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Corporación universitaria Minuto de Dios

Facultad de Ciencias Humanas y Sociales


Departamento de Filosofía
Filosofía Latinoamericana

Realizado por: Julián Marín Arias ID 000518417


¿Qué es la filosofía?

Introducción al problema

En la historia del pensamiento del hombre, la filosofía corresponde a un espacio muy


importante en el desarrollo intelectual de las comunidades. Occidente ha querido abarcar el
estandarte de los lineamientos, para armar un andamiaje conceptual y así poder distinguir lo
que es filosofía de lo que no lo es. Latinoamérica en los últimos años ha desarrollado
propuestas, trabajos y pensamientos diversos para hacer notar que no solo su aporte es
material como se dio en el tiempo de la conquista, sino también intelectual. Por tal motivo,
enmarcar lo que puede llegar a ser filosofía o no, corresponde a una tarea que se debe llevar
con mucho cuidado. Especialmente en Latinoamérica muchos hechos históricos marcaron el
cambio del pensamiento de las comunidades y llevaron a reflexionar sobre el que hacer de
los pensadores, es decir, sobre qué área de la vida del hombre es de mayor urgencia realizar
una reflexión.
Aunque el mundo que conocemos en Latinoamérica se ha basado en una estructura
de pensamiento occidental; como ejemplo tenemos sistemas de pensamientos terminados
como la escolástica, el humanismo, la ilustración, el positivismo, entre otros; se puede decir
que mediante las guerras y enfrentamientos a nivel mundial, europeo y español se abrió paso
al inicio de una emancipación del pensamiento latino o hispanoamericano. Por tal motivo es
necesario pensar ¿Qué es la filosofía? Para saber luego que puedo vincular allí como un
conocimiento verídico; así pues, el pensar la filosofía debe hacerse desde la forma más
general posible, es decir, desencajándola de los criterios meramente occidentales y
ubicándola en los contextos históricos por donde transcurre los pueblo sometidos a los
cambios del pensamiento.
En el recorrido de este texto, será importante realizar una acción reflexiva sobre
aquellos que ya han pensado este problema, la relación que existe entre mito y logos, el
problema de llevar el pensamiento a lo meramente universal o regional y por ultimo revisar
los aspectos que marcan a la filosofía como lo es la peculiaridad, la originalidad y la
autenticidad, nos marcaran los parámetros para dar una aproximación a la pregunta ¿Qué es
filosofía?

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¿El logos del mito o el mito del logos?
Del mito se puede decir que es la expresión primaria del pensamiento del hombre, por
medio de él se intenta dar respuesta o explicación a asuntos importante para el hombre y la
sociedad; por otro lado, también genera modelos de comportamiento u actuación, que a través
de seres como dioses generan relatos de autoridad, pero sin justificación. En la mirada
occidental el hecho que marca la era de la filosofía se da en la acción del paso del mito al
logos; pero surgen diversas preguntas entorno a esto; ¿los mitos no aportan nada a la base
filosófica? ¿la filosofía no se ha convertido en mito a través del paso de los años? Las
respuestas a estas preguntas nos darán un panorama más amplio del aspecto filosófico del
pensamiento.
Como ya hemos visto el paso del mito al logos es muy representativo, pero ocurre un
fenómeno importante y este es que del mito se trasladan muchos conceptos al filosófico.
Como ejemplo tenemos el problema del ser. Inicialmente en el mito, se intentar asociar a un
dios como ser, que crea seres y es precisamente esta pregunta por el ser es la que se traspola
a la filosofía, aunque cambia sus campos de estudio y en muchas ocasiones la interpretación
del mismo concepto; se mantiene la incertidumbre, la angustia por el ser y el hallar sus
facultades. Se observa entonces que el mito aporta significativamente a la construcción
filosófica del hombre. Así pues, que en América sus mitos son elementos constitutivos para
la construcción de un aporte intelectual a la filosofía universal.
Se ha visto como el mito aporta al logos, y el paso es importante sin desconocer que
del mito se saca el constructo, la base para iniciar el pensamiento filosófico, la filosofía no
se da sin más, requiere un proceso. Pero en ocasiones estos constructos filosóficos al ser
anquilosados, al llevar muchos años de historia tienen el peligro de convertirse en mitos
nuevamente, lo vemos en la época medieval que bajo la autoridad de Aristóteles se
cometieron diversos atropellos por creer que la tierra era el centro del universo. Por tal motivo
es necesario distinguir como una filosofía regional debe tener sus parámetros de una filosofía
universal, para evitar aniquilamientos de pensamientos diversos y de pueblos a causa de la
imposición de un pensamiento determinado.

