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Débil

Ya no tiene sentido guardar secretos. Los secretos han perdido su fuerza, como yo. No
es que sea viejo. Sin embargo, en el trazo del recorrido vital, uno puede advertir que
las energías no serán más propicias a partir de un punto. Estoy en ese punto. Me
acerco a una edad en la que mi padre ya era una eminencia. Yo he malgastado la
vida, de lecho en lecho, con poca producción digna de mención. Ni siquiera tengo un
hijo del que sepa. Durante un tiempo se me conoció con el nombre de mi padre:
Pablo. Ahora, que sé unas cuantas cosas, puedo decirles que me llamo Kronamon.
Esto no es lo primero que escribo, tengo versos por ahí. Pero ahora quiero reconstruir
la historia primera, y el legado de mi padre me lo permite gracias a lo que pude extraer
de sus crípticas escrituras. Mi padre era un mago, de eso no hay dudas. Por eso
mismo ocultaba la verdad de formas harto complejas. También era un mentiroso. Pero
estoy seguro de algo: de que sólo mi madre pudo sacarle jugo suficiente como para
hacer un homúnculo. Hubo una mujer que lo obligó a fijarse, a no recorrer más las
adversas mareas del pasado y el futuro; y entonces él tuvo un hijo con su verdadero
amor: el Tiempo. Cómo lo logró no lo sé, pero eso fijó lo que le quedaba de existencia.
Tuvo una vida vulgar para un sabio de Alejandría; murió luego de dejarme dedicado un
tratado elemental de astrología. Son todas cifras que me remiten a la clave para leer
sus cuadernos.

+Pero las vicisitudes de mi salud y trabajo no sólo no me permitieron publicar un
comentario extenso, sino que han acabado por obligarme a presentar en estado
grosero lo que he podido extraer de las notas de mi padre. Tal vez pertenezcan a otro
las posibilidades del tiempo y las fuerzas para poner a punto de publicación el resto de
las partes planeadas que por el momento se encuentran en penosos y diversos grados
de redacción.
¿Qué es lo que fue? ¿Cómo empezó todo? Me refiero a por qué el mundo fue
destruido: se acabó Armenia y los arsácidas. Es a eso que mi padre llama Andgara. Él
escribía una historia anterior a la suya, muy anterior. Recopilaba los mitos de épocas
donde la magia era totalmente real. Allí hay destrozos sin par, hay violencias ejercidas
contra los dioses: ¿Qué significa que Tiamat llegó y acabó con todos los dioses de
Andgara? ¿Qué quiere decir que los atrapó? Acaso era una deidad ugarítica conocida
como Lotan, en ese caso provendría de Siria, y su asiento en la Edad de Bronce, en el
segundo milenio, no sería extraño.

A continuación, las notas que permitirán entender los personajes de la historia. Hay
personajes de los primeros siglos de la Era Cristiana que nos competen. Pienso en
San Agustín, Marcos el Mago, Paulo de Alejandría, su hijo Kronammon, Arriano, etc.
Hay un tal Fírmico Materno del que aún no he averiguado.
Los personajes están numerados según fueron apareciendo en los escritos de mi
padre. Las localidades (genius loci) van con letras [hojas 8- del C45].
“Hijo: ¿En qué lengua estarás descifrando esto?”
“Veo un coleccionista (H), tal como lo describe Benjamin en su proyecto de los
pasajes; en un Paris que tiene su confluencia con Sigil.”
“El Mundo está en Niebla, y no falta mucho para la noche. Es como si viniera el fin.”

1. Cyrilo, que fue patriarca de Alejandría como su tío, nació en el 376 en el
pequeño pueblo de Theodosios, en Egipto. Su tío era de la época de Paulo
Alexandrinus.
2. Teófilo de Alejandría fue patriarca de Alejandría del 385 al 412, año en que
muere; por lo que no era patriarca cuando Pablo publica su Eisagojika en el
378. Justo antes de eso había estado el pequeño reflorecer pagano que duró lo
que duró Juliano El Apóstata, del 361 al 363.
3. Hefesto de Tebas publica tres libros en el 415 bajo el nombre de
Apotolesmatika. Su objeto era unir lo Ptolemaico con las tradiciones anteriores.
4. El emperador Valente, que reinó del 364 al 375, prohíbe ciertos sacrificios y la
magia. Teodosio llega a la púrpura en el este recién en el 379. Son dos
emperadores de diferente carácter. El primero tenía dos mujeres que se
llevaban muy bien (5 y 6). El segundo fue conocido por su piedad.
5. Gallia Placidia nace en el 392.
6. Justina era una cristiana arriana. Eso no le impidió, en ciertas noches de vino
especiado en copas de plata, retozar junto con Gallia y Valente en jardines
repletos de espigas.
A. Ankara: “Ancylae” significa ancla. Es el primer lugar de la Caída.
7. Nilón de Ancyra o Ankara. Era un pelagiano. No solo los monjes eran ascéticos.
Es de la época de Nestorio, patriarca de Constantinopla que fue ignorado
rotundamente por Celestino de Roma y Cirilo de Alejandría.
8. Antonio Volusiano, prefecto del pretorio en Roma, todavía era pagano en el
428. Su familia era la de los Ceionii. Él nació en el 380.
9. Melania La Joven, era nieta de Antonio Volusiano pero ha sido recordada como
una cristiana radical. Estuvo dispuesta a infligir la prohibición de ir a caballo
para cruzar los Apeninos. desde ya no era ni un funcionario ni un noble varón.
B. La Biblioteca de Alejandría sobrevive por esos entonces, es la del Serapeum.
La anterior la quemó Julio Cesar en el 48. Accidentalmente el fuego hizo presa
de los papiros, los pergaminos y los libros. El museum también sufrió en el
siglo tercero, aunque no se sabe en qué momento se destruyeron las mayores
colecciones. Hay cuatro posibles ocasiones de destrucción: en el 48 a.C., como
dijimos con Julio Cesar; durante el imperio de Aureliano (270-275) que atacó en
la Guerra Alejandrina; en el 391, con el decreto del papa copto Teófilo para
acabar con cierto paganismo; y en el 642, o luego, producto de la conquista del
islam.
