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Anarquistas en Montevideo: ideas y prácticas en

torno al “tiempo libre” de los trabajadores (1920-1950)1


Anarchists in Montevideo: ideas and practices in relation to workers’ ‘free time’ (1920-1950)
Anarquistas em Montevidéu: ideias e práticas sobre o “tempo livre” dos trabalhadores
(1920-1950)
Rodolfo Carlos Porrini*

“No será posible la emancipación del obrero,


Resumo mientras éste obstruya su cerebro con el foot-
ball, las carreras, la política y, lo que es peor
Sindicatos, ateneos, bibliotecas, periódi- en más alto grado, con el alcohol. He ahí el
gran enemigo, el pedestal que, a nuestro juicio,
cos y agrupaciones dieron vida al mul- sostiene este edificio de explotación que se llama
tifacético movimiento anarquista mon- estado burgués, con más fuerza que ningún
tevideano durante la primera mitad del otro.” (Despertar, marzo 1919).
siglo XX. Mientras las clases populares “Pero el pueblo inconsciente, el pueblo que
y trabajadoras tenían sus propias expre- vive sin saber como ni para que; esa recua
siones, ideas y comportamientos en rela- de esclavos aplastados bajo su ignorancia
irredenta, sin alma y sin personalidad; eso que
ción con el tiempo libre, los anarquistas va a marearse y a hundirse más en la vergüenza
reflexionaron críticamente sobre gran de su condición, aturdiéndose con el ruido y el
parte de los mismos. Guiados por sus tumulto carnavalesco, como se aturden y se
embrutecen todo el año con el alcohol en las más
ideas de educación e “iluminismo”, sano inmundas tabernas dejando en el fondo sucio de
esparcimiento, higienismo, cuidado y los vasos en que beben, los últimos andrajos de su
fortalecimiento del cuerpo, propusieron dignidad de hombres nacidos para vivir y pensar
libremente; así, después de servir de bestias de
diversas formas culturales, deportivas carga [...] les sirven en los días de carnaval de
y recreativas alternativas, que lograron payasos impúdicos, cuyas muecas y gestos
alcanzar a ciertos sectores de la sociedad descompuestos, plagian las gesticulaciones
semejantes de los primitivos salvajes habitadores
montevideana. En ese periodo los anar- de cavernas” (Despertar, noviembre 1921).
quistas fueron modificando algunas de
sus interpretaciones y las propuestas al-
ternativas. Se pretende mostrar parte de *
Doctor en Historia por la Universidad de Bue-
ese itinerario y pensar en las causas de nos Aires. Docente e investigador de la Facultad
de Humanidades y Ciencias de la Educación de
tales modificaciones. la Universidad de la República.
Palabras clave: Anarquistas. Tiempo li-
bre. Montevideo. Recebido em 21/06/2013 - Aprovado em 30/08/2013
http://dx.doi.org/10.5335/hdtv.13n.2.3279

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En estos fragmentos los redactores del jo” (el fútbol, el carnaval, el consumo de la
periódico de los obreros sastres y órgano del prensa, del cine y la radio), y todas ellas iban
Sindicato Único de la Aguja -integrante de atrapando a gran parte de la sociedad y a
la anarquista FORU, Federación Obrera Re- sus clases populares y trabajadoras.2
gional Uruguaya- advierten sobre los prin- Para el movimiento obrero y anarquis-
cipales enemigos con que debían lidiar los ta en particular eran tiempos revueltos en el
revolucionarios para lograr “la emancipaci- “mundo”, especialmente en la Europa que
ón del obrero”. La obstrucción del cerebro a generó la emigración española e italiana -
partir del fútbol, las apuestas en las carreras componentes fundamentales del anarquis-
de caballos y el consumo del alcohol en las mo montevideano, junto a otros migrantes
tabernas eran actividades donde los traba- en los 20-, la Rusia de los zares asaltada por
jadores (mal) empleaban su tiempo libre. los soviets y que expandía su revolución y
A ello debía agregarse las carnestolendas la Argentina donde las movilizaciones anar-
durante febrero de cada año y lo que enten- quistas y socialistas llegaron a inquietar al
dían implicaba una pérdida de dignidad y Estado. En Montevideo, de las políticas re-
su condición de hombres “para vivir y pensar formistas del batllismo se pasó desde 1916 a
libremente”. Estas reflexiones evidenciaban la “república conservadora”, de tono menos
una prédica moralizante y a la vez cuestio- innovador y más represivo de las protes-
nadora de los comportamientos populares y tas y las organizaciones obreras. Al menos
de los trabajadores. entre 1917 y 1921 se produjeron intensas
¿Cómo era la sociedad montevideana luchas gremiales (frigoríficos, tranviarios,
de los veinte y qué opciones abría para el portuarios y marítimos) y cruentas repre-
disfrute del tiempo libre? ¿con qué empren- siones, contemporáneas de las ocurridas en
dimientos debían competir los libertarios la Buenos Aires de la “semana trágica” de
en ese terreno? Los “enemigos” declarados 1919 y en la Patagonia de esos años. Muchas
de la emancipación recién mencionados, se de esas luchas estaban influidas por los li-
hallaban en un marco más amplio de ofertas bertarios, aunque asomaban en ellas los so-
que provenían de empresarios privados, la cialistas -desde 1910- y los comunistas una
Iglesia Católica y el Estado, o que se venían década después.3
desplegando desde la cultura popular desde En ese clima “revolucionario”, el tiem-
hacía mucho tiempo. El teatro, el cine, la ra- po “libre” que veían los anarquistas –mirada
dio, los deportes, las fiestas y las múltiples común a otros sectores de la izquierda- era
publicaciones, constituían medios tradicio- el que se debía destinar principalmente a
nales o renovados de ocio y medios masivos la militancia, a la lucha por la sociedad del
de comunicación; en tanto las plazas y par- porvenir, y la formación y la educación en
ques, las ramblas o paseos marítimos eran consonancia con aquellas. Pero también se
sitio de variadas diversiones para todos los ensamblaban con formas de entretenimien-
montevideanos. Algunas de estas opciones to, que constituían rituales religantes e iden-
provenían o eran reelaboradas “desde aba- titarios. Todas estas actividades implicaban

