y estructura puede ser más O menos saliente en
,.,':Xas lenguas, y la sociología, la antropología o la psicolingüística ana­ la mente del usuario. Las elecciones lingüísticas que son el punto de
t~slizan los contextos, la pragmática tiene la tarea exclusiva de analizar partida de todos los procesos se hacen más o menos conscientemente,
C11 proceso de interadaptación entre contexto y estructura. En uno de y la conciencia reflexiva de los hablantes convierte á algunas eleccio­
@Os ejemplos preferidos del autor para mostrar la adaptabilidad (y nes en más salientes que otras. En ningúri manual de pragmática se
. ,jimpién,más adelante, lB: sruiencia o accesibilidad cognitiva de los había dado tanta importancia al papel de la «mente social» del ha­
.~nrocesos de generación de significado), se presenta la siguiente situa­ blante, cuyos procesos cognitivos están determinados, en parte o en
"~dón. En un café de California, en el año 1981 (cuando los no fuma­ gran parte a veces, por normas sociales. Todas las elecciones revelan
~]¡ores ya habían logrado hacer valer sus derechos, y había secciones algún grado de conciencia metapragmática,'y algunas de ellascons­
no fumadores en muéhos cafés y restaurantes, al menos en Cali­ tituyen el vastó espacio de reflexividad 'que caracteriza nuestro uso
',.rprnia}, una cliente entra y pregunta a la camarera, señalando una me­ del lenguaje. Hasta .cierto . punto, dice el autor, toda comunicación.
"~a en la que quiere sentarse, si es de no fumadores. La camarera no verbal es autorreferencial, ya que no podríamos usar el lenguaje sin
::contesta a la pregunta, sino que le dice a la cliente que puede usarla calibrar continuamente su funcionamiento.
=;rlomo de no fumadores. De este modo le garantiza implícitamente que El autor analiza la adaptabilidad, desde los puntos--de vista que he
a estar separada de los fumadores. La cliente acepta que se le con­ esbozado aquí, tanto en interacciones cara a cara entre dos o más
~
("~eda 10 que en realidad no ha pedido. y dice «gracias», ratificando así
.'
personas cuanto en el ámbito más vasto de 10 que él llama macropro­
¡,:lJn acto de habla que en realidad no ha tenido lugar. El ejemplo ilustra cesas. Se incluye en este nivel amplio el análisis de las ideologías,
k;:j\ interacción entre' contexto (en gran escala, o sea histórico y cultu­ consideradas conjuntos de significados implícitos' no salientes ni
:al, y en pequeña escala, teniendo en cuenta, entre otras cosas, los transmitidos intencionalmente que, sin embargo, dejan trazas empíri­
¿Dles sociales de cliente y camarera) y las estructuras lingüísticas a las camente observables en los discursos sociales y por 10 tanto pueden
,;lue se recurre: la camarera se salta convenciones de conversación estudiarse pragmáticamente. El análisis deja al descubierto patrones,
:f.Fontestar preguntas, por ejemplo) e incluso convenciones lingüísticas . de significado implícito no cuestionado (lo que pertenece al «sentido
",' .¡
'tal decir «puede usarla como de no fumadores», recalcando la expre­ común») que restringen y distorsionan las discusiones de temas como
: :Jón anómala, que adquiere un sentido especial) y cómo ,la conversa­ la aceptación de los inmigrantes o la responsabilidad política, estu­
,'ión se asienta fuertemente en presuposiciones de varios tipos, en es­ diados por el autor en discursos públicos. Desde una perspectiva
,:~ecial las relacionadas con la identificación de la cliente como no pragmática capaz de tener en cuenta todos los factores en juego y no
-:: ..
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-._~ ...........
~~ '---

_'o

18 Para entender la pragmática 19

solamente el reconocimiento de las intenciones de los hablantes, se contextos y añadan factores que podrían cambiar la interpretación de­
puede hacer un análisis crítico de los discursos que afectan y a veces seada). Al criticar las categorías teóricas habituales y usar ejemplos
determinan o cambian la vida de comunidades enteras. que exigen mayor amplitud de análisis, Verschueren nos exige consi­
derar de nuevo la pragmática clásica, especialmente sus dos teorías
*
más importantes: la teoría del, significado implícito inspirada en las .'
**
refleXiones filosóficas de Grice, que intenta explicar tipos de signifi­
cado implícito y cómo son transmitidos, y la teoría de los actos de
Para entender la pragmática es a la vez un manual de pragmática
habla, tal como ha sido fijada por otro filósofo, Searle (1969).
y una crítica a la pragmática. Los leétores encontrarán aquí todos los
Este libro intenta superar esas' teorías. N o digo que intente des­
temas importantes de pragmática (actos de habla,'deíxis, implicaturas,
cartarlas o desautorizarlas, sino que las toma como punto de partida
presuposiciones, etc;) tratados por los manuales clásicos (Lev!nson,
para ir más allá. Consideremos la noción de «significado del hablan­
1983; Leech, 1983, etc.; nótese que los manuales de pragmátlca, al
te», quiza lainás importante de la pragmática griceana, que en este li­
lado de su función didáctica, han tenido el papel de fijar el estado de
bro vamos a encontrar explicada, criticada y reemplazada por otra. El
las cuestiones e incluso de desarrollar teorías, como sucede con este
significado del hablante es, desde Grice, el único significado lingüís­
libro, que es un manual y más que un m~nual). Verschueren explica
tico que interesaa la pragmática: es un significado lingüístico, pero
estos fenómenos de modo accesible al lector novicio, pero a la vez los
no coincide con lo que unaexpresi6n quiere decir (dominio de la se­
muestra como productos de visiones teóricas que se superponen entre
.mántica, que estudia significados convencionales) sino con 10 que al­
sí, y no como fenómenos diferentes que deban formar un repertorio
guien quiere decir cuando emplea una expresión. Este significado
de temas pragmáticos. -La exposición de los fenómenos mismos es
transmitido tiene un componente contextual que procede de las infe­
útil, por lo tanto, para los lectores que se inician, y la' crítica a la
rencias que hacen los hablantes utilizando tres recursos: 10 que las
pragmátiea interesará mucho a los lectores experimentados. .
palabras quieren decir, la intención (recuperable) del interlocutor y
Los ejemplos que sirVen para ilustrar las explicaciones del hbro
los datos del contexto, entre ellos los principios y los hábitos de uso
son enunciados menos abstractos que los ejemplos típicos de los ma­
del lenguaje, que hacen unos significados más probables que otros en ,
nuales, especialmente cuando proceden de hechos lingüísticos auren­
ciertas condiciones (como se explica en Levinson, 2000). Dada la di­
.ticos o «actos de significación». Sin descartar la conveniencia de usar
ferencia entre 10 que una palabra significa fuera de contexto y 10 que
ejemplos reconstruidos de enunciadós posibles, para contrastarlos con
. puede signi.ficar en un contexto, una vez computados los valores
otros o por razones expositivas, Verschueren, al querer teorizar toda
. contextuales e intencionales, el significado pragmático, lo «transmiti­
la complejidad del significado lingüístico en actos de significación,
do», lo que alguien quiere intencionalmente comunicar a otros, no
no puede trabajar con ejemplos simplificados (como es habitual en la
coincide con el semántico y requiere otra disciplina distinta de la se­
gramática neogriceana; .Sperber y·Wilson [1995], para mencionar so­
mántica. Grosso modo, la noción de contexto es la linea divisoria en­
lamente un caso muy conocido, construyen ejemplos estereotípicos,
tre semántica y pragmática, y la noción de significado intencional,
aséptico~, cuyas implicaciones son supuestamente accesibles para
significado del hablante, es asiento del edificio teórico de la pragmá­
cualquiera, e ilustran así los procesos mentales de la interpretación,
tica. En la teoría de la relevancia, la distinción entre «intención in­
evitando que los lectores deban tener en cuenta o incluso imaginar
formativa» e «intención comunicativa» (esta última firmemente asen­
Para entender la pragmática Prólogo 21
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'<":tada en el presupuesto de que las intenciones de los demás son reco­ bien sucede que el lenguaje, con su poderosa maquinaria de evoca­
(\Jnocibles, pues de 10 contrario no habría comunicación) es una dis­ ciones y connotaciones, dice por sí mismo lo que el hablante no quiso
::)tinción imprescindible, y sitúa la teoría en el paradigma griceano. decir: Y el asunto se complica más sí cuestionamos la noción de in­
t;: Verschueren sostiene que la idea de significado del hablante ha sido tención desde un punto de vista psicológico, pues el sujeto no es un
~ necesaria para el desenvolvimien;o .de .la pragmática, ~:ro que debe­ erite monolitico, dueño de una intención inequívoca; o si dejamos en­
"". mos superarla y preguntarnos que SIgnIfica una expreSIon en un con­ trar en la teoría la distinción entre querer decir y poder decir, pues el
\~texto, en lugar de qué quiere el hablante que signifique una expresión poder de decir o no decir es esencial en las prácticas lingüísticas, y
r~len un contexto, puesto que el significado real de un enunciado. no doblega intenciones y relevancias. Pero la famosa definición de signi- .
"<, coincide .siempre con las intenciones atribuibles a su autor, ya' sea ficado prqpuesta por Grice (1957) según la cual el significado no
,:iporque no ~~mprendemo~ e~as in~enciones, ya sea porque el enuncia­ natural, o sea el lingüístico, consiste en la intención del hablante de
\¡¡~ do ha adqumdo nuevos SIgnIficados. . producir un efecto en el oyente, efecto que se consigue por el recono­
~;) Es más importante saber preguntar que dar la respuesta (como se cimiento, por parte del oyente, de esta intención, abrió el camino para
()explica en este libro, a propósito de las preguntás «impertinentes»). Si el estudio del significado implícito, al hacer posible teorizar cómo
<:\eliminamos al hablante,de la pregunta, eliminamos la coincidencia transmitimos implicaturas, y por lo tanto constituyó y sigue constitu­
é::."i entre· intención y significado y, según V erschueren, recuperamos para yendo la base de los proyectos más difundidos de la pragmática ac­
'~""la teoría toda la complejidad del significado lingüístico: la pragmática tual. Verschueren no solamente señala la insuficiencia de la intencio­
®sepreguntará ahora, más apropiadamente, por el significado completo nalidad como criterio para determinar la valor infonnativo de un
G!)de úna expresión usada, incluidos sus aspectos no intencionales. El enunciado, sino que intenta incluir en la teoría todo 10 que los, enfo­
íriesgo detal pregunta es que no ofrece ninguna contención a la prodi­ ques intencionalistas excluyen, especialmente las nonnas sociales y
galidad del contexto: para contestar hay que tener en cuenta todos los , culturales que presiden los diálogos humanos.
. ;factores que inciden en el acto de comunicación. Pero Verschueren En el modelo de Verschueren, el significado lingüístico, como
~) está convencido de que se pueden estudiar empíricamente tipos ¡m­ producto de la relación entre las estructuras lingüísticas y el contexto,
.Qplícitos de significado, más allá de lo intencional, superando el estu­ se produce gracias a la adaptabilidad del lenguaje, la propiedad del
~dio de cogniciones individuales (lo que un individuo intenta decir, lo lenguaje que pennite a los hablantes hacer elecciones, 'manipulando
Wque otro logra recuperar) e incluyendo los factores sociales y cultu­ . los recursos lingüísticos según las necesidades .de la comunicación.
,. ,rales que fonnan parte del significado. Para analizar el significado La pragmática propuesta en este libro es una pragmática de la adapta­
':::::'lingüístico completo, sin limitarse a la intencionalidad, el autor pro­ bilidad. Esta pragmática exige otras preguntas, que no expulsan al
;'pone, como hemos visto arriba, no estudiar el contexto como si fuera hablante de la teoría, pero no limitan la tyoría a la consideración del
•,é)UÍ1 dato. extralingüístico y por lo tanto inaccesible al análisis empíri­ estado mental de los hablantes, sino a las complejas interrelaciones
;;' camente válido, sino como un dato interno al enunciado, ya que el entre lengua, sociedad y cultura, tal y como se manifiestan lingüísti­
~~J contexto se va creando en la interacción y va dejando sus huellas en' camente, de modo verificable, en los enunciados. La movida meto­
í;~}esta, o sea, es susceptible de análisis lingüístico. dológica es clara: debemos volver a unir el significado a la forma lin­
La deficiencia de la noción de intencionalidad es ínuy evidente. güística, venciendo la aprensión por un contexto inmanejable.
,.,}Los hablantes no solo «quieren decir», sino que dicen sin querer, o
,""..;-'


Prólogo' 23
22 Para entender la pragmática

Para Verschueren, el significado lingüístico es el resultado de las


fuerzas interactuantes de producción e interpretación, finnemente si­
tuadas en tres dimensiones: la cognitiva, la social y la cultural. Los OBRAS CITADAS

procesos mentales que penniten la interpretación lingüística están


inmersos en lo social: la mente que procesa lenguaje es la «mente en Grice,. H. P., 1957, «Meaning», Philosophícal Review, 67. (Reimpreso en D.
sociedad» (expresión tomada de Vigotsky). La pragmática, al ser una Steinberg y L. Jakobovits, eds., Semantics: An Int~rdisciplina?, Read~r
<perspectiva funcional sobre el lenguaje, debe tener en cuenta la com­ in Philosophy, Linguistics and Psychology, Cambndge, Cambndge Unl­
plejidad de su funcionamiento en esos tres ámbitos inseparables, versity Press, 1971, Y P. F. Strawson, ed., Philosophícal Logic, Oxford,
mostrando los procesos de adaptabilidad, empíricamente comproba­ Oxford University Press, 1971.) .
bles, que nos peqnÍten alcanzar algún gradó de satisfacción en nues­ _ 1975, <<Logic and conversation», en Studíes in the Way of Words, Har­
, vard, Harvard University Press, 1989. (Publicado por primera vez en P.
tros actos comunicativos, y respondiendo así a la pregunta sobre qué .
Co1e y J. Morgan, eds., Syntax and Semantics. Volumen 3, Speech Acts,
hacemos cuando usamos el lenguaje. Al revelar la relación entre el
Nueva York, Academic Press, 1975.) ..
lenguaje y la vida huÍnana en general, la pragmática como perspectiva Haberland, H., y Mey, l, 1977, «Editorial: Linguistics and Pragmatlcs»,
de estudio del lenguaje se convierte en punto de convergencia entre la Journal ofPragmatics. 1, págs. 1-12.

lingüística tradicional (la lingüística de los recursos o estructuras lin­ Leech G. N. 1983 PrincipIes ofPragmatics, Londres, Longman.

güísticas) y los proyectos interdisciplinarios de las humanidades y las Levi~on,· S: C., i983, Pragmatics, Cambridge Textbooks in Linguistics,

ciencias sociales. Londres, Cambridge University press. (Versión esp.: Pragmática, Bar­
Dice Verschueren que «siempre hay serios riesgos en el uso del . .celona, Teide, 1989.) .
lenguaje» (pág. 112). Podemos seguir pensando, después de leer este _, 2000, Presumptive Meanings. The Theory of Generalized Conversational
libro, que somos racionales y eficientes, como siempre ha querido la Implicature, Cambridge, MIT Press.
pragmática, y que a veces somos cooperativos, como supone Grice, Mey, J., 199.8, Pragmatiqs, en J. Mey, ed., Concise E.ncyclopedia of Prag­
pero tendremos que concluir, con el autor, en que los actos de len­ matics, Amsterdam, Elsevier. .
Morris, C. W., 1938, Foundations ofthe theory ofsigns, enO. Neurath, R.
guaje son aventuras en nuestra vida, que usamos el lenguaje como Camap y C. Morris, eds., International Encyclopedia of Unified Science,
podemos, y que quizá la torpeza de un hablante extranjero no sea una Chicago, University ofChicago Press, págs. 77-138. .
excepción a la nonna, sino meramente un ejemplo extremo de nuestro Searle, J., 1969, Speech Acts. An Essay in the fhilosophy of Language,
comportamiento habitual de hablantes, empeñados en expresarnos y Cambridge, Cambridge University Press. (Versión esp.: Actos de habla,
comunicarnos usando el lenguaje y recreándolo, respetando y forzan­ Madrid, Cátedra, 1980.) .
do sus convenciones con mayor o menor fortuna, para poder transmi­ Sperber, D., y Wilson; D., 1995, Relevance. Communication and Cognition,
tir e interpretar signífícados. Este libro demuestra que vale la pena· 2.8 ed., Oxford, Basil Blackwell.(Trad. esp. de la La ed.: La relevancia,
intentar analizar toda la complejidad de esa aventura. Madrid, Visor, 1994.) . . .
Verschueren, J., y Bertuccelli Papi, M., eds., 1987, The Pragmatlc Perspectl­
GRACIELA REYES ve, Amsterdam, John Benjamins.
Verschueren, J., 6stman, J.-O. H., Blommaert, J., y Bulcaen, C., eds., 1995,
University ofIllinois, Chicago.
Handbook ofPragmatics, Amsterdam/Filadelfia, John Benjamins.
Esta es la esencia de la ciencia:
haz una pregunta impertinente
y estás en camino de .
una respuest!J. pertinente.
(JACOB Bn.ONOWSKI, 1973, 153)

No hay razón para transigir

en lo que yo llamo buen reducclomsmo.

Es simplemente el compromiso con una ciencia que no mendiga preguntas,

sin engañarse incluyendo desde el principio misterios o milagros.

(DANIELC. DENNET, 1995, 82)


AGRADECIMIENTOS
PREFACIO

El autor y la editorial de este libro quieren agradecer los permisos


de reproducción a las siguientes empresas: . Este libro intenta enfrentarse a un doble desafio. El primero, yno
, Guinness Limited, por losposavasos de la página 273. La palabra el menos importante, es presentar un marco teórico coherente en el
GUINNESS es una marca registrada de Arthur Guinness & Son (Du­ que se pueda reflexionar y seguir explorando sobre, la mayor parte de
blín). lo que se sabe hoyde la pragmática del lenguaje, es decir, del uso del
lenguaj e. El, segundo. de.s~tlº e.s mantener la presentación elemental,
Les Éditions Albert René por las viñetas de las aventuras de AS­
para que pueda ser usado como manual, accesible tanto a estudiantes
62. © 1998. Les Éditions Albert René/G~scinny _
TÉRIX en la página
Uderzo. con unos conocimientos lingüísticos elementales como a estud~an­
tes más adentrados en las ciencias del lenguaje, y abierto a investiga­
Los trenes.:'i:gin por el editorial de la página 237 (que consiste dores de otros campos que esperan obtener provecho de un análisis
e~ una carta dmgIda a los pasajeros de los trenes Virgin finnada por más profundo de cómo «funciona» el lenguaje. Las exigencias de in­
,Richard Branson) de la revIsta HotLine, OtoñolInviemo, 1997. novación e iniciación parecen contradictorias, pero no lo son, si no
~e h~n hecho todos los esfuerzos posibles para encontrar á los que convergen claramente en el nivel de la abstracción que motiva mi
prople;anos de lo~ derec~o~. Cualquier derecho que no aparezca en elección de epígrafes. Las preguntas impertinentes, las que se deben
e.stas lmeas 10 hara en edlCIOnes posteriores si se notifica a la edito­ hacer para forzar los limites de la comprensión y el conocimiento, ra­
na!. .
ramente son las más sofisticadas. Suponiendo que el uso del lenguaje
es una fonna de comportamiento anclada cognitiva, social y cultu­
ralJ:nente, la pregunta que va a guIar nuestra búsqueda' de coherencia
teórica en el campo de la pragmática lingüística es simplemente ésta:
«¿Qué hace la gente cuando usa el lenguaje?». De igual modo, las
respuestas satisfactorias implican nonnalmente algún grado de des­
mistificación. La pregunta general, por tanto, será reducida a pregun­
tas subsidiarias que se prestan ellas mismas a respuestas basadas' en la '
28 Para entender la pragmática Prefacio 29
observación empírica. Se evitará cuidadosamente recurrir a una «caja de la pragmática, condujo subsecuentemente a la organización de la
negra» o a un deus ex machina. International Pragmatics Conference en Viareggio entre el 1 y el 7 de
Hoy en día no hay es~asez de manuales de pragmática. En orden septiembre de 1985 (la primera de una serie que continúa), al estable.;.
cronológico encontramos, y me limito a los 'que están disponibles en cimiento de una International Pragmatics Association (IprA) en
inglés y que tienen «pragmática» en el título o en el subtitulo: Leech 1986, a la producción de una bibliografia de pragínática más com-'
(1983), Levihson (1983), Oreen (1989), Blakemore (1992), Mey pleta (Nuyts y Verschueren, 1987), a la oferta de cursos sobre forma­
(1993), Orundy (1995), Thomas (1995) y Yule (1996). Se debería ción de teoría en pragmática (Universidad de Amberes), a la publica­
añadir docenas más si incluyéramos los que están escritos en otras ción: de un documento de trabajo que esboza la estructura básica de
lenguas, los que evitan la denominación de «pragmática», aunque una teoria general de la pragmática (Verschueren, 1987), de una va­
traten de la misma gama de fenómenos de uso, y los volúmenes co~ riedad de artículos sobre aspectos de 10 mismo (Verschueren, 1994,
lectivos. Sin embargo, todos ellos limitan su alcance teórico o empiri~ 1995), y del Handbook ofPragmatics (Verschueren et al., eds., 1995).
co, o ambos. Tienden a centrarse en un conjunto de fenómenos elegí­ Todas estas empresas implican una gran deuda con numerosos
()dos algo al azar: la deíxis, la implicatura, la presuposición, los actos colegas. En particular quiero agradecer a Jacob Mey, por animarme a
,,~)d~,hab1a, la conversación y semejantes. La cognición se incluye tam­ preparar mi primera contribución a la teoría pragmática para el Jour­
..::;~.blen normalmente, pero sólo con propósitos específicos a la teoria. nal of Pragmatics (y por aceptarme posteriormente como editor de
~:~}Los factores sociales y;culturales, sistemáticamente, no se tienen en reseñas, cargo en el que he aprendido ciertos trucos del oficio en con­
@3cuenta; se. puede añadi,~ un capítulo sobre «pragmática de la socie­ versacion.es con Hartmut Haberland y Ferenc Kiefer); a Herman Pa­
·Odad»perócomo si fuera,u.na idea de último momento. Por eso, al in~ rret, por invitarme a aunar fuerzas en la organización de la conferen­
()tentar juntar orientaciones y temas diferentes, siguiendo unos prin,ci~ cia de Urbino (con Marina Sbisa) 'ya empezar la serie Pragmatics &
"pios, este libro no tiene precursores inmediatos. . Beyond; a Svenca Savié y Johan van der Auwera, por darme la opor­
, Un proyecto como éste no se concibe y se completa en un suspiro. tunidad de presentar algunas ideas embrionarias en las conferencias
'\Excepto un intento anterior de formación de una teoría pragmática de Dubrovnik; a Marcella Bertuccelli Papí, Jan Blornmaert, Jan Nuyts
~'{Verschueren 1978a) así como intentos anteriores de «organizan> el y Jan-Ola Ostman por tomar 10 suficientemente en serio 'esas ideas
t!fampo por medio de un esfuerzo bibliográfico (Verschueren 1978b, para que yo las siguiera explorando (Marcella más tarde coorganizó
¡;i::"con cinco suplementos anuales 1978-1982 en el Journal ofPragma­ la cOIlferencia de Viareggio, Jan N. coprodujo la bibliografia y co­
\~ics), la, participación en la organización de una conferencia sobre . fundó IprA, juntos Jan N. y Jan-Ola fueron coprofesores en el curso
;:Possibilities and limitations ofpragmatics (en Urbino entre el 8 yel de «formación de teoría» en la Universidad de Amberes, y ambos son
~~~4 de julio de 1979) y la preparación de la colección Pragmatics & -junto a Chris Bulcaen- todavía los eoeditores del proyecto en cur­
~Jeyond (John !3enjami~s, d~sde 197~), la empres~ actual tiene al me_O so Handbook; a Ann Verhaert, sin cuyo constante apoyo y trabajo
t'::,~ros catorce anos de histona. Un pnmer bosquejo de las ideas que (gratis al principio y mal pagado después) no hubiera sido posible el'
":subyacen a este libro se presentó en el grupo de trabajo Between se­ trabajo de organización; a Jan Blommaert, Frank Brisard, Chris BuI­
'~)nantics'and pragmatics que tuvo lugar en el Centro InteruniversÍtario caen, Helge Daniels, Sigui'd D'hondt, Gíno Eelen, Jürgen Jaspers,
.je Estudios Postgraduados en Dubrovnik entre el 7 y el 18 de mayo Luisa Martín Rojo y Michael Meeuwis, por su atención critica du­
<1 e 1984. Su principio básico, la búsqueda de coherencia en el campo rante extensos períodos de colaboración en el Centro de Investigación
',­
31
30 Para entender la pragmática Prefacio

de la IprA y por comentarios sobre versiones anteriores de este libro. editOrial desde entonces. Finalmente, quiero agradecer a Mouton-de
Aunque es imposible medir las contribuciones individuales, es justo Gruyter, la American Anthropological Association y a John Benja­
llamar la atención hacia las despiadadas e implacables puñaladas de mins por permitirme reproducir algunos ejemplos y análisis de Ver­
:Michael Meeuwis a mi pobre terminología, que, creo yo, han influido schueren (1989a, 1995b y 1995d11995e, respectivamente).
en gran manera en la claridad conceptual de lo que estoy intentando Dado el reducido volumen de este libro, se han evitado los exten­
presentar, y al talento especial de Gino Eelen para señalar, con emba~ sos comentarios sobre la literatura así como las largas listas de refe- ()
razosa exactitud, dónde estaba cometiendo los mismos errores que rencías. Por lo· tanto, se aconseja a los lectores más avanzados que 10
quería evitar, problema que todavía puede persistir aquí y allá. Mu­ usen conjuntamente conA comprehensivebibliography ofpragmatics
chos otros han contribuido en distintos grados con comentarios sobre (que cubre la mayor parte de la literatura, pero sólo hasta 1985) yes­
un primer borrador: Jannis Androutsopoulos, Bert Bultinck, PoI Cu­ pecialmente con el Handbook of Pragmatics (que ofrece descripcio­
velier, Thorsteín Fretheim, John Gumperz, Annick De Houwer, Cor­ nes sucintas, pero de~ladas, de tradiciones, métodos y temas, y con- (f)
nelia Ilie, Geert Jacobs, Alexandra Jaffe, István Kecskés, Manfred tiene además listas de referencia adicionales).
Kienpointner, LiWei, Tom Naegels, Fran~ois Némo, Srikant Sarangi, JEF VERSCHUEREN
Rachida Senoussi, Tom De Smet, Ludwina Van Son, Khalid Touzani, 31 de marzo de 1998
Rod Watson, Zhang Shaojie: También, éste puede ser el lugar ade­
cuado para agradecer, de una vez por todas, mi deuda intelectual con
Louis Goosens, quien me introduj o en la perspectiva funcional del
lenguaje, y a Charlés Fillmore, JOM Gumperz, George Lakoffy John.
Sear1e, quienes me ayudaron a refmarla durante siete años de conver­
saciones en la Universidad de Berke1ey, California.
El trabajo que ha dado por resultado este libro recibió ayuda eco­
nómica de la Fundación Nacional Belga para la Investigación Cientí­
fica (NFWOIFKFO), una beca del gobierno belga (Federale Diensten
voor Wetenschappelijke, Technische en Culturele Aangelegenheden,
IUAP-U, número de contrato 27) y de la Universidad de Amberes. La
redacción se empezó durante una estancia inolvidable en el Centro de
Conferencias y Estudio de Bellagio (del 8 de febrero al 8 de marzo de ()

1997), subvencionada por la Fundación RockefeIler y -con mérito


equivalente- por Alm, ya que mientras tanto se ocupó· de todos los
asuntos y tareas familiares. Mis compañeros de residencia en el Cen­
tro de Bellagio ofrecieron ejemplos muy útiles (muchas veces sin ser
conscientes de ello), inspiración y discusión.
También se deben agradecimientos a Bernard Cornrie y Greville
Corbett por invitarme a escribir este libro y por su constante atención
PARTE 1

LA PERSPECTIVA PRAGMÁTICA

1
f

INTRODUCCIÓN

Los dos capítulos siguientes tienen la intención de explicar la idea


de la pragmática como perspectiva funcional general sobre el len­
guaje y sobre cualquier aspecto de éste, como una aproximación al
lenguaje •. que considera la complejidad completa de su funciona­
miento cognitivo, social y funcional.. Para relacionar este libro con
tradiciones establecidas, el Capítulo 1 revisa una amplia gama de fe­
nómenos estudiados previamente bajo la denominación de pragmáti­
ca. También explica cómo están estrechamente interrelacionados y lo
accidental de las distinciones resultantes, por lo que aceptar una pers- .
pectiva más global parece acertado en este punto del desarrollo del
campo. El Capítulo 2 vuelve a la pregunta básica «¿Qué hace la gente
cuándo usa el lenguaje?» o «¿Qué es usar el lenguaje?» Se presentan··
algunas observaciones elementales que conducen a las nociones clave '
necesarias para construir una teoria cohere~te de la pragmática. En
contraste con el Capítulo 1, el Capitulo 2 es corto pero teórico. Sin
embargo, la familiaridad con las premisas teóricas es esencial para
situar el resto de este libro en su perspectiva adecuada.
INTRODUCCIÓN

Se puede definir la pragmática, a un nivel muy elemental, como


el estudio del uso del lenguaje o, dicho de manera algo más compli­
. cada, el estudio de los fenómenos lingüísticos desde el punto de vista
de las propiedades y procesos de su uso. Esta definición de nivel bá­
sico no presenta una frontera estricta entre la pragmática y otras áreas
en el campo de la lingüística, como el análisis del discurso, la socio­
lingüística o el análisis de la conversación. Aun así, es raramente dis- .
. cutida y cuando se piensa en sus consecuencias lógicas tiene intere­
santes implicaciones para el modo en que la pragmática se sitúa en la
ciencia del lenguaje en general. Las siguientes secéÍones son un in­
tento de llevar a cabo esta tarea.

0.1 LINGüíSTICA DE LOS RECURSOS DEL LENGUAJE: LOS COMPONENTES


DE UNA TEORÍA LINGüíSTICA

Tradicionalmente se divide la lingüística en disciplinas compo­


nentes como la fonética, la fonología, la morfología, la sintaxis y la .
semántica. Cada una de ellas se relaciona con una unidad de análisis
específica. La fonética y la fonología se encargan de los sonidos del
habla. La fonética hace esto identificando las partes constituyentes de
una corriente continua de sonido como elementos de un repertorio
PRAGMÁTICA. - 2
34 Introducción Lingüística del uso del lenguaje 35
universal, del cual todos los lenguajes usan un subconjunto seleccio­ Todas estas disciplinas comparten un enfoque en los recursos de
nado y fuera del cual hay sólo sonidos no-lingüísticos (p.ej. bostezos la lengua, e.s decir, los ingredientes que hacen de una lengua un ins­
o ronquidos audibles); se concentra en las propiedades de los sonidos trumento que usa la gente con objetivos expresivos y comunicativos.
(fonética acústica), en el módo de producción en la región vocal (fo­ Como la lengua es altamente estructurada, formalmente y en términos
nética articulatoria) o en su recepción (fonética auditiva). La fonolo­ de relaciones forma-significado, se pueden identificar unidades de
gía estudia el modo en que los sonidos del habla forman sistemas que análisis, lo que conduce a la manejable división de trabajo resumida
capacitan a los hablantes de una lengua para ponerse de acuerdo sobre anteriormente. Pero, ¿dónde entra la pragmática? ¿Se puede encontrar
cuándo dos cadenas de sonidos (cuya producción puede ser infinita­ una tarea comparable que sitúe a la pragmática en el mismo conjunto
mente variada) son básicamente el «mismo sonidcm. Cuando los ob­ contrastivo?'
servamos de este modo, meros sonidos se convierten en «fonemas),
los pilares de construcción básicos para unidades del lenguaje sÍgnifi­
cativas como los morfemas y las palabras. La morfología, a su vez,
0.2 LA LINGüíSTICA DEL USO DEL LENGUAJE: LA PERSPECTIVA
investiga «morfemas» (como des-, en-, cant-, -o,' vecind-, -ario), los
PRAGMÁTICA
signos lingüísticos mínimos en el sentido en que son las unidades mí­
nimas cargadas de significado convencional, o que contribuyen con­
vencionalmente al significado de unidades mayores, así como la ma­ la
Tal como está implicito en definición básica con la que empe­
nera en la que se combinan para formar palabras (como desencanto o . zamos esta Introducción,' posiblemente la pragmática no se pueda
vecindario); así, hay una distinción básica entre morfemas que pue­ identificar conuna Unidad de análisis específica y por eso no puede
den aparecer como palabras independientes, es decir, los morfemas formar parte de la división de trabajo asociada con los componentes
libres (como canto. avecino); y aquellos que deben combinarse con tradicionales de una teoría lingüística. Los fenómenos lingüísticos
otros para formar palabras, los morfemas ligados (como des-, en­ estudiados desde el punto de vista de su uso se pueden situar a cual­
y-ario). Palabras o «ítemes léxicos» son aquellas unidades de análi­ quier nivel de la estructura o pueden pertenecer a cualquier tipo de
sis que, teniendo significado convencional, ya sea como morfemas relación forma-significado. La pregunta es: ¿Cómo se usan los recur­
libres o como combinación de morfemas, pueden combinarse con sos del lenguaje? Por consiguiente, la pragmática no constituye un
otras en una dimensión sintagmática, colocadas en un orden lineal de componente adicional de illla teoría del lenguaje sino que ofrece una
acuerdo con las reglas específicas de la lengua para formar oraciones. perspectiva diferente. Este libro tendrá que explicar precisamente lo
La sintaxis estudia tales procesos de formación de oraciones. Final­ que esta perspectiva supone.
mente, la semántica explora el significado de unidades lingüísticas, Sin duda hay unidades de la estructura lingüística que se prestan
típicamente a nivel de palabras (semántica léxica) o a nivel de oracio­ más fácilmente a una investigación pragmática que a exploraciones
nes, ya correspondan a proposiciones simples (como El pájaro se co­ orientadas a los recursos. Este es el caso de la mayoría de unidades
mió el gusano) o a estructuras más complejas (como Juan vio al pája­ supraoracionales como textos, conversaciones o el discurso en gene­
ro que se comió al gusano o Juan dice que cree que el pájaro se ral. La razón es que éstos son típicos productos de la pu{!sta en fun­
comió al gusano). . cionamiento de los recursos. Por un lado, implican una expansión de
la misma gama de recursos. Por ejemplo, más allá de los sonidos, pa­
36 Introducción Lingüística del uso del lenguaje 37

labras y oraciones, hay modelos de argumentación, estilos, géneros, agradecido» del cual se derivaría una palabra que significa «agradeci­

etc. Por otro lado, estos últimos ni siquiera pueden ser definidos fuera do» por medio del prefijo 'negativo des-, tiene mucho que ver con un

del contexto de uso. Sin embargo no hay ningún fenómeno lingüísti­ sistema de normas sociales que enfatiza la necesidad de agradeci­

co, a ningún nivel estructural, que la perspectiva pragmática pueda miento, cortesía, legalidad y similares. Las normas y estándares tam­
permitirse ignorar. Ilustremos esto brevemente. . bién pueden tener una naturaleza más conceptual: en inglés, «familia­
Tomemos el nivel de los sonidos del habla. Cuando un antropólo­ rity» [familiaridad) es un estándar conceptual que determina la:
go especializado en lingüística descubre que los n;liembros de una presencia de un par como familiar y unfamilíar, dejando una posibili­
comunidad adaptan el sistema fonológico de su lenguaje según se dad para un equivalente monomorfémico para el polo negativo. del.
comuniquen o no con otros miembros del mismo grupo, esta observa­ conjunto contrastivo,· como strange, pero evitando la creación de un
ción tiene qué ver con un fenómeno del uso y es, por tanto, funda­ par como strange (con el sentido de «raro») versus unstrange (con el
mentalmente pragmática, aunque situada a un nivel estructural que es, sentido de «familiar») --excepto como acto voluntario individual con
inequívocamente, la provincia de la fonología (véase la sección objetivos retóricos específicos. La normativa puede ser tal que la ló­
4.2.1). Ni siquiera es necesario recurrir a datos exóticos para llegar a gica se deje completamente de lado: es necesario que los objetos que
conclusiones similares. La mayoría de los hablantes de lenguas con un pueden ser «abrochados» [fastened) se vean «normalmente)} «abro­
grado' significativo de variación dialectal que han crecido con un dia­ chados» [fastened); de otro modo es dificil explicar por qué unloosen
lecto local, pero que·fueron socializados en el uso de la variedad es­ [desabrochados, sueltos], que ha debido entrar en la lengua inglesa
tándar a través de la;educación formal, se darán cuenta de que el len­ inadvertidamente¡no tiene' el significado de «fastero) sino que es de
guaje que elIose usan Suena bastante diferente según se encuentren en hecho sinónimo de unfasten. Otro 'proceso derivacional que normal­
.) su contexto profesional o hablando con sus padres o parientes. Este mente requiere una explicación pragmática es la formación de dimi­
tipo de variación en el uso no se limita al nivel de los sonidos: puede nutivos (véase Dress1er y Barbaresi, 1994).
incluir también elecciones morfológicas, léxicas e incluso sintácticas. La formación de palabras compuestas es un proceso guiado por
Con respecto al nivel de los morfemas y las palabras, hay restric­ principios pragmáticos y restricciones relacionadas c.on la interpreta­
ciones pragmáticas e implicaciones de aspectos d~ morfología deriva­ bilidad y la disponibilidad de un contexto. Un compuesto como house
ciona1 (el modo en que los morfemas libres, como decir, y morfemas tree [literalmente, árbol de casa] por ejemplo, ocurriria con menos
ligados, como el prefijo in- y el sufijo -lble, pueden combinarse para frecuencia como descripción de «un árbol entre dos casas» que con el
formar la palabra indecible), o compuestos (el proceso de formadón sentido de <<Un árbol cerca o dentro de una casa». La razón es que la
de palabras que amplía el vocabulario creando nuevas palabras como, primera requeriría una cantidad mayor de información contextual es­
cochecama, de las que existen por separado cOche y cama), e incluso pecífica para asegurar una interpretación exitosa. De manera similar,
. . de morfología inflexional (el modo en que la forma de las palabras un compuesto creativo como the apple-juice seat [el asiento del zumo .
cambia de acuerdo con variables gramaticales como tiempo, número, de manzana] requiere un contexto compartido muy específico (con,
género, caso, etc.). . por ejemplo, un asiento delante del cual se ha puesto un vaso de zumo
Consideremos la relación derivacional entre agradecido y des­ de manzana) para ser producido (véase Downing, 1977). Además, la
, agradecido, cortés y descortés, legal e ilegal. La razón por la que esta forma misma de ciertas palabras compuestas más convencionales es a
relación no es a la inversa, con un lexema básico que signifique «des­ menudo el producto de procesos fundamentalmente pragmáticos .
­
.
38 Introducción Lingüistica del uso del lenguaje 39

Cuando dos aviones casi chocan en el aire, el ténnino, en inglés, near dades fisicas del contexto. Sin más infonnación, sabemos que para
miss 1 [casi fallo en chocar] (en el que los dos elementos separada~ que La puerta se abrió sea una descripción· adecuada de un hecho, la
mente refuerzan el hecho de que los aviones no chocaron) se prefiere puerta se debe haber abierto automáticamente o por alguien que esté
mayoritariamente sobre near hit [casi acierto en chocar] (que erifati­ fuera de la visión del hablante. Esto significa que, si ha habido un
zaría las consecuencias nefastas de lo que casi ocurrió). agente humano, éste no puede haber estado en el mismo lado de la
Las elecciones gramaticales de morfemas están también sujetas a puerta que el hablante. Más aún, esta posibilidad es excluida com­
restricciones pragmáticas. Consideremos los cambios recientes en la pletameJ.?te si la puerta es transparente. MucJ:¡.as palabras no pueden ni
conciencia sociopolftica que harI hecho más dificil de interpretar el siquiera ser entendidas a menos que se recurra a aspectos de conoci­
uso genérico del pronombre personal él (refiriéndose a cualquier ser miento del mundo Olamado a veces «conocimiento enciclopédico»),
humano, hombre o mujer) de una marIera neutral respecto a género. un proceso que gradúa la accesibilidad del significado: se puede su­
Volviendo hacia la sintaxis, debe resultar claro que un mismo es­ poner que la mayorla de la gente hoy en día interpreta el término zona
tado de cosas pue<;le ser descrito con estructuras sintácticas muy dife­ de no fumadores sin dificultad; tampoco una zona de topless es dificil
rentes: John rompió la estatuilla, La estatuilla foe rota por John, La de interpretar, aunque requiere conocimiento de áreas de la ciudad
estatuilla fue rota, La estatuilla se rompió. Aunque puedarI parecer con una alta concentración de .establecimientos de entretenimiento
equivalentes a primera vista, estas fonnas de expresión tienen condi­ (predominantemente masculino) cuya principal atracción son arIfi­
ciones de uso muy diferentes. Para señalar sólo un aspecto a modo de trionas o artistas vestidas ligeramente; sin embargo, un artículo de pe­
ilustración, observemos la reducción progresiva del énfasis~nla per­ .. riódico con comadronas mentales [mental m idwives , en inglés]en
sona responsable dela rofuradé la estatuilÍa, que empieza con la ente­ su título, no puede ser entendid~ completamente hasta que se lee el
ra construcción pasiva que todavía· incluye la mención del agente, artículo, que describe pacientes en un hospital psiquiátrico [mental
John, y que tennina con una fónnula que puede sugerir hasta la com­ hospital, en inglés] (otro ténnino que requiere conocimiento institu­
pleta ausencia de (o ignorarIcia acerca de) cualquier responsabilidad. . .cional) ayudarIdo a otras pacientes cUarIdo dan a luz.
Otro aspecto del uso es la evaluación del hablante de si es más rele- . Algunos aspectos del ~ignificado proposicional u oracional rela­
vante para el oyente que se le diga algo sobre John (en cuyo caso es cionados con el uso, que requieren también conocimiento del mundo
más probable que la oración empiece con John) o sobre la estatuilla e infonnación contextual, próducen muchas interpretaciones diferen­
(encuyo caso la posibilidád de que se elija La figurita como sujeto es tes de la misma estructura de predicación de referencia simple, como
mayor). X está en Y, p. ej. El gato está enelfelpudo (que típicamente sugiere
A nivel de sign,ificado de palabras, el campo de la semántica léxi­ una posición horizontal, el gato se sostiene por la gravedad), El cua­
ca, en cllanto una palabra se usa, .hay que tener en cuenta más de 10 dro está en la pared (una posición vertical, el cuadro se sostiene por'
que nonnalmente seria considerado como su «significado de diccio­ algún tipo de fijación artificial como remedio a la gravedad), La mos- .
nario». En una oración simple· como La puerta se abrió, el verbo ca está en el techo (también horizontal, pero en adquiere un signifi­
abrir puede tener diferentes significados, dependiendo de las propie­ cado que deberla ser clasificado como. debajo si no interviniera la
perspectiva del·hablante, y con·las almohadillas de succión sujetando
a la mosca) y La pintura está en el techo (donde en ya no sugiere una
¡ Near miss y near hit son expresiones nominales derivadas de los verbos lo miss
(<<no acertar, fallar, erran» y lo hit (<<golpear, acertan». [Nota de las tt.] distancia existencial entre X e Y, la pintura se ha aplicado directa­
40 Introducción La pragmática y la interdisciplinariedad 41
mente al techo y, por eso, se ha hecho irrelevante la cuestión de cómo comportamiento, y, en este sentido, hay un componente pragmático
se sujeta). El nivel de la oración nos conduce de nuevo al área de las en todas las reglas (1938, 35; cursivas mías).
estructuras sintácticas, en la cual ya se mostró la relevancia de una
perspectiva pragmática. En el momento en que prestamos atención a Más de medio siglo después, no podríamos haber expresado me­
modelos de entonación y prosodia vuelve a presentarse el nivel de los jor esta idea. .
sonid?s del ha?la: Variando la entonación de Aquí .hace frío puede
cambIarse el sIgmficado esperado de la afirmación y convertirse en
u.na pregunta (posiblemente no a interpretar como una pregunta real
0.3 LA PRAGMÁTICA Y LA lNTERDISCIPLlNARIEDAD
s:n? como una expresión de desacuerdo con el contenido de la propo­
sICIón), una queja y (quizás más indirectamente) una solicitUd de en­
cender la calefacción. . Una perspectiva pragmática, como queda descrito e ilustrado de
¿Por qué describimos todos estos fenómenos (y muchos más que manera tentativa anteriormente, es por definición interdisciplinaria; o,
se presentan más adelante) como «pragmáticos»? Ésta es la canse.;, para citar a Morris de nuevó:
cuencia dir:cta de aceptar sin concesiones la definición de pragmática
Con «pragmática» se designa a la ciencia de la relación de los
como estudIO del uso del lenguaje. Tal vez esto puede ser aclarado re­ signos con sus intérpretes [... ] Como la mayoría de signos, si no to­
conociendo el regre§o radical a la amplia definición originalmente dos, tienen organismos vivos como intérpretes, es una caracterización
propuesta por el pa~e fundador de la pragmática; Charles Morris suficientemente exacta de la pragmática decir que tráta de los aspec­
(1938). Morris distIngue entre sintaxis, semántica y pragmática en tos bióticosde la semiosis, esto es, de todos los fenómenos psicológi­
términos de tres correlatos: signos, los objetos a los que son aplica­ . cos, biológicos Y sociológicos que ocurren en el funcionamiento de
bles los signos y los úsuarios e intérpretes de los mismos. La sintaxis los signos (l938~ 30).
estudia la relación de los signos con otros signos; la semántica trata
las relaciones de los signos con los objetos a los que los signos son La pragmática lingüística estudia el uso del lenguaje por las per­
aplicables y la pragmática estudia cualquier relación que exista entre sonas (el uso que las .personas hacen del lenguaje),' una forma de
l~s~ignos y los usuarios o intérpretes (véase también la sección 9.1). comportamiento o acción social. La dimensión que la perspectiva
Sm Identificarlo del modo en que 10 hemos hecho hasta ahora distin­ pragmática pretende iluminar es el enlace entre el lenguaje y la vida
guiendo entre la lingüística de los recursos del lenguaje y la li~güfsti­ humana én general. Por 10 tanto, la pragmática es también el enlace
ca. del uso del lenguaje, el enfoque de Morris implica ya el reconoci­ entre la lingüística y el resto de las humanidades y las ciencias socia­
mIento de una dimensión enteramente diferente sugerida por la les.
pragmática. Obsérvese lo siguiente: . Dicho esto, debemos observar también que la pragmática no se
sitúa solamente fuera del conjunto contrastivo al cual pertenecen la .
Las reglas sintácticas determinan las relaciones del signo e~tre
fonética, la fonología, la morfología, la sintaxis y la sem~tica. Tam­
los signos vehículos; las reglas' semánticas correlacionan· los signos
vehículos con otros objetos; las reglas pragmáticas establecen las
poco cabe en el conjunto de campos interdiscíplinarios como la neu­
condiciones de los intérpretes bajo las cuales el signo vehículo es ~ ro lingüística, la psicolingüistica, la sociolingüística y la antropología
signo. Cualquier regla puesta en uso real opera como un tipo de lingüística. Cada uno de estos campos tiene su propio objeto correla­
42 Introducción Funcionamiento significativo del lenguaje 43

cional en relación al cual se sitúa el lenguaje: simplificando un poco, Recapitulando; ahora podemos ser más específicos y presentar la
la neurolingüistica intenta revelar las bases y los procesos neurofi­ pragmática como una perspectiva general cognitiva, social y cultu­
siológicos del hablar y el escuchar (y cualquier cosa que pueda ir mal ral de los fenómenos lingüísticos en relación con su uso en fonnas de
en este ámbito); la psicolingüística estudia las relaciones entre el comportamiento (donde la serie «cognitivo, social y cultural» no su­
. ienguaje y la mente en general (una tarea a la que se dedican también giere la separabilidad de los referentes de los términos). Así, la pre­
ciertas ramas de la lingüística cognitiva); la sociolingüística se preo­ gunta sobre cómo se usan los recursos del lel1guaje se replantea a sí
cupa del modo en que las relaciones sociales, el estatus, los modelos misma en: ¿Cómo funciona el lenguaje en la vida de los seres huma­
y redes interactúan con la estructura y el uso del lenguaje, y la antro­ nos?
pologí~ lingüística estudia la relacióh entre lenguaje(s) y cultura(s).
Del mlsmo modo que fue imposible asignar una unidad básica de
análisis a la pragmática, también'es imposible asignarle un objeto co­ . 0.4 FUNCIONAMIENTO SIGNIFICATIVO DEL LENGUAJE
rrelacional específico. La pragmática se ocupa de toda la complejidad.
del comportamiento lingüístico. Desde esta perspectiva, no hay forma
de abordar, por ejemplo, temas de cognición sin considerar la socie­ Independientemente de lo que se pueda decir. sobre el funciona­

dad y la cultura, ni existe un modo de tratar temas culturales al mar­ miento del lenguaje, no hay duda de que es fundamentalmente «signi­

gen de sus bases e implicaciones cognitivas. Cuando se observa el ficativo». El lenguaje es el instrumento más importante en los inten­

~abaJ~ re~1izado bajo las etiquetas interdisciplinarias, la práctica de tos de construir significado en un mundo .que.no tiene significado en

mv~s:lgaclón actu~l. muestra sin duda un importante grado de super­ .,'sí. mismo. Esta elevada afirmación no sólo se refiere al nivel de una
poslClón tanto tematlca como metodológica. Del mismo modo, muchos búsqueda filosófica de sentido en la vida. Muchos ejemplos de este
de 'los aspectos que vamos a presentar en este libro como pragmática libro mostrarán que la· generación de significado es un hecho cotidia­
cabrían fácilmente bajo una o más de las etiquetas interdisciplinarias: no de bajo nivel que se encuentra en cualquier lugar donde se use el
No hay ninguna razón para ver esto como un problema. Muchas for­ lenguaje. Por esta razón la elección (individual) entre John rompió la O
mas de investig~ción requieren claras restricciones autoimpuestas pa­ estatuilla y La estatuilla se rompió no está libre de consecuencias, ni
ra forzar los límltes de nuestro entendimiento. La principal función de '10 es la elección (convencionalizada) entre near miss y near hit en in­
la pragmática lingüística en el paisaje académico de las ciencias rela­ glés. " , .

cionadas con el lenguaje podría ser, entonces, asegurarse de que hay Antes de continuar, se necesita una nota sobre la terrrÍÍilofogía. En
un p,unto de convergencia para las diversas tareas interdisciplinarias, lugar del término más comúnmente usado «construcción de significa- ()
una lmagen global ,contra la cual se puede medir la relevancia total de do» (o su equivalente verbal «construir significado»), este libro se va
esfuerzos más específicos y desde la cual surgirá la necesidad de' lí­ a referir al funcionamiento significativo del lenguaje en general como
neas específicas de investigación. Al mismo tiempo, la pragmática generación de significado. En contraste con «construcción» y «cons­
pued~ funcionar de una manera bastante efectiva como la bisagra que tructo», el ténnino «generación» y el verbo «generar» no se' con­
conecta lo que hemos llamado la lingüística de .los recursos con los centran necesariamente én la participación activa (y. por extensión
campos interdisciplinarios mencionados aquí. predominantemente consciente) del productor del lenguaje. Por el
potencial de ser usado de manera intransitiva (como en Bajo las, cir­
44 Introducción Funcionamiento significativo del lenguaje 45
cunstancias correctas la electricidad se genera espontáneamente), ción dinámica que debe ser para ayudamos a comprender 10 que pasa
«generan> (y por consiguiente la nominalización «generación») tiene en el uso del lenguaje. Con frecuencia, tratamientos de la pragmática
en cuenta la contribución activa de los usuarios del lenguaje a los como el estudio del significado en contexto, aunque tienen en cuenta
procesos en discusión y una activación más espontánea más allá del la variabilidad de los significados de las formas lingüísticas, simple­
control directo de la intencionalidad de un usuario del lenguaje. Dado mente añaden el contexto como otro parámetro de estabilidad a dife­
que esto es un matiz importante será discutido más adelante (espe­ rente nivel.
cialmente en la sección 1.3 y el Capítulo 6). Cuando sea necesario un Habiendo introducido la noción de «funcionamiento», se necesi­
I·E) enfoque. selectivo distinguiremos entre construcción de significado tan unas palabras sobre el tipo de funcionalismo implicado. Lo que no
C3 (o «construir significado», enfatizando agentividad) y emergencia de se quiere decir es el funcionalismo del sistema que ya se puede en­
~ign~ficado (o «significado emergente», enfatizando procesos que contrar en el estructuralismo lingüístico tradicional y que es a veces
lmplIcan un menor grado o un tipo menos saliente de agentividad o bastante mecánico. Las premisas del estructuralismo incluyen la vi­
conciencia), ~o~o diferentes aspectos de generació~ de significado sión del lenguaje como un sistema autónomo en el cual todos los
(o «generar slglllficado»). . . elementos están relacionados funcionalmente el uno con el otro y de­
En la."~ección 0.2, anteriormente en este capítulo, nos hemos refe­
1'.
\
rivan su significación enteramente de las relaciones funcionales con
rido repetidamente al significado en relación con el contexto. Una de otros elementos. Así los fonemas IfI y Ivl forman un contraste funcio­
las más ~adicionales delimitaciones de la pragmática, quizás la más nal en inglés, distinguiendo palabras tales como few y'-c view. Y mien­
ampliamente aceptada, consiste en contrastarla directamente con la tras Ipl, Ibl y IfI sontodos funcionales en inglés (como en pin, bin y
semántica;diciendo que ésta última se ocupa del significado indepen­ fin), algunas lenguas pueden permitir variación libre entre Ipl y Ibl o
(' dientemerí:te del contexto, mientras la primera investiga el significado entre Ibl y Ifl, mientras otras lenguas como el quechua multiplican el
en contexto. El «funcionamiento significativo» del lenguaje concebido número de contrastes funcionales distinguiendo entre Ipl, Iphl y Ip'l.
por nuestro enfoque de la pragmática, sin embargo, no está restringi­ Este tipo de funcionalismo se caracteriza por una contradicción inter­
do al «significado en contexto» que puede simplemente ser añadido a na: el principio elemental que parece operar dentro d~l sistema de la
j otro nivel de significado estudiado por la semántica. Imaginemos te­ lengua no se aplica al lenguaje como fenómeno entre otros fenóme­
ner que sep~ar el significado no contextual del significado contextual . nos, ya que se ve como autónomo. La pragmática, por otro lado, en­
e de Estoy cansado. En primer lugar, esto es virtualmente imposible. fatiza la relación funcional del lenguaje con otras facetas de la vida
Más aún, incluso intentarlo violaría el punto de vista de la pragmática humana. Sin reconocer el significado completo de esto, el funciona­
como perspectiva y lavolveria a introducir en el conjunto contrastivo lismo estructuralista permanece frecuentemente mecánico y tiene en
de los componentes tradicionales de una teoría lingüística. Sin em­ cuenta (restringidos aspectos del) significado s610 lateralmente, mien­
bargo, 10 más importante es que tal postura ignoraría el hecho de que tras que la pragmática le da un papel central -aunque deberíamos ser
. la pragmática se ocupa de un tipo de «significado» diferente, el cual, cuidadosos y no atribuir una actitud idéntica a todos los estructura­
como se ilustró, nos permite por ejemplo incluso hablar de la «signi­ listas.
ficación» de las elecciones entre sistemas fonológicos. El significado Este libro va a evitar también un funcionalismo orientado a identi­
en contexto, sin duda, pertenece a ese tipo de significado, pero no 10 ficar las funciones del lenguaje vistas como enlaces entre sistemas
agota. Tampoco necesariamente convierte al «significado» en la no- formales y su uso. Sin ignorar la necesidad de explicaciones generali­
fA
••
46
Introducción
zables (conw se ilustra, por ejemplo, en 7.1) la pragmática se debe
centrar directamente en el funcionamiento del lenguaje en contextos
de uso reales.
Resumen y lecturas recomendadas
~~~~~~---------------­
47
.

€i}
0.6 RESUMEN Y LECTURAS RECOMENDADAS G

0.5 ¿UNA TAREA INFINITA? Hemos distinguido entre: ~


• La lingüística de los recursos del lenguaje, que consiste en los a
Las tareas de la pragmática, q~e surgen de la orientación y la de­ tradicionales componentes de una teoría lingüística (fonética, O·
limitación resumidas hasta ahora, abarcan" sin duda, un amplio es­ fonología, morfología, sintaxis y semántica), cada uno de los o
pectro. Los miedos a la expansión incontrolada más allá de los límites
de laque podríamos llamar «lingüística» no están por tanto entera­
cuales tiene su propia unidad de análisis.
• Campos de investigación interdisciplinarios (como la neurolí~­
o
mente injustificados. Sin embargo, como será ilustrado a 10 largo de güística, la psicolingüística, la sociolingüística, la antropo~ogla
las exploraciones siguientes, generalmente no es demasiado dificil lingüística) cada uno de los cuales tiene su objeto correlaclOnal o
encontrar un punto de límite. Por ejemplo, es perfectamente legítimo
para un análisis pragmático relacionar mi enunciado John tiene pelo
,extra-lingüístico, O
o
rojo con su asociación típicamente esperada con mi creencia de que
John tiene pelo rojo (a menos que esta interpretación sea impedida
por conocidas condiciones específicas delenuncia,do). No obstante,
En contraste con éstos, la pragmática se ha presentado:
• Como la lingüística del uso del lenguaje. •.,
no correspondería alas pragmatistas probar mis razones para creer
que John tiene pelo rojo, a menos que fuera necesario para un enten­
dimiento de otros aspectos del discurso én el que está mi enunciado.
• Como carente de unidad(es) de análisis propia(s) y objeto(s) co­
rrelacional(es), ' ,
• Como constituyente de una perspectiva general funcional (cog­
•.,•
nitiv~; social y cultural) del lenguaje,
Además, la sugerencia de que la pragmática es una perspectiva,
«la lingüística del uso del lenguaje» en su sentido más gener'al, debe
• Con un tema de investigación que es el funcionamiénto signifi- ,
cativo del lenguaje en uso real, como una forma compleja de
o
ser tomada literalmente. Como perspectiva es completamente efectiva
comportamiento que genera significado". .
e
y, tal como este libro va a tratar de demostrar, es factible su descrip­ ()
• y sirviendo, dentro del ámbito de las CienCIas relaclOnada~ con
ción. Para la práctica de «hacer pragmática», sin embargo, es bastante
aceptable y a menudo necesario seleccionar focos de investigación
el lenguaje, como punto de convergencia para los campos lllter- l>
disciplinarios de investigación y como bisagra entre és~os y los Q
que justifiquen sus 'propias fronteras temáticas y metodológicas -sin
perder de vista, claro, el marco de referencia más amplio--. componentes de la lingüística de los recursos del lenguaJe. ti
:1
, Es particularmente importante recordar qu~ significa~o, como
rasgo deflnitorio de 10 que preocupa a la pragmatlca. no es VIsto como
un contrapunto estable de la forma lingüística sino que. es generado
••
dinámicamente en el proceso de usar el lenguaje.
48 Introducción Presentación preliminar 49
Aunque la perspectiva esbozada en esta introducción no está ela­ complejidad completa de su funcionamiento cognitivo, social y cu1tu- '
borada en ninguna otra parte de la literatura pragmática, se encontra­ ralo Con este fm, el Capítulo 1, «El lenguaje y uso del lenguaje», revi­
rán muchas discusiones sobre la definición del campo, cuya lectura sará una amplia gama de fenómenos estudiados anteriormente bajo la
cuidadosa puede hacer más fácil de entender la posición presente. En denominación de pragmática, explicando por qué su interrelación y el
particular, son útiles los capítulos introductorios a Levinson (1983) y . restringido tratamiento que han recibido hasta ahora' conduce casi ne­
Davis.(1991). Para una extensa discusión de por qué no se considera cesariamente a la perspectiva más global que estamos adoptando. El
defendible la visión de la «pragmática como componente», véase Capítulo 2, «Nociones clave», volverá a la pregunta «¿Qué hace la
Verschueren (1985b). Formulaciones tempranas que se acercan a lo gente clJando usa el lenguaje?» o «¿Qué es usar el lenguaje?» para
que nosotros llamamos «pragmática como perspectiva» se encuentran introducir las observaciones primarias sobre las que tiene que cons­
en Weiser (1974) y Haberland y Me'}' (1977), como¡se mostrará más'. truirse una teoría pragmática. Se sugerirá que el uso de11enguaje con­
adelante (en el Capítulo 9). Para un anterior intento de aproximarse al sisteen hacer elecciones lingüísticas continuamente (tanto al hablar
uso del lenguaje en términos de generación de significado (o, en sus como al interpretar) y que este «hacer elecciones» puede ser entendi­
.,) términos, construcción de significado) véase Grunig y Grunig (1985). do en términos ~e tres nociones relacionadas jerárquicamente: «va­
Fuera de la literatu~pragmática tradicional (véase Coulter, 1991, y riabilidad», la propiedad del lenguaje que determina la gama de las
Lee, 1991) se pueden encontrar interesantes discusiones que apuntan elecciones posibles; «negociabilidad», que implica que las elecciones
/JJ¡ a 'la inseparabilídad de 10 cognitivo, 10 social y 10 cultural -todo 10 no son mecánicas sino guiadas por principios flexibles y estrategias; y
cual se d~be combinar en una perspectiva pragmática-o ' ' «adaptabilidad», la propiedad del lenguaje que capacita a los seres
humanos para hacer elecciones negociables desdé una gama variable
de posibilidades de tal manera que se satisfagan las necesidades co­
0.7 PRESENTAcrÓN PRELIMINAR municativas. Se mostrará que estas nociones son. y han sido funda­
rnenta1es, implícita si no expfícitamente, para un entendimiento de los
fenó¡¿nenos presentados en el Capítulo 1.
Este libro tendrá que demostrar que la amplia visión de la prag­ La Parte n, «Aspectos del funcionamiento significativo del len­
mática que se adopta no conduce en absoluto a la vaguedad, una pro­ guaje», ofrecerá los pilfll'es de construcción para un entendimiento de
piedad que se le atribuye a menudo a la pragmática, sino que nos ca­ la pragmática como un campo coherente' de investigación. Usando la
pacita a aproximarnos a diferentes aspectos del uso del lenguaje de . «adaptabilidad» como el punto de partidá, sedemostrilrá que se pue­
una manera bastante coherente. Va a dejarse atrás radicalmente la vi­ den distinguir cuatro aspectos del funcionamiento significativo del
sión de la pragmática como «papelera», popular en otro tiempo (Bar- lenguaje que cualquier teoría, descripción o explicación pragmática
Hillel, 1971), que asignaba a la pragmática la tarea de tratar con 10 tiene que tener en cuenta. Se dedicará un capítulo a cada uno de ellos ..
que ni la sintaxis ni la semántica pudieran tratar.
El Capítulo 3, «Contexto», identificará correlatos contextuales de la
El libro se organiza en tres partes y nueve capítulos. La Parte 1, adaptabilidad, incluyendo todos los ingredientes de un escenario
.... «La perspectiva pragmática», explica la idea de la pragmática como comunicativo al que tienen que poder adaptarse las elecciones comu­
una perspectiva funcional general (de cualquier aspecto) del lenguaje, nicativas. Se dará un amplio abanico de ejemplos de los tipos de ele­
es decir, como una aproximación al lenguaje que tiene en cuenta la mentos contextuales que restringen el uso del lenguaje. Se argumen­
50 Introducción Presentación preliminar 51

tará que, a pesar de la aparente falta de límite de la gama de fenóme;' pragmáticas», discutirá algunos ejemplos que han de situarse en el
nos potencialmente relevantes, «contexto» no es una noción vaga ya micro-nivel de' comunicación cara a cara o al nivel de «detalles» lin­
que los contextos son generados (como elecciones hechas entre un güísticos. El Capítulo 8, «Cuestiones macropragmáticas», explorará
. abanico infmito de posibilidades, para casos específicos de uso del procesos comunicativos sociales más amplios. En segundo lugar, el
lenguaje) y este proceso de generación puede rastrearse lingüística­ Capítulo 9, «El panorama de la pragmática», señalará tendencias ac­
mente. El Capítulo 4, «Estructura»; sitúa .el funcionamiento significa- . tuales y conexiones históricas. Este capítulo final está básicamente
tivo del lenguaje en relación con los diferentes estratos de adaptabili­ concebido como una guía para estudio posterior. Tratará algunas
dad. Como se hacen elecciones lingüísticas en todos los niveles­ «teorías» actuales de pragmática y hará un enlace explicito con algu­
posibles de la estructura que implican variabilidad de cualquier tipo, nas tradiciones «formativas», con la idea principal de que 1apragmá­
los procesos pragmáticos se pueden relacionar con cualquier nivel de tica, ciertamente, no apareció del vacío.
la estructura, desde un rasgo de sonido y un fonema hasta el dis­
curso, o con cua,lquier tipo de re ladón entre los niveles. En este
capítulo se revisarán una amplia gama de temas favoritos de la
pragmática --complementando los que ya se introdujeron en el Ca­
pítulo 1-, En el Capítulo 5, «Dinámica», se dará cuenta de los pro-.
cesas reales de hacer elecciones, teniendo en cuenta la negociabilidad
fundamental que acarrean. Se _mostrará cómo se usan los principios de
comunicación y las estrategias en las elecciones y negociaciones
de elecciones en la producción y en la interp~etación, El capítulo 6,
«Saliencia», considera el hecho de que no todas las elecciones se ha­
cen con la misma conciencia e intención, que algunas son automáticas
mientras que otras son altamente motivadas. Este capítulo se ocupa de
las diferentes maneras de procesar en el medio de adaptabilidad, la
«mente en sociedad» humana. Con referencia a este tema cuando
la distinción entre significado explícitamente comunicado e informa­
ción implícita adquirirá relevancia especial.
La Parte III, «Temas y tendencias», tiene dos objetivos. En primer
lugar, los Capítulos 7 y 8 tienen la intención de explicar, con referen­
cia a dos tipos' de cuestiones de investigación específicas, cómo los
aspectos descritos del funcionamiento significativo del lenguaje pue­
den ser manejados en la' práctica. Mientras que la Parte 1 y la Parte II
son.tnás teóricas, los dos primeros capítulos de la Parte III serán más
metodológicos, abordando también el tema de lo que cuenta como
datos probatorios en pragmática. El Capítulo 7, «Cuestiones micro-
Temas comunes en pragmática 57
5. Debby: Puede que haga eso el próximo sábado.
1 might do that next Saturday.
6. Jane: ¿Qué quieres decir cuando dices quizás no sea la
ciudad italiana más interesante?
What do you mean when you say perhaps not the
most interesting ofltalian towns?
7. Jack: Quiere decir ciertamente no la más interesante...
He means certainly not the most interesting...
8. Dan: Sólo intentando ser educado ...
1 Just trying to be polite ....
EL LENGUAJE Y EL USO DEL 'LENGUAffi (2) 1996 será un año de prosperidad YPa7i.

En relación con estos fragmentos de discurso totalmente corrien­


Nuestra primera tarea es establecer un enlace claro con las pre­ tes, que representan tipos que encontramos diariamente con frecuen­
guntas de investigación y tradiciones que son comúnmente asociadas cia, se señalan algunos de los temas que la pragmática ha explorado
con l~ etiqueta de «pragmática». Con este objetivo, empezamos con tradicionalmente (sección 1.1). Se preguntará entonc~s si estos «te­
dos ejemplos de uso real del lenguaje. El primero es un extracto de mas comunes» pueden ser cuidadosamente separados, como parecerla
una c?nversacióndu~~nte una cena en el Centro de Conferencias y a primera vista, y se sugiere que simplemente tienen tanto· en común
EstudlO de la FundaclOn Rockefeller en Bellagio, Italia (los nombres que hay buenas razones para dejar de usarlos como puntos focales in­
de los interlocutores se han cambiado; como en ejemplos posteriores . dividuales para la organización de un libro sobre pragmática (sección
las negritas indican sílabas acentuadas [en la versión inglesa]. El se~ 1.2). Se hará un enlace más explícito con la literatura especializada al
gundo es el enunciado que abre la introducción editorial a El mundo tratarse uno de los puntos más controvertidos, la cuestión de la <dn­
en 1996, publicado por The Economist a fInales de 1995 en una serie tencionalidad», que cualquier teorla de la pragmática tendrá que con-o
de publicaciones anuales del mismo tipo. siderar (sección 1.3). Al final de este prim~r capítulo hay algunas pa­
labras introductorias sobre las diversas categorías del uso del lenguaje
(1) 1. Debby: ¿Habéisido hoya álgún sitio?

que conform~n el coinportamiento lingüístico (sección 1.4).


Go anywhere today?

2. Dan: Si, bajamos a Como. Subimos en autobús y volvi- .

mas en acuaplano.

. Yes, we went down to Como. Up by bus, and back


1.1 TEMAS COMUNES EN PRAGMÁTICA
by hydrofoil. . .

3. Debby: ¿Algo que ver ahí?

Anything to see there?


1.1.1 Deíxis
.. .1
4. Dan: Quizás no sea la ciudad italiana' más interesante

. . ,~
pero el viaje vale la pena.
Los enunciados se relacionan con un mundo real, o 10 que se per­
.'
Perhaps not the most interesting of Italian towns,
cibecomo tal, de al menos dos maneras diferentes. La relación puede
b~t it's worth the trip.
ser descriptiva, como cuando en autobús, catedral y seda en (1), o
58 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmática 59

prosperidad y paz en (2) se refieren a aspectos de la realidad en las cimiento contextual, (1)1. podría ser también una pregunta sobre ,acti­
áreas del transporte, la religión, artículos de consumo, condiciones vidades planeadas para una parte futura del día (aunque en ese caso la
sociales o interacción grupal. Este tipo de referencia se ha dejado forma elíptica más posible hubiera sido Going... , abreviación de Are
riormalmente en la provincia de la semántica..Se' ha insinuado pre­ you going... (¿ Vas a ir... ) , dado que Will you go ... (¿Irás ... ) es una
viamente (en la sección 0.2) y se demostrará más adelante (en la sec­ forma menos común para pn;guntar sobre planes futuros inmediatos).
ción 4.2.4) que la pragmática tiene también cosas interesantes que de­ De igual modo, aunque 1996 en (2) es una expresión muy convencio­
cir en esta área. Sin embargo, un segundo tipo de relación que ha sido nalizada para referirse a un período de tiempo específico, y aunque al
tratado bajo la etiqueta de pragmática durante muchos años, tiene que estar con una referencia al tiempo futuro en será indica que el centro
ver con el posicionamiento de un enunciado en una realidad que 10 deíctico debe ser antes de 1996 o relativamente pronto en ese año,
rodea (y sobre la cual puede tratar). Uno de los primeros fenómenos una selección de alguna de estas dos posibles interpretaciones no'
que las consideraciones científicas del uso del lenguaje no podían puede hacerse con certeza hasta que sabemos que el texto del que se
ignorar era este «anclaje» del lenguaje en el mundo real, que se con­ extrajo la oración fue publicado a [males de 1995. Las expresiones
sigue «señalando» las variábles a 16 largo de alguna de estas di­ deicticas no pueden interpretarse literalmente. Por esta razón, no hay
mensiones. Este fenómeno se llama deíxis, y los «señaladores» son una conexión automática ni mecánica entre las elecciones de tiempo y
expresiones deícticas o indicadores. Hay esencialmente cuatro di­ los anclajes de puntos temporales: el presente simple en quieres y di­
mensiones: tiempo, espacio, sociedad (en particular los interlocutores) ces en (1)6., y en quiere decir en (1)7., se refiere a una acción pasa.da,
y discurso (la a.ctividad lingüística en .transcurso). aunque un pasado muy reciente, si bien es cierto que es una acción
Los marcadores de deíxis temporal incluyen hoy en (1)1., el con implicaciones más amplias de «significado»; 10 mismo podría de-o "
tiempo pretérito de subimos en (1)2.; el próximo sábado en (1)5., cirse de intentando en (1 )8." aunque se puede interpretar como un im­
1996 Y el tiempo futuro de será en (2). Nótese que las variables a 10 perfecto progresivo elíptico o un presente progresivo elíptico. Sin un
largo de la dimensión temporal -yen cualquier otra dimensión, co­ cierto grado de flexibilidad iriterpretativa y libertad de elección en la, ,~:)
mo se clarificará pronto- no tienen valores absolutos. Incluso para producción de los enunciados, la comunicación cesaría ya en este ni- v:-:-,.:'1
determinar el centro deíctico, el punto de referencia desde el cual se ve1 elemental. \d ..
observa la dimensión (típicamente ahora cuando se trata de tiempo), La deíxis espacial se marca con habéis ido y algún sitio en (1)1., {W
se necesita información sobre el contexto deíctico. De esta manera el bajamos a, Como, subimos y volvimos en (1)2., y ahí en (1)3. El dis- '¿5jJ
significado de hoy en (1) 1., que podría parecer muy poco ambiguo curso mismo no indica el centro deíctico, el Centro de Conferencias y
(hoyes al menos bastante «próximo» en comparación con el más Estudio de Bellagio, que sólo es accesible a través del conocimiento ()
«distante» próximo sábado en (1)5.), no puede ser entendido de ma­ del contexto del mundo real. Pero se supone obviamente un aquí no ;,J
nera .precisa sin conocimiento sobre el tiempo del habla. En primer ambiguo contextualmente. La elección del verbo ir (en Oposición a
lugar, uno debería saber la fecha para dar sustancia temporal com­ venir) indica un movimiento que se aleja del punto espacial de refe­
pleta a hoy. Aparte de esto, es importante saber que la conversación rencia, normalmente situado ya sea con el hablante(s) (como en esta ..,
tuvo lugar a la hora de la cena y, por tanto, es razonable suponer que conversación) ya con la gente a la que se refiere el discurso. Por Con­
hoy se refiere a un período de tiempo que ya ha pasado y que la frase siguiente, es obvio que Como no puede ser el lugar donde está tenien­
elíptica en inglés se puede completar con Did you go... Sin el cono- do lugar la conversaCión, 10 que es puesto de relieve más adelanfecon
:-'-':~

'~~i;~ 60 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmática 61


----------------------------~~~--------~~~
el marcador deíctica «distante» ahí en (1)3., que es correferencial con subyacen a la distinción básica tripartita entre primera persona, el
Como. La relatividad de las expresiones deícticas espaciales está clara centro deíctica a 10 largo de la dimensión social, segunda persona o
en (1 )2. La elección de bajamos a en bajamos a Como puede ser destinatario, y tercera persona u «otros». Los tres se activan en (1): un .
principalmente motivada por la orientación geográfica que tradicio­ omitido vosotros/ustedes en (1)1., nosotros en (1)2., yo en (1)5., tú
nalmente sitúa lugares al sur más abajo en el mapa que lugares al dos veces en (1 )6., y él en (1)7. De nuevo, el uso de tales formas no
norte; Como está de hecho situado al sur de Bellagio. Otro parámetro está libre de complejidades. Esta conversación tiene lugar entre las
que puede estar relacionado es la situación del Centro de Conferen­ mismas cuatro personas, una persona habla en cada tumo y las otras
cias y Est:udio de Bellagio en la cima ,de una colina, mientras que tres forman la audiencia. Sin embargo, un pequeño cambio en la
Como está situado a nivel del lago Como. Tales parámetros pueden perspectiva deíctica puede convertir a la misma persona, Dan, en una
combinarse e interferir entre ellos de varias maneras, o su pertinencia segunda persona tú en (1 )6., y en una tercera persona. «intrusa» él en
puede ser cancelada por completo (porque, después de todo, estamos (1)7., donde Dan es todavía obviamente una de las personas a las que
tratando aquí con formas de expresión convencionalizadas que man­ se dirige la palabra. Para entender el uso de nosotros en (1 )2. es útil
, tienen sólo una conexión elemental con sus orígenes espaciales). Por saber que Dan y Jane son marido y mujer, que viajan juntos (un he­
eso no es predecible si bajar a se usaría si Como estuviera situado al cho que hace (1)6. más desafiante para Dan que si cualquier otra per­
(;) norte. del centro deíctica pero más bajo, o al sur y más alto; proba­ sana hubiera preguntado 10 mismo, y que no se infiere simplemente
blemente, sin embargo, no se usaría si estuviera al norte y más alto. por (1)6.). En general, nosotros es un deíctica con una gama bastante
"·0 Curiosamente, bajar_oY subir se refieren exactamente a la misma di­ amplia de usos. En (1)2~es un nosotros «exclusivo» porque' excluye
rección en (1)2. Nadá'-cambiaría en el significado de la oración si se al destinatario directo cuya pregunta se está respondiendo. En una
sustituyera subir por bajar. La razón por la que subir puede aparecer oración como Deberíamos ir a Como algún día, enunciada como su­
sin contradicción es que hay un cambio en la perspectiva deíctica. gerencia, el destinatario se incluye en el campo de nosotros, por 10 cual
Mientras el centro deíctica sigue siendo el mismo, bajar a estaba se 10 puede llamar un nosotros «inclusivo». Nosotros puede ser también
principalmente motivado por propiedades espaciales más o menos un sustituto «ceremonial» para yo, como en muchos escritos académicos
«objetivas» (y se deja el trabajo relacional a ir); subir, en cambio, ha­ (tal como Julio César, forzando un poco las cosas, se las ingenió para' re­
ce de polo estándar (aunque no irremplazable) de un conjunto con­ servar él para describir sus propias proezas). y nosotros puede incluso
~~) trastivo «relacionál» que significa «alejado del centro deíctica» en reemplazar a tú como en el ¿Cómo nos encontramos hoy? de un médico.
contraste con volver. En el ejemplo (2) la ausencia de deícticos espa­ En el ejemplo (2), no se dispone de ninguna deíxis de persona a un nivel
(:~j
' •.7 ciales específicos indica que el estado de las cosas descrito se ve co­ explícito, 10 que no e~ raro en la comunicación escrita.
mo bastante general, la situación está «en todas partes». Esta inter­ También en el ámbito de la deíxis social, y a veces incluyendo
pretación se apoya contextualmente por el título de la publicación de elección de pronombres, está el fenómeno llamado deíxis actitudinal: .
la cual se tomó la oración, El mundo en 1996. .. (normalmente llamado «deíxis social» en oposición a «deíxis de per­
' .. j
La deíxis social ancla el lenguaje en su contexto de uso interác­ sona»): el uso de expresiones deícticas que señala aspectos de estatus
cional inmediato. En su nivel más elemental, este proceso incluye 10 social y/o formas de respeto, basadas o no en estatus «objetivos».
:.;.) que se denomina normalmente deíxis de persona. La comunicación Ejemplos típicos son las elecciones posibles en muchas lenguas entre
ó) cara a cara involucra a un número de actores sociales cuyos roles segundas personas, formas de tratamiento formal e informal, como tu

.' ..
. . j
62 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmática 63

versus vous en francés, du versus Sie en alemán, Jij versus U en ho­ :referencial» o «reflexivo», como cuando la expresión en este libro se
landés, tú versus usted en español. También se incluyen bajo esta eti­ usa en este libro, o cuando yo digo Sonaba así mientras imito la voz
queta los elaborados sistemas de «honorificos» o expresiones posibles de la persona de la que hablo. Cuando anuncio que voy a contar una
en numerosas lenguas que indican mayor estatus (no sólo pronombres historia diciendo Me gustaría contar esta historia sobre... se encuen­
sino también expresiones vocativas, titulas de tratamiento y similares). tra un tip~ «proyectivo» de deoos discursiva. Además proyec~ión y
autorreferencia se combinan en Este libro explicará... (Este tipo de
fenómeno será tratado con detalle posteriormente, en las secciones
3.3.2 y 6.4.1, cuando hablemos del tema de la cohesión contextual y
los indicadores de conciencia metapragmática, respectivamente).

1.1.2 Actos de habla


'Cuando Debby dice ¿Habéis ido a algún sitio hoy? (en (1)1.) ella
hace algo. Lo que ella hace se llama «hacer una pregunta». El interés
en este tipo de acto, que corresponde estructuralmente a una oración y
se llama acto de habla, ha sido uno de los ingredientes básicos de la
pragmática durante mucho tiempo. El filósofo John Austin introduj.o· ,.
este concepto. En su propia búsqueda-de formas de tratar el lenguaJe­
como forma de acción (en reacción al positivismo lógico, que no acep­
Ilustración 1.1 (De: Goscinny y Uderzo, 1973, Aslérix y la residencia de los dioses,

Londres, Hodder Dargaud, 5)


taba el significado fuera del ámbito de lo que podía ser probado por
su verdad o falsedad), distinguió primero entre enunciados «constata­
[-¿De quién está hablando? -De él mismo. Siempre habla de sí mismo en
tivos» y «performativos». En esta dicotomía, «constatativos», como
tercera persona./-Es genial. -¿Quién? -Eh... Usted. -¡Oh,él!]
bajamos a Como en(1)2., son enunciados en los cuales se dice algo
que puede ser evaluado en la dimensión de su valor de ~er?ad. Por
Finalmente, una vez producido, el discurso mismo también pro­
otro lado, los performativos son enunciados como ¿Habezs zdo a al­
porciona una dimensión para anclar .los enunciados. Hablamos de
gún sitio hóy? en (1)1. Ca, para tomar otros ejemplos, Prometo ir ti·- q®
defxis discursiva cuando una forma de expresión señala al discurso
Como o Bautizo este barco Lago di Como), en los cuales se hace algo
anterior, simultáneo o posterior. Así ah! en (1 )3. retrocede a Como en
de lo que no se puede decir que sea cierto o falso sino que se puede
(1)2., eso en (1)5. refiere al bajár.a Como dicho en (1)2., y quieres
evaluar en una dimensión de «condiciones de satisfacción o felici­
decir... dices en (1)6., quiere decir (1)7., e intentando ser educado en .••••1\ •

dad» [felicity conditions]. De tal forma ¿Habéis ido a algún sitio ~;;J
(1 )8. todos se refieren al enunciado hecho en· (1)4. Un caso algo espe­
hoy? no es satisfactorio como pregunta a menos que Debby esté inte­
cial es ahí en (1)3. porque además de ser un deíctica discursivo es
resada en la respuesta de Dan; Prometo ir a Como no es satisfactorio
también anafórico pUesto que muestra «correferencia» con Como en
a menos que yo tenga la intención de ir a Como y me comprometa a
(1)2.: las dos expresiones se refieren a la misma realidad fuera del
hacerlo; Bautizo este barco Lago di Como requiere que yo estéauto­
discurso. La deíxis discursiva puede ser también de un tipo «auto-
64 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmática 65

rizado para llevar a cabo la cristianizaci6n de este barco. Sin embar­ • Condición de contenido proposicional: especificaci6n de un fu­
go, Austin se dio cuenta pronto 'de que estas distinciones tan cuidado­ turo estado de cosas.
sas son problemáticas. Si la memoria a corto plazo de Dan está dañada • Condici6n preparatoria: el hablante/escritor tiene la información
y no recuerda realmente lo que ha hecho a lo largo del día, habría algo adecuada para formar una opinión <<válida» sobre el futuro esta­
':) do de cosas. '
insatisfactorío sobre bajamos a Como, incluso si estuviera en lo cierto
por c'asualidad. Igualmente problemáticos son los ejemplos como (2), • Condición de sinceridad: el hablante/escritor cree que el futuro
en que 1996 será un año de prosperidad y paz tiene la estructura de estádo de cosas será de hecho como el descrito.
simple constatativo pero donde no se puede realizar hasta un año más' • Condición esencial: el enunciado cuenta como un acto que com­
tarde una evaluación d,e v~rdad o falsedad, y donde las condiciones de promete al hablante/escritor a la probabilidad de que el futuro
felicidad exigirían al autor estar en la posición de saber 10 suficiente estado de. cosas será como el descrito.
sobre el mundo para hacer algún tipo de predicción con autoridad.
La conclusión ,de Austin era simple: todos los enunciados contie­ Para que (1)3., ¿Hay algo que ver ahí?, sea una pregunta «satis­
nen elementos constatativos y performativos; todos son dichos y factoria», se debe dar lo siguiente:
hechos al pUsmo tietnpo. Para recoger las implicaciones de esta intui­ • Condición de contenido proposicional: ninguna..
ción, sustftuy{) la terininología constatativo-performativo por una dis­ • Condici6n preparatoria: Debby tiene razones para creer que Dan
tinci6n tripartitil:«locuciones» son actos de decir algo (la enunciación puede darle informaci6n sobre Como. '. '.
de la cadena de soni,élos Prometo ir a Como, que contiene Una propo-·· .-. Condición de sinceridad: Debby quiere que Dan le dé informa­
sici6n, o elaspectoconstatativo del acto de habla); «ilocuciones» son ción sobre Como.
10 que se hace al de~1r algo (al decir Prometo ir a Como yo hago una • Condici6n esencial: el enunciado cuenta como un intento de ha­
promesa); y «perlocuciones» son 10 que se hace diciendo algo (di­ cer que Dan dé una respuesta que ofrezca· información sobre
ciendo Prometo ir a Como hago' que usted cuente con que voy a Co­ Como.
mo). Dejando los detalles termino16gicos a un lado, podemos ver que
. es en este punto donde John Searle retoma este tema con su f6rmula Como ya debe quedar claro con estos dos ejemplos, él uso real
de actos de habla F(p), en la cual «F» significa fuerza (ilocutiva), el . tiene una tendencia ajugar con tales condiciones. El ejemplo (2) pue­
lado de a~ción de cada acto de habla, y «p» significa proposición, el de tener un gran efecto retórico que 10 hace inmune a la c~tica en las.
lado de contenido del acto de habla (que consiste en una referencia y dimensiones estipuladas por las condiciones de felicidad. En (1)3., la
una predicaci6n). función principal puede ser mantener una conversación relativamente
Searle sistematiz6 las intuiciQnes de Austin sobre las condiciones banal (un fen6meno generalmente conocido como «comunicaci6n fá­
de felicidad con la propuesta de que para una definición adecuada de tica»; véase Senft, 1995), para que así la menos que informativa res­
cada tipo de acto de habla se deben especificar cuatro tipos de condi­ puesta en (1)4. pueda ser perfectamente satisfactoria. Per~ e~t,o no ha­
ciones, todas necesarias y, juntas, suficientes. De este modo, para que ce que (2) y (1)3. no se consideren menos que una predl?ClOn. o una
(2), 1996 será un año de prosperidad y paz sea una predicción satis­ pregunta respectivamente. A la vez, sin embargo, esto no mvahd~ ne­
factoria se deben dar las siguientes condiciones: cesariamente el análisis propuesto, ya que puede presentar nOCIOnes

,. PRAOMÁTlCA: - 3
.I!f'

-'

66 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmática 67


en cuyos ténninos se conceptualiza habitualmente la comunicación en
Es necesario hacer sólo dos aclaraciones sobre esta clasificación

una comunidad dada.


de actos de habla, que es sin ninguna duda la más influyente de todas

Además del aparato analítico en ténninos de condiciones necesa­ las que se han propuesto. Primero, las categorías no son en absoluto

. rias y. suficientes, que puede ser más .(prototípico» en una comunidad mutuamente excluyentes. El uso real del lenguaje contiene muchos

específica que «necesario y suficiente»(incluso dentro de la misma tipos de actos que, si tomamos la clasificación seriamente deberían

. '
comunidad; véase la sección 4.3), la teoría de los actos de habla orto­ ser llamados híbridos. Consideremos, por ejemplo, amenazas del tipo .
.doxa sugiere ~mbién que todos los actos de habla, en cualquier len­ Si te .vuelvo a ver con mi hermana, te mato, que son al mismo tiempo
gua, en cualqmer lugar del mundo, pertenecen a alguna de estas cinco directivos (con la intención de cambiar el comportamiento de alguien)
categorías: . y- comisivos. Segundo, la clasificación se basa enteramente en tres·
. . .

1. Asertívo~ (p; ej,~ afinnaciones, como Bajamos aCamo): expre­ dimensiones de variaCión (estadó psicológico, dirección de ajuste [di:'
san una creenCia, hacen que la~ palabras se correspondan con recnon offit] y «fmalidad ilocutiva»); si se escogieran otras dimen­
siones como punto de partida (como fuerza relativa, por ejemplo, en- .
el mundo y comprometan al hablante con la verdad de 10 que
afirma,· . tre sugerir e insistir; o diferencias entre estatus de relaciones entre
hablante y oyente, ~n la diferencia entre pedir y ordenar, por ejemplo)
2. Direc~vosC? ej. peticiones, como Por favor baja a Como
conmlgo, u ordenes, como ¡Baja a Como mañana!): expresan esto conduciría a clasificaciones diferentes. Tendrán que hacerse más
un deseo, hacen que el mundo se corresponda con las palabras observaciones más adelante (véase la sección 4.3).
. y(m~n~an como ;m intento de hacer que el oyente haga algo. Se deben introducir·algunas nociones .más ,de actos de habla para
referencia futUra. Primero está la distinción, ya hecha por Austin, en­
3. Comlslvos (p. eJ. promesas, como Prometo ir a Como u ofre­
treperformativos.explícitosy performativos.primarios. Los perfor- .
c~ientos, ~omo Le ofrecemos el trabajo de guía turístico ofi­
clal de la cmdad de Como): expresan una intención, hacen que mativos explícitos (sólo, y de manera algo confusa, llamados «per­
fonnativos» en uso posterior) son actos de habla del tipo Prometo ir a
el mundo se corresponda con las palabras y cuentan como un
compromiso del hablante para participar en una acción futura. Como o Bautizo este barco Lago di Como, que contienen verbosco­ o
4.. Expresivos (p. ej. disculpas, como Lo· siento muchísimo o
mo prom éter y bautizar en primera persona singular del presente in­ (J
agradecimientos, como Agradecemos enormemente lo que hizo dicativo en voz activa y que describen el tipo de a~to qüe se realiza
por .nosotros): expresan una variedad de estados psicológicos, . (véase'también la sección 7.1.2). El resto de formas de enunciado,
n,o tIenen una correspondencia entre las palabras y el mundo y . como Iré a Como (dicho con el mismo significado de <<promesa»),
sl.mplemente cuentan como expresiones de un estado psicoló­ son performativos primarios (también llamados, de manera confusa, .
gICO. < • • <<perfonnativos implícitos»). Los perfonnativos explícitos son ejem­

5. Declarativos (p. ej. bautizar, abdicar, declarar la guerra): no plos de 10 que hemos descrito antes (en 1. L 1) como deíxis discursiva

expresan un estado psicológico, hacen que las palabras se co­ de tipo autorreferencial. Los .verbos performativos incluidos· (una

rrespondan con el mundo y que el mundo se corresponda con sub categoría de una gama más amplia de verbos de actos de habla,

las palabras, con el objetivo de realizar un cambio en la reali­ . muchos de los cuales no se pueden usar perfonnativamente, como

dad (institucional). amenazar) pertenecen a la gama de mecanismos que indican fuerza

llocutiva (IFI), que también incluye el tipo de oración (véase el pró­


68 El lenguaje y el uso del lenguaje . Temas comunes en pragmática 69
ximo párrafo}, ciertos adverbios (por ejemplo francamente, seria­ cionales de sobrellevar esta imposibilidad y las estrategias para ex­
mente, brevemente, confidencialmente; véase también la sección plotarla en la generación de significado.
6.4.1), aspectos del orden de palabras, acentuación y entonación. (por
el papel que estos· IFI juegan como marcadores explícitos de la fuerza La imposibilidad de explicitud completa
ilocutiva es confuso etiquetar todos los «performativos primarios», en
Imaginemos lo que Debby tendría que decir para aclarar en témi­
oposición con los «performativ~s explícitos)}, como «performativos
nos lingüísticos completamente explfcitos 10 que quiso decir cuando
implícitos~) ).
preguntó ¿Habéis ido a algún sitio hoy? en (1)1. Se podría intentar lo
Finalmente, se asume habitualmente que el mayor número de ti­
siguiente:
pos de oraciones· que sirven como IFI tienen asociada· normalmente
una fuerza literal: ~na fuerza asertiva para las oraciones declarativas, . Suponiendo que estamos sentados 10 suficientemente cerca para
una fuerza de pregunta para las oraciones. interrogativas y una fuerza que tú, Dan que tienes una capacidad auditiva normal y un conoci­
directiva para las oraciones imperativas. Cuando..se rompe este pa­ miento del idioma adecuado, me. entiendas, me dirijo a ti. También
· trón, como en ¿Puedes pedirme un taxi?, que es literalmente una pre­ supongo que compartimos algún conocimiento sobre dónde estamos Y..
por qué estamos aquÍ; Quiero decir: supongo que tú sabes que yo sé
gunta sobre la capacidad del destinatario para pedir un taxi pero fun­
que tú sabes, etc. También, me imagino que tú, COrl:lO yo, no quieres
· ciona como una petición de que eso se haga, se usa la denominación que nos sentemos aquí en ·silencio sino que los dos queremos inte­
·de acto de babIa illdirecto. En casos como éste~ la «finalidad ilocuti­ ractuar socialmente y soCÍablemente por medio de una conversación.
va primaria» es la'l.qe una-petición; el enunciado cuenta como un in­ Puesto' que también comparthños el conodiiúeÍlto'de que· ahora es la
tento de hacer qued oyente pida un taxi. La finalidad ilocutiva que hora de la cená, que la mayor parte del día ya ha pasado, y que du­
defme la fuerza Ht~ral, la de pregunta (que hace que el enunciado rante un día como éste se pueden hacer muchas cosas, y que una de
cuente como un intento· de obtener una confirmación sobre la capaci­ las opciones básicas es quedarse· aquí o salir, me parece razonable
dad del oyente de pedir un taxi), es a 10 sumo secundaria. empezar una conversaCión preguntando si habéis ido a algún sitio
hoy. Entonces te pregunto «¿habéis ido a algún sitiQ. hoy?», y te agra­
1.1.3 Significado implícito decería mucho si me pudieras decir algo en respuesta a esta pregunta.

