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LIMA, 2017
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INDICE
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CRIMINOLOGÍA: PARTE GENERAL
CAPÍTULO I
NOCIONES GENERALES
1. EL CONCEPTO DE CRIMINOLOGÍA
2. SOBRE EL CARÁCTER CIENTÍFICO DE LA CRIMINOLOGÍA
3. MÉTODOS DE LA CRIMINOLOGÍA
4. RELACIÓN ENTRE LA CRIMINOLOGÍA Y EL DERECHO PENAL
5. CARACTERÍSTICAS DE LA CRIMINOLOGÍA
6. RAMAS DE LA CRIMINOLOGÍA
a) La clasificación de HERRERO HERRERO:
b) La clasificación de INGENIEROS:
c) La clasificación de RODRÍGUEZ MANZANERA:
8. FUNCIONES DE LA CRIMINOLOGÍA
9. FINES DE LA CRIMINOLOGÍA
CAPÍTULO II
EVOLUCIÓN HISTÓRICA DEL PENSAMIENTO CRIMINOLÓGICO
1. INTRODUCCIÓN
2. CRIMINOLOGÍA PRECIENTÍFICA: LA ESCUELA CLÁSICA
3. CRIMINOLOGÍA CIENTÍFICA
a) La Escuela Positiva:
b) Las Escuelas Intermedias:
4. CRIMINOLOGÍA MODERNA
a) Modelos de la Opción Racional o Librealbedristas:
b) Modelos positivistas y neopositivistas:
5. CRIMINOLOGÍA CRÍTICA
a) El Reduccionismo:
b) El Abolicionismo:
c) La crisis de la Criminología Crítica:
6. CRIMINOLOGÍA CONTEMPORÁNEA
a) Teoría de las Ventanas Rotas:
b) Teoría de la Prevención Situacional:
c) Teoría de la Taxonomía de MOFFITT:
d) Teoría integradora de SCHNEIDER:
e) Modelo Integrador de ANDREWS y BONTA:
f) Modelo Integrador de FARRIGTON:
7. CRIMINOLOGÍA PERUANA
CAPÍTULO III
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OBJETO ACTUAL DE LA CRIMINOLOGÍA
1. INTRODUCCIÓN
2. EL DELITO COMO CONDUCTA DESVIADA
a) Concepto de conducta desviada:
b) Concepto de delito:
c) “Infracción”, “delito” o “crimen” para la Criminología contemporánea:
d) Clasificación criminológica de los delitos:
3. EL DELINCUENTE
a) Concepto:
b) Factores que influyen en la personalidad del delincuente:
c) Teorías sobre los delincuentes:
d) Clasificación de los delincuentes:
4. LA VÍCTIMA
a) Concepto:
b) Evolución histórica de la víctima: el camino hacia la Victimología:
c) La Victimología:
d) La Victimodogmática:
e) El proceso de victimización:
f) Tipologías de la Víctima:
5. EL CONTROL SOCIAL
a) Concepto:
b) Control social informal:
c) Control social formal:
6. EL AUTOCONTROL
CAPÍTULO IV
EL TRIPLE RIESGO DELICTIVO: MODELO DE SÍNTESIS ETIOLÓGICO CRIMINAL
1. INTRODUCCIÓN
2. DEFINICIONES PREVIAS
a) Factor de riesgo:
b) Factor de protección:
c) Dimensión de riesgo:
d) Fuentes de riesgo:
e) Medidas de conducta antisocial:
f) Vulnerabilidad diferencial para el delito:
g) Comportamientos antisociales y delictivos:
h) Comportamientos prosociales:
i) Motivación antisocial (MA):
j) Riesgo individual de conducta antisocial (RCAi)
k) Riesgo social de conducta antisocial (RCAs):
3. DESARROLLO DE LA TEORÍA
4. CONCLUSIONES
CAPÍTULO V
EL STATUS CIENTÍFICO DE LA CRIMINOLOGÍA
1. INTRODUCCIÓN
2. LOS PLANES DE ESTUDIO DE LA CRIMINOLOGÍA
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a) La Criminología como una asignatura dentro de una carrera profesional:
b) La Criminología como una carrera profesional:
c) La Criminología como un postgrado:
CAPÍTULO VI
LA INVESTIGACIÓN CRIMINOLÓGICA
1. INTRODUCCIÓN
2. EL OBJETO DE LA INVESTIGACIÓN EN LA CRIMINOLOGÍA
3. PROBLEMAS EN LA INVESTIGACIÓN CRIMINOLÓGICA
4. PASOS RECOMENDADOS EN LA INVESTIGACIÓN CRIMINOLÓGICA
5. EL MÉTODO EMPÍRICO EN LA INVESTIGACIÓN CRIMINOLÓGICA
6. LAS TÉCNICAS DE INVESTIGACIÓN
a) La observación:
b) La encuesta:
c) La entrevista:
d) La estadística:
e) El experimento:
f) Los test psicológicos:
g) Estudios de seguimiento:
h) Investigaciones con grupos de control:
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CAPÍTULO II
LA DELINCUENCIA JUVENIL
1. INTRODUCCIÓN
2. CONCEPTO
3. TEORÍAS REFERIDAS AL DELINCUENTE JUVENIL
a) Teorías biologicistas:
b) Teorías Psicológicas:
c) Teorías de la Personalidad:
d) Teorías de la cognición:
CAPÍTULO III
LA DELINCUENCIA SEXUAL
1. INTRODUCCIÓN
2. EVOLUCIÓN DE LA DELINCUENCIA SEXUAL
3. CONCEPTO
4. LA FIGURA EL AGRESOR SEXUAL
a) Violadores sexuales:
b) Agresores de menores de edad:
CAPÍTULO IV
LA DELINCUENCIA DOMÉSTICA Y LA VIOLENCIA DE GÉNERO.
1. LA VIOLENCIA Y LA AGRESIVIDAD
a) Diferenciación entre violencia y agresividad:
b) Origen de la conducta agresiva:
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c) Tipos de agresión:
d) Tipos de violencia:
e) Incidencia de delitos violentos en nuestra realidad nacional:
CAPÍTULO V
LA DELINCUENCIA EN EL TRÁFICO
1. INTRODUCCIÓN
2. CONCEPTO
3. PERFIL CRIMINOLÓGICO DEL DELINCUENTE EN EL TRÁFICO
4. CONDUCTAS QUE FORMAN PARTE DE LA CRIMINALIDAD EN EL TRÁFICO
5. FACTORES QUE FAVORECEN LA CRIMINALIDAD EN EL TRÁFICO
6. MEDIDAS NACIONALES ENTORNO A LA CRIMINALIDAD EN EL TRÁFICO
7. SITUACIÓN CRIMINOLÓGICA ACTUAL
CAPÍTULO VI
LA DELINCUENCIA SOCIOECONÓMICA
1. INTRODUCCIÓN
2. CONCEPTO
3. FACTORES QUE FACILITAN EL SURGIMIENTO DE LA DELINCUENCIA
SOCIOECONÓMICA
4. PERFIL CRIMINOLÓGICO DEL DELINCUENTE SOCIOECONÓMICO
5. LA VÍCTIMA EN LA DELINCUENCIA SOCIOECONÓMICA
6. MANIFESTACIONES DE LA DELINCUENCIA SOCIOECONÓMICA
CAPÍTULO VII
LA DELINCUENCIA TERRORISTA
1. INTRODUCCIÓN
2. CONCEPTO
3. CARACTERÍSTICAS
4. TIPOLOGÍAS DE LA CRIMINALIDAD TERRORISTA
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5. PERFIL DEL CRIMINAL TERRORISTA
6. EL TERRORISMO EN EL PERÚ
a) El Partido Comunista Peruano – Sendero Luminoso (PCP-SL)
b) Desarrollo histórico del Conflicto Armado Interno:
c) Características de las organizaciones terroristas peruanas
CAPÍTULO IX
LA CRIMINALIDAD ORGANIZADA
1. ORIGEN
2. CONCEPTO
3. CRÍTICA A LA LEY N° 30077
4. CARACTERÍSTICAS
5. LA DELINCUENCIA ORGANIZADA Y CRIMINALIDAD ORGANIZADA.
VINCULACIÓN Y DIFERENCIAS.
6. TIPOLOGÍA DE LAS ORGANIZACIONES CRIMINALES
a) Jerarquía estándar
b) Jerarquía regional
c) Agrupación jerárquica
d) Grupo central
e) Red criminal
7. LA PRESENCIA DE LA CRIMINALIDAD ORGANIZADA EN EL PERÚ
8. LA POLÍTICA CRIMINAL PERUANA EN LA LUCHA CONTRA LA CRIMINALIDAD
ORGANIZADA
a) La investigación y el proceso penal
b) Las consecuencias jurídicas reguladas por la Ley N° 30077
c) Especial condición penitenciaria de los delincuentes de la criminalidad organizada
d) Nuevas políticas legislativas en el marco de la lucha contra la criminalidad
organizada
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CRIMINOLOGÍA: PARTE GENERAL
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CAPÍTULO I
NOCIONES GENERALES
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INTRODUCCIÓN.
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1. EL CONCEPTO DE CRIMINOLOGÍA
1 Los romanos ubicaban al crimen como una conducta que lesionaba intereses colectivos
y sociales, de carácter estatal. Por su parte, el delito era considerado como una
conducta de lesividad menor, individual, prácticamente privada, entendida
básicamente como una contradicción a la ley. El delito podía ser, por lo mismo, tanto civil
como penal, ya que enfatizaba predominantemente en lo ilícito; mientras que el crimen
era considerado como aquel delito penal especialmente grave. De ello derivó una
acalorada discusión, ya desfasada, acerca de si el Derecho penal debía llamarse como
tal o si era preferente denominarlo “Derecho criminal”.
La diferenciación crimen-delito desde la perspectiva de la naciente ciencia
criminológica fue importante para determinar los primeros estudios a los que se dedicó.
Como se dijo, los análisis primogénitos hechos a los agentes delictivos se dieron sobre
quienes cometían crímenes o delitos muy graves, tales como el homicidio; pues se
proponía que la Criminología estudiara las conductas que sean consideradas delictuosa
independientemente de los vaivenes legislativos y normativos, por el carácter
extremadamente dañoso para la sociedad que conllevaban (delito natural), lo que, en
tiempos antiguos, no era más que lo que se entendía por crimen. Los estudios
criminológicos referidos a quienes cometían delitos simples, comunes y corrientes –un
hurto, lesiones leves, etc.- no fueron reservados sino a épocas posteriores, cuando el
problema de la diferenciación entre crimen y delito se superó. Hoy en día puede
emplearse ambas expresiones sin mayor relevancia.
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tanto a su personalidad, de forma que dicha corriente se basa en
premisas de carácter descriptivo respecto a los delitos y estudios
científicos individualistas.
3 Ídem., p. 27.
5 PÉREZ PINZÓN, Álvaro y Brenda PÉREZ CASTRO. Curso de Criminología. 8ed. Colombia:
TEMIS, 2009, p.1.
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propósito que se persigue a través de esta ciencia: formular política
criminal.
7 La tendencia natural al cambio por parte del Derecho -y con esto también del concepto
de delito que se recoja- conlleva a que las teorías que defienden una conceptualización
extremadamente restringida de Criminología concluyan estimado que una ciencia que
se proclama como autónoma no puede depender en cuanto a su objeto de otra, siendo
en este caso que la Criminología no puede depender respecto a su objeto del Derecho
Penal, ya que el contenido irrefutablemente legal del delito es susceptible de variar de
manera frecuente por diversas condiciones coyunturales, tales como los móviles de
grupos sociales dominantes, los factores económicos o políticos, etc.
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Nosotros nos inclinamos en afinidad hacia una concepción amplia de
la Criminología, en concordancia con lo dicho por GARCÍA-PABLOS
DE MOLINA9, quien la define como la ciencia interdisciplinaria y
empírica que estudia cuatro puntos concretos: el crimen, y su
referente sociológico amplio derivado de la conducta desviada; el
infractor; la víctima; y el control social del comportamiento delictivo.
Por tanto:
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autónoma con un objeto de estudio mucho más amplio que el
Derecho penal.
10 BUNGE, Mario. Ciencia y Desarrollo. Buenos Aires: SIGLO XX, 1989, p. 42.
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a aceptar su condición de conocimiento científico, condicionan
aspectos determinantes de ella a otras disciplinas, siendo el ejemplo
más evidente de ello la conocida –y felizmente superada- posición de
que el objeto de la criminología se encuentra subordinado al
contenido legal de delito.
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unitaria para descomponer sus elementos); especializada;
experimental; verificable con la realidad; y predictiva.
3. MÉTODOS DE LA CRIMINOLOGÍA
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mismo, es posible que se den estudios criminológicos que sean
empíricos pero que utilicen métodos no experimentales13.
13 SERRANO MAÍLLO (Introducción a la Criminología, cit., pp. 47 y ss) nos dice que así
también, es posible que la Criminología utilice otros métodos que no sean propiamente
empíricos, por el hecho mismo de que su objeto de estudio se centra en el Hombre y su
comportamiento. Propone para ello una Criminología comprensiva que pueda ser tanto
empírica como positiva, de manera que el método empírico se integre como otros
métodos cualitativos (GARCÍA-PABLOS DE MOLINA, Antonio, Criminología, cit., pp. 7 y ss.)
que busquen interpretar el sentido del actuar del criminal, a fin de que el investigador
pueda ver el mundo a través de los ojos del delincuente –con su mismo contexto tanto
emocional, familiar, etc.- para facilitar su estudio.
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por el análisis de la persona que comete las infracciones, la víctima a
la que atacó y otras temáticas propias de su objeto de estudio, como
la reinserción social, el control social, el autocontrol y el desarrollo de
políticas dirigidas hacia la prevención delictiva. Esto quiere decir que
el Derecho penal es una ciencia del deber ser con un fundamento
normativo: recopila lo que abstracto debería respetarse y lo positiviza;
a diferencia de la Criminología, que es una ciencia del ser, de la
realidad, que se basa en estudios empíricos.
14 RODRÍGUEZ MANZANERA, Luis. Criminología. 19ed. México D.F.: EDITORIAL PORRÚA, 2004,
p. 33
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delincuente del Derecho penal exclusivamente- fija un punto de
partida para su estudio.
5. CARACTERÍSTICAS DE LA CRIMINOLOGÍA
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f) Es multiaportativa de conocimientos al Derecho Penal, Procesal
Penal, Penitenciario y también a la Política Criminal.
6. RAMAS DE LA CRIMINOLOGÍA
16 HERRERO HERRERO, César. Criminología, 3d. Madrid: DYKINSON, 2007, pp. 42 y ss.
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sistematizado de conocimientos relacionados con la fenomenología,
la etiología y las derivaciones o consecuencias de la realidad
delincuencial o criminal.
17 Vid. NÚÑEZ PAZ y ALONSO PÉREZ (Nociones de Criminología, cit., pp. 115 y ss), quienes son
enfáticos en defender que la Criminología clínica no abarca el estudio de la criminalidad
como fenómeno social: puesto que su principal interés no es el delito, sino la persona que
lo comete, el delincuente en una forma concreta y determinada. Indica que, si bien la
Criminología clínica presenta al delincuente como un ente “biopsicosocial”, esto es,
recoge los aspectos de las tres facetas del hombre (biológica, psicológica y social); no
hará una reconstrucción desde un punto de vista sociológico, sino del que es propio de
su disciplina: un enfoque criminológico que se encuentre dirigido a la resocialización del
criminal. Por tanto, los autores indican que ésta es una ciencia “individualizadora y
aplicada”.
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Criminología General
•Conjunto sistematizado de conocimientos relacionados con la
fenomenología, la etiología y las derivaciones o consecuencias de la
realidad delincuencial o criminal. Aborda los conocimientos teóricos
sobre el crimen que proceden de las diversas disciplinas de la
Criminología.
•Expone los conocimientos teóricos sobre el crimen.
•Estudia sus elementos en abstracto y por separado.
Criminología Clínica
•Conjunto sistematizado de conocimientos relacionados con el estudio
del delincuente (o predelincuente) concreto en un enfoque
multidisciplinario.
•Pretende aplicar los conocimientos teóricos adquiridos a un caso
concreto.
•Su finalidad es poder formular un diagnóstico, pronóstico y tratamiento
para el agente del acto delictivo.
•Presenta al delincuente como un ente biopsicosocial: recoge los
aspectos de las tres facetas del hombre -biológica, psicológica y social.
b) La clasificación de INGENIEROS:
18 INGENIEROS, José. Criminología. Madrid: DANIEL JORRO EDITOR, 1913, pp. 84 y ss.
19 Ibídem.
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Así, resulta el
Etiología Criminal
•Se centra en las
causas que
generan el delito.
•Toma en cuenta el organismo del delincuente y en el ambiente que lo
Clínica Criminológica
•Trata sobre la
manifestaciones
de los actos delictivos.
•Busca fijar el grado de temibilidad del delincuente en su relación con la
Terapéutica Criminal
•Estudia los
grados de
represión del delito, enfocándola como un medio de defensa social.
siguiente esquema:
21 RODRIGUEZ MANZANERA diferencia las ramas de la Criminología de sus clases. Para él, las
clases de Criminología, basado en los estudios de LÓPEZ REY (Vid. Criminología. Madrid:
AGUILAR, 1973, pp. 3 y ss), son: criminología científica, que trata del aspecto puramente
teórico y estudia la criminalidad como fenómeno social e individual, el autor del hecho
delictivo, la víctima, la sociedad y el sistema penal como reacción social frente al delito;
criminología aplicada, que incluye cualquier sistema de control social y de reacción
frente al crimen, sin limitarse solo al sistema penal; criminología académica, que son los
estudios criminológico que persiguen fines de enseñanza; y la criminología analítica, que
tiene como rol principal la supervisión de las demás ramas.
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ejemplo, la Criminología Antropológica, Criminología Psicológica,
Criminología Sociológica, etc.
Al comparar los resultados obtenidos de las criminologías analíticas,
organizarlos y armonizarlos; llegamos a la Criminología General: la
síntesis resultante que resalta la importancia particular de cada uno
de sus componentes.
Criminologías Analíticas
•Tentativas de
explicación del fenómeno criminal
•Parten de una ciencia específica
•Desarrollan una verdadera Criminología
•No tienen método uniforme
Criminlogía General
•Síntesis
armoniosa de los resultados obtenido por las diversas Criminologías
Ciencias Criminológicas
•No pertenecen
a la Criminologia.
•Son ramas de otras ciencias que parten de una visión criminológica pero
enfocan el problema desde su objeto de estudio paricular.
22 Ibídem.
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Por tanto, podemos ejemplificar el modelo de RODRÍGUEZ
MANZANERA tal como figura en el esquema que se presenta a
continuación:
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a) La clasificación de NUÑEZ PAZ:
24 NÚÑEZ PAZ, Miguel A. y Francisco ALONSO PÉREZ. Óp. cit., pp. 39-43.
!27
La Sociología Criminal, por su parte, estudia el crimen como
fenómeno social y hecho colectivo. Confluyen en ella la Geografía
Criminal, de la cual se diferencia en cuanto ésta estudia el crimen
respecto a su distribución y reparto en la sociedad; la Ecología
Criminal, que estudia el crimen y su relación con diversos espacios y
lugares, especialmente sobre la atracción que podrían generar sobre
el delincuente; y la Estadística Criminal, que se encarga del estudio
del método estadístico usado por las disciplinas criminológicas.
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b) La clasificación de RODRÍGUEZ MANZANERA:
Psicología
Criminal
RODRÍGUEZ MANZANERA 25 nos Biología
presenta un sistema abierto Criminal
Antropología
respecto a la clasificación de Criminal
las ciencias auxiliares de la Criminología, en
el que resalta la importancia dada al Geografía
Criminal
aporte interdisciplinario. Así, nos indica que
las ciencias que mínimamente
deben apoyar a Sociología Ecología
Analizan la Criminal
Criminal
l a comisión del
delito
Criminología
Fenomenología Estadística
para un adecuado Criminal Criminal
estudio del crimen son
l a Antropología
Etiología
Ciencias criminal Criminológica,
auxiliares Biología Criminológica,
Psicología Prognosis Criminológica,
Criminal
Sociología Criminológica,
Criminalística, Victimología y Penología.
Criminalística
Con el criminólogo
i t a l i a n o Analizan la LOMBROSO
disminución del Penología
nace la Criminología
delito
c o m o Antropología
Criminal. Ésta se encarga de Profilaxis estudiar al
Criminal
criminal en su condición de hombre, como
ser vivo, y determinar las características
tanto mentales como físicas que son propias de los delincuentes,
tratando de hallar un patrón específico continuo entre los diferentes
autores delictivos. Por tanto, la Antropología Criminal estudia el
corpóreo funcional del hombre delincuente y a los factores
antropológicos del delito26.
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La Biología Criminal estudia también al criminal como ser vivo, mas se
enfoca en áreas tales como sus antecedentes genéticos y los
procesos propios de su anatomía. Busca determinar la influencia de
los aspectos biológicos en la criminalidad27: el funcionamiento del
organismo, la relación de éste con el medio físico, los efectos de la
alimentación, la existencia o no de una herencia criminal, entre otros,
son problemas criminológicos que resuelve la Biología Criminológica.
28 Para ello trabaja junto con la Psicología Judicial y la Psicología Carcelaria, puesto que las
tres disciplinas juntas responden a los factores psicológicos propios del delincuente
durante tres importantes momentos delictivos, en orden: como mero autor, como
imputado del delito, y como condenado que está cumpliendo una pena. Recibe
también apoyo de los estudios de la Psicología Legal, la cual estudia, por un lado, las
circunstancias agravantes o atenuantes de los delitos (premeditación-impulso de ira); y
por otro, los efectos de la aplicación de la norma penal –bajo una visión psicológica y
psicopatológica- en menores de edad, enfermos mentales, alcohólicos, sordomudos, etc.
29 Con este fin se basa, además de los propios estudios criminológicos, en los conocimientos
de la Neurología, Etnografía, entre otros. Ya que se puede sintetizar que para la
Sociología Criminal los criminales son hijos de la que fue su sociedad, de sus carencias y
problemáticas; nos recuerda la célebre frase de EMMA GOLDMAN: “Una sociedad tiene
todos los delincuentes que se merece”.
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Otra ciencia auxiliar mencionada por RODRÍGUEZ es la Criminalística.
Nació como parte de la Medicina Forense, y se encarga del
descubrimiento, investigación y confirmación científica de un hecho
que se presenta como presunto delito, además de las pruebas
suficientes para individualizar al que sería el causante del crimen
como también a la víctima. Por tanto, puede resumirse que la
Criminalística tiene dos finalidades principales: identificar al
delincuente y a las víctimas del hecho delictivo; y reconstruir la
escena del crimen. Así, la criminalística: “reúne las ciencias y
conocimientos humanos para descubrir el cómo, cuándo, dónde,
con qué y para qué de un crimen, para identificar y descubrir al
presunto criminal, así como poder explicar y reconstruir un crimen”30
31.
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ciencia autónoma que estudia las penas como medio de control
social estatal, hay otros que –como RODRÍGUEZ- indican que no
puede hablarse de una Penología enfocada exclusivamente a las
penas, sino que el concepto debe ampliarse a punto tal que dicha
disciplina estudie la reacción que el Estado y la Sociedad tienen
frente al criminal por medio de un sistema de presión que no
necesariamente es sólo punitivo, sino también religioso, educativo,
etc.; encargándose de los medios que se utilizarán para prevenir las
conductas peligrosas o antisociales 32.
Antropología
Criminológica
Biología
Criminológica
Psicología
Criminológica
Ciencias Sociología
auxiliares Criminológica
Criminalística
Victimología
Penología
!
c) Nuestra clasificación:
32 Existe un sector doctrinal que incluso considera que la Penología no puede ser
considerada como ciencia, sino que es sólo una extensión del Derecho Penal debido del
objeto que ambos comparten: la pena. Nosotros optamos por la posición de que la
Penología no puede enfocarse de manera única a las penas impuestas por el Derecho
Penal, ya que ello sería reducir increíblemente su campo de estudio, sino qu trata de
cualquier forma de reacción social frente al delito.
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A manera de conclusión presentamos nuestra propia posición
respecto a las ciencias conexas con la Criminología. Partimos de los
siguientes apartados para una mejor comprensión de la clara
necesidad que tiene la Criminología de los estudios pertenecientes a
otros campos científicos:
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objetivo principal de la política criminal”33. Por tanto, no puede
formularse una política en torno a la resocialización del delincuente
sin considerar los aspectos relacionados con el porqué del actuar
criminal, ni tampoco las relaciones que dicho acto conlleva con la
víctima del delito, el delito en sí mismo y el control social que fue y
será siendo ejercido sobre el agente.
8. FUNCIONES DE LA Sociología
CRIMINOLOGÍA Criminal
Victimología
33 ROXIN, Claus. Política criminal y estructura del delito. Barcelona: IURA, 1992, p. 9.
Derecho
Penitenciario
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Los aportes que la Criminología puede brindar a la sociedad son
variados y la utilización que se les puede dar es mucho más extensa.
Muy a parte del conocimiento científico entorno al delincuente o al
sujeto socialmente desviado, la víctima, el delito, el autocontrol y el
control social; es solo por medio de la Criminología que pueden
implementarse planes de Política Criminal efectivos, fortaleciendo el
control social no hacia la tendencia actual de endurecimiento de las
penas que poco hacen en la persuasión a la no comisión de
crímenes, sino mediante programas certeros eficaces que tengan en
cuenta también a las víctimas –tanto de la delincuencia como de las
conductas socialmente desviadas- evitando así la victimización.
35 Ídem., p. 183.
!35
Es por ello que lo importante de la función dinámica es el resultado
obtenido de la selectividad en el procesamiento de los datos. Dicho
producto se considera una información cualificada sobre el objeto
de estudio de la Criminología.
9. FINES DE LA CRIMINOLOGÍA
36 Ídem., p. 185.
!36
a) La descripción y explicación teórica de las conductas desviadas,
que incluyen tanto al delito como a la conducta antisocial.
!37
CAPÍTULO II
1. INTRODUCCIÓN. 2. CRIMINOLOGÍA
PRECIENTÍFICA: LA ESCUELA CLÁSICA. 3. LA
ESCUELA CIENTÍFICA, a) La Escuela Positiva (i.
Lombroso, ii. Ferri, iii. Garófalo), b) Las Escuelas
Intermedias (i. La Escuela de Lyon, ii. Las
E s c u e l a s E c l é c t i c a s) . 4. C RI MI NOL OG Í A
MODERNA, a) Modelos de la Opción Racional o
Librealbedristas (i. El Neomodernismo, ii. Las
Teorías de las Actividades Rutinarias, iii. Teorías
del Entorno Social), b) Modelos positivistas y
neopositivistas (i. Escuela de la Biología Criminal,
ii. Escuela de la Psicología Criminal, iii. Escuela
de la Sociología Criminal). 5. CRIMINOLOGÍA
CRÍTICA, a) El reduccionismo (i. El Idealismo de
Izquierda, ii. La Nueva Criminología
Administrativa, iii. El realismo de Derecha, iv. El
realismo de Izquierda, v. El Minimalismo), b) El
abolicionismo, c) La crisis de la Criminología
Crítica. 6. CRIMINOLOGÍA CONTEMPORÁNEA, a)
Teoría de las Ventanas Rotas, b) Teoría de la
Prevención Situacional, c) Teoría de la
Taxonomía de Moffitt, d) Teoría integradora de
Schneider, e) Modelo Integrador de Andrews y
Bonta, f) Modelo Integrador de Farrigton.