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lazos de solidaridad y de “sana camarade- multifacético espacio social de los anarquis-
ría”, para las cuales los libertarios ideaban tas montevideanos estaba constituido por
y ponían en práctica propuestas culturales y sociedades de resistencia, ateneos, bibliote-
formativas alternativas. cas, círculos de estudios, clubes deportivos
La crítica a los burgueses, a la política y agrupaciones barriales.5 Una investigación
y a la represión gubernamental hacia el mo- de Daniel Vidal (2009a) abarcando el perio-
vimiento social, se acompasaba también de do de 1900 a 1920 da cuenta de la existencia
la que apuntaba a los comportamientos “no de 35 centros de estudios en Montevideo, y
revolucionarios” de las clases populares. que al menos una quincena funcionaron si-
Esas ideas giraban de hecho en torno a lo multáneamente en los tiempos considerados
que hacían los trabajadores fuera del traba- de auge.
jo, en su tiempo libre. En un ámbito espacial Además de las huelgas, boycotts, sabo-
e ideológico muy cercano, los anarquistas tajes y movilizaciones, proponían acciones
bonaerenses buscaban combinar “más equi- de naturaleza formativa, artística y educa-
libradamente el tiempo libre productivo y tiva, que también involucraban aspectos de
el ocio” (Suriano, 2001, p. 171). Precisa- diversión y “expansión”, desde las cuales se
mente la discusión y las ideas sobre lo que construía y preparaba al “militante” para la
“debían” hacer los trabajadores y el pueblo, lucha en los diversos terrenos y para la vida
se daba en un contexto particular en el cual compartida entre compañeros de ideolo-
las noticias de la revolución rusa iniciada en gía y de ruta.6 Llevar la “luz” a los deshe-
octubre de 1917, las persecuciones estatales redados, combatir la ignorancia, preparar a
en Argentina y el Uruguay, se combinaban las fuerzas del cambio para la sociedad del
con la creencia en un cambio revolucionario mañana, eran algunas de las misiones comu-
dentro de fronteras y en la región del Plata, nes a las opciones ideológicas que buscaban
en una más amplia marea de transformación transformar la sociedad, como anarquistas,
mundial. Esto estaba en el imaginario y las socialistas y comunistas.
expectativas de los pequeños y activos nú- Ateneos, círculos, periódicos, sindica-
cleos ácratas en los primeros años del dece- tos y clubes de fútbol, con distinto nivel de
nio de 1920. institucionalización y definiciones ideológi-
cas, daban cabida a las propuestas alterna-
tivas en lo cultural, periodístico, deportivo
Entre la lucha, los pic-nics y el deporte
y formativo, alcanzando posiblemente un
proletario público más amplio que el convocado para
la lucha política o gremial. Desplegaron un
¿Qué pretendían los anarquistas del
conjunto de emprendimientos que buscaron
tiempo libre de los trabajadores? Su idea
atraer a los trabajadores y dar batalla en el
de “cultura” era “llevar la luz”, la razón y
terreno del tiempo de “no trabajo”.
la ciencia, la iluminación de su condición de
Frente al importante despliegue de
explotados y oprimidos, y la disposición a
opciones culturales y de ocio que ofrecía
integrarse a los procesos de su liberación.4 El

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Montevideo, los anarquistas fueron creando las veladas estaban presentes en la sociedad
sus propias propuestas alternativas, en tanto montevideana, eran compartidas como “for-
buscaban competir con las ofrecidas por los mas” con otros sectores sociales, políticos y
burgueses y el Estado y mostrar un modelo culturales –inmigrantes, liberales, católicos-,
societal y valores diferentes. Organizaron teniendo diferencias fundamentalmente de
veladas culturales, conferencias y cursos de sentido, apuntaban a crear espacios y expe-
formación –que se realizaban en cines y tea- riencias para vivir o construir la sociedad
tros alquilados o en locales propios-, sugirie- deseada.
ron lecturas y editaron múltiples publicacio- Por otra parte, entre los grupos liber-
nes; al aire libre promovieron excursiones, tarios había diferentes matices entre sí e
pic-nics o paseos campestres, y la práctica inclinaciones preferenciales. Desde El Hom-
de deportes como el fútbol.7 En algunos ca- bre, periódico identificado con la corriente
sos tomaban temas de salud, higiene y ali- anarquista individualista, se prefería las ac-
mentación –sintonizando con naturistas y tividades artísticas e intelectuales más que
vegetarianos- y rechazando, en general, el determinados deportes, que en Uruguay
consumo de alcohol. En estos temas se reve- y en especial en Montevideo ya tenían una
laba la influencia de la medicina social y el importante aceptación entre las clases popu-
higienismo de la época. lares. Expresaba con claridad la importancia
Los anarquistas –así como otras cor- de la orquesta nacional “más que esos cam-
rientes de izquierda- contemplaron en el peonatos de boxeo y de football tan favore-
periodo diversas formas de combate y de cidos en el país”. Se contraponía la ciencia y
formación, así como de expansión y camara- el arte al deporte, jerarquizando el impulso
dería, que recién hemos señalado. ¿Qué fines de aquellos, pues “la ciencia y el arte son
tenían estas actividades? ¿Por qué atraían a el pan espiritual que necesitan los pueblos
los trabajadores? Todas ellas constituían es- para ser grandes y libres”, y el arte permite
pacios de sociabilidad, fraternidad y “vida generar “valores morales superiores” y ayu-
sana”, vehículos de propaganda ideológica, da a que el mundo evolucione en el sentido
medios para obtener fondos (mantener la de los “postulados modernos” de la paz de
prensa y los “comités pro presos sociales”, la los pueblos y la felicidad humana (El Hom-
solidaridad con huelguistas o con los republi- bre, 3/5/1919, p. 3). En el caso de La Voz del
canos españoles), recordar a los “mártires” Chauffeur - orientado por libertarios vincula-
obreros, o constituir manifestaciones de soli- dos al gremio del automóvil y la FORU-, si
daridad con la clase obrera nacional y luchas bien había tensiones y polémicas en torno al
de carácter internacionalista, instancias que juego o práctica del fútbol –algunos de sus
ayudaban a delinear o construir identidades. lectores lo cuestionaban desde la doctrina
Estas actividades fueron organizadas anarquista-, una parte significativa acorda-
por las izquierdas así como por sindicatos y ba con su práctica y con que los “obreros del
centros de estudios. Además, como otras ex- volante” o choferes, organizaran un campe-
presiones culturales –ateneos y bibliotecas-, onato y la Liga de Chauffeurs de Football,

