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CONCERTACIÓN Y SU PRÁCTICA EN LAS

ORGANIZACIONES

La concertación es un encuentro para tomar decisiones en al cual confluyen


los actores de las organizaciones con intereses diversos y en algunos
casos contrapuestos para de forma equitativa traer a identidad de fines o
propósitos, cosas diversas o intenciones diferentes. La participación de los
diferentes actores en la toma de decisiones en las actividades de gestión,
es importante para el desarrollo humano y es signo saludable para el
fortalecimiento de las organizaciones por la multiplicidad de sinergias
positivas que genera. Las personas como sujeto social y participativo,
toman cada vez más conciencia de sus derechos y de sus deberes, se
hacen cargo de sus destinos y logran ponerse de acuerdo, negociar y
formar alianzas, en este marco es donde ubicamos la práctica de la
Concertación, entendiéndola como el acto en el cual se ponen de acuerdo
para la acción varias personas con diversos intereses y puntos de vista. Si
vamos al diccionario, encontraremos una noción muy ligada a concertar que
es la de Consenso, que viene a ser el producto de la acción de concertar: la
decisión, tomada de manera conjunta, negociada, tratando de atender a los
múltiples intereses en juego. Otro concepto importante es el de
Unanimidad, que viene a ser la búsqueda del acuerdo, pero a través de la
aceptación total de las partes involucradas, donde absolutamente todos
están de acuerdo y no hay discrepancias sobre la decisión tomada. Para
llegar a concertar no basta con la sola voluntad, se requiere también de
aptitudes, capacidades y destrezas. El proceso de concertación tiene como
instrumentos importantes el Diálogo y la Negociación pluridisciplinaria,
entendidos estos instrumentos, como la comunicación fluida y la puesta en
marcha de mecanismos y técnicas efectivas para la búsqueda de acuerdos.
Cabe resaltar que la concertación busca generar espacios de confianza a
través de la comunicación y el intercambio fluido de información, mientras
que la negociación, está orientada hacia el logro de resultados expresados
en decisiones o acuerdos que sean aceptados y suscritos por los
involucrados.

DISEÑANDO EL PROCESO
Dado que Concertar es el proceso por el cual partes con diferentes
intereses llegan a acuerdos con los cuales se comprometen. Podemos mirar
con atención aquella definición y encontrar algunos elementos interesantes:
la concertación debe ser entendida como un proceso o un paso a paso, una
secuencia a través de la cual se llega hacia algo que es la decisión
conjunta. El otro elemento es que en ella participan varias partes,
entendiendo a las partes como personas, que pueden estar presentes a
título individual o representando alguna institución u organización.
Finalmente, otro elemento clave de la definición presentada es el objetivo de
la concertación, que tiene que ver con lograr acuerdos o decisiones en
común. Los procesos de concertación generalmente se utilizan en las
organizaciones para superar momentos de crisis y de puntos diferenciales
distantes entre las partes, en entornos difíciles no exentos de situaciones
complejas en las relaciones interpersonales, haciendo necesario que las
personas que lideran estos procesos tengan habilidades para el manejo del
conflicto y el de su dirección proactiva. La concertación no neutraliza y
resuelve los conflictos de manera automática, más bien aspira a que las
partes dialoguen, conozcan sus deberes, sus derechos y asuman
compromisos. En este punto suele aparecer el debate si la concertación es
un medio o un fin. A nuestro modo de ver puede ser las dos cosas: un
medio porque implica un despliegue de acciones para arribar a decisiones
mutuamente satisfactorias; pero también, un fin, pues el concertar afirma los
procesos de desarrollo humano en la medida que es incluyente y atiende a
los intereses de las múltiples partes.

