Cuidadosamente planificada, con calles, grandes plazas públicas, edificios
piramidales, y varias agrupaciones artesanales y residenciales, CARAL se
divide en dos sectores según una ORGANIZACIÓN DUAL (cosmovisión). Ambas partes poseen un edificio principal de mayores dimensiones y una plaza circular hundida: el templo piramidal mayor en el sector alto, hacia el norte; y el templo del anfiteatro, en el sector bajo, hacia el sur.
La zona residencial se articula en
diferentes barrios formados por pequeñas construcciones de un solo piso ubicados tanto en el sector alto como en el sector bajo.
Sirvieron como viviendas de las
personas que trabajaron para las actividades de las pirámides, y también de los propios sacerdotes o gobernantes de la ciudad.