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UNIVERSIDAD ABIERTA PARA ADULTOS

(UAPA)

ASIGNATURA

Historia de América y el Caribe II

TEMA

UNIDAD I

FACILITADORA

Antonia Mercedes Guzmán

PARTICIPANTE

Pedro Micael Drullard García

MATRICULA

12-4178
Introducción

Algo más de tres siglos duró el dominio español en América Latina (a excepción de Cuba y
otros pequeños enclaves). No se puede negar que la independencia vino favorecida por la
situación que se vivía en la península, a raíz de la ocupación francesa. Pero, no es conveniente
olvidar que, dicha independencia se produjo cuando América Latina estuvo preparada para
ella. La presencia militar española nunca fue elevada en el continente y dependía del apoyo
militar de los propios latinoamericanos, por lo que ésta nunca fue un hándicap para la
independencia. Por otro lado, en otro momento de la historia, con la llegada de los Borbones
al trono español y el final de la dinastía de los Austrias, no se produjo la independencia aunque
España se vio envuelta en una guerra, tan sólo se produjo algún conato aislado de escasa
entidad. En el análisis de las causas no podemos olvidar este elemento, la capacidad y el deseo
de los habitantes de América Latina, o al menos de una élite, de regir sus propios destinos al
margen de la metrópoli.
Desarrollo

Bienvenidos a nuestra primera semana de trabajo la cual tiene como título América después
de la independencia. En esta ocasión realizaremos las siguientes actividades:

Investigación en fuentes bibliográficas y/o electrónicas sobre los principales resultados del
proceso independentista de América y la caracterización de la situación política, social y
económica de Hispanoamericana, a partir de 1825.

Realizar las siguientes actividades:

- Elaborar un mapa mental con los principales resultados de la guerra independentista


hispanoamericana.

Las nociones de libertad y nacionalismo surgieron, en América Latina, para fines del siglo XVIII.
Antes de la independencia, el pueblo latinoamericano adquirió conciencia de las diferencias
existentes entre las metrópolis y los territorios coloniales, y, con esta toma de conciencia,
comenzó a manifestarse el sentimiento patrio y de identidad nacional. El concepto libertad
adquirió gran significado con el nacionalismo, y la lucha por la libertad y la preservación de la
identidad nacional se convirtieron en los estandartes de los pueblos latinoamericanos. El
incipiente nacionalismo contribuyó, pues, a cuestionar el orden colonial prevaleciente. Estas
posiciones de las colonias engendraron serias divergencias con las metrópolis, lo que
contribuyó a allanar la ruta hacia la independencia.

En el proceso de lucha, las colonias vieron surgir un gran número de figuras heroicas que
dejaron su huella en el desarrollo de una nueva identidad nacional. Los criollos, respaldados
por mestizos, mulatos e indios, lograron sustituir los poderes metropolitanos, y asumieron el
mando. El reto mayor fue lograr la integración de los nuevos estados recién creados, pero para
esto era necesario algo más que un fuerte deseo de libertad.

Sin embargo, podemos señalar que la definición más generalizada destaca que América Latina
es un continente que posee una tradición, historia, lengua, cultura y religión comunes, y cuya
característica más significativa es el mestizaje. El término "América Latina" apareció por
primera vez en 1836, en Francia. Fue acuñado por el francés Michel Chevalier, con el fin de
establecer las diferencias, en aquellos momentos, entre América del Norte y América del Sur.
El uso del término se expandió rápidamente, y fue aceptado por los recién independizados
territorios latinoamericanos, pues representó el reconocimiento de una América distinta de
España, Europa y los Estados Unidos de América. Por diversas motivaciones e intereses, España
no aceptó la utilización del concepto, y prefirió continuar utilizando los términos
Hispanoamérica e Iberoamérica para referirse a lo que hoy denominamos América Latina. Sin
embargo, para los latinoamericanos, la utilización del concepto ha servido, hasta nuestros días,
como elemento aglutinador, es decir, como elemento que ha dado unidad e identidad a un
pueblo. Desde 1836 hasta el presente, sus alcances se han ido ampliando, y alude a una
realidad mucho más abarcadora que la diferenciación entre América del Norte y América del
Sur.
- Confeccionar una tabla informativa con la situación política, social y económica de
Hispanoamérica, a partir de 1825.