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con toda su institucionalidad (reglamento, taciones culturales y del tiempo libre más
jueces, equipos e infraestructura para el de- significativas y comunes en los anarquistas
porte). Lo que era fundamental era que se de las décadas de 1920 y 1930, produciéndo-
practicara por puro “ejercicio físico”, pero se algunos cambios desde mediados de esta
“pero no como un comercio o plataforma de última década, llegando hasta los cincuen-
otras ambiciones” (La Voz del Chauffeur, ta.8 En esas décadas las veladas in­cluían re-
1ªquincena/8/1923, p.6). De todas maneras, presentaciones teatrales, música, canto, dan-
para ellos lo principal, además del terreno zas o bailes, conferencias y la proyección de
gremial, era dedicar “especial interés a Lite- filmes.
ratura, Poesía, Filosofía, Arte, Ciencia, etc.” Las veladas anarquistas, en el entorno
(La Voz del Chauffeur, 7/7/1923, p. 2). de los años veinte eran muy “completas” y
Las veladas. Dentro del arsenal de ini- tal vez en este tramo también extendidas en
ciativas culturales que desplegaron los anar- su duración, quizá no menos de tres horas.
quistas de las primeras décadas del siglo XX Una de estas, reseñada en el periódico Des-
se destacaron las veladas culturales, expre­ pertar a realizarse a fines de agosto de 1918
sión en la que me concentraré. se hacía “a beneficio de los padres del extin-
Estas constituían una representación to compañero Pascual Lorenzo”, revelando
simbólica cargada de rituales, signos de re- una de las finalidades de este tipo de even-
beldía, sonidos y mensajes (himnos, cánticos, tos, el aporte solidario. Una primera parte,
músicas, consignas) que constituían factores más “seria”, se componía de una sinfonía,
religantes del colectivo. Eran ámbitos de ex- una comedia dramática que representaba
presión de lenguajes de clase, que buscaban “un conflicto social” según Carlos Rama
una lengua común en sus discursos (“cofra- (“La Quiebra” de Edmundo Bianchi), una
des”, “camaradas”, “compañeros”), ante un poesía, y una conferencia por la Sra. María
público heterogéneo –obrero, intelectual/ Collazo, una conocida y apasionada oradora
artista, migrante europeo y criollo- partici- y directora del importante periódico ácrata
pante de la fiesta. Además, podía producirse La Batalla. La segunda parte incluía varios
algo indefinible en esa noche de “velada”: ¿la números y canciones regionales italianas:
comunidad de acción con los camaradas de macchiettas (a cargo de “un cómico”), tona-
lucha? ¿un sentimiento de clase? ¿la búsque- dillas y canzonetas napolitanas y una taran-
da de la elevación “cultural”? ¿la necesidad tela bailada por niñas, con un tono “inmi-
de encontrar amigos y afectos? ¿entretenerse grante” definido y más divertido. La tercera
y pasar el tiempo? parte seguía con el mismo tipo de canciones
Según primaran unas u otras formas y bailes y una “danza pastoral de los Ape-
expresivas, se denominaban artísticas, tea- ninos” (Despertar, Agosto 1918, p. 710). La
trales, artístico-musicales, literario-musica- importante presencia de formas musicales
les, cinematográficas, culturales o simple- italianas –muchas de ellas del sur- nos re-
mente veladas. Con antecedentes desde el cuerda especialmente el origen nacional y
decenio de 1890, fueron una de las manifes- regional de muchos de los sastres, gremio

