INTRODUCCIÓN

Una breve mirada histórica

El feminismo es un Doctrina o movimiento social y político que concede

a la mujer igual capacidad y los mismos derechos que a los hombres, se
inicia formalmente a finales del siglo XVIII aunque sin adoptar todavía
esta denominación, que supone la toma de conciencia de las mujeres
como grupo o colectivo humano, de la opresión, dominación, y
explotación de que han sido y son objeto por parte del colectivo de
varones en el seno del patriarcado bajo sus distintas fases históricas de
modelo de producción, lo cual las mueve a la acción para la liberación de
su sexo con todas las transformaciones de la sociedad que ello requiera.

Históricamente partió de la idea de que no existía ninguna razón válida

para desintegrar el principio de igualdad defendido por los intelectuales
de la Ilustración y discriminar a las mujeres. Se centró en la búsqueda
de una igualdad formal entre hombres y mujeres; sin embargo, esa
igualdad nunca fue extensible a las mujeres. Es decir, su lucha se ha
dado por los derechos civiles, políticos, laborales, educativos, derecho al
divorcio como libre decisión de las partes, el derecho al voto femenino,
la no discriminación de la mujer en las leyes y la posibilidad de que ellas
pudiesen acceder a la propiedad en vez de ser simples administradoras
de la economía doméstica.

Entre los años 60 y los 90, la cantidad de tipos de feminismo se

diversifica más al adoptar influencias de la filosofía posmoderna y por
alejarse del individualismo del feminismo liberal.

Desde la igualdad, el feminismo se marca como objetivo que las

mujeres puedan llegar a acceder al mismo estatus que ocupan solo los
hombres; sin embargo este movimiento no tuvo el mismo eco en todas
partes del mundo y fue en Inglaterra y en USA donde tuvo más
relevancia. El género es un constructo social que históricamente ha
servido para vehicular la opresión hacia las mujeres a través de los roles
de género asignados artificialmente al nacer.

Quizá, ahora que la sociedad tiene muchos de los derechos que ellas
fueron consiguiendo, no lo vean con la misma perspectiva, pero en su
tiempo fueron muy criticadas y tachadas de locas. ¿Por qué siempre se
añora lo de “antes” creyendo que lo que tenemos es malo o
simplemente no es tan bueno?
Es hora de cambiar esos paradigmas anquilosados, que se han arraigado
a través de la historia en el pensamiento, las creencias y la cultura de la
sociedad premoderna; que lo único que ha hecho es estigmatizar,
estereotipar y simplificar el sexo y los roles sociales en la humanidad,
por culpa de prejuicios morales que la misma sociedad ha ido
construyendo, entendiendo que nada es estático y que si nosotros no
cambiamos, la misma historia se encarga de cambiar o transformar.

El feminismo de la igualdad tiene como objetivo conseguir la igualdad

entre hombres y mujeres y plantea que para ello no es suficiente la
igualdad formal o legal sino que es necesario establecer un nuevo
Contrato Social.

La realización del presente trabajo me permitió comprender que el

feminismo es un movimiento o corriente social que se ha visto sujeto a
cambios influidos por los aportes culturales, sociales, religiosos e
ideológicos a través del tiempo y que son el resultado de las luchas
sociales emprendidas por las mujeres, logrando el reconocimiento y la
reivindicación de sus derechos; y que gracias a ello, se incorporan a la
sociedad términos como género, identidad de género, roles sociales y
sexuales, diversidad sexual, homosexualidad, heterosexualidad,
creencias, estereotipos, etc, los cuales forman parte del desarrollo
sexual y social del ser humano y son promovidos en la sociedad a través
de la transformación social y cambio de mentalidad de cada individuo.