situación política situación social situación económica

El elemento más significativo La sociedad sufrió un La consecuencia más visible


del proceso independentista enorme cambio. Fruto de la de la independencia de las
fue el surgimiento de nuevas independencia fue la colonias americanas fue el
Naciones dotadas de igualdad de todos los final del
independencia política. Sin ciudadanos. Se abolieron las monopolio español y
embargo sus sistemas diferencias legales con base brasileño y con ello la
políticos pronto se racial. Todos eran declarados apertura de Latinoamérica al
distanciaron del liberalismo y ciudadanos. mercado mundial. La gran
derivaron hacia el Se pasaba así de una beneficiaria de este cambio
autoritaristamo. Por un lado sociedad de castas a una fue Gran Bretaña, que pudo
fruto del contexto de sociedad de clases en la que acceder libremente al
guerra que hacía necesaria la el nuevo elemento mercado
autoridad para concentrar los diferenciador fue la riqueza. latinoamericano
esfuerzos en la consecución Este cambio legal no conllevó proveyéndolo de productos
de la un cambio social real salvo la manufacturados. En muchos
victoria, pero también ocupación, por parte de los casos la calidad y precio
porque los nuevos estados criollos, de los puestos del de los productos ingleses
nacían bajo la égida militar. Estado. Las antiguas élites dieron al traste con la
Por otro lado las élites pronto sociales y incipiente industria local, a la
tuvieron miedo a que el económicas mantuvieron su vez que desanimó
proceso independentista posición social. Si bien, la inversiones productivas por
derivase en tierra se convirtió en el parte de los capitalistas
movimientos revolucionarios, elemento sustentador americanos. Pero hubo un
por lo que apostaron por de las élites, desplazando a la cambio importante,
sistemas políticos oligarquía estrictamente ya que la política arancelaria
autoritarios que urbana. era ahora diseñada por los
protegiesen sus intereses. La esclavitud fue una mismos americanos,
Este movimiento autoritario realidad que tendió a pudiendo utilizarla en
dará origen al caudillismo, desaparecer cuyo proceso, su beneficio. Fueron las
que reproducía el modelo de en algunos países, se ciudades las que impusieron
las inicia con los procesos de sus políticas económicas
grandes haciendas, y que se independencia mientras que, sustituyendo, en este
hizo necesario en el proceso en otros, tendrá que esperar sentido, a la antigua
independentista, sostenido hasta mediados metrópoli, favoreciendo el
por el de siglo para la aprobación desarrollo de los intereses de
estamento militar y las élites de leyes abolicionistas. estos núcleos urbanos
políticas. Los indios pasaron a en detrimento del mundo
convertirse en ciudadanos, rural.
pero sus propiedades
comunales se vieron
reducidas progresivamente
por el avance de las
haciendas, que fueron
expulsando y proletarizando
a
este sector social que pasó
de la protección estatal
española, al abandono de los
recientes estados en
manos de los ricos
terratenientes.

Conclusión:

En conclusión pude notar que La guerra de la independencia en España duró varios años. Los
contendientes, tanto guerrilleros o militares profesionales españoles como soldados ingleses o
franceses, practicaron la táctica de la tierra quemada. La ganadería no recuperó jamás la
importancia que había tenido en años anteriores y el comercio y la industria quedaron
paralizados. A la mala situación de la economía interna se unió, agravándola, el principio de
una depresión económica europea.

La guerra de independencia militarizó la sociedad española. La opinión pública organizada era


inexistente. No había partidos políticos ni libertad de asociación o de prensa. El ejército y el
clero eran las únicas fuerzas sociales organizadas. A diferencia de épocas anteriores y como
consecuencia del carácter frecuentemente espontáneo y popular de la resistencia contra las
fuerzas francesas, los mandos del ejército ya no eran exclusivamente nobles; muchos oficiales
eran de origen modesto y el ejército les dio la oportunidad de ascenso social. Los oficiales
formaron una especie de clase media instruida, a veces honesta, preocupada por modernizar
el país pero en tensión constante con la oligarquía nobiliaria y clerical que trataba de
mantenerla apartada de los asuntos de estado. Este carácter popular de la resistencia armada
hizo que se multiplicaran los ataques sorpresa en las zonas más salvajes y montañosas de
España. Así se consiguieron muchas victorias sobre las tropas francesas. Pero junto con
guerrilleros y héroes populares, como Espoz y Mina, Juan Martín Díaz ("el Empecinado"), el
cura Merino, famoso años después en las guerras carlistas, o José Palafox y Agustina de
Aragón, muertos años más tarde en rebeliones contra Fernando VII, se mezclaban grupos de
delincuentes, desertores y bandidos que se comportaban más como bandoleros que como
soldados. Todos estos grupos o individuos, militares más o menos organizados, subsistieron y
jugaron un importante papel en golpes de estado, aventuras políticas, guerras carlistas (ver
abajo) y pronunciamientos militares que con la violencia o el chantaje de la violencia fueron
reemplazando al poder civil a lo largo del siglo XIX.

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