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Manual de Derecho Político
sin que éstos cuenten para él, está el ger- Antecedentes de esta concepción se en-
men de su impulso antisocial. El hombre cuentran en Sócrates, en los sofistas y en los
es social y antisocial a la par. La esencia de estoicos. Sin embargo, la mayor explicitud se
este hecho está en la convivencia vital de presenta en los representantes de la Escuela
que lo social es ayuda necesaria y, al mismo Clásica del Derecho Natural y en los contrac-
tiempo, límite y barrera”.18 tualistas Hobbes, Locke y Rousseau.
Prácticamente toda la temática que se En contra de este “atomismo”, que
estudia en este curso incide en describir los concibe la sociedad únicamente como un
esfuerzos que el hombre ha desplegado a “mecanismo” compuesto de individuos, se
través de los siglos, creando instituciones presenta la concepción organicista.
que estimulen los impulsos sociales y limiten En efecto, para los organicistas, la so-
al mismo tiempo los antisociales. ciedad es una unidad originaria con la que
los individuos mantienen la relación de
miembros; y, por lo tanto, sólo pueden ser
2. CONCEPCIÓN MECÁNICA Y CONCEPCIÓN comprendidas partiendo de la naturaleza
ORGÁNICA DE LA SOCIEDAD del todo.
La concepción orgánica suele exponerse
Aun cuando el tema corresponde con con una connotación biológica: la sociedad
propiedad a la sociología, resulta pertinente es un organismo igual al de los animales. La
una breve referencia acerca de dos con- base de la vida social no es psicológica sino
cepciones de la naturaleza de la sociedad; biológica. La sociedad, como todo organis-
“mecanicismo” y “organicismo”. mo, implica la “unión de varias partes que
El examen de las tesis opuestas permite cumplen funciones distintas y que con su
advertir en toda su significación la compleja acción combinada concurren a mantener
relación sociedad-individuo, tópico determi- la vida del todo”. Algunos autores llevan las
nante en la formulación de regímenes políticos, identidades a un grado extremo: las institu-
como se podrá apreciar más adelante. ciones de ahorro corresponden al sistema
Para la concepción mecánica o atomista vascular, las redes telegráficas al sistema
la sociedad es sólo una suma de individuos, nervioso, los ciudadanos son las células y
un aglomerado de partes que permanecen los empleos públicos los órganos.
distintas entre sí. Los individuos son las La doctrina orgánica también se pre-
únicas realidades, los individuos son sus- senta revistiendo un carácter espiritualista:
tancia y, en cambio, los grupos sociales no la sociedad presenta una unidad o perso-
son más que su función. Todas las especies nalidad moral, con voluntad propia y que
de grupos humanos carecen, entonces, de es éticamente la más valiosa. Desde este
realidad por ser únicamente ficciones o punto de vista, el grupo social tendría un
abstracciones. alma independiente de los individuos, una
La sociedad no es sujeto de vida propia, conciencia colectiva y una voluntad inde-
como es el hombre, porque no hay vida pendiente.
de la sociedad equivalente a la vida de los En todo caso, puntualiza Jellinek, “es
individuos. Las únicas realidades humanas común a todas las concepciones orgánicas
sustentantes y las únicas que viven en el –biológicas y psíquicas– la negación de la doc-
sentido genuino de la palabra vivir, son trina que considera las formaciones sociales
las personas individuales. Cierto es que los como agregados procedentes exclusivamente
hombres reciben una nueva cualidad como de los individuos que las componen, o sea,
miembros de la sociedad, pero ésta no existe como sus elementos últimos”.19
sino en ellos y por ellos. El organicismo también reconoce ante-
cedentes en la antigüedad: Platón, Aristóte-
18
FERNÁNDEZ, TORCUATO, La Justificación del Esta-
19
do, Editorial Instituto de Estudios Políticos, Madrid, JELLINEK, GEORG, Teoría General del Estado, Edi-
1946, p. 86. torial Albatros, Buenos Aires, 1954, p. 113.
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les. En los tiempos modernos con mayor o concreto, inescindible; sus partes no tienen
menor sistematización quedan adscritos al un lugar o sitio fijo, como las de los organis-
organicismo: Hegel, Comte, Spencer, Schaf- mos, sino que gozan de una cierta movilidad,
fle, Worms, Lilienfeld, Haeckel y otros. de una cierta autonomía e independencia
Por su ponderación, resulta de interés crecientes, en razón directa del desarrollo
transcribir la apreciación de Giorgio del de la sociedad misma. La sociedad es, en
Vecchio acerca del tema. suma, un todo discreto, mientras que el or-
“Importa, pues, establecer los límites ganismo es un todo concreto. Por ende, son
dentro de los cuales es aceptable la con- posibles en la sociedad ciertos fenómenos
cepción orgánica de la sociedad. Las exa- que no tienen equivalencia en el organismo
geraciones citadas no deben impedirnos (por ejemplo, emigración, suicidio, etc.), y
reconocer que entre la sociedad y un orga- que no podrían consiguientemente expli-
nismo existen analogías profundas, las cuales carse según la sola concepción orgánica,
son suficientes para hacernos rechazar la entendida estrictamente.