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organizador del evento; el protagonismo de vocó una disminución importante de la fre-
“niñas” en sus números, nos induce a pen- cuencia del conjunto de la movilización y de
sar en la naturaleza familiar de muchos de eventos como las veladas culturales. No obs-
los concurrentes, así como en la existencia tante ello, se seguían realizando ese tipo de
de públicos múltiples. actividades. El “Centro de Estudios Sociales
Por ejemplo esta otra era más homo- del Paso del Molino” organizó una velada el
génea y exigente en sus “contenidos”. Una 30 de abril de 1930 en el Teatro Apolo del
“velada y conferencia” a beneficio del Co- Cerro “a beneficio del Comité pro Prensa”,
mité Pro-Presos y del periódico El Hombre además de conmemorar esa víspera el Pri-
fue organizada por el grupo anarco-indivi- mero de Mayo (Unión Sindical, 1º/5/1930,
dualista homónimo. Incluía proyecciones p. 3). Casi un mes después del Golpe de Es-
de cine -un “fotograma revolucionario” in- tado, el Comité pro presos de la FORU or-
terpretado por la actriz rusa Alla Nazimova ganizó en beneficio del mismo comité y la
(Huelga de madres)-, una “Conferencia so- FORU una “función cinematográfica” en la
bre la mujer, la guerra y la patria”, a cargo noche del domingo 30 de abril de 1933 en
José Tato Lorenzo, el Monólogo “El Atenta- el Cine Agraciada. Hubo además recitados
do”, declamación de poesías, y un “fotogra- de la “compañera Blanca Burgueño” –actriz
ma de carácter social”, La causa sagrada (El de trayectoria en la radio-, una conferencia
Hombre, 23/10/1920, p. 1).9 sobre los presos Kerbis y Cisneros, y los fil-
Un “importantísimo acontecimiento mes “El patrón del barco” y “Sensacional!
artístico y social” en el Teatro Colón a bene- La caída de San Petersburgo” (Solidaridad,
ficio de la anarco-sindicalista Unión Sindical 1º/5/1933, p.3). El viernes 19 de mayo, una
Uruguaya (USU) y de su Comité Pro Presos nueva actividad preparaba la Agrupación
en noviembre de 1924 incluía recitado de Progreso en el Cine Teatro Miramar del Cer-
poe­sías, conferencias y “una buena orques- ro. La sinfonía acompañaba el film que era
ta”.10 También se destacaba la representa­ un “estreno de la obra de Eugenio Sué ‘El
ción de una obra de teatro social por un cua- judío errante’”, un recital poético por Blanca
dro dramático barrial -el Emilio Zola de la Burgueño, un concierto de violín, y al final,
Villa del Cerro-, el “drama social” de Martín la segunda parte de “El judío errante” (Soli-
Dedeu “¡El Pecado es la Miseria!” (Unión daridad, 1º/5/1933, p. 4). Eran tiempos di-
Sindical, octubre/1924, p.2). fíciles para la prensa militante, los círculos
A comienzos de los años treinta y más y los gremios libertarios, con una FORU y
aún luego del golpe de Estado conservador una USU muy debilitadas y varios sindica-
del Presidente Terra en marzo de 1933 y has- tos “autónomos”.11
ta mediados de la década, la actividad sindi-
cal y de la izquierda fue afectada tanto por
la crisis económica como por la represión
estatal sobre militantes, locales y sus activi-
dades políticas y sociales. Esta situación pro-

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Organizar, educar, divertir y construir no tan frecuentes como el “canto criollo” –
si bien contaba con antecedentes ya desde
una vida alternativa de los trabajadores 1905- y usando más a menudo el cine. Una
velada del Comité Pro Presos del Sindicato
Desde 1936-1937 la reactivación econó-
de Panaderos –gremio autónomo vincula-
mica y en lo político el amplio movimiento
do al anarquismo- realizó el 24 de enero de
antifascista a nivel internacional y antidicta-
1936 una velada “al viejo estilo”. Comenzó
torial contra el régimen de Terra, ambienta-
con la ejecución de himnos –entre ellos La
ron la reorganización sindical y la acción de
Marsellesa- conferencias, obras teatrales por
los grupos de izquierda. Fueron creciendo
el cuadro artístico “Florencio Sánchez”, un
las actividades como veladas, festivales, bai-
concierto de violín con música clásica, y las
les y los pic-nics.
“canciones criollas” del cantor Benito Ovalle
En el discurso de la prensa anarquista
(El Sol, 2ª semana/1/1936, p. 3). La confe-
se mantenía una posición de crítica al carna-
rencia inicial versó sobre la “Solidaridad con
val, al fútbol oficial y al consumo de alcohol
los Presos Sociales”, acorde con el objetivo
muy similar a la de décadas antes, pero en
principal. Si bien el gremio de panaderos
los libertarios más jóvenes –como ha afirma-
era definidamente anarquista, el dirigente
do Mechoso- se advertía una actitud distin-
y poeta socialista Roberto Ibáñez fue invi-
ta, más abierta y cuestionadora de los viejos
tado a participar con una conferencia sobre
“dogmas” del pasado cercano, tal vez en el
“El Arte Teatral como medio de Cultura
marco de una nueva forma de hacer política.
Popular”, mostrando cercanías entre ambas
Había una preocupación por la formación y
corrientes, como la que tenían en el “Ateneo
la política, y también por las denominadas
Popular” en el barrio Sur.12
“sanas expansiones” que adquirían nuevos
Durante la guerra civil española (1936-
ribetes. Las Juventudes Libertarias -organi-
1939) fue importante la campaña de solidari-
zación surgida en 1938-, organizaron cursos,
dad desde los ambientes de izquierda y sin-
instalaron una Carpa en la playa Malvín que
dicales con la causa republicana, así como
implicaba el disfrute de la arena y el mar,
sectores de izquierda o liberales de los par-
realizando práctica de ejercicios físicos y
tidos Colorado y Nacional. Desde tiendas li-
siendo lugar de encuentro. Entre los jóvenes
bertarias, el Sindicato de Artes Gráficas rea-
obreros ácratas se veía normal participar en
lizó a fines de 1937 una exposición de afiches
clubes de fútbol y era natural el consumo
en el Ateneo de Montevideo, la mayoría de
de alcohol, seguramente al contacto con los
ellos de la C.N.T. (Confederación Nacional
cambios sociales y culturales más amplios en
del Trabajo) y la F.A.I. (Federación Anar-
las culturas obreras y en la Montevideo de
quista Ibérica). Poco después, el sábado 29
guerra y posguerra (Mechoso, 12/12/2008).
de enero de 1938 realizó una velada donde
Por otra parte, las veladas y festivales
el Cuadro artístico Florencio Sánchez puso
anarquistas de fines de los treinta conser-
en escena “El Deportao” -del militante gráfi-
vaban en general las características de los
co José M. Ferreiro- obra “de crítica social y
años veinte, e iban incorporando elementos

