Desde que me interesé por la música he intentado comprender los secretos que hay detrás de una

buena música. En mi largo e interminable intento de aprender he encontrado infinidad de libros,

artículos y videos que intentan explicar la armonía. Aunque muchos tienen muchos conceptos
interesantes siempre dejaban vacíos y conceptos que no lograba entender del todo. Esta es la razón
que me lleva a querer escribir este manual de armonía, el cual espero que pueda albergar los
conocimientos básicos de la armonía musical y un intento de aplicarla a la guitarra, aunque sin
limitarla únicamente a esta.
Como en todo proceso de aprendizaje, es necesario reconocer los conocimientos previos que se
tienen acerca del tema, muchas veces se sabe más de lo que se cree. Este libro va dirigido tanto a
personas que se interesen en el tema, principiantes e incluso a aquellos que tienen conocimientos
avanzados sobre armonía.
En primer lugar, es necesario dejar de lado la concepción de que existen siete notas musicales. Son
doce en total y ninguna es más importante que la otra. En realidad, estas notas son también producto
de un acuerdo en el que se estableció que el La4 debía estar afinado a 440Hz. Existen infinidad de
frecuencias en las que podemos afinar nuestro La4: 432, 426, 448 Hz, etc. Incluso hay datos en los
que se registran afinaciones de La4 a los 380Hz. Lo realmente importante son los intervalos, pero
para hablar de esto es necesario conocer primero de dónde surgen estos intervalos.
Como dijimos anteriormente, tenemos doce notas. Siete de ellas han tomado mayor importancia a lo
largo de la historia: Do, Re, Mi, Fa, Sol, La y Si (en el sistema americano son denominadas C, D, E,
F, G, A y B respectivamente). Y 5 alteraciones o semitonos que pueden ser sostenidos (♯) si son en
orden ascendente o bemoles (♭) en orden descendente.

Así quedarían las doce notas alineadas en un plano:

Do - Do♯ - Re - Re♯ - Mi – Fa - Fa♯ - Sol - Sol♯ - La - La♯ - Si - Do
O bien

Do - Re♭ - Re - Mi♭ - Mi – Fa - Sol♭ - Sol - La♭ - La - Si♭ - Si - Do

Como podemos ver solo las siete notas “principales” tienen nombre propio. Las otras cinco utilizan
el nombre de su nota contigua y le agregan una alteración. Otro punto que es necesario observar es
la distancia entre las notas. A esta distancia es a la que llamamos intervalo