. Si la pragmática observa el lenguaje como fomia de acción ancla­ No importa lo elaborado de este intento,el nuevo modo de expre­
da en el contexto del mundo real, o 10 que se percibe como tal, una de sión todavía deja implícito más de 10 que es capaz de hacer explícito.
las consecuencias más inmediatas es que debe prestar atención a tipos El mundo de información inexpresada que un enunciado carga con él
de significado que van más allá de 10 que es «dado» por la forma del se llama información de fondo. Algunas veces también recibe el
lenguaje misma, o de 10 que es «dicho» literalmente. En otras pala­ nombre de conocimiento común o terreno común, porque se debe
bras, una gama de mecanismos qu~ surgen de la característica del suponer que se comparte -hasta cierto grado-- por el enunciador y
lenguaje como acción fijada contextualmente, que podría ser captura­ el intérprete. Como tales supuestos comportan subordinaciones recur­
da por el término general significado implícito, se convierte en un sivas y mutuas (Yo sé que tú sabes que yo sé, etc.), el término cono­
tema de' investigación inevitable. Están involucradas tres cosas: la cimiento mutuo también se usa a menudo. Yo emplearé normal­
impósibilidad de explícitud completa, los modos lingüísticos conven- mente sólo «información de fondo» o «supuestos de fondo», términos
---- ----------- ----- - - - - _....._-~._..... --------

70 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmáticá 71

que evitan afinnaciones sobre el compartir real o incluso supuesto de


Maneras convecionales de comunicar significado implícito
la infonnación en cuestión. No es necesario decir que cualquiera que
sea el ténnino usado, el significado implícito que cubre no es una en­ Los lenguajes proporcionan numerosos portadores de significado
tidadfija sino que se forma en el transcurso de la interacción lingüís­ implícito, herramientas para unir el contenido explícito con aspectos
tica. relevantes de la infonnación de fondo ..
Lo que cuenta para el discurso oral es igualmente verdadero para Una primera categoría de tales herramientas son las construccio­
el escrito. Aunque los textos escritos ,constituyen un medio que nece­ nes y expresiones que llevan consigo presuposiciones (las «presupo- .
sita ciertos tipos de infonnacíón explícita porque productor e intér­ sidones» son aspectos del significado que deben ser pre~supuestos, .
pretenonnalmente no comparten espacio y tiempo, ni en muchos ca­ entendidos, dados por hecho, para que un enunciado tenga sentido)..
Sos un objetivo comllnicativo común, llevan consigo una cantidad «Expresiones referenciales» como Como en Bajamos a Como (en
igual de infonnación inexpresada que se da por conocida. Por esa ra­ (1)2), o 1996 en 1996 será un año de prosperidad y paz (en (2)), o
zón (2), 1996 será un año de prosperidad y paz, puede ser muy explí­ Napoleón y Waterloo en Napoleón fue derrotado en Waterloo, todas
cito en la referencia temporal, pero incluso con respecto al tiempo presuponen la existencia, en un tiempo y/o lugar, de entidades en un
deja cosas implícitas: para una buena interpretación uno debe suponer mundo «real», sea una ciudad, un período de tiempo etiquetado y si­
que el lector sabe qué sistema de calendario se usa para situar el año tuado históricamente o una persona. Éstas se llaman presuposiciones
1996. Más aún, una gran parte del conocimiento del mundo es nece­ existenciales, las cuales tienen que satisfacerse para que las oraciones.
saria s610 para empezar a interpretar prosperidad y.paz. Como se de­ en las que aparecen tengan sentido .. Por eso El-Rey -de Prancia··está····
:
mostrará (véase la sección 8.2.2), la aceptación de la afinnación de­ hablando con Napoleón, dicho en este momento de la historia y )

pende crucialmente de marcos de referencia ideológicos. usando el presente, carece de. significado real porque las presuposi­
La imposibilidad de una explicitud' completa y la necesidad de ciones existenciales' que conllevan las expresiones referenciales El
«explicar» aspectos de información general de fondo para lograr un Rey de Francia y Napoleón no se satisfacen. Este ejemplo muestra
entendimiento completo de cualquier ejemplo de uso del lenguaje son también que el hecho de que se pueda decir que una presuposición
tan generalizadas que se inventó un término (algo confuso) para los existencial de una expr~sión referencial está satisfecha depende tanto'
productos que desarrollah el significado de un enunciado por medio de la oración en que la expresión se usa como en la expresión misma..
de representaciones más explícitas: la explicatura. Por ejemplo, El No hay nada anómalo en El Presidente Clinton está loco por Napo­
Centro está cerrado en enero requiere como «explicaturas» una espe­ león. Esta estructura de la oración requiere la «existencia» de N apo­
cificación posterior sobre de qué «Centro» se habla,o si «enero» sig­ león s610 como figura histórica, no como uno de nuestros contempo­
nifica enero de UIJ. año especifico o de todos los años y si· «cerrado» ráneos. (Obsérvese como los dos predicados está hablando con y está
significa cerrado para toda criatura viviente o sólo para personas que loco por penniten diferentes anclajes en el tiempo).
de otro modo entrarían para usar el centro para sus fines nonnales. La Muchas construcciones conllevan otros tipos de presuposiciones.
confusión se puede evitar si recordamos claramente que las explicatu­ Intentemos algunas variaciones del ejemplo (2):
ras, en este sentido, son simples representaciones de fonnas de signi­
(2) a. El año de prosperidad y paz ha terminado.
ficado implícitas. b. Siento que el año de prosperidad y paz haya te~do.
c. La O.N.U. logro traer la paz.
72 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmática 73
d. El tiempo de prosperidad y paz volverá. O.N.U. hizo algo en Bosnia. El contraste presentado en (2)h. acen­
e. Mientras la O.N.U. mantenía la paz en Bosnia, empezó una tuando gran presupone que es un desastre (presumiblemente para fa­
guerra en el Zaire.
bricantes de armas) que 1996 vaya a ser un año de prosperidad y paz.
f. FueIa O.N.U. la que llevó la paz a Bosnia.
La cláusula de relativo no restrictiva en (2)i. presupone que 1996 fue
g. Lo que la O.N.U.,hizo fue llevar la paz a Bosnia.
h. 1996 será un año de prosperidad y paz y 1997 será un gran'
de hecho un año de prosperidad y paz; El condicional en (2)j. presu­
desastre. pone que 1996 no fue un año de prosperidad y paz; mientras que la
í. 1996, que fue un año de prosperidad y paz, será siempre re~ estructura interrogativa ,en (2)k. presupone que 1996 será ó pacífico o
cordado. " ,,' ,' violento. La partícula incluso en (2)1. y (2)m. presupone que algún
j. Si 1996 hubiera sido un año de prosperidad y paz, hoy no otro año, o años, puede ser candidato a ser llamado pacífico. Final-'
habría tantos refugiados.' , mente, la noción «escalamde todo en (2)n. presupone que partes de
k. ¿Será 1996 pacifico o violento? 1996 serán pacíficas (porque valores más altos en una escala tienden
1. Incluso 1996 podría ser llamado pacifico. a implicar los valores más bajos). No es necesario decir que esta lista
m. Si incluso 1996 se puede llamar pacífico, 1995 era el paraí~ no agota las posibilidades.
so. '
La propiedad principal a señalar sobre los anteriore~ ejemplos es
n. Todo, 1996 será pacífico.
la, siguiente: las presuposiciones especificadas se mantienen sin im­
portar que las oraciones sean verdaderas o falsas. En general, como'
" " . '~?, (2)a. la «des,iripción definida» El año de prosperidad y paz y

consecuencia, las proposiciones principales de esas oraciones pueden


el, verbo de «cambí§ de estado» terminar presuponen que ha habido

también ser negadas sin' afectar a las presuposiciones. Intentemos


un período 'de tiempo que puede describirse legítimamente en esos

(2)a. con ... no ha terminado, (2)b. con No siento... , o (2)c. con La


términos. (<<Descrip~ión definida» es un término usado en semántica

O.N. U. no logró... Sin embargo', las presuposiciones pueden ser ex­


de
, lógica para habl~ 'cualquier frase, normalmente un nombre propio

trañamente susceptibles a pequeños cambios en un contexto (lingüís~


, o una frase nOm1nal con un artículo definido, que describe una enti­
tico o no lingüístico). Considérense (2)0., (2)p., y (2)q.:
dad específica o definida, no una categoría; el resto de términos pre­
sentados en este párrafo son bastante comunes en la literatura y sólo (2) o. Sé que 1996 será un año de prosperidad y paz.
pueden defini:se usando ejemplos del contexto presente.)' En (2)b. el p. No sabe que 1'996 será un año de prosperidad y paz.
(<verbo causatIVO» sentir presupone el hecho que el año de prosperi­ q. No sé que/si 1996 será un año de prosperidad y paz.
dad y paz ha terminado realmente. En (2)c. el verbo «implicatorio»
l~grar presupone que la O.N.U. intentó llevar la paz (y que no fue fá­ Aunque (2)0. y (2)p. están caracterizados por la misma presuposi­
c~l hacerl.o). En (2)d. el verbo «iterativo» volver presupone que ha ha­ ción (que 1996 será un año de prosperidad y paz), esta presuposición
b~do un tiempo de prosperidad y paz anteriormente. En (2)e. el adver­ se desvanece en (2)q. Este fenómeno se llama cancelación de las pre-' ,
bIO «temporab) mientras presupone que' es verdad que la O.N.U. suposiciones -que es solamente otro término para sensibilidad al
mantenía la paz en Bosnia. En (2)f. la «construcción hendida» Fue... contexto.
la que presupone que alguien llevó la paz a Bosnia, mientras que la ' Un aspecto de sensibilidad al contexto o cancelación que ha reci­
«pseudohendida» Lo que la O.N. U. hizo... en (2)g. presupone que la bido mucha atención es el problema de la proyección para las pre­
suposiciones, por llamarlo de alguna manera: en algunos casos en que
-'

74 El lenguaje y el uso de/lenguaje Temas comunes en pragmática 7S


las construcciones que incluyen una presuposición está~ subordinadas explícitos como sugerencias, implicaciones y otros similares; algunas
en una estructura más compleja, conservan sus presuposiciones (p. ej. son «convencionales», incorporadas convencionalmente a las formas
las proyectan en una estructura más amplia), mientras en otros casos lingüísticas; otras son conversacionales, como será explicad? en la .~i:­
las pierden. Consideremos de (2)r. a (2)w.: guiente parte de esta sección). La lógica, sin embargo, está .tam~le~
influida por las restricciones de uso, por lo cual debemos dedl~a: a~Ul
(2) . r. Cuando la O.N.U. logró llevar la paz, el mundo cambió.
s. Como la O.N.U. no logró llevar la paz, el mundo seguirá
algún tiempo al fenómeno. Hasta el punto en que se hacen dIStl!lCIO-'
siendo un lugar miserable. nes sistemáticas, se dice que las implicaciones lógicas o entraña­
t. Si la O.N.U. no logró llevar la paz, "el mundo seguirá siendo' mientos dependen del valor de verdad (en ef sentido que A entraña o
un lugar miserable. implica lógicamente B si y sólo si cada si~ación que ha~e qu~ A sea
u. La O.N.U. logró llevar la paz sin ni siquiera intentarlo. verdad también hace que B sea verdad) mlentras que las lmphcaturas
v., La O.N.U. anunció que había logrado llevar la paz. convencionales son inferencias que no dependen del valor de verdad
w. La .O.N.U. se descuidó al anunci~ que había logrado llevar yque no obstante están incorporadas potconvención a formas de ex­
la paz. presión específicas como los itemes léxicos. Consideremos de (2)x. a
(2)z.:
La presuposición de que la O.N.U. trató de lograr la paz, observada
en relación a la oración simple (2)c. de arriba, se queda intacta en las (2) x. Este soldado de la O.N.U. es el pacificador local.
y. La O.N.U. logró traer la paz y olvidó anunciarlo.
estructuras más complejas (2)r. y (2)s. En (2)t., sin embargo, puede
z. La O.N;U. logró traer la paZ pero olvidó anunciarlo.
pertenecer a la interpretación o no, aunque probablemente la sugeren­ ,)
cia es que la O.N.U. debe al menos intentar lograr la paz. En (2)u. la
En (2)x. el pacificador local implica lógicamente o e~traña que «este
presuposición es simplemente cancelada o bloqueada por su negación
soldado de la O.N.U.» es un pacificador local: 10'prImero es verdad
explícita sin ni siquiera intentarlo. En (2)v. está neutralizada y cual­
si y sólo si lo segundo es verdad. Los ejemplos (2)y. y (2)z., sin em­
quiera de las interpretaciones es posible como resultado de su subor­
bargo, tienen las mismas condiciones de verdad pero difieren en que
dinación a anunció. Finalmente, en (2)w. la presuposición está clara­
pero en (2)z. implica convencionalmente que hay un contraste e~tre
mente restaurada.
los dos conjuntos. Pese a que estos análisis son aceptables en un mvel
Las presuposiciones son relaciones entre una forma de expresión
descontextualizado, tan pronto como el uso real está involucrado el
y un significado implícito al que se.puede llegar por un proceso de in­
conjunto puede cambiar significativamente. Así, no h~y mo.do en ~ue
ferencia (prágmá~ica). Además de inferencia «pragmática»; el proce­
el en (2)x. pueda simplemente reemplazarse por el arti~ulo l?~efim~o
so de inferir significado de un modo que no puede ser imaginado sin
un sin cambiar realmente el significado. Incluso a un mvelloglco mas
tener en cuenta información contextual, hay también tipos de inferen­
profundo, la posibilidad de sustitución depe~de tambi~n del alcance
cias que se supone que conducen lógicamente a relacion~sentre for­
de local; si significa «en relación a la localIdad espeCIfica donde el
mas y significados implícitos. Se llaman normalmente implicaciones
soldado de la O.N.U. en cuestión se encuentra» la sustitución no fun­
(lógicas) o entrañamientos, o, a veces, implicaturas convenciona­
ciona (ya que en este caso el soldado en cuestión sería normalmente
les. (El término técnico «implicatura» fue introducido por el filósofo
el único «pacificador local» y, como consecuencia, no un miembro
del lenguaje Paul Grice para cubrir una variedad de significados no
individual de una categoría .en absoluto). En cambio, sí funciona si
76 El lenguaje y el usa del lenguaje Temas comunes en pragmática 77
significa «en relación a cualquier localidad donde la O.N.U. tiene los recursos para la generación de significado por medio' del uso del
soldados». Respecto ala diferencia entre y y pera en (2)y. y (2)z.• lenguaje.
ésta puede desaparecer tan pronto como se use una diferente entona~ Un caso claro a modo .de ilustración es lo que se ha llamado
. .• :1 ción para (2)y. que haga una exclamación en la segunda parte e intro­ «mentira presuposicional». Cuando le preguntan por qué no se pre­
duzca así la expresión de sorpresa y, consiguientemente, contraste. sentó a tiempo, usted puede responder No logré escaparme, incluso si
Acércandonos más al objetivo, pera no está predeterminado a enfati­ usted ni siquiera trató de hacerlo. Por medio de la presuposición nor­
zar necesariamente el contraste (convencionalmente implicado), co­ mal que va unida a lograr, usted dará la impresión de que sí trató y se
mo debe s.erclaro en (2)z': quitará así algo de culpa. Pero nadie puede acusarle de haber dicho
(2) z'. La paz nunca ha sido lograda pero la O.N.U. olvidará anun­ que usted trató de escaparse y por tanto de haber mentido sobre ello.
. ciarlo. Sin duda la mayor contribución a nuestra comprensión de este ti­
po de procesos ha sido la teoría de Grice de la implicatura' conver­
Aquí pera establece una corr~lación entre el lograr la paz y el olvido sacional. Grice propuso un sistema de «lógica conversacional» basa­
de la O.N.U. de anunciarlo. El contraste, aunque típicamente implica­ do en un número de «máximas de conversación», principios intuitivos
do por la palabra (también en su uso no coordinante en inglés -que a que se supone que guían la interacción conversacional al mantener un
¡¿) . menudo se trata com.o diferente ítem léxico- que significa «excepto» «principio cooperativo» general (pe). Las «máximas» se diferencian
como en There wa~~.nothing there but a pair alsocb [Allí na había de las «reglas» en que se consideran generalmente válidas y no cuen­
nada excepto unpa~; de calcetinesD, no' es Una propiedad' de la pala-' tan sólo para casos específicos. El pe dice:
bramisma sino en buena parte una función de su usb. Su aporte a la conversación debe ser, en cada etapa de ésta,
tal como lo exija la finalidad o la dirección del intercambio
. Evitar estratégicamente la explicitud verbal aceptada por ambas partes .
. .Como el ejemplo [mal debe hacer sospechar al lector, y como se
demostrará más adelante en este libro (véase específicamente el ea­ Las máximas son:
. ,pítulo 5), sean cuales sean los medios convencionales que se ofrezcan l .. La máxima de cantidad:
. para comunic.ar significado implícito (y también explícito), estos son (i) Que su contribución sea todo 10 informativa que
siempre manipulables. De la misma manera, la imposibilidad de ser requiera el propósito de la conversación.
totalmente explicito en el lenguaje se presta a sí misma a la explota­ (H) Que su contribución no sea más informativa de lo
ción estratégica. El mejor punto de comparación para este fenómeno requerido.
enel mundo no lingüístico podría ser la gravedad. La gravedad es una
seria restricción a la manipulación que hace la gente de objetos en el 2. La máxima de calidad: Que su contribución sea verdadera
espacio pero puede explotarse .creativamente en la construcción de (i) No diga nada que crea falso.
edificios y, en última instancia, es incluso una condición previa para ' (H) No diga nada de cuya verdad no tenga pruebas.
que la construcción tenga lugar. De igual modo, una explotación 3. La máxima de relación (posteriormente llamada de rele­
creativa de ,las restricciones a la posibilidad de explicitud es uno de vemcia): Sea relevante.
78 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmática 79 .

4. 'La máxima de manera: Sea claro. No obstante, hay más sobre la implicatura conversacional que es"

(i) Evite la oscuridad de expresión. tas formas de significado implícito inferido convencionalmente de

(ii) Evite la ambigüedad. formas de expresión en combinación con supuesta adherencia están­
(iii) Sea breve. dar a máximas conversacionales. Aquí es donde entra la explotación .

(iv) Sea ordenado. estratégica de la implícatura. En muchas ocasiones las máximas serán '

violadas aparente u«ostentosamente», Pero como se. espera que los

Asumiendo que estas máximas están generalmente o «normal­ hablantes sean cooperativos y usen el lenguaje de acuerdo con las

mente» adheridas a la cultura comunicativa en las que fueron formu-: máximas, cualquier violación aparente u ostentosa será interpretada

ladas, dan lugar a implícaturas conversacionales «convencionales» o por un interlocutor cooperativo como un acto co~sciente que señala el

«estándares» (no confundir con 10 'que se llamó «implicaturas con­ significado implícito especial. La inferencia basada en esto conduce a

vencionales» en páginas anteriores). Un funcionam1ento regular de la implicaturas conversacionales extras ú diferentes de las «estándares»

máxima de calida,d en 1996 será un año de prosperidad y paz en (2) o «convencionales», aspectos del significado que van incl~so más allá

nos conduce a la implicattira de que el autor cree que 1996, será un de lo que es literalmente dicho. Por ,eso cuando Dan dice en (1)4.",

año de prosperidad y paz y que tiene las suficientes pruebas para ha­ comentando algo sobreCama en respuesta a la pregunta de Debby, .

cer esta predicción -una observación que hace recordar las condi­ Quizás no sea la ciudad italiana más interesante pero el viaje vale la

ciones de felicidad de los actos de habla. De igual modo, en base a la .' pena, está violando 'aparentemente la primera suomáxima de la .má­

misma máxima de cualidad, de la pregunta de Debby ¿Hay algo que xima de cantidad al no dar ninguna información real,. así como la

ver ahí? en {l)3. se puede inferir que Debby no conoce (mucho) Co­ 'máxima de calidad al usar una expresión (quizás) que no refleja ade:­
mo y que quiere saber más. Considere ahora la siguiente respuesta cuadamente sus creencias y que obviamente no hace justicia a su pro­
posible como alternativa a (1)4. pio acceso a la verdad de los hechos (los otros participantes. en la
cOl1versación Silben muy bien que Dan ha visitado otras muchas ciu­
(1)4. a. Hay una bonita catedral y mucha seda.
dades italianas). Pero al hacer eso, se transmite implícitamente el sig- G}
En base a la máxima de cantidad, se puede inferir que la catedral y la nificado,. hecho explícito más tarde en la conversación, de que Como
seda son (potep.cialmente) las cosas más interesantes a mencionar so­ no es de ningún modo la más interesante de las ciudades italianas. En
bre Como y que allí no hay tesoros que puedan hacerla rivalizar con '. otras palabras, el viaje vale. la pena mientras uno no espere ,much(}.
Florencia o Roma. Obsérvese cómo el mismo tipo de implicatura se Antes de dar más ejemplos, resumamos ·los tipos de significado
.'
deriva de la máxima derelación o relevancia, razón por la cual teorías implícito que hemos repasado hasta ahora:
posteriores (en particular la tradición iniciada por Sperber y Wilson, 1. Presuposición: significado implícito que debe ser pre­
1986) han tratado de reducir mucho, si no todo, lo descrito por Grice supuesto, entendido, para que un enunciado tenga senti­
a un único principio de relevancia. Por otra parte, la suposición de do. '­
adherencia a la máxima de manera conduce a uno a inferir que la in­ 2. Implicación (lógica), entrañamiento, implicatura conven­
fomiación es bastante ,clara, es decir, que hay una catedral en parti- . cional: significado implícito que puede ser inferido de
cular, que no requiere más especificaqión para que cualquiera la en­ una forma de expresión lógicamente.
cuentre y que uno no puede dejar de apreciar la se~a tampoco.
¡
I
I
80 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmática 81
3. lmplicatura convencional o conversacional estándar: signi­ tampoco puede basarse en la evidencia completa (ya que nadie, pre­
ficado implícito que puede ser inferido convencional­ sumiblemente ha visto todas las ciudades del mUlldo); (1)4.f. y (l)4.g.
mente de las formas de expresión en combinacion c<;m la no parecen respuestas realmente relevantes (lo mismo que, en este ca­
supuesta adherencia estándar a las máximas conversa­ so, (l)4.b., (l)4.c. y (l)4.h.) Y (l)4.h. se evade del tema y no es clara.
cionales. Los procesos son ligeramente diferentes en cada caso, pero hay sin
4. Implicatura conversacional (no convencional o específica duda dos dominantes: (i) evasión de los temas relevantes, 10 que se
para la ocasión): significado implícito inferido de una podría ilustrar con (1 )4.i:
violación obvia de una máxima conversacional en com­
(1)4. i. En un dfa claro tienes una, bonita vista de los Alpes.
binación con la supuesta adherencia al principio de Coo­
peraCión.
y (ii) decir algo que es fácilmente reconoCible como no ve;da?ero.
Para 10 último, como se ha mostrado en (1)4.d. y (1)4.e., el slgrufica­
Mientras que 1.,2. Y3. tienen que vercon los medios convencionales
do implicado puede ser simplemente el opuesto de 10 que se dice lite­
. para comunicar significado implícito, todo 10 cual puede también ser
ralmente. A este proceso se le llama normalmente ironía. En (1)4.j. y
estratégicatnente explotado, 4. supone fundamentalmente que se evite
(1)4.k. se ejemplifican diferentes maneras de producir algo fácilmente
estratégicamente la ~explicitud. Demos algunos ejemplos adicionales
de esto último. reconocible como no verdadero, lo que consecuentemente da lugar a
implicaturas:
. Consideremos u;na posibles respuestas a la pregunta de Debby
.. ¿Algl? que ver ahí? en (1 )3.: (1)4. j. Como es un gusano de seda gigante.
k. Como es la C1eve1and de Italia.
(1)4. b. Uná'ciudad.
c.Una'catedral de piedra y mucha seda producida local­
Losprocesos enjuego aquí son metafóricos. '(Obsérvese que no todas
mente por millones de gusanos de seda.
d. Rivaliza con Florencia. las metáforas pueden explicarse de esta manera. T~das :as le.nguas
e. No hay mejor ciudad en el mundo. contienen numerosas estructuras 'y expresiones convenclonahzadas
, f.·· Sí. que pueden ser metafóricas en origen pero que no requieren pasos in­
g. Miles de personas, cada Íma con una nariz, dos ojos, dos ferenciales del tipo descrito aquí. Véase la sección 6.2.1 para encon­
orejas,una boca, que hablan italiano y se dedican a sus trar ejemplos.)
cosas. Las implicaturas conversacionales son «cancelables», pueden eli­
h. Si tiene los ojos abiertos. minarse o cambiar modificando o añadiendo algo al enunciado, como
en (1)4.1.:
Todas indican depreciación en varios grados: (l)4.b. no es. cierta­
mente tan informativa como es necesario para los fines actuales del (1)4. 1. Si mantiene los ojos abiertos --entonces puede encontrar
verdaderas joyas.
intercambio; (1 )4.c. contiene más detalles o información de la que es
necesaria; (1 )4.d. t;l.penas se puede esperar que represente literalmente
También son «no separables», son propiedades del significado de los
10 que el hablante cree; lo mismo puede decirse de (l)4.e., lo cual
enunciados como un todo y no están simplemente unidas a una forma
82 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmática 83

única de expresión. Por esta razón no hay una diferencia fundamental drian ser posibles con completa adherencia a las máximas (véase la
entre (1 )4. y (1 )4.m. o (1 )4.n., pese a las diferentes formas de expre~ Ilustración 2) aunque un fragmento de discurso' que sigue las máxi­
sión. mas diligentemente puede por sí mismo convertirse en bastante hu­
morístico precisamente por esa razón. La cortesía y el humor explotan
(1)4. m. Quizás Como no es Florencia pero el viaje vale la pena.
los dos la imposibilidad de" explicitud completa estratégicamente,
.n. Quizás Como no es una metrópolis pero el viaje vale la
pena. usando muchos de los mecanismos descritos por Gricepara generar'
significado implicado.
Por otra parte, las implicaturas conversacionales son «calculables»,
así que pueden ser cuestionadas como en (1)6. y hechas explicitas
como en (l)7.Finalmente, no son «completamente determinables»,
por eso -a pesar de ser calculables- su significado no tiene que ser
estable a lo largo de instancias de uso o no tiene ni siquiera que ser el
mismo para diferentes usuarios. Esto debe quedar claro especialmente
en los casos metafóricos (1)4.j. y (l)4.k. El que Como sea un gusano
de seda gigante puede "implicar que no tiene nada de interés que ofre­
cer excepto por la seda o que tiene un~ sorprendente industria de la
seda 0, para intérpretes con familiaridad con los gusanos de seda,
puede aludir a propiedades que una persona que no tenga dicha fami­
liaridad no se puede ni imaginar. El que Como sea la Cleveland de
Italia, por otro lado, puede implicar que es una ciudad normal pero
con" algo de atractivo o más' específicamente que es fuertemente in­
dustrial o tiene una gran orquesta, como Cleveland, Ohio.
La teoría de la implicatura conversacional de Grice está predicada
para un modelo de comunicación que otorga los valores normativos
más altos a las necesidades de racionalidad y eficiencia. Sin embargo,
como se ha observado a menudo en la literatura pr~gmática, el com­
portamiento social también incorpora normas, 10 que pareceda re­
querir violaciones. de las máximas. En particular nos referimos a las
normas de cortesía, que no permiten a menudo enunciados comple­
tamente informativos, verdades sin mitigar o claridad completa (véase
también 1.2). Fue la intuición captada por Dan a un nivel preteórico Ilustración 1.2 Un intento de humor en publicidad: ¿y las máximas?
cuando emitió el enunciado metapragmático Sólo intentando ser edu­
cado (1)8. De. igual modo, hay tipos de actividad verbal, como los .[«Los de alIado tenían un perrito faldero:}) / Los sureños tienen sus
. propias reglas.] "
que se encuentran bajo la etiqueta de humor, que dificilmente po-
86 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en pragmática 87

tia). De: m~smo modo Jane, habiendo hecho el viaje con Dan, podría .6. Dan: Depende de 10 que te interese.
haber anadIdo Fue muy divertido después del enunciado de Dan en . 7. Debby: Quiero decir, si hay monumentos históricos y co­
sas interesantes que comprar.
. (1 )2. sin haber s~do seleccionada por nadie. Incluso podría haberse Tiene una bonita catedral y mucha seda.
·8. Dan:
hecho con la palabra en (1)2. diciendo exactamente 10 que Dan dice,
9. Debby: Me gustaría ir el sábado. ¿Quieres ir conmigo?
cancelando de este modo la selección de Dan por parte de Debby,
aunque esto podía haberse considerado un poco grosero. . . Aunque ésta es sólo una conversación entre dos, en lugar de un inter­
. , Cuando lo~ tumos son más largos que en el ejemplo (1), la· ges M

cambio entre cuatro como (1), la estructura es más- compleja, incluso


tlon ~~cal del SIstema de alternancia de tumos también implica la pro­ aunque parezca casi completamente una concatenación de pares ad­
ducclOn de gestos o sonidos para mantener la comunicación (back . yacentes. Primero, considérense los tumos (3)5. y.(3)8. que son los
channel cues) por parte del destinatario (que van desde asentir con ia dos elementos de un par tionnal de pregunta-respuesta: están separa­
cabeza hasta mmmm y síes). Su función es indicar al hablante que uno dos por una secuencia insertada que consiste en una petición de cla­
está e~cuchalldo y que uno no supone que se ha alcanzado ya un lugar rificación en (3)6. y la clarificación dada en (3)7. Lo que hace la se­
apropIado para, la transición, por eso se llaman algunas veces «conti­ cuencia insertada es explorar el territorio común que necesita Dan
nuadores»., para dar una respuesta máximamente relevante a la pregunta de De­
Un aspecto importante de la estructura conversacional es la se M

bby. Además, observando a la relación entre los dos pares de pre­


cuencia de tumos. Esto implica aperturas y cierres conversaciona- . gunta-respuesta en(3) 1.-(3)2. y (3)3.-(3)4., el primero se puede inter­
les, ninguno q~ .ellos está ilustrado en (1), que representa simplemente pretar como una presecuencia del segundo porque la valoración de·
un fragmento (coherente) de interacción sacado de una conversación que Dan ha estado ya en Como tiene implicaciones directas para la
más amplia. En (1) la secuencia está determinada por la sucesión de probabilidad de que él sea capaz de dar una respuesta infonnativa a la
tres pares adyac~ntes (es decir, pares de tumos que se espera que pregunta en (3)3. Casi del mismo modo, (3)1.-(3)2. sirve como prese­
normalmente se Sigan el uno al otro), todos del mismo tipo: pregunta­ cuencia a la pregunta hecha en (3)5., y el interéambio entero desde
respuesta. La tercera pregunta en (1)6. no está seguida por una res­ (3)1. a (3)8. es una presecuencia elaborada que prepara la invitación
. puesta adyacente inmediatamente sino por el comentario insertado de que se extiende en (3)9.: una evaluación de si Como tiene alguna
Jack en (1)7. Esto cancela básicamente la necesidad de una respuesta atracción para Dan es útil para decidir si invitarlo o no a acompañarla
real y conduce. ~l comentario metapragmático de Dan en (1)8. que es en el viaje. La estructura global de (3) implica claramente un tipo de
una confmnaClOn del comentario de Jack antes que una respuesta di M

organización jerárquica: algunos actos en la secuencia son centrales


recta a la ?regunta de Jane. Sin embargo, la estructura global penna­ mientras otros son subsidiarios. Se puede representar como en la Fi­
nece relatlva:nente simp.le. Consideremos, brevemente,·un fragmento
de conversaCIón alternatIva que podría reemplazar a (1) por completo. gura 1.1.

1~ 1
1 2 3 8
(3) l. Debby: ¿Has estado ya en Como? I _ - - 11.

tI
,5

~
2. Dan: Fuimos la semana pasada.
3. Debby: ¿Cómo se va ahí? .1
4. Dan: FuÍmes en autobús y volvimos en acuaplano.
5. Debby: ¿Hay algo que ver ahí? Fig. 1.1 Organización secuencial de un intercambio
I

84 El lenguaje y el uso del lenguaje . Temas comunes en pragmática 85

1.1.4 Conversación formales del tipo presentado en (1) son localmente gestionados. Esto
es, quién toma qué turno en la conversaci~n es algo que se decide en
Volvamos a un cuarto tema común en lá literatura sobre pragmá~ el transcurso de la interacción. Sin embargo esta alternancia de tur
M

tiea. Desde la perspectiva de su contribución a los intentos de genera­ nos no se hace al azar. Revela aspectos de una organización social,
ción de significado, hay más en el uso del lenguaje de 10 que se puede por 10 que el análisis de conversación --con sus bases en la sociolo­
decir en términos de deíxis, actos de habla y significado implícito. En gía (véase el Capitulo 9}- tiene un interés central en la toma de tur­
particular, la idea de que los actos de habla serían los pilares básicos nos. (Para ver un ejemplo de organización institucional que refleja la
según los cuales toda a~ción lingüística podría ser entendida no fue colocación de los turnos, véase la sección 7.2.2.) Hay un sistema, por
aceptada por mucho tiempo por la mayoría de los pragmatistas. En su esto es por 10 que tanto los solapamientos como los silencios entre
lugar volvieron al estudio de fragmentos de interacción lingüística, turnos son normalmente mínimos, aunque no debemos olvidar que la
normalmente conversaciones de varios tipos. 'Se ha prestado mucha frecuencia de solapamientos y la longitud de los silencios puede va­
atención a sus propiedades estructurales y cómo éstas revelari 10 que riar de gran manera como aspectos de hábitos comunicativos que pre­
realmente está pasando en el uso del lenguaje. Volvamos al ejemplo dominán en una comunidad o en un tipo específico de contexto. El. .
(1), repetido aquípor comodidad, para ilustrar algunas de las cosas inicio de un turno o «hacerse con la palabra», puede ser el producto
que pasan en las conversaciones. de la autoselección o la heteroselección. En (1)1., por ejemplo, Deb­
(1) '1. Debby: ¿Habéis ido hoya algún sitio? by se elige a sí misma para introducir un nuevo tema en la conversa­
2. Dan::> Sí, bajamos a Como. Subimos en aufobúsy volvi-' . ción, pero siguiendo la regla de «el-hablante actual selecciona al si­
mas en acuaplano. guiente», ella selecciona a Dan pep-a el siguiente turno y 10 hace no
3. Debby: Algo que ver ahí? lanzándo su pregunta abruptamente, sino dirigiéndose a él directa­
4. Dan;,' Quizás no sea la ciudad italiana más interesante mente, una actividad que se revela por la postura, el gesto y/o la mi­
pero el viaje vale la pena.
rada. Dan sabe que ha llegado su turno porque el 'final de una pre­
5. Debby: Puede que haga eso el próximo sábado,
6. Jane: gunta es un lugar apropiado para la transición (transitional
¿Qué quieres decir cuando dices quizás no sea la
ciudad italiana más interesante? ' relevance place] típico y marcado prosódicamente, el fmal claro de
7. Jack: Quiere decir ciertamente no la más interesante... una unidad de construcciÓn de turno [tum constructional unit] que,
8. Dan: Sólo intentando ser educado ... en este caso, coincide con un turno completo. Cuando Debby cierra el
turno en (1)5. y pierde su «derecho» a seleúionar más hablantes, esto
Aunque hay muchos tipos de conversación institucionalizados (como
da a Jane la oportunidad de seleccionarse a sí misma en (1)6. Jane usa
en elaula, en los tribunales, etc.) que imponen una estructura desde el
esta oportunidad para volver al tema anterior. Algunas de las comple­
, principio (como el profesor dirigiéndose a los estudiantes que sólo
jidades del sistema son reveladas por el hecho de que Jack, en (1)7., ,
pueden hablar después de pedir permiso o después de que se les pre­
sin haber sido seleccionado e ignorando la selección que hace Jane de
gunte), y aunque hay muchas comunidades en que restricciones es­
Dan como hablante siguiente, puede de alguna manera interrumpir
tructurales similares son resultado de reglas sociales más generales
sin irrumpir en el flujo de la conversación. Ésta es en gran medida
(como cuando las diferencias de edad dictan quién puede hablar y
l,lna función de la relevancia del turno voluntario e impuesto (que
cuándo). es probablemente acertado decir que los intercambios in­ puede también solaparse con (1 )6. sin causar ningún tipo de moles­
89
88 El lenguaje y el uso del lenguaje Temas comunes en prágmática

La motivación de las presecuencias, tal y como se han presentado in- . Volviendo al ejemplo (3), una vez Debby tiene certeza de que
formalmente más arriba, es un fenómeno llamado organización de la Como tiene algunas cosas que Dan considera de interés~ u~o ~e los
preferencia. Hay repuestas preferidas y no preferidas para diferentes factores' que podría obstaculizar su aceptación de la rnvltaClón a
tipos de enunciado (no en el sentido de preferencia personal, sino en acompañarla en el viaje ha sido eliminado, facilitándole a Debby así
términos de un estatus observable, acordado socialmente, que guía la extensión de la invitación en (3)9. - una posibilidad que podría ha­
producción e interpretación). Una petición es preferiblemente conce­ ber sido virtualmente bloqueada por un intercambio como (5).
dida, de modo que un hablante tendrá la tendencia de primero averi­ (5) 1. Debby: ¿Como es un iugar interesante?
guar, p. ej. por medio de una secuencia pregunta-repuesta precedente, 2. ' Dan: Lo odio.
cuál es la posibilidad de que una petición sea concedida. De manera
similar, cuando se hace una pregunta se responde preferiblemente con Por supuesto, hay todavía otros factores que podrían conducir a la no

un enunciado informativo. Por esta razón tiene sentido que Debby aceptación, como que Dan tuviera ya otros planes, que es la razón por

pregunte primero si Dan ha estado ya en Como antes de preguntarle la cual las secuencias de pre-invitación toman a menudo la forma

cómo se llega. Una respuesta negativa por parte de Dan podria no ha­ ilustrada en (6).
berle impedido hacer básicamente la misma pregunta pero probable­ (6) ,1. Debby: ¿Como es un lugarínteresante? ,
·mentehabria sido enunciada de diferente manera, como .en (4)3. 2. Dan: Hay una bonita catedral y mucha seda.
(4) 1. Debby: ¿Has estado ya en Como? 3~ Debby~, ¿Tienes plane~telsábado? .
2. Da:ti:~ No, no he" estado. 4. Dan: No.
3. Debby: ¿Sabes cómo se llega? 5. Debby: Me gustarla ir. ¿Me acompañas?

Obsérvese que (4)3. es de hecho un movimiento potencialmente pre­


Por la mismo razón, las estrategias más convencionalizadas de este
secuencial en sí mismo: si la respuesta es que Dan sabe cómo se llega
tipo son tan reconocibles que a menudo conducen a' secuencias ins,er­
a Como, Debby puede entonces hacer su pregunta real, ¿Cómo se lle­
tadas por el destinatario para protegerse a sí mismo de. la expectaCIón
ga? En la práctica esto casi nunca ocurre. En la teoría de los actos de
de una respuesta preferida, como se ilustra en (7).
habla, (4)3. se llamarla un acto de habla indirecto porque no pregunta
(7) 1. Debby: ¿Vas a hacer algo el sábado?
. directamente por la información deseada sino simplemente si una de
2. Dan: ¿Por qué?
las precondiciones para que el destinatario sea capaz de dar la infor­
3. Debby: Me gustaría ir a Como.
mación se satisface o' no. De ese acto el destinatario infiere, invocan­
4. Dan: Bien ..
do los principios de relevancia, que el que pregunta realmente quiere

. ) , la información en cuestión. Pero todo esto está tan convencionalizado Obsérvese que la invitación ni siquiera tiene que expresarse para ser .
que la' inferencia consciente ya no es necesaria. Por esta razón, los entendida y aceptada. ..
actos de habla indirectos de este, tipo pueden ser tratados en términos Las conversaciones rararpente consisten en oraciones modelo que
conversacionales como «fusionadores convencionalizados de prese­ se encontrarian en libros de gramática. Los ej emplos que he usado (de
cuenda-secuencia») . los cuales sólo (1) era auténtico) no son realmente típicos en ese sen­
tido. Normalmente hay pausas y vacilaciones significativas, así co­
90 El lenguaje y el uso del lenguaje tienen en común los temas comunes 91.

mo falsos principios y reparaciones. Las reparaciones pueden ser


para entender completamente los patrones del uso del lenguaje, ,las
reparaciones de otros (donde un hablante corrige 10 que otro hablante
explicaciones deben ser contrastivas, hasta el punto que debemos ser
ha dicho) como en (8)2" o auto-reparaciones como en (9) (donde «::o:»
capaces de hablar sobre lo que es posible asi comQ de 10 que ,se ob­
' al final de una línea y en el principio de la siguiente indica que una
serva tm la <<realidad». Esta afirmación, sin embargo, no sera com­
sigue a la otra.inmediatamente y «...» indica una pausa). pletamente transparente hasta que hayamos sido capaces de extender- ,
(8) 1. Debby: ¿Has estado ya en Cuomo? nos sobre algunos de los principios básicos de una teoría coherente de
2. Dan: Quieres decir Como ... la pragmática en el Capitulo 2.
Antes de cerrar esta breve visión global de temas comunes en la
Debby: ¿Has estado ya en Cuomo?=
pragmática y empezar a discutir sus interconexiones con igual b:eve­
quiero decir Como ... Siempre 10 confundo con ese
tipo de NuevaYork. dad 'vamos a introducir un término adicional que se usará habItual­
me~te en este libro, acontecimiento de habla. Este término ha sido
Excepto por interesantes confusiones (como Como-Cuomo), las «im­ reservado para cualquier tipo de uso del lenguaje (a menudo o~l), ca­
perfeccÍoQ.es» raramente se retienen en la memoria. Lo mismo es racterizado como conversación o no, visto desde el punto de VIsta de
cierto para la mayoría de las propiedades «técnicas» de la organiza­ su incrustación totalmente social (y a menudo institucional) (véase
ción de las conversaciones. Aun asi, ejerce normalmente una influen­ sección 5.2 para una defmición más explicita).
cia en la manera en la que el significado se incorpora a los enunciados
y contribuye así significativamente al dináfuismo' de la interacción.
Por esta razón los analistas de la conversación acentúan siempre la 1.2 QUÉ TIENEN EN COMÚN LOS TEMAS COMUNES
necesidad de usar datos auténticos. Y también por lo que las técnicas
de grabación (el audio, é incluso más el vídeo) son sin duda un m­
La visión precedente conecta este libro a puntos centrales. en una
vento que ha revolucionado el estudio del uso del lenguaje tanto co­
historia de veinte o treinta años de estudio del uso dellerrguaJe. Una
mo la invención del microscopio revolucionó las ciencias. Las trans­
cripciones cuidadosas, que no serían posibles sin grabaciones, vez presentados, hay buenas razones para deja: de uSar estos p~~tos
centrales como principios organizadores de un libro sobre pragmatlca.
combinadas con la posibilidad de escuchar y ver los datos orales y vi­
La razón principal es que represent&.n diferentes m~neras de hablar
suales una y otra vez, hacen posible estudiar el funcionamiento real
sobre fenómenos comunes más que de fenómenos diferentes. ~a teo w
del lenguaje enmaneras que antes no eran posibles. (para una buena
ría de los aC{tos de habla es, de algún modo, una manera , onentada·
introducción a las técnicas disponibles de recolección de datos, véase
Goodwin 1993.) , ' hacia la estructura de tratar procesos de significación cuya naturaleza
procedural (infere~cial) es destacada por una teoría de las. ~p1icatuw
El principio de autenticidad se debe tomar muy seriamente en
ras. Pero demos algunos ejemplos prácticos de las relaCIones entre
pragmática. ¿Por qué, entonces, puede preguntar el lector atento, este
ellos, algunas ya insinuadas de pasada. . . '
mislPO ,principio se viola en los párrafos precedentes, que no sólo
Habitualmente, las reglas de los actos de habla son aplicaCIOnes
contienen una interpretación (simple) de un intercambio auténtico, si­
especificas de máximas de conversación más generales. Tomemos,
no también un número de intercambios imaginarios? La razón es que
por ejemplo, la segunda submáxima de la máxima de cantidad (<<Que
92 El lenguaje y el uso del lenguaje Qué tienen en común los temas comunes 93
su contribución no sea más infonnativa de 10 requerido») y la máxima ne, toman un largo perlodo de tiempo relativo a una única noche y
de relación (<<Sea relevante»). Ambas se reflejan o «se aplican» en la por eso son diflcilmente compatibles) para llegar a la conclusión de
condición preparatoria para afInnar que «No es obvio para el hablante que (10)2. es un rechazo implícito de su propuesta. (No es necesario
que el oyente conoce el contenido proposicional p de lo que dice», De decir que la ordenación lineal de esos. pasos inferenciales no parece
fonna similar. la condición de sinceridad para afInnar, «El hablante corresponderse con los procesos cognitivos reales y algunos de los
cree P'}), simplemente aplica la máxima de cualidad (<<Que ~u contri­ pasos pueden incluso no ser necesarios; pero esa discusión puede
bución sea verdaderID». . conducimos demasiado lejos en este momento.) En referencia a las
Más aún, se confia en las máximas de la conversación como pasos estrategias conversacionales, ya hemos sugerido (en la sección 1.1.4)
para la «derivación ilocutivID>, la cual, según los teóricos de los actos la conexión con la organización de la preferencIa y sus consecuen­
de habla, es necesaria para llegar al significado de los actos de habla cias. La organización de la preferencia no sólo motiva el uso de los
indirectos. Así, para usar uno de los ejemplos de Searle y su análisis, actos de habla indirectos del tipo «fusionador convencionalizado pre­
si tenemos un intercambio como (10): secuencia-secuencia», sino también, como se ilustra aquí, de un tipo
(10) 1. John: Vamos al cine esta noche. que hace posible evitar rotundamente que se elija un tipo de respuesta
2.: Ann, Tengo que estudiar para un examen. no preferida. .
El ejemplo (10) muestra que no es sólo el mero hecho de las inte­
primeramente, Jo~·tiene que suponer que Ann está cooperando en la . rrelaciones entre diferentes temas tradicionales de la pragmática 10
conversación para que su intervención (10)2. intente ser relevante. De que nos debe inducir a abandonar su tratamiento -conjunto. Funda­
otro modo él tendri~ que llegar a la conclusión de que ella no respon­ mentalmente,debemos damos cuenta de qué puntos de vista diver-·
de a su propuesta dado que su conocimiento del uso del lenguaje, o de gentes tienen que combinarse para lograr una comprensión adecuada.
los actos de habla, o' incluso más específIcamente de los pares adya­ Así, el modelo de inferencia clásico para explicar el acto de habla in­
centes (lo que nos conduce inmediatament~ al campo nonnalinente directo en (10)2. sólo recurre al bastante esencialista «conocimiento
cubierto por el análisis de la conversación), dicta que las respuestas de qué». Lo que también necesitamos es referencia,a un «conoci­
. válidas pueden ser sólo actos. de aceptación, rechazo, propuestas al­ miento de cómO) más procedural del tumo de habla como tipo de in­
. temativas, intentos de discutir la propuesta y otros similares. Sabien­ terácción social en la cual se basa el análisis de conversación .
do que (10)2. no es uno de los tipos de respuesta esperada, pero cre­ Los actos de habla indirectos no son el único enlace entre la téoría
yendo que Ann está sin embargo intentando ser relevante, John debe de los actos de habla y el estudio del significado implícito. Una de las
inferir que Ann quiere decir más de 10 que dice y, presumiblemente, principales primeras definiciones de las presuposiciones avanzadas en
que la fInalidad ilocutiva primaria de su enunciado es diferente al lite­ la literatura depende crucialmente de funciones del lenguaje que se
ral. . discuten generalmente en ténninos de actos de habla:
:!/ f ,. Si todavía quedase alguna duda sobre esto, los actos de habla in­ Las oraciones en el lenguaje natural se usan para hacer preguntas,
directos representan un tipo de significado implfcito y acarrean estra­ dar órdenes, hacer aserciones, expresar sentimientos, etc. [... ] Pode­
. tegiás conversaCionales. En referencia al significado· implícito, la in­ mos identificar las presuposiciones de una oración como las condi­
ferencia posterior de John úsa infonnación de fondo (en particular el ciones que se deben satisfacer antes de que la ()ración pueda ser usada
conocimiento de que ambas cosas, estudiar para un examen e ir al ci- en alguna de las funciones mencionadas (Fillmore, 1971b, pág. 380).
.'.

94 El lenguaje y el uso del lenguaje Qué tienen en común Jos temas comunes 95
Para usar uno de los ejemplos de Fillmore, Abre la pu;erta por favor El primero tiene que ver con la relación entre 10 que hemos lla­
puede usarse como una orden solamente si el destinatario está en po­ mado deíxis actitudinal y los principios fundamentales de la interac­
sición de saber a qué puerta se ha hecho referencia y sólo si esa ción conversacional, en paiticular aquellos que a menudo parecen re­
puerta no está abierta en el momento del habla. De manera cl&a, tales querir violaciones de las máximas griceanas. El campo en cuestión es
presuposiciones se añaden a la satisfacción de algunas condiciones el estudio de la cortesía. Mientras deferencia se reserva para expre­
preparatorias de las peticiones. siones de respeto hacia personas de un estatus más alto, «cortesía» se
Otras interconexiones entre diferentes temas tradicionales de la ha convertido en un amplio término abarcador en pragmática para
pragmática incluyen fenómenos como: cualquiera de las elecciones hechas en el uso del lenguaje en relación
• El carácter discursivo-deíctico de los performativos explícitos. con la necesidad de preservar la imagen (<<face», en inglés) de las
• La deíxis discursiva y el uso de comentarios metapragmáticos personas en general, su auto-imagen pública. Se hace una distinción
.en la interacción en transcurso como en (1)6., (1)7. Y (1)8 .. entre la imagen negativa, la necesidad de una persona de tener li­
• El uso de nociones metapragmáticas del lenguaje natural como bertad de acción, y la imagen positiva, la necesidad de una persona
«peticióm>, «invitacióID>, «saludos» y otras en el análisis de la de ser tratada como igual o como parte del grupo. Cualquier acto que
conversación. La teoria de los actos de habla ofrecía un análisis pone en riesgo la imagen pública es un acto amenazante a la imagen
que todavía puede ser relevante para explicar ciertos procesos (AA!). Un ejemplo de acto amenazante a la imagen negativa podría
conversacionales. Las explicaciones de los actos de habla no ser la petición directa enO 1) que pone en peligro la libertad de .ac­
pueden entenderse como descripciones de las condiciones nece­ ción del destinatario:
sarias y suficientes para·ser pilares básicos válidos de la interac­ (11) Cuando bajes a Como: c6mprame una corbata de seda.
ción lingüística. Sin embargo, pueden ser reinterpretadas como
una primera aproximación razonablemente adecuadá. al núcleo Un ejemplo de un acto amenazante a la imag~n positiva seria el re­
prototípico del significado de los verbos de actos de habla en in­ chazo directo a responder a una petición de información en (12)2. que
glés, .es decir, de conceptos lexicalizados gracias a los cuales niega el estatus igualitario al destinatario:
ciertos aspectos de la interacción lingüística pueden entenderse
mejor (una forma de comportamiento social que no puede sepa­ (12) 1. Debby: ¿Dónde compró Dan esa corbata nueva?
2. Jane: No te lo voy a decir.
rarse de las interpretaciones que se asocian con él en las mentes
de los que participan en ese comportamiento). (Véase la sección
~42J . . Ambos (11) y (12)2. son amenazas reales a la imagen porque son,
como diría la literatura sobre cortesía, sin acción compensatoria, o
Estas observaciones superficiales provocan demasiadas preguntas completamente abiertos y directos, sin ningún intento de permitir al
destinatario conservar alguna libertad de acción' o algún sentimiento :)
para que sea posible un tratamiento adecuado en esta fase. Se volverá
a ellas e.n su debi~o' momento. Siri embargo, y antes de dejar el tema de igualdad. El supuesto es que reglas o principios de cortesía entran
de las InterconeX1ones entre los diferentes temas comunes de la en juego para hacer actos de este tipo menos amenazantes.
pragmática, se tratarán brevemente dos más, dado que han desarrolla­ Las estrategias de cortesía, entonces, normalmente implican, ate­
do campos enteros de investigación con derecho propio. nuacióny/o no hablar directamente, como en (13), un ejemplo de cor­
96 El lenguaje y el uso del lenguaje El problema de la intencionalidad 97
tesía negativa o un intento de salvar la imagen negativa del destinata- ' área' en cuestión la cubren los estudios de argumentación, en los
, rio, o en (14)2., un ejemplo de cortesía positiva o un intento de sal­ cuales, para los objetivos actuales, se deben distinguir dos tendencias
var la imagen positiva del destinatario. principales. Un tendencia, que recurre fuertemente a principios de lo
(13) Odio abusar, pero cuando estés en Como ¿podrfas comprarme razonable, lo relevante y lo coherente en la construcción de argu­
una corbata de seda?' mentos para alcanzar objetivos comunicativos específicos, tiene afi­
(14) 1. Debby: ¿Cuándo compró Dan esa nueva corbata de seda? ' nidad cercana con el campo de la «retórica», la cual de muchas mane­
2. Jane: Sé que es estúpido pero le prometí no decírselo a , ras puede verse como una forma de «pragmática». Una segunda
nadie. No sabía que tú ibas a estar interesada. tendencia, asociada directamente al lingüista francés Oswald Ducrot,
fomenta la argumentación como la fuerza organizativa básica que
En ambos ejemplos, el enunciador todavía actúa ,abiertamente: es subyace a toda comunicación lingüística. Se dice que la «orientacion
todavía obvio que (13) es una petición y que (14)2. una negación de argumentativa» de los enunciados explica un amplio abanico de fe­
accéso a la información. Pero la amenaza a la imagen se reduce a un nómenos, desde el uso de conjunciones como pero en El tiempo está
nivel más tolerable si se usa una formulación diferente. precioso pero no tengo tiempo para dar un paseo pasando por la su­
Otra estrategia'es actuar encubiertamente, como en (15) si fuera gerencia conversacionalmente implicada de que debemos ir a dar un
enunciada casualmente sin dirigirse a nadie' en particular, para lograr paseo cuando digo, bajo circunstancias determinadas, El tiempo está .
el mismo efecto qué el intentado en (11) Y (13). precioso, hasta modelos clásicos de argumentación retórica. (Otralí:­
nea divisoria en el campo de estudios de la argumentación, menos di­
(15) Deberlilcomprarme una de esas corbatas de seda.
rectamente pertinente a nuestros objetivos actuales, es la que se en­
cuentra entre una aproximación prescriptiva en oposición a una
Los destinatarios pueden interpretar si este enunciado es una petición
descriptiva.)
o no loes. Debe quedar claro con estos pocos ejemplos que el tema
de la cortesía se enlaza de manera intrincada con varios de los «temas
,comunes» que ya han sido revisados. Antes de seguir adelante, debe­
m9 s también señalar que no podemos permitir que este tratamiento de 1.3 EL PROBLEMA DE LA INTENCIONALIDAD
la cortesía, basado, en Brown y Levinson (1987), esconda el hecho de
que algunos actos, en lugar de ser amenazantes a la imagen, pueden Un primer vistazo a lo que ofrece la literatura pragmática -que
) ser activamente realzadores deJa imagen (véase Kerbrat-Orecchioni, es 10 que realmente es este capítulO---: no estaria completo sin una
1997), y que la descortesía y la rudeza pueden ser tan funcionales en discusión breve de una de las nociones más controvertidas, la inten­
" la comunicación como la «cortesía» (véase Kienpointner, 1997). cionalidad, y su relación con el significado. Más aún, una posición en
La última conexión intra-temática en la que vamos a hacer hinca­ la controversia es crucial para cualquier otra cosa que una teoria de la
pié en esta sección es el área donde los principios análogos a las má­ pragmática pueda decir sobre el uso del lenguaje.
ximas de conversación (especialmente relacionados con la relevancia Aunque el significado solía ser visto como una propiedad de las
ya menudo expresados en términos de coherencia) entran en contacto palabras y oraciones que podía ser estudiada aisladamente, la prag­
, con ciertos tipos de estrategias en una variedad de actos de habla. El mática reconoce un vasto ámbito de significado que se filtra en la vi­

PRAi3MÁnCA.-4
98 El problema de la intencionalidad 99
El lenguaje el uso del lenguaje

da y las actividades de las personas - un reconocimiento que ya era ron a trabajar con la relación entre los signos y sus usuarios~ Sin em­

común en una gama de tradiciones de investigación mucho antes de bargo, al mismo tiempo, hasta el punto en que se permitió a la reali­

. que volviera a entrar en la lingüística (como se explicará en el Capi­ dad extralingüística entrar en la discusión del significado, el único· 10­
tulo 9). La aceptación de una visión global del significado como no cus del significado se situó claramente en la cognición individual -a

unido a la estructura por parte de lingüistas y filósofos se inició con la pesar del reconocimiento normal explícito de la sociedad y la cultura.

explicación de Grice del «significado no-natural». Grice contrastó el Una de las más claras expresiones de la dependencia del signifi­

«significado no-natural» con el «significado natural» representado cado de las intenciones del hablante se encuentra en la versión están­

por significan en Esas nubes significan lluvia. Permitiendo la existen­ dar de la teoría de los actos de habla. La idea original de Austinde

cia de un significado convencional como propiectad de ciertas· expre­ que hablar es un tipo de acción se canalizó gradualmente hacia un én­
siones lingüísticas (incluso significado convencional· implícito, como ·fasis casi completo en un ingrediente del comportamiento lingüístico:

en el c~so de 'la implicatura convencional; véase la sección 1.1.3), un estado mental de uno de los actores, haciendo de la interpretación

Grice se concentró principalmente en los tipos de significado no­ el mero reconocimiento de este estado mental por el otro actor .(0 ac­

natural que vio como dependientes del enunciador más que en la es­ tores). Por esta razón la atención sistemática a las «perlocuciones», o

tructura de las palabras u oraciones. En la subsiguiente tradición de los efectos de los actos de habla, no'es evidente. También por esta ra­

investigación en pragmática, en la que domina la mayoría de investi· . zón algunos· aspectos de las prácticas sociales, que· supuestamente

gación sobre significado implícito, toda la investigación ortódoxa en equilibran la teería basada en la intención, se veían como circunstan­
actos de habla, hasta los recientes intentos coherentes de llegar a un .. _ciales e incorporados sólo hajo el disfraz de ~ondiciones preparato­
acuerdo con el uso del lenguaje (como en Clark, 1996), el significado rias de los actos de habla ..
dependía completamente de las intenciones (incluso cuando se da un Éste es dificilmente el lugar para entrar en una completa discusión
estatus· central a nociones como «acción conjunta» como hace Clark). técnica de los temas que entran en juego. No estaría justificado reba­
. jar el papel que también juegan las intenciones. Un correlato filosófi­

()
Esto era una consecuencia directa de la definición de Grice del signi­
ficado del hablante como la intención del hablante en el momento de co imp9rtante de la intencionalidad es la direccionalidad. Dirigirse a

emitir un enunciado de producir un efectó en el oyente por medio del , ciertos objetivos es sin duda un aspecto de 10 que pasa en el uso del

reconocimiento del oyente de la intención de producir ese efecto. La lenguaje (véanse las secciones 3.2.2 Y 6.2.2). Pero sería igualménte

c?municación exitosa, o la transferencia exitosa de significados, es poco apropiado afirmar que todos los tipos de significados comunica­

V1sta como un proceso por el cúal se logra un éstado de conocimiento dos son directamente dependientes de una intención individual defi­

mutuo de una intención comunicativa, con la ayuda de principios de nible por parle del enunciador. Tal afirmación sería obviamente falsa.

cooperación (intencionalmente aplicados) .. Consideremos el caso de un Íninistro que debe renunciar después de

Debemos aclarar los movimientos conceptuales que intervienen. · hacer un estúpido comentario que se tomó como ofensivo, aunque

Introduciendo el significado del enunciador, parecía que «se elimina­ · mucha gente estaría de acuerdo en que no tenia una intención ofensi­

ba». el significado del lenguaje aunque el lenguaje era visto todavía va. O, a un nivel más trivial, 'véáse el intercambio en (16).

como el portador. Sin duda, éste fue uno de los mayores pasos en el (16) 1. Dan: Como es un gusano de seda gigante.
desarrollo de la pragmática lingüística. Después de todo, para aplicar 2. Debby: ¡Agggl ¡Qué idea más desagradable!
la definición de pragmática de Morris, lingüistas y filósofos empeza-
100 El lenguaje y el uso del lenguaje . Géneros deluso del lenguaje 101

La metáfora inocente de Dan puede tener la única intención de querer' ros ejemplos completos de cómo funciona este movimiento doble se
decir que Como produce una gran cantidad de seda. Pero eso no evita encuentran en la sección 504.)
que Debby active un significado potencial que no era en· absoluto in­
tencionado. Haciendo esto (16)1. realmente adquiere el significado al
que Debby reacciona. En otras palabras, (16) 1. no tiene simplemente 1.4 GÉNEROS DEL USO DEL LENGUAJE
un significado unavez es enunciado (lo que sería el caso si el signifi­
cado fuera determinado por la intención). Diferentes significados
pueden seguirse uno 'a otro en una sucesión dinámica. Dada la inde­ Se deben hacer algunas observaciones sobre el uso del lenguaje
tenninación del significado en general, que de ningún modo está res­ como objeto de estudio. de la pragmática. lenguaje no es una enti­
tringida a la metáfora y otros portadores de significado implícito, ésta dad monolítica, ni es el uso del lenguaje un fenómeno unificado. Hay
no es una observación trivial s,ino que toca el punto central de 10 que que trazar distinciones importantes. entre las diferentes manifestacio­
realmente pasa en la generación de significado por medio del uso del nes del lenguaje en uso. Esta idea puede haber sido captada mejor, a
lenguaje. (Nótese que esta observación contiene una de las razones su nivel más general, por la teoria de los géneros de Bajtin. Según
para optar por «gep.eraciónde significado» en lugar de «construcción esta teoría, cada esfera de la·actividad humana y por tanto cada esfera
de significado» cgmo ténnino abarcador para designar el objetivo de la cqmunicación (desde un tete el tete Íntimo hasta un campo de
central de una teolja pragmática; véase la sección DA). En otras pala­ batalla) muestra conexiones esenciales con una amplia gama de tipos'
bras,existe la ne<i~sidad de un retorno pragmático al significado en de enunciados (que pueden_ir desde.simples tumos en una conversa­
su complejidad completa, que tenga en cuenta la interacción,de fuer­ ci6n a un grueso libro, algunos de los cuales son por tanto primarios o
zas de la producci§n y de la interpretación del lenguaje, y que haga simples mientras otros son secundarios o complejos), que son relati­
justicia al papel central del significado en la realidad humana, ya sea . vamente estables en términos de contenido temático, estilo lingüístico
cognitiva, social o cultural. Ésta es la perspectiva que tomamos en y estructura composicional. Estos se denominan géneros del habla.
este libro. Tradicionalmente la pragmática se ha concentrado principalmente
Este cambio teórico, que separa el significado del lenguaje ~ás de en cuatro tipos de unidades que podrían reunirse bajo~sta etiqueta: un
10 que 10 hizo Grice al reconocer el papel de fenómenos cruciales tra­ número significativo de tipos de actos de habla (pero privados en gran
dicionalmente etiquetados como «no- lingüísticos» o capturados en manera de su fijación en esferas de la actividad humana al concen­
. tér;mnos c'omo «contexto», no está libre de riesgo. En particular, po­ trarse en una supuesta universalidad), conversaciones de diversa natu­
dría levantar una intenninable especulación sobre el significado: Con­ raleza. (donde se ha prestado más atención a la estructura composicio­
siguientemente, para que esta postura lleve a una erudición p~oducti­ nal que al estilo lingüístíco o al contenido temático), algunos tipos de
va, el cambio teórico necesita equilibrarse con una reincorporación acontecimientos de habla no conversacionales (nonnalmente prestan­
~etodológica del significado al lenguaje de tal manera que se con­ do atención debida al contexto institucional) y ciertos tipos de textos·
VIerta en un objeto de investigación tan empírico como sea posible a (donde han tendido a dominar ya el contenido, o el estilo lingüístico o
pesar de la naturaleza intangible de muchas de sus fuerzas constitu­ la estructura). Hasta ahora, no se ha propuesto ninguna teoría prag­
yentes. Éste es el reto básico al que se enfrenta este libro. (Los prime- mática que combine todo esto. Sin hablar de que el abanico sería am­
pliado para parecerse más a 16 que Bajtin podía haber tenido en men­
102 Ei lenguaje y el uso del lenguaje Resumen y lecturas recomendadas 103

te, Contrariamente, 10 que hay es una clara tendencia a restringir el concretos que representan subtipos de alguno de los anteriores, y se­
tema de investigación. Una de las maneras predilectas de hacer esto rán definidos a medida que avancemos, en la medida en que la defini­
es afirmar un estatus primordial para la conversación, por ejemplo. ción sea necesaria. . ."-,l

Aunque en algún sentido la conversación sea primordial (la gente ha­


blaba antes de empezar a escribir y los ,niños aprenden primero la
lengua a través de la interacción cara acara), sería un error dejar que
1.5 RESUMEN Y LECTURAS RECOMENDADAS
este hecho dicte la ganta de fenómenos de uso del lenguaje que in­
cluimos en el ámbito de la pragmática. Sería un error aún peor man­
tener el mito de que, en el fondo, toda la comunicación puede medirse Hemos revisado cuatro áreas tradicionales de la investigación
,en términos de desviación o correspondencia con parámetros que ope­ . pragmática:
ran en la conversación. Por esta razón empezamos este capítulo con • Deíxis, el anclaje del uso del lenguaje en 'el mundo real que se­
dos ejemplos muy distintos, uno conversacional y el otro tomado de ñala alguna de sus dimensiones, en un tiempo, espacio, sociedad,
un texto publicado. Demos un vistazo a este último otra vez: y discurso particulares.
(2) 1996 será un año de prosperidad y paz. • Actos de habla, las «cosas que uno hace con las palabras» en el
· nivel estructural de la.oración.
Imaginemos que a fmes de 1995, el lector .hubiera dicho (2) para in­ • Significado implícito, 10 que puede ser significado o comunica­
troducir un nuevo tema en una conversacióúdurante una cena. Proba­ do más allá de 10 que es explícitamente o literalmente dicho, por
blemente no le hubieran tomado en serio. No obstante, en el contexto medio de presuposiciones, implicaciones e implicaturas. .
del que fue sacado, (2) era muy serio y pudo publicarse como primera • Conversación, la interacción lingüística entre dos o más perso­
línea de una introducción editorial a una publicación muy respetada. nas como acción social coordinada y colaborativa.
En el fondo, no hay nada misterioso en esta diferencia. Esperamos
mostrar que puede ser explicada adecuadamente. En este punto, lo .Se han sostenido los siguientes argumentos:
significativo es simplemente que diferentes géneros operan bajo dife­
rentes restricciones y que; por ejemplo, 10 que ocurre con ciertos gé­ • Que estas áreas tradicionales tienen más intereses en comúÍ1 de
neros escritos no es derivado de 10 que ocurre en una conversación in­ lo que parecería a primera vista.
formal. • y que, como consecuencia, mantenerlas por separado y ~sarlas
En el resto de este libro, se necesitarán algunos términos para ha­ . como puntos centrales para la organización de un nuevo libro
blar sobre amplias categorías' de tipos de uso del lenguaje. Discurso sobre pragmática no sería una decisión productiva. Al mismo
se usará para designar cualquier variedad oral o escrita del uso del tiempo que se ilustraban' las interconexiones entre las cuatro
lenguaje. A diferencia de algunas tradiciones, texto se restringirá a ti­ áreas mencionadas, se introdujeron brevemente dos campos adi­
pos de discurso escritos. Conversaci6n' será usado para cualquier cionales de investigación:
forina de discurso oral que incluya a más de un hablante, sin importar 1. Cortesía, las estrategias empleadas por los usuarios del
que el escenario sea informal o estrictamente institucional. La mayo­ lenguaje para proteger su imagen y la de su destinatario.
ría de los otros términos que van a ser usados se referirán a,ejemplos
104. El lenguaje y el uso del lenguaje Temas de investigación 105

2. Argumentación, la estructuración global del discl,1.l'sO para (1983, 1992), Stroud (1992), Verschueren (1995b). Sobre géneros de
alcanzar objetivos comunicativos específicos. uso del lenguaje o tipos de discurso: Bajtin (1986), Dittmar (1995),
Gregory y Caroll (1978), Heinemann y Viehweger (1991), Holdcroft
En una posterior preparación para una aproximación más cohe­ (1979).
rente y sistemática a la pragmática:
• Se clarificó el estatus del significado como el producto de fuer~
zas que interactúan en la producción e interpretación del )en,. 1.6 TEMAS DE INVESTIGA<::IÓ'N
guaje, ubicadas firmemente' -en un mundo cognitivo, social y
cultural. 1. A mediados de 1996, un año antes de que Hong Kong se inte­
• ,Se (re)introdujeron algunos de los términos básicos para hablar grara a la República Popular China, se celebró una conferencia en
de ejemplos de uso dellenguaje: géneros del lenguaje, discurso, . Hong Kong para evaluar los cambios lingüísticos que podían acom~
texto y conversación. pañar al cambio politico. Se publicaron presentaciones y debates de
esa conferencia en Current Issues in Language and Society (3, 2,
Se recoiniendan las siguientes lecturas. En la mayoría de los te­ 1996; «One country, two systems, three languages» [Un país, dos
mas tratados en este capítulo, Levinson (1983) es todavía la fuente de sistemas, tres lenguas], editado por Sue Wright). Lo que sigue es una
información más eXhaustiva en un volumen. Sobre deíxis: Fillmore transcripción publicada del turno que abrió uno de los debates: .
(1975a), Irvine Ug95), Nunberg (1993) y,d~sd~ U:-n PUl1to de vista
Benjamín T'sou (City University of Hong Kong): Creo que esta
explícitamente intetdisciplinario, Watson (1987). Sobre actos de ha­
idea de que el contacto fronterizo implica quepodria haber un au­
bla: Austin (1962), Sbisa (1995a, 1995b), Searle (1969, 1975a,
mento en el uso del mandarín es cuestionable. Usted mencionó vaca­
1975b), Verschueren (1983a, 1983b y el primer capítulo de 1985a). ciones en su trabajo y habló de matrimonios mixtos, entre personas de
Sobre. significado implícito de distintos tipos: Blakemore (1992), diferentes lados de la frontera, en su presentación. Mi impresión es
Fillmore (1971a, 1971b), Gazdar (1979), Grice (1975, 1978, 1979, que el matrimonio mixto es normalmente entre partes que h!lblan el
1981), Hom (1984), Karttunen (1974), Lakoff (1973, 1995a, 1995b), mismo dialecto. En la frontera de este lado es, por supuesto, cantonés.
Leech (1983), Ostman (1986), Stalnaker (1974), Sperber y Wilson No puedo imaginar un hablante cuya lengua materna sea cantonés
(1986), Wilson y Sperber (1986). Sobre conversación: Atkinson y pretendiendo casarse con alguien que habíara sólo mandarín. Las ne­
Heritage (1984), Goodwin (1993), Gumperz (1982), Kerbrat~ gociaciones iniciales de la relación serían demasiado dificiles. Por eso
Orecchioni (1997), Roulet et al. (1985),Sacks (1992), Sacks, Sche­ lo que estamos tratando aqqí es más probablemente el caso de un ha­
gloffy Jefferson (1974), Searle et al. (1992). Sobre cortesía: Brown. y blante bilingüe mandarin-cantonés que se casa con un hablante mo­
nolingüe de mandarín o cantonés. Pienso que el efecto de cambio lin- .
Levinson (1987), Eelen (1998), Kienpointner (1997). Sobre argu­
güístico no es tan significativo como usted sugiere: la capacidad del
.mentación: Ducrot (1980 y en inglés 1996), Eemeren y Grootendorst
lenguaje ya estaba alli (pág.l52).
(1992, 1995) y, desde un punto de vista fuertemente interaccíonal,
Cou1ter (1990). Sobre el problema de la intencionalidad: Duboís Comente este texto en términos· de deíxis, actos de habla y signi­
(1987); Duranti (1988), Grice (1957, 1968), Rosaldo (1982), Searle
ficado implícito.
106 E/lenguaje y el uso del lenguaje Temas de investigación 107

2. Comente el mensaj e de la Ilustración 1.3 en términos de actos


de habla y trate de los aspectos de su significado de los que no se
puede ocupar la teoría de los actos de habla (en la forma rudimentaria
en que se ha presentado en este capítúlo).

Ilustración 1.3 Salida de. emergencia

3. El mensaje en Ilustración 1.4 es tan explícito como 10 puede ser


un enunciado. ¿Qué deja implícito?
4. Poco después de que comandos israelíes hubieran rescatado a
los pasajeros judíos del vuelo de Air France 139 (de Tel Aviva Pa­
rís), que habían sido secuestrados por miembros del FPLP (Frente
Popular para la Liberación de Palestina) en el aeropuerto de Entebbe
(Uganda), en la medía noche del 3 a14 de julio de 1976, tuvo lugar
la siguiente conversación telefónica entre el coronel israelí Baruch
Bar-Lev y el presidente de Uganda Idí Amin Dada qui~m, supues-
Ilustración 1.4 Instrucciones en caso de incendio.
108 El lenguaje y el uso dellengúaje

tamente, había colaborado con los secuestradores y que, en ese mo­


mento, no sabía todavía 10 que había ocurrido en el aeropuerto:
Bar-Lev: Señor, quiero darle las gracias por su cooperación y quiero

agradecérselo mucho.

Amin: Sabe que no he tenido éxito.

Bar-Lev: Muchas gracias por su cooperación. ¿Qué? ¿La colabora­

o ció!). no tuvo éxito? ¿Por qué?

o Amin: ¿He hecho yo algo?


2

O Bar-Lev: Hice exactamente 10 que usted quería.

NOCIONES CLAVE

Amín: ¿Qu-Qu- Qué pasó?

O Bar-Lev: ¿Qué pasó?

Q Amín: ¿Sí?

~@ Bar-Lev: No sé.

La pregunta que estamos intentando contestar en este libro es

•• ..
-~
.Amín:
~;-Bar-Lev:
¿No puede decírmelo?

Nó. No sé. Me han pedido que le agradeciera su coopera­


ción~ .

Amin: . ¿~f puede decir algo sobre la sugerencia que ha mencio­

atrevida e impertinente. Lo que queremos comprender es el funcio­


namiento del lenguaje en toda su complejidad. En última instancia
esto equivale a intentar comprender en qué y cómo el lenguaje contri­
O nado? .
buye a la vida y a la supervivencia al nivel de la raza humana, de co­
o Bar-Lev: . Un:;amigo con buenas conexiones en el gobierno me ha munidades más grandes y más pequeñas y de individuos y de situa­
pedido que le dé las gracias por su cooperación. No sé qué ciones. Pero formulemos algunas preguntas prácticas que son más
qu~ría decir con eso pero creo que usted sí 10 sabe.
o Amín: No 10 sé porque acabo de regresar apresuradamente de
fáciles de responder. Intentemos 10 siguiente. ¿Qué. hace la gente
cuando usa el lenguaje? o ¿Qué se hace mediante el1enguaje? o ¿Qué
e Mauricio.
le ocurre a la gente cuando usa el lenguaje? AunqueJa intención sea
e Bar-Lev: Ah...

•• Amín: ... Para resolver el problema antes de que expire el ulti­

mátum mañana por la mañana.

Bar-Lev: Entiendo perfectamente señor... Gracias por su coopera- .

ción. Quizás lo llame mañana por la mañana. ¿Quiere que

aprehender la complejidad, eso no significa que no podamos reducir


esa complejidad a un intento de formular respuestas paso a paso. En
honor a la verdad, empezaremos por una respuesta extremadamente
trivial a la pregunta de qué hace la gente cuando usa ellenguaje.;A.
10 llame otra vez mañana por la mañana?
partir de esta respuesta trivial deduciremos algunos conceptos clave
Amín: Sí.
que nos dejarán aproximar a una comprensión de lo que pasa en el
Bar-Lev: Muy bien, gracias señor. Adiós.
uso del lenguaje. Uno de esos conceptos nos proporcionará diferentes
(De: Stevenson, William, 1976, 90 ~inutes at Entebbe, Nueva ángulos desde los que mirar el comportamiento lingüístico, de manera
York, Bantam Books, pág. 215-216.) . que, combinados, nos proporcionarán un marco conceptual para estu­
diar cualquier fenómeno lingüístico desde una perspectiva pragmática
Describa 10 que ocurre en esta conversación.
i "C')

110 Hacer elecciones 111


Nociones clave
(Capítulos 3 a 6), y pautas para la construcción de metodologías es­ man palabras dentro de un amplio abanico de opciones fon?lógic~s
pecíficas para los diferentes temas (Capítulos 6 a 7). y/o fonéticas. Estas elecciones, por supuesto~ no tienen un orden 11­
Después de introducir algunos temas comunes en pragmática, neal comparable al modo en que se están listando en este párrafo. Por
ampliamente ilustrados, este capitulo es necesariamente teórico. For­ ejemplo, la asignación del género apropiado puede ser necesaria antes
ma la base primaria para el entendimiento de por qué la pragmática es de que se haga una elección de lengua, o las restricciones de eleccio­
interesante y sienta las bases para el resto (y por tanto la mayor parte) nes fonéticas o fonológicas específicas de ·una ocasión (p. ej. depen- -)
de este libro. Voy a esforzarme al máximo para hacerlo 10 más corto diendo de quiénes son algunos de los oyentes) pueden poner limita­
que pueda. ciones a la accesibilidad de ciertos géneros. Muy a menudo la
elección a diferentes niveles es simultánea. ~\
En segundo lugar, los hablantes no sólo seleccionan formas, se-.....!
2.1. HACER ELECCIONES lecciomm también estrategias. Puede ser más acertado volver a for- el
mular el primer tema diciendo, en vez de que las elecciones están he- O
chas desde cualquier nivel posible de la estructura, que las elecciones (),
Aunque se puedan decir otras muchas cosas -y aquí está la res­ están hechas de modo .que incluyan cualquier nivel posible de la es­
puesta trivial a nuestra pregunta general-, el uso del lenguaje debe tructura dentro de su ámbito. Seleccionar una estrategia de deferen­
consistir en la continua elección lingüística, consciente o incons­ . cia, por ejemplo, puede requerir que se hagan elecciones específicas
ciente, por razones internas (p. ej. estructurales) y/o externas al len­ dentro de una gran gama deniveles.estructurales, como el lenguaje, el
guaje. Estas elecciones pueden situarse a cualquier nivel de la forma estilo, las formas dé dirigirse a otras personas, el léxico ~n general,
lingüística: fonética/fonológica, morfológica, sintáctica, léxica o se­ etcétera.
mántica, y pueden cubrir opciones debidas a variedades, internas, o En tercer lugar, el término «elecciones» puede ser confuso en el
pueden suponer tipos de variación distribuidos regional, social o fun­ sentido de que puede sugerir invariablemente un acto consciente. Los
cionalmente. Se necesita una teoría del uso del lenguaje que deberia, procesos de los que estamos hablando, sin embargo, pueden mostrar
por tanto, ser capaz de dar sentido a estas «elecciones». Son necesa­ cualquier grado de consciencia. Algunas elecciones se hacen muy
rias unas aclaraciones preliminares para clarificarlo que ya está en conscientemente, como cuando un r:econocido antimonárquico grita
este párrafo, otras para evitar malentendidos. futuros.
i Viva la República! en vez de i Viva el rey! en la coronación del rey
En primer lugar, laS elecciones se hacen a cualquier nivel posible de Bélgica (siendo consciente de algunos de los riesgos), o comple­
de la estructura. Para empezar, debe elegirse una de las 6.000 lenguas tamerite automáticas como cuando un hablante nativo de inglés añade
o una forma combinada, o debe hacerse una nueva elección con cada la sibilante s al verbo ladrar bark en This dog barks too much (un acto f¡).
nueva palabra o frase. Aunque esta observación puede ser trivial, las . que puede volverse muy consciente para un estudiante de inglés). Hay
elecciones en cuestión nunca lo son. Pueden tener efectQ,s muy pe­ que tener en cuenta que incluso las características lingüísticas que
queños en la interpretación o graves consecuencias políticas. Además, normalmente se consideran como meramente «gramaticales», como
se ha de seleccionar un género y se han de construir oraciones, por 10 la concordancia de sujeto y verbo, están incluidas en el ámbito de. los e
que se han de hacer elecciones de palabras y formas gramaticales. Al
hablar se seleccionan y se producen patrones de entonación y se for­
procesos a los que nos hemos referido como elecciones. Esto resulta. e
••

a
'F..
(
i

112 Nociones clave Hacer elecciones 113


directamente del enfoque de la pragmática como perspectiva presen­ Otro modo de hablar sobre este tipo de fenómeno tradicional en lin­
tado en la introducción de ~ste libro. güística es la distinciÓn entre la opción marcada y la no marcada.
En cuarto lugar; las elecciones se hacen en la producción y en la Usando esta terminología, la respuesta preferida a una oferta, p. ej. la
interpretación de un enunciado, y ambos tipos de elección son de, aceptación, es la opción no marcada, mientras que el rechazo sería la
igual importancia para el flujo comunicativo y para el modo en que se marcada; del mismo modo que en inglés How tall is he? 1 es la opción
genera el significado. Si recordamos lo expuesto en la sección 1.3, no marcada, para preguntar la altura de un hombreen la dimensiÓn
esta observación es probablemente la razón principal para no permitir vertical, y How short is he? 2 sería la opción marcada, proporcionando
un énfasis exclusivo en la intencionalidad del emisor del enunciado una base para la inferencia de que «él» está por regla general en el
en el estudio del uso del lenguaje.
o En quinto lugar, un usuario del lenguaje no tiene libertad de elegir
extremo más corto de la escala corto-largo. Hay que considerar, sin
embargo, que la ausencia de marca no debe confundirse con la neu­
O entre seleccionar o no hacerlo, excepto al nivel en que puede decidir tralidad en el sentido general del término. Hubo un tiempo en que el
O entre usar el lenguaje o permanecer en silencio (siendo la segunda pronombre personal él en el par él-ella se veía como no marcado y


ti
opción tan significativa como la primera en determinadas crrcunstan­
cias).Una vez que el lenguaje se usa, quien lo hace está bajo la obli­
pudo usarse genéricamente para referirse a cualquier ser humano .
Esto no significa que ni siquiera entonces hubiera algo de «neutral»

•e
gación'de hacéi-ele-tciones, sin importar si el abanico de posibilida­ en la elección. De manera clara, había una correlación con los patro­
des puedesatisfacét las necesidades comunicativas del momento o nes de dominio social, 10 que explica por qué, bajo la influencia de
no. Por esta razón.ros cientificos t por ejemplo, crean continuamente los cambios sociales en marcha, el él genérico se ha vuelto inacepta­
nuevas terminologías. Sin embargo, ellos tienen la ventaja-de poder blé en muchas partes del mundo angloparlante, volviéndose, por tan­
estar mucho tiempo considerando las opciones disponibles y decidir to, una opción marcada.
si son satisfactorias y si no se puede crear una nueva opción, y, ade­ Finalmente, las elecciones evocan o llevan consigo sus alternati­
más, pueden explicar todo el proceso. La comunicación de cada día vas. En otras palabras, cualquier elección de forma; motivada por su
simplemente se detendrla si los usuarios regulares del lenguaje fuesen ubicación en la dimensión del significado, no sólo designa esa ubica­
o tan selectivos en sus elecciones. Siempre tenemos que quedamos con ción específica sino que evoca además toda la dimensión completa.
o la aproximación que viene a la mente como la más cercana a lo que
necesitamos: una formulación que ilustra su propio propósito porque
Por esta razón la elección de tiempos verbales en inglés lleva consigo
casi inevitablemente la dimensión de tiempo en la representación de
o conlleva el riesgo de que se preste demasiada atención a los niveles una acción o acontecimiento (por la disponibilidad de una referencia
conscientes de elección y la intencionalidad. En otras palabras, siem­ gramaticalizada al pasado, presente y futuro). En el campo de las
o pre hay serios riesgos en el uso del lenguaje.
En sexto lugar, como regla, las elecciones no son equivalentes.
elecciones léxicas, es fácil demostrar que los efectos comunicativos
o
••
Esto ha sido ilustrado hasta· ahora con el fenómeno de organización
de la preferencia tal como lo usa el análisis de la conversación (ver la
sección 1.1.4). Técnicamente, una oferta puede responderse tanto con 1 En español la traducción literal seria: ¿Cuánto mide de alto? o ¿Cuánto es de

•., una aceptación como con un rechazo. La aceptación es, sin embargo,
la opción preferente, por 10 que es necesario atenuar los rechazos.
alto? (Nota de las tt.] .
2 ¿Cuánto mide de bajo? ¿Cuánto es de bajo? seria la traducción literal córres­
pondiente en este caso (Nota de las tt.)

••
--------------------------------------------~ ....... _----_.-. __ ......
--~ ---~---~

114 , Nociones clave Variabilidad, n egociabilidad y adaptabilidad 115


están a menudo señalados tanto con la no elección de una opción dis­ lidad, la negociabilidad y la adaptabilidad. Vamos a intentar definir­
ponible como con la elección hecha en ese momento. Consideremos los brevemente.
una empleada que ha estado recibiendo mensajes obscenos, sabe de La variabilidad es la propiedad del lenguaje que define la gama
quién provienen y se va a quejar al gerente. Si el gerente le dice Su de posibilidades dentro de las cuales se puede seleccionar. Hace más
comportamiento es sin lugar a dudas cuestionable, el término cues­ de dos décadas Hymes dijo que «en el estudio del lenguaje como mo'"
tionable es absolutamente inapropiado. Todavía existe la posibilidad do de acción, la variación es una pista y una clave» (1974, pág. 75).
de que la empleada reaccione, o al menos le gustaría reaccionar con Esta frase evoca rápidamente 10 que se conoce tradicionalmente como
algo como i Y por qué no inaceptable, o incluso mejor atroz! Estos «variedades del lenguaje», ya sean definidas geográfica, social o fun­
procesos son más claros cuando se confrontan explícitamente las op­ cionalmente: Considerando nuestra perspectiva pragmática en el uso
ciones posibles. Pero todas están siempre en funcionamiento. A un del lenguaje o acción verbal, la frase sigue siendo cierta traS generali­
nivel más bajo de complejidad conceptual, donde se debe elegir entre zar la noción de variabilidad a toda la gama de opciones de variables
conjuntos contr;:tstivos relativamente simples, funciona el mismo (incluidas las que son, estrictamente hablando, intyrnas a la «varie­
principio. Así pues, venir evoca el contraste venir-ir por la misma ra­ dad») que debemos suponer aécesibles a los usuarios del lenguaje pa­
zón que comprar evoca el contrast~,comprar-vender (y complementa­ ra que ellos puedan (macer elecciones». La empleada acosada se­
riedad); ninguno de ellos podría entenderse por completo sin su fun­ xualmente,no· se habría molestado por el Su comportamiento es sin
damental conexión con el otro --que permanece intacta a 10 largo del lugar a dudas cuestionable de su gerente si nohllbiera tenido acceso
proceso de elección (aunque uno puede, por supuesto,: manipularlo de a un campo más amplio de opciones para describir de manera más
distintas maneras). Esta propiedad del proceso de elección lingüística adecuada «su comportamiento) (algunas de las cuales son más ade­
es una de las razones por las que dijimos al flnal de la sección 1.1.4 cuadas a .su respuesta emocional y a su percepción de cómo debe ser
que, para entender el uso del lenguaJe, las explicaciones deben ser la política corporativa en relación con la protección de su integridad)
()
contrastivas hasta el punto de que podamos hablar tanto de lo que es y si ella no hubiera dado por supu~sto que el gerente tenía el mismo
posible cOmO de lo. que es observado. acceso. Cualquier cambio en esta constela~íón, teniendo en cuenta é)
Con estas notas preliminares en mente, deberíamos avanzar ahora que estamos realmente hablando de variabilidad, podría haber hecho
en la noción de «hacer elecciones», paliando así su papel trivial en la . que la empleada adaptara sus opciones interpretativas y su reacción
respuesta a la pregunta de qué es 10 que la gente hace cuando usa el posterior. Por ejemplo, si hubiera sabido que el gerente no tenia acce­
lenguaje. a
so la misma gama de opciones por un conocimiento incipiente de la o
lengua, quizá se habría quedado satisfecha con la forma en que éste O
enunció el veredicto. Una satisfacción similar podría haber resultado ~
2,2 VARIABILIDAD,NEGOClABILIDAD y ADAPTABILIDAD del conocimiento de que la política empresarial prohíbe pálabras co­

mo inaceptable o atroz en el vocabulario de los gerentes, laque pon­

dría, por tanto, límites reales a las opciones posibles. La noción de va­

. Parece que al menos se necesitan tres conceptos clave relaciona­


riabilidad debe tomarse tan enserio que la gama, de opciones posibles

dos jerárquicamente para comprender el proceso de la «elección»


, no se puede ver como algo estático o estable. No es una noción fija, al

como la descripción básica del uso del lenguaje. Éstos son la variabi-
contrario, está en continuo cambio. Además, sería un error colocar

116 Nociones clave Variabilidad, n egociabilidad y adaptabilidad 117

este elemento de «cambio» exclusivamente en una amplia dimensión Air Aire


diacrónica. En cualquier momento en el transcurso de la interacción,
Horselips labios de caballo
una elección puede descartar alternativas o crear otras nuevas para los
Breath aliento
posibles propósitos del hÍtercambio, aunque estos efectos pueden ser pelo
Hair
. siempre renegociados, 10 que nos lleva al segundo concepto clave. On flat-palmed apple en manzana de palma plana
La negociabllidad es la propiedad del lenguaje responsable del (From Terms ofsale. Buffalo: (De Terms ofa sale, Búfalo,
hecho de que las elecciones no se hagan mecánicamente o. según Meow Press, 1996) . Meow Press, 1996)
unas reglas estrictas o unas relaciones de forma-función fijas, sino
o basadas en principios y estrategias altamente flexibles. No hay por Según todos los propósitos y principios prácticos, éste es un
o tanto ninguna regla que nos diga cuándo seleccionar Estoy razona­
blemente satisfecha sobre No estoy insatisfecha, ya que representan·
enunciado real en inglés. Incluso teniendo en cuenta que el trabajo de
. los poetas es romper las reglas del lenguaje o aumentar su potencial,
dos formas lógicas diferentes de expresión para un estado de ánimo no por eso su poesía deja de ser parte del lenguaje que usan. Dejar
comparable; no obstante, hay un principio (manipulable) que dice que esto a un lado como demasiado excepcional para ser relevante serla
la forma con la 'do"RJe negación, incluso si descarta la negación, está . como ponerse una venda en los ojos que evitarla que viésemos los as­

más abajo en el exl!emo negativo de la escala positivo-negativo que pectos importantes de las funciones del lenguaje más mundanas.

el enunciado que evita la negación por completo. En lingüística existe La negociabilidad también implica una indeterminación de varios
e una gran trádición ~'ª,e. contrastar estructuras diferentes y relacionarlas tipos. En primer lugar hay una indeterminación en la elección por
.. ;) en una escala de gfiunaticalidad y/o aceptabilidad, señalando los ca­ parte del productor del lenguaje. Como se indicó en la sección 2.1.,
sos que son claram~nte agramaticales o inaceptables con un asterisco. los usuarios del lenguaje operan bajo la restricción de tener que tomar
Sin embargo, la negociabilidad es tan fuerte que la pragmática no se decisiones, se correspondan éstas o no con sus necesidades. Así, el
presta a este enfoque del asterisco. Aunque tiene sentido que la prag­ gerente imaginario en el caso de acoso sexual, actuando según direc­
o mática mire a lo posible y a lo.real para aprender sobre los principios tri'ces empresariales igualmente imaginarias que prohíben el uso de
o
del uso del lenguaje, es inútil que busque los límites de 10 que es po­ inaceptable o atroz en el vocabulario de los gerentes, puede sentirse
f) sible, p. ej. lo imposible que (si se encontrara, convertiría a los prin­ frustrado por tener que elegir cuestionable oun término semejante
() cipios y estrategias en reglas reales) es inútil. Recordemos el clásico que no agote el significado que quiere expresar, pero se ha de decir
ejemplo de Russell de-un enunciado imposible o sin significado: *Lo algo, incluso si no hay manera de hacer una buena elección. Para
cuadripartido bebe dilación, que pronto se usó para referirse a las re­ ilustrar este punto los ejemplos imaginários son particularmente útiles
uniones de las cuatro potencias después de la Segunda Guerra Mun­ porque nos permiten manipular las restricciones de un modo en que
dial, que no dieron los resultados deseados ni a la velocidad deseada. se vuelven muy visibles. En el uso cotidiano las elecciones que ha­
Incluso la igualmente clásica de Chomsky Las ideas verdes 'incoloras cemos provienen de un conjunto de opciones tan convencional y ha- .

••
duermen profundamente podría usarse si fuese necesario: obsérvese bitual que apenas nos damos cuenta de que estamos restringidos .por
10 que hace Meredith Quatermain en poesía: ese conjunto y que podrían crearse .otras posibilidades que, en su
momento, empezarían a imponer nuevas restricciones. Por otro lado,
o seleccionar opciones que no parecen muy apropiadas a los propósitos

••
118 Nociones clave Variabilidad, negociabilidad y adaptabilidad 119

actuales puede, en última instancia, extender el uso y significado de


de Bajtin) es siempre extremadamente relativo y nunca se debe dar
las formas seleccionadas. Ésta es una de las dificultades del uso del
por sentado.
. lenguaje comparable con la imposibilidad de ser completamente ex­
La adaptabilidad es la propiedad del lenguaje que capacita a los
plícito, lo que puede, por tanto, ser explotado creativamente. seres humanos a hacer elecciones lingüísticas dentro de una gama de
En segundo lugar, hay también indeterminación de elección por posibilidades variable de modo que se acerquen a la satisfacción de
parte del intérprete. Recuérdese; a este respecto, 10 que se dijo de las sus necesidades comunicativas. Esta defmición pide inmediatamente
propiedades de la implicatura conversacional (en la sección 1.1.3). que se hagan unas advertencias. En primer lugar, la referencia a las
Esta observación, sin embargo, se extiende más allá del dominio de la «necesidades comunicativas» no implica que las necesidades a las
implicatura. Todo 10 que se diga puede interpretarse de muchaS mane­ que sirve el uso del lenguaje tengan que ser todas «comunicativas» en
ras, siendo uría de las razones (como se indicó en la sección 2.1) que el estricto sentido de la palabra. Aunque tomamos la postura de que
las elecciones no excluyen necesariamente sus alternativas del mundo casi todo el uso del lenguaje es en cierto sentido comunicativo (inclu­
de la interpretación. so si sólo implica a una persona), no queremos hacer de esto una
En"tercer lugar, interviene la indeterminación también porque las cuestión de fe de lo que debe "depender todo lo que sigue; tenemos en e¡
elecciones, una vez hechas, ya sea en el lado de la producción o de la .cuenta.también formas de usar el lenguaje que almenas están próxi­ )
interpretación, pueden ser continuamente renegociadas. Aquí estamos mas.a ser puramente expresivas, sin ningún propósito o efecto comu­
tocando una dinámica fundamental del uso del1enguaje que espera­ nicativo. En segundo 'Jugar la frase «necesidades comunicativas»
mos ilustrar en el resto de este libro (el Capítulo 5 está dedicado a puede sonar como sLquisierareferirse anecesídades que son de cierto
ello completamente). . " modo «generales». Deheríamosenfatizar, por tanto, que las «necesi-'
Si usar el. lenguaje. consiste en Jacontinua.ele.cción lingüística dades» en cuestión se generan. en su mayoría en contexto y pueden, -".
dentro de una gama: de posibilidades variables· amplia e inestable, por tanto, ser bastante específicas. En tercer lugar, observemos que a
elección no regida por reglas, sino dirigida por principios y estrate­ la «satisfacción» en la definición de arriba hay solamente un acerca­
r)
gias altamente flexibles y permanentemente negociables, es más que miento, ya que puede ocurrir en distintos grados. Ese término, por. \..
lógico preguntar cómo es todavía posible que se use el lenguaje para otra parte, no debería ser interpretado como una exclusión de la posi-·
propósitos comunicativos de manera satisfactoria. Es aquí donde bilidad, ya ofrecida claramente antes, de un serio fracaso comunicati- O·
nuestra tercera noción clave,la adaptabilidad, "entra en juego. No es va ni de la incidencia de circunstancias bajo las cu¡;¡.les hay una nece- f')
una explicación, sino una propiedad que debemos suponer que tiene sidad de no comunicación o incluso de mala comunicación. 'é"

el lenguaje, para ser capaces de entender que puede conseguirse un Finalmente, la adaptahilidad no debería ser interpretada unidi­
cierto grado de éxito con la comunicación verbal. Antes de entrar en reccionalmente. El término por sí mismo puede guiar a upa versión
esto con más detalle, hay que señalar que no hay razón para elogiar simplificada de que las· elecciones de la lengua se hacen:'según cir- . O
los poderes del lenguaje. Las propiedades del uso del lenguaje a las cunstancias preexistentes. Eso también interviene, pero aquí no acaba fE)
que hemós prestado atención hasta ahora llevan consigo la garantía de todo. El otro ·lado de la moneda es que las elecciones hechas cambian
dificultades comunicativas y fraéaso. Deberíamos darnos cuenta de las circunstancias, o se adaptan a ellas. Consideremos, por ejemplo, e
que el éxito comunicativo, excepto en. algunas áreas puramente prác­ los sistemas de cortesía que están creados por relaciones sociales y • .
ticas (o esferas de la actividad humana, tomando prestado el término . que, al mismo tiempo, crean estas relaciones. La. elección de un sis­
~J 120 Nociones clave
e ------~----------------~~~~
Adaptabilidad y universalidad 121
~ tema de cortesía solidaria (tú, nombre de pila, etc.) frente a un sistema dad una vez más para llamar la atención sobre algunos de los modos
, de cortesía deferente (usted, apellido, título, etc.) está típicamente ba­ en que ha sido tratada en las ciencias relacionadas con el lenguaje y
a sada en la cercanía entre los interlocutores. Cuando esta cercanía no relacionarlos con conceptos paralelos en biología y psicología).
,o existe, sin embargo, los hablantes pueden optar por la cortesía solida­
ria. Al hacer eso se crea la apariencia de cercanía hasta el punto de
que sería dificil dejar de hacerlo sin crear una clara hostilidad. Tras
2.3. ADAPTABILIDAD Y UNIVERSALIDAD'
haber hablado con alguien dirigiéndose a él por su nombre, el cambio
iJ a una fonna de tratamiento más fannal sólo puede hacerse por razo­
nes especiales y llevará consigo un significado extra adicional (implí­ Una aproximación a la pragmática que coloca a la adaptabilidad,
l"~~
\JI cito). Típicamente intervendrán elementos de juego o un antagonis­ en el sentido en que se ha descrito, en el centro de lo que es intere­
mo. En este último caso las elecciones pueden ser tratadas como muy sante sobre el uso del lenguaje es básicamente incompatible con el ti­
descorteses, a pesar del grado objetivo más alto de cortesía que esta­ po de universalidad basada en la idea de una competencia lingüística
ría asociado nonnalpente con las elecciones hechas. Este ejemplo es innata, que es componente de una estructura mental con base genética
al mismo tiempo un~ ilustración extra de la negociabilidad involucra­ y autónoma y que comprendería una gramática universal coinpleta.
da en la toma de d~dsiones lingüísticas y de la falta de relaciones Según esto la adquisición del lenguaje, por ejemplo, no debería ser
fonna-función estaolecidas. . guiada por estrategias de aprendizaje más generales. Puede aceptarse
. Los tres concep1bs que hemos introducido en esta sección son una base genética fuerte, pero desde luego no autónoma ni en el pro­
fundamentalmente Íilseparables. No represen.tan temas de investiga­ ceso de adquisición ni a nivel del funcionamiento adulto. Sin embargo,
ción sino simplemente propiedades interrelacionadas del objeto de la noción de universales pragmátiGos o universales de la (inter)acción
investigación global-de la pragmática lingüística, la funcionalidad o lingüística no es contradictoria. La gente tiene la capacidad de apren­
der nuevas lenguas y de empezar a funcionar con más o menos efi~
o funcionalidad significativa del lenguaj e. Su clasificación jerárquica es
una herramienta conceptual para enfrentarse a la complejidad de los' ciencia en estilos de comunicación diferentes de los que usa habitual­
O fenómenos pragmáticos que nos pennitirán usar la noción jerárqui­ mente, aunque sea una experiencia cargada de frustraCión y frecuente
O camente más alta de «adaptabilidad» como el punto de referencia en fracaso. Por tanto, debe haber un centro universal de algún tipo, aun­
O la futura fonnación t~órica y en la investigación empírica, teniendo en que hayal menos dos fonnas diferentes de ver la universalidad, que
o cuenta que está vacía de contenido tanto sin la variabilidad como sin
la negociabilidad. Si usamos la adaptabilidad como punto de partida
debemos distinguir.
En primer lugar puede hacerse una asunción de universalidad
G P?dremos asignar cuatro tareas claras a las descripciones y explica­
máxima. Según este punto de vista la propia experiencia del investi­
O CIOnes pragmáticas (que se discutirán con más detalle en los capítulos
gador se puede tratar como la más representativa de la experiencia


(1
3 a 6). Antes de prese~tar esas tareas o «ángulos de investigación»

(ver la sección 2.4 más abajo) nos gustaría hacer algunas observacio­

universal correspondiente. Un ejemplo de las ciencias políticas y so­


ciales es la tendencia a postular una gran creencia en la «racionalidad

••., nes s'obre la noción de adaptabilidad, explicando su relación con la


noción de universalidad, con la que a primera vista puede parecer in­
compatible. (En la sección 9.3. volveremos a la noción de adapfabili-
mínima», donde la medida de esa racionalidad es el investigador
mismo. Una actitud de este tipo no sólo caracteriza a ciertas teorías
sintácticas que solían ignorar la relevancia de con'siderar un amplio

G
G
122 Nociones clave Adaptabilidad y universalidad 123

abanico de lenguas para descubrir los principios de la gramática uni­ nos con una fuerte «construcción teórica» con aspiraciones universa­
versal que se quería describir, sino también a ciertas tendencias en les.
pragmática, como la teoría de los actos de habla de Searle (el recono­ Actuando con precaución, debería señalarse una conexión intere-'
cido intento de proporcionar validez universal a las categorías univer­ sante entre los universales y la pragmática. Para ese propósito revi­
sales de los actos de habla a pesar de un enfoque filosófico introspec­ semos brevemente la visión global de Cornrie (1981, págs. 22-27) de
tivo). Los peligros de este enfoque deberían ser obvios. Aunque el los tipos de explicación para los universales. En su perspectiva, la
aprendizaje de otras lenguas y estilos comunicativos sólo puede ex­ monogénesis, o asunción de un ancestro común para todas las lenguas
plicarse con referencia a la existencia de un centro de competencia conocidas, es eliminada porque no es comprobable mediante pruebas
gramatical y pragmática universal, el objetivo de aprender es siempre y porque no puede explicar los universales de los que sólo se puede
dominar las diferencias y; a un nivel más elemental, incluso la noción decir que son tendencias a través de una amplia gama de lenguas (sin
específica de variabilidad que hemos propuesto más arriba debería caracterizar necesariamente a todas las lenguas individuales). El in­
eliminarse a partir de la asunción de la máxima universalidad, sin ha­
,
natismo es rechazado y considerado una explicación vacía porque no
blar de lo que hemos dicho de la negociabilidad y la adaptabilidad y está sujeta a una verificación independiente. Con todo «[... ] puede
tf1mbién las otras propiedades' de la elección lingüística sobre las. que darse el caso de que al menos'algunos universales del lenguaje pue­
hemos llamado la atención. dan' explicarse en el. fondoentél1Í1inosde predisposición genética
Así pue~, una asunción de.. universalidadmlnima és un punto de humana» (pág. 24). Otras explicaciones psicológicas muestran un ,
partida mucho más seguro para observar a las lenguas y.a su uso. Es " . grado de plausibilidad más alto. Es «posible que ciertos universales
necesaria esta asunción cuando hablamos de «universales de .adapta­ del lenguaje puedan correlacionarse con otros aspectos de la psico..:
bilidad» o «universales pragmáticos», o «universales.de la (ínter)­ logíacognitiva humana que 'pueden ser examinados independiente­
acción lingüística»; Por~esta razón en este libro 'se encontrarán pocas 'mente» (pág. 24). Se acepta abiertamente la validez de las explicacio­
declaraciones de universalidad. Como mucho, llamaremos la atención nesfuncionales, que ideritifican ciertos rasgos del lenguaje como es­
sobre las tend~ncias supuestamente universales, siempre tratando de trategias para reducir elementos disfuncionales, o «para hacer el
recordamos a nosotros mismos la necesidad de evitar compromisos lenguaje más funcional, ya sea como sistema de comunicación en ge­
~n es~ área. Por esa razón también, a pesar de que este libro tiene neral o más en particular en relación a las necesidades comunlcativas
mtenclOnes teóricas de algún tipo, se ha escrito con un recelo básico de los humanos» (pág. 25) es aceptada abiertamente. Se dice de un
hacia las teorías. de la pragmática: Hay, por supuesto, una paradoja elemento que es disfuncional cuando hace que la recuperación de sig­
fund~mental en la investigación empírica: el trabajo empírico es ne­ nificado desde la estructura sea más dificil. A partir de esta definición
cesano para substancializar y validar las propuestas teóricas, y sin y de los ejemplos presentados por Cornrie (p. ej. que los genitivos son
embargo los marcos teóricos son necesarios como herramientas des­ más difíciles de relativizar que los sujetos, los constituyentes de las
criptivas y heurísticas incluso para las tareas más empíricas. Por con­ oraciones subordinadas son más difíciles de relativizar que los de las o
siguiente, debemos describir simplemente las ambiciones de este libro oraciones principales, la retención de un pronombre en la posición
como un intento de definir un campo de la pragmática. Se corístruirá relativizada sólo se encuentra en las posiciones en' que es más difícil
un «mar~o teórico» en la medida en que la teoría sea importante para relativizar) debería quedar claro que las explicaciones funcionales
conseguir este objetivo, pero no nos deberíamos permitir satisfacer­ son, en realidad, un tipo de explicación psicológica: el problema cru­
;- ..