10. La Reina Zenobia de Palmyra, fue gobernante de Egipto del 269 al 274. Ella
era de Siria aunque decía descender de Dido, de Sempiramus, rey de Emesa,
y de Cleopatra. Era bella e inteligente, oscura su complexión. Hubo una
rivalidad entre el príncipe Arsaces de Persia y Aureliano, el emperador romano,
por conquistar su mano. Ahora: en cuanto conquistas, es innegable que ella
conquistó Ankara con ayuda de los sasánidas. También supo ganarse al pueblo
egipcio y difundir a su paso, tal como había prometido, la doctrina de su amigo
Mani. En esto la ayudó Casio Longino, un griego que era su principal sofista.
La posteridad y sus coetáneos la consideraron una reina guerrera. Con su gran
ejército tomó Ankara, Calcedonia, Siria, Palestina y el Líbano. Mientras hacía
esto, Aureliano estaba con sus tropas en campaña en la Galia. 

Tuvo un hijo, llamado Vaballatus (“don de la diosa”) que lamentablemente fue
hecho prisionero al final de las guerras con los romanos. Las leyendas cuentan
que ella estuvo en Roma encadenada. Sin embargo, difieren en cuanto al
material de esas cadenas. ¿Eran cadenas de hierro, con las que fue obligada a
desfilar junto con sus generales y consejeros vencidos? ¿O fueron cadenas
sutiles, relacionadas con el amor hacia Aureliano? Lo cierto es que se pierde
su rastro en la Roma de finales del siglo tercero. En el siglo quinto hay un
santo, Zenobio de Florencia, que distintos eruditos señalan como descendiente
de ella. En tal caso, tal vez fuera cierto que ella terminó sus días casada por un
esposo designado por Aureliano, un tal Marcelus Pretus Nutenus.
Otro personaje conocido como Zenobius, quien podría ser su tataranieto, nació
el 25 de Mayo de 337. Es el primer obispo de Florencia, y fue educado por sus
padres paganos. Hizo varias misiones, luego de convertir a sus padres, por
encargo del Papa Damasius I (366-386). Entre otras cosas, le pidió fuera como
Legado a Constantinopla. Fue un gran defensor de la fe ortodoxa contra el
arrianismo. Tuvo una larga vida, tal vez murió alrededor de los 90 años, en el
424, pero los estudiosos no coinciden en situar sus últimos encargos que se
dieron bajo el papado de Inocencio I, en el 417. Las hagiografías relatan que
resucitó a un chico. Tal como hacía florecer árboles (olmos), parece hizo
renacer a distintas personas muertas. Hubo una arrollada con un carro que se
levantó tras una mera plegaria. Se negó a casarse. La torre del Ponte Vecchio
se adornaba porque él vivió allí un tiempo largo.
11. Aureliano, “Restitutor Orbis”, frecuentemente personificado como el sol,
aparece en unas cuantas monedas junto con la inscripción: “deus et dominus
natus”. También llevó el título de Sol Invictus; era un dios sobre el resto, capaz,
sin embargo, de ser tolerante. Tenía una emperatriz, su mujer, llamada
Severina (“mater castrorum et senatus et pater epoca”). Debemos recordar que
también tuvo su costado cruel: no perdonó a varias ciudades de Anatolia
(aunque sí a Tyanna) porque recibieron con los brazos abiertos a Zenobia.
Ahora bien, si lo comparamos con el emperador Decio, el gran perseguidor de
los cristianos, sus obras no fueron ni tan crueles ni tan magníficas; en dos
años, su antecesor reparó el coliseo de los golpes de rayo, construyó unas
termas que con su nombre sobrevivieron hasta el siglo XVI, y, para enero del
250, cuando estaba festejándose el milenio romano, promulgó el Edicto del
Sacrificio. Éste proclamaba la superioridad del panteón romano por sobre todas
las religiones, por el bien del Imperio. Los que no obtenían el libellum, no
podían sacrificar. En relación con esto, el Papa Fabiano fue muerto, hubo
pogroms en Cártago y Alejandría. Luego de esto, del 251 al 266, la plaga
antonina hizo que unos y otros de distinto culto murieran como moscas,
sobretodo en Roma. Decio, sin embargo, murió en batalla contra los bárbaros.
12. Vahran I, zoroástrico, tuvo que ver con la ejecución de Mani. Muere en el 276.
13. Mani nació en Ctesifonte (parte de Irak hoy) en el Imperio Parto, aunque murió
en el Sasánida. Vivió sus primeros años en el distrito babilónico de Naler
Kutha, también conocido como Mardinu.
En 1969, se encontró en Egipto el Codex Manichaicus Coloniensis del año 400.
Allí hay información sobre la religión gnóstica que fundó. Se sabe que su padre
era de los eclesiates gnósticos, de la subsecta de los ebionitas. Mani tuvo una
visión de un gemelo divino suyo a temprana edad. Más tarde le dedicó un
trabajo a Shapur I, pero éste siguió su camino persa. El maniqueísmo está
diseñado para suceder y sobrepasar las enseñanzas del cristianismo,
zoroastrismo y budismo. En el Libro de los Gigantes, Mani dice ser el Paráclito
prometido en el Nuevo Testamento. Algunos sostienen que Mani tuvo muchas
reencarnaciones. Él decía ser la reencarnación de Buda, Krishna, Zoroastro, y
también, de Ganesha/Jesús. La tradición cristiana de Mani se basa
principalmente en Sócrates de Constantinopla. No debemos olvidar que San
Agustín fue, al principio, maniqueo. Lo cierto es que las reencarnaciones del
culto maniqueo son increíbles. Por ejemplo, estuvo la Religión de la Luz,
también conocida como la Iglesia de la Justicia. Pastor de ella fue Prisciliano,
obispo de Ávila. Ya en el año 370 conducía sus discípulos a la perfección. En el
385, sin embargo, fue entregado a la justicia civil. Decía ser discípulo de un tal
Marco el Egipcio. Evelius de Uzalis, en el siglo cuarto o quinto habla de unas
partículas de luz encerradas que claman por ser liberadas del interior de los
cuerpos. También dice que Satán fue crucificado. Todavía en el siglo séptimo,
unos autodenominados paulicianos, decían seguir las doctrinas de San Pablo
(o de Pablo de Samosata). Tal vez, pudieron sobrevivir a una pena más dura
porque estaban organizados militarmente. Sí fueron deportados en masa a
Bulgaria.
Aunque suene raro, son los Magos los que condenaron a Mani. Los Magos
eran los sacerdotes zoroástricos de Persia.