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1. INTRODUCCIÓN
Tras finalizar dicha etapa nos ubicamos ante una alta predisposición
moralizante en el Derecho, factor que también intervino en la pre-
Criminología. Lo que se pretendió es instruir moralmente, por lo que ya
no interesó tanto el castigo, la venganza social o apartar al
delincuente de la sociedad. Se intuyeron algunos precedentes de lo
que mucho más adelante se manejarían como conceptos de
rehabilitación y reeducación.
!39
El proceso de esta disciplina evoluciona sustancialmente con la
llegada de la Ilustración, disponiendo de su máximo desarrollo entre
finales del Siglo XIX y la actualidad. Esto fue así porque, llegado el
Siglo XVIII, la inmigración de los pequeños núcleos de población a las
grandes urbes, el aumento de la población, de las necesidades, así
como también la burguesía cada vez más creciente, etc.; hicieron
que la miseria progresara paulatinamente y surgieran nuevos centros
denominados “suburbios” donde la pobreza fue palpable,
desarrollando un caldo de cultivo de la delincuencia 39 .
Intelectualmente, esta situación se fortaleció con las nuevas
corrientes de pensamiento que surgieron, tales como el Contrato
Social de ROUSSEAU, el Contractualismo Inglés, etc.; junto con las tesis
formuladas por el Derecho Penal. El resultado de la confluencia de las
tesis penalistas y las corrientes filosóficas fue plasmándose poco a
poco en la que sería, años después, la ciencia llamada Criminología.
!40
una especie de tabú 40; como lo fue, por ejemplo, el homicidio de
Abel a manos de su hermano Caín.
40 “Tabú” era, para el hombre de esa época, todo aquello que inspiraba un temor sagrado,
algo que no podía ser cuestionado por sentirse prohibido. No hay estudio ni del
delincuente ni del castigo porque ambos se daban como ya atribuidas por fuerzas
sobrenaturales –el tótem, según RODRÍGUEZ MANZANERA (Criminología, cit., p. 134)-, lo
que se encontraba fuera de comprensión para la frágil mente humana.
!41
Sin embargo, si bien la mayor influencia se recibió por parte de la
Iglesia Católica, fue también durante esta etapa cuando surgieron
una gama de pseudociencias que intentaron de explicar la
criminalidad. Tenemos, por ejemplo, a la Demonología, para la cual
la delincuencia podía ser en algunos casos producto de la influencia
de seres demoniacos; o la Fisiognomía, que indicaba que se debía
analizar el aspecto físico de los criminales durante el juicio, a fin de
completar las pruebas de cargo y de descargo41.
!42
Los pensadores de la Escuela Clásica partieron del punto de que el
hombre es un ser libre, racional y capaz de tomar sus propias
decisiones y autodeterminarse según éstas, que deciden delinquir tras
haber hecho un análisis costo-beneficio entre el placer y el dolor que
podría producir la comisión del hecho delictivo, lo que significa que el
proceso de decisión para delinquir es del tipo lógico-deductivo y se
relaciona con el método que los clásicos defendieron: el método
formal o abstracto, propio de las ciencias básicas.
3. CRIMINOLOGÍA CIENTÍFICA
!43
a) La Escuela Positiva:
Por ello, en lugar de considerar que el delito es negativo por ser una
contravención a lo jurídicamente impuesto, los Positivistas
coincidieron en que el crimen –como hecho real- es peligroso para la
44 Entre ejemplos significativos del tránsito del método abstracto al método empírico se
encuentran CUBÍ I SOLER, precursor de la Frenología, que desarrolló una relación causal
entre el tamaño cerebral y las características del alma; y QUÉTELET, quien impulsó la
aplicación de las matemáticas en fenómenos sociales por medio de la estadística social.
!44
subsistencia en sociedad. En este punto incide la importancia de la
Ley, que está destinada a lucha contra el delito y ya no a solo
restablecer el orden jurídico perturbado con la conducta ilícita.
46 FERRI en especial fue quien desarrolló trabajos acerca de la peligrosidad criminal, incluso
antes de formar parte de la Escuela Positiva.
!45
Los representantes de la Escuela Positivista desarrollaron tipologías
criminales, según el factor que cada uno consideraba que era el más
determinante en la conducta criminal, aunque se debe tener en
cuenta que no resumieron las causales delictivas a solo una variable,
sino que reconocieron la existencia de variables ambientales y
sociales47. Sobre ello hondaremos un poco más adelante.
Ahora bien, básicamente podemos resumir que las diferencias entre
la Escuela Clásica y la Escuela Positiva son las siguientes:
i. LOMBROSO:
!46
los cuales sobresale la figura del delincuente nato, aquella persona
que es un criminal debido a la fuerte carga biológica que recae
sobre él, de manera que desde edad temprana exterioriza
tendencias criminales que consume continuamente durante lo largo
de su vida. El delincuente nato es casi imposible de reformar y las
penas no son capaces de cumplir su rol preventivo con él, ya que
éste es un sujeto diferente a las personas normales. Es, como dice
SERRANO MAÍLLO49, un ser atávico con carácter como el de los
hombres primitivos y con un nivel de evolución inferior, muy
reconocible por ciertas características físicas que resaltan sobre las de
los otros humanos, como la asimetría facial y la mandíbula
sobresaliente.
ii. FERRI:
!47
FERRI 51, discípulo de GARÓFALO, fue un abogado 52, catedrático53 y
gran político militante de su época que aportó a la Escuela Positiva el
ser quien mejor aplicó el método experimental al estudio del
fenómeno delictivo.
iii. GARÓFALO:
52 La teoría de los sustitutos penales de FERRI fue uno de sus grandes logros como penalista:
FERRI demuestra la inefectividad de las penas y, sin prescindir totalmente de ellas,
propone la implementación de sustitutos penales como los sustitutos económicos,
políticos, científicos, legislativos y administrativos, religiosos, familiares y educativos. Los
sustitutos son, para FERRI, el método más efectivo para luchar contra la criminalidad, de
manera que así formula el primer plan de Política Criminal establecido orgánicamente.
53 Al tomar la cátedra de Derecho penal en la Universidad de Bologna, con tan solo 23 años
de edad y en sustitución de su famoso maestro PIETRO ELLERO, cambió el sistema de
enseñanza y propició un método empírico de aprendizaje, llevando a sus alumnos a tener
contacto directo con los delincuentes en prisión.
54 FERRI, Enrico. Los Nuevos Horizontes del Derecho Penal y de Procedimiento Penal. 1892,
pp. 127-128.
!48
El tercer integrante ícono de la Escuela Positivista es GARÓFALO 55,
quien tomó una postura moderada positivista, sintetizando los
extremos en lo que caían LOMBROSO y FERRI. Entre sus mayores
preocupaciones se encontró la aplicación práctica de las teorías
criminológicas, especialmente en el ámbito judicial56 y legislativo.
El delito natural es, para este autor, es una categoría que permite
definir el crimen bajo un concepto aislado de influencias legales y
que posibilita la comprensión del conjunto de conductas que son per
se consideradas como delitos, sin recurrir al contexto de la sociedad
en la que se aplique el concepto para entenderlo57 58.
58 Hay quienes critican el análisis de delito natural de GARÓFALO. Así, vid. GARCÍA-PABLOS
DE MOLINA (Criminología, cit., p. 250): “[este concepto] decepciona, ya que difícilmente
puede elaborarse un catálogo absoluto y universal de crímenes, y menos aún en torno a
conceptos tan ambiguos como los de piedad y probidad, prescindiendo de los
mandatos penales”.
!49
considera que la pena no debe basarse en razones de retribución,
rehabilitación o prevención; sino en las características de cada
delincuente. Es a causa de su fundamento que ciertos delincuentes,
los que no se adaptan a la sociedad, deben ser sometidos a la pena
de muerte.
i. La Escuela de Lyon:
!50
médicos, de ahí se deriva que tuvo fuerte influencia del pensamiento
de PASTEUR y sus discípulos en las teorías antroposociales59.
59 Los representantes de la Escuela de Lyon solían hacer comparaciones entre los criminales
y los microbios.
!51
de la relación entre el sistema nervioso central del sujeto y el medio
social al que es expuesto 62. En la aparición de tales anomalías juega
un papel decisivo La pobreza, la miseria y las condiciones
socioeconómicas del delincuente.
!52
delincuente; mientras que las medidas de seguridad lo hacen en
base a la temibilidad hacia él, como sucede en los supuestos de
alienados mentales. Así, esta escuela prescinde del debate de si el ser
humano es libre o no para fundamentar la responsabilidad penal,
concluyendo que los imputables son quienes tienen la capacidad de
sentir la amenaza de la pena64.
b. La Escuela de Marburgo:
!53
La Escuela de Defensa Social fue un movimiento que buscó
resguardar la dignidad y personalidad del delincuente, para lo que
coordinó a la Criminología con el Derecho penal y el Derecho
Penitenciario66, desarrollando una escuela que sobresalía por sus
fundamentos humanitarios. Sus representantes son GRAMÁTICA y
ANCEL.
68 PRIETO, María del Pilar. Manual de Criminología. Buenos Aires: EDIAR, 2004, p. 50.
!54
criminales son influenciados por la propagación de las ideas de la
comunidad por vía de la imitación 70.
4. CRIMINOLOGÍA MODERNA
70 Ídem, p. 349.
!55
Las corrientes que se incluyen en la Criminología moderna son los
enfoques de la Opción Racional o Librealbedristas, y los Modelos
Positivistas y Neopostivistas. Forman parte de los primeros enfoques el
Neomodernismo, la Teoría de la Actividades Rutinarias y la Teoría del
Entorno Físico; mientras que los últimos incluyen a la Escuela de la
Biología Criminal, la Escuela de Psicología Criminal y la Escuela de
Sociología Criminal.
i. El Neomodernismo:
!56
estimado los beneficios (lucro, ventaja patrimonial, venganza, etc.) y
las dificultades (ser apresado, enjuiciado, darse a la fuga, perder a su
familia) que le pueden traer su comportamiento, decidiendo –tras
hacer el razonamiento necesario- que los beneficios superan los
costos.
72 Ídem., p. 280.
!57
De hecho, la sociedad postindustrial de mediados del SXX y actual no
hace sino mejorar los medios, recursos y oportunidades del
delincuente a través de los avances tecnológicos y el agitado estilo
de vida de los ciudadanos que se vuelven presa fácil para un
delincuente motivado.
Entre las principales críticas que se les hace a las teorías de las
actividades rutinarias está en que sus exponentes no delimitan el
concepto de delincuente motivado ni solucionan la problemática de
que sus teorías no pueden ser generalizadas, ya que parten del
análisis de casos en particular. Incluso hay quienes consideran que
estos enfoques no deben ser incluidos en las teorías de la
criminalidad, sino de la victimización 73.
!58
Es de esto que BRANTINGHAM y BRANTINGHAM añaden a los
postulados de NEWMAN que, si bien el entorno físico es el que indica
a un potencial delincuente cuáles son los ambientes donde es más
fácil delinquir y encontrar víctimas idóneas, lo cierto es que la
motivación es una variable que no debe faltar. Para estos autores la
fórmula explicativa del delito consistiría, entonces, en el factor
“ambiente propio” (oportunidad) más el factor “persona motivada
para delinquir”.
a. Antropometría y Antropología:
!59
que el criminal está influenciad por factores de tipo biopsicológico,
psicosocial o psicomoral76, siendo la principal tarea de la política
criminal el disuadir la concurrencia de esos factores.
b. Biotipología:
77 Basaron sus estudios en el análisis del blastodermo, la célula de la que provenimos todos
los seres humanos.
!60
temperamentos que les corresponden (viscerotónico, somatotónico y
cerebrotónico). El matrimonio GLUECK, por su parte, estudiaron 500
jóvenes entre criminales y no criminales, concluyendo que el tipo
mesomorfo es el que suele encontrarse en la mayoría de los
delincuentes.
c. Neurofisiología moderna:
d. Endocrinología:
!61
Así también, los aportes de DI TULLIO79, quien concluye de sus estudios
que los homicidas suelen sufrir de hipertiroidismo e
hipersuprarrenalismo; los delincuentes ocasionales e impulsivos, de
distiroidismo; los delincuentes violentos, hipertiroidismo; y los
estafadores y ladrones, de dispituitarismo.
e. Bioquímica:
f. Sociobiología:
80 Ibídem.
!62
Sin embargo, este autor considera que el aprendizaje no puede ser
controlado por medio de procesos sociales de interacción, sino que
se relaciona con procesos bioquímicos y celulares, donde el sistema
nervioso central y el cerebro son la clave para ello. De ahí se deriva su
relación y complementación con las tesis de JEFFERY.
g. Genética criminal:
!63
bivitelinos o dicigóticos82, los porcentajes de incidencias no eran muy
claros, por lo que la teoría no tuvo el impacto que su autor hubiera
deseado.
a. Teorías Psicoanalíticas:
b. Teorías psiquiátricas:
!64
sufren de alteraciones mentales recién el tratamiento que requieren,
es poco probable que cometan delito.
a. Enfoques multifactoriales:
84 ANITUA, Gabriel. Historias de los pensamientos criminológicos. Buenos Aires. DEL PUERTO,
2010, p. 321.
!65
b. Escuela de Chicago:
i) Teoría de DURKHEIM:
85 Ídem., p. 254.
!66
sociedades. Así, ya que el delito es un hecho social que se encuentra
presente desde tiempos remotos en las comunidades, habrá que
considerar que es también un fenómeno normal y hasta útil –aunque
no por eso deseable- pues permite la normal evolución del Derecho y
la moral88, ya que una sociedad sin crimen sería poco desarrollada,
primitiva e inmóvil.
88 DURKHEIM, Emilio. Las Reglas del Método Sociológico. Buenos Aires: PLÉYADE, 1977, p. 70.
92 Para DURKHEIM existen dos clases de anomia: la anomia aguda, provocada por un
cambio rápido y violento en la sociedad que conlleva a que las regulaciones existentes
sean marginadas y a que se pierda la posición social de los individuos, las clases sociales
y las relaciones de solidaridad entre los ellos; y la anomia crónica, a la que se lleva
cuando se acepta el cambio de la estructura social causado por el desarrollo de las
relaciones industriales y mercantiles, el surgimiento de nuevos valores que integran la
conciencia colectiva y la variación de la moralidad y solidaridad social.
!67
general, sino para mantener la cohesión social y la vitalidad de la
conciencia común.
!68
encuentra en constante pugna con los otros por imponer su propio
sistema de valores y modelos normativos.
i) Teoría de TURK:
Por su parte, THORSTEN SELLIN96 indica para que un sujeto pueda vivir
en armonía con la sociedad debe haber pasado por un proceso de
aculturación que lo haga interiorizar las normas de cultura hasta que
se vuelvan parte de su personalidad. La falta de aculturación o una
aculturación insuficiente provocarán que el sujeto viole la norma de
cultura y delinca, por lo que el grado de interiorización de las normas
de cultura determinará qué tratamiento ha de imponerse al
delincuente para que pueda resocializarse y alcanzar la aculturación.
e. Teorías Subculturales:
!69
que interiorizaban los valores de la clase media estadounidense y
luchaban por “el sueño americano” 97. Así, determinó que la cultura es
el conjunto de creencias, valores, costumbres, etc. que comparte
una sociedad y que puede incluir subculturas que, si bien se
identifican de manera global con la cultura social, discrepan en
algunos aspectos relevantes 98. Cuando una subcultura excusa
conductas que para la cultura general son delictivas o desviadas,
hablamos de una subcultura criminal.
98 Así, ORELLANA (Criminología Moderna y Contemporánea, cit., p. 76) indica que una
subcultura se caracteriza por ser un grupo que no comparte en totalidad con la sociedad
los puntos dominantes; se ubica dentro o al lado de los grupos mayoritarios, por lo que
puede recibir cierta influencia de éstos; y está formado por personas que comportan
identidad y coinciden en metas, valores y finalidades.
!70
modelos que tengan una subcultura criminal. La delincuencia juvenil
no guarda relación con la personalidad de estos adolescentes, sino
con el sentimiento de ser parte de una cultura diferencial y
rechazada, que debe buscar su superación y reconocimiento por
parte de los miembros más privilegiados de la sociedad.
Sin embargo, los trabajos de COHEN son criticados por no enfocar los
problemas de la criminalidad de adultos, debilidad que su propio
autor reconoce.
Estos autores nos indican que existen tres tipos de subculturas juveniles
dentro de una sociedad: la criminal, que se desarrolla en los espacios
geográficos donde existen organizaciones criminales adultas -
maestras en el aprendizaje delictivo de las pandillas de jóvenes-, por
lo que en esta subcultura las bandas criminales juveniles delinquen
99 Cfr. CLOWARD Richard y Lloyd OHLIN. Delinquency and opporunity: a theory of delinquent
gangs. Nueva York: FREE PRESS, 1960.
!71
con técnicas más sofisticadas y racionales que las otras dos
subculturas, además de estar motivados por el lucro; la conflictiva, en
la que predomina la diferenciación entre los valores de la cultura
dominante y la subcultura, se da en barrios pobres e inestables para
los jóvenes pero organizado para los adultos, y se caracteriza por los
delitos violentos para conquistar territorios; y la del retraimiento,
conformada por los jóvenes que no han podido alcanzar sus
propósitos sociales ni por medios legales ni por medios ilegales, por lo
que cometen delitos menores, micro-comercialización de drogas y
prostitución, pues por lo general se refugian en el alcohol y las drogas.
100 Cfr. HENSLIN, James. Down to Earth Sociology, Introductory Readings. New York: FREE
PRESS, 2007, pp. 285 y ss.
!72
comportamiento natural de autojustificación se desarrolla por el gran
sentimiento de culpa que deriva del delito y que requiere que el
delincuente, especialmente el juvenil, deba legitimar su conducta.
Por tanto, para esta teoría la solución más próxima para combatir la
delincuencia, sobre todo la juvenil, será fortalecer los lazos que
existan entre los jóvenes y su familia o la escuela 101, por lo que
101 Así, por ejemplo, participar de las actividades familiar y desarrollar las aptitudes
necesarias para la normal convivencia son importantes en la lucha contra la criminalidad
juvenil; lo que permitirá a su vez que la socialización en la escuela sea próspera al permitir
las relaciones fructíferas con los compañeros de clase y evitan que el joven se encuentre
cómodo con pandillas o bandas juveniles. (Vid. HAWKINS, David y WEIS Joseph. “El
modelo del desarrollo social: un enfoque integrado a la prevención de la delincuencia”
en Comunicación, Lenguaje y Educación, 1995, N° 27, pp. 115-133)
!73
apuesta por encontrar la solución en el control social informal más
cercano a los primeros años del futuro delincuente.
104 Existen dos tipos de sociedades culturalmente diversas: las que provienen de procesos de
colonización y posterior independencia, como suelen ser las sociedades
latinoamericanas; y las que son producto de procesos inmigratorios, entre las que se
encuentren las sociedades europeas y norteamericanas.
!74
En las conocidas como Teorías del Proceso Social se incluyen los
aportes de SUTHERLAND –Teoría de la Asociación Diferencial-, a las
Teorías del Control Social y las teorías del Interaccionismo Simbólico.
106 Ibídem.
!75
la influencia que tienen diversas instituciones en el sujeto, como las
creencias en las pautas morales que la sociedad inculca, la
implicación y constante relación del individuo con actividades lícitas
(deportes, estudio, trabajo, pasar tiempo con amigos, etc.), la
presencia de oportunidades legítimas para alcanzar el éxito y los
fuertes vínculos con los miembros de la sociedad que evitan
defraudar. Así, mientras más fuertes sean los vínculos del sujeto con la
sociedad, menos posibilidad existe de que el sujeto se convierta en
un delincuente.
108 AROCA MONTOLÍO, Concepción y otros. “La teoría del aprendizaje social como
modelo explicativo de la violencia filio-parental” en Revista Complutense de Educación,
Vol. 23, N° 2, 2012, pp. 487-511.
!76
niño que ha sido descuidado por sus progenitores, puesto que
interioriza que mediante actos aversivos (pegar, gritar, patalear)
podrá recibir atención u otros resultados esperados. Según
PATTERSON, las condiciones de vida deplorables, la separación de los
padres o la ausencia de alguno de ellos o ambos, agravan la
situación del niño que se muestra inclinado hacia la conducta
desviada.
!77
En un intento de unir las teorías del control social y las teorías de la
asociación diferencial, desde la perspectiva de la teoría psicológica
del aprendizaje social de BANDURA, GLASER indica que todo
delincuente, en su decisión de si ha de delinquir o no, intentará
anticipar las consecuencias que tendrá su conducta 109 como parte
de su motivación o desmotivación.
109 VICENTE CUENCA, Miguel Ángel. Sociología de la desviación: una aproximación a sus
fundamentos. Alicante: EDITORIAL CLUB UNIVERSITARIO, 2011, p. 176.
110 Ibídem.
!78
conductas112 y que les indica que quienes las cometen deben ser
diferenciados de los demás. Así, quien comete una conducta
desviada secundaria 113 es catalogado como delincuente e interioriza
su nuevo rol en la sociedad, optando por organizarse con los otros
que han sido etiquetados como él por los grupos dominantes que se
encargan de realizar la diferenciación de las conductas. Por ello, el
grado de desviación de una conducta va a depender de la
asignación que le dé la sociedad en el contexto histórico en el que se
encuentra, de lo cual se desprende que existan conductas que son
transgresoras pero no percibidas como desviadas porque gozan de
cierto grado de tolerancia social, mientras que encontramos otras
que tanto infractoras como consideradas desviadas 114.
112 BECKER, Howard. Outsiders: studies in the Sociology Of deviance. New York: FREE
PRESS, 1963, pp. 9 y 10.
113 Para este autor, existen dos tipos de desviación: la primaria, que no hace sentir
desviado a quien la comete ni tampoco es catalogado por los demás como tal; y la
secundaria, que tiene el efecto contrario. Cuando nos referimos, pues, a las personas que
son etiquetadas por la sociedad, hacemos alusión a quienes han cometido conductas
desviadas secundarias.
114 Un ejemplo oportuno para explicar la Teoría del Etiquetamiento está en que antes la
homosexualidad era considerada una enfermedad, una total y completa desviación,
pero hoy en día cada vez son más los movimientos por el respeto de los derechos LGBT y
menos quienes catalogan como conducta desviada a esta opción sexual.
!79
conductas y qué es lo determinante para que un comportamiento
desviado sea tolerado o no en cada contexto histórico y
socioeconómico en el que se encuentre.
Fue propuesta por FISHBEIN y AZJEN. Pese a que en sus inicios solo tuvo
como finalidad explicar el consumo de drogas, hoy en día se
extiende a cualquier tipo de criminalidad e incluso a cualquier tipo
de comportamientos. Su aplicación es probabilística, como ocurre
con la Teoría del Triple Riesgo Delictivo, ya que no busca causas
exactas que expliquen el comportamiento criminal, sino que
desarrolla una escala de probabilidad.
115 La actitud está integrada por la probabilidad subjetiva de que a la conducta que se
analiza le siga una determinada consecuencia, y la accesibilidad subjetiva de dicha
consecuencia.
116 La norma subjetiva se basa en las creencias normativas que tenga el sujeto respecto
a si la conducta que va a llevar a cabo es aceptada o no por quienes más importancia
tienen para él, y la motivación para acomodarse a esas opiniones o, en otras palabras, la
disposición que el individuo tiene para conducirse según las apreciaciones de los demás.
!80
conducta. Así, los autores indican que todo sujeto, antes de realizar
cualquier comportamiento, realiza un examen interno acerca de si su
conducta es positiva para sí mismos y para los grupos que considera
socialmente relevantes, aunque existe la probabilidad de que la
norma subjetiva prevalezca sobre la actitud por la presión que se
ejerce sobre el sujeto, de manera que éste pueda ejecutar u omitir
ciertos comportamientos en base a la apreciación que la
colectividad tenga respecto a dichas conductas 117.
5. CRIMINOLOGÍA CRÍTICA
117 REYES RODRÍGUEZ, Luis. “La teoría de la acción razonada: implicaciones para el
estudio de las actitudes” en Universidad Pedagógica de Durango: N° 7, 2007, p. 70.
118 Otros usos de la Teoría de la Acción Razonada pueden encontrarse en los siguientes
estudios: FISHBEIN, M., “Factores que influyen en la intención de estudiantes en decir a sus
parejas que utilicen condón”, en Revista de Psicología Social y Personalidad, 1990; y,
FISHBEIN, M. y otros, “Predicción del uso de cinturones de seguridad en estudiantes
venezolanos: una aplicación de la teoría de la acción razonada en Latinoamérica” en
Revista de Psicología Social y Personalidad, N° 4, 1980.
!81
femenina, pasando por los grupos homosexuales que exigían el
derecho por la igualdad de su condición, hasta los grupos pacifistas
que protestaban contra la Guerra de Vietnam y el intervencionismo
en latinoamérica; lo que se buscaba era reivindicar los derechos de
las minorías marginales. Esto incluyó también la búsqueda por un
cambio de paradigma con respecto al tratamiento del delincuente y
su maltratada condición en el sistema judicial 119 y penitenciario; lo
que se manifestó a nivel criminológico con la crítica a las corrientes
de la Criminología tradicional que desde sus cimientos legitimaba el
orden social que ahora estaba en tela de juicio.
119 Respecto a este punto, se criticaba arduamente que Estados Unidos empleara un
sistema indeterminado de aplicación de penas, por un lado, y la pena de muerte, por
otro; que no respetaba la proporcionalidad crimen-castigo ni permitía la real
resocialización.
121 BARATTA, Alessandro. Criminología y Sistema Penal. Buenos Aires: EDITORIAL IBdeF,
2006, p. 98.
!82
histórico y socioeconómico en el que se produce. En virtud a ello es
que rechaza a cualquier teoría que no parta de este marco y
proponen la aplicación de un método con carácter socio-político 122
que resalte dicho contexto.
124 Ídem.
125 Sobre esto BARATTA (Criminología y Sistema Penal, cit., p. 151) indica que el Derecho
penal mínimo es el único Derecho penal legitimable de acuerdo a los principios
constitucionales del Estado Social de Derecho.
!83
penal o bien su abolición. A continuación explicaremos ambos
modelos:
a) El Reduccionismo:
i. El idealismo de Izquierda:
!84
Critica que la tasa de criminalidad sea un referente adecuado para
considerar qué tan grave es la situación delictiva de una sociedad,
pues la realidad suele ser mucho menor que la percepción de la
población, aunque es conveniente para los políticos, los medios de
comunicación y la policía hacer creer que el índice de criminalidad
es alto127, para justificar su función en la sociedad y resaltar la
importancia de su rol.