124 Nociones clave Cuatro ángulos de investigación 125

cial al que hacen referencia es el procesamiento cognitivo de la in­


formación. Cornrie los enlaza con explicaciones pragmáticas:
Este tipo de explicación funcional podría, por supuesto, ser lleva­ 2.4. CUATRO ÁNGULOS DE INVESTIGACIÓN
do a cualquier tipo de sistema comunicativo y no necesariamente res­
tringido a uno usado por humanos. Cuando se mira a las explicacio­
nes pragmáticas, sin embargo, hay ciertas instancias en que parece Como se anunció (en la sección 2.2), la noción de adaptabilidad
haber. una más clara correlación entre las propiedades de la estructura nos permitirá asignar cuatro tareas claras. a las descripciones y expli­
del lenguaje y las propiedades del uso del lenguaje en las comunida­ caciones pragmáticas. Cada una será tratada detenidamente en los ca­
des humanas (pág. 26). . . pítulos 3 a 6. Estas cuatro «tareiül» o «ángulos de investigación», que
no constituyen temas de investigación separables, pero que deberían
Como ejemplo se menciona la presencia del sistema de deícticos para verse como puntos centrales de una aproximación praginática al uso
referirse al hablante yal oyente. Puesto que podrían construirse otros del lenguaje, son los siguientes.
tipos de lenguajes pero esto no sucede, es «difícilmente accidental el En primer" lugar, hay que identificar los correlatos contextuales
que la presencia deljistema de deícticos de referencia personal se co­ de la adaptabilidad. Estos incluyen potencialmente todos los ingre­
rrelacione tan altaniéñte con el uso básico del lenguaje en las interac­ dientes del contexto comunicativo con los que tienen que ser intera­
ciones cara a cara» (Pág. 26). daptables las elecciones lingüísticas. La gama va desde aspectos del
A partir de est~breve esbozo parece que, en la medida en que entorno físico (p. ej. la influencia de la distancia en el volumen de la
son posibles las exp~~caciones, ios universales pueden ser tratados, en voz) hasta las relaciones sociales entre hablantes y oyentes y aspectos
nuestra terminología,'.como aspectos del lenguaje que son interadap­ del estado mental del interlocutor. Incluir los estados mentales bajo la
tables las predisposiCiones genéticas, los procesos cognitivos y las etiqueta de contexto es una desviación de la práctica común que· se
necesidades comunicativas. Nunca debería eliminarse la posibilidad
o de los universales puramente formales que aparecen más o menos ac­
sigue en lingüística. Al hacer eso, sin embargo, se eliminan las impli­
caciones engañosas de· tratar el contexto como simplemente «lo que
o cidentalmente. Además, deberíamos tener cuidado en no atribuir dis­ hay ahí afuera». No hace falta decir que los correlatos contextuales no
funcionalidad inherente a las propiedades específicas del lenguaje deberían verse como realidades extralingüística~ estáticas. En primer
precipitadamente (dado que la negociabilidad es un rasgo tan impor­ lugar, los usuarios del lenguaje seleccionan dentro de un amplio aba­
tante del funcionamiento real del lenguaje). Siempre que un universal nico de «realidades» disponibles convirtiéndolas en. correlatos rele­
puede explicarse, es posible que la explicación sea en términos de la vantes (ver la sección 3.1). Además, una vez seleccionados, esos co­
adaptabilidad, y, en ese sentido, funcional o pragmática en el amplio rrelatos están sujetos a variación y negociación en su interacción con
significado de los términos que se usan en este libro. Por tanto, puede aspectos del acontecimiento comunicativo en transcurso, en relación a
que sea el caso que todos los universales explicables sean,en última los cuales pueden verse funcionar.
instancia, universales pragmáticos. En segundo lugar, los procesos en cuestión han de ser situados
con referencia a los diferentes objetos estructurales de adaptabili­
dad. Puesto que el hecho de hacer selecciones comunicativas tiene
lugar en todos los niveles posibles de la estructura lingüística que

126 Nociones clave Cuatro ángulos de investigación 127
conllevan variabilidad de cierto tipo, los fenómenos pragmáticos pue­ dirse con el «contenido» real de ciertos estados mentales (que inclui­
den estar relacionados con cualquier estrato del nivel de la estructura, mos entre los correlatos contextuales de la adaptabilidad).
desde las características del sonido y los fonemas hasta el discurso y Estas cuatro tareas en conjunto pueden considerarse los ingre­
.más allá, o hasta cualquier tipo de relación entre niveles. No sola­ dientes necesarios de una perspectiva pragmática adecuada para
mente están relacionadas las «estructuras», sino también los princi­ cualquier fenómeno lingüístico, pero estas cuatro tareas de la investi­
pios de la «estructuración}}. gación pragmática no deben situarse como iguales. Sus contribucio­
En tercer lugar, cualquier descripción o explicación pragmática nes no son solamente complementarias, también tienen diferentes
debe dar cuenta de las dinámicas de la ádaptabilidad como se ha cargas funcionales a llevar· a cabo dentro del marco general de la
manifestado en el fenómeno baj o investigación, en otras palabras, el perspectiva pragmática. Se relacionan entre sí como se muestra en la
desarrollo de los procesos de adaptación a 10 largo del tiempo. Dada figura 2.1 y como se describe más abajo.
la propia naturaleza de esta tarea, no se puede llevar a cabo sin dar Én primer lugar, puede usarse una combinación de los correlatos
toda su fuerza a la negociabilidad de las elecciones. Esto supone la contextua les y los objetos estructurales de la adaptabilidad para defi- .
explicación del funcionamiento real de los procesos de adaptación, es nir ellocus de los fenómenos de adaptación, es decir, ambos descri­
decir, hay que dar respuesta a las preguntas sobre las maneras en que ben la combinación de las coordenadas lingüísticas y extra lingüísti~
se usan los principios y las estrategias de comunicación en las elec­ cas en el espacio comunicativo de un acontecimiento comunicativo.
ciones y en la negociación de esas 'elecciones eH la producción y en la. Su interrelación es de. gran importancia. ,Así pues, nuestro tema de in­
interpretación. vestigación puede estar relacÍonadocon los procesos de socialización
En cuarto lugar, debemos considerar las. diferencias en la salien­ infantil en.rélación con las eleccioriesal nivel del código, o conelpa­
da de los procesos de adaptación. No todas las elecciones, ya sean pel del oy~nte en relación .con la,.estructura de la información en la
en la producción o en la adaptación, se hacen de manera igualmente oración, etc. Los correlatos. contextuales y los objetos estructurales
consciente o intencionada. Como se ha dicho anteriormente, algunas son nociones relativamente claras que pueden ser a menudo usadas
son casi automáticas y otras son altamente. moti:vadas. Entran en jue­ cómodamente como punto de partida para tareas descriptivas especí- . o
go diferentes formas de procesamiento en el medio de la adaptabili­ ficas en pragmática y como parámetros a lo'sque hay que referirse
dad, la' «mente en sociedad» humana (un término vago, tomado pres­ continuamente a través de una investigación. Sin embargo, no son
,/ tado de Vygotsky, para evitar la sugerencia de que el individuo o la entidades estables; por ejemplo, una vez que se ha hecho una elección
sociedad estarían en primer lugar, 'o para enfatizar 16 que podría: lla­ estructural en el uso del lenguaje, esta elección entra en el contexto.
marse la naturaleza dual no dicotómica del medio de adaptación). En Recordemos también la advertencia de no interpretar la adaptabilidad
referencia a este asunto, la distinción entre el significado comunicado co~o ·unidireccional. Por otra parte, el modo preciso en que se com­

explícitamente y la información implícita toma una especial relevan­ binan puede normalmente no estar establecido hasta que lauwestiga­

cia.La saliencia es básicamente una función del funcionamiento de la ción está completa. Esos enunciados más adelante tienden a tomar la
6.,.;;
conciencia reflexiva (lo que llamamos «metapragmática») que inter­ forma de explicaciones. ~?J

viene en el uso del lenguaje. Obsérvese que tratamos con característi­


cas y mecanismos de procesamiento, y que éstos no han de confun­
e
~

••

128
Nociones clave Resumen lecturas recomendadas 129

pragmática, y 10 que ha impulsado el desarrollo de una metapragmáti­


ca interesada en las huellas lingüísticas de la conciencia que tiene el
hablante de los procesos en los que interviene.
CONTEXTO El asunto de rango superior que guía el estudio de los fenómenos
1ocus pragmáticos como procesos dinámicos que operan en relaciones de
ESTRJCTURA contexto-estructura en· varios niveles de saliencia,es simplemente
funcionamiento entender el funcionamiento significativo del lenguaje, o sea, como
DINÁMICA . rocesos
n significativo se ha explicado antes, seguir la generación dinámica del significado
o en el uso del lenguaje. Estamos interesados, en otras palabras, en lo
O SALIENCIA estatus que Bruner (1990) llama «actos de significacióID>. transmitidos cogní­
tivamente y realizados en un ambiente social y cultural.

•<8 . Figura 2.1 La estructura de una teorIa pragmática

. Dar cuenta de 1.~·~dinámica· de la adaptabilidad, considerando el'

2.5. RESUMEN Y LECTURAS RECOMENDADAS


'.. impacto total de 1av,ªriábilidad y la negociabilidad, es sin duda la ta­
rea principal de las Jílvestigaciones pragmáticas más específicas, ya
·
O
.
que esta tarea seocu~áesencia1mente de una. definición de los proce­ El uso del lenguaje puede definirse como una continua elección
O sos de adaptación. L~dinámica trata de la naturaleza y el desarrollo lingüística:
de la relación entre~lcontextoy la estructura a 10 largo del tiempo. - A cualquier nivel de la estructura.
1';­
Es una caractensticade los procesos que intervienen en su interac­ -Centrándose en las estrategias y en las formas.
ción, o, dicho de otro modo, los procesos son la dinámica de las inte­ -Con varios grados de concíenci<;~.
Ü - Tanto en la producción como en la interpretación de enunciados.
rrelaciones entre el contexto y lit estructura. De ahí el colocar a la di­
O námica en una caja rodeada del contexto y la estructura en la figura - Incluso cuando la' gama de opcione~ dispollioles no es comple­
O 2.1. . tamente apropiada.
@ Finalmente, la adaptabilidad dinámica del contexto y la estructura - A partir de opciones que no son equivalentes.
puede ser más o menos saliente en las mentes de los usuarios del len­ - De modo que las elecciones recuerden a sus alternativas no se­
O guaje. De ahí que una investigación de la saliencia de los procesos de leccionadas.
e adaptación eche luz sobre su estatus en el área de la conciencia de los
~ Hay tres conceptos clave necesarios para que el «hacer eleccio­
seres humanos involucrados p. ej. en relación con el tipo de concien­
@J nes» tenga sentido:
cia reflexiva (que puede ser actualizada en diferentes grados en dis­
a
tintas instancias de uso) que se supone que ha sido, en primer térmi­
no, el prerrequisito original o el corolario inmediato para el desarrollo
- La variabilidad es la propiedad del lenguaje que define la gama
de posibilidades entre las que se pueden hacer las elecciones.
e
•., del lenguaje humano. Es la importancia de este aspecto lo que ha he­
cho del estudio de las ideologías del lenguaje un tema fundamental en

- La negociabilidad es la propiedad del lenguaje responsable por
el hecho de que las elecciones no se hagan mecánicamente o
-s


I'RACMÁTJCA.
..:

130 Nociones clave Temas de investigación 131


según estrictas relaciones de forma-función, sino en base a gente comparta literalmente la misma gramática; también muestra
principios y estrategias altamente flexibles. (poniendo de relieve la idea de la adaptabilidad sin usar ese término)
- La adaptabilidad es la propiedad del lenguaje que permite al ser cómo el lenguaje surge de la práctica 90municativa del mismo modo
humllno hacer elecciones lingüísticas negociables desde una que. la nutre.
gama de opciones variable de tal modo que se acerquen a gra­
dos de satisfacción de las necesidades comunicativas.
2.6. TEMAS DE INVESTIGACIÓN
La adaptabilidad (que no está en conflicto con la acepU!-ción de
algunos universales del lenguaje) puede ser usada, por tanto,como
punto de partida para defrriir cuatro ángulos de investigación, que se Cada una de las definiciones siguientes sobre la pragmática puede
combinan siempre que se hace un acercamiento pragmático a un fe­ compararse o contrastarse con lo que he dicho,hasta ahora:
nómeno lingüístico:
1. Aquí llegamos al corazón del problema de defmición:el ténnino prag·
--Los correlatos contextuales .de la adaptabilidad, que incluyen mática cubre tanto los aspectos .de la .estructura del lenguaje dependientes
cualq~ier ingrediente del contexto comunicativo con el que las del contexto como los principios de uso del1enguaje y la comprensión
elecciones lh1güísticas sean interadaptables. que tienen poco o nada que ver con la estructura lingüística. Es dificil
--Los objetos estructurales de la adaptabilidad, que incluyen las fOIjar uu¡t defmíción que cubra ambos aspectos, pero de ahí no se debe
. implicar que la pragmática sea un cajón de sastre que trata con aspectos

estructuras a cualquier estrato o nivel de la organización y los


del lenguaje diferentes y no relacionados, sino que más bien los pragma­

principios de la estructuración.
tistas están interesados precisamente en la interrelación entre la estructura

- La dinámica de la adáptación, el despliegue de los procesos del lenguaje y los principios de uso de éste (Levinson, 1983, pág. 9) ..

adaptativos en interacción. ..
- La saliencia de los procesos de adaptación, el estatus de esos 2. Ya he mencionado que el tema principal de mi libro es la PRAGMÁTICA
GENERAL. Con este término quiero diferenciar el estudio de las condicio­
procesos en relaeióncon el aparato cognitivo.
nes 'generales del uso comunicativo del lenguaj e y excluir condiciones
específicas más «locales». Estas últimas pueden pertenecer al campo me­
o
El interés general del estudio de la pragmática lingüística es com­ O
nos abstracto de la SOCIOPRAGMÁTICA, ya que está claro que el principio·
prender el funcionamiento significativo del lenguaje como un pro ce­
de cooperación y el principio de cortesía operan de diferente modo en di­
so dinámico que opera en .las relaciones· de contexto-estructura a
ferentes culturas o comunidades de habla, en diferentes situaciones so·
varios niveles de saliencia.
Como lectura adicional es útil consultar las referencias que se
ciales, entre clases sociales diferentes, etc. [...] En otras palabras, la so­
e
•e
cit;>pragmática es la conexión sociológica de la pragmática. Gran parte del
ofrecen en la sección 9.3, donde se revisan teorías precursoras y pa­ tr~bajo que se ha hecho en análisis de la conversación se ha limitado en·
ralelas a la idea de la pragmática como una teoría de la adaptabilidad este sentido y ha estado ligado muy de cerca con datos de conversaciones
lingüística. Sin embargo, para una aproximación más profunda al pa­ locales. El término PRAGMALING01sTICA, por otro lado, puede aplicarse al
pel de la variabilidad y la negociabilidad, aunque la terminología que estudio del extremo más lingüístico de la pragmática, en el que se estu· .~
se usa es diferente, véase Hanks (1995, 1996b); éste demuestra que para
una práctica comunicativa exitosa no es ni siquiera necesarío que la
dian los recursos particuÍares de que dispone una lengua en particular pa­
ra llevar a cabo ilocuciones concretas (Leech, 1983, págs. l 0-11) •
<ID

•..
G
132 Nociones clave
3. Quizá ahora tengamos un modo de distinguir entre una teoria de la satis­
facción y una teoria pragmática. Podemos decir que la primera debe dar
cuenta de las condiciones de satisfacción de las oraciones, incluidas las
condiciones que ciertas oraciones tienen en relación con un contexto de
uso dado. Este requisito significa que dentro de una especificación de las
condiciones de verdad relacionadas con el contexto, una teoria de la sa­
tisfacción debe mencionar las intenciones del hablante, cuando esas in­
tenciones tienen un papel en la determinación de referente para términos
que no tienen un referente semántico dado por las convenciones del len­
guaje. La pragmática tendrá como su dominio las intenciones comunica­
() tivas de los hablantes, los usos del lenguaje que requieren esas intencio­
nes y las estrategias que usan los oyentes para determinar cuáles son esas
O intenciones yesos actos para que puedan entender lo que el hablante está PARTE TI
O . intentando comuni6ár (de la introducció~ a Davis Ced.) 1991, pág. 11).

•• ._;,;:~ -.
4.' Es nuestra tarea demostrar cómo el principio de relevancia explica la in­
teracci6n entre esº~ dos tipos de conocimiento en la interpretaci6n de los
ASPECTOS DEL FUNCIONAMIENTO SIGNIFICATIVO

DEL LENGUAJE


O
O
enunciados.·
La asunción que.,subyace a esta tarea, y, de hecho, a toda la discusión
hasta el momento~:es que h~y una distinción entre el conocimiento del
lenguaje del oyen:i~y su conocimiento del mundo. En' esta sección sos­
tendré que esta; distinción es la que subyace a la distinción entre semánti­
ca y pragmáti~a (Blakemore, 1992, pág. 39).
()
O
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INTRODUCCIÓN

Los cuatro capítulos de la segunda parte de este libro cubren lite­


ralmente «aspectos» del· funcionamierito significativo del lenguaje.
Estos aspectos no pueden verse como objetos de investigación sepa­
rables; son, más bien, cuatro ángulos diferentes desde los que acer- .
carse a cualquier fenómeno lingüístico para investigar sus dimensio­
nes pragmáticas (véase la sección 2.4). El capítulo 3 trata del ángulo
de 10~ correlatos contextuales, en relación con los. cuales se desarro­
llan los procesos de adaptación lingüística. El capítulo 4 trata de los
elementos de la estructura y la estructuración, que son los verdaderos.
objetos de la adaptabilidad. El. capítulo 5 echa una mirada a la diná­
mica de los procesos mismos, mientras que el capítulo 6 trata de su
estatus en relación con las herramientas cognitivas y los mecanismos
disponibles para usar el lenguaje de forma adaptable con fmes comu­
nicativos. Brevemente, los capítulos del 3 al 6 proporcionan los «tor­
nillos y las tuercas» de la pragmática, los conceptos que necesitamos
para hacer pragmática. En los capítulos 7 y 8 de la Parte III se mos­
trará cómo pueden usarse estos elementos en combinación para enfo­
car pragmáticamente temas específicos de investigación.

-1
(~
" f
...

Q La visión global 137


o
3.1. LA VISIÓN GLOBAL

En 1923, Malinowski acuñó la expresión «contexto de la situacióm>:


Exactamente igual a la realidad de las lenguas habladas o escri­
tas, una palabra sin contexto lingüístico es un mero producto de la
3'
imaginaci9n y no vale nada por sí misma, de .modo que en la realidad
CONTEXTO de una lengua viva hablada, el enunciado no tiene significado excepto
en el contexto de la situación (Malinowski, 1923, pág. 307).

o'
e-:¡.
Aunque no deberíamos aceptar el mensaje implícito de que el
.....;;)1 Para que la adaptabilidad sea un concepto útil para dar cuenta de lenguaje escrito puede no tener un «contexto de la situacióm>, la ob­
@ lo que hace la gente cuando usa el lenguaje, debemos poder preguntar servación de Malinowski puede considerarse como uno de los pilares

•. con qué se interadaptan el lenguaje o las elecciones lingüísticas. En


otras palabras, ,cuáles son los correlatos de la adaptabilidad que
motivan y/o son afectados por las elecciones hechas. Después de ha­
necesarios de\.cu~quier teoría pragmática. De hecho, ~l uso del len­
guaje siempre está'situado frente a un complejo fondo con el que se
relaciona de diferentes maneras. Trataremos de ofrecer un resumen de
O ,ber presentado brevemente la imagen global de los eiementos que los elementos que intervienen en forma de representación visual (en
están en juego (en la sección 3.1), se verán los ingredientes del con~ la figura 3.1 ).
,textó comunicativo (sección 3.2). Se'discutirán también brevemente
. algunos aspectos del contexto lingüístico (en la sección 3.3), aunque Mundo
físico
volveremos con más detalle a este tema en los capítulos 4 (al tratar de
o' la estructura lingüística) y 5 (al tratar de desarrollo dinámico del ha­ Mundo
-----~-------------
cerelecciones, que no puede ignorar elecciones previas y por tanto el social
contexto lingüístico). Finalmente (en la sección 3.4), se argumentará
que a pesar de la aparente infinitud de óbjetos contextuales de la Mundo
adaptabilidad potencialmente relevantes, la noción de «contexto» no mental
es vaga, ya que los contextos son generados y construidos activa­
mente (como elecciones que se hacen dentro de un abanico infinito de
posibilidades, para instancias específicas de uso del lenguaje) y este E-
_ _ _-'1
proceso de generación, llamado «contextualizacióm}, deja rastros lin­ Elecciones Elecciones
güísticos. de producción - - - Canal--­ de interpretación
(contexto lingüístico)
Figura 3.1 Correlatos contextuales de la adaptabilidad
138 Contexto
T Ingredientes del contexto comunicativo ·139

Los elementos centrales en esta representación son el enunciador sables del procesamiento lingüístico real; véase la sección 2.4 y el ca­
(E) y el intérprete (I). Sin ellos, y sin el funcionamiento de sus men~ pítulo 6). Más adelante se señalarán unas pequeñas excepciones. Se
. tes, no hay uso de11enguaje. Para los objetivos de una teoría pragmá­ puede considerar que las lineas en la figura 3.1 que convergen en E e
tica, son entidades funcionales o «roles» sociales más que gente del Iforman líneas de visión. Cualquier aspecto del contexto dentro de
mundo real, aunque normalmente también 10 son. El hecho de que las líneas de visión puede funcionar como un correlato de la adapta­
son entidades funcionales debe estar claro por tres factores. En primer bilidad. La metáfora es útil porque, geográficamente, representa el
lugar, tal y como ocurre en la mayoría de las formas de interacción hecho básico de que E e I (a no ser que coincidan) habitan mundos
cara a cara, los roles indicados por E e I cambian constantemente en­ diferentes. Por supuesto, hay superposición entre esos mundos, pero
tre diferentes personas. del mundo real. En segundo lugar, no es impo~ incluso elementos 'de fondo común en las áreas solapadas puedenpa­
sib1e que un enunciador tome el rol del intérprete para su propio recer diferentes, porque la perspectiva siempre difiere, al menos lige­
enunciado en cUalquier momento posterior al de la enunciación, en ramente. En otras palabras, el terreno común casi nunca es realmente
principio, mientras vigila su propio comportamiento lingüístico. En común. La metáfora es también útil porque explica por qué a pesar de . O
tercer lugar, enunciador e intérprete pueden no sólo coincidir en cier~ un grado razonable de estabilidad, los mundos del enunciador y del
tos momentos, sino que hay también etapas en ciertos tipos de evento . intérprete pueden cambiar en un momento dado; un cambio de mirada
()
comunicativo (p. ej. al escribir una novela, la práctica en solítario pa~ es suficiente.
ra una representáción oral, o durante la producción de un informe que La figura 3.1 también indica que el enunciador hace elecciones en
se. espera que sea archivado y olvidado) en que no hay intérprete la producción, mientras que el intérprete hace elecciones en la inter­
aparte del construido mentalmente por el enunciador; en esos casos, y pretación. En los siguientes capítulos se tratará el contenido de estas
en esa etapa, el rol del intérprete está simplemente incorporado al actividades. Mientras tanto, es necesario destacar que el canal de co­
mundo del enunciador, incluso si en una etapa posterior un usuario municación elegido es, en sí mismo, un elemento del contexto. Esto .)

de11enguaje de carne y hueso puede asumir ese rol (p. ej. los lectores se tratará en la sección 3.3, con otros aspectos de 10 que puede lla­
de la novela, un público real para la representación, o un burócrata marse el contexto lingüístico. Al igual que otros elementos del con­
inesperadamente diligente). Así, los mundos de E e I no están estric~ texto lingüístico, éste ya es, en sí mismo, el producto de elecciones
~amente separad~s; de hecho, I puede incorporarse en E, pero no a la lingüísticas. Antes de hablar de este tema explicaremos sistemática­
Inversa porque SIempre hayo ha habido un enunciador. . mente algunos de los detalles de los ingredientes no lingüísticos del o
Se presenta a enunciador e intérprete como puntos clave porque evento comunicativo.
los aspectos contextuales de los mundos fisicos, sociales y mentales
(que no han de estar tampoco estrictamente separados, y consiguien~
temen~e dan lugar a líneas rotas en la figura) no empiezan a jugar un 3.2 INGREDIENTES DEL CONTEXTO COMUNICATIVO
papellmportante en el uso del lenguaje hasta que han sido en cierto
modo activados por los proéesos cognitivos del usuario del lenguaje.
(Observemos de nuevo la distinción que mantenemos, para objetivos En esta visión global, empezamos por la parte inferior en la figura
de la presentación, entre los ingredientes de un mundo mental como 3.1, con el enunciador y el intérprete. Después, desde el punto de
correlatos contextuales y mecanismos mentales o cognitivos respon~


vista de ellos, miraremos hacia el mundo de correlatos posibles de la

48
T

140 Contexto del contexto comunicativo 141

adaptabilidad, empezando con los aspectos del mundo mental, pasan_o


do por el mundo social y acabando en el fisico. Las diferentes voces del enunciador
Los enunciadores o los 'hab1antes no deberían tratarse como si
3.2.1 Usuarios del lenguaje: enunciador e intérprete
fueran la fuente inequívoca de los enunciados significativos que pro­
En la sección 1.1.1. se describió la deíxis de persona como uno ducen. El uso del lenguaje no es tan sencillo. Imaginemos a una estu­
de los modos en que el lenguaje se sujeta a un contexto de uso. Es diante universitaria de Manchester, Beatrlce, que ha solicitado su ad­
una caracteristica universal del lenguaje, que proporciona los medios misión para una estancia de tres meses en la Universidad Autónoma
para distinguir entre un sujeto que h,ab1a (primera persona, el centro de Madrid, en el contexto de un programa de interc~mbio estudiantil.
deíctica de la comunicación cara a. cara), un destinatario (segunda Un día pasa por la Secretaría del departamento y tiene lugar el si­
persona), y «otros» '(tercera persona). Los medios lingüísticos especí­ guiente intercambio entre ella y el secretario del departamento, John.
ficos que proporcionan los lenguajes naturales para llevar esto a cabo
(1) 1. Beatrice: ¿Puedo ir?
.varían enormemente. En algunas lenguas (p. ej. el africano), los pro­ 2. Jo1m: Claro que sí.
nombres personales son las herramientas exclusivas para llevar a cabo.
estas distinciones; otras lenguas combinan un sistema de pronombres Aunque el secretario es sin duda el enunciador fisico de (1 )2.,
con un sistema de conjugación, que a veces se usan obligatoriamente' estará claro tanto para la estudiante como para el secretario que el se­
eh combinación (p. ej. el inglés O el alemán), o se permite un uso va­ gundono es el que determina el contenido. otras palabras, él no es
riable (p. ej. el español o el húngaro, que pueden perder los pronom­ la fuente de la infonnación proporcionada. Ahora consideremos que
bres en muchos contextos). Inclusodentro de estas categorías hay una el día anterior se produjeron otros dos intercambios. El primero es de
C;
{ \
considerable varIabilidad. Así pues, el húngaro tiene un sufijo verbal nuevo entre Beatrlce y el secretario, John. '
"j concreto -lek que expresa a la vez primera persona como sujeto y se-
O gunda persona como objeto: szeret-lek significa «te quiero». Hay (2) L Beatrice: ¿Sabes ya si puedo ir?
Voy á consultarlo con Ann~
O ·también variabilidad en el modo en que los marcadores de pérsona 2. Jo1m: ¿Puedes volver
mañana?
r', . combinan la deíxis de persona pura con propiedades como el número
".~-' (singular-p1uta1, como en inglés, O singular-dual-p1ural, como el grie­
C) go clásico), las distinciones de género (masculino-femenino-neutro, En consecuencia, John habla con Aun, la directora del departa­
e como en inglés, o masculino-femenino como en español y francés, o
mento.
. completamente sin distinciones de género como en eÍ sistema de pro­ (3) 1. Jo1m: ¿Puede ir Beatrice?
nombres de tercera persona, éomo en húngaro), o la animidad (a ve­ 2. Ann: Claro que puede.
ces concediendo un alto grado de animidad a la primera y a la segun­
da persona frente a una tercera persona con menos animidad). Pero Observemos que John, aunque sin duda está interesado en la res':
hay mucho más por decir de la interadaptabilidad entre el lenguaje y puesta, no es la fuente final en su pregunta en (3)1. Más bien lo es
aspectos de los usuarios del lenguaje. Investigaremos los roles del Beatrice. Observemos también que Ann al emitir (3)2., es, no sólo la
enunciador y el intérprete. fuente de ia infonnación proporcionada por John en (1 )2., sino tam­
bién de la fonna de expresión, un fenómeno común cuando un men­
142 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 143

saje se transmite de este modo. Debería quedar claro también en este dría conceptualizar esto en términos de la «polifoníID~ involucrada en .-- ')
ej emplo que Ann no es la fuente final de la· información. Lo que ella el uso delleguaje.· .
dice está basado probablemerite en un mensaje que acaba de recibir La historia de las varias voces del enuncia dar no acaba aquí. Con­
de la sección de la universidad encargada de estos programas euro­ sideremos que en lugar de (1), se produjera un intercambio menos fe­
peos (y de otros internacionales). Ese mensaje, a su vez, está basado liz, como en (4).
en una carta de la «capitah> de la Unión Europea, Bruselas, escrita por
(4) L Beatrice: ¿Puedo ir?
alguien autorizado a hacerlo por un comité que ha tomado esa deci­ 2. John:
Lo siento de veras. Tu solicitud no ha sido acep­
sión. En un caso como éste es casi imposible identificar la fuente fi­ tada.

rial. 3. Beatrice: Entonces, no soy lo suficientemente buena.


Ha habido muchos intentos de crear una terminología que no sólo
distinguiera entre enunciador y fuente, sino que también clasificara y Es muy poco probable que Beatrice, una joven con confianza en
por tanto describiera todos los intermediarios. Ninguno de ellos ha si­ sí misma, y que es una de las mejores estudiantes de su departamento,
do satisfactorio :por la razón que se acaba de ilustrar: a menudo no haga ese tipo de juicio sobre sí misma al ~mitir (4)~. En su enun~iado, o
hay modo de identificar una fuente real. Por otra parte, cualquier eti­ sin embargo, ella invoca a lo que podría denonunarse enunclado,r
queta para un rol intermediario pone restricciones injustificadas a la virtual (o enunciador V). En algún momento alguien pudo haber ~1-
participación de un hablante en un momento 'dado. Así, por ejemplo, cho No es suficientemente buena, pero nO hay prueba de que alguIen
describir a Ann como «reportera» en la cadena comunicativa entre la 10 haya hecho. Supongamos ahora que la conversación del día ante~
o
administración de Bruselas y Beatrice minimiza su implicación per­ rior entre el secretario y la directora del departamento se desarrollo

sonal; ella probablemente es la que ha mandado la solicitud después como'en (5), seguida de un intercambio entre el secretario y la estu­

de haberla aprobado a nivel del departamento; pone gran entusiasmo diante, como en (6).
(que siempre falta en los mensajes burocráticos) en su «informe»,
aumentando su significado; y quizá incluso tiene el poder de detener (5) 1. John: ¿Puede ir Beatrice?
la aprobación final en esa etapa. Por tanto, es mejor quedarse con una
2. Ann: Ha sido rechazada.
3. John: ¿Por qué? Es una de nuestros mejore~ estudiantes
metodología sencilla que distingue el enunciador (como término ge­ este año.

neral que también cubre el de «autoD>, término que se usa por sí mis­ 4. Ann: Es una locura. Otra solicitud que no era lo sufi- .

mo a veces en el sentido que nosotros damos a «enunciador») de su cientemente buena, me imagino.


fuente, permitiendo así caracterizaciones más avanzadas de fuentes ¿Puedo ir?
(6) 1, Beatrice:
como (fuente!) «apartada un grado», (fuentel ) «apartada dos gra­ 2. John: Lo siento de veras. Has sido rechazada.
n
dos», (fuente ) «apartada n grados», aunque no deberíamos dejarnos 3. Beatrice: ¿Por qué?
confundir por la linealidad de este orden. El enunciador y todas las A. John: Sé que es una locura. Tú eres una de las mejo­
posibles fuentes representari los tipos de voces que intervienen en res estudiantes, pero me temo que han decidido
cualquier ejemplo de uso del lenguaje. Aquí tomaremos prestado un que no eres lo suficientemente buena.
término de Bajtin, basado en su visión de que cualquier enunciado
contiene cierto tipo de diálogo implícito. Siguiendo a Ducrot se po­
144 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 145

En esta cadena de eventos comunicativos, Ann hace en (5)4. 10 (7) u (8) en respuesta a una posible queja hecha por un enunciador
que Beatrice hizo en (4)3. Ann sabe muy bien, por cierto, que la toma virtual. En muchos casos interviene una estrategia preventiva. Un.
de decisión involucra muchos factores que no pueden reducirse a jui­ ejemplo típico de esto son los <<prefacios con pero para controlar res­
cios sobre «lo bueno» que es alguien, pero al traer a la memoria a un puestas}} como en (9).
enunciador virtual cuyo juicio literal es No es lo suficientemente bue­ (9) Yo no soy racista pero hay demasiados extranjeros en esta es­
na, Ann critica indirectamente el proceso de toma de decisiones que cuela.
debería prestar más atención a las cualidades académicas del solici­
tante. John, en consecuencia, vuelve a usar la estrategia de Ann en Esta expresión intenta evitar la potencial acusación de un enunciador
(6)4. Al considerar que Anri es la fuente' de su mensaje, el enuncia­ virtual por 10 que sigue a pero.
dor virtual invocado se convierte en en una fuente virtual «apartado Hay otro tipo más de caso que tenemos que revisar antes de cerrar

•,.
1
un grado» (o fuente -V). El intercambio de (6) podría continuar como esta sección. Especialmente en el discurso escrito, se pueden encon­
sigue: .
tr:ar esquemas elaborados de enunciados insertados en el enunciado
~(6) 5. Beamce: ¿Eso es lo que ha dicho Ann? principal.' Aquí, como en otras partes de este libro, un enunciado es
(8
6. John: Sí. No tiene una opinión muy buena de ia bu­ definido stmplemente como un fragmento de discurso producido por
O rocracia de Bruselas. el mismo enunciador o los mismos enunciadores, con un comienzo y
O un final relativamente claros. Por 10 tanto, un enunciado tanto puede
(-lEsto actualiza o hace explícitos los patrones de voces subyacentes. ser un' tumo en una conversación como una trilogía de 1.000 páginas.
,, ,
)
Los enunciadores. virtuales juegan un papel más amplio en el uso Es probable que la trilogía contenga muchos enunciados insertados
,'--'
del lenguaje del que quizá se podría esperar. Se invocan implícita­ que el enunciador (el autor) presenta como producidos por un enun~
r
mente en la mayoría de los enunciados que enfatizan uno de los ex- ciador insertado (o enunciador ). No hace falta decir que un enun­
Q. tremos del contraste. En este sentido son típicas muchas formas de ciador insertado de ese tipo puede' también tener DlUchas voces.· Por
O . negación. Consideremos (7) y (8). . esta razón la figura 3.2., que contiene un resumen de las categorías de
(7) Yo nunca dije eso. voces que hemos distinguido en los párrafos anteriores, tiene tres
puntos para la etiqueta del «enunciador\> para indicar la posibilidad
(8) Yo no soy un sinvergüenza
de recursividad de toda la estructura.
Estas oraciones pueden, de hecho, ser reacciones a enunciados Enunciado? ..
O reales, como cuando se dice (7) en respuesta a una pregunta como
O ¿ Quieres decir que soy un sinvergilenza?, o en el' caso certificado Enunciador--- Fuente! - - - Fuente ---Fuente
2 n

(1 históricamente de Richard Nixon cuando dijo (8) mientras era atacado


por gente que obviamente lo consideraba un sinvergüenza. En estos EnuJciadorV Fulnte l-v . Fu1ente 2-v FuLte n-v
• . casos, el contraste invocado es una cuestión de intertextualidad dé la .
Fig. 3.2 Categorías de voces
.,. vida real y por tanto del contexto lingüístico (véase la sección 3.3).
• En ausencia de provocaciones inmediatas, uno puede todavía decir

•.,
ti
146 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 147

Aunque "los enunciadores insertados son, como se ha dicho, invi­ posibilidad. Por eso es posible que Beatrice, al decir (6)5., baje su voz
tados frecuentes en el discurso escrito, no están ausentes tampoco en al saber que Ann, como directora del departam~nto puede entrar en la
el lenguaje oral. Están presentes en cualquier forma de cita directa, secretaria en cualquier momento, y John puede hacer 10 mismo en
incluida~ las historias del tipo A dijo - B dijo (en contraste con otros (6)6. por la misma razón. Para dar un ejemplo de discurso escrito, es
tipos de estilo indirecto, en que estaría involucrada una fuente identi­ posible que Julio César adaptara su versión de casi derrota a la futura
ficada). Un caso especial, por otra parte, es el del enunciador au­ «participación» posible, en su texto, de una serie de «presencias»,
toinsertado, que produce discurso a sabiendas de que es o será in­ importantes para su control de la influencia y el poder, y que por esto
sertado en un contexto comunicativo más amplio. Así, en el mundo la presentara con la afirmación de que sus oponentes, los belgas, eran
de la televisión, un entrevistador y un entrevistado están ocupados los más valientes de las Galias. Así, las presencias pueden tener un .
conscientemente en la enunciación e interpretación de formas lin­ papel incluso cuando no son intérpretes. "
güísticas que sa'ben que van a ser o quieren que sean insertadas en Una vez que las presencias se convierten en intérpretes, pueden
un evento comunicativo más amplio, con el canal de televisión en un tener 'una variedad de papeles. Vamos a presentar brevemente un
extremo y hi audiencia en el otro, ya sea simultánea o consecutiva­ contexto interaccional, como se visualiza en la figura 3.3.
mente.
x
Los diferentes roles del intérprete
Aunque los enunciadores tienen muchas voces, los oyentes, o, pa­
:a usar el término que preferimos, los intérpretes, pueden tener mu­ A B e
chos roles. No' deberíamos olvidar, antes que nada, que son una sub­
categorla de 10 que podrían llamarse presencias, es decir la totalidad
de las personas que están «presentes» en o en los alrededores de un
L..-I
D E F
G

H
evento comunicativo, o, dicho de otro modo, en una posición que les
permite participar en el evento. Esto no solamente cuenta para los in­
[]
tercambios orale.s. Cualquier persona «presente» 10 suficientemente 1
cerca para poder oíruna conversación, puede «participar» en ella. Del
mismo modo, cualquiera que pasa por una librería o uria biblioteca es
una «presencia» y puede «participar» simplemente cogiendo uno de
los libros y empezándolo a leer. Desde el momento en que las «pre­ Figura 3.3 Escena en un restaurante
sencias» <<participan», ya sea escuchando o leyendo, se convierten en
intérpretes. Esto no significa que hasta ese momento no hayan tenido .El escenario es un restaurante. Las personas que están alrededor
un papel. En la medida en que un enunciador sabe que están por al­ de la gran mesa de la esquina son profesores gel departamento de lin­
guna parte, aunque no se los vea, de modo que pueden participar en güística, excepto D, que es un biólogo molecular especialista en ma­
cualquier momento, puede adaptar su enunciado radicalmente a esa laria, y viejo amigo de A, que está en la ciudad de visita. e y F están

••
148 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 149
intercambiando el último chisme sobre el director del departamento modo en que se expresan. Cualquier lenguaje ofensivo sería cuidado­
de lingüística. B y E siguen atentamente el intercambio, reaccionando samente censurado. De igual modo, si C o F saben que H es miembro
de vez en cuando pero sin aportar mucho. A y D están enfrascados en del departamento de inglés que puede conocer al director de lingüísti­
su propia conversación. En una organización así, C y F son el desti­ ca, pueden querer asegurarse de que, en el caso de que haya intentos
natario directo del otro y B Y E son participantes marginales. El para escucharlos, éste no sepa de quién están hablando. Esto puede
resto de las personas en esta escena pueden ser intérpretes mientras llevarse a cabo fácilmente seleccionando un nombre secreto, aunque
permanecen como no participantes. Pueden distinguirse dos catego­ también deberán. prestar atención' a los detalles de lo que dicen de
O . rías de no participantes; En primer lugar están los que están suficien­ manera que no se desvele con ellos la identidad de la persona de la
temente cerca del intercambio como para que. C y F sepan que van a que e.stán hablando en secreto. También C y F, sentados cerca de la
oír trQzos de la conversación, J' así funcionan hasta cierto punto como puerta que abre a la cocina, y que saben que este restaurante emplea
intérpretes. Esto es váli-do para A y D, que están en la misma mesa, y regularmente a estudiantes del campus, pueden adaptar sus enuncia­
para el cat1:}.arero, G. A estos se les puede llamar espectadores cir­ dos continuamente ante la posibilidad de ser escuchados por las per­
cunstanciales (bystqnders). Además están presentes los que C y F no sonas que escuchan las conversaciones ajenas, ya sea bajando la voz
pueden asegurar que estén actuando como intérpretes. Estos forman o haciendo confuso el contenido o eXpurgándolo.
la categoría de los posibles' oyentes casuales (overhearers). Algunos Por otra parte, hay inéluso eventos comunicativos que requieren
.de estos pueden estar claramente a la vista, como H, que está sentado tipos específicos de presencias. Por ejemplo,dur~nte algunas cere­
en otra mesa; actuando como una persona que oye d~sde dentro , monias son necesarios los participantes marginales(p. ej. testigos) pa­

(listener in) porque está aguzando el oído para póder oír parte del co­ rá qúe la promesa de matrimonio seá válida. Consideremos, también,
tilleo del jefe del departamento de lingüística, a quien él conoce. el modo en que alguien que está siendo acosado en un lugar público
Otros oyentes casuales 10 pueden hacer de forma más secreta, como puede convertir a los potenciales oyentes casuales (overhearers) en
el que escucha las conversaciones ajenas (eavesdropper), en este participantes marginales subiendo el volumen de su voz para que to­
caso un .estudiante de l~ngüistica que trabaja en la cocina del restau­
o rante y que permanece escondido .tras la pared. Claramente, cualquie­
dos le oigan (una forma de comportamiento verbal qu.e se correspon­
de con el término afro americano de hablar fuerte [loud talking]).
O ra de las presencias conocidas mencionadas anteriormente puede ac­ Un elemento de la figura 3.4 no ha sido explicado aún, y tiene q"lJe
e tuar como' oyente de. conversaciones ajenás (eavesdropper), pero la ver con el nódulo que hay encima de «presencia». Recordemos la
o mayoría del tiempo no 10 hacen,' y la categoría de nyentes de conver­
saciones ajenas no está restringida sólo a ellos, por lo que estas cate­
pregunta de Beatrice ¿Puedo ir? de (1)1. Aunque es una petición de
información dirigida al secretario del departamento, John, también .
o gorías deben mantenerse separadas. constituye un acto de pedir autorización, pero ese acto no está dirigi.:.
Esta visión global es la presentada en la figura 3.4. Nada de esto do a John personalmente. Supone la existencia de las presencias que
e es trivial, o lo que es 10 mismo, todas las categorías de intérpretes
pUeden influir en las elecciones hechas por el enunci~dor de modo
11 n
han sido «eliminadas)} en varios pasos (p.ej. presericias • .... ) que in­
e fundamental. Por ejemplo, si C y F saben que B tiene una simpatía
tervienen o han intervenido como intérpretes del mundo real en la
gran cadena de comunicación que concluyó en la aceptación o recha­
ti)
especial por el director del departamento, esto no tiene por qué parar zo de su solicitud para ir a la Universidad Autónoma de Madrid. Estas
ti el cotilleo necesariamente, pero puede tener una gran influencia en el presencias no es.tán actuando como intérpretes en el momento de}. ha­

••., ,­
-----------------------~~_.~­

150 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 151


bla, pero podrían ser reactualizadas (p. ej. si llamarlos fuera el único
El destinatario directo se convierte, por tanto, en un intermedia­
modo de conseguir la información necesaria en ese momento). Como
rio. Un proceso similar tiene lugar cuando una empresa manda una
«personas» del mundo real, la fuente l. 2•..•n y la presencial. 2•••• pueden ser
nota de prensa a un periódico o medio de comunicación (los destina­
idénticas, pero funcionalmente son diferentes.
tarios) para que actúen de intermediarios en la comunicación prevista
La categoría de presencias «eliminadas» cubre, por otra parte, a
con un público más amplio (destinatario 1,2...•). Consideremos también
tipos funcionales más específicos y semejantes a algunos de los nó­ los enuciadores auto insertados del tipo entrevistador-entrevistado en
. dulos inferiores en la figura 3.4. En .concreto los destinatarios «eli­ un programa de televisión dirigiéndose sus enunciados el uno al otro
minados» en· varios pasos (destinatariol.l••n) son incidencias regula­ como destinatarios, pero a la vez también a destinatarios 1, 2, ..... y de
res. Por ejemplo, al mandar llamar a alguien, el destinatario no es el mayor escala, la audiencia televisiva. Para demostrar el efecto de esa
destinatario de la «petición de acudiD>, que está dirigida a un desti­ estructura de la audiencia en el hacer elecciones, podemos recurrir al
natario eliminado 1. siguiente ejemplo de Clark y Carlson (1982, pág. 339) en que (lO) es
una conversación privada y (11) es una entrevista televisiva, ambas
Presencia 1,2.... [Destinatario 1,2..D]
con el mismo «contenido»;
(10) Crothers al senador
p"Lol' Smyth:Bueno, Joe, ¿qué te parece el escándalo

~J.~.~."--,--'-'
de New Hampshire?
,\ ' r - '.- I - 'c-"--,.--"""----4---:-'-"'""""1.
'" ; ;.'; Smith -a Cíb~I1er§: Es un l11aldit'd lfó; Si Bi1l' I¡.o tiene ~uida­ El
Intérprete. No intérprete do, Beit le va a hacer perder la cl}aveta.

¡ (11) Crothers a Smyth: Senador Smyth, ¿qué le parecen tos con­


trovertidos comentarios de Jones en la
I
Participante No participante
I
campaña electoral de New Hampshire la
semana pasada? , 'o
[
I
.
I Smyth a Crothers: Fueron poco apropiados. Si el senador
Jones no mira por donde va, Bert Apple­
o
Destinatario Participante
I I I ·man puede impacientarse con, él y cortar
. Espectador Oyente

marginal circunstancial casual


los fondos para la campaña electoral.
(side participant) (bystander) (overhearer) Crothers a Smyth: Está hablandu de Bert AppJemert, el pre­ @\
sidente nacional del partido demócrata,
I !
¿verdad? ®
I ,
Persona que lntenta
I
Persona que escucha Smyth a Crothers: Sí. O
escuc.har (listener in) las conversaciones @
. ajenas (eavesdropper) Como explican CIark y Carlson hayal menos tres modos en que e
los enunciados se adaptan 'a la estructura de la nueva audiencia en .."
Figurá 3.4 Roles del intérprete (11): (i) todas las referencias privadas como las abreviaturas. de los '.~
nombres, Joe, BUZ, Bert, y las expresiones como el escándalo de New .' @

e
C) 152
Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 153
Hampshire y perder la chaveta se hacen suficientemente explícitas audiencia real se parecerá ni remotamente a la que tengo en mente.
para que las entienda Un público más amplio; (ii) Crothers pide una Cuando la escritura está respaldada por un contrato con una editorial,
, clarificación para «identifican) a Bert Appelman, aunque él no la ne­ los riesgos disminuyen, pero no desaparecen, No obstante, el proceso
O cesita; (iii) el estilo se vuelve más formal, y no se usan los expletivos. que estoy describiendo es más evidente cuando se escribe una novela,
• Este ejemplo muestra también que en el caso de un destinatario 1,2, ...n, o un tratado científico, para el que quizá ni se pueda encontrar una
el destinatario directo no es siempre un interÍnediario. Se puede ha­ editorial. De igual modo, un actor practicando un papel sólo se ima­
blar al destinatario y al destinatario 1,2,,_n a la vez, sin que el destinata­ gina un público y trata de acomodar su actuación para hacerla accesi­
rio tenga que «pasan> el mensaje. ble o reveladora para el tipo de público que tiene en mente. Cuando
() Los procesos de adaptación de las formas de expresión a los pa­ se escribe un informe de cualquier tipo, incluso cuando se sabe que
peles del intérprete han sido discutidos ampliamente por los analistas será dejado a un lado, las elecciones tingüísticas se adaptan a los cri­
o de la conversación, La denominación que han usado es la de diseño
del receptor: los énunciadosestán específicamente diseñados para
terios de un lector imaginario. Mientras que estos ejemplos a veces se
aducen para mostrar que el uso' del lenguaje no es 'necesariamente
una audiencia preVista, para asegurarse tanto una continua atención comunicativo, también demuestran cómo el lenguaje puede ser fun­
• 'éomo el deseado nivel de comprensión.

•.,
damentalmente comunicativo incluso cuando no hay ningún' tipo de
comunicación (aún). Se puede llegar incluso hasta a ponerse del lado
Cuando el enunciador se convierte en intérprete d~ Bajtin al definir un «superdestinatarim) (un tipo de intérprete vir­

Al explicar la figura 3.1 se dijo que el intérprete 1 puede incorpo­ tual) al cual 'se dirigen los enunciados: un modelo mental de algo O
alguien capaz de comprender perfectamente lo que uno dice (ya sea
[) rarse al enunciador E. Eso es 10 que sucede cuando no hay intérprete
aparteqel construidQ mentalmente por el enunciador, de modo que el una persona, un dios,.1a verdad misma o la historia). En otras pala­
papel del intérprete está completamente incorporado en el mundo del bras, siempre parece haber «orientación hacia alguien (directedness)>>
enunciador, incluso si ese papel es asumido más tarde por los usua­ en el uso del lenguaje.
rios reales del lenguaje, como se espera normalmente. Hablaremos,
en esos casos, ~e un intérprete virtual (o intérprete} Observemos La influencia de los números
que este caso es realmente distinto a las presencias que se «eliminan»
o en varias etapas del enunciado, cuando el enunciador sabe que otros
La naturaleza de los enunciados lingüísticos está influida no sólo
por los tipos de enunciadores e intérpretes involucrados, sinó también
O intervienen o han intervenido como, intérpretes reales aunque no ha­ simplemente por cuántos hay. Supone una diferencia significativa si
c~n ese papel en el momento del habla, Un intérprete virtual, por otro hay un enunciador que tiene la palabra durante un tiempo considera­
lado, es en realidad sólo imaginario en el momento de producir el ble (monólogo, novela), o si hay dos o más enunciadores que partici­
enunciado. Así, al escribir este libro, estoy construyendo mentalmente pan simultáneamente en el mismo acto (como en un recital conjunto,
una audiencia para la que supongo que lo que digo será relevante y es decir el tipo de acto que requiere una forma de enunciado determi­
accesible; también debo pensar en las personas que conozco para mo­ nada previamente), De la misma manera, es diferente si el destinatario
delar esa audiencia; pero no hay garantía en el momento de escribir es una persona (en una conversación privada, en una carta privada), si
este libro de que vaya a existir una verdadera audiencia, ni de que la hay más intérpretes (algunos de los cuales pueden ser destinatarios di­
154 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 155
rectos, mientras que otros tienen otros papeles, como en la mayoría de que ha sido influido por sentimientos anti Topcroc. Uno de los ami­
las conversaciones), o cuando alguien se dirige a un grupo de perso­ gos del consejo de Al, Mike enuncia (12).
nas como colectivo (como en el contexto de una clase magistral, en
una reunión política, en una retransmisión por radio). Los aconteci­ (12) . Al, pienso que deberías pensar seriamente en dimitir.
mientos del último tipo, con un enunciador y un destinatario colecti­
vo, no se encuentran necesariamente en todas partes; aparentemente El trabajo interpretativo en relación con el estado de ánimo que hay
hay sociedades prealfabetizadasen las que es completamente extraño detrás de la decisión de Mike al enunciar (12), puesto en funciona­
(véase Gnerre, 1987); en la mayoría de los casos requiere un gran miento por su enunciado, es de proporciones gigantescas. Ade,más,
apoyo institucional. cualquier aspecto de la interpretación puede llamar la atención sobre
propiedades del mundo mental de Mike que provocaron las eleccio­
3.2.2 El mundo mental nes que hizo. Se harán hipótesis sobre aspectos de su personalidad.
Sabiendo que él es uno de los amigos de Al ¿es Mike un amigo de
La interacción 'verbal es sin duda alguna comunicación de mente a confianza? ¿Le falta.valor para enfrentarse a un problema grave? O
mente, aunque no deberíamos olvidar que las mentes son «mentes en ¿es, en cambio, una persona calculadora y está intentando crear una
sociedad» (de 10 que hablaremos más en el capítulo 6). Por esta razón situación con la que pueda aumentar su propia influencia? Se puede
la figura 3.1 tiene como base la «perspectiva» del enunciadory del hablar de emociones. ¿Tiene Mike miedo de que las cosas se lepue­
intérprete de una «realidad» mental, social y flsica. Hay aspectos de dan ir de las manos? ¿Lo mueve su sÍinpatía hacia Al? ¿Tiene miedo
la realidad flsica, social y mental que son «activados» por el enuncia­ de las posibles consecuencias de que Al tenga que enfrentarse a más
dar y el intérprete al hacer elecciones, y es así como se vuelven partes antagonismo? Más aún, ¿cuáles son las creencias involucradas? ¿Real­
del uso del lenguaje, como elementos con los que es interadaptable el mente Mike cree que lo que él propone es la mejor forma de actuar?
hacer elecciones. Comenzamos la visión global de esos objetos de la ¿Mejor para quién? ¿Qué cree él que va pasar si Al no dimite? ¿O
adaptabilidad con el mundo mental. No hace falta decir que esa «vi­ piensa realmente que Al cometió un error que es tan grave que debe
sión global» sólo puede ser sugerente, nunca algo completo.
Comencemos de nuevo con un ejemplo. ConsÍ(ierémosun~'" r¿
. dimitir? ¿Qué. a~~elos o deseos están involucrados? ¿Quiere. real-. ?)..
: mente Mik~ '~ue Aldiínita? ¿Es fuerte su deseo? ¿Es un deseo: qt\e .. \~
unión del consejo de directores de' la empresa internacional Croc & conlleva algo personal, o es puramente circunstancial? ¿Hay alguna
Ca. que fabrica cuero. El presidente del consejo, Al, ha sido atacado motivación o intención específica? ¿Es su ~tención salvar a Al?
por Topcroc, una de las ramas más' eficientes y productivas, por ne­ ¿Salvar la empresa? ¿O simplemente conseguir ganancia personal (p.
e
garse a desviar parte de la producción de ramas más pequeñas, que .~
ej. poder sustituir a Al como presidente del consejo)~ . w
son menos modernas y están peor situadas para satisfacer las deman­
das a eor:o ~lazo. Tratando de forzar las cosas, los gerentes de Top~
Los términos que estamos usando no son muy precisos,pero tam-· e
poco 10 son los estados mentales a los que estamos haciendo referen­
croe han mCltado a algunos de sus clientes directos a amenazar con cia, aunque juegan un papel importante. Tal y como está, (12) es muy
un paro total de sus pedidos a no ser que la capacidad de Topcroc se ambiguo en todas las dimensiones mentales enumeradas. Una buena
aumente par~ garantizar un abastecimiento más rápido. No solamente comprensión de la situación normalmente desambiguaría las cosas,' •
se ha puesto en duda el buen hacer de Al, sino que también se dice pero también se podrían hacer elecciones lingüísticas alternativas, . •
Gl 156 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 157
~
. inte~adaptadas con estados mentales de tal modo que se descarten al­ sobre la posición personal del segundo. Por supuesto, (14) puede ser

~ gunas de las especulaciones anteriores. Consideremos lo siguiente: simplemente una forma inteligente de combinar dos objetivos, ~o so­

(13) No queremos más problemas. Al, creo que debes dimitir.


lamente relacionados con dos tipos de intérpretes sino con el poten­

(14) Al, como amigo, creo realmente que deberlas considerar tu cial de ser más efectivo en ambos frentes: Mike se presenta como un

dimisión, por tu bien. amigo leal, 10 que puede convencer con más facilidad a Al; al ~smo

(15) La empresa sufrirla enormemente si no dimites mientras pue­ tiempo, al combinar esta muestra de lealtad con una propuesta que

das hacerlo con dignidad. está motivada claramente por la perspectiva de la empresa también se

o (16) Ya la has liado, así que pienso que débes dimitir. tiene en cuenta la sensibilidad de todos los otros intérpretes (quienes

(17) Al, de verdad quiero que consideres tu dimisión. indudablemente quieren verse a sí mismos como personas que apre­

o (18) Puede haber llegado el momento de dejar la silla a otro. cian la amistad y la lealtad, y también los intereses de la empresa).

. Desde este punto de vista, (16), (17) y (18) son todos más arriesga­
O La adaptabilidad a estados mentales específicos puede ser más fuerte .

•• o menos vaga y ambiciosa en estas reformulaciones. Observemos, sin


embargo, que esto !lO concede al intérprete menos margen para una
dos, aunque puedén ajustarse mejor a los estados mentales específicos
conocidos o sospechados de algunos de los intérpretes.
Observemos que del lado del intérprete no solamente cuentan las


ti
especulación legítima. Como el enunciado necesita interadaptarse con
el mundo mental del enunciador, las elecciones siempre están adapta-
. das, ya sea, tentativa o satisfactoriamente, al juicio del enunciador so­
propiedades de los participantes directos, con Al como destinatario y
todos los otros miembros del consejo como participantes marginales
para los ejemplos (13) a (17), y con todos los miembros del consejo
O bre 10queparece el mundo mental del intérprete o los intérpretes. Por como destinatarios directos posiblemente para (18). La forma en que
tanto, los juicios de los rasgos de la personalidad del intérPrete, el in­ Mike emite su enunciado puede, en gran parte, estar motivada por lo
volucramiento p~rsonal, los patrones de creencias, los anhelos y de­ que él espera que sean las reacciones de cualquier presencia 1.2,,:.:n co­
seos, las motiváciones y las intenciones pueden tener algo que ver. nocida, como la de miembros del consejo ausentes y accionistas im­
. Obviamente es completamente imposible considerar todos estos fac­ portantes a los que se va a comunicar cualquier cosa que se diga en la
tores de modo que se puedan evitar los problemas y los conflictos de reunión.
la comunicación. Se han de hacer "elecciones. Se han de hacer incluso Los estados mentales siempre han ocupado una posición central
con respecto a con cuál de los. estados mentales opuestos del intér­ en ciertos proyectos de la pragmática lingüística. Las creencias, por
prete el enunciado está más o menos en sintonía. Teniendo en cuenta ejemplo, están en el centro de los «supuestos de fondo» en los que
que «problemas» en (13) es algo malo para el funcionamiento de está anclado el comportamiento verbá1 y que se comunican implíci­
cualquier cosa, este enunciado toma la perspectiva de la empresa, que tamente. De igual modo, se ha confiado en una variedad de estados
Mike puede suponer que comparten la mayoria de 19S miembros del mentales para la definición· de tipos de actos de habla, como ingre­
consejo. Por tanto, el enunciar (13), haciendo caso omiso de las con­ dientes de las condiciones de felicidad. La discusión anterior, sin em":
sideraciones personales con respecto a Al como individuo y como bargo, habrá demostrado que la atribución de estados mentales puede
persona, se puede esperar que se reciba de modo favorable. Lo mismo raramente ser tan precisa como parece sugerirse en la teoria de los
puede aplicarse a (15),rnientras que (14) está claramente centrado en actos de habla. Seria dificil decidir qué domina en (12), .sí la expre­
la relación personal entre Mike y Al y la consideración del primero sión de Mike de una creencia, o sea la evaluación honesta de Ulla S1- "
T
Ingredientes del contexto comunicativo 159 .,
158 Contexto I ,

tuación, o la expresión de un deseo, o sea un intento de hacer que Al ción en los «otros» (la tercera persona), un proceso que a menudo su­
siga cierto tipo de acción, En (14) esto es más complicado al añadir lo pone colocar algunas propiedades en primer plano (como el sexo) que
que parecería ser la expresión verdadera de una preocupación sentida sitúan a la gente en un mundo social. Los aspectos de la deíxis social
de corazón, Parece, entonces, que cualquier intento sistemático de que denominamos deíxis de actitud intervienen incluso en lo' que
considerar los estados mentales tendrá que dejar atrás todas las abs­ respecta a la identificación de enunciador e intérprete e influyen en
tracciones y tendrá que tener en cuenta una variedad de fenómenos las formas de tratamiento, la elección de pronombres (en ~uchas len­
mentales interrelacionados que se acercan y se separan del centro de guas) y cosas similares. Los elementos de la estructura social, por otra
1m espacio mental que está siempre en movimiento. Queda descartado parte, no sólo afectan a la elección de deícticos sino también a cues­
el simple teorizar. Por otra parte, una perspectivapragmáticá que tiones de estilo y contenido.
busca su camino a través de la realidad del uso del lenguaje (lo que En principio, no hay límite al abanico de factores sociales con los
incluye sus posibilidades), guiada por la noción de adaptabilidad, no que son interadaptables las elecciones lingüísticas. La mayoría' de
puede ignorar la interacción entre las elecciones lingüísticas y los es­ ellos tienen que ver con propiedades del entorno social o las institu­
tados mentales· de los intérpretes, un· fenómeno que apenas ha sido ciones. A1gimas veces el simple hecho de la elección lingüística ha de
tratado en pragmática.. Aunque pueda parecer una verdad evidente estar autorizado institucionalmente: solamente un juez puede emitir
que los últimos no ejercen ninguna influencia excepto a través de su una sentencia y no tiene sentido (literalmente) leerle a una persona
procesamiento m~nta1 por parte del enunciador, incluso eso es una sus derechos a no ser que esa persona sea sospechosa de algo; en esos
simplificación excesiva. Como se demostrará más adelante (espe­ casos (ampliables a restricciones más informales impuestas por el
. cialmente en el capítulo 5), las interpretaciones, y por tanto los esta­ entorno social) podemos hablar de enunciadores ratificados e intér­
dos mentales de los intérpretes, cre:;m realmente significado, tanto pretes ratificados. 01éanse también las observaciones sobre la distri­
como los enunciados ylos enunciadores. buCiór{ de los tumos en la sección 1.1.4., y su ejemplificación en
Quedará: claro, tras estas breves 'observaciones, que el mundo 7.2.2.) Dentro de estos eptornos e instituciones muchas elecciones,
mental activado en el uso del lenguaje contiene elementos cognitivos lingüísticas dependen de las relaciones de dependencia y autoridad, o
y emotivos. Mientras que los primeros proporcionan un puente entre poder y solidaridad, no sólo entre el enunciador y el intérprete sino
10 mental y 10 social en forma de conceptualizaciones en términos de también entre el enunciador y/o el intérprete y cualquier tercera per­
las cuales se interpreta la interacción social, los segundos proporcio­ sona que ya figure en el tema del discurso o intervenga de alguna otra
nan un puente en forma de fenómenos que normalmente se estudian manera. Además, los entornos sociales e instituc~onales imponen mu­
bajo denomina~iones como afecto y grado de participación, los pre­ chos tipos de principios y reglas sobre las maneras en que pueden
rrequisitos de actit:ud para participar, mantener y «colorear» la inte­ realizarse ciertos tipos de actos lingüísticos, o sobre quién tiene el de­
racción. .fecho de realizarlos. Incluso determinan la «performatividaID) de cier­
tos actos bajo circunstancias especificadas. El poder, defInido institu­
3.2.3 El mundo social cionalmente, del enunciador, por ejemplo, capacita a alguien a ordenar,
mandar, permitir, mientras que el poder institucional del destinatario
La deíxis de, persona no está restringida a una identificación de
puede hacer a un enunciador preguntar y suplicar. El conocimiento.. . ,
enunciadores e intérpretes (véase 3.2.1). También hay una concentra­
reconocido como superior (también un tipo de autoridad) capacita a
.,

! la
()

Ú ,._1_60_"_-,--______--'-___________C_o_n_tex_to Ingredientes del contexto comunicativo 161


A
"V' un enunciador a aconsejar y orientar; 10 opuesto de la relación de au­
' rabIes, y requerirían formas de expresión más próximas a (18) o in­

e toridad basada en el conocimiento hace que un enunciador haga pre­ cluso más indirectas y formales.

guntas. La cultura, con su invocación a normas y valores, ha sido de he­

«'; Algunos de estos procesos pueden ser ilustrados fácilmente ha­ cho el correlato social favorito de las elecciones lingüísticas en la lite­

" dendo referencia a los ejemplos de la sección anterior. Es poco pro­ ratura pragmática. Es también una de las nociones (potencialmente)

bable que Mike enunciara una de las oraciones de (12) a (18) si fuera más confusas, ya que es un ejemplo excelente de un concepto en tér­

l.) un miembro reciente del consejo. Para sugerir que Al deberla dimitir minos del cuál se interpreta la interacción social preteóricamente. Su

O ' corno presidente, Mike debe estar bien establecido, ser una persona uso en el análisis lingüístico tiene una tendencia a materializar exce­

O con influencia considerable y autoridad y quizá, incluso un posible sivamente o incluso mitificar las culturas corno «entidades» del mundo

candidato a la sucesión (aunque 10 último no deberla ser tan <<natural» real que pueden ser tratadas corno organísmos naturales con propie­

O que se pudiera crear un conflicto de intereses que desacredite su suge­ dades claramente identificables. Una verdadera perspectiva pragmáti­
O rencia). También, el sugerir qué Al dimita, ya 10 diga Mike o cual­ , ca del comportamiento lingüístico no coloca la variabilidad social al
. . quier otra persona,presupone un contexto institucional en que se nivel de grupos idealizados, sino a 10 .largo de una gama de dimensio- '"
• puede apelar a práctÍcas normales para legitimizar una propuesta C9­ nes que se cruzan y que contribuyen 'a las identidades sociales de los
mo esa: pueden usarse acontecimientos anteriores semej antes para interlocutores. Las dimensiones «culturales» incluyen el contraste
"". justificar la expectativa de que Al debería dimitir; o incluso puede entre las sociedades orales y las alfabetizadas, los patrones de vida ru­
• haber Teglas ya establecidas que dicten el tipo de comportamiento. rales frente" a los urbanos, o un ambiente de opiniones influyente fren­
O Ese tipo de contextos de legitimación son aludidos al menos en (13), te a otro subcultural. Otras dimensiones de variabilidad social con las
(15), (16) y, más explícitamente, en (18). Desde una perspectiva más que son interadaptables las elecciones lingüísticas incluyen la clase
amplia, la sugerencia puede encajar en un mundo de prácticas de ne­ social, la etnia y la raza, la nacionalidad, el grupo lingüístico, la reli­
gocios en un modelo de mercado libre, donde cualquier objeto o per­ gión, la edad, el nivel de educación, la profesión, el parentesco, el gé­
sona que sea obstáculo para los beneficios o que cree el riesgo de nero, la preferencia sexual y otras. La significación lil1güística de to­
t) causar beneficios menores se elimina por principio. Volviendo a las das estas variables ha sido estudiada en profundidad, aunque a veces
O elecciones involucradas de nivel más bajo, todos los enunciados, ex­ sólo para ver correlaciones entre grupos y repertorios, más que en
cepto (18), sugieren, mediante formas de tratamiento y el modo en términos de procesos" de uso.
O que está enunciado el "contenido, un alto grado de familiaridad entre La adaptabilidad del lenguaje al mundo social es ciertamente ge­
O Mike y Al, y en (14) se invoca una relación de amistad o de cercania. neralizada. Todos estarnos familiarizados con los eventos de habla
(} Los fenómenos de máxima importancia en la relación entre las institucionales que requieren expresiones fljas, a veces incluso en otra
Q elecciones lingüísticas y el mundo social son las normas comunicati­ lengua de la que es usada normalmente por esa sociedad e incluso en
• vas específicas del entorno, la institución, o la comunidad, que tienen el evento en cuestión: p. ej. la defensa de una tesis doctoral en una,
que ser respetadas. Todos los ejemplos de (12) a (17) suenan fuerte­ universidad holandesa (en holandés) termina cuando una persona en­
• mente a «occidente»; en· un contexto cultural diferente quizá funcio­ tra, con el poder para hacerlo, y dice Hora est! (en latín «ha llegado la
" ' narlan diferentes normas, incluso en contextos institucionales compa- hora»); esta frase no puede cambiarse por Demos por terminado el
G
día. En una variedad de casos certificados debe elegirse un «código»
e
PRAQMÁTlCA. - 6

.,e
162 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 163

completamente diferente. en el curso de ciertas actividades o al diri­ " Serie O (tooku):


girse a un tipo de gente específico. Los hablantes de algunas lenguas Mi padre, mi maestro, mi coche, mi caballo, mi casa, mi ro­
en Papua Nueva Guinea, por ejemplo. pueden cambiar de la versión pa.... 2
diaria de su lengua a una «lengua de caza» cuando cazan (Pawley,
s.f.). Las relaciones de parentesco pueden dictar cambios similares, en La serie A no solamente incluye esposo, esposa, hijos, todos los des­

el caso de la «lengua de respeto» en tongano (Churchward, 1953),0 cendientes, gente de rango inferior, sino también comida, comesti­

bles, herramientas, árboles, plantas, animales domésticos (con excep­


o
la variedad <<usada con la suegra» de chirbal (Dixon, 1972) que se ha­ /)
bla en presencia de ciertos parientes tabú. Casos del mismo tipo, pero ción del caballo), etc. La serie O incluye todos los ancestros, padres,
. menos extremos, que suponen formas de adaptabilidad más suaves, se personas de rango superior, el caballo,: barcos, coches, todos los me­
encuentran en todas las sociedades en que la gente tiene un dialecto dios de transporte, ropa, casas y muebles. A primera vista estas cate­
local. Pueden seguir usándolo en la interacción diaria en su propia re­ gorías parecen hechas al azar, sin embargo, Fuentes (1960) intenta
gión y/o con su familia pero se espera que usen una versión estándar explicarlas del modo siguiente. La distinción básica es que la serie A
en algunos aspectos de su vida pública (comenzando por el contexto se usa para objetos y personas que dependen del hablante, mientras
educacional). quela serie O incluye objetos y personas de los que el hablante de­
Para algunas lenguas, el concepto de «relaciones sociales» puede pende (o que son superiores a él). Esta dicotomía puede e~tenderse
tener que ser ampliado .-para poder explicar ciertas elecciones lin­ fácilmente cuando hay que distinguir entre «hijo», «padre» o «máes.,.
güísticas- a relaciones no sólo entre personas sino también entre tro». También expresa claramente por qué los animales domésticos
personas y animales, personas y p1an'tas, e incluso personas y cosas, . pertenecen a la serie A, pero ¿por qué no el caballo? La lógica que
en la medida en que se «interacciona» con ciertos animales, plantas y hay detrás de esta elección parece ser que dentro de la red de «rela­
cosas como parle esencial de ·las actividades diarias de las personas. ciones» que caracterizan la vida rapanuí la gente es (o era) depen­
En base a esto, uno puede explicar que el marinero elija she como dÍente del caballo (como de otros tipos de transporte) para ir a cual­
pronombre para dirigirse a un barco en inglés, lengua que hace gra­ quier parte (o al menos para llegar allí en un período de tiempo
maticalmente neutras a las cosas que no tienen vida. Un caso más
exótico es el proporcionado por rapanuí que, como la mayoría de len­
razonable sin mucho esfuerzo). La última prueba que éonfirma esta
explicación puede ser que un caballo que nunca ha sido usado por su o
guas polinésicas, tiene dos conjuntos de pronombres y adjetivos pose­ dueño, según las observaciones de Fuentes, pertenece a la serie A. De Q
sivos. Se usan dos formas posesivas diferentes para los siguientes dos igual modo, las personas dependen de la ropa y de .10s caballos para
conjuntos de nombres, para los que en inglés se usa my (Fuentes, mantenerse calientes y sanos, pero ¿qué pasa con la comida? Los ve­
1960,602): getales son cultivados y morirían si no fuera porque los cuida la .gen­
" Serie A (taaku): te, y (aunque esto pueda parecer un punto débil en la cadena:de razo­
Mi hijo, mi esposo, mi esposa, mi oveja, .mis patatas, mi pes­ namiento) se considera que depende de los humanos dej ar a los peces
cado ... 1 en el mar o sacarlos fuera. Otros (p. ej. Krupa, 1982) han interpretado

I En inglés my son, my husband, my wife, my sheep, my potatoes, my fish .... [ Nota 2 En inglés my father, my. master, my car, my horse, Ín), house. my clothes....

de las tt.] [Nota de las tt.]

49

o 164 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 165

la distinción entre posesión alienable (dominante) e inalienable (su­


bordinada). Incluso sino aceptamos todos los detalles, teniendo en Referencia temporal
cuenta, como siempre deberíamos hacer cuando tratamos del lengua­
Comencemos con una serie de ejemplos que, aunque sencillos,
je~ las inconsistencias, reales o aparentes, es casi inevitable compro­
~uestran cómo el «tiempo» es una noción relativa más que un valor
bar que difícilmente se explicarían las elecciones lingüísticas en
absoluto en relación con el lenguaje, y que además interfiere con mu­
cuestión sm: referírse al modo en que los hablantes de rapanuí se ven a
chas otras consideraciones. Examinemos los saludos. Estos no sólo
sí mismos en relación con los otros y con las otras «entidades» con
nos ofrecen la trivial observaciÓn de que Buenos días es solamente
'. las que interactúan en sus actividades cotidianas. Como señala Kurpa
apropiado por la mañana y Buenas tardes por la tarde (una ~bserva-
, «es 'la relación entre el poseedor y 10 poseído 10 que se caracteríza
. ción que se vuelve menos trivial cuando intentamos determInar los
como o y a, no 10 poseído por sí mismo» (1982, 113). De igual modo
espacios temporales que cubren los términos ,«mañana», «tard:» y sus
o Biggs habla de las partículas que se colocan al comienzo de una ora-
, ción en maorí, y que expresan la misma distinción: «la posesión o al­
,equivalentes en diferentes lenguas). Ademas de estar relaclOnados
{} go respecto de lo cual el poseedor es dominante, activo o superíor se
con «períodos de tiempo» los saludos tienden a relacionarse con el
tiempo relativo a ciertos acontecimientos. Buenos días, por ejemplo,
expresa con una a;-1a posesión de cosas respecto a las cuales el posee­
sólo se usaría al encontrarse con alguien por primera vez por la ma­
dor es subordinado, pasivo o inferior,
. se expresa con una o» (1969,
'
ñana; decir lo mismo otra vez al ver a esa misma persona más tarde
43)., ,
en la misma «mañanID>, indicaría, al menos, la sospecha de una mente
, Esta referencia a fenómenos que no son" directamente accesibles a
distraída. Buenas tardes (Good evening) puede usarse al encontrarse
la competencia lingüística de la mayoría de los lectores de este libro
con alguien por la tarde, y Buenas noches (Good night) solamente, al
solamente sirve para recordar que no debemos dejar que nuestras
menos en inglés, al encontrarse en un momento (normalmente a la
ideas' sobre .el uso del lenguaje y su relación con el mundo social se
hora de ir a la cama) en que ya no queda suficiente parte de la «tarde»
o determinen por esquemas previsibles. Al mismo tiempo, el ejemplo
puede servir como transición a la próxima sección. Antes de hacer esa
para que el hablante diga Buenas tardes (Good eviming). Hola (He- .
O transición es necesario señalar que cualquier éontexto lingüístico que
!lo!) y adiós (Good byef) pueden decirse en cualquier momento del
o precede inmediatamente es también parte del mundo social en que se
día o de la noche, pero el primero solamente al encontrarse con al­
guien y el segundo al despedirse, una división del trabajo que ~o es
sitúa un ,enunciado, pero este fenómeno será tratado de modo separa­
tan evidente para algunos estudiantes de inglés como lengua extranjera.
o do en la sección 3.3. '
El que estos hechos no sean nada triviales, aunque las consecuen-:
O 3.2.4 El mundo físico cias no sean graves, se vuelve especialmente claro cuando observa­
mos hasta qué punto cambian de lengua a lengua. Así, la fórmula de
O Las deíxis temporal y espacial son los modos más estudiados y
despedida en holandés Tot straks! significa literalmente «hasta m,ás
O más visibles de anclar las elecciones lingüísticas al mundo físico.
tarde». Este «tarde», sin embargo, es necesariamente dentro del mIS­
G Ambos fenómenos han ejercido una gran fascinación en los lingüis­
mo día. Este significado temporal (que es más estricto de lo que es el


e
tas, antes de que la pragmática fuera una noción común. Por tanto,
existe una extensa e interesant~ literatura en la qué basarse, de modo
'que el panorama que sigue se puede mantener bastante rudimentario .
caso, por ejemplo, del equivalente directo español Hasta luego) tiene
consecuencias, incluso para los tipos de comunicación en que puede

.,•
-.
166 Contexto del contexto comunicativo 167
usarse la fórmula. Por eso, una carta, que normalmente no se espera Como muchos aspectos de la generación de significado lingüísti­
recibir el día que fue escrita, ni que la siga otra carta ese mismo dia, co, la referencia temporal está normalmente caracterizada por un gra- .
no puede terminar en Tot straks! Algunos estudiantes de holandés do significativo de indeterminación. Consideremos los ejemplos (23)
cometen ese error, pero deja de serlo en el intercambio rápido de a (25). '. )
mensajes por correo electrónico. .
(23) Sólo un segundin.
Todavía en el área de los saludos, algunas lenguas han encontrado
(24) Hoy no es fácil encontrar un trabajo.
modos de hacérselo más fácil a lo largo de la dimensión temporal. (25) JFK visitó Bellagio en 1963. No estaba solo. ese día.
Así el tan conocido saludo hawaiano Aloha puede usarse en cual­
qui~r momento del dia o de la noche, al encontrarse o aL despedirse Claramente", segundín en (23) no significa literalmente un «segundo».
(lo que sigue a su significado básico general de «amaD>, «afecto», o Dependiendo de quién es el enunciador y lascrrcunstancias, cualquier .""""
«expresar afecto>>.). Otro ejemplo es en el húngaro hablado, que ha U
intérprete formará expectativas específicas al contexto sobre cuánto"
perdido las indicaciones temporales de Jó napot kívánok (<<[te] deseo tendrá que esperar .para que el hablante esté «disponible». Tampoco"
O
un buen día»), Jó reggelt kívánok (<<[te] deseo una buena mañanID», hoy en (24) se refiere solamente al día en que se habla, sino también a n
etc., manteniendo a veces el sufijo acusativo unido al nombre indi­ un espacio de tiempo más amplio (y de nuevo variable) que rodea al .
cando el período de tiempo relevante, como en 't kívánok, que, como momento presente. Más interesante es todavía (25), con su correfe­
resultado puede usarse en cualquier momento. . rencia imposible lógicamente entre 1963 y ese díl!-' donde ese día sólo
Al hablar de .referencia temporal, es útil hacer la distinción entre puede interpretarse como «el día no específico en 1963 en que JFK
tiempo del evento, tiempo del enunciado y tiempo de referencia visitó Bellagio», dejando 365 posibilidades para especificación poste­
(en relación a un claro centro deíctica distinto del tiempo del enun­ rior (menos 40 para los que, por su conocimiento del mundo, o enci­
ciado). Un simple ejemplo de tiempo del evento es la frase en 1963 c1opédico, saben que el presidente Kennedy fue asesinado' el 22 de
en (19).
(19) JFK visitó Bellagio en 1963.
noviembre de ese mismo a ñ o ) . '
En la medida en que el orden temporal coincide con un orden li­
.
o
neal en las elecciones lingüísticas (como en algunos tipos de narra­ ()
El tiempo del enunciado sirve como centro deíctica en los ejemplos ciones), nos enfrentamos a un aspecto de la iconicidad dellengÜaje,
del (20) a (22). es decir, la propiedad de semejanza no arbitraria entre la forma y el
significado ..Consideremos, por ejemplo, (26). " @

.••
(20) .Ayer defendí mi tesis doctora1.
(21) Ahora estoy planeando una fiesta. (26) JFK visitó Bellagio en 1963. Ese mismo año, más tarde, fue
(22) . Empézaré a buscar trabajo mañana. asesinado.

Los enunciados también pueden colocar eventos en relación a un A menudo, el orden de oraciones conjuntas es, por esta razón irrever­
centro deíctica distinto del tiempo del enunciado. Las relaciones con sible, como en (27). ~
ese tiempo de referencia están indicadas con adverbios temporales, , . (27) JFK fue a Bellagio y pasó una noche en la Villa Serbelloni.
como cuando, después, antes, etc.
·'168 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 169

Formas de expresión de ese tipo, sin embargo, a menudo combinan el numerosas áreas de la experiencia: antes de que acabe el año (tiem­
orden temporal con relaciones significativas de diferentes tipos, como po), amigos cercanos (relaciones soéiales), voz álta (sonidos), alta
la c~usalidad (que, con suficiente fantasía, podría leerse en (26)). Más sociedad (estatus),alta cantidad (cantidad), subidas y bajadas (esta­
" a menudo de lo que parece, las formas narrativas no se corresponden do de ánimo),. la corriente ascendente del pluralismo, una mente es­
estrictamente con el orden temporal, incluso cuando se indica ese or­ trecha, ir cuesta abajo, etc. Por tanto, la relevancia del espacio como
den explícitamente coino en (28). correlato de la adaptabilidad espacial va más allá de las meras refe­
,(28) JFK visitó Bellagio en 1963. Pasó una noche en la Villa Ser­
rencias espaciales.
belloni, donde la habitación en que se alojó se llama ahora (~la Para la codificación lingüística del espacio y las relaciones espa­
habitación Kennedy». Cuatro años antes, en 1959, esta pro­ ciales, lenguas como el inglés o el español usan preposiciones (den­
piedad fue legada por la difunta Princesa della Torre e Tasso a tro, sobre, bajo, detrás, entre, delante de....), verbos (ir:- venir, traer
la fundación Rockefel1er. Él fue asesinado más tarde ese año. -llevar), adverbios (aquí, allí), pronombres (este, ese), y nombres de
lugares (Londres, y en un sentido más amplio de «lugar», el nombre
Este'ejémplo también muestra qué profundamente entrecruzados pue­ de una tienda como Harrods). Otras lenguas pueden combinar cual­
den estar.el tiempó~del evento, el tiempo del enunciado, y la referen­ quiera de estos recursos lingüísticos con otros, como elaborados sis­
cia temporal en la perspectiva de un enunciador de.la dimensión tem­ temas morfológicos. Un caso a señalar es el del húngaro, que; no ofre­
poral de «realidad». ce sufijos nominales para formas de caso común como el acusativo o
Fíiialmente observemos que una símple «operación de punto de el dativo, sino que tiene una amplia gama de sufijos espaciales (que
vista» o uná «manipúlación de la perspectiva» hacen factible que sea se pueden usar de modo metafórico) también: e,l inesivo -banl-ben,
o posible manejar un tiempo de recepción retrasado como tiempo del «en», el ilativo (-ba/-be «dentro de»), el elativo (-boll-bol, «fuera ,de
enunciado. Simplemente pensemos en escribir una carta a alguien 'que (out oj)>», sublativo (-rall-r61 «sobre»), el supresivo (-nl-onl-enlon,
se va de vacaciones y que sabemos que no recibirá nuestra carta hasta «sobre») el delativo (-róll-rol, «de _(ojj)>», el alativo (-hozlhez/-haz.
(l que vuelva. Podemos elegir entre: «hacía»), el adesivo (-náll-nél, «em», el ablativo (-tóllJól, «lejos de»),
'..J
el terminativo (-ig «hasta»).
,C) , (29) Espero que pases unas buenas vacaciones.
Por la misma razón por la que hay referencia razonablemente pre­
O y cisa al tiempo del evento, parece que hay indicadores de relaciones
O (30) Espero que hayas tenido unas buenas vacaciones espaciales absolutas. Serian ejemplos de esto dimensiones como
Norte - Sur, Este Oeste. No obstante deben formularse inmediata­
o dond~ (29) toma la perspectiva del tiempo de la escritura, mientras mente algunas advertencias. En primer lugar, esos puntos orientativos
O que (30) está orientado hacia el tiempo de la lectura anticipado. tienen sentido solamente en un planeta que gira en una dirección fij a,
O sobre un eje también fijo. (No solamente lás relaciones espaciales, si­
O Referencia espacial no probablemente todos los aspectos del mundo fisico, dependen de
esta propiedad del planeta en el que estamos: la división del tiempo
e Los conceptos espaciales son centrales al pensamiento humano de

.,
e muchas maneras, porque forman la base de metáforas estándares en
en horas, días, estaciones y años, la posición de nuestros cuerpos se­
gún la gravedad y en consecuencia las posturas del ,cuerpo, etc.). En


_ O _ _ ~_~oooo _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _

170 Contexto o-r,<'nrt'nT,".\' del contexto comunicativo 171

segundo lugar, la representación de estos puntos de orientación está la entidad usada como centro deíctico para colocación espacial de la
altamente convencionalizada en ámbitos de la actividad humana co­ figura).
mo la confección de mapas. En tercer lugar, una consecuencia de esta A menudo los enunciadores hacen que su perspectiva coincida .
convencionalizaci6n es -algo paradójicamente- que en algunas conIas orientaciones intrínsecaS de los objetos de los que hablan. Así, )
áreas de actividad haya menos necesidad de precisión al referirse a a la izquierda del coche significará «a la izquierda de la perspectiva
esas coordenadas espaciales. Por ejemplo, secciones de una autopista de un conductor o pasájero sentado hacia delante en un coche visto
que van al este o al oeste pueden indicar que su dirección es norte si desde el punto de vista de su dirección típica de movimiento». El
se puede demostrar en el milpa que el punto final de la autopista en enunciador, sin embargo, es capaz de rechazar aspectos de orienta­
cuestión (en la dirección en la que vamos) está al norte del punto de ción intrínseca. Por ejemplo, la frase delante del coche puede signifi­
salida. En cuarto lugar, algunos sistemas absolutos basados en puntos car simplemente «entre el enunciador y el coche»; o, si el hablante se
fijos en un paisaje pueden cambiar. Por ejemplo, si los habitantes pone frente al lado izquierdo' (intrínseco) del coche la frase a la iz­
de una isla toman la cima de una montaña como su punto principal de quierda del coche puede significar situado en ese lado del coche nor­ ()
orientación, las direcciones se indicarán de modo diferente según malmente visto como la parte delantera (intrínseca) del coche. Obsér­
dónde se encuentra uno en la isla. vese que esas manipulaciones de perspectiva están sujetas a más
Un tipo diferente de sistema «absoluto» depende de las orienta­ restricciones cuando el coche en cuestión se mueve. De igual modo;
ciones intrínsecas. Así, la cabeza y la cola de un animal, o la parte los enunciadores pueden hacer que su propia perspectiva coincida con
delantera y la trasera de un coche, en relación a la dirección típica de la del intérprete, como pasa nonnalmente cuando se dan indicaciones el
movimiento, determinan los valores por. defecto de delante y detrás por teléfono para ir a algún sitio. La perspectiva del enunciador se .'
en relación a animales y coches. De igual modo, muchas casas, con su puede abandonar totalmente a favor de la del intérprete, como cuando .
entrada principal frente. a la calle, tienen una orientación intrinseca .izquierda y derecha se adaptan para facilitar la comprensión.
del mismo tipo. . Incluso oraciones 'sencillas pueden resultar problemá.ticas como
La referencia espacial, sin embargo, está nonnalmente en relación herramientas para la comunicación si no se tiene en cuenta la r~lativi­ o
a una perspectiva, que puede ser el espacio del enunciador o el es­ dad de las perspectivas espaciales. Una vez, al hacer una parada en el o
pacio de referencia (el último definido como poseedor de un centro aeropuerto de Frankfurt para encontrar a un colega, estaba buscando·
deíctico distinto a la perspectiva del enunciador). Así, conceptos es­ el camino hacia la tenninaldonde nos íbamos a encontrar. Frente a un
paciales como izquierda y derecha, aquí y allf, o la frase a las 10 control de seguridad que se parecía mucho al que tienen que pasar los
usados para indicar dirección, requieren típicamente una perspectiva pasajeros antes de entrar en el avión, pensé que quizá era mejorpre- eJ
detenninada por la orientación espacial del enunciador. Cualquier co-' guntar antes de seguir en la misma dirección. Se produjo el siguiente •
sa fuera del enunciador se puede convertir en centro deíctico. Lá ora­ intercambio: •
ción La tienda de seda está cerca de la catedral, por ejemplo, ejem­
(31) JV: Quiero salir, no entrar.

plifica ese uso de referencia espacial relativa, al localizar la tienda de Oficial: Es por aquí.

seda (tradicionalmente llamada figura en el contexto de las relacio­


nes espaciales) en relación específica a la catedral (el fondo, es decir, Más seguro, seguí, pasando el control de seguridad, y me di cuenta. de "
que había entrado en una de las zonas dé embarque, como me lo ha- 1}

••
172 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 173

bía temido. Claramente, mientras mis salir y entrar se orientaban ha­ sol, no se sentirá cómodo gritando órdenes a un grupo de soldados.
cia el edificio del aeropuerto, los salir y entrar del oficial se orienta­ Por otro lado, se supone que es favorable al proceso de discurso tera­
ban hacia Frankfurt, o incluso hacia Alemania. péutico de un paciente que esté tumbado en un sofá, y también, al
Muchos de los ejemplos dados hasta ahora ya han indicado que la menos en un paradigma terapéutico, que el terapeuta se coloque de­
referencia espacial está nonnalmente relacionada con concepciones trás del paciente. Los gestos tienden a acompañar al lenguaje hablado
de movimiento a través del espacio. No es necesario decir que el mo­ en varios grados y ·en diferentes maneras, desde los gestos violentos
vimiento se puede volver el centro, yf.i sea directamente como en pa­ que pueden añadir poco al significado de un enunciado pero que pue­
sar a través, o con referencia a una fuente (de, irse) o a un objetivo den indicar mucho sobre estados emocionales y grado de participa­
(hacia, llegar). ción, pasando por el rascarse pensativamente la barbilla' (para indicar,
por ejemplo, interés), hasta movimientos completamente convencío­
o
El enunciador y el intérprete en el mundo fisico nalizados que pueden acompañar o incluso sustituir al discurso (como
el levantar el pulgar para indicar «de acuerdO)). De manera similar,
O La relatividad de la referencia espacial y temporal es principal­
una mirada similar es un acompañamiento significativo a la interac- "
(8 ", mente una función <;le la posición de los usuários del lenguaje .en el
ción oral; ténganse en cuenta, por ejemplo, los modos en" que los
«mundo». El hacer elecciones lingüísticas depende en gran medida de
enunciadores pueden dirigir su mirada lejos del destinatario, mientras
propiedades de este posicionamiento más allá de lo poco que se ha
que un destinatario (dejando de lado restricciones culturales o con­
O
," 'esbozado anterionnente en los <<puros» ténninos espaciales y tempo­ textuales) normalmente tiene que mirar al etmnciador para señalarle
O
. 'raIes', Consideremos el modo en que el volumen de la voz de alguien que está escuchando. Incluso aspectos de la apariencia física (inclui­
se adapta a un lugar. No solamente el volumen es una función de la
r.~
O distancia entre el enunciador yel intérprete, fenómeno al que todavía
da la ropa) pueden influir enormemente en la efectividad del discurso
~'.