El nombre Mani significa “joya”. Ya habíamos dicho que recibió una revelación
de un espíritu al que llamaba Syzygos o “gemelo”. Aquí es posible ver, en el
mismo nombre, un alma, u otra alma, atrapada en una gema (el cuerpo de
Mani, lo cual es muy gnóstico). Por más perfecta que sea la vaina, es una
prisión y el alma está encerrada. Por otro lado se encuentra aquí el tema del
doble, o mejor dicho, de los dobles. Sabemos que el comienzo de su
humillación es la que sufre por exponer esa doctrina al nuevo rey persa, en
contra de los zoroástricos.
Él dijo ser “sello de los profetas”, eso quiere decir el último de una serie que
incluye a Buda, Krishna, Zoroastro y a Jesus. Dejó una jerarquía que coincide
con lo de las sectas judeo-cristianas de entonces, en donde se diferenciaban
los electi de los auditori. Solo los primeros siguen las leyes más estructuradas
que obligan a un vegeterianismo, ayuno y castidad estrictos. Según Sócrates
de Constantinopla, el Viajero de Persia escribió cuatro libros: Misterios, El
Evangelio, El Tesoro y Cabezas. La historia de estas redacciones comienzas
con un tal Escitianos, un sarraceno esposo de una mujer egipcia.
Supuestamente introdujo la doctrina de Empédocles y Pitágoras en la
cristiandad. A su vez, tenía un discípulo llamado Buddas, también conocido
como Terobinthos. Este escribió inspirado por un Daimón los libros
mencionados. Este mismo Daimón que le permitió alegar que había nacido de
una virgen, fue el que lo arrojó de un precipicio (Parecido al final de Marcos,
digo Arcoms), tras unos ritos místicos que fueron finales para su cuerpo. La
dueña de la posada donde él vivía solitario, le enterró y guardó sus libros. Un
chico de siete años que fue criado en esa misma casa tuvo acceso a dichos
libros. Este niño llamado Cubricus entonces, tomaría luego el nombre de Mani.
Tuvo tres discípulos. El primero fue enviado a Egipto, se llamaba Thomas. El
segundo, fue enviado a Escitia y se llamaba Addas. El tercero se quedo junto a
él y sufrió su suerte, era su nombre Hermas. Aunque determinó que el reino de
las tinieblas se encontraba al sur, repleto de demonios que obedecían a los
cinco elementos. Los filósofos griegos notaron esto. Desde Alejandría, Sexto
Empírico, el mismo que tanta atención le dio a Gorgias y a otros amigos de la
Nada, tenía mucho para decir acerca de los que recibirían más tarde el mote
de neoplatónicos. San Agustín recogió sus comentarios y aprovechó para
quejarse ampliamente de los maniqueos y sus cinco sustancias. Decía así: “…
los cinco elementos variadamente disfrazados, en consonancia con las cinco
cavernas de las tinieblas, [son] cosas que no tienen realidad alguna y matan al
que las cree. Los versos y la poesía puedo transformarlos en verdadero
alimento; y el vuelo de Medea, aún cuando lo recitaba, no lo afirmaba; aunque
lo oía recitar, no lo creía, pero aquellas cosas las creí. ¡Desventurado,
desventurado de mí! ¡Cómo escalón por escalón fui llevado a lo profundo del
infierno!” (Agustín, Confesiones, III.6.11).
Recalquemos que los cinco elementos eran según los maniqueos: el humo, las
tinieblas, el fuego, el agua y el viento (cf. Agustín de haer, 46 contra epist.
FUNDAMENTI, 28, 31).
Halló la muerte en la corte persa, fue despellejado vivo y rellenado de estopa
antes de ser colgado. LO DISECARON!!!
Cronología (año 1000 a.u.c = 248 d.C). 216 d.C. Nace Mani cerca de Seleucia
Ctesifonte, tal vez en el pueblo Mardinú, en el distrito Babilonio de Narcuta, o
sino en Absumya.
228 d.C. Primera experiencia visionaria del doble.
240. Segunda experiencia visionaria del doble.
240-241. Viaja a la India. Sakhas en el moderno Afganistán.
242. Se une a la corte de Shapur I. Prepara un libro dedicado a él: el
Shibuhragon.
242-243. Posiblemente se encuentra con Plotino, que está del otro lado del río,
con las tropas romanas.
243-270. Amistad con los grandes, difusión de su visión, relación con Zenobia.
270-272. Muere Shapur I.
273. Patronato de Hormazd II.
274. Enfrentamiento con Kartir, reformador Zoroástrico. No puede contra el
concierto de Magos, lo encarcelan y torturan. Esto coincide con una plaga
importante en la región.
276-277. Su ejecución.
14. Kartir fue el sumo sacerdote zoroástrico que decidió había un solo cielo y un
solo infierno. Sacó todas las imágenes de los altares. En realidad, dejó una
sola cosa en ellos: el fuego (Atar).
15. Zabdas fue el gran conquistador de Egipto, general de la reina Zenobia de
Palmyra. Tuvo un aliado egipcio que le ayudó a efectivizar su hazaña. Su
nombre era Timagenes. Tuvo un rival romano que intentó detenerlos, de
nombre Tenagino Probus. Era el prefecto romano, pero fue decapitado.
I. Hay fuentes y fechas de conocimiento esotérico que coinciden si son leídas
mediante la clave de los libros de Enoch. Primero me referiré al libro 1 de
Enoch, proveniente de Etiopía que estaba en posesión de la Iglesia
Abyssinia. El Negro de Pedro el Grande de allí provenía. Justo en el siglo
XVII se da a conocer a Europa, justo cuando el que sería llamado Ganibal
llegó a Constantinopla en 1703. En realidad, cuando digo “se da a conocer”
es que se tienen noticias solamente. Habrá que esperar hasta 1773, para
que el viajero inglés James Bruce deposite en los tesoros de Inglaterra el
primer manuscrito etíope de la obra, que sería recién publicado en Oxford
en 1838 (R. Laurence Libri Enoch profetae versio Ethiop., Oxford).
Despertó un interés importante; es de las principales fuentes para conocer
el mundo teológico judío anterior al surgimiento del cristianismo.
¿Qué sería Enoch? Una forma judía en el recuerdo, una trasposición
mitológica de un antiguo rey babilonio.