Para esta corriente la prevención del delito debe hacerse por medio
de un análisis costo-beneficio de la lucha contra la criminalidad, la
creación de entornos que disminuyan las oportunidades delictivas (a
través del incremento de agentes policiales) y la participación activa
de los pobladores por medio de rondas, patrullas vecinales, etc; de
tal forma que estos esfuerzos se encuentran orientados a reducir la
oportunidad de la comisión de delito a través de la fortificación del
control social informal, logrando así que el sentimiento de inseguridad
ciudadana sea erradicado paulatinamente,
!85
sectores obreros y en las minorías étnicas, que son donde –según esta
corriente- hay una concentración de la delincuencia; lo que se
evidencia en el hecho de que la mayoría de las poblaciones
carcelarias es de raza negra o inmigrante.
v. El Minimalismo:
Así, el Derecho penal debe intervenir solo en los supuestos en los que
sea estrictamente necesario, fomentando incluso en ellos el respeto
por los Derechos Humanos. En los demás casos, BARATTA indica que
debe utilizarse medios alternativos de justicia 129. De ahí se desprende
que este autor tenía confianza en la posibilidad de implementar un
nuevo Estado donde el eje fueran los Derechos Humanos y se
incluyera a las minorías que suelen ser dejadas de lado.
129 BARATTA es altamente criticado por AEBI (Temas de Criminología, cit., pp. 287 y ss),
quien incluso juzga que la teoría que presenta del Minimalismo no es –si quiera- capaz de
ser considerada como científica. Entre sus principales refutaciones se encuentra que
BARATTA parte de una concepción muy restrictiva de Criminología (considera que sólo el
delincuente es su objeto de estudio y no así el delito), adapta los conceptos a su
conveniencia para adaptarlos a su definición de delincuencia (para BARATTA los delitos
de cuello blanco sólo serían cometidos por las clases dominantes), parte del supuesto de
que la delincuencia es normal, confundiendo –como DURKHEIM- normalidad con
frecuencia, y hasta olvida la relevancia de la víctima en el fenómeno criminal.
!86
El Minimalismo de FERRAJOLI, por su parte, considera que el
fundamento para la reducción del Derecho penal a su mínima
expresión se encuentra en asegurar el orden social que es violentado
por la conducta delictiva y evitar, así, la venganza privada por parte
de los grupos dominantes130. Para ello desarrolla una serie de axiomas
que hasta el día de hoy nutren la garantía del debido proceso131; por
lo que este autor considera que su modelo de Derecho penal
garantista es una alternativa idónea y progresista frente a las utopías
abolicionistas que sugieren la eliminación del Derecho penal que, a
los ojos de FERRAJOLI, implicarían una regresión en la sociedad.
b) El Abolicionismo:
130 TIEGHI, Osvaldo. Tratado de Criminología. 3ed. Buenos Aires: EDITORIAL UNIVERSIDAD,
2004, p. 335.
131 Así, los axiomas de FERRAJOLI (Derecho y Razón, 4ed. Madrid: TROTTA, 2000, pp. 411 y
412) son los siguientes: nulla poena sine crimine (no existe pena sin crimen), nullum crimen
sine lege (no hay crimen sin ley), nulla lex sine necessitate (principio de mínima
intervención del derecho penal), nulla necessitas sine iniuria (el delito se crea cuando
ofende o lesiona bienes jurídicos fundamentales), nulla iniuria sine actione (solo podrá ser
objeto de proceso penal la voluntaria acción humana que dañe o ponga en peligro
bienes jurídicos), nulla actio sine culpa (principio de culpabilidad, no hay acción penal sin
culpabilidad), nulla culpa sine iudicio (sólo el juez está en condiciones de determinar la
culpabilidad penal), nullum iudicium sine accusatione (el proceso únicamente podrá ser
abierto por acusación legítima por sujeto competente), nulla accusatio sine probatione
(quien acusa tiene la carga de la prueba), nulla probatio sine defensione (debe
resguardarse el derecho de defensa y el principio de contradicción).
132 ELBERT, Carlos. Manual Básico de Criminología. Colombia: TEMIS, 2005, p. 118.
!87
de la sociedad. Para ellos, las penas no son capaces de resocializar,
porque aniquila al sujeto al que son impuestas, y además son
ilegítimas, porque no implican el reconocimiento de la autoridad que
las imponen ni la colaboración del condenado133.
136 Para ORELLANA WIARCO (Criminología Moderna y Contemporánea, cit., p. 173) los
desarrollos de HULSMAN y BIANCHI pueden categorizarse en lo que denomina como
abolicionismo penal radical, mientras que los de CHRISTIE harán lo propio bajo el nombre
de abolicionismo de justicia participativa.
!88
medidas que reemplacen el castigo penal como el sentimiento de
vergüenza social.
138 COHEN S. citado por LARRAURI Elena. La herencia de la Criminología crítica. 2 ed.
Madrid: SIGLO XXI, 1992, p. 193.
139 LARRAURI Elena. La herencia de la Criminología crítica. 2 ed. Madrid: SIGLO XXI, 1992,
p. 194.
!89
en el sistema moral y justificó la limitación de los derechos individuales
a fin de combatirla.
El profesor VAN SWAANINGEN140 indica que son dos los aspectos que
determinaron la crisis de la Criminología Crítica: por un lado, esta
corriente sufrió una crisis analítica, pues fue incapaz de desarrollar un
paradigma coherente y estructurado -optando por una postura de
indignación- y de dar tratamiento a los problemas de criminalidad
menor que eran altamente preocupantes en los centros de las
grandes ciudades; por otro, sufrió una crisis ideológica con los duros
golpes que sufrió el socialismo durante el siglo anterior y la
consolidación del capitalismo tras la caída del Muro de Berlín.
6. CRIMINOLOGÍA CONTEMPORÁNEA
140 VAN SWAANINGEN René. Perspectivas europeas para una Criminología Crítica.
Buenos Aires: IBDEF EDITORIAL, 2011, pp. 8-12.
!90
amplia cantidad de teorías contemporáneas acerca de la
criminalidad, de las que haremos referencia las más importantes:
141 Para un análisis más profundo del experimento de ZIMBARDO, vid. WILSON James y
George KELLING, “Broken windows” en Atlantic Monthly, marzo, 1982, pp. 29-38.
142 KELLING, George y Catherine COLES. No más ventanas rotas. México: INSTITUTO
CULTURAL LUDWING VON MISES, 2001.
!91
obligaciones cívicas143 mediante comportamientos que transmitan
que a nadie le interesa revertir el daño o evitarlo. Los autores añaden
que si se rompe una ventana de una casa y no se repara a la
brevedad, pronto las demás ventanas estarán rotas también; si no se
limpia una pinta con aerosol en las paredes de una calle, el resto de
ellas también serán afectadas. Caso contrario ocurrirá en los lugares
donde se mantiene el orden y la limpieza, lo que nos brinda la idea
de que los comportamientos incivilizados son contagiosos.
143 Ibídem.
!92
c) Teoría de la Taxonomía de MOFFITT:
!93
Además, aunque la autora no niega la posibilidad de que suceda, es
altamente difícil que las personas que delinquen durante el curso de
su vida puedan cambiar por medio de los programas de
resocialización; lo que contrasta en el caso de quienes solo lo hacen
durante su adolescencia, que suelen dejar su vida delictuosa por sí
mismos al notar que sus actos pueden ser perjudiciales para
mantener el status que han obtenido por medio del delito.
!94
Este modelo se basa en el reforzamiento personal, comunitario e
interpersonal146 para explicar el fenómeno delictivo. La decisión de
delinquir se encuentra determinada por factores estructurales y
culturales, como la familia y el barrio de origen; factores familiares,
como la relación con los padres; factores personales, entre los que se
encuentran los problemas de conducta, el temperamento, la baja
autoestima, etc.; la asociación que se tenga con otros
delincuentes147; las actitudes, valores, creencias y sentimientos que
resguarden el comportamiento delictivo como favorable; la
inmediata situación en la que se encuentra el sujeto; y sus
antecedentes delictivos.
146 LÓPEZ LATORRE, María Jesús. Psicología de la Delincuencia. Salamanca: CISE, 2006, p.
152.
147 Así, esta teoría reconoce que si bien existen múltiples caminos para llegar a la
delincuencia, las amistades y el círculo social al que el sujeto pertenece suelen ser los que
más influyan en tendencia hacia el comportamiento criminal o no criminal.
148 En este sentido, vid. ANDREWS D.A. y J. BONTA. The Psychology of Crimimal Conduct. 3ed.
Cicinnati: ANDERSON, 2003.
!95
f) Modelo Integrador de FARRIGTON:
149 MC CORD, Joan. Facts, frameworks and forecats. Advances in criminological theory. Vol
3. New Jersey: TRANSACTION, 1992.
!96
criminalidad 150, lo que no necesariamente implica que se vayan a
cometer delitos por estos sujetos, pues ello depende de procesos
cognitivos más complejos y de la oportunidad. Se tienen así:
150 FARRIGTON, David. “The ointegrated cognitive antisocial potential (ICAP) theory”, en
Advances in criminological theory – integrated developmental and life-course theories of
offending, N° 14, 2005, Londres: TRANSACTION PUBLISHERS, pp. 73-92.
!97
!0
CRIMINOLOGÍA Edad Antigua (Mesopotamia, Grecia, Roma), Edad Media (SAN AGUSTÍN, SANTO TOMÁS), Eda
PRECIENTÍFICA HOWARD, TOMÁS MORO), Escuela Clásica.
CRIMINOLOGÍA
CIENTÍFICA
Escuela Intermedias
CRIMINOLOGÍA Enfoques de la
MODERNA Opción Racional o
Librealbedristas
Modelos Positivistas
y Neopositivistas
Reduccionismo
CRIMINOLOGÍA
CRÍTICA
Abolicionismo
Crisis de la
!1
7. CRIMINOLOGÍA PERUANA
!0
La Sociología criminal encuentra su representante peruano en
VICTOR MODESTO, que contribuyó brillantemente a la comunidad
criminológica con estudios realizados del delito en grupos sociales
marginados, como los indígenas o las meretrices; a quienes defendió
señalando que las características negativas que se les atribuían
formaban parte de un sistema racista y opresor económico, político y
social.
!1
publicaciones relacionadas con la Criminología y el Derecho Penal153,
no solo desde una perspectiva teórica, sino –y sobre todo- desde una
visión práctica.
153 Así, “Criminalidad Organizada. Análisis de la Nueva Ley contra el Crimen Organizado
(Ley N° 30077)” (agosto, 2014), “Comentarios a la Ley N° 30076 (Ley Contra la Inseguridad
Ciudadana” que modificó el Código Penal” (enero, 2014), “Comentarios Urgentes a la
Ley N° 30076 que modifica el Código Procesal Penal de 2004, el Código de Ejecución
Penal y el Código de los Niños y Adolescentes” (octubre, 2013), “Criminalidad y
Delincuencia Organizada en el Nuevo Proceso Penal. Un aporte desde la Criminología y
la Política Criminal” (marzo, 2012), “La regulación del agente encubierto como institución
contra la Criminalidad Organizada” (enero, 2011); “Seguridad ciudadana e insuficiencia
del control de la delincuencia. Especial mención al problema de la corrupción en los
aparatos policiales” (diciembre, 2010); “Maldita Criminalidad: razones y sinrazones para
entender la criminalidad y su avance en la sociedad peruana” (julio, 2010); “Crónica de
una derrota anunciada. De la caída del fujimorismo a la condena en cárcel de un
moderno dictador” (mayo, 2009); entre otros.
!2
CAPÍTULO III
!3
1. INTRODUCCIÓN
!4
autocontrol ameritan ser propuestos como parte integrante de los
estudios de la Criminología. Abarcaremos esta temática, pues, más
adelante.
b) Concepto de delito:
!5
No existe un consenso respecto a la definición de delito, puesto que
ello depende de la ciencia desde la cual lo estudiemos. Con ello
queremos decir que no sólo el Derecho Penal y la Criminología se
preocupan por el estudio del crimen. Ramas tales como la Filosofía, la
Sociología, la Ética, etc., lo abordan y llenan su propia
conceptualización de éste.
!6
Por tanto, delito será aquella conducta antijurídica y culpable que
violenta la norma penal, dañando o poniendo en peligro bienes
jurídicos protegidos por el Derecho penal.
157 Bien indican los profesores NÚÑEZ PAZ y ALONSO PÉREZ que “el penalista califica, el
criminólogo analiza. El penalista actúa desde la norma legal, el criminólogo desde la
realidad” (Nociones de Criminología, cit., p. 115). RODRÍGUEZ MANZANERA (Criminología,
cit., p. 22) explica en el mismo sentido que “los defensores de la definición jurídica del
objeto olvidan también que la realidad es cambiante en tanto que la ley es estática, y
por lo general está atrasada, lo que obligaría al criminólogo a vivir con 20, 30 o 40 años
de atraso, según el código que le toque sufrir”.
158 SERRANO MAÍLLO (Introducción a la Criminología, cit, p. 68) indica que el criterio
legal para la conceptualización del delito como objeto de la Criminología es insuficiente
porque va en contra de la autonomía de cada ciencia el acepar que su objeto sea
definido por otra, además de que el concepto de delito desde la perspectiva del
Derecho penal no toma en cuenta aspectos criminológicos importantes como las causas
generales de la comisión de los hechos delictivos. Por otro lado, critica que las leyes
penales no pueden ser la base de la definición de delito puesto que se encuentran
sometidas a la interpretación de los jueces.
!7
Decimos que el delito bajo un enfoque criminológico no puede
eximirse de ser considerado como un problema comunitario y social
debido a que tanto el delincuente como la víctima son parte de la
sociedad, y es en razón de ello que las soluciones referentes a la
problemática criminal deben ser halladas en la comunidad misma159.
!8
Derecho Penal general), de un delito no lo es a modo de relación
directa; lo que quiere decir que un delito o crimen no es reprochable
por el hecho de ser un delito o crimen sino que es crimen o delito en
razón a que –en primer orden- es reprochable socialmente. Este
enunciado último, que guarda estricta relación con la categoría de
la “culpabilidad” en Derecho Penal, tiene un origen de estricto orden
sociológico que se ubica en EMILIE DURKHEIM161.
d) Clasificación criminológica de los delitos:
161 Discípulo de COMTE –uno de los iniciadores del positivismo -el otro fue Henri de
SAINT SIMON quien fuera también precursor de la “fisiología social” o “física
social” y rebautizada por COMTE como “sociología”-, y padre de la sociología.
163 NÚÑEZ PAZ, Miguel y Francisco ALONSO PEREZ. Óp. Cit., p. 122.
!9
entre la víctima y el criminal. Se caracterizan por hacer peligrar o
dañar el orden social y económico de la sociedad. En los segundos
encontramos la comisión de estafas, empero éstas serán de menor
grado que las propias de los delitos socioeconómicos, a punto tal que
su cotidiana comisión dificulta su demostración.
!10
Así, proponemos considerar delito de terrorismo, en los
Delitos
delitos de violentos. conciencia
como parte Delitos Delitos de de la
delincuencia de concienci p o r
tráfico. a
convicción.
CLASIFICACIÓN
DE LOS DELITOS Delitos
Delitos patrimonial
sexuales. es
Delitos de Delitos
los socio-
funcionari económico
s/
os criminalida
3. EL DELINCUENTE
a) Concepto:
!11
concepciones desde la Escuela criminológica de la que se parta
para su análisis.
Solo para citar algunos ejemplos: para los positivistas el criminal era un
ser anómalo con impulsos que no podía controlar, muy distinto de las
personas que conviven normalmente en sociedad. Los criminólogos
de la Escuela Libre-albedrista, en cambio, lo percibieron como un ser
que decide hacer el mal en ejercicio erróneo de su libertad. Quienes
formaron parte de la Escuela Sociológica indicaron, a diferencia de
las dos Escuelas anteriores, que una persona es criminal porque así ha
sido etiquetada y que la delincuencia es un subproducto del control
social. Los marxistas, alejados de todas estas concepciones,
consideraron que la persona que comete delito no es más que una
víctima de las estructuras económicas de la sociedad, que lo obligan
a delinquir para poder subsistir.
!12
queremos decir que todo delincuente será un infractor, pero no todo
infractor será un delincuente.
i. La socialización:
ii. La economía:
167 NÚÑEZ PAZ, Miguel y Francisco ALONSO PÉREZ. Óp. Cit., pp. 131-133.
!13
enfermedad son causales que incitan a la criminalidad de las
personas más necesitadas.
iv. La tecnología:
i. Teorías biológicas:
168 Otra manifestación de la importancia del entorno físico se encentra en que mientras
más oportunidades de delinquir existan para los sujetos, mayor será la tasa de
criminalidad. Lo dicho es desarrollado con mayor profundidad por el Modelo del Triple
Riesgo Delictivo (TRD) de REDONDO ILLESCAS, quien ubica como una fuente de riesgo de
comisión de delitos a la oportunidad delictiva. Para ello, parte de la definición de
BRANTINGHAM que explica que la oportunidad delictiva es la “situación u oportunidad en
cuanto a la facilidad o viabilidad para acceder (sin especiales obstáculos) a objetivos o
víctimas vulnerables para la comisión de categorías específicas de delitos o de delitos en
general” (“Individuos, sociedades y oportunidades en la explicación y prevención del
delito: modelo del Triple Riesgo Delictivo (TRD)” en Revista española de investigación
criminológica. Artículo siete, N° 6, España. 2008, p. 34.)
!14
Las teorías biológicas son de las primeras en explicar el fenómeno
delictivo. Para ellas el origen de la criminalidad se encontrará en el
delincuente como ser defectuoso para la sociedad desde su
nacimiento; lo que quiere decir que el criminal lo es porque se
encuentra determinado así en su sistema, sin que medien otros
factores determinantes para la comisión de hechos delictivos. De ahí
puede derivarse que las cárceles hayan sido en sus inicios centros de
aislamiento y no de rehabilitación.
170 El tipo corporal Leptosómico se caracteriza por ser de baja estatura, tórax largo,
pecho fundido, cabeza pequeña, pies y manos cortas, y cabello recio. Tienden a los
delitos de estafa, hurto y robo.
El tipo corporal atlético tienden a los delitos violentos y se caracterizan por ser sujetos de
mediana estatura, tórax ancho, musculatura y estructura ósea fuertes, cabello robusto,
rostro uniforme, manos y pies grandes, y cabello fuerte.
El tipo pícnico es el que menos inclinación tiene al delito. Son sujetos de tórax pequeño,
hundido y abovedado; formas redondeadas y femeninas; cuello corto; cabeza grande y
redonda; rostro ancho; manos y pies cortos; y cabello fino.
Los displásicos son los que suelen cometer delitos sexuales y, según LOMBROSO, tienen un
cuerpo desproporcionado y un crecimiento anormal.
!15
Tesis del delincuente nato: LOMBROSO
•Estudió sistemáticamente las características físicas de los delincuentes.
•Utilizó el método experimental (así implantó el método de la Escuela
Positiva).
•El criminal nato es un ser inferior.
•Clasificó a los delincuentes en violentos, locos morales, epilépticos,
ocasionales y pasionales.
!16
“socialización deficiente” son las teorías de los hogares deshechos, los
contactos diferenciales, las subculturas y la neutralización.
Teoría de la subcultura
•Propone que la criminalidad es resulado de un choque de culturas: por una
parte está la cultura principal o mayoritaria de la sociedad; por otra, las
subculturas que, si bien forman parte de la misma socidad, no abarcan a la
totalidad de indidivudos.
Teoría de la neurtralización
•Es similar a la teoría de la subcultura, pero da mayor relevancia a la
reacción habitual del delincuente desccubierto en su acto delictivo y a la
presión social de la que los criminales no logran liberarse.
!17
mayor o menor medida para todos por igual”171. De ello entendemos
que alcanzar las metas personales es deseado por todos en la misma
medida, encontrándose en factor problema en que la sociedad
reparte desigualmente los medios para alcanzarlas. Es decir, mientras
que la estructura cultural y la estructura social no estén disponibles
armónicamente para los miembros de la sociedad, existirá el delito.
!18
delito. Es justamente eso lo que los diferencia de los delincuentes
reincidentes.
•S o n q u i e n e s h a n •S u j e t o s que •E s t a c a t e g o r í a
sido condenados por delinquen de forma corresponde a los
primera vez. temporal o a delincuentes ya
•P r e d o m i n a n e n intervalos. condenados con
delitos imprudentes, •Se distingue de los anterioridad en un
en los delitos de delincuentes periodo no mayor a
funcionarios públicos residentes en que cinco años.
y en los delitos éstos comenten los •Criminológicamente
simples contra la crímenes en forma se ha determinado
propiedad. más recurrente y que suelen ser
•Criminológicamente cercana una de personas antisociales
es una clasificación otra. con una marcada
con poco valor, pues •C o m p r e n d e predisposición al
la primera infracción también lo referente crimen.
que cometa un al delito casual
sujeto no siempre propio de las
será de c o n d u c t a s
conocimiento de los imprudentes que son
órganos de penadas por el
persecución penal. Derecho penal.
4. LA VÍCTIMA
!19
era central. Sin embargo, en la Edad Media los ojos se desplazan
hacia el delincuente y la víctima es relegada a un rol meramente
testifical. Con la Ilustración el objeto de estudio criminológico se
centra en el delito; no siendo hasta finalizada la Segunda Guerra
Mundial que la Criminología se aleja de la tendencia a minimizar la
importancia de la víctima y forma parte del centro de investigación
de la Criminología, una vez recordado que la víctima es un ser
humano pensante que merece más que la compasión de quienes se
supone que debe recibir respeto y auxilio.
a) Concepto:
173 El maestro JOSÉ LUIS SANGRADOR (“La víctimología y el sistema jurídico penal”, en
Psicología Social y Sistema Penal. JIMÉNEZ BURILLO, F. Madrid: ALIANZA UNIVERSIDAD
TEXTOS, 1986, pp. 88 y ss) nos ilustra en que las expectativas de la víctima incluyen
aspectos más complejos, como la realización de prestaciones personales a favor de sí
mismo como afectado por el delito y la realización de reparaciones simbólicas en
beneficio de la comunidad.
!20
La progresiva despersonalización, anonimato y colectivización de la
víctima ocasionó, pues, que el partir del binomio delincuente-víctima
se convierta en innecesario; lo que fue reforzado por su reivindicación
como sujeto activo que interactúa en el fenómeno criminal, y ya no
como mero sujeto pasivo o hasta. Con ello, entonces, se procedió a
considerar también como víctimas a las personas morales.
174 MARCHIORI, Hilda. “Victimología y Derechos Humanos: víctimas del abuso de poder”,
en Victimología, MARCHIORI, Hilda (coord.) Córdoba: UNIVERSITARIA INTERAL, 2004, p. 447.
175 NÚÑEZ PAZ, Miguel y Francisco ALONSO PÉREZ, Óp., Cit., p. 168.
!21
utilización del proceso acusatorio puro y por la posición central de la
víctima en el fenómeno criminal.
177 Vid. HASSEMER, W. (Fundamento del Derecho penal. Barcelona: BOSCH, 1984, p. 89)
señala que el sistema legal nace con el propósito deliberado de neutralizar a la víctima,
distanciando a los dos protagonistas enfrentados en el conflicto criminal, precisamente
como garantía de una aplicación serena, objetiva e institucionalizada de las leyes al
caso concreto.
!22
mediante el acceso a la justicia, la participación en servicios de
asistencia para recuperarse, y la compensación monetaria 180.
c) La Victimología:
180 Sin embargo, se debe rechazar toda práctica que implique satisfacer el deseo de las
víctimas de hacerse con los derechos del delincuente en un esfuerzo de instrumentalizar
el sistema penal en su venganza.
!23
que la Victimología solo es una rama de la Criminología, por el
momento, con tendencia a consolidarse como autónoma182 183.
d) La Victimodogmática:
182 Vid. NEUMAN, Elías. Victimología. 3ed. Buenos Aires EDITORIAL UNIVERSIDAD, 2001, pp.
39 y ss.
183 Se resalta que la Victimología enriquece los estudios de la Criminología, en tanto por
mucho tiempo se relegó la figura de la víctima, siendo fundamental la presencia de
aquélla para que dicho cambio se desarrolle.
!24
El maestro ROXIN185 sintetiza de manera acertada las objeciones que
pueden presentarse en contra de la Victimodogmática:
e) El proceso de victimización:
!25
concreta, cuestiones conceptualmente diferenciables, pero
interdependientes.
!26
infractor tanto para él mismo, para terceros o para la propia
sociedad.
Victimización
terciaria
•Ponderación de los
Victimización costes de la
secundaria penalización del
•E s l a s e g u n d a infractor.
Victimización experiencia negativa
Primaria de la víctima,
producida por el
•Producida por el propio sistema.
mismo delito. Es la
recepción directa o
indirecta de los
efectos del delito.
f) Tipologías de la Víctima:
191 NUÑEZ PAZ, Miguel y Francisco ALONSO PÉREZ. Óp. Cit., p. 170.
!27
iii. Víctima voluntaria: es tan culpable como el agresor ya que
colabora con el victimario.
ii. Las víctimas aisladas son integrados por los extranjeros, los
ancianos, los inmigrantes, etc.
!28
aventuras y peligro o ejercer su libertad), su agresividad; o
hasta su poco valor193 .
vi. Las víctimas indefensas son las personas que no piden auxilio a
la justicia porque para ellas implicaría un mal mayor; las
víctimas falsas son quienes simulan haber sido víctimas de
delitos; mientras que para VON HENTING las víctimas inmunes
son inmunes como tendencia, que incluye a los sacerdotes, los
jueces y fiscales, la policía, etc.
193 Para VON HENTING existe un grupo de personas que son víctimas inútiles por tratarse
de seres que, pese a que nadie lo ha dicho en voz alta, tienen poca valía como los
ancianos, los infieles, los pesados, los malos y los pecadores.
194 Este autor considera que ciertas cualidades como la codicia, la depresión, etc.;
pueden ser transmisibles en los genes.
!29
NEUMAN e incluyen a las víctimas del sistema penal, de la sociedad
en sí misma (enfermos, minusválidos, niños abandonados) o de la
nación (de rebelión o sedición).
!30
iv. Las víctimas colectivas son -a diferencia de las demás-
personas jurídicas, colectivos, comunidades y hasta incluso el
Estado, que se ubican en rol de víctima de hechos delictivos.
Características de las víctimas colectivas son la
despersonalización, colectivización y anonimato, de manera
que “la difícil o imposible identificación de la víctima
determinan la puesta en marcha de complejos mecanismos
de neutralización o justificación”197 .
vi. Por su parte, las víctimas simbólicas son las afectadas por el
ataque efectuado a un determinado sistema de valores,
partido político, ideología, secta religiosa, etc.200, de manera
que se les considera como un elemento representativo de
dichos sistemas por parte de los agresores.
