Si…Hablemos de mujeres.

Pero de aquellas que decidieron emprender por una u

otra razón. Aquellas, a quienes se les ocurrió que crear empresa les traería un
bienestar económico y una mejor calidad de vida, o simplemente aquellas que no
tuvieron más opción que “inventarse” un negocio propio para tener un ingreso
económico y a la vez, cuidar de sus hijos y hacerse cargo del hogar.

Si…Hablemos de mujeres. Pero de aquellas que decidieron emprender por una u

otra razón. Aquellas, a quienes se les ocurrió que crear empresa les traería un
bienestar económico y una mejor calidad de vida, o simplemente aquellas que no
tuvieron más opción que “inventarse” un negocio propio para tener un ingreso
económico y a la vez, cuidar de sus hijos y hacerse cargo del hogar.

Para entender mejor lo que ocurre con aquellas mujeres, es importante

comprender un poco la realidad emprendedora del país, pero sobre todo la
femenina. Para ello, cabe destacar que existe aproximadamente un 54.5% de
intención emprendedora en Colombia, es decir que existe una población
comprendida entre los 18 y 64 años que tiene la intención de crear su negocio en
tres años. (Fuente: GEM, www.gemconsortium.org/visualizations,
“Entreprenurial Intention”). Esta cifra sobrepasa a la de países como Chile,
Brasil, México y Estados Unidos.

Con estos números en la cabeza, podemos ver que el emprendimiento en

Colombia cada vez toma más fuerza, pero con el fin de enriquecerlo, es
importante que diversos sectores como el económico, financiero, político y
académico se ‘’pongan la camiseta’’ para lograrlo. Además, no se puede
desconocer que aún existen limitantes a la hora de emprender como el alto costo
de hacer negocios en Colombia y el uso deficiente de los servicios financieros.

Panorama del emprendimiento femenino en Colombia

Según un reporte publicado por la Unidad de Inteligencia Económica, apoyada

por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Colombia se ubica en el (3er)
tercer lugar de la región con un ambiente favorable para que las mujeres sean
emprendedoras. Esto, acompañado de un escenario ventajoso en otros temas
como un bajo riesgo operativo de las empresas y fácil acceso a herramientas
financieras. (Ver Ranking en www.weventurescope.com/en/Home/Ranking)

Mujeres gerentes de MIPYMES disfrutan de un amplio acceso a organizaciones

empresariales y del apoyo de programas dirigidos en gran parte a empresas
creadas por mujeres. La educación y entrenamiento de habilidades y capacidades
en todos los niveles son particularmente fuertes y en este sentido, en el 2003
Colombia empezó a ofrecer apoyo técnico, organizacional y de gestión para las
empresas pertenecientes a mujeres en los espacios urbanos y rurales.

Este escenario resulta favorable para aquellas mujeres que emprenden. En otras
palabras, valdría decirse que, las mujeres en Colombia podrían emprender por
oportunidad más que por necesidad. Aunque este supuesto podríamos debatirlo
en otra discusión.

Respecto a la ocupación de las mujeres en Colombia, los sectores en los que más
emprenden son: Servicios de consumo, cosméticos, confecciones y turismo. No
obstante, existen más campos en donde las mujeres podrían ser muy exitosas,
teniendo en cuenta la coyuntura tecnológica y económica del país. ¿Por qué no
pensar en diversificación?.

En últimas, el emprendimiento femenino en Colombia tiene características

prósperas para desarrollarse a mediano plazo en el país. Esto busca convertirse en
una opción de vida para muchas mujeres profesionales y no profesionales, que
deciden tener independencia económica y flexibilidad horaria para asumir todas
sus tareas a la vez (en algunos casos) como la de ser madre, trabajadora y jefe de
hogar.

El escenario es prometedor para que muchas mujeres que aún no se han decidido,
dejen de lado los miedos al fracaso y vean en su entorno más oportunidades que
amenazas al momento de crear su propia empresa y simplemente tomen ese
“pequeño” riesgo de emprender.