O se puede hacer referencia en ténninos espaciales relativamente puros. individual. Esto es lo generalmente entendido por los que. dependen
de sus apariciones públicas o de su capacidad de persuasión en priva­
Pero vamos más allá de las simples dimensiones espaciales de colo­
do para su éxito profesional. También por esto, en Al~atraz, la famosa
O cación cuando observamos que en algunas guarderías americanas una cárcel de San Francisco, se decidió que sus prisioneros deberían en­
de las primeras cosas que aprenden los niños es la diferencia entre su
contrarse los unos con los otros sin ropa tan a menudo como fuera po­
voz interior y su voz exterior. En este ejemplo los elementos de la lo­
sible; Como explican los guias de las visitas es difícil hacerse el pez
calización (espacial) interactúan con las nonnas sociales y los tipos
de actividad. " gordo cuando se está desnudo, aunque tu nombre sea Al Capone: Más
comúnmente, aunque no necesariamente con menos consecuenCIas, el
En muchos casos, la posición del interlocutor en el mundo físico
modo en que uno habla está influido por condiciones físicas como el
es importante para detenninar ciertas elecciones lingüísticas y su sig­
agotamiento, la énfennedad o la ebriedad. Hay, también una vasta li­
nificado. Este hecho básico es el que hace que los materiales graba­
teratura sobre el modo en que una propiedad biológica como el sexo
dos ,en :vídeo sean tan útiies para el análisis de las conversaciones y
está relacionada con las elecciones en la enunciación y la interpreta­
otros. tipos de eventos de habla. Muchos tipos de comportamiento
ción.
verbal están enormemente asociados con posturas del cuerp,o especí­
ficas. Un oficial del ejército tumbado sobre su espalda, tomando el

174 Contexto Ingredientes del contexto comunicativo 175
Montarse en un ómnibus o en un tranvía era una novedad: Por '
Condiciones «materiales)) del habla primera vez en la historia de la humanidad, otras personas aparte de
, ,
los muy ricos podían, como parte de su rutina diaria, subir a vehículos
No es aquí donde el mundo fisico deja de ejercer su influencia so­ que no tenían que conducir. Sus ojos y sus manos eran Ubres; podían
bre el uso del lenguaje. En la literatura pragmática, sin embargo, se ha leer en el autobús. Gcorge Juergens ha sugerido que el cambio en el
prestado poca atención a las condiciones puramente «ma~eriales}) del World a un estilo y maquetación sensacionalista se ha adaptado a las
habla que inducen o evitan cierto tipo de elecciones. Consideremos necesidades de las personas que viajan al centro cada día: era dificil
(32) y (33). leer eJ1 el autobús con la letra pequeña y el gran tamaño de las pági­
nas de la mayoría de los periódicos. Así, el 'w'orld redujo el tamaño
(32) ¿Qué cenaremos?
de la página y aumentó el tamaño de los titulares y el uso de fotogra­
(33) ¿Estás imprimiendo?
fias, y desarrolló e1.párrafo «principal» en que se concentra,toda la in-, '
formación vital de una historia. Desde 1840, el párrafo «principal» se
La oración (32) es el tipo de oración enunciada en un contexto mate­ había elimina,do por los elevados costes de la transmisión telegráfica
rial en que el enundador y el intérprete tienen' algún control sobre 10 de las noticias; ahora se usaba otra vez a causa del tiempo abreviado
qUe tomarán para cenar; por ejemplo, tienen que decidir qué comida en que se leían los periódicos. Es posible por tanto que el creciente
prepararán en casa o a qué tipo de restaurante irán, o qué platos deben uso de las ilustraciones y los grandes titulares en los periódicos fuera "
elegir de un menú. Aunque su significado literal simplemente trata de una adaptación a los hábitos de la clase media y a la nueva personali- ,
un esta~o de cosas en el futuro, es raro que se produzca esta fonna de dad de la clase trabajadora inmigrante (1978,103).
expresión bajo condiciones en que las elección de cena están más allá o

d~l control y ~a responsabilidad de los interlocutores (que son, por De igual modo, algunos casos de marca en el lenguaje están relacio­
eJemplo,estudIantes ,eu,un internado o invitados a cargo de una pres­ nados directamente con aspectos materiales del mundo fisico. Esto es
tigiosa fundación). La oración (33) solía usarse docenas de veces al más visible en el caso de cambios' en la marca. Así Witkowski y O
día en l1uestra oficina, pobremente equipada, en la que ocho personas Brown (1983) informaron sobre el siguiente caso de cambio léxico en O
dependían de la misma impresora simultáneamente, y teníamos que tenejapa tzeltal, una lengua maya que se habla en el estado de Chia­
(
, '!
desenchufarla
., y enchufarla todo el tiempo. En ese contexto, éra una pas en México:
expreSlOn de, cortesía, para indicar que uno necesitaba la impresora No MARCADO MARCADO

pero no quena bloquear el acceso a otro, aunque esa fuera la única Fase 1 (pre - conquista) cih «ciervo» o
manera. Cuando compramos una nueva impresora, con un botón de Fase 2 (primeros tiempos
~nc~~di.do autom~,tico, el enunciado desapareció de nuestro repertorio en la post conquista) cih «ciervo» tunim cih «oveja» (lit. ciervo •
lIngUIStlCO: perdlO' todo su significado al cambiar las condiciones de algodón) •
materiales. ' Fase 3 (actual) cih «oveja» . te 'tildl cih «ciervo» (lit. ~
oveja salvaje)
Muchos tipos de cambio lingüístico dependen de esos fenómenos.
Con~ideremos, a un nivel trivial, el tamaño cada vez más grande de
Esta marca invertida se explica por la nada misteriosa razón de que ~
los tItulares de los periódicos americanos a finales del siglo diecinue­
ve, tal y como 10 explica Schudson: no había ovej as en el México anterior a la conquista, mientras que •
ahora son más numerosas que los ciervos. e

\..) 176 Contexto Cana/lingüístico contexto lingüístico 177


Aunque la conexión del lenguaje con las circunstancias materiales lenguaje descontextualizado. Podria defenderse que el modo en que el
es más visible cuando hay cambios, estos ejemplos muestran que contexto funciona en relación con algunos tipos de discurso oral (p.
siempre está ahí, normalmente al frente de las convencionalizaciones ej. la conversación cara a cara) es diferente del modo en que funciona
(completamente lexicalizadas en el caso tetzal, puramente ad hoc en en relación a los tipos de uso del lenguaje que emplean canales dife­
(33)), pero siempre sujetas a la adaptabilidad. rentes. No se pueden hacer generalizaciones para ninguno de los dos
casos porque los mismos canales varían demasiado a través de las
dimensiones de anclaje discursivas, situacionales y sociales. Recor­
3.3. CANAL LINGüíSTICO y CONTEXTO LINGüíSTICO demos a este respecto lo que se dijo anteriormente de los géneros del
.~.

uso del lenguaje (véase la sección 1.4). La conversación cara a cara


sigue diferentes patrones de los que caracterizan a las conversaciones
Los objetos contextuales de la adaptabilidad fmales para examinar
o en las que el teléfono es el canal. En lo que respecta a los canales es­

•.
sonp.or sí mismos parte de la forma comunicada. Pertenecen al canal critos, la escritura a mano y la impresa tienen diferentes restricciones,
lingüístico elegido' para la comunicación y a los aspectos de la elec­ y las elecciones lingüísticas para un libro no son las mismas que para
. ció n lingüística l1lispa, es decir el contexto lingüístico .
una carta (aunque, por ejemplo, los géneros de la carta y la novela se
O) pueden mezclar). Más aún, existe la categoría fronteriza entre la re­
3.3.1 El cana/lingüístico
transmisión por radio y por televisión, cuyos contextos están nor­
O malmente preescritos (prácticamente del mismo modo que lo son
Solamente hay\ll1 canal biológico para la comunicación verbal
r) '(en contraste con el uso del lenguaje de los sordos): los sonidos del otros textos escritos para ser hablados, como las obras de teatro). Esta
V habla, o las vibraciones de la atmósfera producidas con el aire de los categoría proporciona un tipo de «oralidad secundaria» (con la posi­
() pulmones y mediante los órganos del habla compartidos por los usua­ bilidad de ser representado una y otra vez en muchas situaciones dife­
rios de todas las lenguas humanas, es decir las cuerdas vocales y la rentes, una diferencia significativa~en comparación con lá fugacidad
G
.cavidadbucal con la faringe, la glotis y la úvula, la lengua, el paladar del día a día en el uso oral del lenguaje). Conside¡:emos el correo
blando y el duro, los alvéolos, los dientes, los labios y la cavidad na­ electrónico, ese extraño canal escrito asociado con expectativas de
sal. Esos. sonidos, además, siempre se producen con el fondo de los' velocidad de intercambio casi propias de una conversación, o"la co­
Q canales .no verbales de comunicación: los gestos (los ingredientes municación multimedia interactiva.
e básicos del lenguaje. de los sordos), la mirada, etc. (véase la sección
3.2.4).
Al considerar los canales lingüísticos, deberíamos recordar que
básicamente el mismo evento comuniCativo se destina a menudo para
(3
Todos los otros canales lingüísticos son en cierto modo «artifi­ pasar a través de varios canales consecutivamente. Pensemos sim­
e ciales». No obstante, no hay OIJOsición simple entre el lenguaje ha­ plemente en un discurso político típico, escrito en un principio (a me­
G blado y el escrito. A menudo, se dice que el uso oral y escrito difie­ nudo por un ayudante), leído por un políticb, grabado por medio de la
~
v ren e~ que el primero se sitúa en contexto, mientras que el segundo tecnología auditiva o visual, y después publicado (a menudo en forma
escrita otra vez).
e estaría descontextualizado. Todo 10 que hemos diCho sobre el con­

•• texto debería llevarnos a la conclusión de que no existe el uso del

•e:
"'1'

178 Contexto Canal lingüístico y contexto lingüístico 179

ción de la vida ordinaria por los sistemas económicos y buro­


3.3.2 El contexto lingüístico cráticos. f) El cambio social en las ~ociedades capitalistas
avanzadas está centrado cada vez más en el cambio cultural, y
, Tal y como se indicó con relación a la deíxis discursiva (sección el cambio cultural a menudo toma una forma prominente­ '\
1.1.1), el discurso por sí mismo forma una dimensión en la que las mente discursiva. g) En consecuencia, los analistas del discur­ I

elecciones lingüísticas se anclan contextualmente, por ejemplo, al re· so están en posición de hacer una gran contribución a la com­
ferirse a discurso' anterior, al hacer autorreferencia, o al proyectarse prensión de los procesos fundamentales de la reestructuración'
hacia un contexto lingüístico futuro. El estudio de ese tipo de fenó­ social que dominan la vida contemporánea, investigando ten·
menos a menudo se engloba bajo la denominación de cohesión. Otras dencias como la marquetización y la conversacionalización
del discurso público. h) Este libro supone un importante paso
características del contexto lingüístico que se van a discutir son la in­
en esa dirección por su análisis del aspecto discursiyo de los
tertextualidad y !a secuenciación.
cambios actuales en las formas de funcionamiento de la buro­
cracia en las sociedades modernas.
La cohesión conteXtual
El término cohesión se usa generalmente para designar la marca~ Los marcadores de conexión en un texto breve como éste incluyen: ()
ción explícita de las relaciones dentro de un discurso o un texto (que • Conjunciones corrio Gran Bretaña y otras sociedades seme­
normalmente se llama contexto -del discJ,lrso o fragmento de texto jantes en (a), sistemas económicos y burocráticos en (e) , o O
bajo consideración). Ya se ha tratado un ¡:tspecto de la cohesión, en marquetización y conversacionalización en (g).
relación con el orden temporal (véase la sección 3.2.4). La amplia • Anáfora, o términos que se refieren a la misma entidad que
otro término anterior en el discurso, estableciendo así formas
o
gama de fenómenos que intervienen se ilustran con el primer párrafo
de la introducción de Norman Fairclough a Sarangi y Slembrouck de correferencia, como con los pronombres relativos que en
CJ
(1996, ix): ' (g) y (h), los demostrativos en estos dominios en (c), estos
(34) a) Hay dos tendencias entrecruzadas que afectan al discurso cambios en (e) y esta dirección en (h), el posesivo su en (h). o
público contemporáneo en Gran Bretaña y otras sociedades • Un demostrativo usado como autorreferencia (anticipatoria) \)
semejantes. by La primera es una tendencia a 10 que podemos como en este libro en (h).
llamar «marquetizacióm> del discurso, la extensión de las • La colocación al lado o la yuxtaposición, como en la «mar-:

O
prácticas discursivas de los mercados de mercancías a, por quetización» del discurso, la extensión de.. [...] en (b).

ejemplo, los ámbitos de servicio profesional y público. c) Un


• La ejemplificación a través de por ejemplo en (b), un ejemplo

ejemplo es la proliferación en esos ámbitos 'de formas de dis·


es en (e), o como en (g).

curso· publicitario. d) La segunda es la «conversacionaliza·


, ciÓID) del discurso público, la apropiación y la imitación de • La explicación que sigue a la coma en (b) y la coma en (d).
características del discurso conversacional en el discurso pú­ • Otros tipos de relaciones lógicas como la «conclusión» indi­

blico. e) Estos cambios en las prácticas discursivas son parte cada por en consecuencia en (g).

de procesos más amplios de cambio social que afectan a las • La omisión de palabras, o la elipsis, como en la primera [ten­
sociedades modernas recientes: la incorporación de vastas
áreas. nuevas de la vida social a los mercados, y la coloniza­
dencia poderosa] en (b), y la segunda en (d), o la conclusión

inmediata omitida de (f) (<<así el cambio social toma una forma


••
••.
T
I
'J 180 Contexto Canal lingüístico y contexto lingüístico 181
prominentemente discursiva»), que es necesaria para justifica~ • El colocar muy cerca (aquí mediante una conjunción) 10 que
en consecuencia en (g). . está próximo conceptualmente para los propósitos del discurso
.• Los numerales dos en Ca), el primero en (b), y el segundo en actual en frases como ámbitos del servicio profesional y públi­
(~. .
co en (b) o la apropiación y la imitación en (d); a esto se llama
• Destacar mediante las comillas que rodean a «marque~iza­ iconicidad estructural (donde <<Íconicidad» es un término ge­
.ción» en (b) y «conversacionalización» en (d), o mediante la neral para describir los aspectos no arbitrarios de la forma del
práctica explícita de denominación de lo que podemos llamar
o en (b).
lenguaje, en este caso la no arbitrariedad o valor significativo
de las elecciones lingüísticas unidas estructuralmente).
• El contraste conseguido mediante la primera en (b) frente a la
segunda en (d), o mediante los elementos unidos en la incor­ Intertextualidad
poración de vastas áreas nuevas de la vida social en los mer­
cad~s, y la colonización de la vida ordinaria por [... ] en '(e), o, El mismo ejemplo demuestra la dimensión intertextual del con­
medIante las cualificaciones léxicas como en cambio social texto lingüístico. No hay modo de interpretar (34) a no ser que se dis­
. ~, frente a cambio cultural en (f). . tingan al menos tres dimensiones intertextuales.
• La comparación, como se hace mediante semejantes en (a). En primer lugar, es el párrafo inicial de una instancia de un géne­
• . Las formas de, repetición (que a menudo incorporan elementos ro establecido, el «prólogo», que deriva su estatus discursivo, y por
. de contraste y comparación o varios tipos de relaciones se­ tanto parte de su significado, de su conectividad intertextual con el
o mánticas como la equivalencia de. significado o la sinonimia, cuerpo de un texto más largo, normalmente en forma de libro. No hay
O ;oposición de significado o antinomia, inclusión de significado señal de esto en el texto hasta (h). Sin embargo no hay ambigüedad
o hiponirnia, no representados todos en este fragmento) como para el intérprete porque el texto se presenta materialmente en las
O primeras páginas del libro (antes de que empiece la numeración nor­
en discurso público en (a), dos veces en (d), y de nuevo en (g),
o sólo discurso en (b) y (g), con especificaciones posteriores mal) y se denomina explícitamente Prólogo. Nomialmente, el autor
.. como enformas de discurso publicitario en (e) o discurso con­ de un «prólogo» (frente a un «prefacio» o «introducción») no es el
versacional en (d), y ligados a nociones relacionadas 1éxica­ autor del texto más largo que 10 sigue. Esto tiene consecuencias fun­
. mente como en prácticas discursivas en (b) y (e) y discursivo cionales significativas. Aunque no es una anticipación por naturaleza,
. en (~ ~ ,eh); este corto fragmento contiene muchos patrones de un prólogo se escribe después' de haber leído por completo el libro
repeticlOn, ya sean contrastivos o no, rode~mdo conceptos co­ (normalmente después de que s(( ha aceptado su publicación) ycon el
mo tendencia, cambio, proceso,mercado, social, cultura' y propósito de recomendar el libro a potenciales lectores (cuyo interés,
A."
fIiiJ1 otros. en ese punto, ya ha sido demostrado por el hecho de que 10 han com­

•G(
• Formas de sustitución como en Gran Bretaña y otras socieda~
des ,semejantes en (a), sociedades modernas recientes en (e),
prado) y proporcionarle un marco de interpretación. Esto tiene conse­
cuencias significativas para las elecciones lingüísticas que se hacen.
Aunque la mayoría del contenido típico, que consiste en ubicar del

••
SOCIedades capitalistas avanzadas en (f), y sociedades moder­

nas en (h).
tema y el enfoque del libro en una perspectiva más amplia, podría ha­
ber sido escrito por los autores mismos, hay normalmente un claro

••

·r

182 Contexto Canal lingüístico y contexto lingüístico 183

aspecto de evaluación que los autores del libro nO podrían haber pre­ tanda de transmitir un conocimiento científico presentando tantas
sentado del mismo modo. Este es incluso el caso para la selección de «muestras» como les sea posible en el proceso. Un aspecto fundamen­
importante en Este libro supone un paso importante en esa dirección tal es que los autores, al igual que los lectores, están involucrados, di­
(h), y se vuelve progresivamente más claro en el resto del prólogo, recta o indirectamente, en este proceso comunicativo bajo investiga­
donde el autor hace referencias en tercera persona a Sarangi y Stem­ ción como verdaderos participantes. Además, todos los informes de
brouck, o ellos, o los autores, literalmente. alabando propiedades de investigación lingüística, al ser básicamente formas meta lingüísticas
su trabajo como en la fuerza del libro, o su atento y detallado modo
del uso del lenguaje, apelan a ese conocimiento de participantes de
de analizar los ejemplos, acabando con un nada ambiguo Este libro se
parte de los lectores. Así, en (34), la línea (c) sirve de ejemplo porque
ha de recibir como una valiosa aportación a la creciente literatura
se puede suponer de modo razonable que los 1ectorés se han enfrenta­
del análisis de discurso crítico.
do a la publicidad y han tenido algún contacto en los campos del ser­
En segundo lugar, como indica esta última cita, el prólogo al igual
vicio público y profesional, de modo que puedan entender la idea de
que el libro ha de situarse intertextua1mente en el contexto de una
que hay una tendencia por parte de los profesionales y los servicios
creciente literatura del análisis de discurso crítico. En un sentido
públicos de participar en actividades verbales que pueden caracteri­
muy real, gran parte de lo que (34) dice no puede ser entendido de
zarse como publicitarias, en que la publicidad es asociada normal­
modo posible sin un cierto grado de conocimiento sobre la literatura
mente con ámbitos puramente comerciales. Además, (d) apela a la
especializada y la investigación de la cual es resultado (y que han si­
experiencia con conversaciones para transmitir una idea sobre cam­ o
do juzgadas suficientemente importantes como para garantizarle un
bios en el discurso público. O
lugar entre las tradiciones relacionadas con la pragmática ya estable­
Antes de abandonar este tema, deberiamos señalar que no am­
cidas en el Handbook ofPragmatics). Si vamos más lejos, se necesita
pliamos el significado de «intertextualidad», como tantas veces suce­
Q
comprender la inclusión del análisis de discurso critico en una gama . ,! de, al campo de las «voces» o la «polifonía», aunque hay un área. en
más amplia de aproximaciones «criticas» en las ciencias sociales. El
que se solapan, como en los ejemplos (7) y (8) de la sección 3.2.1. O
término «critico» por sí mismo requiere para su interpretación estar al
Nuestra noción de intertextualidad es más amplia que el uso alternati­ O
tanto de ideas, en gran parte de origen marxista, sobre el carácter
vo coml:¡n que comprende solamente las citas, las alusiones, y otras O
. ideológico de las ciencias sociales «tradicionales». Este linaje inte­
referencias concretas a un pre-texto especifico. (También ver el fmal
lectual, en el que Fairc10ugh (1989) ocupa un lugar específico, expli­
de la sección 5.4.4 para más observaciones sobre la intertextuálidad).
ca también mucho sobre el modo en que se usan en (34) el mercado,

la apropiación, la colonización, el sistema, las sociedades capitalis- . Secuencialídad


tas y otros conceptos.
Una propiedad universal dejos enunciados lingüísticos:,es el or­
La tercera dimensión intertextualde (34) es que trata sobre dis­
den lineal de las partes que los constituyen. La secuencialidad de es­
curso de un tipo específico, aquí caracterizado como discurso público
tas partes, por tanto, es siempre un aspecto significativo del contexto
o, más en concreto, el lenguaje de las burocracias. Esta dimensión, sin
lingüístico. Este fenómeno ha sido estudiado en mayor extensión en
embargo, no está restringida al hecho aparentemente no problemático
el análisis de la conversación, como se ilustró en la sección 1.1.4. Las
de que el lenguaje de la burocracia sirve como «objeto», sobre el que
propiedades secuenciales del contexto lingüístico, sin embargo, son
el autor del libro (y, por consiguiente, el autor del prólogo) están tra-
184
T

I
Contexto La generación de contexto 185
I
igualmente importantes en otros tipos de uso del lenguaje. Se pueden de manejabilidad. Sin embargo, el miedo a una información de fondo
escoger unas pocas pistas a tal efecto de las anteriores observaciones extralingüística incontrolable, en cOnstante ampliación, está basado
de la conectividad intertextual del ejemplo (34). Consideremos, por en la visión mal orientada del contexto como una realidad que «está
ejemplo, la colocación del «prólogo» con relación a su estatus fun­ ahí». En realidad, los conteXtos se generan en el uso del lenguaje, Y.
cional. Obviamente, un metacomentario de un investigador diferente por tanto están restringidos de distintas formas . .t\unque en principio
del autor o autores de la parte principal de un libro podría colocarse al cualquier posible ingrediente de un evento comunicativo puede apa­
final de ese texto, en cuyo caso seria un «epílogo». Ese fragmento de recer como elemento contextualmente relevante a tener en considera­
e escritura servirla menos como recomendación (aunque se seguiría es­ ción, no todos esos ingredientes se movilizan de manera relevante en
o perando el estilo de alabanza), y no podría ser restringido meramente todas las ocasiones. En otras palabras, de toda la gama virtúalmente
o a ofrecer un marco del texto. En 10 que a contenido se refiere, podría
presuponer al menos un conocimiento parcial de los análisis ofrecidos
infinita de posibilidades, los contextos se crean por las dinámicas de
interacción entre los enunciadores y los intérpretes con relación a lo
por los autores del libro,con consecuencias inmediatas para qué po­ que está (o se cree 'lue está) «ahí afuera». Como resultado, existen
dría decirse como metacomentario, y cómo,·y daría como resultado la fronteras para el contexto relevante, aunque no sean estables y sí
expectativa de que algo de sustancia se le añadiría. En otras palabras, permanentemente negociables. El reto es descubrirlas en ejemplos es­
las elecciones Hng~ifsticas tendrían que ser adaptadas profundamente pecíficos de uso del lenguaj e antes que imponerlas en base a un mo­
a varios niveles pe la estructura y del contenido. deló teórico preconcebido. Intervienen al menos tres fenómenos que
Los capítulos 4 y 5 de este libro tratarán básica y respectivamente hay que considerar: las «líneas de visión», que determinan la posición
O '. de los ingredientes del contexto lingüístico y las operaciones que en de un usuario del lenguaje frente al «mundO}) que lo rodea (véase la
él se realizan. sección 3.4.1); los muchos modos en que los contextos pueden mani­
pularse mentalmente (3.4.2); y los procesos activos de contextualiza­
ción (3.4.3).
. 3.4 LA GENERACIÓN DE CONTEXTO Antes de revisar brevemente esos fenómenos, h1:!:y que formular
dos advertencias preliminares, En primer lugar, algunos contextos
pueden ser relevantes sin ser «movilizados». Conside~emos simple­
Uno de los obstáculos más graves en el desarrollo de una teoría de mente un ruido fuerte que distrae al enunciador e impide una recep­
principios en pragmática, evitando' poner restricciones arbitrarias en ción clara por parte del' intérprete. En segundo lugar, el considerar
. el espectro de rasgos permitidos en los análisis pragmáticos -rasgos que los contextos se generan en el uso del lenguaje no implica un
® del lenguaje como fenómeno inserto en situaciones-, ha sido un tipo constructivismo radical. constructivismo radical mantendría que el
O .' de vértigo comprensible. La aparente falta de límites del contexto po­ c'ontexto está construido o creado por el usuario del lenguaje siempre
• drí·a tener uri efecto mareante. Por esta razón fue tan fácilmente adop­ y (casi) por completo. Esa postura, que niega la existencia de una
ta da como estándar durante tantos años la opción griceana (véase la <<realidad» independiente (o al menos de una realidad que se puede
., " sección 1.3) para definir .el significado .:---.después de introducir una
«conoceD», no puede explicar la interpretabilidad de (35):
• . perspectiva claramente pragmática- por completo en términos de'la
G intencionalidad del hablante individual. Pero dio una falsa impresión (35) ¡Oh, mira!

•• .­
186 La generación de contexto 187

Este enunciado se emitió un día gris cuando de repente apareció un bargo, para simbolizar la «colocación» de los usuarios del lenguaje.
rayo de sol entre las nubes, No se necesitaron gestos de apoyo, tam­ que impone restricciones al tipo y a la cantidad de «mundo» que se
.poco el tiempo había sido el tema de conversación. El ambiente fisico puede activar. Esas restricciones determinan la ubicación y los mate­
por sí mismo, con su color gris y el rápido contraste de luz, propor­ riales, de construcción para el proceso de generación de contexto,
cionó un detonador contextual «objetivo» suficiente para que tanto el tanto del lado del enunciador como del lado del intérprete. Por ejem­
enunciador como el intérprete mantuvieran una comunicación no am­ plo, se necesita familiaridad con diferentes sociedades para ser capaz
bigua sin ser explícita. De igual modo, hay elementos contextuales de identificar a Gran Bretaña como un caso de tipo de sociedad y así
«ahí afuera», esta vez de naturaleza histórica, que hacen que (36) sea hablar de Gran Bretaña y otras sociedades semejantes en (34) (a).
«objetivamente» divertido: Podría ser precisamente el grado de familiaridad y el ámbito de so­
(36) R.?ederer vendfa unagran remesa de Cristal a Sudamérica en cieclades con las que se supone que un autor está familiarizado lo que
sena cuestionado por un intérprete que tuviera dudas sobre las afir­
1919. Puesto que éste era un champán que se había destinado
originalmente al Zar de Rusia, quien, par una razón u otra, maciones del enunciador. De igual modo, los juicios sobre dónde es­
habia sido incapaz de pagar el vino que únicamente compraba tán las líneas de visión influyen sobre los procesos de interpretación
su corte [... ] . en un juzgado o en intentos de comprensión histórica: la respuesta a . ")
preguntas sobre si alguien pudiera haber sabido algo en un momento
Este párrafo está tomado de una guía de vinos blancosdcFrancia, un dado son a menudo decisivas.
texto que no intenta hacer bromas históricas. La oración por una ra­ o
zón u otra ignora un contexto histórico que no tiene que ser «cons­ 3A2 La manipulación de contextos
truido» (no importa lo discutibles que pueden ser algunos tipos de co­
Los usuarios del lenguaje tienen una excepcional' capacidad para
. no cimiento histórico): el Zar Nicolás II había perdido su poder de
adquisición con la Revolución de Febrero (marzo de 1917 en nuestro
manipular contextos moviéndose dentro y fuera de lo que se conoce O
normalmente como espacios mentales (Faucorinier, 1985). Conside- (J
calendario), y fue asesinado enjulio de 1918, por lo que no había un
Zar al que ven:der vino en 1919. remos simplemente (37), que es una oración de la introducción. del c)
. editor a Bajtin (1986):
3.4.1 Líneas de visión (37) Él [Bajtin] es una figura todavía en el proceso de convertirse
en quien será. o
Recordemos la figura 3.1 en la sección 3.1. Se indicó que las lí­
neas que convergían en E (enunciador) e 1 (intérprete) forman líneas

e
Esta oración se mueve a través del tiempo desde el presente hasta el O
de visión que demarcan las «borrosas» fronteras de la gama de ingre­
futuro, a través de un mundo social.' Nos conduce desde la realidad
dientes de los mundos mental, social y fisico que pueden funcionar

como objetos contextuales de la adaptabilidad. La inadecuación de

histórica de una persona que habia muerto hacía once años (en 1975) ~,.
-implicando asi la referencia al pasado-- hasta una figura académi- "{J;,!
esta representación visual (de la que tratará más en el capítulo 6) debe

ca intemporal cuya vida continúa. También se mueve a través de un


haber quedado clara: líneas semejantes debenan extenderse en el

. mundo del contexto lingüístico. La figura sigue siendo útil, sin em-

contexto lingüístiéo y mental desde el área limitada de producción e


académica hasta un potencial de interpretación menos limitado. Es
188 Contexto La generación de contexto 189
o solamente al entrelazar todas estas perspectivas cuando se puede decir contextualización y es uno de los más importantes, si no el más im­
y comprender (37). portante de los ingredientes en la generación verbal de significado. En>
Un ejemplo igualmente interesante es (38), que representa el mo­ ,otras palabras, las interpretaciones contextuales son activamente se­
~ do en que solía presentarse un artista callejero de Berke1ey llamado ñalizadas y/o usadas, y es este hecho el que las hace más útiles en el
~ SwamiX: análisis lingüístico, porque es 10 que hace que se puedan rastrear. La
(38) Yo soy el que Quién es quién define como ¿Qué es eso? señalización puede tener lugar en el momento de la enunciación o,
como se ilustrará mejor en el capitulo 5, las interpretaciones que se
O En esta oración, las perspectivas del enunciador, una autoridad exte- usan y con las que se está de acuerdo en la interacción posterior pue­
O rior, y de la audiencia están cuidadosamente mezcladas para obtener den eliminar la ambigüedad en fragmentos anteriores de discurso.
un efecto humorístico. Consideremos los muchos significados que pueden vincularse al ejem­
La manlpulación de contextos no siempre funciona de este modo. plo (12), y 10 que les pasa cuando (12) se integra en el siguiente inter­
A veces se mezclan diferentes espacios mentales de forma inadverti­ cambio más largo (como (40)2. más abajo):
da, como t:;:n (39), to~ado de un libro de antropología: (40) 1. Dave:¿Qué deberíamos hacer ahora?
(39) La mayórla de los pueblos más simples no ven la conexión 2. Mike: Al, pienso que deberías pensar seriamente en di­
causal entre la concepción y el nacimiento. mitir.
3. Dave: ¿Qué bien haría eso?
4. Mike: Sería una señal de que se toma en serio a Topcroc.
Aquí, el marco de interpretación del antropólogo está superpuesto al En su reacción el consejo puede alimentar más esa
~¡ de la gente cuyas creencias describe. Para una adecuada descripción percepción, incluso rechazando la dimisión al mis­
te) de esas creencias, el. concepto de concepción no podría usarse de mo­ mo tiempo.
do que se 'atribuya Goma concepto al pueblo en cuestión, porque> im­
plica una comprensión de la conexión causal que se dice que ellos no . (40)4. puede decirse para contextualizar a (40)2. retro activamente, de
entienden. Así, (39) s6lo tiene sentido cuando concepción se emplea modo' que elimina un cierto tipo de ambigüedad. Al mismo tiempo,
como eufemismo de acto sexual. (40)4. puede estar contextualizándose a sí mismo, al eliminar una po­
r, sible ambigüedad, mediante, por ejemplo, un tono jocoso y/o un énfa­
U 304.3 Contextualización sis especial en rechazando. '
o Tomados aisladaménte, casi todos los enunciados son altamente Gumperz creó el término indicios contextualizadores (contex­
indeterminados porque se pueden encajar en múltiples constelaciones tualization cue) para designar las señales lingüísticas, muchas de las
Qcontextuales. Lejos de introducir vaguedad, dejar que el contexto fi­ cuales son prosódicas (pero' también incluyendo los gestos o sonidos
O gure.~~ el análisis yn~ístic? es por tanto un prerrequisito para la para mantener la comunicación (back channel eues), como se defmie- '
." preClSlon. Como senale antenormente, sin embargo, deberíamos evi­ ron en la secCión 1.104, al intercambio de códigos, como se describió
• ,tar el err~r de cosificar o petrificar el contexto. El contexto contribuye en 4.1, etc.), para la comprensión situacional de los aspectos societa­
les del significado. La noción puede fácilmente ser generalizada a

., a la clandad al estar sujeto a la negociación; respuesta o rechazo,


• . aceptación de la respuesta o renegociación. Este proceso se denomina

cualquier huella lingiiística de un proceso de contextualización. Estas

••
·...­ .. _----------------------------­

190 Contexto Resumen lecturas recomendadas 191

huellas se pueden encontrar potencialmente en cualquiera de los ni­


veles de la estructura lingüística que revisaremos en el capítulo 4. )
.,
(Para una lectura más avanzada y un tratamiento ejemplificado de \

este tema, véase la sección 5.4.2; todos los análisis posteriores debe­
rían proporcionar suficiente ilustración.

3.5 RESUMEN Y LECTURAS RECOMENDADAS

Al' preguntamos con qué se interadapta el lenguaje, podemos


contestar que cualquier ingrediente de un acontecimiento comunicati­
vo es un correlato potencial de la adaptabilidad. Estos correlatos po­
tenciales son «activados» al presentarse entre las «líneas de visión»
de un enunciador (E) y/o un intérprete (l). Es particulannente impor­
. tante recordar:
• Que E e 1 incorporan múltiples papeles funcionales (llamados o
«voces}) en el caso de E).
• Que los correlatos contextuales pueden encontrarse en los
mundos mental, social (o cultural) y fisico, y que también in­
cluyen propiedades del canal lingüístico que se usa y,yl con­
texto lingüístico eI;1 que tiene lugar el evento. o
• Que el contexto es el producto de un proceso de generación ()
que incluye tanto lo que «está afuera» como su movilización (y O
a veces la manipulación) nevada a cabo por los usuarios del
l~mguaje.

Para una discusión posterior de lo que se considera relacionado


con el «contexto» ver Auer (1995), Auer y Di Luzio (eds.) (1992),
Duranti y Goodwin (eds.) (1992) y Malinowski (1923). Sobre las vo­
ces del enunciador: Bajtin (1981), Ducrot (1996). Sobre los papeles
del hÍtérprete: Clark y Carlson (1982), Eco (1979), McGregor (1986a,
1986b, 1990). Sobre los papeles de los participantes en general Hanks
Ilustración 3.1. El metro de Londres
'--..! 192 Contexto Tema de investigación 193

[CUIDADO CON EL HUECO [entre el tren y la plataforma] (Mind the gap 3).
Mujer de la cosecha.
3.6 TEMA DE INVESTIGACIÓN
Pero no, ella es abstracta, es un pájaro

De sonido en el aire del aire que se eleva

y su alma canta libre


• Cualquier ambiente urbano es una red de densos cámpos semióticos.
Porque es la,canci6n la que la hace cantar
La Ilustración 3.1 contiene algunas fotografIas de este tipo de campo,
el metro de Londres. Describa los mensajes que contiene en términos
GAP Cualquier regalo sólo de Gap de sus parámetros contextuales.

Cuidado con el hueco


Por Elizabeth Speller
o Lo que más me gusta de ti es un espacio,
G Una ausencia esbelta, brillante, que hace ami corazón más afectivo,

••
ApoyadoPQr dientes ti~comprometidos en cada lado

bastante cOInun~s, bastante blancos, siguiendo las convenciones normales,

(Hasta que alguien alcance al canino izquierdo,

que éambiade direcci6nindependientemente; incluso en la dentadura no

"O
suenas idiosincráSico)J{,

Ese pequeño hueco en la implacable, de otro modo impenetrable, pared ~e tu


sonrisa;
o Es 10 qtfe te hace. '
Pasta dental 2 en 1 y enjuague bucal antibacterial.]
O
O (1996a), Irvine (1996). Sobre los estados mentales: Bnmer (1990).
Sobre el contexto, social (escenarios, instituciones, etc.): Fasold
(1984), Sarangi y Stembrouck (1996). Sobre el tiempo: Comrie'
(1985), Moeschler (1996). Sobre el espacio: Hanks (1990), Levinson
~ (1992a). Sobre los canales lingüísticos: Halliday (1989), Slembrouck
(1995), Tannen (ed.) (1982). Sobre el contexto lingüístico: Halliday y
O Hasan (1976). Sobre la generalización de contextos: Fauconnier
Q , (1985). Sobre los indicios contextualizadores (conteXtualization cue):

••
Gumperz (1982).

••

3 Frase que se repite en las estaciones de metro de Londres, y que se ha hecho ti~

pica y en cierto modo representativa de la ciudad. [Nota de las tt.]

PRAGMÁ'DCA. - 7


Lenguas, códigos y estilos 195

P.rin:ero, hay algunos niveles de elecciones lingüísticas que están


por enClma de todos: lengua, código y estilos (véase la sección 4.1).
Segundo, hay ingredientes de construcción de enunciados básicos
q~e se encuentran potencialmente en cualquier enunciado y en varios
mveles estructurales (véase la sección 4.2). En tercer lugar, es necesa­ ~\

)
rió revisar el funcionamiento de tipos diferentes de estructuras de
enunciados y grupos de enunciados. El término enunciado se reserva
4 para cualquier segmento de lenguaje, sin importar su extensión ni
ESTRUCTURA cuantas voces contenga, con un principio y un final claros y produci­
dos por la(s) misma(s) persona(s) (véase la sección 4.3). El cuarto
tema se refiere a la atención que se debe prestar a los principios. de
construc~ión de en,unciados que guía.IJ. la producción e interpretación
Dada su concentración en los procesos del uso del lenguaje, la
de enunclados y de grupos de enunciados (véase la sección 4.4). Por
pragmática no necesita su propia unidad básica de análisis, ya que las
último, se debe examinar, el modo en: que el hacer eleccio~es reales
elecciones lingüísticas actúan en todos los niveles de la estructura que
implica todas las necesidades anteriores sin perder de vista el hecho
muestran algún tipo de variabilidad. Por consiguiente, para estudiar
de que, a menudo, elecciones en un área se pueden adaptar a otras en
aspectos del funcionamiento significativo de1lenguaje, los procesos
otra área (véase la sección 4.5). .
en cuestión tienen que situarse con referencia a objetos estructurales
de adaptabilidad específicos. Estos incluyen «estructuras» en un
séntido estricto (en varias capas o niveles de organización) además de
principios de «estructuración». 4.1 LENGUAS, CÓDIGOS Y ESTILOS u
. Se deb~ observar que las estructuras estratificadas no pueden con­ O
SIderarse sImplemente un conjunto ordenado linealmente cuya com­ La decisión de usar el lenguaje supone ya una elección entre un
plejidad va aumentando. Este erróneo supuesto ha perseguido a la conjunto de opciones (todos lps sistemas de signos). Como se señaló
pragmática durante varios episodios de su historia. Por esta razón, en en el Capítulo 3, exíste normalmente un alto grado de interacción en­
algún momento se creyó que era posible analizar textos enteros de tre las elecciones lingüísticas y las formas de comportamiento no ver­
manera análoga a las oraciones pero con un nivel más alto de com­
bal que las acompañan, desde el aspecto físico. y la postura corporal
plejidad. Posteriormente, cuando los actos de habla fueron proclama­
hasta la ?roduccíón de sonidos paralingüísticos, risas, gestos y mira­
dos unidades básicas del análisis pragmático, las estructuras de mayor
das. De Igual modo, cuando se usa el canal escrito, las elecciones lin­
orden se consideraron «macro-actos de habla» se usara o no este
güísticas pueden destacarse con representaciones pictóricas de dife­
término. En lugar de hacer solamente un listado Jerárquico de niveles
rentes tipos. Relegamos el resto a la esfera del contexto y por ahora
relacionados, una explicación de la estructura lingüística en relación
'con las elecciones lingüísticas requiere una discusión de los cinco te­
nos .q~edamos con l~s elecciones lingüísticas, el ámbito que ha sido o
mas siguientes.
tradlclOnalm~nte cubIerto bajo el término (<variabilidad». e
u 196 Estructura
r

I
Lenguas, códigos y estilos 197
------------------------------------------~---
Una vez se ha optado por el lenguaje natural, se debe elegir una seguir escolarización subvencionada en holandés al sur o en francés
1eI1;gua entre un conjunto de aI'roximadamente 4.000 a 6.000 (depen~ al norte; detenninar si las señales en la carretera dirigen a Luik o
de de cómo se cuenten). Aunque esto pueda parecer trivial, la elec­ Liege depende en mayor medida de dónde está uno que de hacia dón-'
ción se basará al menos en la competencia lingüística del enunciador de se dirige. Este es el resultado de un conflicto político. También las
y las suposiciones sobre lo que los intérpretes entienden. Así, cuando fuerzas políticas se activan para lograr la estandarizaCión o para desa­
se escribe una solicitud de beca para una fundación americana es mu­ rrollar la planificación lingüística que condujo al trilingüismo en Lu­
cho más útil hacerlo en inglés que en cualquier otra lengua. Del mis­ xemburgo o a las elecciones de lengua en el sistema educativo de
mo modo, en una gran conferencia científica internacional se usa una Tanzania (donde no hay escolarización en las lenguas vernáculas, la
pequeña parte de la gama de lenguas de comunicación internacional, educación primaria se imparte mayoritariamente en kiswahili y los ci­
o otra' vez con el inglés como primera opción. Las consecuencias de
esto no son en absoluto triviales: como se ha aflnnado, a menudo
clos superiores de educación, en inglés). Casi siempre las elecciones
políticas se inspiran más en consideraciones ideológicas que en con­
O puede dar como resultados modelos de dominio y hegemonía cultural. sideraciones prácticas. La frontera lingüística belga refleja la creencia
O Otros muchos objetos contextua1es de adaptabilidad que influyen en

••
de que la homogeneidad basada en el territorio es normal. El dominio
, la elección 1ingüfstiQa de manera importante transcienden (juiCios de) del árabe moderno estándar (relacionado cercanamente con el árabe
capacidad y factibilidad y se sitúan desde el pÍincipio en profundas clásico del Corán) entre las élites en todo el mundo árabe se explica

• dimensiones sociales del' mundo.


CónsideremÓ$:por ejemplo las sociedades bilingües o plurilin­
O- gües, una categoría a la que pertenecen casi todas las sociedades de
O una manera u otra (y a la que todas pertenecen si tomamos en serio la
parcialmente por su uso práctico en un paisaje muy diverso lingüísti­
camente, pero también está relacionado con la convicción política­
mente aprobada de que el árabe es uno e indivisible porque fue dado
así por Alá: El argumento de que «fue dado por Alá» revela sus pro­
I~') variación dialectal), aunque siempre se consideran casos marcados o 'pías bases ideológicas, ya que la lengua estándar no es idéntica a la
.\..­
excepcionales. En teoría debería haber dos grupos: el de sociedades del Corán. El argumento se aplica políticamente a 'casi todo 10 que
Ü donde diferentes grupos hablan diferentes lenguas y otro donde la uno quiere defender enérgicamente. Impregnando todo esto, ya sea
() mayoría de los miembros hablan más de una lengua. En la práctica cómo origen o como consecuencia, las elecciones lingüísticas son in­
éstos están siempre mezclados, incluso si pensamos en casos como fluidas por las actitudes, es decir, los sentimientos inspirados' por len­
Bélgica en un extremo (con una frontera lingüística congelada que guas en particular por su papel sociocultural de marcadores de identi­
f-:~~ separa comunidades diferentes lingüísticamente y con solamente a1­ dad (a nivel de clase social, relaciones de mayoría-minoría, etnia,
U
gunasáreas bilingües, francés-holandés) y casos como Luxemburgo nacionalidad, etc.). Sin embargo, el hacer elecciones lingüísticas no
$ en el otro extremo .Ccon su orgullo en el trilingüisrno francés-alemán­ tiene que situarse siempre en un contexto de conflicto. Con frecuencia
(;), luxemburgués de la mayoría de sus ciudadanos). El hacer elecciones" , se puede lograr un consenso (casi) completo, como cuando una co­
ya sea a nivel de la comunicación cara a cara o a nivel' de las institu­ munidad de expatriados zaireños en Amberes, hablantes de engala,

"•e , ciones, es a menudo una fuente deconflido porque se guia por fuer­
'zas políticas, foerzas ideológicas y actitudes lingüísticas, de modo
que generalmente se hace imposible separarlas. En la frontera lin­
kiswahili y otras lenguas africanas, convergen en el uso de' enga1a
(véase Meeuwis, 1997).
'No es necesario decir que los escenarios plurilingües son extre­

•., güística franco-holandesa en Bélgica, por ejemplo, es imposible con- ' madamente adaptables. Cualquier situación de lenguas en contacto


;---- )

'TI
198 Estructura Lenguas, códigos y estilos 199

puede conducir a modelos o patrones de convergencia (la adaptación cador de las elecciones lingüísticas -pero no separable completa­

mutua de rasgos lingüísticos entre diferentes lenguas, básicamente un mente-o Definimos código como cualquier variante distinguible de

producto de la acomodación a las necesidades comunicativas mutuas, una lengua que supone un conjunto sistemático de elecciones, unida a

consciente o no), divergencia (el fortalecimiento de las diferencias un área geográfica específica, una clase social, unas funciones asig­
'1

cuando, por ejemplo, actitudes lingüísticas negativas bloquean la nadas o a un contexto de uso específico. El conjUnto de códigos en
~}
acomodación), mantenimiento lingüístico (la conservación de una cualquier lengua hablada en una comunidad de un tamaño considera­
)
lengua o de un rasgo, lingüístico a pesar de la presión de otra lengua), ble es virtualmente infinito. Se puede encontrar un dialecto estándar,
I-~'..,

inteiferencia lingüística (la inserción de rasgos lingüísticos de una también dialectos regionales y sociolectos (algunos representan códi­

lengua en otra), cambio lingüístico (un cambio en el equilibrio entre gos «elaborados» que se pueden usar 'en una gama amplia de contex­

diferentes lenguas que se usan en la misma sociedad), extensión lin­ tos, otros muestran un código más «restringido» y sólo se usan en la
.~

,~~,
-'
güística (la ext~nsión geográfica del uso de una lengua específica), conversación cara a cara en círculos más pequeños) e incluso idio­
dominio lingüístico (donde una lengua es favorecida frente a otras), la
(J
lectos (que caracterizan los usos individuales). A veces se encuentran
()
minorización de una lengua (lo contrario de dominio) y a veces inclu­ lenguas específicas de un grupo, ya sea para unos pocos iniciados,
'-J
so la muerte de una lengua (o.,por supuesto. la revitalización). Todos como argots o jergas (comparables a las versiones de una lengua es­

estos procesos suponen varios' tipos de cambios lingüísticos. Desde pecíficas de un contexto a las que nos hemos referido en la sección

un punto de vista pragmático, cualquier intento analítico de imponer 3.2.3). o para segmentos de la población más amplios. como el len­
estabilidad en un sistema es sospechoso por definición. Un intento de guaje de las mujeres como opuesto al lenguaje de los hombres; hay

ese tipo fue la introducción de la noción de diglosia, que intentaba jergas o registros específicos a ámbitos o actividades (relacionados

describir «situaciones lingüísticas relativamente estables» en las que muy de cerca con 10 que se ha llamado géneros en la sección 1.4 pero

. I
hay una clara distribución funcional entre una variedad «alta» y una no cubriéndolos totalmente) que van desde el lenguaje literario alle­
variedad «baja» de una lengua (o a v:eces una lengua «alta» y una len­ gal, periodístico, burocrático, el lenguaje político, el lenguaje científi­
()
gua «baja»). Si tomamos el árabe como ejemplo queda claro que no co, el lenguaje médico, el lenguaje de la publicidad, el lenguaje de la
hay una estabilidad real entre la división de trabajo entre el árabe mo­ aviación, etc. Finalmente, hay también adaptaciones de una lengua ()
derno estándar y las variedades locales de árabe, aunque haya persis­ específicas a un contexto, por ejemplo cuando ésta sirve como lengua Q
tido por mucho tiempo. En este caso, hay una discrepancia importante franca para la comunicación entre hablantes no nativos o cuando un ©
entre las normas y el uso real; por ejemplo, mientras el árabe moder­ hablante nativo simplifica su producción a un habla más simple, co­

no estándar se considera la norma para la enseñanza universitaria, no mo la que se usa con un extranjero (foreigner talk), para ser entendido

siempre se usa. Incluso las normas son una fuente constante de dis­ por un hablante no nativo con un conocimiento muy básico del len­

putas y tensión social relacionada con la lengua, principalmente diri­ guaje.

gidas por fuerzas religiosas y políticas; muchos educadores afirman Una vez que se elige una lengua o un código, éste no tiene que

que el acceso a la educación en las variedades locales es un requisito mantenerse a toda costa. De hecho, el cambio de código, término abar­

previo para el avance social de grandes segmentos de la poblaciÓn. cador para la alternancia de lenguas o códigos, es un caso frecuente y

La idea de diglosia, que a menudo supone sólo variedades de la una estrategia favorecida especialmente en el discurso oral. Puede te­

misma lengua, lleva a la noción de «código», el segundo nivel abar­ ner muchas y diferentes funciones. En (1), por ejemplo, la traducción

o
T
200 Estructura Lenguas, códigos y estilos 201

de un' chiste árabe marroquí, el cambio de código es un modo de evi­ 10 que hace es restaurar una relación de poder que está amenazada
tar un tabú social. poniendo al inmigrante «en el lugar que se merece» (véase Hinnen­
kamp, 1991).
(1) Dos moscas están copulando delante de una madre y su hijo.
Niño: ¿Sabes lo que están haciendo estas moscas? '
En el contexto de la comuniCación interétnica o intercultural, se
Madre: No. llama estilos comunicativos a los códigos que están restringidos a un
Niño: ns font l'amour. comportamiento verbal de grupos identificados étnica o socio-cultu­
Madre: Está bien, está bien. ralmente en escenarios específicos, o son típicos de éstos. En el ejem­
Q Niño: ¿Sabes? Si hubiera dicho esto en árabe, te habrías plo (2), se puede decir que Jesse Jackson cambia de un estilo comuni­
ido de la habitación inmediatamente. cativo estándar americano a uno aftoameri cano , cambio que puede
causar dificultades interpretativas para americanos blancos que asis­
o Como las lenguas y los códigos se asocian con lugares, grupos, acti­ tan al acto. Como las propiedades de tales códigos y estilos comuni­

.,
@
vidades o funciones, el cambio es uno de los recursos de hablantes y
destinatarios para generar el significado de su mundo social interac­
cionalmerite, para negociar la inversión mutua en el mercado lingüís­
cativos están altamente sujetas a la formación de hábitos (que a veces
conlievan significados que son difíciles de cuestionar conscientemen­
te, como' ciertos aspectos prosódicos) de hecho pueden causar pro­

•• tico. Se puede usar para demostrar afecto y solidaridad o para marcar


y mantener relaciones de poder. Cuando Jesse Jackson, en uno de sus
discursos electorale.s de la campaña de 1984, cambia de la variedad
blemas comunicativos. Al mismo tiempo, debe considerarse su adap­
tabilidad, recordando que un encuentro intercultural puede cambiar
aspectos de código o estilo de maneras inesperadas, ya que la expec­
O estándar del inglés americano a inglés negro (la variedad usada por la tativa de problemas puede aumentar la tolerancia a 10 que de otra ma­
u comu:nidad aftoamericana, «Black Englislm) diciendo: nera serían enunciados inteligibles, reforzando así la capacidad inter­
o (2) Well, 1 done a lí'l observin' now 1 pretativa de los participantes.
Aunque los estilos comunicativos, que pueden caracterizar dis­
()
seguido de un episodio largo, metafórico, in crescendo, común en la tintas variantes de una misma lengua, son códigos, el témiino «estilo»
()

retórica pública aftoamericana, 10 que hace es indicar la identifica­ se puede usar para referirse a un tercer nivel abarcador de'la elección
ción con su audiencia, predominantemente negra (véase Verschueren, lingüística que se suma a las elecciones de lengua y Código. Usare­
o 1989a;el ejemplo se estudia con más detalle en la sección 8.2.1). Pe­ mos estilo para describir la variabilidad a 10 largo ,de las dimensiones
de formalidad e informalidad, del habla informal' o coloquial a usos
'O',
','
ro cuando un mendigo alemán, después de conversar con un tran­

o
seúnte turco-alemán en alemán estándar, cambia de repente a la, va­

riedad simplificada usada' con un extranjero (foreigner talk) para


altamente formales. Todas las lenguas son susceptibles de usos esti­
lísticos variables y también la mayoría de códigos, aunque algunos de
O decir: ellos (como argots o jergas) se encuentran normalmente en el extremo
Q de informalidad, mientras otros (como el legal) son típicamente for­

.
O
e

(3) Türkishmann du?[¿Tú hombre turco?]

, ¡ La versión del inglés estándar es Well, 1 have been observing for a while,«Bue­

no, he estado observando un poco». [Nota de las tt.]


males.
Se dijo que lengua, código y estilo son niveles del hacer eleccio­
nes que están por, encima de los otros porque las diferencias entre
lenguas, entre códigos y entre estilos están conformadas por conjun­
o


202 Estructura Ingredientes de la construcción de enunciados 203

tos sistemáticos de elecc.iones a partir de ingredientes que sirven para alto y/o. ascendente para marcar las interrogaciones y uno bajo y/o
")
, la construcción de enunciados (véase la sección 4.2), a partir de tipos descendente para marcar las afirmaciones y maneras similares para
de enunciados y grupos de ,enunciados (véase la sección 4.3), ya par­ indicar conmoción, intención o emoción), hay también diferencias
tir de principios de construcción de enunciados (que se discuten en significativas. Por esas diferencias una mujer asiática que dice ¡Salsa!
4.4). La relevancia de los dos últimos es algo más alta para códigos y con una entonación descendente, cuando quiere saber si la persona a
estilos que para lenguas. la que está sirviendo quiere salsa en su carne o no, es perfectamente
cortés en su propio estilo comunicativo, perQ puede ser considerada
brusca y poco amistosa por un británico (véase Gumperz, 1982). En
4.2 INGREDIENTES DE LA CONSTRUCCIÓN DE ENUNCIADOS cualquier conversación, o en cualquier historia narrada conversacio­
na1mente, la entonación es uno de los principales indicios para la in­
terpretación de lo que se dice. De igual modo, los sistemas de pausa
En teoría esta ~ección debería contener una descripción completa y de partici6n de la corriente de sonidos enunciados son algunos de
de todas las propiedades de las «gramáticas» (en el sentido más am­ los indicadores más importantes de cómo está organizado el conteni­
plio de definiciones completas de lenguas como sistemas formales) do en el discurso hablado. Lo mismo ocurre con, los patrones de va­
que los usuarios de la lengua tienen a su disposición como recursos cilación, acento, velocidad, ritmo, etc., que son responsables de una
para hacer elecciones lingüísticas. En la práctica esa sería una tarea gran parte de la construcción retórica del discurso hablado. Incluso
imposible. Recordemos, sin embargó, las breves indicaciones que se aspectos de la calidad de la voz, que son más dificiles de describir,
dieron anteriormente (en la sección 0.2) sobre la relevancia de la proporcionan constantemente pistas para la interpretación de enun­
pragmática para el estudio de los diferentes niveles de la estructura ciados. Considérese el siguiente comentario de Hedrick Smith (1976,
lingüística. Es a todos esos niveles, tradicionalmente tratados por di­ 234) sobre lo que se dice del líder de un grupo que acaba de tocar el
ferentes componentes de una teoría lingüística, donde se debe situar tema de Lara de Doctor Zhivago (estrictamente prohibido en esa épo­
los ingredientes de construcción de enunciados: desde sonidos, mor­ ca) en el restaurante Berlín de Moscú, después de que le pidieran que
femas y palabras, a cláusulas, oraciones y'proposiciones. Revisemos lo tocara de nuevo:
algunos fenómenos que han recibido gran atención en la literatura
pragmática. (4) «No, debe estar equivocado. No lo tocamos y por eso no lo ha O
oído». La réplica fue hecha en esa helada voz soviética que es ,Q
menos una negación de la verdad real que un rechazo a una
4.2.1 Estructura del sonido verdad inconveniente. (Cursiva añadida.)
Al nivel de la estructura del sonido, los rasgos más comúnmente
Aunque sean intangibles, juicios como, estos siempre sé hacen. '~
" estudiados han sido aspectos de prosodia, especialmente entonación,
por su importante papel como indicios contextualizadores. Es obvio
N o sólo estos aspectos obvios del uso de la estructura del sonido O
son pragmáticamente importantes. A veces los tipos de códigos que ~,
que es con frecuencia la entonación lo que convierte estructuras sin­
se distinguieron en la sección anterior son defmibles'en gran parte en ~
tácticas en afirmaciones o preguntas. Y, a pesar de cierto grado de co­
términos de alternancias sistemáticas en el sistema fonémico de una ~"
rrespondencia ,entre lenguas en este ámbito (p. ej. con un contorno
lengua. Además de las variaciones dialectales con las que estamos" e'
.,.,

'~
\- '

-
v

204 Estructura

familiarizaddOS (pero que funcionan de un modo más complicado del


que a menu o suponemos, y que in91uyen muchos cambios de códi­
Ingredientes de la construcción de enunciados

ros, que dejan aspectos borrosos en los bordes de la definición. Por


ejemplo, unpájaro prototípico tiene plumas, puede volar, tiene pico y
205

go), hay casos en los que (como presenta Everett (1985) en piraba, pone huevos. Todas estas p¡:opiedades se combinan en las águilas y
• una lengua brasileña de la familia mura) la adaptación fonémica tiene los petirrojos y por esto son ejemplos prototípicos. El hecho de que ni
1 lugar en base a circunstanC(ias contextuales como la presencia o au­ -los pingüinos ni los avestruces puedan volar los hace ejemplos menos
O sencia de extranjeros. ­ típicos de pájaros, aunque hay bastante parecido familiar (usando el
Finalmente, son a menudo los rasgos de sonido, como el énfasis, término de Wittgenstein) para su inclusión en esta categoría y la con­
O los que desambiguan la estructura sintáctica en el discurso, como en ceptualización con referencia al prototipo. Lo que hace posible la
inglés John has plans to leave (intenta salir, marcharse) versus John creación de prototipos es la existencia de «discontinuidades natura­
has plansto leave (tiene planos o proyectos para entregar)~ les» en el mundo, o «grupos de rasgos» que las hacen predecibles.
o
O 4.2.2 Morfemas y palabras
Por ejemplo, cuando se ve un animal volador (dejando a un lado los
insectos), es muy probable que tenga plumas y un pico y que ponga
huevos, con pocas excepciones (y más aún teniendo en cuenta que no
• En el nivel de los morfemas y las palabras debemos recordar ob­
todos los rasgos en el grupo tienen el mismo poder de predicción o
• servacionesó anteriores sobre derivación, flexión y palabras com- _
«indicación de validez» -como el poner huevos, que los pájaros
puestas (en la sección 0.2), el funcionamiento de la anáfora (véanse
comparten con los reptiles y los peces-} Sacando provecho de esta
• las secciones 1.1.1 y 3.3.2), Ytambién el hecho de que una gran parte
estructuración de la realidad, la cognición humana puede hacer frente
O de la literatura sobre .presuposiciones depende de las observaciones a la multitud de entidades distinguibles de una manera relativamente
O relacionadas con el significado implícito que conlleva la elección de económica. Además, estas propiedades del significado léxico hacen
ciertas palabras,como sustantivos, verbos especiales, muchas partí­
que las palabras se puedan usar de múltiples maneras. Se necesita la
O culas y nociones escalares (véanse los ejemplos bajo (2) en la sec­
negociación del significado en la interacción y se tiene en cuenta una
O ción 1.1.3).
amplia gama de estrategias de uso. Los procesos ql!e producen nú­
O De manera más general, el significado léxico proporciona, un re­
cleos relativamente estables de significado no están restringidos a los
curso ilimitado para la generación de significado en el uso del len­
sustantivos. Considérese el verbo de acto de hablafeUcilar. Una feli­
guaje. La estr:Ictura misma del lexicón en las lenguas naturales está
citación prototípica es (i) la expresión del enunciador de que está
adaptada para este fin. La estructura semántica interna y la estructura
complacido y (H) por el éxito del intérprete en hacer u obtener algo
® semántica global del vocabulario son reflejos parciales de modelos iÍnportante. Por esta razón se considera que (5), titular del lnternatio­
~ _que se pueden observar en el mundo yresponden a la vez a la necesi­
nal Herald Tribune, se desvía del uso esperado.
O dad de economía cognitiva. Es tan imposible para un usuario del len­
A guaje decir explícitamente lo que quiere decir como es imposible que (5) Begin [por entonces primer ministro israelí] felicita a Sadat
,., una lengua natural proporcione denominaciones para todos los as­ [presidente egipcio] por su Nobel [el Premio Nobel de la Paz
• pectos distinguibles de la «realidad». La consecuencia para las es­ que recibieron conjuntamente].
e tructurás semánticas internas a la palabra ha sido la organización del
Obviamente, se está adulterando (ii). De igual modo, (i) puede estar
• significado de la palabra alrededor de prototípos relativamente cIa­
ausente de muchos actos formales de felicitación que sin embargo to­

••
206 Estructura de la construcción de enunciados 207
davía pueden describirse con el verbo felicitar. (Se puede comparar semánticas internas a la palabra y también con' las relaciones semánti­
con lo que ocurre con agradecer en la conversación citada como tema cas entre palabras en el vocabulario, no tiene ningún sentido hacer
de investigación 4. en la sección 1.6). Cuanto más abstracto sea un clasificaciones de palabras porque tienden a basarse en una falsa sen­ j
\

concepto, como en el caso de prosperidad, paz o democracia, más di~ sación de estabilidad. Antes bien, para determinar el significado léxi­
ficil será definir precisamente el núcleo semántico, y habrá más espa~ co se debe examinar sistemáticamente el funcionamiento de las pala­
cio abierto para la negociación y la manipulación. Pero incluso estos bras a 10 largo de una gama de dimensiones semánticas relevantes.
términos tienden a usarse como si tuvieran un significado prototípico (Un ejemplo de este enfoque, y posterior justificación, se encuentran
claro. Las consecuencias retóricas de esto se aclararán más adelante en Verschueren, 1985a.)
(véase la sección 8.2.2). Se puede decir que la composición del lexicón de una lengua na­
Con respecto a la estructura semántica del vocabulario, se ha ob­ tural «genera» un modelo semántico que organiza cualquier cosa que
servado durante mucho tiempo que está jerárquicamente estructurada sirva como .contexto y cualquier cosa que tenga que distinguirse para
y que no todos Jos niveles de la estructura son igualmente salientes. la referencia específica en el uso del lenguaje. Como la generación
i'luevamente, es la interacción entre la estructura del mundo y la exi~ del contexto en el uso real del lenguaje (véase la sección 3.4), éste es .
gencia de economía cognitiva lo que crea un conjunto de términos de un proceso que implica la interacción entre la mente y la realidad ex­
nivel básico, es decir, los que se usarán más fácilmente para identifi­ terior. Esto cuenta para ítemes léxicos qUA~ pertenecen a lastres tipos
car un' objeto. Así, si se muestra a .alguien una manzana y se le pre~ de signos que' distinguió Charles Sanders Peirce: desde los más con­
gunta ¿Qué es esto? muy probablemente la respuesta será una man­ cretos, iconos (que se parecen a lo que se refieren, como la onomato­
zana y no una fruta o una golden, a menos que las necesidades peya) pasando por los indices (que meramente «señalan» , como un
comunicativas del momento dicten la elección del término hipónimo expletivo sirve como indicador de un estado mental) hasta el más
(p. ej. en un contexto de clase donde el tema es la diferencia entre abstracto y arbitrario símbolos (que se asocian a un referente por con­
verduras y frutas) o del téimino hiperónimo (p. ej. en una tienda de vención, como es el caso de la mayoría de las palabras).
fruta). Los términos de nivel básico no son necesariamente los mis­
mos para todos los hablantes de la misma lengua porque este aspecto 4.2.3 Cláusulas y oraciones
de la estructuración conceptual tiene su base en la experiencia. Por
esta razón, una persona que ha vivido la mayor parte de su vida en No hay apenas ningún tipo de construcci6n sintáctica que no ha­
una ciudad posiblemente tenga pájaro como término de nivel básico ya recibido atención des~e un punto de vista pragmático. ,De hecho, \..1
antes que gorrión o petirrojo, que son elecciones obvias enun entor~ aunque mucha de la inspiración se encontró. en 10sestLidios de los fi- O.
no con diferentes t~pos de pájaros. Las diferencias pueden ser incluso iósofos, l.a pragmática fue trai~a a la lingüística por .l?s especialistas ; f:\
en smtaxls que buscaban soluclOnar problemas penrut1endo que tanto. V
más sutiles: se puede esperar que los habitantes de algunas Ciudades
europeas infestadas de palomas tengan la palabra paloma como tér­ el significado como el contexto entraran en la descripción y la expli- . ®
mino de nivel básico para palomas y pájaro para otros pájaros, con 10 cación (véase el Capítulo 9). Anteriormente ya se hicieron algu~as
que lá estructura cognitiva y la jerarquía biológica dejan de coincidir. observaciones sobre la pragmática de las elecciones sintácticas (en las ~:;
Dada una perspectiva' pragmática en el significado léxico, que secciones 0.2 y en 1.1.3). Hay que recordar también que una de las .~.
nodones pragmáticas más usadas, el acto de habla (véase la sección •. ~
permite variabilidad y negociabilidad en relación con las estructuras . e

•••••
A
o -----------------------------------------------------
208 Estructura Ingredientes de la construcción de enunciados 209
O 1; 1.2) es esencialmente un concepto de acción a nivel de la oración. lizar hechos de diferentes maneras, es decir, las opciones desde las
• Por esta razón, por ejemplo, en los intentos de clasificación de los que se hacen las elecciones para generar significado al nivel de la
ew actos de habla se prestó atención a los correlatos sintácticos (como cláusula. Observemos la diferencia entre (6) y (7).
{;) oraciones interrogativas para preguntas, imperativas para directivos, (6) No logramos vender esas camisas.
O etc.). El hecho de que la teoría de los actos de habla no se considerara (7) Esas camisas no se venden.
una teoría pragmática completa porque se centraba exclusivamente en
estructuras a nivel de la oración o que las correspondencias entre los La oración (7), comparada con (6), sitúa al paciente de vender, esas
actos de habla y los tipos de oración se consideraran ilusiones, no de­ camisas, en posición de sujeto y así se aparta la atenci6n del agente
be disl;raer de la atención que se neces,ita prestar a los aspectos for­ ,nosotros y se atribuye la falta de éxito en los intentos de vender las
C"" males. Sin la noción de tipos de oraciones sería muy difÍcil, discutir
"..7
camisas a una propiedad inherente, que podemos llamar «vendibili­
el tipo de implicitud inherente en lo que comúnmente se ha denomi­ dad», de las camisas. Aunque los equivalentes de vender en otras len­
O nado actos de habla indirectos, se use o no esta terminología. guas pueden no ofrecer las mismas posibilidades específicas y aunque
O

•••
relaciones de manera más general diferentes lenguas ofrecen diferentes perspec­
gramaticales ~ujeto objeto directo objeto indirecto otro tivas «están dan> a estados de cosas comparables (como en Tengo frío

O
categorías
de caso
¡
nominativo . acusativo dativo
t otro
o Estoy triste versus las formas en ruso que literalmente significarían
«Está frío para mí» o «Es triste para mí»), se encuentran estrategias
similares de generación de significado en todas las lenguas. En pola­
co, por ejemplo, se han descrito algunos usos de la forma del dativo

g
El
p'pel"
semánticos ,..
tagente paciente experimentador
¡ otro
de los pronombres personales que señalan principalmente emoción,
compromiso y solidaridad (véase Rudzka-Ostyn, 1995). Algunos in­
cluso llegarían tan lejos como a atribuir diferentes visiones del mundo
o sistemas de valores socioculturales a hablantes de lenguas diferen­
() Fig. 4.1 Relaciones gramaticales;categorfas de caso, papeles semánticos
. (de Rudzka-Ostyn, 1995) tes dependiendo de los modos variables de estructurar las relaciones
funcionales. Pero se presenta aquí el riesgo importante de olvidar las
o Un foco de atención fructífero al nivel de la cláusula es el domi­ advertencias hechas antes sobre «cultura» (en la sección 3.2.3), la
e nio de las relaciones funcionales entre constituyentes nominales: re­ manipulación involucrada y la premisa pragmática básica de que hay
pocas relaciones forma-función fijas, si ,es que hay alguna.
c.. ladones gramaticales, categorías de caso y papeles semánticos.

O
~. Como.se mue~tra en la Figura 4.1, estos tres tipos de relaciones inte­ Otra área interesante, con importantes ramificaciones pragmáti­
ractúan de maneras complejas e interesantes: las categorías de caso cas, es el orden de palabras. Incluso en lenguas con «orden libre de
• sirven como ipterfaz entre los papeles semánticos y las funciones palabras», por así llamarlo, hay normalmente una ordenación de
• sintácticas. constituyentes (sujeto, verbo, objeto) (SVO) que es más común o está
• . Estas distinciones cubren una gama de herramientas gramaticales menos marcada que las otras posibilidades. El orden de palabras no es
nunca realmente «libre», las restricciones pueden ser diferentes (de

•• que los usuarios del lenguaje tienen a su disposición para conceptua­


las más «gramaticales» a las más «pragmáticas»). Lo que deterniina

."
--.,----~- - -~~-_ ...... _ - - - - - _ ..- .....•--~. ~-_ ...... _ - _ ....~.. _- ..... _--------------------------~----

210 Estructura Ingredientes de la construcción de enunciados 211


. \

la desviación del orden básico de palabras en la mayoría de lenguas lación entre objeto y paciente y la tendencia de los agentes a ser más
es normalmente la necesidad de destacar o enfatizar un constituyente salientes perceptivamente que los pacientes (1981, 88).
~ a menudo con más implicaciones en el significado. El orden básico
SVO en inglés o español, como en (8), puede cambiarse al orden de (para las correlaciones a las que se refiere véase la Figura 4.1)
objeto, sujeto, verbo (OSV) como en (9). Sean cuales sean las reglas de «gramática» básicas para la cons­
trucción de cláusulas y oraciones en una lengua, debemos recordar
(8) No vas a conseguir más dinero.
que desde un punto de vista pragmático reflejan meramente hábitos
(9) Más dinero no vas a conseguir ~ sólo más trabajo. estructurales que se pueden romper de diferentes maneras aunque ra­
ramente de modo tan drástico como en el poema que se reproduce en
La oración (9) necesitaría un mayor énfasis en dinero, 10 que implica la discusión de negociabilidad (en la sección 2.2). Lo que da su rela­
un contraste que.se puede hacer explícito, como con sólo más trabajo. tiva estabilidad a las reglas es el hecho de que desviarse demasiado
En ciertos contextos, también las «desviaciones» pueden llegar a ser del camino habitual hace la interpretación demasiado dificultosa para
estándares, como éuando las citas de un periódico normalmente (aun­ que se pueda esperar un grado razonable de éxito comunicativo. .
que no necesariamente) reemplazan el orden básico SVO por un or­
den de palabras objeto, verbo, sujeto (OVS) como en (10) o por un 4.2.4 Proposiciones
orden de palabrasde objeto, sujeto,verbo (OSV) como en (11): .
Las proposiciones coinciden estructuralmente. con las cláusulas o
(10) «Es provocadom, dijo la Dra. Regina Ziegler, epidemióloga las oraciones. Sin embargo, merecen un tratamiento aparte porque el
del Instituto Nacional del Cáncer. (lnternational HeraJd Tri­
mismo término evoca una perspectiva diferente que va más allá de la
bune, viernes 2 de mayo de 1997)
(11) Esvásticas y otros símbolos fascistas fueron pintados en tum­
estructura formal para investigar el «formato» del significado; ade­
más, porque varios aspectos han sido tema frecuente de investigacio­
o
bas de un cementerio judío al sudoeste de Zagreb, un grupo de
derechos humanos informó el jueves. (íd.) nes pragmáticas.
Los constituyentes básicos de una proposición «pura» son sujeto
Esta ordenación está motivada por el hecho de que el contenido de 10 y predicado, en términos gramaticales, y referencia y prediCación,
que se cita (con o sin comillas) es la parte más saliente de la oración, en términos semánticos. En otras palabras, algo se «predica» de .una
aunque no sea demasiado importante, como en (10). La elección entre persona, .cosa, proceso, acontecimiento o acción que se señala por
OVS y OSV parece determinarse por el procesamiento: el sujeto pre­ medio de una «expresión referencial». Se ha dicho repetidamente que
cede al verbo a menos que el sujeto requiera demasiada información referir, o establecer referencia, es de por sí una acción, que se logra
extra y el objeto y el verbo no estén lo suficientemente cerca para po­ interactivamente. En la interacción verbal se gasta una gran cantidad
der interpretarse fácilmente. Las restricciones en el procesamiento de energía, incluso involuntariamente, para asegurarse o tratar de ne­
cognitivo son parte de la explicación de algunas tendencias universa­ gociar qué es lo que uno está diciendo. Una de las razones para esto
les en el orden de palabras. Como dice Comrie, . es que la misma forma puede. tener referentes diferentes, mientras el
mismo referente se puede señalar con diferent~s formas; esta. obser­
L..] la tendencia de los sujetos a preceder a los objetos [...] puede ser vación va más allá de la homonimia y la sinonimia estrictas .. Otra ra­

••
explicable en términos de correlación entre sujeto y agente, la corre­
zón es la diferencia en «líneas de visión» entre el enunciador y el in­
TI

214 Estructura Ingredientes de la construcción de enunciados 215

imperativo- a la par con tiempo, aspecto y voz),. La modalidad es un


cuando se habla del comportamiento, es uno de los muchos posibles
fenómeno inherentemente pragmático. Implica todas las maneras en
opuestos de aceptable, la negación no aceptable es como mucho una
que se pueden expresar actitudes sobre el «puro» contenido referen­ aproximación semántica, de ninguna manera un uso equivalente a
. cia-y-predicación de un enunciado y señala la factibilidad, los grados
atroz. La compleja relación entre términos tan aparentemente opues­
de certeza o duda, la vaguedad, la posibilidad, la necesidad e incluso
tos, donde la negación de uno debería, en teoría, ser igual al otro en
permiso y obligación. Esto se puede lograr por medio de modos ver­
su forma positiva, se vuelve todavía más clara cuando se hace 10
bales (sólo hasta cierto grado en el inglés actual, aunque el subjuntivo opuesto: no atroz no es en absoluto equivalente a aceptable.
cumplía algunas de estas funciones), auxiliares modales (puede, po­ Un segundo hecho interesante es el «ámbito de ambigüedad» po­
dría, podrá, debería, debe, tiene que; en inglés can, could, may, tencial de la negación. Cuando se informa de que un líder alemán ha
might, shall, should, will, would, must, ought to y have to), adjetivos dicho (19):
(como probable en Es probable que... ), adverbios (como realmente,
(19) We germans willnot let ourselves be divided.
ciertamente, posiblemente, probablemente, inevitablemente, etc.) y Nosotros los alemanes no nos dejaremos dividir nosotros mis­
los llamados «adverbios oracionales» (como francamente, seriamen­ mos.
te, obviamente, cuando se usan para introducir una oración como
)
Francamente, me importa un rábano). Un tipo especial de modalidad, son posibles diferentes interpretaciones(que en la forma haplada ori­
denominado evidencialidad, marca la . fuente de información, por' ginal pueden ponerse de relieve prosódicamente) dependiendo del
ejemplo en términos de objetividád o subjetividad (que algunas len­ contexto: (i) hay intentos de dividir a los alemanes pero «noso.tros los
guas señalan en l.a morfología de los verbos, otras léxicamente --co­ alemanes» no nos dejaremos dividir nosotros mismos, con la predica- .
mo supongo...- o cón medios prosódicos). ción entera bajo el alcance de la predicación; (ii) como los alemanes
Algunos lingüistas incluyen la negación en el ámbito de la moda­ son perfectamente capaces de dividirse ellos mismos bajo su propia .. <)
lidad. Sea o no sea esto justificado, «negaD> es claramente una opera- .¡ iniciativa, no dejarse ellos mismos dividir por otros; (iii) puede que
ción que afecta a las proposiciones. Como 10 hace de maneras que no haya otros que se dejen dividir ellos mismos pero no nosotros los
pueden ser representadas en términos lógicos positivo-negativos es­ alemanes. Dado nuestro conoCimiento de la historia reciente,pode~
trictamente, es un fenómeno interesante por derecho propio desde un
punto de vista pragmático. Observemos varios aspectos de la proble­
mos ordenar estas posibilidades de acuerdo con su grado de probabi­
lidad como(i)-(iii)-(ii). . '.
o
mática de la negación. En primer lugar, una negación puede ser re­ En tercer lugar, hay diferentes modos de manejar la negación en
emplazada a menudo por una forma positiva casi equivalente semán­ el discurso que son a veces específicos a cada lengua. Tomemos este
ticamente pero la elección es raramente neutral. Observemos (17) y par normal de pregunta-respuesta en (20):
(18): .'
(20) P: ¿No se dividió Checoslovaquia hace un par de añ'os? . ~
(17) El comportamiento de Jack no es aceptable.
(18) El comportamiento de Jack es atroz.
R: Sí. e
Dependiendo del sistema de negación que se use, la respuesta Sí pue- .
Ambas oraciones recurren al mismo conjunto de normas en cuyos
de expresar o bien acuerdo con la predicación en su alcance de no, es . .,
términos se evalúa el comportamiento de Jack. Pero aunque atroz,
o r

212' Estructura Ingredientes de la construcción de enunciados 213

térprete. A un nivel más fundamental, algunos referentes pueden ser do disparatada. En otros casos la referencia se puede lograr por medio
simplemente muy dificiles de identificar o puede ser útil fomentar un de expresiones que son absolutamente imposibles de interpretar a
tipo de identificación sobre otro. Este no es sólo el caso de nociones menos qu~ se sepa con antelación a quién o a qué se hace referencia.
abstractas como democracia, que puede requerir una conversación Considérese (13):
entera para alcanzar un punto en que el término pueda usarse de una (13) Quien tú ya sabes se va el fin de semana. Tendremos tiempo
manera mutuamente comprensible. Incluso la identidad de objetos para terminar el asunto.
concretos es negociable y esta negociabilidad puede ser el requisito
previo para que cualquier interacción posterior tenga lugar. Imagine La ~<amalgama sintáctica)} en la primera oración, con la cláusula
el lector que recibe una llamada telefónica de una persona desconoci­ Quien tú ya sabes en la posición de constituyente nominal, es~ dise­
da que se presenta como representante de FilterX, el fabricante líder ñada por su vaguedad, como cuando es necesario, ocultar la identidad
de máquinas de purificación de aire. Después de enterarse de que us­ de alguien a una persona que está allí y no participa en la conversa­
ted tiene hijos que pueden padecer leves alergias y por eso usted está , ción (bystander), o a una persoria que puede oírla pero tampoco es un
interesado en aire purificado, el representante pregunta (12): participante (overhearer). Aunque igualmente vaga, el asunto es una
'(12) ¿Estaría usted interesado en una demostración de nuestra má­ forma de expresión más común que ha llegado a ,asumir la funciÓn de
quina purificadora en su casa? anáfora que señala hacia un referente cuya identidad ya se ha estable­
cido en el discurso precedente. '
Si usted acepta esta oferta, puede resultar que la máquina purificado­ ¿Qué ocurre con la predicación? Se puede <<predicaD> algo de una
ra de ciire sea 10 que usted llamaría normalmente aspirador. El repre­ persona, cosa, proceso, evento o acción de varias maneras. Observe­
o sentante de FilterX sabe perfectamente que Ud. probablemente no mos los ejemplos (14) a (16):
o habría aceptado su oferta de hacer una demostración si él le hubiera
propuesto mostrar un aspirador. Una vez en su casa, la mayor parte de
(14) ¡Qué pobre hombre!
O (15) Ese hombre es pobre.
la demostración puede centrarse todavía en las capacidades de la má­
O quina como purificadora de aire y presentar su uso como aspirador de
(16) ES,e hombre vive en la pobreza.
O manera bastante marginal (pero manteniendo a la vez que usted no El referente se mantiene constante y el contenido de la predicación en
podrla conseguir un aspirador mejor). Y, si usted termina comprando cada una de estas oraciones es muy similar (ya sea que se tome la
o
1;::.)
la máquina, será en gran manera en función del éxito del represen­ formade un adjetivo, con o sin cópula, o una frase verbal entera). Sin
tante en hacerle pensar en ella en los términos que él propone. Sher~ embargo, las condiciones de uso varían de gran manera.
O zer (1987) estudia las prá~ticas de regateo en la comunidad que habla Varios tipos de ingredientes del significado contribuyen a la «mo­
O boipurí en el norte de la India, donde tanto el estatus social del com­ dificación» o «colorido» de la proposición o de la estructura referen­

•"•
prador como el precio a pagar por los productos lácteos se negocian cia-y-predicación. Como ténnmo abarcador podemos usar modalidad
por medio de la elección de descripciones para referirse a los pro­ (denominada modalización en gramática sistémica funcional, que no ..

'.
ductos en cuestión (úna descripción de un producto de alta calidad se hay que confundir con el modo gramatical, que es una propiedad mor­
puede usar para otro de baja calidad con el fin de obtener un precio fosintáctica de las formas del verbo --como indicativo, subjuntivo e
más alto y viceversa). Una comparación con el aspirador no es del to­
(1
ti
()

U 216 Estructura Enunciados y grupos de enunciados 217

* decir' que Checoslovaquia sí se dividió hace un par de años, o bien


"," puede aceptar la negación no, contradiciendo así cualquier sugerencia
citas en informes periodísticos, o incluso grupos de enunciados su­
bordinados (o grupo de enunciados S), cOmO cuando una novela
de que Checoslovaquia se dividiera hace un par de años. Meeuwis contiene conversaciones entre algunos de los personajes.
" ,,(1994) ha documentado un caso en que estilos de negación 'diferen.tes Los actos de habla, que se sitúan estructuralmente al nivel de la
• "conducen a malentendidos entre instructores flamencos e ingenieros oración y'por lo tanto existen como constituyentes del enunciado an­
@ coreanos en el contexto de un programa de entrenamiento en una em~ tes que como enunciados completos, son sin duda los tipos de enu~­
presa multinacional. ciado, pragmáticamente definido, más ampliamente estudiados. Este
() nivel varia en sí mismo de estructuras de una sola palabra, como en
O 4.2.5 Unidades supraoracionales los ejemplos de (21) a (24), a construcciones sintácticas complejas
con varios estratos de subordinación como en (25).
Sin duda, unidades lingüísticas de orden superior a las oraciones
pueden también identificarse como ingredientes de la construcción de (21) ¡Ayl
enunciados al igual que una larga monografia contiene capitulos, sec­ (22) ¡Dios! ,
()

•• ciones y párrafos. ?ero éstos tienen pocas propiedades estructurales


quenG se deriven de los principios de organización del contenido, un
(23)
(24)
(25)
¡Siéntate!
Sí.
Esta trayectoria sub vocal del curso de la experiencia sexual


tema que abordaremos más adelante (en la sección 4.4), y algunos de culminante es una manifestación a disposición de ambos se­
cuyos aspectos ya se han tratado en la discusión del contexto lingüís­ xos, pero se dice que está más de moda entre las mujeres
C tico (véase la sección 3.3.2). --entre las que, por supuesto, el seguimiento del sonido puede
ser empleado estratégicamente para delinear un desarrollo ideal
en la marcada ausencia de cualquier cosa cercana a la reali~
o 4.3 ENUNCIADOS Y GRUPOS DE ENUNCIADOS
dad.
O Los actos de habla de una palabra son casi siempre exclamaciones
O Como se dijo en la introducción de este capítulo, se usa el término con contenido expresivo únicamente, como la expresión de dolor en
enunciado para ,cualquier' fragmento del lenguaje, sin importar su (21), y la expresión de algo que puede variar desde una sorpresa
longitud pi la cantidad de voces que contenga, con un principio y fi­ agradable hasta repulsión en (22). Pero pueden también ser órdenes,
nal claros, producido\por 1a(s) misma(s) persona(s). Los ejemplos como en (23), o, como en (24), pueden' constituir respuestas comple­
pueden ser desde oraciones de una sola palabra, pasando por actos de tas a una pregunta y representar así un contenido proposiéion~l y una
habla que constituyen un turno, en una conversación~ hasta novelas estructura de acto de habla que es potencialmente tan compleja como
de varios tomos. Los grupos de enunciados son conglomerados de la de (25). La oración (25), que es la descripción de Goffman (1981,
enunciados organizados. Algunos ejemplos típicos serían una conver­ 106) del gemido sexual podría presentarse como una «afirmación»,
sación o la correspondencia escrita. Como se anticip6 en la discusión aunque la parte.anterior al guión contiene ya dos de ellas separables,
de las distintas voces del enunciador (sección 3.2.1), muchos de los incrustando una «defmición» en la parte referencial del primero, y
enunciados más complejos pueden contener varios tipos o niveles de aunque la parte que sigue al guión tiene el estatus de un «comentario»
enunciados subordinados (o enunciado S), como cuando se usan del segundo. '
218 Enunciados y grupos de enunciados 219

Por las dificultades que se encuentran en la aplicación de los con­ mente protegerla. Se han hecho muchos intentos de criticar análisis
ceptos de actos de habla a estructuras más complejas como (25), que como los de Searle por su metodología refinando las propuestas para
no es en absoluto la más compleja que se podría imaginar, ha habido las condiciones necesarias y suficientes, pero sólo se ha llegado a
una tendencia a acercarse a la teoría de los actos de habla como a un formulaciones en contra de las cuales se pueden encontrar contrae­
cadáver antes que a usar sus aportaciones. N o obstante, la mayoría de jemplos. Esto conduce a una regresión infinita y deja muy poco .con­
sus logros pueden ser recuperados si estamos dispuestos a rechazar tenido tras de sí. El mismo proceso ha perseguido los intentos de
sus objetivos básicos y su posicionamiento metodológico. La ambi­ mejorar la clasificación de los actos ilocutivos de Searle. La relevan­
ción de la teoría de actos de habla ortodoxa fue ofrecer descripciones cia de la clase de los «expresivos» , por ejemplo, se puede negar en . .--:¡
universalmente válidas para categorías universales de la acción lin­ base a la propia clasificación de Searle de principios y parámetros. Si
güística. Desde este punto de vista se rechazó cualquier conexión se definen los expresivos como los actos de habla cuya función es ex­
esencial entre esas categorías y los verbos usados para nombrarlas. presar un estado psicológico, esta clase deberla incluir lógicamente
Esta posición dejó de considerar un aspecto importante del compor­ todos los asertivos (que expresan una creencia), todos los directivos
tamiento lingüístico (al que se prestará toda la atención en el Capítulo (que comunican un deseo) y todos los comisivos (que expresan una
6): que comparte con todas las formas restantes de comportamiento intención). Después de ·aceptar la naturaleza de la dependencia verbal
soci~l. la pro~iedad de que es interpretado siempre por la gente que de las categorías tradicionales de actos de :habla, comparar ladisponi­
p~l~Ipa en el, que no hay.modo de entender el comportamiento so­ bilidad de los verbos en diferentes lenguas puede confirmar la signifi­
Cial SIn :ener tamb~én una intuición de esas interpretaciones y que pa­ cación de una clase separada de expresivos, aunque debería redefmir:".
ra esas InterpretaclOnes la gente tiene a su alcance conceptos habi­
tuales, muchos de los cuales están lexicalizados de modos específicos
se como la clase de actos de habla" cuya función es expresar" una
" "

emoción a la que un enunciador espera que un intérprete conceda una


.
a la lengua. Ejemplos de tales lexicalizaciones, verbos como pregun­ importancia particular. Se encontró prueba para esto en un estudio
tar, orden~r,prometer, sirven como denominaciones para los tipos de contrastivo de los patrones de lexicalización versus no-lexicalización
actos analIzados en la teoría de actos de habla, 10 que hace dificil ne­ de expresiones de emoción (Verschueren, 1985a, capítulo 6). Consi­
gar la conexión. Si reinterpretamos los análisis de los actos de habla dérese la diferencia entre (26) y (27) Y entre (l8) y (29).
(co~o se pres~ntó"en la sección 1.1.2) como análisis de categorías de
aCCIOnes v~rbales lexicalizadas, debemos rechazar también el enfoque
(26) Siento que no pudieras venir anoche. G
(27) Siento no haber podido venir anoche. ~.":
met?dológlCo en términos de condiciones necesarias y suficientes. ~
(28) Me gusta este plan.
Temendo en cuenta 10 que se ha dicho sobre la estructuración con­