!31
vii. Finalmente, aquellos sujetos que formulan denuncias pese a
que no han sido realmente victimizados, integran el grupo de
las falsas víctimas. En ellas se ubican tanto las víctimas
simuladoras, que buscan generar un error judicial de manera
consciente; como las víctimas imaginarias, las que por razones
psicopatológicas o inmadurez psíquica creen haber sido
víctimas de agresión criminal.
!32
Quienes no
tienen actitudes
victimales
Con actitudes
Víctimas individuales
v i c t i m a l e s
culposas
Con actitudes
victimales dolosas
NEUMAN
Víctimas familiares: niños explotados, mujeres
maltratadas, etc.
Víctimas de la
sociedad
Víctimas colectivas: víctimas de
Víctimas de la
la sociedad, la nación y el
Nación
sistema penal.
Víctimas del
sistema penal
V í c t i m a s
V í c t i m a s p a r t i c i p a n t e s o alternativas
fungibles: desempeñan un papel
V í c t i m a s
en la comisión del delito
voluntarias
!33
Víctimas simbólicas: afectadas por el ataque a un
determinado sistema de valores, partido, ideología,
etc.
V í c t i m a s
simuladoras
Falsas víctimas
V í c t i m a s
imaginarias
5. EL CONTROL SOCIAL
a) Concepto:
202 Al ocuparse la Criminología del control social se formula un paralelismo más con el
Derecho Penal: así como éste trata el tema del delito, de su imputación y de las
consecuencias jurídicas necesarias al cometer los crímenes; también la Criminología tiene
que estudiar la reacción frente a la delincuencia, la eficacia del sistema de sanciones
legalmente existente, su idoneidad en tanto a su carácter preventivo general o especial,
etc. (Vid. HASSEMER Winfried. y Francisco MUÑOZ. Introducción a la Criminología, cit., p.
31.
!34
un conjunto de reglas y principios establecidos, así como las formas
organizadas con que la sociedad responde a sus transgresiones 203.
Sin embargo, puede ocurrir que las instancias del control social
informal fallen en sus cometidos. He ahí que se debe recurrirse al
segundo aspecto mencionado: el control social formal. Éste actúa de
manera coercitiva e impone sanciones cualitativamente distancias a
las impuestas por el control social informal. Instituciones de control
social formal son tanto la policía como la instancia judicial y así
mismo, la cárcel.
203 COHEN, S. Visiones del control social. Trad. de Larrauri. Barcelona: s/e, 1988, p. 15.
!35
determinar las imágenes del criminal, de la criminalidad y el del
crimen, todo ello a través de la educación, la religión, los medios de
comunicación, etc.
i. La familia:
b. S o c i o l ó g i c a m e n t e , l a f a m i l i a p r o d u c e p a u t a s
determinadas de comportamientos en relación a los roles
sociales que se asignan o imponen a cada uno de sus
integrantes.
204 NÚÑEZ PAZ, Miguel y Francisco ALONSO PÉREZ. Óp. Cit., p. 156.
!36
manera comienza a comprender su postura de
sometimiento y amoldamiento a la convivencia social.
ii. La escuela:
iii. El trabajo:
!37
La imposición de las instancias pertenecientes al control social formal
implica un fracaso de las propias del control social informal. Son
instituciones que han sido establecidas con la finalidad de ejercer
control sobre los miembros de la sociedad, como es el caso de la
policía, los tribunales, los establecimientos penitenciarios, etc.
i. La policía:
206 BUSTOS RAMÍREZ, Juan. “Control social y Derecho penal” en Obras completas. Tomo I.
Lima: ARA EDITORES, 2004, p. 493.
208 PÉREZ ARROYO, Miguel. “Maldita criminalidad. Razones y sinrazones para entender la
criminalidad y su avance en la sociedad peruana” en Gaceta Penal. Número 13. Lima,
julio 2010, pp. 379-385.
!38
policial es pan de cada día en nuestra sociedad. Si bien ésta puede
deberse en factores tales como los bajos ingresos de los policías, falta
de identificación con los valores institucionales, etc., es necesario
implantar de manera urgente una reforma para combatir ya
mencionada crisis institucional.
iii. La cárcel:
Control social
6. EL AUTOCONTROL
209 Si bien los sujetos principales del control social formal ejercido por las instancias
La familia
judiciales son los jueces y tribunales, es importante destacar
Latambién
cárcel la importancia de los
abogados en ella, en cuanto contribuyen en ciertos casos a condicionar la propia
actividad de los tribunales (Núñez y Alonso, 2002).
El trabajo
!39
Los medios de
comunicación
riesgo de obtener un castigo. La percepción que cada individuo
tenga acerca de qué tan riesgoso resulta el comportamiento
delictivo para él -y, por ello, qué tanto le conviene realizarlo- es muy
variable y se verá afectada por el grado de vulnerabilidad que tenga
el sujeto ante sus tendencias delictivas: su autocontrol. GOTTFREDSON
y HIRSCHI, autores de la teoría del autocontrol o teoría general del
delito, desarrollan que lo que diferencia al delincuente del no
delincuente se deberá en gran parte a la mayor o menor presencia
de autocontrol en su persona210, de manera que su ausencia
aumenta la probabilidad de que el sujeto cometa actos delictivos211.
La definen, pues, como “la tendencia diferencial de las personas
para evitar los actos delictivos cualesquiera que sean las
circunstancias en las cuales se encuentren” 212.
!40
el déficit de autocontrol se manifieste por medio de otro tipo de
comportamientos tales como el alcoholismo o la drogadicción,
GOTTFREDSON y HIRSCHI consideran que siempre es posible la
socialización efectiva del sujeto.
!41
CAPÍTULO IV
!42
1. INTRODUCCIÓN
216 Es autor de los siguientes artículos científicos: Tratamiento juvenil en prisión: modelos
psicológicos y programas aplicados en España, 1992; Creencias sociales sobre la
reincidencia en el delito, 1992; Intervención con delincuentes, reinserción y reincidencia,
1997; Evaluación y tratamiento en prisiones, 1998; Criminología aplicada: intervenciones
con delincuentes, reinserción y reincidencia, 1998; Tratamiento de los delincuentes y
reincidencia: una evaluación de la afectividad de los programas aplicados en Europa,
1999; La delincuencia y su control: realidades y fantasías, 2001; Treatment of offenders
and recidivism: assessment of the effectivenes of programes applied in Europe 2001;
Delincuencia sexual: mitos y realidades, 2002; Guía de tratamiento psicológicos eficaces
para la delincuencia juvenil, 2003; Tratamientos y sistema penitenciario, 2004; Perfil y
tratamiento del maltratador familiar, 2004; Modelos de buenas prácticas: intervención
intensiva con internos autores de delitos violentos y contra la libertad sexual, 2006; La
aproximación psicológica al tratamiento de la delincuencia en España, 2006; e
Individuos, sociedades y oportunidades en la explicación y prevención del delito: Modelo
del Triple Riesgo Delictivo (TRD), 2008.
!43
El Modelo del Triple Riesgo Delictivo (TRD) de REDONDO ILLESCAS
merece en el presente Manual un capítulo propio, puesto que
consideramos que sus postulados son los más acertados de la
Criminología contemporánea. No solo es una teoría más de la
criminalidad, sino que es un modelo de síntesis etiológico criminal.
2. DEFINICIONES PREVIAS
El Modelo del Triple Riesgo Delictivo utiliza conceptos que han de ser
previamente definidos para facilitar la comprensión de la teoría218.
Encontramos los siguientes:
a) Factor de riesgo:
b) Factor de protección:
Eso quiere decir que los factores de riesgo delictivo nos acercarán a
un comportamiento antisocial, mientras que un factor de riesgo
prosocial hará lo mismo con respecto a las conductas prosociales.
c) Dimensión de riesgo:
!44
protección de naturaleza análoga 219 (ejemplo: impulsividad-
autocontrol) susceptible de ser gradual y destinada a analizar las
influencias criminológicas en los miembros de la sociedad.
d) Fuentes de riesgo:
!45
económica. En este punto, que se presenten personas vulnerables o
contextos propicios para cometer delito, aumentarán el riesgo de su
comisión. De hecho, las oportunidades para realizar hechos delictivos
se presentan con mayor intensidad y frecuencia en quienes poseen
mayor motivación antisocial.
h) Comportamientos prosociales:
!46
inhibitorios que evitan que se amenace o dañe a las demás personas
o a sus propiedades en la búsqueda de un beneficio o satisfacción
personal. Por ello, los comportamientos prosociales implican haber
adquirido y mantener los controles inhibitorios propios y adquiridos.
!47
riesgo social de conducta antisocial se resalta la relevancia de los
riesgos B y riesgos C. El RCAs se formula como ∑RCAi = ∑f(A, B, C).
3. DESARROLLO DE LA TEORÍA
220 Las teorías que principalmente se relacionan con la teoría del Triple Riesgo Delictivo
son las teorías del desarrollo y las etapas vitales, puesto que también se estructuran en
base a los factores de riesgo y de protección que propone REDONDO ILLESCAS.
221 Esta condición se identifica con el factor de riesgo A. El autor manifiesta que las
fuentes de riesgo son genéticas y constitucionales, la impulsividad, la hiperactividad,
problemas de atención, las tendencias al riesgo, la baja inteligencia, la baja motivación
de logro, la baja autoestima, la ausencia de sentimientos de culpa, el egocentrismo, la
baja tolerancia a la frustración o ira, las bajas habilidades interpersonales, las creencias
antisociales, la dependencia a la drogas, la experiencia de victimización infantil o el
hecho de ser varón.
!48
En segundo lugar, se requiere que el individuo cuente con un apoyo
prosocial adecuado222, sobre todo durante las etapas en las que
existe mayor tendencia a cometer delito (infancia y juventud). El
apoyo prosocial proviene de las principales instituciones sociales en
las que el individuo se desarrolla, como la familia, la escuela, entre
otros; y se manifiesta como todo capital informativo, económico,
educativo, etc., que la comunidad traslada a cada uno de las
personas que la integran por medio de la educación y la
socialización 223.
222 Se identifica con el factor de riesgo B, que según el autor implica mucho más que ser
un mero factor de control social, que evita que se cometa delito; sino que implica un
sustentado y continuo actuar orientado a propiciar conductas lícitas. Son fuentes de
riesgo B los bajos ingresos familiares o la dependencia social, el conflicto entre padres e
hijos, el alcoholismo de los padres, los padres delincuentes, la crianza cruel o
inconsistente, los amigos delincuentes, la desvinculación de la escuela, las detenciones
policiales e internamiento en centros de reforma juvenil, los barrios deteriorados o
desorganizados, la exposición a violencia grave a través de los medios de comunicación
y la tensión familiar.
!49
!
225 Se identifica con el factor de riesgo C. Los factores de riesgo de oportunidad pueden
ser las propiedades descuidadas, las zonas de alta movilidad residencial, la
concentración de turistas para actos terroristas, la exposición a incidentes violentos, etc.
!50
para la conducta antisocial o delictiva. Los riesgos A y B, pues,
interactúan entre sí a lo largo de la existencia del individuo y dan
lugar a determinados grados de MA que se manifestarán según el
momento “t” en el que la persona se encuentre.
Por
!51
medio de su Teoría, REDONDO ILLESCAS desarrolla un sistema en el
que divide a la sociedad en cuatro sectores, según la MA que
presentan. En el eje de las ordenadas se ubican los riesgos de tipo A;
mientras que en el eje de las abscisas, los riesgos de tipo B. Los riesgos
se relacionan entre sí teniendo en cuenta la positividad o negatividad
con la que se manifiestan en el individuo, por lo que en el primer
cuadrante la MA será baja; en el segundo, moderada; en el tercero,
alta en pequeños grupos; y en el cuarto, alta.
!52
c) Tercer cuadrante: son quienes presentan insuficiencia en las
capacidades necesarias para vivir en sociedad (-A), aunque sí
reciben el apoyo prosocial necesario (+B). Pueden alcanzar una
integración social razonable, aunque también es posible que se
dé el supuesto de que los individuos con graves insuficiencias
personales (impulsividad desmedida o falta de empatía extrema)
estén lo suficientemente motivado como p ara cometer delitos. La
prevención del Estado, pues, debe enfocarse en dichos sujetos.
4. CONCLUSIONES
!53
El modelo integra los postulados de las demás teorías criminológicas,
de lo cual deriva que su aceptación sea cada vez mayor. De ellos
recepciona, sobre todo, la influencia recíproca de los factores
personales y ambientales en la conducta de las personas, así como la
posibilidad de resocializar y prevenir el comportamiento delictivo
!54
!55
CAPÍTULO V
!56
Argentina, ii. México, iii. Venezuela, iv. Perú, v.
Otros países latinoamericanos).
!57
1. INTRODUCCIÓN
!58
2. LOS PLANES DE ESTUDIO DE LA CRIMINOLOGÍA
229 Ibídem.
!59
Medicina, la Psiquiatría, el Derecho, la Antropología, etc.), lo cierto es
que esta posición considera que la Criminología se encuentra ya en
condiciones de permitirse la organización de sus conocimientos como
carrera profesional propia.
231 Ibídem.
!60
puniendi estatal, sino como un atributo que puede desprenderse de
la voluntad privada.
232 ABBOT MATUS, Felipe. “En torno a la enseñanza de la criminología y las ciencias
jurídicas en España: una coyuntura y un desafío en el fondo y en la forma” en Revista
sobre enseñanza del Derecho. Año 5, N° 9. 2007, pp. 25-26.
!61
aplicación práctica y a la fomentación de discusiones sobre dicha
aplicación.
i. Países escandinavos:
ii. Inglaterra:
!62
En Inglaterra existe también un interés notable respecto a la
enseñanza criminológica. Manifestación de ello puede encontrarse
en la Universidad de Londres, y en el Instituto de Criminología de
Cambridge233 –relacionado a la Universidad de Cambridge-, donde
se dictan cursos en pregrado y postgrado de Criminología.
iii. Francia:
233 Dicho instituto fue fundado por LEÓN RADZINOWICZ, reconocido discípulo de Ferri y
destacado por albergar en su biblioteca la colección más completa de Criminología en
Reino Unido.
!63
estudios de Criminología como una especialidad a la que pueden
acceder quienes hayan concluido el segundo ciclo de la licenciatura
en Derecho.
v. España:
Sin duda, España puede considerarse como un país con una muy
larga tradición en lo que se refiere a estudios criminológicos, pues su
enseñanza se imparte incluso desde el SXIX.
!64
Escuela de Estadística, Estudios Penitenciarios, Medicina Legal,
Psicología y Sociología. Los conocimientos que se imparten en él son
tanto de Criminología como Criminalística, Historia Penitenciaria,
Estadística Criminal, etc.
vi. Italia:
!65
Podemos mencionar entre las instituciones dedicadas a la enseñanza
de la Criminología en Italia al Centro Internacional de Criminología
Clínica de Génova, fundado en 1975 por una convención entre la
Sociedad Internacional de Criminología y la Universidad de Génova,
importante si bien depende del Instituto de Criminología y Psiquiatría
Legal de la Universidad. Su especialidad radica en el ámbito de la
Criminología Clínica, orientada hacia la prevención del crimen y el
tratamiento de los delincuentes.
!66
A pesar de no haber sido durante siglos el centro de los primogénitos
avances criminológicos; América cuenta también con instituciones
dedicadas a la pedagogía de la Criminología.
i. Estados Unidos:
ii. Canadá:
!67
otro lado, colabora también en lo que es la creación de seminarios,
trabajos prácticos y estudios a varias universidades de distintos países
que se lo solicitan.
i. Argentina:
!68
Sin embargo, no fue hasta los aportes del Doctor JOSÉ INGENIEROS
que se fundó el primer Instituto de Criminología en el año 1907, el cual
se incorporó a la Penitenciaría Nacional de Buenos Aires y
posteriormente a la Dirección General de Institutos Penales,
aproximadamente en el año 1934. Sus principales propósitos fueron
estudiar a los reclusos e internos, organizar una biblioteca
internacional de Criminología y reunir en ella la suficiente bibliografía
argentina que trate sobre la materia. Así también fue por el Instituto
de Criminología que se dio a luz a la primera revista criminológica de
Latinoamérica: la “Revista de Criminología, Psquiatría y Medicina
Legal”.
!69
instauración de una carrera universitaria de Criminología, que ahora
es ya una realidad en Argentina.
ii. México:
!70
eventos internacionales en México, como el Primer Coloquio de
Política Criminal en América Latina –año 1976- y el de Defensa Social
en 1979.
iii. Venezuela:
!71
se sustentaron en los numerosos eventos realizados a nivel
internacional y nacional, a punto tal que podían fácilmente financiar
sus propias publicaciones e investigaciones.
iv. Perú:
!72
conferencias, etc. acerca de estos temas; capacitando no solo a
alumnos, sino también a docentes.
PEDAGOGÍA DE LA CRIMINOLOGÍA
237 Si bien esta asociación no presenta los estudios de la Criminología como una carrera,
sí fomenta la enseñanza criminológica por medio de sus diversas publicaciones tanto en
libros como por medio de artículos.
!73
Universidad de Pennsylvania, Arizona State
E s t a d o s University; Florida State University; la
Unidos Universidad de California; Columbia University;
Universidad de Harvard.
!74
Instituto de Criminología de París; Centro de
Francia Ciencias Criminales; Instituto de Criminología
y de Ciencias Sociales de Touluse.
Instituto de Altos Estudios Penales; Escuela de
Criminología de Barcelona; Instituto de
Criminología de Madrid; Instituto de
Criminología de la Universidad de Valencia;
EURO España
Instituto Andaluz Interuniversitario de
PA Criminología; Instituto Vasco de Criminología;
Centro de Investigación Criminológica de la
Universidad Castilla-La Mancha.
!75
CAPÍTULO VI
LA INVESTIGACIÓN CRIMINOLÓGICA
1. INTRODUCCIÓN. 2. EL OBJETO DE LA
INVESTIGACIÓN EN LA CRIMINOLOGÍA. 3.
PROBLEMAS EN LA INVESTIGACIÓN
CRIMINOLÓGICA. 4. PASOS RECOMENDADOS
EN LA INVESTIGACIÓN CRIMINOLÓGICA. 5. EL
MÉTODO EMPÍRICO EN LA INVESTIGACIÓN
CRIMINOLÓGICA. 6. LAS TÉCNICAS DE
INVESTIGACIÓN, a) La observación (i. La
observación documental, ii. La observación
participante, iii. La observación directa), b) La
encuesta, c) La entrevista, d) La estadística, e)
El experimento, f) Los test psicológicos (i. Test de
eficiencia, ii. Test de personalidad, iii. Test
sociométricos), g) Estudios de seguimiento, h)
Investigaciones con grupos de control.
!76
1. INTRODUCCIÓN
!77
conceptuales238, indicadores de calidad de vida 239 e indicadores
psicométricos 240.
238 Los indicadores conceptuales son situaciones en las que el público percibe que la
delincuencia ha disminuido o que hay más seguridad ciudadana; cuando los internos en
prisión perciben mejor clima social; los funcionarios de prisión perciben una mayor
satisfacción al trabajar; entre otros.
240 Los indicadores psicométricos dan a conocer si la persona ha reincidido en delito y/o si
muestra mejoría en su salud mental, a través de sus actitudes o emociones en las prisiones
o los entes judiciales.
!78
Como recomendación, MARCÓ DEL PONT 241 enumera su propia lista
de puntos sobre los que debe incidir la investigación de la
Criminología. Indica que al menos en América Latina los objetivos
deben orientarse a intensificar la investigación aplicada para realizar
un plan de política criminal coherente y adecuada a los medios y
necesidades de cada país y que facilite no sólo una aplicación
meramente doctrinaria, sino también práctica. Con este fin se debe
estudiar áreas que conlleven a la aportación de soluciones concretas
en la prevención del delito, como pueden serlo las materias de salud,
empleo, educación, vivienda, migraciones, etc.; e incentivando a las
universidades y sus programas de investigación.
Por otro lado, creemos que urge un estudio mayor en la temática del
menor infractor y los factores criminológicos que desencadenan su
conducta delictiva; así como en lo que respecta a las deficiencias
del sistema penitenciario a partir de una visión criminológica, ya que
en nuestra realidad no se cumple la función resociabilizadora y
rehabilitadora de las cárceles, sino que incluso son llamadas
“universidades del crimen”.
!79
3. PROBLEMAS EN LA INVESTIGACIÓN CRIMINOLÓGICA
243 PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL PERÚ – PUNTO EDU. Informe: Inseguridad
ciudadana, ¿percepción o realidad? Lima, 19 de marzo de 2013. Consulta: 11 de Junio
de 2013. Disponible en: <http://puntoedu.pucp.edu.pe/noticias/informe-inseguridad-
ciudadana>
244 No cabe confundirla con la zona oscura de la criminalidad, pese a que ambas tratan
de reflejar la disfunción entre la criminalidad real en una sociedad y la percibida o
perseguida por las autoridades. Mientras que la cifra negra alude a la existencia de un
cociente que expresa la relación entre el número de delitos efectivamente cometidos y
los delitos reflejados por medio de estadísticas, la zona oscura sólo se limita a un conjunto
genérico de acciones delictivas que no se encuentran reflejadas en las estadísticas
oficiales. Esto quiere decir que la zona oscura o campo negro es un concepto más
ambiguo que meramente describe la discordancia existente sin preocuparse por la
obtención de ninguna cuantificación aritmética.
!80
la relativización técnica del análisis del crimen a causa de su
naturaleza social.
245 NUÑEZ PAZ, Miguel y Francisco ALONSO PÉREZ. Óp. Cit., p. 194.
!81
investigación246 que considere más apropiado en base a la
naturaleza de la misma, teniendo en cuenta el estado actual de los
conocimientos sobre el problema y los objetivos a los que quiere
llegar; por lo que, además, trazará las limitaciones prácticas de todo
el proyecto.
!82
Delimitar el Contrastar el
Interprerar la resultado de la
problema de
investigación muestra muestra con la
hipótesis formulada
Elaborar un marco
Recolectar una
teórico y las
variables muestra
!83
Recordemos, pues, que Criminología adquirió carácter de Ciencia
gracias al método empírico del positivismo criminológico: la
superación de la especulación llevó a que se considere que el
conocimiento adquirido por la Criminología tiene carácter científico,
ya que garantiza un conocimiento más fiable y seguro capaz de
verificar o refutar hipótesis objetivas y no intuidas.
249 De ahí podemos desprender que todo método experimental será un método empírico,
es decir, un método que encuentra sus bases en la observación y el análisis de la realidad.
Sin embargo, no todo método empírico será un método experimental, puesto que éste no
es el único perteneciente a esta clasificación. El método empírico es el género, mientras
que el método experimental es la especie.
250 Que la Criminología opte por el método empírico y produzca conocimiento científico
no quiere decir que exista una lista de paso a seguir para la producción de un mismo
resultado cada vez que sean puestos en práctica. No puede esperarse que su
metodología se aplique como lo hacen las ciencias formales, ya que el ser humano es un
ente cambiante y voluble.
!84
métodos experimentales durante sus investigaciones: la fiabilidad del
resultado deberá constatarse mediante otras técnicas no
experimentales.
a) La observación:
251 Tanto los métodos como las técnicas de investigación criminológicas suelen ser los
mismos que los utilizados en las demás ciencias sociales; sin perjuicio de que la
Criminología haya desarrollado los suyos propios, a causa de la naturaleza de su objeto
de investigación.
!85
Esta técnica surgió en la Antropología Social, generalizándose,
después, para investigar determinadas parcelas del ámbito psíquico y
social del examinado, sobre todo, como complemento de la
exploración. Por medio de ella el investigador aprehende el
fenómeno utilizando sus sentidos (sin limitarse para ello únicamente a
la vista), con la finalidad de recapitular información sobre éste que,
de manera posterior, analizará. Constituye un elemento fundamental
en toda investigación científica, toda vez que es la técnica más
usada y, a la vez, la más primitiva.
i. La observación documental:
!86
ii. La observación participante:
b) La encuesta:
!87
Es uno de las técnicas más generalizadas en la investigación en las
Ciencias Sociales. Se encuentra destinada a una muestra, entendida
como tal al número de personas al que se dirige el cuestionario; y se
diferencia de la entrevista en que, mientras la primera hace
referencia a la preparación de un cuestionario que de forma
posterior será presentado a las personas de las que se busca obtener
su opinión; la segunda es el modo más personalizado en que se
formulan preguntas, sin que se exija necesariamente la realización de
un cuestionario previo a ella. Sin embargo, se relacionan en que en
algunas situaciones es recomendable realizar una entrevista como
paso preliminar a la elaboración de una encuesta, a fin de conocer
algunos detalles del colectivo al que se dirigirá el cuestionario y
propiciar la correcta elaboración de éste.
c) La entrevista:
!88
etc. Así, por ejemplo, suele distinguirse -atendiendo al primero de los
criterios- entre entrevistas informales y entrevistas estandarizadas.
254 Ibídem.
256 Se orienta a campos más limitados. El papel del entrevistador es más activo, pues
sugiere el objeto de estudio y selecciona los datos obtenidos cualitativamente.
!89
entrevistas, como las entrevistas dirigidas y las no dirigidas261; y las
directas e indirectas 262.
d) La estadística:
262 Las entrevistas directas son aquellas en las que las preguntas no pretenden obtener
otra información a la que aparentemente persiguen, situación contraria a las entrevistas
indirectas.
263 En ésta se entrevista a los mismos sectores de la población sobre las mismas variables
pero en épocas diferentes, a fin de registrar los cambios de opinión y conducta durante
el periodo de tiempo interesado.
!90
En la actualidad la estadística criminal es útil para informar a las
políticas públicas, ya que los datos recopilados a través de esta
técnica de investigación son influyentes en la política legislativa y
policial. Brindan también una “topografía” elemental de la
delincuencia, identificando la prevalencia del delito en las zonas
urbanas, en relación a las zonas rurales.
Por otro lado, los informes estadísticos son de importancia para los
medios de comunicación pues facilitan reportajes sobre asuntos
relativos, por ejemplo, a la inseguridad ciudadana.
e) El experimento:
!91
sociales y el comportamiento criminal. Tenemos, por ejemplo, que
para verificar si las malas condiciones de habitabilidad generan
delincuencia se procede a un experimento en el que se divide en dos
a una cierta cantidad de personas ya expuestas a un ambiente de
pobreza: el grupo experimental, que es trasladado a mejores
condiciones de habitalidad, y el de control, que se mantiene a su
regular exposición. La hipótesis de investigación se confirmará si el
grupo de control comete un porcentaje de delitos estadísticamente
más significativo que el grupo experimental.
!92
las afirmaciones incontroladas que se vierten en una exploración,
observación o experimento; limitando, para ello, el procedimiento de
obtención de datos mediante ciertos criterios y definiendo
formalmente su contenido con precisas determinaciones.
i. Test de eficiencia:
266 Fue creado en 1905 por el psicólogo francés ALFRED BINET y el psiquiatra THÉODERE
SIMÓN. En sus orígenes se utilizó para determinar la inteligencia de sujetos que padecían
déficit intelectual, en una edad mental entre los 3 y los 15 años. Tras las revisiones de
TERMAN y MERRIL, la aplicación del test se extendió también a personas adultas.