Se ha sugerido también que hay alteraciones en los ciclos del sol y las
estrellas, que los antiguos explicaban teológicamente en este apócrifo. Por
ejemplo, los días intercalares que no hacían falta cuando el mundo no
estaba inclinado y el giro de la tierra alrededor del sol era de 360 días
(osea, sin inclinación polar).
La situación de partida del relato del libro mencionado puede conjugarse
con la historia de la siguiente manera: tras la toma de los asirios, Dios
entrega a setenta pastores (ángeles) el dirigir de los israelitas; pero como
mueren más de lo debidos, son juzgados. También a estos se suman
doscientos ángeles malos que engendraron gigantes en el pasado remoto.
Son los mismos que enseñaron magia inicua a los hombres, luego pedirían
a Enoch que interceda ante Dios para alivianar su castigo.
Volvamos a la versión etiópica de la que disponemos. Se sabe que la
composición original es semítica, hecha en hebreo y/o arameo. También se
sabe que la actual versión etiópica es una traducción del griego; las
estructuras y ciertas trasliteraciones extrañas así lo delatan. Esta versión
fue escrita entre el 350 y el 600 d.C. No sería extraño que un Pablo de
Alejandría haya podido acceder a él.
Diremos ahora de qué elementos clave se compone la obra.
I.a. Primero hay un Dios que es señor de los espíritus. Él se regocija con la
caída de los ángeles porque es un gran castigador. Tal rasgo de su
personalidad determina la siguientes angeleología: (angenealogía)
I.b. Por un lado están los vigilantes, que son ángeles caídos. Por el otro
están los demonios, la personificación de las tentaciones. Mientras que los
primeros son encerrados en las entrañas de la Tierra, poco tiempo después
de su caída y separación de sus hijos, los segundos andarán sueltos
probando a los hombres y a los gigantes (los hijos de los primeros).
Algunos han especulado que estos demonios se nutren de las almas de los
gigantes muertos. Ahora bien, ¿Cuáles fueron los pecados de los ángeles
que ameritaron su caída? Podemos distinguir cuatro, todos tienen que ver
con dádivas no deseadas por Dios. Salvo la primera de estas dádivas, las
tres siguientes son secretos perniciosos. La primera, en cambio, es sexo
con las mujeres de los hombres.
Si tal fue la unión con las mujeres, a los hombres se les dio escritura,
armas y encantamientos. Una cita textual del apócrifo condena así la
entrega del secreto pernicioso que es la escritura: “los hombres no han sido
creados para semejante cosa: con pluma y tinta fortificar su fe” (Enoch 69,
10-11 Libro 1). También, se sabe Gadreel enseño instrumentos mortíferos a
los hijos de los hombres: “escudo, cota, espada de combate y todo
instrumento mortal de los humanos” (Ibidem).
No es extraño entonces, que ahora podamos expandir un tercer elemento
que se vincula directamente con el mal.
I.c. Del lado del mal también están los satanes, gobernados por Satán, su
jefe. Parece que los vigilantes se sometieron a su dominio y por eso
cayeron. A diferencia de los vigilantes, los satanes no reciben castigo
especial: “son como la contrapartida maligna de la bondad de Dios” dirá un
comentador autorizado muy posterior (Diez Macho, apócrifos IV, 27). Dado
que los vigilantes sí reciben castigo, es hora de que hablemos de ese lugar
a donde han sido arrojados: el Gehenna.
I.d. Ultratumba y resurrección. El Gehenna es “un lóbrego y caótico desierto
de fuego que tiene los mismos rasgos que el llameante lugar de castigo de
las estrellas desobedientes” (Diez Macho, apócrifo IV, 21).
Hay según afirmaciones autorizadas, resurrección de justos e injustos, de
israelitas y no israelitas. Ello, encuentra un fin en la venida del mesías
cuando todos serán juzgados.
I.e. El mesías. En el Libro de los Sueños (90, 37) un toro blanco, que luego
se convierte en un orix, es la representación del mesías. Él nace de la
misma comunidad, es un mero hombre (nada se dice de su preexistencia) y
aparece después del juicio. Tiene como misión gobernar la comunidad de
los justos, porque ante él temblarán todas las naciones. Tal vez por eso se
lo llama Justo, Juez e Hijo del Hombre. En Enoch 3 aparecerá como Virrey
del Cielo y del Altísimo: el Metatrón. Él sabía hacer temblar a los constantes
(del etíope Teguhan), a los vigilantes y a los que duermen (Liti). Expuestos
estos elementos, es hora de que volvamos a los detalles del orden de la
naturaleza anterior, de la caída y lo que sucede posteriormente.
II. El libro de los Vigilantes. Para explicar por qué hay verano e invierno, y
por qué existe conocimiento de diversa naturaleza, hay que relatar cómo se
pervirtió por primera vez el Orden. Los vigilantes deseaban tomar a las
bellas hijas de los hombres, entonces Semyaza, su jefe, les dijo:
-Temo que no queráis que tal acción llegue a ejecutarse, y sea yo solo
quien pague por tamaño pecado
Le respondieron todos:
-Juremos y comprometámonos bajo anatema entre nosotros a no cambiar
esta decisión y a ejecutarla ciertamente.
Entonces juraron todos de consuno y se comprometieron bajo anatema.
Eran doscientos los que bajaron a Ardis (en etípoe dice así, en griego habla
de un tiempo “los días de Yared”), que es la cima del monte Hermón, al que
llamaron así porque en él juraron y se comprometieron bajo anatema
(Enoch II 6,6).
16. Dionisio de Alejandría nació a finales del siglo segundo o principios del tercero.
Era pagano al principio. Temprano en su carrera se enfrentó a dioses sirios
como Bel. Pese a que fue presa de la justicia pagana, una muchedumbre lo
liberó y así pudo huir al desierto. Aún en ese entonces, se confundían el Dies
Solis como día de descanso y como día del Sol de la Justicia, un título que
luego ostentaría Cristo. Es que no es extraño que algunos hayan querido ver a
Cristo en la figura de Apolo-Helios.
17. Ambrosio Aurelianus fue un caballero romano que muchos relacionan con la
figura mítica del Rey Arturo. Gildas, un cronista posterior, lo sitúa en el siglo V y
dice que había vestido la púrpura. En su rol de emperador había rechazado a
los anglosajones. Beda, el venerable cronista, da una fecha tardía para la
victoria de Aureliano sobre los sajones: del 474 al 491, porque lo sitúa en el
imperio de Zenón. Gildas habla de los “avita”, que son los ancestros o los
abuelos; una o dos generaciones antes de la batalla del monte Badonius.