(29) Me gusta tu plan.
ceptual.del significado léxico (en la sección 4.2), se puede llegar a la
conclusIón de que los análisis de los actos de habla de Searle son Aunque (26) y (27) expresan ambas un sentimiento de pesar muy si- Q
aproximacione~ razonablemente adecuadas de ejemplos prototípicos milar, el modelo de lexicalización del ámbito conceptual del com-. ~
de comportamIento verbal que se puede describir por medio de ver­ portamiento lingüístico en inglés (yen otras muchas lenguas) ofrece"
bos usados como etiquetas.
un término especializado para la descripción del acto realizado en
Más que destruir' el contenido de la teoría de "los actos de habla
tal operación de recuperación aparentemente destructiva puede real~
'(27) ~omo expresión de un estado psicológico, di~culparse, mientras
que tal térmmo no es aplicable a (26). Y aunque también (28) y (29) ••
••
~~~l 220 Estructura Principios de construcción de enunciados 221
----~-----------------------------------
Q
expresan el mismo estado de «gustaD> un plan específico, (29) se con­ documentos políticos (p. ej. un programa electoral), informes perio­
@ sidera un cumplido, mientras que (28) sería descrito como una simple dísticos, informes médicos, informes científicos y otros. También se
• ,afirmación a menos que «este plan» se pueda interpretar como «tu incluyen tipos de discurso dialogal (a menu~o conversacional, cons­
• plan». La diferencia parece encontrarse en el tipo y el grado de parti­ tituyendo grupos de enunciados y recurriendo casi siempre a un nivel
• cipación del intérprete. En (27), por ejemplo, el destinatario es pre­ subordinado tanto en el discurso monologal como en otros tipos de
smniblemente el que invita y el que podría haberse ofendido por la no discurso dialogal) como conversaciones entre dos adultos y entre dos
asistencia del enunciador, por lo que se requiere una expresión de pe­ niños, conversaciones entre hablantes nativos y no nativos o simple­
O "sar para «disculpaD> al enundador implicando que sus acciones no se mente entre hablantes no nativos de la lengua elegida, conversación
, correspondieron a sus deseos. . . en el aula, narrativa conversacional, juicios, aSesoramiento psicológi­
Cuando se coloca la teoría de los actos de habla en esta perspectiva, co, servicio de citas, conversaciones de sobremesa, discusiones, de­
la vasta literatura sobre actos de habla nos ofréce extensos recursos de in­ bates (en el parlamento, en la televisión), negociaciones, llamadas de
formación en tipos de enunciado al nivel de la oración (afirmar, anunciar, emergencia, adivinación, entrevistas de trabajo, historiales médicos y
reclamar, estimar, adivinar, insistir, declarar, blasfemar, decir, advertir, otras interacciones entre doctor y paciente, interrogatorios, reuniones
ordenar, permitir, prometer, amenazar, aconsejar, instruir, invitar, pres­ formales, encuentros de ventas, conversaciones de cóctel, programas ,
cribir, proponer, p,edir, preguntar, rogar, sugerir, disculparse, perdonar, de entrevistas, conversaciones telefónicas, discurso terapéutico, inter­
saludar, alabar, agradecer, desear, bendecir, nombrar, etc.). Cualquier cambio de correo electrónico, la escritura de cartas, la interacción en­
lista de este tipo, sÍrt'embargo, contiene numerosos conceptos (p. ej. tre ser humano y máquina, etc.
anunciar, instruir, prescribir, proponer) que también pueden llevarse a Dada esta enorme gama de enunciados y tipos de grupos de enun­
cabo en tipos de acciones verbales qU'e están estructuralmente situadas al ciados, no es necesario afirmar que los ejemplos en lo que resta de
o nivel supraotacional. Esto significa que la reinterpretación de la teoría de
(} los actos de habla que se ha propuesto aquí también fuerza a abandonar
este libro se limitarán a una elección de muestras que se espera que
sean suficientemente representativas para presentar el aparato teórico
---como se ha hecho en este libro desde un principio- la idea de una básico y las herramientas metodológicas. Además, de~e quedar claro
O unidad de análisis estructuralmente básica para la pragmática.. que las etiquetas que se usan para designar estos tipos (ya sea actos de
A nivel supraoracional se han estudiado una amplia gama de tipos habla al nivel de la oración o enunciados supraoracionales monolo­
de discurso. Entre ellos se encuentran el discurso monologal (que gales o dialogales o grupos de enunciados) no describen realmente
con frecuencia contiene diálogo incrustado, que es siempre «dialogal» estructuras; describen usos del lenguaje que no podemos definir más
en el sentido explicado antes en la sección 3.2.1, que se manifiesta hasta que empecemos a observarlos como procesos en el siguiente
como texto escrito, pero normalmente se presenta oralmente o mos­ capítulo (véase especialmente la sección 5.2)
trando los tipos de estatus de canales mezclados indicados en la sec­
ción 3.3.1) como anuncios publicitarios, tiras cómicas, instrucciones
de uso, ensayos, chistes, diversos tipos de textos legales (contratos, 4.4 PRINCIPIOS DE CONSTRUCCIÓN DE ENUNCIADOS
tratados, testamentos), cartas, textos literarios (poemas, fábulas, no­
velas, narraciones cortas, obras de teatro), lecciones magistrales, ser­ Como se presentó de manera breve anteriormente (al fin de la
mones, discursos políticos, muchos tipos de narrativa, necrológicas, sección 4.2), la estructuración al nivel supraoracional es, en su mayor
222 Estructura
l

Principios de construcción de enunciados 223


--------------------------------------------------
parte, una cuestión de organización del contenido. Esto no quiere de­ pensión ofrecen ejemplos similares más convencionalizados, como
cir que la organización del contenido no sea una fuerza impulsora al (31).
nivel oracional, sino solamente que los criterios más puramente (31) Pensando sobre el problema de la correferencia, me sobresaltó
«fonnales» son más claramente operativos a niveles inferiores de la el repentino timbre del teléfono.
estructura. Este fenómeno es consecuencia de las capacidades huma­
nas de procesamiento que disminuyen el papel de las reglas gramati­ El sujeto implícito de la' c1áusulano finita no se corresponde con el
cales ya en los límites de la oración cuando ésta se hace estructural­ sujeto explícito de la cláusula principal, 10 que no sigue las reglas
mente más compleja, no sólo porque se hace más dificil seguir las <<normales» de la gramática. Sin embargo la interpretación deseada de
correspondencias gramaticales en estructuras más complejas' sino esta oración no va a bloquearse por el hecho de que ,no sea así.
también porque el significado mismo asume ese papel como principio Si se recuerda que el uso del lenguaje se basa en la generaci~n de

de organización.-Obsérvese (30): significado, no puede sorprender que los principios de construcción

(30) Quizás el mayor beneficio en las nuevas terapias es que, a di­ de enunciados más importantes (que se extienden hasta la construc­

ferencia de las drogas de la quimioterapia, sus efectos secun­ ción de los grupos de enunciados), que guían la producción y la inter..: o
'\
darios son pocos y leves. pretación de los' enunciados (y de los grupos de enunciados) deben.
estar relacionados con la organización del contenido. Ya se ha discu- ,
La mayoría de los lectores del artiéulo del periódico del cual se tomó tido una manifestación formal de este hecho bajo el térniino de c~­
esta oración 10 encontrarán 'completamente normal. No obstante, un hesión (véase la sección 3.3.2). Al nivel del significado mismo, el,
procestlmiento estrictamente gramatical de esta oradón requeriría ha­ con~omerado de principios de organización que participan pueden
cer hipótesis sobre modelos específicos de elípsis: habría que suponer representarse con el término coherencia, o. si se permite transcender
que a diferencia de los de las drogas de la quimioterapia significa no idiosincrasias de una teoría específica, relevancia (véanse las seccio­
como es él caso de los de las drogas de la quimioterapia. Si no fuera nes 1.1.3 y 1.2). A pesar de que la necesidad de coherencia o relevan­
así (30) llevaría a la conclusión de que mientras «los efectos secunda;. cia se deriva de los propósitos de enunciadores e intérpretes al nivel
rios de las nuevas terapias son pocos y leves». «las drogas de la qui­ del discurso, parte del «trabajo» se refleja claramente a niveI de la
mioterapia no son pocas ni leves» y no a «los efectos secundarios de cláusula o la oración en lo que se denomina comúnmente su estruc­
las drogas de la quimioterapia no son pocos ni leves». Sin embargo, tura de la información y/o estructura temática (dependiendo de
no es probable que el rodeo gramatical se haga ni en la producción ni opciones internas a la teoría; por ejemplo, el cuadro teórico de Ralli-, •
en la interpretación. En un caso co~o éste, que no es .una excepción, day presenta una rígida diferencia entre las dos). Por esta razón,por
tanto la enunciación como la interpretación se guían por el significa­ razones de presentación, se hará una distinción entre principios de
do que se construye en el discurso (el texto en cuestión se presenta 'construcción de enunciado oracional en contraste con los de construc­
como un informe sobre nuevos desarrollos en el tratamiento delcán­ ción de enunciado a nivel supraoracional.· '
cer, posibles gracias a los avances en biotecnologia) yal mismo tiem­
po se' apoya en información contextual (particularmente, algún su­
puesto conocimiento general sobre los usos de la quimioterapia y sus
desagradables efectos secundarios). Los llamados principios de sus­
O,_2_24____________________E_s_tr_u_c_tu_r_a
r

Principios de construcción de enunciados 225


o 4.4.1 Construcción de enunciados oracionales
demuestran que la información conocida coincide a veces con el su­
jeto gramatical y con el espacio referencial en la estructura proposi­
Retomamos y ampliamos uno de los ejemplos anteriores, el párra­ cional, (e) muestra que esto no es siempre así ya que la oración entera
, fo introductorio completo de El mundo en 1996. se presenta como nueva información sobre un período de tiempo, en
(32) (a) 1996 será un año de prosperidad y paz. (b) El mundo va a
1996, que es conocido. La información conocida tampo'co tiene que
alejarse un poco más de las creencias aceptadas por las gene­ ser expresada explícitamente. En (f), por ejemplo, los destinatarios
raciones anteriores. (c) La campaña presidencial americana, explícitos de la exhortación, los lectores, son «conocidos». Del mis­
que tendrá lugar desde las nieves de las primarias en New mo modo, considérese (33) como alternativa a (b):
Hampshire hasta el cinco de noviembre, será el escenario de (33) Es la campaña electoral americaria la que va a marcar la agen­
, las ideas políticas que dominarán el resto del siglo: menos im­ da política.
puestos, menos interferencias del gobierno, una reducción
drástica del estado de la asistencia social. (d) Estos son los En esta oración la implicatura de que va a haber un acontecimiento en
o temas a los que se dedicarán las, campañas electorales en Es­
particular que va a marcar la agenda política sirve como información

•• paña, Rusia, India y Australia. (e) (En 1996 más de un billón


de personas partIciparán en unas elecciones, prueba de que la
democracia está ganando a las dictaduras en el ring.) (f) Aten­
ción a la conferencia intergubemamental de la Unión Europea
conocida. En casos excepcionales, el hecho de que la información
implícita pueda representar información conocida hace posible que el
mismo constituyente oracional contenga infonnación conocida y nue­

'u"
(']
,~.
que empieza en Italia en primavera, como el último lugar en
que las viejas panaceas de interfe~encia política y subsidio re­
ciben algún crédito,;
va simultáneamente. Obsérvese el siguiente intercambio:
(34) P: ¿Cómo se llamaba la protagonista de «El año que vivimos
peligrosamente» ?
R: El protagonista se llamaba Mel Gibson.
O Como se señaió en el primer capítulo de este libro (véase la sección
Ó 1.1.3), todos los enunciados llevan consigo un mundo de información En la respuesta, tanto el protagonista se llamaba (con énfasis en «el»)
O de fondo o conocimiento mutuo supuesto, ya sea por medio de presu­ 'como Mel Gibson son información nueva, porque la pregunta no era,
posiciones, implicaciones o implicaturas. Excepto simples expresivos sobre un actor, sino sobre la protagonista. Pero, a la vez, la informa­
como ¡Hola! o ¡Ay!, es probable que todos los enunciados a nivel de ción presupuesta por el protagonista se llamaba, es decir, que se ha
la oración y todas las--oraciones usadas en la construcción de enuncia­ preguntado el nombre de alguien o de otra manera está al alcance pa­
dos más largos eleven algún(os) elemento(s) de la información de . ra comentar, es conocida. Los constituyentes de la misma estructura
fondo para usarlos como información conocida (a veces llamada oracional pueden también cambiar entre información conocida y nue­
también información vieja) sobre lo que se dice de algo que no pue­ va, como en (35) y (36).
de ser tratado o visto como información nueva. Frecuentemente, esto (35) Mel Gibson es el actor.
se hace por medio de expresiones referenciales (con una presuposi­ (36) Mel Gíbson es el actor. '
ción existencial asociada), como 1996 en (a), el mundo en (b), la
campaña presidencial americana en (c). A veces un pronombre ana­ En (35), que responde a la sugerencia de que otro era el actor, Mel
fórico es suficiente, como estos en (d). Mientras que estos ejemplos Gibson es información nueva. En (36), posiblemente una réplica a la
PRAGMÁTICA.-8
-------------------------------_._-.,--------------------------~
,......_ - ­
;

226 Estructura
r

I
.Principios de construcción de enunciados 227
sugerencia de que Mel Gibson era el director, Mel Gibson es infor­ QPuestoa la articulación conocida-nueva. Y en (34) la doble estructu­
mación conocida. ra conocida-nueva del primer constituyente de la respuesta,no se co­
Es importante darse cuenta de que la noción de «información co­ rresponde con ninguna ambigüedad o dualidad en su estatus temático:
nocida» no es monolítica. Es sin duda útil distinguir entre verdadera el protagonista se llamaba es el tema, seguido por Mel Gibson como
información conocida (como cuando se puede esperar que 1996 en rema.
(32)a. y en 1996 en (32)e. sean plenamente activas en la consciencia Los temas también pueden subrayarse o destacarse, como en
del intérprete porque forman parte de la introducción de una publica­ (37) y (38), que pueden aparecer en lugar de (33).
ción llamada El mundo en 1996) e información accesible (como la (37) En cuanto a la agenda política, será marcada por la campaña
campaña presidencial americana en (32)c. que no se ha mencionado presidencial americana.
antes en el discurso pero puede ser fácilmente llevada a la conscien­ (38) . En cuanto a la agenda política, será la campaña presidencial
cia; el proceso de activación se apoy~ en la cláusula de relativo que americana la que la marcará.
tiene lugar desde, las nieves de las primarias de New Hampshire
hasta el 5 de noviembre). Por otra parte, tanto información conocida En ambas (37) y (38), (en cuanto a) la agenda política es el tema. En
«real» como información accesible son nociones graduales: la infor­ (37) este tema altamente destacado se repite anafóricamentecon la.y
mación conocida de~ en 1996 en (32)e. es más fuerte que la de 1996 en coincide, así, plenamente con la información conocida. La estructura
(32)a. porque ha sido reforzada por la presencia de esta última. parece análoga a la <;le (39).
Se distingue comúnmente, en el extremo más estructural de la or­
(39) Mel Gibson, él es un gran actor.
ganización del contenido oracional, entre los constituyentes funcio­
nales llamados tema (o tópico) y rema (o comento o foco). En len­
guas cori un orden de palabras fuertemente «gramatical», los temas se
No obstante, como ejemplo de lo irregular de las interrelaciones de o

los diferentes tipos de conceptos, se puede poner un énfasis especial .

encuentran normalmente al principio de la oración por lo que coinci­


en Mel Gibson y en éf,lo que conservaría el mismo tema pero tendría·

den con frecuencia con las categorias de información conocida, sujeto


sólo la afirmación implicada de que alguien es una gran actor como

sintáctico y referente proposicional, como en el caso de 1996 en (a),


información conocida. Hay entonces en (38) dos elementos que fun w

el mundo en (b), la campaña presidencial americana en (c) y estos en


cionan como información conocida, la agenda política ,y la asUnción,

(d) en el ejemplo (32). Coincide todavía con la información conocida


implicada por la estructura que sigue a la coma, que habrá algún

en (e), es decir, en 1996. En tal caso en inglés, en que un circunstan­


acontecimiento en particular que marcará la agenda política.

cial adjunto ocupa la posición temática, el tema se describe como


Finalmente, los temas pueden también recibir un tipo especial de

«marcadm>. Pero en (f), el tema es Atención a, que no se corresponde


énfasis si se sitúan en la posición [mal, como en (40). .

con ninguna de las categorias mencionadas. El rema, en todas las ca­


tegorías mencionadas, es cualquier cosa que siga al tema. Como que­ (40) Él es un gran actor, Mel Gibson.
da claro con (e) y (f), la estructura tema-rema no debe considerarse
equivalente a información conocida-información nueva. La necesidad . En un caso como este, Mel Gibson se denominarla normalmente el
de mantenerlas separadas se pone de relieve en los ejemplos (35) y antitema (o a veces, idea de último momento, afterthought).
(36), donde Mel Gibson es el tema y es el protagonista, el rema y 10
1

I
228 Estructura Principios de construcción de enunciados 229
Es esta constante interacción entre estos diferentes principios de fluencia del mundo se dirigirán una vez más en 1996. G) Año
.. organización del contenido, o estructuración ~e la infonnaci6n,. guia­ tras año, el este de Asia logra un índice de crecimiento tres
() dos por una necesidad general de coherencIa, lo. que detenmna la veces mayor que el del oeste. (k) La mayoría de los 90 millo­
contribución, a nivel oracional, a la generación de significado. Esta .es nes de personas extra en el mundo en 1996 serán asiáticas. (1)
un área tan compleja que la tenninología no es en absoluto conSIS­ Nacerán más pobres que el lector medio de este artículo.(m)
tente. El uso en esta sección no corresponde necesariamente a una Morirán más ricos. (n) La inclinación del mundo hacia el este
apenas está empezando.
ortodoxia generalmente aceptada.
o (o) El mundo será un lugar pacífico en 1996. (P) Las gue­
rras civiles de Europa van a terminar por fin. (q) Se va a ¡legar
4.4.2 Construcción de enunciados supraoracionales a un acuerdo en Oriente Medio a pesar de los intentos para
. Aunque los principios de estructuración discutidos hasta este pun­ desbaratarlo de los que ponen bombas y otros fanáticos. (r) Se
. to son operativos al nivel de la oraci6n, los ejemplos a~terior:s mues­ firmará un tratado de prohibición de las pruebas nucieares. (s)
Los ejércitos serán retirados, excepto en China y África.
tran que no es posible discutirlos sin tratar la informaCIón den~ada de
la conexión entre las oraciones con otras oraciones en un discurso
Conjuntamente, (32) Y (41) revelan la tematicidad de prosperidad y
.másamplio (a·menos que conStituyan el enunciado de una sola ora­
o ción). Otros principios, también guiados por la coherencia, son ope­
paz en (a). Como resultado, una' sección del texto, que abarca dos pá­
e ~ativos direc1amente al nivel supraoracional.
rrafos, desde (b) hasta (n), trata de la prosperidad, mientras que el ter­
cer párrafo, (o) a (s), trata de la paz. En este nivel textual se encuen­
.0 Un primer ele;iento en la construcción del enunciado al nivel su­
tran las claves necesarias para interpretar la coherencia del primer
praoraciona1 o a nivel de discurso es el establecimiento de uno o. más
párrafo, que enumera lo que el autor considera algunos de los requi­
temas del discurso. En (32), el tema de discurso global es el conjunto
o de «predicciones» que, desde el punto de vista del editor de El mundo
sitos previos para la prosperidad, en particular el rechazo de la creen­
cia que la generación anterior tenía en la naturaleza beneficiosa de la
G en 1996, se pueden hacer razonablemente sobre el año 1996. El autor,
interferencia gubernamental.
o sin embargo, presenta inmediatamente su concentración en dos temas
N o todos los tópicos discursivos son iguales funcionalmente. En
e específicos: prosperidad ypazen 1996. A pesar de la primera oración
(a), el dominio de estos dos· temas discursivos específicos no está
(32) y (41), prosperidad y paz poc1rian llamarse temas discursivos
centrales, ellos mismos subordinados jerárquicamente al tópico gene­
completamente claro en el párrafo citado en (32), que examinado
ral de 1996. Por 10 general, éstos tienen una relación asimétrica con
aisladamente puede parecer una. enumeración de afirmaciones r~lati­
los temas discursivos periféricos. Ejemplos de esto último son la
vamente desconectadas. Examinemos los dos párrafos que siguen.
observación en (e) y los comentarios en el balance económico cam­
(41) (g) Por esta locura, Europa será recompensada con un lento biante desde (i) hasta (n). A las secciones citadas del texto les siguen
índice de crecimiento económico en 1996, aunque Gran Bre­ dos párrafos que contienen una lista de más temas de discurso perifé- .
taña, por fin, está sorprendentemente bien situada. (h) Los ricos, los Juegos Olímpicos de Atlanta, el envejecimiento de la pobla­
Estados Unidos van a entrar en su sexto año de crecimiento, el
ción mundial y el ritmo del cambio electrónico. Finalmente, el texto·
período más largo de expansión ininterrumpida desde la gue­ vuelve al tema general:
rra. (i) Sin embargo, es hacia Asia donde la riqueza y la in-
(42) [Dos párrafo,s omitidos]
\/

230 Estructura Principios de construcciÓn de enunciados 231


(t) Estas son algunas de las tendencias e ideas que encontrará en El Unión Europea como una aparente excepción a la tendencia general,
mundo en 1996, que aparecerá en 80 países y en 12 lenguas. (u) Este 10 que se usa en (g) para reforzar el argumento en contra señalando
es nuestro décimo año de publicación. Si juntáramos todas nuestras
las consecuencias de este comportamiento excepcional en el nivel de
predicciones erróneas· probablemente podríamos sacar otra edición.
la· prosperidad y llevando a primer plano la contraexcepción de Gran
(v) Pero en este tiempo también ha habido muchos aciertos y espero
~r,etaña (h~ciendo uso del conocimiento presupuesto sobre la pósi­ r)
que la mayoría del contenido haya sido también interesante. \c. .
clon especIfica de la Gran Bretaña en la Unión Europea después de f"')
:0
AquÍ incluso los temas di cursivos ce~trales retroceden a la informa­ muchos años de thatcherismo) y (h) cierra el argumento con la prue- .
,,\
ción de fondo y se ofrece una especie de definición del género del uso ba :fillal: las visibles consecuencias beneficios~s de seguir la receta· de . i

los Estados Unidos. .


de11enguaje del cual el texto es un ejemplo.
El modo en ,que los temas discursivos son presentados y desarro­ Mi~ntras se presenta el tema periférico de la distribución global
llados se denomina progresión discursiva. La naturaleza de su pro­ de la nqueza, de (i) a (n) se elabora el tema de la prosperidad. La ."")
'.J .
ceso se hará más transparente cuando se hayan discutido más aspec­ predicción de que el equilibrio va a cambiar beneficiando a Asia· se
tos de la dinámica y la negociabilidad (en el Capítulo 5). En este presenta en (i), las razones para esta expectación se explican en O), y O
punto, sin embargo, ya se puede señalar que la organización progresi­ de (k) a (m) se ofrece una mayor elaboración en términos de las con­
va del discurso conduce a la construcción de una estructura retórica secuencias del cambio para la población asiática bosquejandoJas cir:"
elaborada a partir de selecciones hechas entre un conjunto infinito de cunstancias en (k) y presentando entonces un contraste entre las si- .
relaciones identificables entre constituyentes cdel enunciado funcio­ tuaciones dificiles presentes y futuras en (1) y (m), mientras. (m)
nalmente significativos a vanos niveles de organización estructural o intensifica la predicción.
(cuando intervienen grupos de enunciados) entre enunciados. Así, Finalmente, el segundo tema central se restaura -en (o) después
los dos temas discursivos centrales· están yuxtapuestos. El fragmento de ser ejemplificado desde (P) a (s). Los ejemplos simplemente se
de texto de (b) a (n) justifica la predicción sobre la prosperidad, enumeran, si bien agrupados en dos tipos, específicos en (P) y (q), en
mientras que de (p).a (s) ejemplifica la paz. En la justificación de la contr~te con los generales de (r) y (s). En cada uno de estos dos ti­
predicción de la prosperidád (b) presenta y, al mismo tiempo, resu­ P?s uno de los ejemplos se califica por medio de una concesión, que
me el argumento principal en términos de alejarse un poco más de slgue a a pesar de en (q), y excepto en China y Africa en (s). U~a vi- .
las creencias aceptadas por las generaciones anteriores, (c) explica sión. de conjunto de los ejemplos (32) y (41) se podría representar con
la FIgura 4.2. . .
10 que esto significa por medio de una enumeración (menos impues­
tos, menos inteiferencia del gobierno, una reducción drástica del es­ . Cualquier representación de este tipo no pretende ser más que una·
tado de la asistencia social), mientras se aduce una prueba para la apro~imación. El conjunto de relaciones. activadas y que estructuran
realización de los ingredientes básicos de esta explicación, la campa­ cualquier fragmento del discurso o texto es verdaderamente ínfmito.

ña presidencial americana y su poder para imponer tendencias, (d) Inclu~o en el ejemplo presentado, se podrían detectar otros tipos de

ofr~ce más pruebas para subrayar la validez general de la predicción, relaCIOnes relevantes y concernientes a la estructura más allá de las

(e) mtroduce un tema periférico, la creciente democracia, que puede . que s,e han :nencionado, como causa (volitiva o no-volitiva), resulta­

servir no obstante como información de fondo, (f) introduce la do, mtencIón, motivación, interpretación, etc. Una teoría que

T ,,'
I
232 Estructura Integración del proceso de hacer elecciones 233
. [tema discursivo superordinado: 1996] postulara un conjunto finito resultaría inmediatamente sospechosa. Al
[teJas discursivos centrales subordinados] mismo tiempo, sin embargo, cualquier investigación a este nivel debe
guiarse por un interés en la mayor sistematicidad y precisión posibles
(a) iltroducción [prosperidad y paz]
en la búsqueda de los tipos de relaciones más relevantes en la investi­
*[prosperidad] gación.
(bH n) justificación
(b) it¡traducción/resumen del argume~to 4.4.3 Construcción de grupos de enunciados
(e) explicación - enumeración - prueba Todos los principios que guían la organización de los enunciados
I a nivel de discurso o a nivel suprasentencial intervienen también en la
(d) más pruebas
L (e) [tema discursivo periférico: democracia] infor­ construcción de grupos de enunciados: los temas' discursivos se esco­
mación de fondo gen y se desarrollan progresivamente para dejar paso a una estructura
(f) excepción
retórica que consiste de relaciones identificables entre los enunciados
I

(g) consecuencia - contraexcepción de los que se compone el grupo. .


(h) cierre/prueba En la conversación, para tomar como ej emplo el grupo de enun­
L(i)-(n) [tema discursivo periféripo: distribución de la rique­ ciados más frecuentemente estudiado, todos estos aspectos son conti­
, za] elaboración nuamente negociados. Los temas discursivos en la conversación se
(i) introducción determinan de gran manera por 'los que toman o reciben la palabra. La
C) I progresión del discurso está gobernada por reglas (adaptables) de to­
G) ¡xplicación
í\
ma de turnos, por expectaciones dirigidas por pares adyacentes y pre­
v (k)-(m) elaboración/consecuencias ferencias interaccionales comunes y, a medida que avanza, vacilacio­
Q
(k) circunstan~ias
nes, falsos comienzos y reparaciones. El resultado final es una
C)
[ (1) - contraste - (m)
secuencia organizada (o autoorganizada) d,e movimientos e inter­
cambios conversacionales que no siguen necesariamente un orden li­
(n) intensificación
~' neal sino que se atiene a principios generales de coherencia y rele­
::ImpOSición
vancia (véase lasección 1.1.4).
~ *[paz] ,
e
[
(o) nuevaexposición ' . .
® ,
(p )-(s) ejemplificación/enumeración -
[ (P) específico
(q) específico - concesión
. 4.5 INTEGRACrÓN DEL PROCESO DE HACER ELECCIONES

o
••

(r) general ,
, . (s) general ~ concesión El hacer elecciones lingüísticas implica necesariamente todo 10
anterior: la selección de una lengua; código y estilo y elecciones de


Figura 4.2 Ejemplo de una estructura retórica. una serie de ingredientes de la construcción de enunciados para for­
mar enunciados o grupos de enunciados de tipos específicos; de
e

7T'-­
I

234 Estructura Resumen y lecturas recomendadas 235 !,

acuerdo con los principios generales de construcción de enunciados. presenta dos tópicos discursivos subordinados pero cen­
Por otro lado, las elecciones a todos estos niveles son altamente inte­ trales (prosperidad y paz).
radaptab1es, o interdependientes. Anteriormente en este libro (en la
sección lA) se observó que la oración que abre (32), 1996 será un Todas estas elecciones se interrelacionan en modos que una presenta­
año de prosperidad y paz, probablemente no habria sido tomada en ción superficial no puede revelar. Considérense algunas conexiones
serio si se hubiera usado para presentar un nuevo tema discursivo du­ sin entrar profundamente en sus bases. Hay una conexión clara entre
rante una conversación en una cena informal. En términos de lo que la formalidad del estilo (véase 3.) y la naturaleza del tipo mono10gal
se ha discutido en este capítulo, se debe~ observar los siguientes de discurso (véase 8.); entre el uso de la escritura (véase 8.) y el uso ."1
!

,--­
puntos sobre e,sta oración: de una variedad estándar de la lengua elegida (véase 2.); entre el tipo
de enunciado (véase 5.), la estructura proposicional (véase 6.); y el ti­
1. Está escrita en español.
po de acto de habla (véase 7.) y la estructura de la información (véase
2. Se usa una variedad estándar de español.
9.); entre la intención global del discurso (véase 8.) y el tipo de acto,
3. ,El estilo es formal.
de habla (véase 7.); entre las elecciones de temas discursivos (véase
4. Las elecciones léxicas se hacen con una fuerte connotación
10.) y las elecciones léxicas (véase 4.); entre las ambiciones globales
positiva pero un contenido semántico vago.
del autor (véase 8. y 10.) Y la elección deJa lengua inglesa c,omo me- "
5. Se elige una oración declarativa que toma la forma de un
dio de comunicación -incluso si se señala. que la publicación se dis­
suj eto con una cópula (en tiempo futuro) y un predicado
nominal. tribuye en 12 lenguas (véase (42). En otras palabras, cada elección es
en sí misma una constelación de elecciones interadaptables.
6. La proposición predica un futuro estado de' cosas sobre una
referencia temporal.
7. Como aparece en el comienzo de un enunciado más am­
plio, esta oración sirve como enunciado constituyente que 4.6 RESUMEN Y LECTURAS RECOMENDADAS
pertenece a un tipo de acto de habla que podría llamarse
«predicción» . Q
En este capítulo se han revisado los objetos estructurales de la (J
8. El enunciado más amplio es un texto mono10ga1 del tipo adaptabilidad. Para resumir, el uso de la lengua implica el hacer elec­
«editorial», definido intertextualmente con referencia a las
CIOnes: e
f.-o,
series de «informes» que, contrariamente a los informes \bi
ordinarios, miran hacia el futuro antes que hacia el pasado. • En los niveles estructurales de lenguas, códigos (variantes dis­
9. En témiinos de la estructura de la información, 1996 es a tinguibles de una lengua, que incluyen conjuntos de elecciones 'ti)
la vez información conocida y tema, mientras qu~ el resto basadas geográfica, social, funcional o .situacionalmen:te) y esti­ e
de la oración es a la vez información nueva y rema.
, 10. La información conocida de la oración representa el tema
los (variantes de una lengua o código a lo largo de la dimensión
de formalidad-informalidad).
o
discursivo superordinado (el año 1996, visto desde una • Entre toda la gama de ingredientes de construcción de enuncia­ ®
perspectiva global), mientras que la información nueva dos (de la estructura de los sonidos, morfemas y palabras, cláu- e
~

••
,-, 237
~) 236 Estruciura Tema de investigadón
Ü ---------------------------------­

•.
{;)
sulas y oraciones a las estructuras proposicionales y unidades
supraoracionales de varios tipos).
• Entre toda la gama de tipos de ..enunciados y de grupos de enun- .
ciados. -=~troins

• De acuerdó con los principios de construcción de enunciados


tanto a nivel de la construcción de enunciados oracionales y su­ Out Vlrgln Tralnl Traveller
praoracionales como a nivel de los grupos de enunciados (guia­ Thanl:: you for tnve1ling wlm Virgin Trains.

o dos básicamente por estrategias para establecer y mantener cohe­ A, I'm sure you're weU awue, our trains are fu fram perfea ríghl now. W.'re a few months

ímo running our twO fr.nchíse, - me former lmerCiry W61 CO.SI .nd CrossCountry n~rworks

G rencia). El hacer elecciones a diferentes niveles de la estructura _ and h.ve bt:en f.cing me d.ny chaUenge of undoing Ihe 30 yem of negle<:t, demo"h..uon

•• y basadas en diferentes principios es siempre interdependiente e


interadaptable. .
and strucrural decline we inherited.

We didn'l go inlo Ihi. wilh OUT eyes closed. We lmew <ha¡ we WC~ inheríting íneffectiv~ aír

conditionlng/he.!lng .habby ínlerlor., disgr.ceful.loaking l.va,ones .nd even, 00 oCC'.Slon,

m.lfunctioning engines - all Ihe result of anliqu.t€d rolUng slock and many rea" of .


ti
Sobre lenguas, códigos y estilos: Auer (ed.) (1998), Bourdieu
(1991),Coupland (1995), Eastman (1995), Fasold (1984), Gal (1979),
underinvemnent. We lm,w mu co·ordínation belween s!>.tians \Vas poor and ma!, al nmes,

Ihe way dlsabled passengers were <leall with was less Ih.n Ideal. We alsa lmew mal .caífUlg

levels on me ,elephone, vrere in.dequ..,,;

The good news ís ,hal we also lmew m.1 we could change .11 Ihís. We believed tha¡'wlthin •

year of talting over we could son OUl many of !he shott-ten:' problems and hégín la huUd
O Giles y SJ. Clair (eds.) (1979), Gumperz (1982), Reller (1995), !he found.tions for me reYoluóo"",y pl.ns we have forVírg¡n Tums. \Ve ate DOW .bo';!l four
MeeuwÍs y OstÍnan (1995), Woo1ard (1989). Sobre ingredientes de la manlru. Inlo Ihls proce:ss.

O .construcción de enunciados desde un punto de vista pragmático: Bo­ In me mon lerm,.:u 100 of our el<istíng tr;U1ll ore belng refurbished .1. COSI of (1 rnillion

e linger (1986), Comrie(1981),Fretheim y Gundel (1996), Hoye (1997),


eaeh induding repladng defective .lr conditioníng/heatíng. And [al!hough nal very

comfaréng ifyou're s¡¡tíng re.ding ¡rus on a del.yed train) desplte Ihe saIne locomotlv., !h..

llritish Rall used and me mlSSÍv. werks ma, ue gomg en 10 upgr.de me l¡nes, puncluility

:'\\
. Palmer (1986), Rosch (1977), Rudzka-Ostyn (1995), Verschueren and p<rformance have been improved, ancell.tions reduced, .nd we u. ne.arly up 10 full .tarr

V On me VirginTralnLine (OHS 222 333). . .

o (1980). Sobre principios de construcción de enunciados y tipos de


eimnciados: Bloor y EÜoor (1995), Chafe (1994), C1ark y Haviland
In !he long.r !erm, we havo tommítted lo' InV.'1 l:7 SO mi1lion in new rollÍ~g slocl md \v:i.lh

R:ailuack, up ,o n hUlion on infrastructure Impro.ementS to cope M!h !he MW rutlng ".m.

o (1977), Halliday (1985), Lambrecht (1981), Mann y Thompson (eds.)


on !he Wesl Coasl Ilne <hal wlU come ínlO semee ñoro 200 LThese wIll dram.tIcaUy reduce

Ihe nm. oC your loumeY. We :Uso have a range o.f ínltiatives desígn~d 10 git'l! people on-board

o .(1992), Prince (1981), Sgall (1995a, 1995b).


our trains !he producIs and service !hey wanl Mm • prtlmlst of qu.hry and value for mooey.

When we lOO\:' over OUT franchlses, w. <lid ¡nheril somethíng we're proud oC, a great leam
of motiva!ed people wim good ideas who want lO chango Ihe raílw.y fOI lhe bett'.L
In me meantlme. th.ñk you fOI puning "p wI!h Virgin Traln. whUe we flx Ihe problems.

Kind regards.
4.7 TEMA DE INVESTIGACIÓN

Describa la estructura del texto de la Ilustración 4.1, extraído de


la portada interior de HotLine: Revista gratuita para los pasajeros del
Richard Bran.on
tren Virgin (Otoño/Invierno de 1997).
Ilustración 4.1 Palabras de bienvei1ida de Hol Line
:T
.. "
"1'

,239
238 Estructura Tema de investigación
A largo plazo, nos hemos comprometido ~ invertir 750 mi11~nes
de libras en nuevo material rodante y, con Raütrack, hasta dos bIllo­
nes en mejoras de infraestructura para hacer frente a los nue:~s trenes
de alta velocidad en la línea West Coast, que estará en seMClO desde
el 2001. Esto reducirá dramáticamente la,duración de su viaje. Tam­
Querido viajero de los Trenes Virgin bién tenemos una serie de iniciativas disefiadas para dar a las perso"
nas a bordo del tren los productos y los servicios que deseen con una
Gracias por viajar en los Trenes Virgin. promesa de calidad y dinero bien gastado. ' .
Estoy seguro de que usted bien sabe que nuestros trenes no son Cuando nos hicimos cargo de nuestras franquicias, heredamos a:"
perfectos en estos momentos. Hace algunos meses que empezamos a go de 10 que sí estamos orgullosos: un gran ~quipo de pers,onas, motI­
hacemos cargo de nuestras dos franquicias -las antiguas redes In­ vadas y con buenas ideas que quieren cambIar el ferrocam1 para me­
terCity West Coast y CrossCountry- y nos hemos enfrentado con el
joc "
reto diario de ,reparar los 30 años de negligencia, desmoralización y Entretanto, gracias por apoyar a los Trenes Virgin mientrasso1u- '
deterioro estructural que hemos heredado.
cionamos los problemas.

No nos metimos en esto con los ojos cerrados. Sabíamos que he­

redábamos aires acondicionados y calefacciones inservibles, interio­


Saludos cordiales.
res pobres, baños de mal gusto e incluso, en ocasiones, motores en Richard Branson

mal funcionamiento -todo como resultado de material rodante anti­

cuado y muchos años de falta de inversión, Sabíamos que la coordi­

nación entre las estaciones era mala y que a veces el trato que reci­

bían los pasajeros discapacitados era peor de lo deseado. También ¡


,1

sabíamos que el número de empleados para atender los teléfonos era

inadecuado.

Lo bueno es' que también sabíamos que podíamos cambiar todo


esto. Pensábamos que después de un año de asumir el control podía­
mos solucionar muchos de los problemas a corto plazo y empezar a
construir las bases para los planes revolucionarios que tenemos para G
los trenes Virgin. Estamos ahora en el cuarto mes de este proceso.
o
A corto plazo, nuestros 100 trenes van a ser renovados a un coste
de 1 millón de libras cada uno, y esto incluye la sustitución de los a
aires acondicionados y calefacciones defectuosos. Y (aunque no sea ()
muy reconfortante leer esto mientras está sentado en un tren con re­
traso) a pesar de mantener las mismas locomotoras usadas por British
.Raíl y la gran .cantidad de obras que están en marcha para modernizar
las líneas, la puntualidad y el funcionamiento se han mejorado, las
cancelaciones se han reducido y casi se ha completado la contratación
de nuevos empleados en Virgín TrainLine (0345222333).
«Situación» de la dinámica de la comunicación 241

tiva específicamente dinámica a la interadaptabilidad del contexto y


'la estructura en el uso real del lenguaje.
La generación, dinámica de significado (véase la Introducción,
sección 0.4) es central al proceso de (inter)adaptación en el uso del
lenguaje o al funcionamiento significativo dellengliaje. Esto sucede
en el transcurso de las actividades y acontecimientos, que proporcio­
nan «marcos de significación» (que se discutirán en la sección 5.2) y
5
con la ayuda de las estrategias (véase la sección 5.3). Tras introducir
DINÁMICA brevemente estos dos aspectos, se demostrará la dinámica de la gene­
ración de significado (interactivo) mediante unos ej emplos (en la sec­
ción 5.4). Primero veremos un poco más sobre el concepto mismo de
dinámica, «situándolo» en relación tanto con los correlatos contex­
Los capítulos sobre los correlatos contextuales de la adaptabili­ tuales como con los objetos estructurales de la adaptabilidad; espe­
dad (CapItulo 3)y los objetos estructurales de la adaptabilidad (Ca­ cialmente, pero no únicamente, se mostrará la relevancia de ias di­
~ pítulo 4) nos han proporcionado las herramientas básicas neces,arias mensiones sociales' y temporales de la comunicación en la sección 'c
para describir el locus 'de cualquier instancia o aspecto del funciona­ 5.1).
~' miento significativo del lenguaje en términos de sus coordenadas ex­
O, tralingüisticas y lingüísticas (una distinción que no refleja completa­
O mente la que hay entre correlatos contextuales y objetos estructurales, 5.1 «SITUACIÓN» DE LA DINÁMICA DE LA COMUNICACIÓN
.-'"\
f
como debería quedár claro por la noción de contexto lingüístico).
'v} Como ya se ha demostrado (en la sección 2.4), sin embargo, es la ta-
O rea central de las investigaciones pragmáticas específicas dar cuenta No es necesario decir que 10 que le pasa al lenguaje o 10 que pasa
O de la dinámica, de la adaptabilidad, o estudiar los procesos reales de con el lenguaje, es decir, la dinámica de su uso, puede colocarse en
(inter)adaptación, teniendo en cuenta toda la fuerza de la variabilidad relación con cualquier aspecto del contexto y de la estructura visto en
'y lanegociabilidad. En este capítulo exploraremos cómo se puede ha­ capítulos pasados. Para que la noción de dinámica tenga sentido como
cer esto usando las herramientas relacionadas con el contexto y con la tal, sin embargo, puede ser útil señalar algunos factores destacables,
@ estructura.
empezando por la materia prima de la dinámica, es decir, la dimen­
® 'CQnceptualmente éste es el capítulo central de este libro. Desde
sión temporal del uso del lenguaje.
O una perspectiva diferente, el ámbito de los objetos estructurales es ,

•e •
estudia~o por los componentes tradicionales de una teoría lingu"ística.
De igual' modo, los correlatos contextuales constituyen también el
'tema de investigación de la sociolingiiística, la antropología lingiiísti­
ca, la psicolingüística, etc. Lo que la pragmática añade es la perspec­
5.1.1 La dimensión temporal
Sí hay algún universal lingüístico indiscutible es el simple hecho
de que el uso del lenguaje tiene lugar a 10 largo del tiempo. Aunque el
espacio es un correlato contextual poderoso de la adaptabilidad (por­

•.,• ,.
que el discurso es incomprensible a larga distancia, porque la distan­

•­ , .. ,.,-------- " " , . , , - - - - - - .~,,-----_ .. ­


\
~ .'

242 Dinámica «Situación» de la dinámica dela comunicación 243

cia espacial es influida por aspectos de las relaciones sociales rele~ El contraste entre (i) y (ii) es característico, por ejemplo, de la di­
vantes para la naturaleza de la comunicación en cuestiól1, etc.; véase ferencia entre las clases tradicionales de presuposición e implicatura
la sección 3.2.4), y aunque las relaciones espaciales subyacen a blo­ conversacional. En el caso de las presuposiciones típicas, se supone
ques significativos de conceptualización reflejada lingüísticamente, el que tanto el enunciador como el intérprete deben ser conscientes de la
tiempo, como correlato contextual de la adaptabilidad, impone cla­ información de la que se está tratando (por ejemplo, que yo no fui a tu
ramente más restricciones universales a la interacción verbal. Lo que fiesta anoche), antes de que se cree el enunciado al que está unida la
el espacio es para el significado léxico y gramatical (un conjunto de presuposición (por ejemplo, Siento no haber ido a tu fiesta anoche).
relaciones observables que pueden transformarse y extenderse meta­ En el casode las típicas implicaturas conversacionales, por otro lado,
fóricamente para construir un amplio abanico de conceptos), 10 puede un fragmento de información (como que lagasolinera de la esquina
ser el tiempo para la acción lingüística: el tiempo o la dimensión tem­ vende gasolina y está probablemente abierta) que )raes parte delco­
(')
poral proporciona la materia prima para la dinámica comunicativa. no cimiento del mundo de E antes. del enunciado Hay una gasolinera
Las restricciones impuestas por esta materia prima son visibles en la esquina (en respuesta a No tengo gasolina) se preten:de que sea· ()
inmediatamente cuando se considera el procesamiento por el medio parte de las creenéias o supuestos de 1 en virtud de su' comprensión
de ac4iptación, la mente en sociedad (a discutir más adelante, en el del enunciado, entrando así en el. ámbito del conocimiento común, de
capítulo6). A un micro nivel, la.«memoria» de los interlocutores im­ modo igual al de la presuposición, pero en un estado más avanzado
pone restricciones de procesamiento relacionadas con el tiempo; y el del proceso de interacción. Hay otros tipos de supuestos (o, por la
procesamiento comunicativo por sí mismo supone una «planifica­ misma razón, otros estados mentales) que se relacionan con la dimen­ o
ción» (de nuevo' relacionada con el tiempo); véanse las secciones sión temporal de manera parecida. Por ejemplo, una condición· de sin­
6.2.2 y 6.2.3. En un macronivel, las etapas anteriores del desarrollo de ceridad específica de una ocasión (la creencia de E de que la tierra es
las lenguas y de las convenciones lingüísticas ya no son accesibles al redonda cuando dice La tierra. es redonda, o la intención del E de ve- .
usuario del lenguaje; no puede garantizarse el éxito comunicativo de nir cuando promete Vendré) es un supuesto o estado mental que se
cara a futuras generaciones, ni siquiera con el canal de escritura, y espera que pertenezca al mundo mental de E antes del enunciado,y
mucho menos a niveles .más triviales donde se encontrarían pequeños que entra a fqrmar parte de los supuestos de 1 como resultado de una
obstáculos en la interacción con los coetáneos. comunicación satisfactoria. (Véase, p. ej., Verschueren, 1978a, 1981a.)
También al micronivel, pero considerando ahora procesos de coa­ Los fenómenos del siguiente tipo son ejemplos de (iii) (discutidos
daptación entre los correlatos contextua1es de la adaptabilidad y las. ampliamente por Kurzon, 1986): Lego todas mis posesiones a mí es­
elecciones lingüísticas, es posible distinguir etapas de adaptación en posa (en un testamento) solamente será efectivo tras la muerte de E;
la interacción lingüística. Pueden distinguirse tres tipos (pero hay más Tomo a ... como esposa ... (en una boda católica) puede anularse des­
configuraciones posibles): (i) las elecciones lingüísticas pueden ha­ pués de un tiempo si el matrimonio no se ha consumado; una ley
cerse después de que hayan aparecido ciertas circunstancias «del promulgada apropiadamente (por ejemplo en Estados Unid0s) puede
mundo» (como se vio con el enunciador E y el intérprete 1); (H) las ser declarada inconstitucional por algún tribunal unos años más tarde.
elecciones lingüísticas pueden cr(!.ar ciertas circunstancias; (iii) las Hay que tener en cuenta que dichos ejemplos son engañosamente
elecciones pueden permanecer o volverse no efectivas cuando entran estáticos en un intento de hacer frente a los procesos dinámicos. Lo .
en juego ciertas condiciones posteriores. que describimos como presuposiciones «típicas» o implicaturas con­
244 Dinámica «Situación» de la dinámica de la comunicación 245

versaciona1es pueden ser abstracciones que se corresponden muy.po­ conversación puede explicarse sobre la base de las tendencias en co~­
co. con el uso real de11enguaje. Más adelante (en la sección 5.4) espe­ flicto hacia la preservación de la privacidad y la fOl1l;1ación de alian­
ramos demostrar que esto es de hecho posible, dada la extremada di­ zas. Esta sería una explicación hecha completamente en términos de
námica de los procesos de generación de significado que se pueden relaciones sociales. Puesto que la comunicación tiene lugar entre
observar. Sin embargo, incluso como abstracciones pueden ser rele­ humanos, este podría ser uno de los ángulos más prometedores para
vantes hasta el punto de no Vivir sólo en la mente del investigador si­ ver este proceso como un proceso. Así, las exigencias enfrentadas de
no también en la del usuario (un enunciado que debe entenderse per­ privacidad y alianza determinan, entre otras cosas, el establecimiento
fectamente después de leer el capítulo 6). y el cruce de fronteras entre identidades de grupo, el ritmo con el que
Volviendo al macro nivel una vez más, debería estar claro que los se intercambia la información, los tipos de información que se inter­
o .,
procesos de cambios del lenguaje, ypor tanto las dinámicas perpetuas
que subyacen a la variabilidad,· deben localizarse teniendo .como fon­
cambian o no se revelan, el estatus que se concede a los diferentes ti-,
pos de «presencias» en un acontecimiento comunicativo y la interac­
\ .. /
r"
U
. do la progresión temporal. Es en este dominio en el que la distinción ción entre la imagen positiva y la negativa y entre el poder y la
entrelo macro y lo micro pierde parte de su significado (tal y como 10 solidaridad.
mostró MeeuWis,. 1991). Así, los préstamos léxicos, por poner un Una correlación menos directa puede encontrarse entre las otras
ejempl01 pueden empezar por un caso individual de intercambio de dos fuerzas que subyacen a la dinámica discursiva, es decir, la parti­
códigos(véase la sección 4.1) que luego se repiten, copian y generali­ cipación versus la disociación, menos directas porque pueden depen­
('\ .'
zan, acabando. en una adopción total del término «foráneo» en la len-' der de características muy personales no determinadas por las rela­

gua y, en última instancia, en la completa incorporación, de modo que ciones sociales, o de productos de la socialización apenas accesibles a
O el origen foráneo ya no es transparente para el hablante de la lengua la conciencia de los usuarios del lenguaje. Además, están también los
O · en cuestión. estados mentales personales del enunciador y el intérprete. Puede
De igual modo, varias etapas de la adquisición de las lenguas se demostrarse que los deseos (por ejemplo, el deseo de un interlocutor
pueden tratar como adaptaciones progresivas al micronivel de la inte­ de que el otro haga algo) se «desarrollan» a 10 largo -de una interac­
racción diaria def individuo o como una norma adulta más o menos ción. Como ya se insinuó (en la sección 5.1.1), algunos de los com­
establecida al nivel de una comunidad más amplia o de la sociedad. ponentes más dinámicos de los acontecimientos comunicativos son el
Al mismo tiempo, se debe tener cuidado con la unidireccionalidad del conocimiento y las creencias, que están en'constante movimiento. In­
· proceso de adaptación que se filtra a través de esta formulación: no cluso la intención de decir algo puede formarse retroactivamente o re­

o hay duda de que las normas «establecidas» cambian bajo presión a 10


· largo de las sucesivas generaciones de estudiantes.
formarse en el transcurso de la negociación de significado..
. Los diferentes canales lingüísticos, el oral frente al escrito, se re­
Q

.
lacionan de modo diferente con,la dimensión temporal de la comuni- .
O · 5.L2 Dinámica y contexto
. .
cación y muestran, por tanto, diferentes tipos de dinámicas. Los
SJ... . ' efectos se encuentran especialmente al nivel. de la organización del
'El tiempo no es el único correlato de la adaptabilidad de impor­
discurso: restricciones en la coherencia y la cohesión, disgresión, etc ..
O tancia a la hora de «situar» la noción de dinámica. Martín Rojo

•e (1994), por ejemplo, propone que la dinámica de la interacción en la


Esto, por supuesto, nos lleva directamente a los aspectos estructurales
.de la dinámica.

.,
f)
246 Dinámica Actividades, acontecimientos y marcos del significado 247

Wittgenstein (1958) pensó que era útil introducir la noción de juego


5.1.3 Dinámica y estructura de lenguaje para llamar la atención sobre lo inmersa que está el habla
en las actividades humanas o formas de vida. Ambos conceptos de- :
. Debemos recordar que el lenguaje por sí mismo tiene una propie­
.signan un amplio espectro de enunciados, desde el más simple· (como
dad relacionada con el tiempo: la linealidad. Es precisamente por la
un grito de enfado), pasando por los actos de habla, hasta· el más
linealidad dellenguaje.por 10 que la secuéncia es tan importante para
complejo (como una narración larga), que derivan una parte signifi­
la comunicación, o la planificación del tiempo en los gestos o sonidos
cativa de su significado de su estatus reconocible dentro de un con­
para mantener la comunicación [backchannel cues] en la conversa­
texto de acción. Tanto Bajtin como Wittgenstein enfatizan un grado
ción, el intercambio entre códigos, el sistema completo de Qambio de
de estabilidad y convencionalización razonable (que hace que los gé­
turnos, de las reparaciones, etc. Al nivel de la estructura de la oración
neros del habla y los juegos de lenguaje sean reconocibles e interpre­
la linealidad determina las restricciones en el orden de palabras, junt¿
tables) al mismo tiempo que se centran en la variabilidad infmita y el
con las limitaciones en la memoria y en la planificación. En los nive­
ca~bio. Así pues, Lo haré puede reconocerse como ejemplo de un
les oracional y supraoracional, los· aspectos de. la estructura de la in­
género o un juego conectado con la esfera de la actividad que rodea el
formación (como el orden de la información dada y la información
compromiso entre dos personas de hacer algo, con un grado de corÍl­
nue~a~ y la interacción progresiva entre el significado implícito y el
parabilidad suficiente (describible, p. ej. en térrninossemeja,ntes a los
expllclto (sobre 10 que se tratará más adelante en la sección 5.3) son
del acto de habla de prometer) a través de una gama de ocasiones de
'. algunos de los componentes más importantes de la dinámica comuni­
cativa. uso. Pero esas ocasiones de uso, fuera de. las cuales el género o juego
ni siquiera existe, crean una seria variabilidad entre las instancias in­
Aunque la linealidad es una restricción poderosa, no determi~a
dividuales; compárese simplemente Lo haré como un acto voluntario
P?r comple:o ~a forma de la. dinámica del uso del lenguaje. El enun­
crador y el mterprete pueden moverse alrededor de la dimensión bási­ de ~frec.ei un servicio y el mismo enunciado emitido por alguien que
se nnde ante una amenaza: los dos pueden contar como «promesas».
camente lineal en. cualquier etapa del proceso de generación de signi­
Estos dos aspectos, la estabilidad (producto principal de los procesos
ficado. Esta pro?~edad del funcionamiento significativo del lenguaje,
de interpretación) y la variabilidad (una propiedad de la «realidad» en
que puedemoV1llZarse en cualquier fragmento de discurso se hace
~anifiesta al nivel de un contexto lingüístico más amplio en 'forma de cuestión), están interactuando constantemente en la generación diná­
mtertextualidad. mica de significado.
. Un~ se puedep~eguntar por qué no se discutieron antes los géne­
ros de habla o los juegos delertguaje, excepto por una breve introduc­
ción en la sección 1.4, por ejemplo en relación con el contexto
5.2 ACTIVIDADES, ACONTECIMIENTOS Y MARCOS DEL SIGNIFICADO
(puesto que esto está relacionado con laS conexiones con'hixtuales'
. ,
véase el Capítulo 3), o en relación con la estructura (donde el g6nero
. ~a generación del significado no se produce en el vacío. Por eso de habla o el juego de lenguaje, o ambos, podrían haberse presentado
BaJtm ~~986) propuso la noción de género de habla (véase también a la par con los actos de habla, como enunciados estudiadosfrecuen­
la seCClon 1.4) como un tipo relativamente estable de enunciado aso­ temente; véase la sección 4.3). La razón es que las nociones de Bajtin
ciado con una esfera de la actividad humana. Es por esto por lo que y Wittgenstein llegan precisamente a la esencia de 10 que trata el uso
'T

r-,
U 248 Dinámica Actividades, acontecimientos 1harcas del significado 249
~------~--------------~----~-----
d~llenguaje, de modo que una aproximación en ténninos de proce­ 10 que se considerará el esquema «típico» de valores paramétricos
sos, que recurre tanto ál contexto como a la estructura, tiene sentido. que ese tipo representa. La razón es que esa descripción atribuye pro­
¿Cómo es posible conceptualizar esto? piedades estables a una realidad inestable, que puede, por otro lado,
Teniendo en cuenta la discusión general de los correlatos' contex­ ser relevante para ciertos aspectos de la interpretación. Esta ambiva­
tuales de la adaptabilidad, pero prestando atención a los procesos lencia es precisame~te la misma que se encontró en los géneros de
habla o los juegQs de lenguaje (véase el ejemplo de la «promesa» más
o reales de uso del lenguaje, se puede ver que los valores de las dimen­
siones contextuales descritos en el capItulo 3 pueden combinarse en arriba). Para poner un ejemplo, se podría decir que un modelo típico
una variedad infmita de maneras. Cualquier combinación de ingre­ de entrevista de trabajo contiene los siguientes tipos de ingredientes:

••
'~
dientes desde cualquier conjunto de' dimensiones contextuales puede
definir uria actividad (de habla) o un acontecimiento (de habla).
Algunas veces estos ténninos se usan para enfatizar diferentes as­
• Los interlocutores son típicamente un entrevistado (que solicita
el trabajo) y uno o más entrevistadores. Cuando el entrevistado
es el enunciador, es nonnalmente la fuente directa de 10 que
pectos del uso del lenguaje: el término «acontecinliento de habla» se dice pero, en un intento de anticipar preguntas y objeciones, se
O refiere simplemente a los, fragmentos del discurso organizados se­ Y
puede invocar a unenunciador en varias ocasiones. En cuanto
() cuencialmente (un dominio analítico), mientras que «actividad de ha­ al entrevistador, o entrevistadores, pueden' ser tanto' la fuente
8 bla» se refiere a la fonna de comportamiento significativa que un in­ directa o las fuentes directas de las preguntas o comentarios o
térprete tÍene que imaginar para construir una interpretación. En este n
pueden hablar en nombre de una fuente , p. ej. su inmediato
O libro no se manejara'una distinción sistemática, aunque la selección superior o una entidad más impersonal de la empresa o institu,;
O entre estas dos alternativas puede depender a veces de si se quiere en­ ción, en cuyo caso un entrevistado iniciado considerará un
0, fatizar la intervenCión creativa de los participantes en la construcción destinatarion potencial (las letras voladas se explicaron en la
de la actividad o la naturaleza ya convencionalizada del aconteci­ Sección 3.2.1.).
miento, recordando que ambos aspectos juegan un papeL Los eJem­ • El entrevistado va a la entrevista con la intención de presentar­
plos estándares de actividades o acontecimientos son la enseñanza en se de un modo que amplíe al máximo sus oportunidades de
el aula, los interrogatorios de la policía, las entrevistas de trabajo, las convencer al entrevistador y/o a los entrevistadores y/o a los
charlas de sobremesa, las bodas, el contar historias, los encuentros destinatarios de que es la persona adecuada para el trabajo. In­
I!~ relacionados con servicios, las lecturas de poesía, las sesiones de es­
\;:d tervienen un grado variable de esperanza y, más a menudo de
A,',,,,,
Q
critura de cartas de Amnistía Internacional, las reuniones de negocios, 10 que podía parecer, cierta certidumbre. El objetivo del entre­
etc. Cada uno de ellos puede describirse en los siguientes ténninos: la vistador es obtener la infonnación necesaria para tomar una
(1) constelación de enunciadores (con voces específicas) y de intérpretes decisión de contratación. Ambas partes están igualmente in­
O (con roles específicos); las creencias, las intenciones, las emociones y volucradas en la interacción, pero desde puntos de vista clara~
O otros aspectos del mundo mental; los parámetros sociales; las propie­ mente diferentes.
dad~s, del mundo flsico; los aspectos del canal lingüístico y del con­ • El contexto social es completamente asimétrico, con una canti­
G texto lingüístico'. dad de poder (dependiendo de su precisa posición de autoridad
O " Es siempre arriesgado dar ejemplos del «tipo» de actividad de ha­ en la empresa o institución) por parte del entrevista~or o de los
O bla ode acontecimiento comunicativo; incluyendo una descripción de

••
T \

I
25Q Dinámica Actividades, acontecimientos y marcos del significado 251

entrevÍstadores, y una falta de control por parte del entrevista­ de uso del lenguaje como un tipo específico de a'Ctividad de habla
do. La constelación precisa depende mucho de los parámetros puede hacerse de modo seguro sólo con la condición de que se tenga
.institucionales involucrados, y también de asuntos personales en cuenta la gama verdaderá de variabilidad y negociabilidad en la
que pueden interferir (como una posible conexión personal descripción empírica, junto con abstracciones como las señaladas
entre el entrevistado y el entrevistador o los entrevistadores). arriba, siempre que pueda demostrarse que contribuyen a ciertos as­
En un contexto interétnico, aspectos del bagaje cultural (que pectos de la interpretación.
debe tratarse con el mayor cuidado en el análisis; véase la sec­ Nótese que los usos del lenguaje que enumeramos (en la sección
ción 3.2.3) pueden entrar también a formar parte del conjunto. 4.3), como tipos de discurso monologal (como los anuncios, las ins­
• También intervienen diferentes tipos de referencia temporal trucciones de uso, las bromas, las cartas, los discursos políticos, etc.)
dependiendo del segmento temático de la entrevista; hay nor­ o discurso dialogal (como la narrativa conversacional, las conversa­
malmente un pequeño <<historial», una exploración de las apti­ ciones entre niños y adultos, las sesiones de terapia, los debates, los
tudes y actitudes y una anticipación de las tareas'a llevar a cabo. programas de entrevistas y semejantes), se ajustan perfectamente a la
• La posición de los interlocutores en el espacio fisico es típica­ descripción de los tipos de actividad, de habla y de acontecimientos de
mente cara a cara; el entrevistado y el entrevistador o los en­ habla. Por tanto,' como se señaló (también en la sección 4.3), no de­
ftrevistadores están en ladQs ~'puestos de un objeto como un es­ signan realmente estructuras sino compleja§ categorias estructurales y
critorio o mesa. La aparienciá fisica.del entrevistado, los gestos contextuales, es decir, actividades o acontecimientos.' .
y su compostura son vigilados muy de cerca. Esos tipos de actividades o acontecimientos son siempre signifi­
• Las condiciones «materiales» del discur;o son de la mayor im­ cativos en el sentido en que, como otras formas de acción social, son
portancia en las entrevistas de trabajo. En primer lugar, en interpretados por los actores que participan: Las abstracciones que no
ellas se cristalizan las relaciones económicas. Además, las cir­ encajan completamente con los (otros) «hechos» empíricos pJleden
cunstancias económicas como la abundancia frente a la escasez entrar a formar parte en esta interprétación. Esas actividades o acon­
de trabajos y.de candidatos para los trabajos pueden no sólo tecimientos interpretados, productos de los éomplejos procesos de
determinar el resultado de una entrevista, sino también el mo­ socialización, proporcionan marcos' de significación para los géne­
do en que ésta se lleva a cabo. . ros de habla o los juegos de lenguaje que los componen. Es por el
• El canal lingüístico para las entrevistas de trabajo es normal­ marco de interpretación que proporciona la actividad o tipo de acon­
me~te. el lenguaje oral. En términos del contexto lingüístico, tecimiento de la entrevista de trabajo, que reqúiere la habilidad de pre­
están mtertextualmeníe conectadas con otras formas de discur­ sentarse a sí mismo del mejor modo posible, por el que el solicitante
so; un anuncio de trabajo anterior, un informe de la entrevista del trabajo puede determinar su futuro haciendo de la honestidad la
y una carta posterior o llamada de teléfono notificando al ~olí­ directriz dominante de sus respuestas a las preguntas del entrevistador.
citante su aceptación o rechazo. Considérese el intercambio en (1) adaptado de Gumperz et al. (1979):
(1) Entrevistador: ¿Por qué solicita un trabajo en esta Universidad
Lo que ~e presenta aquí como típi~o puede no ser «representati­ en concreto?
vo» del conjunto de entrevistas de trabajo reales. Pensemos por ejem­ Entrevistado: He rellenado 50 solicitudes. Esta es mi tercera
plo en el fontanero local buscando un ayudante. Clasificar un ejemplo entrevista. Solamente necesito un trabajo.'
252
Estrategias de la generación de significado 253

~l a~alizar esto en términos de pares adyacentes que consisten en, en ciado a ella, como se ha ejemplificado en (2), es rechazado. El error
termmos de actos de habla, una pregunta para conseguir información más grave que un análisis pragmático podría cometer es ignorar que
seguida de una secuencia de tres enunciados, se perdería el objetivo «lo que está sucediendo realmente» está incrustado dentro, en esos
de ver qué es .10 que realmente está pasando, por muy exacto que sea marcos de interpretación, tanto los que se esperan como los que no
a un cierto nivel de estructura y contenido. La pregunta del entrevis­ son permisibles en el contexto de uso.
tador representa un género o juego específico según la actividad o
acontecimiento. Dentro del contexto de la actividad o acontecimiento ,
es una pregunta formulaica que prueba lo que sabe el entrevistado del·
5.3 ESTRATEGIAS DE LA GENERACIÓN DE SIGNIFICADO
lugar. Es una invitación a presentar la relación entre la biografía del
candidato y su posible nuevo trabajo, o a mostrar cómo cree el candi­
dato que encajaría en el trabajo. Puede también ser una manera de Como se ha repetido una y otra vez, nada de lo dicho más arriba
buscar cumplidos. EI.entrevistador puede querer ofr algo de la univer­ es completamente estable. Esa es la esencia de la negociabilidad y la
o sidad que llame especialmente la atención del solicitante, q\fe puede adaptabilidad. En un contexto de escasez de empleo no queda duda de
llevar a la conclusión de. que este último desarrollaría un alto grado de que surgen nuevos géneros o juegos que permiten la referencia a as­
~

•e devoción por su nuevo empleo. Al no responder a la pregunta en ese


sentido, el entrevistado, aunque honesto, muestra, a los ojos dei en­
trevistador, falta de i.oterés y pierde sus posibilidades de ser contrata­
pectos de la lucha social, modificando así el marco evidente deinter­
pretación de la actividad de una entrevista de trabajo, pero sin real­
mente cuestionarlo o romperlo. El entrevistador, por ejemplo, tiene el
o do. La idea no es~engañar' al entrevistador con una respuesta poten­ privilegio de poder referirse a la abundancia de solicitantes, tanto co­
o cialmente hipócrita como la de (2). mo una estrategia para suavizar un rechazo posterior como para re­
forzar el lazo posterior a la contratación (por ,tanto reforzando la así­
o (2) No puedo imaginanne un lugar mejor para trabajar. Tiene una
~n reputación y es un lugar agradable en un entorno muy bo­
mema .de la relación y creando una atmósfera de casi falta de control
ruto. por parte de los contratantes). Este es sólo un modo, sin embargo, en
que están involucradas las estrategias en la generación dinámica de
(1) Esta respuesta habría estado, simplemente, entre las lIneas trazadas' significado.
e .por el marco de interpretación que da sentido a las entrevistas de tra­ Hay muchas estrategias que están altamente convencionalizadas,
bajo (de~n:o de un ~~cenario particular o específico de cada cultura). pero todo lo convencional puede usarse potencialmente con fines es­
Q Como lUlmmo podría haber Sido un despliegue de aptitudes sociales y tratégicos o de explotación. Por esto es por 10 que casi no hay rela­
e habría asegurado al entrevistador que el candidato disponía de las ar­ ciones de forma-función fijas en el lenguaje considerado desde una
o
A
mas para subrayar la buena imagen de la universidad tanto directa
como indirectamente. La respuesta de (1) desafía este 'marco porque
perspectiva pragmática. En general, las estl'ategias de uso del len­
guaje son formas de explotar la interacción entre lo explícito y lo.
W
G
., comporta el marco de significado asociado con una esfera de activi­
dad diferente, la lu~ha social y los problemas que supone la búsqueda
de empleo. Es cunoso que las entrevistas de trabajo siempre estén
implícito en la generación de significado, al nivel de enunciados ora­
cionales y supraoraciona1es, al igual que al nivel de grupos de enun­
ciados, se haga o no conscientemente. Las manifestaciones de esto,

•e
dentro de esa amplia esfera, pero el tipo de referencia específico aso­ algunas más convencionalizadas que otras, pueden encontrarse enlos

CID
254 Dinámica
l

La dinámica de la generación de significado interactivo 255

fenómenos discutidos (en la sección 1.1.3) como ejemplos en que se dos controles morales: no sólo tiene que negar la hospitalidad sino
evita estratégicamente. la explicitud: la implicatura conversacional, también tiene que contradecir las expectativas declaradas por el enun­
algunas ironías, la metáfora, la cortesía y el humor. . ciador.
Los fenómenos relevantes no están restringidos a esta lista. Van A nivel de los principios de construcción de enunciados en el pla­
desde el uso de expresiones referenciales, pasando por las elecciones .)
no supraoracional, el modo en que se presentan y se manejan los te­
gramaticales, hasta llegar a los principios de construcción de enun­ mas del discurso para construir una estructura retórica es muy estra­
ciados a nivel supraoracional. Se va a restringir la discusión a estos tégico, aunque algunos modelos son más neutrales que otros. Entre
tres ejemplos. Considérese, en primer lugar, una expresión definida los procesos que intervienen están tanto evitar el tema como resaltar
como mi ex, usada de modo estándar como combinación de un sujeto, el tema, la argumentación, los usos de expresiones directas frente a
información dada y tema, que conlleva la presuposición existencial de expresiones indirectas, etc.
que existe una persona con la que yo estaba casado y de la que estoy Debería enfatizarse que siempre intervienen estrategias en cual­
divorciado. La fu:t:Ición superficial de esta expresión referencial es an­ quier tipo de comunicación, y que no implican necesariamente inten­
clar información en un terreno común. Sin embargo, esas construc­ tos de rechazo, manipulación, expresión de falta de solidaridad, esta­
ciones que conllevan presuposiciones pueden ser usadas estratégica­ blecimiento de situaciones competitivas, etc. A menudo, sin embargo,
mente para transmitir información nueva en un contexto en qu~ el los tipos de uso de lenguaje más normal.es llevan gérmenes de. esos
enunciador sabe perfectamente bien que el «terreno común» no es tan objetivos y designios menos nobles, aunque no deberíamos dejar que
común puesto que el intérprete no comparte el conocimiento presu­ el término «designio» conduzca al engaño y conceder así plena con­
puesto. Así, un enunciado puede comenzar con Mi ex .... simplemente ciencia al proceso de hacer elecciones (véase e.l Capítulo 6).
para sacar el tema de que el enunciador estuvo casado, lo que puede
ser pertinente para un destinatario (por ejemplo una posible pareja
nueva) que no sabe nada de la historia sentimental del enunciador.
5.4. LA DINÁMICA DE LA GENERACIÓN DE SIGNIFICADO INTERACTIVO
Como ejemplo de elecciones gramaticales, se considera que las ()
pregunta~ confirmatorias [question tagsJ disminuyen la asertividad de
las afirmaciones y, en ese sentido se cita, a veces, su frecuencia de .En esta sección revisaremos cuatro breves ejemplos de uso del O
ocurrencia en el discurso de las mujeres como prueba de la sumisión lenguaje reales, de los que puede participar cualquiera, para ilustrar la (}
femenina. No hay duda de que Puedo quedarme en tu casa, ¿no? es dinámica de los procesos que incorporan. Los dos primeros y el ()
menos asertivo que Puedo quedarme en tu casa, siendo este último cuarto son ejemplos de interacción real, aunque simple. En el tercero
bastante grosero a no ser que se pueda interpretar como un ofreci­ no hay intercambio real. El análisis demostrará, sin embargo, que no
miento. Al mismo tiempo esas preguntas confirmatorias pueden usar­ se puede explicar lo que pasa a no ser que se suponga inte&acción de
se estratégicamente para que el contenido de una aserción.se vuelva algún tipo. Se espera demostrar,por tanto, que la generación de sig­
presuposición, haciendo así que ·sea más dificil estar en desacuerdo y nificado es siempre dinámica e interactiva.
por tanto reforzando su poder argumentativo o persuasivo. El enun­ Al concluir la sección 1.3, dije que el movimiento teórico que lle­

ciador, al «presuponer» que puede quedarse en casa del destinatario, va a cabo la pragmática al separar significado y forma lingüística in­

pone a éste en una posición tal que para negarse tiene que pasar por vocando la intencionalidad(el punto de referencia griceano). tiene

256 Dinámica La dinámica de la generación de significado interactivo 257

que contrarrestarse p~r una re-unión del significado con hechos del ter actúan de algún modo (descartando alguna excepción ocasional),
lenguaje observables. Las siguientes secciones tienen el 'objetivo de las conversaciones están restringidas a breves intercambios de infor­
ilustrar ese doble movimiento .. mación o a comentarios también breves sobre la actuación. En otras
palabras, las opciones están limitadas, tanto estructuralmente como en
.5.4.1 La ópera de Budapest relación con el conterudo. .
El siguiente intercambio tuvo lugar en la ópera de Budapest cuan­ Los que ·interactúan en situaciones de este tipo son completa­
mente extraños, pero hacen, sin embargo, hipótesis sobre los demás
do Hungrfa estaba todavía bajo el telón de acero. Fui con mi mujer,
entramos tarde, todo el mundo había dejado ya de hablar, y nos sen­ que ayudan a guiar el procesarle comunicación de modo dinámico
tamos cerca de una pareja de mediana edad. Durante el intermedio mi tanto en su producción como en su interpretación. Al oír y ver (3)1.,
mujer y yo empezamos a hablar en holandés. La mujer que estaba a di por hecho que la persona sentada a mi lado em o húngara (con una .
mi lado se giró hacia mí y sé produjo el siguiente intercambio: baja probabilidad, porque de ser así habría tenido n;ás recur~os que
pedir a un extranjero, en un inglés fragmentado, la mformacl~n que
(3) 1. Mujer: [Gesticulando] Pausa... pausa. necesitaba) o extranjera de otro tipo (pero no una hablan:e natlv~ de
[Señalando el reloj] ¿Cuánto tiempo? inglés, ya que el esfuerzo articulatorio fue tal que encubnó las pIstas
2. JV: [Articulando lentamente] Diez minutos.
de lo que posteriormente resultaría ser un acen.to clar~m~~te. recono­
[Con las manos hacia arriba y todos los dedos abier­
tos] Diez.
cido). Yo supuse ingenuame~te que la~elecclOnes 1:n~U1stICas c~n
gestos que había hecho reflejaban su nIvel de conOClmlento del m­
C) glés, lo que me hizo elegir, como código para mi respuesta, .la lengua
Mi vecina parecía satisfecha, se giró hacia su esposo y comenzó a ha­
Ü usada con los extranjeros rJoreigner talk], que es la estrategIa normal
blar en inglés, con un inconfundible acento de Tejas, lo que hizo que
en tales circunstancias, incluso si uno mismo no es un hablante nativo
O y6 interviniera y dijese algo así como: ¡Ah, ustedes son americanos!.
de la lengua en cuestión.' .
seguido de una conversación normal en inglés. .
. Teniendo en cuenta el objetivo, el intercambio fue un fragmento
El tipo de actividad representada en (3) está puramente centrada
en la información, y consiste en dos enunciados adyacentes pertene­ de comunicación satisfactorio para todós: mi vecina de asiento obtuvo
cientes a los géneros de pedir y dar información. Aunque parezca que su respuesta y yo fui capaz de ayudarla. Cuando me ~~n:,erti en es­
(;) pectador circunstancial (bystander] y cuando ella se dmglO a su y?a­
todo laque se pue<i,a decir de interés acerca de (3) será en términos de
rido y oí el acento perfecto de Tejas de que disponía, tuve que reVIsar
O las' categorías generales de los actos de habla de pedir información
mi hipótesis. En un momento, su identidad cambió por complet~ y
seguida de una respuesta, la naturaleza de los géneros en cuestión está
Q. pasÓ de ser una hablante no nativa de inglés éxtranj~ra (au~qu~ hun­
determinada fuertemente por la especificidad del tipo de actividad y'
O su inserción institucional. El contexto particular de las representacio­ . gara era la opción más remota) a ser una habla~te na:Iva de mgles c~n
un origen reconocible (y posiblemente una resl~encl~)., Ahora podría·
O nes inusica1es organizadas y altamente institucionalizadas es tal que
formular la hipótesis de que ella probablemente Imagmo que nosotros
o "grandes canti'dades de personas, desconocidas entre sí, pueden confi­
. nars~en posiciones cercanas sin que se espere ningún tipo de interac­ éramos los hablantes de ese idioma ininteligible, el húngaro, y que,
e ción entre ellas aparte de una sonrisa amistosa (no necesaria). Si in- frustrada tras intentos anteriores de hacerse entender en inglés, había
e optado por expresiones de una naturaleza más simple. Esta interpréta­
8 PRAGMÁTICA.-9

ti
11
Dinámica La dinámica de la generación de significado interactivo 259

ción de repente cambió el estatus de su enunciado, después del hecho res habían creado una fuerte identidad de grupo frente a los fumado­
y cuando ya un intercambio basado en una interpretáción diferente res, y habían tenido éxito en la defensa de sus derechos y en sus pro­
había concluido satisfactoriamente. A lo que había sido previamente puestas en algunas áreas de. la vida social. Uno de los resultados fue
percibido como inglés fTagmentado, ahora se le púede conceder el que la mayoría de los restaurantes y cafés en la zona en cuestión ha­
estatus de «lengua usada con los extranjeros» [foreigner talk], dejan­ bían creado zonas de no fumadores. Al preguntar ¿Es ésta la de no
do, por supuesto, intactas todas las elecciones lingüísticas de (3) l. fitmadores?, el cliente (una mujer en este ejemplo) se identifica como
Esta anécdota, como muchas otras, muestra que dadas las circuns­ perteneciente al grupo de no fumadores y declara su intención de ha­
tancias adecuadas, es probable que la gente educada esté preparada cer uso del privilegio establecido de no ser molestada por los fumado­
para mutilar su idioma nativo con el fin de cumplir con tareas que res. Aunque sería posible para un fumador hacer la misma pregunta· ()
pertenecen al marco de significado de la actividad que se tiene entre con la intención de averiguar qué sección debe evitar, ésta sería cla­
manos. Claramente, esto es un tipo de adaptabilidad. ramente la opción marcada (en contraste con ¿Es ésta la de fumado­
res?, que es 10 que se esperaría que preguntase un fumador), y es la
5.4.2 El café de Berkeley razón por la que la camarera responde en base a la suposición de que
la pregunta señala la autoidentificaCión de la cliente como no fuma­
Veamos ahora otro ejemplo de un encuentro extremadamente dora. Puede suponerse' también que más de 'quince años después,
breve, con un intercambio estavezun poco más elaborado, que ilustra cuando las secciones de fumadores se volvieron «marcadas» en Cali- '
las dinámicas de comunicación de modo ..más claro que 10 que puede fomia, si no prohibidas, frente a las secciones de no fumadores (que,
parecer a primera vista. La esfera de actividad humana en la que se aún se veían como una innovación y por tanto un caso marcado en
sitúa el ejemplo es la de comer y beber, donde los tipos de géneros o 1981), los no fumadores supondrían que un lugar sería príncipalmente
juegos de lenguaje a los que pertenecen los enunciados. están fuerte­ de no fumadores, de modo que la pregunta perdería su rele~ancia
mente definidos por los roles de los que interactúan, uno que espera (mientras que ¿Es ésta la de fumadores? sería una pregunta más im­
un servicio y otro que 10 proporciona (y usa las estrategias que sean portante). Este es un caso de cambio de marcación basado en las con­
necesarias para que se perciba su servicio comó bueno). El ejemplo es diciones «materiales» producidas por el cambio social (análogo al ca­ ,~
v
el siguiente (y como en ejemplos anteriores la negrita indica énfasis): so de cambio demarca como resultado de cambios en el mundo fisico O
(4) [Situación: un café en Berkeley, .California, en 1981] revisado en la sección 3.2.4.). Proporciona además una ilustración de
1. Cliente a la camarera ¿Es ésta la de no fumadores? por qué los contextos histórico y local son cll1cÍales para una aproxi­
[entrando] : mación pragmática al significado.
2. Camarera: Puede usarla como de no fuma­ Volviendo al ejemplo que estamos analizando, aunque ¿Es ésta la

dores. de no fumadores? es básicamente una petición de informadón (con

3. Cliente [sentándose]: Gracias.


las implicaciones esbozadas con respecto a la identidad de grupo y a

la conciencia de los derechos de los grupos), no es repondida como

No hay manera de que esta conversación tenga sentido sin considerar


una pregunta. Las dinámicas ilocutivas del intercambio consisten en

el tiempo histórico y el lugar y la dinámica de las relaciones de grupo


el siguiente proceso: la pregunta original del cliente es transformada

a un macronivel. Cuando este intercambio tuvo lugar, los no fumado-


en una petición por la respuesta de la camarera yeso lleva al cliente

260 ' Dinámica La dinámica de la generación de significado interactivo 261

a agradecer que se le otorgue algo que en realidad no había pedido. Al saltarse todos los pasos intermedios la camarera transforma
Los siguientes fenómenos son característicos del proceso esbozado en inmediatamente la pregunta del cliente sobre la ubicación de la sec­
estos rudimentarios términos. ción de no fumadores en una petición de protección de los derechos
Con referencia al contexto de interacción social, se observa un de los no fumadores. Esta tr~sformación se consigue con una (suave)
alto grado de cooperatividad por parte de la camarera (donde «coope­ violación de las normas lingilisticas al nivel de la palabra subrayada
ración» ha de interpretarse como una propiedad general de la interac­ por medios prosódicos. La «violación» consiste en un uso un poco
ción humana que está tan normalmente ausente como presente, y no aberrante del verbo usar, de hecho una forma de sobreextensión se­
en los restringidos términos del príncipio de cooperación de Gríce, mántica. «Usar x como y» normalmente implica «acción» de cierto
que la presenta como un valor presente por defecto). La camarera po­ tipo, aunque en este ejemplo no está involucrado' ningún tipo de ac­
dría haber respondido simplemente en forma negativa como en (5), ción. De modo literal, Puede usarla como de no fumadores da al des­
una respuesta que ahora se da implícitamente. tinatario el permiso de no fumar en la mesa en la que se quiere sentar.
(Compárese con Puede usar este cuchillo pw'a no cortar). Obvia­
(5) No, no lo es.
mente, el enunciado no fue ni emitido con esa intención, ni interpre­
Esta ,respuesta, que habría dado. a la pregunta el tratamiento que se tado de ese modo porque no hay obligación de fumar incluso en una
merecía en su capacidad de pregunta, habría sido percibida por la sección de fumadores, y el dar permiso para no fumar no tiene senti­
cliente. como de mala educación 00 que la convierte en una opción do. El uso aberrante del verbo usar se pone de relieve por el énfasis
que no es posible estratégicamente), porque, sin modificación poste­ puesto en <<usar» en el enunciado. Es este aspecto de la prosodia del
. rior, no habría reconocido los derechos de los no fumadores implíci­ turno 10 que hace que la oración tenga la información implícita de que
tamente reivindicados en la pregunta, hecha obviamente para com­ el café aún no tiene establecida una distinción entre la sección de fu­
probar los hechos que determinarían dónde sentarse. Un grado en madores y la de no fumadores (lo que responde a la pregunta hecha
cierto modo más alto de cooperación habría dado lugar a una combi­ por la cliente en su primer turno). Sin duda, podría haber intervenido
nación de la respuesta negativa con una disculpa por parte de los due­ un cierto grado de ironía o incluso un suave sarcasmo, pero sin rom­
ños por no haber institucionalizado todavía los derechos de los no per la cooperación.· ,
fumadores, como en (6) o (7), siendo el segundo el más apologético Una objeción potencial a este análisis podría ser que, en inglés, el
de los dos. adjetivo participial non smoking no es equivalente a «not smoke­
ing 1». Estructuralmente no lo es, puesto que uno no puede reemplazar
. (6) Lo siento; todavía no tenemos una sección para no fumadores.
al otro: una non smoking section no se puede definir como una sec­
(7) Lo siento; aún no. hemos decidido dónde vamos a poner la sec­
ción de.no fumadores.
ción que no fuma. El sentido de actividad inherente en la construc­
ción verbal inglesa no se elimina por completo. Forma parte del modo
La camarera, sin embargo, va más allá. No solamente acepta la au­ adjetival y puede parafrasearse como «designado para clientes que no'
toid~ntificaciónde la cliente como no fumadora, y no solamente
aéepta el reconocimiento de los derechos de los no fumadores 00 que 1 El diálogo en inglés es: Cliente: Is this non-smoking?

está también implícito en (6) y (7)) sino que demuestra también su· Camarera: You can use it as non-smoking .

. deseo de tomar medidas para corregir su negligencia anterior. Cliente: Thank you. [Nota de las tt.]

262 Dinámica La dinámica de la generación de significado interactivo 263

fuman (o al menOs no lo hacen mientras estén en estas instalacfo­ El ejemplo es muy diferente de las estructuras de preguntas con
nes)>>; por otra parte, puesto que un non-smoking customer significa significado directivo real o potencial (como estudian Ervin-Tripp,
un «cliente que no fuma}), la inserción es necesaria solamente porla 1976, y Merritt, 1976, y según se presenta en el capítulo sobre la con­
naturaleza de la «sección» (al igual que la naturaleza de una «zona» versación en Levinson, 1983), muchas de las cuales danpor hecho el
necesita la transferencia de la cualidad «no llevar la parte de arriba» estado de pre-petición en la estructura de la conversación. Los pasos
• para (algunas) chicas en un topless district (<<zona de topless»». El infereneÍales que se necesitan para ir de ¿Tiene café para llevar?
sentido de actividad es, además, destacado por la combinación (enfa­ hasta la respuesta ¿Leche y azúcar? (que son los pasos implícitos en
tizada) con «USaD>. Sí, ¿ quiere uno? seguido de Sí, por favor) no tienen que ir más allá de
El ejemplo demuestra claramente los usos estratégicos de las pre­ suponer intenciones de petición expresadas convencionalmente por la
suposiciones. La presuposición sirve como un atajo para ahorrar tiem­ pregunta original del cliente. En otras palabras, en eSos ejemplos la
po; a la vez señala el grado de cooperación (es decir, la camarera pregunta es una petición en el momento del epunciado mientras que
omite el probleniarelacionado con la pregunta de la cliente y propone el mismo enunciado adquiere una forma que hace que sea posible
inmediatamente ,una solución), mientras que puede evitarla crítica cancelar la respuesta si no se satisface una condición contextual espe­
(que podría presentarse contra una afmnación explícita del hecho de cífica (que la cafetería tenga café). En este caso se combina una ex­
que el café aún no ha institucionalizado la sección de no fumadores). plicación directa en términos de significado intencional con aspectos
El- resultado final del intercambio~ señalado por Gracias es la de la dinámica conversacional. Por otro lado, ¿Es ésta la de no fuma­
aceptación de la cliente del enunciado de la camarera como un com­ dores? no es una petición para designar una sección de no fumadores,
promiso de mantener a los fumadores alejados de la cliente. La sec­ a no ser que uno suponga que el cliente es consciente. totalmente del
ción en la que se ha sentado la cliente ha sido así prácticamente decla­ hecho de que la respuesta es No, y que la precondición implícita de
I
rada como de no fumadores. Gracias, la expresión de agradecimiento que ya se ha designado una.sección de no fumadores no ha sido satis­
de la cliente al serIe concedida una petición que no fue hecha en un ·1
fecha. Así, en todos los casos en que ese supuesto no es válido, la pe- .
principio, también señala que la cliente tiene la expectativa de que la tición satisfecha por la camarera no es parte del significado intencio­ u
camarera manten.drá alejados a los fumadores. nal; es un elemento del significado «generado» efectivamente por la
Este fragmento de interácción dinámica genera claramente signi­ respuesta de la camarera y «aprobado» por la reacción de la cliente.
ficados que no están directamente relacionados con las intenciones Es por esto también por lo que no se puede hacer un análisis en tér­
del hablante (véase la sección 1.3). Al igual que en todo tipo de inte­ minos de actos de habla indlrectos. .
racción humana, interviene por supuesto la intencionalidad (en parti­ Este ejemplo también difiere de los aducidos p. ej. por Weiser
cular la intenció~ del cliente de asegurar espacio de no fumadores a (1974) en su acusación a la teoría de los actos de habla de ser muy (J
su alrededor y la intención de la camarera de complacer a la cliente), ·estática en su intento de tratar con la dinámica ·de la conv~rsación. O
pero no hay una conexión directa entre la intención ilocutiva original Weiser escribe sobre casos de ambigüedad deliberada en los que el Q
de la cliente y el significado que adquiere su enunciado como resulta­ estatus ilocutivo de un enunciado no queda determinado hasta una
do de las dinámicas sociales generadas por la respuesta de la camare­ etapa posterior de la interacción, pero en ei cual las diferentes posibi­
ra, y que más tarde acepta como una reinterpretación apropiada. lidades están· calculadas por adelantado por el hablante y están por
tanto directamente ligadas a las intenciones. Un ejemplo sería alguien
264 Dinámica La dinámica de la generación de significado interactivo 265

diciendo ¡He encontrado unas flores hermosísimas delante de mi .ción» reales. Nótese que esta explicación del contexto no debe, de
puerta! a alguien que puede haber sido o no quien las ha puesto. Este ningún modo, ser malinterpretada y entenderse como la recomenda­
enunciado tendrá el significado de una mera afirmación versus el de ción de prestar atención solamente a los detalles en un micronivel de
un acto de habla indirecto de agradecimiento, dependiendo de si el organización del discurso. Por el contrario, los detalles lingüísticos al
destinatario tuvo algo que ver o,no con las flores. De igual modo, micronivel deben ser vistos como puntos de anclaje 'que proporcionan
el intento de Stroud (1992) de ampliar la critica de los enfoques del sig­ apoyo heurístico para una metodología empírica viable. Para su inter­
nificado y la comunicación basados en la intención al análisis del in­ pretación, sin embargo, e incluso para la formulación de las cuestio­
tercambio de códigos se concentra principalmente en las formas (in­ nes de investigación, deben considerarse los fenómenos contextuales
tencionales) de ambigüedad, por 10 que en realidad no abandona los al macronivel. Considérese simplemente la referencia que tuvimos
análisis (como los de Gal, 1979, o Gumperz, 1982) a los que él mis­ que hacer a un tipo de dinámica de grupo para poner el ejemplo del
mo se refiere como demasiado orientados hacia el significado y la no fumar en un marco social de acción interpretable.
intención, aunque coloca el énfasis debido en la dinámica colectÍva de
generación y negociaci,ón del significado. 5.4.3 De Bruselas a Fránckfort
En resumen, (4) muestra que la dinámica de la comunicación, in­
La dinámica del uso del lenguaje en la comunIcación es tal que ni
cluso en los encuentros más breves, crea significado basándose en los
siquiera requiere un intercambio comunicativo para ver el cambio en
procesos para los cllales las intenciones individuales no son más im­
el significado que surge alrededor de un enunciado. Tomemos por
portantes que otroüngredientes del acontecimiento de habla. Quizá
ejemplo la oración (8) que fue enunciada por un piloto alemán de
se postuló un estricto enlace entre significado-intención para mante­
o ner la tarea de la descripciórr del significado manejable tras el descu­
Lufthansa tras disculparse por el retraso en una salida de Bruselas de­
bido a la intensa niebla en el aeropuerto de destino, Franckfort, y tras
O brimiento-de queha1;>ía más significado que el que se encontraba en la
anunciar que su vuelo había sido autorizado:
O forma lingüística (vease el problema planteado en la sección 0.5). El
situar al significado bajo la custodia del contexto ha podido parecer (8) Una vez en el aire, volaremos 10 más rápido pO,sible.
un poco arriesgado. En aproximaciones recientes al contexto y la
contextualización (véáse el capítulo 3), sin embargo, se ha demostra­ Aunque el enunciado se emitió con toda s.eríedad, causó algunas risi­
~.
do qUé éste es precisamente el prerrequisito para una metodología tas. entre los pasajeros. La intención del piloto era claramente la de
6J empírica en el estúdi~ del funcionamiento significativo del lengu'aje. asegurar a los pasajeros que iba a hacer todo lo posible para recuperar
El contexto no es manejable mientras se perciba como puramente ex­ el tiempo perdido o para asegurarse de' que llegaría a su destino antes
tralingüístico. Lo que sucede en la interacción es ia acumulación' gra­ de que las condiciones climáticas cambiaran de nuevo. La parte del
o dual de un contexto que es' específico del discurso, la calibración entre significado basada en la intención era transparente, pero, sin embar­
l"f:o
v la realidad <{exterior» y las necesidades comunicativas del momento, go, el enunciado hizo pensar en algo gracioso como p. ej. en el piloto
O y esto deja rastros lingüísticos (véase la sección 3.4 para la presenta­ de un avión haciendo carreras en el aire como los Mercedes o BMW
ción de este tema hecha anteriormente)~ Un recuento cuidadoso de en las autopistas alemanas (casi sin límite de velocidad). Este tipo de

.'•
estos rastros, tal como espero que se haya demostrado con el ejemplo imagen (que representa sólo uno de los posibles tipós de reacción), no
A.
V anterior, nos permite ofrecer una explicación de «actos de significa- . intencionada, fue, sin embargo, parte del significado de (8), al menos

e
f
¡
266 Dinámica La dinámica de la generación de significado interactivo 267

para algunos de los pasajeros que . sonreían. Pero, ¿cómo «surgió»? definición, debería quedar claro también que la torpeza es probable­
De modo muy simple, el enunciado pasó de un contexto de actividad mente la norma en la comunicación, más que la desviación, excepto
(primariamente mental, aunque también fisico), con su propio marco en las formas de intercambio altamente estandarizadas (como el len­
de interpretación, al siguiente. En el extremo de la producción, en la guaje de los controladores aéreos, aunqúe Cushing, 1994, demostró
cabina. del piloto, la velocidad es algo con lo que el piloto tiene que de modo convincente que incluso ahí los «errores» son innumera­
. tratar todo el tiempo (con límites tanto técnicos como regulatorios bles). .
que definen el ámbito dé 10 que es posible), mientras que el concepto También se puede argumentar que las risitas de los pasajeros re­
de velocidad en el aire no está basado en la experiencia de ningún pa­ asignan o reenmarcan el enunciado en el modo descrito por Goffman
sajero (permitiendo así una lectura diferente de lo más rápido posi­ (1976), como cuando ¿Tiene hora 2 ? Recibe respuestas como No, pe­
ble). De este modo, (8) puede enunciarse con total seriedad con un ro tengo el Newsweek o Sí, ¿y usted tiene ganas? Estas respuestas
significado inteñcional completamente transparente mientras que cho­ construyen de modo consciente un significado para la pregunta origi­
ca, aunque de modo suave, con un marco conceptual en el extremo de nal que claramente no fue intencionado, pero 'hay dos diferencias im­
la recepción, produciendo así un significado no intencional adicional portantes. La primera es que tales reinterpretaciones resultan del sig­
con un efecto humorístico. nificado intencional de·la respuesta verbal del interlocutor. En el caso
La pregunta interesante aquLes: ¿Qué es 10 que hace exactamep.te de (8) no hay tal respuesta, y la respu~sta no verbal (las risitas) resulta
que el significado adicional (más .allá de lo que se intenta) surja en la del significado adiCional no intencional, en lugar de producirlo (ex­
interacción entre un enunciado y el contexto de interpretación? Nor­ cepto, quizá, para un posible grupo de pasajeros más lentos para los
malmente no hay nada misterioso al respecto. Un test clásico de sus~ que el significado no intencional potencial no es activado hasta que
titución podría ayudar. Si el piloto hubiera elegido otra forma de ex­ oyen las risitas de los otros pasajeros). La segunda es que, hasta el O
presión como Una vez en el aire, trataremos de recuperar algo del extremo en que la reinterpretación interviene én las reacciones a (8), O
tiempo perdido o Una vez en el aire, intentaremos llegar a nuestro no es una cuestión de un marco relacionado con una actividad que C)
destino lo antes posible, es posible que no hubiera habido reacciones sustituye a otro: Más bien, el marco de actividad compartido de las '-­
de sorpresa, aunqúe están presentes las mismas implicaciones sobre la comunicaciones entre pilotos y pasajeros en las circunstancias de
velocidad. Esto sugiere que el potencial de la imagen que surge no retraso de un vuelo, que exige un breve mensaje para evitar preocu- ~i
intencionadamente ya estaba áhí en el enunciado, de modo más espe­ paciones, se conserva durante la interpretación. Pero las formas de Q
cífico en el modo en que se usó el término volar en combinación con expresión con las que se evoca este marco, en interacción con restric­
un agente humano y la descripción explícita (aunque potencialmente ciones contextuales específicas en la interpretación, dan lugar a que Q
ambigua) del modo de volar. Pero aunque el potencial estaba ahí, sólo surja un enlace asociativo con un marco adicional discrepante. 0
se podría haber ,actualizado en el proceso de recontextualización del é""¡
~)
extremo interpretativo. La conclusión podría ser que el piloto alemán
era un usuario torpe del idioma inglés, pero entonces la torpeza se ha­
Q
bríadefinido como la incapacidad de evitar formas de expresión que, @
en interacción con el contexto y los modelos de expectativa de la au­ 2En inglés la pregunta es Do you have the:time? Es literalmente¿tie~e el tiempo?,
donde la palabra Time es también el nombre de una popular revista, al igual que
e
diencia, permiten que suIjan significados no intencionados. Dada esta Newsweek. AqUÍ se está jugando con el doble significado de time. [Nota de las ~.l e
••,.
268 Dinámica La dinámica de la generación de significado interactivo 269
(9) 1. Secretaria: De aquí va a Lecco.
5.4.4 De Bellagio a Linate 2. N: Hmmm
3. Secretaria: NQ entre en Lecco, pero siga la 8836 a Milán ...
El último ejemplo en este capítulo pretende demostrar que la di­ autopista
námica de la generación de significado en interacción no tennina ne­ 4. N: [Mirando al mapa] ¿cómo la encuentro?
cesariamente cuando se ha completado un intercambio, aunque haya 5. Secretaria: [Tras buscar en el mapa y señalar con el dedo]
sido «satisfactoriamente». Un caso típico es el tipo de actividad in­ Tras el segundo túnel a la derecha. Primero es
volucrada en dar y recibir indicaciones en la carretera. Un día tuve una carretera pequeña, pero después verá se­
que conducir desde el Centro de estudios y conferencias de Bel1agio ñales.
al aeropuerto Linate de Milán (el que tiene Vuelos nacionales e inter­ 6. N: Muy bien, suena fácil.
7. Secretaria: Sabe, es Valmadera, Cincello Balsamo, Milán.
nacionales, no el gran aeropuerto internacional de Malpense). La se­
8. N: [Buscando en el mapa, que no es lo suficiente­
cretaria del centro había pedido al conductor del centro que le diera mente detallado] Lo encontraré.
las mejores instrucciones, porque él estaba más familiarizado con las 9. Secretaria: Siga por la Tangenziale Este.
condiciones (nonna1m:ente campiantes) de las carreteras. Ella había 10. N: [Señalando en el mapa la autopista al norte de
tomado algunas notas en un trozo de papel que usó para refrescar Su Milán] ¿Esta?
propia memoria mientras me daba las indicaciones necesarias. Intenté 11. Secretaria: Si, busca Forlanini... ese es el nombre del lugar
seguir susexplicaci~mes, tratando de interpretarlas én referencia á un donde está el aeropuerto.
mapa. Deb.eria estar 'daro ya que la comunkación, aunque nada ex­ 12. JV: Bien
13. Secretaria: La salida al aeropuerto está a su izquierda.
o traordinaria, era un poco compleja. La figura 5.1. es un intento de re­
presentación visual.

Además de los aspectos que normalmente se consideran parte_,del


El intercambio tuvo lugar como sigue:

contexto, la intertextualidad juega un papel especialmente importante


consulta: secretaria - conductor en este ejemplo. Las interconexiones entre la consulta al conductor
I (conductor == fuente l ) (que en la figura aparece como Fuente\ las notasde la secretaria, el
notas intercambio real durante el que se dan las indicaciones de la carretera,
:
el mapa (que se usa como punto de referencia pero que por sí mismo
indicaCiones de la carretera
o no es más que una representación de la realidad de las carreteras ita­
lianas), encaman una variedaq de pasos interpretativos. Estos pasos
~ culminan en mi intento de seguir las instrucciones para llevar a cabo
1----1-- secretaria N - - - - - t - - - - mapa
O la tarea de conducir desde Bellagio a Linate en un espacio de tiempo
O razonable, y llegar a tiempo de tomar el avión que quería tomar:
O
e
la realidad de las ,arr...J. italianas de Bellagio a Lim"
JV siguiendo las indicaciones
Quiero :ilustrar el proceso de generación de significado ~nvolucrado
concentrándome en el proceso interpretativo que seguí desde el· mo­
mento. en que empecé a conducir. En particular, demostraré cómo,
J!!!!"l.

~
Figura 5.1 Indicaciones de carretera.
aunque (9) fue, sin lugar a dudas, un intercambio completado (satís­
íff5':;
rei,1

••
270 Dinámica La dinámica de la generación de significado interactivo 271

factoriamente) para ese momento, la negociación del significado no pregunta que no se presentó en la conversación original con la secre­
se detuvo hasta que llegué a Milán, y algunos elementos son todavía taria antes de irme. ¿Pertenecía a un género puramente descriptivo,
hoy un misterio. que indicaba los diferentes lugares que iba a atravesar? ¿O era una
La parte fácil fue seguir las indicaciones de la línea (9)1., en parte instrucción en el sentido de que debía tener en mente Valmadrera y ,--~\

porque había tomado la carretera de Bellagio a Lecco antes, y en Cincello Balsamo para asegurarme de que iba por el camino correcto?
parte porque una vez seguidas las indicaciones iniciales, no hay más Simplemente siguiendo la carretera supe que l~ primera interpretación C)
que seguir la carretera correcta; si no, uno se pierde en las montañas o era la correcta. Así, el estatus pragmático del enunciado no se hizo \.. J
acaba en el lago. Sin embargo, c~ando traté de seguir las instruccio­ claro hasta mucho después del intercambio.
nes de (9)3. y (9)5. me perdí por unos instantes, fui por carreteras pe­ Si algo parecía claro y no ambiguo fue (9)9., así que seguí bus~
queñas y atravesé pueblecitos por más tiempo del necesario. Final­ cando señales que dijeran Tangenziale Este. Teniendo en cuenta que
mente vi señales que indicaban «Milán» y durante unos minutos se podía· haber pasado de largo una, si es que había una, traté de cen­
mantuvo la incerti~umbre de si iba a acabar en la «autopista» SS36 o trarme en algo que m~ llevara a Linate o, según la indicación (9)11.,
no, pero en última instancia lo hice. De todas formas, aunque mi mi­ Forlanini. Ninguna de las dos apareció o las pasé sin verlas .. Las úni­
sión hasta ese momento fue satisfactoria, estaba claro que no llevaba cas señales que vi decían Malpense y Aeroporti. El plural «Aeropor­
a cabo una tarea que consistía simplemente en uriir indicaciones y ac­ ti» me hizo dudar, pero puesto que señalaba hacia la misma dirección
ciones, sino que, en realidad, iba generando interpretaciones según que la que indicaba <<Malpense», que está bastante lejos de Milán y en
avanzaba. Lo que no funcionó en la conexión entre (9)3. y (9)5., ---e dirección opuesta a Linate, desde donde yo estaba en ese momento,
irónicamente, pero sin ironía, a lo que contesté suena fácil en (9)6.­ seguí avanzando. Pronto se hizo patente que había una mezcla inter­
y la realidad de la conducción, es algo que no seré capaz de decidir a textual entre las indicaciones y las señales de la carretera: me estaba
no ser que tenga la oportunidad de hacer todo de nuevo. Ahora sólo dirigiendo hacia el centro de Milán, en el momento en que me di
hay preguntas y (marginalmente) hipótesis. ¿Fue (9)5. simplemente cuenta de que me había pasado la entrada de la Tangenziale Este y o
demasiado ambicioso o impreciso? ¿Debía haber girado inmediata­ tuve que dar la vuelta. D.e nuevo en la carretera, era imposible pasarse O
mente tras el segundo túnel o quizá tras la primera gran intersección? las señales tanto para Tangenziale Este como para Linate. Una vez en ()
¿Me había equivocado ái contar los túneles? ¿Había perdido alguna la Tangenziale Este, Linate se indicaba sin ninguna ambigüedad du­
salida? ¿No había leído todas las señales? ¿Había surgido algún error rante todo el trayecto. No fue, sin embargo, hasta que llegué al aero­
o malentendido a lo largo de la consulta con la fuente 1 hasta las no­ puerto cuando vi una señal hacia Forlanini. En ese momento se acla­
tas de la secretaria. y la directa comunicación de las indicaciones que ró que (9)9. y (9) 11. debían interpretarse secuencialmente,' y que el Sí
me dio ella? ¿Había perdido yo parte de las indicaciones? Una explo­ en (9) 11. no era seguido por ninguna clarificación posterior -hipóte­
ración mental breve de algunas de las posibilidades, sin embargo, no sis a la· que llegué mientras buscaba la entrada a la· Tangenziale Es­
llevó a una renegociación del significado verdadera, por falta de datos te-, sino por una nueva indicación: primero entre en la autopista y
nuevos. después verá que está cerca del aeropuerto tan pronto como vea las
Había que conce~trarse ahora en 10 que venía. Ante (9)7., y pro­ señales pata Forlanini. Este hacer elecciones interpretativo terminó en ©
bablemente por la experiencia de las dificultades de (9)3. a (9)5., es­ el minuto justo, porque apenas tuve tiempo de movenne hacia la '¡z- ~ .
tuve dudando por un momento sobre el estatus de esa afirmación, una quierda para inne hacia la pequeña y difícil salida al aeropuerto .. · @l

••
c) _2_72_ _,________________________________________D_m_a_'m_ _ic_a La dinámica de la generación de significado interactivo 273

Mientras evitaba un accidente, (9)l3. se ganó el estatus dé adverten'"


cia seria.
, Del mismo modo que en los otros ejemplos, no hay nada de ex­
cepcional en éste. La generación de significado es simplemente un
proceso dinámico, lo más importante que hace la gente cuando usa el
lenguaje. Es interactivo, además, aunque no haya interacción visible;
y preserva ese estatus mucho después de que cese el intercambio de
palabras. De igual modo que con las indicaciones de carretera, la ma­
yoría de las conversaciones se repiten mentalmente una y otra vez,
incluso inconscientemente, para construir los significados múltiples
o que penetran en los discursos futuros. Esperamos haber demostrado

•• también que las interpretaciones dan de verdad significado a los


enunciados. En realidad, una vez emitido, ll!1 enunciado ya no está

O
.• bajo el control del enunciador: comienza a llevar una vida propia en
los mundos'mentales de otros (un fenómeno que ya se ha anticipado
en la sección 3.2:2).'

no
'
Aún hay más' lecciones que aprender de este ejercicio. Primero,
todo lo que pasa-en y con la conversación se p~ede grabar, pero,
O
sin embargo, todo es esencial para el entendimiento de cómo funcio­
O na. Los datos no grabados como los de (9) de arriba (escritos a partir
O de la memoria inmediata tras el intercambio, lo que les otorga un es-
O ,tatus comparable a las «notas de trabajo de campo») pueden ser muy
relevantes: el modo en que recordé la conversación fue probable­
mente más decisivo para su funcionamiento significativo que 10 que
«realmente» sucedió. Pero eso sólo cuenta si uno está interesado en el
lenguaje como forma de comportamiento y acción. Esto todavía nos
~,-S
V deja con el problema' metodológico no resuelto y nada trivial de la
<) «precisión» de los datos no grabados.
<:) Segundo, el ejercicio trata los procesos que forman la esencia de
toda la intertextualidad (véase la sección 3.3.2). Procesos similares a
O los descritos unen la consulta, las notas, el mapa y el intercambio en
@ la figura 5.1. Para dar cuenta de esas conexiones, además, se' deben
tomar" en serio las diferencias de idioma (italiano frente a inglés) en

"e que, los tipos de actividad precedentes debieron tener lugar. Esto pue­
Ilustraci6n 5.1 Posavasos

(© Guinness Limlted 1997, Todos los derechos reservados)

•"
~~~----~~---~~------------ -----------------~-----~---------~-_ - _..__..
...

274 Dinámica Temas de 275

[«NO ERA EL TIPO DE NIEVE CORR.ECTO» La dinámica incluye:


Trenes británicos • El ámbito infinitamente variable de los géneros de habla o los
No todo lo que está en blanco y negro tiene sentido. GUINNESS juegos de lenguaje que constituyen 10 substancial de las activi­
dades «interpretadas», tanto las actividades del discurso como
«ESTAMOS LLEGANDO» los acontecimieT}tos del habla, que proporcionan marcos de
Trenes británicos significado para la negociación de las interpretaciones. ,. ......
· }
• El empleo de estrategias de uso del lenguaj e que explotan la
No todo lo que está en blanco y negro tiene sentido. GUlNNESS
interacción entre 10 explícito y 10 implícito en la generación de
significado.
«SE DEBEN BEBER AL ME."lOS 3 PINTAS DE AGUA AL DÍAl)

Dr. J. L. Husselby Se dieron cuatro ejemplos breves para ilustrar cómo puede describirse
No todo lo que está en blanco y negro tiene sentido. GUINNBSS] la generación dinámica de significado sin hacer concesiones sobre la
gama de fenómenos que deben entrar en el análisis, siempre y cuando
de revelar algunas características relacionadas con el lenguaje que son se mantenga empírico el análisis.
significativas para lo que pasa en (9). Ampliando el análisis a la di­
rec,ción opuesta, dentro de una conversación tienen lugar procesos En la dinámica del uso de11enguaje en general: Kurzon (1986),
comparables, aunq-ile hay menos diferencia de. tiempo y más oportu­ Markova y Foppa (eds.) (1990), Martín Rojo (1994), Verschueren
nidad para comprobar y corregir. Se puede mirar los tumos de la con­ (1981). Sobre la naturaleza colaboracionista de la generación de sig­
versación como «textos» y considerar lo que ocurre al moverse por nificado: Schegloff (1990). Sobre las actividades, acontecimientos y
los tumos como la generación dinámica de conexiones intertextuales. marcos del significado: Bajtin (1981), Briggs y Bauman (1992), .
Goffrnan (1974), Gumperz (1982 y 1996), Hanks (1995), Hymes .
(1962), Levinson (1992b), Winch (1958), Wittgenstein (1958). Una
interesante y exitosa presentación de un acontecimiento· comunicati­
5.5 RESUMEN Y LECTURAS RECOMENDADAS
vo, en este caso de un tipo de fabricación de discursos politicos, pue­
de ~ncontrarse en Duranti (1994).
La tarea central del análisis pragmático es dar cuenta de la diná­
mica de la generación de significado. Esta dinámica puede «situarse»
en relación con: 5.6 TEMAS DE INVESTIGACIÓN

• La dimensión temporal del uso del lenguaje (proporcionando


su material en bruto). 1. Para aprender más de la dinámica de la generación de signifi­
• Otras dimensiones contextuales, como las relaciones sociales. ©
•e
cado, es un ejercicio útil tomar al azar Uf). análisis pragmático
• Las propiedades estructurales deLdiscurso. (por ejemplo un artículo del Journal 01 Pragmatics) y pregun­
tarse sistemáticamente hasta qué punto el autor tiene éxito en

••
A
T'
I

276 Dinámica I
presentar los procesos de la vida real en vez de un retrato abs­ !!
tracto estático. ' 1
&,'
~ 2. Grabar un extracto de una conversación ordinaria en un esce­
nario de su elección. Haga una simple transcripción (siguiendo
sus propias intuiciones o consultando p. ej. a Gumperz y Be­
I
renz, 1993) y describa la dinámica de la generación de signifi­ I
I,
I
cado que interviene.
3. Los posavasos con anuncios pueden parecer objetos estáticos. 6
Describa la dinámica en los tres ejemplos de la Ilustración 5.1. SALIENCIA

o En este capítulo tenemos que definir el cuarto ángulo de investi­


@ gación que necesitamos, en combinación con los otros tres tratados en

•o los capítulos 3, 4 Y 5, para enfocar en forma coherente los aspectos


del uso dél' lenguaje desde una perspectiva pragmática. Dicho' sim­
plemente: si la discusión de los correlatos contextuales y objetos es­
tructurides nos dice ,qué es adaptable a qué, y el estudio de la dinámi­
o ca muestra los procesos que intervienen, nos queda pendiente todavía
la cuestión de cómo funciona realmente el procesamiento. Todos los
aspectos del uso del lenguaje (dinámicos), que se púeden describir en
i\
términos de elecciones identificables estructuralmente. y propiedades
V e influencias contextuales, requieren un procesamiento en un medio
o de adaptabilidad, es decir, el medio en el que las personas usan el
o lenguaje de una manera variable, negociable y adaptable. El término
general que usamos para designar el estatus de los procesos de gene­
o ración de significado en relación con el medio de adaptabilidad, es
@ decir, su estatus tal y como se determina por las características y los
o mecanismos del procesamiento, es saliencia (término originalmente
o inspirado pór el uso de Errington en 1988, pero adaptado a nuestras
necesidades). Esta expresión da a entender que no todo 10 que ocurre
@

•e, en el comportamiento lingüístico ocupa el mismo lugar en la concien­


cia y al mismo tiempo indica que la conciencia también participa.



