Professional Documents
Culture Documents
C21_12_5
FECHA:
07/02/2007
CONSULTANTE:
Ministerio
Nº EXPEDIENTE:
DCAARRHH – 42/07
CUESTIÓN PLANTEADA:
Se formula consulta en relación con los criterios para la concesión de permiso por
enfermedad grave de un familiar hasta el segundo grado de consanguinidad o
afinidad
SÍNTESIS DE LA CONTESTACIÓN:
RESPUESTA:
Por tanto, son las circunstancias de cada caso las que debe ponderar el Centro
decisor teniendo presente la finalidad del permiso (atención de necesidades de
índole familiar) y la propia naturaleza del hecho causante, dentro de la pauta
fijada por la redacción de la Ley”.
Así, deben valorarse las circunstancias objetivas y subjetivas por el centro gestor
para considerar una enfermedad como grave o no, siendo la gravedad de la
enfermedad el presupuesto básico para la concesión del permiso, sin que se
pueda definir dicho concepto a priori y con carácter general.
Segundo. Momento de disfrute del permiso.
Por lo que hace a la posibilidad de entender que con cada recaída en la enfermedad
grave de un familiar se inicia un nuevo período de cómputo, el criterio de este Centro
Directivo es que habrán de ponderarse, de un lado, el interés de la Administración,
esto es, las necesidades del servicio, y, de otro, el del funcionario en el que concurre
la causa que da origen al permiso. En este sentido, corresponde al Centro Gestor
valorar si se está ante una recaída, y por tanto, ante un nuevo hecho causante, o si,
por el contrario, estamos ante un alargamiento de una enfermedad, de por sí grave
pero estacionaria, en cuyo supuesto habrían de adoptarse por el Centro Gestor las
medidas que estime más convenientes para evitar que se pueda producir un abuso
del permiso.
En conclusión:
La consideración de una enfermedad como grave o no, en tanto estamos ante un
concepto jurídico indeterminado, requiere una ponderación por parte del Centro
Gestor, a la vista de las circunstancias concurrentes.
En todo caso, es requisito indispensable para la concesión del permiso que exista
una justificación documental suficiente, ya sea con carácter previo o con
posterioridad, de tal modo que permita a la Administración efectuar un juicio
razonado acerca de la procedencia o no de la concesión del citado permiso. En
este sentido, no se considera justificación suficiente la mera referencia al
internamiento hospitalario sin concretar el hecho causante del mismo.