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de costumbres criollas”, y la comedia satíri- ro la posibilidad de cumplir el deseo utópi-
ca de Angel Gómez Giz “Pamperada”. Junto co y revolucionario, seguida luego de la im-
a ellas hubo recitados, cantos y la conferen- pactante derrota del proceso español y del
cia de Roberto Cotelo a su regreso de Es- sueño anarquista que vivían desde el Uru-
paña con noticias de la revolución española, guay. Y esto lograba teñir particularmente
mientras otros compañeros refirieron a “tó- todo su mundo y actividades culturales y en
picos gremiales y de actualidad”. También el tiempo libre.
se exhibieron “affiches españoles reciente- Tiempos de cambios. Si se observa en
mente llegados”, y “una buena orquesta” los años cuarenta las formas culturales del
amenizó la velada (El Obrero Gráfico, enero “tiempo libre” empleadas por los anarquis-
1938, p.1). Por su parte, los amigos del novel tas se puede reconocer cambios. El mundo
periódico Voluntad organizaron para el 5 de no era el mismo, había pasado la crisis del
noviembre en el Cine Teatro Edén del Cerro 29, producido la derrota de la Revolución
una “velada artístico-cinematográfica” en la Española, y luego de la Segunda Guerra el
que destacaba una alocución sobre España país estaba en su “mejor momento” y con
del “compañero Cotelo” (Voluntad, agos- un elenco gobernante que proponía el “bie-
to1938, p. 4). nestar” y políticas sociales inclusivas de las
Al mismo tiempo continuaban las tareas clases populares urbanas. Además, esos
solidarias a nivel nacional como las cam- cambios se pueden relacionar con la aún
pañas por la liberación de “presos sociales”. incipiente tensión que ocurría en el terreno
La velada de la “Agrupación Sembrando doctrinario en sus organizaciones y la ten-
Ideas” se hizo para apoyar a los presos so- dencia a converger en una organización “es-
ciales en el cine teatro Edén del Cerro, y con- pecífica”.13
tó en su Programa con una “Sinfonía”, luego Conviene tener presente los cambios
la “apertura” por un compañero, seguido socio-económicos y políticos en curso, en
del film trágico de Paramount “Caras olvi- especial la formación de la nueva clase tra-
dadas”. Continuó la actuación de “un cantor bajadora, el nuevo contexto ideológico esta-
de versos con guitarra”, y luego un segundo tal –que propugnaba la concertación social,
film, “Silencio”, cuyo argumento trataba de la industrialización y la “aliadofilia” ante la
un hombre que fue puesto “fuera de la ley guerra- y las transformaciones culturales y
por no denunciar a su hija”. El sábado 29 de en los medios de comunicación masivos.14
abril de 1939, en ocasión de rememorar otro Es probable que la nueva clase trabajadora
aniversario del Primero de Mayo, el Centro influyera en las jóvenes camadas militantes
Cultural Obrero de ‘Estudios Universales’ anarquistas, no todos ellos obreros, pero
organizó una función de cine en el Cine Edén insertos –por nacimiento o vocación mi-
(Voluntad, 27/4/1939, p. 2). litante- en barriadas obreras y populares.
Esos años de fines de los treinta repre- Supongo que esto pudo ayudar a mitigar
sentaron para los anarquistas un momento –o equilibrar- la presencia de las formas ex-
crucial y decisivo, en que se alumbró prime- presivas de la “alta cultura” en sus activida-

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des y un acercamiento mayor a los gustos y favorable a sus posiciones críticas ante la
comportamientos populares. Además, entre conflagración y las definiciones que adop-
los cambios en las formas usadas, se puede taba una gran mayoría de la sociedad y los
destacar el formidable impacto del cine y de partidos. Para ello proponía obras teatrales,
la radio entre los montevideanos, y el desa­ películas o conferencias que apuntaban a
rrollo de los “teatros independientes”, ami- mostrar críticamente aspectos del capitalis-
norando la presencia en las veladas de los mo, a efectuar la solidaridad internacional
antiguos “cuadros dramáticos”.15 Por otra con los perseguidos o a rememorar las efe-
parte también se observó una retracción de mérides clásicas del movimiento obrero, sin
la influencia de expresiones étnicas y regio- apoyar la campaña “pro aliada” mayoritaria
nales en una sociedad más “uruguayizada” en la sociedad uruguaya, a la que buscaron
y con menor presencia inmigrante. eludir o denunciar al caracterizar la situación
De los 21 eventos culturales anarquis- como de “sangrienta guerra imperialista”.
tas “en espacios cerrados” registrados entre En su repertorio teatral tomaban textos y
1938 y 1944, diez contaron con proyecciones obras dramáticas y de crítica social prove-
de cine, nueve con teatro, seis con conferen- nientes de ácratas rioplatenses como Rodol-
cias, le seguían música (4), recitado y poesía fo González Pacheco (“Hijos del Pueblo”) o
(3) y canto (3). Esto mostraba un progresivo Florencio Sánchez, y españoles como Ramón
cambio en el formato de la velada y en la pri- J. Sender (“El Secreto”) y Joaquín Dicenta
macía de sus componentes –el cine despla- (“Juan José”)16, así como poesías que tenían
zando las artes escénicas y musicales-, lo que un compromiso ideológico con la postura
también se puede ver en las denominacio- antibelicista y antipatriota. Tal era el caso de
nes, haciéndose más frecuente el “festival” “Patria”, definida como “poesía anti – guerri
y la “función” de cine frente a la clásica “ve- – patriótica” de Eulogio Castro, recitada en
lada”. Aunque las fuentes consultadas no una velada en el Teatro Edén del Cerro en
lo indican, se puede deducir que no faltó la agosto de 1942 (Voluntad, agosto 1942, p.1).
“palabra” ni la “oratoria” de las conferencias Algunas de las conferencias apelaban al sa-
o arengas, tal vez viró en algo más acotado y ber médico –ahora, tal vez, por la presencia
lateral. Al mismo tiempo, es difícil conocer de médicos y estudiantes de medicina ácra-
la “experiencia” que cada obrero, militante tas- y por ejemplo identificaban algunos de
y simpatizante vivió en el acto cultural, en los males del capitalismo aun vigentes como
la asistencia, en la previa decisión de parti- el flagelo de la tuberculosis entre los sectores
cipar o no, en el efecto en su “conciencia” o populares.
en sus deseos al terminar el festival o velada Los nuevos grupos y entidades anar-
y soportar o disfrutar el tiempo transcurrido. quistas como Juventudes Libertarias y la
En los años de la Segunda Guerra Casa de los Libertarios tendieron a promover
Mundial los grupos ácratas desarrollaron actividades en las que incluían cada vez más
una actividad cultural importante, en espe- cine. Estas funciones por lo general se desa-
cial teniendo en cuenta un contexto menos rrollaron en los barrios, menos en el centro