!93
mayoritariamente utilizado; el de RAVEN o test de Matrices
Progresivas 268 ; y el de dominó o test D-48269.
268 Creado en 1938 por JOHN RAVEN para evaluar un selecto grupo de oficiales de la
armada estadounidense. Es un test no verbal (gráfico) consistente en encontrar la figura
faltante en un grupo de 60 series, por lo que mide la capacidad intelectual a través de la
habilidad perceptual, la comparación entre formas y el razonamiento analógico. No
tiene en cuenta los conocimientos adquiridos, sino la capacidad de pensamiento.
269 Test de inteligencia no verbal creado por EDGAR ANSTEY para uso de la armada
británica. Por medio de ejercicios con piezas de dominó, mide la capacidad de
conceptualización y razonamiento en base al factor g de la inteligencia (un factor
general que se encuentra presente en todas las fases de la conducta humana según la
teoría bifactorial de la inteligencia de CHARLES SPEARMAN). En este test la inteligencia
promedio es de 50 puntos; de 75 a 90 puntos, superior al término medio; y 95 puntos,
superior.
270 Resalta el test de WECHSLER o WMS-III, utilizado para evaluar la memoria inmediata,
memoria demorada y memoria de trabajo.
271 En ellos debe mencionarse al test de BENTON o de retención visual, utilizado para
evaluar la percepción, memoria y habilidades visuales; el test de BENDER, que se emplea
para medir la capacidad viomotora; y el test de REY o de la figura completa, que
examina la organización perceptual y la memoria visual de sujetos que sufren lesiones
cerebrales.
273 Ejemplos emblemáticos de estos test son el test de VIGLOSKY; test de Afasia, utilizado
para la valorización de los trastornos afásicos o de pérdida de comprensión y emisión de
lenguaje; y test de la batería de Luria.
!94
Test de inteligencia
•Test de inteligencia de BINET-SIMON
•Test de inteligencia de WECHSLER–BELLEVUE
•Test de inteligencia de RAVEN o de Matrices Progresivas
•Test de dominó
Test de aptitudes
•Memoria
•Aptitudes perciptivo-motores
•Aptitudes psicofisológicas y psicomotores
Test neuropsicológicos
•Test de VIGLOSKY
•Test de Afasia
•Test de LURIA
Son utilizados para revelar aspectos del carácter del sujeto estudiado.
A diferencia de los test de eficiencia, no buscan poner a prueba al
sujeto, sino sacar a la luz los rasgos más característicos de su
personalidad al ponerlo en situaciones determinadas. Se clasifican en
cuestionarios de personalidad, test objetivos de la personalidad y test
proyectivos de la personalidad.
!95
objetivos de personalidad son el test del laberinto 274 y el test de
HARTSHORNE y MAY 275.
Los test proyectivos, por su parte, permiten llegar de forma más fácil
al subconsciente del individuo, ya que ocultan a la persona analizada
el aspecto de su personalidad que se evalúa. La finalidad de estos
test, entonces, es la de descubrir los deseos inconscientes de quien es
estudiado. Son parte de ellos el test de RORSCHACH o prueba de las
manchas de tinta 276, que es uno de los más utilizados; y el test de
Apercepción Temática (AT)277.
274 Desarrollado en 1914 por el psicólogo STANLEY PROTEUS, es una prueba no verbal que
evalúa la capacidad de planificación y previsión psicológica. En esta prueba se pide al
sujeto que trace un camino de salida a través de una serie de laberintos variables en su
complejidad, analizándose la habilidad de la persona para evitar callejones sin salida.
275 Creado en 1928, fue uno de los primeros estudios que equipara la conducta y el
conocimiento moral. Sus creadores pretendían determinar el carácter de los niños,
encontrar el momento en que las virtudes nacen en el ser humano y si la conducta
depende de las situaciones a las que el sujeto es expuesto. Para ello estudiaron miles de
niños y adolescentes en contextos donde se les permitía mentir, engañar o robar sin que
aparentemente nadie lo notara, llegando a la conclusión de que los niños con ciertos
códigos morales aprendidos (como los religiosos), actuaban de forma más virtuosa que
los demás.
276 Se creó en 1921 por el psiquiatra HERMANN RORSCHACH. La prueba cuenta con 10
cartillas diferentes, cada una con una ambigua mancha de tinta impresa, que se
expondrán al sujeto para que explique lo que percibe.
277 Se asemeja al test de RORSCHACH en que también en éste se expondrá una serie de
escenas ambiguas al participante, aunque difiere en que ahora el sujeto deberá contar
una historia y describir al escena brindada, cómo se sienten los personajes en ella y cómo
cree que finaliza la historia.
!96
Cuestionarios de personalidad
•Unifásicos
•Multifásicos
!97
iii. Técnicas sociométricas:
g) Estudios de seguimiento:
!98
condena. La mayor observación que se le hace a la técnica de
seguimiento es que debe ser realizada exhaustivamente y, por lo
mismo, es costosa.
280 Sobre la utilidad del análisis del proceso de reinserción social del ex recluso, el trabajo
de GLASER y GLUECK es importante al resaltar la relevancia del problema laboral en la
vida de quien ha salido penado. A su juicio, esto es decisivo para recaer en reincidencia,
porque durante los primeros meses que suceden a la excarcelación el liberado opta por
replegarse a sus actividades marginales ilícitas si no encuentran ocupación legal.
!99
estadísticamente más significativo que el grupo no delincuente,
podrá establecerse aquella relación causal.
!100
CRIMINOLOGÍA: PARTE ESPECIAL
!101
INTRODUCCIÓN
!102
CAPÍTULO I
!103
1. INTRODUCCIÓN
Se sabe que siglos atrás quienes sufrían alguna de estos males eran
consideradas poseídos por demonios y sometidos a infinidad de
rituales que, según se creía, mejorarían su situación. Tiempo después,
el trato a este sector poblacional no fue mucho mejor: mezclados
con criminales peligrosos en un mismo espacio, sin tratamiento y sin
los ambientes adecuados para su situación, se les ingresó en cárceles
que, en lugar de tener como prioridad la resocialización, eran en
realidad espacios para mantener a quienes perturbaban a la
sociedad alejados de ésta. Incluso hoy en día, si bien se ha ampliado
el conocimiento sobre la condición de quienes sufren de una
enfermedad mental o de un trastorno de personalidad, falta aún
mucho por hacer para mejorar la calidad de vida de estas personas.
2. LA ENFERMEDAD MENTAL
281 Vid. GARRIDO, Vicente y otros. Óp. Cit., pp. 558 y ss.
!104
deficiencias cardiovasculares282. Esto, junto con el hecho de que
muchas personas que padecen de enfermedades metales
desconocen su situación, conlleva a que sufran constante
discriminación, abandono y rechazo; lo que agrava su situación
como personas individuales e incrementa la peligrosidad de que
cometan actos delictivos.
a) Concepto:
284 Existen diversas posturas acerca de qué es lo que genera que, al menos, 450 millones
de personas en el mundo padezcan de problemas de salud mental (Vid. OMS, Informe
sobre la Salud en el Mundo 2001. Francia, 2001, página x. Disponible en: http://
www.who.int/whr/2001/en/whr01_es.pdf?ua=1). La comunidad científica ha incidido en
que no existe un causal único, sino que es muy probable que tanto la enfermedad
mental como del trastorno de personalidad existan debido a la confluencia de una serie
de factores biológicos, psicológicos y sociales. Hay que tener en cuenta que aunque esta
cifra corresponde al año 2001, la cantidad de personas con problemas de salud mental
se incrementa a medida que lo hace el índice poblacional mundial.
!105
perturbación de la mente causada por un factor orgánico o
biológico; mientras que para los que enfocan el fenómeno desde
una orientación psicológica, el concepto es mucho más amplio y se
identifica con un desorden psíquico. Por su parte, desde una
perspectiva sociológica, será un trastorno psíquico que encuentra sus
orígenes en la sociedad y en las relaciones personales inadecuadas
del individuo 285.
285 HURTADO POZO, José y Víctor PRADO SALDARRIAGA. Manual de Derecho penal –
Parte General. Tomo I. 4ta ed. Lima: IDEMSA, 2011, pp. 602 y ss.
286 CABELLO, Vicente. Psiquiatría forense en el derecho penal. Tomo I. Buenos Aires:
HAMMURABI, 2005, pp. 141 y 142.
!106
deficiencia física o sensorial288. Basta, no obstante, que comprometa
gravemente la capacidad del sujeto para comprender lo ilícito de sus
actos y que signifique, además, la imposibilidad de comportarse de
manera diferente para que sea considerada una perturbación
psíquica para el Derecho penal.
b) Características:
i. Es un proceso.
ii. Impide que el sujeto que la padece se conduzca según su
entorno social y cultural.
iii. Afecta procesos psicológicos básicos del ser humano.
iv. Se manifiestan como un patrón constante, aunque pueden
tener periodos de inactividad.
288 Para aclarar este punto, una deficiencia psíquica o intelectual es aquella en la cual
la persona afectada sufre limitaciones en el funcionamiento de su psiquis, por lo que
tendrá dificultades intelectuales y en el desarrollo de habilidades básicas como la
comunicación. Una deficiencia física, en cambio, se da en las personas que tienen
limitaciones causadas por una alteración en el aparato locomotor, ya sea a nivel del
sistema muscular, nervioso u óseo. La deficiencia sensorial corresponde a personas que
sufren de alteración en los órganos sensoriales de la vista o el audio. Finalmente, un
trastorno mental orgánico se califica como el deterioro mayormente progresivo de las
facultades mentales por causa de una alteración en el tejido cerebral.
!107
DSM-V se encuentra vigente desde el año 2013, como la versión
quinta del DSM-I del año 1952, y se diferencia de la CIE-10 en que sólo
clasifica lo que corresponde a enfermedades mentales, mientras que
la CIE-10 es una categorización general de las enfermedades.
i. La esquizofrenia:
290 DÍAZ MARSÁ, Marina. Afrontando la esquizofrenia. Madrid: EFOQUE EDITORIAL, 2013,
p. 15.
291 MINISTERIO DE SALUD DEL GOBIERNO DE CHILE. Guía clínica para el tratamiento de
personas desde el primer episodio de esquizofrenia. Santiago: MINSAL, 2009, p. 22.
!108
Sin embargo, la predominancia de algunos de los síntomas depende
de la persona en particular, de manera que no todos quienes sufren
de esquizofrenia son hostiles o desorganizados en su presentación
personal, aunque las alucinaciones son el síntoma más frecuente de
esta enfermedad: el sujeto suele tener percepciones a través de los
sentidos que ocurren solo en su mente, pero que no distingue de la
realidad292.
292 Las alucinaciones pueden ser auditivas (la persona escucha voces en su cabeza que
le dan órdenes), táctiles, olfativas, gustativas y visuales. (Vid. DÍAZ MARSÁ, Marina, cit., pp.
20 y ss.)
294 GONZÁLES PARRA, Silvia y otros. “Violencia asociada con los trastornos
esquizofrénicos” en Archivos de Psiquiatría, N° 2-4, Vol. 71. 2008, p. 113.
!109
Por tanto, si se recibe el tratamiento adecuado y se visita en los
tiempos correspondientes al médico psiquiatra que analizará la
situación de cada caso en particular y su evolución temporal; las
personas con esquizofrenia pueden tener una vida común y corriente.
Existen, pues, diversos tipos de esquizofrenia, en base al síntoma que
predomina en el sujeto; sin perjuicio de que puedan manifestarse
esquizofrenias que no están especificadas aún. Así, siguiendo al
CIE-10295 se tiene:
a. Esquizofrenia simple:
b. Esquizofrenia hebefrenia:
c. Esquizofrenia paranoide:
295 Según el DSM-IV, los tipos de esquizofrenia son cinco: paranoid type, disorganized
type, catatonic type, undifferentiated type y residual type. (AMERICAN PSYCHIATRIC
ASSOCIATION, Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders. 4ed. Washington:
2005, p. 278.
!110
que se refieren a alucinaciones y delirios que son vividos
conscientemente y hacen que el sujeto crea que son parte de la
realidad. De aquí derivan aquéllos que cometen actos delictivos bajo
la premisa de que una voz le ordenó que lo haga.
d. Esquizofrenia catatónica:
e. Esquizofrenia residual:
f. Esquizofrenia indiferenciada:
ii. La oligofrenia:
296 LEGANÉS GÓMEZ, Santiago y María Ester ORTOLÁ BOTELLA. Criminología: parte
especial. Valencia: TIRANT LO BLANCH, 2009, p. 44.
!111
capacidad intelectual inferior al promedio (CI alrededor o menor de
70) y significativa incapacidad adaptativa, entendida como la
manera en que las personas afrontan satisfactoriamente las
exigencias del día a día en sociedad 297. La afectación mental de
estas personas se manifiesta por medio de la disminución en las
capacidades de lenguaje, funciones cognoscitivas, autocontrol,
habilidades motrices y habilidades sociales; por lo que no se relaciona
con la presencia o ausencia de alteraciones mentales o físicas298. Se
manifiesta antes de los 18 años 299 y afecta aproximadamente al 2%
de la población mundial.
297 PICHOT, Pierre (coord.). DSM-IV. Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos
mentales. Barcelona: MASSON, 1995, p. 42.
299 La edad del sujeto una vez que se manifiesta el déficit mental es muy importante,
pues solo cuando ocurre en las personas menores de 18 años nos encontraremos ante un
retraso mental, siendo denominada demencia cuando ésta se da pasada la edad de
desarrollo intelectual (18+), pues nos encontramos ante una situación en la que el sujeto
pierde la inteligencia que ya había adquirido. (Vid. LEGANÉS GÓMEZ, Santiago y María
Ester ORTOLÁ BOTELLA. Criminología, cit., p. 51)
300 Cfr. LEGANÉS GÓMEZ, Santiago y María Ester ORTOLÁ BOTELLA. Óp. cit., p. 53.
!112
La oligofrenia se categoriza en cuatro grados de intensidad 301, que
analizaremos a continuación:
a. Oligofrenia leve:
b. Oligofrenia moderada:
c. Oligofrenia grave:
301 Ha de considerarse que los diversos test de inteligencia tienen un margen de error de
entre 5 y 10 puntos, por lo que no basta el puntaje para diagnosticar un retraso mental,
sino que el especialista tendrá en cuenta otros factores que hagan referencia al grado
de capacidad adaptativa del sujeto, así como a su condición cultural y social.
303 Ibídem.
!113
d. Oligofrenia profunda:
306 Famosos son los casos de los dirigentes de sectas religiosas que, acuñándose ser hijos
de Dios, reúnen adeptos y los instigan a asesinar a quienes están en contra de su
organización o incluso a cometer suicidio colectivo.
!114
celosos y controladores de sus parejas sentimentales o de cualquier
otra persona con la que se relacionen afectivamente. Reaccionan
con violencia ante opiniones de los demás, porque creen que están
siendo despreciados.
iv. La epilepsia:
307 LEGANÉS GÓMEZ, Santiago y María Ester ORTOLÁ BOTELLA. Óp. cit., p. 55.
!115
Los delitos cometidos por las personas con enfermedades mentales
encuentran su motivación en causas específicas naturales, propias de
la enfermedad padecida y que no responden a causas lógicas ni
racionales, sino a las circunstancias psíquicas del individuo308. En la
mente del sujeto se produce un fenómeno natural que se manifiesta
externamente por medio del acto violento, que es completamente
normal para ellos. Para un mejor entendimiento: la mente de un
enfermo mental se encuentra estructurada de tal manera que le
obliga a ejecutar el hecho que ha procesado, por más inverosímil
que parezca para una persona normal, de lo que deriva que no se
manifieste en el agente delictivo el remordimiento o preocupación
por evitar dañar más a la víctima.
!116
alimentos (vivienda, educación, vestido, entre otros) 310. No es
novedad, de hecho, que la pobreza tiene relación directa con la
falta de salud y el delito, pero sí es digno de resaltar que afecta
también a la salud mental. No puede negarse que las personas que
sufren de trastornos mentales que -además- viven en un estado de
pobreza, tienen menos acceso a los tratamientos necesarios para
lograr una vida regular, siendo muchos los casos en que ni siquiera
llegan a tener conocimiento de que padecen de una enfermedad
de tal condición, llevando, por tanto, un estilo de vida lamentoso y
hasta denigrante como ser humano, lo que muchas veces deriva en
delito.
Se requiere, pues, que estas personas sean tratados con respeto, pero
también con la diligencia respectiva a fin de que, a pesar de lo
impredecible que en algunos momentos puede resultar su
comportamiento, no se cometan crímenes que son capaces de ser
prevenidos, ya sea a través de la implementación de medidas de
custodia como de internamiento en casos en que exista posibilidad
de que el individuo cometa graves actos violentos. No olvidemos,
pues, que a diferencia de lo que sucede con otras personas que
cometen delitos crueles aparentemente sin sentido, sin tener
problemas de salud mental; gran porcentaje de los crímenes
cometidos por enfermos mentales pueden ser evitados con la debida
atención y tratamiento.
e) Responsabilidad penal:
!117
Analizaremos a continuación la inimputabilidad como la respuesta a
la responsabilidad penal de las personas con enfermedades
mentales:
i. La inimputabilidad:
a. Concepto:
311 NÚÑEZ GAITÁN, María del Carmen y LÓPEZ MIGUEL María José. “Psicopatía y
delincuencia. Implicaciones en el concepto de imputabilidad” en Revista Electrónica de
Ciencia Penal y Criminología. N° 11, 2009, Lima. Disponible en: http://criminet.ugr.es/
recpc/11/recpc11-r2.pdf
312 PEÑA CABRERA FREYRE, Alonso. Derecho Penal Parte General. Tomo I. Lima: IDEMSA,
2011, pp. 797-798.
313 VILLA STEIN, Javier. Derecho Penal Parte General. 3ed. Lima: GRIJLEY, 2008, p. 393.
!118
relevancia a que esa persona se sienta efectivamente culpable o
reprochada316. No hay que confundir la imputabilidad con la
consciencia de la antijuricidad del acto: la categoría que estamos
analizando trata acerca de la facultad intelectual del sujeto para
poder controlar su comportamiento según las normas de la sociedad.
316 BRAMONT-ARIAS TORRES, Luis Miguel. Manual de Derecho Penal Parte General. 4ed.
Lima: EDDILI, 2008 pp. 297 y ss.
317 ROJJASI PELA, Carmen. Ejecutorias Supremas Penales 1993-1996. Lima: LEGRIMA, 1997,
p. 85.
!119
psíquica. El segundo implica analizar la capacidad o incapacidad
del sujeto para comprender el significado de sus actos y para su
determinación. El tercero, por su parte, sugiere la combinación de
ambos criterios.
319 ROJAS VARGAS, Fidel. Estudios de Derecho Penal. Lima: JURISTA EDITORES, 2004, p.
109.
!120
encarcelamiento en un centro penitenciario de quien en realidad
necesita tratamiento terapéutico y en el que –evidentemente- no se
alcanzaría la finalidad de la pena: la resocialización; mientras que,
por otro, implica el beneficio de ciertos delincuentes que, mediante
un informe psiquiátrico, obtienen una responsabilidad atenuada o
inimputabilidad cuando el hecho delictivo fue cometido en un
estado de consciencia.
!121
ii. Las medidas de seguridad:
!122
la gravedad del delito y de los que posiblemente cometerá el
inimputable si no es tratado. Además, su aplicación ha de respetar
todos los derechos fundamentales de la persona inimputable, ya que
son individuos especialmente vulnerables324.
a. Medida de internación:
324 Cfr. STC. EXP. 03426-2008-PHC/TC de fecha 26 de agosto del 2010. En dicha sentencia se
resalta que el Estado debe adoptar todas las directrices que sean necesarias para
superar la problemática que surge en la aplicación de las medidas de seguridad, por lo
que se exhorta a que fortalezca los niveles de coordinación intra e interinstitucional, entre
los establecimiento de salud mental y las institucionales relacionadas con la aplicación
de las medidas, como el Ministerio de Justicia, Ministerio de Economía y Finanzas,
Ministerio de Salud, Poder Judicial, etc.
325 Vid. R.N. N° 104-2005-AYACUCHO de fecha 16 de marzo del 2005, fundamento jurídico
8°.
!123
inimputable cometa otros delitos graves, por lo que –debido a sus
intensos efectos en la libertad de las personas- solo pueden
imponerse por sentencia y tras haber acreditado en juicio que el
inimputable haya realizado un delito, así como su estado de
peligrosidad. Además, la medida no puede ser indeterminada e
incluso se prohíbe tajantemente que exceda los límites cuantitativos
de la pena privativa de libertad que hubiera recibido el sujeto de no
haber sido inimputable. En este sentido, la Corte Suprema se
pronuncia resaltando que la duración de la medida de internación
debe ser proporcional a la potencial peligrosidad del sujeto, para lo
que ha de tenerse en cuenta las precisiones del perito psiquiatra para
cada caso concreto.
326 DEFENSORÍA DEL PUEBLO. Salud mental y derechos humanos: la situación de los
derechos de las personas internadas en establecimientos de salud mental. Lima:
DEFENSORÍA DEL PUEBLO, 2005, p. 26.
!124
ii) El derecho a ser internados tras un consentimiento
informado del paciente o de quien legalmente es
responsable de él, sin perjuicio de que puedan
realizarse actos médicos sin consentimiento del
paciente o su curador cuando se trate de una
emergencia que ponga en peligro la vida o salud del
inimputable. Es posible también realizar un
internamiento involuntario cuando la persona que
padece de la enfermedad mental se encuentre en
condiciones que signifiquen un peligro para la vida o
salud de ellos mismos u otras personas y su responsable
cuente con mandato judicial previo emitido por
autoridad competente.
!125
vii) El derecho a la intimidad personal y a la privacidad en
las comunicaciones, lo que implica que los internados
puedan contar con espacios donde guardar sus
pertenencias personales y que puedan comunicarse
con otras personas, recibir visitas en los momentos
oportunos y acceder a medios de comunicación
telefónicos.
!126
que el inimputable se encuentra en condiciones de haber culminado
con éxito el tratamiento brindado durante el tiempo que estuvo
internado y su especial condición permite que sea adecuadamente
cuidado por otra persona.
Así, durante el año 2014 fueron 3,396 personas las que se atendieron
en el servicio de psiquiatría de hospitalización a nivel nacional, de las
que –además de Lima Este (1,286 personas atendidas) y Lima ciudad
(1,413 pacientes)-, resaltan Arequipa (273 personas) y Tacna (200
hospitalizados). Sin embargo, la morbilidad de pacientes
hospitalizados durante el mismo año, en comparación con los
pacientes atendidos, fue alarmante: 5,059 fallecidos, sobre todo
329 MINISTERIO DE SALUD. Informe sobre los servicios de Salud Mental del Subsector Ministerio
de Salud del Perú 2008. Lima: Minsa Ed., 2009, p. 12.
!127
pacientes con esquizofrenia (1,485 pacientes). Por su parte, la
morbilidad de pacientes atendidos en consulta externa descendió de
622,474 a 544,199 personas. De esta última cifra, 113,421 personas
eran atendidos por episodios depresivos y 130,692 lo eran por
trastornos relacionados con la ansiedad.
a) Concepto:
!128
adolescencia 332, sin desaparecer una vez que se haya alcanzado la
etapa adulta. Incide en la manera en la que el sujeto afectado por
ella se conduce en sociedad, por lo que afecta a sus relaciones con
terceros y con ellos mismos al no cumplir el rol que la sociedad espera
que cumpla.
b) Características:
!129
tanto es generalizada y desadaptativa en una variedad de
situaciones.
vi. Iniciar, por lo general, en la adolescencia y perdurar en la
madurez.
vii. No encontrar sus orígenes en un trastorno mental u otra
enfermedad médica, así como tampoco en el consumo de
sustancias.
viii. Afectar la sensibilidad del individuo que las padecen
llevándolo incluso a ser incapaz de sentir empatía por los
demás –en especial por sus potenciales víctimas- o tener
restricciones al emplear los métodos más crueles para
alcanzar sus objetivos.
!130
de éstas, frente a lo cual ciertos autores333 muestran disconformidad,
ya que inciden en que éstos no son enfermedades, sino sistemas
estructurales y funcionales dinámicos que, al no ser entidades
permanentes ni estáticas, no pueden ser parte de las
categorizaciones que se hacen sobre las enfermedades mentales. Se
sustentan, pues, en que la personalidad no es una variable que
pueda dividirse entre lo normal y lo patológico, sino que cada quien
es como es.
i. Trastorno Paranoide:
333 Cfr. MILLON, Theodore y otros. Trastornos de la personalidad: más allá del DSM-IV.
1ed., Barcelona: MASSON, 2004, pp. 7 y ss. Este autor indica que una clasificación más
adecuada de los trastornos de personalidad es la que diferencia entre: a) las
personalidades con dificultades para el placer, donde se incluyen los trastornos
esquizoides, los trastornos por evitación y los trastornos depresivos; b) las personalidades
con problemas interpersonales, que abarca los trastornos de personalidad por
dependencia, los trastornos histriónicos, los trastornos narcisistas y los trastornos
antisociales; c) las personalidades con conflictos intrapsíquicos, que abarcan los
trastornos sádicos, los trastornos compulsivos, los trastornos negativistas y los trastornos
masoquistas; y, d) las personalidades con defectos estructurales, que abarcan los
trastornos esquizotípicos, los trastornos límite de la personalidad, los trastornos paranoides
y los trastornos de la personalidad descompensada.
!131
ii. Trastorno Esquizoide:
!132
ocurre sobre todo cuando su nivel de frustración alcanza niveles que
no puede tolerar, explotando contra todo y todos los que están a su
alrededor. Sobresalen en homicidios, lesiones, delitos contra la
libertad sexual, tráfico de drogas, proxenetismo, etc.
v. Trastorno Histriónico:
!133
vi. Trastorno Anancástico:
!134
viii. Trastorno Dependiente:
!135
terceros o pactan una muerte conjunta, matando a su víctima para
luego suicidarse con la misma arma. Por otro lado, durante la faceta
maniática, estos individuos pueden cometer delitos contra la libertad
sexual por la exaltación de su libido, lesiones y, al igual que en el
periodo depresivo, homicidio.
a. Trastornos de Ansiedad:
!136
Las personas neuróticas se diferencian de los que sufren de
esquizofrenia o paranoia en que no sufren de delirios ni se alejan de la
realidad en la que habitan; aunque –en contraste de los individuos
paranoicos- tienen dificultades en sus relaciones interpersonales por
su intenso grado de inseguridad, ansiedad, inferioridad y sentimiento
de culpa.
b. Trastorno Obsesivos-compulsivo:
c. Trastornos Somatomorfos:
!137
de trastorno la persona se resiste a considerar que sus malestares son
causados por motivos psicológicos.
b. Cleptomanía:
!138
alucinaciones o delirios; sino para desecharlos, regalarlos o
esconderlos.
c. Ludopatía:
d. Piromanía:
!139
trastornos sexuales propiamente dichos334, las parafilias y los trastornos
de la identidad sexual; y las incluye en las enfermedades mentales.