18. Minborguen es un germano que primero luchó en una legión adoradora del Sol
Invictus. Proviene de la localidad de Glastum, en la Galia. Glastum es un
nombre germano que recibe la isatis tictorea, una planta tinte, conocida
también como “aspa de Jersusalem”, que es nativa de la estepa del caúcaso,
en Asia central y occidental. Era muy importante como fuente para hacer tinte
azul. Tanto los pictos del norte, que lo usaban profusamente, como los egipcios
la conocían bien.
19. Mauritius muere en el 287 en Auganum Suiza, en realidad es martirizado. Se
trataba de un jefe de legionarios, al mando del prefecto o el legatus romano en
el Alto Egipto. Fue trasladado a los Alpes en donde se le ordenó reprimir a
unos cristianos con saña. Se negó y sus legiones fueron decimadas. Es decir,
uno de cada diez de sus soldados fue ejecutado. Es que habían sido
convertidos al cristianismo y estaban dispuestos a seguir a su jefe hasta la
muerte. Pero no: su jefe los siguió a ellos. Toda la legión fue inmolada y él fue
el último en morir sobre los cadáveres de sus fieles seguidores. Fue
canonizado y es santo patrono de las órdenes militares que defienden el
cristianismo hasta las últimas consecuencias. Por ejemplo, de los piqueros
suizos a cargo de la seguridad del vaticano.
Este Mauritius fue asociado con Saint Moritz. Posee una catedral en
Magdeurgo. Cierto personaje histórico que se le asocia derrotó en el 955 a los
magiares, cuando en el 975 murió Otto El Grande, fue allí enterrado. En 1207
hubo un fuego, justo de viernes santo, que destruyó la inmensa catedral (80m
de largo por 40m de ancho). Se dijo que a la catedral se la llevó el diablo. Sin
embargo, en el 1240 se encontró la lanza, la espada y las espuelas de San
Mauricio. Estas armas fueron utilizadas como parte de la regalía disponible
para las coronaciones de los emperadores austro-húngaros hasta 1916.
Estaban entre las más importantes insignias del trono imperial.
Otro lugar importante para San Mauricio es el retiro montañez conocido como
Davos.
20. Plotino. Porfirio escribió la vida de su maestro a los 68 años, en el 298 d.C., a
treinta años de su muerte. Dijo que Plotino, el mejor filósofo de su tiempo, tenía
el aspecto de quien se siente avergonzado de estar en un cuerpo. En el fin de
sus días no se supo si aun tenía nariz, llevaba una máscara. Dicen que dirigió
unas últimas palabras a su médico Eustoquio: “esfuérzate por elevar el dios
que está en nosotros hacia lo divino que hay en el universo”. Definitivamente,
su meta era el homoiósis teôi, el “asemejarse a dios”. Algunos dicen que en su
pasado egipcio buscó conjuros para convertirse en un demonio de fuego. En el
203-205 d.C., nace en Licópolis, Assyut, en el Alto Egipto. Pertenecía a una
familia helenizada y pudiente. La suya fue una vida cotidiana romana en
Egipto. En el 232 d.C., despierta su vocación filosófica, tenía 28 años. Parte a
Alejandría, donde traspasar de una escuela a otra encuentra finalmente a un
maestro filósofo que lo satisface: Amonio Sacas. Permanece once años con él.
En el 243 se une a la expedición del emperador Gordiano. Su objetivo es llegar
a conocer de primera mano la filosofía de la India y de Persia. Su empresa se
ve obstaculizada por la derrota del emperador, en el cruce del río Éufrates. En
el 254 pone por escrito algunas de sus enseñanzas. Su vista ya es débil por
entonces. Recuerda como había logrado escapar y se había refugiado en
Antioquía en el 244. También cuenta de cómo se había entonces dirigido a
Roma, donde había fundado una escuela. La escuela estaba abierta a todos,
inclusive a las mujeres. Aunque también contaba con una enseñanza selecta
para discípulos de la talla de Porfirio. En el 268 se agrava la enfermedad que
probablemente había contraído en sus viajes por Mesopotamia. Se supone que
era una suerte de lepra. Se retira a la campaña acompañado por su médico
Eustoquio, a la propiedad de un amigo fallecido.
21. Amonio Sacas fue uno de los fundadores del Neoplatonismo. La sociedad
teosófica fundada en Nueva York a fines del siglo XIX, dice haber sido
inspirada por su sabiduría divina. Poco es sabido de dicho filósofo alejandrino,
sin embargo. De él toman su nombre de Filealetheias (amantes de la verdad).
Aunque los orígenes de este filósofo eran humildes, tuvo discípulos de la talla
de Plotino, Casio Longino, Erenius y el Orígenes cristiano y el Orígenes
pagano. Respecto a sus orígenes humildes: parece ser que acarreaba sacos
en el puerto de Alejandría. En el 232 fue su encuentro con Plotino que se
deprimía con los maestros mejores pagos. Tal vez fue sorprendido por Amonio
que estaba impregnado de filosofía persa. Puede que por eso que no se haya
separado de él durante toda su formación. Porfirio dice que aunque sus padres
eran cristianos, a partir de las enseñanzas recibidas por Amonio, pudo
convertirlos al paganismo. Obviamente los autores cristianos posteriores
niegan esto. Hay quienes dicen que hubo dos Amonios: uno que no escribía
era pagano y fue maestro de Plotino, y otro que sí escribió y era cristiano. No
es necesario abundar acerca de la relación de esta figura en contrapunto con
los dobles de Mani.
Lo último que se sabe de Amonio es que enfrentó a cierto capitán negro en el
puerto. En un impulso de filosofía práctica le arrojó un saco lleno de verduras
desde un lugar oculto en un galpón del puerto. El capitán y sus soldados lo
despedazaron.
C. Los galos inmigrantes de Tracia crearon Galatia. Francis Bacon los llamaba los
galo-graeci, “los galos entre los griegos”. Justino y Diodoro Cículo lo explicaban
antes. Decían que habían sido guiados por leotarios o leonorios. El estado e
Galatia existió en Anatolia del 280 al 64 a.C. Su capital era Ancyra (la actual
Ankara); cómo se llamaba ese territorio para ellos se desconoce. Los que
sobrevivieron libres de su pueblo tras la conquista romana, permanecieron en
bosques impenetrables y lejanos del norte. Hay que recordar que hay una
Ankara en Georgia, Tartaria. Esa es la tierra de los osetas.