concepción mecánica de la sociedad. Dos La otra diferencia es de orden espiritual
son las analogías que más contribuyen a dar y de importancia todavía mayor que la pri-
preferencia a la concepción orgánica. Ante mera. En el organismo existe un fin único,
todo, la sociedad tiene vida independiente a saber: la vida del todo; las partes no tienen
de los elementos singulares que la compo- valor sino en cuanto concurren a mantener
nen: los individuos pasan, se suceden; la la vida del todo, y no vive sino por ésta. La
sociedad, en cambio, permanece y conserva sociedad, en cambio (aun teniendo fines
su forma. La sociedad nace, se desarrolla propios), sirve al bien de los individuos
y muere, de un modo propio, siguiendo y es una condición necesaria para la vida
una trayectoria propia. Por tanto, la des- de éstos. Todo individuo no es solamente
cripción de la vida de todos y cada uno de un medio, sino que también es un fin en
los individuos no supone la descripción de sí, tiene un valor absoluto. Esta diferencia
la vida de la sociedad. Además (y ésta es esencial entre la sociedad y el organismo
la segunda analogía fundamental), entre tiene particular importancia para las aplica-
los individuos que componen la sociedad ciones jurídicas. No podemos concebir un
existen relaciones necesarias por las cuales sistema de Derecho sin la idea del valor de
todo individuo experimenta el efecto de su la persona. Siguiendo literalmente la teoría
pertenencia al todo. Hay una solidaridad y orgánica, deberíamos negar este valor y
una colaboración a fines comunes, es decir, considerar al individuo como un simple
una ordenación de las diversas actividades medio. A tal error gravísimo se inclinan
en relación con fines que exceden de la precisamente aquellos sociólogos que, sin
vida individual. El trabajo de todo indivi- suficientes reservas críticas, consideran la
duo no concierne sólo a sus necesidades sociedad como un organismo. Adviértase
propias, sino también a las de un número que también incurrieron en un error tal
indefinido de otros individuos; será, en –bien que a través de otra vía– los grandes
suma, una distribución, una división del clásicos griegos Platón y Aristóteles, a los
trabajo social (como la llama Durkheim), cuales la idea del carácter orgánico de la
esto es, una ‘organización’ de las tareas y sociedad los privó de apreciar adecuada-
de la vida común. mente el valor de la persona individual (por
Al lado de estas semejanzas, que permiten lo cual pudieron, por ejemplo, justificar la
afirmar el carácter orgánico de la sociedad, esclavitud).
debemos notar, como ya lo hizo también Otro defecto de la teoría orgánica con-
Spencer, las diferencias entre la sociedad siste en que puede dar lugar fácilmente
y un organismo en sentido propio, o sea, a la idea de que la sociedad está fundada
individual. Estas se reducen esencialmente sólo sobre un vínculo biológico, o sea, que
a dos. La primera, más visible, consiste en consiste en una relación simple y homo-
que la sociedad no es un todo compacto, génea; mientras que, en realidad, es un
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leza; por la cultura elabora ideales que se cultural crea los artefactos, instrumentos
oponen a la naturaleza. técnicos y las instituciones.
Como dice Maurice Hauriou, el hombre Por ejemplo, tan pronto como la satisfac-
ha creado el ambiente social que no le per- ción del amor sexual se transforma en una
mite evolucionar hacia otras formas. Al crear vida en común permanente y el cuidado
el ambiente social el hombre ha cortado de los hijos conduce a una vida doméstica
la línea de la evolución. Así, la civilización permanente, se dan nuevas condiciones, cada
humana es irreversible y su historia más es una de las cuales es tan necesaria para la
una reacción del hombre contra el medio natural autoconservación del grupo como lo es cada
que adaptación. Crea, en efecto, el hombre fase de un proceso puramente biológico.
una sobreestructura de productos artificia- El matrimonio es, sin duda, una institución
les, límites y restricciones que impiden su social basada en el instinto sexual, pero es
evolución ulterior. De ahí que en vez de a la vez mucho más.28
evolucionar, el hombre progresa, es decir, trata De suerte que si, en una primera aproxi-
de llevar a su perfección el tipo de hombre mación, definimos a las instituciones como
concebido racionalmente.27 Estas formas
“creaciones del hombre para satisfacer ne-
de actuar son específicamente humanas,
cesidades sociales”, debemos puntualizar
“no naturales”, “artificiales”, comparadas
que toda institución es una síntesis de fun-
con la conducta biológico-animal.
Cierto es que el hombre no puede eludir ciones y satisface siempre varios objetivos
la satisfacción de las necesidades biológicas al mismo tiempo.
fundamentales, pero a través del proceso 28
Ver SCHELSKY, HERMUT, Acerca de la estabili-
dad de las instituciones en El hombre en la civilización
27
Principios de Derecho Público y Constitucional, Edi- científica u otros ensayos, Editorial Sur, Buenos Aires,
torial Reus, Madrid, 2ª edición, 1927, p. 86. 1967, p. 47.