Por su parte, la CIE-10 considera que los trastornos sexuales son parte
de los trastornos de la personalidad y de comportamiento adulto,
diferenciando entre los trastornos de identidad sexual 335, los trastornos
de inclinación sexual, las disfunciones sexuales no orgánicas y los
trastornos de orientación sexual. En los primeros incluye al
transexualismo, el transvestismo no fetichista, el trastorno de la
identidad sexual en la infancia y otros no especificados; mientras que
en los segundos clasifica al fetichismo, transvestismo fetichista,
exhibicionismo, escoptofilia o voyerismo, paidofilia, sadomasoquismo,
los trastornos múltiples de inclinación sexual, entre otros no
especificados.
334 Desde una perspectiva criminológica, no son de relevancia, pues son parte de esta
clasificación los trastornos del deseo sexual, de excitación sexual, orgásmicos, sexuales
por dolor y otras disfunciones sexuales, como las inducidas por sustancias o las que deben
sus causas a otras enfermedades médicas.
335 Los trastornos de la identidad sexual en ambas clasificaciones son similares. Hacen
referencia a enfermedades relacionadas con problemas en el rol sexual del individuo, de
manera que tiene la constante percepción de que forma parte del sexo opuesto. Desde
un punto de vista criminológico, sobre sale la figura del transexualismo, que conlleva a
que la persona tenga el deseo constante de cambiar de sexo por medio de una
intervención quirúrgica. A causa de la marginalidad a la que las personas transexuales se
enfrentan, existe mucha incidencia criminológica en su diario vivir, ya que pueden
dedicarse a delitos menores contra el patrimonio o a la prostitución.
!140
a. Fetichismo:
b. Exhibicionismo:
!141
c. Froteurismo:
d. Voyerismo:
e. Masoquismo:
f. Sadismo:
!142
intensificar la estimulación sexual que ya obtuvo por otros medios, por
lo que la actividad solo será considerada un trastorno cuando la
actividad es la fuente más importante para la estimulación.
g. Pedofilia:
Para que una persona que tiene vinculaciones sexuales con niños
entre los 13 años sea considerado un pedófilo debe tener, al menos,
16 años y por lo menos 5 años mayor que su víctima.
h. Asfixiofilia:
Los psicópatas son individuos que conviven día a día con nosotros en
sociedad. Su diagnóstico es más complicado que en el caso de las
!143
personas que padecen de enfermedades mentales, ya que en
muchos casos los trastornos de personalidad no se manifiestan sino en
la intimidad de la persona, excepto en los supuestos de individuos
especialmente violentos o que tienden a expresas su trastorno en
público.
338 LEGANÉS GÓMEZ, Santiago y María Ester ORTOLÁ BOTELLA. Óp. Cit., pp. 69 y ss.
339 JIMÉNEZ DÍAZ, María José y Gema María FONSECA MORALES. Trastornos de la
personalidad (psicopatías. Tratamiento científico y jurisprudencial. 2da ed. Madrid: CESEJ,
2007, pp. 127 y ss.
!144
toda responsabilidad, pues para los psicópatas ésta recae sobre
quienes lo rodean y nunca sobre su persona.
e) Responsabilidad penal:
!145
Existen diferentes posturas acerca de si es que las psicopatías son
causal de inimputabilidad: el maestro MIR PUIG indica que la
inimputabilidad del psicópata se sustenta en su incapacidad de
comprensión de la criminalidad de sus actos y de dirigir sus acciones,
por lo que todo psicópata es inimputable por la naturaleza de su
trastorno 342, de lo que deriva que nunca se le pueda imponer una
pena, sino una medida de seguridad. En oposición a este
planteamiento, existen quienes resaltan la peligrosidad del sujeto en
lugar de enfocarse en su culpabilidad, por lo que postulan que solo
imponer medidas de seguridad a los delincuentes psicópatas significa
exponer a la sociedad a un peligro constante e innecesario, por lo
que defienden que –en pro del resto de la comunidad- estos sujetos
deberán ser encarcelados.
342 MIR PUIG, Santiago. Derecho penal, parte general. 7ed. Montevideo: B DE F, 2004, p.
557.
!146
CAPÍTULO II
LA DELINCUENCIA JUVENIL
!147
1. INTRODUCCIÓN
2. CONCEPTO
343 PODER JUDICIAL. Sistema de reinserción social del adolescente en conflicto con la ley
penal – SRSALP. Lima, p. 5.
344 LEGANÉS GÓMEZ, Santiago y María Ester ORTOLÁ BOTELLA. Óp. cit., pp. 191 y ss.
!148
Desde una perspectiva estadounidense o amplia, la delincuencia
juvenil abarca a todas aquellas conductas desviadas cometidas por
menores de edad, sean o no delictuales; mientras que, desde una
perspectiva europea o restringida, el término hace referencia a
aquellas personas menores de edad que cometen hechos que, si
fueran adultos, se considerarían delitos 346.
346 En este sentido, en el II Congreso de las Naciones Unidas sobre Prevención del Delito
y Tratamiento del Delincuente de 1960 se determinó que no deben crearse figuras
delictivas exclusivas para los menores de edad que abarquen conductas no sancionadas
penalmente para los adultos, sea cual sea la gravedad de la conducta.
347 LEGANGÉS GÓMEZ, Santiago y María Ester ORTOLÁ BOTELLA. Loc. cit.
!149
penalmente de forma restringida; y los adultos (mayores de 21 años)
a los que se les aplica la ley penal con todo su peso.
349 Recordemos que estas teorías están conformadas por la Teoría de la Anomia de
DURKHEIM y de MERTON, así como la Teoría del Control de HIRSCHI y la Teoría de la
Desigualdad de Oportunidades de CLOWARD y OHLIN
350 LEGANÉS GÓMEZ, Santiago y María Ester ORTOLÁ BOTELLA. Óp. cit., pp. 197 y ss.
!150
principales en los que se basan las teorías que intentan explicar la
génesis de la delincuencia juvenil: los factores biológicos,
psicológicos, de personalidad y de cognición.
a) Teorías biologicistas:
b) Teorías Psicológicas:
c) Teorías de la Personalidad:
!151
que implica que los primeros presenten una tendencia hacia la
criminalidad. Para este autor, los altos índices de extraversión,
psicoticismo y neurotisimo son factores predominantes en la
personalidad del delincuente; aunque no fue sino hasta las
investigaciones de DRWAL, CROSS y TRACY, PARROT y STRONGMAN y
LEIFCOURT que el factor autocontrol o control interno es tomado en
cuenta.
d) Teorías de la cognición:
!152
provienen de estratos sociales bajos, aunque gracias a TITTLE351 es que
se llegó a conocer que no existe una relación sustancial entre la clase
social del joven y su calidad de delincuente, sino que es más sencillo
ser atrapado por los agentes del orden si uno pertenece a estratos
económicos de clase media o baja.
!153
que se encuentran en constante búsqueda de la aceptación de los
demás, los delincuentes que pertenecen a este grupo no logran
desarrollar una estabilidad emocional adecuada para superar los
estragos de la adolescencia y, junto a la frustración y soledad,
tienden a refugiarse en las drogas y el alcohol.
Con esto queremos decir que los factores personales del delincuente
juvenil (agresividad, poco autocontrol, problemas escolares,
inestabilidad emocional, etc.), unidos a factores externos (las drogas,
el alcohol, las dificultades económicas, los medios de comunicación
violentos y una baja aceptación familiar -en lo que se incluye, de
hecho, el provenir de una familia desintegrada-) y las oportunidades
delictivas, forman el caldo de cultivo necesario para el surgimiento
de la delincuencia en la juventud.
!154
personalidad o de personalidad disocial, que –recordemos- son
sujetos que solo piensan en su bienestar, crueles e indiferentes ante el
dolor o sufrimiento ajeno.
6. EL PANDILLAJE:
!155
violentos y que desarrollaron un sistema cultural y de valores propios
diferente al de la común sociedad, datan del siglo XIX: así, los
ejemplos no solo se encuentran en Estados Unidos –que, para
mediados del SXIX contaba con más de 200 guerras de pandillas solo
en Nueva York-, sino también en Europa, en grandes metrópolis como
Londres, y en Latino América, sobre todo en México.
a) Estructura:
!156
b) Características:
!157
Otra característica tradicional de las pandillas juveniles trata del
factor territorial: recordemos que es ésta una de las principales causas
de las guerras entre pandillas en los Estados Unidos. Este tipo de
agrupaciones se circunscribe a un ámbito territorial determinado, el
cual defienden y explotan en las actividades que deciden realizar;
aunque no se descarta el supuesto en el que una pandilla juvenil no
tome en cuenta el territorio en el que opera, sino que extiende sus
dominios a cualquier distrito o provincia donde pueda organizar sus
acciones.
!158
ascender a las “ligas mayores” u organizaciones criminales en base a
sus méritos criminales y su prometedor futuro delincuencial.
La primera de ellas, las barras bravas, son las más violentas. Surgieron
en la década de los 80’s, influenciadas por las barras fuertes
argentinas de veinte años atrás. Se caracterizan por enfrentamientos
q u e p u e d e n c o b r a r v i d a s h u m a n a s 352, re a l i z a d o s e n l a s
inmediaciones de los Estadios antes o después de celebrarse partidos
de futbol. Sus agresiones se extienden inclusive a los integrantes de los
equipos futbolísticos contrarios, la policía, las personas que se cruzan
352 Se conoce como “clásico” al enfrentamiento que se realiza entre la barra brava
denominada “Comando Svr”, de la agrupación futbolística “Alianza Lima”, y “Trinchera
Norte”, de la agrupación de “Universitario de Deportes”.
!159
en su camino o los inmuebles ubicados en las calles por las que
transitan. Para tales efectos, utilizan armas blancas, cualquier objeto
contundente, vidrios y hasta armas de fuego.
!160
Las acciones cometidas por los miembros de las pandillas perniciosas
no tenían que ser necesariamente delictivas para que se señale su
pertenencia a dicha agrupación. Bastaba, según la normatividad
derogada, que alteraran el orden público. Dicha figura era tan
amplia e imprecisa –tanto en el extremo del concepto de orden
público como de las acciones que puedan intranquilizarlo- que era
susceptible de incluir desde canticos grupales en alta voz hasta
guerras de pandillas con arma de fuego.
!161
mandatos y prohibiciones354 o, si se requiere y lo amerita la condición
del menor, privativas de libertad. No obstante, las medidas no son
irrevocables, sino que, aplicando los principios de interés superior del
menor y de necesidad, pueden ser suspendidas, revocadas o
sustituidas por otra que sea más beneficiosa para el joven.
354 En la versión original del Decreto Legislativo N° 1204, esta medida fue denominada
como medidas privativas de libertad. Sin embargo, con fecha 02 de octubre del 2015, se
corrigió mediante una fe de erratas con el nombre que mantiene en la actualidad.
!162
Cuando el hecho punible trata de un delito doloso sancionado por la
legislación nacional con pena privativa de libertad no mayor de dos
años y que no se haya recurrido a la violencia o amenaza para
cometerlo ni se haya puesto en riesgo grave la vida o integridad física
o psicológica de terceros; es posible aplicar la libertad asistida, lo que
quiere decir que se le otorga la libertad al menor sentenciado a
cambio de que se obligue a participar de programas educativos y a
recibir orientación especializada que favorezca a su tratamiento y
sociabilización. Los programas a los que el adolescente se someterá y
la asistencia que recibirá no podrán ser menor de 6 meses ni mayor
de 12, sea en una institución pública o privada.
355 El beneficio puede ser el restituir el bien afectado con otro de similar valor o
naturaleza, así como el obligarse a entregar una suma de dinero fijada por el Juez, que
no exceda la cuantía de los daños y perjuicios provocados por el infractor.
!163
Para la aplicación tanto de la reparación directa a la víctima como
de la prestación de servicios a la comunidad, se tomarán en cuenta
las aptitudes y habilidades del adolescente y se evitará imponer
cualquier forma de esclavitud y trato inhumano o degradante.
Tampoco se puede obligar al menor a realizar actividades que
menoscaben su salud, seguridad, trabajo o asistencia a un centro de
educación.
b) Mandatos y prohibiciones:
!164
Las medidas privativas de libertad que se encuentran reguladas en la
legislación actual son la internación domiciliaria, la libertad restringida
y la medida de internación. De éstas, las dos primeras limitan la
libertad del menor de forma parcial, de manera tal que se le permite
tener un horario de salidas acorde con las necesidades que tenga
relacionadas con salud, trabajo, estudios u otros motivos justificados;
mientras que, por su parte, la medida de internación se encuentra
destinada de forma excepcional para aquellos jóvenes que no han o
no podrían responder positivamente a las sanciones socioeducativas,
prohibitivas y las demás medidas privativas de libertad y que cumplan
requisitos que mencionaremos más adelante. Comenzaremos a
analizar cada una de ellas.
!165
La segunda medida regulada en el Código de los Niños y
Adolescentes es la libertad restringida, que puede aplicarse cuando
el hecho cometido por el menor es considerado un delito doloso
sancionado con pena privativa de libertad no menor de cuatro años
o no menor de seis años, si es que el infractor no puso adrede en
grave riesgo la vida o integridad física o psicológica de las personas.
Consiste, pues, en obligar al menor a participar en programas de
intervención diferenciados o de finalidad formativo-educativo –tal
como en el caso de la internación domiciliaria- por al menos seis
meses y no más de un año. Se ejecuta en los Servicios de Orientación
al Adolescente 356, otras entidades que desarrollen las mismas
funciones o instituciones del sector público o privado que lleven a
cabo fines asistenciales o sociales.
Debe tenerse claro que, ya que se trata de una medida que limita
intensamente la libertad del menor, solo procede de forma
excepcional en alguno de los supuestos descritos y que la duración
de la misma no puede exceder el tiempo de la pena abstracta
establecida en la legislación penal para el tipo penal en el que ha
incurrido el menor infractor, aunque no podrá ser menor de cuatro ni
356 Son dependencias del Poder Judicial conocidos mediante la abreviatura SOA que
forman parte del régimen de medio abierto. Se encargan de realizar trabajo preventivo y
de llevar a cabo programas en contra de la violencia juvenil, el consumo de drogas y
alcohol, las pandillas, problemas familiar y cualquier otro factor que pudiera ser
perjudicial para los jóvenes; por medio de un staff de profesionales en la salud, salud
mental, asistentes sociales y docentes.
!166
mayor de ocho años cuando el adolescente tenga entre 14 y 16 años
de edad. Es posible, incluso, que el Juez varíe la medida (esto es, la
cambie por otra de menor gravedad, reduzca su plazo o la deje sin
efecto) una vez que haya transcurrido el 50% del plazo de internación
impuesto y que cuente con un informe favorable por parte del
equipo multidisciplinario que estudia el caso; pues toda decisión que
tome debe hacerlo en aras del interés superior del menor y de los
fines de la sanción.
!167
por las autoridades 357 y que resalta la necesidad de la
implementación de programas de prevención y de socialización que
tengan en cuenta los factores de riesgo y las directrices emitidas en el
derecho internacional.
357 En este sentido, se presentó el Proyecto de Ley N° 1951/2012-CR, presentado por el Grupo
Parlamentario Fuerza Popular el 28 de febrero del 2013, el cual se dirige a otorgar
responsabilidad penal a los menores entre 16 y 18 años de edad cuando se cometa el
delito de homicidio calificado por lucro o cuando la víctima de homicidio sea un
funcionario o servidor público.
!168
Por otro lado, se tiene que la duración de la medida socioeducativa
impuesta suele ser de 7 a 12 meses en ambos medios (36.52%),
aunque es preocupante que, en medio cerrado, 308 casos se traten
de jóvenes aún no sentenciados.
!169
CAPÍTULO III
LA DELINCUENCIA SEXUAL
1. INTRODUCCIÓN. 2. EVOLUCIÓN DE LA
DELINCUENCIA SEXUAL. 3. CONCEPTO. 4. LA
FIGURA DEL AGRESOR SEXUAL, a) Violadores
sexuales, b) Agresores de menores de edad. 5.
CONSECUENCIA DE LA AGRESIÓN SEXUAL EN LA
VÍCTIMA. 6. LA INVESTIGACIÓN EN LA
DELINCUENCIA SEXUAL. 7. LA PRUEBA EN LA
DELINCUENCIA SEXUAL, a) La ausencia de
incredibilidad subjetiva, b) La verosimilitud, c) La
persistencia en la incriminación.
!170
1. INTRODUCCIÓN
Los delitos de tipo sexual han existido desde tiempos remotos, sobre
todo en su manifestación por excelencia: la violación sexual. Sin
embargo, no siempre fueron considerados como afectaciones a la
libertad sexual y, además, no siempre fueron entendidos como lo son
en la actualidad; aunque siempre se consideró como una de las
mayores afectaciones que se podían realizar contra otro ser humano.
359 NOGUERA RAMOS, Iván. Violación de la libertad e indemnidad sexual. Lima: Grijley,
2015, p. 43.
!171
encontraban penada en favor de la libertad sexual de la mujer, ya
que ésta no gozaba aún del derecho a elegir libremente sobre su
vida sexual, sino que protegía la castidad femenina y el honor de la
familia de la víctima. Este punto fue tan importante que, durante el
tiempo de los visigodos, se exigía que la mujer haya perdido la
virginidad en la agresión sexual para que el delito se configure.
En los tiempos más conservadores del medioevo, era difícil que las
agresiones sexuales fuesen reportadas a las autoridades, pues –
gracias a la influencia de la Iglesia Católica- la virginidad y castidad
eran elementos claves en la reputación no solo de una persona, sino
de su familia 360. Las víctimas de violencia sexual encontraban justicia
generalmente en manos de sus familiares, quienes buscaban
revindicar el honor de ésta y la reputación familiar a través de la
venganza violenta. Resalta que el agresor era exclusivamente una
persona diferente al esposo de la víctima, quien en todo momento
tenía derecho a mantener relaciones con su mujer, sea que ésta
quisiera o no lleva a cabo el acto sexual. Mención aparte merecen
los supuestos en los que la víctima ejercía la prostitución, pues –en
contraste con aquella mujer que no lo hacía- poco o nada podía
hacer para restituir el daño causado. Era, pues, una manifestación
criminológica reservada para las mujeres que gozaban de buena
reputación social, vírgenes y siempre que el acto se llevara a cabo
fuera del matrimonio.
360 Recordemos, pues, la famosa costumbre de exhibir las sábanas manchadas con
sangre por la pérdida de la virginidad de la nueva esposa tras la noche de bodas, así
como las múltiples vidas femeninas que se vieron afectadas con el desprecio de sus
maridos, la humillación pública y el regreso al hogar paterno si ésta no llegaba virgen al
matrimonio.
!172
necesidades, sea que culmina el acto sexual o que realice actos
contra el pudor de las personas; concepto que fue evolucionando a
medida que lo hacía el colectivo social y que cambió hasta aceptar
que las agresiones sexuales pueden no ser necesariamente violentas,
sino que existen otros métodos para afectar la libertad sexual de una
persona, de donde proviene la tipificación de delitos como el de
seducción, y otros actos que deben considerarse parte de este tipo
de criminalidad, como el acoso sexual.
!173
3. CONCEPTO
363 MARTÍNEZ, José. “Abuso sexual contra el niño y el adolescente en el derecho penal
sustantivo venezolano” en Anuario de Derecho, N° 23, pp. 279-282.
!174
En este punto ha de tenerse en claro que la línea entre las conductas
desviadas sexuales y las conductas permitidas es frágil y que deberá
analizarse la percepción de la sociedad de la que se trate. Como
ejemplo de ello se tiene la aceptación en algunas sociedades
orientales y africanas de los matrimonios celebrados entre adultos y
niñas, a pesar de que el país al que pertenecen –en teoría- los
prohíbe; los cuales forman parte de actos que, en otras sociedades,
se consideran manifestaciones atroces de pedofilia o abuso sexual de
menores de edad. En forma contraria, el utilizar minifaldas apretadas
o escotes muy profundos es un comportamiento no penado por
nuestro derecho penal pero que, no obstante, en los Estados Islámicos
puede pagarse con la propia vida.
364 MAGGIORE, Giuseppe. Derecho penal, parte especial. Vol. IV, Bogotá: Ed. Temis,
1955, pp. 49 y ss.
365 BRAMONT-ARIAS, Luis. Temas de Derecho Penal. Tomo III. Lima: Ed. San Marcos, 1990,
p. 11.
!175
perfecta de la perversión y degradación humana. Sin embargo, los
agresores sexuales no manejan una personalidad uniforme ni siempre
se conducen en base exclusiva a móviles sexuales, sino que pueden o
no padecer alguna enfermedad mental, trastorno de personalidad o
–por el contrario- ser objetivamente sanos.
a) Violadores sexuales:
!176
Por último, destaca el violador que actúa en base a la oportunidad
que le brinda otro delito, como puede ocurrir en el supuesto en que el
sujeto agrede a una persona para robarle sus pertenencias, quien
cae en un estado de inconsciencia. Es el llamado violador impulsivo.
!177
descenso significativo de sus calificaciones académicas, el rechazo
por las actividades comunes a las que solía dedicarse y el abandono
de la escuela o los estudios superiores.
!178
agresor368; el mismo que debe contar –necesariamente- con su
consentimiento informado. En el caso del examen realizado sobre la
víctima, ha de incluirse una breve historia cínica que valore su estado
mental, su orientación (tiempo, lugar y persona), su nivel de
consciencia, atención, afectividad, entre otros; así como una
descripción de los hechos supuestamente acontecidos,
acompañados de una descripción del señalado como agresor y los
medios que utilizó para perpetrar el hecho. Tras ello, el examen debe
contar con una exploración física completa que incluya los signos
vitales de la víctima, una detallada inspección que abarque su
actitud, integridad, estado de la ropa, etc.; las lesiones que presente
y la antigüedad y evolución de éstas, haciendo especial énfasis en
aquellas que puedan ser producto de una agresión de tipo sexual,
como mordeduras, hematomas, equimosis, desgarros genitales,
desfloración, exploración proctológica (señalando las características
de los pliegues y esfínter anal); y el resultado de la búsqueda de
pelos, fibras o secreciones (sangre, semen, contenido vaginal).
368 GARCÍA GARDUZA, Isamel. Procedimiento pericial médico-forense. 4ed. México: Ed.
Porrúa, 2012, pp. 150 y ss.
369 Respecto a este punto, la posibilidad o no de una erección suficiente que permita la
penetración, en el supuesto de que ésta sea la incriminación en el caso concreto, es
imprescindible. Así, he conocido de casos en los cuales la disfunción eréctil del acusado
fue determinante para probar su inocencia.
!179
dejar espacio a la suposición o a la indeterminación. Además, han de
ser suscritas por dos médicos legistas, a fin de evitar subjetividades u
otras problemáticas que podrían derivar de la firma de un solo
médico.
b) La verosimilitud
!180
fuera del país al momento de los hechos, afectará el grado de
verosimilitud de la acusación.
c) La persistencia en la incriminación
CAPÍTULO IV
1. LA VIOLENCIA Y LA AGRESIVIDAD, a)
Diferenciación entre violencia y agresividad, b)
Origen de la conducta agresiva (i. Teorías
Instintivistas, ii. Teorías Ambientalistas), c) Tipos
de agresión (i. Agresión por venganza, ii.
Agresión sádica, iii. Agresión por poder, iv.
Agresión para ganar confianza o por
compensación, v. Agresión por lucro), d) Tipos
de violencia (i. Violencia primaria, ii. Violencia
secundaria), e) Incidencia de los delitos
violentos en nuestra realidad nacional. 2. LA
V I O L E N C I A D O M É S T I C A O FA M I L I A R , a )
Concepto, b) Causas de la violencia de tipo
doméstico (i. Modelo psiquiátrico, ii. Modelo
psicosocial, iii. Modelo sociocultural, iv. Modelo
ecológico), c) Factores de riesgo (i. Factores
personales, ii. Factores ambientales, iii. Factores
de oportunidad), d) Manifestaciones de la
!181
violencia doméstica (i. Violencia física, ii.
Violencia psicológica, iii. Violencia sexual, iv.
Violencia económica), e) La violencia
doméstica como un círculo vicioso, f) Los daños
producidos por la violencia doméstica, g)
Análisis criminológico de la violencia doméstica
(i. Perfil criminológico de la víctima, ii. Perfil
criminológico del agresor), h) Los niños y
adolescentes como víctimas de violencia
doméstica, i) ¿Por qué no se denuncia la
violencia doméstica? 3. LA VIOLENCIA DE
GÉNERO, a) Concepto, b) Causas, c)
Manifestaciones (i. El feminicidio, ii. Las
violaciones correctivas, iii. Las esterilizaciones
forzadas)
!182
1. LA VIOLENCIA Y LA AGRESIVIDAD
!183
destina a obtener el control y la dominación de otros 371; mientras que,
en cambio, la agresividad es una tendencia que el sujeto presenta
comportamientos lesivos, tanto para sí como para terceros, que
pueden manifestarse en diversos grados 372. De ello deriva que la
concepción de violencia varíe según cada sociedad y el momento
histórico en el que se encuentre, mientras que la agresividad se
define, sobre todo, en términos de tendencia interna del sujeto.
Por su parte, HERRERO HERRERO 374 indica que por violencia debe
entenderse al hecho de conducir a un tercero o conseguir algo de
éste por medio de la fuerza o coacción. La agresividad, entendida
desde una vertiente negativa375, es la tendencia de una persona que
se vincula con actitudes hostiles, destructivas, perversas o
malintencionadas; por lo que –para este autor- la violencia no es sino
el efecto de la agresividad cuando es exteriorizada en el
comportamiento humano.
371 CORSI, Jorge y Graciela PEYRÚ. Violencias Sociales. Barcelona: ARIEL, 2003, p. 20.
373 ECHEBURÚA, Enrique y Santiago REDONDO. ¿Por qué víctima es femenino y agresor
masculino? La violencia contra la pareja y las agresiones sexuales. Madrid: EDICIONES
PIRÁMIDE, 2010, p. 33.
375 Para HERRERO HERRERO (Criminología. Parte general y especial, cit., p. 785), la
agresividad puede ser positiva, cuando es articulada como una tendencia activa hacia
un servicio útil, de provecho propio y/o interés del prójimo; o negativa, cuando es dirigida
hacia actitudes dañinas, provocando así que la persona se convierta en un ser
inadaptado.
!184
El mismo sentido le otorga OTROSKY-SOLÍS 376 , quien distingue entre
una agresión benigna, que es una reacción destinada a protegernos
del peligro acechante, breve y espontánea; y una agresión maligna,
también llamada violencia, que implica el deseo sádico de dañar a
los demás por puro placer.
i. Teorías Instintivistas:
376 OSTROSKY, Feggy. Mentes asesinas: la violencia en tu cerebro. 2ed. México: CIUDAD
SATÉLITE, 2011, pp. 77 y ss.