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de la ciudad, tal vez por la implantación más estaban constituidas de una mayoría estu-
territorial de los grupos que los promovían diantil y una minoría obrera.
y su intención “localizada” en esos ámbitos. Juan Carlos Mechoso, oriundo de la
Entre los films se destacaban los de origen ciudad de Trinidad (Departamento de Flo-
francés y algunos argentinos. El Comité Sin- res), migró con su familia a Montevideo en
dical de Acción Libertaria organizó una fun- 1942 afincándose en el barrio La Teja, entran-
ción a su beneficio en agosto de 1940 en el do a la militancia libertaria hacia fines de la
Cine Paso del Molino. En el doble programa década (Jung, Rodríguez, 2006). Mechoso re-
se exhibió las películas francesas “Yo Acu- cordó “Nosotros alquilamos un cine, queda
so” (1938) y “El hombre que reclamó su ca- ahí en Agraciada, el Alcázar, y ahí se daban
beza”, que mostraban su posición contra la películas digamos de tipo social, y a veces
guerra en curso, –luego de la caída de París-, había alguna representación teatral corta,
donde era cada vez más difícil posicionarse cosa así, previa, […] pero algo más combina-
como “neutrales”, y más aún, contrarios a la do que eso yo no me acuerdo, de haber visto
contienda (Voluntad, 2ª quincena/7/1940, en el ambiente libertario de ese tiempo, no
p. 3). El primer film refería a la guerra de me acuerdo” (Mechoso, 12/12/2008). Este
1914 y se presentaba como un “emocionante relato parece confirmar la tendencia al cam-
alegato contra las guerras”, el otro mostra- bio en la velada y su simplificación expresi-
ba “el grito desgarrador” de las madres, las va. También señaló que el Ateneo Cerro-Teja
viudas y los mutilados de la guerra europea, -creado en 1952- tenía su grupo de teatro, lo
como una “advertencia” para los gobiernos. que mostraba cierta continuidad con la tra-
El pintor y anarquista Julio Mancebo dición de los antiguos “cuadros dramáticos”
cuenta que hacia 1949-1950 “entramos una casi desaparecidos bajo el desarrollo de ver-
cantidad de gente joven” a las Juventudes daderos grupos teatrales, con tendencia a su
Libertarias “y le cambiamos el carácter [a profesionalización. Estos grupos de “teatro
un movimiento que se había vuelto un poco independiente” eran solidarios con los con-
rutinario] … veníamos con una cantidad juntos no profesionales de los ateneos, a los
enorme de ganas de hacer cosas” (Mancebo, que asesoraban: “una barra grande venían
6/6/2009).17 En ese entonces existían las Ju- de La Teja, venía Julio Matos a enseñar, del
ventudes Libertarias –grupo fundado hacia Tinglado … y Atahualpa del Cioppo de El
1938-, el periódico Voluntad y la BAIA (Bi- Galpón, […] mi hermano Alberto estaba en
blioteca Archivo Internacional Anarquista) el grupo de teatro”.
a cargo del rumano Eugen Relgis. Mancebo De nueve eventos libertarios desar-
destacó que entre los militantes que entra- rollados entre 1949 y 1952, ocho incluyeron
ron “en bloque” a las Juventudes Libertarias cine, tres contaron con conferencias y sólo
a fines de los 40, había mucha gente de la uno tuvo una representación teatral. La
Agrupación del Preparatorios del IAVA mayoría eran denominados “festival cinema-
(Instituto Alfredo Vásquez Acevedo).18 Ade- tográfico” y “función de cine”. Los barrios en
más indicó que las Juventudes Libertarias los que estaban las salas eran Unión, Belve-