Entre lo universal y lo regional

Tomando lo anterior, es necesario ubicar algunos hechos históricos que empiezan a


mostrar como el pensamiento entre lo universal y lo regional confluyen en el mundo
precolombino de América. La llegada de los españoles alrededor del año de 1492 sin duda
marca una ruptura en la vida del continente nuevo. Hay un hecho fundamental que para
algunos legitimará la esclavitud y la barbarie aplicada sobre los indios o indígenas de nuestras
tierras y para otros será la oportunidad de ver en el otro a uno igual; uno de los exponentes
de la primera línea de pensamiento es Sepúlveda quien busca a través de argumentos de raza
subyugar a los nativos americanos; por otro lado, tenemos a Fray Bartolomé de las Casas
quien defenderá la igualdad de posición de los nativos frente a los españoles, ya que reconoce
en ellos una estructura social y una división de trabajo entre otras características que los

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legitima como seres humanos y no como una especia diferente a la humana. En el texto El
Pensar en América Latina de Helio Gallardo encontramos un esquema histórico que hace
Salazar Bondy donde hace evidente el problema del pensamiento en esta época, así dirá “los
temas americanos se hacen presentes en esta filosofía fundamentalmente a través de
meditaciones filosófico-teológicas acerca de la humanidad del indio.” (Gallardo, 1981, p.
187) En este choque cultura, el tema fundamental es pues una ontología del indio, se reconoce
al indio como ser humano o no; esta es la disputa que confronta al mito y al logos; en dónde
se evidencia que el logos flaquea y podría verse en cierto aspecto como mito.

El siglo XX es una época crucial para Hispanoamérica, los acontecimientos que se


dan en Europa en 1914 como es la primera guerra mundial y en España en 1936 como lo es
la guerra civil abren espacio para el inicio de una legitimización del pensamiento filosófico
en Latinoamérica. Algunos piensan que la guerra civil española fue un campo de experimento
y preparación para la Segunda Guerra Mundial que se desarrolla entre los años 1939 – 1945;
con este hecho la humanidad muestra que tan despiadada puede llegar a ser y en muchos
países se empieza a criticar los hechos de tomar a la modernidad y llevarla a su
industrialización, es decir, se genera una crítica a lo que se pensaba era una época de fulgor
del pensamiento del hombre. La modernidad; sin duda lo fue por la riqueza de posturas
diversas, pero una mala administración de este conocimiento y una poca tolerancia entre las
diferencias de posturas lleva a lo que evidenciamos anteriormente, las guerras.

De la originalidad, la peculiaridad y la autenticidad en el pensamiento filosófico

Luego de evidenciar el choque entre lo universal y lo regional, pasemos a analizar los


aspectos para calificar el pensamiento filosófico, para ello Bondy y Zea, realizan su discusión
frente a unos aspectos principales y unas condiciones para que se dé una aceptación del
pensamiento filosófico en Hispanoamérica, estos aspectos son la autenticidad, originalidad y
peculiaridad del pensamiento de cada región. Tomaremos solo uno de estos aspectos para
mostrar el desarrollo y la capacidad filosófica de estos dos autores, este aspecto que se tomará
será lo peculiar del pensamiento.