!185
Se subdivide en las siguientes perspectivas: la Teoría etológica, la
Teoría psicoanalítica, la Teoría de la personalidad, la Teoría de la
frustración y la teoría de la señal de activación.
a. Teoría etológica:
b. Teoría psicoanalítica:
379 Se cree que el tercer cambio de pensamiento de FREUD se debió a la influencia que
implicó la Primera Guerra Mundial en él, que lo llevó a perder parte de la esperanza que
resguardaba en la naturaleza humana.
380 Vid. FREUD, Sigmund. “El porqué de la guerra” en Obras completas, Vol. VIII. Madrid:
BIBLIOTECA NUEVA, 1974, p. 3211.
!186
opuestos a los instintos de vida o de conservación-, que se
manifiestan en el sujeto como expresión del instinto de muerte o de
reducción de excitación y que es redireccionado hacia otros como
un intento de proteger la vida propia a costa de la vida de los demás.
c. Teoría de la personalidad:
d. Teoría de la frustración:
e. Teoría de la señal-activación:
!187
frustración, aunque tal brote dependerá del grado de activación
emocional del individuo.
b. Teoría sociológica:
!188
como aceptable, sino incluso como deseable o digna de premiación.
En este punto, resalta el labor de los medios de comunicación, que
pueden expresar el mensaje de que dejarse llevar por la agresión y la
violencia es un método idóneo para alcanzar las metas trazadas.
d. Teoría de la subcultura:
c) Tipos de agresión:
381 Vid. Resolución WHA49.25 de la OMS que exhorta a los Estados Miembros a que
evalúen los problemas de violencia que concurran en su territorio y que los comuniquen a
su Organización para disponer medidas necesarias a fin de afrontarlos.
!189
La agresión es clasificada por la doctrina382 en cinco tipos, que
dependen de la motivación del delincuente. Así, encontramos:
Los delitos que comete el agresor de este tipo puede ser planificado,
eligiendo previamente a su víctima, la oportunidad más favorable
para el ataque y el medio a utilizar; o también puede ser no
planificado, como parte de una reacción emocional que podría
dañar no solo a su blanco, sino también a quien sea que se
encuentre cerca del lugar de los hechos.
!190
Un ejemplo clásico de agresión por venganza reside en el caso
Lorena Bobbit383. Ocurrió el 23 de junio del año 1993 en Manassas, un
pueblo de Estados Unidos, cuando un marine del ejército de los
Estados Unidos llamado John Wayne Bobbit llegó a su casa ebrio y
violó a su esposa, Lorena Bobbit, una inmigrante latina de origen
ecuatoriano. Para ella, fue el acto que desencadenó su venganza,
pues durante los seis años que estuvo casada con John fue víctima
de maltratos físicos, psicológicos y humillaciones. A mitad de la
noche, tras haber sido violada y mientras John dormía, Lorena se
dirigió a la cocina y regresó al dormitorio con un afilado cuchillo. Sin
pensarlo, rebanó el miembro viril de su esposo en dos pedazos.
383 El caso de Lorena Bobbit tuvo tal repercusión a nivel mundial que la revista People
refirió que fue “el corte que sintió el mundo entero”.
384 Ciento de feministas, armadas con tijeras, hicieron revueltos en las puertas de la
Corte durante el juicio de Lorena Bobbit, para dar respaldo a la que consideraban su
heroína, por llevar a cabo lo que ninguna mujer maltratada había hecho hasta el
momento.
!191
la defensa-, aún más en justificar su reacción violenta y desmedida al
verse humillada, maltratada y violada por su propio esposo.
385 En nuestro sistema legal, la emoción violenta es regulada como una circunstancia de
atenuación y no como causal de exculpación de la responsabilidad penal.
!192
Las víctimas del agresor sádico son personas desconocidas, en su
mayoría, por el agresor. El ataque físico que sufren suelen ser heridas
en zonas que tienen significado sexual para el sujeto activo, como
cortes en los pezones, desgarres anales, etc. El modus operandi que
el agresor emplea para acercarse a su víctima es el de proyectar
autoridad, por lo que los delitos por lo general son planificados y los
agredidos son seleccionados meticulosamente. La firma criminal se
encuentra influenciada por la preparación con la que el agresor
opera, pues suele llevar a la escena de los hechos los materiales que
necesita (cuerdas, clavos, entre otros). Los ataques son lentos,
prolongados y crueles.
!193
dejaba correr para darles caza a lo lejos. Los cadáveres los colgaba
de los pies para dar paso a descuartizaciones o mutilaciones a fin de
divertirse. No se descarta que, incluso, utilizara restos de sus víctimas
como alimento para sus cerdos.
Desde el año 2007, este asesino serial cumple condena, sin goce de
beneficio de semilibertad o libertad anticipada, por seis de los
veintisiete asesinatos que se le imputó. Sin embargo, se cree que sus
víctimas fueron casi medio ciento, pero no se pudo identificar la
pertenencia de muchos de los restos de carne putrefacta hallados en
su hoy demolida granja.
!194
pasado 31 de octubre del 2015 y que sorprende por la brutalidad de
la agresión386. Nos referimos al caso Orlando Felipe:
386 Para mayor información de la noticia periodística, vid. RIVAS, José. “Se busca sujeto que
electrocutó y realizó cortes al cuerpo de su conviviente” en Diario La República, 11 de
noviembre de 2015. Disponible en: http://larepublica.pe/sociedad/717687-se-busca-
sujeto-que-electrocuto-y-realizo-cortes-al-cuerpo-de-su-conviviente
!195
La firma del delincuente consiste en actos voyeristas ya sea antes o
después de que la víctima sea agredida. Suele ocurrir incluso que el
sujeto activo lleva consigo alguna prenda de la persona a la que
atacó para recordar el hecho e incluirlo en su colección de
agresiones. También ocurre que el agente delictivo mantiene el
contacto con su víctima con la finalidad de atormentarla.
!196
oscilar entre una conducta muy agresiva hasta una agresión
controlada. El delito suele ser breve, por lo que no se persigue tanto
dañar a otro, sino alcanzar el beneficio material o personal.
!197
El tiempo en libertad del que gozó “Gringasho” fue poco. Con solo
quince años, se disfrazó de un desaliñado reciclador de botellas para
asesinar por encargo a tres presuntos delincuentes. Por estos delitos
fue sentenciado a seis años en el reclusorio de Trujillo, en el 2012. Sin
embargo, solo tres meses después fugó del centro juvenil y viajó a
Lima, según indica él para visitar su entonces pareja sentimental.
d) Tipos de violencia:
!198
i. Violencia primaria:
389 OSTROSKY, Feggy. Mentes asesinas: la violencia en tu cerebro, cit., pp. 77 y ss.
!199
irritabilidad que, hasta en un 44% de ocasiones, deriva en ataques de
enojo y agresiones; el consumo de alcohol incrementa la irritabilidad
y agresividad de las personas, pues disminuye el grado de serotonina
que segrega el organismo; el consumo de drogas provocan
alternaciones a nivel de la conciencia del sujeto que tienden a
volverlo más violento a medida que se vive una abstinencia o una
dependencia; y, por su parte, los trastornos de personalidad que más
se vinculan con la violencia son los de tipo paranoide, tipo esquizoide,
tipo esquizotípico, tipo antisocial, tipo histriónico y tipo narcisista.
!200
La importancia del estudio criminológico de los delitos violentos
responde, pues, a la necesidad no solo de explicar los motivos por los
que suceden, sino para nutrir las políticas destinadas a prevenirlos y a
resarcir el daño provocado en las víctimas.
393 BENÍEZ JIMÉNEZ, María José y Cristina RECHEA ALBEROLA. Violencia doméstica en el
municipio de Albacete. Castilla – La Mancha: UCLM, 1999, p. 2.
!201
a) Concepto:
394 INNOCENTI DIGEST. La violencia doméstica contra mujeres y niñas. N° 6. Italia: UNICEF
Ed., 2000, p. 2.
395 ROBLES SÁNCHEZ, José Ignacio y Eric GARCÍA LÓPEZ. “Sobre la violencia doméstica”
en Fundamentos de Psicología jurídica y forense. México: OXFORD, 2010, p. 155.
396 Forman parte de los parientes colaterales hasta cuarto grado de consanguinidad los
hermanos, tíos, sobrinos y primos hermanos. El parentesco por afinidad deriva del
matrimonio y abarca en su segundo grado al suegro, suegra, cuñado, cuñada, yerno o
nuera.
!202
La actual Ley N° 30364, Ley para Prevenir, Sancionar y Erradicar la
Violencia contra las Mujeres y los Integrantes del Grupo Familiar,
promulgada el 22 de noviembre del 2015, por su parte, señala que la
violencia familiar es cualquier acción que, en el contexto de una
relación de responsabilidad, confianza o poder, por parte de un
miembro del grupo familiar a otro, cause muerte, sufrimiento físico,
sexual o psicológico, o cualquier otro tipo de daño. Las personas que
se protegen de la violencia familiar mediante la nueva legislación son
similares a las referidas en la derogada Ley de Protección Frente a la
violencia Familiar: los cónyuges, ex cónyuges, convivientes, ex
convivientes, padrastros, madrastras, ascendientes, descendientes,
parientes colaterales de los cónyuges y convivientes hasta cuarto
grado de consanguinidad y segundo de afinidad397, quienes hayan
procreado hijos en común –convivan o no-, o con quienes no se
encuentran dentro de las personas descritas pero habitan en el
mismo hogar, siempre que no haya de por medio relaciones
contractuales o laborales.
397 Esto quiere decir que las agresiones por parte de o hacia los tíos, sobrinos, primos,
primas, hermanos, hermanas, etc., del conviviente son también consideradas como
violencia familiar, aunque no exista convivencia de por medio; lo que hasta antes de la
Ley N° 29282 del 2008 -en el marco en el que aún se encontraba vigente la Ley de
Protección Frente a la violencia Familiar-, no era posible.
!203
es más reducido, pero en esencia se enfoca a proteger a las mismas
personas.
399 DE LA TORRE SALAZAR, Teresa del Pilar. Violencia familiar y sexual. Manual de
orientación y prevención. Lima: DESCO Ed., 2013, p. 13.
400 RAMOS RÍOS, Miguel Ángel. Violencia familiar: protección de la víctima frente a las
agresiones intrafamiliares. 2ed. Lima: LEX & IURS, 2013, p. 88.
!204
solo un conflicto familiar, pues por sus manifestaciones y efectos ha
de resaltar que es un problema mucho más grave.
i. Modelo psiquiátrico:
401 GROSMAN, Cecilia y Silvia MESTERMAN. Violencia en familia. 3ed. Buenos aires:
EDITORIAL UNIVERSIDAD, 2005, pp. 523 y ss.
!205
iv. Modelo ecológico:
c) Factores de riesgo:
i. Factores personales:
!206
Ello, asociado con un bajo desempeño laboral o el desempleo,
conlleva a que las necesidades económicas incrementen la tensión
en el hogar, tanto para el agresor –que se muestra arisco y frustrado
en la vida-, como para la víctima –que por lo general no tienen un
control en su propia economía y que dependen monetariamente de
su agresor-.
402 Tener en cuenta que lo dicho aplica no solo para violencia contra la mujer en el
marco de la familia, sino también para los hijos u otros familiares.
!207
causan violencia doméstica per se, pero que sí se consideran
detonantes.
El enseñar a los niños desde muy pequeños que “los hombres deben
fuertes” o que “los niños no lloran” deriva a que, al crecer, se
presenten problemas de asertividad o de expresión adecuada de las
emociones, por lo que es más probable que la violencia brote a
causa de la frustración retenida. En sentido contrario, una sociedad
que califica a la mujer y a los niños como objetos accesorios al
patriarca o como seres débiles y confusos, contribuirá a un mayor
riesgo de violencia doméstica.
!208
En este punto, hay que distinguir entre los agresores que lo son en
todo momento y con cualquier persona; de los que únicamente
atacan cuando se encuentran a solas con el agredido.
404 ANDRÉS PUEYO, Antonio y Santiago REDONDO ILLESCAS. “Perfil y tratamiento del
maltratador familiar” en Cuadernos de la Guardia Civil: revista de seguridad pública, N°
30. Madrid: CENTRO DE PUBLICACIONES DEL MINISTERIO DEL INTERIOR, 2004, p. 26.
!209
pareja, a los hijos, a los ancianos, hermanos u otras personas que se
encuentren bajo el cuidado del agresor.
i. Violencia física:
405 Según el Registro de Feminicidio y Tentativa del Feminicidio del Ministerio Público, en
el 78% de los casos de feminicidio el agente es la pareja o ex pareja de la víctima, de lo
que se desprende que antes de la muerte se le precedió la violencia de tipo doméstico.
!210
su madre (27.3%), su padre (28.1%), ex pareja (17.0%), o hermano
(15.7%).
!211
acusaciones de ser infiel, en 17.6%; y la desconfianza con el dinero, en
un 14.4%.
!212
Es un tipo de violencia incluido como novedad en la Ley para
Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra las Mujeres y los
Integrantes del Grupo Familiar. Ocurre cuando, en el marco de la
familia, el agresor propicia un régimen económico absolutamente
dependiente de él, por lo que la víctima debe rogar para acceder al
dinero familiar; o, incluso, debe entregar todos sus ingresos al agresor
para que éste lo administre, a pesar de que el sujeto activo no aporte
a la economía del hogar.
!213
entendimiento de por qué muchas denuncias son retiradas o por qué
las víctimas no abandonan a sus agresores.
406 DE LA TORRE SALAZAR, Teresa del Pilar. Óp. cit., pp. 16 y ss.
!214
Finalmente, tras el ataque, la víctima y el agresor ingresan a una “fase
de arrepentimiento” o también llamada “luna de miel”. En ella el
sujeto activo intentará compensar el daño que ha causado, ya sea
porque realmente se encuentra apenado por lo que hizo o porque es
una forma de continuar dominado a su víctima. Será amable,
cariñoso y atento, curará las heridas que le hizo a la persona
maltratada o incluso tendrá consideraciones que nunca se hubiera
esperado de él o ella: cuidará a los niños, ayudará con los labores del
hogar o expresará amor hacia los demás miembros de la familia. Es
precisamente esta etapa lo que fortalece la relación de
dependencia entre la víctima y el agresor, pues la primera quiere
creer que no se repetirá un episodio como el de la segunda fase,
mientras que el segundo está convencido de que podrá contenerse
en otra oportunidad. En los supuestos en los que la víctima es un hijo y
el agresor es el padre o la madre, se suele compensar la agresión por
medio de juguetes, viajes o permisos.
Los daños físicos 408 que el agresor produce en su víctima son, por lo
general, las contusiones en diversas partes del cuerpo, las heridas
producidas por armas punzo cortantes o punzo penetrantes, las
quemaduras, fracturas de huesos o mutilaciones409 (con armas
blancas o incluso con los dientes). También forman parte de las
consecuencias físicas los embarazos no deseados, los abortos, las
enfermedades transmitidas sexualmente del agresor a la víctima o,
incluso, la muerte. No obstante, ha de tenerse en cuenta que muchas
408 El 65.4% de las mujeres entrevistadas en el 2014 por el INEI (Encuesta Demográfica…,
cit., p. 375) indican haber sufrido moretones y dolores; y un 13.7% señala que sufrió
heridas, lesiones, huesos o dientes rotos o quemaduras. Sin embargo, solo el 14.2%
consideró necesario ser atendida por un médico.
409 Sobre el particular, recordar los casos de mutilaciones a varones que ya han sido
materia de análisis en el acápite referido a la violencia y la agresividad.
!215
veces la violencia física no deja huellas alarmantes (un pellizco o una
bofetada puede no causar más que zonas rojas en la piel), pero que
no por ello se deberá dejar de considerar que son actos violentos.
Los daños también se expanden a las personas que son testigo de los
maltratos: es frecuente que los menores que conviven con la
violencia doméstica tengan problemas en el control de sus impulsos,
en el aprendizaje, enuresis, desórdenes de apetito o, incluso, opten
por la autoflagelación. A ello habrá que añadirle las grandes
posibilidades de que la víctima proyecte la frustración acumulada
que siente por su agresor hacia los demás miembros de la familia
(sobre todo, hijos, hermanos menores u otros parientes a su cargo) por
lo que el círculo de violencia se repetirá con ellos como víctimas.
!216
sentir que parte de la responsabilidad por las agresiones les
corresponde.
!217
de personas suelen sentir dolor, humillación y vergüenza por lo que
hacen, por una parte, y por el trato que reciben de su agresor, por
otra.
!218
Muy por lo contrario del imaginario colectivo, la necesidad de
controlar y dominar que presentan los agresores de este tipo, en
muchos casos, deriva de su propia inseguridad. Parte de los sujetos
maltratadores presentan problemas de autoestima y son
emocionalmente dependientes de sus parejas, a quienes agreden
por temor a ser dejados o desobedecidos. Incluso acontece que los
maltratos infantiles en la propia infancia del agresor son un patrón
frecuente que repiten de generación en generación, aunque
también existen supuestos en los que el niño maltratado o testigo de
maltrato evita bajo todo concepto repetir su experiencia de vida y
convertirse en maltratadores de otros.
Ante esto, el agresor responde que la violencia que ejerce sobre sus
agredidos es “mínima”, que “no es para tanto” o que “un poco
siempre hace bien”, de lo que se desprende que son personas que
asumen la violencia como una forma de vida o que minimizan su
verdadera intensidad o la niegan. Es su mecanismo más eficaz para
ejercer el poder y el control sobre quienes considera más débiles,
aunque no se identifica con la figura de un maltratador. En este
sentido, es común que justifique su propio comportamiento
señalando que lo hace “por proteger” a su víctima.
!219
Se diferencia entre los agresores de este tipo de violencia dos
perfiles410: a) los que son capaces de mostrarse amables, simpáticos y
cordiales frente a otras personas, pero violentos, impulsivos y
autoritarios en su hogar, que provocan que su víctima sea tachada
de mentirosa; b) y los que son agresivos y violentos en todo momento,
quienes suelen tener antecedentes penales o judiciales, poco
autocontrol y fácil irritabilidad no solo ante su familia, sino contra
todos.
410 MORILLAS FERNÁNDEZ, David Lorenzo. Análisis Criminológico del Delito de Violencia
Doméstica. Cádiz: UNIVERSIDAD DE CÁDIZ, 2003, pp. 76 y ss.
411 DIARIO EL CORREO. La ley que prohíbe el castigo físico para corregir niños. Lima, 14 de
diciembre del 2015. Consulta: 17 de diciembre de 2015. Disponible en: <http://
diariocorreo.pe/ciudad/la-ley-que-prohibe-el-castigo-fisico-para-corregir-a-los-
ninos-639781/>
!220
Así, la violencia infantil es un problema mundial que se manifiesta a
través de la trata de niños y adolescentes, los abusos sexuales, los
castigos crueles y humillantes, el abandono414, el trato negligente,
entre otros. Estos actos suelen llevarse a cabo en los ambientes
donde se supone que las víctimas deberían tener mayor protección,
como el propio hogar, los demás ambientes que comparte con otros
miembros de la familia y la escuela a la que asiste. Además, los
grupos de riesgos cambian en función a la edad y desarrollo de la
víctima415: mientras que los más pequeños son quienes se encuentran
mayormente expuestos a la violencia física, los adolescentes o
púberes son las víctimas sobre los que predomina la violencia sexual.
414 Para agosto del 2015, se registraron 1,665 niños, niñas y adolescentes que estaban
siendo atendidos por la Unidad de Servicios de Protección de Niños, Niñas y Adolescentes
(USPNNA) en los Centros de Atención Residencial (CAR). De los 512 niños atendidos, 40
eran lactantes y 99 no superaban los cinco años de edad. Del total de menores
atendidos, 497 fueron abandonados por sus padres o responsables, 176 habían tenido
experiencias de vida en calle, 148 fueron víctimas de abuso sexual y 263 lo fueron de
maltrato físico y psicológico
415 SÉRGIO PINHEIRO, Paulo. Informe mundial sobre la violencia contra los niños y las
niñas. UNICEF ed., p. 13.
!221
Las secuelas que derivan del maltrato infantil van más allá de los
hematomas y cicatrices. La OMS ha desarrollado en su nota
descriptiva N°150 que los adultos que de niños han sido víctimas de
violencia son más proclives a tener problemas conductuales, físicos y
mentales, ser violentos o ser víctimas de violencia mayor al crecer,
consumir tabaco, alcohol y drogas, suicidarse y, en los casos más
extremos, sufrir alteraciones del sistema nervioso e inmunitario.
!222
parte de su familia, en quien depositó su confianza y, peor aún, por
quien puede sentir aprecio.
3. LA VIOLENCIA DE GÉNERO
a) Concepto:
!223
sexual, o hasta causarle la muerte417. Dado que no se identifica del
todo con el concepto de violencia doméstica, la violencia de género
puede darse en la familia, pero también en la comunidad, en el
trabajo o en el propio sistema estatal.
b) Causas:
!224
A esto se le añade que a nadie sorprende, de hecho, que las
portadas de los diarios más populares sean “adornadas” con mujeres
en escasas prendas de vestir, que desde la más corta edad hacen
interiorizar el papel de la mujer en la sociedad, como objeto sexual y
no como ser humano digno de respeto. Día a día las mujeres y niñas
del país crecen interiorizando su papel de “adorno” u objeto de
deseo, de figura femenina y sensual que deben desarrollar, mientras
que al varón se le permite comportamiento que a una mujer serían
duramente criticados, como el tener múltiples parejas sexuales,
permanecer en la calle durante altas horas de la noche o expresar
actos violentos.
c) Manifestaciones:
!225
de sumisión y debilidad socialmente designados a la figura femenina,
así como a los conocidos “piropo callejeros”; la violencia de medios,
que se lleva a cabo a través de la sexualización de la mujer, que es
tan común de percibir en los medios de comunicación peruanos,
tales como la televisión, el cine y la prensa escrita; la violencia
laboral, que concurre especialmente por la diferencia de
oportunidades entre trabajadores varones y mujeres, además de los
maltratos a los que éstas pueden estar sometidas por su rol de madre
y/o gestante; entre otros.
i. El feminicidio:
!226
víctimas), al igual que el 53.6% de sus presuntos agresores. Se les dio
muerte, en un 54.9% de los casos, por medio de la asfixia, el
estrangulamiento o a través de cuchilladas, lo que denota el
carácter violento de este tipo de agresión. Además, el 55.7% de los
ataques se dieron dentro de casa.
a. Concepto:
421 En este sentido, TOLEDO VÁSQUEZ, Patsilí. Feminicidio. México: NACIONES UNIDAS
FONDO EDITORIAL, 2009, p. 27.
!227
motivos de género, pero que se diferencia del feminicidio en que el
primero de ellos -el femicidio-, hace referencia a los casos en los que
las acciones u omisiones no constituyen, necesariamente, delito, pues
no son imputables a personas determinadas o porque carecen del
dolo de matar.
b. Regulación en el Perú:
!228
confianza o cualquier otra relación de poder que garantice que la
víctima confiaba en su agresor; o discriminación423 contra la mujer.
c. Tipos de feminicidio:
423 Serán actos que evidencien discriminación contra la mujer (Directiva General N°
004-2009-SG-PNCVFS, de fecha 07 de mayo del 2009), los que son cometidos por: el
esposo, ex esposo, conviviente, ex conviviente, pareja sentimental o ex pareja
sentimental de la víctima; un tercero que no pudo concretar una relación sentimental
con la víctima; un compañero de trabajo o jefe que, previamente, hostigaba de forma
sexual a la mujer fallecida; un cliente sexual, si se trataba de trabajadoras sexuales; un
desconocido o conocido que viola a la víctima antes de matarla; su padre o madre por
estar la víctima en estado de gestación o por tener una relación sentimental no
consentida por el agente; un proxeneta, rufián o tratante sexual; subversivos u otros
contra mujeres del enemigo, a fin de humillarlo o desmoralizarlo; o que traten de
infanticidio selectivo por género; entre otros supuestos que se vinculen con discriminación
femenina.
!229
Por lo general, cuando se menciona a las mal denominadas
violaciones correctivas, se suele pensar en hechos acontecidos en
lejanos países africanos. Sin embargo, estas atrocidades se viven
también en nuestro país, aunque sean muy pocos los casos en los que
se denuncian o, incluso, pocos los supuestos en los que las denuncias
por violación vienen acompañadas de la precisión de haberse
cometido por motivos de orientación sexual.
A pesar de ser una realidad que se vive en Perú, lo cierto es que son
escasos los estudios que versan sobre la materia, lo que –junto con la
inacción estatal-, facilita la impunidad de los varones que violentan
sexualmente a las mujeres lesbianas.
425 RED PERUANA TLGB y PROMSEX. Informe anual sobre derechos humanos de personas
trans, lesbianas, gays y bisexuales en el Perú 2014-2015. Lima: s/e, 2015, pp. 47 y ss.
!230
cuerpo, tal cual se indicó, sino evitar que las clases más pobres del
Perú se reprodujeran.
!231
Hoy en día, las víctimas de las miles de esterilizaciones practicadas
durante el segundo gobierno de Fujimori aún no han recibido justicia.
El caso fue archivado el 23 de enero del 2014, por no haberse podido
acreditar que la esterilización fue parte de un plan sistemático del
Gobierno, aunque fue apelado el 28 de enero de dicho año. Hoy en
día se le considera una temática de interés nacional y si bien aún no
se ha hecho justicia, organizaciones como Amnistía Internacional se
han unido a la causa, solicitando al Estado –por ejemplo- la creación
de un registro de víctimas de esterilizaciones forzadas, a fin de resarcir
el daño que se les ha producido.
!232
CAPÍTULO V
LA DELINCUENCIA EN EL TRÁFICO
!233
1. INTRODUCCIÓN
2. CONCEPTO
426 OMS. 10 datos sobre la seguridad vial en el mundo. Octubre, 2015, disponible en:
http://www.who.int/features/factfiles/roadsafety/facts/es/
427 INEI, Estadísticas de seguridad ciudadana Abril – Setiembre 2015. Informe Técnico N°
4, diciembre 2015, p. 118.
428 El Consejo Nacional de Seguridad Vial (CNSV) fue creado mediante Decreto
Supremo 010-96-MTC y está integrado por un representante de cada una de las siguientes
entidades: el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, el Ministerio de Educación, el
Ministerio de Salud, el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo, el ministerio del
Interior, la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales, la Municipalidad de Lima, la
Municipalidad Provincial del callao, la Superintendencia Nacional de Administración
Tributaria (SUNAT) y el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la
Protección de la Propiedad Intelectual (INDECOPI). Entre los principios que lo dirigen se
encuentran la defensa de la vida humana, así como la consolidación de la seguridad
vial.
!234
delictivas o desviadas que se relacionan con las afectaciones en el
marco del tránsito automovilístico.