278 Saliencia Mente en sociedad 279

Este capítulo se organiza de la siguiente manera. En primer lugar sociales compartidas (algunas veces de naturaleza institucio­

se caracteriza el medio de adaptabilidad que ya hemos denominado nal) para ser negociables.

«mente en sociedad» (sección 6.1).- Después (en la sección -6.2) se • La organización de la preferencia en la conversación no es so­
identificarán algunos de los fenómenos mentales más visibles en el lamente un «hecho» del comportamiento verbal; se basa en
funcionamiento significativo del lenguaje: percepción y representa­ gran medida en modelos de expectación producidos tanto por
ción, planificación y memoria. Posteriormente (en la sección 6.3) nos ­ la experiencia personal como socialmente, que están conecta-_
concentraremos en varios mo,dos de procesamiento o grados de sa­ dos a los tipos de desiderata afectivos que también guían la ne­
()
liencia; se estudiará el papel de diferentes niveles de conciencia. Fi­ cesidad de deferencia y cortesía (reforzando así la conexión

nalmente (en la sección 6.4) nos concentraremos en un aspecto espe­ generalmente aceptada entre emoción y cognición).
\ ....: ./
cífico de la saliencia: la conciencia metapragmática que conlleva • La intencionalidad está obviamente basada en la cognición. El
cualquier forma de uso del lenguaje. argumento contra el énfasis exclusivo en la intencionalidad in­
o
dividual se inspiró en gran medida en la observación que guía O
este capítulo, a saber, que los fenómenos cognitivos obtienen
6.1 MENTE EN SOCIEDAD gran parte de su significado y poder operativo del nivel organi­
zativo de la sociedad.
• Hacer elecciones lingüísticas, nuestra identificación básica del
Junto con Vigotsky, de cuyo trabajo en psicología evolutiva se
tema de investigación de la pragmática, es por supuesto una
toma prestada la algo torpe' expresión <anente en sociedad», estoy
operación mental, pero está situada necesariamente en un con­
completamente convencido de que cualquier teoría pragmática seria
texto. De igual modo, no tiene sentido hablar sobre variabili­ )
debe rechazar una oposición rígida entre sociedad y cognición. Para
dad, negociabilidad y adaptabilidad (los conceptos que dan
ejemplificar esta idea nos bastará una visión de conjunto, ya utilizada
significado al hacer elecciones) sin suponer procesos cogniti­
en este libro, de ninguna manera completa, de las nociones cognitivas
o relacionadas con la cognición. vos que pueden manejar de manera flexible principios y estra­ o
tegias aprobados socialmente. - <}
• Incluso un fenómeno tradicional de la pragmática como la deí­ mundo mental completo (con creencias, emociones, deseos' O
xis no se puede entender sin suponer que un aparato cognitivo e intenciones), inseparable de lo social y 10 físico, forma parte.
identifica puntos de referencia al tratar de hacer frente a la de los posibles correlatos contextuales de la adaptabilidad.­
«realidad» exterior (hasta cierto punto significativa en el senti­ • Las voces del enunciador y los papeles del intérprete se cons­ ,0
do en que se «define socialmente)), lo que ya implica una mul­ truyen mentalmente y se aprueban socialmente. Q
titud de operaciones mentales cuyo producto es compartido por • Las sociedades mismas, especialmente c;uando se las define ()
un grupo de personas lo suficientemente numeroso como para culturalmente, y las instituciones se corresponden con las cate­
convertirse en una de las bases para la interacción). gorizaciones y las imponen.
• Los significados indirectos y explíCitos no tendrían función al­ • La existencia de-lengua, códigos y estilos depende más de l,as @
guna en la comunicación si no existieran para activarlos proce­ percepciones de diferencia y coherencia que de sus propieda-. ~
sos de inferencia (operaciones mentales) basados eri normas e
.,.
el
280 . Saliencia Percepción y representación, planificación y memoria 281

des «objetivas». Esas percepciones son guiadas significativa­ veces cognitivamente producidos). A la inversa, la cognición abs­
mente por normas sociales establecidas. tracta sin ninguna fijación social no existe. En otras palabras, el me·
• El significado léxico está estructurado, tanto en términos de dio de adaptabilidad muestra una naturaleza dual no dicotómica. Su
estructura semántica interna como en términos de relaciones dualidad es presentada por los términos aproximados mente y socie­
semánticas entre palabras, sobre una base de principios cogni­ dad. La expresión mente en sociedad hace destacar la no-dicotomía.
tivos que interactúan con la «realidad» extralingüística. Además de los fenomenos mencionados anteriormente, tanto la
• La gramática no tiene una vida independiente. Por un lado, se dualidad como la no dicotomía del medio de adaptabilidad son clara­
manifiesta sólo en la estructura de los enunciados socialmente mente evidentes en la adquisición del lenguaje, la activación inte­
o «acordados), es decir, una estructura que no viola abierta­ ractiva, y por tanto social, y la adquisición de las destrezas cognitivas
mente las expectaciones. de la mayoria de miembros de una necesarias para usar el lenguaje para la generación del significado. Lo
comunidad de habla. Por otro lado, está llena de fenómenos mismo se aplica para la culturización y la socialización relacionadas
o gobernados por restricciones cognitivas .. con el lenguaje, la incorporación de normas y expectativas de com­
• La estructura de los enunciados y los grupos de enunciados portamiento, lingüísticas y no lingüísticas, predominantes en una co­
(más allá de 10 que es producto de la «gramática» en el signifi­ munidad (una «comunidad»~ como se dijo antes, es también siempre


O
, cado estricto de la palabra) se inspira en gran medida en lo que
los interlocutores imaginan sobre la representación mental del
. mundo delotre.
el producto de complejas formas de interacción entre prácticas socia­
les y procesos de categorización).

O • Los tipos de actividades de habla y los tipos de acontecimien­


() tos de habla se basan en el comportamiento y por 10 tanto en la 6.2 PERCEPCIÓN Y REPRESENTACIÓN, PLANIFICACIÓN Y MEMORIA
'sociedad. Aún así, su importancia se halla en los marcos de
O
significado que ofrecen para los géneros y juegos de lenguaje.
O Los marcos mísmos.son meros productos de la organizaci6n de El <<trabajo» mental que interviene de modo más visible en el uso
O la experiencia cognitiva y conceptual (como sugiere el subti­
del lenguaje se puede tratar bajo tres etiquetas: percepción y repre­
tulo de Goffman, 1974). O, para citar aVigotsky, la aparición
sentación (sección 6.2.l),planificación (en 6.2.2) y memoria (sección
de actividades del habla, es decir, laconvergencia de actividad
6.2.3). Antes de entrar en cada uno de estos temas se debe señalar que
, de habla y actividad práctica, es «el momento más significati­
los procesos en cuestión (incluyendo la percepción y representación)
vo en ,el . curso del desarrollo intelectual, del cual nacen las
operan tanto en el «objeto» de la comunicación verbal (a veces no
o formas puramente humanas de inteligencia práctica y abstrac­ lingüístico) como en el lenguaje y en el uso del lenguaje, a veces si­
O ta» (1978,24). ' multáneamente. Las implicaciones de este hecho quedarán claras con
Q las siguientes breves explicaciones.
\) En resumen, sean cuales sean los correlatos sociales del lenguaje,
siempre se procesan cognitivamente para tener alguna influencia en el 6.2.1 Percepción y representación
e comportamiento lingüístico. Más aún, esos factores sociales no. exis­ La metáfora de las «líneas de visiÓn)) que se usó para describir el
e ten sin ser interpretados, o sea, cognitivamente proce~ados (algunas modo en que los elementos de los mundos sociales, mentales y fisicos
(1

.,
~

282 Percepción y representación, planificación y memoria 283


.!;,

se activan en el lenguaje como correlatos contextuales de la adaptabi­ nivel cognitivamente básico. Ninguno de ellos es absolutamente fijo
lidad (véase la sección 3.1) cubre la mayoría de aspectos a tratar so­ ni necesariamente idéntico para todos los usuarios de la misma lengua
bre el papel de la percepción y representación. Para tener alguna cosa ni para los mismos usuarios en momentos diferentes y bajo diferentes
de la que hablar tenemos que percibir ciertas «realidades» (hacernos circunstancias. Sin embargo, una vez las categorías están establecidas
conscientes de ellas, ya sea a través de la percepción visual o de algu­ no llevan una vida inocente. No sólo p~eden variar y cambiar, sino
na otra forma). Sin embargo, es necesario que esas percepciones ten­ que,en la medida en que muestran alguna estabilidad, guían el input
gan sentido; en otras palabras, es necesario representar 10 que se de 10 que se percibe así como el output comunicativo, es decir, la ma­
percibe d~ modo que sea interpretable y se pueda usar para objetivos yor parte de 10 que interviene en la generación de sigriificado. En lo
comunicativos.' . , que respecta al input de percepciones, cuando se visualiza un entorno,
Estas dos actividades mentales son inseparables. Consideremos el las categorías habituales que tenernos a nuestro alcance, influirán
modo en que se percibe él lenguaje mismo. Los sonidos del habla no fuertemente en 10 que se ,ve o 10 que se 'encuentra interesante (o 10 su·
se oyen como la continua corriente de aire qUe es su sustancia fisica, flcientemente interesante como para decir algo). Esto es válido tanto
o en términos de sus propiedades acústicas o articulatorias sino en
T • ,
para los entornos sociales y mentales como para el entorno fisico.
tenrunos de cómo el conocimiento lingüístico de los usuarios del len­ Goma consecuencia, será dificil (literalmente; en el sentido en que 'se
guaje representa el estímulo auditivo nercibido en relación con un necesitará más esfuerzo comunicativo) hac~r un comentario ~obre un
sistema funcional de contrastes. Esto J;s permite identificar segmen­ tono de rojo que corresponde al color de un cierto tipo de pájaro a
tos fonéticos (véase la sección 0.1, donde esto se presenta como la
base para la distinción' entre fonética y fonotogía), morfemas, pala­
menos que tengamos Un concepto lexicalizado que sea adecuado; aún
así debemos recordar que hacer un comentario no es nunca imposible
o
bras y finalmente oraciones y demás. Los mecanismos representacio­ y que se pueden crear nuevas herramientas conceptuales cuando es
na1es interfieren con la, percepción «pura» de una manera tal, que, necesario. De igual modo, describir una mezcla de enfado y tristeza
()
como han demostrado los experimentos, segmentos de sonido separa­ sería más fácil si se tuviera al alcance un término que incorporara el ()
dos de un fragmento ,de habla (incluso cuando se corresponden preci­ significado de ambos enfado y tristeza. O hablar sobre el espectro . O
samente con una palabra,por ejemplo), son con frecuencia irrecono­ político sería diferente si no se apli'caran habitualmente las nociones
cibles de manera aislada pero perfectamente entendidos en contexto. de derecha e izquierda. De hecho, en parte por la disponibilidad va­
No obstante, ,de la misma manera que los patrones de representación riable de herramientas conceptuales habitUales, ¡as personas difieren
pueden ayudar a la percepción, pueden también producir malas inter­ mucho en los grados d~ refinamiento en la percepción de lo que
pretaciones. sienten o piensan ,(y en cómo hablan de ello), en niveles de sofistic.a~
En relación a, la realidad no verbal que participa en el contenido ción para considerar lo que ocurre en el mundo político y social (yen
comunicativo ocurren fenómenos similares. Uno de los procesos re­ cómo hablan de ello); y también en la precisión con la, que <observan
presentacionales básicos que interactúan con la percepción; a la cual (y comentan) los alrededores fisicos.
ya se ha dedicado alguna atención en observaciones anteriores sobre Eh 10 que respecta de manera más directa al output comunicativo ,
si~ifica~o léxico (véase la sección 4.2.2), es el 'proceso de categori­ y usando la última oración del párrafo anterior como ejemplo de~ te­
zaClOn. Este produce contenidos semánticos organizados alrededor de '
prototipos y' campos léxicos que están estructurados alrededor de un
ma, los términos evaluadores (<<refmarniento», «sofisticación», «pre­
Cisión.») implican la asunción de una jerarquía en~e los sistemas de •e
284 Saliencia Percepción y representación, planificación y memoria 285
,~
\;JI
categorización. La rápida disponibilidad que tenemos de esos tres tiempo, pasar tiempo y dar a alguien algunos minutos. De la misma
IS ,conceptos, que al mismo tiempo pueden mostrar una inclinación

•.,
forma atacar, defender, arruinar un argumento coloca la argumenta­
normativa subyacente (más o menos científica en el caso de «preci~ ción en el cuadro de la guerra verbal. Ahora existe mucha literatura
, sión», intelectual y política en el caso de «sofisticación» e intelectual sobre estos fenómenos .

• y ética en el caso de «refmamiento»), nos tienta a clasificar los siste­


mas de categorización. Sin embargo, escribiendo para un público con
Algunos mecanismos representacionales a la par' con la categori­
zación (aunque a veces intervengan en la categorización, a veces del

" el qúe comparto presumiblemente una desconfianza por las categori­


zaciones absolutas, especialmente cuando son evaluadoras, y dispo­
niendo de acceso rápido al concepto de «evaluaciów>, puedo hacer
este metacomentario para relativizar mi propia afirmación más radi­
tipo de la metaforización) merecen mención' especial: procesos de
asociación, abstracción, generalización y cosificación. Un proceso
de asociación, el enlace conceptual de nociones que de otro modo son
o caL Lo que sucede en este nivel abstracto es más fácil de ver con fe­
distantes, interviene en la construcción e interpretación de conceptos
como arquitectura paisajística o instalación artística. Describir los

.•
nómenos más tangibles (recuérdense los ejemplos de la sección
4.2.2).
Entre los mecanismos de categorización, la metaforización es uno

de los más influyel)tes. Este proceso consiste en ampliar lá posibili­

dad de a¡:Hicación d~ un término, usado en ciertos ámbitos de la expe­

movimientos aparentemente caprichosos de un jugador de rutbol co­


mo táctica requiere abstracción, es decir, la transformación de 10 que
es observable fisicamente en una dimensión más alta de conceptuali­
zación.. Generalización (el acto mental de conceder validez general a
hechos específicos)~ en combinación con abstracción, es lo 'que hay
O riencia relativamerlte concretos" para emplearlo en un ámbito dife­
cuando los acontecimientos en América en 1776, en Francia en 1789,
O rente. Ya se ha señalado el modo en que la referencia espacial'
en Rusia en 1917 y en Irán en 1978-9 son todos denominados revolu­
O establece las bases para metáforas estándares en numerosas áreas de
ciones. Y la cosificación, o convertir algo abstracto en un, objeto, se
experiencia (véase la sección 3.2.4): desde formas relativamente consigue cuando se da la forma plural culturas· (o lenguajes) ..
transparentes de transferencia de significado como en la cumbre, el Todos estos procesos no son s610 características de la generación
final del túnel, a formas como las de uso político, derecha e izquier­ de significado al nivel léxico, sino que funcionan visiplernente en el
da, c'on una motivación menos clara. Otros ejemplos se encuentran en discurso natural y no están restringidos al uso espontáneo cotidiano.
las variadas maneras en las que partes del cuerpo humano aparecen en Para demostrarlo, observemos el ejemplo (1).
campos como el de los fenómenos naturales sin ninguna relación con
(1) (a) ¿Arqueólogos que no excavan?'(b) Seguramente es una he­
el cuerpo humano (brazo de mar, pie de la montaña, boca de un río),
o una variedad de artefactos (manillas de un reloj, cola de un avión,
rejía. (e) Sin embargo, las encuestas son prácticas arqueológicas
bien establecidas. (d) Los antropólogos americanos que trabajan
O brazos de un sillón) e incluso posiciones sociales (el cabeza de fami­ en el sudoeste de los EE.UU. y Mesoamérica refinaron la técni­
G lia). Lo interesante es que estas no son elecciones al azar sino que ca en los años 60 y 70. Ce) Posterionnente los arqueólogos bri­

•• forman parte de sistemas, algunas veces elaborados, que favorecen


maneras específicas de ver ciertos aspectos de la realidad (aunque
esos, mismos sistemas puedan ser producidos por estas maneras). Por
tánicos adoptaron la costumbre del Nuevo Mundo, y la hicieron '
casar con teorías modernistas francesas de la historia de la vida
«diaria» para referirse a problemas del Viejo Continente [The

O• esta razón el tiempo tiende a ser tratado como un artículo de consu­


m9, como queda claro en expresiones como ahorrar tiempo, perder
Sciences, mayo/junio de 1997, 12].

•.'
286 Saliencia Percepción y representación, planificación y memoria 287
Este texto refleja una representación de una realidad percibida de la
sólo con el signifIcado de prestar atención especial (véase la sección
práctica científica que. hace uso de todas las herramientas mentales
3.3.2) o como realce temático (véase 4.4.1). Tales proceSos no se
mencionadas hasta ahora. En primer lugar, se identifica una categoría
pueden ignorar en este contexto. Pero hay un modo fundamental en el
. de investigadores, llamada arqueólogos, una de cuyas propiedades cual los procesos que pueden llamarse «enfatizadores» contribuyen a
prototípicas (el hecho de que él o ella excave) se cuestiona en (l)a. la naturaleza de la representación y, como consecuencia, también a la
Este cuestionamÍento en sí mismo es conceptualizado reflexivamente de la percepción. El proceso en cuestión tiene un papel en todas las
de manera inmediata en términos de una categoría que establece una categorizaciones e identificaciones. Tomando la comparación de Go- "
asociación entre los mundos de la investigación académica y la reli~ odwin (1994), especialmente apropiada en relación con el ejemplo
gión: herejía en (1 )b. En lugar de identificar a los investigadores es~ (1), es sufIciente que un arqueólogo traée una línea alrededor de un
pecíficos implicados, se manejan dos grupos de «arqueólogos» como trozo de barro que es de un color o una textura ligeramente diferentes
categorías generales: antropólogos americanos en (1 )d. (refIriéndose para que otro arque6logo 10 considere los restos de un poste de made­
obviamente a un~ subcategoría de «antropólogos americanos»,· los ra. De igual modo, la manera en que un fragmento de texto como (1) ,,.."'
\~ .}

que llevan a cabo trabajo arqueológico) y antropólogos británicos en divide el campo de la arqueología podría hacer olvidar una amplia
(l)e. El tema, un método arqueológico específico, se mueve a través gama de preguntas referentes al «campo perceptivo» en cuestión:.
del espacio de representación desde la forma relativamente concreta ¿qué ocurre con los antropólogos americanos que no se consid.eran
encuestas a la categorización más abstracta una práctica arqueológi­ arqueólogos, si es que hay alguno? ¿qué pasa con los qué no están .
de
ca bien establecida en (l)c., vuelta el la más concreta técnica (sufi~ trabajando en el sudoeste de los Estados Unidos ni Mesoamérica? ()
cientemente tangible como para serrefmada) en (1)d. y hacia la más ¿Hubo consenso completo sobre las encuestas como práctica arqueo­ . r' ':

general y abstracta la costumbre del Nuevo Mundo en (1)e., la cual,


sin embargo, es sufIcientemente cosificada como para ser adoptada y ."
lógica? Si nó fue así ¿cuáles fueron los aspectos coirllictivos?¿Qué
hay de los arqueólogos europeosfuera de Gran Bretaña? O conside"
u

hecha casar con las teorías modernistas francesas. 'Además de los remos el efecto de describir el mismo acontecim~ento histérico como O

procesos ya nombrados,.el ejemplo(l) muestra hasta qué punto la re­ la reunificación de Alemania en lugar de la unificación de las dos O

presentación depende del establecimiento d"e contrastes: excavación Alemanias. Incluso los actos más simples de referencia, por el énfasis
versus encuestas; arqueólogos americanos versus británicos; Nuevo que implican, hacen algo más "que ~(COpiaD> lo que está «ahí afuerID>.
Mundo versus Viejo Continente; costumbres versus teorías·. Lo que se Debe quedar claro que.una mirada pragmática no comprometedo­
observa es la manifestación de un conflicto en curso sobre la per­ ra al modo en que funciona .el1enguaje, tomando seriamente la «men­
cepción. y representación de un episodio de la vida académica. El te en sociedad» como medio. de la adaptabilidad, pide la adhesión a
ejemplo muestra que en el discurso real, incluso cuando no se trata algún tipo de principio de relatividad lingüística. Hay por supuesto
claramente de "interacción directa, la representación emerge como ac­ una conexión entre los hábitos de hablar y los hábitos de pensar, aun­
tividad negociable on-line. que no se pueda mantener de ningún modo que uno determina com­
En otras palabras, todo uso del lenguaje activa proyecciones del pletamente el otro; En comparación con la versión '!-tribuida a Sapir y
espacio semántico. El output comunicativo, como en (1), implica ac­ Whor! (pero con· rafces en el romanticismo alemán, "el trabajo de
tos de referencia (tratados anteriormente en la sección 4.2.4) y un Wilhelm van Humboldt y el estructuralismo saussuriano) un principio.
grado importante de enfatización. Hasta ahora el énfasis ha aparecido de relatividad lingüística inspirado pragmáticamente no se centra ex­

-.

" .

"1·"
o
)

288 Saliencia Percepción y representación, planificación y memoria 289


o
•,.
clusivamente en el papel de las categorías gramaticales y léxicas co­ conductor; pidió indicaciones al conductor y durante esa conversa­
mo intemalizadas por miembros individuales de una sociedad, sino ción tomó notas que guiaron las indicaciones que me dfo a mí. Pero
también en el modo en que éstas funcionan en contextos reales de imaginemos tener que dar indicaciones impromptu. En una situación

~
•• uso, en un micro nivel de interacción (véase el Capítulo 7) y también
.en un macro-nivel social (véase el Capítulo 8). El hecho de que estas
categorías «se pongan en funcionamiento» -y aquí un verdadero
como esa, la planificación y la ejecución de los planes se desarrollan
virtualmente de manera simultánea. Sin embargo, todavía se puede
hablar de «planificación». La razón es que la búsqueda improvisada
~ principio de relatividad lingüística contrasta netamente con versiones de las estrategias más apropiadas para capacitar al destinatario a en­
o ,determinístas posteriores de 10 que se denomina la hipótesis de Sapir
y Whorf-- significa que su papel es en sí mismo relativo porque es
contrar su camino basándose en 'output verbal usa guiones', es decir,
representaciones mentales (en el sentido considerado en 6.2.1) de ti­
@

.,
o variable, negociable y adaptable. Pero esto hace el fenÓmeno mucho
más interesante. Situando así la relatividad en el ámbito de una acti­
tud relativista, se elimina cualquier conflicto potencial entre la relati­
pos de actividad o acontecimientos (como se vio en 5.2). En el ejem­
plo de las indicaciones de carretera, el guión que rodea la tarea de en­
contrar la ruta en un sistema de carreteras y ayudar a alguien a lograr

•• vidad y la existencia deun grado de universalidad en el lenguaje y en


el uso del lenguaje (un conflicto que se deriva directamente de algu:­
esa tarea contiene puntos de salida y llegada, tipos de carretera, giros
a la derecha y a la izquierda, señales de tráfico, señales a 10 largo de


6
O
nas visiones completamente particularistas de la relatividad lingüísti­
ca) (véase también la sección 2.3).

6.2.2 Planificación
la carretera, nombres de lugares, etc. En la mayoría de las formas de
interacción espontánea, éste es el tipo de planificación que encontra­
mos(que tiene como resultado falsos comienzos, pausas, vacilaciones
y la necesidad de reparaciones; véase la sección 1.1.4) aunque los
guiones a seguir no son siempre igualmente claros..
O Un segundo tipo de actividad mental que .interviene en ~l uso del
En segundo lugar, en la_medida en que la planificación interviené
O lenguaje se puede poner bajo el rótulo de planificación. Se puede'
en el comportamiento del énunciador, ésta se relaciona con la inten­
usar el término para referirse a cualquier influencia de cualquier tipo
O ción o el objetivo, aunque no siempre con el mismo nivel de con­
de «mirada hacia el futuro» en aspectos del comportamiento verbal.
() ciencia. Pero de la misma manera en que se afirmó que el significado
Entran en juego multitud de fenómenos.
O en general no puede reducirse a la intencionalidad (véase la sección
En primer lugar, aunque parece existir una relación temporal entre
1.3), la planificación no sólo interviene en el comportamiento del
. las actividades de.p!anificación y su producto verbal (que hace de la
enunciador que se relaciona con la intención; también la tnterpreta­
"
(.J planificación un factor que contribuye de manera importante a la di­
ción supone planificación. Los procesos de interpretación están guia­
námica del uso del lenguaje; véase la sección 5.l.}), la planificación
O no está de ningún modo restringida a operaciones mentales que se dos en parte por expectaciones y la anticipación de planes de habla
@ llevan a cabo por adelantado. Consideremos las indicaCiones de ca­ basados en un conocimiento de los guiones. Cuando se lee (1), por.
e rretera que se comentaron en el capítulo anteríor (sección 5.4.4). En
ejemplo, se espera una explicación de la «técnica arqueológica de la
encuesta», así como una justificación de los «problemas del Viejo
.,
~
w ese caso la conversación estaba precedida por un cuidadoso estado de
planificación: yo había informado a la secretaria de que tendría que
encontrar el camino hacia Linate; ella había prometido preguntar al
Continente» a los que se aplica, con una indicación de cómo ambos se
relacionan y los resultados que se espera obtener. Mí aprobación o
o desaprobación del artículo del cual fue extraído será en parte en fun-

ce ',­ PRAOMÁTIC". -10


. 1'·. ·

, .

,
290 Saliencia Percepción y representación, planificación y memoria 291

ción de en qué medida se cumplen estas expectaciones relacion~d~ do , entremezclado con fragmentos esporádicos de memoria literal..,
con guiones. En el curso de la interacción cara a ~ara, pro~esos SUlli­ Esta manera de usar la memoria en el transcurso de la interacclOn se
lares permiten la posibilidad de continua retroahmentaclOn, lo. que activa incluso dentro de los límites de una conversación más larga o
conduce a ajustes de la planificación del lado del (otro) enunclador al leer un texto de más. de unos pocos párrafos. Esto significa que la'
(en el caso de que se trate de un intercambio de información). En el memoria es interpretativa (no sólo, obviamente, con respecto a com­
caso de las conversaciones más habituales, el resultado es un com­ portamiento lingüístico sino también con respecto a cualquier estado
plejo cruce de los diferentes procesos de planific~ción y ajuste en la de cosas extra-lingüístico). Tal observación tiene consecuencias me­
producción y en la interpretación, por parte de los mter10cutores. todológicas importantes para el estudio de la interacción hablada. Por
un lado, los detalles minúsculos de lo que ocurre en la interacción ha­
6.2.3 Memoria blada sólo se pueden estudiar con la ayuda de grabaciones (razónpor
la cual los equipos de grabación han revolucionado el estudio de la
Hasta cierto punto, la memoria, aunque también interviene en la
conversación). Sin embargo, por otro lado, 10 que hay en una cinta.
planificación (en' frases como Antes de que me .olvide,... ), ~s s~
(ya sea de audio o video) no puede ser nunca suficiente: 10 que oCurre
opuesto: el concepto se usa para señalar la inflU~~cla de cual~U1er tI­
en la interacción conversacional no está sólo formado por un contexto
po de «mirada hacia el pasado», o representacIon retrospectiva del
más amplio, también depende de representaciones retrospectivas (y
curso del comportamiento lingüístico. Hasta ahora el tema de la me­
también anticipatorias, recuérdese la sección 6.2.2) que están separa~ .
moria se ha presentado de paso y sólo como una restricción al proce­
das de las formas de expresión reales (susceptibles deser'grabadas) y
samiento. Por supuesto, la memoria es más un recurso que una res­ son en su mayor parte interpretativas y orientadas al contenido, una
tricción, aunque pueda ser limitado. El uso del lenguaje es imposible
sin la intervención constante de la memoria, que toma la forma de re­
vez se han traspasado los límites de la memoria literal. Desafortuna­
damente , los analistas
. de la conversación se olvidan a menudo de este
o
conocimiento (la movilización espontánea de la memoria necesaria
punto. En la sección 5.4.4 hemos visto un ejemplo de la relevancia de O
para entender el discurso en transcurso) o recuerdo (un esfuerzo ac­
datos no grabados (y no grabables) consistentes en interpretaciones y
tivo para recuperar algo de la memoria). La interacción cotidiana.con­ .
no en 10 que podría posiblemente ser recordado con la cantidad de' -.\

fiará predominantemente en el reconocimiento, ayudado por la dISpO­


nibilidad de esquemas de categorización (véase la sección 6.2.1) Y
detalle que se puede encontrar en una cinta (sin' quitar importancia
metodológica a hacer grabaciones también, cuando es posible).
o
guiones (véase 6.2.2) los cuales son a su vez product~s (al me~os
Antes de continuar, permítaseme expresar la esperanza de que la O
parcialmente) del reconocimiento basado en la mem?n~. Cualqu~er O
anterior exposición (de~de el principio de la sección 6.2 en adelante)
cosa que se diga sobre el pasado, ya sea un acontoclffilento no 1m­
haya mostrado que el lugar de la cognición es de hecho la (~~ente en
güístíco o un acto de comunicación anterior, requiere un recuerdo ac­
sociedad», Ninguno de los procesos descritos, aunque tengan lugar en
tivo. . mentes individuales, tiene sentido sin una dimensión social. Las re-'
Para la mayoría de los usuarios del lenguaje, sólo la memoria a @

presentaciones (y la planificación y la memoria basados en parte en


corto plazo es capaz de retener la forma real de los enunciados. Nor­
ellas y en parte produciéndolas) tienen que ser «establecidas» inter­ e
malmente sólo se pueden recordar literalmente turnos cortos de con­
versación. La memoria a largo plazo se concentra más en el conteni-
personalmente para que funcionen en el uso del lenguaje (pero nunca
••
••

292 Saliencia
T

Grados de saliencia 293


de manera estática). Además, la planificación y la memoria están en ciones, no existe una correspondencia automática. Por ejemplo, cuan­
parte guiadas por lo que es socialmente importante. to más saliente es un término en un esqúema de categorización, más
fácil o automáticamente será recuperado. De hecho, la facilidad de pro­
cesamiento ha sido usada por psicólogos cognitivos como primer indi­
6.3 GRADOS DE SALIENCIA cador de rudimentariedad conceptual o saliencia cognítiva. Igualmente,
cuanto más cuidadosamente planeado sea un intercambio (p. ej. cuanto
más se haya <<practicado») menos esfuerzo de procesainiento cons­
o La secci6n6.2 pasó revista a algunos tipos de procesos que tienen ciente se requerirá para decir lo apropiado en el momento adecuado.
" lugar en el medio de la adaptabilidad, la «mente en sociedad» huma~ Respecto a lo que realmente es hacer elecciones lingüísticas, se
, ná, y que contribuyen a la operación de hacer elecciones lingüísticas puede suponer que mucho -pero no todo- de 10 que ocurre tiene
que la pragmática intenta explicar. Todo esto, es decir, tanto él hacer lugar a un nivel subliminal. Comentemos otra vez, para ilustrar esto,
o' , elecciones 'en general como los procesos mentales, están sujetos a di­ el ejemplo de la cafeteria (que se trató largamente en 5.4.2):

,.
0, ferentes modos de procesamiento. En particular, todos pueden tener
e 'lugár con diferentes grados de:; saliencia. Su operación puede ser com- ,
pletámente consciente o absolutamente inconsciente, con todos' los
matices intermedios. Hay una relación clara entre saliencia y «cono­
(2) . [Situación: cafetería en'Berkeley, California, en 1981J
1. Cliente a camarera
(entrando): ¿Es ésta la d~.no fumadores?

'.'
2. Camarera: Puede usarla como de no fumadores.
cimientO)individual, como la exposición que sigue aclarará -al for­ 3. Cliente (sentándose): Gracias.
mular mucho (demasiado) en términos individuales-o Pero al mismo
() tiempo no se debe olvidar que existe la denominada saliencia social: Con el anterior análisis como fondo, se pueden hacer las siguientes
las normas sociales establecen patrones de lo que es <<marcado» (p. ej. suposiciones con respecto a la saliencia de los procesos de la genera­
rechazar una oferta en lugar' de aceptarla -recuérdese la «organiza­ ción de significado que tienen lugar,en el enunciado:'
, ción de I~ preferencia» en la sección 1.1.4). Esto será más «notable» y
como consecuencia más consciente o saliente. • Se puede suponer que la cliente está buscanao consciente­
'Cuando se habla de grados de saliencia, es necesario distinguir mente la información que necesita, es decir, si un área es de
entre 10 que es realmente hacer elecciones lingüísticas y lo que se fumadores o no; la búsqueda «reaí» de la zona de no fumado­
puede denominar los «procesos mentales que contribuyen a hacer res puede volverse una acción rutinaria comparable al modo en
elecciones». Respecto a lo segundo, algunos de los elementos en Un que un conductor experimentado cambia las marchas. Pero si
o modelo de categorización (como ejemplos prototípicos y términos de la búsqueda rutinaria no tuvo éxito y por eso se necesita pre­
guntar, el nivel de conciencia se eleva drásticamente (como
o nivel básico) son cognitivamente más salientes que otros. De igual

•• modo, se puede esperar que la planificación avanzada muestre un


mayor grado de saliencia o conciencia que la planificación espontá­
nea. El recuerdo activo requiere obviamente más operaciones cons- .
cuando el mismo conductor usa un coche diferente al 'que usa·
normalmente).
• También debe ser consciente la cliente de la inevitable identi­

•• cientes que el reconocimiento espontáneo. Aunque hay una relación


entre esto y los grados de conciencia con los cuales se hacen las elec­
ficación (en términos de cate garfas definidas socialmente) que
está implícita en su pregunta, pero no hay ninguna razón con­

••
- - - _ ... - _... __..._ - - _... - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - -

294 Saliencía
T

Grados de saliencia 295

vincente para creer que es consciente del hecho de que pre­ si (2)3. no fuera ¡Gracias! sino ¡Eso no es suficiente! No se necesita­
guntar puede entenderse como un intento de establecer a la ría esp~cular mucho sobre el lugar que la búsqueda de una sección de
fuerza los qerechos del grupo al que pertenece. Sin embargo, no fumadores y los derechos de los no fumadores ocupan en la con­
este tipo de estrategia intencional puede intervenir si (i) la ciencia del cliente.
cliente sabia que la cafetería no tenia todavía una sección de no Tal como la saliencia de las elecciones lingüísticas reales se rela­
fumadores establecida y/o si (H) pertenecía a un grupo de acti­ ciona con la de los procesos mentales participantes, pero no de uno a -~
I
vistas anti-tabaco que se presenta en las cafeterías para presio~· uno, también se relaciona con la distinción entre significado explícito
nar sutilmente para que se establezcan secciones de no fuma­ e implícito (véase la sección ·1.1.3). De nuevo, la relación no es me­
dores; en el caso de (i) o (ti) la posibilidad de interpretar su cánica ni invariable. Normalmente se esperaría que los aspectos del· iJ.
pregunta como una mera rutina se cancelaría; en el caso(ii) significado implícito estuvieran más en un segundo plano. Pero la
intervendría la planificación consciente. realidad del uso del lenguaje no es tan sencilla. En primer lugar, co­
• La camar~ra está tratando conscientemente de cumplir con los mase señaló anteriormente (en la sección 5.3), la interacción entre la· o
deseos de la cliente 10 mejor que puede, pero en su afán por explicitud y la implicitud puede explotarse de manera estratégica.
cooperar toma algunos atajos -posiblemente de manera sub­ Esta es la razón principal por la que el estudio del uso del lenguaje, el
consciente o al menos no intencionada (excepto si intervinie­ ámbito de la pragmática, no puede definirse satisfactoriamel1te en
ran la' ironia o el sar-cl:).smo)- que conducen a violaciones de términos de implicitud exclusivamente. Así, cuando una presuposi­
normas lingüísticas, aunque sean ligeras. ción o una implicatura choca con los supuestos o expectaciones de un . -o
Sin embargo, cuando tennina el turnó de la camarera, la mayo­ intérprete, asume súbitamente un grado de saliencia más alto que el .
ría de las implicaciones se han hecho lo suficientemente sa­ de 10 q"ue se dfga explícitamente. Volviendo a uri ejemplo clásico, se
lientes como para servir de base a la continuación de la inte~ puede esperar de hecho que el mensaje tranquilizador explícito en
racción. Mañana te seré fiel desaparecerá bajo la sombra del mensaje implí~
cito: el contenido proposicional de la promesa puede contrastar con
Este ejemplo no es excepcional en absoluto. Es también típico en el una conducta pasada y no cuenta necesariamente para el futuro (o ni o
sentido de que es imposible obtener respuestas definitivas a todas las siquiera) mañana.
preguntas que se pueden hacer sobre el estatus preciso, en términos En segundo lugar, puede intervenir un posicionamiento diferente
de saliencia, de los procesos de producción de significado que inter­ de intérprete y enunciador en relación a lo que es explícito y 10 que es .
vienen. Es importante recordar que aunque los grados de saliencia se­ implícito, y esto 10 puede tener en cuenta conscientemente el enun­
an realmente importantes (incluso en el sentido de que a menudo se ciador. Esto es 10 que ocurre en oraciones cargadas de infqrmación Q
convjerten en el tema de disputa explícita), para el análisis lingüístico como (3). O
solamente son importantes en la medida en que son necesarios para
explicar 10 que sucede en el discurso (en el sentido más amplío). Si (3) Bajo cálidos ysoleados cielos los votantes británicos salieron el O
jueves a la calle en gran número en 10 que encuestas, chistes y G
pueden usarse de manera convincente con objetivos explicativos, en
politicos predijeron hasta el final que sería probablemente una
la mayoría de los casos seremos capaces de responder las preguntas ele.cción de cambio crucial para el partido laborista; la elección e
que sUljan. Así, nuestra interpretación de (2)1. cambiaría seriamente tennina 18 años de gobierno conservador y cede las llaves del ~

"e
lA.
296 Saliencia Conciencia metapragmática 297

número 10 de la calle Downing a Tony Blair (Internatiohal He­ estudiando. En la siguiente sección, la atención se centra en un tema
raId Tribune, 2 de mayo de 1997). específico relacionado. con la saliencia de hacer elecciones: el área de
la conciencia metapragmática. Este tema es de especial importancia
El autor, con la tarea de dirigirse a una audiencia cuyos miembros no en una teoría de la pragmática porque (i) deja muchas huellas obser­
están igualmente informados, opta por el uso de formas de expresión vables y, más importante, (ii) llega al núcleo de lo que es la saliencia,
que encierran muchas presuposiciones (p. ej. que había una elección la conciencia reflexiva del enunciador y el intérprete sobre las elec­
en Gran Bretaña, que había sido gobernada por conservadores en los ciones que se hacen cuando se usa el lenguaje.
18 años anteriores, que la elección iba a determinar el próximo primer Es necesario hacer una observación más para cerrar la presenta­
ministro cuya residencia es el núme~o 10 de la 'calle Downing, que ción general. Lanecesidad de considerar aspectos de pro.cesamiento
--o • •'
TonyBlair era el' candidato del partido laborista, etc.) a un nivel su­ en una aproximación pragmática al lenguaje implica que se debe re­
perficial, desde donde se extraen fácilmente, que perÍnite a los lecto­ interpretar la Figura 3.1 (en la sección 3.1). Primero, las «líneas de
res inforÍnadosusar1as como puntos de apoyo (para la información de visión»' propuestas para enunciador e intérprete no sólo abarcan fe­
o nómenos mentales, sociales y físicos de los que son conscientes los

••
, , que mucha gente fue a votar y de que todos habían avanzado la pre­
dicción de una victoria laborista) y al mismo tiempo capacita a lecto­ interlocutores. Lo que se puede activar con propósitos comunicati­
. res inénos. informados a reconstruir un estado general de las cosas . vos, incluso al nivel subconsciente más profundo; se sitúa entre esas
~ .De'l.lado del autor las elecciones son relativamente conscientes, aun­ (porosas) «líneas». En segundo lugar, algunos aspectos del mundo
~'
, que el estilo en cuestión y su adaptabilidad a un público mixto tam­ social y mental fuera de las «líneas de visión» también entran en el
'J bién se vuelve rutinario. Del lado de la recepción, el procesamiento y uso del lenguaje, no como correlatos contextua1es de la adaptabilidad
" .J los distintos grados de saliencia serán diferentes para diferentes cate­ sino como propiedades de la «mente en sociedad» en sí misma, los
gorías dé lectores. ~ mecanismos de procesamiento que caracterizan el medio de adapta­
En tercer lugar, se filtran en el discurso de la gente modelos de bilidad.
supuestos ampliamente compartidos que tienden a eludir el cuestiona­
miento consciente y, consecuentemente, la formulación explícita. Pue­
den presentarse principalmente como portadores de significado implí­ 6.4 CONCIENCIA METAPRAGMÁTICA
, cito que interactúan sutilmente con el contenido explícito aunque a
veces resistan un'a'formulación explícita completa. Tanto enunciador
como intérprete participan sólo subliminal mente en el hacer eleccio­ V~lvamos a los ejemplos (1), (2) Y (3). La oración (l)b. hace una
o nes. Este tema, que toca el área, de las ideologías de' la sociedad, se observación sobre (1 )a. describiéndola como una herejía, una caracte­
O tratará en profundidad en el Capítulo 8. rización evaluadora con referencia a un rimndo de expectaciones so­

•• La saliencia no puede medirse. Es más, no es necesario deterrm­


nar grados de saliencia para todos los procesos en cada ejemplo de
bre la arqueología. Además, con seguramente califica su propio esta­
tus de aserción en una dimensión de certidumbre o evidencia. En
(2)2., las elecciones prosódicas de la camarera, con mucho énfasis en

•,. uso' del lenguaje. Existe, no obstante, la necesidad de considerar la


saliencia cuando sus huellas pueden mostrar su relevancia para' una
comprensión de la generación de significado en los datos que se están
usar, muestran alguna conciencia reflexiva del hecho de que su res­
puesta va más allá del patrón de lo esperado (y por 1.0 tanto muestran

••
()

'T
298 Saliencia Conciencia metapragmática 299

también conciencia de las expectaciones nonnales del cliente) en un de los usuarios» (1993, 277) -un tema que es simplemente «prag­
esfuerzo de ser cooperativa (ya sea elegido conscientemente o rutina­ mática» en el sentido en que se emplea en este libro). '
riamente). El ejemplo (3) muestra una conciencia grande del estatus La conciencia metapragmática, como los otros procesos y fenó-.
asertivo (predijeron hasta el final), del linaje comunicativo (encues­ menos mentales que intervienen en el uso del lenguaje, puede mostrar
tas, chistes y políticos -una manera de expresión que refleja además diferentes grados de saliencia. Algunos de sus indicadores muestran
algún distanciamiento irónico. consciente-), y del valor epistémico una elección muy consciente (como herejía en (l)b.), mientras otros.
(sería probablemente) del resultado esperado de las elecciones. ¿Qué no son fácilmente accesibles (como el énfasis en use en (2)2.). El te­
tienen en común estas observaciones? ma es muy complejo a causa de dos fronteras de definición borrosas: o
Defmir el uso del lenguaje como el hacer elecciones lingüísticas, primero, no es fácil distinguir la conciencia reflexiva de otros aspec­
considerando' el rol mediador de las mentes del enunciador y del in­ tos de la operación de la conciencia en el uso del lenguaje (y una dis­
térprete y atribuyendo un papel prominente a la conciencia, implica tinción estricta podria no tener ningún sentido); segundo, no toda la
que los usuarios, saben más o menos lo que hacen cuando están conciencia reflexiva es saliente y accesible de la misma manera (hasta
usando el lenguaje, incluso cuando algunas elecciones son práctica­ el punto en que se puede dudar de que el concepto sea pertinente). C)
mente automáticas en' comparación con otras que pueden tener alta Por otra parte, mientras la conciencia reflexiva no implica necesaria­
motivación. Este «conocimiento» se manifiesta verdaderamente en mente un alto grado de elección consciente o saliencia, las. elecciones
todas las elecciones que se hacen. Además, se manifiesta en la con­ que son altamente conscientes tampoco implican necesariamente una
ciencia reflexiva que los usuarios del lenguaje tienen de esas elec­ foima importante de conciencia metapragmática. Veamos los ejem­
ciones, como elecciones hechas entre una serie de opciones, y por eso plos (4) y (5). ')
con un estatus conceptual o comunicativo específico: mientras todas
(4) A fines de año, 31 nuevos tratamientos para el cáncer estarán en
las elecciones lingüísticas implican algún grado de conciencia, algu­
nas elecciones se reflejan abiertamente en sí mismas (como segura­
la fase final de pruebas clínicas. ü
(5) Alrededor de fin de año, más de 30 tratamientos para el cáncer
mente en (l)b. o el énfasis en (2)2.) o en otras elecciones (como he­ podrían estar en la fase final de pruebas clínicas.
O
rejía en (l)b. y en la descripción de (3)). La conciencia reflexiva O
puede ser tan importante que se puede considerar como uno de los re­ No hay razón para suponer que hay una diferencia significativa en la
quisitos previos evolutivos originales para el desarrollo del lenguaje. saliencia de las elecciones que subyacen a estas dos oraciones. Inclu­ Q
Es tan importante, además, que toda la comunicación verbal es auto­ so podria ocurrir que (4) fuera el producto de un esfuerzo muy cons­ @
rreferencial hasta cierto grado. En otras palabras, no hay uso dellen­ ciente de dar infonnación precisa, es decir, de conseguir un empare­
guaje sin una calibración constante entre funcionamiento pragmático jamiento perfecto entre el mensaje y el estado de cosas anticipado. No e
y metapragmático. El estudio sistemático del metanivel, donde se en­ obstante, (5) puede estar más arriba en la escala de conciencia meta­ ©
cuentran los indicadores de conciencia reflexiva en el hacer eleccio­ pragmática: contiene más elementos que muestran la conciencia del ~
nes real que constituye el uso del lenguaje, eS.el ámbito propio de lo
que 'se ha llamado metapragmática (otros usos de este ténnino son
confusos; para Mey, por ejemplo, la metapragmática «estudia las
condiciones que sustentan las reglas pragmátic~s, es decir, las reglas
enunciador deL estatus del enunciado como predicción, con toda la in­

certidumbre que eso implica en relación con el momento preciso en el

cual se espera que se materialice un estado de cosas (por eso alrede­


••e
~
e
SI
300 Saliencia Conciencia metapragmática 301

dor en lugar de a), detalles de ese estado de cosas (más de 30 versus tratar indicaciones léxicas -a menudo adverbios oracionales (véase
31) y el grado de certidumbre mismo (podrían estar versus estarán). la sección 4.2.4) o marcadores de cohesión y coherencia (véanse las
Esta complejidad se refleja en un tratamiento insuficientemente . secciones J.3.2 y 4.4)- o cómo un enunciado se corresponde con el
coherente de los fenómenos correspondientes en la literatura pragmá­ discurso.que 10 rodea (de cualquier modo, sin embargo, actualmente,
tica. Se han propuesto muchos conceptos para tratar el tema, que' por el contrario, etc.) o tratan del estatus epistémico y/o ilocutivo del
siempre se ha considerado intuitivamente importante. Pero todas las contenido proposicional (como seguro, sin duda, francamente, creo,
propuestas hasta ahora han seleccionádo, o se han concentrado prin­ etc.), o de compromiso del intérprete (como en ¿sabes?). Tercero, el
cipalmente, en subco!,ljuntos de la serie de indicadores, perdiendo así funcionamiento de las claves. de contextualización (véanse las sec­
la amplia perspectiva que los coloca en el núcleo de 10 que ocurre ciones 3.4.3 y 4.2.1), ya sea en forma de marcadores prosódicos,
cuando las personas usan el lenguaje. cambios de código o de gestos o sonidos para mantener la comunica­
e\ ción [backchannel cues] , que aunque sean «raramente apreciadas
v
· 6.4.1 Indicadores de éonciencia metapragmática . conscientemente y. casi nUnca discutidas directamente» (Gumperz,
Q
1982, pág. 131), muestran una conciencia de «expectaciones coocu­
Présentemos de manera concisa una visión general de algunos de
rrentes entre contenido y estilo superficial» (Gumperz, 1982, pág.

• los fenómenós,que 'se tendrán que situar en diferentes niveles es­


· tructuralesde adaptabilidad, que han centrado la atención de los lin­
güistas y que son candidatos a ser incluidos bajo el rótulo de «indicado­
131) ya que son identificables como bases de interpretaciones de
contextualización. ,
Una observación más sistemática e integrada de estos fenómenos
res de 'conciencia metapragmática». Debemos señalar primero algunos
sería muy deseable. En este libro, sólo podemos empezar a tratarlos
de los conceptos que se han usado o todavía se usan y que pertenecen
superficialmente. Simplemente ejemplificaremos o l:amaremos la aten­
al tema de 1i:\. reflexividad del lenguaje. Primero, la categoría de 10
ción: sobre un número de indicadoresmetapragmátlcos que hacen,re­
, que Jakobsón (1971) -y Silverstein (l976)-llamó conmutadores
ferencia a aspectos del contexto lingüístico (véase la sección 3.3.2) y
· [shijtersJ. Los «conmutadores» son símbolos indicadores, como pro­
a los objetos estructurales de la adaptabilidad que se ,distinguieron en
nombres personales y otras expresiones deícticas (véanse las seccio:'
nes 1.1.1, 3.2.3, 3.2.4), aspecto (véase 4.2.4), tiempo (véanse 1.1.1, el Capítulo 4. Para un análisis serio, tendremos que usar 10 que se ha
3.2.4), modo (véase 4.2.4), modalidad y evidenciales (véase también aprendido hasta ahora en los capítulos 3, 4, 5 Y 6; se presentará un
la sección 4.2.4), que «cambian» necesariamente en relación con los estudio de caso, con referencia a un problema específico acerca de la
cambios en el contexto de uso y que requieren conciencia reflexiva reflexividad del lenguaje, en el Capítulo 7 (sección 7.1.2). .
del proceso de emparejar propiedades estructurales a propiedades En este capitulo quedará claro que mucho de lo que se h~ dICho
contextua1es, excepto cuando se hace una elección: por defecto o no sobre lenguas, códigos y estilos (en la sección 4.1) está. rel~clonado
con elecciones que muestran un cierto grado. de conCIenCIa ~eta~
marcada del sistema estructural de opciones disponibles. Segundo,
pragmática, concretamente los ejemplos que se dieron de cambl~ de
una amplia gama de indicadores de conciencia metapragmática se en­
código (aunque esto no ímplique ne~es~riamente que to~os ~os tlpos
cuentra bajo los rótulos variables y a veces solapados de marcadores
de cambio de código sirvan como mdlcadores de conCIenCia meta­
del discurso, marcadores pragmáticos, partículas del discurso o
pragmática). Otro ejemplo será útil.
partfculás pragmáticas. Frecuentemente, estas nociones se usan para


,)
'\.

302 Saliencia Conciencia meraTwa 303 ' i

(6) (De Gumperz, 1982, pág, 30) En el nivel de las palabras encontramos algunos de los indicado­ . ,
[Después de un seminario para estudiantes avanzados, un estu­ res más explícitos de conciencia metapragmática. En concreto,. todas I
diante negro se acerca al profesor blanco. Este está a punto de
las lenguas naturales contienen una amplia gama de verbos y expre:-.
marcharse' acompañado por varios estudiantes blancos y ne­
gros.] siones verbales para describir formas de uso de11enguaje. Llamemos'
1. Estudiante negro: ¿Podria hablar con usted un minuto? a los miembros de este campo léxico, como se ha hecho en la literatu­
Voy a solicitar una beca y querría saber ra pragmática, verba dicendi, «verbos de deciI?>' 0, rec~rdando (i)
sí me podria escribir una carta de reco­ que el uso del lenguaje es más de lo que se puede llamar h:eralmente.,
mendaci6n~ «hablar» (no sólo en el sentido. de que no hay solamente diSCurso no ()
2. Profesor: De acuerdo. Ven conmigo a la oficina y hablado sino también en el sentido de que la interpretación es también
dime qué quieres hacer. una forma de acción lingüística) y (H) que no sólo intervienen verbos
3. Estudiante negro [volviendo la cabeza ligeramente hacia los sino expresiones similares a verbos, podemos atrevemos a usar el
otros estudiantes; mientras todos salen de la clase]: Ahma git . término verbiales (verb(ial)ls) de acciones lingüísticas. De aquí en
a
me gig! [Trad. aproximada: «Voy a hacerme con una ayu­ adelante los dos términos se usarán de manera indistinta. Algunos de
los ítem~s léxicos en cuestión pertenecen al grupo de los verbos de
dita» ].

. actos. de habla (prometer, afirmar, amenazar, preguntar, ordenar,


Este ejemplo, (6)3. muestra una 'doble, forma de reflexividad. Por un la­
etc.;' véase la sección 1.1.2), algunos de los cmiles se pueden usar
do, el cambio de código es simbólico en el sentido de que representa
como perfo~ativos explícitos (prometer, ordenar, ~tc.; véase la s.ec­
una elección que señala explícitamente solidaridad con el grupo, en
ción 1.1.2); otros describen aspectos del comportamiento verbal dIfe­
este caso los estudiantes negros, cuyo código se adopta. Probablemente
rentes de la fuerza ilocutiva (discutir, persuadir, continuar)¡ y ade­
los blancos del grupo ni siquiera entienden el enunciado. El estudiante
más de los verbos hay por supuesto muchas expresiones verbales (dar
negro, tras haber demostrado abiertamente que depende de un profesor
carta blanca, imp~ner la ley, ir a la caza de, plantear una pregunta,
blanco para conseguir una carta de recomendación, reafmna su identi­
escaparse [de una situación dificilj, solicitar el placer.de la ~omp'a­
dad negra y su pertenencia a la comunidad negra. Por otro lado, (6)3. es
ñía de alguien, presentar reclamaciones). Su relevanCIa se dIscutIrá
también un mefacomentario explícito del discurso precedente.
más adelante en la sección 6.4.2. También'se volverá al problema de
Por 10 que se refiere .a los ingredientes de construcción de enun­
la performatividad en el Capítulo 7 (sección 7.1.2). .
ciados, la estructura del sonido es un buen recurso para las claves de
En relación a los verba dicendi, debemos señalar un fenómeno
contextualización, las cuales, a Un bajo nivel de saliencia, indican va­
que los lingüistas (predominant~mente los franceses) han llamado
rios grados de conciencia metapragrnática (véase la sección 4.2.1).
delocutividad: la reflexividad de algunos verba dicen di. aparece ya
Así, el intérprete británico de la mujer asiática que dice ¡Salsa! con
por ser derivados de «locuciones». Así, el latín salutare, ({saluda!», se
una entonación descendente cuando quiere saber si una persona a la
deriva del saludo salve o salvete (en plural). De manera similar, en
que está sirviendo quiere salsa o no, podrá decimos que no habría
inglés, 'la locución OKha dado lugar al verbo delocutivo t~ okey. . tE:;;;.
considerado descortés que ella hubiera dicho ¿Salsa? con una entona­
Además de tales verbos, así como nombres y expreSiOnes noml- W
ción ascendente, que es la típica de una pregunta o un ofrecimiento en
inglés. (Véase Gumperz, 1982.) nales relacionadas, encontramos a nivelléxÍco muchos de los marca- &#
dores del discurso, marcadores pragmáticos, partículas discursivas y
-"'- .

304 Saliencia Conciencia metapragmática 305

partículas pragmáticas que se discuten en la literatura. Aquí. presen­ (16) 1. ¿Quieres marcharte ya?
tarnos algunos ejemplos. 2. Bueno, va a oscurecer pronto.
(17) Por cierto / Ya propósito, John es un mal conductor.
(7) a. Según todo~ reconocen, John es un mal conductor.
b. Lamentablemente/Desgraciadamente, John es un mal con­ Ciertos grupos de palabras sirven como mecanismos indicadores de
ductor.
fuerza ilocutiva de modo que se muestra una explicación anterior o
c. Francamente/Honestamente/Verdaderamente, John es un
mal conductor.
una referencia del tema que se trata, como en (18) y (19). Una refle­
(8) a. Probablemente/Posiblemente, la humanidad está planean­ xión similar está implicada en (20) y (21); en estos dos ejemplos, los
do. su propia extinción. grupos de palabras en cursiva no definen fuerza ílocutiva, sólo añaden
b. Ciertamente/Indudablemenfe, los humanossori un peligro, énfasis. Finalmente, (22) califica el contenido proposicional de forma
para ellos mismos. parecida a los adverbios oracionales de (7). .
o (9) Según se dice/Supuestamente, la familia real va a dar lu­
. gar a más escándalos. .

(18) ¿Qué te parece quedarse a pasar la noche?


O

••e

How about staying for the night?

(lO) Siempre he tenido como - muchas pesadillas .


(19) ¿Por qué no quedarse a pasar la noche?
I'vealways had like-lots ofnightmares.
(11) . Why not stay for the night?
Está, está simplemente loco, el capitán.
(20) Por amor de Dios, ¿por qué no os quedáis?
He'.sjust - he'sjust crazy, the captain.
For Pete 's sake, why don't you stay?
o Todos los adverbios oracionales en (7), (8) Y (9) espeCifican el estatus
(21) ¡Por supuesto que os quedáis!
By al! means, stay!
del siguiente contenido proposicional: (7) en términos de marcadores (22) Como amigo, te tengo que decir que deberias ser más flexjpl\ó!.
o de actitud, (8) en términos de propiedades epistémicas y (9) indicando
una (vaga) fuente de información (un fenómeno al que se denomina

As afriend, 1 have to wam you that you should be more flexible.

«evidencialidad»). Tanto (10) como (11) indican, por medio de like y Además, la conciencia metapragmática se iridicacon una gran varie­

O . just, reflexión en el proceso de usar las palabras. dad de tipos de cláusulas, como en los ejemplos siguientes:
. Algunas elecciones al nivel de las palabras sirven como marcado­
(23) a. Este doctor Hammer está loco, ya sabes.
. res claros de conexiones supraoracionales a elementos circundantes b. Ya sabes, este doctor Hammer está loco.
·del contexto lingüístico (véase la sección 3.3.2): (24) Este doctor Harnmer está loco, creo yo.
(12) Ya era tarde. Así que/Por consiguiente, nósfuimos a casa. (25) Quiero decir, debe estar loco.
'oo (13) a. Ya era tarde. Pero nos quedamos (26)
(27)
Yo creo que el calor daña el cerebro.
Pienso que toca muy bien el piano.
b. Ya era tarde. Sin embargo, no tuvimos el valor de mar-
\) chamos. (28) No ha recibido ningún entrenamiento como piloto, ¿ves?

•• (14) Fuimos los primeros en marchar. De todas formas, ya era tar­


de.
(15) Nos debíamos haber marchado. En cambio, nos quedamos to­
(29)

(30)
No ha recibido ningún entrenamiento como piloto, ¿no?
He didn't get any pilot training, did he?
Recibió entrenamiento como piloto, ¿no? .

•• da la noche. He was trained as a pilot, wasn 't he?


.'1f; .

306 Saliencia Conciencia inetapragmática 307

(31) Es sólo que no me gusta. (42) Está como I algo loco.


¡t'sjust that 1 don't like him. (43) En cierto modo, las universidades son sólo fábricas.
"\
(32) Mejor que os quedéis a pasar la noche.
(33) ¿Sabes qué? Deqbie se casa. Palabras, así como oraciones enteras con contenido proposicional·
(34) Lee mis labios, ¡no más impuestos! completo, pueden entrar en un proceso de distanciamiento metaprag- .
(35) Por si no lo sabes, Debbie se casa. mático que ha sido denominado comúnmente mención (versus uso) ..
(36) Soy un buen corredor, aunque lo digayo mismo. Veamos (44), (45) Y (46).
(37) Se rumorea que se están acumulando muchas nubes oscuras·
sobre la Casa Blanca. (44) Deletréame shibboleth.
(38) Hablo sólo por mí cuando digo que tu propuesta es de 10 más (45) 1. Estaba un poco aturdido. .
aéertada. 2. ¿Un poco aturdido? Absolutamente aterrorizado estaba.
(39) . Se'puede argumentar crmvincentemente que la lingüística es (46). (Suena el teléfono.· Eve contesta, se vuelve hacia SQphie que
una rama de la psicología. . está sentada en la misma habitación).
(40) Perdona pero no puedo aceptar de ninguna manera. 1. Eve: Es Jack. o,
,
(41) No soy codicioso pero me niego a trabajar sin cobrar. 2. Sophie: No estoy. '. ¡

Todas las oraciones de (23) a (28) contienen verbos de estados men­ En (44), shibboleth es «mencionado», no usado: es una referencia a la
tales, describiendo explícitamente la relación entre un contenido pro­ palabra misma como palabra de la lengua inglesa; concretamente, es o
posicional y su relación con estados y procesos mentales. Este es el una cuestión de ortografia; como su significado es completamente
caso en las oraciones de (24) a (27) con Yo como sujeto, ya que la melevante en el contexto de esta oración, no puede ser «usado» en
primera persona es la única sobre cuyo estado mental un enunciador ningún sentido normal de esa palabra. El ejemplo de (45)2. se centra
puede decir algo con autoridad. La relación es mucho más débil en en el significado de un poco aturdido, que no es en absoluto irrele·
(23) y (28), con un sujeto en segunda persona. En (23)b., ¿sabes? vante; pero mientras la frase es «usada» en (45)1., en (45)2. el hecho o
funciona básicamente como bueno en (16). Tanto ya sabes en (23)a. de que haya sido elegida para describir un estado concreto de cosas O
como ¿ves? en (28) llamárr la atención del destinatario de una manera está en cuestión: es «mencionado» como inapropiado. Finalmente, es
comparable a las preguntas conflrmatorias en (29) y (30). Todas las dificil imaginar que No estoy es simplemente «usado» en (4;6)2., ya
cláusulas en bastardilla en los ej emplos (31) a (39) ofrecen reflexio­
Q
que es evidentemente falso en el contexto, mientras que la misma
. nes contextualizadoras para los mensajes dentro de su alcance. Los oración sería perfectamente aceptable e interpretable literalmente co­ el
«pero» que controlan la respuesta en (40) Y (41) anticipan y reac­ mo parte de un mensaje de un contestador automático. Se puede decir é
cionan ante posibles interpretaciones de lo que el enunciador está a
punto de decir. . .
que No estoy es «mención» y no uso p'orque funciona principalmente
como un mecanismo para ofrecer al destinatario, Eve, la forma de ex­
e
Q

.
Los atenuantes en (42) y (43) llevan a cabo modificaciones di­ presión que ella puede usar, con adaptaciones deícticas menores, para
rectas del contenido proposicional, siri el rodeo de comentar su estado . formular un mensaje --con un juego lingüístico' de fingimiento- pa- O
en términos de actitud, epistémicos o evidencíales, pero igualmente ra Jack: Sophie no está. .
indicativas de conciencia metapragmática.
e
••
A
308 Saliencia Conciencia metapragmática 309
En fragmentos de discurso más largos, y muchas veces a un nivel (51) El señor Khrushchev hizo de su versión una historia dramática
intertextual, se encuentran comentarios explícitos sobre el estatus del con tejemanejes rastreros mezclados con comentarios sarcás­
contexto lingüístico circundante o enunciados o gnipos de enunciados ticos cortantes sobre la declaración de Washington de que el
relacionados. Veamos (47) Y (48). piloto estaba en una misión de reconocimiento del tiempo y
que probablemente se había perdido durante un desmayo de­
(47) Como se sostuvo antes/Como se mostrará posteriormente, la bido a un fallo en su equipo de oxígeno.
lingüística es una rama de la psicología.
(48) Estas son algunas de las tendencias e ideas que encontrará en
Q El mundo en 1996, que aparecerá en 80 pa[ses y en 12 len­
Volveremos a estos ejemplos en el Capítulo 8.
f'""'o;
\.J guas. Este es nuestro décimo año de publicación. Si juntamos Se puede decir que todos estos mecanismos entextualizan el dis~
todas nuestras predicciones erróneas próbablemente podría­ curso, es decir, dan al discurso un estatus textual, un cuadro interpre­
mos sacar otra edición. Pero en este tiempo también ha habido tativo de referencia, por medio de una contextualización metaprag­
o muchos aciertos y espero que la mayoría del contenido haya mátíca. (Este uso de «entextualizacióm> extiende la referencia común
e
.-•
sido también interesante. del término, la transformación del discurso en un artefacto textual
-como cuando un antropólogo escribe' unq historia cOl¡nlnicada
El ejemplo (47) sitúa una oración en relación a otras partes de la' ora1mente-, ~ un aspecto inevitable de todo uso del lenguaje; ade­
misma oración. El ejemplo (48), que ya vimos anteriormente (véase más, ignorá la distinción que a veces se d~riva entre la entextualiza­
a
v .' la sección 4.4:2), conecta el contexto lingüístico precedente a una ción como un problema de producción y la contextualización como
O descripción del estatus del grupo de enunciados inmediatamente ad­ una reconstrucción interpretativa; véase Silverstein y Urban (eds.),
yacente (los artículos en la publicación en cuestión) en relación a una 1996). Se encuentran ejemplos extremos de este proceso en tipos de
evaluación intertextual de una serie a la cual pertenece ese grupo de actividad lingüística que r.equieren literalmente unafabricación de íos
enúnciados. Este tipo de fenómeno pragmático está directamente re­ textos. Un ejemplo que viene al caso (tratado ampliamente por la­
lacionado con la aJ;!lplia gama de datos producida por prácticas de ci­ cobs, 1997) es la producción de comunicados de pre~sa, escritos de
e) ta directa y discurso indirecto, en las cuales se usan verbos de ac­ tal manera que muestran todas las propiedades de las noticias norma­
ción lingüística para 'enmarcar el estatus comunicativo de un uso del les de periódico, con citas directas de enunciados producidos por re­
. lenguaje anterior. Algunas veces, como con la cita directa y el discur­ presentantes de la empres~ o grupo que los emiten (normalmente in­
so indirecto en las noticias, tal encuadre es bastante poco imaginativo, ventadas, sin duda). Estos modos de uso del lenguaje requieren un
() . como en (49) y (SO). En otros casos, cuando se toma más libertad in­ cambio completo de punto de vista; se separa del enunciadÓt y se di­
A terpretativa; las descripciones pueden ser bastante vivaces, como en rige al destinatario directo (agencias de prensa o periodistas), para
V
(51). . "
o que éste último pueda simplemente usar el texto preformulado en su
comunicación con su propia audiencia. Se podría llegar tan lejos co­

"'.
(49) «Si los soviéticos identificaran el U-2 como eL avión que de­
rribaron, dejaríamos de' buscarlo», dijo el señor Bonney. mo a afirmar que los comunicados de prensa preformulados pueden
Q considerarse ejemplos de «mencióim en lugar de (<uso», comparables
(50) El informe apuntó que no hubo más comunicación con el pi­
.loto. al ejemplo (46)2.
e
••.,
310 Saliencia Conciencia metapragmática 311

con una definición de casta como «la clase sin movilidad». Pero esto
6.4.2 La ~etapragrnática y la naturaleza de la acción lingüística no le permitirá entender la estructura social y la dinámica de las pro­
piedades y procesos de las castas en la sociedad india, pues para en­
En la introducción a esta sección sobre conciencia metapragmáti­
tender esto se requeriría también una comprensión de los principios .
ca se dijo que toda comunicación verbal es autorreferencial hasta
de las posiciones jerárquicas en relación con criterios religiosos de
cierto punto, que todo uso del lenguaje implica una interacción cons­
pureza cuyas manifestaciones evidentes son la jerarquía misma, la se­
tante entre funcionamiento pragmático y metapragmático y que la
paración estricta y la división del trabajo. No haY'razones para creer
conciencia reflexiva está en el núcleo de lo que ocurre cuando las
que se tenga que decir algo diferente sobre las aproximaciones cientí­ J' ;
personas usan e11enguaje. Los ejemplos de la sección 6.4.1 deben ha­
ficas a las formas de acción lingüística.
ber mostrado que la conciencia metapragmática es de hecho omnipre­
Una manera de entrar en los «conceptos populares» del compor­
sente, hasta el punto de que se pueden encontrar huellas lingüísticas
tamiento verbal que son ingredientes del funcionamiento significativo
en todos los niveles de la estructura lingüística. Un análisis adicional,
del lenguaje sería observar los términos metapragmáticos en las len­
del cual se pueden insinuar sólo pequeños fragmentos, habría mostra­
guas naturales. Está de más decir que el nIvel superficial de lexicali­
do que esta conciencia tiene que ver con todos los aspectos o dimen- .
zación no es base suficiente para conclusiones de amplio a19ance so­
siones del uso dellenguaj e, desde cualquier parámetro contextual, pa­
sando por detalles insignificantes. de la estructura y de elementos de
bre las maneras específicas que tiene el lenguaje de conceptualizar y o·
experimentar el uso del lenguaje. Sin embargo, con el apoyo de datos Q
contenido semántico, hasta principios globales de generación de sig­
etnográficos de uso del lenguaje real, es posible obtener revelaciones
nificado. La razón se encuentra en la naturaleza de la acción lingüísti­
significativas. Así, la ausencia de una noción clara (lexicalizada). de
ca.
prometer en ilongoto, una lengua de Filipinas, es significativa cuando
Conceptos, prácticas e ideologías lingüísticas
la investigación antropológica revela que la actividad de compromiso o
verbal a una acción futura no eS una forma de comportamiento sa­ O
El comportamiento lingüístico comparte con otros tipos de com­ liente en las comunidades donde se habla ilongot (véase Rosaldo,
portamiento social, como Winch demostró de manera convincente ya 1982). De igual modo, la observación de que muchas lenguas poline­
en 1958, la propiedad de que es siempre «significativo», en el sentido sias tienen como verbos de acción lingüística términos más básicos
en que es interpretado por los actores que participan en él (véase tam­ que combinan el significado de «deCID> con el sentido más generala
bién la discusión de actividades)' acontecimientos en 5.2, anticipada un amplio abanico de sentidos de «hacen> ·(cf. maorí mea {(hacer, tra­
en las observaciones sobre la teoria de los actos de habla en la sección tar con, causar, hacer, decir, intentar, desear, pensan>; kapingamaran­
4.3). En otras palabras, las conceptualizaciones y las prácticas son in­ gi hai «hacen> versus hai bolo «decir que», donde bolo es ·,una con­
separables de la vida social. Com~ consecuencia, no hay modo de junción equivalente a «según, que»; rennellese hai «tener, ser dueño,
entender formas de comportamiento social sin comprender la manera obtener, actuar como, decir»; etc.), puede llevar a hipótesis razona­
en que los mismos actores sociales conceptualizan habitualme.nte 10 bles sobre la centralidad de «acción» en las conceptualizaciones poli­
que" están haciendo. Los marcos teóricos preco~cebidos no son sufi­ nesias de «habla» (en éontraste, por ejemplo, a la visión intencional
cientes. Si un sociólogo va a la India a estudiar el sistema de castas, que se da por supuesta en la teoría de actos de habla), ,si está apoyada
can sus conceptos de «clase» y «movilidad», puede volver satisfecho por investigación etnográfica que revele que en algunas sociedades
312 Saliencia
polinesias los efectos de actos verbales se consideran más importantes'
que las intenciones de un enunciador (véase Duranti, 1988). Veamos
un ejemplo más cercano, Reddy (1979): el descubrimiento de la «me­
r Conciencia metapragmática 313
I,.a presentación lineal en la primera definición se corresponde con la
metáfora' del conducto completamente. La segunda añade un ele­
mento de' doble dirección, enfatizando también el contexto, pero sin
táfora del conducto» en maneras de hablar sobre el uso del lenguaje, cuestionar realmente la naturaleza de tal proceso; el «intercambio» es
que ven el lenguaje como un contenedor para almacenar, transferir y simplemente una transmisión .en dos direcciones. El modo de expre­
extraer significado, como en (52), (53) y (54). sión muestra que incluso este cambio menor de perspectiva causa
(52) a. Intentar meter más pensamientos en menos palabras. , problemas de formulación, en particular la elipsis lógicamente pro­
b. El discurso estaba lleno de emoción. blemática en «transmitido de una fuente a otra (fuente)>>. Con el ver­
c. Mete esas ideas en algún otro lugar del parrafo. bo transmitir se esperaría «de una fuente a 1m objetivo», pero eso se­
(53) a. Intenta hacer que se entiendan tus ideas. [Literalmente: ría difícilmente compatible con la perspectiva bidireccional. Aunque
hacer que las ideas lleguen al otro lado. J
o los ingredientes subrayados del acontecimiento de habla son similares

•.,•
Try to get your thouglits across. a los que hemos tratado en este libro, mucho de lo que hemos dicho
b. Ninguno de sus sentimientos me llegó.
sobre el uso del lenguaje (por ejemplo en términos de su dinámica,
None ofherfeelings'camé through to me.
elecciones interpretativas y negociabilidad) queda fuera tanto de la
c. Dame solamente una idea de lo que quieres decir.
(54) a. ¿Encontraste alguna buena idea en el libro? metáfora del conducto como de estas definiciones .
La relación entre conceptualizaciones y prácticas de la acción lin­
G b. ¿Puedes extraer una visión coherente de este ensayo?
güística, a pesar de que algunas de sus propiedades se reflejen super­
c. ~Sá observación es completamente impenetrable. '
O ficialmente en patrones de lexicalización, se sitúa al nivel más subli­
O Tales observaciones son relevantes cuando se ve que esta visión del minal de la conciencia metapragmática. Constituye la base de las
() lenguaje codificáda 'metafóJjcamente se equipara con regularidad a ideologías lingüísticas, es decir, maneras habituales de pensar y ha­
las bases de las feorías de la comunicación y uso del lenguaje, a ex­ blar sobre el lenguaje y el uso del lenguaje que són raramente cues­
pensas de visiones alternafivas. Veamos las dos siguientes definicio­ tionadas en una comunidad. No obstante, el hecho ,de. que no, sean
nes de comunicación. ' cuestionadas no significa que se conespondan con prácticas reales. Si
lo hicieran, no habría razón para criticar las definiciones de comuni­
Para expresarlo de manera sencilla, el proceso de comunicación cación de un manual Esto. quiere decir que la referencia a datos exó­
empieza cuanqo un mensaje es concebido por un emisor. Entonc~s es
ticos en párrafos anteriores tiene el objetivo de explicar un tema,
" CODIFICADO <-traducido a una señalo una secuencia de señales- y
transmitido vi~ un MEDIO o CANAL a un receptor que lo decodifica e
más que establecer contrastes absolutos --observación' que debe re­
interpreta y envía de alguna manera una señal de retomo que indica si cordar la advertencia de que la aproximación a la misma relatividad
el mensaje ha sido entendido o no (Watson y Hi11, 1997,41). lingüística debe ser relativa (véase el final de la sección 6.2.1). Inclu­
é"i' , ,
so así, la conexión entre conceptos y prácticas no se debe ignorar
~
[.~.] se puede definir la comunicación como una actividad en la cual el nunca y se mostrará posteriormente (especialmente en la sección
fj 'contenido simbólico no es meramente transmitido de una fuente a

• . otra sinÓ intercambiado entre agentes humanos que interactúan en un


contexto situacional y I o discursivo compartido (price, 1996,5).
8.2.1) cómo las ideologías lingüísticas pueden influir enla práctica
comunicativa.

".'e
/ ' .

314 Temas de . 315

• Memoria, que interactúa con los esquemas de categorización .


Autorrevisión y los guiones y se manifiesta en procesos de reconocimiento y
recuerdó.
En el extremo más saliente de la escala de la conciencia meta­
pragmática se encuentra la verdadera autorrevisión. Los usuarios del Estos tipos de procesos tienen lugar con 4iferentes grados de saliencia
lenguaje siempre supervisan los modos en que producen e interpretan o diferentes grados de conciencia que los dota de diferentes estatus en
enunciados, ya. que son conscientes de la necesidad constante de ne­ relación con el medio de la adaptabilidad. Tiene especial importancia
gociar significado y de los obstáculos que existen en el camino de esa a este respecto el ámbito de la conciencia metapragmática, la con­
negociación. Vacilaciones y reparaciones (véase la sección 1.1.4) son ciencia reflexiva del proceso de hacer elecciones lingüísticas.
sólo algunas de las más visibles manifestaciones de este proceso. Sin
embargo, debe guedar claro después de lo que se ha dicho hasta ahora En el medio de la adaptabilidad, el aparato cognitivo humano en
sobre saliencia, que los enunciadores e intérpretes no pueden nunca relación con el lenguaje: Chafe (1996), CoulsoIJ. (1995), Edwards
supervisar todos los niveles de elecciones simultáneamente y con la . (1997), Nuyts (1992), Vygotsky (1978). Sobre percepción y represen­
misma int.ensidad. Esta observación conduce posterionnente a im­ tación: Gumperz y Levinson (eds.) (1996), Lakoff y Johnsori (1980),
portantes recomendaciones metodológicas (en la sección 8.2.3), espe­ Lucy (1992 a, 1992b), Miller y Johnson-Laird (1976), Ungerer y
cialmente en relación con el estudio del discurso como manifestación Schmid (1996). Sobre planificación: Linde y Labov (1975), Schaok: y
de una ideología. Abelson (1977). Sobre memoria:.Chafe (ed.) (1980), Schank (1982).
Sobre (indicadores de) conciencia metapragmática: Abraham (ed;)
(1991), Benveniste (1966), Foolen (1996), Fraser (1996), Jakobson
(1971), Janssen y van derWurff (eds.) (1996), Kiefer y Verschuéren
6.5 RESUMEN Y LECTURAS RECOMENDADAS
(eds.) (1988), Lucy (ed.) (1993), Ostrnan (1981), Schiffiin (1988),
Silverstein (1976, 1993), Silverstein y Urban (eds.) (1996), Verschue­
En. este capítulo se ha tratado el tema del «trabajo» mental que ren, (1995c). Sobre universales metapragmáticos (fonnulados tenta­
interviene en los procesos 'de generación de significado en el uso del tivamente sobre la base de investigación léxica comparativa): Ver­
lenguaje. Este trabajo tiene lugar en un medio de adaptabilidad, la schueren (1989b). (1
«mente en sociedad». Se identificaron y discutieron tres tipos de pro­ O
cesos mentales que contribuyen a hacer elecciones lingüísticas:
• Percepción y representación, en el que intervienen procesos de 6.6 TEMAS DE INVESTIGACIÓN
categorización, asociación, abstracción, generalización y cosi­
ficación. Todos ellos contribuyen al trazado del espacio se­
A continuación véase un fragmento de un infonne sobre un' co­
mántico.
municado de prensa del Departamento de los Estados Unidos, .fechado
., Planificación, una actividad relacionada con la intención y el
el 26 de marzo de 1998 y distribuido por el Servicio de Infonnación
objetivo dirigida por guiones y que interviene tanto en la inter­ de los Estados Unidos. Describa su funcionamiento metapragmático:
pretación como en la enunciación.
\.
316 Saliencia
o
•.
1'RANSCRI~CIÓN: COMUNICADO DE PRENSA DEL DEPARTAMENTO DE ESTADO,
26 DE MARZO DE 1998

(Kosovo, Israel, Irán)

.~
Infonnó el portavoz J~es Rubin.

e KOSOVO - El embajador Robert Gelbard se ha reunido con el presidente


Milutinovic en Belgrado y el líder albano-kosovar Rugova y un' grupo de
'O estudiantes en Pristina, dijo Rubin. En estos encuentros, dijo Rubin, Gelbard
o ha subrayado la importancia del diálogo entre los dos lados y ha dejado claro
a los serbios que la presi6n internacional va a continuar «a menos y hasta que
ellos entiendan el mensaje y empiecen a concentrarse en el diálogo. en lugar
de en actos violentos como medio de resolver este problema»,
o . Gelbard infonnó que Kosovo estaba tranquilo pero dijo que la polida PARTEill

•• especial se está haciendo fuerte en lugar de retirarse, situación que Rubin ca­
racterizó como amenazadora. Advirtió que la comunidad internacional «pro­
cederá a tomar medidas incluso más duras si las autoridades serbias rió en­
TEMAS Y TENDENCIAS

'"
tienden el mensaje»"
ti
"

En respuesta a u~,pregunta sobre un supuesto acuerdo de annas pen­


O diente entre Rusia y Belgrado, Rubin dijo que ,el ministro ruso de Asuntos
Exteriores Yevegny Pnmakov ha dicho a la Secretaria de Estado Albright

.'
que Rusia apoyará la decisión del Grupo de Contacto de imponer un embar­
o gode annas contra la «República Federal de Yugoslavia» (<<RFY»). También
infonnó sobre negociaciones constructivas en la preparación de una resolu-'
ci6n ,de I~ O.N.U., con vigencia desde el 31 de marzo, que aplicará el embar­
O , go ..
@
Rubin dijo que el Grupo de Contacto recomienda que el embargo sea in­
condicional e ilimitado, y que sea levantado sólo cuando Belgrado cumpla
e con los requisitos del Grupo de Contacto. '
A
V¡). , «No tenemos ninguna razón para creer que Rusia no entiende que un
te '. embargo de annas e~ un embargo de annas»,dijo Rubin, <<:y esto significa
~
que no hábrá entregas de equipamiento militar (a la «RFY») si se establece el

"tie embargo».

•@

••
. )

INTRODUCCIÓN

La Parte II era litera1.rllente un intento de presentar «aspectos del


funcionamiento significativo del lenguaje». Cada uno de los cuatro
capítulos pone de relieve uno de los cuatrq ángulos necesarios desde
los que se debe enfocar el estudio del lenguaje en cualquier lingüísti­
ca seria d~l uso del lenguaje. Estos ángulos'son dependientes:unos de
otros y se pueden separar sólo por razones heurísticas. Nuestra hipó­
tesis de trabajo es que una perspectiva pragmática sobre cualquier fe­
nómeno lingüístico, propiedad, estructura o proceso requiere una in­
vestigación basada en su locus contextual y estructural (Capítulos 3 y
4), los procesos dinámicos del uso del lenguaje (Capítulo 5) y su es­
tatus en relación con una «mente en sociedad» ,humana (Capítulo 6).
Esto significa que ahora podemos tomar cualquier fenómeno, cual­
quier ejemplo de los capítulos anteriores y reexaminado bajo este

marco, mientras nuestra referencia anterior ilustraba sólo algún «as­

pecto» subrayado. Las limitaciones de, espacio, sin embargo, no nos

permitirán hacerlo sistemáticamente. Todo 10 que podremos ofrecer

en la Parte III es una aplicación de este marco de investigación a al­

gunos ejemplos seleccionados (Capítulos 7 y 8) que muestran cómo

se puede manej ar la teoría en la práctica para responder a preguntas

.de investigación lingüística. En el Capítulo 9 se presenta una vasta vi­

sión panorámica del origen de la pragmática y 10 que se conoce hoy

. con ese nombre (en la medida en que esto último no se trató en el Ca­

pítulo 1).
320 Temas y tendencias
r

Para la división temática del trabajo entre los Capítulos 7 y 8,'


distinguimos entre microprocesos, que tienen lugar en el contexto de
la comunicación diaria entre individuos o grupos pequeños, y macro­
procesos, que transcienden esos contextos (aunque se reflejen tam­
bién en ellos). Sería 'posible también otra distinción entre procesos al
nivel del uso adulto, procesos del desarrollo, procesos sincrónicos y
diacrónicos. No obstante, en los límites de este libro sólo hay espacio
7

para tratar tenias que son básicamente sincrónicos y al nivel del uso
adulto aunque no debemos olvidar que los procesos evolutivos y dia­ CUESTIONES MICROPRAGMÁTICAS

() crónicos también pueden distinguirse y separárse para la, investiga-'


ción pragmática.

"•• En este capítulo usamos la denominación «cuestiones rnicroprag­


máticas» para cubrir dos' tipos distintos de temas. En primer lugar,

• hay propiedades sistemáticas del lenguaje que la lingüística de los re­


cursos del lenguaje (véase la sección 0.1) no puede tratar porque es

"O
O
necesario recurrir a patrones de uso real del1enguaJe para su descrip­
ción o explicación, o entran en juego consideraciones que constituyen
inevitablemente una perspectiva pragmática. Vamos a limitar nuestra
discusión a dos ejemplos, el caso de la ordenación de .las partículas en
O una lengua 'rica en ellas como el holandés (sección 7.1.1), y el pro­
O blema de la performatividad (explícita) que ha obsesionado e inspira­
O do a la pragmática desde el principio (en la sección 7.1.2). En segun­
do lugar, se discutirán ejemplos de comportamiento verbal real, al
a)
micronivel de intera'cción a pequeña escala (o cara a cara), en un caso
\%:#

~
en una situación informal (en la sección 7.2.1), y en otro en un típico
Vd contexto institucional y profesional (en la sección 7.2.2).
.~

"O., 7.1 LOS RECURSOS DEL LENGUAJE NECESITAN UNA PERSPECrIVA PRAGMÁTICA

e., Implícita en la tesis de este libro de que la pragmática es real­


mente una perspectiva y no un componente de una teoria lingüística

•• l'RAGMÁ.TICA. -11
322 Cuestiones micropragmáticas Los recursos del lenguaje necesitan una perspectiva pragmát.ica 323.

está la convicción de que virtualmente todos los fenómenos lingüísti­ (1 ) Ga dan . toch ook nog maar eens even wat zitten
[Ir enton- aún tam- toda- pero una un un sentar] .,
cos se pueden investigar pragmáticamente. En él límite entre la lin­
ces bién vía vez rato poco ¡ \
güística de los recursos del lenguaje y la lingüística del uso del 1en­
2 3 4 5 6 .7 8
guaje, sin embargo, hay algunos recursos del lenguaje que no se I I I I ")
pueden tratar razonablemente a menos que se tome una perspectiva ,-,
I
;" ~
pragmática. Nos limitamos a dos claros ejemplos.
Aunque es posible combinar las partículas de (1) de varias mane­
7.1.1 La ordenación de partículas ras, el grupo contiene numerosas agrupaciones a pequeña escala ex­ fj
\. "
tremadamente comunes (de las cuales sólo tres se indican arriba: 1:-2,
El orden de palabras es un tema típico de la sintaxis pero tiene 3-4 y 6-7-8); una vez están todas en su lugar, permiten poca o ningu­ O
reconocibles y generalmente reconocidas implicaciones pragmáticas.. na permutación. Para empezar a preguntar por qué es necesario un
Si se cambia el orden de sujeto y verbo en una oración en inglés co­ entendillliento completo de la pragmática de una estructura como és­
mo This house is·too big [Esta casa es demasiado grande] no sólo se ta.
transforma una oración declarativa en una interrogativa sino que en la
En 10 que se refiere al contexto, (1) es enunciado por un profesor
mayoría de los casos se reemplazará una simple afmnación por la
universitario al final del siguiente intercambio con un estudiante que
pregunta]S this house too big? [¿Es esta casa demasiado grande?] Si . \.J
c"\

entra en su oficina cuando él está a punto de salir, después de una


llevamos a cabo una operación sintáctica algo más drástica que re­
conversación con otro estudiante que está todavía en lá misma habita­
sulte en This house, It's too big [Esta casa, es demasiado grande] o
ción.
lt's too big, this house [Es demasiado grande, esta casa] obtendre­
mos enunciados con estructura· de la información y condiciones de (2) 1. Estudiante: Zou ik u even kunnen spreken?

uso marcadamente diferentes. ¿Qué ocurre con los elementos lingüís­ ¿Podría hablar con usted un minuto?

ticos para los que la sintaxis no especifica reglas de ordenación? Un 2. Profesor: 'k Wou net vertrekken. Kun je morgen teru­

caso así se encuentra en las partículas. Sin entrar en distinciones más gkomen?

sutiles, las partículas son (normalmente) formas monosilábicas y no Estaba a punto de irme. ¿Puedes volver maña­

na?

flexivas, morfológic'amente intennedias entre palabras completas y


3. Estudiante: 't Gaat over de paper, en die moet morgen af

afijos. No contribuyen directamente a un contenido proposicional fá­


zijn.

cilmente identificable pero realizan una amplia gama de funciones, Es sobre el trabajo que hay que entregar maña­

desde modificar la fuerza ilocutiva o indicar el principio, la continua­ na.

ción y el fm de un tumo en la conversación, hasta señalar una ruptura 4. Profesor: Ga dan toch ook nog maar eens even \y;at zitten.

en la coherencia· o el estatus de la información de un .fragmento del Aproximadamente: Está bien, siéntáíe enton­

discurso como fondo o como primer plano. En lenguas ricas en partí­ ces.

culas éstas pueden aparecer en grupos. Cuando esto ocurre su orden


no es casual. Observemos la oración en holandés (1), con ocho partí­ El intercambio mismo podría comentarse extensamente pero va­
culas entre dos ítemes enteramente léxicos, ga (imperativo de gaan mos a limitamos a aspectos que son directamente relevantes a la for­
«in» y zitten (infinitivo, «sentar») que juntos significan sentarse. mulación de (2)4., es decir, (1). El marco de participación está foima­
( ¡

ü 324 Cuestiones micropragmáticas Los recursos del lenguaje necesitan una perspectiva pragmática 325
{)

• do por dos enuncíadores-intérpretes en una interacción cara a cara,


que funcionan corno fuente de lo que dicen (excepto en [... ] en die
moet morgen afzijn en (2)3., donde se invoca una fuente\ que, 'inci­
Mientras las otras partículas, además de su papel contextualizador,
contribuyen también directamente a la modificación del contenido
proposicional (dan tochmodifica la forma imperativa ga y eens even

•• dentalmente, coincide con el destinatario: es el profesor quien pidió el


trabajo para mañana), y que se tratan el uno al otro corno destinatarios
directos, pero con la presencia de un espectador circunstancial
wat modifica el «sentarse» que resulta del directivo, mientras que ook
nog puede modificar al directivo, al «sentarse» o a'ambos), la partí­
cula' maar codetermina la fuerza ilocutiva. El añadir maar a Ga zi­
(bystander), alguien q1.,le no participa, cuya existencia se reconoce con 'tten! (<<¡Siéntate!») para formar Ga maar zitten! nQrmalmente con­
() el ook en (1). Por parte del enunciador, (1) expresa un estado mental: vierte un mandato en una autorización (aproximadamente: <<Está bien,
existe al menos un cierto grado de irritación por estar obligado a que­ ¡siéntate!»).
C>
darse (cuya naturaleza objetable se señala con dan toch, donde toch La autorización (a sentarse para una conversación), en el contexto
"--.,0

invoca un contraste con un estado de cosas deseable y la «tardanza» del tipo de actividad de una consulta académica, parece ser el género
o se indica con nog), posiblemente combinado con una crítica, sugi­ al que (1) pertenece como parte de la secuencia de apertura dinámica
O riendo que el estudiante debería haber ido antes. En todo caso, el gru­ y negociada de tal áctividad. Como ya se ha indicado brevemente, el

•• (;
po de partículas eens even wat indica la intención del profesor de
mantener la conversación tan breve corno sea posible. El contexto so­
cial es institucional, con una jerarquía clara (y los marcadores de deí­
grupo de partículas contribuye significativamente al marco de signifi­
cación del episodio interacciona!.
En cuanto a la saliencia, no todas las elecciones de (1) se hacen
xis de actitud, u en (2)1. y je en (2)2. se corresponden con lasformas con igual conciencia. En particular, hay pocas dudas de que el orde­
O usted y ttrrespectivamente), que permite expresar irritación al enurt­ namiento real de las partículas elude las elecciones conscientes del
ciador en (1), mostrar control sobre las limitaciones de tiempo im­ enunciador tanto como elude al sintacticista. No obstante, el lugar
puestas en la siguiente actividad de habla y emitir una directiva corno más prometedor para empezar a buscar una explicación de lo que pa­
siéntate. Los parámetros temporales y espaciales, corno ya se descri­ rece ser un orden relativamente fijo es el medio de' la adaptabilidad,
bieron anteriormente, son simples pero necesarios para una compren­ las maniobras de la «mente en sociedad», Dividamos Ja pregunta so­
sión correcta de lo que ocurre. ' bre el ordenamiento en dos: primera, ¿por qué las series dan toch, ook
Obviamente, (1) requiere una referencia al contexto lingüístico nog y eens even wat ocupan sus respectivas posiciones? y segunda,
del intercambio. No podría ser enunciada aisladamente. La objeción ¿CÓmo se puede explicar su estructura interna?
que lleva implícita dan toch se refiere al' reparo real expresado en La respuesta ala primera pregunta es la más fácil. Hay una ten­
(2)2. Igualmente, aceptar la petición a pesar de la objeción se puede dencia general, que se deriva de las capacidades humanas para proce­
@ comprender gracias al argumento del estudiante en (2)3., que' en sí sar información, a que los ítemes lingüísticos que' conceptualmente
$' mismo depende de una conexión intertextual con las directivas ante-' están unidos también aparezcan próximos en la estructura lingüística

• riores del profesor.


Después de dar una función a todas las partículas en el anclaje
(excepto cuando hay una clara marca morfológiCa de relación). Por
consiguiente, la colocación de dan tochsiguiendo inmediatamente a

••"
contextual de (1), maar se queda colgado en ,el medio. Aunque su ga, de eens even wat precediendo a zitten y de ook nog en el medio se
funcionamiento está oscurecido por las partículas circundantes, pro­ puede explicar en base a sus contribuciones respectivas al contenido
bablemente no es muy diferente del papel que tendría aisladamente. proposicional (dan toch modifica el aspecto de autorización que re­

•e
326 Cuestiones micropragmáticas Los recursos del lenguaje necesitan una perspectiva pragmática 327·
presenta ga, especialmente la desgana implicada, mientras eens even aproximadamente. Skrabec (1903, pág. 555) identifica un Praesens
wat cualifica la naturaleza misma deL sentarse, especialmente su du­ effectivum «que no sólo nombra la acción sino también la realiza si­
ración, y ook nog pertenece a .ambos aspectos igualmente y enlaza el· multáneamente a la enunciación del verbo en cuestión». Observemos
,
... ;
1

. enunciado con el discurso precedente). No se puede formular una hi­ en primer lugar el fenómeno, cómo se ha formulado el «problema» y,
pótesis igualmente satisfactoria para la segunda pregunta. La estructu­ fmalmente, propondremos una solución.
ra interna de las tres subseries identificables del grupo puede ser sim­ La forma ortodoxa de un «performativo explícito», tal y como fue
plemente una cuestión de colocación, aunque para dan toch y eens presentada por Austin (1962) es la siguiente:
even wat podemos observar un grado creciente de vaguedad en la di­ [.implo, prosente, Indlcalivo, actiVO}
rección opuesta al elemento proposicional que modifican: dan se usa (3) Yo (por 1a present e) V '"
con frecuencia como temporal, refiriéndose a un momento específico;
en su sentido como partícula se refiere todavía de una manera relati­ Algunos ejemplos típicos:
l.
vamente concreta a «en ese caso>}, mientras que toch es más vaga­ (4) 1 (hereby) abdica te

mente concesivo; ·de igual modo, aunque en orden inverso, wat se re­ Yo por la presente abdico
".1
fiere a una cantidad concreta aunque no especificada, mientras que (5) I apologize for stepping on your toes 1
J
even indica duración relativa y eens señala muy vagamente «algún Me disculpo por meterme en 10 que no me incumbe .
momento». (6) 1 promise to come on Wednesday

Prometo venir el miércoles

Usando el vocabulario de una teoria general de pragmática, se


(7) 1 order you to leave the room·

puede llegar muy lejos en los intentos de describir y explicar fenóme.


Te ordeno s.alir de la habitaci6n

nos lingüísticos evasivos (con muchas reservas porque no se ha lleva­


do a cabo más investigación sistemática).
u
Se puede observar que la forma del presente simple del verbo en estos
ejemplos debe referirse al momento de hablar y no a una verdad ge­
O
7.1.2 El problema de la perjormatívidad
neral o habitual, como hace en otros casos.
O
En esta sección intentaremos demostrar cómo, tomando en consi­ Esta forma ortodoxa está sujeta a una cierta serie de variaciones
deración los ingredientes básicos de una teoría pragmática, uno de los en diferentes lenguas, dependiendo de sus características específicas.
«problemas» pragmáticos más arraigados puede encontrar una solu­ El húngaro, por ejemplo, no sólo ofrece un ejemplo análogo exacto:
ción fácil. El problema en cuestión es el siguiente: cómo se puede ex­ (8) Kér-em a segít-ség-ed-et

plicar que algunos verbos de actos de habla, pero no todos, se puedan [Pregunto-yo la ayuda(V)-Nominalizador-tu-Acusativo]

usaren una fórmula performativa explícita (véase la sección 1.1.2). [pido tu ayuda/Te pido que me ayudes]

Generalmente se le atribuye a Austin (1962) el «descubrimiento» de


una clase de enunciados, variablemente llamados performativos ex­ sino también:
plícitos o performativos. Estos enunciados contienen un verbo que
(9)· Kér-lek, segit-s

nombra el tipo de acto de habla que el enunciado realiza. Los lin­


[Pregunto-yo(Sujeto)tu(Objeto), ayuda-Imperativo]

güistas debatieron ya los enunciados performativos hace un· siglo


328 Cuestiones micropragmáticas
T

Los recursos del lenguaje necesitan una perspectiva pragmática. 329


Esta última fonna de·expresi6n sólo es posible por la existencia de un De estos ejemplos (lO) es el caso más discutible de perfonnativo: ni
sufijo verbal que combina la primera persona singular como sujeto . siquiera contiene el contenido de la petición a la que se refiere con
con la segunda persona singular como objeto (véase también la sec­ «pidiendo», lo que indica que el acto es una descripción de la petición
ciÓn 3.2:1). después de que ésta· se ha hecho por otros medios Oingüísticos) y no
Puede que no haya ninguna razón en absoluto para considerar (9) la petición en sí misma. Esto no significa que el presente continuo no
menos «ortodoxa» que (8) en húngaro. Sin embargo, la mayoría de pueda tener un significado perfonnativo; pero si 10 tiene, al menos
lenguas tienen también fonnas· de expresión que son funcionalmente parece intervenir la repetición de un acto precedente. Así (16):
bastante cercanas a ejemplos como (4), (5), (6) Y (7) aunque difieran
(16) ¡Te ordeno que salgas!
del esquema de (3) a lo largo de uno o más parámetros significativos.
Los siguientes ejemplos representan algunos de los tipos comentados
Es más probable que aparezca después de que el perfonnativo «pri­
en la literatura. Un p~er tipo de. casos no centrales de perfonnativos
e en inglés y francés, que se pueden llamar semi-perfonnativos, usan
mario» ¡Sal! no haya tenido efecto. Una segunda clase de casos de
o diferentes fonnas verbales. En (10) se usa el presente continuo, en
perfonnativos no centrales contiene modificadores verbales de dife­

•• (11) la primera persona del plural, la tercera persona del singular en


(12) y la pasiva en (13), (14) Y(15):
rentes tipos:
(17) . Creo que habría unos 20.