En un primer momento acerca de lo peculiar del pensar latinoamericano, Bondy dirá que es
peculiar, pero no autentico u original, ya que son países que no reconocen su historia y su
herencia está en un pensar ajeno. Zea va ir un poco más allá en esta respuesta y dirá que es
peculiar desde la mirada ontológica del hombre, desde el mismo instante entre la disputa de
Bartolomé de las Casas y Sepúlveda sobre la humanidad de los indios en América esto da a
América un especial sitio dirá Zea “Por ser 'lo peculiar nuestro' la inserción colonizada -
subhumana- en la historia occidental, y por haber hecho crisis esta cultura y con ello nuestro
modo de inserción, es que estamos en especiales y favorables condiciones, desde nuestra
peculiar situación, de realizar ese quehacer que es la filosofía.” (Gallardo, 1981, p.194)

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Hermenéutica analógica y la Analéctica

Para poder desarrollar el problema del método es necesario conocer los conceptos que vamos
a manejar y para ello tenemos como primer punto la hermenéutica, que según Beuchot y
Marquínez “es la que se ha encargado de, como lo hace Paul Ricoeur, de recoger el sentido
de una cultura a partir de sus productos, de una historia a partir de sus avatares y de una
filosofía a partir de sus preguntas y respuestas” (Beuchot y Marquínez, 2005, p. 10) la
hermenéutica se muestra así como la interpretación en un primer momento de textos,
artículos o escritos; pero en este caso la llevaremos a su estado más general, y este es la
interpretación del pensamiento de un pueblo en el aspecto filosófico. Es en este punto donde
la hermenéutica toma dos caminos contrarios entre sí, lo univoco y lo equivoco. Tenemos
dos conceptos en donde el primer se encierra en aquello que posee un único significado, y el
segundo, es aquello que posee multiplicidad de términos.

Los dos conceptos anteriores ubican al pensamiento en dos caminos que se alejan entre si,
impidiendo la reflexión con varios campos o miradas de observación, por esto es que la
analogía entra como elemento regulador, generando neutralidad entre los dos caminos y
tomando lo mejor que ambos puedan aportar para la elaboración de una base, de un método
epistemológico. Como resultado tenemos que “en cuanto a su estructura, la hermenéutica
analógica tiene, como es natural, la característica de ser mediación entre hermenéutica
univoca y otra equivoca. No tiene la rigidez de la primera, pero tampoco incurre en las
extralimitaciones que cabrían en la segunda; trata de situarse como participando de ambas,
aunque sin quedarse como termino equidistante, sino más inclinado a la diferencia.” (Beuchot
y Marquínez, 2005, p. 32)

Analéctica

La Analéctica ocupa un campo ontológico en la medida que al ver el ser como totalidad,
desde la Analéctica se busca romper con la totalidad sin más, es decir, salir de mero ser y
encontrase con el otro distinto, el otro que me complemente, que me interpela, que me
posibilita. Se convierte así en una dialéctica entre la totalidad que se prepara a ser desmontada
y el otro que llega e irrumpe para reconstruir. Dirá Dussel “La primera tarea del filósofo es
destruir las filosofías preexistentes, para poder quedar en el silencio, silencio que le permitirá
estar en condiciones de escuchar la voz del Otro que irrumpe desde la exterioridad.” (Dussel,
p. 239)

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En conclusión, podemos realizar la metáfora con un artista y una obra a crear, la filosofía
latinoamericana tiene toda la materia prima para la creación de una obra que puede marcar
el pensamiento universal filosófico, tiene unas características como el mito que poco a poco
avanza al logos y en el cual reposa una esencia propia del pensar ancestral; por otro lado,
toma forma en su característica de ser peculiar, original y autentica. Y, por último, tenemos
un punto de partida, una base epistemológica para crear, solo es necesario tomar manos sobre
el asunto y empezar a realizar el ejercicio filosófico como tal y así como dice Picasso el
filósofo también debe actuar, “que la inspiración te coja trabajando”.

Referencias

 Gallardo, H. 1981, Pensar en América Latina. Heredia, Costa Rica: Editorial UNA.
 Mauricio Beuchot y Germán Marquínez Argote. Hermenéutica analógica y filosofía
latinoamericana. Editorial El Búho, Bogotá, 2005, 105 páginas.
 Enrique Dussel, La Analéctica como ruptura teórica,
http://www.ifil.org/dussel/textos/14/08pp221-241.pdf

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