Ingeniería civil Semestre I Universidad de Cartagena El objetivo de entretenimiento que tiene una película sea cual sea su género no siempre es el efecto que esta tiene en los espectadores, y no siempre es una mala señal. Generalmente cuando una película entretiene y es bien recibida por el público llena las expectativas, y las mismas solo son superadas por filmes capaces de hacer que el público además de entretenerse, reflexione y cuestione situaciones que mueven fibras. La película titulada "Los tres idiotas" es de esas últimas gracias a una trama que se debate entre el drama, las risas y la tensión y a tres personajes que ilustran diversas lecciones de vida. Una escuela de ingeniería no es el espacio idóneo para hacer mentes mecánicas y Rancho, el protagonista lo tiene muy claro. Su astucia e innegable sabiduría lo hacen el personaje principal más que por el libreto mismo de la historia. Sus dos amigos, Raju y Farhan (con quienes completa el trío estrella) no tienen precisamente su misma concepción de la vida y son devastados por sus decisiones, algo que se observa a diario en el entorno. Los tres aspiran al título de ingeniero en una institución dirigida por Viru, un hombre retrograda, mediocre y mecanicista que presiona a los estudiantes a aprender como si solo tuvieran la capacidad de almacenar información en su cabeza. Este resumido panorama permite hacer alusión a la realidad actual, por lo menos en Colombia para hablar con seguridad. Para nadie es en secreto que el sistema educativo solo aparenta querer formar grandes personas y profesionales porque es evidente la poca importancia que se le da a el asunto. Nuevos grandes ingenieros, abogados, médicos, etc. representan nuevos gobernantes o sea el fin de la oligarquía infinita y esto es lo que quienes están en el poder quieren evitar. La dinámica es: el docente dicta la cátedra, hace un examen en ocasiones para aplicar habilidades adquiridas en el proceso y en otras irresoluble, por último, resuelve una calificación que promediada con las calificaciones de las demás asignaturas arroja el aclamado promedio, el mismo que convirtió a Chatur (compañero de los personajes) en un cerebro que no razonaba, sino que memorizaba. Anexo a esto hay más situaciones lamentables. Estudiantes que aprueban por salir del paso para ganar un sueldo producto de un oficio que terminarán odiando o quizá se detendrán en el camino frustrados por no disfrutar de lo que eligieron para aprender por estar distraídos obteniendo notas de gente supuestamente excepcional; o los que simplemente por cualquier motivo no tienen carácter para decidir por sí mismos lo que quieren ser y todo solo por complacer a personas que quizá sin intención alguna los conducen más rápido al fracaso y muchas veces optan por el suicidio como sucedió cuando un estudiante se quitó la vida solo porque el director le negó la posibilidad de mostrar un simple proyecto, y es muy simple comparado con el valor de una vida. Estas dos situaciones se aplican a Raju y Farhan respectivamente y se muestran como callejones sin salida. Pero Rancho quien además de cuestionar notablemente el sistema educativo y ser castigado muchas veces por ello logra impulsarlos a ver por otras alternativas que al final de la trama logra ponerlos en el lugar que siempre quisieron. Por otra parte, él que siempre fue muy asertivo logró muchas cosas producto de su entusiasmo por la vida y de su inteligencia, sin muchas palabras siempre logró demostrar grandes cosas, encontrar el amor, formar una verdadera amistad, aleccionar a un hombre prepotente que creía ser la cima de todo y cambiar el rumbo de la vida de personas que se creían idiotas. Bien decía San Agustín "Si precisas una mano, recuerda que yo tengo dos".