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dere, Cerro, Cordón, Aguada y la zona cer- Según balance del beneficio se vendieron
cana al Palacio Legislativo. Los films proyec- 831 entradas, un número nada despreciable
tados eran franceses, de EEUU y Argentina, (Proa, agosto 1949, p. 2). Otra función simi-
abarcando dramas y críticas sociales, obras lar ocurrida dos meses después obtuvo un
de “arte” y “clásicos” de Chaplin, hasta co- éxito mayor, vendiéndose casi mil entradas.
medias de entretenimiento sin orientación En oportunidades se combinaba filmes de
“ideológica”. Además del cine “ideológico” carácter “comercial” con los de contenido
que predominaba, el uso del cine “comer- ideológico. Una nueva función del Comité
cial”, más liviano o sin “compromiso social” del Pantanoso por los presos navales ex-
podía ser también indicador de un intento de hibió una comedia de Sandrini (“Secuestro
acercarse a los gustos populares por parte de sensacional!!!”) con la importante obra de
algunos sectores libertarios.19 Orson Welles “El Ciudadano” (Voluntad,
Los objetivos de las “funciones” re- marzo 1950, p. 3). Los programas de la
mitían a acciones solidarias y de recau- Agrupación Voluntad parecían tener mayor
dación de fondos para los comités de apoyo afinidad política: en una velada a beneficio
de los presos navales, de la prensa como del periódico homónimo en el Cine Monte-
Voluntad y las recordaciones de los “már- video dieron “El Rey”, película francesa “de
tires de Chicago”. Un festival de cine de la crítica social” con Raimu, y “También so-
FORU por el Primero de Mayo realizado el mos seres humanos”, una crítica de guerra
27 de abril de 1949 en un cine en la Unión –el (Voluntad, mayo 1949, p. 4). La naturaleza
Glugksmann Palace- contó con “cintas” que de estos filmes mostraba la heterogeneidad
fueron señaladas como poco acordes “con cultural del público asistente y la búsqueda
los objetivos doctrinarios que perseguimos”, de “formarlos” a la vez que satisfacerlos. Y
aunque considerando “las posibilidades de también se puede apreciar ciertos matices, si
los organizadores, alcanzaron a satisfacer se trataba de una organización gremial, bar-
el interés de los concurrentes” (Solidaridad, rial o política.
julio 1949, p. 5). En esto se reconocía ambos La “velada” de FORU por el Prime­
aspectos, las limitadas “posibilidades” de ro de Mayo de 1950 incluyó la comedia
la organización y la incorporación del “in- dramática ‘Mi primer pleito’ de Conrado
terés” o gusto del público, buscando una Rodríguez, representada por un “conjunto
extensión de su base social. Esto ocurría en de actores y aficionados”, y el cierre por el
el marco de una gran extensión del fenó- compañero Minotti “con breves palabras
meno de los “cines de barrio”. También se alusivas al 1º de mayo y valorizando el ideal
puede apreciar en la función de cine del anarquista” (Solidaridad, agosto 1950, p. 2).
“Sub Comité del Pantanoso pro Liberación Como en 1951, la celebración de la FORU en
de los presos navales” en el cine Belvedere 1952 tuvo el mismo esquema, un programa
Palace, ofreciendo una película del popular cuyas películas “gustaron [y] en cuyo inter-
cómico argentino Luis Sandrini, “Peluquería valo un compañero hizo uso de la palabra”
de Señoras” (Voluntad, mayo 1949, p. 1). Solidaridad, setiembre 1952, p.2). Una venta

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de 423 entradas mostraba un grupo peque- darias, y ese último año crearon el Ateneo
ño relativamente estable, y una adaptación Libre Cerro-Teja, epifenómeno –tal vez- de
que reconocía los cambios: la casi total sus- aquellos múltiples centros irradiadores de
titución de las antiguas formas por el cine. luz y cultura de treinta y cuarenta años an-
tes. Se estaba en camino hacia una nueva
A modo de cierre fase, de convergencia de corrientes en la Fe-
deración Anarquista Uruguaya (FAU), y de
El polifacético movimiento anarquis- otra historia.
ta del decenio de 1920 se había modificado.
Hacia fines de los cuarenta e inicios de 1950
Abstract
ya no gozaba de la hegemonía del sindicalis-
mo –en el terreno de otras corrientes, desta- Trade unions, athenaeums, libraries,
cando las marxistas-, ni la extensión diver- newspapers and associations gave life
sificada de ateneos y centros de estudios, ni to the multifaceted Montevideo anar-
la potencia cultural en aquella Montevideo chist movement during the first half of
the 20th century. While working and po-
más aldeana y con reconocidos referentes
pular classes had their own expressions,
intelectuales anarquistas o “anarquizantes”.
ideas and behaviors in relation to ‘free
Pero otros militantes, grupos y formas ex-
time’, anarchists gave critical thought to
presivas se insinuaban y afirmaban. Tenían most of them. Guided by their ideas of
nueva vida en el movimiento estudiantil education and 'enlightenment', healthy
-con la interesante capacidad de expansión recreation, hygienism, and physical cul-
que permitía el ámbito educativo-, entre los ture, proposed various alternative cul-
sindicatos, y en actividades barriales como tural forms, sports and recreations, that
los clubes de fútbol. Posiblemente las Juven- succeeded in reaching certain sectors of
tudes Libertarias incorporaron una juventud Montevidean society. In that period the
estudiantil y obrera ilusionada y potente, así anarchists modified some of their inter-
como los libertarios se insertaban en sindi- pretations and alternative proposals. It
catos de acción directa o autónomos, cuyas is intented to show part of this route and
energías unidas protagonizarían importan- discuss the causes of such changes.
tes tareas en los siguientes años.
Keywords: Anarchists. Free time. Monte-
Durante la Segunda Guerra Mundial
video.
y la inmediata posguerra pareció existir una
recomposición del anarquismo, también
en el campo social y cultural. Si el país es- Resumo
taba en “auge” los libertarios estaban en
Sindicatos, ateneus, bibliotecas, periódi-
guardia y percibían las tensiones, injusticias
cos e agrupações deram vida ao multifa-
y desigualdades en la comarca y el mundo.
cetado movimento anarquista de Mon-
En 1951 y 1952 junto a otros promovieron tevidéu durante a primeira metade do
activamente dos “huelgas generales” soli- século XX. Enquanto as classes popula-