430 En este punto, cabe resaltar que el 32.76% de los accidentes de tránsito a noviembre
del 2006 se debieron a exceso de velocidad. (APESEG. Medidas contra los accidentes de
tránsito. Disponible en: http://www2.congreso.gob.pe/sicr/cendocbib/con2_uibd.nsf/
ACF3D6D2DCBDC994052575A600605601/$FILE/Medidas_contra_accidentes_transito.pdf)
431 NÚÑEZ PAZ, Miguel A. y Francisco ALONSO PÉREZ. Óp. cit., p. 382.
!235
4. CONDUCTAS QUE FORMAN PARTE DE LA CRIMINALIDAD EN EL
TRÁFICO
!236
5. FACTORES QUE FAVORECEN LA CRIMINALIDAD EN EL TRÁFICO
SI bien se señala que toda persona al volante es, por el simple hecho
de manejar un automóvil, un potencial criminal en el tráfico; ocurre
que existe una serie de factores que aumentan el riesgo de formar
parte de dicha criminalidad. Así, se tiene que el manejar con exceso
de velocidad, bajo los efectos del alcohol y/o las drogas, forman
parte de los principales motivos que influyen en la delincuencia en el
tráfico.
432 INEI, Estadísticas de seguridad ciudadana Abril – Setiembre 2015. Informe Técnico N°
4, diciembre 2015, p. 113.
!237
creación del Consejo Nacional de Seguridad vial, el cual maneja una
política interna de prevención y difusión de la cultura de la seguridad
vial nacional, la cual, desde luego, contribuye a la disminución de la
criminalidad en el tráfico.
Al respecto cabe señalar que el SOAT cubre a todas las personas que
hayan sido víctimas de un accidente de tránsito,
independientemente de las causas que provocaron la afectación, en
lo que corresponde a muerte, invalidez permanente, incapacidad
temporal, gastos médicos y, de ser el caso, gastos de sepelio. Sin
embargo, el SOAT no cubre los accidentes producto de carreras de
automóviles, los que ocurren en el extranjero, incluso si el automóvil es
transportado a dicha zona, en lugares no abiertos al tránsito público,
los que son provocados por guerras, casos fortuitos, fuerza mayor,
entre otros; o provocados por suicido o autolesiones.
433 La campaña se desarrolló en su primera fase en julio del 2012, siendo su segunda
etapa la correspondiente a agosto del 2013.
!238
Solo en el año 2013 el Instituto Nacional de Estadística e Informática 434
registró 102,938 denuncias de accidentes de tránsito no fatales ni
heridos, las cuales –si bien disminuyeron- continuaron siendo
significativas en el año 2014, con 98,773 casos registrados. De esta
cifra, 53,486 denuncias corresponden a la capital, seguida por el
segundo departamento con mayor índice de denuncias de
accidentes de tránsito sin consecuencias fatales o heridos: Arequipa,
con 5,497 casos. Para setiembre del 2015435, los casos registrados de
accidentes de tránsito se elevaron a 71,860, de los cuales 23,545 se
dieron a cabo entre enero y marzo he dicho año; 24,163, entre abril y
junio del 2015; mientras que 24,152, entre julio y setiembre del 2015.
435 INEI, Estadísticas de seguridad ciudadana Abril – Setiembre 2015. Informe Técnico N°
4, diciembre 2015, p. 88.
!239
registradas por la Policía Nacional del Perú son, de lejos, altas:
1’330,959436 infracciones solo durante el 2014, contra 1’753,920
pertenecientes al año 2013 y 2’276,339 que se vivieron en el 2012.
CAPÍTULO VI
LA DELINCUENCIA SOCIOECONÓMICA
436 De las cifras del año 2014, 444,225 infracciones corresponden al departamento de
Lima; es decir, el 66.62%. Del año 2013, 734,330 corresponden al departamento de Lima;
es decir, el 58.13%. Finalmente, del año 2012, 1’287,005 infracciones corresponden al
departamento de Lima; es decir, el 43.46%. Esto quiere decir que a medida que transcurre
el tiempo la cantidad de infracciones de tránsito desde una perspectiva global
disminuyen; sin embargo, el porcentaje de incidentes cometidos en la ciudad de Lima se
ven incrementados.
!240
SOCIOECONÓMICO. 5. LA VÍCTIMA DE LA
DELINCUENCIA SOCIOECONÓMICA. 6.
MANIFESTACIONES DE LA DELINCUENCIA
SOCIOECONÓMICA.
!241
1. INTRODUCCIÓN
2. CONCEPTO
437 LEGANÉS GÓMEZ, Santiago y María Ester ORTOLÁ BOTELLA. Óp. cit., pp. 245 y ss.
439 NÚÑEZ PAZ, Miguel A. y Francisco ALONSO PÉREZ. Óp. cit., pp. 273 y ss.
!242
patrimoniales y se apega a una concepción más jurídica que
criminológica, por lo que loso define como aquellos delitos que
afectan o perjudican directamente al patrimonio de la víctima, por lo
que requieren que la afectación pueda ser evaluable desde un
punto de vista económico.
!243
dedicado dicha criminalidad. En este sentido, el factor oportunidad
es, desde nuestro punto de vista, aún más fundamental que las
oscilaciones económicas, puesto que el delincuente socioeconómico
es, por así decirlo, un empresario criminal que actúa desde el marco
de entablar relaciones económicas fraudulentas, de donde deriva
que la oportunidad para ello es fundamental en este tipo de
delincuencia.
!244
de delincuencia han optado por volverla su estilo de vida,
indiferentemente del estado en el que la economía se encuentre.
Las afectaciones hacia la víctima van más allá del mero perjuicio
patrimonial, pues a través de este especial tipo nocivo de
criminalidad se daña también la confianza en el mercado y en las
relaciones económicas, las que dieron pase –mal aplicadas- a ser
víctima del delincuente socioeconómico.
!245
volviéndose más sofisticadas y modernas a medida que los
fenómenos como la globalización se interiorizan más en nuestro diario
vivir.
!246
CAPÍTULO VII
LA DELINCUENCIA TERRORISTA
1. INTRODUCCIÓN. 2. CONCEPTO. 3.
CARACTERÍSTICAS. 4. TIPOLOGÍAS DE LA
CRIMINALIDAD TERRORISTA. 5. PERFIL DEL
CRIMINAL TERRORISTA. 6. EL TERRORISMO EN EL
PERÚ, a) El Partido Comunista Peruano –
Sendero Luminoso (PCP-SL), b) Desarrollo
histórico del Conflicto Armado Interno (i. Inicio
de la violencia armada; ii. Militarización del
conflicto; iii. Despliegue nacional de la
violencia; iv. Crisis extrema de la violencia; v.
Declive de las acciones); c) Características de
las organizaciones terroristas peruanas.
!247
1. INTRODUCCIÓN
2. CONCEPTO
!248
resto de la sociedad, en base al terror y la intimidación que derivan
de sus acciones443.
3. CARACTERÍSTICAS
444 No obstante, suelen reportarse casos aislados de sujetos con móviles terroristas que
actúan en el marco de la ideología de su organización, pero que no han coordinado un
ataque sistematizado con ésta, sino que obran por cuenta propia en base a sus ideales.
445 NÚÑEZ PAZ, Miguel y Francisco ALONSO PÉREZ, Óp., Cit., p. 399.
!249
Las víctimas de las organizaciones terroristas suelen ser no
combatientes 446, lo que incluye a los miembros de las fuerzas armadas
en tiempos de paz, a quienes se busca convencer por medio de la
violencia y la crueldad de un proyecto bandera defendido por las
organizaciones terroristas, el que por lo común es de tipo político,
pero que también puede abarcar planes culturales, económicos y
sociales.
!250
aficionado, que es ejecutado como una forma de diversión para sus
actores, y el terrorismo profesional, que implica una formación y
preparación que hacen que los sujetos adquieran esta criminalidad
como estilo de vida; el terrorismo político y el terrorismo religioso, de
donde resalta el último de éstos, por tratarse del más peligroso al
identificar las acciones terroristas como parte de un plan divino y
justificadas moralmente; el terrorismo de liberación de la opresión
ejercida por otro Estado; y el terrorismo nacional, que recae sobre un
determinado Estado, o internacional, como es la tendencia en la
criminalidad actual.
Los terroristas son personas que, tal como indica GARCÍA ANDRADE448,
suelen ser emocionalmente inmaduros, lo que repercute en su grado
de peligrosidad, toda vez que pueden desenvolverse con una
bomba de tiempo contra cualquier víctima potencial que sea lo
suficientemente representativa como para extender el terror en la
sociedad. Ello, sumado a su necesidad de aceptación, es
determinante para que el delincuente terrorista busque en la
organización de la que forma parte la identidad y seguridad de la
cual carece.
Ahora bien, los terroristas son sujetos que actúan con frialdad en el
desenvolvimiento de sus planes, violentos en extremo y crueles,
indiferentes ante el dolor ajeno, aunque no necesariamente forman
!251
parte de las personas que padecen trastorno de personalidad
psicópata.
6. EL TERRORISMO EN EL PERÚ
449 Sin embargo, que su número haya sido reducido y que hayan logrado repercutir como lo
hicieron en la Historia peruana deja en evidencia su grado de violencia extrema y las
graves deficiencias que caracterizaron al Estado peruano que no pudo evitar el brote del
conflicto armado interno (CVR, Informe Final. Tomo II. Lima, 2003, p. 14. Disponible en:
http://cverdad.org.pe/ifinal/)
!252
Así, tenemos que el partido madre es el Partido Comunista Peruano
(PCP) original, el cual se dividió en PCP Pekineses y PCP Unidad
(Moscovitas). De los PCP Pekineses surgieron dos ramas: el movimiento
Saturnino Paredes y el movimiento José Sotomayor. En 1960, el
movimiento Saturnino Paredes se bifurcó en PCP Patria Roja y PCP
Bandera Roja, la misma que –finalmente- dejó pase al PCP-SL y PCP
Albaneses.
PCP Original
451 Era una generación marcada por el Decreto Supremo N° 006-69-EP; debido a que
éste les había puesto en la necesidad de tomar las armas contra las fuerzas del orden,
luchar por sus derechos y ver a muchos de sus comunes fallecer o ser heridos por lo que
consideraban una causa digna. También, importante es recalcar que esta juventud se
encontraba entre dos mundos: el andino de sus padres, del cual ya no compartían a
cabalidad las costumbres y mitos, y el urbano-criollo del que eran discriminados.
!253
en un futuro, pues por medio del Materialismo Dialéctico e Histórico
era necesario, y hasta natural, el paso del Capitalismo al Comunismo;
y, además, una organización que derivaba en identidad.
!254
en el que entraron Ayacucho, Apurímac y Huancavelica. La
deficiencia del Sistema Nacional de Inteligencia (SIN) es aún más
notoria cuando capturan a Abimael Guzmán, pero luego lo liberan
por faltas de pruebas.
!255
iv. Crisis extrema de la violencia
!256
bienestar. En la cabeza de la pirámide social del PCP-SL se
encontraba el Presidente Gonzalo, seguido en poder jerárquico por
los miembros del partido, los organismos generados por éste y, en
última instancia, las masas. Éstas eran usadas como escondite para
que los subversivos no fuesen identificados fácilmente por las fuerzas
del orden.
!257
CAPÍTULO IX
LA CRIMINALIDAD ORGANIZADA
!258
Decreto Legislativo N° 1204, ii. Decreto
Legislativo N° 1217, iii. Decreto Legislativo N°
1218, iv. Decreto Legislativo N° 1219, v. Decreto
Legislativo N° 1227, vi. Decreto Legislativo N°
1229, vii. Decreto Legislativo N° 1233, viii.
Decreto Legislativo N° 1234, ix. Decreto
Legislativo N° 1239, x. Decreto Legislativo N°
1241, xi. Decreto Supremo N° 005-2015-JUS)
!259
1. ORIGEN
Sicilia es una de las más importantes islas de Italia que, a pesar de solo
contar con cinco millones de habitantes, puede presumir de ser el
área geográfica de la cual nace la influencia de las más grandes
organizaciones criminales mafiosas, entre las que figuran La Mafia454,
la Cosa Nostra455, la Camorra456, y la ´Ndrangheta457, entre otras. De
ellas, la más conocida es la Cosa Nostra, la cual influye
delictivamente en todas las provincias sicilianas y tiene, incluso,
presencia en tres continentes.
453 BRUCCET ANAYA, Luis Alonso. El Crimen Organizado (origen, evolución, situación y
configuración de la delincuencia organizada en México). Segunda Edición. Argentina:
PORRÚA, 2007, p. 50.
455 Es conocida como la Mafia estadounidense y que encuentra sus principales focos de
acción en Chicago y Nueva York, realizando actividades similares a las de La Mafia
original. Resalta su intromisión en las áreas relacionadas con la prostitución, venta de
narcóticos, etc.
457 Se le llama también como la Maffia Calabresa y obtiene el “mérito” de haber sido la
primera organización criminal proveniente de Italia que se dedicó al tráfico de cocaína.
A diferencia de las anteriores organizaciones, prefiere optar por iniciar a sus miembros en
base a los lazos sanguíneos y por trabajar en un perfil bajo.
!260
Como efecto colateral de la inmigración europea a América del
Norte del s. XIX y principios del s. XX, el fenómeno de la mafia siciliana
fue exportado a los Estados Unidos; con lo que surgieron nuevas
formas de afectación social, como la extorsión. De esta manera, el
fenómeno de la criminalidad organizada fue extendiéndose a nuevos
territorios y desarrollándose en base la delincuencia ya existente en
dichos lugares, lo que sustenta la tesis de que la criminalidad debe
adaptarse a todas las épocas y condiciones para existir.
2. CONCEPTO
458 PÉREZ ARROYO, Miguel. “Criminalidad organizada: análisis de la nueva ley contra el
Crimen Organizado (Ley N° 30077)” (en) Actualidad Penal, N° 2. Lima: INSTITUTO PACÍFICO,
agosto 2014, pp. 30 y ss.
460 DELGADO MARTÍN, Joaquín. Criminalidad organizada. Barcelona: BLANCH, 2001, pp.
35 y ss.
!261
organizada colisionan entre sí461 y afectan aspectos fundamentales
que deberían tenerse más en consideración, como se hace a través
de medidas como la sobre incriminación, el agravamiento
desmedido de las penas, la intensificación y justificación de actos
especiales de investigación, entre otros.
!262
Ante tal vacío, hacíamos uso de la conceptualización realizada por la
Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia
Organizada Transnacional y sus Protocolos -suscrita por nuestro país
en el año 2000 y ratificada por éste en el año 2001- que se
caracteriza por estar destinada a la promoción de la cooperación
para prevenir y combatir más eficazmente la delincuencia
organizada transnacional (art. 1ª de la Convención)-. En ese sentido,
se entendía el concepto en el sentido siguiente: “…todo grupo
estructurado de tres o más personas que exista durante cierto tiempo
y que actúe concertadamente con el propósito de cometer uno o
más delitos graves o delitos tipificados en la Convención con miras a
obtener, directa o indirectamente, un beneficio económico u otro
beneficio de orden material.”
!263
mientras que –tal como respalda PRADO SALDARRIAGA465-, en la
criminalidad organizada es necesaria la existencia de la pluralidad de
agentes con distribución funcional tenga también un plus en el
contenido del injusto o, en otras palabras, la planificación previa de
lo actuado que implique un reparto de roles entre los intervinientes en
la lógica de una estructura jerarquizada, lo que ocasionará que la
organización criminal adquiera cierta autonomía con relación a las
personas que la contribuyen. De allí deriva que la criminalidad
organizada será un tipo de fenómeno delictivo destinado a perdurar
en el tiempo, indiferentemente de que lo hagan así los miembros que
la conforman466, similar a la mentalidad de una empresa mercantil;
aspecto que no ocurre en los supuestos de coautoría.
466 Ejemplo de ello puede encontrarse en el grupo terrorista Sendero Luminoso, el cual
continuó desarrollando acciones aisladas en Perú pese a que su histórico líder había sido
apresado.
!264
que se encuentran en la actual Ley N° 30077. De hecho, son cinco los
pilares en los que debe basarse 468 un concepto adecuado de
criminalidad organizada:
469 Tener en cuenta que las organizaciones criminales son formas de tipo asociativo que se
destinan a facilitar la comisión de delitos, por lo que su vinculación radica en términos de
fines inmediatos y no trascendentales.
!265
necesidades de la sociedad. He allí que se entiende la
expresión de que dichas organizaciones se asemejan a
empresas mercantiles.
4. CARACTERÍSTICAS
471 Ídem.
!266
ii. Tener pretensiones de permanencia en el tiempo.
!267
que laboran dentro de los marcos de la ley; y su distinción con
respecto a la delincuencia organizada.
!268
por el mercado legal pese a ser demandado en la sociedad. Por
tanto, y de manera similar a una empresa mercantil, sus operaciones
responden a un proceso previo de planeamiento lineal y se ejecutan
en un espacio funcionalmente limitado que, pese a ello, contará con
la vinculación de varios países interrelacionados entre sí, sea ya por
lógicas de cercanía territorial o por compartir los mismos intereses o
sectores productivos. La delincuencia organizada no responde a la
misma situación. A diferencia de la criminalidad organizada, éstas son
organizaciones tradicionales, menos innovadoras y más
convencionales que las antes mencionadas.
Por otro lado, se distingue también de la criminalidad organizada en
que la delincuencia organizada se caracteriza por existir sólo mientras
que sea útil para sus miembros –es decir, mientras que el delito o los
delitos para los que se han propuesta organizarse, tarden en
cometerse-, y por hacerlo en relación a determinados hechos
concretos. Por lo mismo es que no pueden ser consideradas como
empresas criminales, no cuentan con marcados roles establecidos, y
no se estructuran sobre la base de la criminalidad organizada. Son las
conocidas también como “bandas criminales” u “organizaciones
delictivas de paso”.
!269
Solo existe mientras sea útil para Actividad especializada y
sus miembros. Si desaparecen o enfocada por lo general en
son capturados por la justicia, ámbitos no cubiertos por el
culmina la vida de la mercado legal, pero
organización. demandado por la sociedad.
!270
población, como una vía de escape o bote salvavidas que cubre
aquellos ámbitos que el Estado descuida, restringe o prohíbe.
a) Jerarquía estándar
b) Jerarquía regional
!271
que son autónomas entre sí y que ejecutan simultáneamente las
actividades a las que se dedica la organización.
c) Agrupación jerárquica
Se entiende así:
!272
d) Grupo central
e) Red criminal
!273
!
475 Ídem.
!274
así encontrar en los jóvenes sus próximos miembros, aprovechando
para estos fines la pobreza, falta de oportunidades y discriminación
de las clases más pobres.
!275
en los que se cometa alguno de los delitos de su catálogo478 en el
marco de cualquier agrupación de tres o más personas que se
reparten diversas tareas o funciones, cualquiera sea su estructura y
ámbito de acción, que, con carácter estable o por tiempo indefinido,
478 Los delitos incluidos en la Ley N° 30077 son los que enumeraremos a continuación:
A. Homicidio calificado (art. 108° del CP);
B. Secuestro (art. 152° del CP).
C. Trata de personas (art. 153° del CP).
D. Violación del secreto de las comunicaciones (art. 162° del CP).
E. Delitos contra el patrimonio en las modalidades de hurto agravado (art. 186° del CP), robo
agravado (189° del CP), receptación agravada (195° del CP), estafa agravada (art. 196°-
A del CP) y defraudación (art. 197° del CP).
F. Pornografía infantil (art. 183°-A del CP).
G. Extorsión (art. 200° del CP).
H. Usurpación en las modalidades de usurpación (art. 202° del CP) y sus formas agravadas
(art. 204° del CP).
I. Delitos contra la propiedad industrial (art. 222° del CP).
J. Delitos monetarios en las modalidades de fabricación y falsificación de moneda de curso
legal (art. 252° del CP), alteración de la moneda de curso legal (art. 253° del CP) y tráfico
de moneda falsa (art. 254° del CP).
K. Tenencia, fabricación, tráfico ilícito de armas, municiones y explosivos; así como
fabricación, suministro o tenencia de materiales peligrosos (art. 279° del CP); producción,
desarrollo y comercialización ilegal de armas químicas (art. 279°-A del CP); sustracción o
arrebato de armas de fuego (art. 279°-B del CP); tráfico de productos pirotécnicos (art.
279°-C del CP); y, empleo, producción y transferencia de minas antipersonales (art. 279°-D
del CP).
L. Delitos contra la salud pública en las modalidades de falsificación, contaminación o
adulteración de productos farmacéuticos, dispositivos médicos o productos sanitarios
(art. 294°-A del CP); y comercialización de productos farmacéuticos, dispositivos médicos
o productos sanitarios sin garantía de buen estado (art. 294°-B del CP).
M. Tráfico ilícito de drogas en cualquiera de sus modalidades (Sección II, Capítulo III del Título
XII del Segundo Libro del Código Penal).
N. Delito de tráfico ilícito de migrantes en sus modalidades básicas (art. 303°-A del CP) y en
sus modalidades agravadas (art. 303°-B del CP).
O. Delitos ambientales en las modalidades de tráfico ilegal de productos forestales
maderables (art. 310°-A del CP), obstrucción de procedimiento (art. 310°-B del CP), y sus
formas agravadas (art. 310°-C del CP).
P. Delito de marcaje o doblaje (art. 317°-A del CP).
Q. Genocidio (art. 319° del CP), desaparición forzada (art. 320° del CP) y tortura (art. 321° del
CP).
R. Delitos contra la administración pública en las modalidades de concusión (art. 382° del
CP), cobro indebido (art. 383° del CP), colusión simple y agravada (art. 384° del CP),
peculado doloso y culposo (art. 387° del CP), cohecho pasivo propio (art. 393° del CP),
soborno internacional pasivo (art. 393°-A del CP), cohecho pasivo impropio (art. 394° del
CP), cohecho pasivo específico (art. 395° del CP), corrupción pasiva de auxiliares
jurisdiccionales (art. 396° del CP), cohecho activo genérico (art. 397° del CP), cohecho
activo internacional (art. 397°-A del CP), cohecho activo específico (art. 398° del CP),
negociación incompatible o aprovechamiento indebido de cargo (art. 399° del CP),
tráfico de influencias (art. 400° del CP), y enriquecimiento ilícito (art. 401° del CP).
S. Delito de falsificación de documentos (art. 427° del CP).
T. Lavado de activos en las modalidades de actos de conversión y transferencia (art. 1° del
DL 1106); actos de ocultamiento y tenencia (art. 2° del DL 1106); transporte, traslado,
ingreso o salida por territorio nacional de dinero o títulos valores de origen ilícito (art. 3° del
DL 1106); formas agravadas y atenuadas (art. 4° del DL 1106); y, omisión de comunicación
de operaciones o transacciones sospechosas (art. 5° del DL 1106).
!276
se crea, existe o funciona, inequívoca y directamente, de manera
concertada y coordinada. Así también, facultó la competencia de la
Sala Penal Nacional para la investigación y procesamiento de
quienes cometan los delitos del artículo 3° de la Ley como acciones
de una organización criminal.
!277
El juez debe resolver a las 24 horas de recibida la solicitud, sin trámite
de por medio; aunque el afectado puede solicitar la realización de la
audiencia judicial de reexamen, tal cual lo faculta los artículos 228°.3
y 228°.4 del NCPP.
a. L a i n t e r c e p t a c i ó n p o s t a l e i n t e r v e n c i ó n d e l a s
comunicaciones
c. El agente encubierto
!278
indiquen que el sujeto es parte de una organización criminal o que ha
cometido delito. Se lleva a cabo con previa autorización fiscal y son
sujetos autorizados para adquirir, poseer o transportar bienes
delictivos, así como cualquier otra utilidad útil y necesaria en el marco
de la investigación del delito; aunque no se encuentran facultados
para provocar que se cometa delito, de allí es donde deriva la
diferencia principal entre el agente encubierto y el agente
provocador479.
!279
Investigación Preparatoria. Si existe una razón fundada para
considerar que los documentos encontrados con el levantamiento
del secreto bancario guardan relación con el delito investigado y que
resulta indispensable para los fines del proceso, el Fiscal incautará el
documento. Así, las entidades que, por orden judicial, han sido
solicitadas a entregar la información bancaria del investigado
deberán responder en un plazo máximo de 30 días hábiles.
!280
jurídicas que sean instrumentalizadas para cometer delitos por una
organización criminal. En el marco de la lucha contra la criminalidad
organizada, se puede aplicar una multa por monto no menor del
doble ni mayor del triple del valor de la transacción real que se
procura obtener como beneficio económico por la comisión del
delito respectivo; clausura definitiva de la persona jurídica; suspensión
de sus actividades por plazo no mayor a cinco años; prohibición de
llevar a cabo actividades de la misma naturaleza que las que se
realizaron para cometer, favorecer o encubrir el delito; cancelación
de licencias, derechos y otras autorizaciones; así como la disolución
de la persona jurídica.
Esto se debe a que, por política criminal, el Estado considera que las
personas que se encuentran relacionadas con estas organizaciones
tienen un mayor nivel de peligrosidad, pues su especial condición de
ex integrante o aún miembro de una organización criminal, facilita
que exista una posible reincidencia o reactivación de la organización
delictiva desarticulada. Así, esta prohibición se aplica ante los líderes,
jefes, cabecillas o quienes ejerzan actividades de administración,
dirección y supervisión de la organización criminal; cuando el agente
financia la organización criminal; cuando el sujeto, en condición de
ser integrante de la organización, vinculado o encargado de ésta,
utiliza menores de edad u otros inimputables para cometer delitos; o
en el caso de los demás integrantes, cuando el delito por el que han
sido condenados es homicidio calificado, secuestro, trata de
personas, robo agravado o extorsión.
!281
En los meses de agosto y setiembre del 2015 se promulgaron una serie
de medidas que perfilan la perspectiva político-criminal del Estado
peruano destinada a combatir la criminalidad organizada. Así,
tenemos:
!282
Terminales de Telefónica Celular. Entre sus objetivos se encuentra
fortalecer las actividades de prevención, investigación y lucha contra
el crimen organizado y la delincuencia común.
!283
Para ello, indica que el aislamiento, protección y vigilancia de la
escena del crimen es competencia de la PNP, quien debe conservar
y mantener su originalidad, evitando que sea alterada, destruida,
contaminada o que sean sustraídos los indicios y evidencias del
crimen. Con esta finalidad, solo los peritos criminalístico y el médico
legista, bajo dirección del Fiscal, pueden acceder inicialmente a la
escena.
!284
Así, busca fomentar la inversión privada en estos ámbitos, aunque
determina que la política penitenciaria es dirigida y formulada por el
Estado, quien se encuentra en posición de protector de la integridad
y seguridad ciudadana.
!285
Como indica el Reglamento del Código de Ejecución Penal (art. 60° y
siguientes), el régimen cerrado se caracteriza por su ardua vigilancia
y control, especialmente si se trata del régimen cerrado especial,
incluso en las actividades comunes dentro del establecimiento
penitenciario.
!286