TEXTO COMPLEMENTARIO
Texto atinente a párrafo 1: han explorado las zonas polar y tropical entre
Acerca de la naturaleza social del hombre las que se extiende.
a) Ama a tu prójimo como a ti mismo. En el
campo de la teoría ética abundan las doctrinas
LESLIE LIPSON que hacen hincapié en el aspecto cooperativo de
Los grandes problemas de la política las relaciones humanas y prescriben un curso de
Editorial Limusa, México, 1964, pp. 53 y ss. acción basado en la necesidad que los hombres
tienen los unos de los otros. Prueba de ello es el
CONDICIONES OPUESTAS mandato de los Evangelios de “ama a tu prójimo
SOBRE LA NATURALEZA HUMANA como a ti mismo” o la norma de “no hagas a otro
La verdad de que los hombres no pueden lo que no quisieras que te hicieran a ti mismo”.
basar sus vidas en la pura cooperación o en la En la misma vena fueron escritas estas elocuentes
pura competencia, y de que los intentos de acer- palabras de John Donne: “Ningún hombre es
carse demasiado a cualquiera de los extremos una isla, todo para sí mismo; cada hombre es
resultan impracticables, se aclarará un poco más parte del continente, es parte de lo principal;
mediante algunos juicios contrastados en los si el mar se lleva un terrón, eso de menos tiene
campos de la ética, la economía y la biología. Europa, como si hubiese sido un promonto-
Considerar tales extremos es valioso porque rio, como si hubiese sido una heredad de tus
ilumina la esfera que queda entre ellos. Una amigos o de ti mismo; la muerte de cualquier
zona templada cobra más interés cuando se hombre me disminuye, porque soy parte de la
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humanidad; y por tanto, nunca preguntes por (u otra) puede caerle a él mismo”, lo que es
quién doblan las campanas; doblan por ti”. Estas una flagrante manera de deformar los hechos
expresiones y otras semejantes no describen con para salvar una teoría.
apego a la realidad cómo sienten y se portan la Tales opiniones diversas refuerzan la afir-
mayoría de las personas. Declaran algo acerca mación de que los agrupamientos humanos
del sentimiento y la conducta como podrían ser no pueden atribuirse solamente a uno de sus
y a juicio del que habla deberían ser. Lo que aspectos o ser explicados por una sola causa. Por
quizá sea más significativo de tales doctrinas tanto, la sociedad está fundada en una paradoja.
es la continua distancia que media entre los Los dos principios que explican, principalmen-
ideales a menudo repetidos y las persistentes te, la formación de grupos son mutuamente
realidades. Sin ser un cínico, cualquiera que antagónicos. Donde uno avanza, el otro retro-
haya vivido en la primera mitad del siglo XX cede en la misma medida. Son también, sin
habrá de aceptarlo. Indudablemente, la razón embargo, complementarios, y cada uno tiene
de esta distancia es que tales preceptos hacen que mezclarse con su antítesis para salvarse de
excesivo hincapié en la cooperación y no toman sus propios excesos. El aceite y el vinagre no se
suficientemente en cuenta la capacidad de odio pueden unir; pero se mezclan. Esto no quiere
y de destrucción del hombre. decir que los dos principios tengan igual valor
b) Que los perros se coman a los perros. Opues- y deban mezclarse en iguales proporciones. De
tos a la benevolencia universal, e igualmente hecho, lo contrario es lo cierto. De los dos, el
exagerados en la dirección contraria, son los más importante es la cooperación. La huma-
dogmas del egoísmo universal. En un pasaje de nidad podría existir sin competencia. Pero no
El príncipe, Maquiavelo resumió de la siguiente podría existir sin cooperación. Inclusive cuando
manera su concepción de la humanidad: “Porque los hombres actúan en competencia, forman
puede decirse de los hombres, en general, que grupos en los que cooperan unos con otros a
son ingratos, volubles, hipócritas, ansiosos de fin de llevar a cabo más eficazmente la compe-
evitar el peligro y ávidos de ganancia, mientras tencia contra quienes están fuera del grupo.
los beneficios serán enteramente tuyos; te ofre- Así, las exigencias de la competencia llevan a
cerán su sangre, sus bienes, su vida y sus hijos, los hombres a la cooperación. Lo contrario, sin
como he dicho antes, cuando la necesidad sea embargo, no ocurre. Los hombres no se ven
remota; pero cuando se acerque, se rebelarán”. llevados a competir por la necesidad de coope-
No tan centrada en el yo fue la caracterización rar. Por tanto, la cooperación es el principio
de Hobbes, que considera que “de los actos más importante; y aunque la humanidad deba
voluntarios de cada hombre, el objeto es algún tomar en cuenta el elemento necesario de la
bien para sí mismo”. competencia, la mezcla social debería contener
Inclusive llega a decir que la compasión una gran cantidad de la primera y una cantidad
“surgió de imaginar que una igual calamidad más pequeña de la segunda.
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