•oo (10) Te estoy pidiendo que hagas esto por mí Henry, te ·estoy pi­
diendo que hagas esto por mí, Cynthia y los niños.
1 am asking you to do this for me Henry, 1 am asking you to
do it for me and Cynthia and the chíldren. (Searle, 1989)
l' d guess there were 20 of them.

(18) Yo diría que esto es completaménte incorrecto.


1 would say that this is'completely wrong. (McCawley, 1917)
(19) Estimaría/replicaría que...
1 would estimate/reply/etc.that... (McCawley, 1977).
o
f";:;'
(11) Ofrecef11.os nuestras vidas, nuestras fortunas y nuestro sagrado
. honor.
(20) Te ofreceré la siguiente alternativa...
1 will ojJer you the following alternative... (McCawley, 1977)
~.
We pledge our lives, our fortunes and our sacred honour. (21) Te responderé (simplemente) que...
o (Searle, 1989) I will (simply) answeryou that... (McCawley, J977)
(12) El portador (de esta entrada) declara que es mayor de edad.
(22) Me gustaría pedirte que cambiaras tus planes.
Le porteur déclare étre majeur. (Comulier, 1980) l' d like to ask you to change your plans.
.• (13) Por la presente se comunica que todos los vuelos. a Phoenix
(23) Me gustaría anunciar el compromiso de...
han sido cancelados.
I'd like to announce the engagement oL. (McCawley, 1977)
Passengers are hereby advised that all flights to Phoenix have
9 (24) Deja que te pregunte qué te pasa.

•• been cancelled. (Searle, 1989)


(14) Se advierte a los pasajeros que nose asomen a las ventanas.
Passengers are warned not to lean out ofthe window.
(15) Está absueltolEs absuelto.
Let me askyou what bothers you. (McCawley, 1977)
(25) Deja que concluya/responda/etc; que...
Let me conclude/respond/etc. that... (McCawley, 1977)
(26) Digamos que son performativos semi-explícitos.

•••
You are dismissed.
Let us say that these are semi-explicit performatives. (Comu­
lier, 1980)

•_. I

1.
"r ~

330 Cuestiones micropragmáticas f Los recursos del lenguaje necesitan una perspectiva pragnú:ltica 331
------------------------------------------~~------
(27) Permlteme llamarte canalla. se refiere a un deseo que se encuentra en algún otro lugar de la carta
Allow me fa cal! you a bastardo (Comulier, 1980) (o puede no encontrarse). Los comentarios a (10) sirven para (34) y
/. \
(35): en ambos casos se puede argumentar que los nombres describen
Aunque esos modificadores verbales ya se añaden a la compleji­
antes que realizar actos que preceden (corno en (34)) o siguen (corno
dad semántica y pragmática de los perfonnativos, hay un tercer caso
en (35)).
de casos no centrales que, a falta de una mejor descripción, contiene La formulación original pre-austiniana del «problema de la per­
diversas «construcciones complejas»:
fonnatividad» era lógico-gramatical, un intento de emparejar com­
,;~. J"
(28) Esto es una ardilla, podemos decir. portamiento gramatical con propiedades funcionales y lógicas. Skra­
That's a squirrel, shall we say (Comulier, 1980) bec. (1903) y Koschmieder (1935) están perplejos por el hecho de que
(29) Esto es para agradecerte que ...
en las lenguas eslavas se usan principalmente los verbos imperfecti­
'Fhis is to thankyou for ... (Comulier, 1980)
vos para lo que ahora denominarnos uso performativo, aunque la na­ . ¡
(30) Esto es para informarte de que...
../
turaleza momentánea de los actos dictaría lógicamen.te usar formas
This is lo in/ami you that. .. (Comulier, 1980)

perfectivas.
(31) (Esto es) sólo para saludarte (p. ej. en una postal). ,.~

(This is) justto say helIo [e.g. one postcard]. (Comulier, 1980)
Searle (1989) ofrece una defInición completamente diferente del ~ )
(32) Te escribo/llamo para decirte (que)... problema de la performatividad. Para Searle el problema básico a ex­
I am writinglcalling to tellyou that... (Comulier, 1980) plicar es que yo puedo prometer venir a visitarte diciendo Prometo
(33) Si me atrevo a hablar aquí, es para expresar mi agradeci­ venir a visitarte, mientras que no se puede freír un huevo diciendo
miento más profundo ... Frío un huevo . .E n ténninos más filosóficos: ¿cómo explicarnos la
If I dare speak here, it is to express my profoundest gratítu­ existencia de una clase de oraciones c,:!yo significado puede ser usado
.1
de ... (Comulier, 1980) . para realizar el acto que nombra el verbo principal simplemente
enunciando la oración (que literalmente dice que estarnos realizando ó
o
Finalmente, se han propuesto incluso construcciones con nombres y
el acto en cuestión)? ¿Cómo explicamos la existencia de una clase de
no verbos corno (semi) performativas:
verbos que se presta a tales usos? ¿Cómo explicarnos que muchos
(34) Vendré a verte la semana que viene, es una promesa. otros verbos que parecen semánticamente similares no puedan usarse
1'11 come and see you next week, and that' s a promise. (Sear­ de la misma· manera (p. ej. no puedo jactarme diciendo Yopresumo
le, 1989) de que... o insinuar diciendo Insinúo que... )? ¿Hay algo en el signifi­
(35) Mi pregunta es, ¿qué quieres decir con ... cado de esos verbos que los diferencia?
My question is, what do you mean by... (Comulier, 1980)
En nuestras propias palabras: ¿los hechos observados están de­
(36) Encontrarás en esta carta mis mejores deseos para el Nuevo
Año. . terminados meramente por convención o hay algunas restricciones
You will find in this letter my best wishes for the New Year. pragmáticas más profundas? Omitiendo los detalles de la explicación
(Comulier, 1980) de Searle (para cuya discusión remitilnos a Verschueren, 1995d), lo

•.,é
I . que neces·ita una explicación es el comportamiento de un tipo especí­
El ejemplo menos discutible de éstos puede ser el más complejo; (36), fico de verbos de acción lingüística (VAL) que permite una maximi­

.'
que es en sí mismo un deseo para el Nuevo Año, aunque literalmente zación de reflexividad en el lenguaje. El problema de la performativi-

••
'r

o 332 Cuestiones micropragmáticas

"•• dad se convierte en el problema de cómo definir la autorreferencia


completa de los VAL. Un modelo descriptivo general y coherente para
el análisis ~e términos metapragmáticos debe ayudar a resolverlo. Tal

•• modelo es relativamente fácil de formular sobre la base de la teoría de


la pragmática esbozada en este libro, considerando sus implicaciones

•ca para el estudio del significado léxico (véase la sección 4.2.2) y la po­
sición a la que conduce en relación a los indicadores de 'conciencia
metapragmática (véase la sección 6.4).
o Una descripción no circular del significado de los VAL (en la cu­
o al el «significado» se construye en el sentido pragmático de su contri­
bución a la generación del signjficado en el uso del lenguaje) debe I .ti:) .'0
_=
M
..., especificar las condiciones prototfpicas bajo las cuales un verbo V se
=
o
u
u
O)
:;1
I .-
u "O
o
8 .....
O puede usar en una descripción D (que es también en sí misma una ac­ o
"O o
o
"O_ ,W oC.
i -

ción lingüística) de una acción lingüística A. Estas condiciones ( C ) C «l

•"., se pueden formular como condiciones o propiedades del acto a des­


=.-
.:

~lE
u
\ :: -y
1 ~ ;; I
"1:l

cribir (condiciones-A; abreviado corno C) y a veces en términos de ~-------------------------->

condiciones. o· propiedades del acto de describir (condiciónes-D;


O abreviado Cd). Puesto que tanto, A corno D implican todos los ingre­ I

O dientes de un acontecimiento de habla completo, las condiciones o u


() propiedades pueden estar unidas a los enunciadores (Ea y Ed) y a los
intérpretes (Ia y Id), sus mundos mentales de creencias, deseos, inten­
(.,-;:..
ciones, y también a .aspectos de los mundos fisicos y sociales, espe­
d cialmente las relaciones sociales. Lo que necesita explicarse es la
O elección en D en el nivel léxico, más específicamente un verbo V (un

•e
f'1'\
.V¡7
VAL) que describe A como forma de comportamiento verbal, en re­
lación con los ingredientes relevantes de A y D. En la figura 7.1 se
ofrece unápresentación esquemática.

e
o
(j.

.,o
.'
"
\1
-------------_ ... _-~....--~ ... ­
.
/

334 Cuestiones micropragmáticas Los recursos del lenguaje necesitan una perspectiva pragm~tica 335

Aunque las descripciones todos los VAL requieren condicio­ I Nuestra hipótesis es la siguiente: la autorreferencia completa en
\

i
nes D, la mayoría se refieren a creencias o supuestos que tienen el los verbos de actos de habla (un tipo de VAL) requiere la posibilidad ~ I

enunciador de D (p. ej. Ed) que simplemente reflejan condiciones o de hacer que A y D coincidan al máximo. En otras palabras, los ver­
propiedades de A. Por ejemplo, si la elección de prometer en una bos de los actos de habla que no requieren condiciones-D (más allá
descripción de A está regida normalmente por la condición de que Ea de los de tipo «reflexivo») para una descripción adec.uadade sus sig­
intenta llevar a cabo la acción especificada en el contenido proposi­ nificados, pueden, en principio, usarse de forma performativa. Tan
cional de su enunciado, entonces el uso de prometer en la descripción . pronto como se requieren condiciones-D exp1í:citas, hay una distancia
D es también normalmente regido por la condición D de que Ed debe conceptual entre A y ]j que hace imposible interpretar un enunciado
creer que Ea tenía esta intención cuando realizó el acto A. Peroade­ (es decir, procesarlo cognitivamente) en el cual V sea autorreferen­
más de tales «reflejos» de condiciones-A, algunos VAL requieren cíal.
también para su uso prototípico la satisfacción de condiciones que Los casos más simples en los que' es posible la coincidencia com­
pueden formularse sólo con referencia a D. Tomemos mentir como pleta entre A y D son esos en los que todas las C se definen por el
ejemplo. El uso apropiado dél verbo (en su sentido prototípico; véase contexto institucional al que pertenece A: no es casualidad que los el
Coleman y Kay, 1981) supone al menos las siguientes condiciones-A: ejemplos más típicos de Austinde performativos explícitos sean actos
como bautizar y suspender. La siguiente categoría, que .incluye el
• el contenido proposicional de A se desvía de alguna manera de
ejemplo prototípico deSearle de un acto de habla, una promesa, im­
«la verdad»
plica actos que son gobemadospornormas sociales relativamente cla­
• hay una discrepancia entre las creencias de Ea y el contenido
ras (aunque de gran manera específicas a cada cultura) para que su
prototípico del enunciado
estatus no sea normalmente ambiguo (o al menos se preste a ser' trata­
• Ea tiene alguna intención de engañar a la.
do como no ambiguo). Preguntar, ordenar, declarar,advertir, anun­
ciar, disculparse, agradecer y muchos otros tampoco requieren dis­
Todas estas condiciones se <<reflejan» en D(enJa forma de creencia
po: pa~e de Ed de que estas condiciones~A se satisfacen), peroade­
tancia entre· A y D. En otras palabras, los verbos correspondientes en o
~as eX1stenlas siguientes condiciones-D (es decir, condiciones que
inglés [yen español] tienen la capacidad de funcionar como indicado­ O
solo se pueden formular haciendo referencia explícita a algo que se
res reflexivos (con un alto grado de saliencia) de conCÍenciameta­
pragmática.
o
sitúa en ellado-D):
Sin embargo, para verbos de acto de habla que no se pueden usar
• El juicio de valor negativo de Ed sobre A (un juicio de valor de manera performativa, se puede mostrar que necesitan varios tipos f!!!J
negativo se asocia siempre con el uso del verbo mentir, como de distancia conceptual que bloquean el uso completamente reflexivo. O
resulta del hecho que cuando hay circunstancias atenuantes en Presentemos una breve visión' general de los ejemplos rritts citados C
la mente de Ed, el uso del verbo se evita tanto como es posi­ (que dividimos en cuatro grupos, que no representan una taxonomía,
ble). . porque en los mismos verbos pueden funcionar aspectos diferentes Q
" El juicio de Ed sobre el valor de verdad de la proposición en A ~~~. ~
(que creauna distancia interpretativa en el sentido que se ex­ Sugerir, insinuar, dar a entender, aludir requieren una distancia • .
plica más adelante). . interpretativa entre, A y D; La razón es que el <<modo de entreg~» en.' e
o

336 Cuestiones micropragmáticas Los recursos de/lenguaje necesitan una perspectiva pragmática 337

A, como 10 describe el verbo, es la implicitud; por 10 tanto el signifi- , para el fenómeno de la performatividad. Podemos aclarar mejor que
cado que es sugerido, insinuado, dado a entender o aludido es funda­ esto es exactamente lo que ocurre refiriéndonos a formas de uso en las
mentalmente «construido» por Ed. La condición-D que se supone es que se cancela el juicio de valor negativo. Observemos (37) y (38):
la intervención interpretativa de Ed que lo /la conduce a creer que A (37) Me jacto de ser un patriota.
significa algo más de 10 dicho realmente. Esto no niega que la inter­ I boast myself a patrlot
pretación es en otros casos un proceso activo también. Pero este pro­ (38) Prometo que te mataré.
ceso es colocado en primer plano completamente describiendo A co­
mo un ejemplo de sugerencia o insinuación, por lo que tal descripción La oraci6n (37) se tomó de un diccionario británico; como el patrio­
no es posible sin separar A y D. Como consecuencia, A y D no pue­ tismo se suele evaluar de manera positiva, el contenido de la oración
den coincidir y los verbos correspondientes no se pueden usar de ma­ cancela cualquier asociación negativa que el verbo factarse tiene
nera perfonnativa. normalmente. Por consiguiente la condición-D se anula y jactarse
Mentir, alegar, perjurar, bromear, jactarse- o fanfarronear tam­ puede usarse performativamente. (El hecho de que esta oración se en­
bién requieren distancia interpretativa, pero de un tipo ligeramente contrara en un diccionario no la hace necesariamente aceptable para
más específico. La razón es que actos como mentir, perjurar, etc. tie­ todos los hablantes de inglés. De hecho, un uso autorreflexivo de
nen un «estatus»queJlo tiene la ,intención de ser reconocido por la (al jactarse es sin duda extremadamente excepcional -10 que recalca lo
menos temporalment~); por 10 tanto, para poder ser descritos con re­ que hemos señalado sobre este verbo.) El comportamiento de prome­
ferencia a tal estatus;,es necesaria una intervención interpretativa de ter en (38) es similar, no implica las connotaciones negativas con las
Ed que cree una distancia conceptual inevitable entre A y D. La con­ que carga amenazar, por 10' que si prometer se usa como eufemismo
dición-D más especí:fl:ca (como ya se mencionó antes en referencia a con idéntica razón también se puede amenazar perfonnativamente.
mentir) es la siguiente: el juicio de Ed sobre el valor de verdad de la Finalmente, convencer, irritar, persuadir, diver.tir requieren una
proposición en A.
a Amenazar, quejarse (como opuesto aprotestar), blasfemar o mal­
distancia temporal entre A y D. Rázón: el efecto comunicativo de A
o decir, encubrir (como opuesto a disculpar), difamar (como opuesto a
debe haber tenido lugar antes de que A pueda ser descrito como haber
convencido, irritado, persuadido o divertido a alguien. Condiciones­
o acusar) pero también mentir y jáctarse o fanfarronear, todos requie­ D:,la evaluaci6n de Ed del efecto comunicativo de A. Ni que decir
ti ren una distancia evaluativa entre A y D. Raz6n: como ya se antici­
p6 enrelaci6n con m('tntir, la aceptabilidad social de los actos descri­
tiene que A y D no pueden coincidir si deben ser consecutivos.
En resumen, nuestra hipótesis sobre las condiciones bajo las cua­
O tos es baja, por lo que los juicios de valor negativos de Ed se asocian les un verbo de acción lingüística tiene un potencial perfonnativo, es
(7 conla misma elección de los VAL de la lista. Condici6n-D: juicio de decir, las condiciones bajo las cuales se puede usar de una manera
valor negativo del Ed. Esta condici6n-D hace imposible que el ha­ autorreferencial completamente o como un .indicador refl~xivo máxi­
@ blante describa su propio acto como amenázar" difamar, mentir O," mo de conciencia metapragmática, parece confirmarse completa­
alardear sin juzgarlo y de ese modo socavar el acto mientras 10 reali­ mente por los ejemplos que se encuentran en la literatura sobre actos
el za.Este es el ejemplo clásico de 10 que Vendler (1976) llam6 «suici­ de habla para ilustrar el «problema» de la performatividad. Si las ex­
@ dio ilocutivo» en ún artículo que contenía ya muchos de los ingre­ plicaciones aducidas hasta aquí son suficientemente convincentes pa­
O dientes necesarios para el tipo de explicación que intento fonnular ra justificar nuestra hipótesis en conexión con los ejemplos que· en­

••
338 Cuestiones micropragmáticas La pragmática de la interacción a pequeña.. escala 339

contramos en la literatura sobre actos de habla, todavía queda pen­ rrencia factual funcionan convenciones específicas a cada lengua. De
diente el problema de la performatividad tal y como lo formularon este modo, nada puede impedir el uso inglés de to ask (preguntar, pe­
Skrabec (1903) y Koschmieder (1935). ¿Cómo puede ayudamos nues­ dir), p.ej. en su sentido de petición, en una fórmula explícita perfor­
tro marco descriptivo a explicar el dominio de formas imperfectivas mativa. En el uso del inglés esto se hace raramente, mientras que su
en un uso performativo explícito? Si reemplazamos la anterior for­ equivalente húngaro kér (como en el ejemplo (8)) se usa en la mayo­
muladón lógico-gramatical del problema por un enfoque directo en ría de las peticiones diarias. Además, hay una gran variación entre·
términos del marco descriptivo que hemos bosquejado, la explicación lenguas sobre si la forma ortodoxa del performativo (ejemplos (3) a
es relativamente transparente. La elección entre «aspectos» alternati­ (9)) se usará con ·un verba específico o si se preferirá alguna expre­
vos (en este caso perfectivo versus imperfectivo) es algo quenecesa-· sión performativa no central (como en los ejemplos (10) a (36)).
riamente tiene lugar en el lado D de nuestro modelo: Ed tiene que hacer Aunque el principio básico pragmático parece bastante claro, la sus­
una elección sobre la qase de su juicio respecto al estatus tempo­ ceptibilidad del uso performativo puede ser en sí misma un fenómeno
ral/aspectual del'. acto realizado. Esta inevitable intervención inter­ gradual (como ya se sugirió anteriormente en la formulación de una
pretativacreauna diferencia conceptual entre A y D. Pero el papel de explicación para la elección del aspecto en las lenguas eslavas, y co­ o
Ed es explícitamente más central cuando se usa el perfectivo porque mo debe quedar claro por la observación de que puede haber una :3
el perfectivo es el caso marcado (véase la sección 2.1) en el contraste frontera borrosa entre las condiciones-D que son «reflexivas» y las
entre verbos perfectivos e imperfectivos en las lenguas eslavas. Como que no lo son). Esta gradación, a su vez, puede tener alguna relación
consecuencia se puede predecir que el perfectivo se usará menos -si con la preferencia por una fonna específica de expresión. Pero se re­
se usa alguna vez- en un enunciado performativo, ya que pone aten­ quiere una investigación pragmática mucho más detallada para hacer
ción más fuertemente en una distancia interpretativa entre A y D. estos temas tangibles. En particular, se tendrán que examinar modelos ()
Contrariamente a otras afirmaciones (como en Searle, 1989) de reales de uso, en los que interviene el poder completo de la negocia- .
que la ocurrencia performativa de Ciertos verbos de actos de habla es bilidad. Haremos referencia a un estudio empíríco relevante al tema
más o menos accidental y no tiene nada que ver con el significado de en el siguiente capítulo (sección 8.2.1).
o
esos verbos, creemos haber demostrado cómo un modelo coherente Q
para la descripción del significado de los verbos de los actos de habla O
(o VAL, o incluso términos metapragmáticos en general) hace prede­
7.2 LAPRAGMÁTICA DE LA INTERACCIÓN A PEQUE~A ESCALA
cible, en terrenos semánticos y conceptuales (tal y como estos se en­
tienden en el contexto de una perspectiva del lenguaje cognitiva, so­
cial y cultural, es decir, pragmática), si un verbo es apropiado para un Los casos de uso del lenguaje --de la misma manera que los re­ e
uso performativo o no. Los hechos de la naturaleza no tienen nada cursos lingüísticos- se pueden observar, en principio, desde'un pun­ o·
que ver con esto. El fenómenose puede formular enteramente en tér­
minos de procesabilidad, como actos y descripciones coincidentes, de
tó de vista no pragmático. De hecho, es necesario hacerlo para inves­
tigar propiedades estructurales de los mismos recursos usados:' Se
o
.~

enunciados que contienen verbos para hacer esos enunciados autorre­ puede investigar un gran corpus de textos para estudiar la distribución wo .
ferenciales: Lo que no es predecible, sin embargo, es si un verbo dado
se usará performativamente en una lengua dada. A nivel de la ocu­
de construcciones de genitivo entre tipos de oraciones, o para investi-··
gar la frecuencia relativa de ítemes léxicos como plan e,. airplane y'
-•.
e
G
''f~
I
!

340 Cuestiones micropragmáticas La pragmática de la interacción a pequeña escala 341


aeroplane ,(avión, en inglés). De igual modo, todos los ejemplos de dres a un restaurante cercano donde fueron a cenar con una pareja de
uso del lenguaje muestran propiedades formales «objetivas» que se amigos. Son alrededor de las once de la noche, aunque los padres ha­
o pueden investigar en sí mismas (desde fenómenos cuantificables co­ bían prometido volver alrededor de las diez. Esta breve información
mo el tamaño medio de una oración a la pauta de uso de conectores " sobre el canal de com].micación, el contexto de la actividad general y
en un texto). Sin embargo, las preguntas más interesantes sobre ejem­ la relación social entre los dos enunciadores e intérpr'etes implica que
plos de uso del lenguaje necesitarán invariablemente una perspectiva el fragmento (39) está conectado intertexfualmente con varios círcu­
pragmática. Una consecuencia es que los datos nunca hablan <<por sí los de comunicación más amplios. Para empezar, una conversación
mismos». En su calidad de formas de comportamiento que generan telefónica empieza normalmente con una señal mutUa, de que se ha
() significado, no pueden separarse de la compleja realidad del funcio­ establecido contacto, a veces combinada con indicaciones explícitas
namíénto humano. En el resto de este capítulo se ilustrará esto, prime­ de reconocimíento tÍmtuo. Además, es poco probable que la conver­
ro con un intercambio muy simple e informal y en segundo lugar con sación termine abruptamente después de (39)5. El cuerpo principal de
un tipo de discurso institucional. la conversación estará posiblemente en la continuación, p.ej, en forma
de una petición de la hija de que el padre Se comprometa a volver
7.2.1 Un intercambio informal pronto a casa. La conversación en sí misma está funcionalmente co­
Observemos el ejemplo (39). nectada a dos tipos de discurso precedente. En primer lugar, a menos
que el padre tenga un teléfono móvil, ha debido haber dos conversa­
(39) 1. Hija: ¿Sabes qué hora es? ciones precedentes con el único propósito de establecer el contacto
2. Padre: Sí. ¿Tú no lo sabes? para que la conversación sea posible: una entre la chica y el dueño del
3. Hija: ¿Sí?
restaurante (o un camarero) que contesta el teléfono y otra entre el
4, Padre: ¿Entonces por qué llamas?
5, Hija: ¡Papál dueño del restaurante (o un camarero) y los padres en la mesa. Sería
G un grave error pensar que esta conexión intertextual' es insignificante
Como debe estar claro a estas alturas, la tarea central de una in­ e irrelevante. Lo que la chica dice al dueño puede influir en el modo
()
vestigación pragmática de este fragmento de discurso es rastrear el en que su llamada es comunicada a sus padres, quienes, a su vez,
O modo en que el significado se genera interactivamente tanto en térmi­ pueden establecer el tono de la conversación de la cual (39) es una
O nos dedinámíca (como se descnl,e en el Capítulo 5) como en térmi­ parte. En segundo. lugar, el contenido de la conversación está íntima­
nos de la saliencia de los procesos que integran esa dinámica (CapI­ mente conectado a lo que fuera que se dijeron la hija y los padres an­
O tes de que éstos salieran hacia el restaurante (ya sea inmediatamente
® tulo 6). A menos que se permita la mera esp~culación, ,no hay
ninguna manera de llevarlo a cabo, sin embargo, sin definir su locus, antes o en alguna ocasión anterior).
C:"~
En términos estructurales; (39) es un grupo de enunciados con un ,

•.,
~
tanto en términos extralingüísticas como lingüísticos (véanse 16s ca­
pítulos 3 y 4 respectivamente). estilo bastante informal. Los enunciados individuales en sí mismos
son estructuralmente muy simples: todos menos uno contienen una
11 En 10 que se refiere a sus coordenadas contextuales, (39) es un
única oración corta y dos de ellos son solamente una palabra. Los
fragmento de una conversación entre una chica de 13 años y su padre.
Están hablando por teléfono. La chica está en casa y llama a sus pa­ enunciados' de (39) 1. a (39)4; terminan con una entonación ascen';
el dente característica de las estructuras interrogativas en inglés. Esta

••
(9
T

\
342 Cuestiones micropragmáticas La pragmática de la interacción a pequeña escala 343

puede ser una de las propiedades a explicar porque la expectación . presente de manera saliente tanto para E corno para l, y que el padre
normal sería encontrar pares adyacentes de pregunta-respuesta. juega conscientemente con la distinción entre 10 implícito y lo explíci­
La pregunta crucial es:. ¿qué ocurre con el «significado» en (39)?
to. La hija, en principio, está «engañada», por el juego del padre, pero
El marco de significado en términos del· cual tienen que interpretarse
10 entiende rápido y da voz a su irritación (inspirada al menos en parte
los procesos de negociación viene dado por el tipo de actividad o
por la conciencia súbita de que su padre se estaba burlando de ella).
acontecimiento definido por los ingredientes señalados anteriormente: .
Un fragmento aislado como (39) siempre presenta más preguntas
una conversación telefónica informal entre dos parientes cercanos en
de las que se pueden responder sin más investigación. Elobjetivo de
la cual la persona que llama está de algún modo «controlando» a la
presentarlo es doble. Hay, en primer lugar, una intención de demos­
persona llamada. En este contexto, el enunciado de la hija·(39)I. es
trar brevemente cómo se puede formular una explicación coherente
dificilmente interpretable como una pregunta sobre la hora (ya sea
en términos de las cuatro tareas a realizar en el curso de un análisis
vista como «literab> por la convencionalidad de la forma o como «in­
pragmático. En segundo lugar, este ejemplo ilustra los tipos de pre­
directa» por ser literalmente una pregunta sobre el conocimiento del
guntas que se pueden plantear desde un punto de vista pragmático.
destinatario más que directamente sobre la hora). Recurriendo al co­
Hagamos una lista de algunas de ellas.
nocimiento compartido sobre Un compromiso anterior (o al menos

• ¿Cuál es el estatus de este fragmento en reiación con el resto


una afmnación predictiva) por parte de los padres en relación a la ho­

ra de su regreso a casa, la pregunta de la hija se convierte en un re­


de la conversación? o ¿Cómo es posible considerarlo como una
proche (si es serio o no sólo se puede deducir por aspectos de proso­
unidad o episodio separable que se abre con la pregunta de j

dia). Esta interpretación, que se puede suponer que es completamente


(39)1. y se cierra con la exclamación de (39)5.?
accesible para el padre, es rechazada por éste jugando: en (39)2, rea­
• ¿Cómo se conecta esta conversación con el discurso prece­
·dente? ¿Cuál es, por ejemplo, la influencia de la manera de ex­
signa el género de pregunta al enunciado de la hija (de nuevo; ya sea

presarse usada por el propietario del restaurante (que variará en


«literal» o «indirecta») añadiendo una oración que cuestiona (y de ese

relación con los lazos entre el propietario y los clientes) en el


modo expresa sorpresa) una de las implicaciones que normalmente

género o la aproximación que adopta el padre?


tienen las preguntas, es decir, que el que pregunta no sabe la res­

puesta. Sorprendida, la hija responde Sí a la pregunta del padre en


• ¿Cuál es el papel de los factores de personalidad?
(39)3., pero indica --con una entonación ascendente- que está per­
• ¿Cuál es la correlación, exactamente, entre, por un lado, el es­
pleja y espera que haya una continuación. Corno eso no cuestiona el
tilo usado y, por otro, el canal de comunicación y el 'tipo de
"' rechazo del padre a reaccionar «apropiadamente» a la pregunta inicial relación social? . ':J
• ¿Cómo podemos estar seguros de la comprensión del signifi-:
(teniendo en cuenta su significado implícito), el padre puede conti­
cado implícito? 0, por la misma razón, del significatro explí­
O
nuar su propio juego estratégico preguntando (39)4., que, en la super- . ()
cito 'también.
ficie, es un intento de obtener una afirmación explícita sobre un obje­
tivo oculto que todavía fmge no entender. La hija de pronto se da • ¿Qué sistematicidad caracteriza la función contextualizadora ()
cuenta de lo que ocurr~ y enuncia un vocativo con irritación en (39)5.
de los marcadores prosódicos?
• ¿Cómo se explica que parezca más fácil ignorar aspectos de
e
Muy poco de 10 que realmente ocurre en este intercambio se hace ~.

explícito. Aún así está claro que el significado implícito de (39)1. está significado implícito que cuestionarlos?
()

346 Cuestiones micropragmáticas


í La pragmática de la interacción a pequeña escala 347 '1

El ejemplo es el análisis de Goodwin (1994) de los juicios de Ro­ una constelación de diferentes tipos de enunciados y grupos de enun­
dney King en Los Ángeles. Después de detener su vehículo por una ciados: una variedad de enunciados monologales (el juez dando
infracción de tráfico el3 de marzo de 1991, King, un afroamericano, instrucciones, la recapitulación del jurado) y grupos de enunciados
'fue violentamente golpeado por un grupo de cuatro policías. Cuando dialogales (interrogatorios a los testigos), todos conectados intertex­
se mostró la cinta de este hecho, grabada por un cámara amateur, el tualmente (como en secuencias de interrogatorios, la recapitulación
escándalo público llevó a los policías a juicio por abuso de la fuerza. del jurado resumiendo lo que ha precedido, etc.). Contextualmente,
Los procesos judiciales, como cualquier otro acontecllniento co­ los papeles de los participantes están bien definidos (el acusado, el
municativo, sólo se pueden entender apropiadamente en función del juez, el fiscal, los abogados de la defensa, jurados, testigos, peritos). "

cuadro significativo impuesto por el tipo de actividad, que es en este Esos papeles institucionales se defmen en términos de asignación
)
caso predominantemente institucional. Decimos «predominantemente previa de tumos o tipos de -tumo (o tipos de géneros verbales) que
institucionau> porque el suceso, que es en principio autónomo y debe­ usarán cada uno de ellos: los jueces dan instrucciones, los abogados
ría seguir sólo la~ reglas relativamente estrictas de interacción im­ preguntan (de un modo institucionalmente permisible) y objetan a las
puestas por las 'instituciones establecidas para administrar justicia, preguntas de los otros, los testigos responden, los jurados escuchan
forma parte de un 90ntexto de comunicación mucho más amplio. Para (actuando como participantes marginales a 10 largo de la mayor parte ,)
dar un ejemplo, es posible que no hubiera tenido lugar un juicio .sin el del proceso, como destinatarios directos principalmente durante la re­
escándalo público que generaron el vídeo y los comentarios sobre capitulación y como un enunciador colectivo al término del, proceso).
el vídeo. Como resultado, desde el principio el juicio fue parte de un La dinámica de la interacción en conjUnto se determina por esas es­
debate general público y político, con intervención real de mucha tructuras y roles, de los cuales los participantes son bastantes cons­
gente (lo que se volvió trágicamente claro cuando el veredicto de ino­ cientes, en combinación con una tarea a realizar: decidir la culpabilí­
cente para los policías en el primer juicio disparó las revueltas en Los dad o inocencia del acusado. El proceso resultante toma la forma de
Ángeles, sin las cuales posiblemente no hubiera tenido lugar el se.' un concurso entre la fiscalía y la defensa, en el cual el objetivo de la
~do juicio federal un año más tarde, en el que dos de los cuatro po­ fiscalía es probar la culpabilidad y es suficiente para la defen.sa si
hClas ~eron condenados por violar los derechos civiles de King). puede suscitar duda razonable sobre la culpabilidad del acusado. Da­
Ademas, el suceso tuvo Una gran publicidad en los medios de comu­ da la naturaleza éompetitiva del acontecimiento, los participantes '. )
nicación. Seria un error ignorar la posible, incluso probable, influen­ también saben que no es la principal preocupación ni de la fiscalía ni
cia de esta capa circundante de comunicación y conflicto social. Ob­ de la defensa la búsqueda de'«la verdad», sino la búsqueda de estrate­
viamente, lo que .se diga' durante el juicio será' adaptado, tanto en gias para ganar. En este proceso el lenguaje es la herramienta más
contenido como estilo, para una serie de destinatariosl.2....n, en particu­ poderosa para con.struir los significados deseados.
lar periodistas, audiencia de los medios de comunicación y grupos de En el primer juicio de Rodney King la fiscalía empezó aparente­
presión políticos. - , mel1-te desde el supuesto de que teman un caso sólido, con una prueba
En la medida
, .
en que el suceso puede con.siderarse autónomo, aún incontestable e inequívoca en forma de cinta de' vídeo. Como Good­
represent~ un tipo de actividad altamente complejo. Los siguientes win (1994) muestra, sin embargo, fue suficiente para la defensa im­
com:ntanos se refieren al tipo concreto de juicio con jurado que es poner lo que él denomina «visión profesional» en lo que se podía ver
comun en los Estados Unidos. Estructuralmente, el juicio consiste en en la cinta para crear un cuadro de interpretación que conduciríaco­
344. Cuestiones micropragmáticas La pragmática de la interacción a pequeña escala 345

• ¿Cómo se caracteriza el tipo de cooperación que se encuentra regla sigue siendo seguir el rastro de 10 que pasa realmente con los
en un intercambio como (39)1 O. ¿dónde entran los elementos aspectos de significado en cuestión, qué es 10 que se hace realmente
conflictivos que son parte de la interacción diaria tanto como con ellos, en el curso de la interacción de la vida real. No obstante, se
la cooperación? pueden concebir experimentos para suplementar los resultados. Con­
trolar todas las variantes relevantes, sin embargo, es casi imposible en
,Una vez que tenemos preguntas interesantes de este tipo, el problema el área de la pragmática (un factor que hace el uso de entrevistas y
es qué es lo que consideramos datos probatorios en la búsqueda de cuestionarios no fiable en absoluto). La introspección puede tener un
respuestas. Debe quedar claro que la naturaleza de los datos reunidos papel, como se dijo antes, cuando sea relevante preguntar qué podría
o y las metodologias a adoptar sólo pueden decidirse en función a la pre­ haber ocurrido en lugar de 10 que se ha observado, o por qué una op­
gunta específica que se plantee. La única regla general es que la com­ ción disponible no es elegida. En otras palabras, en principio nada se
paraciónentre ejemplos de habla real, que ocurren naturalmente (se­ excluye pero hay una clara clasificación de preferencias de los tipos
leccionados entre dimensiones de variación pertinente a la pregunta de datos probatorios disponibles ..
planteada) es siempre un buen punto de partida. Para estudiar la pre­ Además de los tipos de preguntas de la lista anterior, la investiga­
Q gunta final que formulamos, por ejemplo, es útil contrastar (39) con ción puede por supuesto concentrarse en procesos característicos de
tj casos como (40) (los paréntesis cuadrados alineados verticalmente grupos específicos de hablantes. De este modo, se puede centrar en

•••
.(')
indican habla solapada).
(40) (De SChiffrin, 1994, pág. 434)
1. Debby: [Sí, es la clase
fenómenos de adquisición o de deficiencia comunicativa. No es nece­
sario decir que en este libro, donde se tiene que cubrir la mayoría de
metodologías especificas a un tema, no podemos ,entrar en esas áreas
,---' de investigación seriamente.
2. Irene: [es verdad
3. Heruy: Es la cIase media ...
4. Irene: Es la clase media [que da á los niños todo 7.2.2 Un acontecimiento institucional
o 5. Debby: [Sí
La definición que se ofreció (eri la introducción a laParte TI!) para .
o En contraste con la no cooperación estratégica que encontramos en
distinguir entre microprocesos y macroprocesos (los pnmeros tienen
lugar en un contexto de comunicación diaria entre individuos o pe­
(39), el ejemplo (40) ofrece un caso de cooperaCión conversacional
queños grupos de individuos y los segundos transcienden esos con­
espontánea perfecta: tres personas formulan de manera colaborativa
textos, aunque todavía se reflejen en ellos) ya implicaba que la distin­
una opinión compartida: No obstante, los elementos de conflicto que
ción es artificial. Incluso una conversación telefónica entre un padre y
se ocultan en (39) están bastante atenuados, mientras que en la con­
e versación de la cual se tomó (40) los desacuerdos explícitos salen a la
su hija forma parte de un contexto mucho más amplio que implica
e superficie por todas partes y los participantes normalmente están pe­
actividades socialmente definidas y productos normativos de procesos

•• leando para tomar la palabra.


.. ' Además de datos reales, también pueden ser útiles para ciertos ti­
de socialización. El segundo ejemplo de interacción a pequeña escala,
que muestra cómo se puede generar el significado en el contexto ins­
titucional de un proceso judicial, demostrará este hecho de manera


el
pos de preguntas los datos obtenidos experimentalmente. Para estU­
diar la comprensión del significado implícito, por ejemplo, la primera
más contundente.

•.,•
348 Cuestiones micropragmáticas La pragmática de la interacción. a pequeña escala 349

mominimo a «duda razonable». Con este objetivo la defensa llamó a al nivel que lo había hecho previamente, (004)
los'peritos, cuya primera tarea fue descomponer lo que parecía una y el descenso ha cesado.
paliza masiva y etiquetar y categorizar los fragmentos, como en (41)
Oosnúmeros entre paréntesis indican pausas en segundos). , Elegir la forma completamente pasivizada Vemos que se lanza un pu,.
ñetazo en (42)1. en lugar de la alternativa obvia «Vemos al agente X
(41) (De Goodwin, 1994,617)
Perito: Hubo
golpeando a Rodney King», o decir el descenso ha cesado en lugar de
diez usos distintos (1.0) de fuerza
«han empezado a pegar otra vez» es una estrategia estándar para qui­
tar la atención que está puesta sobre el agente. En otra,s palabras, se
hace responsables a los agentes no por el desagradable curso de las
o En cada uno de esos usos de fuerza
hubo una escalada y un descenso, (0.8) acciones; simplemente hacen, de modo bastante responsable, lo que
un período de evaluación, (1.5) cualquier otro policía ha sido entrenado para hacer, en circunstancias
y entonces una escalada y un descenso otra vez. comparables. Para hacer completamente aceptable esta interpretación,
o (0.7)
y otro período de evaluación.
la defensa tiene que demostrar que el comportamiento de Rodney
King da buenas razones para que los policías consideraran necesario
el uso de la fuerza. Con este fin, la defensa' llama al Sargento Duke
La categorización s~introduce de manera muy consciente para ofre­
del Departamento de Policía de Los Ángeles y 10 presenta como pe­
cer un nuévo significado a lo que se puede ver. En un contexto donde
rito en el uso de la fuerza. En el fragmento (43) (donde dos puntos in­
la práctica profesional permite el uso de' fuerza cuando es necesario,
dican el alargamiento de la vacal), el fiscal cuestiona su testimonio
especialmente el término evaluación sitúa el suceso en un cuadro en
haciendo notar que King parece estar moviéndose ala posición para
el que interviene un comportamiento racional y' completamente res­
ser esposado. '
ponsable por parte de los agentes de la policía. En la misma línea, en
otro fragmento, se define pat~das como herramienta del trabajo poli­ (43) (De Goodwin, 1994, 619)
cial, al mismo nivel que la porra, una estrategia de categorización 1. Fiscal: Entonces, ¿usted
que elimina el enlace asociativo entre patadas y furia o malevolencia. consideraría otra vez que esto e:s
La impresión de que los agentes de policía estaban haciendo su tra­ un movimiento no agresivo del señor King?
2. Duke:· En este momento no, no 10 consideraría (1; 1)
bajo se refuerza todavía más al despersonalizar sus acciones. Obser­
. 3. Fiscal: Es agresivo.
vemos (42) (donde'los signos de igual al fma1 de una línea y al prin­ a
4. Duke: Sí, 10 empieza ser. (0.9)
cipio de la siguiente indican que los fragmentos se siguen sin ninguna Este pie, está plano en el suelo. (0.8)
pausa; un guión al final de una palabra indica vacilación). ' Empieza a haber una curva en eeh (0.6)
(42) (De Goodwin, 1994, 617) esta pierna (OA)
1. Defensa: Cuatro, 000... cinco, 000... uno. en su trasero. (004)
Vemos, que se lanza un puñetazo. El área de las nalgas ha empezado a levantarse, (0.7)
=¿Corre,cto? 10 que nos pondría,
2. Perito: Correcto. en el principio de nuestro espectro otra vez.
La- fuerza se ha intensificado otra vez (0.3)
350 Cuestiones micropragrnáticas Resumen y lecturas recomendadas '-'C 351 )
" '

En otras palabras, lo que el fiscal interpretó como cooperativo es re­ caron como espasmos naturales de los músculos en respuesta a la pa­
interpretado por el sargento Duke como agresivo. El uso de descrip­ liza y se destacaron diferentes partes de la cinta (como la postura fisi­
ciones vagas como empieza a (dos veces) y ha empezado a en (43)4. ca de los dos agentes que no estaban golpeando, sólo estaban de pie y
muestra cuánto depende el marco del deseo de imponer una interpre­ mirando y no preparados para controlar a un criminal peligroso). Co­
tación. En consecuencia, el fiscal aún puede desafiar la habilidad del mo vemos, se puede dotar a las mismas pruebas de significados com­
perito para entrar en los procesos de evaluación que se dice que los pletamente diferentes. Es, sin duda, el poder del lenguaje.
policías llevan a cabo.
(44) (De Goodwin, 1994,625) ,
1. Fiscal: ¿Puede leer sus mentes eeh, (l.4) sargento Duke? 7.3 RESUMEN Y LECTURAS RECOMENDADAS
(1.3)
2. Duke: Puedo, (004) fonnar una opinión basada enmi en­
trenamiento En este capítulo se han ofrecido algunos ejemplos seleccionados
y en haber entrenado a otros, 'para ilustrar cómo una teoría de la pragmática, como se define en este
10 que puedo percibir que ellos perciben. (0.6) libro, puede ser usada para ofrecer un análisi,s,pragmático defenóme­
3. Fiscal: Bien ¿cuáles son las percepciones del señor King nos lingüísticos de pequeña escala y de ejemplos de uso del1énguaje
en este momento? (0.6) al micro nivel de la interacción' cara a cara. Primero se mostró cómo
4. Duke: Nuncahe sido un sospechoso.
la pragmática puede explicar hechos del lenguaje que parecen arbitra­
No sé.
rios, como la ordenación de las partículas y las capacidades perfor-.
El sargento Dukeexige el derecho a hablar como un profesional ex­ mativas de ciertos verbos de actos de habla. Después se comentarqn
perto capaz de penetrar en los procesos mentales que tienen lugar en las dos ejemplos de interacción lingüística, uno en una situación informal
y otro en un contexto institucional. '
mentes de los agentes de policía. La imagen resultante es por definición
discursivamente construida. Aunque no pudiera convencer a los miem­ Otras lecturas sobre partículas: Abraham (ed.) (1991), Foolen
bros del jurado de la validez del juicio del abogado de la defensa de que (1996). Sobre performatividad: Récanati (1981), Searle (1989), Ver­
, ()
«sólo Rodney King tenía el éontrol de la situación» mientras, estaba schueren (1995d). Sobre conversación cara a cara: Atkinson y Herita­
tendido en el suelo boca abajo y rodeado por cinco hombres armados, ge (eds.)(1984), Kerbrat-Orecchiono (1990/92/94), SacIes (1992), o
~;;I.
su declaración fue sufi9iente para inspirar «duda razonable». Schiffrin (1994). Sobre discurso institucional: Atkinson y Drew (1979),
La medida en que el resultado de acontecimientos institucionales Walter (1988), Drew y Heritage (eds.) (1992), Goodwin (1994), Sa­
de este tipo es el producto de procesos verbales de generación de sig­ rangi y Slembrouck (1996), Gunnarsson et al.. (eds.) (1997).
nificado (en este caso incluso construcción activa) queda también cla­
ra por el segundo juicio. En esa ocasión el fiscal ya no confió en las
prueb~s visuales sin interpretación sino que ofreció un cuadro alter­ 7.4 TEMA DE INVESTIGACIÓN
nativo: se introdujo un nuevo motivo (dar una lección a alguien que
no ha sido respetuoso), los movimientos del cuerpo de King se expli­ El tema de investigación presentado en la sección 6.6 contenía un
'fragmento de un informe del Departamento de Estado de los Estados
'~ ..- .

352 Cuestiones micropragmáticas Tema de investigación 353

o Unidos,en la sesión infonnativa del mediodía del 26 de marzo de que entiendan el mensaje y empiecen a centrarse en el diálogo y no
1998, tal y como fue distribuido por el Servicio de Infonnación de los en las medidas represivas como medio de resolver este problema.
Estados Unidos (SIEU). El fragmento que se presenta aquí fue escrito La situación.en Kosovo, ~egún la opinión del embajador Gelbard,
.como un infonne nonnal, aunque el encabezamiento del mensaje del es de tranquilidad. Sin embargo, creemos que la policía especial se
SIEU decía «Trancripción .. ». De hecho, el mismo mensaje del SIEU está haciendo fuerte; que no hay ninguna indicación de que vayan a
abandonar, y que sus actividades son por 10 tanto amenazadoras. Lo
tanlbién contenía la transcripción'oficialliteral de la sesión infonnati­
que vamos a encontramos si ellos no entienden el mensaje que el
va en cuestión. El fragmento correspondiente al «infonne» de la sec­ Grupo de Contacto intent6 enviarles es una situación en la que va a
ción 6.6 se incluye a continuación. Estudie' la generación del signifi­ aumentar la violencia y en la que el Grupo de Contacto y la comuni­
o cado en la interacción de esta versión transcrita. dad internacional procederá a medidas más duras si las autoridades
serbias no entienden el mensaje.
DEPARTAMENTO DE ESTADO DE LOS ESTADOS UNIDOS P: ¿Piensa que el acuerdo con Rusia sobre el embargo de annas
SESIÓN Th'PORMATIVA DIARIA . bloqueará este presunto acuerdo de annas ruso con Belgi:ado del que
DPB#37 se ha habládo?
. JUEVES 26 DE MARZO, 1998, 12:40 PM RUBIN: Bien, la Secretaria Albright recibió garantias del Ministro
(INFORMACIÓN PÚBLICA A MENOS QUE SE INDIQUE LO CONTRARIO) de Exteriores Primakov, como indicó la declaración del Grupo de
Contacto. El Ministro de Exteriores Primakov dijo a la Secretaria que
RUBIN: Bienvenidos a la sesión infonnativa del Departamento de ellos van a seguir adelante y van a implementar las decisiones de im­
Estad6:;Es buerto ver que al menos algunos de los que viajaron con el poner un embargo de annas.
Secretario han logrado estar aquí hoy -al menos algunos de ustedes Se fijó la fecha del 31 de marzo -un objetivo, más bien- para
10 hicieron.. aprobar la resolución. Las discusiones siguen teniendo lugar en Nue- .
Tenemos una declaraci6n sobre Laos, sobre el tema de la libertad va York y nuestros diplomáticos allí nos ínfonnan de que son cons­
de credo, que se hará pública después de la sesi6n. Los dos periodis­ tructivas. Tenemos buenas razones para pensar que ..se impondrá un
. tas de Associated Press deben decidir cuál de ellos va a preguntar en embargo de armas a tiempo. Y si no es así, ,eso causará problemas.
primer lugar.
Pero suponiendo que tendrá lugar, nonnalmente un embargo de
P: Bien, ¿puede volver a algo que se dejó ayer pendiente? Había annas prohibiría la entrega de equipos milítares desde el momento en
() alguna duda sobre si Gelbard seria capaz de entrar en Belgrado. ¿Tie­ que el embargo de armas entre en vigor. Hubo alguna sugerencia de
ne alguna novédad? que quizás este embargo de armas deberia tener un tiempo limitado.
O Esto fue reéhazado por el Grupo de Contacto; va a ser un embargo de
RUBIN: Sí, hablé con el embajador Gelbard hace más .0 menos
9 una hora. Le dieron autorización para volar en el último momento. Se annas incondicional e ilimitado que sólo será levantado cuando Bel­

\¡;jI encontró con Milutinovic en Be1grado. También se reunió con Ibra­ grado cumpla con los requisitos del Grupo de Contacto. Todas las re­
@ him Rugova en Pristina y con un grupo de líderes estudiantiles. Está soluciones de embargo de aunas que he visto -y no he mirado real­
subrayando la importancia del diálogo y que en el lado serbío, cum­ . mente este téxto- prohíben, desde el momento de su decreto, la
~
.•. "
\íiiI plan con las cuatro condiciones del Grupo de Contacto; que entiendan entrega de armamento.
O que el mensaje que salió de Bonn era un mensaje que indica que Ía De acuerdo con 10 que sabemos y no sabemos sobre 10 que estará

• presión sobre Serbia-Montenegro va a continuar a menos que, o hasta pasando, todo 10 que puedo decir es que somos conscientes de la po-
PRAOMJ..TICA,-12

"•

·T··. '

. ,.

354 Cuestiones micropragmáticas

sibilidad de cooperación de los ejércitos entre Rusia y Belgrado. Este


es un asunto que,. desde nuestró punto de vista, si incluyera equipa­
miento militar, quedaría prohibido por una resolución de embargo de
armas. Esta es precisamente la razón por la que esta resolución será
importante.
P: ¿Discutió este particular trato o tema en Bonn con los rusos?
RUBIN: Bien, no estoy en condiciones de describir cada aspecto
de las discusiones entre los dos ministros; sólo puedo decir que no te­ 8
nemos razones para creer que Rusia no entiende que un embargo de
armas es un embargo de armas -y esto significa que no habrá trans­
CUESTIONES MACROPRAGMÁTICAS
ferencias de equipo militar si se decreta el embargo.
P: Sí eso está tan claro ¿sobre qué son las discusiones en Nueva
York?
RUBIN: Bien, como ya he indicado a muchos de ustedes en mu­
Este capítulo trata de cuestio~es relacionadas con las implicacio­ o

nes que, de modo inevitable, van más allá. del aquí y ahora de la inte­ .(J
chas ocasiones, cuando ustedes escriben la frase «embargo de armas» ,
racción lingüística a pequeña escala. Corno se indicó (al principió de .
, >
en sus reportajes, parece que todo .se ha terrhinado. Ustedes dijeron
la secc~ón. 7.2.2), la distinción con el capítUlo. 7 es artificial'porque
, que se va a imponer un embargo de armas. Pero cuando los diplomá­
ticos que realmente tienen que hacer el trabajo preparan una resolu­ todas las formas de comunicación, aunque. limitadas estric.tamente. a .
ción -como saben aquellos de ustedes que hayan trabajado en Nueva un contexto cara a cara, están insertadas en una área social más am- .'
York o hayan leído resoluciones, que son textos tan elaborados ...­ plia, a cuya influencia se puede 'seguir el rastro. De modo inversO, los
estos documentos hay que diseñarlos cuidadosamente y requieren una macroprocesos que transcienden la interacción a pequeña escala no .
preparación muy minuciosa antes de que se pueda promulgar una re­ pueden ser estudiados sin investigar detalles a un rnicronivel; esta
solución que va a imponer una sanción tan severa. cuestión no tiene sólo relevancia metodológica sino también teórica. o
Así ,que ahora están trabajando en el texto de una resolución y Si querernos que la distinción tenga sentido, debería interpretarse co­ O

eso lleva muchos días; y es perfectamente normal que ese proceso rno algo de gran importancia. A un nivel macro, por ejemplo, el pa­ O

lleve tiempo, de modo que cuando la sanción sea aprobada e impues­ rámetro relevante «tiempo» es más normal que haga referencia ,a ()
ta, si 10 es, no se suspenda hasta que Serbía la obedezca, y para eso «tiempo histórico» que a «tiempo del enunciado» o a «tiempo dispo­
todas las íes deben tener sus puntos y todas lastes sus rayitas antes de nible». De modo similar, aunque las nOrmas sociales son siempre re­
que la resolución se apruebe, no después. ()
levantes, tendrán un papel diferente en la interacción personal infor­
. mal (corno en la sección 7.2.1) que en un contexto institucional que \t
ha de situarse más adelante hacia el extremo macro de 'la e~~ala (co­ . (~
~ ~

rno en la sección 7.2.2). También, los rasgos de la personalidad y los


@
éstados mentales perderán fuerza corno factores relevantes a conside:­
f"~.' .
rar cmmto más nos movamos hacia cuestiones que trasciendan la inte­ ~

e

ti
T'·

I
356 Cuestiones macropragmáticas Macroprocesos en el uso del lenguaje 357

. racción interpersorial directa. Las cuestiones de metodología se .debe­ pectiva pragmática radical (es decir, realista) podría haber ahorrado la
rán adaptar en consecuencia (como intentaremos demostrar en la sec­ energía que mucha gente gastó en ingeniería lingüistica, desde «el
ci~8~~ . . .que espera» del doctor Esperanto, hasta la propuesta de Quirk (1981)
. Primero, nos concentraremos brevemente en 10 que llamamos pers­ de construir un «inglés nucleao>. Desde un punto de vista pragmático,
pectiva pragmática de los recursos del lenguaje a un macronivel (sec­ un «lenguaje universal» es un concepto paradójico.' Cuanto más uni­
ción 8.1). Después revisaremos unos ejemplos de investigación prag­ versal es el lenguaje (es decir, cuanto más hablado es), menos univer­
mática que están claramente situados cerca del extremo macro en la sal se volverá (es decir, se diversiflcará más). El lenguaje puede ser el
:O escala mi~ro-.macro. Esto incluirá problemas de comunicación inter­ único bien de consumo que es ciertamente propiedad de todos (quizá
... cultural e internacional (en la sección 8.2.1), el estudio de la ideologia por eso el control sobre el lenguaje sea una meta tan deseable para los
. bas~do en el discurso (en 8.2.2) y la pragmática de los grandes deba­ regímenes totalitarios). Todos usamos el lenguaje, no hay fin a la
tes sociales (en 8.2.3) variabilidad de las condiciones de uso, y el lenguaje es modelado
esencialmente al usarse, Como consecuencia, ni las herramientas más
o modernas para facilitar la estandarización pueden evitar la diversifi­
@ 8.1 UNA PERSPECTIVA PRAGMÁTICA EN LOS RECURSOS cación.


O'
DE LA LENGUA A UN MACRONlVEL

En el capitulo 7 dimos dos ejemplos diferentes de la perspectiva 8.2 MACROPROCESOS EN EL USO DEL LENGUAJE
O pragmática· (es decir, una aproximación orientada hacia el uso) de
Q ciertos re~ursos del .lenguaje. Era necesario hacerlo porque los que Las siguientes secciones apenas cubren una selección al azar de
() hemos denominado recursos del lenguaje, ciertamente a un nivel mi­ temas, seleccionados en base a mis recientes intereses de investiga­
G cro, son fáciles de tratar para un enfoque formalista o estructuralista. ción. No habrá ningún intento de defmir por completo ,campos enteros
A un nivel macro, en cambio, una perspectiva pragmática se presenta de la investigación pragmática, solamente se ilustrará el enfoque
como algo inevitable, aunque siguen siendo posibles limitadas formas pragmático en ciertas áreas (en las secciones 8.2.1 y 8.2.2) Y se pre­
de investigación no pragmática '(como los estudios de formas varia­ sentarán algunas consideraciones metodológicas que siguen y retroa­
A bles de distribución o una representación del desarrollo diacrónico de
V limentan la perspectiva pragmática en conjunto (principalmente la
O una forma lingüística específica). Por tanto, podemos ser extremada­ sección 8.2.3).
e mente breves en esta sección, refIriéndonos principalmente a la lite,.
ratura disponible en sociolingüística. Los recursos de la lengua a nivel
o macro son básicamente 10s que hemos defInido como lenguas, códi­
8.2.1 Comunicación intercultural e internacional
a gos y estilos (en la sección 4.1) teniendo en cuenta, como cualquier Al usar la perspectiva pragmática presentada en este libro, la
principal directriz no es observar fenómenos como la comunicación
perspectiva pragmática debería hacer, que estos siempre muestran una

"e
o variación significativa y siempre son susceptibles de cambio. Nunca
s e insistirá excesivamente en esta característica. El adoptar una pers­
intercultural e internacional como algo especial, sino' simplemente
como una instancia más del comportaniiento lingüístico, sujeto a los
mismos tipos de influencias y restricciones -(aunque posiblemente .con

••
)

358 Cuestiones macropragmáticas Macroprocesos en el uso del lenguaje 359

cambios de foco), fonnado por los mismos tipos de modelos estructu­ Las múltiples capas del comportamiento lingüístico irivolucrado
rales, exponente de procesos dinámicos seJIlejantes de generación de deberían ser muy transparentes desde el principio. Lo que tenemOs es
significado, que tienen lugar con grados variados de saliencia. En la que (i) Jackson se dirige a la audiencia de Estados Unidos en vivo"
medida en que las cosas «salen mah) en la comunicación intercultural (H) Jackson se dirige a una audiencia estadounidense más amplia a
e internacional (del mismo modo que las cosas «salen mal» en otro través de la mediatización de sus presentaciones públicas, (iii) unos
tipo de acontecimiento corpunicativo), y hasta el punto en que lo que periodistas suecos seleccionan partes de los discursos de Jackson, con
sale mal no es simplemente una consecuencia de conflictos de interés o sin agencias intennediarias, para infonnar a los telespectadores del
o de lucha por el poder (como en muchos casos de interacción intra­ papel de Jackson en las 'elecciones primarias, y (iv) se incorporan
cultural), el problema a menudo puede reducirse a la falta de atención materiales seleccionados por los periodistas suecos dentro de un pro­
hacia una premisa pragmática básica (presentada primero en la sec­ grama de información sobre el papel de Jackson en las elecciones
ción 2.2, y recientemente presentada en la sección 8.1 más arriba): la primarias dirigido a la audiencia flamenca. Nos concentraremos en el
influencia de la variabilidad. Daremo~ dos ejemplos de comunicación modo en que la introducción al (iv), que es seguida básicamente por
intercultural/ internacional,centrados en el modo en que el marco una copia exacta del contenido documental de (iií), enmarcalos
metrapragmático del comportamiento lingüístico del Otro revela la acontecimientos en (i); el nivel (H) es completamente ignorado y el, . -'. \

falta de entendimiento de la div~rsidad comunicativa o el respeto ha­ nivel (iii) se menciona como fuente.
cia ella. En esta presentación del programa, se describe a Jackson, ya' en el
título (gue se muestra en letras grandes como fondo, detrás del perio­
Las piedras que están en el suelo 1 (Rocks-just layin 'around) dista que está hablando), como een kleurrijk kandidaat, (<un candidato
pintorescO)) (la lectura es: ciertamente fascinante, pero está un poco
En enero de 1984, la radio y la televisión belga retransmitieron un fuera de lugar) con una considerable dosis de talento para la oratoria.
noticiero sueco (en el programa «Panorama))) que estaba dedicado a Parte de la descripci6n está en la oración de (1). ' '
la campaña electoral del candidato demócrata a presidente norteame­
ricano Jesse Jackson'durante las elecciones primarias. Durante 40 mi­ (1) Jackson web met de media om te gaan.
nutos, la audiencia flamenca pudo seguir su campaña de ciudad a ciu­ Jackson sabe cómo manejar los medios de comunicación.
dad, de estado a estado. De modo alternado se ofrecían fragmentos de
Este comentario sigue inmediatamente a la observación del comenta­
las entrevistas, las ruedas de prensa y los discursos políticos y los mi­
rista de que Jackson éra apenas conocido hasta que fue a siria y vol­
tines. Como siempre en Holanda y en la parte flamenca de Bélgica, el
vió con un piloto americano que había sido hecho nrisionero. No está
sonido' original, que no contenia las opiniones del comentarista, sino
lejos de un juicio de demagogia. Después tenemos un comentario e
sólo datos documentales del tipo delos mencionados, se mantuvo in­
tacto, y el inglés iba acompañado de subtítulos en holandés.
metapragmático muy explícito sobre las apáriciones públicas"deJack-, e
son: iD
(2) Met typish Arnerikaanse predikantentruuks web hij zijn volge­ l€
I Lo que quiere decir Jesse Jackson es que las piedras que están en el suelo son
i~útiles si no se tiran o se lanzan a personas, pájaros, cosas, etc., con un tirachinas, por
ejemplo. [Nota de las tt) ,'
lingen in vervoering te brengen.
(Con los típicos trucos de los evangelistas americanos ~e las
apaña para llevar a sus seguidores a un estado de é;xtasis.)
•.,
••
lA
360, Cuestiones macropragmáticas Macroprocesos en el uso dellenguaje 361
o ." Este comentario alude a una forma de histeria masiva que se provoca cas, si no las lingüísticas, del uso común del inglés entre los afroame­
mediante los trucos demagógicos que recuerdan el estilo retórico de ricanos. Esta impresión se refuerza posteriormente por la observación
loslfderes de las sectas religiosas. Se supone que esto describe los de que en afias recientes los estudiantes flamencos parecen tener me­
fragmentos de la campaña que podrán entrever los telespectadores. nos problemas con el estilo de Jackson de 1984 que los que tuvieron
• ,Deberíat;fios preguntamos inmediatamente hasta qué P~~óto estod~epre- sus colegas en 1985, probablemente como resultado de su mayor ex­
. senta las características reales de (i) es decir, la apancl n en lrecto posición a él a través de la música, las películas yla televisión. Ha­
de Jackson frente a \lna audiencia en Estados Unidos. La pregunta blar de prácticas retóricas típicamente americanas, por tanto, puede
·v tiene tres partes: Primero, ¿estamos frente a algo típicamente ameri­
1"111.'
llevar la interpretación por direcciones no deseadas.
. cano? Segundo ¿qué hay de evangelista en los acontecimientos de El supuesto estilo «evangelista» de Jackson, además, puede sim­
, habla retransmitidos? Tercero, ¿en qué sentido somos testigos del uso plemente ser un estilo étnico, si es que se 10 puede denominar así.
de trúcos? ' Como ha demostrado Kochman (1981) y Gumpérz(1982) y muchos
O . ,, Incluso un 'análisis superficial nos permite ver que lo que obtene­ otros investigadores, un sistema de normas y convenciones determi­
O mos no es «típicamente americano» en ningún sentido general. Si nadas socioculturalmente separan el uso afroamericano del lenguaje
' " ' ' consideramos la variedad de inglés hablada por Jackson, percibimos (en sus manifestaciones más claras) del de la mayoría blanca (aunque,
• 'que 'a veces usa Una versión del inglés americano estándar, y otras ve­ estrictamente hablando, se comunican en la misma lengua y muchos
ces una forma típica de inglés negro. En algunos.fragmentos; hay uná pueden cambiar fácilmente de una variedad a otra). El lenguaje de los
'O clara ruptura entre las dos variedades, como cuando en (3) presenta predicadores negros en su forma más típica es sólo un ejemplo del
O un gran episodio retórico en inglés negro. . estilo comunicativo negro, que también caracteriza la ret~rica políti­
o .P) . Well, 1 done alil'l observing now 2• ca, sea o no el político un Uder religioso. Una de las característica bá­
O . . sicas del «sermón» afro americano es el «intercambio dramático entre
O Este ejemplo de intercambio de: códigos (al que ya nos hemos referido el hablante y la audiencia» (Gumperz, 1982, 189). '
en la sección 4.1; véase también la sección 6.4.1) es un ejemplo de
O manual de cómo el uso alternativo de ciertos códigos puede servir una
Al modular sistemáticamente su representapi6n,' a veces cantando
y hablando, 0, con más frecuencia, cambiando de estilo, el ministro
función claramente simbólica para reforzar la identificación y la soli­ habla altemadamente con su propia voz, la del Señor y la de la con­
daridad con la comunidad afroamericana· (de la cual proviene la ma­ gregación (Gumperz, 1982, 189-90)
e yoría de, su audiencia). Al probar las reacciones de los estudiantes
flamencos un año después de la retransmisión, por otra parte, perci­ La participación activa de la audiencia en-esta representación es de la
~ bimos que precisamente los pasajes que llevaban a la percepción de la máxima importancia y «puede afectar materialmente al transcurso del
ti demagogia mostraban también las peculiaridades del inglés negro. servicio» (Gumperz, 1982,190).

•• . Debido a esto es difícil evitar la pregunta de que si esas visiones eran El aspecto más viable de la modulación del discurso de la oratoria

.
1>
pro4ucidas por la falta de familiaridad con las propiedades estilísti­

2 La versión del inglés estándar es: Well 1 have been observing for a while, «Eue­
no, he estado observando un poco», [Nota de las tt.J
negra es el cambio simbólico entre estilos, pasando del inglés ameri­
cano estándar al «estilo populamdel inglés negro (fonológica, léxica,
gramatical y prosódicamente distintos). En parte porque la retransmi­
sión de la campaña de Jesse Jackson no mostró ningún discurso ca m­

••
e
-- - _.... _----­

362 Cuestiones macropragmáticas Macroprocesos en el uso del lenguaje 363

pleto, en parte porque el énfasis estaba en los pasajes más típicos de Los comentarios espontáneos de la audiencia son muy frecuentes.
)
un «estilo popular», el valor simbólico del cambio de estilo no pudo Aunque las grabaciones no estaban pensadas para registrar esas inter~
ser apreciado por el televidente medio. Como resultado, el carácter venciones, se oían constantemente. En (5) se presenta una muestra.
étnico (o específico de su grupo) del estilo de' j ackson se hizo incluso (5) 1. ¡Está bien!

menos conspicuo de 10 que ya 10 habría sido para una audiencia insu~ (That's allright!)

ficientemente familiarizada con éL Es bastante comprensible por qué 2. ¿Ló hiciste realmente?
}.
una audiencia europea, sin razones para considerar qué el estilo de (Now, did you,really?)
Jesse Jackson sea algo más que retórica 'típicamente americana, juz­ 3. ¡Imagínatelo!.

gara sus actuaciones en términos de los valores prevalecientes en las (Think ofthat!)

principales sociedades europeas. Al interpretar su estilo de actuación


4. ¡Vaya cosa!

. (Big thing!)

a la luz de las observaciones anteriores, sin embargo, debemos con­


cluir que, apenas puede considerarse «típicamente americano» y que
Siempre que las intervenciones tengan que exp~esar acuerdo. la natu­
no se hace justicia a la base étnica y a la tradición a la que pertenece
raleza interactiva de las actuaciones públicas no es una garantía con­
al referirse a ellas como estilo «evangelista». .
tra la manipulación. Tal y como aparece;cn (5), sin embargo, al me- '.
N os quedamos con la pregunta de si podemos hablar sin restric­
nos se puede hacer ofr· abiertamente un sano escepticismo en las
ciones de «artimañas» y de medios,demagógicos. No debemos ser in~
intervenciones de fondo. En los discursos que se presentan a una~u-. ()
ge~uos y podemos admitir simplemente que ~oda la retórica pública
diencia diferente aparece de manera más clara que reacciones como
esta llena de estrategias y trucos para alcanzar objetivos específicos.
ésas son esenciales para el tipo de acontecimiento. Por ejemplO en el
Más allá de esta observación general, sin embargo, hay algunos as~
mismo programa puede verse cómo la retórica de Jackson pierde
pectos d~l estilo comunicativóen cuestión que plantean dudas sobre
la adecuación de esta descripción. Está la ya mencionada naturaleza
fuerza frente a una audiencia' mayoritariamente formada 'por indios, o
norteamericanos que responden con silencios y aplausos ocasionales. 0.···
v

intera~tiva de las representaciones públicas religiosas y las políticas


En uno de los discursos más apasionantes de ,la campaña enBa­
O
(r~laclOnadas estrechamente). La audiencia participa en el aconteci­
kersfield, California, Jackson se refiere a Ronald Reagan como el

n:1e?to. La participación raramente toma la forma de repetición me­


«Goliat de hoy en día». Continúa:

camca, excepto en el caso de ll...11 slogan claro y significativo (p. ej.


Soy alguien, queriendo decir «podré venir del ghetto, pero también (6) ... [él] gaÍlÓ lllinois en 1980 por 300.000 votos ... había 800.000
@
soy un, s~r humano tan meritorio como cualquiera») o por el efecto
humonstlco, como cuando Jackson pide a los que están registrados
para votar que levanten la mano derecha y repitan (4) (donde los
puntos indican el tiempo dejadopara la repetición): .
negros no registrados ~ .. como las piedras que están en el suelo
(rocks, Just layin 'around).

Tras una enumeración de factores semejantes, que siempre terminan'

••
(4) Yo... (~iga su nombre) ... juro ... que estoy... registrado para vo­
tar... Sl... estoy mintiendo ... espero ... que mi brazo derecho ...
nunca baje.
con las mismas palabras, y construyendo un clímax al aumentar la

velocidad al igual que el volumen, con las sibilantes alargadas, y


efectos similares" concluye: '
A
~
"e
G
(). 364 Cuestiones macropragmáticas Macroprocesos en el uso del lenguaje 365
----------------------------------------~--~-----
C}
(7) Levanta,Ia cabeza, Bakersfield. Recoge los tirachinas ... usa las pragmáticos (y especialmente aquellos de tipo metafórico) que se
piedras ... lancémoselas ... las piedras, las piedras, las piedras, ' usan para describir el lenguaje usado por los oficiales de losgobier­
que están en el suelo ... nos soviético y americano, incluidos Nikita Khrushchev y Dwight Ei­
senhower, en su representación verbal del incidente. Brevemente re­
''Sería dificil no apreciar las cualidades estéticas de la metáfora. Los sumido, el marco del incidente como un acontecimiento comunicativo
V televidentes flamencos, sin embargo, cuyas reacciones podemos su­ político es el siguiente.
poner que están representadas, al menos parcialmente, en las palabras . El día después del anuncio de Khrushchev de que un avión ameri­
del comentarista yen los juicios de los estudiantes universitarios (que cano había sido derribado en territorio soviético, el marco metaprag­
tertruerona evaluar a Jackson de modo positivo· en cuestiones de per­ mático de los acontecimientos tiende a señalar que The New York Times
, sonalidad pero bastante negativamente como posible candidato), no otorga menos credibilidad a los detalles del anuncio de Khrushchev
, parecían listos para llevar a cabo la tarea de evaluar un aconteci­ (según el cual el avión había violado el espacio aéreo soviético por
.G miento comunicativo político que tiene lugar en una comunidad espe­
e ,cífica de habla inglesa, a pesar de su buen,' en algunos casos excelen­
razones de espionaje) que a las explicaciones norteamericanas de que
un avión del tipo de los U-2 que observaba el tiempo para la NASA
• '. te, conocimiento del idioma inglés. El conocimiento del idioma usado podía haberse perdido cerca de la frontera turco soviética, tras haber
,. puede crear un falso sentido de inteligibilidad, llevando a opciones no te~ido problemas con el equipo de oxígeno. Este grado 'menor de cre­
• reflexivas, h~bituales,de interpretación, que están basadas completa­ dibilidad está parcialmente est~blecido por los reportajes factuales
. ' mente' en normas de'comportamÍento comunicativo que dependen de (centrados en el contenido) y los reportajes detallados de la versión
O .. un grupo, y que son tratadas como si fueám universales, en vez de in­ oficial americana (en la que figuran de modo 'prominente verbos neu­
"finitamente variadas. trales de 'acción verbal como decir, negar,observar, explicar, etc.), y
, Eh este ejemplo, el inglés se convierte en un objeto de malenten­ parcialmente por la elección de verbos de acción lingüística ~entrados
dido. Vamos a exániínar un caso en que el inglés, de nuevo a través en lo emocional. lo hostil y en los malos modales al narrar las reac­
G . de un marco metapragmático, sirve de medio para un malentendido ciones de Khrushchev. Así, hay una tendencia a pon~rse del lado de
en un contexto interculturallintemacional. la opinión citada del senador EL Bartlettde que las palabras de
Khrushchev eran desatinadas, groseras, y provocativas. Al enfrentar­
¿Quién hizo estallar la mina en la coriferencia? se a esta actitud, se dijo que Estados Unidos había reaccionado con
G
~ El suceso en cuestión fue un incidente político que siguió al de­ compostura, implicando así que no les faltaron razones para una res­
\...)
rribode un avión espía americano U-2 en terreno soviético elIde
puesta con rabia y falta de compostura;
mayo de 1960. El estudio que exponemos aquí (presentado con más
El segundo día de la cobertura se presentó un nuevo elemento.
detalle en Verschueren, 1985c) analiza todos los reportajes de The
Las descripciones orientadas hacia las emociones de los enunciados

New York Times relacionados con este acontecimiento desde el 6 de


de Khrushchev están enmarcadas de modo que .sugieren cálculos de­

.mayo (cuando apareció el primer reportaje, el día después del anuncio


magógicos, más que valor expresivo. El reportero de un artículo no

público de Khrushchev de lo que había ocurrido) hasta el 20 de mayo


sólo menciona explícitamente, como en (8), que «Moscú animó a los

(unos días después de la cumbre frustrada de los cuatro en París). El


soviéticos [.... ] a expresar su "ira"», sino que dio el tono público en

, centro' de atención es' el conjunto de términos y expresiones meta-


. (9) ofrece la misma información de modQ más implícito. Lo mismo

''f;
I
366 Cuestiones macropragmáticas
I Macroprocesos en el uso 'del lenguaje 367
,
consigue premeditado en (10), que sugiere que la expresión de rabia bierno de los Estados Unidos corno una posibilidad, no sólo con res­
' . .!

es más estratégica que espontánea.


pecto al primer anuncio oficial, sino incluso en referencia a la nueva
(8) Con la reunión de la cumbre en menos de quínce días, Moscú versión que elimina la responsabilid,ad personal del presidente Ei­
animó a los soviéticos a expresar su «ira» sobre el incidente senhower.)' ,
en el que se acusó a un avión norteamericano no annado de Esta imagen general permanece intacta hasta la cumbre de Paris. ·
"

)
violar el espacio aéreo soviético el día 1 de mayo. La noticia más importante es un anuncio del presidente Eisenhower
(9) El primer ministro Khrushchev dio el tono público para su en el que asume toda la responsabilidad del espionaje. El periódico
gobierno ayer en un discw:so amargo al Soviet Supremo. ofrece este mensaje metapragrnáticamente acompañado por un marco
(10) El comentario, más meditado pero todavía airado sobre el in­ de falta de emoción y racionalidad, como se ve en (12) y (13). .
cidentefue hecho hoy por la mayoria de los diecisiete orado­
res .gue le siguieron en el estrado. (12) En un anuncio cuidadosamente escrito, léido en una rueda de
prensa, el presidente dijo que el «fetiche de secretismoy
ocultación» soviético fue «la causa mayor de la tensión inter­
Así las revelaciones se presentan corno una maniobra antes de la
nacional y del maJestan>. . , ,
cumbre.
(13) No hubo ni remordimientos ni disculpas en las palabras del )
El tercer día, tras admitir Estados Unidos el espionaje.(provocado presidente Eisenhower sobre el~caso, ni en el tono fome y me- .'
por el anuncio soviético de que el piloto del avión, Francis G. Powers, dido con el que lo léyó.
había sido capturado vivo y que se habia encontrado el fuselaje del
avión), los detalles de las revelaciones de Khrushchev ya no se Mientras tanto, se presta gran atención a la defensa de las actividades
muestran corno si fueran susceptibles de duda. Pero,su estilo para .de espionaje (corno en (12)), y ocasionalmente la duplicidad america­
emitir mensajes se convierte en el terna central (especialmente la exa­ na está' ligeramente paliada al presentar a Estados Unidos corno las \
geración, que subraya la posibiÍidad de un intento de manipulación), víctimas de la maquinación soviética: '
diversificando así la atención de las invenciones americanas de los
días anteriores. Tengamos en cuenta simple~ente (11) (ya citado en (14) El gobierno de Estados Unidos, muchos miembros del Con­
la sección (6.4.1): greso y la mayoría de la prensa han caído en la trampa de.ha­
cer desmentidos prematuros. .
(11) El señor Khrushchev hizo de su versión una historia dramáti­
ca con tejemanejes rastreros mezclados con comentarios sar­ Hay una postura claramente critica, no tanto contra el hecho del es­
cásticos cortantes sobre la declaración de Washington de que pionaje (excepto por el momento del vuelo fallido, solamente dos se­
el piloto estaba en una misión de reconocimiento del tiempo, manas antes de la cumbre y durante las principales fiestas s<¡>viéticas) o
y que probablemente se había perdido durante un desmayo sino contra los anuncios del gobierno.
debido a un fallo en su equipo de oxígeno.
Finalmente hay un intercambio comunicativo, en Paris, que cons­
. tituye el climax de conflicto. Consideremos las siguientes descripciones.
(Estas implicaciones, sin embargo, fueron respaldadas por un sólo ar­
(15) [Título en la portada] El choque entr~ Estados Unidos y la
tículo de James Reston que ofrece claramente la duplicidad del go­
Unión Soviética interrumpe las conversaciones de la cumbre.

(j 368 Cuestiones macropragmáticas Macroprocesos en el uso del lenguaje 369


----~------------------------------------~~~-----
(16) El presidente De Gaulle dio un ,discurso de bienvenida y en­ vado tras una reunión, durante esta reunión se supo controlar y res­
tonces el primer ministro Khrushchev se embarcó en su in­ pondió «del modo esper.ado de un jefe de estado y con control», Se
vectiva.
citó al primer ministro' británico Macmillan diciendo que pensaba que
(17) El salvaje ataque de Khrushchev fue el responsable de esta
su «viejo amigo» había «reaccionado ignorando la "imagen" que uno
transformación [de las críticas contra Eisenhower a la simpa­
tia hacia él]. no podía encontrar en hombres inferiores procedentes de países infe­
(1.8) Nikita S. Khrushchev, primer ministro de la Unión Soviética, riores». Por tanto la carga de culpabilidad se coloca claramente en los
ha dirigido una acusación de «traición» contra el presidente hombros de Khrushchev: él es el que hizo estallar la mina en la con­
de Estados Unidos. ferencia.
(19) El primer ministro soviético dijo' abiertamente al presidente Esta ubicación de la culpa se consigue mediante los marcos meta­
o de Estados Unidos que no sería bien recibido si fuese a la pragmáticos del comportamiento verbal de Khrushchev y de Ei­

• ',Unión Soviética al mes siguiente tal y como había propuesto.


(20) Sus denuncias de los Estados Unidos y su imposiciÓn de con­
senhower, sin violar los estándares de precisión, pero centrándose en
los aspectos del estilo del habla de modo que son automáticámente

••"
diciones júeron coronadas por el, brutal anuncio de que en susceptibles' de evaluación a partir de las normas que se manejan co­
esas circunstancias la visita del general Eisenhower debía
posponerse.
mo si tuvieran validez universaL Aunque esta universalidad no es'
(21) Después de que el señor Khrushchev lánzara la bomba esta afirmada, se implica fuertemente al rechaiar el que pueda haber va­


n......
mañimien el Palacio Elíseo [... ]
(22) Algún tipo de presión interna ha debidQ llevar al primer mi­
nistro a venir a París a hacer estallar la mina en la conferen~
riabilidad. Así, cuando se dice, acertadamente, que Khrushchev, había
«explotado» en público, es probable que ese, comportamiento sea juz­
gado por parte de los lectores de The New York Times con sus están­
cía, anunciaron diplomáticos británicos. dares culturales específicos de comportamiento, que dictan que las
c. '(23) Tras este tormentoso discurso, el sistema de consulta y nego­
ciación de alto nivel parecía destrozado.
explosiones de este tipo son permisibles en privado, pero no en públi­
co. Estos estándares modelan el típico concepto occidental de diplo­
,() (24) El discurso del señor Khrushchev fue una actuación devasta- macia, en el que sólo se aceptan las negociaciones y los debates no
O dora y explosiva. '
emotivos y distantes, con independencia de lo que se pueda sentir.
'(25) , La reacción de unos pocos diplomáticos experimentados y'
Por lo tanto, se evalúa a Eisenhower como' un diplomático «real»
distantes a los que la tormenta de Khrushchev no hizo volar
o por los aires [...]. ' porque se supocontrálar, aunque sus emociones pudieron ser visibles
en diferentes momentos durante la reunión. De hecho, Boleen'(1973,
Así, el intercambio en la sesión de apertura de la cumbre (durante la pág. 468) señala que «mientras Khrushchev hablaba, la cabeza calva
de Eisenhower iba tomando varios tonos de rosado, una clara señal de
cual K.hrushchev exige la condena de los vuelos, de los U-2, su inme­
,que estaba usando toda su voluntad para contenerse», añadiendo q~e
diata cancelación y un castigo para los responsables) se presenta co­
«cuando Eisenhower habló, no dio señales del intenso enfado que sm
mo un choque 'del que se hace responsable a la actitud hostil y los
duda había sentido unos minutos antes».
malos:modales del premier soviético. Se confia mucho en las metáfo­
ras metapragmátícas para causar esta impresión. Aunque se dice de la
otra parte del intercambio, Eisenhower, que explotó con furia en pri- ,
..: ~!
f

370 Cuestiones macropragmáticas Macroprocesos en el uso del lenguaje . 371,

que las viejas panaceas de interferencia política y subsidió re­


ciben algún crédito. '
8.2.2 Discurso e ideología
(g) Por esta locura, Europa será recompensada con un
Los acontecimientos comunicativos o los fenómenos a un macro lento índice de crecimiento económico en 1996, aunque Gran
nivel son dificil es de separar de los procesos que uno puede llamar Bretaña, por fin, está sorprendentement~ bien situada. (h) Los
«ideológicos». Por esta razón centramos la discusión de los ejemplos Estados Unidos van a entrar en su sexto año de crecimiento, el
anteriores en la comunicación intercultural e internacional (conside­ período más largo de expansión ininterrumpida desde la gue­
rra. (i) Sin embargo, es hacia Asia donde la riqueza y la in­
rando que ambas trascienden el aquí y ahora de la comunicación cara
, fluencia del mundo se dirigirán una vez más en 1996. G) Año
a cara) en aspectos de la ideología del lenguaje o, sise desea, en la
tras año, el este de Asia logra un índice de crecimiento tres
ideología de la comunicación, tal y como se refleja en las descripcio­ veces mayor que el del oeste. (k) La mayoría de los 90 millo­
nes metapragmáticas. En esta sección se ampliará la discusión a la nes de personas extra en el mundo en 1996 serán asiáticas. (1)
relación general entre el discurso y la ideología. Con este objetivo nos Nacerán más pobres que ellector medio de este artículo. (m)
centraremos exclusivamente en la introducción editorial a El mundo Morirán más ricos. (n). La inclinación del mundo hacia el este
en 1996, de la que se discutieron algunos fragmentos ampliamente está apenas empezando. (o) El mundo ser~ un lugar pacífico
cuando se presentaron los temas comunes de pragmática como la de!­ en 1996. (P) Las guerras civiles qeEuropa van a terminar por
xis (en la sección 1.1.1), cuando se ilustró el proceso de la construc­ fin. (q) Se va a llegar a un acuerdo en Oriente Medió a pesar
ción de enunciados oracional (en la sección 4.4.1) y la construcción de los intentos para desbaratarlo de los que ponen bombas y
otros fanáticos. (r) Se firmará un tratado de prohibición de las
de enunciados al nivel supraoracional (en la sección 4.4.2), y cuando
pruebas nucleares. (s) Los ejércitos serán retirados, excepto en
tratamos los indicadores de conciencia metapragmática (en la sección
China y África.
6.4.1). Presentamos los fragmentos discutidos hasta el momento en
[Dos párrafos omitidos]
(26) para facilitar la referencia.
(t) Estas son algunas de las tendencias e ideas que encon­
(26) Ca) 1996 será un año de prosperidad y paz. (b) Elmundo trará en El mundo en 1996, que aparecerá en 80 países y en 12
va a alejarse un poco más de las creencias aceptadas por las lenguas. (u) Este es nuestro décimo año de publicación. Si o
generaciones anteriores. (e) La campaña presidencial ameri­ juntáramos todas nuestras predicciones erróneas probable­
cana, que tendrá lugar desde las nieves de las primarias en mente podríamos sacar otra edición. (v) Pero en este tiempo
New Hampshire hasta el cinco de noviembre, será el escenario también ha habido muchos aciertos y espero que la mayoría
de las ideas políticas que dominarán el resto del siglo: menos del contenido haya sido también interesante.
impuestos, menos interferencias del gobierno, una reducción ~

drástica del estado de la asistencia social. (d) Estos son los Para los propósitos actuales, defInimos ideología como una c'bnstela­
temas a los que se dedicarán las campañas electorales en Es­ ción de creencias e ideas del sentido común, y a veces normativas,
paña, Rusia, India y Australia. (e) (En 1996 más de un billón relacionadas con algún(os) aspecto(s) de la «realidad» (social). La G
de personas participarán en unas elecciones, prueba de que la
,naturaleza de sentido común de las creencias y las ide!,!s se manifIesta
democracia está ganando a las dictaduras en el ring.) (f) Aten­
en el hecho de que son raramente cuestionadas, dentro de un gnipo e
.•
ción a la conferencia intergubernamental de la Unión Europea
específIco de gente en u:na sociedad o.comunidad dada, en un discur­
que empieza en Italia en primavera, como el último lugar en ~
{\,
\
"TI
¡
_3_72_ ___________>_:.-C_u_e_s....;.ti_O.n_e_s_m_·_ac_r_o':;..'P_ra---:gm:..-_át_ic_as_ \ MacrO.prO.cesos en el uso del lenguaje 373

so relacionado con la «realidad» de la que se trata a través de varios personal se establece mediante una identificación que dice a los intér­
géneros del discurso. El que no sean cuestionadas significa que las pretes que él es miembro del parlamento de Kensington y de la junta
creencias y las ideas son a menudo (aunque no siempre y no exc1,usi-, directiva de supervisores de la Universidad de Harvard. El mundo de
vamente) llevadas a cabo implícitamente antes que formuladas explí­ los intérpretes, las audiencias, también se presentan a primera vista
citamente. Las redes construidas retóricamente o apoyadas ideológi­ como casi completamente universales: como se ve en (26)1. el texto
camente sirven para enmarcar, dar validez o legitimar actitudes y se distribuye en 80 países y en12 idiomas. Por supuesto, los lectores
acciones en el ámbito en el que son aplicables. Sin embargo, estas reales están limitados a un pequeño subconjunto de la audiencia uni­
áctividades o enmarcaciones, validaciones o legitimaciones siempre versal potencial. La naturaleza de la fuente, junto con el público ob­
o tienen lugar eÍlun ambiente caracterizado por la heteroglos~a, la , jetivo, imponen más restricciones al contenido: el texto no es real­
cónstante interaccion entre diferentes lenguajes socioideológicos en , mente,sobre el mundo. como tal, incluso visto desde una perspectiva
competencia por la dominación o hegemonía. La normativa que in­
o tervHme en las manifestaciones de la ideología es, por tanto, en parte,
(conservadora) británica, sino principalmente sobre aspectos políticos
, ysociales .
.0 una función de la conciencia reflexiva (tanto de normas sociales co­ ,
Estructuralmente, la unidad básica de enunciado que se observa es
,

(1 mo lingüísticas, que funcionan en los procesos de construcción de la la de un texto autónomo y de un sólo autor. Sin embargo, está incrus­


O
" identidad), y 'en parte proyectada (aspirando al control sobre el pre­
sente del Otro así cQrno sobre el futuro de uno mismo).
Obséry:ese(26) con esta definición en mente. Como siempre en la
() ", investigaéiÓn pragmática, el interés principal debe ser la dinámica de
tado en una publicación más amplia que pertenece a un tipo de activi­
dad bien definido, el de cubrir las noticias. Sus relaciones intertex­
tuales con porciones de esta. gran publicación son jerárquicas: (26)
proporciona una «introducción editorial», esbozando así una perspec­
la generación de significado. Nuestra pregunta es, entonces, ¿qué mo­ tiva para los otros textos. Estos dos aspectos definen el género al que
,delos de significado no cuestionada emergen del texto? Para refor­ pertenece (26). Si fuera posible, dedicarle la correcta cantidad de
O mular y obtener respuestas para esta pregunta, «localicemos» breve-' tiempo y de espacio, (26) deb€?ría analizarse a cualquier nivel de la
: mente el acontecimiento comunicativo. eS,tructura desde el texto hacia abajo. Al mismo tiempo, deberla anali­
O Espacial y socialmente, (26) trata del «mundo», al mismo tiempo zarse en coherencia con el discurso más amPlio de·The EcO.nomist en
O que es una forrha de comunicación en ese mismo mundo. Temporal­ general, e incluso con publicaciones' de la competencia. Para la pri­
mente está situado en 1995, mientras que trata de 1996, 10 que con­ mera tarea debemos contentarnos' con lo que han revelado los capí­
,vierte a la actividad en pronosticadora por defmición. La extensi?>n tulos anteriores, añadiendo sólo unas pocas observaciones analíti­
\,referenCial del mundo. está limitada por el hecho de que es sobre' «el cas directamente relevantes al tema de esta sección. Para la segunda,
@ mundo desde una perspectiva (conservadora) británica». Este flecho; podemos hacer un poco de luz sobre lo que costaría llevarla a cabo
'po.
v sin embargo, se deja completamente implícito. Al nivel de la superfi­ (en la forma de observaciones metodológicas de la sección 8.2.3).
O cie, se trata del mundo de modo muy general. El nivel implícito está En lo que respecta a la saliencia, escribir para una publicación

•• «marcado» por (o se puede inferir de) el hecho puramente contextual


de que el editor sea The Economist, que, aunque abstracto en algunos
aspectos, es la fuente real de la comunicación. Esta fuente es repre­
(especialmente como editor de una revista) supone un proceso cons­
ciente de hacer elecciones. El autor no sólo piensa en el contenido
proposicional, sino que también está constantemente moldeando una '
sentada por el enunciador, el editor Dudley Fishbum, cuya autoridad audiencia y al mismo tiempo trata~do de expresar ideas de modo
"•

_ .... _~-_ .... - -- - - - - - - - - - _.._ . . .- - .~--_ .... - _... _~ ....
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374 Cuestiones' mácropragmáticas


T " j
Macroprocesos en el uso del lenguaje 375
apropiado Pllra los intérpretes imaginados o construidos. Sin embar­
go, en vista de nuestra definición de ideología, algunos de los proce­ 8.2.3 La pragmática de los grandes debates sociales
sos más interesantes de la generación de significado pueden estar
situados al nivel de 10 que el hablante da por sentado tan completa­ Avancemos, fmalmente, al nivel del debate social y político pú­
mente que no provoca ninguna pregunta, o con 10 que no puede ima~ blicamente accesible, uno de cuyos ingredientes es el trabajo lingüís­
ginar que sus i~térpretes no estén de acuerdo. tico del presente autor (un análisis pragmático del mismo debate, en .
La principal cuestión del proceso de generación de significado en particular Blornrnaert y Verschueren, 1992a, accesible en inglés en
un texto como (26) puede ser cómo un texto de este tipo genera su BloIÍllIlaert y Verschueren, 1998). El asunto es la presencia de 10 que
propio contexto, por ejemplo al limitar «el mundo» del que trata de .
se percibe como un gran número de extranj eros (en concreto extraIlj e­
modo que sea compatible con las restricciones preexistentes qúe ya ros cuyas raíces son el Magreb y Turquía, a los que normalmente se
han sido impuestas contextualmente. Consideremos, por ejemplo, el hace referencia como «inmigrantes» [migrants (lit: «migrante»)]en
modo en que prosperidad y paz, que .(26) -a. predice en términos bas~ Bélgica. Este «debate belga (y más específicamente flamenco) del
tante generales, quedan reducidas, aparente:rp.ente sin pensamientos inmigrante [migranl]» es sólo una representación de lo que es tratado'
. ulterior~s, en los párrafos que las ejemplifican, (26) g.-n. y (26)0.-'s., en Europa como el llamado problema de los inmigrantes [migration j-­

respectivamente. ¿La prosperidad de quién está en juego? Parece que problem]. Una versión sintetizada de la es,tructura general d~l debate, _
solamente Europa, Gran Bretaña y Estados Unidos merecen ser men­ que no se debe confundir con ningún ejemplo específico de interac­
cionados, aunque se añade una advertencia de que una comparación ción lingüística que haya sucedido realmente, se presenta en (27),.
entre los tradicionalmente ricos y Asia puede cambiar a favor de donde ED sustituye a la posición tomada por la extrema derecha, MT
Asia. El ansia de comparar nos· lleva a una serie. de afirmaciones a «mayoría tolerante» y JB&N somos Blornmaert y yo. Nótese que
cuestionables. Aunqu~ es sin ninguna duda cierto que la mayoría de los enunciados en (27), aunque no coinciden con turnos literales en
los 90 millones de personas que habrá de más, muchos de los cuales un intercambio real, no son hipótesis estereotipadas. Representan da­
tos reales en el sentido de que (i) resumen posturas tomadas real­ ()
serán asiáticos, nacerán más pobres que el lector medio de este artí­
culo (línea (26)1.), el autor está probablemente exagerando este hecho mente en el debate, y (H) cada uno puede encontrarse en el corpus del
discurso que hemos investigado.
o
cuando afmna que ellos (¿todos?, ¿o la mayoría de ellos?) morirán O
más ricos (en (26)m.). De igual modo, ¿para quién será el mundo un (27) a. ED: Los inmigrantes [migrants] deberían ser envia­ rj
...~'>

lugar pacífico? Solamente se piensa en Europa y el Medio Oeste (en dos de vuelta a sus paises de origen.

(26~p.-q.). La marginación verdadera es el destino de China y de b. MT: Los inmigrantes [migrants] deberían integrarse

África, c~yos ejércitos, de los que no se espera que «se retiren», no en nuestra sociedad. @

pueden ehminar las expectativas de paz global. c. ED+MT: Respetamos las identidades de otras personas.
O
Más allá de. estos asuntos de alcance referencial se filtra en el d. JB&JV: Ni la ED ni la MT aceptan las formas funda­
mentales de diversidad. . @
texto una visión inequívocamente económica y política del mundo y
e~pli~a sus, ~rincipales principios. Dejaré que sea el lector quien los
e. MT: JB&JV simplemente no'entienden. O
slga slstematlcamente. Para entender el problema que queremos presentar, es importante te­ O
ner el contexto social, cultural y politico en mente. Un ingrediente te
••,.
1
376 Cuestiones macropragmáticas
que puede dar lugar a confusión es el uso dependiente del contexto .
1 Macropr.ocesos en el uso del lenguaje

premisas de la pragmática desde su comienzo: la de que nadie puede


377

del verbo integrarse en (27)b. Mientras que en el debate americano decir completamente lo que quiere decir (véase la sección l.L3). La
del multiculturalísmo el término «integración» normalmente se refie­ comunicación no es posible sin involucrar un mu.z:¡do de conocimien­
o re a la participación de los miembros de las minorías en todos los as­ to, o supuestos, que se supone que son cQmpartidos, al menos par­
A pectos de la esfera social, su equivalente belga-flamenco hace refe­ cialmente, entre los interlocutores, a los que pueden anc1arse los
rencia bá~icam~nte al modo de asimilación, concentrándose en que enunciados.
los no natIVOS tienen que demostrar que merecen la participación. Los supuestos de fondo, sin embargo, pueden en un principio ser
. El problema, en relacion con la pragmática de la generaci6n de completamente transparentes a todos los participantes, por 10 que
G SIgnificado, es el siguiente. La oración (27)d. resume la conclusión pueden ser usados activamente en la construcción del contexto (como
O del a~álisis de un corpus de discurso con una extensión de tiempo de se ha discutido en relación con los ejemplos anteriores, p. ej. en ·la
() apr~xlmadament~ ;res· años, recogido de fuentes que representan las sección 5.4). Por tanto, es necesario un paso más. También debemos


(1
·comentes de opln1onesprincipales (es decir.. evitando los extremis­
mos obvios en cualqui.er dire?ción), y que está fonnado por reportajes
s?~re el «problema mIgratono», afirmaciones de proclamaciones po­
suponer que" algunos patrones conceptuales o significados muestran
. un grado relativamente bajo de saliencia. Puede que simplemente re­
flejen los hábitos de cónceptualización, estén arraigados en ideas
••O 11tlcas moderadas., reportajes de investigación científica altamente·
m~di~tizados y un programa de entrenamiento del gobierno dirigido
conscientes o no.
La zona de hábitos de la cognición que fonnan parte de los ingre­
p~nc1palmente a los oficiales de policía. La pregunta es: CÓmo es po­ dientes menos salientes del significado de los enunciados no sólo in­
SIble alcanzar estas conclusiones conceptuales, actitudinales o ideoló­ cluyen aspectos de la conceptualización sino también cualquier tipo
gica~ a ~~s~r de que (i) no está representado abiertamente en la for­ de intencionalidad convencional ·que pueda haber. Por otra parte, los
~a lmguzstic.a de (27) a. y (27) b., ni en los textos que (27)b. (y hasta tipos de significado no saliente, pueden, cuando se hacen conscientes,
Q CIerto punto mcluso (27)a.) resume, y (ii) contradice la reivindicación coincidir con 10 que los usuarios del lenguaje habrían querido decir o
explícita de una áctitud hecha tanto por laED como por la MT en entender. Es necesario un paso final, por tanto, para que (27)d. sea
Q (27)c. . , una conclusión válida de investigación en un contexto en que (27)c.
O . Se han tenido que seguir una serie de pasos para buscar una solu­ puede ser (al menos en 10 que interesa a la mayoría tolerante) úna ex­
O CIón al problema. En nuestra sociedad enonnemente comunicativa, se presión honesta de una actitud que coincide conscientemente con el
nos lleva a esperar un alto grado de significado transparente. Pero pa­ significado intencional. Ese paso es el suponer que la falta de salien­
. r~ que (27)d. sea una conclusión correcta de la investigación (espe­
e CIalmente en conexión con el discurso procedente de la mayoría tole­
cía de los procesos involucrados puede llegar hasta crear un vacío
completo entre el significado que se corresponde más o menos con la
o rru:~ que, po: sup?esto, hace todo 10 posible para mostrarse como fonna lingüística de expresión a un nivel transparente, literal o explí­
~ ablerta a la dIverSIdad), tenemos que asumir que 10 que es textual­ cito, por un lado, y con los tipos· adicionales de significado o de es­
... meIl;te transparente, el significado codificado literalmente la comum­ tructuras conceptuales por otro.