D. Osetia. Es una zona del Cáucaso septentrional en donde además de los osetas
están los cherqueses Adighés constituídos por dos tribus occidentales (k´ax) y
una oriental: la de los kabardos (q´abrtyen). Al sur de la región y al centro hay
dos pueblos hermanos de los chechenios y los ingushes. Habían sido echados
y volvieron después de un tiempo, lo cual tensó mucho las cosas. En el medio,
muy escondidos, están veinte grupos daguestanos, con los que hay algún
emparentar de lenguas, pero de carácter lejano y prehistórico. Por último hay
también algunas agrupaciones turco-tártaras que penetraron en el último siglo
(siglo XIX); varias sufrieron los efectos de la Guerra Patriótica: al este los
kunkys y los nogais; al oeste los balkares y los karachis, establecidos en las
proximidades del dominio cherqués.
Tal es el cuadro etnográfico del Cáucaso septentrional. La filiación escítica de
los osetas es segura. Las crónicas georgianas permiten establecer
determinadas fechas acerca de los alanos, sus antepasados más recientes.
Los alanos han sido caracterizados como una organización social feudal, por lo
menos hasta la venida de los ejércitos rusos. Bajo el gobierno del príncipe
(Aeldar) en oseto alano, vivían dos tipos de hombres libres: nobles y no nobles;
ambos poseedores de esclavos. Para los alanos según B. I. Abaev, no había
otra distinción que la de los Aeldar y el ejército, Aefsad.
Todos estos grupos tenían una leyenda en común. Hay una leyenda acerca de
los objetos de oro caídos del cielo, que se encuentra referida por primera vez
en Heródoto.
E. Axum es un reino, ciudad capital, del 400 a.C. al 1000 d.C., en Etiopía,
Abyssinia. Su lengua es el ge´ez. Estaba dotado de numerosos obeliscos.
Algunos han llamado a los habitantes de estas tierras soleadas los de faz
ardiente. Eso es lo que significa etíope del griego aito, quemar, y ops,
presencia, cara. No es extraño que los obeliscos negros contengan óxidos y
sulfúreos. La primera escritura propiamente etiópica refiere a un tal GRDT,
gobernante de la región entre el 200 y 230 d.C. Él poseía un bastón de poder
que le permitía colectar el tributo. Se lo llamaba “aquel que exige”. Otro rey de
Axum fue Zos Kales. Parece que fue un buen hombre, conocedor de algo de
literatura griega. Claudius Ptolemaicus de Alejandría habla de él a mitades del
segundo siglo después de Cristo. El erudito señala que Axum era el asiento del
palacio del rey. Un siglo después, Mani diría que Axum se encuentra entre los
cuatro imperios que rigen en el mundo. Los otros tres serían Roma, Persia y
uno que podría ser China, pero él llamaba Sileos. Un siglo después de Mani
llega a la zona un obispo arriano que se llamaba Teófilo pero era conocido
como El Indio (Kosmas Indico Pleusts). Parece ser que Constancio II, patriarca
de Alejandría, lo envió para convertir los reinos árabes. Hay una carta para un
tal Ezana, rey de Axum, de parte del emperador conservada en la Apología ad
constantium imperatore, compilada por Atanasius Kircher. De fines del siglo IV
se encuentra también un relato de la conversión de Audesius de Tiro,
compañeros de Fromentius, que convierte a los najashi de Axum. Éste era otro
título colectivo con el que se conocía a los reyezuelos de la zona. Hay una
reina que aparece en las fuentes con el nombre de Zara Yaglob, pero
pertenece a una lista que terminar en 1438, mil años después. En Axum aún
hoy se encuentran las ruinas de la catedral de María de Zión. Fue descrita en
detalle por un tal Padre Lobo, un jesuita que relacionó a las figuras femeninas
mencionada con la reina de Sheba.
Ahora describiremos las distintas regiones que conforman el territorio. Si la
descripción comienza en la costa, no sería extraño que el puerto en el que
recaban los que navegan el mar oriental, sea Adulis (Broken Reach). Este
pueblo, es como un portal para acceder a los tres niveles sucesivos
diferenciados por montañas y mesetas de diferente altitud. El viajero sabría que
Axum propiamente dicho se encontraba en las tierras altas, a varios días de
viaje desde la cima de la escarpadura, en una zona climática diferente y para
todas las inteciones y propósitos en un mundo diferente. Había que partir de
estar bajo un sol oblongo, en la costa del Mar Rojo, a escalar distintos niveles
de desierto, también teñidos de rojo, de la verdadera Abyssinia. James Bruce,
un explorador escocés, escribió acerca de cómo se veía la estrella del can,
Sirio, desde la costa, y cómo había seguido al silencioso Anubis hasta las
cimas vedadas. Tal vez estaba en busca del Arca de la Alianza, que las
leyendas dicen que el hijo de la reina de Saba había robado de Jerusalem, al
mismísimo Rey Salomón. Parece que no fue suficiente que el sabio rey lo
reconociera como fruto de su cimiente.
Continuemos con las tres zonas climáticas relacionadas con la altura, que
determinan un triple reino. Pasando de la costa a la meseta, tenemos en el
Plateau el pueblo de Aue, es un lugar que las tormentas suelen arrasar, y que
sorprende por el duro invierno que se vive allí. Un explorador expañol de
apellido Alvares, hablaba de una jungla y una montaña diabólicas, también
había una serie de puebluchos quebrados por los rasgos escabrosos del
terreno.
Por último se encontraban las tierras altas de Eritrea y Tigray, en el corazón del
reino axumita. Bruce, se maravilla frente a las increíbles montañas. Habla de
extraños picos, prismas que desafían las leyes de gravedad, parecidos a
pirámides y obeliscos. Un edificio de piedra que no osa describir, lleva el
nombre de Matara. También están los valles de los ríos Marab en el norte,
Takace en el sur. Más allá de este último se hallan los montes Semién, siempre
cubiertos por nieve y heladas brumas. Un monumento adulitadum que se
encuentra allí registra las campañas contra los habitantes de tiendas en la
costa del Mar Rojo, por un lado, y contra los Beja de las montañas, por el otro.