A. Principios Claves de la Concertación:

Todo proceso de concertación debe


tener en cuenta un conjunto de principios claves

 La concertación es un medio orientado hacia la búsqueda de


compromisos en la toma de decisiones para la acción, de todos los
actores que participan en torno al bien común. Es un fin porque
afirma los procesos de participación.
 La diversidad y pluralidad de posturas, intereses y visones es
bienvenida, no hay concertación válida si de esta se excluyen
participantes en aras de facilitar o lograr rapidez en el proceso.
 El norte debe estar fijado hacia el arribo de acuerdos consensuados.
Consensuar acuerdos no implica necesariamente unanimidad sino la
confluencia de diferencias en torno al bien común.
 Todos los integrantes del proceso son respetados por igual y el
trabajo principal se centra en la resolución de problemas y la toma
de
decisiones.
B. Requisitos Claves para un Proceso de
Concertación Exitoso: Los anteriores principios se
articulan a un conjunto de requisitos importantes a ser observados
para llevar a cabo un proceso exitoso:
 Contar con información clara, transparente y veraz que sea de
dominio de todos los participantes.
 Autonomía, voluntad y libertad para decidir involucrarse y formar parte
del proceso. Nadie puede ser forzado a concertar contra su
voluntad.
 Establecimientos de acuerdo y manejo de reglas de juego que sirvan
como pautas ordenadoras de la discusión y el debate.
 Norte claro y consensuado entre las partes involucradas. No se puede
concertar sin objetivos de antemano clarificados, en función del
interés de las partes y el principio de realidad.
 Debate abierto y transparente de ideas, posiciones, puntos de vista,
etc. El proceso de concertación será exitoso en la medida que lo
discutido responde a las necesidades e intereses de los
involucrados. Usamos la concertación,
como medio o instrumento para tomar decisiones colectivas en
donde el colectivo de los participantes, busca ponerse de acuerdo en
“el que, el cuando, el como y el donde” de las acciones prioritarias a
emprender; También un proceso de concertación debe determinar
cómo se gestionaran los recursos para poder realizarlas y qué
compromisos de acción asume cada uno de los
involucrados. Para tomar
decisiones colectivas, es preciso que las partes involucradas
participen por voluntad propia, que estén bien informadas de la
materia a discutir y que haya claridad alrededor de los objetivos o
resultados que se buscan obtener. La clave de toda acción
concertadora es que en el proceso participen todas las personas o
representantes que tengan algo que ver y decir sobre el tema en
discusión. Justamente, esta característica hace que los procesos de
concertación adquieran complejidad. Concertar no es fácil, es el
camino más largo, pero el más seguro para legitimar
decisiones.
4. ETAPAS DE LA
CONCERTACIÓN Poner en
marcha un proceso de concertación implica tener en cuenta una
serie de etapas a lo largo de las cuales discurre el
proceso:
-Definición del objetivo principal o
resultado al que se quiere
llegar
-Identificación de los participantes claves del
proceso
-Generación de corriente de opinión favorable al
proceso
-Generación de los espacios de discusión y las
metodologías de trabajo a
seguir
-Difusión de información significativa del proceso entre
los actores involucrados y retroalimentación
permanente -
Formulación y suscripción de acuerdos consensuados y difusión de
los
mismos
-Ejecución de los acuerdos en función a los compromisos
asumidos por las
partes
-Evaluación del proceso y seguimiento del cumplimiento
de los acuerdos

La Concertación se desenvuelve, esquemáticamente hablando; a través, de


una primera etapa preparativa, otra de discusión o negociación, otra de
suscripción de acuerdos o decisiones y otra de seguimiento y evaluación.
Cabe tener en cuenta que el acto de concertar no es un tema estrictamente
técnico o metodológico, éste tiene mucho de interactivo, dado que los
actores involucrados ponen en discusión sus necesidades, intereses,
posturas y ello pasa por una situación en la que se ponen en juego acciones
de poder: presionar, orientar el proceso, insistir e incidir, etc.

Por ejemplo, una experiencia concertadora puede buscar poner de acuerdo


o tomar decisiones conjuntas entre representantes de diferentes posturas e
intereses: un grupo de ciudadanos y un grupo de empresarios propendiendo
por la utilización de un recurso natural escaso de su región como un bien
común, todos con diferentes posturas respecto al tema a consensuar.