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res e trabalhadoras tinham suas próprias del PS entre 1920 y 1921, y un nuevo PS se reor­
expressões, ideias e comportamentos em ganizó desde 1922.
4
En un contexto regional común con otras cor-
relação ao tempo livre, os anarquistas rientes de izquierda y el movimiento obrero,
refletiam criticamente sobre grande par- como el ateneo socialista bonaerense estudiado
te de suas atividades. Guiados por suas por Dora Barrancos (1996), o el papel asignado
a la prensa gremial en Buenos Aires y Montevi-
ideias de educação e “iluminismo”, re-
deo como “iluminadora” de conciencias, en el es-
creação saudável, higienismo, cuidado tudio de Mirta Lobato (2009, p. 45-51), en espe-
e fortalecimento do corpo, propuseram cial su parágrafo “Enseñar, educar, iluminar”.
diversas formas culturais, desportivas e Formas comunes pueden verse en el caso de los
ácratas paulistas, estudiados por Maria Guzzo
recreativas alternativas, chegaram a al- Decca (1987, p. 123-126) y por Margareth Rago
cançar certos setores da sociedade mon- (1997, p. 112-116).
tevideana. Nesse período os anarquistas 5
Estas instituciones tenían zonas de contigüidad
foram modificando algumas de suas in- e intercambio –un círculo podía generar una bi-
blioteca-, distinto grado de adhesión a la “idea”,
terpretações e as propostas alternativas. y también diferenciación según tendencia ideo-
Neste artigo pretende-se mostrar parte lógica, inserción en el espacio territorial, e in-
desse itinerário e pensar as causas de cluso, tal vez, de “clase”.
6
La “huelga” puede ser considerada en algunos
tais modificações.
casos como un espacio de libertad, una situación
especial y de “fiesta”, donde los trabajadores
Palavras-chave: Anarquistas. Tempo Li- abandonan la labor y viven un “tiempo de no-
vre. Montevidéu. -trabajo”, sin duda constreñido por el conflicto
y sus exigencias, pero con momentos para otras
actividades, incluida la diversión, o sea, “tiempo
libre”. Cfr. Michelle Perrot (1987).
Notas 7
Actividades que también compartían con socia-
listas y comunistas. Cfr. Rodolfo Porrini (2012a,
1
Este texto fue presentado en la Mesa "El mundo y 2011).
de los trabajadores: espacios, actores, cultura 8
Fueron muy usadas entre los anarquistas, en
y conflictos", en las IV Jornadas nacionales de menor medida en socialistas y comunistas que
Historia Social, realizadas en La Falda (Cór- adoptaron otras formas –festivales, bailes-, y
doba) en mayo de 2013. Asimismo, se inscribe también por sindicatos y ateneos en los que esas
en la Tesis de Doctorado Izquierda uruguaya y corrientes influían.
culturas obreras en el tiempo libre: Montevideo 9
Vidal (2009b: “Cine libertario”) ha advertido el
(1920-1950), defendida y aprobada en diciembre temprano uso del cine por los ácratas, al menos
de 2012 en la Universidad de Buenos Aires y desde 1912, e incluso desde las “proyecciones lu-
cuya Directora fue la Dra. Mirta Zaida Lobato. minosas” de Gori en diciembre de 1901; aunque
Esta ponencia se ha beneficiado además de las en los años veinte en mi incompleto relevamien-
atentas lecturas de Nicolás Duffau y de Daniel to no he registrado tal hecho.
Vidal, a quienes agradezco aportes y observacio- 10
La USU se fundó en setiembre de 1923, carac-
nes, y del comentario de Maria Ulivarri en las terizada como de mayoría “anarco-sindicalista”,
mencionadas Jornadas de Córdoba. siendo una escisión de la FORU anarquista, que
2
En relación a estos temas, cfr.: Da Cunha (2010), continuó existiendo.
Bouret y Remedi (2009), Maronna y Sánchez 11
En relación al contexto sindical entre 1930 y
(2006), Alfaro (2008), Prats (2007), Saratsola 1950, cfr. Rodolfo PORRINI (2005).
(2005), Mirza (1998). 12
Ubicado en el mismo lugar que el Centro Inter-
3
Con antecedentes desde fines del siglo XIX, el nacional (Río Negro 1180), y en cierta forma una
Partido Socialista (PS) se organizó definitiva- continuación de aquel, contó con la presencia de
mente durante las elecciones de 1910; el Partido libertarios y también de socialistas como Emilio
Comunista (PC) surgió de la autotransformación Frugoni.
13
Esto ocurrió al crearse la Federación Anarquis-

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ta Uruguaya (FAU) en 1956, fruto del encuen- sindo, Juan Carlos Mechoso, anarquista. Monte-
tro de agrupaciones barriales, sindicales y estu- video: Trilce, 2006.
diantiles.
14
Sobre los primeros temas mencionados, ver Ro- LOBATO, Mirta Zaida, La prensa obrera. Buenos
dolfo Porrini (2005). Aires y Montevideo, 1890-1958. Buenos Aires:
15
En 1937 se creó el primero (Teatro del Pueblo), Edhasa, 2009.
luego muchos otros y en 1947 la Federación
Uruguaya de Teatros Independientes (FUTI). MARONNA, Mónica; SÁNCHEZ Vilela,
16
Representando por los ácratas desde 1902, como Rosario, “La puesta en relato de lo cotidiano”,
sostiene Daniel Vidal (2009b). en Carmen Rico de Sotelo (Coord.), Relecturas
17
Mancebo ingresó muy joven en el Taller del pin- de Michel de Certeau. México: AUSJAL, 2006,
tor Joaquín Torres García.
p. 93-126.
18
En la Agrupación ARU (Agrupación Reforma
Universitaria) del liceo (Preparatorios) diurno MIRZA, Roger (Comp.), Situación del teatro
Mancebo recordó: “El que me acercó fue Gerar- uruguayo contemporáneo. Montevideo: Cal y
do” (Gatti), y además estaban en la Agrupación:
Canto, 1998.
Machado, Pedro Scarón, Ruben Prieto, Lamolle,
(Raúl) Cariboni, Villar; y en la Agrupación del PERROT, Michelle, Workers on Strike. New Ha-
Nocturno, señaló a Ricardo Capano y Juan Ló- ven: Yale University Press, 1987.
pez.
19
Como ha señalado Vidal, esto también reconocía PORRINI, Rodolfo, La nueva clase trabajadora
antecedentes en el teatro anarquista desde el uruguaya (1940-1950). Montevideo: Departa-
Novecientos incorporando comedias y “juguetes mento de Publicaciones de la Facultad de Hu-
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Unión Sindical, Órgano de la Unión Sindical
Uruguaya, 1924, 1930.

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