Según el explorador griego Cosmas de nombre, son treinta días los que lleva
dirigirse de el centro de Axum hasta las cataratas de Asuan y a Elefantina. Por
otro lado, si uno quiere ir hacia el sur, a las tierras del incienso, tal vez las
conocidas por los egipcios como Punt, uno debería emplear treinta días
también, en dirección contraria. Un comentarista latino, podrá encontrar en el
nombre Axum la raíz de lo que en latín se llama eje, osea axis, centro del África
oriental.
Desde el 200 d.C., el Negus (rey o líder militar en idioma ge’ez) o nagashi (lo
mismo pero en árabe) podían intervenir políticamente en el sur de arabia.
Muchos consideran que Axum tomó el lugar imperial de Meroe. Las crónicas de
entonces señalan que GDRTY DHBDTWNSIZQRUS intervinieron en arabia del
sur, son los nagashi de trono de marfil de Habashat o Abyssinia, de las fuentes
árabes. Especial mensión merece el trono de marfil que señalamos recién. Era
de basalto negro, frente a él se llevaban a cabo las ejecuciones. En la ciudad
de Adulis, donde estaba emplazado, los mercaderes de Alejandría y de Eliat
comerciaban profusamente. Un gobernante llamado Asbas, se sentaba sobre
el trono tallado con símbolos de Hermes y de Hércules. Tenía además el trono
dos apoya brazos muy elaborados y una estela de basalto con un pico
puntiagudo como respaldo. La leyenda cuenta que cerca de Axum nació la
reina de Saba, oriunda de un pueblo Sabat (que en mapas antiguos aparece
nominado como Sabath).
Detalles de la historia anterior. Hubo una época en la que los griegos hablaban
de un arconte de Adulis (antes del surgimiento del reino axumita). Unas
mujeres referidas como semidiosas pero vestidas con un estilo árabe, eran
representadas con un muchacho al lado y una esfinge de cabeza humana. Por
ese entonces, se distinguían dos grupos étnicos: los negros (Tsalim) y los rojos
(Qayh). Acerca de las distancias podemos agregar que se tardaba cinco días
en cruzar el Mar Rojo y llegar a Arabia. Esto lo sabemos por un axumita que
reconstruyó La Meca en el 608. En honor a esta hazaña, la tribu Quraish a la
que pertenecía, fue exceptuada del Jihad del islam que aconteciera décadas
posteriores.
Antes, en la época de Aureliano (270-275) hubo embajadores axumitas en
Roma. La paz con los romanos solo duró del 305, al 323, época en que
Constantino vence a Licino. Aunque algunas fuentes dicen que no era
prisioneras aliados de Zenobia, estaban presenten en los desfiles de la victoria
de Aureliano por sobre la Reina de Palmyra. El modo en que los embajadores
axumitas son retratados en la vida de Aureliano atribuída a Flavius Vopiscus en
la scriptores historiae augustae, los señala como aliados vencidos que
desfilaron derrotados junto a la reina rebelde, y no como presente en las
celebraciones del lado de los romanos. Todo depende de cómo se interprete el
que aparezcan en la sección de los que llevan regalos y que no haya registro
de una alianza entre Palmyra y Axum. Algunos dicen que un allegado del
general Zabdas, un catafracto de la reina, iniciado en los misterios de Mani,
había entregado ciertos conocimientos ocultos al rey de Axum.
α) Mea culpa ante el acoso del negus de Axum. Período conocido como el de
los reyes paganos en la historia de dicha civilización que va del 270 al 330 d.C.
(el próximo sería el que va de Ezana a Kaleb del 330 al 520).
¿Por qué fuimos contra ese negro? ¿Por qué fuimos contra su amigo rojo, al
que casi flagelamos por completo? Digo: lo despellejamos como parte de la
debida confessio a nos sus captores. Eran seguidores de Mani. La dualidad, el
conocimiento prohibido corría por sus venas. Eran vasallos de Zenobia, la reina
oscura; pero no venían de Palmyra, venían de un reino sureño conocido como
Axum. Ahora sabemos que era el abismo, o Abyssinia. No hay duda de que sus
habitantes eran demonios.
Hechos. En el cubículo que fue una de las prisiones del maldito se encontraron
grabados con caracteres indescifrables, las doctrinas de la dualidad. La lengua
en que estaban escritos era ge’ez (aunque también había algo de griego). La
grafía mantenía algo de la cursiva tan suya.
En la única entrevista que tuvo con el emperador Aureliano, GRDT dijo “vas a
caer, vas a caer, vas a caer”. Además, se autoproclamo Neorex. Pese a que
estaba encerrado en Roma, presagió una caída en dos veces cien años.
Caería la ciudad de los caminos, la ciudad de las puertas que para él
permanecieron cerradas. Eso lo dijo en el año 276 (mil y pico ab urbe condita).
Algunos dicen que fue ejecutado a las orillas del Tiber. Los guardias dicen que
miró hacia las colinas y gritó: “¡Seres ignotos! ¿Por qué viven en concentrada
urbe?”. Más allá de unos mendigos no había nadie cerca para escucharle.
Había sido la idea matarlo en silencio sacándolo de las celdas, por debajo del
puente Sublicus, ese que estaba consagrado a las Furias. Otros dicen que
huyó gracias a un azar. Si la fortuna le sonrió entonces fue porque conocía la
magia dual. Alguien interrumpió lo que debía ser su cruzar al otro lado del
Estigia. Sus carceleros le dijeron que se prepara para cruzar del otro lado del
Río del Olvido.
-No -dijo él- será el afluente contrario al del río Lete, y emergeré vivo. Lo
negaré y tendré la verdad: aletheia, lo contrario del olvido.
Corrieron por los empedrados de Roma. Llegaron casi agotados, faltos de
aliento, a algún lugar de las afueras. Robaron unos huevos y los comieron. En
las viejas termas, en una posada de mala muerte, estaba Juan el Cazador.
Gracias a su compañera mendiga, había llegado antes. “Yo me cojo al destino”
había dicho uno de los captores, cuando le habían dicho que su fatum era
morir en Roma.
Mientras que por la tríada él había pronunciado una maldición (Vas a caer, en
nombre del padre; vas a caer, del hijo; vas a caer, del espíritu santo). Tal vez
por ello la iglesia etiópica continuó monofisista. La naturaleza divina y humana
es una en la misma persona.