El llevar a cabo una exitosa experiencia de concertación traerá como


resultados de dicho proceso:

 Desarrollar y fortalecer las capacidades de los agentes involucrados,


en el campo de la gestión, comunicación, negociación y conducción
de procesos.
 Generar y fortalecer liderazgos sociales a nivel local, regional y
nacional
 Mejorar la gestión de los recursos a todo nivel (humanos,
económicos, financieros, naturales, etc.) en el ámbito en el que se
haya llevado el proceso.
 Mejorar y aumentar las capacidades locales para aprovechar las
oportunidades de desarrollo
 Generar nuevas redes sociales, confianza entre los actores y
fortalecer las organizaciones.

El resultado principal de toda acción concertadora radica en las decisiones o


acuerdos consensuados que se tomen sobre uno o varios puntos
contemplados en la agenda de trabajo. De hecho el concertar genera valor
no solamente a nivel de los resultados expresados en acuerdos sino
también por la riqueza del proceso desplegado.

Un proceso exitoso de concertación va ha renovar los pactos sociales, la


confianza entre los diferentes actores sociales e institucionales de una
comunidad: aquello que se viene a llamar hoy en día capital social.
Así, además de los acuerdos que se puedan suscribir entre las partes, el
proceso mismo aporta a que los actores que intervengan se conozcan más,
entablen relaciones y se vaya generando confianza entre ellos. Se puede
decir que esta es una de las principales ganancias secundarias de todo
proceso concertador.

¿Y qué dificultades pueden afectar lo hacer fracasar los procesos de


concertación?

 Ausencia de objetivos
 Falta de información
 Ausencia de voluntad para llegar a algún acuerdo.
 Limitadas capacidades y destrezas para el diálogo
 Limitaciones en la capacidad para comunicarse
 Débil participación de los agentes involucrados
 Procesos mal diseñados
 Falta de tolerancia y cooperación
 Incumplimiento de acuerdos
 Falta de confianza o credibilidad en el proceso

Los procesos de concertación, si bien pueden estar muy rigurosamente


diseñados y pautados, estos siempre son una experiencia abierta que
dependerá en gran medida de una relación complementaria entre la
estrategia trazada y la voluntad de los participantes para arribar a
decisiones de común acuerdo. Concertar es abrir un espacio para la
negociación permanente. Se busca concertar para llegar a resultados, que
se expresan como acuerdos entre las partes.

Si bien últimamente la concertación viene sonando mucho como proceso a


través de la cual se alienta y canaliza la participación ciudadana, hay
relativamente poco material sistematizado sobre el “cómo hacer” y cuáles
son las orientaciones estratégicas como para hacer de estos procesos
experiencias exitosas. De hecho, una de las destrezas clave a ser
desarrolladas tiene que ver con la prevención de conflictos y la negociación
constructiva.

5. CONCERTANDO EN CONTEXTOS PLURIDISCIPLINARIOS.


En los espacios pluridisciplinarios, ahí donde se cruzan diversos modos de
percibir, interpretar y actuar en el mundo, son los lugares en donde las
experiencias de concertación pasan una de sus principales pruebas de
rigor. Ya vimos que concertar es el proceso a través del cual múltiples
personas o representantes de diversas instancias buscan ponerse de
acuerdo y generar decisiones en común. En tal sentido, si es que además
de tener posturas o intereses que pueden no ser necesariamente
confluyentes, tenemos como telón de fondo las diversas miradas que sobre
un mismo punto, vienen pautadas por diferencias disciplinas, los procesos
de concertación asumen cierta complejidad.

En este punto, nuestra perspectiva intercultural de capacidad comunicativa


y de voluntad concertadora entra en juego. No podríamos avanzar hacia
una exitosa experiencia de concertación si es que de principio no asumimos
el diálogo pluridisciplinario como principio de base: Es ahí donde no hay
verdades rotundas sino que éstas se construyen en la respetuosa y
equitativa interacción.

En este caso, no basta solamente con atender a los diferentes intereses en


juego sino a las percepciones singulares que hay detrás de cada uno y darle
a cada uno la confianza que amerita y a partir de ello abrir el espacio para el
diálogo en igualdad de condiciones.

La concertación en contextos Pluridisciplinarios, adquiere una mayor


complejidad, qué duda cabe, porque los elementos en juego tienen que ver
con las “verdades, las convicciones y las necesidades” que cada grupo
interesado tiene como marco referencial y desde donde tejen sus singulares
posiciones, intereses, temores y aspiraciones.

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