"• cación explícita pública que las fuentes del discurso acep~rían como
fiel a sus intenciones significativas, no agota el significado de lo di~
Esto lleva, antes que nada, a una fonnulación más exacta del pro­

••
blema. En los casos en los que hay un vacío entre las repres·entaciones
cho. Este es el paso más fácil de tomar pues·to que há sido una de las .lingüísticas conceptualmente más profundas y las manifiestas, ¿cómo


378. Cuestiones macropragmáticas Macroprocesos en el uso del lenguaje 379
se puede recuperar el significado con algún grado de certeza? Cierta- , Primero, la mayoría de los mensajes están construidos combinando
mente, no es posible preguntar a los hablantes 10 que quieren decir, dinámicamente aspectos del significado explícitos e implícitos. Lo
puesto que sólo se pueden parafrasear sus palabras originales, que re­ mismo pasa con la comunicación con la que estamos tratando ah?ra,
presentan las intenciones ya codificadas de modo manifiesto. Para pero una peculiaridad significativa es que observamos un conflI.Cto'
que sea posible unq. interpretación científicamente posible, debería entre 10 explícito y 10 implícito, de modo que se puede ver que lo Im­
haber otra conexión entre el significado y la forma, un puente al otro plícito socava lo explícito, sise vuelve a sí mismo explícito, en lugar
lado del vacío. Una solución al problema está al alcance porque el de combinarse con él de un modo relativamente claro. Segundo, con
puente 10 proporciona el mismo fenómeno que nos llevó a tomar el respecto ~ géneros comunicativos como las noticias, y especialmente
primer paso fuera de lo que es textualmente transparente: el área del la retórica política, normalmente tiene sentido preguntar qué aspectos
significado impUcito, incluyendo, pero no restringido a, la mayoría de del significado implícito simplemente representan el fundamento de la
las áreas den.ominadas tradicionalmente supuestos de fondo, terreno visión del mundo que el hablante I autor supone que comparte con,
común, presuposición e implicatura. Lo que queda entonces es una la audiencia, y cuál constituye la comunicación (estratégica) de in­
evaluación del estatus metodológico y teórico del estudio del signifi­ formación nueva. En el presente caso, sin embargo, el conflicto entre
,cado implicito en un discurso accesible públicamente.
el significado explícito e implicitoimplica que el significado impU­
Vayamos a la metodología primero, y comencemos por situar la /'")
cito con el que estamos tratando represen~ el supuesto cono~imiento
.

investigación a la que nos referimos~n términos de pragmática gene­ de fondo compartido a un nivel que puede ser insuficientemente
ral. Parece que los correlatos coritextuales .con los que las fonnas consciente para ser enunciado explícitamente. Como la ideología es
lingüísticas de expresión y procesamiento de la información son inte­
también una combinación de las visiones implícita y explícita, pode·
radaptables en este caso pueden describirse brevemente como la ideo­
mas llegar a la conclusión, a partir de estas observaciones, de que es­
logía que influye ,en las relaciones de grupo, en particular las actitu­
tamos tratando con las premisas más profundaS y generalmente no
des básicas hacía la diversidad én sociedad. El término «ideología» se ()
formuladas de una ideología. ,
usa aquí como en la sección 8.2.2. Ellocus del estudio se define más
No hace falta decir que una metodología dependiente de la bús­ ()
adelante en términos de los diferentes ,ni~eles estructurales en los que
queda d~ significado implícito es claramente interpretativa. !,ara q~e
deben enc0I?:trarse indicadores lingüísticos de modelos de significado
la interpretación proporcione el puente a través de cualqUier vaClO
implícito. En los procesos a investigar intervienen varios aspectos de potencial entre los mundos conceptuales más profundos y los presen­
las dinámicas social y comunicativa (con' al menos tantos usos estra­
tados como transparentes, la mayor preocupación debe ser separar
tégicos como formas de codificación de significado directo, a causa
claramente la interpretación de la especulación. A pesar de la exis­
de los aspectos del poder involucrados en la interacción entre la ma­
tencia de una gran tradición que trata de temas,similares, como la psi­
yoría y la minoría), y tienen lugar con varíos grados de 'saliencia.
cología social, la lingüística crítica o el análisis crítico del di§purso,se
La búsqueda, de formas de significado implícito que tiene que ver
han cometido demasiados pecados en contra de este principio para
con las actitudes latentes hacia la diversidad es, por supuesto, sólo un
permitirnos ignorarlo. La mayoría de los ingredientes de nuestra me­
aspecto de metodología pragmática general para estudiar los tipos de
todología no serán «noticia)) 'para los lectores de este libro. Intentare­
discurso a investigar. Vale la pena hacer hincapié en dos aspectos del
mos demostrar,. sin embargo, que la mejor comprensión de la prag­
posicionamiento de nuestro, tema dentro de un proyecto más amplio.
mática lingüística (tradicional), reinterpretada para tener en cuenta


o 380 Cuestiones macropragmátlcas ·1 Macroprocesos en el uso del lenguaje 381
G grados más altos de dinámica y procesamientos complejos más allá de comportamiento adicionales, de que el solicitante está nervioso.
de un claro enlace intendón~interpretación, puede combinarse con las Nótese que los productos de la especulación pueden incluso ser cier­
preocupaciones de la lingüística crítica y los principios dél sólido tra. tos. Pero no pueden justificarse a partir de una metodología pragmáti­
bajo etnográfico para penetrar en algunas de las áreas más' evasivas ca. y como se puede hacer la distinción entre el significado especula­
del significado. tivo, estamos tratando realmente con «hechos incontestables», si es
Al nivel de la interacción cara a cara no es dificil demostrar que que existe una cosa así dentro de la realidad de 10 que es humano. La
hay una distinción relativamente clara entre la interpretación y la es­ propuesta realmente es que los «hechos del significado» con los que
peculación. Para tomar un ejemplo trivial, consideremos a un solici­ estamos tratando, si se investigan desde la perspectiva de «actos de
o tante de lln trabajo que está esperando para 'ser entrevistado y le pre.
gunta a la recepcionista, ¿me puede decir dónde están los baños? Tal
significado», nos proporcionan datos más incontestables que muchas
(.) de las otras empresas en las humanidades y las ciencias sociales.
y como nos dice la vieja literatura de los actos de habla indirectos, se Para evitar conclusiones no garantizadas, es decir, especulativas,
O
•• ha de seguir una gran cantidad de pasos interpretativos para que la re.
cepcionista llegue a la respuesta esperada. Aunque la forma literal de
la pregunta hace~referencia a la capacidad de la recepcionista de decir
al inferir significado implícito de un corpus de discurso a un nivel sao.
. cial amplio, es necesario mucho más que una atención escrupulosa a
cada inferencia de bajo nivel que se obtiene de los detalles de los da­

•e dónde están los baños, una respuesta sí I no, invitada por la pregunta,
no sería aceptadaoomo suficientemente cooperativa. Más aún, como
diría la li~eraty.:ra sobre las implicaturas conversacionales, la respuesta
tos, aunque esa atención escrupulosa es. indudablemente el primer re~
quisito. Hay unos cuantos requisitos adicionales para que los datos
cuenten como pruebas en la búsqueda de ingredientes de una ideolo-:­
A ,la vuelta, a la derecha· sólo puede ser apropiada si pueden usarse gla. Teniendo en mente la definición provisional que ya hemos pro­
los baños. que estáD. en esa ubicación, porque se supone que el solici•. porcionado de «ideología» debemos añadir que las' ideologías nor­
tante no está preguntando dónde están los baños simpleménte para malmente son hegemónicas en el sentido de que están apoyadas por
sabérlo. Este fenómeno se ha descrito en otras partes con más detalle una variedad de fuentes del poder social y que dependen para su éxito
.' (véase también el capítulo 1). El asunto es que debido a la combina. (en términos de la influencia que domina la vida polítlco social y el
ción de formas de expresión convencionales con hábitos comunicati­ debate público) de hasta dónde han sido experimentados por (un
o vos y con principios que gobiernan la comunicación se abre un mun­ segmento significativo de) la población como representantes de las
o do entero de significado que no está expresado transparentemente en
la forma lingüística de los enunciados para poder hacer una interpre­
perspectivas «normales». Por tanto, el conjunto de requisitos meto­
c, tación perfectamente legítima, aunque uno no debe 'olvidarse que pue~
dológicos debe ser capaz de establecer coherencia, tanto en términos
.de conectividad conceptual como de pátrones derecurrf3ncia. Aun­
e den estar involucrados tipos confusos de variabilidad, que la práctica que los requisitos en cuestión se formularán prinCipalmente con refe­
o establecida es negociable permanentemente y que el uso real puede ' rencia a aspectos de los «datos» en la siguiente discusión, tienen que

•• . adaptarse a una amplia selección de propósitos estratégicos que pue~ ver más con el enfoque científico que con, pór ejemplo, cuestiones de

.••
den distorsionar los modelos esperados. Como resultado hay una lí­ la selección de los.datos per se. También el énfasis en la «coheren­
nea relativamente clara donde los límites de la interpretación legítima cia», aunque dictado por propiedades del objeto. de investigación, es,
cruzan hacia la mera especulación, como cuando la recepcionista lle­ en primer lugar, una cuestión de enfoque científlco. No se quiere im~
' ga a la conclusión, principalmente en base al enunciado y sin pruebas plicar que las ideologías por sí mismas tienen que ser coherentes .


382 Cuestiones macropragmáticas , Macroprocesos en el uso del lenguaje 383

Evidentemente, si 10 que queremos investigar es el vacío entre una dio lugar a la conclusión (27)d. La conclusión representa el siguiente
nonna de tolerancia representada claramente y la falta de apertura diagnóstico sobre la ideología dominante, a la que llamaremos homo­
más profunda a la diversidad,estamos tratando con una fonna fun­ geneísmo, en términos de la cual se piensa sobre la diversidad en un
damental de incoherencia.' Pueden surgir incongruencias más sutiles contexto flamenco: la homogeneidad social (en relación a la historia, '
también, pero para poder dar cUenta de ellas debemos ser capaces de la descendencia, la etnicidad, el lenguaje y la cultura) se ve como'
«situarlas» dentro de un patrón general que nos permita al menos «nonnal», la diversidad se ve como una aberración, y en consecuen­
fonnular hipótesis para'obtener una explicación. Cualquier fenómeno cia, por definición, como un estado de cosas problemático; por 10
que no pueda situarse de este modo debe tratarse como un hecho in­ tanto, las reacciones negativas a la diversidad (por ejemplo el racismo
'diosincrásico hasta que se puedan dar más pruebas sobre él. o la xenofobia) son también nonnales; así, la solución al «problema
La siguiente presentación de los requisitos metodológicos será un de los inmigrantes» [migrant problem] se encuentra en la'rehomoge­
reflejo de los principios establecidos en lingüística crítica y de algu­ neización de la sociedad, ya sea eliminando los elementos extranjeros
nos métodos etnográficos. Sin embargo, al observar el modo en que (la postura de la extrema derecha) o eliminando las diferencias todo
muchos de los estudios disponibles hoy en día tienden a saltar a las 10 que sea posible mediante un' proceso de' «integración» (la posición
conclusiones, debilitando así la credibilidad del ,campo, no se puede de la mayoría tolerante). Esta conclusión es válida ~ólo si se pueden
sobrevalorar demasiado su importancia. encontrar sistemáticamente' ingredientes de esta ideología en las dife- ,
Primero, los tipos de datos han de ser variados, tanto horizontal rentes capas estructurales. En 10 que sigue,;señalaremos cuatro tipos
como verticalmente. Los requisitos de la diversidad horizontal se re­ de fenómenos que se pueden situar en relación con las diferentes ca-'
fieren al hecho de que es deseable que diferentes tipos de discurso pas estructurales. Se podrían haber presentado, por supuesto, muchos .
, (reportajes, documentos políticos, etc.) sean investigados al mismo más tipos de ejemplos, pero los que siguen han demostrado ser de una
tiempo con el mismo tipo de metodología orientada a las impliqatu­ relevancia excepcional en el curso de nuestra investigación.
ras: Esto ayudará a evitar conclusiones erróneas basadas en laespeci­ Los patrones de elección de palabras constituyen uno de los loci
ficIdad de un tipo deenunciador quediseña'mensajes orientados a un estructurales obvios para encontrar indicios de los patrones habituales
tipo de audiencia solamente. de pensamiento. A este nivel, incluso el término migrant [Íit. «mi­ C)
El requisito de que los datos del eje vertical deberían ser variados grante» J, y el' modo en que se usa, refleja ya la actitud descrita. El
término no aparece en los diccionarios de holandes en el momento en
es de más importancia. Hace referencia a la necesidad de datos con­
vergentes derivados de los análisis llevados, a cabo en diferentes ca­ que empezó a sustituir a «tr~bajador invitadQ). Aunque no era una
o
pas de la estructura lingüística. Esto es tan importante porque nos formación morfológicamenteextraña, la elección estaba marcada de O
ayuda a 9.etectar el autocontrol potencial hecho por los enunciadores varias maneras. Primero, no era de uso común, por 10 que apenas ha­
de los mensajes analizados (y por 10 tanto nos ayuda a evitar conclu­ bia connotaciones asociadas a ella. Se' podría, por tanto, introducir
siones prejuiciadas basadas en esos mensajes autocontrolados). Los como un término relativamente neutral, que reemplazaba a &0 que
O
~:o.
" '

enunciadores raramente pueden hacer ese autocontrol en muchos ni­ estaba lleno de significado negativo, un hecho que 'nos da la primera
veles' diferentes de la estructura al mismo tiempo. indicación de las actitudes negativas hacia el grupo designado de po­
Voy a ilustrar el principio en referencia a los niveles principales blación que se considera problemático. En segundo lugar, estaba mar­
de la estructura del discurso en los que se llevó a cabo el análisis que cado porque estaba disponible una alternativa perfectamente común:
385
o 384 Cuestiones macropragmáticas Macroprocesos en el uso del lenguaje

inmigrante. Esta alternativa, además, era definitivamente más acerta­ Además, los perfiles de interacción pueden ser particularmente
da en el momento en el que se int,rodujo migrant, porque se hizo más instructivos. Consideremos' el siguiente intercambio entre un miem­
o claro que la mayoría de los extranjeros a los que hacía referencia se
quedarían en el país. El hecho de que se e.ligiera migrant a pesar de
bro dé la extrema derecha y un miembro de la mayoría tolerante to­
mado de un debate televisivo: ,
o esto, que describe literalmente él una persona en un proceso migrato­ (28) a. ED: Debe ser posible 'revisar los procedimientos de natu­
rio más que a una que ha completado su migración de ida (como es el ralización que se han completado desde 1974.
caso de inmigrante), indica que se sentía la necesidad de dejar abierta b. MT: ¿También para los que se han adaptado?
la vuelta. Un resultado extraño de esto e~ que se hable ahora común­
mente de segunda y tercera generación de «migrantes», aunque el En este intercambio, el miembro de la mayoría tolerante acepta las
grupo al que se hace refere~cia no haya llevado a cabo ningún proce­ premisas de que, en principio, revisar los procesos de natural~aci~n.
sode migración. (réngase en cuenta que estas anotaciones se refieren es algo a tener en· cuenta (aunque es claramente autocontradlctono
sólo al holan4és de Bélgica, no a sus equivalentes directos en otras hablar de una revisión de los procesos que ya han concluido). Él so-.
() lenguas). En tercer lugar, a pesar de su aplicabilidad mucho más am· lamente contraataca la formulación de una condición bajo la cual no

•• plia, eLtérmino es reserv!ido casi exclusivamente para los inmigrantes


marroquíes y turcos, un grupo al que se suele señalar como especial­
mente problemático. Esta problematización es en gran medida,' una
es posible la revisión: si el extranjero ha demostrado suficiente adap­
tabilidad para minimizar la diferencia y hacer que su presencia sea,
por tanto, menos problemática. ' . .
función de· las' estrategias léxicas, como cuando a las manifestaciones Finalmente, son de vital importancia. los constructos de significa­
o de inmigraptes no se las llama «manifestaciones» sino «disturbios»
(en contraste con las «manifestaciones de granjeros», aunque estos
do global, como por ejemplo los patrones de argumentación (algunos
de los cuales también,' por supuesto, se manifiestan en los tipos de.
últimos causen más.destrozos), o cuando se evocan dramatizaciones interacción a los que nos hemos referido en el párrafo anterior). A ese
u altamente metaforizádas de la 'inmigración (como en la pregunta de­ nivel encontremos una inconfundible anormalización del extranjero:
O sespemda de un comentarista político respetado: «¿se puede evitar to­ sus características se describen coruistentemente en términos de
O' davía que explote la presa?» en referencia a las «olas» de inmigrantes' evolución, con gran énfasis en un área de origen principalmente rural
a que ponen al «europeo» en peligro de «extinción como raza», .
Una capa de adapta1;lilidad estructuralmente diferente a la que se
(con la que, en realidad, tienen ya pocos lazos), y en una versión del
Islam concebido en términos de fundamentalismo (olvidándose por
o une el significado implícito está formada por una amplia variedad de completo la práctica del Islam hoy en día en las ciud~de~de Bélgic~).
. construcciones que contienen implicación y presuposición. Para dar De igual modo,no es dificil de encontrar la normalIzaCIón del raCIS­
sólo un ejemplo, si se organiza un Congreso con el título «Hacia una mo: el racismo se explica en términos de falta de seguridad económi­

.'•
o comunidad multicultural viable», la combinación de «hacia» y la des­ ca; o se hace a sus causas persuasivas y objetivas en lugar de sujetas a .
cripci6ncomo «viable» para el producto resultante del proceso, im~ la responsabilidad personal en la búsqueda del llamad~ (<umbral de
plica claramente qUe una comunidad multicultural es vista como inhe:' tolerancia», el nivel proporcional de diversidad 'que es aceptable en
ff rentemimte problemática y que hay que tomar medidas especiales una sociedad antes de que empiece a producir graves problemas. Así,
para hacerla (<viable». la retórica permite a la mayoría tolerante decir (29) y a la extrema de­

•• recha (30).
PIlAOMÁTICA. -13


386. Cuestiones macropragmáticas
T

Mpcroprocesos en el uso del lenguaje 387


(29) MT: Los flamencos pueden ser xenófobos en un 90%, pero cantidad de datos. Esto no es un aspecto trivial del método, sino que
hay sólo una pequeña minoría de racistas. está fundado en una consideración teórica importante. Del mismo .
(30) ED: No somos racistas. Sólo queremos garantizar una vida modo que es imposible decir todo lo que uno quiere decir explícita­
pacífica y segura para nuestra gente.
mente, también es imposible querer decir o significar (incluso en una
visión del significado no centrada en la intención) absolutamente. todo .
(29) es un intento torpe de exculpar a las masas, incluso si para ello es
10 que está de cierto modo implicado en lo que uno dice implícita­
necesario reemplazar una acusación específica (racismo) con una mu­ mente. Esto significa que nunca se debería llegar a concluslOnes a
cho más amplia (xenofobia) que casi necesariamente incluye la pri­ .~) .
partir de un ejemplo; Jos ejemplos aislados pueden servir para for­
mera. Tanto (29) como (30) desvían la atención del daño causado por ~)
mular hipótesis o ilustrar 10 que se ha encontrado previamente.. Debe­ .. '
las fonnas de discriminación; (30) ·10 hace justificando abiertamente
rían encontrarse patr~nes de recurrencia en una amplia gama de datos,
el que se dé priQridad a <<uno mismo», (29) consigue el mismo efecto
ya sea en fonna de ocurrencia o de ausencia sistemática. En el caso
de modo más sutil al jugar con las connotaciones semánticas del ra­
del debate belga sobre la inmigración (migration), este requisito se
cismo versus la xenofobia con referencia implícita a la atribución de
satisfizo al contemplar cuatro tipos diferentes. de discurso en un pe:­
intenciones que se supone queno son malas del todo. Finalmente, los
ríodo de tiempo de aproximadamente tres años.' k'
dos lados profesan abiertamente el respeto a la identidad de otras per­
En tercerJugar, se debería prestar atención a la calidad d~Ios da­
sonas (véase (27)c) y esta expresión está ligada a sus soluciones res­
tos. Este requisito, por obvio que parezca, quiere decir que los datos
pectivas al «problema», como en (31) y (32).
deberían seleccionarse en base a los criterios garantizados por el ob-.
(31) ED: Para que puedan mantener su propia identidad, los tra­ jetivo de la investigación (en nuestro caso, el estudio de la ideología).
bajadores extranjeros deberían ser enviados a sus paises Uno podría preguntarse, por ejemplo, por qué prestamos atención a 10
de origen. que decían los politicos, pero apenas a las «cartas al director» en los
(32) MT: Los trabajadores extranjeros deberían integrarse, pero no periódicos. La razón es que necesitábamos el discurso de la gente que
deberían renunciar a su identidad.
intenta que su mensaje llegue a una gran audiencia y consiguiente­
mente intenta no alienar a esta audiencia y trata de maximizar la base
La violación abierta de los derechos de los inmigrantes en (31) con-O
común. Los politicos no quieren distanciarse de su electorado, los
trasta menos con la garantía de igualdad de derechos que con la de­
editores de los periódicos quieren mantener a sus lectores, 10s'CÍentí­
fensa de un claro, ·aunque sea implícito, proceso de «integraciÓn» dis­
criminatorio y represivo que, en el contexto especifico socio cultural
ficos sociales están preocupados por los fondos para la investigación,
pero los escritores de cartas particulares están preocupadosprinci­
o
del disctirso que se investiga, tiene poco que ver con la participación
palmente por expresar sus opiniones, y el resultado de esto ;~ormal­
plena de los «migrants» pero mucho con las vagas medidas que se
mente no tiene consecuencias concretas para ellos. Así, el discurso
imponen unidireccionalmente a esa población; no está completamente
procedente de las categorías anteriores puede tratarse como más en
claro qué aspectos de la identidad se pueden conservar y cuáles se
sintonía con hábitos ampliamente aceptados de hablar y pensar cues­
pueden alterar a la luz de este concepto de integración no especificado.
"tiones sociopolíticas.
Un segundo requisito adicional para que los datos cuenten como
En cuarto lugar, la contrarrevisión es un requisito fundamentaL
prueba en la búsqueda de ingredientes de una ideología se ocupa de la
En otras palabras se riecesitauna búsqueda sistemática de implicacio­
388 Cuestiones macroprdgmáticas Macroprocesos en el uso del lenguaje 389
nes potenciales que contradigan las que están basadas en las conclu­ Esto significa que, de modo predecible, se tiene la tendencia a evitar
siones de la investigaci6n. Por esta raz6n, en el caso de la investiga­ las opiniones de uno mismo o las actitudes que uno sabe que serán
ci6n resumida en esta secci6n, tuvimos que prestar gran atenci6n al condenadas por la mayoría. Por esto, a nivel explícito, la extrema de­
corpus (para satisfacer los requisitos de recurrencia) y a los diferentes recha y la mayoría tolerante, para usar nuestro ejemplo, comparten
niveles de estructura lingüística (para tener una base de datos lo sufi­ (27)c, y la extrema derecha se ve forzada a rechazar imputaciones de
cientemente variada) para tener también expresiones implícitas de una racism!,) en (30). El describirse uno mismo en términos asociados con
actitud fundamentalmente positiva frente a,la diversidad. Désafortu­ los juicios de valor negativos es social y conceptualmente equivalente
nadamente, no pudimos encontrarlas con ningún grado de regulari­ a emitir un juicio negativo sobre uno mismo, que es por defmici6n in­
. dad. compatible con cualquier intento serio de una autodescripción (a no
C) Estos cuatro requisitos (que tienen que ver con los tipos, cantidad. ser que los términos' negativos en cuestión se hayan movido a un me­
cualidad de datos, y con la contrarrevisi6n) están combinados en el
O yconcepto metodo16gico de éoberencia (sin implicar, como se ha he­
tanivel como resultado de posibles estrategias espécíficas de la cultu­
ra O de renegociaciones). Este fenómeno al nivel del discurso es' casi
~ . chO hincapié anteriormente, que .el mundo de la significación que se

••
paralelo a lo que se ha descrito a nivel de los actos de habla en térmi­
está estudiando debáser coherente en un sentido estricto). En la me­ nos de restricciones de performatividad (vé.ase la sección 7.1.2). ¿Por
dida en que ~a coherencia se puede establecer a través de las capas qué es posible decir Prometo amarte siempre pero no Amenazo con
matarte? Simplemente porque prometer no está asociado con juicios
O estructurales ya través de una amplia gama de datos cualitativamente
adecuados, en el sentIdo de que una aplicación sistemática de la mis­ de valor mientras que amenazar describe un compromiso similar con
ma metodología no puede llevar a descubrimientos contradictorios, una serie de hechos futuros que no se aceptan normalmente y por
CJ hay una base empírica válida para estas conclusiones. La coherencia tanto se juzgan de modo negativo. Como resultado, amenazar requie­
O de este tipo sirve como criterio para evitar los errores de interpreta­ re una distancia evaluativa entre el acto llevado a cabo y sudescrip­
() ci6n (como argumentó Eco, 1990,60). ci6n,' de modo que no pueda usarse completamente de modo autorre­
, Después de clarificar la metodología nos quedamos con una cues­ ferencial sin cometer 10 que Zeno Vend1er (1976) describe como
O ti6n te6rica. ¿Por qué se encuentra más importancia en lo implicito suicidio ilocutivo.
O que en lo explícito ,en la interpretación de actitudes y en la búsqueda ¿Cómo se puede colocar todo esto en la teoría pragmática? En la
O' de una ideología? En principio, lo explícito debería ser tan importante ' . secci6n 5.4 y en los capítulos 7 y 8 se mostr6 c6mo breves intercam­
C) como lo implícito. De hecho lo es si no hay discrepancias sistemáti­
cas entre los dos. Tan pronto como aparecen las discrepancias, y es­
bios comunicativos así como áreas complejas de discurso que tras­
cienden el contexto cara a cara inmediato, crean, cuando se tratan
@
pecialmente si surgen contradicciones que nos fuerzan a disociar el desde una perspectiva pragmática, formas de significado identificadas
V significado implícito de las intenciones, como en el ejemplo que aca­ empíricamente cuyo contenido no está restringido a 10 que puede des­
O . bamos de presentar, el mundo habitual de referencia representado a cribirse en términos de intencionalidad individual. Metodológica­

•• nivel del significado implícito pesa más para la interpretaci6n de los


patrones de pensamiento. La razón de esto puede encontrarse en la
'naturaleza de la auto presentación; Al nivel del significado explícito
mente, se mostr6 que la identificabilidad empírica de' esas formas de
significado, dependía en los casos que tratamos, de las dinámicas del
proceso de construcci6n del contexto que se pueden rastrear y de la

•• hay uná preocupaci6n consciente por una autopresentación positiva. coherencia observable al nivel del ·significado implícito. Desde un

e.
8)
/ ")

390 Cuestiones macropragmáticas


r

Resumen lecturas recomendadas 391

punto de vista teórico, los ejemplos también muestran que los casos en la realidad humana, ya sea cognitiva, social o cultural, requiere in­
no occidentales que presentan Rosaldo (1982), Du Bois (1987) y Du­ dudablemente que la lingüística una sus fuerzas con disciplinas veci­
rantí (1988) para apoyar sus quejas por la atención excesiva que se nas como la psicología, la antropología, la sociología, la filosofia,e
presta a la intencionalidad individual en la pragmática de Searle y . incluso la historia. La investigación pragmática y la teorización, des­
Grice, se pueden suplementar fácilmente con ejemplos occidentales de esta perspectiva, pueden contribuir enonnemente a la comprensión
de procesos que apuntan en la misma dirección. Por tanto, en la me­ de la relación entre el individuo y la sociedad, o entre la cognición y
dida en que se puede decir que un enfoque centrado en la intención es la cultura, y el papel que tienen el lenguaje y el significado en la
etnocéntrico, 10 que está involucrado es al menos etnocentrj.smo coin· construcción de ,esa relación.' Por elusivo que parezca el tema, es po­
binado con una comprensión incompleta de la interacción verbal en sible acercarse a sus manifestaciones de modos justificables metodo­
general, proba.blemente debido a una tradición filosófica occidental lógicamente, optimizando la atención sistemática a esos fenómenos
específica con la que es dificil romper. que nos permiten volver a unir significado y lenguaje en la aproxima­
Es de mayor' importancia teórica el hecho de que una aproxima­ ción científica, a la vez que se reconoce un alto grado de separación .)
ción pragmática, especialmente con referencia a la preocupación ex­ entre los dos desde un punto de vista teórico. Este enfoque incluso
traordinaria por el funcionamiento real del lenguaje, nos capacita para nos permite tratar cuestiones de extrema importancia social §:>política,
volver a la pregunta ¿Cuál ES el significado de la expresión X en además de todo 10 que está involucrado en las interacciones a peque­
un contexto Y? Ya no es necesario limitar escrupulosamente la in­ ña escala relativamente sencillas. En otras palabras, la pragmática re­
vestigación pragmática a la pregunta griceana de ¿Qué es lo que in­ cupera el significado en toda su complejidad, y nos permite. como
tentó el hablante que X significará en un contexto Y? Las respuestas a sugiere Duranti (1994). ir de la gramática a la política. O. para decirlo
la pregunta más atrevida tienen que tener en consideración las inten­ en palabras de Lakoff, «la pragmática es, y debe ser. el área de es tu- .
ciones del hablante donde sea necesario, pero no deberían nunca liN dio que nos dice 10 que realmente queremos saber» (1993: 367). al
mitar la interpretación sólo a las intenciones, incluso en los casos en menos algunas de las cosas que queremos realmente saber del funcio­
que son importantes tipos de uso obviamente estratégicos. Lo que namiento del lenguaje.
también está involucrado es todo el abanico de ingredientes contex­
tuales ampliamente divergentes que forman el acontecimiento comu­
nicativo (incluidos los hábitos de conceptualización relacionados con
8.3 RESUMEN Y LECTURAS RECOMENDADAS
la cultura y los procesos de socialización), que se puede interadaptar
con el lenguaje a diferentes niveles estructurales del comportamiento
lingüístico, sujeto permanente a la dinámica interaccional y a la nego­ Este capítulo ha presentado una selección de temas que' pueden

ciabilidad y caracterizado por los diferentes grados de saliencia, que usarse para analizar una teoría pragmática: aspectos de la comunica­
van desde estrategias manipuladoras plenamente conscientes al pro­ . ció n intercultural e internacional, el tema del discurso y la ideología,
cesamiento altamente automatizado. y las propiedades de los debates sociales amplios. Todas se han de
Hay más que decir sobre el estatus del «significado» en una teoría situar en un macro nivel de interacción. como a un nivel que trascien­
pragmática, pero ya debería estar claro que un retomo pragmático al de el aquí y ahora. Como en el capítulo 7, el enfoque fue meramente
significado que pretenda hacer justicia alpapel central del significado ilustrativo, más que representativo. Sin embargo, de estos ejercicios
394 El panorama de la pragmática Tradiciones formativas 395

han pasado a un primer plano más recientemente (como en Smith y En términos de los tres correlatos (signo vehículo, designátum,
Leinonen, 1992), pero como parece por. la publicación de manuales intérprete) de la tradición triádica de la semiosis, se pueden abstraer
de terapia prácticos basados en la pragmática como el de Andersen­ otras relaciones diádicas para su estudio. Se puede estudiar las rela­
Wood y Smith (1997), el campo se ha ido poniendo al ciía. ciones de los signos y los objetos a los que se pueden aplicar los sig­
El objetivo de este capítulo es dar mayor profundidad a la pre­ nos. Esta relación se denominará la dimensión semántica de la semio-:­
sentación situando la pragmática de hoy en día en el contexto históri­ sis, [~ .. J; el estudio de esta dimensión se denominará semántica. O el
co de sus tradiciones formativas (en la sección 9.1). Después se vol­ objeto de estudio puede ser la relación entre signos e intérpretes. Esta
verá a la cuestión de la delimitación (sección 9.2), se mencionará a relación se denominará la dimensión pragmática de la semiosis, [... J,
algunos de los precursores y estudios paralelos de la pragmática como y el estudio de esta dimensión se denominará pragmática (Morrls
teoría de la adaptabilidad lingüística (sección 9.3) y. se señalará de 1938,6).
nuevo la necesidad de una perspectiva interdisciplinaria (en la sección Esta defmición se debe situar en el contexto intelectual de la apa­
9.4). Al final del capítulo quedará claro por qué este libro se ha es­ rición de la. semiótica como reflexiól). filosófica sobre el «significa­
crito del modo en que se ha escrito. do» de los símbolos, provocado a menudo por el uso de símbolos en
ciencia, y por lo tanto relacionado con los avances en la filosofla o
teoría de la ciencia, pero ampliado a todos los otros ámbitos. de acti­
9.1 TRADICIONES FORMATIVAS
vidad en que intervienen lo que Cassirer denomina «animales simbó­
licos», es decir, los seres humanos.'Específicamente, hay una línea
directa desde la tradición filosófica americana del pragmatismo (re­
Numerosas tradiciones han contribuido, individual o colectiva­ presentada por Charles S. Peirce, Williams James, Clarence Irving
mente, a la formación de la pragmática lingüística como disciplina. Si Lewis, John Dewey y George Herbert Mead, de quien Morrls fue dis­
asociamos la tradición de la pragmática con su nombre tendremos cípulo) que estaba interesada en el significado de los conceptos en o
que empezar, éomo habrá quedado claro en el capítu10 introductorio, relación directa con propósitos humanos definidos y consecuencias ()
por la clásica definición de Morrls de. «pragmática» como el estudio prácticas (el nombre de la tradición se inspiró en el uso de Kant de
de la relación entre los signos y los intérpretes de esos signos. Aun­ pragmatisch en su Krítik der reinen Vernunft [Crítica de la razón pu­
que los intereses que constituyen el ámbito de la pragmática tienen ra]).
una historia más larga (véase, por ejemplo, Nerlich y Clarke, 1996, El mismo contexto de esta definición convierte a la pragmática en
una excelente visión de conjunto), la pragmática, como noción, nació una empresa eminentemente interdisciplinaria. Los ambiciosos obje­
de un proyecto muy ambicioso. Intentaba bosquejar una teoría de los tivos de Morrls no sólo reflejaban sus ambiciones personales. Con­
signos, o semiótica,· unificada y consistente, que abarcara todo lo que formaban una parte integral de un movimiento creciente que iritentaba
lingüistas, lógicos, filósofos, biólogos, psicólogos, antropólogos, psi­ combinar en su enfoque rigor filosófico y científico, con los riesgos
copatólogos, especialistas en estética o sociólogos tienen que decir inevitables que implica un intento inflexible de entender todo el razo­
sobre los signos. Es lo que Morrls propuso en la siguiente definición . namiento y el comportamiento humanos. Por esta razón no es sor­
del campo: . prendente que las tradiciones «formativas» que han dado forma a: la
pragmática tal y como la entendemos hoy en día tengan sus orígenes

••
()
392 Cuestiones macropragmáticas

se pueden obtener importantes lecciones en relación con lametodolo­


gía de la investigación pragmática. Más aún, las consideraciones me­
todológicas alimentan también la teoría pragmática. En particular, se
demostró que, si se hacen algunas concesiones mutuas, la pragmática
es capaz de revelar algunos «hechos del significado» reales o aspec­
tos del verdadero «funcionamiento» del lenguaje en la vida social.
Sobre los recursos del lenguaje a un macro nivel: Fasold (1984, 9

1990); Y especialmente en relación a la pragmática del cambio lin­


güístico, Meeuwis (1991). Sobre la comunicación intercultural: Blom­ EL PANORAMA DE LA PRAGMÁTICA

maert y Verschueren (eds.) (1991), Gumperz (1982), Hinnenkamp


o· (1995). Sobre el discurso y la ideología: Bakhtin (1981), Bordieu
(1991) y ChUton et al. (eds.) (1998), Wodak (1995). Sobre el análisis .
O
·­ Los capítulos anteriores han intentado guiar al lector hacia un en­

•• pragmático del debate social: Blornmaerty Verschueren (1998). Se


puede obtener una visión interesante de la distinción micro-macro én
Sharrock y Watson'(1988).·
tendimiento claro de 10 que es y lo que trata la pragmática, evitando
cuando ha sido posible las distracciones que provoca el quién-dijo­
qué-cuándo o las diferencias polémicas. El interés principal ha sido
o bosquejar el panorama de los temas importantes de pragmática cohe­
rentementede manera que, de algún modo, este libro puede conside­
u 8.4 TEMAS DE INVESTIGACIÓN rarse como una amplia definición del campo. Los capítulos 7 y 8 s.e
o 1. Haga los ejercicios formulados al final de la sección 8.2.2. ,
desvian ligeramente de este objetivo porque presentan ejemplos ele­
gidos cuidadosamente para demostrar no sólo qué tipo de preguntas
o 2. Vuelva a conSultar los ejemplos en las secciones 4.7,6.6 Y 7.4, de investigación puede plantear la pragmática sino también cómo 10
o Y describa detalladamente lo que revelan sobre el discurso y los pro­ hace (o cómo debería hacerlo). Se podrían haber seleccionado mu­
o cesos ideológicos. chos otros tipos de temas de áreas de investigación como la adquisi­
F\
~J.
ción del lenguaje ola.patología del lenguaje. Las aproximaciones
pragmáticas a la adquisición del lenguaje datan de la primera etapa
e
del interés lingüístico sistemático en el uso del lenguaje, es decir, el
(D, . período en el que la sugerencia de Hymes (1972) de que el uso del
o
lenguaje implicaba una competencia comunicativa había hecho res- .

•• petable la concentración en la parole (en la dicotomía de Saussure


langue-parole) o en la actuación
1
(en la terminología .chomskiana de

••
competencia-actuación). Véanse Ervíng-Tripp (1973), Bates (1976),
Ochs y Schieffelin, eds., (1979; 1983). En cuant? a los temas clínicos,

•.'

398 El panorama de la pragmática Tradiciones formativas ;~.. 399


hasta sus desarrollos posteriores, ya sea bajo hi denominación de so­ pensamiento pragmático. Es suficÍf~nte enumerar al azar algunas ob­
ciollngüística (p. ej. Hymes, 1974) o más específicamente sociolin­ servaciones sobre avances posteriores. El libro de Winch (1958)
güística interaccional (p. ej. Gumperz, 1982), ha permanecido como
sobre «la idea de una ciencia social» se publicó en una colección lla­
un intento, más o menos exitoso, de estudiar el uso d~l lenguaje en
mada Studies in philosophical psychology (Estudios de psicología
contexto, teniendo en cuenta la plena complejidad de la gramática, la
filosófica), y de .hecho trataba tanto de la mente como de la socie- .
. personalidad, la estructura social y los modelos culturales, sin elimi­
dad. Una de las colecciones clásicas de artículos relacionados con la
nar estos diferentes aspectos del modelo de la actividad lingüística
pragmática, aunque su título fuera Semantics [Semántica], fue publi­
misma. En segundo lugar, existía la tradiCión sociológica de la etno­ cada por mi psicólogo y un lingüista y se llamó An interdisciplinary
metodología, iniciada por Garfinkel (véase Garfinkel, 1967), que pro­ reader in philosophy, lingUistics and psycho logy (Lecturas interdisci­
dujo el amplio campo del análisis de la conversación (p. ej. Sacks et plinarias de filosofia, lingüística ypsicología) {Steinberg y Jakobo­
al., 1974; Atkinspn y Heritage, eds:, 1984; véase la sección 1.1.4). De vits, eds.,1971). El manual de Clark y Clark (1977) sobre psicolin­
nuevo, a pesar de los pequeños detalles de los que se ocupa con fre­ güistica ya había incorporado completamente el conocimiento sobre
cu~ncia el análisis de la conversación, la pregunta subyacente no era
el uso del lenguaje, comprensión, producción y adquisición que había
nada modesta: la interacción cara a cara se convirtió en el tema de in­
ofrecido la pragmática en ese tiempo, y tuvo influencia en trabajos
vestigación en "vista de las claves que ofrece para el entendimiento de
posteriores. Mientras tanto, se desarrqllaba una tradición claramente
la organización 'de la experiencia y el comportamiento humanos.
cognitiva en empresas tan diversas como el estudio de modelos de
'. Los supuestos básicos, tanto de la etnografia de la comunicación
metaforización (Lakoff y Johnson, 1980), investigaciones sobre as­
como de la etnometodología, nos hacen volver, sin damos cuenta, a
pectos de la generación de significado a nivel de la oración y en el
un filósofobritánico en la tradición de Wittgenstein, Winch (1958),
discurso (Fauconnier, 1985; Givón, 1989; Talrny, 1978), y la creación
cuya afirmación principal era que el comportamiento humano no
de gramáticas cognitivas (Langacker, 1987). Recientemente se nos ha
puede entenderse sin acceder a los conceptos con que los interpretan
recordado que el objetivo real de la ciencia cognitiva era «hacer que
los que participan en el comportamiento, y que el lenguaje ofrece las
la psicología uniera fuerzas con sus disciplinas interpretativas herma­
claves necesarias para esos conceptos (véase también la sección
nas en las humanidades y las ciencias sociales» para estudiar ~<actos
6.4.2). Dada la similitud de los fundamentos, no es sorprendente que
de significaciÓn» (Bruner, 1990, 2), un concepto esencialmente prag­
las dos tradiciones hayan convergido significativamente. Lo que han
mático. En varios puntos del proceso, se revitalizaron, con o sin refe­
producido, en cpnjunción, es una noción altamente dinámica de con­
rencia a la adquisición del lenguaje, las ideas más antiguas formula-
texto (Auer y di Luzio, eds., 1992; Duranti y Goodwin, eds., 1992;
das por Vigotsky (véase 1986) sobre las relaciones entre la cognición O
véase especialmente la sección 3.4) que está destinada a permanecer
individual y la sociedad. La psicolingüística evolutiva, cqmose se- (;)
como pilar principal para la formación de teoría en pragmática en los
años venideros. ñaló al principio de este capitulo, há estado durante décadas usando la O
pragmática y contribuyendo también a su crecimiento, y es en el es- r
La psicología y la ciencia cognitiva siempre han intervenido. La tudio de Ochs (1988) sobre la adquisición del lenguaje en una comu- ,J
teoría .de Bühler de la psicología del lenguaje (1934), especialmente
nidad de Samoa donde se encuentra uno de los ejemplos más com:"
mediante las distinciones que hace entre varias funciones del lt:mgua­
pletos de cómo 10 cognitivo, 10 social y lo cultural se combinan. en
je, ha estado presente directa o indirectamente en la mayor parte del
cuestiones de lenguaje y de uso del lenguaje, una cuestión tratada un @

••
,A····
396 ' El panorama de la pragmática Tradiciones formativas 397

en muchas disciplinas diferentes. El descubrimiento de Morris del americana en pragmática. Esto no significa que la misma teoría de los
usuario del lenguaje no fue un avance aislado. Fue paralelo y tuvo actos de habla no haya recibido influencias. Ha tomado forma, clara­
una relación directa con el descubrimiento del actor humano en rela­ mente, por las interacciones y los desafios con las investigaciones re­
ción con el lenguaje y el comportamiento cultural y social en el tra­ flejadas en los trabajos de Vanderveken (1988), Récanati (1981);
bajo de Mead, Malinowski, Boas y Sapir. La interdiscíplinariedad es Sbisa (1989), la escuela de pragmática de Ginebra (por ejemplo Rou­
tan fundamental que cualquier intento de ordenar la breve muestra si­ let, 1980, y el número anual de Cahiers de linguistiquefranfaise), sin
guiente a 10 largo de las fronteras disciplinarias simplificaría de gran mencionar la pragmática transcendental de Apel (1989), la prag­
manera el proceso histórico. Aún así, es imposible evitar el uso de al­ mática universal de Habermas (1979)" o la pragmática funcional
gunas denominaciones disciplinarias. de Rehbeín (1977) y Ehlich (1991) (este último término sería tautoló­
o Incluso ignorando la base filosófica de la semiótica, no se puede gico en el contexto de este libro).
negar que la filosofia hl:). ofrecido algunas de las ideas más fértiles en El nombre de Habermas, que representa a la teoría social crítica,
O pragmática. Además del programa de Wittgenstein para relacionar ofrece un enlace con una rama diferente de tradiciones formativas;'un
O «significado» con (<uso» (Wittgenstein, 1958; véase también Bimba­ complejo de empresas sociológicas, antropológicas, psicológicas y
• cher y Burkhardt, eds., 1985), la filosofia del lenguaje produjo dos de psiquiátricas. Todos estos se combinan en el programa de Bateson
las principales teorías que subyac'en a la pragmática de hoy en día. La con base en el Mental Research Institute de Palo Alto. Esta tradición
• primera (que se presentó brevemente en la sección 1.1.2) es la teoría no sólo reintrodujo el concepto de Bartlett (1932) de marcos (como
e de los actos de habla, formulada originalmente por un «filósofo del en Bateson, 1972), que posteriormente adoptaron Fillmore, en sus'
O lenguaje orrunario» de Oxford (Austin, 1962) y desarrollada poste­ marcos semánticos (1975b), Goffman en su marco de análisis, so­
riormente por Searle (1969). La segunda es la lógica de la conversa­ ciológico (1974), que también aplicó al análisis de la interacción ver­
o ción (Grice, 1975; véase la sección 1.1.3). Juntas ofrecian un marco bal (Goffman, '1981),y en inteligencia artifiCial (Minsky, 1977)~-El
de referencia para la consolidación del campo de la pragmática lin­ , de Bateson, de hecho, era un programa general, no menos ambicioso
() güística? que se habia convertido en una realidad con la publicación que el semiótico, dirigido al mejor entendimiento del comportamiento
O de Pragmatics ofnaturallanguages (1971), de Bar-HilIel, y Seman­ humano, incluyendo tanto la actividad verbal como la mental. La
a ticsI,ofnaturallanguage (1972), de Davidson y Harman, dos clásicos afirmación más conocida de su visión sobre la comunicación ya tenía
va umenes colectivos con contribuciones predominantemente filosó- , <<pragmática» en su título: La pragmática de la comunicación huma­
() ficas pero con una notable presencia de unos pocos lingüistas asocia­ na: un estudio de patrones de ,interacción, patologías y paradojas
O dos, en grados diferentes, con el movimiento disidente de la semánti­ (Watzlawick el al., 1967).
" ca generativa (Fillmore, G. Lakoff, McCawley y Ross). Fue a través Otras tendencias en sociología y antropología, que convergen en
de la semántica generativa, pese a 10 efimera que pueda haber sido, diferentes grados con el programa de Bateson (con raíces anteriores
@ , como searraígó en lingüística una pragmática inspirada en la filosofla incluso al mismo Bateson y especialmente con su expresión en eltra­
e como tina empresa respetable (una historia elocuentemente descrita bajo de Goffman), pronto se asociaron también con la pragmática.
G en Lak0:ff, 1989).' . Este fue el caso específico de dos tradiciones. En primer lugar la et­
• ' ~a teoría de los actos de habla ha ejercido una influencia que ha nografíade la comunicación, orientada a la antropología, que, desde
., contInuado hasta el presente. Fue el motor ~e la prominencia anglo­ sus primeras formulaciones (como en Gumperz y Hymes, eds., 1972)

•• ',­
''?Y''

el ----~------------------~--------~~---
400 El panorama de la pragmática Tradiciones formativas 401

siglo atrás en el trabajo de Humboldt y relacionada con los intereses perspectiva que han adquirido un lugar fijo en el estudio pragmático
de lingüistas y antropólogos como Whorf, Kroeber, Haas y Emeneau. del lenguaje, como <<tema-rema», <<tópico-comento» y «foco», sin men­
O Hasta ahora no hemos mencionado ninguna tradición formativa cionar las contribuciones que hizo al estudio de la entonación. La tra­
• con raíces en la lingüística como tal. Hayal menos tres que no se dición era funcionalista en el sentido de que el lenguaje se considera­
pueden ignorar, aunque se mostrará que incluso éstas tienen conexio­ ba desde la perspectiva de los objetivos a los que sirVe en la actividad
• nes que van más allá del estudio púramente lingüístico del lenguaje. humana. Aunque la mayoría de los trabajos se dedicaban a detalles
., En primer lugar, la escuela francesa de pragmática (relacionada con lingüísticos, sus fundamentos se enlazaban a la cibernética y su no­
e la Escuela de Ginebra a la que nos referimos anteriormente), con raí­ ción de los sistemas dinámicos de dirigirse hacia un objetivo. Por otra
(") ces en la obra deBenveniste (1966) y cuyo proponente más abierto es parte, había un componente lingüístico (p. ej. Jakobson, 1960) que
'v Ducrot (1972, 1973, 1980). La tesis principal de Benveniste era fun­ llevó a la escuela de Praga a una posición más cercana a los intereses
damentalmente pragmática: Nihil est in lingua quod non prius fuerit de la semiótica en general. Además, la relación con otras disciplinas
in oranone (aproximadamente, «No hay nada en el lenguaje que no se consideraba como una cuestión muy relevante (como se refleja, por
O esté primero en, el uso del lenguaj e»). Su trabajo recibió claras in- ejemplo, en las explicaciones de Jakobson, 1970).
o fluencias de ,la filosotIa analítica británica, como el de Ducrot fue in­ Por último, aunque no por eso ~enos importante, no se puede ol­
fluido por los posteriores avances de la teoría de los actos de habla. vidar la tradición de la lingüística de Firth, que se mueve sobre <<una
• La influencia en la Qp'a dirección ha sido injustificablemente escasa, visión del habla como instrumento social, tanto para "sentido" como
G ya que, seha,l1,hecho numerosas contribuciones originales: el concepto para "sinsentido", trabajo y jüego: práctico, productivo, creativo»
O de Benveniste de la «delocutividad», desarrollado posteriormente por (Firth, 1964, 15) y, siguiendo las huellas de Malinowski, rechaza ob­
O Anscombre (1979) como una herramienta para explicar la autorrefe­ servar ,el lenguaje fuera del «contexto de la situación» (véase la sec­
O rencia de los performativos explicitos; la noción de Ducrot de la natu­ ción 3.1). Hoy en día, la mayoría de las aproximaciones funcionales
raleza «polifónica» del significado del enunciado, que resulta de una en lingüística tienen raíces históricas directas o indirectas en la lin~
Q distinción reveladora entre productor, locutor y enunciador como as­ güística de Firth, en'la escuela de Praga o en ambas (p. ej. Halliday,
O pectoS distintos del hablante (con parecidos notables con las <<voces» 1973; Dik, 1978; para una visión general véase Dirven y Fried, eds.,
O de Bajtin); la reformulación de Ducrot de la teoría de los actos de ha­ 1987). Han producido teorías de la gramática totalmente orientadas a
bla dentro del molde de una teoría general de la argumentación, en ' la pragmática, como 'la gramática funcional sistemáticá de Halliday
, cuyo contexto se presta atención al estudio detallado de las «pequeñas (1985), así como, en una línea de desarrollo diferente, tradiciones
palabras» que sirven como mecanismos de estructuración argumenta­ enteras de estudios del discurso (p. ej. Sinclair y Coulthard, 1975) y
O tiva (una misión que la escuela de Ginebra y la francesa tienen en análisis crítico del discurso (p. ej. Fairclough; 1989).
@ común). Además, algunos de los temas tradicionales de la pragmática Muchas de las tendencias han dejado huellas abundantes en los
• lingüística, como la presuposición, han sido ,objeto de análisis en 'el trabajos más importantes de la lingüística' de primera línea, como el '
contexto de esta tradición (p. ej. Ducrot, 1972). manual clásico de Bolinger (1968), Aspects oflanguage (Aspectos del
O En segundo lugar, la escuela de Praga (p. ej. Mathesius, 1928; lenguaje) .
., Danes, ed., 1974; Firbas, 1983; Sgall y Ají, 1977) ofreció algunas no­

.
.

• ,ciones clave relacionadas con ~a estructura de la información' y la

'

e
402 El panorama de la pragmática Los problemas de delimitación 403

complementaria de la semántica y/o de la gramática. Así Leech ,


(1983,4) afirma: )

9.2 LOS PROBLEMAS DE DELIMITACIÓN [...] que la gramática (el sistema abstracto fonnal del lenguaje) y
la pragmática (los principios del uso del lenguaje) son ámbitos com­
plementarlos dentro de la lingüística..
A 10 largo de su historia, se han hecho numerosos intentos de so­
lucionar el problema de delimitar el campo de la pragmática siguien­ En la terminología de Leech, la semántica es parte de la gramáti­
do ciertos principios, es decir, de manera que haya una unidad temáti­ ca. Otras dos formulaciones de tal visión, bastante directas, son la
ca, del tipo de investigaciones, y metodológica. Dna mirada atenta a afmnación de Gazdar (1979) de que la pragmática (formal) es el es­
algunos de los volúmenes colectivos, monografias y manuales, tanto tudio del significado menos las condiciones de verdad (la semántica
introd,uctorios como avanzados, revelan el siguiente cuadro. se limita al estudio del significado en términos de las condiciones de
En general, cualquier cosa que se asemej e a una unidad temática y verdad, como en Kempson, 1975), o el contraste de Cole (1981, xi)
o
metodológica se encuentra sólo en trabajos que restringen el alcance entre la semántica «que interviene enJa determinación del significado O

de la pragmática a nociones más o menos limitadas como la de actos convencional (o literal)>> y. la pragmática «en la determinaCión dC!

de habla, mínimamente extendida hacia el campo del diálogo o trata­ significado no convencional (o no1iteral)~. LeviÍlson (1983, 32),

da en relación directa con problemas lógicos o gramaticales (p. ej. aunque crítico de esas definiciones,las defiende con una ligera re­

Wunderlich, ed., 1972; Sch1ieben-Lange, 1975; Dah1, ed., 1977; Sear­ formulación después de revisar cuidadosamente un amplio abanico de o
. le, et al., eds., 1980), o énonciátion (p: ej. Récanati, 1979; Kerbrat­ propuestas altemati:vas:
Orecchioni, 1980; Berrondonner, 1981; Latraverse, 1987). Se encuentra
también en trabajos que se concentran en «fenómenos»eminentemen­
Las más prometedoras [definiciones de pragmática] son las defi­ o
te relevantes al estudio del lenguaje en uso, con o sin combinarse con
niciones que equiparan la pragmática con «significado menos semán­ O
tica», o con una teoría de la comprensión del lenguaje que tiene en O
una concentración clara en los tipos de nociones ilustrados anterior­ cuenta el contexto para completar la contribución que la· semántica
mente, como la noción de lo apropiado (como en Verschueren, 1985a, hace al significado.
y sobre lo que Parret et al., 1981, afirmaban algo inocentemente que
parecía que había «algún tipo de consenso general» [pág. 8] que es de Esta es la base de la extendida definidón .de pragmática como el es­
o
gran importancia), la implicitud (como en Ostrnan, 1986; Duerot, tudio del significado en contexto.Esta visión es posteriormente modi­
1972; Kerbrat-Orecchioni, 1986), la «derivación de significado» o la ficada, permaneciendo al mismo tiempo en el mismo paradigma; con
inferencia (p. ej. Comulier, 1985), o las unidades «transjrásticas» la distinción que introduce Davis (1991, 11) entre una teoría dela sa:'
(Stati, 1990), o la ~elevancia, muy importante en el desarrollo re­ tisfacción y una teoría de la pragmática (véase el tema de investiga­
ciente de la pragmática (Blakemore, 1992; Carston y Dehida, eds., ción en la sección 2.6). .
1998; Escandell Vidal, 1996, Sperber y Wilson, 1986).· La separabilidad clara de :un componente pragmático se niega a
Una vez se abandonan esas nociones, las aspiraciones de unidad menudo, como cuando Guenther y Sehmidt (1979, vii) dicen que «no GJ
temática y metodológica se trasladan a menudo a una visión de la podemos esperar lograr una sintaxis y una semántica integradas ade­ ~
pragmática como un componente claro de una teoría lingüística, cuadamente sin prestar atención a los aspectos pragmáticos de· las @

••••

'T

v 404
í" El panorama de la pragmática Los problemas de delimitación 405
o construcciones implicadas». Esta idea tiene el apoyo de la mayoría de ticas, la informaci6n y la teoría de sistemas, la jurisprudencia, la cien­
J los proponentes de la pragmática como componente que se habían ' cia literaria, etc.] (Schmidt, 1974, 7).
{) interesado primeramente en la pragmática por esta misma afIrmación.
El componente pragmático se considera como un componente necesa­ Del mismo modo, la introducción a la pragmática de van Dijk (1978)
(,',' rio de una teorla adecuada de la competencia lingüística. Por esta ra­ acentúa sus conexJones con la psicología cognitiva, la .sociología y la
j zón Leyinson defIende «la necesidad de un componente pragmático antropología; el enfoque de Golopentia (1988, 2) se apoya en «la sé­
O en una teoría integral de la habilidad lingüistica», y Davis (1991, 4) miotique mise a part, .la linguistique, l' ethnolinguistique, l' analyse
(1 dice: «Considero que la pragmática es una parte de una teorla de la textuelle, l'analyse conversationelle et la th60rie littéraire» [<<1ingüís.,
• competencia y, como tal, la consideraré como una realidad psicológi­ tica, etnolingüistica; análisis textual, análisis de la conversación y teo­
ca». Cualesquiera que sean las diferencias en la teorla, los que se ad­ ría literaria, además de la semiótica»] y en la obra de no sólo Austin
.. hieren a este tipo de visión general se concentran en una gama de fe­ sino también de von Wright y Bajtin., La misma orientación general
O nómenos pragmáticos más o menos compartidos: deíxis, implicatura, se encuentra en la base de muchos volúmenes colectivos de trabajos
O- presuposición, actos de habla, interacción' conversacional, etc., es de­ sobre pragmática (p. ej. Verschueren y Bertuccelli Papi, eds., 1987).
O cir, los mismos con lo~ que empezamos en el Capítulo 1. A pesar de ' 'De igual modo, hay cruces con las disciplinas de la lingüística textual,
°
la obvia naturaleza cogrutiva de la competencia destreza bajo in­ la narrativa,el análisis del discurso, los estudios literarios y la estilís- '
~. vestigación (los proceªos de inferencia, por ejemplo, son uno de los tica que muestran invariablemente una clara inclinación interdiscipli­
.• y
intereses principales):c pese a los determinantes sociales y culturales naria, mientras que las formas aplicadas de la pragmática son por ne­
O del contexto;loque tainb~éncomparten es un miedo general a invadir cesidad interdisciplinarias (p. ej. Blum-Kulka et al., eds., 1989; Smith
() el territorio de la sociolingüística y la psicolingüística. . y Leinonen, 1992).
Las aproximaciones de Bolder hablan de la pragmática como «la Por supuesto, no todos los enfoques interdisciplinarios asignan
science qui reconstruit le langage comme phénomene communicatif, una red tan amplia alrededor de 10 que interesa para la comprensión
intersubjectif et social» [«la ciencia que reconstruye el lenguaje como del funcionamiento del lenguaje. Se imponen restricciones para in­
() fenómeno comunicativo, intersubjetivo y sociab>] (Parret et al., 1980, tentar conseguir la unidad de tema y de método después'de la expan­
3). A esta se unen un conjunto de afIrmaciones sobre la necesaria in­ sión entre disciplinas. Por ejemplo, en la teoría de la relevancia
terdisciplinariedad del campo de la pragmática: ' (Sperber y Wilson, 1986), la pragmática se limita a 10 que se pueda
decir en términos de una noci?ln defuiida cognitivamente de relevan­
, «Pragmatilm gleich ob als linguitische Teiltheorie oder als
o , neuartige Theorie sprachlicher Kommunikatibn,;. ist angewiesen auf
cia. 0, como presenta Blakemore (1992, 47) en su manual basado en
la teoría de la relevancia:
A enge Zusammenarbeit mit anderen Disziplinen me Soziologie, Psy­
V
e
,. chologie, Philosophie, Logik und Mathematik, Informations- und
Systemtheorie, Jurisprudenz; Líteraturwissenschaft etc.
[...] es confuso incluir fenómenos como la cortesía, la protección
de la imagen y la alternancia de tumos con Jos fen6menos que se dis­
cuten en los capítulos siguientes [sobre explicatura e implicatura]

•• [La <<pragmática», ya sea como componente de una teoría lin­


'güfstica o como un nuevo tipo de teoría de la comunicación lingüisti­
ca, tiene que contar con la cooperación cercana de otras disciplinas
bajo la denominación de pragmática.

Aunque no descarta la sociopragmática (tal y como la defIne Leech


e
como la sociología, la psicologia, la filosofia, la lÓgica y las matemá­ 1983) como una empresa válida, no acepta la posibilidad de combinar

••ti
'f

I
)

406 El panorama de la pragmática Precursores y estudios paralelos a la pragmática ~, 407


un enfoque cognitivo y uno social en una teoría general de pragmáti­ pantes en un proceso de resolución de·problemas continuo, propone
ca. Los descartes en la otra dirección son menos comunes, pero mu­ que las adaptaciones de comportamiento y socio-culturales son pro­
chos autores que entran en el ámbito de lo soCÍal dejan de lado 10 ducto de procesos «epistemológicos» e interpreta la evolución huma­
cognitivo. Mey (1993, 42) ofrece un ejemplo reciente: na en general como un crecimiento del conocimiento. Aplicada al
Por tanto, la pragmática es el estudio de las condiciones de los lenguaje, la viabilidad de tales explicaciones funcionales puede de­
usos del lenguaje humano tal y como éstos están determinados por el pender (como defiende Van parijs) de la distinción entre mecanismos
contexto de la sociedad. de selección natural en la evolución (seleccionando o eliminando ras­
gos mediante la selección o eliminación de las entidades que estos
El libro de Mey trata todos los «temas 'comunes» de la pragmática, rasgos caracterizan) y los mecanismos de refuerzo (seleccionando
dej a de lado un tratamiento detallado de las presuposiciones pero rasgos directamente). Esto último es 10 más parecido a lo que se cree
añade un capítulo sobre «pragmática societal» con tono crítico, como que ocurre en la formación de las lenguas y, por extensión, en el fun­
cabe esperar del autor de Whose language? (Mey, 1985). Se encuen­ cionamiento del lenguaje. .
tran combinaciones más o menos ambiciosas de los aspectos cogniti­ El interés de la epistemología evolutiva en el aprendizaje está re­ ()
vos y sociales del uso del lenguaje en manuales recientes como flejado en las teorías psicológicas de Piaget, donde la adaptación es
Bertuccelli Papi (1993), Ghiglione y Trognon (1993), Moeschler y una idea central (p. ej. Piaget, 1971), yen las teorías sobre el desarro­
Reboul (1994), y también en la teoría .funcionalista de Givón (1989) llo mental de Vigotsky, que le permitieron hablar de «esos medíos de
que tiene «en su centro la noción de conteXto, o marco, o punto de adaptación que llamamos signos». Piaget hace frente a la multidirec­
vista» (pág. 1) en relación con el sistema de signos completos a cual­ cionalidad de la adaptación definiéndola como un equilibrio entre
quier nivel posible de la estructura, sistema llamado «código», enfati­ asimilación (la integración de un nuevo elemento en el ciclo de un
zando el papel de la «mente» humana en el proceso de la comunica­ organismo) y acomodación (el organismo que se modifica como re­
ción. . sultado de la asimilación).
Las teorías del origen y evolución del lenguaje o de los lenguajes
muestran una fuerte tendencia a referirse a fenómenos· de adaptación
9.3 PRECURSORES Y ESTUDIOS PARALELOS A LA PRAGMÁTICA COMO incluso cuando están descon~ctadas del intento general de extender la
TEORíA DE LA ADAPTABILIDAD LINGüíSTICA teoría de la biología a aspectos del comportamiento y de la socíocul­
tura, tal y como los presenta la epistemología evolutiva. Ya en 1875.
Q

•e
Whitney atribuye implícitamente el origen y el crecimiento del len-.
El uso de la noci6n de adaptabilidad que se hace en este libro no
guaje a un proceso de adaptación cuando los trata como una respuesta
surge de la nada, se puede considerar como un ejemplo de «par~dig­
a la necesidad de comunicación que se desarrolla gradualmente (aun­
ma creciente» (Van Parijs, 1981) en las ciencias sociales. En particu­
que él no hubiera suscrito' la continuidad entre Naturwissenschajt,
lar, la' epistemología evolutiva amplía la teoría biológica, y en espe­
aprbximadamente las «ciencias» y Geisteswissenschajt, aproximada-' &
cial el paradigma de la selección natural, a todos los aspectos de @
:mente ¡as humanidades y las ciencias sociales, poniendo la lingüística ..
comportamiento y socio-cultura, incluyendo lenguaje, aprendizaje y
ciencia. La epistemología evolutiva ve l~s organismos como partici­ firm~mente en esta última categoría). De igual modo, . Sapir, aunque
enfatizó fuertemente que el lenguaje es una función cultuml antes que
.

."


408 El panorama de la pragmÓ:tica Precursores y estudios paralelos a la pragmática 409
~
una función heredada biológicamente y que el «habla es una actividad una adaptación unidireccional del comportamiento del niño al habla
simple que se lleva a cabo por uno o más organismos biológicamente adulta, debería quedar .clara por los estudios sobre la variedad que se
~ a~aptados a ese propósito» (en el sentido en que habrian sido espe­ usa con los. niños, baby talk, que representa la. adaptación de los
cialmente desarrollados para el lenguaje), afinnó que . adultos al nivel del niño (ya sea momentánea o sistemática).
Se han ofrecido más descripciones y explicaciones de adaptado- .
El habla es una red siempre cambiante y extremadamente com­
nes «locales» de diversos fenómenos lingüísticos más restringidos. El

pleja de aju.stes, en el cerebro, en el sistema nervioso y en los 6rganos


articulatorios y auditivos,.que tienden hacia el objetivo deseado de la tipo de acto de habla de pedir se ha estudiado en relación con su fun­

o c~municaci6n (1921,9; cursivas añadidas). cionamiento en grupos sociales, concentrando la atención en su adap­

() tación a modos de resolver el conflicto entre competitividad natural y

() La referen~ia a la. ad~ptación evolutiva de tipo biológico, que implica la necesidad de cooperación (p. ej. Becker, 1984).Pawley y Syder

O una extensión de la blOlogía más allá de la propia «naturaleza» (y por (1983) han aducido la selección natural para explicar las diferencias

· esta raZÓn no contradice opiniones similares anteriores), se ha vuelto entre ciertos usos sintácticos y morfológicos en inglés conversacional

O mucho m~s ~xplícita)~esde en:o~ces. Asf, mientras reconoce el gran . y fonnal. Por ejemplo, se dice que las condiciones de uso hacen que

e salto cuahtatlvo de la.,,«zooseffilótlCa» al discurso (habla) humano, Ia­ they, them, their [ellos, (a)ellos. sus, de ellos/as] sean más apropiados

e kobson (1970) d~fien<!~ la existencia de una continuidad evolutiva y o adaptados a inglés conversacional para referirse a tercera persona
singular con género neutro que el conjunto he [él] or she [ella], que
• que, en ~o que atañe aTlenguaje humano, no pueda haber una dicoto­
O mía estri,cta entre naturaleza y cultura. La conexión no se puede ex­ sigue siendo admisible en la escritura. Los ideófonos (es decir, repre­
poner mas claramente de lo que 10 hace Liebennan en la siguiente ab­ sentaciones vívidas de ideas por medio de la calidad sonora de una·
O servación: fonna lingüística ya sea creada espontáneamente, como en cruasán
o El lenguajehum~no puede haber evolucionado sólo en relación
crujiente, o convencfonalizada como en blablablá) han sido descritos
(por Samarin, 1978) como adaptaciones a la función expresiva del
e con la condición humana total. No habría habido una ventaja selecti­
habla. El simbolismo acústico en general se ha relac.ionado, por ejem­
o va para la retención de las mutaciones que gradualmente dieron como
r:sultado la evolución del lenguaje humano si el lenguaje no se hu­ plo, a un «código de frecuencia» determinado biológicamente que
o biera usado en 10 que Darwin denominó (da lucha por la superviven­ asocia la alta frecuencia acústica con el significado de «pequeño vo­
cia» (1975, 1). calizador, por tanto subordinado, no amenazador, etc.» y la baja fre­
cuencia acústica con el significado de «vocalizador grande, por ta.nto
... ~n el ~rea de la adquisición del lenguaje, varios estudiosos del lengua
dominante, agresivo, amenazante, etc.» (véase Ohala, 1984). Incluso
~ lnfant:l se han concentrado en los aspectos pragmáticos de este proce..;
las diferentes calidades de la voz de los hombres y de las mujeres se
Oso baJO la denominación de «etología» (e. j. Becker, 1983; Foppa,
han atribuido a procesos de adaptación diferentes .
• 1979; Maho~~y, 1975). La idea de que la adquisición del lenguaje se Al mismo nivel «loca})), debe quedar claro que algunas de las no­
• puede descnblr como ~a cadena de pasos de adaptación que da co­ ciones de la pragmática presentadas en el Capítulo 1 son implícita­
a
mo resultado el lenguaje adulto. se usa ahora menudo como una mente adaptacionistas. Recuérdese, por ejemplo, la noción de «direc­
.premisa básiCa (p. ej. en Bemicot, 1992). Sin embargo, la compleji­ ción de ajuste) [direction offltJque se usó como unodelos criterios
edad de los procesos, incluyendo el hecho de que, de nuevo, no hay para clasificar los actos de habla, caracterizando a los asertivos como

••
410 El panorama de la pragmática Precursores y estudios paralelos a la pragmáticá 411

intentos de hacer que las palabras o el contenido proposicional refle­ Como ya se señaló en la sección 2.2 y se repitió en varias ocasio­
jen un estado de cosas en el mundo, o a los directivos como intentos nes, debe rechazarse vigorosamente cualquier asociación unidireccio­
de lograr un estado de cosas. que se corresponda a las palabras enun­ nal que sugiera un mecanismo de comportamiento estímulo-respuesta
ciádas. Además, se puede aflrmar que el aparato completo de las en el cual cualquier cosa «en el mundo», puede actuar como un estí­
«condiciones de felicidad» tiene que ver con la adaptabilidad de los mulo para provocar una respuesta lingüística. Nótese que la adapta­
actos de habla a objetivos y circunstancias. De modo similar, los «su­ ción, como se observa en biología, no es tampoco un proceso unidi­
puestos de fondo» [background assumptions] tienen que ver con cir­ reccional. Aunque se dirija. a un objetivo, no es teleológica en el
cunstancias contextuales preexistentes, conocidas o supuestas, a las
cuales se adaptan las fornuis de expresión para no ser expresadas lite~
sentido de ser iniciada con un objetivo y determinada por un objetivo, n
ya que «la selección natural es estrictamente un fenómeno a posterío­
ralmente o explícitamente. En este contexto, hay que distinguir .dife­ ri que recompensa el éxito actual pero nunca marca <?bjetivos futu­
rentes niveles de adaptabilidad. Esta es la razón por la que el con­ ros» (Mayr, 1974, 2); en otras palabras, no hay un gran «designio»,
cepto de «fracaso presuposicionah> tiene sentido incluso cuando no como diría Dennet (1995). La función fundamental de la adaptación
hay «fracaso comunicativo» de ningún tipo: si George no volvió, la transciende si~mpre su objetivo· inicial. Cada forma de adaptación
presuposición en ¿ Cuándo volvió George? no se satisface; no obs­ crea nuevas posibilidades. Sería posible aflrmar, por ejemplo, que la
tante, la negociabilidad del significado es tal que esta pregunta puede división del trabajo, como seconoceentre.humanos"no hubiera sido
todavía ser enunciada exitosamente con objetivos interaccionales muy posible sin el lenguaje; sin embargo, la división del trabajo no era el o
específicos (p. ej. para llamar la atención sobre la ausencia de Geor­ «objetivo» del desarrollo del lenguaje en los humanos. Se podrían dar
ge). La aplicab.ilidad más general de la noción de adaptabilidad en el ejemplos similares con referencia a la mayoría de los fenómenos
campo de la pragmática fue demostrada por Bertuccelli Papi (1993), y biológicos de adaptación, que es por 10 que Darwin usaba. normal­
también por Givón (1989). Ni que decir tiene que esta visión general mente el término coadaptación y se concentraba repetidamente en la
o
es solamente ilustrativa y de ninguna manera puede ser representativa multidireccionalidad de los procesos de adaptación en el mundo natu­ O
. de los conceptos y visiones adaptacionistas en las ciencias relaciona­ ral:
das con el lenguaje.
[... ] cómo las innumerables especies que habitan en este mundo
La pregunta sobre la relación precisa entre la noción pragmática
se han modificado para adquirir esa perfección en la estructura y esa ..'·
O

de adaptabilidad y el concepto 'de «adaptaciÓn» en biología es inevi­
coadaptación que provoca justificadamente nuestra admiracióIl; Los
table, con su necesaria connotación de «selección natural». Una falsa naturalistas se refieren constantemente a condiciones externas, cómo.
impresión, que debe eliminarse inmediatamente, es que usar la deno­ clima, comida, etc., como Ja posible única fuente de variación. En un . O
minación de adaptabilidad, como resulta~o de su término paralelo en sentido limitado, como se verá posterionnente, esto puede s~r ciérto; 1>
biología, haría que el lenguaje ascendiera al estatus de una especie
natural que consiste en un conjunto de organismos vivos indepen­
dientes. La idea real es, por supuesto, considerar el lenguaje, cuyo de­
pero es absurdo atribuir a meras condiciones externas Ía eStructura,'
por ejemplo, del pájaro'carpintero, con sus patas, cola,pico y lengua,'
adaptadas tan adinirablemente para cazar i~sectos bajo el tronco de
••
••
sarrollo'fue posible por ciertas propiedades de los organismos vivos los árboles. En el caso del muérdago, que extrae su alimento de cier­
(H~mo sapiens),como una gama de fenómenos adaptables en la inter­ tos árboles que tienen semillas que deben ser transportadas por pájá­
aCCIón entre estos organismos y su «entorno» o «condiciones de vida». ros específicos y que tienen flores de sexos diferentes que requieren

•••
.-.
o 412 E/panorama de /apragmática Retorno a /a interdisciplinariedad 413
O ---q-U-e~c-ie-rt-o-s-i-ns-e-ct-o-s-n-ev-e-n-p-o-Ie-n-d-e-u-n::"'a-fl-o-r-a-o-tra-,-e-s....:¡gu:......-al...::m:...e-n-te-n-·­
<<mente en sociedad» (Capítulo 6), con sus propiedades específicas de
dlculo explicar la estructura de este parásito, con sus relaCiones con reflexividad e intencionalidad y con la capacidad de designar cursos
diversos seres orgánicos diferentes, por los efectos de condiciones de acción. Naime (1997) usa The adaptive mind [La menteadaptati­
externas, o de hábito, o de la voluntad de la planta misma (1958
a , [1859],28). va] como título para su manual de psicología por buenas razones. No
obstante, debemos resistir la tentación dé exagerar el papel de esas
Darwin más adelante pregunta: propiedades y esa capacidad, un error que cometieron esas aproxima­
ciones al uso del lenguaje que dan un lugar central a la'inteneionali­
¿Cómo se han perfeccionado todas estas adaptaciones exquisitas dad. Gran parte de las elecciones específicamente lingüísticas, como
de una parte de la organización a otra parte y a las condiciones de vi­ se dijo anterionnente, son automáticas y subliminales. Incluso cuando
da, y de un ser orgánico a otro ser? (1958 [1859],73). entran en juego los planes, los recu,rsos son limitados (aunque, en'
principio, sean ilimitados) y fuerzan elecciones que no se correspon­
Y€ ' Esta pregunta se anticipa a interpretaciones restrictivas de la direccio­ den con las intenciones y que pueden dar por resultado consecuencias
O nalidaq de la adaptación. Añádanse a esto las advertencias de Lewon­ .no deseadas. Esto no es de ninguna manera una visión pesimista ni de

•• tin para evitar unir a la metáfora de la adaptación por prueba-errorla


implicación «de que el mundo se divide entre posiciones ecológicas
preexistentes y la:evol:ución consiste en el ajuste progresivo de los or­
la humanidad ni del lenguaje. Pero si se pretende entender el uso del "
lenguaje, hay que dejar de lado las ilusiones de una voluntad omni­

O• ganismos en esas posiciones» (1982, 159). O su afinnación de que


Hay uná constante interacción del organismo con el entorno, de
modo que aunque 'la selección natural pueda adaptar el organismo a
potente y libre (sin negar que los actores humanos individuales pue­
den realmente jugar un papel importante).

O
un conjunto particular de circunstancias medioambientales, la evolu~
O ción del mismo organismo cambia esas circunstancias (1978, 159).
9.4 RETORNO A LA INTERDISCIPLINARIEDAD
O
() Obsérvese la creencia de Waddington (1959) y Bateson (1980) de que En la sección 9.2 se presentaron las aproximaciones a la delimita­
'--.­
la causalidad en biologia 'es circular y no lineal. Está claro entonces ción de 18; pragmática con respecto a sus diferencias a 16 largo del pa­
que, cuando se aplica al lenguaje, la noción de adaptabilidad quedaria rámetro de la interdisciplinariedad. No se ha hecho en este libro nin­
vacía si se interpretara unidireccionalmente. gún intento de esconder una inclinación hacia el lado más favorable
O Hay importantes lecciones que aprender del paralelo biológico de la interdisciplinariedad más radical (recuerde el lector la presenta­
~ tanto en términos de comparación como de diferencia. Por un lado, ción en la sección 0.3, así como la discusión de la noción de adapta­
O cuand~ se observa el lenguaj~. en general' como un producto de la bilidad en la sección anterior). Además, en este capítulo, se mostró
'. . evol~clón humana, su adaptabIlIdad funciona tal y como se describió implícitamente que la legitimidad de esta preferencia' se deriva de la
antenonnente. Por atroJado, observando el uso cotidiano del lenguaje naturaleza de las tradiciones formativas, ya que práctícamente todas
" entre ,los seres humanos, es necesario tener en cuenta que parte de la tienen un punto de vista interdisciplinario. Sin embargo, aunque se
• evolución biológica humana ha sido el desarrollo especifico de la prefieran los enfoques con un amplio alcance (si no por otras razones,
. , mente humana específicamente, 10 que se denominó en este libro al menos porque los enfoques menos amplios no han tenido éxito en

••
------~--~~------~--:------~ ..... ~~ ...._~- .. _~-~.

414 El panorama de la pragmática Retomo a la interdisciplinariedad 415

marcar el territorio siguiendo principios, y no de manera ad hoc, es si6n de centrosmultidisciplinarios y programas en las universidades,
decir, no han logrado el tipo de unidad temática y metodológica que los departamentos se dividen todavía de acuerdo a estas líneas· tradi­
motivó la reduccion del alcance), a menudo no constituyen en abso­ cionales... es verdad todavía que el modo más seguro de labrarse una
carrera académica es publiéar en la línea tradicional de intereses de
hito una «pragmática mejoD>. Normalmente esto se debe a una falta
las disciplinas.
de claridad y coherencia, derivada de la falta de fundamentos teóricos
El problema es que las fronteras disciplinarias tradicionales se
y la incertidumbre sobre las exigencias metodológicas que hay que están confundiendo y torciendo hasta hacerse casi irreconocibles, pa- .
tener respecto de las pruebas empíricas. Por tanto,· es fácil entender
por qué se puede aflrmar, como hace Davis (1991, 3), que «El pro­
ra acomodar torrentes de nuevo conocimiento, para responder ·la a
exigencia de investigación socialmente relevante de las instituciones
blema con esta amplia visión de la pragmática [tal y como la define que proveen los fondos y para reflejar el hecho de que los problemas
Morris] es que es demasiado inclusiva para poder ser útil». de mayor importancia tienen que ser atacados desde enfoques múlti­
El razonamiento de Davis puede ser válido a menos que se com­ ples (Holden, 1993, 1796).
bine un retomo a Morris (como se defendió en 0.2) -10 que exigiría,
sin duda, que la pragmática incorporara aspectos cognitivos, sociales Para no dejarlas humanidades y las ciencias sociales en un caos ab­
y culturales, apartándose radicalmente de la visión de la pragmática soluto después de abandonar las fronteras disciplinarias, hay que re­
como un componente. separable de la teoría lingüística- , con la de- . plantearlas en términos de dimensiones de la: realidad humana..que se
cisión de dejar de pensar en términos de disciplinas (o sub disciplinas) deben estudiar desde diferentes perspectivas.·
separables. Esta modificación todavía no se encontraba en el trabajo La visión de la pragmática como perspectiva, que tomamos como
de Morris. Aunque él habla de dimensiones de la semiosis, su visiÓn punto de partida en este libro, tiene una larga historia si no explícita
es básicamente de componentes: «La sintaxis, la semántica y la prag­ al menos implicita. En su introducción editorial al primer número de
mática son componentes de la ciencia de la semiótica, pero compo­ Joumal ofPragmatics, Haberland y Mey dicen:
nentes mutuamente irreductibles» (1938, 54). Estos componentes se Se puede decir que la pragmática lingüística caracteriza una nue­
ordenan jerárquicamente: /. . va manera de mirar los temas lingüísticos, más que marcar una clara
En una presentación sistemática de la semi6tica, la pragmática . frontera con otras disciplinas (1977, 5). o
presupone tanto la sintaxis como la semántica, tal y como esta última
presupone la anterior, ya que discutir adecuadamente la relación entre Incluso antes, en un tiempo en que el respeto por la pragmática entre
los signos y sus intérpretes requiere conocimiento de la relaci6n entre los lingüistas teóricos sólo había empezado a extenderse, Weiser(1974)
e
••
los signos mismos. y la relación con esas cosas a las que se refieren terminó su obra seminal sobre los problemas de la «teoría performati­
sus intérp:i:etes (Morris 1938,33). va» (que trataba cada enunciado como un acto único, c1asi~"cáble)
como sigue:
Obsérvese que el desafio· al pensamiento (sub)disciplinario .se está
extendiendo a las ciencias sociales en general: . La sintaxis, la semántica y la pragmática son una famosa triada.
Quizás es natural suponer que existe la misma relación entre la se­ •e
Todas estas nuevas preguntas surgen en el contexto de una es­
tructura disciplinaria que ya no se adecua bien a ellas. Las disciplinas
de las ciencias sociales se definieron un siglo atrás y pese a la explo­
mántica y la pragmática que entre la sintaxis y la semántica, pero este.
supuesto no está garantizado. Nuestra visi6n actual de la sintaxis y la
semántica es que están relacionadas como partes de un continuum, •
.QJ
••

416' El panorama de la pragmática Retorno a la interdisciplinariedad 417
separadas por una borrosa frontera o por una frontera inexistente. No mento de hacer una reevaluación completa de ,las ciencias humanas
existe justificación para situar a la pragmática en este continuum, o para entenderlas como una red de perspectivas convergentes y diver­
para suponer que se puede adoptar una estructura teórica formal desa­
gentes en dimensiones diferentes de la realidad humana más que co­
, rroIlada para ocuparse del lenguaje abstraído de la actuación para el
mo una colecci6n de disciplinas.
estudio de la interacción comunicativa de la gente en situaciones del
Desde una perspectiva histórica más amplia, una reevaluaci6n
mundo real. Se ha demostrado recientemente más de una vez... que
las consideraciones pragmáticas tienen efectos en las transformacio­ como ésa no es nueva. Ya en 1929 Sapir dijo que
nes sintácticas, pero esto no significa que se deban escribir en los ár­ Es difícil para un lingüista moderno limitarse a sus temas tradi­
boles sintácticos. Es muy importante que nos demos cuenta de esto. cionales. A menos que no tenga imaginación, no puede sino compar­
Como lingüistas teóricos que se embarcan en el estudio de la prag­ tir alguno o todos los intereses mutuos que unen la lingüística eón la
o mática, no estamos ampliando ligeramente nuestra área de investiga­
ción, sino que estamos adoptando un punto de vista completamente
antropología y la historia de la cultura, con la sociología, con la psi­
cología, con la filosofia, y, de modo más remoto,con la física y la fi- ,
á diferente respecto al lenguaje: Debemos tener cuidado y evitar limi­

•.,
siología (1929, 208).
tarnos a nosotros mismos con constructos teóricos que no son apro­
piados paracla nueva misión, o vamos a perder la oportunidad de ga­ Como defensor de la interdisciplinariedad par e:xcelJence, veía la aÍl­
nar aportacioneS'cfrescas y reveladoras sobre el lenguaje y sobre los

•e', seres humanos~que la pragmática ofrece de un modo tan tentador


(pág. 729, cursivas añadidas).
tropología, la sociología y la psicología, entrelazadas en sus propias
obras (véanse las colecciones como Sapir, 1966), como perspectivas
antes que como objetos de investigáción (véase Winkin, 1981, 64-5).
o Desgraciadamente para la pragmática, su advertencia no siempre se En esto, como en muchos otros aspectos, la pragmática actual está de
O ha tenido en cuenta. alguna manera re inventando la obra de Sapir. Desde el punto de vista
Un enfoque como éste no es una prerrogativa de la pragmática. Re­ de la pragmática, sólo podemos lamentar que uD. predominio relativo
cientemente, Berger hizo una observación similar sobre la sociolocrfa: del paradigma chomskiano parezca haber interrumpido la comente de
O t;:>'

La sociología no es tanto un campo como una perspectiva; si esta las ideas de Sapir en lingüística (de la misma manera en. que se puede
o perspectiva fracasa no queda nada. Se puede estudiar la economía, o decir que la sociología de Parsons ha interrumpido un desarrollo que,
O el sistema político o los hábitos del emparejamiento de los samoanos como muestra Hillbert, 1992, tenia que reínventarse, por ejemplo, por
desde perspectivas que son bastante diferentes, una de las cuales es la la etnometodología). Como mostró Thibault (1997), vale la pena in­
G sociología. La perspectiva soCiológica ha entrado en el instrumenta­ cluso volver a Saussure para encontrar ideas pragmáticamente rele­
O rium cognitivo de la mayoría de las ciencias humanas con enorme vantes que se han oscurecido por avances posteriores en la lingüística.
e éxito. Pocos historiadores no han incorporado en alguna parte una
perspectiva sociológica en su trabajo. A diferencia de otros especia­
Optar por una aproximación a lá pragmática que requiere que se
~ defma como una perspectiva particular en ellenguaje¡ como se des­
listas en ciencias humanas, los sociólogos no pueden afirmar que tie­
@ nen un territorio empírico especIfico en sí mismo. Lo que tienen que
cribió sistemáticamente en este libro, da como resultado necesaria­
mente un pluralismo metodológico que tiene en cuenta diversos tipos
e ,ofrecer es principalmente su perspectiva (1992, 18).

.,•
de datos. No obstante, hay que recordar unas directrices generales.
Pero los «especialistas en ciencias 'humanas» pueden no tener tampo­ Dado que la pragmática (bajo sus diferentes disfraces) estudia bási­
co su propio {<territorio empírico». Probablemente há llegado el mo­ camente el lenguaje como una forma de y en relación al comporta­

.,•
PAAOMÁTICA.-14
418 El panorama de la pragmática
r

miento, se deben imponer fuertes exigencias empíricas. Además, el


comportamiento es de interés sólo en la medida en que se relaciona
con el significado que tiene par,a la gente que participa en él. Conse­
cuentemente, la orientación empírica tiene que combinarse con una
clara posición interpretativa. Como interviene el procesamiento cog­
nitivo, es al menos deseable que haya pruebas de la realidad psicoló­
gica de los fenómenos descritos. Es, sin duda, un mandato dificil, pe­
BffiLIOGRAFÍA
ro esperamos, con este libro, haber acercado la lingüística un poco
más a tal aspiración.

Abraham,W., ed., 1991, Discourse partieres: descriptive and theoretical in­


.9.5 LECTURAS RECOMENDADAS vestigations on the log/cal, syntactic and pragmatic properties 01 dis­
course particles in Gennan, AmsterdamIFiladelfia, John Benjamins. <::)
La mayoría de las, referencias de este capítulo son recomendacio­ Andersen-Wood, L., y Smith, B. R., 1997, Working with pragmatics: a . .<.'::'4.
t~.J
nes de lectura. No obstante, aquí se ofrecen algunas referencias más practical guide to promoting communicative confidence, Oxon, Winslow.
sobre temas específicos que surgieron en la discusión. Para obras bá­ Anscombre, J.-C., 1979, «Délocutivité benvenistienne, délocutivité'générali­ ()
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••
•..
o

o ÍNDICE GENERAL

()
o . Págs.
O 7

.'
PRÓLOGO •••.•••••••••••••••••••• o ••••••••••••••••••••••• o

• AGRADECIMIENTOS •.••••••• o..... o........................ 26


27
•e
PREFACIO •.•••••••••••••••••••••.•.•••..•.••••••• ! • • • • • • • •

INTRODUCCIÓN •••••.••• : •••••••.• o ••••••••••••••••••••• o • 33


0.1. Lingüística 'de los recursos del lenguaje: los compo­
o nentes de una teoría lingüística .................. 33
()
0.2. La lingüística del uso del lenguaje: la perspectiva
pragmática ..... . ,..... o o • • • • '. ' , ' o • • '" ','" .',...... 35
o . 0.3. La pragmática y la interdisciplinariedad .. ~ O," •• ••• •• 41
o 004. Funcionamiento significativo del lenguaje ....... : .... 43
o 0.5. ¿Una tarea infinita? .............. ~................ 46
G 0.6. Resumen y lecturas recomendadas . .......... : . . . . . . . 47
o
0.7. Presentación preliminar . ...................... '. . . . . . 48

"•o
PARTE!

LA PERSPECTIV A PRAGMÁTICA


INTRODUCCIÓN' ••••.••••••.•••.•..•.••..•••••••••.•.•..••• 55

•'"

1;
443 ,. '
442 Para entender la pragmática lndice general
Págs.
Págs.
3.1 La visión global . .................................... '

137
1.- EL LENGUAJE Y EL USO DEL LENGUAJE ••....•.••.•....•..
56
1.1 Temas comunes en pragmática ..................... .
57 3.2 Ingredientes del contexto comunicativo . .............. , 139 '

1.1.1' Deixis .... : ............. '. ................. .


57 3.2.1
Usuarios del lenguaje: enunciador e intérprete. 140
1.1.2 Actos de habla ............................ .
63 Las diferentes voces del investigador .... ~ . . . ' 141:
1.1.3 Significado implícito ...................... .
68 Los diferentes roles del intérprete.. . . . . . . . . .
146, . ~)
, La imposibilidad de explicitud completa.... .
69 Cuando el enunciador se convierte en intér­ ,.--\

Maneras convencionales de comunicar signi­ prete ...... '" .............', ........ : ..


152 .

ficado implicito ........................ .


71 La influencia de los números .............. .
153

Evitar estratégicamente la explicitud ....... .


76 '3.2.2
El mundo mental .......................... .
154

1.1.4 -Conversación ......'....................... .


84 3.2.3
El mundo social ........................... ;
158

1.2 Qué tienen en común los temas comunes . ............ .


91 3.2,4
El mundo fisico .. .. .. .. . .. . . .. .. .. . .. . .. ...
164
Referencla . tempora1...................... .
"165
1.3 El proBlema de la intencionalídad ........•..........
97
Referencia espacial. ...................... .
168"
1,4 Géneros del uso del lenguaje ....................... .
101 El enunciador y el intérprete en el mundo fi­ "
1.5 Resume;n y lecturas recomendadas . ................. .
103 sic o . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
172
. Temas
16 ' de 'znvestzgaclon
. . , ............................
.
.
105 Condiciones «materiales» del habla. . . . . . . . .174

3.3 Canal lingüístico y contexto lingüístico ............. ~


176
2.- NOCIONES CLAVE ••••..••••••• .' ••.••..•••..•.••• " .••••••
109
3.3 .1 El canallingüistico .................... ~," ~.
17 <5 ,/

2.1 Hacer elecciones . ..................... '. ........... .


110 3.3.2 El cóntexto lingüístico .. .. .. .. .. .. .. .. .... ..
178
2.2 Variabilidad, n egociabilidad y adaptabilidad . ....... .
114 La cohesión contextua1 .. .. .. .. .. .. . .. .. ...
178
2.3 Adaptabilidad y universalidad . ..................... .
121 Intertextualidad . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
181
Secuencialidad. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
183
o
2,4 Cuatro ángulos de investigación. . ........ ....... ....
125 O
3,4 La generación de contexto . . .. . . . . .. . . . . . . . . . .. . . . ..
184
2.5 Resumen y lecturas recomendadas . .. '. . . . . . . . . . . . . . ..
' 129
3,4.1 Lineas de visión .......................... ..
186
26
. Te mas d' . ., ..........................
e znvestlgacwn "
~ . .
131
3,4.2 La manipulación de contextos ...............
187
3.4.3 Contextualización .H......... .... .... ... .....
188 e
PARTE II
d d
3.5 Resumen y lecturas recomen a as ............ ·······
190 . e··
ASPECTOS DEL FUNCIONAMIENTO SIGNIFICATIVO DEL LENGUAJE
3.6 Tema de investigación . ............................... 193
~
4.- ESTRUCTURA ••••••••••••.••••••••••••• , •..•••••••••,... 194 ®
INTRODUCCIÓN •••..•.•....•......•....•••••.•.•••••.•.•.. 135
4.1 Lengua;, códigos y estilos .. ....................... ~. 195 e

3.- CONTEXTO '. . . . . . . . . . . . . . " ., ., 4 ... ~ ..... ., • t f • " & • I •• " f ............. .
136
4.2 Ingredientes de la construcción de enunciados. . . . . . . . 202

••

444 Para entender la pragmática lndice general 445

Págs. Págs.

...
~,
4.2.1 Estructura delsonido ....................... 202
6.1 Mente en sociedad ................................. ' 278

.} 4.2.2 Morfemas y palabras ....................... 204


6.2 Percepción y representación, planificación y memoria. 281

4;2.3 Cláusulas y oraciones .................... : .. 207


6.2.1 Percepción y representación ....... .' . . . . . . . .. 281

4.2,4 Proposiciones.............................. 211


6.2.2 Planificación............................... 288

4.2.5 Unidades supraoracionales ........... . . . . . .. 2,16


6.2.3 Memoria ......................... '. . . . . . . . .. 290

4.3 Enunciados y grupos de enunciados.................. 216

o 4,4 Principios de construcción de enunciados. . . . . . . . . . . . . 221

6.3 Grados de saliencia . .. . .. . . . .. .. .. . .. . .. . .. . . . . .....


6.4 Conciencia metapragmática ........................ 297

292

(}
4,4.1 Construcción de enunciados oracionales . . . . .. 224 6.4.1 Indicadores de conciencia metapragmática . ... 300

o . 4,4.2 Construcción de enunciados supraoracionales. 228


6,4.2 La metapragmática y la naturaleza de la acción

o
4,4.3 Construcción de grupos de enunciados........ 233
lingüística ............... : . .. .. .. .. . ... 310

é, 4.5 IntegraciÓn del proceso de hacer elecciones.. ........ 233


Conceptos, prácticas e ideologías lingüísticas. 310

4.6 Resumen y lecturas recomendadas. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 235


Autorrevisión. .. . . . .. .. . .. . . . . .. . .. .. .. . . .314

4.7 Tema de investigación .. ~........................... 236


6.5 Resumen y lecturas recomendadas; . . . . . . . . . . . . . . . . . . 314

o- 5.-DINÁwcA ...... ., ..... ".. .~ ......... f.,...... 240

l •••• '., ••
6.6 Temas de investigación. . .. .. .. .. . . . .. .. .. . . . .. .. . . . 315

» ••

5.1 ' «Situación» de la dinámica de la comunicación....... 241

() 5.1.1 La dimensión temporal ......... ~ . . . . . . . . . . .. 241

e, .
'-'1'
5J.2 Dinámica y contexto.... ....... ............. 244
PARTE 1lI

TEMAS Y TENDENCIAS
5.1.3 Dinámica y estructura ........................ 246

e}' 5.2 Actividades. acontecimientos y marcos del significado. 246

G 5.3 Estrategias de la generación de significado. . . . . . . . . .. 253


INTRODUCCI6N .....................'. . • • • • • . . . . • • • • • • . . • • • •• 319

G ,5.4 La dinámica de la generar;:ión de significado interacti­ 7.- CtrESTIONES MICROPRAGMÁTICAs •.••••.... ~.... ...•••••• 321

fl va ... ..... , .....


4 • , •••••• f •• , 255' 7.1 Los recursos del lenguaje necesitan una p,erspectiva
..................... .

o 5,4.1 La ópera de Budapest ...................... . 256

5,4.2 El café de Berkeley ........................ . 258

pragma't'lca '32
.............. ; ..................... .
1
®
7.1.1 La ordenación de partículas.......... .... ... 322

•o 5,4.3 De Bruselas a Fránckfort ................... . 265

5,4.4 De Bellagio a Linate ....................... . 268

5.5, Resumen y lecturas recomendadas . ................. . 274

7.1.2 El problema de la perfonnatividad. . . . . . . . . . .. 326

7.2 La pragmática de la interacción a pequeña escala ~ . . . . 339

••e

7.2.1 Un intercambio infonnal ............... '..... 340

5.6' Temas de investigación. .. ........................... 275


7.2.2 Un acontecimiento institucional ........ " . . .. 345

·6.- SALIENCIA ••••••.•.•••••••..••••....•••••••..•••...•••• 277

7.3 Resumen y lecturas recomendadas................... 351

••
446 Para entender la pragmática
Págs.

7.4 Tema, de investigación. . . .. . . . .. . .. . .. .. . .. . . .. . . ... 352

8.- CUESTIONES MACROPRAGMÁTICAS ••..•••.•.•••.•.••.••.• 355

8.1 Una perspectiva pragmática en los recursos de la len­


gua a un macronivel. .... ; . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . .. 356

8.2 Macroprocesos en el uso del lenguaje . . . . . . . . . . . . . . . . 357

8.2.1 Comunicación intercultural e internacional. . .. 357

Las piedras que están en el suelo (Rocksjust

layin around). . .................... ..... 358

, ¿Quién hizo explotar la mina en la conferen­


cia? ..•.... . ... .... .... . .... .. .. .... ... 364

8.2.2 Discurso e ideología. . .. . . .. .. .. . . . .. .. . . .. . 370

8.2.3 La pragmática de los grandes debates sociales .375

8.3 Resumen y lecturas recomendadas . ................. . 391

8.4 Temas de investigación ............................ . 392

9.- EL PANORAMA DE LA PRAGMÁTICA ..••••.••..••••.••..••• 393

9.1 Tradicionesformativas ........................... .. 394

9.2 Los problemas de delimitación . ................... .. 402

9.3 Precursores paralelos a la pragmática como teoría de

()
,
la adaptabilidad lingüística .................... . 406
"

' ..

9.4 Retorno a la interdisciplinariedad .................. . 413

,r' ,
9.5 Lecturas recomendadas . ........................... . 418
.~ l...j
-}

BIBLIOGRAFÍA ... .. ~ ......... 4 .. ~ ............................. ~ .. , ............. t ...... , ... 419


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