β- Existen unos tenores rojos en las planicies de los infinitos portales. De fondo
hay un ruido como de nave espacial al pasar lentamente sobrevolando cráteres
que parecen sómeros, pero son más que profundos. Un sector de acceso que
ya mencionamos para el reino de Axum, es la Broken Reach. Es una fortaleza,
pero también un palacio que dispone de trincheras alrededor, con muros en los
que las torretas adosadas de manera simétrica hacen pensar en una flor
extraña; una flor que creció roja en el desierto rojo. La gobierna una mujer
pelirroja, que se adorna con una mortaja del mismo color. Hay quienes cuentan
que una niña raptada por GRDT y su amigo KAXA fue llevaba primero así.
Cuando llegaron dijeron: “Nosotros [se suponen que hablan dos seres
demoníacos] tomamos una porción del cielo, la mezclamos y fundimos con una
porción de la tierra, y creamos al hombre”.
Como puede observarse ellos volvieron de su prisión con una nueva
concepción acerca del cosmos. A partir de entonces representaron al demiurgo
como un ser monstruoso: un pulpo que aprisiona al mundo, o un reptil con
cabeza de león, de cerdo o de asno (es este sin duda el origen de la acusación
contra ciertos cristianos de que adoran a un dios con cabeza de asno). Los
gnósticos se consideran a menudo ajenos (allógenes) queriendo indicar con
ello que constituyen una raza particular y aparte, ya que participan de un
mundo superior, un mundo luminoso.
También establecieron una genealogía nueva para los padres de Axum. El
imperio íntegro y solidario de Dios que refundaron se retrotraía a Noé. Un
bisnieto de Noé fue Ityopys, que tuvo a su vez a un hijo llamado Axsumawy y
que luego de muchas generaciones concibieron a GRDT. También, como título
él se hizo cargo de la denominación Malakya-Axum. Malakya tuvo seis hijos:
Sum, Nafas, Bagio, Kuduki, Akhorro y Fasheba.
Estos fueron los vengadores de su padre. Acabaron con los generales romanos
que habían permitido la humillación durante su prisión. Al legatus minaya y al
adivino del solis invicti, mataron. Al primero además le robaron su espada.
Otras leyendas cuentan de una historia anterior en donde una gran serpiente
gobernaba el territorio de Axum. Ésta exigía el tributo de una joven niña cada
año. La última niña fue la chica romana que trajeron GRDT y KAXA. Dicen,
otras fuentes, que un extraño rescató a la chica y mató a la serpiente.
¿Cómo se venga a un vengador? El general romano que fue asesinado por los
seis hijos de GDRT era conocido como una encarnación de Mars VLTOR. Se
suponía que era la personificación de la venganza del estado sobre los
asesinos del César.
22. Pablo de Samosata. Figura importante del tercer cuarto del tercer siglo d.C. En
las acusaciones que le dirigieron sus rivales, se menciona que le importaba
alardear de su cargo de procurador duocenario y que aprovechaba de manera
inicua su nombramiento de obispo. Las acusaciones que describen esto se
encuentran entre los ejemplos más antiguos de los denominados odium
theologicum. Es decir, “el vicio eclesiástico de combatir un error teológico
atacando el honor, el carácter y la vida privada de quien lo defiende y
propaga” (Teja, 2005, 181). Entre las críticas personales que se le hacen, se
encuentra una que llama especialmente la atención, puesto que no debería
atentar contra la moral cristiana: se lo acusa de provenir de una familia sin
recursos. El término que se utiliza es “mendigo”. Lo que esta crítica quiere
resaltar es que se trata de un advenedizo y que no pertenece a las familias que
durante generaciones estuvieron vinculadas con las elites superpuestas de las
jerarquías administrativas y la incipiente iglesia universal. A esto se suma el
que su posterior fortuna se habría realizado a partir de exacciones ilegales,
producto tanto de su cargo eclesiástico como de su supuesta magistratura. No
es extraño hacer coincidir esta riqueza súbita a través de otra alianza terrible,
aunque esta vez de carácter político: se trata de la protección que recibió de
Zenobia, reina de Palmyra, que entró a saco a Ancyra (Ankara). Hay que decir
que, sin embargo, Aureliano no guardó especial rencor a este Pablo y, a la
hora de redimir quién se quedaría con el puesto de obispo, se situó como
neutral. En tanto árbitro no preocupado por las cuestiones teológicas de fondo,
simplemente señaló que confirmaría en su puesto a aquel a quien estuvieran
dirigidas la mayoría de las cartas de los demás obispos. En cuanto a su
especificidad teológica o doctrinal, hay quienes lo mencionan como un
precursor de los adopcionistas. Eso significa que Jesús habría sido adoptado
por Dios en mor de su comportamiento.
F. Antioquía de Siria. Antakya es el nombre que recibe en la actualidad turca el
mermado pueblo que en la antigüedad fue conocido como Antioquía. Fue
fundada por Seleuco I Nicator, con el nombre de Antioquía en reconocimiento
de un ancestro o un descendiente suyo cercano (su padre o su hijo),
aproximadamente en el 300 a.C. (es decir, en el 450 a.u.c.). Su locación es
excelente, se encuentra a unos 25 km de la desembocadura del Orontes, río
que nace cerca de la antigua ciudad de Baalbek, entre las cordilleras del
Líbano y el Antilíbano. Como el río se abre paso desde allí hacia el norte,
atraviesa Siria y penetra en Turquía; la ciudad fundada cerca de su
desembocadura se convertiría en una vía de acceso privilegiada para aquellos
que quieran conectar el Mediterráneo con el interior de Asia. La ciudad en sí se
encontraba en la ribera izquierda del río. Poseía una larguísima avenida
paralela al mismo, flanqueada en ambos lados con bellos pórticos. Una buena
parte de las calles secundarias y la arteria principal iban a parar a los pies del
monte Silipos, lugar de jardines y bosques. Las calles que corrían en dirección
opuesta también terminaban en jardines sobre la ribera del Orontes. De allí,
otra avenida principal desembocaba en un puente que daba a su vez a una isla
donde se habían construido el hipódromo, varias termas, templos y el palacio
utilizado en las largas estancias de los emperadores de turno. No muy lejos se
encontraba el Octógono Dorado, un edificio de planta central decorado con
profusión de bronce y oro que mandó a construir Constantino. A unos 6 km al
oeste de la ciudad, se encontraba el barrio residencial de Antioquía conocido
como Dafne. Era un lugar de puentes, jardines, parques y bosques. También
conocido por su santuario y el templo de Apolo y Zeus respectivamente.

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